Oracion de La Secre

2
ORACIÓN Dame, ¡oh Señor! La paciencia de Job. La sabiduría de Salomón. La discreción de María. La lealtad de Juan Apóstol. La hacendosidad de Martha. Haz: Que me despierte cada mañana con una amplia sonrisa, dispuesta a comprender el mundo entero. Que no me llamen sólo los trabajos fáciles, pues es tan satisfactorio hacer lo que otros esquivan. Permíteme ser: Activa, sin ser llamativa. Recatada, sin ser mojigata. Correcta, sin ser altiva. Elegante, sin llegar a la exageración. Te doy gracias Señor por haberme colocado en este trabajo donde puedo ganar el pan de cada día, sirviéndote a ti, a mi prójimo, a mi empresa y a mi patria. Te doy gracias Señor por permitirme ser una profesional y que con mi trabajo pueda sostener a mi familia y sentirme útil en la sociedad, que pueda involucrarme con la prosperidad de los seres que amo.

description

consejos de etiqueta

Transcript of Oracion de La Secre

Page 1: Oracion de La Secre

ORACIÓN

Dame, ¡oh Señor!

La paciencia de Job.

La sabiduría de Salomón.

La discreción de María.

La lealtad de Juan Apóstol.

La hacendosidad de Martha.

Haz:

Que me despierte cada mañana con una amplia

sonrisa, dispuesta a comprender el mundo entero.

Que no me llamen sólo los trabajos fáciles, pues

es tan satisfactorio hacer lo que otros esquivan.

Permíteme ser:

Activa, sin ser llamativa.

Recatada, sin ser mojigata.

Correcta, sin ser altiva.

Elegante, sin llegar a la exageración.

Te doy gracias Señor por haberme

colocado en este trabajo donde puedo

ganar el pan de cada día, sirviéndote

a ti, a mi prójimo, a mi empresa y a mi patria.

Te doy gracias Señor por permitirme ser una profesional y que con mi trabajo pueda sostener a mi familia y sentirme útil en la sociedad, que pueda involucrarme con la prosperidad de los seres que amo.

Dame, ¡oh mi Señor! La paciencia de Job, la sabiduría de Salomón, la discreción de María, la lealtad de Juan Apóstol y la hacendosidad de Martha.

Page 2: Oracion de La Secre

Haz Señor que me despierte cada mañana con una amplia sonrisa, dispuesta a comprender el mundo entero. Que no me llamen sólo los trabajos fáciles, pues es tan satisfactorio hacer lo que otros esquivan y asumir nuevos retos, teniendo la oportunidad de aprender.

Permíteme ser Señor, activa sin ser llamativa; recatada sin ser mojigata; correcta, sin ser altiva; elegante, sin llegar a la exageración y arrogancia, alegre y entusiasta.

Señor, te doy gracias por haberme dado una labor que me permita realizarme como mujer, sirviéndote a ti, a mi prójimo, a mi empresa y a mi patria, que no me sienta desvalorada ni menospreciada, pues la función que realizo aunque no sea siempre reconocida sé que es vital.