LIDERAZGO CARISMÁTICO ÁLVARO URIBE V U CONCEPTOS …
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LIDERAZGO CARISMÁTICO: ÁLVARO URIBE VÉLEZ. UNA TRIANGULACIÓN DE CONCEPTOS DESDE EL ANÁLISIS FRAMING DEL DISCURSO DEL POLITICO
ANTIOQUEÑO
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y RELACIONES INTERNACIONALES
CARRERA DE CIENCIA POLÍTICA FACULTAD DE COMUNICACIÓN Y LENGUAJE
CARRERA DE COMUNICACIÓN SOCIAL BOGOTÁ D.C.
2018
LIDERAZGO CARISMÁTICO: ÁLVARO URIBE VÉLEZ. UNA TRIANGULACIÓN DE CONCEPTOS DESDE EL ANÁLISIS FRAMING DEL DISCURSO DEL POLITICO
ANTIOQUEÑO
ISABELLA PEÑA IDROBO PRESENTADO PARA OPTAR A LOS TÍTULOS DE POLITÓLOGA Y COMUNICADORA
SOCIAL
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y RELACIONES INTERNACIONALES
CARRERA DE CIENCIA POLÍTICA FACULTAD DE COMUNICACIÓN Y LENGUAJE
CARRERA DE COMUNICACIÓN SOCIAL BOGOTÁ D.C.
2018
LIDERAZGO CARISMÁTICO: ÁLVARO URIBE VÉLEZ. UNA TRIANGULACIÓN DE CONCEPTOS DESDE EL ANÁLISIS FRAMING DEL DISCURSO DEL POLITICO
ANTIOQUEÑO
ISABELLA PEÑA IDROBO
DIRECTOR DEL TRABAJO DE GRADO
ANDRÉS DÁVILA LADRÓN DE GUEVARA Politólogo, Maestro y Doctor Ciencias Sociales
PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y RELACIONES INTERNACIONALES
CARRERA DE CIENCIA POLÍTICA FACULTAD DE COMUNICACIÓN Y LENGUAJE
CARRERA DE COMUNICACIÓN SOCIAL BOGOTÁ D.C.
2018
A mi mamá gracias por enseñarme que el amor es más grande que el miedo. A mi papá por enseñarme a responder en vez de reaccionar, y a los dos por su
apoyo incodicional a distancia. Son mi hogar, mi ejemplo y mi mayor motivación. Gracias por ser el pilar fundamental de este logro.
Sebastián vos sos la definición del hilo rojo en mi vida, gracias por ser mi pedacito de mindfulness.
A Renata y Valentina por ser el elemento incondicional de este proyecto de vida y enseñarme tanto.
A mis abuelitos porque por los tres ahora entiendo el por qué de la vida, por hacerme un efecto de condiciones extremas.
A Dios, Aurora y a Ottla por siempre aparecerse cuando más sentía caer y por permitirme ser.
A mis profesores a lo largo de los dos procesos, gracias por enseñarme a entender la sátira.
TABLA DE CONTENIDO
I. INTRODUCCIÓN: “Lo predecible, aunque difícil, crea confianza” ....................... 1
II. PLANTEAMIENTO Y CONTEXTUALIZACIÓN DEL PROBLEMA: “Miro a mis compatriotas hoy más con ojos de padre de familia que de político” ..................................... 7
ÁLVARO URIBE VÉLEZ: EL PERSONAJE POLÍTICO ...................................................... 9
¿CRISIS DEL SISTEMA DE REPRESENTACIÓN? ......................................................... 11
ÁLVARO URIBE VÉLEZ: EL ASCENSO ..................................................................... 14
III. ACERCAMIENTO TEÓRICO AL FENÓMENO DE LIDERAZGO CARISMÁTICO: “(…) Compartiré con ustedes el día a día de la difícil brega para recuperar la seguridad y el orden, que es el valor fundante de las libertades" .................. 18
LA RETÓRICA DEL CAMBIO SOCIAL Y LA VISIÓN ........................................................ 19
IV. ESTRATEGIA METODOLÓGICA: LIDERAZGO CARISMÁTICO Y FRAMING: “Me haré moler para cumplirle a Colombia. En mis manos no se defraudará la democracia.” ........................................................................................................ 26
V. ANÁLISIS DE DISCURSO: PRESENTACIÓN DE RESULTADOS Y DISCUSIÓN: “No quiero morir con la vergüenza de no dar hasta la última lucha para que mi generación pueda tranquilamente esperar el juicio de la historia” ................ 36
VI. CONCLUSIONES: “Y todas las deficiencias les suplico ponerlas en el pasivo de esta carnita y estos huesitos que lo único que tienen es infinito amor por Colombia” ............................................................................................................. 48
VII. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS .......................................................................... 56
VIII. ANEXOS ........................................................................................................... 64
ANEXO 1: CONFIANZA EN EL CONGRESO Y EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS EN COLOMBIA
DE 1996 A 2017 ................................................................................................... 64
ANEXO 2: CONFIANZA EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS EN COLOMBIA ......................... 66
ANEXO 3: ANÁLISIS DE DISCURSOS ........................................................................ 66
DISCURSO DE POSESIÓN GOBERNACIÓN 1995 ........................................................ 66
DISCURSO DE POSESIÓN PRESIDENCIA 2002 .......................................................... 72
DISCURSO DE POSESIÓN PRESIDENCIA 2006 .......................................................... 87
PLEBISCITO (CAMPAÑA POR EL NO) 2016 ............................................................ 105
1
I. “Lo predecible, aunque difícil, crea confianza” Álvaro Uribe Vélez (Discurso posesión presidencial 2006)
Introducción
2
En la actualidad las sociedades contemporáneas parecen estar regidas por
una serie de fenómenos particulares que afectan la relación entre ciudadanos y
gobernantes. Desde finales de los años ochenta, los estudios empíricos dan
cuenta de un creciente malestar ciudadano ante la política. Dicha apatía ha sido
denominada “desafección política”. Este fenómeno hace referencia al
(…) sentimiento subjetivo de impotencia, cinismo y falta de confianza en el
proceso político, los políticos y las instituciones democráticas que genera un
distanciamiento y alienación respecto a éstos, y una falta de interés en la política y
los asuntos públicos, pero sin cuestionar el régimen democrático (…) (Torcal &
Montero, 2006, p. 604)
Así pues, se ha generado un escepticismo creciente hacia los mecanismos
de representación vigentes en las democracias occidentales. Esta crisis se ha
manifestado a través de la ciudadanía, cuyo descontento se ha materializado en
una progresiva valoración negativa de los partidos, la política y la institucionalidad.
Sin embargo, aunque en los sistemas democráticos subsiste un apoyo mayoritario
a los valores inherentes a la democracia; la desconfianza en las instituciones que
los traducen ha aumentado abismalmente (Pharr, Putnam, & Dalton, 2000, p. 13).
Por ejemplo, en las encuestas de opinión, por lo general los partidos
políticos lideran el grupo de instituciones en las que los ciudadanos confían menos
(Corporación Latinobarómetro, 2017). De este modo, pese a que la existencia de
los partidos obedece a identidades políticas distintas, existe un sentimiento
unísono de apatía y desdén frente a ellos. Su baja tasa de popularidad solo puede
ser contrastada con la de instituciones afines a los mismos, como lo es en el
escenario colombiano el Congreso de la República. Dicho desprestigio obedece
en la mayoría de los casos a problemáticas como la corrupción, además de la
incapacidad de las reformas políticas para reconfigurar y fortalecer el sistema de
partidos. De esta forma, la representación partidista está signada por la debilidad
estructural e institucional. De allí, que resulte cada vez más complejo satisfacer las
demandas del sistema electoral en sí.
3
En este orden de ideas, “(…) la generalizada insatisfacción con la
representación democrática es un elemento central de la crisis de la democracia
en los países andinos y en gran parte de América Latina (…)” (Mainwaring,
Bejarano, & Pizarro León-Gómez, 2008, p. 52). Dicho de otro modo, las
democracias en el continente y en particular los partidos políticos y las Asambleas
Nacionales, han sufrido una progresiva caída en la confianza otorgada por los
ciudadanos. El escenario colombiano no ha sido una excepción. De acuerdo a los
más recientes datos del Latinobarómetro, en los últimos 20 años la confianza en
los partidos políticos y el Congreso es tan solo del 36% en promedio para ambos,
y ninguna (45% y 35% respectivamente) (Ver anexo 1).
En este sentido, vale destacar que el síndrome de la desafección política se
acompaña a su vez de otro fenómeno. Este es el de la influencia personal de
aquellos líderes, cuyas posiciones configuran el proceder tanto de los partidos
como de las instituciones. De este modo, tal y como se ha señalado en este texto,
el malestar generalizado de la desconfianza se debe en su mayoría a la debilidad
estructural frente a la organización, funcionamiento y régimen sancionatorio de los
partidos políticos y los procesos electorales1. No obstante, los liderazgos que
acompañan todos estos procesos son preponderantes. Tales fenómenos están
estrechamente relacionados. Sin la existencia de uno, no sería posible el otro.
De este modo, a raíz del sentimiento de desconfianza y desinterés
institucional surgen liderazgos cuyas características no solo reconfiguran
escenarios institucionales, sino que a su vez pueden acrecentar o disminuir dicho
sentimiento. La gesta de estos liderazgos puede ocasionar que la insatisfacción
democrática sea mayor, pero en diversas ocasiones, puede aprovecharse de tal
insatisfacción para promover nuevas dinámicas políticas. Ejemplo de ello, son
aquellos líderes que pertenecen a estructuras políticas cuestionadas, pero que sin 1 Las prácticas de gestión y las técnicas motivacionales que son legítimas y aceptables en una cultura (o período de tiempo) pueden no estar en otra. "Los carismáticos aparecen en sociedades con tradiciones de apoyo para ellos y expectativas sobre su surgimiento" (Bass & Stogdill, 1990, pág. 196). Esto parece implicar que el liderazgo carismático podría emerger fácilmente y ser efectivo en algunas sociedades pero no en otras.
4
embargo son referentes ineludibles en el panorama político. Sus abultadas
votaciones sostienen a un sistema carente de identidad y confianza.
En este orden de ideas, comprender los fenómenos de la desafección
política y el liderazgo carismático en América Latina, requiere ineludiblemente de
herramientas que permitan realizar un análisis profundo sobre dichas coyunturas.
Es así como la comunicación política se muestra como una alternativa para la
comprensión de los fenómenos que afectan la relación entre ciudadanos y
gobernantes. Esta disciplina resulta esencial en el entendimiento de los líderes
como actores clave en la proyección de visiones políticas y en la oferta de
soluciones (Den Hartog, et al., 1999, pp. 233 - 236). La comunicación política ha
permitido estudiar a profundidad y de una manera sistemática el papel de los
líderes, su estilo de liderazgo político y en particular la forma de comunicación del
líder con sus seguidores y ciudadanos. Todo ello, a partir de desarrollos literarios
sobre estilos de liderazgo, que han estado acompañados por estudios de la teoría
de la organización y el análisis de habilidades y rasgos que permiten a un
individuo ejercer liderazgo político (Kellerman, 1986, pp. 157 - 161).
Es así, que este proyecto tiene como objetivo establecer un diálogo entre
los diferentes enfoques y metodologías que ofrece la comunicación política, con el
fin de dar respuesta a cuestionamientos como ¿qué habilidades y rasgos
personales pueden ser considerados como componentes clave del estilo de
liderazgo? y ¿cuál es la influencia de los estilos de liderazgo en la relación con
seguidores, colaboradores y ciudadanos? Asimismo, se pretende responder
¿cómo los líderes utilizan la retórica para interpretar su papel? De igual manera,
se plantea ahondar en ¿cómo los líderes son guiados por un conjunto de
creencias y orientaciones ideológicas y cómo esos valores condicionan los estilos
de liderazgo? Esto, abordando también preguntas sobre ¿cómo los factores
institucionales contribuyen a influir en la comunicación de los líderes? Para ello, se
realizará un análisis de discurso del político y abogado colombiano Álvaro Uribe
5
Vélez, quien reúne las condiciones de un líder contemporáneo en el marco de un
contexto sumido por la aversión política.
En este sentido, el estilo político de gobierno y la figura de Álvaro Uribe
Vélez han supuesto una escisión significativa en comparación a sus predecesores
en la Presidencia del país. Su ejercicio y participación en diferentes etapas de la
política colombiana, han dado cuenta de una forma de liderazgo particular. Esto,
teniendo en cuenta que los estilos de liderazgo se ven condicionados por las
circunstancias y los rasgos situacionales en los que se ven inmersos (Sosik &
Dinger, 2007, pp. 135 - 138). Por consiguiente, la imagen de Uribe Vélez se
introdujo de manera particular en la identidad política de un país subscrito por la
guerra, y al que Uribe se presentó coyunturalmente abanderando la causa de la
seguridad. Ello, sumado a las características propias de su estilo de gobierno, lo
han convertido en un fenómeno político cuyo discurso es uno de los referentes de
la escena nacional.
Por todo lo anterior, la puesta en escena de Álvaro Uribe Vélez se presenta
como el caso de estudio ideal. De esta forma, a través de las herramientas de la
comunicación política, se pretende exponer cómo este Antioqueño se ha
mantenido como un personaje capaz de crear y reproducir opinión en el sistema
político colombiano en el trascurso del tiempo. De este modo, el objetivo de la
presente investigación consiste en realizar una triangulación de conceptos
discursivos, a partir del análisis de discurso de los últimos 30 años de Álvaro Uribe
Vélez como fenómeno de liderazgo carismático. La intención de este proyecto es
desarrollar un estudio en tres etapas discursivas, para así encontrar una
continuidad o discontinuidad en los conceptos utilizados. Así, se busca mantener
una serie de diagnósticos vinculados al contexto del discurso retórico, con el
objeto de dar cuenta de la reproducción del liderazgo carismático a lo largo del
tiempo seleccionado.
Para el correcto desarrollo de este objetivo se iniciará por realizar el
planteamiento y contextualización del problema a partir de dos ejes. La
6
institucionalidad en Colombia y cómo ésta da lugar al fenómeno del liderazgo
carismático. Con ello, se explicará la perpetuación del poder político de la imagen
de Álvaro Uribe. En segundo lugar, se expondrá la estrategia metodológica
conformada por dos fases. Con la primera de ellas se busca descubrir el uso de
los conceptos centrales mencionados a partir de la exploración y estudio de los
discursos del político colombiano. Con la segunda, considerando que los
conceptos se construyen a partir de un escenario de crisis preciso, se organizarán
desde las categorías de conceptos, análisis, contexto y diagnóstico desde la
perspectiva del análisis de marcos (frame analysis) y la construcción de confianza
(trust building).
Por último, se presentarán los resultados donde se señalan los principales
hallazgos de cada metodología por separado y en conjunto. Finalmente, se
plantearán algunos postulados en torno a la práctica política de Uribe Vélez. No
sin antes señalar, que la importancia del presente trabajo también radica en la
presentación de una reflexión sobre los cambios tanto en el sistema político como
en la sociedad a partir del liderazgo carismático y la estructura discursiva. Todo
esto, a raíz de la exposición de los más sobresalientes elementos discursivos, que
son de gran influencia en el entorno político social y las posibles consecuencias
que pueden llegar a existir sí tal fenómeno persiste en Colombia.
7
II. “Miro a mis compatriotas hoy más con ojos de padre de familia que de político”
Álvaro Uribe Vélez (Manifiesto democrático)
Planteamiento y contextualización del problema
8
En el marco de las teorías organizacionales, la conceptualización de
liderazgo en las democracias actuales se deriva de las investigaciones de las
audiencias y la comunicación política. Por ejemplo, la gobernanza en los sistemas
políticos latinoamericanos está determinada precisamente por las características
de los líderes y las audiencias a las que se exponen (Manin, 1998, pp. 246 - 248).
De este modo, los líderes individuales son percibidos como los actores en el
centro de los mecanismos de responsabilidad política. Su estilo y forma de
comunicación se han convertido en un proceso de mediatización de la política
(Mazzoleni & Schulz, 1999, p. 256). Sumado a ello, los líderes políticos han
reemplazado a los partidos como agentes primarios de la construcción de
consensos. Por consiguiente, su forma de comunicarse con los ciudadanos se ha
transformado en un elemento preponderante del estilo de liderazgo2.
Entonces, comprender el fenómeno del liderazgo carismático y su impacto
en escenarios latinoamericanos como el colombiano, a finales del siglo XX y
comienzos del XXI, requiere del análisis de los más sobresalientes elementos
discursivos y su contraste con el contexto político actual. En este sentido, se
necesita observar cómo la comunicación política, la retórica y el liderazgo
carismático, surgen a raíz de la baja confianza en las instituciones políticas (Ver
anexo 2). Así pues, el objeto de este trabajo es el de argumentar cómo el
desinterés y la decepción por el ejercicio político y la institucionalidad pública,
constituyen una variable esencial para la reaparición del liderazgo carismático y
todas sus características. Para ello, resulta necesario contextualizar los estilos de
liderazgo como base interpretativa y la relación del contenido retórico del discurso
y el carisma del individuo. Esto, para aplicarlo en el caso del sistema político
colombiano y a uno de sus más contemporáneos referentes: Álvaro Uribe Vélez.
2 El académico estadounidense Bernard Bass ha destacado que la transformación de los seguidores puede lograrse al aumentar la conciencia de la importancia y el valor de los resultados deseados. De esta forma, se logra que los seguidores trasciendan sus propios intereses y modifiquen o amplíen sus necesidades (Bass, 1985, págs. 96 - 97). Sin embargo, no todo el liderazgo carismático / transformacional es positivo. El "lado oscuro del carisma" también está bien documentado, siendo evidenciado por carismáticos totalitarios, explotadores y autoengrandecientes como Hitler, Charles Manson y David Koresh.
9
ÁLVARO URIBE VÉLEZ: EL PERSONAJE POLÍTICO
Álvaro Uribe Vélez ha sido definido en varias ocasiones como un líder
carismático y autoritario. Evidentemente, el expresidente Uribe es un líder
innegable. Ningún dirigente reciente en el país había logrado mantener y contar
con un nivel de popularidad tan alto durante toda su administración (Gonzalez,
2006). Según la firma Napoleón Franco, el 57% de los colombianos hubiese
votado por él para una segunda reelección. Al final de su periodo, en junio del
2010, contaba con el 68% de popularidad a pesar de llevar 8 años en la
Presidencia pese a las crisis y éxitos que ello acarrea (América economía, 2010).
Uribe Vélez se introdujo de manera particular en la identidad política de un
país subscrito por la guerra, presentándose coyunturalmente abanderando la
causa de la seguridad. El manejo de un discurso político sencillo, directo,
corriente, popular y moralista lo han caracterizado desde sus inicios en la escena
pública desde la década de los 80. Su lenguaje y estilo de comunicación se han
impreso en el imaginario colombiano.
Por ejemplo, este político antioqueño suele recurrir al uso constante de
metáforas. Una de las más famosas los “tres huevitos de su gobierno”: la
seguridad, la confianza inversionista y la cohesión social, que luego denominó
como inversión social. Su discurso es también manifiestamente maniqueo y
moralista. Uribe divide a los colombianos en dos bandos, "(…) los patriotas que
apoyan la seguridad democrática y los comunistas disfrazados que quieren
entregar la patria a las FARC" (Fierro, 2014, p. 130). Esta visión dicotómica es una
característica propia de los líderes autoritarios quienes no permiten la disidencia,
ni la crítica, solo la unanimidad es permitida. Este tipo de liderazgos recurre al
nacionalismo y la utilización de la patria para descalificar a sus adversarios.
Su relación con el pueblo colombiano siempre ha estado determinada por
un estrecho lazo de comunicación directa con el ciudadano. Uribe ha promovido
un estilo de comunicación que se deslinda de lo institucional. Durante los dos
10
primeros años de su presidencia Uribe había transmitido 2.240 horas en televisión
(de la Torre, 2005, p. 101). Un promedio de casi tres horas diarias, sumadas a los
viajes quincenales a las regiones para la realización de Consejos Comunitarios
(Silva Estanislao, 2015, p. 72). Uribe deseaba ser visto como un ‘padre’ para los
colombianos. En el punto 100 de su Manifiesto Democrático3 expresó:
(…) Aspiro a ser Presidente sin vanidad de poder. La vida
sabiamente se marchita con las dificultades y atentados. Miro a mis
compatriotas hoy más con ojos de padre de familia que de político. Aspiro a
ser Presidente para jugarme los años que Dios me depare en la tarea de
ayudar a entregar una Nación mejor a quienes vienen detrás. No quiero
morir con la vergüenza de no dar hasta la última lucha para que mi
generación pueda tranquilamente esperar el juicio de la historia (Patiño
Aristizábal, 2007, p. 254).
Anudado a lo anterior, Álvaro Uribe ha pincelado su discurso a partir del
nacionalismo. En su aparato retórico lo ha utilizado como elemento esencial para
promover la cosmovisión de Colombia como un Estado moderno, autónomo y con
identidad cultural, étnica, religiosa o de lenguaje. Sin embargo, el recurrir al
patriotismo también ha servido para desatar violentos conflictos. En la retórica
nacionalista se maneja un discurso emocional que hace énfasis en los temas de
seguridad y sobrevivencia de grupo, que busca movilizar a las audiencias a su
favor. Uribe sin duda alguna, es un experto en enfilar baterías hacia este tipo de
herramientas discursivas. De ello daremos cuenta más adelante.
Por otro lado, y no menos importante está el denominado Estado de
Opinión como propuesta discursiva para reforzar la gestión gubernamental por
medio de la opinión pública. En el discurso del expresidente Uribe esto se
encuentra sustentado bajo varias temáticas: la seguridad democrática, la
3 Este Manifiesto Democrático contiene los 100 puntos básicos del programa de gobierno de Álvaro Uribe Vélez. Fue elaborado entre el año 2000 y 2001 como propuesta principal de su campaña presidencial.
11
confianza inversionista, la cohesión social y el Estado comunitario. La primera, la
seguridad democrática, es conocida por el electorado colombiano como el caballo
de batalla de Álvaro Uribe. El político antioqueño ha recurrido a esta estrategia
para presentar la seguridad como razón de Estado. Como ejemplo de ello, se
encuentran los golpes militares como el bombardeo en Ecuador donde murió Raúl
Reyes (Operación Fenix) y la “Operación Jaque” en donde se produjo la liberación
de Ingrid Betancourt Pulecio. A su vez, el Estado de Opinión se presenta como un
mecanismo de participación directa del pueblo con sus instituciones y dirigentes.
En palabras del expresidente Uribe, es la propuesta de una democracia
participativa.
Además, Uribe presenta una característica poco común con los demás
presidentes. Su estilo comunicacional y características de liderazgo son tan
propias, que ha incrementado su popularidad y figura de líder carismático debido a
que:
(…) no pertenece a una elite tradicional, lo cual hizo que el pueblo
se sintiera identificado y tuviera una mayor cercanía. Se ratificó con sus
consejos comunales, en donde la mayoría de los asistentes, eran gente del
común que exponía sus necesidades, a ellos se les regalaba desde
materas para mejorar sus casas, hasta dinero en efectivo (Ramírez
Martínez, 2015, p. 16).
¿CRISIS DEL SISTEMA DE REPRESENTACIÓN?
Como ya se mencionó, desde los años ochenta y principios de los noventa,
el crecimiento cada vez mayor de un malestar ciudadano ante la política, ha
generado un escepticismo creciente hacía los mecanismos de representación
vigentes en las democracias occidentales (Manin, 1998, p. 250). Estos fenómenos,
comúnmente conocidos como crisis de la representación, han sido explicados
como consecuencia de algunas transformaciones contemporáneas. Estas
afectaron y aún hoy afectan al propio funcionamiento y estructura de los Estados
12
modernos. La crisis de representación tiene como actor protagónico y eje de todas
las críticas a los partidos políticos. En cualquier caso, a juzgar por los hallazgos
empíricos más recientes, lo que está en crisis no es tanto el sistema democrático.
Son los elementos propios del modelo representativo, en particular los partidos
políticos. América Latina no ha sido una excepción en este proceso. En el
continente se ha acrecentado cada vez más el escaso apego a los partidos como
instituciones representativas.
El catedrático español Mariano Torcal ha propuesto para ello la noción de
desafección política. Esta puede definirse como el sentimiento subjetivo de
desempoderamiento, cinismo y falta de confianza en los procesos políticos, en la
política misma y en las instituciones democráticas por parte de los ciudadanos
(Torcal & Montero, Political Disaffection in Contemporary Democracies: Social
Capital, Institutions, and Politics, 2006, p. 604). Ello, sin que haya necesariamente
un cuestionamiento directo hacia el régimen político. Del análisis de Torcal acerca
de la desafección de las nuevas democracias en América Latina se pueden
extraer dos conclusiones. La primera, es que los sucesos políticos del pasado han
modelado en gran medida la desafección del presente. Por ende, esta última no
depende sólo de factores políticos del momento inmediato. La segunda, es que la
desafección en las nuevas democracias produce una ciudadanía menos
participativa en todos los ámbitos. De esta manera, se refuerza y aumenta la
distancia entre representantes y representados.
Adicionalmente, Torcal y los politólogos José Montero y Richard Gunther
han identificado cómo se manifiestan los sentimientos antipartidistas en la
ciudadanía. De acuerdo con estos autores, el antipartidismo puede presentarse en
dos dimensiones: reactiva y cultural.
(…) [El antipartidismo reactivo] es la posición crítica adoptada por los
ciudadanos como respuesta a su insatisfacción con las actividades de las
élites de los partidos y los rendimientos de las instituciones. Esta
orientación es producto de la inconsistencia entre las promesas, las
13
etiquetas ideológicas y la retórica de los dirigentes políticos, por un lado, y
las percepciones de los ciudadanos sobre los rendimientos efectivos de las
instituciones democráticas y de las élites políticas, por otro (Torcal,
Montero, & Gunther, Ciudadanos y partidos en el sur de Europa: los
sentimientos antipartidistas, 2003, p. 13).
En este orden de ideas, el decaimiento de la eficacia del ejercicio político,
además del contraste de una institucionalidad permisiva y un escenario nacional
cuya apatía política crece abismalmente, son los ingredientes fundamentales del
caldo de cultivo para la aparición de líderes cuya estrategia retorica se aprovecha
de ello. De allí, que varios autores contemporáneos hayan expuesto cómo un
número creciente de líderes elegidos democráticamente, estarían recurriendo
nada menos que a viejos estilos políticos4 presentados de un nuevo modo. De
esta manera, se aprovechan de la severidad de la situación para finalmente
acentuar –tal vez sin advertirlo – el vacío organizacional e institucional que durante
largo tiempo ha atormentado a gran parte de la región (Ducatenzeiler & Oxhorn,
1994, p. 42).
Sin embargo, no se puede desconocer la capacidad partidista en América
Latina. Aunque se hable de crisis, no ha habido otra figura pertinente para
reemplazar el sistema de partidos. En términos estructurales se mantiene una
capacidad eficiente para funcionar correctamente en función con las demandas del
País. Aun así, el auge, reproducción y mantenimiento del liderazgo carismático
4 El liderazgo carismático se caracteriza por la estructura vertical del poder organizativo. Esto a su vez contrasta con el aspecto central de la ideología populista, que establece una oposición entre pueblo-oligarquía, es decir, el anti-elitismo. La estrategia del líder son las cualidades del hombre común. Las virtudes cotidianas del pueblo son desplegadas en el líder de forma extraordinaria para poder realizar su misión. Así, parece establecerse una mitología del líder. Ello genera un tipo de identificación de las multitudes con el líder al sentirse similar a éste. Otro aspecto a destacar radica en que el líder posee cualidades que la gente querría tener. “El populismo se reduce a convocar al pueblo en torno a un líder sin ningún contenido ideológico. El carisma actúa como elemento de legitimación del liderazgo y del partido u oligarquía que representa” (Deusdad, 2003, pág. 24).
14
como fenómeno corriente en Latinoamérica es una realidad. Realidad que líderes
como Álvaro Uribe Vélez materializan en su ejercicio político. De este modo, este
contexto de desconfianza en las instituciones representativas y en asociación con
las especificidades propias del sistema político colombiano, hacen que la
trayectoria pública de Álvaro Uribe sea el centro de proposición de los conceptos
objeto de este análisis. Sobre todo en lo relativo a sus períodos presidenciales y
su relación con los partidos políticos.
ÁLVARO URIBE VÉLEZ: EL ASCENSO
El predominio presidencial al interior del régimen democrático le ha
merecido al país el apelativo de “presidencialismo exacerbado o de tipo imperial”
(Vázquez Carrizosa, 1979, p. 163). Este se enmarca en la debilidad estructural de
las instituciones, en la inestabilidad social y la violencia armada. Ello, ha dado
lugar a escenarios como los Estados de sitio o conmoción interior y a la creación
de poderes presidenciales paraconstitucionales sin las correspondientes medidas
de control (Benavides Romero, 2005, p. 20).
En este marco presidencialista los partidos políticos en Colombia atraviesan
por un profundo fraccionamiento estructural y por una falta de control sobre sus
candidatos y elegidos. Aunque los mecanismos legales existen, su aplicación es
débil. La flexibilidad que se otorgó a sus estructuras organizativas permitió de
alguna manera la supervivencia de los partidos tradicionales. Sin embargo, los
modismos actuales del ejercicio político, han degenerado en prácticas
personalistas con cierto aire mesiánico. En consecuencia, han proliferado las
propuestas sustentadas en el discurso de la anti-política.
Así pues, la tendencia de un presidencialismo fuerte frente a unos partidos
debilitados, permitió que la frustración de las negociaciones de paz adelantadas
por el Presidente Pastrana con las FARC, generara un contexto propicio para el
ascenso al poder de Álvaro Uribe Vélez. Sin duda alguna, este fue el escenario
favorable para la proclamación de su proyecto de orden, autoridad y ‘mano dura’
15
contra la guerrilla. Según el historiador Fabio López de la Roche, surgió un “(…)
viraje radical de los colombianos a favor del combate militar a la guerrilla, que
colocó al presidente Uribe con su discurso confrontacional en la ruta segura hacia
la Casa de Nariño” (López de la Roche, 2014, p. 37).
A pesar de ser liberal, Uribe se propuso llegar a la Presidencia de la
República por un movimiento ciudadano llamado Primero Colombia. Mediante este
convocó a colombianos de todas las corrientes políticas, liberales, conservadores,
izquierda democrática e independientes. Sumado a ello, después de su primer
mandato “(…) el presidente Álvaro Uribe supo aprovechar sus altos niveles de
popularidad y ganó en forma contundente la elección para el período 2006 – 2010,
su segundo período como presidente, sin que hubiera necesidad de que se
realizara una segunda vuelta” (Botero, 2007, p. 103).
No obstante lo anterior, cabe destacar que aunque el diseño constitucional
de 1991 mantuvo el presidencialismo como la columna vertebral de la
organización de los poderes públicos en Colombia; el constituyente para evitar un
control excesivo de la presidencia, amplió los contrapesos. Sin embargo, tal y
como lo ha señalado Botero Bernal, el Acto Legislativo 02 de 2004 (el de la
reelección presidencial de Álvaro Uribe) los afectó sensiblemente.
En esta ocasión Uribe tampoco aspiró como candidato de ninguno de los
partidos existentes, incluido el Partido de la U que agrupaba a las fuerzas
uribistas. Lo hizo nuevamente a través del movimiento Primero Colombia. A
grandes rasgos, las políticas implementadas durante ambos periodos pretendían
consolidar el mensaje de que el país necesitaba recuperar la confianza para que
hubiese más inversión y más empleo. “(…) [P]ara lograrlo había tres frentes de
trabajo: la seguridad democrática, la reactivación económica y social y la lucha
contra la corrupción” (Bermúdez Merizalde, 2010, p. 46).
Todo lo anterior, confluía en el concepto de Estado Comunitario. Imagen
que Uribe había idealizado como meta central del Plan de Desarrollo desde que
16
llegó por vez primera a la Presidencia de Colombia en 2002. Dicho proyecto tenía
como objetivo que los recursos del Estado sirvieran al interés de la comunidad,
teniendo en consideración a la equidad como eje transversal. El medio para lograr
tal fin era la participación amplia de la comunidad ciudadana en la toma, ejecución
y supervisión de las decisiones para garantizar la transparencia (Uribe Vélez).
En el mismo sentido, la política pública de defensa y seguridad democrática
(PPDSD) fue uno de los pilares del gobierno Uribe en su búsqueda del Estado
Comunitario. El documento orientador de la PPDSD planteó que las instituciones
democráticas y la vida de los colombianos enfrentaban una serie de amenazas
que ponían en peligro el Estado de Derecho. Por tal razón debían ser combatidas
enérgicamente. Estas amenazas eran el terrorismo, el negocio de las drogas
ilícitas, las finanzas ilícitas, el tráfico de armas, de municiones, de explosivos, el
secuestro, la extorsión y el homicidio (Ayala Osorio, Hurtado Vera, & Duque
Sandoval, 2006, pp. 47 - 48).
En este orden de ideas, el compendio de lo que ha significado Álvaro Uribe
para el panorama político colombiano, da cuenta de cómo los líderes carismáticos
desafían el statu quo y actúan como agentes de una reforma radical (Conger &
Kanungo, 1987, p. 640). Uribe como líder carismático ha promovido un discurso
colmado de estrategias retoricas que lo hacen posicionarse como la fuerza para el
cambio. El político antioqueño se ha aprovechado de la crisis del sistema de
representación y el desapego al ejercicio político.
En este sentido, desde su gestión como militante con el Partido Liberal, sus
períodos como Presidente de la República y su actualidad como Senador por el
partido Centro Democrático, Uribe ha demostrado la necesidad de poder social,
impacto o control sobre otros (McClelland, 1985, p. 817). De esta manera, el
objeto central de este análisis se enmarca en identificar cómo se reproduce la
visión y estilo de liderazgo carismático promovido por Álvaro Uribe en el sistema
político colombiano. Así, en el siguiente apartado se presentará la propuesta
metodológica para develar el estilo político de Uribe a través de las estrategias de
17
frame analysis y trust building. Ello, cohesionando los conceptos de liderazgo
carismático y el contenido retórico del discurso.
18
III. “(…) Compartiré con ustedes el día a día de la difícil brega para recuperar la seguridad y el orden, que es el valor fundante de las libertades"
Álvaro Uribe Vélez (15 de agosto de 2002). Primer Discurso Escuela Militar
de Cadetes José María Córdova
Acercamiento teórico al fenómeno de liderazgo carismático
19
LA RETÓRICA DEL CAMBIO SOCIAL Y LA VISIÓN
En general, el cambio social se relaciona con la modificación del orden
existente, la convención o el statu quo de alguna manera. Por ejemplo, este
cambio puede corresponder a la resolución de un problema social existente de
una manera innovadora (Fiol, Harris, & House, 1999, pp. 463 - 464). Esto, a través
de la modificación de las normas grupales o el cambio de las relaciones
intergrupales (Tajfel, 1974, p. 76). En este sentido, la teoría del liderazgo
carismático5 postula que los líderes con este tipo de características, instituyen el
cambio alterando el escenario social de alguna manera fundamental (Fiol, Harris,
& House, 1999, p. 77). Los líderes carismáticos logran dicho objetivo presentando
a las personas una visión poderosa que los inspira y motiva hacia tal cambio.
De manera específica, este tipo de líderes articulan una visión que atrae las
emociones de quienes los siguen y aumenta su autoestima (Emrich, Brower,
Feldma, & Garland, 2001, p. 533). Como consecuencia de ello, sus seguidores
forman fuertes vínculos emocionales, lo que a su vez implica un alto sentido de
confianza en tal sujeto (Fiol, Harris, & House, 1999, p. 78). Además, quienes
profesan el liderazgo carismático parecen tener una habilidad casi "mágica" para
evocar en sus seguidores una motivación intrínseca, que los instiga para hacer
sacrificios personales al implementar la visión del dirigente (Fiol, Harris, & House,
1999, p. 78). 5 La teoría de la legitimidad de Weber enfocó el tema vinculándolo a la dominación como la probabilidad de encontrar obediencia, al poder como la probabilidad de imponer la propia voluntad dentro de una realocución social, y a la relación social desde la reciprocidad entre dos o más individuos (Weber, 1964, pág. 623). Con lo anterior, se encuentran las motivaciones tras la aceptación de la dominación, que van desde el hábito hasta la consecución de intereses propios ya sean materiales como sociales. Los tipos de dominación legítima para Weber tienen que ver con su carácter racional, tradicional o carismático. Siendo este último el “(…) que descansa en la entrega extracotidiana a la santidad, heroísmo o ejemplaridad de una persona y a las ordenaciones por ella creadas o reveladas (…)” (Weber, 1964, pág. 707). Es decir, la exposición del carisma como la cualidad que pasa por extraordinaria de una personalidad, como virtud de posesión de fuerzas superiores y que no son accesibles por cualquier otro. Esta legitimación proviene de la apreciación de los atributos individuales -percibidos- de un líder particular. A través del carisma ello se traduce en lo que se llamará visión en el desarrollo del proyecto.
20
Para comprender cómo funciona entonces el afianzamiento del poder, es
preciso referirse al concepto de visión en términos de liderazgo. La visión
representa el objetivo idealizado de un líder que se comparte con los seguidores.
La visión es central en el concepto de liderazgo carismático. Algunos
investigadores han vinculado ambos conceptos mediante el uso de liderazgo
carismático y visionario como sinónimos (Shamir, House, & Arthur, The
Motivational Effects of Charismatic Leadership: A Self-Concept Based Theory,
1993, p. 581). En este sentido, la visión evoca incontrastablemente imágenes de
memorables líderes carismáticos. Estos, a través de estrategias como la
implementación de una retórica apasionada, persuaden a los seguidores a creer y
buscar un cambio radical.
En este sentido, la utilización de este tipo de herramientas por parte de los
líderes ha sido un asunto que ha permanecido de manera constante en la mente
de los investigadores. De este modo, los expertos en la materia se han
concentrado en comprender cómo a través del liderazgo carismático los sujetos
acceden y mantienen el poder por medio de su influencia en los seguidores. Tales
análisis han arrojado en unísono, que la construcción y entrega de declaraciones
visionarias es quizás el elemento preponderante al momento de influenciar y
mantener el escenario de poder (Awamleha & Gardnerb, 1999, pp. 362 - 364).
Igualmente, es oportuno destacar que aunque los líderes pueden ser vistos
como carismáticos sin ser oradores fascinantes, la capacidad de captar una
audiencia a través de la oratoria llamativa juega un papel importante en la
formación del carisma (Bryman, 1992, p. 55). De hecho, varias teorías del
liderazgo carismático han revelado que la capacidad de articular bien es inherente
a los líderes carismáticos. No obstante lo anterior, a pesar del aparente consenso
sobre la importancia de la retórica de este tipo de liderazgos, la relación entre el
contenido de los discursos y el liderazgo carismático no ha recibido mucha
atención por parte de teóricos e investigadores.
21
De esta forma, los comportamientos retóricos que los líderes carismáticos
proyectan dan cuenta de una presencia poderosa, segura y dinámica. Esto, a
través de factores de entrega como el contacto visual, la fluidez, los gestos, la
expresividad facial, la elocuencia, la energía y la variedad de tonos de voz (Bass &
Stogdill, 1990, pp. 433 - 435). Sin embargo, en términos generales, comprender el
papel del comportamiento retórico como una herramienta para generar confianza
en los líderes carismáticos, es el resultado tangible de la práctica en sí.
Por otro lado, teorizaciones más recientes sugieren que los líderes actúan
como "empresarios de identidad" (Reicher, Hopkins, & Levine, 2005, p. 630). De
esta manera, juegan un papel fundamental en la construcción de identidad grupal6
y en ocasiones dicho papel está dado para asegurar su posición de liderazgo
(Heaven, 1999, p. 592). Los líderes carismáticos pueden ser particularmente
expertos en esta habilidad. De hecho, las teorías sobre liderazgo carismático y
transformacional conectan la efectividad del líder con la capacidad de implicar
preocupaciones colectivas con los autoconceptos individuales. De esta forma:
(...) [L]os líderes carismáticos cambian la prominencia de la jerarquía
de valores e identidades dentro del autoconcepto del seguidor, aumentando
así la probabilidad de que estos valores e identidades se vean implicados
en la acción. Dado que los valores y las identidades se basan socialmente,
es probable que su control del comportamiento represente un cambio de lo
instrumental a lo moral y de la preocupación por las ganancias individuales
a las preocupaciones por las contribuciones de lo colectivo (Shamir, House,
& Arthur, The Motivational Effects of Charismatic Leadership: A Self-
Concept Based Theory, 1993, p. 584).
En este sentido, la evidencia empírica reciente expone que los líderes
carismáticos empoderan a los seguidores al aumentar su identificación social
6 La identidad social se refiere a "(…) la parte del autoconcepto de un individuo que se deriva del conocimiento de su pertenencia grupal a un grupo social (o grupos) junto con la importancia emocional asociada a esa membresía" (Tajfel, 1974, pág. 69).
22
(Conger & Kanungo, 1987, p. 640). A su vez, la identificación social aumenta con
el énfasis del líder carismático en las identidades colectivas de los seguidores y
los valores compartidos (Shamir, Zakay, Breinin, & Popper, 1998, pp. 397 - 398).
Además, suele destacarse el vínculo entre los valores y las identidades sociales.
De esta manera, los miembros del grupo que comparten una identidad social
común también comparten orientaciones de valor comunes. Por otra parte, la
eficacia del líder carismático para generar un cambio social, puede depender en
igual forma de la capacidad de transformar los valores e identidades compartidos
del grupo en una nueva identidad social relacionada con el cumplimiento de la
visión del líder.
Así pues, resulta necesario señalar que, tanto en grupos minoritarios como
en grupos de estatus más establecidos, el cambio social evoca problemas de
identidad social. Si la visión del líder no concuerda con las normas, valores e
identidades definitorias preexistentes del grupo, los líderes pueden gastar
rápidamente su crédito idiosincrásico ( (Hollander, 1958, p. 124). Ello, puede
propiciar el riesgo a la marginación y la pérdida de apoyo de los seguidores debido
a la resistencia al cambio. Por ende, para que un líder de un grupo mayoritario
produzca un cambio social que puede ser contrario a los valores e identidad
preexistentes, deberá deconstruir y reconstruir los valores e identidad del grupo
(Reicher, Hopkins, & Levine, 2005, p. 633).
(…) [E]l líder carismático ostenta similitudes en el trasfondo, las
experiencias y los valores entre él y los posibles seguidores para demostrar
su pertenencia a la misma colectividad, y para presentarse a sí mismo
como un personaje representativo y un posible modelo a seguir. Esto sienta
las bases para la posible identificación de los seguidores con el líder, y su
emulación de las creencias del líder y la aceptación de la misión del líder
(Boas, Arthur, & House, 1994, p. 34).
Por lo anterior, si hablásemos del proceso de acercamiento al grupo, vale
destacar que de acuerdo con la teoría, el líder lo realizaría en varias etapas. Así,
23
iniciaría con el encuadre o búsqueda de empatía con quienes pretenden sean sus
seguidores. Para ello, durante el encuadre deberá comunicar un sentido de
similitud a los seguidores (familiaridad, nivelación), siendo esta una de las
principales estrategias mediante las que el líder busca maximizar la identificación
e influencia. Por ende, representar un sentimiento de similitud con los seguidores
puede aumentar la atracción de los mismos (Reis, Collins, & Berscheid, 2000, pp.
850 - 851).
En este orden de ideas, luego de que el líder ha logrado encuadrar en el
imaginario colectivo de su grupo de seguidores, iniciará a reconfigurar dicho
escenario. Construirá un nuevo imaginario. Uno con mayor similitud a sus
perspectivas, utilizando las herramientas previamente mencionadas para generar
en quienes lo siguen la necesidad de cambio y validación de tal orden. Esta etapa
es llamada por los académicos frame-breaking. Ésta es propia de los líderes
carismáticos, pues estos suelen recurrir a reinterpretaciones de la historia grupal
que condujo al statu quo del grupo. Lo hacen mediante el uso de un lenguaje que
hace referencia al pasado y al presente (Bligh, Kohles, & Meindl, 2004, p. 225).
Por consiguiente, este tipo de liderazgos propenden por despertar la
insatisfacción emocional en los seguidores con el pasado y el presente. Al tiempo,
transmiten un sentido de urgencia o crisis para resolver o cambiar dicho statu quo.
Todo ello, les permite erradicar en los seguidores su deseo de mantener el
escenario y los temores de innovación (Fiol, Harris, & House, 1999, pp. 463 - 464).
A través de estas tácticas de comunicación, los líderes usan su prototipo para
influir en la insatisfacción de los seguidores con el estado actual de las cosas.
Esto, deconstruye los vínculos de los seguidores con los componentes de la
identidad del grupo y los valores que tal grupo ha perpetuado. De esta forma, el
líder establece tanto un sentido estructural como uno de insatisfacción, que sienta
las bases para llevar a los seguidores hacia su visión.
En cuanto al frame-moving, el cual se refiere a las tácticas de movimiento
del “framing” o la serie de valores, creencias e ideologías en las que está
24
enmarcado un discurso, el líder se centra en varias funciones. Éste, quien ya ha
hecho empatía y ha iniciado con la transformación del imaginario, busca
establecer entonces una identidad social alterada que sea congruente con su
visión del cambio social. Con este fin, los liderazgos carismáticos cumplirán dos
funciones esenciales. La primera, será la de negar los componentes de la
identidad del grupo que apoyó la convención. La segunda, será la de transmitir
una nueva jerarquía de valores y definir una identidad alternativa a través de los
mismos, con el objeto de respaldar la la visión de cambio del líder (Shamir, House,
& Arthur, The Motivational Effects of Charismatic Leadership: A Self-Concept
Based Theory, 1993, p. 582). Asimismo, es necesario subrayar que los líderes
usan la negación para construir sobre la insatisfacción emocional suscitada
durante el cambio de cuadro. Con ello buscan erradicar el apoyo a políticas,
reglas, normas o convenciones específicas que son incompatibles con su visión.
De este modo, para ayudar a los seguidores a avanzar hacia la visión del
cambio social, los líderes carismáticos también pueden continuar redefiniendo la
categoría social de membresía grupal (Reicher, Hopkins, & Levine, 2005, p. 626).
Lo hacen con categorizaciones como las de menor o mayor inclusión, redefiniendo
quién es el "nosotros" y quién el "ellos”. Además, para redefinir la identidad del
grupo, los líderes carismáticos pueden involucrarse en una retórica que resalta los
valores y la identidad grupal. Así los conecta con los comportamientos del
seguidor esperado y las visiones del futuro (Shamir, House, & Arthur, The
Motivational Effects of Charismatic Leadership: A Self-Concept Based Theory,
1993, p. 587).
Por último, el líder cuyo trabajo de frame breaking y frame moving ha
arrojado resultados, necesita solidificar la identidad alterada del grupo. De igual
forma, necesita fortalecer las motivaciones de canalización establecidas en el
marco de movimiento (frame moving), junto con el compromiso del seguidor. Para
ello, acude a la retórica de realineamiento de marcos o frame realignment. Así, los
líderes carismáticos pueden afirmar positivamente la identidad alterada del grupo y
25
usar el lenguaje para fomentar el compromiso y alentar a los seguidores a actuar.
Por ende, afirmar positivamente la identidad alterada del grupo es crítico durante
la realineación del marco (Fiol, Harris, & House, 1999, p. 453). Esto permite
asegurar que las motivaciones del seguidor que surgen del deseo de una
identidad positiva se asocien con el cambio social. Por lo tanto, los líderes pueden
volver a enfatizar la positividad de la identidad grupal y conectar la identidad
positiva con el cumplimiento de la visión del líder.
Sumado a lo anterior, los líderes carismáticos pueden, una vez más,
emplear la inclusión para destacar la identidad del grupo y aumentar la
identificación de los seguidores con el grupo. Para esto, la comunicación de logros
en particular puede cumplir varias funciones importantes en la realineación de
marcos. Primero, referirse a los logros y acciones grupales en términos tangibles
puede crear un sentido de compromiso grupal con la visión. Además, puede
aumentar el sentido de eficacia colectiva de los seguidores (Shamir, House, &
Arthur, The Motivational Effects of Charismatic Leadership: A Self-Concept Based
Theory, 1993, p. 585). Incluso, si los pasos cruciales hacia la visión aún no se han
completado o se han logrado con éxito.
En este orden de ideas, teniendo en cuenta la estructura comunicacional, la
visión en términos de liderazgo y el cómo todo ello es utilizado por el líder
carismático, en el siguiente apartado se presenta la propuesta metodológica para
develar el estilo político de Álvaro Uribe Vélez. Ello, como un ejemplo tangible de
liderazgo carismático que cumple con las características de este fenómeno. Para
esto, se acude a estrategias de frame-analysis, sumado a una intersección de
conceptos según los autores, que proponen y teorizan el fenómeno del liderazgo
carismático.
26
IV. “Me haré moler para cumplirle a Colombia. En mis manos no se defraudará la democracia.”
Álvaro Uribe Vélez (Balance de Gobierno Colombia 2002 – 2010)
Estrategia metodológica: liderazgo carismático y framing
27
Los discursos transmiten significados, pero también proponen
comportamientos sobre diferentes asuntos (Manzano, 2005, p. 5). Por lo tanto, el
discurso no sólo es una forma para describir realidades sino un medio para
crearlas. En este sentido, en su obra Cómo hacer cosas con palabras (1971), el
filósofo británico John Langshaw Austin ha destacado cómo el acto discursivo
tiene un carácter “performativo”. Esto indica que, así como existen ciertas formas
de describir sucesos o acontecimientos, también existen maneras de crear
realidades sociales por medio del lenguaje.
Adicionalmente, mediante el habla los sujetos expresan cierto tipo de
relaciones como la dominación, la cortesía, la ayuda, la solidaridad, entre otras
(van Dijk, 1996, p. 17). De este modo, a través de la utilización del lenguaje los
sujetos seleccionan algunos aspectos de la realidad percibida y los hacen más
prominentes en un contexto comunicativo. De esta forma, logran promover una
definición de problema, una interpretación causal, una evaluación moral y una
recomendación de tratamiento particulares para el asunto descrito (Entman, 1993,
p. 53). En otras palabras, a través de los marcos se diagnostica, evalúa y
prescribe (Gamson, 1992, p. 131).
Desde este punto de partida, los marcos tienen cuatro ubicaciones al
interior del proceso comunicativo. Quien comunica enmarca consciente o
inconscientemente al tomar la decisión sobre qué decir con base en su sistema de
creencias. Asimismo, el texto contiene marcos que se manifiestan en la presencia
o ausencia de palabras clave, fuentes de información y frases. Además, los
marcos guían el pensamiento del receptor, y la cultura es el stock de marcos
comúnmente invocados. En este contexto, la prominencia final del marco es el
producto de la interacción entre el texto y el receptor. Sin embargo, la presencia
de marcos en el texto por sí sola no garantiza su influencia en el receptor (Entman,
1993, p. 54).
En este orden de ideas, la propuesta metodológica para develar el estilo
político de Uribe como un gobernante que surge bajo las circunstancias
28
mencionadas en capítulos anteriores, se plantea a través de estrategias de frame
analysis7 y trust building. Ello, a través de la cohesión de los conceptos de
liderazgo carismático y el contenido retórico del discurso. Cabe recordar que la
intención de este proyecto es realizar un análisis de tres etapas discursivas para
así encontrar una continuidad o discontinuidad en los conceptos utilizados. Para
esto se expondrá una serie de diagnósticos vinculados al contexto del discurso
retórico, que lograrán dar cuenta de la reproducción del liderazgo carismático a lo
largo del tiempo seleccionado.
Las observaciones realizadas a través de este texto buscan contribuir en el
desarrollo de la literatura acerca del comportamiento retórico de los líderes
carismáticos. Para ello, se examinará a fondo el “mensaje" de la retórica en clave
del discurso del expresidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez. En este sentido, es
preciso señalar que, aunque los estudios han demostrado que el discurso y puesta
en escena preponderan sobre el contenido del habla en términos del carisma
percibido (Holladay & Coombs, 1993, pp. 416 - 417). Los líderes carismáticos
también deben concentrarse en "crear significado" o "enmarcar" -framing- (Conger
J. A., The charismatic leader: behind the mystique of exceptional leadership, 1989,
p. 68).
Anudado a lo anterior, las investigaciones de académicos como el
norteamericano Jay Conger, señalan que la puesta en escena por sí sola no
puede hacer más que despertar el entusiasmo y las emociones a corto plazo. Al
tiempo deja intactos los sistemas de creencias de los seguidores. Conger se ha
apartado del enfoque actual de la literatura mediante el análisis de la relación
7 Vale la pena subrayar las diferencias que existen entre los conceptos de frame, framing, frame building y frame effects. Los marcos (frames) tienen que ver con las características del contenido de los textos; el framing alude a las características procesales y contextuales precisas de la elaboración y recepción de los mismos; la pregunta por el frame builiding apunta al origen y formación del marco, y los frame effects son las consecuencias que tiene dicho marco (Vliegenthart & van Zoonen, 2011, pág. 111).
29
entre el contenido retórico y el carisma. Así, ha propuesto dos roles principales
para el uso del lenguaje por parte de los líderes: alineación de marcos (frame
alignment) y construcción de confianza (trust building).
Así pues, basándose en la teoría de campo del sicólogo alemán Kurt Lewin,
es necesario subrayar que en términos generales los liderazgos carismáticos
tienden a ocasionar cambios sociales. Ello, mediante la utilización de estrategias
retóricas específicas, cuyo objetivo es la trasformación de los valores personales y
sociales de los seguidores (Lewin, 1988, p. 127). Estas estrategias están
teorizadas para seguir una secuencia temporal mediante la que los líderes
manipulan diferentes aspectos de las motivaciones personales (deseos y miedos)
y los valores sociales (convención e innovación) de los seguidores. Todo esto
ocurre durante etapas separadas y temporalmente distintas.
En la primera fase (fase 1) los líderes carismáticos emplean estrategias
innovadoras al intentar reducir el valor que las personas asignan a la convención
social actual. Específicamente, estos líderes derogan las convenciones sociales
recurriendo a la negación del deseo de las personas de mantener el statu quo o
negando su miedo al cambio o la innovación (Fiol, Harris, & House, 1999, p. 462).
En la segunda fase (fase 2) los líderes carismáticos se involucran en estrategias
que modifican el marco de trabajo. Esto sucede al intentar alterar el estado neutral
de las personas, ya sea de falta de apoyo para la convención o de miedo o falta de
apoyo al cambio. Dichas modificaciones se obtienen mediante el fomento del
deseo de las personas a no ser parte de una convención o mediante la difusión de
temor a no poder transformar el panorama actual de la misma (Fiol, Harris, &
House, 1999, p. 463). En la fase final (fase 3) los líderes carismáticos utilizan el
realineamiento de marcos para convencer a los seguidores acerca del respaldo de
su nueva visión. De este modo, recurren a la sustitución del deseo de no
convención por un deseo de cambio o innovación. Es así, que durante esta fase
los líderes carismáticos logran la movilización de apoyo de nuevos seguidores y
los alientan en acción (Fiol, Harris, & House, 1999, p. 464).
30
En este orden de ideas, para comprender cómo el líder carismático usa el
lenguaje para crear un significado que sea altamente motivador, el concepto de
enmarcar es importante. La alineación de marcos -framing- se refiere a la
vinculación de orientaciones interpretativas individuales y de líderes. Es decir, se
abarca el cómo algunos intereses, valores, creencias, actividades, objetivos e
ideología del líder y sus seguidores se vuelven congruentes y complementarios.
De manera similar, los líderes carismáticos enmarcan su visión o interpretan
eventos para hacerlos más significativos para sus seguidores (Conger & Kanungo,
1987, p. 634). Para lograr dicha alineación, se recurre a herramientas como el
proporcionar una fuerza para el cambio y apelar a la historia. Además, este tipo de
liderazgos suele enfatizar la autoeficacia de los seguidores y su identidad colectiva
(Shamir, Arthur, & House, The rhetoric of charismatic leadership: A theoretical
extension, a case study, and implications for research, 1994, p. 31).
Asimismo, en términos de construcción de confianza o trust building los
líderes carismáticos apelan a la autoconfianza, amplifican valores específicos,
mencionan el éxito pasado y enfatizan la similitud con los seguidores (Tan & Wee,
2002, pp. 325 - 326). De allí, que se presente una interconexión de conceptos
entre el framing y el trust building8. En este sentido, tal escenario de interceptación
de conceptos, permitirá llevar a cabo el análisis de contenido propuesto en este
texto.
Tabla 1
CONCEPTOS ANÁLISIS/
REFERENCIA CONTEXTO DIAGNÓSTICO
(Framing)
Fuente: Elaboración propia
8 El concepto de framing deriva en trust building (Fiol, Harris, & House, 1999, pág. 472).
31
En este orden de ideas, el sociólogo norteamericano Bernard Berelson ha
definido el análisis de contenido como "(…) una técnica de investigación para la
descripción objetiva, sistemática y cuantitativa del contenido manifiesto de la
comunicación" (Berelson, 1952, p. 356). De acuerdo al estadounidense las
inferencias hechas a partir de los discursos constituyen elementos significativos
para comprender el comportamiento del orador. Los conceptos corresponden
entonces a las oraciones precisas de las que da cuenta el discurso en sí. De este
modo, en el análisis retorico se pretende interpretar propiamente qué se quiso
decir con tal concepto, además de su interacción con el contexto9 político. De igual
forma, con el diagnóstico se pretende emplear las capacidades interpretativas de
los métodos de framing y trust building. De esta manera, tal y como se mencionó
anteriormente, cada concepto apela a herramientas como el otorgar una fuerza
para el cambio, apelar a la historia o enfatizar en la autocapacidad de sus
seguidores. Del mismo modo, se hace hincapié en una identidad colectiva y en la
amplificación de valores específicos. También, se menciona el éxito pasado y se
resalta la similitud del líder con los seguidores.
Por todo lo anterior, se consideró que los factores previamente
mencionados son los que mejor podrían adaptarse a los discursos por analizar. En
primer lugar, la característica de proporcionar una fuerza para el cambio da cuenta
de cómo los líderes carismáticos desafían el statu quo y actúan como agentes de
una reforma radical (Conger & Kanungo, Charismatic leadership: the elusive factor
in organizational effectiveness, 1988, p. 176). El análisis propuesto en este escrito
expone que los líderes carismáticos proporcionan la fuerza para el cambio al
destacar el estado intolerable de la situación social actual, mientras defienden los 9 El discurso tiene una base cognitiva y otra social, puesto que su producción requiere necesariamente la interacción. En el encuentro con otras personas los sujetos construyen y asignan significados a su experiencia interactiva. Los elementos implicados en el discurso que son de índole social se denominan el contexto. “(…) el género, la edad, la etnicidad, el estatus social, las actitudes lingüísticas, el poder y la profesión de los actores sociales pueden condicionar de múltiples maneras el texto y el habla (…) (van Dijk, 1996, pág. 70). Esto tiene efecto directo a su vez en aspectos como la pronunciación hasta la sintaxis de la oración, la lexicalización, los significados, las figuras retóricas, el estilo y los movimientos conversacionales. Por tanto, son atributos del contexto (van Dijk, 1996, pág. 70).
32
objetivos futuros como idealizados y atractivos. De hecho, cuanto más idealizados
sean los objetivos futuros más discrepantes se vuelven en relación con el statu
quo. Como resultado de esto, es más probable que al líder se le atribuyan visiones
extraordinarias.
Igualmente, el estadounidense Bernard Bass he expuesto que los líderes
carismáticos identifican y expresan las serias amenazas que enfrentan sus
seguidores a la vez que elevan su nivel de conciencia acerca de tales amenazas
(Bass, Leadership and Performance Beyond Expectations, 1985, p. 106). Sumado
a ello, la visión puede proporcionar una sensación de continuidad para los
seguidores al vincular el statu quo actual con una imagen vívida de un futuro mejor
para la organización. Como consecuencia de esto, muchos enfoques del liderazgo
carismático han enfatizado la importancia de proporcionar una imagen idealizada
del futuro para los seguidores (Bennis & Nanus, 1985, p. 114). De hecho, aunque
los líderes no carismáticos tienden a enfatizar los objetivos proximales específicos,
los líderes carismáticos se concentran alrededor de objetivos vagos y distantes.
Además, prefieren la exposición de resultados utópicos (Shamir, Arthur, & House,
The rhetoric of charismatic leadership: A theoretical extension, a case study, and
implications for research, 1994, p. 39).
En segundo lugar, al apelar a la historia las personas luchan por un sentido
de coherencia propio. Este debe incluir un sentido de congruencia y continuidad
entre el pasado, el presente y el futuro. El sentido de "evolución" es central para
otorgar significado y, por lo tanto, la alineación actúa como una fuerza motivadora
(Shamir, House, & Arthur, The Motivational Effects of Charismatic Leadership: A
Self-Concept Based Theory, 1993, p. 581). En este escenario, la politóloga
norteamericana Ann Ruth Willner ha destacado cómo los líderes carismáticos
vinculan los comportamientos actuales con eventos pasados al citar ejemplos
históricos (Willner, 1985, p. 57).
Por otra parte, de acuerdo al sicólogo canadiense Albert Bandura, el dar
cuenta de la autocapacidad de los seguidores hace referencia a las percepciones
33
de autoeficacia como potentes fuerzas de motivación (Bandura, 1986, pp. 437 -
438). De este modo, los líderes carismáticos aumentan las percepciones de los
seguidores al promover expectativas de alto rendimiento, expresando confianza en
la capacidad de estos para contribuir a la consecución de una meta grupal (Bass,
Leadership and Performance Beyond Expectations, 1985, p. 93). Dado que los
líderes distantes suelen reunirse con sus seguidores como grupo, es probable que
se dirijan al grupo en lugar de al individuo (Yagil, 1998, p. 167). Por ende, aunque
los líderes carismáticos distantes podrían no ser capaces de influir directamente
en la autoestima y la autoeficacia del seguidor individual, influyen al expresar
confianza en la capacidad del grupo como un todo.
Asimismo, la importancia de la identidad colectiva para distinguir a un grupo
sobre otros grupos da sentido a las vidas y al esfuerzo individual del colectivo
social. Esto, al conectarlos con entidades más grandes y con preocupaciones que
trascienden su propia existencia limitada (Bennis & Nanus, 1985, p. 102). Por lo
tanto, los líderes carismáticos hacen más referencias a la identidad colectiva y
menos referencias al propio interés individual (Shamir, Arthur, & House, The
rhetoric of charismatic leadership: A theoretical extension, a case study, and
implications for research, 1994, p. 28).
Ahora bien, del modelo de trust building se tomaron los últimos conceptos a
categorizar. El primero de ellos reside en la amplificación de valores. Los líderes
carismáticos amplifican o elevan los valores que tienen los seguidores para ganar
el apoyo de los mismos (Conger & Kanungo, Charismatic leadership: the elusive
factor in organizational effectiveness, 1988, pp. 198 - 199). De esta forma, al
realizar una comparación discursiva de los líderes no carismáticos, los discursos
de los líderes carismáticos contendrán más referencias a los valores y la
justificación moral. De hecho, el sello distintivo del liderazgo transformacional es
elevar a los seguidores a "niveles más principistas" (Burns, 2010, p. 462).
Sobre la mención del éxito pasado, el filósofo alemán Max Weber ha
destacado la necesidad de los liderazgos carismáticos para "probar" sus
34
extraordinarios poderes ante el seguidor. En este sentido, los seguidores de la
teoría alemana señalan igualmente que el éxito tiene a su vez como objeto validar
el carisma de los líderes y afirmar su poder extraordinario (Conger J. A., The
charismatic leader: behind the mystique of exceptional leadership, 1989, p. 93). De
allí que, siguiendo esta misma línea, el sociólogo alemán Amitai Etzioni sea
expositor de cómo el carisma se adquiere a través del logro y la validación
constante de más logros (Etzioni, 1975, p. 321). Además, los seguidores distantes
tienden a atribuir carisma al líder en función del éxito organizacional observado
(Bryman, Charisma and Leadership in Organizations, 1992, p. 47).
De la misma forma, la similitud del líder con seguidores da cuenta de cómo
los seguidores se identifican con sus líderes y emulan sus comportamientos (Bass,
Avolio, & Goodheim, Biography and the Assessment of Transformational
Leadership at the World-Class Level, 1987, p. 12). Sin embargo, aunque la
distancia entre líder y seguidor es una condición necesaria para el liderazgo
carismático, el líder debe presentar características comunes con quienes le
siguen. Ello, con el objetivo de formar un vínculo común y así lograr la
identificación emocional. Por consiguiente, los líderes carismáticos exteriorizan
similitudes en los antecedentes y experiencias entre él y sus seguidores para
demostrar su pertenencia a la misma colectividad. Así se presentan a sí mismos
como “personajes representativos" y posibles modelos a seguir (Shamir, House, &
Arthur, The Motivational Effects of Charismatic Leadership: A Self-Concept Based
Theory, 1993, p. 574).
En este orden de ideas, los discursos a analizar serán estudiados de
acuerdo al momento de la historia política del expresidente Álvaro Uribe Vélez.
Así pues, la primera etapa a observar será la de su discurso de posesión como
Gobernador de Antioquia en el año 1995. En segunda medida, se profundizará en
su discurso de posesión como Presidente de la República de Colombia 2002-
2006. Asimismo, se hará énfasis en el discurso de posesión a la reelección
Presidencial en el año 2006. Finalmente, en la tercera etapa se recurrirá al análisis
35
del discurso para el Plebiscito por la Paz en el año 2016. A partir de lo anterior, se
categorizarán las tendencias según el diagnóstico propuesto anteriormente, junto
al manejo de amenazas10 y valores que componen en su totalidad el colectivo de
discursos tomados en cuenta. Por último, se propondrá una triangulación11 de
conceptos a partir del análisis framing del discurso en sí. Esto, después de haber
validado o rechazado las proposiciones determinadas anteriormente.
De esta manera, en el capítulo siguiente se llevará a cabo el análisis
expuesto de la mano de la matriz propuesta. De igual forma, se expondrá una
configuración de los discursos interpretados con el objeto de profundizar sobre los
mismos en el marco de las fases del liderazgo carismático propuestas por los
autores previamente mencionados.
10 Las amenazas en el medio ambiente se definieron operativamente como problemas que amenazan la supervivencia, la seguridad o el éxito del país. 11 El marco de la triangulación propuesto por el lingüista holandés Teun van Dijk está guiado por lo social del discurso, la cognición y la sociedad. Aunque utiliza la estrategia en clave de manipulación, es posible estructurar un resultado del análisis propuesto por medio de tal marco. Para este autor la importancia de la cognición radica en que los modelos mentales “(…) se expresan en el significado del discurso, los modelos contextuales restringen la variación discursiva y las representaciones sociales abstractas (como el conocimiento) resultan necesarias en todos los niveles de la comprensión discursiva (aunque sólo sea el conocimiento social compartido sobre el discurso mismo)” (van Dijk, 1996, pág. 72). Con base en ello concluimos que lo cognitivo es social, debido a que implica la previa comprensión mutua entre los sujetos que participan del lenguaje. Esta comprensión exige que algunas características de las representaciones mentales sean compartidas por los usuarios de la lengua. Por ende, es allí donde radica el carácter mediador de la cognición en la relación sociedad discurso que complementa la triada referida.
36
V. “No quiero morir con la vergüenza de no dar hasta la última lucha para que mi generación pueda tranquilamente esperar el juicio de la historia”
Álvaro Uribe Vélez (Manifiesto democrático)
Análisis de discurso: presentación de resultados y discusión
37
La validez de la dominación carismática se halla en el reconocimiento de las
cualidades poco comunes que posee el portador del carisma. Este reconocimiento
se entiende como un “deber de los dominados”. Sin embargo, no es suficiente por
sí mismo para legitimar la dominación. En todo caso, si falta dicho reconocimiento
la autoridad del líder se desvanece (Weber, 1964, p. 262). Según Weber la
prolongación e interiorización de la dominación carismática por parte de los
seguidores, puede llevar a trascender el plano excepcional y emocional. De esta
forma, da lugar al tránsito de una dominación puramente carismática a una
dominación de carácter tradicional (Weber, 1964, p. 264).
El ascenso de Álvaro Uribe Vélez estuvo determinado por la coyuntura que
el país atravesó desde finales de la década del 9012. Esta puede caracterizarse a
grandes rasgos como una crisis de legitimidad de la dominación tradicional. Ello,
abonó el terreno para la emergencia de una figura providencial que encarnara la
“regeneración” del país. En aquel momento, la salida a dicha crisis estaba signada
por dos posibles caminos: la emergencia de una dominación legal avanzada13 o el
surgimiento de un liderazgo carismático. En el periodo durante el que fue Senador
(1986-1994) la seguridad no fue el tema central de discurso del antioqueño. Por lo
contrario, éste se caracterizó por su participación protagónica en el trámite de
reformas en materias sociales de corte neoliberal (pensional, laboral, seguridad
social). Tanto así, que ello le valió el reconocimiento como el mayor experto en el
Congreso en materia laboral. Incluso llegó a ser elegido por la Revista Semana
como el Parlamentario del año en 1990.
12 El momento histórico abierto en 1991 se caracterizó por el deterioro de la economía, la continuidad del narcotráfico como protagonista de la vida nacional, y los fracasos en las diferentes negociaciones de paz con las guerrillas. Estos hechos pusieron en entredicho la capacidad de la Constitución de 1991 como pacto de convivencia nacional.
13 La dominación legal en Weber es aquel tipo de dominación que se desprende de la creencia en la legalidad de las leyes establecidas.
38
En este orden de ideas, la retórica de Álvaro Uribe Vélez a través de cuatro
etapas distintas de ejercicio político, da cuenta de un escenario ejemplo de la
gesta de un líder carismático. De este modo, a partir de la clasificación de
conceptos encontrados en varios fragmentos de cada uno de los discursos que
desarrollan tales etapas, el trabajo aquí presentado permitió desarrollar una serie
de análisis, además de referencias precisas anudadas al contexto de cada
alocución. Esto permitió realizar un diagnóstico desde la enmarcación de la visión
del líder. Es decir, a qué estrategia carismática apeló Uribe para enmarcar su
visión plasmándola por medio de su habilidad discursiva. De allí que así pudiese
hacer de su discurso mucho más significativo para sus seguidores. A continuación,
se presentarán los resultados de manera interpretativa desde el framing y el trust
building en clave de liderazgo carismático y de la función retórica del discurso (Ver
anexo 3).
PANORAMA DE TEMAS DISCURSIVOS
Aunque se podría argumentar que los redactores de discursos
profesionales crean la mayoría de los discursos de los políticos, la evidencia
sustancial demuestra lo contrario. Usualmente, los discursos reflejan de manera
directa la personalidad del interlocutor, por lo que mucho de su redacción y
construcción depende de él mismo (House, Spangler, & Woycke, 1991, p. 382).
Como ejemplo de ello, los discursos inaugurales de la mayoría de los presidentes
electos dan cuenta del estilo del líder presidencial. Por ende, el estudio del
contenido retórico de Uribe Vélez en sus discursos también refleja su estilo de
liderazgo.
Así pues, en términos generales uno de los elementos de mayor
preponderancia en cuanto a su estilo de liderazgo, ha sido el fomento de la
transformación de la relación Estado - Sociedad. Para dicho cambio su propuesta
de Estado comunitario fue fundamental. En la retórica uribista el Estado debía ser
eficiente y estar al servicio de los colombianos. Para lograrlo, el expresidente
Uribe se propuso recuperar los desgastados vínculos del ciudadano con las
39
instituciones a través de su mediación personal. La forma de gobierno que el
antioqueño desplegó trajo importantes cambios en la dinámica de la política
nacional. En primer lugar, el haber centralizado en su figura todo el gobierno le
permitió establecer las bases para una participación controlada de los ciudadanos.
Esto, con casi ninguna mediación de los partidos políticos y a través de nuevos
lazos de pertenencia que logró construir entre el ejecutivo y los gobernados. Así,
la mediación de vínculos de patronazgo político, otrora llevada por la vía del
Congreso y los gobiernos locales, fue sustituida por una línea que conectó
directamente al ejecutivo con la sociedad.
En este sentido, los temas que sugieren que Álvaro Uribe Vélez estaba
articulando una visión o una meta idealizada son recurrentes en cada uno de los
discursos analizados. Tal visión se articuló como una vía intermedia entre la
representación política, ejercida a través de los partidos y las instituciones, y la
participación directa de la ciudadanía, lo cual se materializó en los conceptos de
Estado Comunitario y Estado de Opinión. Así, el Estado Comunitario se proyecta
como un
“(…) estado participativo que involucre a la ciudadanía en la
consecución de los fines sociales. Un estado gerencial que invierta con
eficiencia y austeridad los recursos públicos. Y un estado que privilegie la
autonomía regional con transparencia, responsabilidad política y
participación comunitaria” (Herrera, 2005, p. 90).
El Estado de Opinión, por su lado se presenta como:
“(...) equilibrio entre la participación y la representación; no es
manipulación pero sí es coraje para orientar sobre temas de gran
controversia; es respeto a la opinión expresada y derecho para que la
opinión silenciosa se exprese; no es imposición por la fuerza ni
claudicación ante la fuerza contraria; es garantía de la libertad de prensa
y de su contrapeso, que es la libertad del ciudadano y del Gobierno frente
40
a los medios de comunicación; es el seguro de la descentralización, que
en Colombia impide su suplantación” (Toro Londoño & Gómez Hoyos,
2010, p. 29).
De esta manera y apoyándose en la utilización de los medios de
comunicación y la interacción cara a cara, el expresidente comenzó a crear un
imaginario de comunidad. Dicho imaginario reconciliaba a la autoridad estatal –
encarnada en el jefe de Estado– con los ciudadanos, quienes tuvieron la
posibilidad de sentirse parte íntegra del nuevo proyecto de Nación. Estas
transformaciones fortalecieron la tendencia del sistema político colombiano hacía
una institucionalización edificada alrededor de la figura del Presidente. Así, se
consolidó el eje articulador del Estado en Colombia durante este período. Todo
ello, a partir de la proyección de Álvaro Uribe Vélez como figura providencial y
salvadora del país. Por todo lo anterior, en términos de la teoría sociológica de
Weber, Uribe Vélez se posicionó en el colectivo ciudadano obteniendo obediencia
para mandatos específicos. Siguiendo al filósofo alemán, la obediencia aparenta
ser un acto natural por parte de los dominados como resultado de la influencia que
el dominador ejerce sobre ellos. No obstante, es preciso destacar que “(…) para
ejercer la autoridad se hace ineludible legitimar la dominación, a fin de que ésta
pueda ser efectiva” (Weber, 1964, p. 397).
TENDENCIAS PRESENTES EN LOS DISCURSOS
CATEGORÍAS ANALIZADAS NÚMERO DE VECES EN LOS DISCURSOS
PORCENTAJE DE VECES EN LOS DISCURSOS (%)
Proporciona una fuerza para el cambio 40 26,14%
Apela a la historia 12 7,8% Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
11 7,2%
Enfatiza en una identidad colectiva 38 24,8%
Amplifica valores específicos 39 25,4%
Menciona éxitos pasados 8 5,2%
41
Enfatiza en la similitud con los seguidores 5 3,3%
Total 153 100% Fuente: Elaboración propia
En el marco del análisis suscitado, se puede destacar cómo la categoría
“proporciona una fuerza para el cambio” se refiere precisamente a cómo los
líderes carismáticos articulan una meta idealizada. Dicho objetivo promete un
Estado atractivo y que a futuro es valorado por los seguidores. De esta manera, la
visión se define como una serie de metas idealizadas. Estas representan una
perspectiva compartida por los seguidores debido a que comparten características
similares (Boal & Bryson, 1998, pp. 19 - 20). Esto da lugar a la oportunidad de
vincular las necesidades de los seguidores. Además, permite establecer un
estándar de excelencia en la medida que se expresa esperanza y optimismo. De
allí que, sea menester subrayar que esta fue la categoría que más incidencia tuvo
a lo largo del análisis de los discursos del antioqueño. Por tal razón, se ubica
como la tendencia en la retórica uribista, apelando a un continuismo de la visión
en sus diferentes oportunidades de ejercicio político.
No obstante lo anterior, pocas apelaciones a la historia fueron encontradas
en los discursos de Álvaro Uribe con un porcentaje del 7,8%. La importancia de
este tipo de estrategias retoricas reside en que el apelar a eventos pasados les da
a los seguidores un sentido de congruencia y continuidad. Ello, permite hacer un
llamado a las figuras históricas con el objeto de dar sustento a los valores
empleados en el ejercicio retórico14.
Por otro lado, en cuanto al énfasis en la autocapacidad de los seguidores,
se observó que la recurrencia a tal estímulo fue moderada. Solo un 7,2% de los
discursos contenían la suscitada temática. En los apartados discursivos en los que
el expresidente utilizó esta herramienta, lo hizo haciendo apología a la capacidad
de Colombia para enfrentar los enormes problemas que la han aquejado en su
14 Uribe recurrió a Bolívar y a Santander en sus discursos de posesión a la presidencia en 2002 y 2006 respectivamente.
42
desarrollo. “(…) El presupuesto es escaso, muchos los problemas, pero la alegre
espontaneidad de los colombianos, intacta no obstante los padecimientos, y su
carácter, acerado en el yunque de las dificultades, constituyen un invaluable
recurso” (Uribe Vélez, Discurso de posesión presidencial, 2002). El exmandatario
incluso hizo referencia al posicionamiento de Colombia ante la comunidad
internacional, como “(…) una Nación con riqueza en el alma, inteligencia creativa,
capital social, valores comunitarios, disposición de salir adelante” (Uribe Vélez,
2006).
Otra de las categorías que se observó en los discursos y cuyo predominio
fue sorpresivo, fue el énfasis en una identidad colectiva con un 24,8%. En este
sentido, siendo Colombia un país multicultural y diverso en términos de etnias,
cuando Uribe hizo hincapié en una identidad colectiva, se refería a la cooperación
entre los diferentes grupos étnicos para fusionarse en la identidad de un todo
integralmente. En este aspecto, El hoy Senador de la República señaló entonces
que “(…) [l]a globalización puede ser más amable si la entendemos como
resultado de la ciencia y no imposición de la ideología (…)” (Uribe Vélez, Discurso
de posesión presidencial, 2002). Asimismo, hizo hincapié en que “(…) [l]a mejor
manera de reconocer la diversidad es buscando una estructura de poder
compartido (…)” (Uribe Vélez, Discurso posesión Gobernador de Antioquia, 1995).
TIPOS DE VALORES NÚMERO DE MENCIONES IDENTIFICADAS EN CADA
CATEGORÍA
PORCENTAJE TOTAL DE VALORES IDENTIFICADOS
(%) Democracia 10 26,3% Seguridad 9 23,7% Paz 8 21% Respeto 3 7,9% Religión 4 10,5% Familia 4 10,5% Total 38 100% Fuente: Elaboración propia
En la categoría de amplificación de valores, mayoritariamente se destacan
la democracia, la seguridad y la paz, seguida de las apelaciones religiosas y
43
familiares. En general, cuando Uribe amplificaba la paz se refería a la cooperación
intercomunitaria dentro de la sociedad. De igual forma, la mención a la democracia
es continua en la serie retórica analizada con frases como: “(…) [n]uestra devoción
por la democracia” (Uribe Vélez, Discurso de posesión presidencial, 2002) o “(…)
[l]a democracia de nuestra Patria ha sido superior a toda la presión para imponer
el Sí (…)” (Uribe Vélez, Discurso Elecciones Plebiscito por la Paz, 2016).
Igualmente, Uribe Vélez acudió a referencias como “(…) [e]n la democracia de la
participación, la honradez del gobernante ha pasado a la primera línea de
exigencia popular (…)” (Uribe Vélez, Discurso de posesión presidencial, 2006).
Finalmente llegó a exponer que “(…) [l]os cinco elementos de la democracia son:
Seguridad Democrática, libertades públicas, cohesión social, transparencia e
instituciones independientes” (Uribe Vélez, Discurso de posesión presidencial,
2002).
Por último, la mención a éxitos pasados15 y el énfasis a similitudes con los
seguidores fueron mínimas. Independiente a que las menciones al pueblo se
hagan en términos de paridad, no se destaca ningún uso retórico que permita
interpretar la relación entre características personales del mandatario en igualdad
de condiciones con los seguidores. Se observa que Uribe apenas hizo ahínco en
la similitud entre los seguidores y él mismo a través de la revelación de penurias y
dificultades. Para ello, llegó a mencionar aspectos como su origen. “(…)
[P]rovengo de una montaña que me enseñó a quererla a ella para querer
intensamente a Colombia toda. Los míos del cielo, agricultores casi todos, me
emplazan como vigías de la Patria” (Uribe Vélez, Discurso de posesión
presidencial, 2002). Del mismo modo, destacó “(…) [c]omprendo el dolor de las
madres, de los huérfanos y desplazados de la Patria (…)” (Uribe Vélez, Discurso
de posesión presidencial, 2002). De la misma manera, invitó a los colombianos a
“(…) trabajar en la protección de la mujer cabeza de familia, inmensa realidad
derivada de la muerte y de la destrucción de hogares” (Uribe Vélez, Discurso 15 Se interpreta desde la mención a cambios económicos, sociales o progresos en términos de índices medibles en su gobierno.
44
posesión Gobernador de Antioquia, 1995). Por lo anterior, resulta evidente que a
través de esta serie de revelaciones personales Uribe estaba tratando de acortar
la distancia entre él y los seguidores, destacando cómo él aún con su coraza de
líder, no se libró de la pobreza y las dificultades.
Fuente: Elaboración propia
Por otra parte, como se mencionó anteriormente, la articulación de
amenazas en el sistema político colombiano fue un tema común que se encuentra
en muchos de los discursos de Álvaro Uribe Vélez. Las amenazas en el entorno se
definieron operativamente como problemas que amenazan la supervivencia, la
seguridad o el éxito del país. En las porciones de los discursos que se identificaron
amenazas se encontró como tendencia el conflicto armado. Teniendo en cuenta el
contexto de cada una de las emisiones retóricas, el sentido amenazante a la
seguridad individual y colectiva cobró mayor preocupación que tendencias como
las relaciones internacionales en el momento. La mención a la importancia de la
seguridad deriva en la amenaza económica que se presenta en la tabla. Para
Uribe la inversión y el reajuste fiscal depende directamente del equilibrio que debe
garantizar el Estado en términos de minimización del conflicto armado.
En este orden de ideas, las categorías más representativas del discurso del
político antioqueño y las que enmarcan la continuidad retórica en los objetos
16 Se consideran los conceptos “violencia”, “conflicto”, “armas”, “guerra”, “muerte”, “secuestro”, “desplazados”, “terrorismo” 17 Se consideran los conceptos “desigualdad”, “Derechos Humanos”, “huérfanos” 18 Se consideran los conceptos “escasez”, “pobreza”.
TIPOS DE AMENAZAS NÚMERO DE AMENAZAS IDENTIFICADAS EN CADA
CATEGORÍA
PORCENTAJE TOTAL DE AMENAZAS IDENTIFICADAS
(%) Conflicto armado16 18 66,6% Cultural/ Social17 5 18,5% Asuntos Internacionales 0 - Económicas18 4 14,8% Total 27 100%
45
analizados serían: la amplificación de valores específicos, el énfasis en una
identidad colectiva y la proporción de una fuerza para el cambio (Gráfico 1).
GRÁFICO 1
Fuente: Elaboración propia
FASES DEL DISCURSO
De acuerdo con la académica norteamericana Marlena Fiol cada fase de
cambio social requiere tácticas de comunicación específicas para alcanzar los
objetivos especificados de esa fase (Fiol, Harris, & House, 1999, p. 211). Por lo
tanto, cada táctica de comunicación adicional explorada en este estudio se
seleccionó específicamente. Ello, con el fin de corresponder a cómo los líderes
pueden lograr los objetivos específicos de una determinada fase de cambio social.
En este sentido, puede colegirse que Uribe en los discursos analizados empleó
referencias retoricas como las señaladas previamente. Así, expuso justificaciones
morales más que instrumentales o prácticas del control de opinión o de la política
de opinión (no es claro cómo operarían en el nivel formal). De igual forma,
presentó la superación de la pobreza y la construcción de equidad como fines a
Amplificación de
valores específicos
Énfasis en una
identidad colectiva
Continuidad retórica
en el discurso
carismático
Proporción de una
fuerza para el cambio
46
largo plazo, más que como metas próximas. Asimismo, apuntó a la relevancia de
los seguidores del Estado Comunitario y del Estado de opinión como individuos y
como colectividad. De esta manera, manifestó la importancia de la identidad
colectiva y desplegó referencias a un pasado histórico sobre el que se asienta la
figura del Estado de Opinión. En suma, la alusión a tales referencias presenta a
Uribe como un líder carismático y comprometido que comparte preocupaciones y
objetivos comunes a cualquier ciudadano.
Cabe destacar que para abordar la estructura del mensaje Uribe recurrió a
algunas metáforas que apelaban sobre todo a la emocionalidad de su audiencia.
Por ejemplo, habló de “crear motivaciones en el alma de los compatriotas”
mediante el fomento de la confianza. Ello, para que la ciudadanía tuviera una
visión de largo plazo frente a su gobierno y procurara su continuidad. También,
indicó que el Estado de opinión constituía “la muralla que atajaba el
desbordamiento de cualquier poder”, y evaluó el diálogo con la ciudadanía (sus
“compatriotas”).
De igual manera, cabe precisar que el expresidente Uribe en la fase uno19
derogó la convención social negando el deseo de las personas de mantener el
statu quo. En la fase dos20 fomentó el deseo de las personas a no ser parte de una
convención social fracturada. Por último, en la fase tres21 sustituyó el miedo a no
cambiar la vieja convención por un deseo de innovación. Dentro de las principales
herramientas a las que acudió Uribe se encuentran (1) la idea de que el
surgimiento del Estado de opinión le devolvió al “pueblo” colombiano el control
sobre la democracia. Además, el antioqueño fue capaz de orientar a sus
seguidores en temas de controversia y de prevalecer ante decisiones legales
injustas. De la misma forma, Uribe Vélez recurrió al método de (2) infundir en el
imaginario del electorado, la idea propicia de que la extensión del Estado
19 Intentar reducir el valor que las personas asignan a la convención social actual. 20 Intentar mover el estado neutral de las personas 21 Utilizar el realineamiento de marcos para convencer a los seguidores de que respalden su nueva visión.
47
Comunitario en el largo plazo era necesaria para aumentar el margen de
participación ciudadana. De esta forma se permitía la garantía de la seguridad,
inversión y cohesión social en pro de la confianza que necesitaba el gobierno para
seguir en el poder.
A partir de todo lo planteado en términos teóricos y del frame analysis
adelantado, la siguiente sección plasma algunas conclusiones relevantes en torno
al estilo y la práctica política de Álvaro Uribe Vélez a lo largo de sus periodos de
gobierno.
48
VI. “Y todas las deficiencias les suplico ponerlas en el pasivo de esta carnita y estos huesitos que lo único que tienen es infinito amor por
Colombia” Álvaro Uribe Vélez (Balance de Gobierno Colombia 2002 – 2010
Conclusiones
49
Las habilidades y rasgos personales constituyen el pilar clave del estilo de
liderazgo. Todo ello se manifiesta en la capacidad del líder para influenciar a sus
seguidores. De allí, que luego de realizado el análisis planteado en las páginas
que preceden estas conclusiones, se hayan obtenido resultados que dan cuenta
precisa de cómo funciona el fenómeno del liderazgo carismático. En este sentido,
a partir de una profundización empírica, este trabajo permitió examinar la medida
en la que el expresidente Álvaro Uribe Vélez utilizó herramientas esenciales como
la retórica. De este modo, al recurrir a este tipo de estrategias el político
antioqueño logró consumar dos objetivos principales como lo son la alineación de
marcos y la construcción de confianza en el electorado.
Por lo anterior, teniendo en cuenta lo expuesto en este texto Uribe Vélez
encuadra en el prototipo de líder carismático a plenitud. Como ejemplo de ello, el
examen aquí desarrollado expuso cómo los líderes carismáticos parecen
proporcionar una fuerza para el cambio, apelan a la historia, enfatizan en la
autoeficacia de los seguidores y a su vez en una identidad colectiva. Por todo ello,
Uribe Vélez se posicionó como una fuerza para el cambio identificando y
articulando las amenazas a través de la política de la seguridad democrática.
Del mismo modo, la utilización de las estrategias retoricas recurrentes que
aparecieron en la mayoría de los discursos analizados, antecedieron la gesta del
liderazgo carismático que hoy caracteriza al expresidente. Algunas como la
amplificación de valores específicos, el énfasis de la identidad colectiva y la
proporción de una fuerza para el cambio resultaron determinantes para el ascenso
de la figura política del antioqueño. Sin embargo, el resto de las proposiciones no
fueron bien respaldadas en las alocuciones22.
La articulación del discurso del expresidente en el escenario público se
tradujo en el Estado Comunitario. En este contexto se diseñó y ejecutó una política 22 Los líderes carismáticos implican el autoconcepto de los seguidores al referirse a su historia común, también motivan a sus seguidores comunicando las expectativas de alto rendimiento de los seguidores y expresan una gran confianza en la capacidad de los seguidores para alcanzar el objetivo (Fiol, Harris, & House, 1999, pág. 464).
50
de seguridad –considerada válida debido a la defensa de principios democráticos–
y que estuvo acompañada de una serie de reformas para generar confianza
inversionista y cohesión social. Asimismo, se hizo de la participación ciudadana –
en todas las fases de la toma de decisiones públicas especialmente en la de
control– la base de la confianza ciudadana, la credibilidad y la sostenibilidad del
gobierno. Así pues, una vez estas ideas fueron interiorizadas por la opinión pública
gracias a la “corajuda” orientación del gobierno, surgió un Estado de opinión que
con el tiempo demandaría la continuidad de su Plan de Gobierno a través de una
política de opinión.
En este orden de ideas, es posible concluir que aunque no se reconozca
abiertamente, el gobierno del expresidente Álvaro Uribe Vélez apeló de manera
directa a la creación de estrategias de comunicación política para establecer y
mantener relaciones de mutua dependencia con los gobernados. De este modo, el
ex presidente y sus asesores fueron conscientes de la relevancia de los nexos
comunicativos y procuraron generar mecanismos para interactuar con la
ciudadanía (Gómez Giraldo, 2005, p. 8). Uribe como líder encarnó una demanda
social considerada hegemónica frente a otras demandas particulares. De igual
modo, agrupó en torno a sí a una ciudadanía heterogénea, unificándola frente a lo
que se consideraba un “enemigo único” (Carrillo Cruz, 2010, p. 38)23.
De lo anterior, es posible decantar una serie de proposiciones que derivan
del análisis y el diagnóstico preciso de cada uno de los conceptos resaltados en
los discursos del expresidente. En este sentido, siguiendo los presupuestos
teóricos en los que este trabajo se ha basado, Uribe Vélez se caracteriza como un
líder carismático pues también logró identificar y articular las amenazas serias que
enfrentan los seguidores (Tan & Wee, 2002, pp. 325 - 326). Ello, con el objetivo de 23 “Los enemigos políticos pueden ser países extranjeros, creyentes en ideologías desagradables, grupos que son diferentes en algún aspecto, o ficciones de la imaginación; en todo caso, constituyen una parte intrínseca de la escena política. Ellos ayudan a dar al espectáculo político su poder de provocar pasiones, miedos y esperanzas” (Edelman, 1991, p. 78).
51
aumentar su conciencia hacia un objetivo idealizado como lo era el desarrollo de
su política pública de seguridad, lo que prometía un futuro atractivo para los
ciudadanos. Por ende, en cada uno de los discursos referenciados se puede
observar por lo menos tres menciones a las amenazas serias congruentes con el
contexto nacional. De allí el énfasis constante en la seguridad, a la cual se
vinculan las demandas económicas, internacionales y de servicios públicos tales
como salud y educación. En suma, el objetivo idealizado desde el discurso del año
2002 hasta el 2016 claramente era el propósito de la seguridad democrática. Sin
embargo, éste estuvo precedido por su etapa como Gobernador de Antioquia y su
concentración retórica en la visibilización de la relación entre la paz y la seguridad.
Igualmente, los líderes carismáticos alinean la identidad y los valores de los
seguidores con los objetivos articulados. Esto, a través de la enfatización de la
necesidad de una identidad colectiva y la amplificación de los valores específicos
que profesan sus seguidores. Estos elementos fueron verificables en el análisis de
discurso del político antioqueño, pues el patrón de repetición fue más intenso que
los demás. En este sentido, es importante tener en cuenta que Uribe materializó el
principio de escenificación o representación en torno a su figura personal,
presentándose como un hombre providencial y regenerador del orden social. Así,
concentró la posible solución a las problemáticas colombianas en sus manos
(Patiño Aristizábal & Cardona Restrepo, El neopopulismo: una aproximación al
caso colombiano y venezolano, 2009, p. 168). Nuevamente, tal posición podía
contribuir al unanimismo político y dejaba de lado otras instancias de la
representación política institucionalizada. De este modo, el expresidente puso las
relaciones Ejecutivo - sociedad por encima de los vínculos Estado - sociedad
(Osorio Villegas, 2007, p. 63).
Lo anterior, se sustentó a partir de cómo quedaban las instituciones locales
y parlamentarias si las decisiones que antes les correspondía tomar, ahora
estaban casi enteramente en manos del gobierno central, en términos formales.
De la misma manera, los líderes carismáticos como Álvaro Uribe Vélez se refieren
52
a éxitos pasados (reales o percibidos) para ganarse la confianza de sus
seguidores. De este modo, señalan similitudes entre los antecedentes históricos,
sus seguidores y su experiencia como líder a través de los discursos.
Por otra parte, la idealización del Estado Comunitario buscaba crear
empatía y construir carisma, empleando los Consejos Comunales como estrategia
para mantener el liderazgo. Se trataba de forjar y sostener en el imaginario
colectivo la idea de un líder cercano a sus compatriotas aprovechando la existente
desconfianza hacia otras instituciones formales. Así, no era el Estado de opinión lo
que estaba por encima del Estado de Derecho, sino el proyecto político de Uribe
en sí mismo. A la larga, era su gobierno el que se había encargado de enseñarles
a las comunidades el camino positivo de la Nación como proyección política.
Asimismo, cabe resaltar que en materia teórica el trabajo desarrollado a
través de este texto, puede contribuir a ampliar la teoría del liderazgo carismático.
Esto, por medio de un análisis profundo del "mensaje" del comportamiento retórico
y el encuadre de conceptos del framing y el trust building. Esta extensión teórica
resulta de suma importancia ya que implica que los líderes carismáticos no ganan
el apoyo de los seguidores simplemente a través de la elocuencia fluida, sino
también a través de la creación de significado. Por consiguiente, la integración del
liderazgo carismático y la confianza a través del presente estudio, constituye un
importante aporte a los desarrollos académicos sobre este tipo de liderazgo y la
comunicación política. En este escenario, aunque muchos académicos e
investigadores han identificado la importancia de la confianza en el liderazgo
carismático, se ha dado poca extensión teórica al desarrollo de la literatura en esta
dirección.
También, resulta necesario subrayar que las implicaciones prácticas del
análisis aquí elaborado pertenecen principalmente al entrenamiento de liderazgo.
Aunque las principales teorías del carisma pueden caracterizarse como
descriptivas por naturaleza, comparten la premisa subyacente de que el carisma
es entrenable. El carisma puede condicionarse entonces a diferentes contextos,
53
así como también a escenarios geográficos, políticos o empresariales
contrapuestos. Por ejemplo, los líderes de las grandes empresas que abarcan
restricciones geográficas no suelen ser capaces de ejercer el liderazgo a través de
encuentros cara a cara tradicionales o supervisión directa (House, Spangler, &
Woycke, 1991, p. 379). Sin embargo, a través del uso de la retórica y la
tecnología, los líderes carismáticos pueden infundir actividades organizacionales
aparentemente desconectadas con valores compartidos y un sentido de propósito
unificado. De este modo proporcionan una identidad común a miembros altamente
dispersos y así terminan vinculándolos a la misión de la organización.
Anudado a lo anterior, son varios los estudios que han demostrado que los
líderes que son percibidos como carismáticos reciben percepciones de
desempeño más altas. Además, son vistos como líderes más efectivos y tienen
seguidores más motivados y satisfechos que otros líderes en puestos de liderazgo
similares. Por lo tanto, para que la visión comunicada en el discurso pueda crear
efectos más duraderos, el contenido es tan importante como la composición y la
entrega del discurso. Con esto en mente, el conjunto de proposiciones
desarrolladas en este texto, puede usarse para ayudar a los líderes a preparar
discursos que sean más efectivos y cruciales para cambiar sus sistemas de
creencias.
Ahora bien, como reflexión final es menester hacer una apología al carisma.
El carisma en el mundo actual puede revestir formas del pasado. Sin embargo, es
ubicuo, multidimensional y poliédrico. La televisión y la utilización de Internet han
influido en ello. Además de los elementos expuestos en este escrito, existe otro
elemento importante: la identidad. El liderazgo debe vivirse como algo propio. El
líder político, además de ser una personalidad cotidiana a través de su aparición
en los medios de comunicación, se convierte en el prototipo de la sociedad que
representa. Se produce una mimesis, una tendencia a identificarse con el líder
político. El sentimiento patriótico y de identidad es una fuente del carisma.
En suma, el carisma es un elemento universal común a todas las
54
sociedades. Desde el chamán o el guía espiritual de las sociedades simples hasta
el político moderno. Proviene de elementos mágicos, religiosos y políticos de la
sociedad y del saber. A medida que nos acercamos al occidente actual, si bien el
proceso de secularización de la religión y el ritual tienden a desaparecer y a
practicarse en menor medida, el carisma permanece y simplemente se transforma
como consecuencia de los cambios sociales. Es decir, la secularización no ha
afectado su existencia, simplemente lo ha transformado. Es más, los residuos de
religiosidad y de trascendencia que encontramos en nuestras sociedades vienen
marcadas por el elemento carismático que participa de la religión civil.
En este sentido, el líder político puede llegar a encarnar los valores de
divinidad y de mito, todo ello de la mano del elemento emotivo. Las palabras del
líder político pueden llevar a la catarsis colectiva mediante una interconexión de la
retórica, las emociones, los sentimientos y el pensamiento colectivo (Deusdad,
2003, p. 25). El carisma está rodeado del elemento místico. El líder político se
convierte en un símbolo que al igual que el Mesías se sigue, se respeta y se
alaba, debido a que es un garante de la salvación terrenal. A la vez, el líder
político tiene la capacidad de apaciguar las multitudes, de frenar su desenfreno y
de conseguir un cierto consenso público que canaliza y sublima las pasiones. El
carisma es una forma de reordenar la sociedad, de conseguir la implicación de la
ciudadanía.
No obstante, el carisma es también ambivalente. Al igual que el líder político
puede tranquilizar las multitudes con sus actos, a la vez la puede exacerbar. Si por
un lado, puede ser un elemento integrador y de cohesión social que puede incluso
fomentar la integración del tejido social, existe también un lado oscuro del carisma
que lo hace peligroso. Sobre todo, cuando dicha característica es puesta al
servicio de ideas irracionales e inhumanas.
En las democracias occidentales, la racionalización se manifiesta tanto por
lo que respecta a los razonamientos de los electores como por las políticas más
racionales tomadas por los líderes democráticos. Al líder político se lo considera
55
un líder apto y se lo acepta como representante; sin la aceptación y la confianza
no se convertiría en un líder. En este sentido, el carisma termina por convertirse
en un ápice indiscutible para legitimar al líder, incluso entre aquellos sectores
sociales más extremos en ideas y posicionamientos.
Finalmente, la conclusión más precisa a la que las observaciones
plasmadas en este texto podrían llegar, es que el fomentar la creación de carisma
será una herramienta necesaria para el fortalecimiento de aquellos liderazgos
políticos débiles. En otras palabras, “(…) la manufactura del carisma puede
convertirse en un mecanismo para legitimar aquellos liderazgos políticos que
demuestran una cierta incapacidad y dificultad de adaptabilidad ante las distintas
situaciones (…)” (Deusdad, 2003, p. 24).
56
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64
VIII. ANEXOS
ANEXO 1: CONFIANZA EN EL CONGRESO Y EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS EN
COLOMBIA DE 1996 A 2017
Fuente: Latinobarómetro
65
Fuente: Latinobarómetro
66
ANEXO 2: CONFIANZA EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS EN COLOMBIA
ANEXO 3: ANÁLISIS DE DISCURSOS
DISCURSO DE POSESIÓN GOBERNACIÓN 1995
CONCEPTOS ANÁLISIS/ REFERENCIA CONTEXTO DIAGNÓSTICO
(Framing) (…) ante Dios y ante ustedes he jurado conducir los destinos de Antioquia con observancia de la Constitución
Referencia religiosa sustentada en la idiosincrasia paisa sobre las prácticas católicas de la región.
A partir de la posesión como Gobernador de Antioquia en 1995, Uribe Vélez formula las líneas de su política prioritaria, con una mínima estructura teórica: seguridad combatiendo la delincuencia apoyado en la
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
67
confianza de los ciudadanos en las instituciones judiciales, militares y de policía. “Ni pasividad ni violación de derechos humanos”, fue su consigna en ese campo, lo que mostró desde el inicio la tensión entre seguridad y derechos humanos que ha estado presente en la ejecución de las ideas de seguridad del uribismo. Es importante resaltar que en ese momento el Alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, aplicaba la receta de la “tolerancia cero”, que luego con las llamadas políticas de mano dura fuera implementada en países de Centro América y en Brasil.
Este pueblo campesino, industrial, arriero, minero, comerciante, recibió siempre de
Los paisas culturalmente son conocidos como personas trabajadoras.
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Enfatiza en la autocapacidad de sus
68
sus mayores la lección del amor al trabajo (…)
seguidores
Paisa como la epopeya de la industrialización en la montaña
Referencia metafórica a la geografía del departamento de Antioquia
• Enfatiza en una identidad colectiva
Invito a mis paisanos que trabajemos en la recuperación de valores de familia
• Amplifica valores específicos
Invito a mis paisanos a trabajar en la protección de la mujer cabeza de familia, inmensa realidad derivada de la muerte y de la destrucción de hogares.
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Amplifica valores específicos
Invito a mis paisanos a trabajar por el pacto social
La justicia social está forjada con un sentido igualitarista, que concilia grandes diferencias económicas y sociales.
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
(…) el juramento me impone el deber de luchar por la paz y la seguridad
La erradicación de la delincuencia de mano de las leyes constitucionales y defendiendo a los DDHH era imprescindible para el nuevo gobierno antioqueño.
• Proporciona una fuerza para el cambio
69
Reconociendo que era necesario reconciliar aquel recelo que había con las autoridades (jueces, militares y policías).
Ni pasividad ni violación de DDHH
“Tenemos que romper el circulo vicioso entre la autoridad que por temor no actúa y aquella que cree ser eficaz desde la tortura”.
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
El Estado Social de Derecho demanda firmeza de la autoridad
La referencia al Estado Social de Derecho es clave después de los argumentos dados en la constitución del 91 por Uribe, legitimando las acciones de lo que vendría 24 como política de seguridad y salvaguardar la necesidad de la paz en términos de defensa guerrillera.
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
24 Frente al tema de seguridad tenía claro desde entonces que la tarea del orden público se debía encarar con una sólida autoridad. El hecho de mayor renombre y controversia al respecto fue la defensa e implantación que junto con su secretario de gobierno, Pedro Juan Moreno, hizo de las CONVIVIR como parte de la lucha por restablecer el orden público. Con respecto a este tema, en entrevista realizada tras la finalización de su mandato en Antioquia, defendió la necesidad de “un ejercicio eficaz de la autoridad” para la búsqueda de la paz.
70
Nuestra época ha asistido con positivismo asombro a acuerdos de Paz (…)
Se insiste, como solución a la guerra la autorización desde la comisión internacional para explorar los caminos posibles para el acuerdo con los violentos en términos de guerra.
• Amplifica valores específicos
• Apela a la historia
• Proporciona una fuerza para el cambio
El esfuerzo de capital y tecnología se ve privado a nuestros jóvenes por el estigma del narcotráfico y la violencia
El problema de educación estructural debe avanzar en términos de temporalidad comparada con 1928.
• Enfatiza en una identidad colectiva
La reorientación financiera del Metro no puede reducirse a la necesidad de valorización.
Es necesario utilizar el restante de recursos en la financiación de la obra y que los restantes vayan en materia de educación aumentando la cobertura y la calidad.
• Proporciona una fuerza para el cambio
Somos un pueblo en definitiva con ejemplo.
Después de mencionar una serie de personajes significativos en la idiosincrasia paisa, Uribe hace un llamado de reconocimiento a los mismos en términos de
• Enfatiza similitud con los seguidores
• Proporciona una fuerza para el cambio
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Apela a la historia
71
recobrar el ejemplo de “los mayores”
• Menciona éxito pasado
La mejor manera de reconocer la diversidad es buscando una estructura de poder compartido (…)
La referencia es a la receptividad de la crítica, llegando a acuerdos sin detener el ritmo de trabajo.
• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
• Proporciona una fuerza para el cambio
(…) las dificultades del poder son desbordarlo en perjuicio de la democracia y no ejercerlo por temor a la tiranía
Se argumenta una necesidad de equilibrio para ejercer el poder. En un Estado de Derecho el poder está subordinado a la ley, acertando en la aplicación de los principios del gobierno de opinión, respetando las formas de participación ciudadana.
• Proporciona una fuerza para el cambio
• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores.
En la democracia de la participación, la honradez del gobernante ha pasado a la primera línea de exigencia popular.
La única garantía que hace respetable el inicio del poder es la honradez del gobernante, lo anterior viene consolidado desde la configuración del papel de la participación desde la nueva Constitución.
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
Vengo de una batalla pública
Refiriéndose a los cargos
• Menciona éxitos pasados
72
plena de deseos de transformar (…)
públicos que tuvo anteriormente.
“Las grandes energías del hombre las desatan el amor, la fe y el poder (…) el amor y el poder llevan a al felicidad y el poder a la desgracia”
Cita a Karl Loewenstein, filósofo y constitucionalista alemán.
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
Bolívar, discurre entre el recuerdo de los tiempos felices por el amor y la fe y el dolor y la amargura por los resultados del poder.
Para aterrizar el discurso a algo más nacional, la cita a Bolívar se sobreentiende como una referencia analógica con la del poder de Loewenstein.
• Amplifica valores específicos
• Proporciona • una fuerza
para el cambio • Apela a la
historia
Soy consciente también que debo ejercer la autoridad sin apego a la codicia del poder.
Desvincularse de la palabra poder es importante para mantener una línea de referencia horizontal con los electores.
• Amplía valores específicos
• Enfatiza en la autocapaciad de sus seguidores
Con nostalgia por los que desde la eternidad presiden esta ceremonia (…) el consejo de mi madre en la apelación a la cosntancia (…)
Termina el discurso apelando a términos abstractos pero concretos ofreciendo su elección al pueblo.
• Amplifica valores específicos
DISCURSO DE POSESIÓN PRESIDENCIA 2002
CONCEPTOS ANÁLISIS/ REFERENCIA
CONTEXTO
DIAGNÓSTICO (Framing)
Autoridad “Desde el Con el movimiento • Amplifica
73
democrática, libertad y justicia social
Gobierno emprendimos una serie de acciones basadas en unos principios de largo plazo, simples pero profundos, en los que persistimos para grabarlos en el corazón de las mayorías populares, con el fin de jalonar la marcha del país”. El objetivo fue lograr confianza en Colombia, basada en tres pilares: la seguridad desde la democracia, la confianza inversionista desde la responsabilidad social y la cohesión social desde las libertades. Todo esto tiene una relación vertical de abajo arriba, de arriba abajo; y una relación horizontal, de mutuas y transitivas dependencias.
Primero Colombia 25 , Uribe estructuró un discurso que, fundamentado en la lucha contra la corrupción del sistema político y los problemas de orden público, le permitió ganar seguidores a su causa y avanzar hacia la presidencia en 2002. Visto desde una perspectiva weberiana, Uribe obtuvo el reconocimiento de sus seguidores gracias al uso de un discurso mesiánico y a la constante exhibición de sus cualidades “extraordinarias” para enfrentar adecuadamente los problemas colombianos, cualidades excepcionales que había demostrado en su paso por la Gobernación de Antioquia. Tanto su Manifiesto Democrático como su Plan de Desarrollo “Hacia un Estado comunitario” articularon su postura antiestablecimiento al hacer de la clase política tradicional el nuevo enemigo. Una reflexión más detenida sobre este punto permite observar que este proyecto no logró materializarse plenamente debido al fracaso de los medios usados para tal fin (el
• valores específicos
25 Cuya victoria electoral contó con 5.892.000 que representan un 54% de participación en las urnas.
74
Bolívar y Santander prefiguran nuestra identidad política como Nación
La referencia va precisamente con la idea de orden y autoridad adjuntado a la seguridad y las libertades propias de cada uno de los personajes mencionados, el binomio ético-político sostiene la continuidad histórica de la Nación “y le otorga sentido a la institucionalidad”. “Para reposo del Libertador recuperemos el orden, que unifique esta Nueva Granada disgregada hoy en repúblicas de facto de organizaciones violentas”.
• Apela a la historia
(…) convoco a los colombianos y colombianas a retomar el lazo unificador de la ley
“(…), la autoridad democrática, la libertad y la justicia social, extraviado en momentos desapacibles de la historia”. Hace referencia a la necesidad de unificarse como ciudadanos para poder entender la
75
paz como un todo retomando el diálogo entre las intenciones de los fundadores de la Patria conocidos históricamente.
Cada uno desconfía del vecino y en especial del Estado.
La recurrente tasa de desfavorabilidad y de aprobación de los Gobiernos pasados derivan en el decrecimiento de las actitudes colectivas en términos de confianza y solidaridad con el otro, a lo que se llama Capital Social. “Su razón de ser la explica la violencia destructora, la politiquería y la corrupción, que concurren a la incertidumbre, la miseria y la desigualdad”.
• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
Cada secuestro es sufrimiento, fuga de capitales y desempleo.
“La Patria confronta un cuadro serio de dificultades”. En la miseria viven 9 millones de ciudadanos, el 57% se ubica en la línea de pobreza, además del 16% de
• Enfatiza en una identidad colectiva
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desempleo hay 6.5 millones de subempleados, el déficit total supera el 3% del Producto Interno Bruto, la capacidad de pago de la deuda pública está saturada. Si tuviéramos la tasa de homicidios de Inglaterra habría 200 cada año. Uno es muy grave, 200 también, pero padecemos 34.000. Entre 3.000 y 3.600 secuestros que se denuncian, constituyen el 60% de este delito en el mundo.
Este es mi deber frente al derecho de los jóvenes y de quienes habrán de venir.
La alusión hacia el futuro es importante pues juega con los imaginarios de ilusión e colectividad que pretende unificar las consideraciones preferentes en términos de representación. “Es mi obligación de honor con el
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80% de nuestros compatriotas que vive aún en el despertar de su juventud y requiere que acertemos para que brote su ilusión”.
El crecimiento es el mejor ajuste fiscal y la única fuente perdurable de ingresos del Estado
“Los más pudientes, los empresarios que con tenacidad sirven bien a la Nación, llevarán sobre sus hombros nuevas responsabilidades tributarias. Los esfuerzos de los sectores medios y populares deben retribuirse en mayor inversión social para frenar la renovación de su prolongado purgatorio”. El uribismo afirma que el Estado Comunitario debe construir ciudadanía para hacer el tránsito de masa amorfa a pueblo cohesionado con solidaridad. Se formula como la antípoda de la corrupción, el clientelismo y la politiquería, y su
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propuesta lleva explícita una reducción considerable de la estructura y un ajuste fiscal del Estado. Pero también el Estado comunitario es mostrado teóricamente como la contra cara del abandono neoliberal de lo social a la suerte del mercado. “La economía andina requiere más voluntad y resultados (…)Avancemos hacía la armonía en tasa de cambio competitiva, baja inflación, endeudamiento prudente y equilibrio fiscal”.
En medio de la escasez crítica de recursos impulsaremos las 7 herramientas de construcción de equidad expuestas en el Manifiesto
(La revolución educativa, la ampliación de la seguridad social, el impulso a la economía solidaria, el manejo social del campo, de los servicios públicos, el apoyo a la pequeña y mediana empresa
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• Amplifica valores específicos
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para tener un País de propietarios, y la calidad de vida urbana). La identidad discursiva de Álvaro Uribe Vélez está estrechamente ligada a su propuesta de seguridad, que se ha presentado como un asunto auténticamente uribista. José Obdulio Gaviria, uno de los hombres más importantes del uribismo, citando a John Rawls, tomará esa legitimidad del Estado Colombiano como el elemento fundamental que soporta la política de seguridad democrática. Tomas Hobbes también será inspirador de Gaviria en su argumentación del orden, la seguridad y la libertad como componentes de la Política de
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Seguridad Democrática.
No es posible estabilidad económica sin estabilidad social.
El Estado tiene que ser promotor del desarrollo, garante de la equidad social y dispensador del orden público. No puede ser obstructor de la iniciativa privada, ni estar ausente frente a los reclamos sociales. “Nuestro Estado Comunitario buscará que los recursos y las acciones lleguen al pueblo, con transparencia, mediante creciente participación popular en la ejecución y vigilancia de las tareas públicas” Junto a la Política de Seguridad Democrática, el Estado Comunitario es otro pilar del uribismo. Aunque no sea tan comentado, atraviesa todo su discurso, sus
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programas y sus políticas públicas como un asunto auténticamente uribista, pese a que no lo es del todo. La gestión administrativa del Estado y el ejercicio del poder ejecutivo se conciben y desarrollan por el uribismo sobre las bases de su propuesta de Estado Comunitario.
La independencia frente al Ejecutivo no requiere Parlamento de gran tamaño sino que la opinión lo observe y controle.
En síntesis, la propuesta del Estado comunitario que se presenta como una nueva visión de la gestión pública contra la corrupción y el clientelismo se concreta en un Estado promotor, subsidiario y corrector de la iniciativa privada, que implica reducción drástica del Estado, ajuste fiscal, eficiencia y austeridad en el gasto público. “No podemos luchar contra el clientelismo si
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• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
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practicamos el clientelismo”.
La Nación entera clama por reposo y seguridad.
“Nuestro concepto de seguridad democrática demanda aplicarnos a buscar la protección eficaz de los ciudadanos con independencia de su credo político o nivel de riqueza”. Para el uribismo el centro de la dinámica o de cambio en la sociedad es "la seguridad como valor fundante", es decir, a partir del concepto de seguridad democrática el Estado existe y todo se reduce a la política de seguridad.
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Amplifica valores específicos
Comprendo el dolor de las madres, de los huérfanos y desplazados de la Patria (…)
Para el uribismo recuperar la seguridad democrática es el primer requisito para generar la confianza que permita recuperar el capital social y
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reconstruir la ciudadanía. Sin seguridad no habrá inversión social. En fin, sin seguridad no habrá futuro ni país creíble.
Apoyaré con afecto a las Fuerzas Armadas de la Nación y estimularemos que millones de ciudadanos concurran a asistirlas.
“Ello aumenta nuestra obligación con los derechos humanos, cuyo respeto es lo único que conduce a encontrar la seguridad y por su conducto la reconciliación”. El valor que Uribe Vélez le da a la seguridad se explica en su convencimiento de que la violencia es la causa principal de la pobreza y de la desigualdad, y que el atraso económico no es resultado de determinada ideología sino de esa violencia histórica colombiana. “Cuando un Estado democrático es
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• Amplía valores específicos
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eficaz en sus garantías, así los logros sean progresivos, la violencia en su contra es terrorismo”.
La democracia es el único camino para la emulación de las ideas.
El objetivo general de la política (de defensa y seguridad democrática) fue la de reforzar y garantizar el Estado de derecho en todo el territorio, mediante el fortalecimiento de la autoridad democrática (instituciones, imperio de la ley y participación ciudadana), y con el propósito de proteger a todos los ciudadanos y a la democracia. “La democracia es nuestra oferta para que los fusiles sean sustituidos por la política y la seguridad democrática el instrumento para que se haga política sin armas y con el derecho
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
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de no ser asesinado”.
Paz definitiva “(…)exploraremos soluciones humanitarias, que liberen secuestrados, que se den a partir de acuerdos que vislumbren la paz definitiva como algo posible”.
• Amplifica valores específicos
Queremos la paz, no el apaciguamiento que se origina en el diálogo insincero
“El mundo debe entender que este conflicto necesita soluciones no convencionales, transparentes, imaginativas”.
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
Provengo de una montaña que me enseñó a quererla a ella para querer intensamente a Colombia toda. Los míos del cielo, agricultores casi todos, me emplazan como vigías de la Patria.
Referencia a sus orígenes campesinos.
• Enfatiza la similitud con los seguidores
• Amplifica valores específicos
La esposa y dos estudiantes constituyen mi dulce retaguardia.
Se referencia el valor de la familia en esta fracción del discurso. La muerte de su padre Álvaro Uribe Sierra delineó su
• Enfatiza la similitud con los seguidores
• Apela a la historia
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carrera, quien afirma que ese dolor se transformó en un auto-compromiso con el dolor que muchos colombianos han sufrido por la violencia nacional, dedicando toda su vida a esta causa, “La nuestra es una tragedia personal y un problema nacional”26
El presupuesto es escaso, muchos los problemas, pero la alegre espontaneidad de los colombianos, intacta no obstante los padecimientos, y su carácter, acerado en el yunque de las dificultades, constituyen invaluable recurso.
Referencia a los electores.
• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
Que el amor por esta Patria sea la llama a través de la
Referencia religiosa.
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en 26 Álvaro Uribe Vélez. No hay causa perdida. (New York: Celebra. 2012), 30.
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cual Nuestro Señor y la Santísima Virgen me iluminen para acertar.
una identidad colectiva
DISCURSO DE POSESIÓN PRESIDENCIA 2006
CONCEPTOS ANÁLISIS/ REFERENCIA CONTEXTO DIAGNÓSTICO
(Framing) Cumplimiento de la Constitución
La idea general es honrar la democracia y rendir tributo a la ley como su principio regulador.
Los intentos de institucionalización del mandato carismático del presidente Uribe se materializaron en su propuesta de reelección, y en su posterior triunfo en esta. Sin embargo, y al igual que lo predicho en la teoría weberiana, dicha institucionalización comenzó a tambalear en su segundo período presidencial. La persistencia de condiciones sociales adversas para la población colombiana; la continuación de la guerra interna; y la socialización en el debate público de los posibles nexos entre el expresidente y parte importante de su equipo con
• Enfatiza en una identidad colectiva
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los paramilitares27, desmejoraron la imagen carismática de Álvaro Uribe Vélez, y la legitimidad de su dominio, es decir, disminuyeron el reconocimiento de sus cualidades excepcionales, y por ende su legitimidad como líder, obligando al expresidente a reinventar su imagen providencial a través del endurecimiento de su discurso. En el 2006, Uribe fue reelegido por un porcentaje que superó el 60% con el movimiento Primero Colombia. La reelección fue aprobada en el 2005 por el Congreso y se declaró constitucional en octubre del mismo año.
27 Este episodio ha sido denominado en Colombia como el escándalo de la “parapolítica”. Información sobre la confluencia que se dio entre paramilitares y políticos, y su injerencia en la política nacional, especialmente a partir de la elección de Uribe, se encuentra en la investigación realizada por la Corporación Arco Iris: “Paramilitares y políticos”, en Arcanos, No. 13, marzo, Bogotá, Fundación Arco Iris, 2007.
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La democracia es mucho más que el triunfo accidental de una mayoría
(o el respeto a las minorías coyunturales) “La democracia es el derecho del pueblo que demanda el equilibrio en los órganos de poder, entre ellos y en sus relaciones con el ciudadano; equilibrio en el Congreso, en la relación entre bancadas y con el pueblo; equilibrio en la justicia, en el ejercicio de su autonomía, entre equidad y severidad; equilibrio entre protagonistas de ideas encontradas para hallar la síntesis como alternativa al antagonismo insuperable; equilibrio en cada individuo para reciprocar las libertades con el cumplimiento del deber, sin necesidad de coacción oficial; equilibrio entre seguridad y paz, en un marco de firmeza, persistencia, serenidad y generosidad”. La referencia da cuenta de la Unidad
En campaña Uribe siguió haciendo énfasis en los puntos centrales de su gobierno anterior, tales como la continuidad de la seguridad democrática - aunque con la posibilidad de sostener diálogos con los grupos armados-, la lucha contra la corrupción, el TLC entre otros.
Además de esta campaña, centrada en la continuidad de sus políticas, Uribe se movía en una línea política de carácter más tradicional, que buscaba establecer alianzas con todo tipo de políticos para formar varias confederaciones de grupos que llegarían al Congreso a apoyar la gestión del gobierno. Este cambio de estilo
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de la nación en su diversidad, dejando de lado las divisiones que nutren el conflicto.
respondía a la nueva normatividad electoral y el régimen político de la ley de bancadas, que obligaban al presidente Uribe a pasar de una negociación al frecuento con los políticos individuales a una relación más institucionalizada con grupos políticos más consolidados.
Los cinco elementos de la democracia son: Seguridad Democrática, libertades públicas, cohesión social, transparencia e instituciones independientes.
La seguridad como valor democrático fue el concepto utilizado como base de la práctica política de Álvaro Uribe Vélez, fue su bandera en la consolidación de su Gobierno y se definió como el papel más activo de la sociedad colombiana dentro la lucha del Estado y de sus órganos de seguridad frente a la amenaza de grupos insurgentes y otros grupos armados ilegales. En términos de
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• Menciona éxito pasado
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progreso desde su primer Gobierno, se le acredita la garantía eficaz de libertad de prensa, la protección del pluralismo, la defensa de las autoridades locales y de los líderes sindicales. El Referendo del 2003, el cual permitió la pérdida de derechos políticos, la inserción del voto nominal, la eliminación de suplencias, independencia de los recursos administrativos del Congreso, supresión de contralorías departamentales y municipales, pérdida de investidura para ediles, concejales, diputados o congresistas y busca la organización de los partidos políticos, endureciendo los requisitos para obtener la personería jurídica, entre otros, fue uno de los proyectos ejecutivos que permitieron mencionar a Uribe la seguridad al servicio
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del pluralismo.
Quedó atrás el pasaje negro del terrorismo
“Una sociedad asediada por el secuestro pierde sus libertades. La tendencia de disminución del flagelo no nos envanece, nos apremia para erradicarlo. El camino que emprendemos de nuevo nos conduce con plenas energías a luchar por el ideal que permita a nuestra Patria, un día no lejano, decir con orgullo ante el mundo que el asesinato de alcaldes, periodistas, sindicalistas (…)”. La connotación democrática de la seguridad es imprescindible para obtener la paz.
• Apela a la historia
Los hechos de paz avivan la fe en su posibilidad
“Los discursos de paz desvirtuados por la violencia, generan escepticismo que bloquea el sendero de acercamientos”. En medio de la violencia, el diálogo se desgasta y la búsqueda de la paz desmotiva la tarea
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• Menciona éxito pasado
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de la institución armada legítima.
La paz necesita sinceridad (…) los hechos irreversibles de reconciliación deben ser el enlace entre seguridad y paz.
“La generosidad oficial en negociaciones con los violentos, que muchas veces es injusta, es entendida por la comunidad cuando los hechos demuestran buena fe y honestidad de los beneficiarios”. La seguridad garantiza la inversión; la protección a la inversión como función social permite, en un marco de prosperidad, el crecimiento sostenido y vigoroso de la economía que ayuda a superar la pobreza y a generar equidad; y a su vez, la cohesión social legitima la perdurabilidad de políticas de seguridad y de confianza a la inversión.
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Paz con una forma de lucha: la transparente emulación de las ideas
La amarga experiencia de la combinación de “todas las formas de lucha” por grupos
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• Proporciona una fuerza
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ilegales, la debilidad institucional para enfrentarla y la reacción también violenta e ilegítima para contrarrestarla, “configuran un cuadro clínico de la democracia y las libertades, en trance de solución, aún no definitiva”.
para el cambio • Enfatiza en
una identidad colectiva
En algunos momentos históricos la derecha reclamaba seguridad, la izquierda libertades e igualdad.
“En otras etapas la derecha se erigía en dueña de las libertades y la izquierda reclamaba justicia social”.
• Apela a la historia
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Democracia moderna
La democracia moderna reconoce en la seguridad la primera de las libertades, que se legitima al hacer posible el ejercicio de las demás, que finalmente conducen a la igualdad. “En las democracias que he llamado delegativas, la concepción de la autoridad y sus prácticas son democráticas porque surgen de elecciones libres y no cercenan las libertades políticas,
• Apela a la historia
• Enfatiza en una identidad colectiva
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pero, a la vez, estos poderes ejecutivos sienten que tienen el derecho y la obligación de mandar como a ellos mejor les parece que le conviene al país” (O’Donell, 1997). La propuesta de O’Donnell puede ser útil para analizar el mandato del expresidente Uribe si se pretende analizar la importancia que tuvo su liderazgo, el reforzamiento que se dio al ejecutivo frente a los demás poderes e instancias de la sociedad, y la centralización del poder en su figura, sin embargo, su utilidad es cuestionable al enunciar la entrega total de poderes al Presidente, dejando a la sociedad el papel de mero observador.
Seguridad, inversión y crecimiento
En términos de recursos, son las que aseguran que en una democracia exista equidad, desde la mejor distribución. Sin dejar de lado que el
• Apela a la historia
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• Menciona éxito pasado
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crecimiento y la solidaridad son medios para la superación de la pobreza.
Política social estructural
Los pilares de competitividad tienen como fin aumentar el ingreso y mejorar la distribución. Se refiere precisamente a proveer una “plena cobertura en educación básica; avances en preescolar; plena cobertura en régimen subsidiado de salud con esfuerzos para que la formalización laboral ayude a crecer el sistema contributivo; familias en acción, guardabosques, estrategias del Sena, Bienestar Familiar, cobertura en atención de niños y ancianos; vivienda; saneamiento básico; infraestructura; acceso popular al crédito”.
• Apela a la historia
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Reformas económicas
Crecimiento con justicia social, insistente con la confianza inversionista, el crecimiento de la economía y la financiación de
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metas sociales. Estado comunitario, promotor y subsidiario.
“El Estado Comunitario es el medio para que la actividad pública beneficie a los gobernados, no a los funcionarios, los grupos de poder, la politiquería, las burocracias laborales” La noción de “Estado Comunitario” de Uribe, representa la función de la Autoridad Democrática de la Ley, que emana de su relación con el Orden, como el estandarte de la Libertad. Dentro de éste concepto de “Estado Comunitario”, la ética en el ejercicio de la política, es la base sobre la cual la sociedad construye y mantiene la institucionalidad democrática. “La democracia es el único camino para la emulación de las ideas”. La propuesta del Estado Comunitario representa
• Proporciona una fuerza para el cambio
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el engranaje de la Legalidad con la Autoridad Democrática en función de la Libertad y la Justicia Social. Su desarrollo se fundamenta en la conjunción de dos principios elementales sin los cuales no pueden operar las instituciones democráticas: la Confianza y la Solidaridad entre los ciudadanos y el Estado. En su propuesta de Estado comunitario se puede ver un importante parentesco con los planteamientos de la teoría de la presidencia personal que proponen entender al gobierno como el administrador de los bienes de la comunidad, con la intención de mejorar su rendimiento y devolverlos a esta en forma de servicios. En el caso específico del Estado comunitario de Uribe, estos servicios fueron seguridad y recursos
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económicos directamente canalizados desde el gobierno central hacia la comunidad local.
La participación popular derrumba los muros que frenan las reivindicaciones.
Otros elementos que integran la teoría del “Estado Comunitario” son: El respeto por el interés general que debe siempre prevalecer sobre los intereses particulares, propios de la indiferencia social; y la formación de capital social que es la única forma de prevenir la incertidumbre, la desigualdad y la miseria que engendran la politiquería, la corrupción y la violencia.
• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
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El Estado promotor no es el Estado empresario, absorbente, que marchita la iniciativa privada.
El Estado tiene que desempeñarse como garante de cohesión social, defensor del medio ambiente y promotor de crecimiento económico. “El Estado es minusválido tanto en el neoliberalismo, que lo reduce a
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• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
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mirar abusos desde lejos, como en el burocratismo que lo convierte en monstruo arrogante y usurpador, que destruye lo privado, no obtiene lo social y concluye en su propia ruina”.
Estado sostenible por eficiencia en gestión y aprobación popular
“Lo público es la propiedad privada de toda la sociedad que impone superior cuidado y diligencia en su administración”. A la dominación carismática se le atribuye un carácter revolucionario por el desconocimiento que hace de los valores del orden preexistente, dando paso a una nueva lógica fundamentada en las cualidades del líder y diseñada para servir a su misión y consagración: “Significa así la exclusión de la vinculación a todo orden externo en favor de la glorificación única y exclusiva del auténtico carácter
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
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heroico y profético. Por eso se comporta revolucionariamente, invirtiendo todos los valores y rompiendo absolutamente con toda norma tradicional o racional: ‘está escrito, pero yo os digo’”.
Nos ilusionan las reformas propuestas y adelantadas con patriotismo
“Para cimentar confianza en la administración profundizaremos la participación comunitaria en audiencias de contratación, consultas sobre transacciones de litigios, difusión previa al perfeccionamiento de compraventas o capitalizaciones (…) No puede ser que reclamemos reformas para que la base popular participe en las corrientes dinámicas de la economía y a la hora de la verdad frenemos las reformas”.
• Enfatiza en la similitud con los seguidores
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
No estancarnos en el remolino del discurso que lo critica todo y nada permite hacer.
Se refiere a la distribución de recursos en términos de corrección de gestión de créditos y banca de
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oportunidades sin ajustes periódicos; “Es preferible devolver el valor del IVA a los más vulnerables, franquear dificultades, corregir el SISBEN, procurar el acceso bancario a 6 millones de familias pobres (…)”.
(A la comunidad internacional): (…) Llega a ustedes una Nación con riqueza en el alma, inteligencia creativa, capital social, valores comunitarios, disposición de salir adelante.
Una Nación que quiere y necesita de la comunidad internacional como contribución esencial para la paz, el desarrollo y la igualdad. “Un país que se ha desgarrado en el sufrimiento de la violencia interna, añora, con justa razón, armonía en las relaciones internacionales”.
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Amplifica valores específicos
Registramos avances y obstáculos en los procesos de integración.
Refiriéndose a la integración de Latinoamérica sin exclusiones, consolidando los procesos desde la práctica de compartir en lugar de dominar, “La globalización puede ser más amable si la entendemos como resultado de la ciencia y no
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
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imposición de la ideología”.
Nuestra devoción por la democracia
Como reciprocidad al acompañamiento de la comunidad internacional.
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
(…) La gobernabilidad no radica en mutuas prebendas entre el Ejecutivo y el Legislativo sino en el acuerdo de ambos para responder bien al clamor ciudadano.
El Congreso está regido por nuevas normas políticas. El pueblo observa con positiva inquietud. No podemos fracasar. Ejecutivo y Congreso comprenderán la necesidad de mutua cooperación con interlocución independiente, imaginativa, constructiva.
Los efectos de la reforma política se hicieron evidentes en el aumento de la cohesión de los grupos y organizaciones políticas, lo que podría representar una mejoría en las condiciones de la gobernabilidad y una mayor institucionalización de las relaciones entre ejecutivo y legislativo. En ese sentido, las elecciones del Congreso del 2006 produjeron una reducción de partidos y organizaciones políticas: se pasó de sesenta o setenta agrupaciones políticas del Congreso de 2002 a unos once o doce en el 2006. Por otra parte, la reagrupación de los congresistas
• Proporciona una fuerza para el cambio
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partidarios del presidente Uribe también profundizaba el cambio de las relaciones entre legislativo y ejecutivo, pero sin representar una transformación fundamental de la relación del gobierno con la clase política tradicional.
Estados de opinión
Es la fase superior del Estado Social de Derecho. La legitimidad, ese grado de confianza, de aceptación popular que facilita la gobernabilidad, proviene esencialmente de la aprobación de la opinión pública. “Debe renovarse al despuntar del sol de cada nuevo día”.
• Enfatiza en la autocapacidad de sus seguidores
• Amplifica valores específicos
A los soldados y policías de la Patria un saludo lleno de afecto en esta hora de esperanza.
La mención a las Fuerzas Armadas es importante para comprender los estatutos de la Seguridad Democrática y la intención de su progreso en función de la Paz.
• Enfatiza una identidad colectiva
A los La mención a los • Amplifica
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trabajadores y empresarios, funcionarios públicos, hombres, mujeres, jóvenes y mayores, mi expresión de dedicación al bienestar colectivo
trabajadores dan cuenta de la importancia de la empresa privada en el discurso y la gobernabilidad de Álvaro Uribe.
valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
Vamos a construir una Nación en armonía, con rectitud, próspera y justa.
“Lo haremos apasionadamente, con vigor, para que las nuevas generaciones vivan felices en este noble suelo”.
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
Y a Dios, una luz inspiradora de tenacidad en el buen obrar.
La referencia religiosa al final exterioriza el interés de la porción devota en el País.
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
PLEBISCITO (CAMPAÑA POR EL NO) 2016
CONCEPTOS ANÁLISIS/ REFERENCIA CONTEXTO DIAGNÓSTICO
(Framing) Todos queremos la paz
Al pedir la no-violencia se requiere que se le de protección a las FARC y que cesen los delitos como el narcotráfico y la extorsión, de la misma manera es necesario que el cese sea bilateral.
El ‘No’ se impuso ante el ‘Sí’ en el plebiscito con 6.422.136 votos, el 50,23 % de votos. Por su parte, el ‘Sí’ reunió un total de 6.361.762 votos.
En teoría, el expresidente y
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Menciona éxito pasado
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actual senador Álvaro Uribe Vélez le apostaba a la campaña del No junto a el expresidente Andrés Pastrana, el exprocurador Alejandro Ordóñez, Marta Lucía Ramírez, Jaime Castro y otros. Muchos votaron como un rechazo a las FARC y a los acuerdos, y otros lo hicieron para rechazar al gobierno de Santos.
Las claves de su victoria fueron dos: 1) Haber creado la impresión de que el acuerdo con las FARC se podía renegociar en mejores términos. 2) Haber logrado que la gente percibiera el acuerdo como de la izquierda. Ninguna de estas percepciones era totalmente realista, pero produjo esos dos efectos.
Gran pacto Para la paz es • Amplifica
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nacional fundamental que se refuercen los valores que la hacen posible como la libertad, la justicia institucional, el pluralismo, la confianza en el emprendimiento privado y la educación de calidad como cabeza de la política social.
valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
Respeto a la constitución
“no sustitución; justicia, no derogación de las instituciones; pluralismo político sin que pueda percibirse como premio al delito; política social sin poner en riesgo la empresa honorable”. La legitimidad de los Acuerdos va ligada a la soberana Constitución, a la cual no se puede ignorar en términos legislativos y reglamentarios
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
La economía del País está en dificultades
Se hace énfasis en la importancia de la confianza privada para garantizar el compromiso con la inversión
• Proporciona una fuerza para el cambio
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social. Alivio judicial que no constituya impunidad
En términos generales, “las Fuerzas Armadas de la democracia” como se refiere Uribe, insisten en que los acuerdos en sí no son solidarios con la real circunstancia del conflicto, manteniéndose al margen de la retribución judicial que define para los excombatientes de las FARC.
• Amplifica valores específicos
• Proporciona una fuerza para el cambio
Valores de la familia
Definidos por líderes religiosos y pastores morales, entendiendo el respeto a la libertad de cada ciudadano sin poner en riesgo el valor de la familia. Lo anterior se decanta a partir del escándalo de “la ideología de género” auspiciada por diferentes sectores religiosos del País, dentro del fenómeno
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
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llamado pos-verdad 28 , en la que la identidad sexual de las personas, así como los roles de género, son socialmente construidos y no eternos, esenciales y asignados por Dios. Lo anterior fue una de las causas bandera de la campaña por el No, dirigida por Juan Carlos Vélez.
Comunidad Internacional
Independiente a la mención al Gobierno, teniendo en cuenta la capacidad de reacción de la Comunidad Internacional en términos de su incidencia en la articulación de los acuerdos, se remite el mensaje a los organismos propios que determinaron la negociación en La Habana.
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
28 Según la RAE, es la distorsión deliberada de una realidad, que manipula creencias y emociones con el fin de influir en la opinión pública y en actitudes sociales.
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La democracia de nuestra Patria ha sido superior a toda la presión para imponer el Sí
En términos de encuestas, el plebiscito sería determinante en confirmar la aceptación de los acuerdos con un rotundo Sí llevado a las urnas para la legitimación democrática que protocolariamente se propuso. Sin embargo, por unos pocos puntos, el No dio cuenta de la inconformidad ciudadana con la reinserción de excombatientes en la sociedad civil sin argumentos de reparación congruentes con las acciones dentro del conflicto.
• Amplifica valores específicos
• Enfatiza en una identidad colectiva
• Proporciona una fuerza para el cambio
• Enfatiza la similitud con sus seguidores