Plan tabaquismo

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Programa innovador para e tratamiento del tabaquism

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Programa innovador para el tratamientodel tabaquismo

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Introducción

Poco más de mil millones de personas fuman en todo el mundo y cerca de

6 millones mueren anualmente por el consumo y la exposición al humo del cigarro,

es por esto que se necesitan implementar programas de atención como el que a

continuación se presenta. Este programa está diseñado para durar 7 semanas,

una sesión por semana, en las cuales le enseña a la persona adicta a cómo

superar esta enfermedad, cuales son los factores de riesgo en su salud física y

mental si se resiste a dejarla, entre otras cosas.

Este programa está diseñado para poder aplicarse a distintos tipos de

públicos, desde adolescentes hasta adultos.

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Origen y otros aspectos sobre el tabaquismo

Parece ser que el origen del tabaco estuvo en la zona andina entre Perú y

Ecuador y podemos fecharlo entre el 5000 y el 3000 a C. Cuando los españoles

llegaron a finales del siglo XV su consumo se había extendido por todo el

continente. Sus usos eran diversos: se fumaba, se masticaba, se comía, se le

daba usos medicinales, rituales y hasta afrodisiacos. Cristóbal Colón escribió en

su diario que los españoles se quedaron asombrados al ver a los indios con un

tizón encendido en las manos y expulsando humo por la boca.

En Cuba mandó a dos de sus hombres, Luis de la Torre y Rodrigo de

Jerez a explorar la isla y comprobaron que esta costumbre estaba muy extendida

e incluso a uno de ellos, Rodrigo de Jerez, le gustó la experiencia terminando

enganchado a ella. Cuando llegó a España el vicio casi la cuesta caro. Se puso a

fumar expulsando el humo por la boca y la nariz dejando perplejos a todos los que

le rodeaba. Fue denunciado por brujería y la Inquisición le condenó a siete años al

pensar que sólo el diablo podría darle a un hombre el poder de echar humo por la

boca. Buen método para dejar de fumar.

El punto es que el consumo de tabaco es una de las principales causas de

muerte en todo el mundo. No fue un problema serio hasta los años de la primera

revolución industrial, cuando comenzó a masificarse. Aparecieron empresas que lo

convirtieron en un negocio muy rentable de hecho no se diferenciaba entre adultos

y niños. Hasta se promocionaba por tener supuestos fines terapéuticos. De allí en

adelante las consecuencias de salud se extendieron hasta llegar a la actualidad: la

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OMS calcula que se producen 1.000.000 de muertes al año relacionadas

directamente con el tabaquismo. La gran mayoría por cáncer.

Componente(s) psicoactivo(s)

La nicotina es un alcaloide (droga) que se encuentra de forma natural en

las hojas de tabaco. La forma más común de consumo de tabaco son los

cigarrillos, un cigarrillo está compuesto de tabaco, papel y hasta 599 aditivos. Se

calcula que existen más 4000 sustancias tóxicas y cancerígenas en el humo de

tabaco, Otros productos de tabaco son las pipas, puros, tabaco para masticar,

entre otros.

Mecanismo de acción

El principal componente químico del tabaco es la nicotina, sustancia

farmacológicamente activa de doble efecto, estimulante y sedante. La forma más

frecuente de administración es fumada, pues a través de la absorción por los

bronquios, alcanza niveles plasmáticos, suficientes para atravesar la barrera

hematoencefálica, llegando a la vía dopaminérgica en el sistema nervioso central

en pocos segundos, lo que proporciona efectos rápidos y placenteros, en casi 7

segundos.

Efectos agudos y crónicos al consumo

Fumar, causa dependencia y síndrome de abstinencia a la nicotina. Estos

síntomas aparecen al cabo de unas pocas horas (2-12 horas) y pueden

extenderse un promedio de cuatro semanas o más tiempo. El alquitrán, el

monóxido de carbono y otras sustancias irritantes que se encuentran en el cigarro,

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aumenta el riesgo de que un fumador desarrolle cáncer de pulmón, enfisema y

trastornos bronquiales, enfermedades cardiovasculares. Las mujeres

embarazadas tienen un mayor riesgo de sufrir un aborto espontáneo o que sus

bebés tengan un bajo peso al nacer. La inhalación pasiva del humo también

produce daños. El consumo de tabaco se ha visto asociado a diferentes

problemas psicológicos: trastornos del estado de ánimo, esquizofrenia,

alcoholismo, trastornos de ansiedad y trastorno de déficit de atención con

hiperactividad, principalmente, al estado de ánimo deprimido.

Clasificación de los fumadores

Fumador leve: Es el que consume menos de 5 cigarrillos en promedio por

día. Tiene hasta 15 veces mayor probabilidad de padecer cáncer de pulmón que

la población no fumadora

Fumador moderado: Es el que fuma entre 6 y 15 cigarrillos promedio por

día. Aumenta hasta 40 veces las probabilidades de cáncer de pulmón.

Fumador severo: Fuma más de 16 cigarrillos por día en promedio.

Incrementa hasta 60 veces la probabilidad de cáncer de pulmón.

En cuanto al tabaquismo, poco más de mil millones de personas fuman en

todo el mundo y cerca de 6 millones mueren anualmente por su consumo y la

exposición al humo de éste. El tabaquismo causa 71% de los cánceres de pulmón,

42% de las enfermedades pulmonares crónicas y 10% de las enfermedades

cardiovasculares.

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Por otro lado, el consumo de tabaco no sólo implica graves daños a la salud

individual; también ocasiona pérdidas de productividad laboral, mortalidad

prematura y elevados costos para el sector salud. Además, tiene un impacto

negativo en la economía individual y familiar ya que el dinero que se gasta en

tabaco deja de invertirse en alimentos y otras necesidades básicas como

educación y salud. Para hacer frente a esta epidemia global, la OMS convocó en

2003 a la creación del Convenio Marco para el Control del Tabaco, el cual hasta

2012 estaba ratificado por 174 países, dentro de los cuales México es signatario

de mismo desde el año 2003.

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Sesión 1: Concientización

Dar a conocer los tipos de fumadores y hacer que puedan identificar

el suyo.

Objetivo: Concientizar a la persona adicta sobre su adicción.

¿Qué es el tabaquismo?

Es un fenómeno social de primera magnitud, que prevalece en personas de

diferentes edades y status social. El tabaquismo es una adicción, así como el

alcoholismo, las drogas entre otros, ya que este tiene nicotina el cual se considera

una sustancia altamente adictiva y causa de muerte, por lo cual se considera una

drogadicción. El tabaquismo ha prevalecido desde hace mucho tiempo, por lo cual

se debe hacer conciencia en qué grado se está de adicción para así poder seguir

con un tratamiento para la erradicación de esta adicción.

El tabaquismo no solo afecta a la persona, sino que afecta a su familia

incluso a los que trabajan con él y todo aquel que le rodee, por lo cual es la

importancia de hacer conciencia para cambiar este estilo de vida. Algunas causas

de tabaquismo son el envejecimiento prematuro, cáncer de pulmón, deterioro de la

dentadura, enfisema pulmonar, ulcera gástrica, cáncer en la mujer y abortos, daño

en los espermatozoides. La razón por la cual es difícil de dejar de fumar es por los

altos contenidos de dopamina aumentada en el cuerpo lo cual causa sensación de

placer o bienestar, y a las 48 horas de dejar el cigarro genera sensación de

ansiedad, vacío, irritabilidad y problemas para dormir.

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Por lo cual es mejor dejar de fumar para evitar todas estas enfermedades y

consecuencias lentas y dolorosas que provoca el ser un adicto al cigarrillo. Para

saber qué tipo de fumador soy estas son algunas de las características:

Fumador leve: Es el que consume menos de 5 cigarrillos en promedio por

día. Tiene hasta 15 veces mayor probabilidad de padecer cáncer de pulmón que

la población no fumadora

Fumador moderado: Es el que fuma entre 6 y 15 cigarrillos promedio por

día. Aumenta hasta 40 veces las probabilidades de cáncer de pulmón.

Fumador severo: Fuma más de 16 cigarrillos por día en promedio.

Incrementa hasta 60 veces la probabilidad de cáncer de pulmón.

También nos encontramos con la primera calificación que son los

fumadores activos y los pasivos.

Activos

Son los fumadores propiamente dichos, las personas que fuman

directamente el cigarro.

Pasivos

Es aquel que pese a no consumir directamente el tabaco inhala las

sustancias toxicas y cancerígenas provenientes de la combustión del cigarrillo y

que se dispersan en el humo. Este humo inhalado es denominado “humo

secundario” el cual es una mezcla residual entre humo de cigarro y el exhalado

por el fumador.

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Dejar de fumar es una de las cosas más importantes que hará jamás:

Vivirá más años y vivirá mejor.

Al dejar de fumar se reducirá la posibilidad de que sufra un ataque al

corazón, una embolia o cáncer.

Si está embarazada, dejar de fumar aumentará la posibilidad de tener un

bebé saludable.

Las personas que viven con usted, especialmente los niños, serán más

saludables.

Tendrá dinero adicional para gastar en otras cosas y no en cigarrillos.

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Sesión 2: ¿Cuáles son las enfermedades que se asocian al consumo del

tabaco?

Objetivo: Hacer conciencia de las enfermedades y su gravedad que

provocan la adicción al tabaco.

El tabaquismo se relaciona con varios tipos de enfermedades. Las más

importantes por su gravedad son:

Cáncer

El riesgo de desarrollar cáncer de pulmón en la población fumadora es

de 5 a 20 veces mayor que en sujetos no fumadores

El consumo de tabaco también incrementa el riesgo de otros tumores

como ser laringe, lengua, glándulas salivales, labio, boca y faringe, esófago,

vejiga, riñón, cuello uterino, mama, páncreas y colon.

Enfermedades cardiovasculares

Las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de

muerte en la provincia de Bs.As. (35%), siendo la enfermedad coronaria la más

frecuente.

Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC)

La EPOC comprende dos grandes grupos de enfermedad pulmonar: la

bronquitis crónica y el enfisema. El desarrollo de EPOC aumenta con la edad,

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existiendo también una dramática asociación con el tabaquismo, de modo que

los fumadores tienen más alta prevalencia, mortalidad y pérdida de la función

pulmonar, dependiente de la cantidad fumada.

Tabaco y salud de la mujer y el niño.

En la mujer fumadora, además del riesgo de contraer cáncer de pulmón y

enfermedades cardiovasculares, se ha demostrado una mayor incidencia de

otros tumores (mama, cuello uterino). Por otra parte, el tabaquismo en las

madres puede afectar a los niños pequeños, al estar muchas horas en íntimo

contacto con ellas.

La imitación a los padres en los gestos de fumar incitan a los niños a probar

el cigarrillo.

El fumar durante el embarazo también produce riesgos particulares para los

bebés.

El bajo peso al nacer y retardo del crecimiento intrauterino, son más

frecuentes entre las mujeres que fuman que entre las que no lo hacen.

Por otra parte, se ha descripto un riesgo incrementado del síndrome de

muerte súbita entre los niños cuyas madres fuman.

La exposición al humo de tabaco ambiental (Tabaquismo Pasivo) causa una

variedad de efectos adversos en los niños, incluyendo infecciones del tracto

respiratorio como neumonía y bronquitis, tos y dificultad respiratoria,

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empeoramiento del asma y otitis media, contribuyendo además a la

enfermedad cardiovascular en el adulto.

Diversos estudios han mostrado un aumento de riesgo de cáncer de pulmón

y de enfermedades coronarias en fumadores pasivos.

El tabaquismo materno durante el periodo de gestación es el origen de un

deterioro de la función pulmonar en niños de entre 6 meses y 10 años.

El tabaquismo pasivo en los niños aumenta la frecuencia y severidad de la

enfermedad asmática.

Los daños que causa la combustión del cigarro, comienzan desde el primer

momento en que la persona fuma un cigarro.

1. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el humo del

tabaco se detectan al menos 4 mil productos químicos conocidos de los

cuales 50 son cancerígenos y 250 son nocivos para el ser humano, pero

¿qué daños físicos puede tener la persona que fuma el tabaco?

2. Para José Carlos Herrera, neumólogo del ISSSTEP, uno de los principales

daños es el depósito de la nicotina en la piel, pues al entrar en contacto,

la combustión del cigarro afecta la mano, los dedos, labios y lengua del

fumador.

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3. El especialista indica que la piel es un sistema de defensa contra agentes

externos y es el primer órgano que se daña y que resiente los efectos. Sin

embargo, lo que aún se investiga, es el tiempo que tiene que transcurrir

para que el cigarro comience a manifestar el daño en el paciente.

Pérdida de gusto e impotencia sexual

Herrera comenta que los depósitos de la nicotina en la piel se

manifiestan en puntillos amarillentos o negruzcos, a nivel de los dedos, uñas,

dientes y labios.

Otra característica, es que el color de la piel se torna entre grisáceo

amarillento, además de que el fumador va perdiendo el esmalte de los dientes

y comenzando a tener un color amarillo en dientes y uñas.

El tabaquismo propicia la aparición de arrugas y la caída del cabello; altera

el gusto, pues se va perdiendo la capacidad para distinguir los sabores e incluso

se presentan tumoraciones en el epitelio y lengua; así como faringitis, laringitis,

sinusitis, osteoporosis.

Puede ocasionar disminución de la fertilidad en la mujer e impotencia

sexual en el hombre.

El neumólogo indica que internamente, el cigarro provoca una quemadura u

oxidación en el epitelio y en el caso del pulmón comienzan a haber “huecos” y

mayor cantidad de aire que no se está respirando; en el corazón, las arterias se

endurecen y van perdiendo su color.

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El especialista señala que si las arterias pierden este tono, se forman

grumos que pueden provocar un infarto. Advierte que los depósitos de la nicotina

no solo se van quedando en la piel, sino que la pueden perforar, llegando a vasos,

nervios y arterias.

Señala que los fumadores están expuestos a tener insuficiencia vascular

periférica ocasionando un daño sistémico, es decir, sus arterias, vasos, piel y

nervios comienzan a tener un endurecimiento.

Al haber este endurecimiento, se liberan sustancias que se impregnan en

los demás órganos y que la piel se pueda abrir, se pueda hacer úlceras que

difícilmente se pueden cerrar si se sigue fumando.

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Sesión 3: Efectos del cigarrillo sobre la familia.

Objetivo: Concientizar a la persona adicta, sobre los efectos negativos que

trae su adicción hacia su familia y personas que lo rodean.

No existen hábitos, tanto positivos como negativos, que no afecten de alguna

manera a la familia. Cuando un integrante fuma, el cigarrillo se convierte en un

elemento familiar más y las consecuencias que genere, también serán

compartidas por todos.

Estos son algunos ejemplos de los efectos del cigarrillo sobre la familia.

Convierte en fumadores pasivos a todos los integrantes por la inhalación

del humo del tabaco.

Aumenta la predisposición  de los niños a padecer asma.

Incrementa las posibilidades de las demás personas  de la familia a sufrir

bronquitis y neumonía.

Manifiesta una asociación errónea sobre la ansiedad o problemas y la

supuesta acción relajante del cigarrillo.

Ofrece un modelo a los más pequeños, que aunque intente justificar, está

presente y activo.

Contradice todos los consejos sobre el cuidado del cuerpo, los hábitos y la

salud.

Cualquier efecto negativo que genera en el individuo, influirá

profundamente en la familia.

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Los fumadores pasivos son las personas que aspiran el humo que proviene

de un cigarro encendido o el humo que proviene del fumador. Este humo es

peligroso porque contiene más de 4,000 químicos, de los cuales la mayoría son

sustancias tóxicas que pueden provocar diferentes tipos de cáncer. El humo de

segunda mano no sólo causa problemas a los adultos, daña a los niños y durante

el embarazo, afecta a la madre y su bebé.

El humo de segunda mano durante el embarazo puede causar aborto

espontáneo, parto prematuro, o que los bebes nazcan bajos de peso, retrasando

su crecimiento físico e intelectual, y los recién nacidos cuyas madres estuvieron

expuestas al humo de segunda mano, o que la propia madre fumaba durante el

embarazo son más propensos a morir a causa del Síndrome de Muerte Súbita

Infantil (SIDS) o Muerte de Cuna, el cual provoca que los pulmones o cerebro de

los menores de un año dejen de funcionar.

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SESIÓN 4: DANDO EL PRIMER PASO

Objetivo: Crear el compromiso propio de la persona para dejar de fumar y

comenzar la abstinencia.

Método: Primero confrontaremos al paciente con adicción-consecuencias y

utilizaremos en esta sesión técnicas cognitivo-conductuales.

1.-Compromiso para dejar de fumar…

Comenzaremos preguntándole al paciente lo siguiente…

Piense por qué quiere dejar de fumar…

Que cambios habría en…

a) Mi familia

b) Mi trabajo

c) Mi economía

d) En mi salud

¿Le preocupa que pueda padecer una enfermedad relacionada con el

hábito de fumar?

¿Realmente cree que los beneficios de abandonar el hábito son mayores

que los beneficios de continuar fumando?

¿Conoce a alguien que ha tenido problemas de salud debido al hábito de

fumar?

¿Está listo para hacer un intento serio de dejar de fumar?

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Actividad:

Escribir una carta de compromiso dirigida hacia él.

Calendarizar una fecha específica para fumar una cantidad menor al

consumo normal del paciente, sistematizarla con consumos menores.

Tarea:

Conseguir un objeto sustituto del cigarro o pipa y utilizarlo cuando sea

necesario.

Ir al dentista para aprender a cepillarse correctamente y después en su

hogar repetir las instrucciones dadas por el dentista. Lavarse los dientes con

demasiada meticulosidad (paladar, lengua, pared bucal, encías, dientes).

Colocar la carta en un lugar apropiado para que lo pueda ver el paciente y

reafirmar su compromiso.

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SESIÓN 5: COMO INVOLUCRAR A MI FAMILIA PARA DEJAR MI ADICCION

Objetivo: Utilizar el ambiente donde se desarrolla el paciente para apoyo

ante la abstinencia de fumar.

Método: Realizar una carta; pediremos al paciente que haga una lista de

las personas que están más cerca de él y a continuación escribirles una carta del

porqué necesita apoyo de cada una de ellos y como espera que ellos les ayuden.

El terapeuta debe decir lo siguiente al paciente: “No tenga miedo de hablar

con otros acerca de cómo se siente. Permita que las personas sepan por qué

quiere dejar de fumar y qué tan importante es para usted tener éxito. Dígales lo

que pueden hacer para ayudarle. Incluso sus amigos que siguen fumando le

pueden ayudar al no fumar en su presencia y no ofrecerle cigarrillos”.

Actividad:

Escribir la carta para cada uno de la familia, identificar quienes podrían

perjudicarles en este nuevo paso de cambio en su vida del paciente.

Identificar quienes serán las personas que influyan más para ayudarle a

cambiar.

Hacer un horario cotidiano de su día e identificar donde es más propenso a

fumar, cambiar actividades que convengan y suplir nuevas actividades benéficas

por las actividades riesgosas para su abstinencia.

Tareas:

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Pedir números de celulares de las personas que estarán beneficiando al

paciente para estar en comunicación mayor con ellos.

Alejarse de los lugares y personas dentro de su familia que puedan ser

objetos de recaídas.

En las fechas establecidas y porciones establecidas fumar con la persona

que más es de beneficio para él.

Entregar la carta a cada persona que va dirigida dicha carta, leerla delante de

esa persona a quien va dirigida.

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Sesión 6: Reemplazar el tabaco con conductas positivas.

Objetivo: por medio de conductas, lograr reducir y eliminar el consumo del

cigarro.

Las conductas tienen el objetivo de reemplazar el cigarrillo, y de esta forma,

lograr reducir su consumo hasta eliminarlo.

Primeramente, encuentra las razones psicológicas por las qué fumas, y

desarrolla métodos para confrontar todos los aspectos de tu vida sin dependencia

en el tabaco.

Tu principal estrategia para dejar de fumar será identificar todas las

situaciones cuando fumas ahora. ¿Qué vas a hacer cuando tomes una taza de

café? Solamente tomar café. ¿Qué vas a hacer después de las comidas o cuando

te sientas inquieto? Si no tiene respuestas para estas preguntas será mucho más

difícil dejar de fumar.

Algunas técnicas son las siguientes:

Reemplaza el paquete de cigarrillos con un talismán (por ejemplo, una foto

de un ser querido) o un objeto que te recuerde lo que quieres lograr.

No lleves fósforos o encendedor.

Evita situaciones que asocias con el consumo de tabaco

Mantente ocupado para superar el impulso de fumar

Siéntate en las zonas donde está prohibido fumar en los lugares públicos

Recuerda los riesgos para la salud causados por fumar

Concéntrate en lo que esperas ganar al dejar de fumar.

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Respira profundamente para luchar contra el deseo de fumar

Bebe mucha agua para permanecer hidratado.

Aléjate de lugares donde la gente fuma para evitar la tentación.

Dile a otros sobre tu esfuerzo para dejar de fumar

Pide a tus amigos y a tu familia que te ayuden a dejar de fumar.

Un método para dejar de fumar, es consumir agua al momento de querer un

cigarrillo. El agua engañará a tu sistema para que puedas soportar el no consumir

el tabaco, además de que limpiará tu cuerpo de la nicotina.

Elimina, por ahora, las bebidas alcohólicas o los estimulantes como

cualquier bebida que sea compañera de tus cigarrillos, por ejemplo, el café. Beber

alcohol y fumar es una de las conexiones más fuertes y más difíciles de controlar.

Evitar bebidas excitantes favorecerá que estés más relajado.

Simula que fumas aspirando y soplando, usando, si quieres, un bolígrafo.

Sustituye el cigarrillo de la mano por otro objeto, un bolígrafo por ejemplo.

Otro método es meterte el dedo en la boca, para de esta forma, liberar un

poco la tensión. Otra estrategia es intentar vomitar con ese dedo, para así asociar

el consumo del tabaco con algo desagradable.

Desarrollar un programa de ejercicio bien estructurado es una gran

estrategia. Este será su aliado para combatir las enfermedades y dejar de fumar.

Los ejercicios de fuerza son una parte importante del plan, pero también recuerde

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incorporar ejercicios de alta intensidad con intervalos, ejercicios de fortalecimiento,

aerobics y estiramiento

El correr, jugar algún deporte (especialmente uno donde se requiera mucha

fuerza física), nadar, etc., mantendrán las ganas de fumar alejadas, para así poder

reducir y eliminar el consumo.

En caso de que estos métodos sean inútiles, se puede utilizar un cigarrillo

electrónico o parches de nicotina, para eliminar el cigarro. Aunque estos métodos

son eficaces, la adicción a la nicotina continuará, por lo que se deben dejar

gradualmente, aunque será mucho más fácil.

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Sesión 7: Controlar la ansiedad por dejar de fumar

Objetivo: controlar la ansiedad del síndrome de abstinencia al dejar de

fumar, para poder eliminarlo del sistema.

El dejar el cigarro es una decisión excelente, pero se vuelve complicada al

presentarse un síndrome de abstinencia al decidir dejarlo de tajo, especialmente si

eres un fumador empedernido de hace varios años. Lo más aconsejable en estos

casos es dejarlo gradualmente, aunque esto también generará ansiedad.

La ansiedad se genera por los efectos de la nicotina en el sistema, por lo

que es mejor tenerlo bajo control para evitar una recaída en esta adicción.

Un método es beber mucha agua y toda clase de jugos de frutas

(preferentemente naturales) y ricos en vitamina C. Esta vitamina te ayudará a

eliminar más rápidamente la concentración de nicotina en tu organismo. Repite

esta acción tres o más veces al día.

Cada vez que tengas ganas de fumar, bebe agua a sorbos, despacio, y

piensa a la vez que el agua corre por el interior de todo tu cuerpo, limpiándolo de

nicotina por fuera y por dentro, y que te hace sentirte bien, te tranquiliza y

desaparece el ansia de fumar.

Respira hondo, manteniendo el aire… y así un mínimo de 5 veces seguidas,

a la vez que imaginas tu cuerpo lleno de oxígeno que te limpia y purifica, haciendo

desaparecer la nicotina que provoca la necesidad física de fumar. Mira el reloj y

espera medio minuto. Verás que estas ganas se van como han venido, sólo tienes

que dejarlas pasar.

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Refuerza las creencias positivas de dejar de fumar y plantéate la vida futura

como no fumador: más ejercicio, sustitúyelo por líquidos saludables etc.

Cuando has fumado tu último cigarrillo, tira todos los productos de tabaco

en la basura o quémalos en una hoguera. No se los des a otro fumador, y mucho

menos a un amigo. El desechar tu tabaco es una ceremonia similar a un funeral

que se despide de un viejo modo de vida y abre un nuevo camino.

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Conclusión

El tabaquismo es un problema de salud pública, se estima que casi seis

millones de personas mueren al año en el mundo por enfermedades atribuidas al

tabaco, lo que equivale a una persona fallecida cada seis segundos.

Este programa se elaboró con el principal propósito de ayudar a las

personas a poder superar una de las adicciones más comunes y al mismo tiempo

peligrosas que se tiene en la actualidad. Debido a su estructura, puede aplicarse

de forma individual o en forma grupal, con la única condición de que la persona

realmente quiera mejorara su salud y, como se vio en la sesión tres, mejorar la

salud y la estructura familiar.

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Referencias

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