Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

17
Misterios dolorosos martes y viernes

Transcript of Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Page 1: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Misterios dolorosos

martes y viernes

Page 2: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Primer misterioLa oración de Jesucristo en el huerto

Page 3: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Al llegar al sitio, les dijo: orad para que no entréis en tentación. Se apartó de ellos, alejándose como a un tiro de piedra, y se puso a orar diciendo: Padre, si quieres, aparta de mí este cáliz; pero, que no se haga mi voluntad sino la tuya. Se le apareció un ángel del cielo, que lo animaba. Lleno de angustia oraba con más instancia; y sudó como gruesas gotas de sangre, que corrían hasta la tierra.

Lucas 22, 40-44

Page 4: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Padre NuestroAve María x 10Gloria

Page 5: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Segundo misterio dolorosoLa flagelación

Page 6: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Entonces tomó Pilato a Jesús y lo mandó a azotar.

Juan 19, 1

Page 7: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Padre NuestroAve María x 10Gloria

Page 8: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Tercer misterio dolorosoLa coronación de espinas

Page 9: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Entonces los soldados del gobernador, tomando a Jesús, lo condujeron al pretorio, y, reuniendo en torno a Él a toda la cohorte, y despojándole de sus vestiduras, le echaron encima una clámide de púrpura, y tejiendo una corona de espinas, se la pusieron en la cabeza, y en la mano una caña; (…)

Mateo 27, 27-29

Page 10: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Padre NuestroAve María x 10GloriaOh Jesús:

Page 11: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Cuarto misterio dolorosoJesús con la cruz a cuestas

Page 12: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Tomaron, pues, a Jesús, que llevando su cruz, salió al sitio llamado Calvario, que en hebreo se dice Gólgota.

Juan 19, 17

Page 13: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Padre NuestroAve María x 10Gloria

Page 14: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Quinto misterio dolorosoLa crucifixión y muerte de Jesucristo.

Page 15: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Era ya como la hora de sexta, y las tinieblas cubrieron toda la tierra hasta la hora de nona, oscureciose el sol y el velo del templo se rasgó por medio. Jesús, dando una gran voz, dijo: Padre en tus manos entrego mi espíritu; y diciendo esto, expiró.

Lucas 23, 44-46

Page 16: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Padre NuestroAve María x 10Gloria

Page 17: Misterios dolorosos martes y viernes. Primer misterio La oración de Jesucristo en el huerto.

Dios te salve reina y madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra Dios te salve, a ti llamamos los desterrados hijos de Eva. A ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra. Vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos, y despues de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre, oh clemente, oh piadosa, oh dulce Virgen María. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.