Los Limites del Arte

download Los Limites del Arte

of 2

description

Una reflexión acerca del relieve del Descendimiento de Andrés de Ocampo (iglesia de San Vicente, Sevilla)

Transcript of Los Limites del Arte

  • 71Q

    uin

    ta A

    ngu

    stia

    De las Bellas Artes

    En los meses de julio y agosto del pasado ao, la prensa internacional se hizo eco de una noticia cuyo protagonista no era otro que el multifactico Miguel ngel Buonarotti. El experto en Renacimiento italiano Antonio Forcellino sacaba a la palestra dos michelangelos: un Crucificado con la Virgen y San Juan, acompaados de dos ngeles llorosos (Museo de la Universidad de Oxford, Reino Unido) y una Piedad (coleccin Kober, Estados Unidos). Este descubrimiento ha reavivado el debate en torno a las obras que se sitan en la rbita del maestro florentino como, por ejemplo, un dibujo a carboncillo en el cual puede contemplarse la misma escena y cuya atribucin al italiano defienden los especialistas del museo Isabella Stewart Gardner (Boston) desde 1902. ste puede identificarse con la obra que el artista regala a Vittoria Colonna y que Giorgio Vasari refiere en sus Vidas, ya en 1550. Es en este dibujo donde, en opinin de la profesora Mara Concepcin Garca Ganza, el imaginero jiennense Andrs de Ocampo se inspira al componer el gran relieve del Descendimiento que centrara el retablo de la capilla del linaje Ponce de Len en la iglesia parroquial de San Vicente (Sevilla).

    Este imponente altorrelieve, el cual se erigir como referente en el plano iconogrfico, compositivo incluso esttico desde el mismo momento de su ejecucin, esto es, entre los aos 1603 y 1605, se considera como una de las obras clave en la produc-cin del escultor de Villacarrillo. De perfil rectangular rematado en semicrculo, el patibulum vertebra la composicin, configu-rando las dos escaleras el marco piramidal interno. El eje central lo determinan las efigies de la Virgen, Cristo y la Magdalena; en el flanco izquierdo dos Maras con San Juan mientras el restante

    LOS LMITES DEL ARTE

    El Descendimiento de Andrs de Ocampo

    JOS CARLOS PREZ MORALES

  • 72

    Quin

    ta A

    ngu

    stia

    lo ocupan otra Mara, Jos de Arimatea y Nicodemo. La propia disposicin de las figuras otorga el papel protagonista a las centrales pero, adems, es en ellas donde se concentra toda la fuerza expresiva en tres estados muy diferenciados: la splica de la Madre, el recogimiento del Hijo y la sumisin de la pecadora arrepentida.

    Los vnculos de esta obra con otras piezas del ambiente sevillano son pal-pables. Sin ir ms lejos, su representacin de la Virgen, tanto en tipo humano como en soluciones formales, se encuentra estrechamente ligada al simulacro orante y arrodillado, advocado de la Antigua, Siete Dolores y Compasin, que se conserva en la iglesia hispalense de Santa Mara Magdalena. Este parentesco avalara algunas tesis que sospechan que la considerada obra de Pedro Roldn es realmente una intervencin sobre una talla anterior.

    A pesar de la supuesta inspiracin en el dibujo de Miguel ngel, cabra bus-car un influjo ms directo en la pintura anterior. Pensemos, por ejemplo, en la Piedad de Juan Nez, ubicada en la catedral, y fechada en el ltimo tercio del siglo XV o, sin abandonar de este sacro recinto, aunque realizado para la iglesia de Santa Cruz, el Descendimiento de Pedro de Campaa (1547). Igualmente, la magnfica Piedad que Luis de Vargas llevara a cabo en 1564 para el retablo ho-

    mnimo de la iglesia de Santa Mara la Blanca. No obstante, puede comprobarse una vin-culacin realmente admirable con la produccin de Luis de Morales en sus representacio-nes del Descendimiento, Piedad y Lamentacin sobre Cristo. Los resabios toscanos y nrdicos que se han visto en su arte son especialmente significativos pues similares ascendentes se le atribuyen a la mencionada Virgen de la Antigua.

    Como colofn, parangonar la pieza que nos ocupa con un relieve de idntica iconografa y misma inspiracin en el di-bujo de Boston y que podemos contemplar en la iglesia de San Juan Bautista de la loca-lidad navarra de Tbar. Fue materializado, a comienzos del XVII, por el ensamblador y ar-quitecto Juan de Huici e Ituren

    en colaboracin con Juan de Berroeta. Este es uno de los muchos ejemplos que podemos poner en relacin con la obra seleccionada de Andrs de Ocampo y prueba fehaciente de la ambigedad de las fronteras en el mundo del arte.

    A pesar de la supuesta inspiracin en el dibujo de Miguel ngel, cabra buscar un influjo ms directo en la pintura anterior. Pensemos, por ejem-plo, en la Piedad de Juan Nez, ubicada en la catedral, y fechada en el ltimo tercio del siglo XV o, sin abandonar de este sacro recinto, aunque realizado para la iglesia de Santa Cruz, el Descendimiento de Pedro de Campaa (1547).