Mi amado me dijo…¡Mira! El invierno ha pasado y con el se han ido las lluvias. Ya han brotado flores en el campo, ya ha llegado el

tiempo de cantar.

Cantares 2:10-12

Era muy hermosa. Era

huérfana.Su valor es indudable. Arriesgó su

vida al aparecer

ante Asuero sin ser

llamada. Sus acciones fueron

decisivas, realizadas con mucho tacto. Era

una persona de carácter.

Esta mujer abundaba en

buenas obras y en Iimosnas que

hacía.» Se dedicaba a coser vestidos y túnicas para los pobres.

Tabita es una expresión del amor cristiano

transformado en hechos. Apela a la

acción de las mujeres que, por

su edad, o su posición, o

circunstancias, no tienen ninguna otra vocación

específica. Nos enseña que la

pobreza puede ser mitigada

efectivamente en el nombre de

Jesús.

La fe de Rut es simple y

transparente. Un servicio humilde y

tranquilo, sin mancha de

orgullo o altivez espiritual. Rut, la moabita, fue incluida en la línea de los elegidos por

Dios para formar la línea de la que nació el Salvador. Rut fue la bisabuela

de David.

Esta mujer no podemos decir que fuera un modelo de

virtudes .Era sin duda una

mujer no muy recatada, Y sin

embargo, Dios, dirige las

cosas de tal forma que esta mujer mundana,

superficial y probablement

e inculta, recibe una revelación

extraordinaria, Jesús en

cambio la escogió para

convertirla y le indujo a hacer una confesión

de fe.

El misterio de la fe se

realiza en su corazón.

Sara consigue ser una mujer

con dignidad.

Sara no se aceptaba a sí misma. Sara vivió por fe.

Por fe recobró su valor como mujer. Sara

es una princesa entre las mujeres.

 Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. 

Proverbios 31: 30