Las Primicias (II) Apóstol Sergio G. Enríquez O. Cuarto Servicio Guatemala, 9 de abril del Año De La Revelación

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En el tema anterior vimos cómo las primicias anuncian que el tiempo de la cosecha está cerca, y que son figura de los que seremos arrebatados de la destrucción que vendrá sobre la tierra, sabiendo esto; es tiempo de erguirnos y levantar nuestra cabeza porque nuestra redención se acerca. También expusimos que los que somos primicias debemos cumplir con un perfil; la primicia sabe qué es primero y pone las cosas en el orden que Dios estableció. Apocalipsis 2:5 (BNC) Considera, pues, de donde has caído, y arrepiéntete, y practica las obras primeras; si no, vendré a ti y removeré tu candelero de su lugar si no te arrepientes. Este versículo ha sido la base para el desarrollo de los temas bajo el título de “Volviendo al primer amor” en donde se explica que las obras primeras son las primeras en importancia y no necesariamente en cronología, dentro de lo cual explicamos que primero es:

• La limpieza • Piedad • Saber • Entender • Juzgar las dos partes • Saludo de paz

Cuando hacemos primero lo segundo no podemos ser primicias, vemos el ejemplo de Caín y Abel; Caín presentó una ofrenda vegetal rompiendo el orden establecido, pues en el tabernáculo de Moisés que era una débil representación de lo celestial, nos muestra el orden de las ofrendas; primero era una ofrenda animal, segundo una vegetal y por último una mineral. Por esa razón Dios solo aceptó la ofrenda de Abel, la ofrenda de tipo animal. Entonces para dar una ofrenda se necesita conocer el orden de los factores para no afectar el producto, si somos primicia, debemos conocer qué es lo primero, en este caso lo primero es: RECONCILIACIÓN Mateo 5:24 (LBA) deja tu ofrenda allí delante del altar, y ve, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda. No es lo mismo ofrendar, a presentar una ofrenda, porque para que esta sea acepta delante de Dios, primero debe venir la reconciliación, caso contrario nuestra ofrenda puede ser útil para la obra del Señor pero si no estamos a cuentas con nuestros hermanos, no nos va a servir de nada, por eso Dios nos está llamando a reconciliación porque fuimos llamados al ministerio de la reconciliación. Uno de las cosas más difíciles de reconciliar son los pleitos entre hermanos biológicos, veamos el caso de Jacob y Esaú, Jacob tuvo que encontrarse en entre la espada y la pared para entender que necesitaba reconciliarse con su hermano. Aun a nivel pastoral puede haber enemistades por ovejas, y muchas veces será necesaria la prueba para encontrarnos con el

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ángel del Señor en la soledad para poder humillamos, no buscando a ningún culpable y reconocer nuestras faltas ante alguien más. 2 Corintios 8:12 (RV60) Porque si primero hay la voluntad dispuesta, será acepta según lo que uno tiene, no según lo que no tiene. Este versículo nos enseña que debemos dar según lo que tenemos, no podemos meternos a deudas para ofrendar, la única condición que vemos en este versículo es que primero debemos tener una voluntad dispuesta, para no dar y después quitar. 2 Corintios 8:5 (LBA) …y no como lo habíamos esperado, sino que se dieron a sí mismos a nuestro Señor primeramente, y después a nosotros por la voluntad de Dios; Este versículo nos deja ver que para poder ofrendar, primero debemos ser ofrenda, vivir el ser primicias, cumpliendo todo lo primero. Mateo 6:33 (LBA) Pero buscad primero su reino y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Este versículo nos llama a reflexionar sobre qué es lo que buscamos primero, porque puede ser que busquemos lo que hay que pedir, como el habitar en Su casa (Salmos 27:4), que primero se debe pedir y luego buscar. 1 Reyes 17:13 (RV60) Elías le dijo: No tengas temor; ve, haz como has dicho; pero hazme a mí primero de ello una pequeña torta cocida debajo de la ceniza, y tráemela; y después harás para ti y para tu hijo. Se necesita dar un paso de fe y darle a Dios primero, ya que la necesidad de Elías no era tan grande como la de la viuda, la viuda no era judía, lo que nos deja ver que Dios no le habla solo a los de su pueblo, sin embargo ella creyó, obedeció y Dios la bendijo con abundancia. Lucas 6:42 (LBA) ¿O cómo puedes decir a tu hermano: "Hermano, déjame sacarte la mota que está en tu ojo", cuando tú mismo no ves la viga que está en tu ojo? ¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu ojo y entonces verás con claridad para sacar la mota que está en el ojo de tu hermano. Este versículo nos enseña que primero debemos analizarnos antes de fijarnos en los defectos de los demás. Marcos 3:27 (LBA) Pero nadie puede entrar en la casa de un hombre fuerte y saquear sus bienes si primero no lo ata; entonces podrá saquear su casa. Aun en las batallas espirituales debemos seguir un orden, primero debemos amarrar al hombre fuerte, pero para ello debemos discernir cuando es una tormenta enviada por Dios y cuando es una tormenta del diablo para ordenarle a los vientos que enmudezcan.

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Hechos 5:29 (LBA) Pedro y los demás apóstoles respondieron: Nosotros primero obedecemos a Dios antes que a los humanos. Si el Señor se tarda un poco más en regresar por nosotros, Su iglesia, seguramente nos tendremos que enfrentar a la legalización de la iniquidad, ante lo cual tendremos que decidir entre obedecer primero a Dios o a los hombres. Anhelemos un arrepentimiento genuino, un cambio de mente para poder poner en orden nuestra vida y así convertirnos en primicia para Dios y para el Cordero.