La Revolución Cubana y La Planificación Socialista

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Miércoles 1ro de julio de 2015 TRIBUNA ABIERTA La Revolución cubana y la planificación socialista En junio de 1964, en el número 34 de la revista Cua !o"ialista, a#are"i$ el art%"ulo &'a #lani("a"i$n so"ialista, su si)ni("ado*, #or Ernesto +uevara, en el mar"o del )ran deate "uano de 1963 1964- A m.s de /0 a os de su #uli"a"i$n, no est. re"ordar este #e2ue o te to, atento a las dis"usiones sore la #o de a#ertura reestru"tura"i$n de la e"onom%a "uana en "urso- Juan Luis Hernández Lic. en Historia (FFYL-U!" Entre 1963 1964 tuvo lu)ar el &)ran deate* "uano, en un "onte to #ol%ti"o mu radi"ali5ado- El triun o revolu"i$n de 19/9 dio ini"io a uno de los #ro"esos d trans orma"iones revolu"ionarias m.s a"elerados d si)lo 77- 'as dos le es de re orma a)raria de 19/9 1963 e #ro#iaron a los #ro#ietarios de )randes lati undios #rimero, a la ur)ues%a rural, des#u8s- el %nterin, al "alor del en rentamiento "on la dominantes los Estados Unidos, se di"tar.n e se)undo semestre de 1960 las le es de na"ionali5a"i$n de tierras, an"os, em#resas e tranjeras estale"imientos "uanos, sentando las ases de #ro#iedad "ole"tivade los #rin"i#ales medios de #rodu""i$n- 'o 2ue se dis"uti$ en Cua a #art 1963, ue el uturo e"on$mi"o so"ial de la revolu" "u o "ar."ter so"ialista a a%a sido #ro"lamado en aril de 1961, en las v%s#eras del triun o revolu"ion en :la a +ir$n, "uando ue derrotada la invasi$n mer"enaria a#o ada #or los Estados Unidos- En el "onte to interna"ional, 1963 ue el a o en 2u "onsum$ la ru#tura del :artido Comunista de la Uni$n

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Mircoles 1ro de julio de 2015TRIBUNA ABIERTALa Revolucin cubana y la planificacin socialistaEn junio de 1964, en el nmero 34 de la revista Cuba Socialista, apareci el artculo La planificacin socialista, su significado, escrito por Ernesto Guevara, en el marco del gran debate cubano de 1963/1964. A ms de 50 aos de su publicacin, no est dems recordar este pequeo texto, atento a las discusiones sobre la poltica de apertura y reestructuracin de la economa cubana en curso.

Juan Luis HernndezLic. en Historia (FFYL-UBA)

Entre 1963 y 1964 tuvo lugar el gran debate cubano, en un contexto poltico muy radicalizado. El triunfo de la revolucin de 1959 dio inicio a uno de los procesos de transformaciones revolucionarias ms acelerados del siglo XX. Las dos leyes de reforma agraria de 1959 y 1963 expropiaron a los propietarios de grandes latifundios primero, y a la burguesa rural, despus. En el nterin, al calor del enfrentamiento con las clases dominantes y los Estados Unidos, se dictarn en el segundo semestre de 1960 las leyes de nacionalizacin de tierras, bancos, empresas extranjeras y establecimientos cubanos, sentando las bases de la propiedad colectiva de los principales medios de produccin. Lo que se discuti en Cuba a partir de 1963, fue el futuro econmico y social de la revolucin, cuyo carcter socialista ya haba sido proclamado en abril de 1961, en las vsperas del triunfo revolucionario en Playa Girn, cuando fue derrotada la invasin mercenaria apoyada por los Estados Unidos. En el contexto internacional, 1963 fue el ao en que se consum la ruptura del Partido Comunista de la Unin Sovitica (PCUS) con el Partido Comunista Chino (PCCH). En la URSS se debatan las ideas de Evsei Liberman, un economista que propona la descentralizacin de las empresas y su funcionamiento a partir de un criterio de rentabilidad, con autonoma financiera y operativa, y una poltica de incentivos materiales de los trabajadores.En Cuba se haban creado los organismos fundamentales para regir la economa colectivizada, entre ellos el Ministerio de Industrias, dirigido por Ernesto Che Guevara, y el Instituto de Reforma Agraria (INRA), a cargo de Carlos Rafael Rodrguez, un dirigente revolucionario proveniente del Partido Socialista Popular (PSP, nombre adoptado por el antiguo Partido Comunista de Cuba en 1944). En 1963 se aprob la Ley de Financiamiento Presupuestario. Las empresas industriales (incluidas los grandes centrales azucareros) comenzaron a funcionar bajo las pautas de la economa reorganizada a partir de la centralizacin financiera presupuestaria, implementada en forma rigurosa, sistemtica y uniforme desde el Ministerio de Industrias conducido por el Che. Pero en la agricultura subsistan distintas formas de propiedad, estatal, cooperativa y privada. En estas condiciones las autoridades del INRA comenzaron a aplicar otro mtodo de gestin, el Clculo Econmico, en boga en aquellos momentos en la URSS y dems pases socialistas.Es realmente notable que uno de los ms interesantes debates tericos y polticos en los procesos de transicin al socialismo en el siglo XX haya tenido su inicio en diferencias relacionadas con la contabilidad y la administracin de las empresas estatales. Era obvio que la existencia simultnea de dos sistemas distintos en materia de gestin, iba a generar tarde o temprano un debate en torno a la preeminencia de uno u otro, pero lo que nadie intuy fue la dimensin que iba a adquirir: involucr a gran cantidad de dirigentes de la revolucin, siendo los ms relevantes Ernesto Guevara y Carlos Rafael Rodrguez. Participaron tambin Charles Bettelheim, profesor de economa, experto en planificacin, miembro del Partido Comunista francs y Ernest Mandel, uno de los dirigentes ms conocidos de la Cuarta Internacional trotskista. Rodrguez encabez la tendencia contraria al Che Guevara, mientras Bettelheim fue el principal terico que lo enfrentar en la polmica, desarrollada a travs de artculos publicados en las revistasCuba SocialistayNuestra Industria Econmicaen los aos 1963 y 1964.Como hemos dicho, en un primer momento el meollo de la discusin era la gestin de las empresas estatales. Carlos Rafael Rodrguez haba puesto en prctica, en las empresas bajo control del INRA, el Sistema de Clculo Econmico (SCE), en tanto Ernesto Guevara aplicaba en el Ministerio de Industrias el Sistema del Presupuesto Financiero (SPF).El SPF se apoyaba en cuatro cuestiones centrales: 1) Se consideraba Empresa a un conglomerado de fbricas o unidades con una base tecnolgica similar o un destino comn para su produccin, organizadas por rama de la economa o localizacin geogrfica, por ejemplo, todos los centrales azucareros, 2) El dinero era slo una unidad aritmtica, siendo utilizado bsicamente como elemento de registro contable, 3) Las empresas carecan de recursos propios, posean una cuenta en la que depositaban y extraan dinero del presupuesto estatal (de ah el nombre al sistema) y 4) El trabajo estaba normado a tiempo, con premios por sobrecumplimiento.El SCE, por el contrario, funcionaba a partir de los siguientes principios: 1) Se consideraba Empresa a una unidad de produccin con personalidad jurdica propia, por ejemplo, un central azucarero, 2) El dinero era utilizado, adems de las funciones contables, como medio de pago e instrumento de control, 3) Las empresas posean recursos propios: podan sacar crditos en los bancos por los que pagaban intereses y 4) El trabajo estaba normado a tiempo pero tambin se recurra al trabajo por piezas o por hora (a destajo).Las diferencias ms significativas quedaron centradas en la contraposicin estmulo material/estmulo moral. Los partidarios del SCE consideraban que los estmulos materiales eran la respuesta adecuada a la necesidad de ligar la remuneracin obtenida por los trabajadores con la cantidad y la calidad de su trabajo. Los partidarios del SPF no negaban la necesidad de aplicar estmulos materiales, pero rechazaban su uso como palanca impulsora fundamental de la economa. Como deca el Che, luchaban contra su predominio porque entendan que ello implicara el retraso del desarrollo de la moral socialista, generando una subjetividad cargada de egosmo e individualidad.Con la publicacin enCuba Socialistadel artculo de Charles Bettelheim Formas y mtodos de la planificacin socialista y nivel de desarrollo de las fuerzas productivas (abril de 1964), se arriba al punto culminante de la controversia. En la opinin del autor, el proceso econmico estaba determinado por el nivel de desarrollo de las fuerzas productivas, por lo tanto las modificaciones en la conducta de los hombres reconocan como palanca decisiva los cambios en la produccin y su organizacin. Solo con un mayor desarrollo de las fuerzas productivas se poda modificar el comportamiento humano en el sentido pregonado por el Che y sus compaeros. An bajo la dictadura del proletariado, insista Bettelheim, subsista la produccin mercantil simple, lo que implicaba el mantenimiento de las categoras mercanca y moneda, la vigencia de la ley del valor y del mercado, por lo que se deba otorgar libertad de accin a las unidades productivas, justificando la autonoma contable, el clculo econmico, el autofinanciamiento y el sistema de estmulos materiales, que permita vincular las remuneraciones de los trabajadores a la cantidad y calidad de su trabajo. La funcin de la educacin se limitaba a eliminar gradualmente los resabios de actitudes y comportamientos heredados del pasado, pero pretender modificar el comportamiento humano a travs de la educacin pasando por encima del nivel alcanzado por las fuerzas productivas constitua, un enfoque idealista de las cosas, que solo poda conducir a grandes fracasos.La clebre respuesta del Che se materializ en el artculo La planificacin socialista, su significado (Cuba Socialista, junio de 1964). Si en Cuba slo caba esperar grandes fracasos, ya que segn Bettelheim las relaciones de produccin instauradas por los revolucionarios no se correspondan con el desarrollo de las fuerzas productivas existentes, que haba que hacer entonces con la Revolucin -se preguntaba con irona el Che- haba que dar marcha atrs y devolverle el poder a Batista? Guevara critica la concepcin mecanicista de Bettelheim apelando a la concepcin del desarrollo desigual del capitalismo en el mundo, que explicaba el estallido de las crisis y las rupturas en los eslabones dbiles de la cadena. En su opinin, las premisas bsicas para modificar el nivel de las fuerzas productivas en Cuba estaban constituidas por la consolidacin de las empresas estatales y el crecimiento de la conciencia revolucionaria. Destaca que Bettelheim no comprenda el aspecto universal, internacionalista, del desarrollo de la conciencia revolucionaria, criticando asimismo el excesivo nfasis en los aspectos jurdicos al que tenda en sus anlisis. El Che concluye afirmando que la planificacin centralizada es el modo de ser de la sociedad socialista, que le permita a los seres humanos dirigir la economa hacia su plena liberacin.Con el paso del tiempo, el gran debate de 1963/1964 qued sujeto a los vaivenes de la historia y la economa cubana, alternando momentos de olvido con recuperaciones parciales, signadas por las necesidades coyunturales. En 1987, Carlos Rafael Rodrguez reconoci que el sistema defendido por el Che era ms progresista e igualitario que el Clculo Econmico, pero ste ltimo era el que mejor se adecuaba a las condiciones de Cuba (Sobre la contribucin del Che al desarrollo de la economa cubana, 1987). Ernest Mandel realiz un balance de la polmica en 1967. Ratific su apoyo al SPF, destacando que en Cuba era perfectamente viable la planificacin centralizada y el control de la gestin a travs del presupuesto, mientras que el Clculo Econmico multiplicaba los peligros de burocratismo y corrupcin. (El debate econmico en Cuba durante el perodo 1963-1964,PartisansN 37, Pars, 1967).Los autores cubanos como Carlos Tablada Prez (El pensamiento econmico de Ernesto Che Guevara,1987), Orlando Borrego (Che, el camino del fuego, 2002) y Fernando Martnez Heredia (El corrimiento hacia el rojo, 2001) suelen presentar el gran debate como una confrontacin entre dos concepciones, una determinista (Bettelheim) y la otra basada en la praxis (Guevara). En la concepcin estratgica del Che habra primado la construccin de un nuevo tipo de subjetividad histrica, que lo llevara a ponderar superlativamente el desarrollo de la conciencia socialista y su incidencia en las fuerzas productivas. Una subjetividad de este tipo no poda construirse con "las armas melladas del capitalismo" sino con las convicciones ideolgicas de quienes estuvieran dispuestos a trabajar y luchar por una nueva sociedad. Los aportes de estos autores resultan relevantes, pero su mirada sobre la obra del Che est teida, en nuestra opinin, de un enfoque excesivamente subjetivista.Una cuestin habitualmente omitida es la continuidad del debate cubano con las polmicas del 20 en la Rusia sovitica: la discusin entre Nikolai Bujarin y Eugen Preobrazhenski sobre la economa y la transicin, y la viabilidad del socialismo en un solo pas propuesto por Bujarin-Stalin. En la antigua Rusia zarista, un verdadero semi-continente cuyos territorios se extendan desde el Pacfico Asitico hasta casi el centro de Europa, con enormes recursos humanos y naturales, la historia se tom setenta aos para demostrar la inviabilidad del socialismo en un solo pas. Pero en Cuba, una pequea isla ubicada a escasa distancia de la principal metrpolis imperialista, era claro que slo el avance de la revolucin a nivel mundial permitira eludir la opcin de ser aplastada por la reaccin y el imperialismo o quedar dentro de la esfera de la influencia econmica y poltica de la Unin Sovitica. El mrito del Che y sus compaeros es haber interpretado que la energa liberada por una revolucin en ascenso poda impulsar la construccin de los instrumentos que prefiguraban la sociedad igualitaria del futuro, y la elaboracin de un proyecto terico-poltico-administrativo para intentar llevar esta concepcin a la prctica.Para nosotros, una conclusin importante del debate es que planificacin socialista y mercado debern estar presentes, en distinta proporcin, en los procesos transicionales, pero lo central es la participacin organizada de los trabajadores, a travs de sus propios organismos, para decidir en forma democrtica que y cuanto producir, en establecimientos fabriles y unidades productivas bajo control obrero. Hoy, cuando ya nadie recuerda las fantasas reaccionarias del fin de la historia, la emergencia de procesos anticapitalistas en los pases perifricos plantea, una vez ms, la discusin sobre el perodo de transicin y las vas hacia sociedades igualitarias.Todos los artculos que forman parte del debate cubano de principios de los aos sesenta estn recopilados en la obra: AA. VV.,El gran debate sobre la economa en Cuba,Ocean Press, Melbourne, 2003.