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LOS PROYECTOS ESCOLARES PARTICIPATIVOS COMO ESTRATEGIA PARA MOTIVAR LA LECTURA Y ESCRITURA EN LOS NIÑOS 1
SCHOOL PROJECTS AS STRATEGY TO ENCOURAGE READING
AND WRITING IN CHILDREN
Pedro Lucas Torres Bautista2, Claudia Milena León Agudelo3 y Isidro Perdomo Toledo4
Resumen
Ante los problemas de desmotivación para el aprendizaje de la lectura y de la
escritura, se puede afirmar que estas dificultades no están solamente en los niños,
sino también en las estrategias didácticas que comúnmente utilizan los docentes y
en otras prioridades que establecen los medios de comunicación y la sociedad
que, de igual forma, impactan la educación en niños y niñas. Aquello que un niño
puede hacer al llegar a la escuela, no se relaciona sólo con sus habilidades o con
sus capacidades, sino con las oportunidades o escenarios que tiene de participar
en situaciones sociales, donde logra adquirir herramientas fundamentales para la
formación en la lectura y la escritura.
Oportunidades o escenarios que como docentes se deben propiciar de
manera novedosa, al punto que despierte el interés y la creatividad del niño, sobre
todo que sean situaciones de participación y valoración de sus capacidades, de
sus talentos y de sus saberes previos; pero, ¿cómo puede la escuela actual
mejorar el aprendizaje de la lectura y la escritura? ¿Es posible que a través de los
1 Este artículo es una síntesis del trabajo de investigación “Los proyectos escolares participativos como estrategia para motivar la lectura y escritura en los niños” para optar el título de especialista en el Programa de especialización de Pedagogía y Desarrollo Humano de la Universidad Católica de Pereira en julio de 2011. 2 Economista de la Universidad Nacional de Colombia, estudiante de la especialización de Pedagogía y Desarrollo Humano de la Universidad Católica de Pereira. Correo electrónico:[email protected] 3Licenciada en Educación básica de la Universidad del Quindío y estudiante de la especialización de Pedagogía y Desarrollo Humano de la Universidad Católica de Pereira. Correo electrónico: [email protected] 4Licenciado en básica primaria y promoción de la comunidad de la Universidad Santo tomas de Aquino sede Bogotá y estudiante de la especialización de Pedagogía y Desarrollo Humano de la Universidad Católica de Pereira. Correo electrónico: [email protected]
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Proyectos escolares participativos y los escenarios propicios motivarán esas dos
habilidades de tal manera que podamos hablar de competencia lecto - escritural?
Proyecto escolar participativo es la expresión dada a la estrategia didáctica
desarrollada en la investigación, realizada con niños que cursan el grado segundo
de educación básica primaria en la Institución Educativa Compartir Las Brisas de
Pereira, que complementado con experiencias de la práctica docente, nos permite
afirmar que se pueden superar las dificultades de motivación y que podemos
desarrollar la competencia lectora y escritural en ellos, así como discutir
concepciones comúnmente aceptadas entre docentes y padres de familia sobre
esta competencia.
Palabras clave: proyectos escolares participativos, estrategia didáctica,
motivación, lectura y escritura
Abstrac
Given the problems of motivation for learning reading and writing, we can say that
these difficulties are not only children but also in teaching strategies commonly
used by teachers and other priorities established by the media and society,
likewise, impact on children education. What a child can do to get to school, is not
associated only with their skills or their abilities, but the opportunities or scenarios
that have to participate in social situations, where it manages to acquire essential
tools for training in reading and writing.
Opportunities as teachers or scenarios that should encourage new ways, to
the point that sparks the interest and creativity of children, especially situations that
are participation and assessment of their abilities, talents and their prior
knowledge, but how how can the current school to improve learning of reading and
writing? Is it possible that through the participatory school projects and favorable
scenarios motivate these two skills so that readers can talk about competition -
scriptural?
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Participatory school project is the expression given to the teaching strategy
developed in the research, conducted with children attending the second grade of
basic primary education in the Educational Institution Share Las Brisas de Pereira,
who complemented with experience of teaching practice, we can affirm that can
overcome the problems of motivation and we can develop the competence and
scriptural reading them and discussing concepts commonly accepted among
teachers and parents about this competition.
Keywords: participatory school projects, teaching strategy, motivation, reading and
writing
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LOS PROYECTOS ESCOLARES PARTICIPATIVOS COMO ESTRATEGIA PARA MOTIVAR LA LECTURA Y ESCRITURA EN LOS NIÑOS
“Los profesores enseñan mucho pero no logran entusiasmar a los niños para que lean. Y agregaba: …si ponen a los niños a leer, ellos no lo ven como una actividad agradable, sino
como una tarea, un compromiso más y eso es lo que al muchacho no le gusta”. “A los padres no nos han enseñado a acompañar a los hijos a leer y escribir. Lo común es decirle a los hijos: “vaya y lea”, o cuando el niño está bien contento jugando en casa se le
dice: deje la bulla y póngase a leer”.5
Testimonios de los padres de familia
Introducción
Los epígrafes anteriores hacen parte de las expresiones de padres de familia que
dan cuenta de su percepción sobre las dificultades del aprendizaje de los niños en
lectura y escritura, situación que redunda en el desarrollo mental y en los procesos
de socialización y apropiación de la cultura. A partir de dicha situación emergen
las siguientes preguntas:
¿Cómo puede la escuela actual mejorar el aprendizaje de la lectura y la
escritura? ¿Los Proyectos escolares participativos y los escenarios propicios
motivarán esas dos habilidades de tal manera que podamos hablar de
competencia lecto - escritural?
Se pretende en este documento evidenciar una estrategia didáctica como son
los Proyectos escolares participativos para la motivación de la competencia lecto-
escritural en niños de básica primaria, de tal manera que aquellas concepciones
comúnmente aceptadas entre docentes y padres de familia, las cuales fortalecen
la “pereza” y desmotivan a los niños para leer y escribir, encuentren en esta
estrategia didáctica opciones para superar un problema contemporáneo en la
educación colombiana.
Al respecto, es posible considerar que estas dificultades se encuentran
asociadas a la historia de vida de cada sujeto y los contextos culturales en los que
5Apartes de los testimonios de los padres de familia que participaron en grupos focales en la investigación realizada en el segundo semestre del año 2010, en la Institución Educativa Compartir Las Brisas ubicado en la comuna Villasantana de la ciudad de Pereira, donde habitan familias que en su mayoría pertenecen a los estratos socioeconómicos 1 y 2. Los actores de la investigación son un grupo de niños entre los 8 y 10 años que cursaban segundo grado de básica primaria, de los cuales se seleccionaron 3 entre niños y niñas, a quienes se les realizo un seguimiento más detallado y se recopilaron evidencias de sus escritos.
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se desarrollan; contextos en los que posiblemente los espacios para la lectura y la
escritura no han sido significativos, por lo tanto se propone que mediante los
proyectos escolares participativos, el aula se transforme en un espacio en el que
leer y escribir motiva porque contribuye significativamente en la socialización y
apropiación de la cultura en los niños y niñas.
El contenido de los siguientes párrafos son reflexiones de la práctica docente
y resultado de una investigación realizada con niños de grado segundo de
educación básica primaria en la Institución Educativa Compartir Las Brisas de
Pereira6, aplicando una estrategia metodológica denominada Proyectos escolares
participativos, así como reflexiones teóricas que consideran la educación como
aspecto importante de la transformación cultural y el desarrollo humano, desde las
cuales se pueden implementar elementos que contribuyen para que desde el
aprendizaje participativo, la lectura y la escritura se conviertan en medios de
socialización y humanización.
Aquí, la comprensión lectora juega un papel muy importante ya que es un
incentivo que alienta al niño a escribir. La comprensión lectora se entiende como
la aptitud que se debe desarrollar en el infante para facilitarle el acercamiento al
componente semántico y sintáctico del lenguaje (Bruner 2001, p. 159). Cuando
esto sucede y se logra crear escenarios propicios, la competencia escritural surge,
permitiendo una adecuada comunicación, ejerciendo su libertad de expresión
escrita, tan importante en tiempos contemporáneos.
Para que esto pueda ser realizable, es necesario ofrecer en el aula, tanto
dentro como fuera de ella, escenarios propicios y pertinencia temática en las áreas
de enseñanza, de tal manera que a partir de la selección y ejecución de temas de
investigación en forma de Proyectos escolares participativos, se motive y despierte
el interés de los niños para crear sus propias producciones textuales. Éstos se
deben priorizar en el aula con una activa participación, involucrando a toda la
comunidad educativa, y en particular a los padres de familia, como coequiperos en
el propósito de formar y educar a sus hijos.
6Proyecto de investigación escolar para la Especialización en pedagogía y desarrollo humano cohorte 18 del la Universidad Católica de Pereira (2010), con grupos focales y en escenarios extra aula de la Escuela, como la huerta escolar. Cuyos temas fueron seleccionados por los niños.
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La adquisición de habilidades escriturales puede motivar a los niños
Jerome Bruner en su libro Acción, pensamiento y lenguaje (2001) expone: “…el
niño, al resolver problemas, ha adquirido una habilidad” (p. 129). Los problemas a
los cuales se refiere el autor son los relacionados con la percepción, atención,
manipulación y locomoción, interacción social, maduración y desarrollo. El uso y la
coordinación de estos procesos para alcanzar una meta son los que permiten que
el niño sea hábil y pueda alcanzarla, utilizando inteligentemente la información y
escogiendo entre varias opciones posibles respuestas.
Cuando el niño domina una habilidad está desarrollando una estrategia
que, hace referencia a un patrón de decisiones en la adquisición, retención
y utilización de la información que sirven para lograr ciertos objetivos, es
decir para asegurarse de que se den ciertos resultados y no se produzcan
otros. (Bruner 2001: 130).
Es aquí donde el papel del docente es crucial para que esta “estrategia” se
produzca en el niño, al crear espacios propicios donde los proyectos participativos
escolares, como alternativa didáctica en el aprendizaje y en la motivación de la
lectura y la escritura, sean adecuados y cumplan con el objetivo planteado.
Cuando en el niño se produce este cambio y de cierta manera es consciente
de su capacidad, es capaz de expresarla, incluso sin que se dé cuenta. En
ocasiones leer y escribir es para los niños inútil, no le encuentran sentido ni interés
en desarrollar estas competencias básicas siendo ellas fundamentales en el
aprendizaje para las demás áreas del conocimiento. Por eso al intervenir con
actividades curiosas, creativas y ágiles despiertan en el niño motivación para
involucrarse y poco a poco desarrollar estas habilidades estructurales.
La escritura en el desarrollo mental del niño y la Zona de desarrollo próximo Ante los problemas de desmotivación para el aprendizaje de la lectura y de la
escritura, desde Vygotsky (1995), en la introducción de este artículo se afirma que
la dificultad no está en los niños. Esto modifica el modo en que comúnmente se
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piensa sobre las habilidades o capacidades de éstos. Porque más allá de las
teorías educativas o cognitivas que adoptemos, el interés es despertar la
motivación a leer y a escribir.
Cuando los niños que crecen en contextos de pobreza urbana y de padres
poco letrados llegan a la escuela con escasa motivación hacia la escritura y la
lectura. Se genera baja expectativa respecto de su potencial para el aprendizaje
de la comprensión lectora y escritural. De lo que se trata es reconocerle al niño
sus saberes previos y a partir de ellos convertirlos en conocimientos sistemáticos.
Vigotsky desde 1934 había llegado a la conclusión sobre la importancia de la
escritura en el desarrollo mental del niño, advierte sobre la necesidad de
considerar la edad y grado de madurez de los niños, que en palabras de Vygotsky
(1995) afirma:
No se puede enseñar a leer a un niño de un año, o a escribir a uno de tres.
El análisis del aprendizaje se reduce, pues, a determinar el grado de
desarrollo que deben alcanzar varias funciones para que sea viable la
instrucción. Cuando la memoria del niño ha progresado lo suficiente para
permitirle memorizar el alfabeto, cuando su atención puede mantenerse en
una tarea aburrida, cuando su pensamiento ha madurado hasta el punto de
poder comprender la conexión entre el signo y el sonido, entonces, se
puede comenzar a enseñarle a escribir. (p. 172)
Estas afirmaciones son importantes miradas en el contexto socioeconómico y
cultural de los estudiantes del estudio de caso señalado, en particular porque se
presentan casos de niños con edades diferentes o de extra edad de algunos
estudiantes que se atienden en la Institución educativa señalada. Continúa
Vygotsky (1995) planteado que si:
… examinamos el nivel de desarrollo de las funciones psíquicas
indispensables para el aprendizaje de las materias escolares básicas: leer y
escribir, aritmética y ciencias naturales. Descubrimos que, al comienzo de
la instrucción, estas funciones no se podían considerar maduras, ni siquiera
en los niños en que se demostraron capaces de dominar el programa de
estudios con mucho éxito. El lenguaje escrito es muy ilustrativo. ¿Por qué
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escribir le resulta al escolar tan difícil que en ciertos periodos hay un retraso
de hasta seis o siete años entre la edad lingüística hablada y la escritura?
Esto se solía explicar por la novedad de la escritura: como función nueva
que es, debe repetir los estadios de desarrollo del habla; por tanto, la
escritura de un niño de ocho años se debe parecer al habla de uno de dos.
(p. 175)
De lo que se trata es romper con la monotonía y permitirle al productor de
textos, los niños, que encuentren sentido a sus elaboraciones, que es en lo que
los Proyectos escolares participativos aportan a la motivación y superación de las
dificultades para la escritura. Esas dificultades el autor (Vygotsky) las señala en
los siguientes términos:
El habla escrita es monologo; es una conversación con una hoja de papel
en blanco. Así la escritura requiere una doble abstracción: la abstracción
del sonido del habla y la abstracción del interlocutor. Pero igual que el
aprendizajes de la formulas algebraicas no repite el proceso de adquisición
de las habilidades aritméticas, el desarrollo de la escritura no repite el
desarrollo del habla oral. Nuestros estudios demuestran que el niño tiene
poca motivación para aprender a escribir cuando comenzamos a enseñarle.
No siente necesidad de ello y solo tiene una idea vaga de su utilidad. En la
conversación cada sentencia es suscitada por un motivo. El deseo o la
necesidad llevan al ruego; la pregunta a la respuesta, la perplejidad a la
explicación. .. Los motivos para escribir son más abstractos. En el habla
escrita estamos obligados a crear la situación, a representárnosla a
nosotros mismos (p. 176)
Por otra parte la escritura evidencia asimilación de los temas leídos, puede
indicar el grado de desarrollo cognitivo, la formación de conceptos, la imaginación
y la capacidad de abstracción que alcance el niño en el proceso de instrucción
básica. Es útil reseñar en palabras de Vygotsky, la enorme importancia de la
escritura y la gramática para el desarrollo mental del niño, así:
...nuestro análisis ha demostrado claramente la enorme importancia del
estudio de la gramática para el desarrollo mental del niño” (p. 177). …hacer
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conscientemente lo que ha estado haciendo inconscientemente al hablar.
La gramática y la escritura ayudan al niño a subir a un nivel superior de
desarrollo del habla (p. 178).
Por otra parte es importante afirmar con Vygotsky que todo niño tiene un Nivel
de Desarrollo Real, que se define por lo que el niño puede hacer solo, y un Nivel
de Desarrollo Potencial, que se demuestra en función de aquello que puede
realizar con ayuda de un adulto o un niño con mayores conocimientos. Este
concepto es importante para pensar, no sólo en esta investigación, sino en
posteriores estudios, el desarrollo de la competencia lecto-escritural.
Estos dos niveles definen una Zona de Desarrollo Próximo (ZDP). En el
proceso de aprendizaje, el nivel de desarrollo potencial se convertirá, en el nivel
de desarrollo real del niño; es decir, aquello que en un momento el niño solamente
puede hacer si se le ayuda. De aquí se desprende que el nivel de desarrollo real
de un niño es también la historia de las zonas de desarrollo potencial que ha
recorrido. El contexto socio cultural, las didácticas, los aportes de docentes, las
potencialidades o talentos que se logren desarrollar en el niño contribuyen a definir
su nivel de desarrollo real.
Por ello afirmamos, que aquello que un niño puede hacer al llegar a la
escuela, no solo se relaciona con sus habilidades o con sus capacidades, sino
también con las oportunidades o escenarios que ha tenido, al participar en
situaciones sociales desde las cuales logró motivarse hacia la lectura y la
escritura. Oportunidades o escenarios que -como docentes- debemos propiciar de
manera novedosa, al punto que despierte el interés y la creatividad del niño, sobre
todo que sean situaciones de participación y valoración de sus capacidades y de
sus talentos.
No se trata aquí de responsabilizar totalmente de los escasos conocimientos
de los niños a sus familias, o que el problema radica en que no los estimulan ni los
acompañan. Definitivamente en un contexto sociocultural en el que los medios de
comunicación y el estado poco aportan a la motivación del desarrollo lecto –
escritural, el resultado no será distinto a uno adverso para el niño. Por el contrario,
aquellos niños que crecen en familias en las que el uso de la lectura y la escritura
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es parte de la vida cotidiana y del trabajo de sus padres, adquieren
anticipadamente estos conocimientos.
Por lo tanto, analizando la situación que viven las familias que tienen sus hijos
en la institución educativa Compartir las Brisas, la lectura y la escritura no dan el
verdadero valor que merecen ya que para garantizar la supervivencia económica,
no se ven necesarias en la práctica estas dos competencias. Las familias
incentivan a sus hijos para aquello que, de acuerdo al contexto es importante y en
este sector donde confluyen los estudiantes de la institución educativa, la lectura y
la escritura aparentemente no satisfacen necesidades básicas como la vivienda, la
salud, entre otras.
¿Es acertado decir que demuestra mayor preocupación por sus hijos un padre
que enseña a escribir que otro que enseña a manejar un azadón, una pala o
mercancías destinadas a las ventas ambulantes? En ambos casos, el niño es
atendido pero cada familia enseña lo que tiene a su alcance. Aunque es
reconocido que el niño que aprende anticipadamente a leer y escribir, tendrá más
oportunidades de desarrollo. En estas situaciones lo que se debe hacer es
convertir esas experiencias, esos saberes del niño en insumos para un
aprendizaje sistemático y significativo.
Opciones para motivar la competencia lecto - escritural Es posible que los padres de familia piensen que leer y escribir no representa un
valor económico que ayude a su sostenimiento y subsistencia. Es por eso que la
escuela tiene la responsabilidad de cambiar su manera de pensar y demostrar que
al adquirir estas habilidades, para luego convertirse en competencias es lo que
determinará de cierta manera el futuro del infante. Entonces, ¿cuál es la tarea del
docente en este referente? La primera responsabilidad de quien enseña es dar
forma, orientar y adecuar las diferentes actividades que en la escuela se dan, para
demostrar que son posibles e interesantes.
Cuando se piensa en un niño que ingresa a la escuela y que ha tenido muy
poco contacto con la lectura y la escritura, al encontrarse con una metodología
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tradicional, con un maestro que monopoliza el conocimiento, en el que el juego no
hace parte de su método de enseñanza y que lo obliga a memorizar los
contenidos de ciertas asignaturas (sin desconocer la memorización de ciertos
datos e información mínima del aprendizaje). ¿Será para el infante un ambiente
aburrido, donde se siente obligado a observar sin moverse, a quedarse callado, a
llenar renglones de garabatos que ni siquiera entiende qu son, será un escenario
propicio de aprendizaje?
Obviamente, este es el camino que para muchos maestros es el único y
posible de recorrer, incluso, así se imparten las primeras enseñanzas en muchas
de las instituciones educativas, pero difícilmente se puede afirmar que es
interesante y que efectivamente motive al niño a ingresar al mundo de la lectura y
de la escritura, dando apertura al mundo del conocimiento. Otros docentes creen
que ofrecer una biblioteca con coloridos libros para que el niño se relacione con
ellos puede parecer llamativo, pero difícilmente ayuda a que el niño sienta o valore
la necesidad de convertirse en un lector experto, con elevados niveles de
comprensión lectora y escritural.
Ante todo es necesario que las estrategias que se utilicen motiven
efectivamente al niño y éste comprenda la importancia de la lectura, donde los
temas sean de su interés.
Una alternativa que aquí se propone son los Proyectos escolares participativos,
donde cambiar el lugar de clases e involucrar activamente a los niños en la
preparación y ejecución de las diferentes actividades según las temáticas
escogidas por ellos, motiva al niño a indagar, a consultar y como consecuencia
de ello a leer y luego escribir, es lo que cada institución educativa y cada docente
debería hacer para generar en el niño interés sin que se sienta obligado y sin que
lo caracterice como aburrido.
Además de los conocimientos significativos y de interés para el niño, y para
que la enseñanza primaria resulte a la vez posible, es necesario que se transite
junto con otro que lo acompañe, oriente y ordene el proceso de aprendizaje en
torno a ambientes significativos, en los cuales el niño asume mayores
responsabilidades a medida que alcanza mayores conocimientos.
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Ante la presencia de un niño con poca motivación y con bajo nivel de
conocimientos, la primera pregunta que debemos formular no es ¿qué le pasa a
este niño?, sino ¿cómo se le ha orientado y motivado hacia el aprendizaje? ¿Qué
oportunidades de enseñanza ha tenido? Cuando un niño ha participado de
situaciones de aprendizaje adecuadas y aún así no aprende, es posible pensar
que las dificultades se deben a un déficit cognitivo o situacional del niño. Pero si
no ha tenido oportunidades para el aprendizaje, se debe pensar en facilitarle
escenarios y metodologías propicias que solventen sus deficiencias.
La competencia lecto - escritural en relación con la formación en competencias
Como el objetivo es desarrollar una didáctica o estrategias que motiven la lecto -
escritura en la forma de Proyecto escolar participativo, es útil analizar la
experiencia de formación en competencias y asimilarlas en el aula escolar de
educación primaria. Cuando un aprendiz, por ejemplo, se incorpora a un proceso
de producción, su aprendizaje se organiza de manera que conozca los objetivos y
que presencie el proceso completo. Al principio su intervención es limitada, pero
gradualmente desarrolla las habilidades necesarias para aumentar su
participación. Para ello, se organizan actividades que promuevan la adquisición de
las habilidades y competencias que el aprendiz necesita para incrementar su
participación en el proceso y que pueda adquirir con una práctica frecuente.
Por ejemplo, la formación por competencias que adelanta el SENA7 se realiza
con proyectos concretos, de tal manera que contribuye a un buen desempeño en
el trabajo productivo y a crear la necesidad de la formación permanente y
actualizada en su propia profesión u oficio de los aprendices. Quienes deben
adquirir una mayor responsabilidad de su propio aprendizaje y aplicar en
Proyectos reales los conocimientos de la formación. Así se promueve el
aprendizaje colaborativo, el juego de roles, la solución de problemas, el estudio de
7 Esta sección se realizo con base en la observación y revisión de la metodología del SENA y en documentos de la institución como: http://sis.senavirtual.edu.co/infocurso.php?semid=190
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caso, las simulaciones, los debates, y las entrevistas. ¿Se pueden aplicar estos
planteamientos al proceso de aprendizaje de la lectura y la escritura?
En primer lugar, así como el aprendiz de un arte u oficio observa el proceso
completo de elaboración de un bien o prestación de un servicio, aunque su
participación sea limitada, es necesario establecer situaciones reales y completas
en las que los niños participen de un proceso de aplicación práctica de la
comprensión lectora y de la producción de textos. La anterior propuesta se plantea
a partir de las conclusiones o hallazgos del Proyecto escolar participativo que se
está, la construcción de la huerta escolar, la cual se explica a continuación.
La investigación con los niños. Proyecto escolar participativo: construcción de la huerta escolar
De acuerdo con lo expuesto anteriormente, es preciso estructurar situaciones
significativas o crear escenarios en los cuales los niños intervengan en un proceso
completo; por ejemplo, seleccionar el tema en forma de Proyecto escolar, leer
sobre el tema, investigar, y posteriormente motivarlos a escribir cuentos o
narraciones descriptivas sobre situaciones del tema seleccionado y realizar las
actividades del Proyecto priorizado. Estas actividades se realizan con el apoyo del
docente que guía y orienta, también con los padres u otro actor que pueda
aportar al tema seleccionado.
Por situaciones socialmente significativas se quiere decir que se trata de
condiciones que tengan sentido para los participantes, situaciones en las cuales
alumnos, docentes, y padres de familia, conozcan y compartan el objetivo del
Proyecto escolar participativo.
Este ejercicio o Proyecto escolar participativo se realiza al tener en cuenta que
los niños pueden tomar decisiones como: temas de lectura, problemas de
aprendizaje y solución a problemas de interés. Así como el agrado que siente un
adulto cuando se le pregunta qué comida prefiere o cual película desea ver.
Así en el segundo grado de la institución educativa Compartir Las Brisas de
Pereira, a finales del año 2010 se sometió a consideración de los estudiantes la
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actividad que posiblemente orientaría el proyecto escolar participativo. Luego de
una activa participación y con la facilitación del docente, se prioriza la construcción
de una huerta escolar. Los alumnos participaron desde la gestación de la idea
hasta la ejecución del Proyecto.
Se utilizó el método de investigación basado en pedagogía acción educativa,
en donde el maestro investiga mientras enseña, de esta manera el docente integra
tres roles: investigador, observador y maestro. Ver a Restrepo (2002).
Se realizó la siguiente secuencia de investigación y temas tratados:
1- ¿Qué se va a hacer? Una huerta escolar
2- ¿Qué se quiere aprender?:-Reproducción en las plantas, clases de
reproducción (sexual y asexual). Clases de plantas, tipos de suelo, ciclo del agua.
Utilidad de las plantas, usos, cadena alimenticia Nutrición en las plantas y en los
humanos.
-Hacer cuentos alrededor de la huerta. Leer cuentos de los compañeros.
-Ortografía básica. (Uso de las mayúsculas), gramática: el sustantivo, el adjetivo,
el verbo, tiempos verbales. El género y el número.
-Literatura: la narración, el cuento, la fábula, la descripción.
Como se observa a través del proyecto escolar se integran todas las áreas del
conocimiento.
3- ¿Para qué estudiar todo esto desde la huerta? Respuestas de los alumnos:
-para que las clases sean más divertidas. -para salir del salón de clases.
-para divertirnos. -para leer y aprender.
-¿Por qué? (desafíos del Grupo.) Porque nos aburrimos en el salón, porque no
nos gustan las clases solo en el salón. ¿Cómo? (metodología) Mediante un plan
de actividades que comprende: limpieza del terreno, elaboración del compost,
observando el compost, sembrando plantas en las dos formas de reproducción
paseando por el bosque, escribiendo los nombres y escribiendo las actividades.
-¿Cuándo? (cronograma: meses de julio a octubre)
Una parte de las actividades se realizaron con la ayuda de los padres de los
alumnos.
4- ¿Dónde? Terreno aledaño del Colegio.
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Recursos humanos: alumnos de segundo grado, el profesor y padres de familia.
Durante las horas y días que se le dedicaron al Proyecto, se apoyó y orientó a
los niños en la realización de las diferentes actividades de limpieza, preparación
de compost, construcción de eras, siembra de semillas y el mantenimiento
correspondiente, registrando las actividades en una bitácora, así como lo realizado
por los participantes, sus aportes y las observaciones correspondientes. Una vez
construida la huerta y a medida que las plantas crecían, los niños hacían
observaciones y comentarios sobre los follajes, los insectos y las malezas. Con
esos insumos en rondas y en el aula se elaboraron escritos en carteleras y se
inició la redacción de cuentos en grupos y posteriormente de manera individual,
estos últimos se presentan más adelante.
Síntesis de los resultados de la investigación
La investigación mostró que las herramientas didácticas utilizadas fueron
eficaces, en particular con las evidencias de textos escritos por los alumnos y los
testimonios de los padres de familia. Se puede concluir que los alumnos del grado
segundo si quieren aprender y pueden hacerlo pero se deben implementar nuevas
estrategias como los proyectos escolares participativos.
Se encontró que desde el Proyecto: la huerta escolar, fue posible motivar a la
lectura y fue significativo para los niños, porque cautivo su interés y facilito la
lectura de la botánica y la biología, entre otros temas. Aun cuando se realizaron
varias actividades relacionadas con una huerta, se quiere resaltar que el principal
resultado es haber despertado motivación en los niños participantes del Proyecto,
inicialmente hacia la lectura y posteriormente hacia la escritura de cuentos y
narraciones de las situaciones vividas. Esta producción textual era una práctica de
las clases de lenguaje, en donde se desarrollaban los temas correspondientes y
elementos de gramática como el uso de los tiempos verbales, organización y
orden de las frases.
Escribir un cuento divertido, por ejemplo y a propósito de la construcción de la
huerta escolar, es una situación significativa en la escuela pero también puede ser
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la preocupación por otro tema de interés. Esta es una de las maneras como se
puede contribuir a ampliar la Zona de Desarrollo Potencial, donde los niños se
desempeñan por encima de su Nivel de Desarrollo Real. Lo podemos observar en
la siguiente secuencia de dos de las producciones textuales, antes y después del
Proyecto de la huerta escolar.
Caso 1. Producción textual: escribir una narración. Momento 1: Se le planteo
al alumno que describiera a la persona que más quería y al día siguiente trajo el
siguiente escrito: “mi mama es bajita bonita de pelo corto”.
Momento 2: Después de una jornada en la huerta escolar, y haber recibido
clases de lenguaje, la alumna escribe con el título: “Un día en la Huerta”, el
siguiente texto8: Un día en la Huerta
Narración del momento 2
8En este caso como en el siguiente texto, se ha utilizado el formato original en imagen escaneada para mostrar la evidencia y la originalidad del esfuerzo textual de los niños.
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En este segundo momento de la Narración 1, en donde hay un escenario propicio
-como lo hemos denominado- se puede observar la ampliación de la producción
textual, los detalles que relata la autora sobre las actividades realizadas alrededor
de la huerta, la interacción entre los niños y coherencia en la narración así como
en la organización de las oraciones. Es de señalar que la ortografía no fue
corregida para permitir la fluidez de las ideas y dar cuenta del grado de desarrollo
de las autoras.
En el anterior escrito como en el siguiente del Caso 2, se evidencian los
avances en la producción textual de los niños y niñas. Es de señalar que
independientemente de la ortografía y redacción, recoge la motivación como
fueron escritos, la inspiración en el escenario escogido: la huerta escolar.
Se les planteo a los alumnos que trajeran al día siguiente un cuento sobre
cualquier situación de sus familias, de algún amigo o vecino. Que escribieran
sobre cualquier tema que fue de interés para ellos.
Caso 2. Producción textual: escribir un cuento. Momento 1:
Escribió lo siguiente: “había una vez una gatica muy bonita y era muy pobre
hasta que consiguió un novio y se casaron y la gatica se volvió millonaria y les
compró a su familia una casa y vivieron muy felices para siempre colorín
colorado.
Momento 2: Después de una jornada en la huerta escolar y de observar los daños
causados por los gusanos en el follaje de las plantas sembradas, la alumna del
Caso 2 escribe un cuento con el título: “un monstruo en la huerta”.
En el cual se observa que tiene estructura completa: inicio, nudo y desenlace.
En otros casos, en ausencia de escenarios propicios, los niños difícilmente
escriben uno o cuatro renglones. Además la niña atendió las instrucciones del
docente, en el sentido de que los personajes no mueren en el cuento y se llega a
acuerdos o consensos, es decir que se incorporan enseñanzas de valores y
convivencia de las clases dictadas sobre estos temas.
El texto del cuento es el siguiente:
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permite
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aún escribir a la velocidad necesaria para producir un texto extenso y bien
organizado. Este ejercicio permite responder a algunas preguntas que con
frecuencia nos hacemos. Por ejemplo: - ¿Tengo que escribir el texto tal como me
lo dictan los niños o puedo intervenir? Indudablemente, la respuesta desde esta
perspectiva es que el maestro no solo puede, sino que debe intervenir. Pero no se
trata de que el docente embellezca el texto para que quede mejor, sino que
interactúe con los niños para que juntos, compongan un texto superior. - Pero si es
el docente quien escribe ¿aprenden algo los niños?
Una conclusión del ejercicio descrito anteriormente es que con las lecturas
realizadas y con la escritura de cuentos, los niños aprenden a organizar las ideas,
a ordenarlas, a darles coherencia, a relacionar palabras utilizando conectores y
sinónimos, algo de sintaxis. Este aprendizaje se genera en colaboración con el
docente, sin necesidad, incluso, de que los niños escriban “con sus mismas
manos”. Desde un referente vygotskiano se plantea que, en situaciones
socialmente estructuradas (tales como la escritura grupal de textos) los niños
asimilan la ayuda que reciben de su docente, por lo que gradualmente mejoran la
calidad de los textos o cuentos que posteriormente escriban en forma
independiente. Discusión sobre las implicaciones didácticas de los Proyectos Escolares
Con lo realizado se procura configurar un modelo de instrucción en el que los
estudiantes planean, opinan e implementan Proyectos escolares que tienen
aplicación en el mundo real más allá del aula de clase.
Para mejorar la lectura y la calidad de los textos o cuentos que escriban los
niños, no es suficiente que participen una y otra vez de escenarios de escritura
con su docente. Así como los aprendices del SENA practican, por ejemplo los de
confecciones con retales de tela, los niños deben practicar componentes parciales
del proceso de producción de textos para poder, con el tiempo, lograr cada vez
mayores responsabilidades. ¿Cuáles serían esos componentes? Claramente se
evidencia que los niños necesitan adquirir buenos niveles de comprensión lectora
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y producción de textos. Para avanzar en los ejercicios se flexibilizo en la ortografía
y en las tildes, con el fin de mejorar la retención y expresión de ideas.
Adicionalmente los niños deben lograr y ejercitar conocimientos
específicamente textuales. Desarrollar su propio estilo de lenguaje escrito,
acostumbrarse a reconocer (aunque no necesariamente a nombrar) las partes de
un cuento, a mantener el tiempo verbal (los niños y los adultos suelen comenzar
un cuento en un tiempo y continuar en otro), deberán aprender a utilizar
conectores, sinónimos y sintaxis. ¿Qué involucra todo esto en términos de la
organización del proceso de enseñanza de la comprensión lectora y de la
producción de textos?
Pues no es suficiente con generar un escenario o un espacio de taller de
lectura y de escritura, por ejemplo una o dos veces por semana. Es necesario que
esos talleres y Proyectos sean parte de un proceso de enseñanza planificado y
estructurado en el que varíe el grado de participación de los niños y en el que
permanentemente se introduzcan situaciones o escenarios para el aprendizaje de
aspectos específicos de las áreas escolares, del proceso de lectura y producción
textual, en estrecha relación con los temas o Proyectos 9que interese a los niños y
despierten su creatividad. En otras palabras, que esta metodología, que los
elementos de didáctica aquí propuestos, hagan parte del plan de estudios y del
PEI; es decir, una estrategia de largo plazo y centrada en el estudiante, en vez de
lecciones cortas y aisladas.
Con esta metodología los escenarios podrán ser propicios para que los niños
produzcan textos (cuentos, narraciones o descripciones) con sus maestros (en las
que el docente tenga un mayor grado de responsabilidad e interacción con los
niños dentro de su Zona de Desarrollo Potencial), allí los niños podrán practicar
los componentes parciales del proceso de escritura individual, básicamente pensar
brevemente en el tema a escribir y la redacción propiamente dicha del texto
pensado, (la revisión no se trabajo individualmente). De esta manera cada niño
colocaba en juego su Nivel de Desarrollo Real. No se trata de una secuencia fija, 9 Si bien en este caso fue la huerta escolar el Proyecto seleccionado por los niños, en el ejercicio se escucharon otras ideas como la construcción de la cancha de futbol, una visita al zoológico, mejorar el parque o visitar el acueducto. Lo importante es que sea un tema que interese a los niños. Igualmente se podrían incluir otras áreas como las matemáticas, la convivencia o la conservación del medio ambiente.
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sino de situaciones o escenarios que cada docente organiza y ejecuta en función
de las necesidades de su grupo.
Es de señalar que las zonas de desarrollo real y desarrollo próximo son
conceptos que acompañan los proyectos escolares, son un motivo para
reflexionar, pero dada la limitación de la investigación no se desarrollan ni se
demuestran empíricamente, debería ser motivo de otra investigación para
perfeccionar la estrategia didáctica.
En el desarrollo del trabajo con los niños, se consideró que, en las
situaciones de escritura individual de textos, los alumnos tendían a omitir la
escena de los cuentos y no presentaban adecuadamente a los personajes. Se
realizaron algunos ejercicios: se les presentó una oración como: “Una mañana, el
grillo despertó y la mariposa no estaba en su rama.” y se propuso a los alumnos
que, entre todos, inventaran la escena más apropiada para ese suceso inicial.
Consecutivamente se repitió la situación con otra oración, los niños trabajaron en
parejas, sin el apoyo del docente. Cuando se repitió el ejercicio de escribir cuentos
con sus alumnos, en forma individual, la calidad de las escenas producidas
mejoró notablemente.
Con lo anterior se han propuesto y ejemplificado escenarios de componentes
o aspectos cruciales del proceso de enseñanza de la lectura y de la producción de
textos (cuentos a partir de un proyecto o situación escogida por los niños). Este
modo de concebir el proceso de enseñanza y de aprendizaje se podría extender a
los grados y ciclos de la básica primaria. Y lo más importante, de acuerdo con lo
observado, todos los niños pueden aprender.
La comprensión lectora debe ser una habilidad transversal o una competencia
transversal permanente en el proceso de enseñanza, que debe tener el énfasis en
la comprensión, análisis y aplicación de los conceptos más que en la
memorización de los contenidos. En donde la aplicación a la solución de
problemas del entorno evidencie la utilidad de la actividad escolar.
Aunque se debe lograr un equilibrio entre contenidos, competencias y
aplicación de conceptos, es útil reseñar que,
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… se está enseñando y aprendiendo tanto contenidos (de ciencias,
sociales) como formas de discurso y prácticas de comprensión y de
producción textual en casi todos los momentos de la vida escolar. Rincón,
G. (2005: 68)
A manera de conclusión Si leer comprensivamente es exigente, escribir lo es mas. La escritura evidencia
asimilación de los temas leídos, el grado de desarrollo cognitivo, la formación de
conceptos, la imaginación y la capacidad de abstracción que alcance el niño en el
proceso de instrucción básica, en donde el docente o el acompañante tiene un
papel fundamental. La producción textual rompe con la oralidad a la que están
acostumbrados los estudiantes. Por ello reiteramos que los énfasis de una
didáctica o metodología renovada para mejorar la enseñanza de la lectura y de la
producción de textos, deben estar centrados en facilitar escenarios propicios, los
Proyectos escolares participativos, que logran la motivación en los niños y se debe
revisar la pertinencia temática de los textos para avanzar en una didáctica que
potencie la competencia de lectora y escritural en niños de básica primaria.
El proceso que permite conocer y entender de una manera sistemática la
realidad que rodea al niño y al ser humano, es la lectura, herramienta que
posibilita abrir nuevos horizontes en el campo del conocimiento y de la vida en su
entorno, teniendo en cuenta que si los niños leen comprensivamente, pueden
ampliar su nivel de entendimiento dentro y fuera del aula.
De manera más general, con lo anterior queremos contribuir a que las
comunidades educativas, en particular sus familias, ayuden a que los niños
entiendan que la lectura y la producción de textos, es un medio propicio para ser
buenos ciudadanos, competentes en varios oficios, demostrando así que el
conocimiento es una fuerza productiva y un factor de competitividad. La educación
básica primaria, debe dotar a los niños de conocimientos y herramientas
fundamentales para la actividad humana, es primordial para que aprendan a
desarrollar sus habilidades y destrezas, de modo que les abra puertas en la
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educación en tecnología, continuar con niveles educativos superiores, formación
en artes u oficios o formación profesional. Igualmente para complementar en
términos de las competencias, que les habiliten para el trabajo en armonía con su
comunidad y con la naturaleza.
Es necesario señalar que el éxito o el fracaso de los estudiantes dependen en
gran medida de su capacidad para comprender palabras, símbolos, números y
emplearlos correctamente, por ello se han propuesto elementos para avanzar en
la descripción de una didáctica que contribuya a que los niños, logren leer
comprensivamente y resuelvan problemas de su contexto.
Se señala que la lectura y la escritura preparan al niño para la vida, y que de su
dominio, dependerá que ese objetivo del milenio, la educación básica primaria no
solo sea un enunciado universal, sino que sean pilares para sus vidas cotidianas,
para la convivencia, para su autonomía, para avanzar en el desarrollo humano de
esas comunidades con las que nos encontramos laborando e interactuando como
docentes.
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