Leer full teleón

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En Full Teleón. Sierpes de León de Greiff, el fantasma mismo del “ensayo como forma” nos hace señas desde el resplandor. Bruno Mazzoldi replica al don imposible de León de Greiff con otro don imposible, convirtiendo el intercambio literario en un potlatch descomunal y portentoso en que el pensamiento crítico se desdobla en la seducción, la aproximación mimética y el sigilo cómplice ante la fuga del objeto literario. Mazzoldi se conjura con aliados de la catadura de Rabelais, Góngora, Joyce, Lezama, Macedonio Fernández, Cortázar y el propio de Greiff para engendrar una criatura sin parientes inmediatos en los anales del género, artilugio que nos pone a pensar y reír con “cara de pecado fresco.” —Juan Duchesne Winter Tomar el Full Teleón a Ciudad Leo Invito a leer el libro de Bruno Mazzoldi, Full Teleón, que a su vez invita a leer al escritor León de Greiff a full, con todo. El libro de Mazzoldi es un portal, un pasaje, una entrada y una salida por los senderos serpentinos del maestro colombiano. Hay quien me ha dicho que leer a León de Greiff, en especial su prosa, es difícil, y que leer este libro de Mazzoldi es redifícil. Yo respondo que ambas lecturas por cierto son difíciles, pero es la dificultad de lo extremadamente ligero, ágil y grácil, es la dificultad de

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Presentación del libro de Bruno Mazzoldi, Full Teleón. Sierpes de León de Greiff (Pittsburgh: Instituto Internacional de Literatura Iberoamericana, 2014).

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  • En Full Telen. Sierpes de Len de Greiff, el fantasma mismo del ensayo como forma nos hace seas desde el resplandor. Bruno Mazzoldi replica al don imposible de Len de Greiff con otro don imposible, convirtiendo el intercambio literario en un potlatch descomunal y portentoso en que el pensamiento crtico se desdobla en la seduccin, la aproximacin mimtica y el sigilo cmplice ante la fuga del objeto literario. Mazzoldi se conjura con aliados de la catadura de Rabelais, Gngora, Joyce, Lezama, Macedonio Fernndez, Cortzar y el propio de Greiff para engendrar una criatura sin parientes inmediatos en los anales del gnero, artilugio que nos pone a pensar y rer con cara de pecado fresco. Juan Duchesne Winter Tomar el Full Telen a Ciudad Leo Invito a leer el libro de Bruno Mazzoldi, Full Telen, que a su vez invita a leer al escritor Len de Greiff a full, con todo. El libro de Mazzoldi es un portal, un pasaje, una entrada y una salida por los senderos serpentinos del maestro colombiano. Hay quien me ha dicho que leer a Len de Greiff, en especial su prosa, es difcil, y que leer este libro de Mazzoldi es redifcil. Yo respondo que ambas lecturas por cierto son difciles, pero es la dificultad de lo extremadamente ligero, gil y grcil, es la dificultad de

  • emprender vuelo y sostenerse en el aire; no es la pesadez de la congestin ni el entumecimiento en que muchas veces cae cierto discurso terico-acadmico. S es, adems, la dificultad que se puede tener para relajarse, dejarse ir, dejar de leer como neurtico compulsivo, dejar de buscar cul es el tema, el argumento, cul es la demostracin, cul es el anlisis, qu se quiere comprobar, cul es la conclusin. No hombre! Esas cosas pasan a un segundo plano, si no es que desaparecen del todo, cuando se emprende vuelo a full con la escritura telenica. Se piensa en Len de Greiff sobre todo como poeta, pero l fue tambin un gran prosista, cultivador de lo que defini como prosa pura en un pasaje citado por Mazzoldi: una especie de prosa (como se dice de la msica, pura, y de la poesa, pura, sin programa ni argumento ni propsito s con despropsitos Prosa no excipiente de nada sino vehculo de s misma, funcin de s propia: Es decir, prosa que se escribe en esa prosa, o que no se escribe, que no se escribira en otra. Es el idioma nico de lo que ella va o no va a expresar, no de lo que con ella, como instrumento, se pretendiese decir. Hay que tomarla o dejarla. Aconsejara dejarla. Que no se gaste ni se use. Es una definicin que aproxima el arte de la prosa a la msica, nada sorprendente dada la evidente melomana literaria del autor. En De Greiff se explaya todo un intento de reflotar la frase con la estructura musical para suspenderla sobre flujos, no slo de sonido, sino de sentido y sonido que saltan sobre las unidades gramaticales y la semntica del diccionario para afectar el cuerpo y la mente, flujos que no es que no signifiquen nada, sino que lo significan todo sin atarse a signos determinados, flotando sobre el afecto. As Len de Greiff le pone el cuerpo a la escritura. Este afecto intelectual y corporal es el gran regalo que nos entrega Len de Greiff. Y qu hace el crtico Mazzoldi? Bruno Mazzoldi no es que slo lo reciba, lo analice, lo disecte, lo convierta en conocimiento serio y determinado sobre un tema. No, Mazzoldi le responde a de Greiff con otro regalo de afecto, a full, con todo lo que da su cuerpo y su mente. Asistimos a una especie de sobrepuja o duelo de regalos entre Leo y Bruno, un gran potlatch literario, ms que a un intercambio entre crtico y autor. Mazzoldi tambin despliega un arte de la prosa, que aparenta mimetizar, pero tambin desva e inventa la prosa del poeta. Muchos confunden el tratado, el artculo, el estudio exegtico, la tesis doctoral, y hasta el informe burocrtico con el ensayo como gnero literario. El ensayo es, por supuesto, otra cosa. El ensayo es el arte de la prosa en ella suspendido como las alas del picaflor, que no las del milano. El picaflor ms bien camina, salta, se detiene y

  • vuelve a caminar por el aire como si se condujera por las sierpes de un sendero. El vuelo del colibr es de cercana, rasante, es tctil, para tocar, oler, saborear, casi acariciar. Su mirada no es panptica, no ve slo desde arriba como el milano tijereta o como el piloto de avin. Si existiera una ciudad llamada Leo, el Telen anti-expreso sera una berlina calesa voladora, telesfrico de escasa o muy variable elevacin, sin cables, que se entretiene llevando al lector por callejuelas sin fin, yendo por recovecos y chuzos igual que palacios y parques sin distinguir centro ni periferia. Nada que ver con las avenidas ni las rutas que conducen directamente al centro de gobierno o al centro comercial, que es lo que casi siempre pretende el tratado, artculo, paper o tesis acadmica. No se puede montar uno en el Full Telen pretendiendo que se ha tomado el servicio expreso al centro de Ciudad Leo. Ciudad Leo no tiene centros, tampoco rutas: slo callecitas y callejones a nivel, elevadizos o soterrados como los de las sierpes. Por ah y alguito ms te llevar Full Telen si te relajas un poco. Reljese. Pues no slo de volar se trata, sino de flotar, frotar y refrotar como si se reflotara. Hace poco iba yo, no en un Full Telen, sino en un Ford 1961 decrpito, por la carretera de Sinamaica entre Maracaibo y Maicao cuando vi una gran valla instalada en medio de la nada que deca Dios es mi lubricante. Entonces entend por fin una prosa de Len De Greiff que recomienda el aceite 3 en 1 para la lectura, y luego las divertidas pginas que Mazzoldi dedica a esta sagrada pero no santa trinidad lubricante. De eso se trata. Seamos obvios. La lubricacin ayuda a refrotar. El ttulo del prlogo anuncia un refrote de autores varios. Entre los autores ms citados en el libro, adems del propio De Greiff, se encuentran Jacques Derrida, Julio Cortzar y Thomas Pynchon, tambin Jos Mara Arguedas y Rabelais. Otros, entre varias decenas, son Jos Lezama Lima, Isidore Ducasse, el Conde de Lautreamont, Lewis Carroll, Mario de Andrade y Francois Villon. Mazzoldi, como de Greiff, no cita generalmente para autorizar proposiciones o proveer evidencias de sus descripciones del texto del caso. Es decir, la cita no es hipotctica, no se coloca debajo de la proposicin para constatar su verdad. La cita es ms bien paratctica, suele acompaar otras citas o el discurrir de la voz ensaystica como pretexto para desviar el tema antes que para suplementarlo. Por eso a una cita de Len de Greiff puede seguir una de Pynchon o de Arguedas como si tal cosa. Esto tiene mucho que ver con la proliferacin incesante de la digresin. Hay segmentos enteros en el texto de Mazzoldi en los cuales ninguna oracin termina con el tema o sujeto con que pareca comenzar. Muy pocas frases, en especial en los primeros captulos, conforman proposiciones formales en el sentido de afirmar o negar algo que pueda ser cierto o falso, en representacin del sujeto de la enunciacin, como suele ocurrir en la prosa crtica convencional. A medida que la frase se empata con otras frases armando perodos gramaticales extensos, se va diluyendo la secuencia que pareca prometerse al inicio del perodo. De pronto se est hablando de cosas muy distintas y no se sabe si s o si no es el caso lo que se barrunt entender en un principio. Se le puede llamar a esto incoherencia? No, pues no necesariamente

  • rige aqu la incoherencia monda y lironda como tampoco lo hace en la prosa de Len de Greiff ni, por supuesto, en sus versos. Mazzoldi precisamente emula, muy a su modo, aquello que ms aprecia tanto en la prosa como en los versos de Leo: Salto de un poema a otro, desarzonando fechas. Mtodo, xodo ms bien, economa generalizada del espasmo de la continuidad, del brinco y de la brincadeira, peligrosa elipsis de sentido y shock hilarante, dualidad, sobrentendido y exceso de sentido, blink y blank, parpadeo y laguna irrumpente, broma o taraza que, como observa cidamente el insomne almirante, ataca la madera de los barcos del mismo modo que la broma del poder, de la riqueza, ataca el alma humana con una voracidad y velocidad increbles (Roa Bastos 251). Este breve segmento nos muestra cmo el crtico, al describir el mtodo/xodo, es decir, el irreprimible salir y entrar en tema de Len de Greiff, incurre l mismo, en su descripcin, en uno de esos innmeros brincos cuando trae la cita del novelista Roa Bastos tomando como punto de partida la palabra broma que haba asociado a la hilaridad, para asociarla ahora a otra acepcin de la palabra, la broma, el molusco, su depsito y adherencia corrosiva, sobre el casco de las naves del almirante Cristbal Coln. La cita desestabiliza ms bien la continuidad argumental con cortes abruptos en la secuencia significante, yndose por otro camino, desdoblando lo que el perodo gramatical establece al principio. Sin embargo, este corte apunta a una coherencia otra, la coherencia de la diferencia que yuxtapone humor corrosivo a la corrupcin misma del poder: una paradjica coherencia que no excluye la incoherencia de lo real. Este gesto se riega saltando como una tribu de pulgas por todo el texto. La incoherencia es una acusacin en la que incurren lo que Mazzoldi llama las lecturas ansiosas por disipar la neblina del desarrollo temporal culpable de sinsentido inmediato, lecturas que responden a una mana de persecucin semntica. Lo que rige en el mtodo digresivo de Mazzoldi y del autor antioqueo a quien dedica sus divagaciones es otra coherencia, la del flujo afectivo del sentido que gracias al sinsentido salta por encima de los segmentos usuales del lenguaje formal (frase, oracin gramatical, desarrollo argumental); los aparentes cambios de tema en verdad arman redes, pero no redes organizaditas, ntidas internetcianas, sino emplegostes, embadurnes, de asociaciones y disociaciones, flujos e interrupciones que van depositando una como broma en palimpsesto, unas como napas de sentido, cual hace la msica, que el lector absorbe de una u otra manera segn sus inclinaciones de lectura en un momento dado. Estas napas de sentido, con toda su heterogeneidad y fragmentacin y precisamente gracias a ellas revelan muchas cosas sobre los textos refrotados, es decir, citados. Nos damos cuenta, por ejemplo, de muchas cosas sobre Cortzar cuando Mazzoldi lo refrota con De Greiff, cmo, en trminos generales, el ideal de la educacin de los sentidos, de cuo pequeoburgus no juega un papel

  • secundario en el torturado hedonismo de Cortzar. Lo torturado del hedonismo sesentoso de Cortzar se pone en relieve cuando se le aplica el refrote telentico, que expone ante la vista la solidaria beatera teletcnica del adorable autor de Rayuela. Este tipo de relieve significante, proposicional, no deja de plisar aqu y all, a modo de puntadas de costura furtivas la prosa de Mazzoldi, pese a sus corrosivas brincadeiras bromistas y embromadas. En el capitulillo Cochinchineras democrticas, la voz ensaystica declara, sin ambages: Es as como libertado su bulto o cuerpo (ni tan tarifo ni tan

    obeso) de lo superfluo ora superficial o ya recndito (ib. nfasis del autor), el secretario de s y de la Firma no vacila en dilucidar los principios de una potica indiscernible de las polticas del saboteo del consenso y evitacin del socius. Y en esta misma declaracin Mazzoldi no vacila en dilucidar sus principios lenticos indiscernibles de una poltica impoltica. Estas puntadas son las que mantienen el texto dentro del performance ensaystico, segn el cual el autor asume la responsabilidad personal de sus palabras. Tampoco vacila Mazzoldi en endilgarles a los crticos acadmicos aplastantes refutaciones de las piedades interpretativas con que intentan custodiar los trminos de un Pacto Literario cuidadoso del bienestar comn, como hace, por ejemplo, en el capitulillo titulado Trazas del acto acadmico en que se disertara del aura de mariscos de Afrodita. All, como atacado de una risa y un regusto corrosivo el ensayista refuta el lugar comn segn el cual Len de Greiff sera un autor cerebral e idealista, descorporizacin demostrada en su supuesto retrato de una figura femenina alelada en la abstraccin romntica. Mazzoldi contradice esta clara equivocacin de la crtica entregndose hasta la saturacin a un extenso y divertido vaginiloquio en torno a las mltiples escenificaciones porno-erticas del sexo tetraptalo en la poesa del poeta antioqueo que declar, ufano: Mis perfumes? las sales y los yodos, / el aura de mariscos de Afrodita, el sexual tufo ecureo! El idealismo, sea dicho, nada tiene que ver con esta escritura que pone el cuerpo a la manera de los autores refrotados con mayor fruicin en Full Telen, empezando por Len de Greiff el objeto principal de las divagaciones, y siguiendo con Rabelais, Derrida, Emilio Gadda, Arguedas, Joyce, Lezama Lima y otros compaeros del vagabundaje literario-filosfico. Estos son todos unos materialistas empedernidos cual el propio Mazzoldi. Para decir esto recurro al materialismo entendido como matriz del mtodo-xodo digresivo, vagabundo, paradjico, interrumpido, corrosivo expresado por esta gavilla de autores. El materialismo de estos seores no es el que corresponde a la provincia de la fsica convencional. A la fsica lo que es de la fsica, diramos, pero el reino de este materialismo no es el de la reduccin de todo a una sustancia fundamental uniforme regida por una supuesta constitucin natural y sus leyes. La materia de estos materialistas vagabundos no es la de la reduccin al mnimo

  • denominador comn sino la de las relaciones, las relaciones infinitas que no agotan el ser de ningn objeto sino que lo multiplican, relaciones en las cuales todo lo fsico tiene una relacin espiritual y viceversa y nada se abroga una cuota de mayor realidad o importancia sobre nada, todo comparece en la misma red estriada con olor a marisco. Es la red materialista que permite hacer de lo insignificante la clave de la significacin y deconstruir la significacin y entrelazar lo catico con lo csmico. Por eso todos estos autores comienzan sus trabajos in media res, en medio de la cosa, sin someterse a fundamentos ni principios metafsicos. Es a esa lectura divagante que invita Full Telen. As que reljese, tome el Full Telen a Ciudad Leo o desde Ciudad Leo a algunos lugares ms. Juan Duchesne Winter (20/11/2014 Biblioteca Luis ngel Arango en Bogot Presentacin del libro de Bruno Mazzoldi, Full Telen. Sierpes de Len de Greiff, Pittsburgh: Instituto Internacional de Literatura Iberoamericana, 2014)