La Profecía en El Nuevo Pacto

La profecía en el Nuevo Pacto salvadosporJesús.com


LA PROFECIA EN NUEVO PACTO

Estudios Bíblicos de Salvados por Jesús.

El Nuevo Pacto y la Profecía

Voy a citar a un siervo de Dios que fungió como profeta estando vigente el Antiguo Pacto , me refiero a Joel,

quien profetizó acerca de el día en que oficialmente se iniciaría el Nuevo Pacto:

Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones.

Joel 2:28

Prueba irrefutable de que Joel estaba hablando de lo que sucedió en Pentecostés, es la confirmación que Pe-

dro da, al justamente citarlo para aclarar lo que ahí estaba sucediendo.

Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días Derramaré de mi Espíritu, y profetizarán.

Hechos 2:18

El caso es que la profecía es un elemento constante en esta revelación del nuevo pacto, con una diferencia-

ción, de la cual hablaré al final de esta nota.

Las Arras del Espíritu y la profecía

Hay que notar que el Espíritu (la promesa hecha por Jesús ) es para todos los elegidos, primordialmente por-

que esta contiene el sello del Nuevo Pacto que es redención :

Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.

Hechos 2:39

Recordemos que el Espíritu es las arras de nuestra salvación. En la antigüedad las arras eran la dote que se

daba por la novia. En contratos o pactos , las arras eran un anticipo o prima que servía para sellar un pacto.

(-La Iglesia es la novia del Cordero - Apocalipsis 21: 9 y la analogía del matrimonio Efesios 5:25 - 33-)

el cual también nos ha sellado, y nos ha dado las arras del Espíritu en nuestros corazones.

2 Corintios 1:22

Mas el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado las arras del Espíritu

2 Corintios 5:5

En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.

Efesios 1:13 - 14

Por eso vemos como en el inicio del Nuevo Pacto, El Espíritu las lenguas y la profecía iban de la mano.

Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetiza-


ban.

Hechos 19:6

Al otro día, saliendo Pablo y los que con él estábamos, fuimos a Cesarea; y entrando en casa de Felipe el evange-lista, que era uno de los siete, posamos con él. Éste tenía cuatro hijas doncellas que profetizaban. Y permanecien-do nosotros allí algunos días, descendió de Judea un profeta llamado Agabo, quien viniendo a vernos, tomó el cinto de Pablo, y atándose los pies y las manos, dijo: Esto dice el Espíritu Santo: Así atarán los judíos en Jerusa-lén al varón de quien es este cinto, y le entregarán en manos de los gentiles. Al oír esto, le rogamos nosotros y los de aquel lugar, que no subiese a Jerusalén.

Hechos 21: 8 - 12

La Profecía y la Revelación

El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará. Porque en parte conocemos, y en parte profetizamos; mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará.

1 Corintios 13: 8—10

El hombre sólo puede venir a Dios, por el llamamiento hecho por Espíritu Santo, que está supeditado a la esco-

gencia de Dios. Solo Dios nos puede dar entendimiento y conocimiento, y esto el lo hace por medio del Espíri-

tu. A esto es lo que se llama revelación.

La revelación de Dios al hombre es individual y es también gradual. Cuando Dios le revela a una persona algún

aspecto de la Salvación y/o su persona _ Dios mismo _ no significa que esta persona está recibiendo un cono-

cimiento que nadie tiene, o nadie nunca halla tenido. Simplemente es revelación para la persona que lo recibe

en esa etapa especifica de su vida, pues antes ignoraba o era ciego a esa verdad. Por eso se entiende que la

revelación es gradual, porque de acuerdo al plan de Dios y a nuestra madurez en Cristo, vamos creciendo en el

conocimiento de Dios, o sea en revelación.

Otro detalle de suma importancia respecto de esto es que la revelación que recibimos de Dios, está imbuida

en las Sagradas Escrituras. Nunca ninguna revelación de Dios va a contradecir lo que la Biblia dice.

El caso es que la revelación de Jesucristo nos sucede a todos los que somos llamados y escogidos de Dios, na-

die puede entender a Dios, si no es por el Espíritu Santo.

Pero antes que viniese la fe, estábamos confinados bajo la ley, encerrados para aquella fe que iba a ser revelada.

Gálatas 3:23

Mas os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre; pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo.

Gálatas 1:11 - 12


Como veremos mas adelante tanto la revelación como la profecía - cada una en particular - tienen una duali-

dad.

Revelación de eventos futuros. - Exhortación.

Y le había sido revelado por el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Ungido del Señor.

Lucas 2: 26

¿Qué hay, pues, hermanos? Cuando os reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tie-ne revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación.

1 Corintios 14:26

Revelación de palabra de consuelo y sabiduría espiritual. - Edificación y consolación .

Y Zacarías su padre fue lleno del Espíritu Santo, y profetizó, diciendo:

Lucas 1:67

Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación.

1 Corintios 14:3


Profetas bajo diferentes Pactos

Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan .

Mateo 11:13

En el pasaje citado, Jesús mismo es quien hace una diferenciación entre los profetas que vinieron antes de

que el Espíritu Santo descendiese después de su muerte y resurrección. Aunque esta distinción , no es basada

en estilo o forma, sino mas bien en referencia al privilegio de los nuevos profetas, que estaban ya no bajo un

pacto por venir, sino por uno ya establecido.

Bajo este Nuevo Pacto, todos serian llenos del Espíritu y todos serian profetas. Un contraste con los profetas

del Antiguo Testamento, quienes dentro de el pueblo eran la excepción a la regla. Los hijos nacidos después

de establecido el Nuevo Pacto, tendrían todos los privilegios concedidos por quien conquistó a la muerte, al

diablo y al mismo infierno : Jesús El Cristo, Señor de todo lo creado.

Pero si todos profetizan, y entra algún incrédulo o indocto, por todos es convencido, por todos es juzgado;

1 Corintios 14:24

La naturaleza Dual de la profecía.

Lecturas

Todo varón que ora o profetiza con la cabeza cubierta, afrenta su cabeza.

1 Corintios 11:4

Pero toda mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta, afrenta su cabeza; porque lo mismo es que si se hubiese rapado

Porque podéis profetizar todos uno por uno, para que todos aprendan, y todos sean exhortados.

1 Corintios 14:31

Así que, hermanos, procurad profetizar, y no impidáis el hablar lenguas;

1 Corintios 14:39

El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia.

Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación.

1 Corintios 14: 4 - 5

En los pasajes anteriores vemos como la profecía tiene dos avenidas:

Una es el anuncio literal de eventos por venir, revelación que puede ser de sucesos específicos hacia una per-

sona, al igual que puede ser el anuncio de la venida del Señor la esperanza del creyente y los juicios que le vie-

nen al mundo, todo lo cual se puede tomar como exhortación y consolación.

La otra es también el resultado de revelación, pero que tiene mas que ver con asuntos doctrinales, la natura-

leza de Dios, la vida cristiana que agrada a Dios, el mundo, el pecado, la regeneración, la obra de Cristo, el dia-

blo etc. Este tipo de profecía se puede tomar como de consolación y de edificación.

Por la narrativa bíblica se puede deducir sin lugar a dudas que la profecía no tiene restricciones con respecto a


quien de la iglesia lo puede hacer, todos pueden profetizar, hombre o mujer, joven o anciano.

Por eso Pablo, insiste en que todos profeticen. Siendo el motivo fundamental la edificación mutua o general,

bajo la regla del sometimiento mutuo y en base a que todos tenemos el mismo Espíritu Santo.

Cabe aclarar aquí, que el profetizar es un instrumento de edificación y por sobre todo un privilegio dado a la

Iglesia, por el Espíritu, no es nunca un instrumento para someter a los demás, o para reclamar algún tipo de

autoridad. Al fin y al cabo, para los creyentes lo más importante es vivir una vida consagrada a Dios, recorde-

mos la advertencia de Jesús :

Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera de-monios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.

Mateo 7:22 - 23

Resumen final y consejos sobre el tema

La profecía en el Nuevo Pacto, es dada en palabra clara y comprensible, revelada por medio del Espíritu Santo.

En Hechos hay pasajes que nos hablan de profetas de la iglesia que anunciaban eventos próximos a suceder y

que tenían que ver con una persona en específico.

La regla a seguir en este caso es que este tipo de profecía se le da solamente a la persona a la cual es designa-

da, y segundo, si los eventos no suceden fidedignamente, la persona que lo dijo es un falso profeta. La expe-

riencia nos deja ver que muchos que tienen un concepto errado de lo que es operar en el Espíritu, en su afán

por llamar la atención, o su deseo de ser reconocidos como algo especial, abusan de la confianza cristiana para

inventar profecías, que a la postre solo sirven para crear confusión, promover miedo y desconfianza y hasta en

muchos casos provocar tropiezos. De igual manera, la constante es que Dios avisa a la misma persona directa-

mente, estoy seguro que el aviso por medio de otra persona es mas la excepción que la regla, a menos de que

estemos hablando de la predicación de las buenas nuevas.

La profecía dentro de la Iglesia, siempre será hecha por todos para que todas aprendan y todos sean exhorta-

dos.

La profecía esta contenida en la Palabra de Dios, nadie puede decir que Dios le reveló algo nuevo, algo que no

está en las Escrituras. Quien quiera que esto haga está bajo doble maldición.

Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.

Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis reci-bido, sea anatema

Gálatas 1: 8 - 9

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