La Querella Del Arte Contemporáneo

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  • 7/26/2019 La Querella Del Arte Contemporneo

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    Marc Jimenez

    LA QUERELLA DEL ARTE CONTEMPORANEO

    Prefacio

    El Origen de la crisisExisten an criterios de apreciacin esttica?. En el umbral de la ltima dcada del siglo XX, esta

    pregunta desencaden de modo espectacular e inesperado, especialmente en rancia, lo !ue a"ora se "a

    dado en denominar ##la crisis del arte contempor$neo%% &...'( )*.

    &...' interrogarse acerca de las normas de e+aluacin apreciacin estticas !ue permiten -ormular un

    uicio sobre las obras de arte no tiene en s/ nada de escandaloso. 0a cuestin es incluso pertinente, pues

    se acerca a las reacciones del gran pblico, a menudo perpleo desorientado ante obras !ue no

    comprende(. )1.

    2ese a la notoriedad nacional e internacional de 3aniel 4uren, artista reconocido por las instituciones

    pblicas, eti!uetado como ##artista o-icial%%, la contro+ersia !ue lo opone a sus mu numerosos

    espectadores dista de "aberse resuelto &...'( )1.

    0as esculturas corporales de 5rland, en especial las inter+enciones !uirrgicas ##estticas%% !ue

    remodelaron su rostro a los e-ectos de denunciar los estereotipos ampliamente mediatizados de la

    belleza -emenina, despierta an "o cierto grado de incomprensin &...'( )1.

    El ready-made, ese obeto completamente ##in+entado%% por Marcel 3uc"amp en )6)*, inasimilable,

    segn la propia con-esin del artista, a una obra de arte , sin embargo, en gran medida presente "asta

    "o en el arte contempor$neo, contina sorprendiendo a m$s de un espectador por su incongruencia(.

    )17)8.

    El semirremol!ue !ue Jean7Marc 4ustamante pensaba instalar, en )688, en una capilla en desuso de la

    ciudad de 9arpentras se +io obligado a dar media +uelta &:' por orden del alcalde, instigado por las

    intensas reacciones de sus administrados &...'( )8.

    &...' este tipo de arte pro+oca con muc"a -recuencia impresiones sensaciones encontradas;

    curiosidad, asombro, incomprensin, irritacin, reprobacin, esc$ndalo, execracin o, peor an,

    indi-erencia. En suma, mu a menudo alcanza su obeti+o. < resulta per-ectamente legitimo

    interrogarse acerca de la existencia de criterios estticos !ue rigen la seleccin de los artistas de sus

    obras por las instituciones pblicas pri+adas &...'( )8.

    &...' los criterios se "an +uelto inaplicables o &:' lisa llanamente "an desaparecido. =o tiene nada de

    sorprendente !ue los criterios art/sticos de los siglos X> XX a no sean +$lidos; la modernidad

    art/stica del siglo XX se "a encargado de descali-icar las categor/as estticas tradicionales. 2or el

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    contrario, la "iptesis de la desaparicin lisa llana es moti+o de sorpresa, determina, por otra parte,

    !ue se torne particularmente incomprensible la atencin de !ue es obeto el arte contempor$neo por los

    pro-esionales del arte la cultura &...'( )87)@.

    &...' pese a la -recuente perpleidad del pblico ante mani-estaciones cuo sentido se les escapa, el arte

    contempor$neo se bene-icia sobremanera, desde "ace m$s de dos dcadas, con sub+enciones otorgadaspor el Estado &:' bien se puede pensar !ue los poderes pblicos !ue -inancian los proectos, o !ue

    se los encargan a los artistas, disponen de normas !ue garantizan una seleccin rigurosa, no aleatoria,

    en cuanto a la calidad el +alor de las obras sub+encionadas(. )@.

    &...' se trate de su obsolescencia o su desaparicin, por el momento la polmica se centra inicialmente

    en el tema de la decadencia del arte contempor$neo. 3e !uin es la culpa? Ana pltora de potenciales

    culpables &:' el Estado &:' sub+enciona un arte ##o-icial%% !ue en principio resulta, no obstante,

    rebelde ante las normas los +alores sociales comunesB los artistas, acusados de oportunismo, !uienes

    pretenden una cotizacin +entaosa en el mercado del arteB los cr/ticos de arte, complacientes

    timoratosB la renuncia al o-icio, a la tcnica al saber "acerB los medios de comunicacin de masas, al

    acec"o de lo sensacional, e, ine+itablemente, Marcel 3uc"amp, el iconoclasta, el gran iniciador de

    ##cual!uier cosa%% de la decadencia en el campo de las artes &...'( )@.

    Una querella paradjica

    &...' por +arias razones, esta crisis del arte contempor$neo resulta paradica &:' 3espus del

    cubismo, la abstraccin, las +anguardias, elpop art, el minimalismo, el arte bruto, los happenings, las

    instalaciones, etc., bien se pod/a creer !ue el mundo art/stico estaba "arto de la desen-renada sucesin

    de pro+ocaciones &...'(. )C.

    &...' 0as contro+ersias sobre el arte contempor$neo tu+ieron lugar en ausencia de los artistas &...' Dus

    obras propiamente dic"as rara +ez eran citadas menos an analizadas. 0os comisarios de

    exposiciones e "istoriadores del arte -rancs !ue se bat/an a espada &...' a propsito de la situacin del

    arte contempor$neo en rancia &...'( )C.

    Etimolgicamente, una !uerella signi-ica ##!uea ante la usticia%%. 9abe mu bien imaginar los

    procesos en los cuales deb/an entender antao los ueces garantes de lo bello, de la armon/a de la

    semeanza, en contra de los obras consideradas escandalosas o "erticas &...'()F.

    &...' !u tribunal recibir/a a los !uerellantes, si no el de la "istoria, o sea, ##el de los tiempos%%, !ue

    elige ineluctable casi in-aliblemente entre las obras inol+idables a!uellas !ue no +ale la pena

    recordar? &...' siempre resultan ganadoras las obras, cuando menos a!uellas !ue escapan al ol+ido de la

    "istoria. De +er/a tambin !ue el arte siempre "a sabido a-ianzar la libertad de creacin contra todo tipo

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    de coercin, de dogmas, de con+enciones, de tradiciones, de tutelas di+ersas Greligiosas, pol/ticas,

    ideolgicas, econmicas7, !ue permanentemente se "an opuesto a la +oluntad de trans-ormar el mundo

    &...'( )F.

    F...' algunas !uerellas clebres; la de la mimesis, recurrente desde la HntigIedad Ga -a+or o en contra

    de la imitacin el trompe-loiel7B la !uerella !ue en-rent a la 9ontrarre-orma con la iconoclastialuterana cal+inista &...' ambin recordamos la !uerella de los Hntiguos los Modernos, sobre un

    -ondo de estrategia pol/ticaB la !uerella del color contra el dibuo, !ue ten/a en un segundo plano la

    conmocin del racionalismo cartesianoB la !uerella de los 4u-ones &...'( )F7)6.

    &...' la modernidad modi-ic pro-undamente el sentido de los en-rentamiento. El menosprecio de la

    tradicin se +ol+i cada +ez m$s radical, el rec"azo de lo ##antiguo% se mani-est de manera muc"o

    m$s sistem$tica. 0a experiencia de lo nue+o se in-iltr en todos los aspectos de la +ida cotidiana.

    rans-orm la representacin de la +ida moderna &...'( )6.

    &...' En el primer tercio del siglo XX, el -ilso-o Kegel presinti el surgimiento del arte moderno sin

    tener ante sus oos ni en los o/dos ningn eemplo de ##modernidad%% art/stica. 9r/tico acerbo sagaz,

    sin ilusiones sobre el -uturo, 4audelaire se con+irti, sin embargo, en los comienzos de la Le+olucin

    industrial, en el poeta de la modernidad. ransgresiones, esc$ndalos pro+ocaciones se sucedieron sin

    cesar -ueron soca+ando poco a poco la autoridad, por cierto declinante pero an bien a-ianzada "asta

    -ines de siglo, del academicismo el conser+adurismo. En los umbrales del siglo XX, el grito de

    auguin expresaba con toda razn el entusiasmo de una generacin !ue algunas dcadas despus se

    aprestaba a pasar del neoclasicismo a la abstraccin &...'( )6.

    &...' -uera de algunos clebres ##accidentes%% de repercusin tard/a prolongada &...' NlaO libertad

    slo sobrepas temporariamente las -ronteras del arte. 5blig en particular a las instituciones &...' a

    "acer retroceder los l/mites. Estas instituciones, as/ como el mundo del arte, mu a menudo terminaron,

    de buen o mal grado, por aceptar e incorporar esos desbordes. < lo mismo sucedi con el pblico, !ue

    al cabo de un tiempo -ue asimilando e incluso celebrando obras ignoradas o rec"azadas en el momento

    de su creacin(. PQ.

    0a crisis de las bellas artes tradicionales G!ue comienza con el impresionismo7, el nacimiento de la

    abstraccin, las +anguardias, al irrupcin de obetos industrializados en el campo art/stico Gen suma, la

    modernidad7, dan cuenta en -orma imper-ecta del malestar actual. 9ontrariamente a una idea

    establecida, el arte moderno no explica al arte contempor$neo. 3ic"o de otra manera, no se puede

    suscribir la tesis &...' !ue establece una relacin de causa a e-ecto entre las conmociones pro+ocadas por

    la modernidad la pretendida delicuescencia de la creacin art/stica desde "ace unos treinta aos( PQ7

    P).

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    El fin de la unidad de las bellas artes: las artes plsticas

    Es cierto !ue el denominado ##arte contempor$neo%% nace &...' en un terreno preparado desde muc"o

    tiempo atr$s por la descomposicin de los sistemas de re-erencia, tales como la imitacin, la -idelidad a

    la naturaleza, la idea de belleza, la armon/a, etc., por el relaamiento de los criterios cl$sicos(. P).

    &...' 0as +anguardias el arte moderno, "asta su apogeo en la dcada del sesenta, contribueron engran medida a esa conmocin, debida en parte al des"ilac"amiento de las artes, a las mezclas a las

    "ibridaciones de pr$cticas materiales. De !uebr la unidad de las bellas artes Gdibuo, pintura,

    escultura, ar!uitectura7, !ue "ab/a legitimado durante dos siglos la elaboracin de eruditas

    clasi-icaciones por los "istoriadores -ilso-os del arte, se abri un +asto dominio de inno+aciones,

    experimentaciones, correspondencias inditas poli+alencias en busca de una nue+a co"erencia(. P)7

    PP.

    &...' a di-erencia del arte moderno G+/ctima del ##-renes/%% de lo nue+o, preocupado por romper con

    los c$nones acadmicos los +alores art/sticos tradicionales7, el arte contempor$neo cambi

    pro-undamente el signi-icado de la transgresin.

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    !uitaba, sobre todo, sus connotaciones idealistas rom$nticas, "eredadas de los siglos X> XX.

    Ensear en la escuela o en la uni+ersidad las ##artes pl$sticas%%, a no el tradicional ##dibuo%%, se

    inscrib/a en un proecto m$s +asto &...' de -a+orecer en -orma democr$tica el acceso a la cultura de la

    maor cantidad posible de ciudadanos. Esta democratizacin &...' se orientaba a sensibilizar ante el arte

    actual a las +enes generaciones , por lo tanto, a un pblico tan amplio como -uera posible &...'( P*.&...' 0as pr$cticas llamadas ##contempor$neas%% toda+/a pro+ocan sobre todo reticencias rec"azos,

    a se traten de artes pl$sticas propiamente dic"as, a de msica, danza, cine o ar!uitectura. De podr/a

    decir &...' !ue el arte contempor$neo se +uel+e Gaun!ue resulte paradico7 cada +ez m$s aeno al

    pblico !ue le es, precisamente, contempor$neo(. P1.

    &...' las cl$sicas &...' teor/as del arte de la cr/tica de arte, an +$lidas para dar cuenta del arte

    moderno, constituen mu a menudo pobres recursos para analizar, explicar o legitimar las -ormas casi

    siempre desconcertantes de la creacin actual. 0o !ue +al/a para la es-era de las bellas artes en el

    sistema Rantiano &...' a no con+en/a, dado !ue la unidad de las bellas artes a"ora estaba en !uiebra

    las normas los criterios tradicionales de e+aluacin "ab/an sido trastocados(. P1.

    &...' 0a pro-usin de textos sobre el arte, en el transcurso de la ltima dcada, demuestra una +oluntad

    de +ol+er a encontrar algunas re-erencias con-iables en una countura en !ue se "a perdido la brula.

    3e "ec"o, se "an multiplicado los ensaos acerca del arte, sobre todo desde "ace una dcada, unto a

    cr/ticas especializadas, cat$logos de exposiciones, escritos tericos, -ilos-icos, sociolgicos estticos

    &...'( P17P8.

    &...' =o se trata tanto de analizar obras en particular, !ue en s/ mismas se "an +uelto problem$ticas a

    las !ue algunos les niegan la categor/a de obras de arte, sino de legitimar la apertura "acia nue+as

    experiencias estticas, e incluso, en el meor de los casos, de crear una nue+a mirada acerca del mundo.

    Din embargo no "a !ue sobreestimar la in-luencia !ue los escritos de los especialistas eercen en el

    pblico &...' el arte esa clase de re-lexiones sobre el arte no a+anzan al mismo paso. El pblico !ue

    asiste a los museos de arte moderno, en de-initi+a, mira con mala cara al conunto de centros e

    institutos de arte contempor$neo. 2oco interesado en el debate de los expertos &...' deserta tanto de los

    lugares de exposicin como del restringido teatro de las contro+ersias las polmicas. Di bien sospec"a

    !ue el arte contempor$neo obedece &...' a con+enciones &...' ignora las reglas de uego, !ue son

    propiedad exclusi+a de una red de expertos de !uienes deciden en las instituciones o en los centros

    pri+ados, los cuales se "allan sometidos a los imperati+os del mercado del arte, de la promocin

    medi$tica del consumo cultural &...'( P8.

    &...' N0aO ausencia de re-erencias de cla+es para la interpretacin re-uerza, sin duda, la sensacin de

    !ue el arte contempor$neo bien podr/a ser esa ##cual!uier cosa%% !ue estigmatizan sus detractores. En

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    tal caso, resulta di-/cil con+encer a los +isitantes de institutos centros de arte de !ue la pretendida

    ##cual!uier cosa%% no se "ace en cual!uier parte &...'( P8.

    La crtica de arte en el callejn sin salida

    &...' 9mo uzgar la calidad art/stica de obetos pr$cticas si a no existen criterios ni normas a loscuales remitirse? Di es cierto, como "emos dic"o, !ue el problema de la apreciacin de las pr$cticas

    art/sticas actuales interesa al pblico, "a !ue reconocer !ue las condiciones de eercicio del uicio

    esttico "an sido pro-undamente modi-icadas en el curso de las ltimas dcadas. ncluso se puede

    "ablar de un cambio radical de la situacin de la cr/tica de arte, en la media en !ue la propia nocin de

    arte est$ cuestionada(. P@.

    0a apreciacin de la cr/tica de arte en su -orma moderna se remonta al siglo X>. Du gnesis su

    desarrollo participan del mismo mo+imiento de emancipacin Gel luminismo7 !ue +io nacer la "istoria

    del arte, la esttica -ilos-ica, el espacio pblico, la prensa el mercado del arte. Hl mismo tiempo

    gnero literario Gal !ue 3iderot dio sus t/tulos de nobleza7 o-icio, particip en la autonom/a del uicio

    basado en el gusto cr/tico, e+aluador con pretensiones uni+ersalistas. De eerci dentro del sistema

    reconocido de las bellas artes con auda de categor/as per-ectamente de-inidas, como la de belleza

    &...'( P@.

    &...' no se planteaba la cuestin de saber si con+en/a percibir una escultura de 9ose+ox, un cuadro de

    9"ardin o una sin-on/a de Mozart como obras de arte.Eran sin duda obras de arte, se las apreciara o

    no, -ueran uzgadas bellas o mediocres, es decir, m$s all$ del uicio basado en el gusto. Hlgo di-erente

    ocurr/a cuando a no se trataba de e+aluar las cualidades estticas de una escultura, de un cuadro o de

    una sin-on/a, sino de saber si un obeto, una accin o un gesto pertenec/an al campo del arte. ampoco

    all/ "ab/a moti+o, al parecer, para la inter+encin del uicio basado en el gusto. Din embargo, para saber

    si una pr$ctica cual!uiera o una cosa surg/an del arte era preciso saber !u era el arte, o disponer de una

    de-inicin, aun!ue -uera +aga, de l &...'( PC.

    &...' la paradoa de la situacin creada por el arte contempor$neo radica no slo en la indefinicin del

    arte, sino tambin en el "ec"o de !ue la palabra ##arte%% implica, pese a todo, no obstante su

    indeterminacin, un uicio de +alor. 2or cierto, lo !ue interesa no es a la belleza de tal o cual obeto,

    sino !ue reconocerlo como obeto art/stico signi-ica singularizarlo colocarlo en una categor/a !ue no

    es la de los obetos banales &...'( PC.

    &...' se llega a +alorizar Ges decir, concretamente, a exponer en los museos o en las galer/as7 obetos o

    pr$cticas despro+istos de cualidades art/sticas espec/-icas, sin !ue en principio nada usti-i!ue su

    presencia en dic"os lugares. H la in+ersa, la dimensin de e+aluacin de la palabra ##arte%% se re+ela

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    asimismo, de manera indirecta, en las apreciaciones negati+as !ue "acemos sobre obetos a los cuales

    les negamos cual!uier pretensin art/stica. Hl no ser a pertinente la re-erencia a lo bello o lo -eo, nos

    basta con declarar, con maor -acilidad !ue en el pasado, acerca de algo !ue "ierre nuestro gusto;

    ##Der$ lo !ue !uieran, menos arte%%(. PC.

    2uede concebirse, pues, -$cilmente el desconcierto de una cr/tica de arte cuo papel a no es analizaro interpretar las obras, sino !ue se limita a establecer una l/nea di+isoria entre el arte el no7arte. Es Es

    e+idente !ue la cuestin de los criterios no !ueda as/ resuelta. Esa demarcacin supondr/a, en e-ecto, la

    aplicacin de una regla, un canon o una norma, pero esta clase de criterios a no existe. 2or lo dem$s,

    el uicio esttico con pretensiones obeti+as, aceptable para la maor/a, ser/a imposible, a !ue cada

    cual podr/a decidir libremente !u es lo !ue deber/a entrar o no en la categor/a de ##arte%%, en -uncin

    de sus gustos, su educacin e incluso sus "umores &...'( PF.

    &...' la esttica, dos siglos medio despus de nacer como teor/a del arte, +ol+er/a a estar en una

    posicin idntica a a!uella !ue el -ilso-o Emmanuel Sant pretend/a superar, es decir, depender/a de la

    libre opcin de cual!uiera, segn el mu conocido adagio ##Dobre gustos colores no "a nada

    escrito%%(. PF.

    &...' En nuestros d/as, el artista contempor$neo a no ese limita a un solo medio. Hdem$s de ser pintor

    o escultor, tambin puede desempear las -unciones de creador de per-ormances o de instalaciones, ser

    cineasta, msico, etc. El -inal de la unidad de las bellas artes se caracteriza, de "ec"o, por la dispersin

    de los modos de creacin a partir de -ormas, materiales, obetos o acciones "eterogneos, !ue la

    expresin ##arte contempor$neo%% de-ine de manera imper-ecta. Esta dispersin es producto de la

    extrema di+ersidad de las experiencias sensibles, propiamente estticas en extremo indi+idualizadas,

    !ue o-rece a"ora la multiplicidad de pr$cticas culturales(. PF.

    &...' rente a NlaO sobre abundancia de experiencias estticas di+ersi-icadas, el pblico o, m$s bien, los

    pblicos tienden a reaccionar de manera particular; cada cual se considera con derec"o a uzgar lo !ue

    para l resulta bueno. Empero, m$s an !ue una subeti+acin del gusto, se asiste "o a una -uerte

    indi+idualizacin de las actitudes ante el arte la cultura, al menos en !uienes tienen -$cil acceso a

    ellos. Din embargo, ese comportamiento &...' resulta paradico. En e-ecto, se mani-iesta en un contexto

    espec/-ico, marcado por la -uerte presin de las industrias culturales, !ue se eerce masi+amente sobre

    los indi+iduos &...'( P6.

    &...' Din duda, NelO sistema asume, en parte, un papel democratizador de la cultura, pero -rente a la

    abundancia de sus presentaciones, a +eces ante la laxitud, la cr/tica de arte +e su tarea simpli-icada

    sobremanera. 3el an$lisis la interpretacin Gelogioso o no7 de las obras particulares, tiende a

    orientarse "acia la promocin indi-erenciada de los bienes culturales(. P6.

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    &...' N0aO desidia de una cr/tica de arte !ue, de "ec"o, renuncia a toda cr/tica -ue mencionada +arias

    +eces en el debate sobre la crisis del arte contempor$neo. Hlgunos estigmatizaros el car$cter consensual

    de una cr/tica !ue de-eccionaba, !ue se limitaba a promo+er los bene-icios de la industria cultural en su

    conunto , sin embargo, se mostraba incapaz de contribuir a la -ormacin del uicio re-erido a la

    calidad de las obras. 5tros denunciaron ese paradico indi+idualismo de masas !ue respond/a, ende-initi+a, de manera adecuada, a un sistema !ue -uncionaba segn el modelo del "ipermercado. El

    ##cliente%% lle+a su art/stico, aun!ue su seleccin pretendidamente personal est$ limitada

    a una gama de productos masi+amente preseleccionados por los ##centros de compras%% &...' en el

    mercado del arte contempor$neo(. P67*Q.

    Cambios de paradigmas

    &...' ante una situacin indita, esas teor/as Ndel arteO pretenden reno+ar los modos de interpretacin

    tradicionales proponen nue+os paradigmas. Hs/, en lugar de interrogarse en +ano sobre !u es el arte

    adaptar, bien o mal, su de-inicin a cada irrupcin de algo aparentemente incongruente, la -iloso-/a

    anal/tica pragm$tica, en particular la anglosaona, toma nota de las pro-undas modi-icaciones !ue

    a-ectan el estatuto de la obra de arte del artista.

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    por sus pares. ambin es cierto !ue las instituciones, pri+adas o pblicas, desempean un papel

    predominante en la promocin del arte contempor$neo &...'( *P.

    &...' N0a -iloso-/a anal/ticaO 9onsidera !ue el arte asume en esencia una -uncin de conocimiento, !ue

    es la expresin de un mundo !ue contribue a construir Ga ##"acerlo%%, segn el trmino empleado

    por =elson oodman7, con prescindencia de los uicios de +alor, las emociones o las e+aluacionescr/ticas !ue pueda generar. Esta posicin, !ue tiende pura simplemente a pri+ar a la re-lexin sobre el

    arte de su dimensin cr/tica de apreciacin Gdic"o de otra manera, a neutralizarla7, es compartida

    asimismo, bao -ormas di+ersas, por numerosos tericos -ranceses &...'( *P.

    &...' 0a esttica, cuto cercano -inal se "a pronosticado, no ser/a m$s !ue una rama de la antropolog/a,

    con +ocacin en esencia descripti+a anal/tica. 5tros adoptan una posicin resueltamente subeti+ista,

    lo cual es una manera de +ol+er al -amoso adagio sobre los gustos los colores(. **.

    Las apuestas reales de la querella

    &...' El debate sobre el arte contempor$neo conclu r$pidamente, a puertas cerradas entre iniciados.

    Ello no es ino indicio de una +erdadera distorsin entre la legitimacin institucional, de la !ue se

    bene-icia ese arte, su reconocimiento pblico, m$s bien modesto. al distorsin re+ela tambin &...' la

    creciente brec"a entre el mundo del arte, los expertos en arte contempor$neo los espectadores,

    librados a su suerte, -rente a las +erdaderas apuestas !ue deben a-rontar las -ormas actuales de la

    creacin art/stica(. *1.

    &...' la !uerella del arte contempor$neo muestra las insu-iciencias limitaciones de un sistema cultural

    basado, sobre todo, en la gestin institucional econmica de la creacin art/stica. 0a renuncia a la

    argumentacin esttica al uicio cr/tico +a acompaada de la sensacin de !ue el arte occidental "a

    terminado, de alguna manera, con su "istoria, reproduce una otra +ez las -ormas los estilos del

    pasado, condenado a la repeticin por "aber agotado en algunos siglos la gama de las posibilidades

    expresi+as &...'( *1.

    &...' la contemporaneidad art/stica sigue siendo, al parecer, un pri+ilegio de la ##+iea cultura

    occidental%% en detrimento de otras -ormas de expresin art/stica consideradas tradicionales, exticas o

    -olclricas , no obstante, tambin ellas plenamente contempor$neas &...'( *8.

    &...' 0a ##lgica cultural%%, a la !ue obedece "o el arte contempor$neo, surge de la combinacin de

    nue+as tcnicas, de los medios de comunicacin del mercado masi+o. Ella logra conciliar el

    indi+idualismo de masas la participacin colecti+a en el sistema de gestin de los bienes culturales.

    Hnte ello, el arte contempor$neo, incluso el m$s pro+ocati+o o extra+agante, no parece estar en

    condiciones de adoptar una posicin cr/tica, en +erdad distanciada, -rente a ese sistema. Din embargo,

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    esta idea de un arte de una cultura !ue se "an +uelto consensuales, no cr/ticos, liberados de cual!uier

    implicacin en los asuntos del mundo, es errnea, pues esa misma lgica permite entre+er nue+as

    perspecti+as &...'( *8.

    &...' 0as -ronteras del arte no terminan de ampliarse ante el doble e-ecto de la e+olucin tecnolgica G

    +irtual, im$genes digitales, 937Lom, * 3, programas "ipermedia, etc.7 el cosmopolitismo art/stico cultural Gmestizaes e "ibridaciones de estilos, -ormas, pr$cticas materiales7.( *8.

    Es probable !ue el arte ##!ue se est$ "aciendo%% pro+o!ue en el -uturo otras !uerellas. 0a cuestin

    de la de-inicin del arte de sus l/mites se +ol+er$ sin duda recurrente, como lo "a sido por cierto en el

    pasado. 2ero el +erdadero inters de los debates -uturos depender$, con seguridad, de la +oluntad !ue

    muestren los di-erentes actores del mundo del arte occidental para oponerse a !ue la creacin art/stica

    !uede reducida a ser slo el eco de lo !ue la sociedad espera de ella(. *8.

    II. Arte Contemporneo: una

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    comprend/a mu bien, sobre todo en =ue+a

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    desmaterializacin del obeto art/stico.

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    art/stica a todas las dimensiones de la experiencia +i+ida(. 6C.

    %II. T)eo#or *.A#orno + e' fin #e 'a mo#erni#a#

    3esde -ines de los aos treinta, el cr/tico de arte norteamericano NreenbergO el -ilso-o alem$n

    NHdornoO emigraron a Estados Anidos, ambos in-luidos por el marxismo, "ab/an tomando partido a

    -a+or del arte +anguardista. 3enunciaban con +irulencia la industrializacin capitalista de la cultura la

    di-usin de subproductos culturales estandarizados, destinados a las clases medias ad!uiridos con las

    +entaas del capital. Din embargo, sus respecti+as posiciones no tardaron en di+ergir, para llegar

    -inalmente, a -ines de la dcada del sesenta, a un resultado idntico, a saber; la inadecuacin de su

    teor/a de la modernidad -rente a las nue+as orientaciones de la creacin art/stica &...'( ))Q.

    &...' Degn reenberg, tomar partido por la +anguardia no signi-ica pretender instaurar una resistencia

    ideolgica a las dictaduras de la poca. ampoco pretend/a denunciar la represin de !ue eran +/ctimas,

    por eemplo, los artistas modernos bao el nazismo. Degn l, la -uerza de la +anguardia era el -ruto de

    su autonom/a, de su apoliticismo, no de su sumisin a una obediencia doctrinaria o partidaria(. ))).

    &...' Hdorno consideraba !ue el arte no pod/a transmitir directamente ninguna clase de mensae

    pol/tico. Din embargo, su de-ensa del arte moderno su toma de posicin a -a+or de obras a +eces

    "ermticas se inscrib/an en el marco de una batalla m$s general contra los intentos de li!uidacin

    cultural e-ectuados por los reg/menes totalitarios, el nazi el estalinista &...'( ))).

    &...' en la dcada del +einte en la del treinta las re+oluciones -ormales lle+adas a cabo por las

    +anguardias irritaban "asta el extremo al orden establecido, burgus tradicionalista, ello se deb/a a

    !ue, ustamente, no eran slo -ormales. Degn Hdorno, la -orma e!ui+al/a al contenidoB meor an, ella

    misma era ese contenido, de signi-icado eminentemente "istrico social. 0o !ue l +e/a en el

    Guernica no era el ##re+oltio%% de negros grises !ue percib/a reenberg, sino los cuerpos

    dislocados despedazados por la barbarie(. ))).

    &...' lo !ue separaba al cr/tico de arte del -ilso-o; a una concepcin Rantiana, -ormal -ormalista,

    basada en una especie de in-alibilidad del uicio subeti+o basado en el gusto, se opon/a una concepcin

    "egeliana, !ue pri+ilegiaba la dea, es decir, el signi-icado, el contenido de un arte siempre en rebelin

    contra la sociedad &...'( )))7))P.

    &...' reenberg celebraba el expresionismo abstracto a los e-ectos de promo+er una -orma de arte

    indito &...' por!ue estaba persuadido de !ue la pintura modernista terminar/a algn d/a por responder a

    las aspiraciones m$s altas de la sociedad norteamericana. 0a idea de una reconciliacin entre el arte la

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    sociedad no ten/a, por el contrario, ningn lugar en la teor/a del -ilso-o(. ))P.

    Hdorno subraa a menudo la necesidad de !ue cada arte se mantu+iera dentro de los l/mites de sus

    propios medios de expresin. Kubo !ue esperar a la dcada del sesenta para !ue concibiera posibles

    inter-erencias o ##des"ilac"amientos%% entre las artes &...' Excepto un discreto "omenae a Jo"n 9age,

    condenaba sin reser+as d e manera global todos los mo+imientos de la poca Garte bruto, antiarte,action painting, happenings, etc.7 !ue cuestionaban el particular concepto de arte la nocin de obra(.

    ))P.

    Du maor preocupacin giraba en torno al estatuto del arte en las sociedades postindustriales. Dab/a

    !ue las trans-ormaciones pro-undas del sistema cultural eran irre+ersibles amenazaban la

    super+i+encia de la creacin art/stica &...' Degn Hdorno, el arte -uturo ten/a, a partir de all/, pocas

    oportunidades de conser+ar expresar lo !ue l llamaba ##el recuerdo del su-rimiento acumulado%% a

    lo largo de la "istoria(. ))P.

    &...' Hl arte minimalista, elpop art, el land art, el arte conceptual el "iperrealismo slo les !uedaba

    por "acer un nue+oacoonte. 0as -ronteras tradicionales entre las artes eran alegremente transgredidas,

    muc"o m$s all$ de los preceptos del ut pictura poesis, los medios tecnolgicos G-otogra-/a, cine,

    +ideo7 aparec/an cada +ez m$s a menudo asociados con los medios de expresin cl$sicos(. ))*.

    En Europa, a no era el momento de la ri+alidad sistem$tica con Estados Anidos. 0as +anguardias se

    internacionalizaban. 2ar/s deaba de deplorar la prdida de su "egemon/a art/stica, el ##robo%% del

    arte moderno era a una rater/a sin gran importancia(. ))*.

    &...' NEn HdornoO 0a cr/tica del capitalismo tard/o lle+aba a una interpretacin pesimista, incluso

    alarmista, en cuanto a la super+i+encia del arte en el uni+erso mercantil de una sociedad cada +ez m$s

    administrada sometida a los imperati+os econmicos. 2ero la carga lanzada contra la industria

    cultural parec/a intempesti+a en momentos en !ue la maor parte de las sociedades occidentales se

    embarcaban en la realizacin de un +asto proecto de democratizacin cultural &...'( ))1.

    &...' 9ontrariamente a las esperanzas, a antiguas, -ormuladas por dos grandes tericos de la

    modernidad, el arte moderno la +anguardia no llegaron a triun-ar ante el kitsch, execrado por

    reenberg, ni ante las ##baratias%% culturales, detestadas por Hdorno. En suma, la modernidad de la

    !ue el -ilso-o "ab/a sido encarnizado de-ensor durante dcadas a no estaba a la orden del d/a(. ))1.

    Du re-lexin sobre el arte parec/a, adem$s, minada por contradicciones insolubles. En e-ecto, si bien

    Hdorno conceb/a el arte como uno de los ltimos re-ugios del indi+iduo, como un polo de resistencia

    de lo ##particular%%, no por ello "ac/a de l un pri+ilegiado lugar de expresin de la subeti+idad !ue

    se "und/a en la irracionalidad, ni tampoco consideraba la creacin art/stica desde el punto de +ista de

    alguna meta-/sica o una m/stica &...'(. ))1

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    &...' El arte pon/a en uego ##otra%% razn, pero no era lo ##otro%% de la razn ni de la racionalidad.

    Meor an; se le ped/a a ese arte Gpor ser de su tiempo, es decir, moderno, ##radicalmente moderno%%,

    segn la expresin de Hrt"ur Limbaud7 !ue tu+iera lazos con la racionalidad cient/-ica, tcnica e

    industrial. en/a !ue adaptarse, dec/a Hdorno, al est$ndar tcnico de su poca, so pena de regresin

    &...'( ))1.&...' 0a re-erencia -undamental de Hdorno era el arte moderno tal como se "ab/a desarrollado desde

    comienzos de la Le+olucin ndustrial "asta la dcada del sesenta. Era un arte sometido a la

    racionalizacin progresi+a de sus materiales, sus procedimientos su -orma, poco a poco liberado de

    las con+enciones los c$nones tradicionales. En 5ccidente, esta racionalizacin "abr/a comenzado

    durante el Lenacimiento "abr/a in+olucrado a todas las artes. 0a Le+olucin ndustrial aceler ese

    proceso de emancipacin -rente a las con+enciones pasadas; mimesis, reproduccin -iel de la

    naturaleza, cdigos ##naturalizados%%, tales como la perspecti+a o la tonalidad musical. En la poca

    moderna, la creacin art/stica tambin ten/a !ue ser moderna , en opinin de Hdorno Gretomando por

    su cuenta un +ocabulario marxista7, las -uerzas producti+as art/sticas iban de la mano de las -uerzas

    producti+as extra7art/sticas(. ))8.

    &...' Hl ser autnomas, la creacin art/stica las obras de arte no obedec/an a las mimas

    determinaciones cient/-icas, tcnicas comerciales de una sociedad por entero orientada "acia la

    racionalizacin, el control la rentabilidad de las acti+idades "umanas. 3e este modo, an era posible

    "ablar de arte, aun!ue su existencia su e+idencia parecieran amenazadas(. ))@.

    &...' la creacin art/stica las obras de arte son "ec"os sociales; la -orma el material art/stico est$n

    impregnados por la "istoria la sociedad. El arte est$ permanentemente expuesto a la integracin en las

    -ormas de expresin cultural !ue predominan en ciertos momentos en determinada sociedad(. ))@.

    &...' 0a teor/a esttica de Hdorno re+elaba su car$cter ##"istrico%% en la medida en !ue resultaba

    e+identemente imposible, en +irtud de sus presupuestos, admitir !ue l modernidad pudiera +ol+er

    contra ella misma las -uerzas !ue impulsaban su propia din$mica(. ))@7))C.

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