'La hidalga del valle', un auto sacramental mariano · creador, en El divino Orfeo,por ejemplo, y...

36
Introducción En el pasado 2005, coincidieron el Año de la Eucaristía proclamado por el Papa Juan Pablo II para la Iglesia universal y, en España, el Año de la Inmaculada convocado por los obispos para celebrar el 150 aniversario de la definición dogmática. La Eucaristía y la Inmaculada son dos temas destacados de la fe católica y ambos encuentran una gran correspondencia en la devoción popular. Si nos remontamos al Siglo de Oro, cierta relación entre ellos puede apreciarse en el auto sacramental La hidalga del valle de Pedro Calderón de la Barca. Por una parte, el género del auto sacramental es un tipo de composición dramática en honor del Santísimo Sacramento y, por otra, el auto escogido tiene como argumento la Concepción Inmaculada de María. El esquema del presente trabajo dedicado al citado auto es, después de una presentación del género y los autos de Calderón, un análisis de los personajes y de la estructura dramática de La hidalga, para terminar con un apartado dedicado a los temas doctrinales que aparecen en el mismo; todo ello visto preferentemente a través de los versos del propio Calderón. Un género original En nuestros días, el auto sacramental es un género dramático casi desconocido, salvo por unos pocos especialistas. Por tanto, puede ser de 319 LA HIDALGA DEL VALLE UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO ROMÁN SOL RODRÍGUEZ ScrdeM

Transcript of 'La hidalga del valle', un auto sacramental mariano · creador, en El divino Orfeo,por ejemplo, y...

Introducción

En el pasado 2005, coincidieron el Año de la Eucaristía proclamado porel Papa Juan Pablo II para la Iglesia universal y, en España, el Año de laInmaculada convocado por los obispos para celebrar el 150 aniversario de ladefinición dogmática.

La Eucaristía y la Inmaculada son dos temas destacados de la fe católicay ambos encuentran una gran correspondencia en la devoción popular. Sinos remontamos al Siglo de Oro, cierta relación entre ellos puede apreciarseen el auto sacramental La hidalga del valle de Pedro Calderón de la Barca.Por una parte, el género del auto sacramental es un tipo de composicióndramática en honor del Santísimo Sacramento y, por otra, el auto escogidotiene como argumento la Concepción Inmaculada de María.

El esquema del presente trabajo dedicado al citado auto es, después deuna presentación del género y los autos de Calderón, un análisis de lospersonajes y de la estructura dramática de La hidalga, para terminar con unapartado dedicado a los temas doctrinales que aparecen en el mismo; todoello visto preferentemente a través de los versos del propio Calderón.

Un género original

En nuestros días, el auto sacramental es un género dramático casidesconocido, salvo por unos pocos especialistas. Por tanto, puede ser de

319

LA HIDALGA DEL VALLE

UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

ScrdeM

alguna utilidad conocer primero de qué se trata, aunque sea apenasmediante un apunte.

El auto sacramental es, en cuanto auto, una pieza dramática en un soloacto –en consecuencia, breve– y, en cuanto sacramental, una representaciónen honor del misterio eucarístico en la fiesta del Corpus Christi.

El auto sacramental pertenece al ámbito más amplio del teatro religioso,pero cuenta con rasgos peculiares que lo diferencian claramente del resto ynos permiten hablar de un teatro dogmático.

Sin duda alguna, el contenido del auto puede calificarse de religioso,pero es algo más: una forma dramática específicamente teológica, por surelación con el dogma. Ésta es su verdadera originalidad, su mérito, sudificultad y también su rareza: un drama teológico o dogmático, porque lacuestión representada en escena es el dogma. Como ocurre en La hidalga,sobre el dogma de la Inmaculada.

Pero surge la duda sobre cómo es posible todo esto y si puede darlugar a un verdadero teatro. Señalemos en primer lugar lo que han dicholos estudiosos remarcando su nota teológica. Esta diferencia específica noha dejado de ser advertida desde el inicio de los estudios modernos. Enla serie de conferencias dictadas por Menéndez Pelayo en 1881, conocasión del segundo aniversario del fallecimiento de Calderón, dijo delos autos:

“Género es éste, repito, que con ningún otro del mundo tienefácil comparación, y en este sentido puede afirmarse que eldrama estrictamente teológico (no el drama religioso conaccidentes y estructura de drama profano) no existe ni haexistido en el teatro de ninguna nación, fuera de España”1.

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

320 ScrdeM

1. M. MENÉNDEZ PELAYO, Estudios y discursos de crítica histórica y literaria, vol. III, CSIC,Madrid 1941, p. 133. Algo más adelante, insiste: “He dicho que el drama sacramental esfruto exclusivo de la literatura española; es más: me atrevo a sostener que el dramateológico, no se ha dado en ninguna literatura, antes ni después de la nuestra” (p. 134).Llega a decir: “Género es éste, no sólo peculiar de nuestra literatura, sino singularísimo yextraño entre todas las del mundo. Es más: constituye por sí solo una que no sé si llamaraberración o excepción estética, digna, desde este punto de vista, de muy detenido examen”(p. 132). La importancia de estos textos está en que se califica los autos como dramateológico, distinguiéndolos del resto del teatro religioso.

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

No era una tarea fácil lograr una pieza dramática de semejantescaracterísticas, tan singular que carecía de precedentes útiles. Esto explicaque hubiera diferentes intentos: Timoneda, Lope, Tirso, Valdivielso... “Perohasta Calderón no se llevó a la perfección la difícil tarea de combinarteología y teatro”2. De este modo, entre los diferentes literatos queemplearon su pluma en los autos sólo hubo uno que haya merecido loselogios unánimes de la crítica. Hay varias razones que contribuyen aexplicarlo:

“Sólo Calderón poseyó los precisos conocimientos teológicos,el rigor intelectual y la imaginación que hacían falta paraponer el drama poético estrictamente al servicio de la doctrinacristiana, para hacer que la teología fuera algo inseparable delverso, de la alegoría y de la estructura dramática, más bien quealgo añadido a ellos. En sus autos, la teología y la enseñanzamoral (que es combinación ecléctica de ideas agustinianas,franciscanas y tomistas, aunque su perspectiva puede serindependiente cuando es dramáticamente necesario) seentrelazan en la misma urdimbre de las obras, dando lugar auna asociación mutuamente esclarecedora entre poesía yteología que el admirado censor de la edición de los doce autosde Calderón de 1677 calificó de «arquitectura celestial»”3.

Al mismo tiempo, su formación teológica contribuía a que su proyectode unión estética entre teología y teatro fuera posible:

“Pero, a su vez, Calderón es el gran dramaturgo sintético delcatolicismo. Su apoteosis triunfal religiosa halla el lugaradecuado en la pompa solemne de los autos, mientras que suformación, hondamente escolástica, le da el contenido máspreciso, más sabio y matizado que el género y los asuntosrequerían. Calderón recoge para la poesía la gran época de losteólogos españoles. (...) Calderón recoge una herencia

321ScrdeM

2. M. MCKENDRICK, El teatro en España (1490-1700), Olañeta, Palma de Mallorca 1994,p. 273.

3. Ibidem, p. 274.

teológica, como la tradición de un teatro escolar (...), paraconvertirla en animada y suntuosa poesía dramática en losautos”4.

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

322 ScrdeM

4. A. VALBUENA, Introducción, en P. CALDERÓN, Obras completas, III: Autos sacramentales, Aguilar,Madrid 1952, p. 16.

Santa María la Real de Pamplona. La talla de la virgen es de mediados del siglo XII. Catedral de Pamplona.

(Salve. 700 años de arte y devoción mariana en Navarra,ed. Gobierno de Navarra, Navarra 1994, p. 47).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

A este éxito de conjunción de elementos en algo nuevo y de calidadsuperior, no era ajena su consciente voluntad: “Ya que la intenciónconfesada de Calderón era la de enseñar teología por medio dramático, teníaque dar una versión dramática de ideas y no de acciones humanas”5. Porejemplo, en nuestro caso, sobre la Concepción Inmaculada.

En consecuencia, la riqueza de los temas tratados por este autor esasombrosa, con sus más de ochenta autos. Ángel Valbuena, que preparó laedición más completa de autos hasta la fecha, nos facilita un elenco:

“Todos los temas capitales de la teología se hallan en los autoscalderonianos. Desde la doctrina de Trinitate (bien plástica enla personificación del Padre, el Hijo y el Espíritu en las figurasdel Poder, Sabiduría y Amor, de La vida es sueño) a la del Dioscreador, en El divino Orfeo, por ejemplo, y la del Verboencarnado. La unión hipostática de las dos naturalezas enCristo se hace visible en varias obras, así como la Redención yla Gracia, la doctrina de los Sacramentos y de los Novísimos oPostrimerías”6.

Como puede verse, en su extensa producción, Calderón abarcó muchos

323ScrdeM

5. A. A. PARKER, Los autos sacramentales de Calderón, Ariel, Barcelona 1983, p. 53, lo dice apropósito de los versos de Calderón en la loa a La segunda esposa y triunfar muriendo, quedefinen los autos con las expresiones de “sermones puestos en verso” y “cuestiones de laSacra Teología”.

6. A. VALBUENA, o. c. en nota 4, p. 12. No debe confundirse el auto citado La vida es sueño conel famosísimo drama del mismo título. Ahora bien, aceptada esta tarea por el dramaturgo,de escenificar un tema de tal índole, no faltan los peligros en este intento: “Los dogmasteológicos pueden quedar desfigurados en los autos de dos maneras, sea por presentarloscon inexactitud, sea por hacerlo con proposiciones prosaicas y carentes de fuerza –o pormedio de alegorías pueriles o abstrusas– en las que el sentido y la vitalidad espiritual delos dogmas se pierdan”. A. A. PARKER, o. c. en nota 5, p. 25. Añade un poco después: “Losautos calderonianos, en consecuencia, son, esencialmente, una poesía de la belleza invisiblea la que se puede aspirar imprecisamente pues nunca se puede encontrar en la tierra. No esaccesible a los sentidos sino por medio de símbolos; toda poesía auténtica es un símboloalegórico de la verdad y la belleza trascendentales. Calderón ha dado con el métodoperfecto para transmitir lo misterioso y lo incomprensible por medio de los sentidos. (...)En sus autos, pues, lo divino en forma humana, con la colaboración de una naturalezaimpregnada de Dios, llega a ser el símbolo de lo supersensible. En lo más elevado de suplano poético, los mundos natural y supernatural se funden con toda perfección, y eltiempo y el espacio desaparecen en el misterio del amor eterno”. Ibidem, p. 26.

temas. Precisamente, Valbuena redactó su tesis doctoral sobre laclasificación de los autos. A la que añadió después varios trabajos yediciones críticas, hasta culminar con la publicación completa de los autosde Calderón7.

El corpus sacramental calderoniano suele dividirse para su estudio engrupos temáticos. Este orden se adapta a la variedad del contenido queofrece la lectura de los autos. Está bastante difundida la clasificación quetrazó en siete grupos Valbuena8. Aunque encontramos el inconveniente deque los grupos resultan algo desiguales. El más numeroso comprendediecinueve autos y el que menos solamente uno, el resto ronda en torno a ladecena9. Precisamente, el último de sus grupos tiene un solo auto, el automariano La hidalga del valle.

Ante la sorpresa de encontrar uno solo como auto de la Virgen, es precisodecir que, en sentido amplio, hay más autos de tema mariano10; peroValbuena, cuando un auto incluía algún aspecto susceptible de englobarloen otro grupo, ha preferido hacerlo así. Por tanto, sólo se encuentra aquíuno que es, eso sí, exclusivamente mariano.

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

324 ScrdeM

7.Las obras de Valbuena a las que nos referimos son: Los autos sacramentales de Calderón:clasificación y análisis, “Revue hispanique”, LXI, 1924, pp. 1-302; un trabajo más generaltitulado Calderón. Su personalidad, su arte dramático, su estilo y sus obras, Juventud, Barcelona1941; y, principalmente, su trabajo de preparación de la edición completa de los autos deCalderón para Aguilar en el año 1952, ya citada, con varias reediciones.

8.Cfr. A. VALBUENA, Introducción, o. c. en nota 4, pp. 32-35.9.Enunciamos los grupos copiando algunas de las piezas más destacadas: 1. Autos filosóficos

y teológicos (El gran teatro del mundo, El gran mercado del mundo, El pleito matrimonial delcuerpo y el alma, y La vida es sueño); 2. Autos mitológicos (El divino Orfeo, El verdadero DiosPan, El divino Jasón y Los encantos de la Culpa); 3. Autos de temas del Antiguo Testamento(La torre de Babilonia, Primero y Segundo Isaac, La piel de Gedeón, Las espigas de Ruth, El arcade Dios cautiva, Mística y real Babilonia y La cena del rey Baltasar); 4. Autos inspirados enparábolas y relatos evangélicos (El diablo mudo, La semilla y la cizaña, La viña del Señor,A tu prójimo como a ti, Llamados y escogidos y El nuevo hospicio de pobres); 5. Autos decircunstancias (La segunda esposa y triunfar muriendo, El indulto general, El nuevo palacio delRetiro, Los misterios de la Misa, El orden de Melquisedech, El socorro general y El jardín deFalerina); 6. Autos históricos y legendarios (La lepra de Constantino, El maestrazgo del Toisón,El cubo de la Almudena, El santo rey don Fernando y El segundo blasón del Austria); y 7. UnAuto de Nuestra Señora: La hidalga del valle.

10. Cfr. E. GONZÁLEZ, Los autos marianos de Calderón, “Religión y cultura”, 32, 1930, pp. 319-332. Es bastante común considerar que también son autos marianos: A María el corazón,La primer flor del Carmelo, ¿Quién hallará mujer fuerte? y Las espigas de Ruth. Valbuena colocael primero entre los históricos y legendarios y los otros tres en grupo del AntiguoTestamento.

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

La hidalga del valle (se data en torno a 1634) es una alegoría sobre laConcepción Inmaculada de la Virgen. El argumento del auto esespeculativo y procura ofrecer una explicación racional sobre este misterio.Se parte de la propagación del pecado original a todos los descendientes deAdán y Eva, que lo contraen en el momento de la concepción, por estarsometida la Naturaleza humana a la Culpa. La diferencia se produce en elcaso de la Virgen María donde la intervención divina impide que estoocurra y, en consecuencia, su naturaleza se ve libre de la mancha de pecado.A continuación, se produce una discusión para comprender cómo esto seaposible y, frente a la oposición de la Culpa, el Placer alcanza la soluciónmediante la redención preservativa.

Además, sobre el tema de la Inmaculada, hay otro auto, no mariano sinocristológico, Las órdenes militares, más marcado por su tiempo, ya que seaborda la cuestión desde el punto de vista de la limpieza de sangre.

Las órdenes militares (1662) se conoce también con el título de Las pruebasdel Segundo Adán. Su argumento se ha calificado de pintoresco:evidentemente, la situación planteada no carece de ingenio y osadía. ElSegundo Adán –Cristo– está caracterizado de soldado y se presenta alexamen del Judaísmo y la Gentilidad para obtener la cruz de admisión auna orden militar, para lo cual debe acreditarse su limpieza de sangre11.

325ScrdeM

11. En contra de su pretensión está la Culpa original, que tiene registrado en un libro a todoslos hombres nacidos en pecado. En el discurso del Segundo Adán para pedir la insignia,explica que desea enmendar al Primer Adán. En el examen informan como testigos laNaturaleza y la Gracia, sosteniendo respectivamente la humanidad y la divinidad delsolicitante. Los jueces ante los que deponen son los ya citados Judaísmo y Gentilidad. Alpresentar su informe, el Judaísmo vota a favor de darle la cruz, pero como baldón y nocomo blasón, mientras que la Gentilidad se abstiene. A la vista de esta insatisfactoriaresolución, la Naturaleza y la Gracia acuden a una instancia superior, Roma, para que seaclare la limpieza del Segundo Adán en su humanidad. La respuesta que llega, emanadadel papa Alejandro VII –reinante en el año del estreno del auto–, defiende la InmaculadaConcepción de María, y por tanto su exclusión del libro de la Culpa. Termina larepresentación con el Segundo Adán vestido con el hábito de una orden militar, flanqueadopor los maestres de las otras conocidas (Calatrava, Santiago, Montesa...). Con laInquisición, a propósito de este auto sacramental, se planteó una cuestión por un delicadomatiz, pues podía entenderse que se hacía depender un tanto la dignidad redentora deCristo de la exclusión de María del pecado original, lo cual podía llevar a alguna confusiónentre el público menos docto.

1. Personajes

En la obra intervienen nueve personajes, además de los músicos, quepropiamente no representan un papel, sino que cantan unos pocos versos.Son: la Culpa, la Naturaleza, Job, David, la Gracia, el Furor, el Placer, elAmor divino y la Niña.

La Culpa

La gran protagonista, de principio a fin, sobre el escenario es la Culpa.No lo es, en cambio, la Virgen María, como podría sospecharse porque todogira en torno a Ella; pues no aparece hasta el final representada por unaNiña con un pequeño papel.

Para muchos, por su nombre, el personaje de la Culpa –como términoabstracto– es alegórico12, representa el pecado con el que todos nacemos.

Desde sus primeros versos de presentación, la Culpa dice de sí mismaque es el Demonio13, ya visto desde el paraíso o desde las visiones delApocalipsis. Se describe como la serpiente del jardín del edén, donde tuvolugar el pecado original, y como el dragón apocalíptico de siete cabezas.

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

326 ScrdeM

12. La alegoría es una cuestión primordial en este peculiar género dramático. Son coincidentesen este punto los comentarios de los principales estudiosos: “La alegoría de los autos, encambio, hace plástica y visible la estructura dogmática de la creencia cristiana” (B. W.WARDROPPER, Introducción al teatro religioso del Siglo de Oro. La evolución del auto sacramental,1500-1648, Anaya, Salamanca 1967, p. 109). La alegoría, que lleva en los autos de lohumano a lo divino, tiene una raíz filosófica en la analogía, predicable de los seres pese ala distancia que se abre entre ellos por la razón de lo que poseen en común, así todosresultan en algo parecidos y en algo diferentes. El acierto artístico se encuentra en dar conla medida justa. En concreto, sobre el principio de la analogía se comenta: “Lo divino y loeterno no pueden comprenderse más que, aunque imperfectamente, por medio de unaanalogía con lo humano y temporal. Ya que la obra de teatro puede presentarnos estaanalogía con especial viveza, es legítimo poner el teatro al servicio de la teología” (A. A.PARKER, o. c. en nota 5, p. 55). Es, en consecuencia, el drama teológico como lo concibe elgénero sacramental: un teatro alegórico. Calderón solía encabezar los textos autógrafos desus autos con este nombre: “auto sacramental alegórico”, al que seguía el título propio. Seha cuestionado que quepa en el arte un drama construido con alegorías. Ya que se duda dela capacidad dramática de la alegoría, lo que es dramático es la vida real, y no una alegoría.Se teme que resulte un drama desencarnado, en el que el hombre no encuentra lugar. Perolos hechos desmienten este temor, ya que es indiscutible el éxito de los autos en su época.

13. En este caso, no habría alegoría.

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

Culpa. Yo soy la Culpa, yo soyla Serpiente, de quien dijoen el Génesis Moisésque andaba en el Paraísodisimulada; yo soyaquel hermoso prodigioque, coronada en un monstruode siete cuellos distintos,Juan vio en el Apocalipsis (vv. 17-25).

Un poco después prosigue con la imagen de la serpiente.

Culpa. Cuando yo en el mundo estabasin imperio y sin dominio,arrastrando por la tierrael pecho escamado mío,me resbalaba en las flores... (vv. 37-41).

Y se identifica con el mismo pecado original; por tanto, quedaperfectamente descrita mediante sus propias palabras.

Culpa. Yo el origen, el principiode todas las aflicciones,probando que de los viciosyo soy el original,y ellos son retratos míos (vv. 228-232).

La Naturaleza

El contenido del drama es la lucha de la Culpa por imponerse a todo serhumano concebido. Por este motivo, en su primera aparición, llevaencadenada a la Naturaleza14, en su condición de sierva. Es un magníficomodo de mostrar nuestro sometimiento al pecado/demonio comoconsecuencia de aquella falta original, así todos nacemos herederos de unaculpa por la que nuestra naturaleza está dañada. De ésta se dice que esesclava y lleva los signos correspondientes.

327ScrdeM

14. Una clara alegoría, ya que las naturalezas no existen más que encarnadas en los individuos.

Culpa. A vuestra Naturaleza,mi esclava, traigo conmigo,herrada con esos duros hierrosque en su rostro imprimo (vv. 13-16).

Por este rasgo, otros pueden reconocerla15. En esta situación (de pecadoen compañía de la Culpa), la Naturaleza se ve rechazada por la Gracia.

Gracia. Mientras te miro,con ese hierro en el rostrono puedes vivir conmigo (vv. 374-376)16.

Junto a la Culpa, la misión de la Naturaleza es reconocer a los suyos, alos de su especie.

Culpa. Aquesta esclava he traídoa que me avise de cuántosse engendraren, pues ya miroque ella no podrá engañarseen saber cuántos han sidoengendrados, siendo éstede naturaleza oficio (vv. 142-148)17.

No obstante su desgraciada condición, se le auguran tiempos mejores, yes con el Placer el único personaje con cierta evolución, pues se le anunciaen el final:

Niña. Presto la Naturalezaserá libre y rescatadade tu esclavitud... (vv. 1.398-1.400).

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

328 ScrdeM

15. Como le ocurre a Job: “no te había conocido / hasta que te vi los hierros / que traes en elrostro escritos” (vv. 204-206).

16. Pero la Naturaleza prefiere la compañía de la Gracia a la obligada de la Culpa. “Sí, que laNaturaleza, /habiendo a la Gracia oído, /que su Ley se acerca, toda / ha de ser hoy regocijos”(vv. 463-466).

17. Por este motivo, concurren juntas a toda concepción. Culpa: “Que Naturaleza y Culpa, / condos afectos distintos, / en cualquier concepción / igualmente concurrimos” (vv. 185-188).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

Y se le quitarán los hierros de la cara lavándola con el bautismo (cfr. vv.1.410-1.412).

La Gracia

Frente a la Culpa, el personaje positivo es la Gracia, que intervieneatrayendo a sí a la Naturaleza y permitiendo así una concepción sin culpa18.

Como característica de la Gracia está, primero, el obedecer a la libertadhumana.

Gracia (a Naturaleza). Pero como soy la Gracia,es fuerza que a tu albedríoresponda siempre que llames (vv. 369-371).

Y, después, como segunda característica, el secundar los planes de Dios,pues como don de Dios es un auxilio para la criatura.

Gracia. Y guiada del DivinoAmor (que tras sí me lleva)he penetrado los airessiempre a obedecer dispuesta (vv. 781-784).

El Placer

El otro gran protagonista del auto es el Placer, criado de Joaquín, quedesempeña un papel cómico, y con la Culpa es conductor de todo el autohasta su resolución final. Su función cabe interpretarla del siguiente modo:con sus comentarios ingenuos es fácil que el pueblo llano siga larepresentación, ya que sus dudas y actitudes coinciden con las corrientes decualquier persona, y así puede entenderse como alegoría de la razónhumana. Sus dos aspectos principales son la inteligencia y la alegría, que darazón de su nombre.

329ScrdeM

18. Llegada la noticia de la concepción de un nuevo ser humano, la Culpa se presenta con laNaturaleza encadenada ante la casa de Joaquín y Ana. Pero en este caso, entra la Naturalezay con ella la Gracia, dejando fuera a la Culpa pese a sus protestas. Es uno de los pocosepisodios con algo de acción del auto. De este modo, se destaca la incompatibilidad entreCulpa y Gracia. Placer. “Adelantóse la Gracia, / dejando a la Culpa fuera, / porque la Graciay la Culpa / entrar juntas no pudieran” (vv. 841-844).

Placer. En fin, soy inteligencia,pues el divino Placerallá en el Cielo se engendra (vv. 760-762).

Este personaje procura usar su inteligencia en busca de un acercamientoracional al misterio de fe.

Placer. De grandes misterios sonprevenciones; pues revelastus misterios al humilde,haz, Señor, que aqueste entienda (vv. 775-779).

Dice de sí mismo, al responder a la Culpa que le ha preguntado quién es.

Placer. Un algo tan venturosoque a conocerme no llegas (vv. 997-998).

En su papel de cómico, resalta los límites de su inteligencia.

Placer. ¿Quién me metió en argüir(siendo un mentecato yo)...? (vv. 1.095-1.096)19.

En el final, se expresa dichoso:

Placer. Ahora sí que soy Placer;en músicas acordadassuene este triunfo... (vv. 1.426-1.427).

El Furor

Es un aliado de la Culpa, al que ésta invoca cuando se enfada y con quienhace pareja para sus propósitos.

La Culpa llama al Furor y, para someter a la Naturaleza, le dice:

Culpa. Pues de mis iras ministroeres, ¡castiga esta esclava! (vv. 480-481).

En otro momento, da razón de su origen.

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

330 ScrdeM

19. Cuando el Placer se permite recomendar a la Culpa que no ponga pleito a la Niña, lereplica destacando que no lo tiene por muy listo. Culpa: “Muy grande es vuestra simpleza/ para hablar conmigo” (vv. 1.004-1.005).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

Culpa. Y acompañada también,del Furor, que en mí se engendra,penetrado he los abismos (vv. 789-791).

Su papel se centra en contar por extenso la historia de Joaquín y Ana.(cfr. vv. 493-630) que está inspirada en apócrifos de la infancia de la VirgenMaría20.

Amor divino

Sobre las tablas, descontado lo que dicen los demás sobre su omnipotencia21,el papel de Dios se corresponde con la presencia de un personaje llamado Amordivino y que es el Espíritu Santo. Así, en el lado positivo, aparece junto a laGracia, como el negativo el Furor estaba con la Culpa.

Su intervención en la Concepción Inmaculada es decisiva. El Amordivino trae la Gracia ante la puerta de los padres de la Virgen y, bajo suamparo, ésta puede introducirse con la Naturaleza, cuando lo común entodos los demás casos es que a la Naturaleza le acompañe la Culpa, y así elconcebido cargue desde el primer instante de su vida con el pecado original.Además, se queda ante la puerta con una espada que arrebata al Furor, paraimpedir cualquier acceso a la Culpa, aunque ya estando dentro la Graciaresulta imposible. Más adelante, reaparece el Amor divino con la Gracia ylo único reseñable es lo que ahora dice de sí mismo:

Amor. El Amor divino soy,el Espíritu me inflamay pues es él quien asistea los Pontífices,... (vv. 1.344-1.347)22.

Niña

331ScrdeM

20. Por ejemplo en dos detalles, se alude a la ancianidad de ambos a la hora de la concepciónde la Virgen y se hace referencia a la mucha penitencia que precedió a este acontecimiento.

21. Se repite que Dios todo lo puede y esta omnipotencia está centrada en que puede librar dela esclavitud del pecado a María en el momento de su concepción, pues sencillamente serealiza porque Dios quiere. Naturaleza: “Como es Dios quien puede hacerlo/ y es su poderinfinito” (vv. 457-458).

22. Estos versos son una repuesta a la Culpa, que quiere ver la ejecutoria de hidalguía de Maríapor la que es preservada. De paso, se defiende la asistencia del Espíritu Santo al Papa.

Cerca del final, aparece por primera vez la Virgen María en escena y lohace en la figura de una niña. Sin transición alguna, ni referencia a sunacimiento, se ha pasado de su concepción a su presencia en edad infantil.

Su misión es bien clara, representar cumplida la profecía del Génesis conuna imagen indudable: la mujer/niña que pisa la cabeza de la serpiente, esla derrota de la Culpa a la que se ha aludido en diferentes pasajes del auto.

Antes de su aparición, se hacen referencias a ella por otros personajes.Primero, en su anuncio.

Furor. Un ángel, con inmensas alegrías,a los dos anunció, de luz vestido(bien como fue anunciado Jeremías,y bien como Sansón fue bendecido23),que Ana concebiría, (¡oh ansias mías!)en tan mayor edad, (¡pierdo el sentido!)una niña esta noche, hermosa y bellaponiendo el Cielo su atención en ella (vv. 543-550).

Segundo, con imágenes de la mujer del Apocalipsis.

Furor. El sol un manto azul, todo estrellado,con recamados visos se ha vestido,la Luna de topacios se ha calzado,el Cielo de diamantes se ha lucido,y no sé para quién, coronas bellasde doce en doce hicieron las estrellas (vv. 561-566).

En el instante mismo de su concepción, se destaca el rasgo de suplenitud de gracia. La Culpa explica al Furor que no puede entrar en la casade Joaquín y Ana, con palabras que aluden a la Anunciación del ángel.

Culpa. Porque está de Gracia llenaesta casa, tanto queno puedo caber yo en ella (vv. 852-854)24.

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

332 ScrdeM

23. Cfr. Jr 1, 7 y Jc 13, 3-5.24. Una descripción completa de María se encuentra en boca de la Culpa y el Placer que

aluden, alternativamente, a sus rasgos humanos y divinos en una suma deslumbrantede elogios. Por ejemplo, Culpa: “Humana es, pues se concibe / de humananaturaleza”. Placer: “Divina es, pues que por gracia / Dios de culpa la reserva” (vv.1.011-1.014).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

333ScrdeM

Inmaculada Concepción: Luis Salvador y Carmona. Hacia 1754.Retablo mayor de la parroquia de san Martín de Lesaca (Navarra).

(Salve. 700 años de arte y devoción mariana en Navarra,ed. Gobierno de Navarra, Navarra 1994, p. 125).

Por último, de su corto papel tomamos sus palabras de victoria sobre laserpiente, conforme al texto de la Sagrada Escritura.

Niña. Dice él mismocon misteriosas palabrasque habrá entre ti y la mujerdisensiones y asechanzas,y que ella a poner vendrálos pies sobre tu garganta;ya se ha cumplido, pues pisotu frente, sin que tu rabiapueda atreverse a morderme,con ser víbora pisada,porque en este inmenso vallede lágrimas soy la Hidalga (vv. 1.378-1.389)25.

Los dos personajes restantes del elenco, con un modesto papel, son Joby David, personas concretas e históricas. Sirven para aludir a la Ley Naturaly la Ley Antigua, respectivamente. En este caso, se evita la alegoría y elautor las personifica.

A Job le corresponde representar la Ley natural, que la Naturalezadescribe con estas palabras: “candor y yugo sencillo/ de nuestros primerospadres” (vv. 200-201). Job está en nombre de todos ellos (cfr. vv. 216-219)y se encarga de explicar la razón de su elección.

Job. Mis trabajos infinitos,que, como por ti padezcomás que todos, todos, vistomi dolor, poder me dieronpara que hablase contigo (vv. 264-268).

Sobre el pecado original, reconoce de sí mismo con dureza:

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

334 ScrdeM

25. Culpa: “Sí haré, a pesar de la Gracia, / y con mi rabia sangrienta / morderé, serpiente altiva, / laplanta a esa Niña bella”. Placer: “Paréceme que te pone/ la tal planta en la cabeza”. (vv. 869-874).

26. La fuente de este comentario esta en Job 3, 3: ¡Perezca el día que nací, y la noche que dijo: “Unvarón ha sido concebido”!

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

Job. Y sean malditosla noche y día en que fuien pecado concebido (vv. 282-284)26.

David, por su parte, es el rey cumplidor de la ley y la alianza. Asume larepresentación del pueblo de Israel, que en el Decálogo recibió la LeyEscrita (cfr. 296-300). La Naturaleza comenta a este respecto: “Davidresponde / por todos, como su invicto / rey” (vv. 301-303).

Su participación se reduce a reconocer la deuda que la Culpa le reclama.

David. No puedo negarla, tomalas voces, que al aire envíoen señal del rendimiento,que por todos significo.En iniquidades fuiengendrado, y concebidofui de mi madre en pecado (vv. 345-351)27.

2. Estructura dramática

Una vez presentados los personajes, veamos el contenido del auto. Lahidalga ofrece, en su condición de teatro alegórico, un tratamiento peculiar deltiempo y el espacio. En cuanto al tiempo, el hoy del que se habla comprendemuchos siglos. Alcanza desde el mismo paraíso: Culpa: “pues hoy en unacampaña / que era verde laberinto” (vv. 67-68), cuando ha derrotado a laGracia; hasta el mismo día de la concepción de María, comprendiendo en si:Culpa “toda / la carrera de los siglos” (vv. 153-154). Es como si todo el tiempose encaminara al día de la concepción de la Virgen, sin transición aparente.

En cuanto al espacio, el mundo entero cabe en el escenario, incluso se llega almundo desde fuera de él. No posee una localización geográfica concreta –hastallegar a la casa de Joaquín y Ana– y es visto como un alcázar de tres puertas.

335ScrdeM

27. Estos versos finales se corresponden con el Salmo 51, 7: Mira que en culpa yo nací, pecador meconcibió mi madre.

Culpa. Ya a vista del mundo estamos,su fábrica descubrimos,una emulación hermosade ese alcázar cristalino.Tres puertas tiene... (vv. 155-159).

Después de estas precisiones espacio-temporales, sigamos con eldesarrollo de la trama. El auto sacramental, como hemos visto, pordefinición es una pieza dramática en un solo acto. No obstante, si es unabuena pieza teatral, podrán distinguirse: planteamiento, nudo y desenlace;términos que se corresponden con los tres actos clásicos de nuestro mejorteatro del Siglo de Oro. Por esta razón, en nuestra obra hemos procuradodiferenciar esas tres partes, sin que Calderón diera indicación alguna alrespecto.

Planteamiento (vv. 1-475)

En el comienzo, la Culpa se presenta con la Naturaleza humanaencadenada, como consecuencia del pecado original, y entiende que tieneun derecho sobre todo humano concebido: al modo de vasallos suyos (deaquí el contraste con los hidalgos). De este modo, todo hombre nace con lamarca del pecado.

Para hacer más claro y didáctico cómo sea esto, la Culpa –con laNaturaleza a ella sometida– se encamina hacia unas puertas para cobrar esteimpuesto. Es un modo de explicar en tres pasos la historia de la salvación.La primera puerta corresponde a la Ley natural y Job, en su nombre, pagael tributo. Y lo mismo sucede en la segunda, la Ley escrita, donde es Davidquien lo satisface.

En cambio, al llegar ante la tercera puerta, se la encuentra cerrada y laGracia, que es quien allí responde, se niega a pagar. Para la Culpa estoresulta impensable y discute con la Gracia, porque anuncia que va a naceruna hidalga, limpia de pecado, y por eso no paga.

Hasta aquí se ha planteado el tema: el pecado original afecta a todos,pero se apunta una excepción.

Nudo (vv. 476-1.134)

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

336 ScrdeM

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

Disconforme la Culpa ante lo sucedido (la excepción, haya quien noquiera pagar), llama en su auxilio al Furor. Éste cuenta la historia de losfuturos padres, Joaquín y Ana, que en la vejez van a concebir una Niña.Como le corresponde, la Culpa se encamina a cobrar el tributo.

Otro nuevo personaje irrumpe ahora, el Placer, un cómico criado de Joaquín.Es utilizado para comentar unos versículos del Cantar de los cantares, que yaanunciaban en la Escritura esta promesa de una criatura sin mancha. En suargumentación se le suman el Amor divino y la Gracia, a los que la Culpa y elFuror se les oponen con otros textos tomados también de la misma Escritura.

Con este enfrentamiento se llega al gran momento dramático ante lacasa de Joaquín, donde en lugar de entrar la Naturaleza con la Culpa, lohace con la Gracia. Es el signo de que se concibe precisamente a un humanoen gracia, sin mancha de culpa.

La Culpa se queda fuera y la puerta es guardada para impedirle el pasopor el Amor divino. Y así se realiza la concepción inmaculada de María.Mediante esta representación, el público puede entender perfectamente elcontenido del privilegio y adentrarse en la comprensión del misterio28. Esla razón de ser del teatro teológico.

Mientras esto sucede, en la calle la Culpa y el Furor comentanindignados el privilegio. La Culpa habla incluso de poner un pleito por loocurrido, al entender que ha sido vulnerado su derecho. En este momento,se plantea la ardua cuestión teológica de cómo puede ser esto. Se dice quepara ser redimida ha de nacer en pecado. Éste es el gran tema29:

Culpa. Luego si tú mismo dicesque es la mayor excelenciadel hombre ser redimido

337ScrdeM

28. Siempre ha interesado saber qué real comprensión podía alcanzar el público de un teatrode este tipo, tan conceptual, ¿es posible que lo entienda mínimamente siquiera? Se sueleaceptar que sí: “Los autos tradujeron las sutilezas teológicas a términos cotidianos, segurosde que la habilidad práctica nativa que hay en todos los hombres deduciría las analogíascorrespondientes” (B. W. WARDROPPER, o. c. en nota 12, p. 110). Es, por tanto, un teatroalegórico que existió no dentro de los confines de un grupo selecto, sino que gustó muchoa un público que iba desde el monarca al más humilde vasallo del reino.

29. También se debate otro aspecto relacionado: cómo se le puede redimir antes de que tengalugar la Redención obrada por Jesucristo.

con la sangre de Dios, de éstaexcluyes hoy a su Madre,pues procuras que no seaen pecado concebida,para que parte no tengaen la sangre derramadade Dios; pues naciendo de ellasin pecado, no hay de qué lavarse: con que se pruebaque concebida en pecadoha de ser su Madre mesma,o no ha de ser redimidacon su sangre (vv. 1.071-1.086)

Terminan los versos con la disyuntiva fundamental y en estos mismostérminos el Placer acepta el problema (curiosamente, no asumen dar larespuesta la Gracia o el Amor).

Placer. No sé qué me he de decir,mi ignorancia está vencida;¿qué no ha de ser redimidacon la sangre, esta mujer,de Dios hombre, o ha de seren pecado concebida? (vv. 1.099-1.104).

Con anterioridad, se ha dejado clara la omnipotencia de Dios, según lalógica secuencia: podía, quiso, luego lo hizo30. En los siguientes versos, sereitera la seguridad en el poder de Dios.

Placer. ¿Luego en Gracia puede serredimida y concebida?Sí, pues con eterno aviso(no lo extraño ni lo dudo),Dios quiso hacer cuanto pudo,y pudo hacer cuanto quiso,

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

338 ScrdeM

30. Placer (contesta a la Culpa y da razones, dice que podría dar hasta mil): “las dos, porquesois blasfemas / pues decís que Dios no pudo / (siendo Suma Omnipotencia) / hacerlo, siquiso hacerlo; / las tres, porque es indecencia / decir que pudo y no quiso...” (vv. 984-989).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

luego que sea es precisoesta virgen escogidapara Madre, preferidoen todo, siendo en su estadoconcebida sin pecado,y con sangre redimida (vv. 1.113-1.124).

339ScrdeM

La Virgen, santa Ana y el niño: Pedro Imberto y Fermín de Arbizu.Hacia 1586. Retablo del Rosario. Parroquia de san Andrés, Morentín (Navarra).

(Salve. 700 años de arte y devoción mariana en Navarra,ed. Gobierno de Navarra, Navarra 1994, p. 105).

Con este nuevo planteamiento, se ha roto la disyuntiva de la pregunta,pues se afirma rotundamente que María es concebida sin pecado y esredimida, no son realidades que se excluyan. El Placer ha terminado suspalabras con la seguridad de la concepción sin pecado, esto es un hecho,aunque siga sin saber explicarlo y queda a la espera del regreso de la Culpay el Furor.

Placer. ¡Oh, quién supiera explicarel cómo esto puede ser,que en mi modo de entender,ya lo he llegado a alcanzar!Esta azada he de tomary un hoyo en la tierra heridahe de hacer. ¡Oh, si mi vidamostrase, al volver los dos,que es redimida de Diosy sin Culpa concebida! (vv. 1.125-1.134).

Desenlace (vv. 1.135-1.483)

La cuestión ya está resuelta con toda firmeza, ahora sólo se trata de darcon un “argumento” que nos aproxime a la comprensión del misterio.

El Placer se afana en busca de una solución. Sobre el escenario se pone acavar un hoyo, mientras habla consigo mismo sobre el problema, pues va aser una experiencia práctica la que le ponga en camino. Adonde seencuentra cavando, se acerca primero el Furor y al no verlo cae en el hoyo,y el Placer le saca.

En cambio, después, el Placer ve venir a la Culpa y cuando va a caer alhoyo le advierte y lo evita. Con este ejemplo se pone de manifiesto un modode redención más eminente: antes de caer en el pecado puede ser redimida.Y esto es lo que se aplica a santa María. Esta cuestión la veremos con másdetalle al final.

En este momento, todos los extremos quedan aclarados, en la medida delo posible. La respuesta es que Dios la ha redimido antes de tener pecado(como en el ejemplo, se le ha evitado caer en el hoyo) y lo ha sido en virtudde la sangre de Cristo. La Culpa se enfurece por el argumento logrado y el

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

340 ScrdeM

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

Amor le contradice y, además, le advierte de todo lo que se le viene encimacon la Redención. Esta Hidalga, que aparece como Niña, le pisará la cabezay su Huésped traerá el Bautismo (y demás sacramentos). En consecuencia,la Naturaleza se verá al fin libre de su esclavitud.

3. Temas doctrinales

Los temas dogmáticos centrales presentes en el auto son: el pecadooriginal, la redención y el privilegio mariano de la concepción inmaculada.Los dos primeros sirven de preparación para afrontar el tercero y primordialen La hidalga.

Universalidad del pecado original

En el auto, el tema de la culpa original se plantea mediante el contrastesocial entre villanos/pecado e hidalgos/gracia31, como se destaca con el títulode la obra.

La tesis del auto es una afirmación de la fe cristiana, en la concepción secontrae la mancha debida al pecado de origen: naturaleza humana y culpavan unidas, como se muestra en la escena, mediante dos personajes quellevan tales nombres. Esta cuestión aparece presente desde los primerosversos a cargo de la Culpa.

Culpa. Villanos, hijos de Adán,los que sois, los que habéis sidoy habéis de ser para siempreen pecado concebidos.Villanos, hijos de Adán,segunda vez os lo digo,

341ScrdeM

31. En el Diccionario de la Real Academia Española (22ª edición) se dice de hidalgo: “Persona quepor su sangre es de una clase noble y distinguida”; y “dicho de una persona, de ánimogeneroso y noble”. Sobre villano: “Vecino o habitador del estado llano en una villa o aldea,a distinción de noble o hidalgo”; y dicho de una persona, “rústico o descortés, ruin, indignoo indecoroso”.

los que pagáis a mi imperiopechos del primer delito (vv. 1-8).

La imagen del villano sirve perfectamente a la idea de Calderón y es fiela la verdad revelada. Por eso somos villanos, pagamos la deuda del primerpecado de Adán, una deuda heredada en cuanto descendientes suyos. Lavalidez de la imagen empleada se comprendía mejor en aquellos tiempos enque era una realidad social esta distinción. En una sociedad estamental, loshijos nacen de la misma condición que sus padres. El villano, como vasallo,es un siervo sometido a una serie de obligaciones, se llamen deuda, pecho,impuesto, tributo... Pero no es lo mismo un vasallo, pues también cuentacon derechos, que un esclavo. Éstos son los límites de una imagen, comotampoco se marcaba al hierro a los villanos.

En este largo parlamento inicial, se dirige la Culpa al público con unclaro sentido de catequesis, recordando verdades básicas de fe. El modovisual de presentar este misterio es con la personificación de la naturalezahumana como esclava, marcada en el rostro con un hierro, del mismo modoque el pecado original se imprime en el alma en la concepción.

La Culpa cuenta la historia del pecado original: un desafío con la Graciay su victoria con un ardid, que por conocido ni siquiera se relata. Trofeo deesta victoria es la Naturaleza humana como prisionera. Así el pecadooriginal significa el estado de esclavitud de la humanidad bajo el demonio,éste es el aspecto que muestra Calderón. Y ésta es una condición eterna yuniversal, nadie puede ser excluido, comprende a todos desde el máshumilde hasta los reyes. Desde el primer momento de la concepción, elembrión32 tiene ya el pecado original, lo cual, dicho sea de paso, supone lapresencia del alma desde la concepción.

Como resultado de ese pecado, la Culpa goza de un derecho o derecho(por lo que puede establecerse una relación con la teoría de los derechos deldemonio).

Culpa. La Naturaleza humana,(...) pleito homenaje me hizo

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

342 ScrdeM

32. Culpa: “Y así, cualquiera embrión, / apenas en el abrigo / materno, primer sepulcro / delHombre, señas de vivo /dará, al informarse en él /del alma el vital suspiro...” (vv. 111-116).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

de que un pecho eternamenteme pagarían sus hijos,tan común, tan absoluto,tan entero, tan cumplido,que, sin exceptuar persona,todos claramente digo (vv. 99. 104-110).

El rasgo teatral de este inicio está en que la Culpa va de viaje, como unpuntual acreedor, para cobrar este tributo, como se va a ver sobre elescenario. Para tal misión se hace acompañar de la Naturaleza humana,porque ella reconoce a los suyos. Es otra muestra del ingenio del autor parahacer visible el misterio.

De este modo, comienza propiamente el drama en el tiempo y el espacio.Entrando en el mundo, la Culpa ve un alcázar con tres puertas y allí seencamina. El mismo parlamento se repite ante cada puerta.

Culpa (a Job). Cobrarel pecho, a que reducidosestáis todos los humanos,es el intento que sigo (vv. 219-222).

Culpa (a David). El intento que he traído,que es de cobrar el tributoque ha impuesto el común delitoa todos los de tu Ley (vv. 312-315).

Culpa (a la Gracia). Que describoel orbe, cobrando el pechoa mi majestad debido,y que he llegado a tus puertas,aunque desiertas las miropor ahora, por si acasose poblaren de vecinos... (vv. 386-392).

El pecado original se ha convertido en un tributo que el amo reclama asus vasallos. Con Job y David se cumple lo establecido: pagan. El problemasurge ante la tercera puerta que está cerrada, ¿una excepción al pago?Escuchando a la Culpa parece impensable, pero está revelada esta

343ScrdeM

posibilidad en la Sagrada Escritura.

El mensaje hasta ahora es claro: la Naturaleza y la Culpa concurren entoda concepción. Se ejemplifica con Job (Ley natural) y David (Ley escrita)que, en el mismo momento de su aceptación, anuncian conforme a laSagrada Escritura una posible excepción, representada por los siguientessignos: el arca de Noé y la piel de Gedeón.

De esta tesis, se pasa a la antítesis, con la Gracia delante de la puertacerrada. Si la tesis es la certeza del pecado original en todos, la antítesis esla duda sobre una excepción.

La redención

Este segundo tema es continuación del anterior y consiste en el final dela esclavitud de la Naturaleza por la redención con la sangre de Cristo(quien no aparece pero se le alude como Huésped), porque ignora la Culpaque el pecado original no es la última palabra sobre el tema. Esa situaciónde esclavitud de la humanidad tiene fecha límite, y esa hora se acerca. Es loque vamos a ver.

En cuanto a los aspectos de la redención que observa Calderón se puededecir que sigue los pasos de la historia de la salvación, Leyes natural yescrita, y así llega a una tercera Ley: la Gracia, una Ley que se da con laredención.

Gracia (a Naturaleza). Abro la casa en que vivo,esperando un huésped nuevo,para quien sólo previnotodo el aparato de esasdos leyes, que has discurrido (vv. 362-368).

Gracia (a Culpa). Mal haré en firmar por todos,pues podrá ser, y aun lo afirmo,que alguna humana criatura

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

344 ScrdeM

33. La comparación de Cristo con una salamandra parte de la creencia legendaria de que lassalamandras no se quemaban en el fuego. En este símil, el Señor sería inmune al fuego delpecado.

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

en la hoguera de los siglos,salamandra de ese fuego33,tenga los rayos por tibios (vv. 421-426).

A su lado, la Naturaleza sólo puede ser libre y no esclava; es decir, conla terminología del título: en lugar de vasalla, pasa a ser hidalga.

Gracia. Aquesta casa fabrico,y podrá ser que a ella vengahuésped tal, que su divinoser no quiera pagar pecho,por ser hidalgo, y ser limpio (vv. 446-450)34.

Y esta nueva perspectiva anunciada produce una gran alegría en laNaturaleza. La Niña que se espera va a nacer sin pecado conforme a loprofetizado en la Escritura, por ejemplo, en el texto del Cantar de los cantares:

Música. Porque de Gracia y de Feeterno tu aplauso seaTota pulcra, amica mea,macula non est in te (vv. 631-634).

Así la redención es la limpieza de la mancha debida al pecado y lainstauración de la nueva Ley de la gracia.

En un largo pasaje en que la Culpa y el Placer argumentan sobre María,destacando sus rasgos humanos y divinos, respectivamente, se cita que laredención se realiza con la sangre de su Hijo. Placer: “Divina es, pues delpecado / redime al hombre con ella” (vv. 1.067-1.068)35.

Lo importante es que María es redimida de verdad por Él. La misma Niñahabla de la redención que va a venir, por ese anticipo de gracia que significasu Concepción Inmaculada. Jesús es aludido de nuevo como el Huésped.

345ScrdeM

34. La venida de un hidalgo al mundo será posible por el poder de Dios. Naturaleza: “Como esDios quien puede hacerlo / Y es su poder infinito” (vv. 457-458).

35. La Culpa usa en contra de la posible redención de la Virgen este mismo pasaje, ya que lasangre de Jesús todavía no ha sido vertida (aunque no discute que la redención vaya arealizarse).

Niña. Presto la Naturalezaserá libre y rescatadade tu esclavitud, que yala Gracia ha vuelto a la casaque fabrica para el huéspedque ya tan benigno aguarda (vv. 1.398-1.403).

En ese momento, en escena, en un bofetón36 de otro carro se descubre laGracia, mostrando la abundancia de sus sacramentos.

Furor. ¿Cómo la podrá quitarestos hierros de la cara?Gracia. Lavándola con el bautismo.(...) Con el agua clarade los siete caños queson la fuente de la Gracia.

Del tocado de la Gracia salen siete caños de agua.

Culpa. Siete Sacramentos son,y aunque todos me dan tantaconfusión, sólo el primeroa atemorizarme basta,porque es el que, misterioso,mi original culpa lava (vv. 1.410-1.421).

Exención de la Virgen

Para tratar este último aspecto doctrinal, conviene advertir que evitamosreferirnos a un privilegio mariano, pese a ser una terminología corriente, yaque en el auto esta palabra la usa la Culpa para referirse a su derecho sobrelos hombres. El tema de la exención es el corazón del auto y el punto departida está, en boca de la Culpa, en la negativa a que se dé algunaexcepción.

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

346 ScrdeM

36. Se trata de un término teatral en desuso. Es el bastidor colocado en algún lugar deldecorado y que, al girar rápidamente sobre su eje vertical, hace aparecer, sustituir odesaparecer intérpretes u objetos.

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

Culpa. Privilegio de Dios tengo(su mano me lo dio mesma),de que nadie naceríasin reconocer la deudaque como pecheros paganlos descendientes de Eva.Aqueste valle no esposible que exentos tenga,porque todo es behetría37

y todos pagan en ella (vv. 933-942).

Por tanto, la Culpa se prepara a incluir a María entre sus siervos, con unanaturaleza caída38. Pese a sus intenciones, en esta ocasión, se prepara algodistinto, porque vamos a asistir a una concepción sin pecado.

Mediante una serie de figuras, más o menos veladas, se adelantaba estemisterio en la Sagrada Escritura. Por ejemplo, se habló de la enemistad conla mujer, que le pisaría la cabeza; con las frases del Cantar de los cantares dela amiga sin mancha y las referencias al arca y a Gedeón, en boca de Job yDavid, cuando reconocen y pagan su deuda.

Job. Es la verdad, pero un Arcaa los desdenes esquivosdel mar, exenta se viosobre los crespos y rizosde las espumas saliendointacta de su peligro (vv. 245-250).

David. Otro rocío por eso

347ScrdeM

37. Behetría es la población que podía elegir como señor a quien quisiese. En el caso denuestros primeros padres, puede entenderse que eligieron a la Culpa como su señor.

38. Culpa: “Si en esta Anunciación su gloria advierte, / presto en la Concepción haré que escriba /en mi libro esa niña el vasallaje / que debe, por nacer de su linaje” (vv. 611-614). Culpa (aNaturaleza): “De mí, ningún viviente se ha exceptuado, / de ti, ningún humano se haexcluido” (vv. 619-620).

39. Avanzado el auto, se recuerdan estos signos. Culpa: “Aquella Arca hermosa, aquélla / quecorrió sobre las ondas / sin temor a la tormenta / (...). Vi al alba bella / llorar un manso rocío /sobre una cándida y tersa / piel, siendo el llanto del alba, / al caer, lágrimas tiernas”(vv. 908-910.914-918).

también, sin corrupción, vimosen la piel de Gedeóncuajarse cándido y limpio (vv. 333-336)39.

Con sus posiciones enfrentadas, discuten la Culpa y la Gracia. Así cantala Gracia: “Tota pulcra amica mea” (v. 802); y responde la Culpa: “Pereat / diesin qua natus sum” (vv. 808-809). De nuevo, insiste la Gracia: “Macula non estin te” (v. 815); y replica la Culpa: “Et in peccatis/ concepit me mater mea” (vv.819-820). En las palabras de la Culpa, hay unas referencias a Job y a David.También es de suponer que estas expresiones latinas serían muy familiarespara el público.

No obstante en el testimonio de la Sagrada Escritura, se resiste la Culpaa reconocer una posible exención.

Culpa. Miente mi voz si confiesaque es verdad que sin mi Culpapuede ser concepción ésta,por más figuras y sombras... (vv. 926-929).

La Culpa defiende su derecho, porque ella también se apoya en la Biblia.

Furor. ¿Adónde está el privilegioque tu justicia sustenta?

Culpa. En el Génesis está (vv. 965-967)40.

Pero debe tenerse en cuenta que en el origen del privilegio se alude ya ala exención, como se le recuerda enseguida.

Placer. Por buen privilegio va,pues está al pie de la letra,cuando a la mujer castigael Señor su inobediencia,

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

348 ScrdeM

40. Recuerda que tiene un privilegio y está dispuesta a poner pleito. Culpa: “Y así, a aquestaconcepción / pondré pleito ante la eterna / chancillería” (vv. 943-945). Comenta el Placercon sorna: “Pues mal pleito tienes, / viborilla, en mi conciencia” (vv. 977-978).

41. Reaparece el Furor con el libro. Momento en que, por no mirar, cae en el hoyo. Furor: “Yael privilegio está aquí, / Moisés, que al fin es letrado...” (vv. 1.178-1.179).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

que pondrá la mujer, dijo,las plantas en la cabezade la serpiente... (vv. 969-975)41.

Después de la constatación del origen de la exención en la SagradaEscritura, se trata por tanto de un dato revelado, se pasa a la reflexiónespeculativa42. El problema teológico que se deriva se lo plantea el Placer, yaque parece que María no es redimida por la sangre de su Hijo. Para resolveresta cuestión da, por casualidad, con el ejemplo del hoyo ya expuesto.

No se acierta a explicar, pero no duda de que sea así, porque Dios nopodía querer otra cosa para la elegida por Madre suya. La Gracia, el Amordivino y los Músicos cantan que eso es ya una realidad. Lo único que elPlacer busca es darle entrada en su entendimiento, para vencer el dilemaplanteado por la Culpa.

Puede interpretarse que su trabajo, el cavar, es estudio para encontrar unargumento.

Placer. Sí; que esta fatiga míaestudio es para llegaruna experiencia a tocar (vv. 1.152-1.154).

Amor. ¿Qué es lo que tu afán procura?

Placer. Estudiar un argumento,y cavando en él, intentoahondar una sutileza (vv. 1.162-1.165).

En premio a su esfuerzo descubre un razonamiento: la redenciónpreservativa. Se puede redimir a alguien después de la caída, como elbautismo lava el pecado original después de contraerlo, pero también cabehacerlo antes, es decir, evitándole la caída. Éste es el caso de la Virgen:redimida antes de caer. Y así se muestra en La hidalga. Ha llegado el Furor,se ha caído al hoyo y ya le han sacado. Al ver venir a la Culpa que lleva elmismo camino, se le advierte.

349ScrdeM

42. Se interrogan los personajes. Culpa: “¿Cómo en este humano valle / de lágrimas y suspiros, /ninguna hidalga criatura / ha de negar mi dominio?” (vv. 453-456).

Placer. Tente, Culpa, sin llegara caer, ni tropezaren ese hoyo, que es abismodonde tu Furor mismoen este instante cayó.

Culpa. Siempre agradecida yo...

Placer. Ya está puesto el silogismo.

Culpa. ...pues me has redimido ahorade tan extraña caída,he de estar toda mi vida (vv. 1.201-1.210).

Después de escenificar el ejemplo del hoyo, prosigue el debate teológicosobre los aspectos más controvertidos y de difícil argumentación. Se observala validez del ejemplo y su capacidad pedagógica para el público. Y comobien dice al Furor le debe más por haberle evitado el caer.

Culpa. Cosa es clara,que le he debido más yo,pues antes de haber caídome ha excusado de caer (vv. 1.216-1.219).

Argumenta el Furor en contra. Porque, según entiende, más tiene queagradecer el que se vio perdido que el que nunca lo estuvo. Pero concluyela Culpa con el ejemplo de un enfermo curado, ha padecido ya el dolor, poreso dice:

Culpa. Mas no en quien llega a verla cura antes del dolor.Luego viene a ser mejorpreservar que socorrer (vv. 1.254-1.257).

Recapitulando, el Placer explica lo ocurrido con ambos.

Placer. Una atención, un cuidadome habéis costado los dos;vos, porque caísteis; vosporque no os dejé caer;

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

350 ScrdeM

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

pues si esto hace mi poder,¿qué no hará el poder de Dios?Luego de Dios reservadaestá la que no cayó,y sin caer se levantólimpia antes de estar manchada (vv. 1.282-1.291).

El preservar queda como modo más eminente de redención.

Placer. Luego en su Sangre hoy es bienque esta Niña comprendidasea antes de la caída,y es, pues Dios la ha preservado,Concebida sin pecado,y en su Sangre Redimida (vv. 1.302-1.307).

A la Culpa todavía le queda un aspecto de la cuestión.

Culpa. Es vana sofisteríaquerer que esta niña humanade la sangre de Dios goceantes que esté derramada (vv. 1.308-1.311).

Para que Jesús la derrame, antes se la ha de dar su madre y ya tiene queser limpia.

Naturaleza. Pues si por ser más, no habíade ser menos, cosa es clara,que así le da anticipadoeste mérito de Gracia (vv. 1.318-1.321)43.

Termina el auto con una bella imagen, muy habitual en la iconografíacristiana para representar a la Inmaculada Concepción: la Niña pisa a la

351ScrdeM

43. Ante esto la Culpa se enfurece más todavía. Culpa: “No sé más, de que yo tengo / estaescritura, firmada / de su nombre ante Moisés, / y a las puertas de su casa / la he de hacerpública hoy; / y, si el pecho no me paga, / la obligaré que litigue / si es hidalga, o no eshidalga. / Presente su ejecutoria, / haya un texto solo, haya / un evangelio, que diga / que hanacido preservada”. Amor: “Las asentadas noblezas, / las ilustrísimas casas / no tienenejecutorias, / la notoriedad les basta” (vv. 1.322-1.337).

Culpa.

Niña. El privilegio que traestú misma es en esta causacontra ti; pues dice él mismocon misteriosas palabrasque habrá entre ti y la Mujerdisensiones y acechanzas,y que ella a poner vendrá

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

352 ScrdeM

Inmaculada niña: Vicente Berdusán. Año 1663. Hospital de santa María de Gracia, Tudela (Navarra).

(Salve. 700 años de arte y devoción mariana en Navarra,ed. Gobierno de Navarra, Navarra 1994, p. 143).

LA HIDALGA DEL VALLE. UN AUTO SACRAMENTAL MARIANO

los pies sobre tu garganta;ya se ha cumplido, pues pisotu frente, sin que tu rabiapueda atreverse a morderme,con ser víbora pisada,porque en este inmenso vallede lágrimas soy la Hidalga (vv. 1.376-1.389).

Conclusión

Como se ha podido notar, en la exposición de las cuestiones, más queargumentar mucho por nuestra cuenta, nos hemos servido de los versos deCalderón preferentemente. Esto obedece a varias razones, por una parte, nosha servido para escucharle a él que es lo verdaderamente interesante(cuestión que hoy resulta complicada en este tipo de obras, difíciles deencontrar por carecer de ediciones actuales y populares); por otra, es lamayor garantía para ser fieles a sus ideas. Además, así puede comprobarsemejor hasta qué punto es posible la unión de teatro y teología, es decir,saber cuál es la verdadera viabilidad de un teatro dogmático, donde esescasa la acción dramática y lo único que se muestra es un argumentoteológico, como la Concepción Inmaculada de María.

Los elementos que Calderón emplea para realizar este teatro dogmáticoson los componentes que hemos querido distinguir en nuestro estudio.Primero, los personajes alegóricos, porque la alegoría es el graninstrumento del auto sacramental para hacer representable un teatro deideas, que conduce de lo humano a lo trascendente. Segundo, unaconstrucción precisa, respetuosa de las leyes básicas del teatro, ofreciendoplanteamiento (las tres puertas correspondientes a las tres Leyes), nudo (alque hemos prestado más atención, porque concentra la capacidad dramáticadel auto en la pregunta sobre una posible excepción a la concepción en

353ScrdeM

44. En el siglo XX, se hicieron algunos esfuerzos por recuperar los autos sacramentales, sevolvieron a representar los antiguos y se escribieron algunos nuevos con temascontemporáneos (por ejemplo, G. TORRENTE BALLESTER con El casamiento engañoso), perono se obtuvo el fruto deseado.

pecado) y desenlace (el ejemplo del hoyo), con un desarrollo de granequilibrio y muy brillante en su exposición. Tercero, las propias cuestionesteológicas, con su propia dinámica, pues se parte de la universalidad delpecado original, se espera la redención y ésta se cumple en la Virgen Maríade un modo completamente singular, gracias al ser redimida antes de versemanchada de pecado.

En definitiva, como puede verse, la historia de la salvación como materiade una obra de arte no decae en fuerza ni actualidad si se hace bien y en lascondiciones adecuadas44. Por todo lo expuesto, el peculiar género de losautos sacramentales se ve plenamente cumplido en La hidalga del valle, ungran ejemplo del genio de Calderón para realizar un teatro dogmático,como lección magistral en la unión de teatro y teología.

Román SOL RODRÍGUEZ

MADRID

ROMÁN SOL RODRÍGUEZ

354 ScrdeM

La Virgen Niña en oración: Francisco Zurbarán. Museo del Ermitage, Leningrado (San Petersburgo).

(L. MONREAL, La pintura en los grandes museos, tomo 8, ed. Planeta, S. A.,Córcega - Barcelona 1981, p. 30).

Página siguiente