PROTECCION DE LA MADERA DE USO RURALIII - DAÑOS OCASIONADOS POR ORGANISMOS

XILOFAGOS

La madera, por tratarse de una materia denaturaleza orgánica, puede ser degradada e,incluso, destruida por la acción de organis-mos xilófagos (hongos e insectos) que la uti-lizan como sustrato y alimento para su des-arrollo. Efectivamente, mientras el árbol vivoposee los medios de defensa necesarios paraasegurar la protección de sus tejidos, y enparticular de su madera, contra la acción delos organismos xilófagos, a partir del mo-mento en que se apea el árbol, sus medios dedefensa dejan de actuar paulatinamente, que-dando expuesto a la acción de los organis-mos xilófagos existentes en la naturaleza.

Por las características propias de la maderay las de su utilización, ésta se ve afectada porun tipo u otro de agentes destructores. Pero,podemos hacer, en principio, una diferencia-ción entre madera fresca o recién apeada ymadera puesta en obra.

ORGANISMOS QUE DEGRADANLA MADERA RECIEN APEADA

La madera apeada, por sus características dehumedad (generalmente por encima del 100%)y tener el floema (tejido vivo del árbol situadoentre la corteza y el leño) saturado de sus-tancias nutritivas, fácilmente asimilables, seve atacada por un grupo de hongos e insec-tos de características especiales:

Entre los hongos, los más importantes sonlos causantes del azulado y otras manchas,conocidos genéricamente como «hongoscromógenos» . Se desarrollan, fundamental-mente, en la albura, parte exterior del tronco,más porosa y rica en sustancias de reserva,que les sirven de alimento, por lo que nocausan una verdadera pudrición. Los dañosque producen afectan, exclusivamente, al valorestético, pero no a las propiedades físico-mecánicas de la madera.

Entre los insectos que atacan a la ma-dera fresca, los más abundantes son losque se desarrollan debajo de la corteza y sealimentan del floema, limitándose a arañarligeramente la madera. Por este motivo suacción no repercute negativamente en suresistencia. En este grupo se encuentran grannúmero de especies pertenecientes a las fami-lias Cerambicidae, Bostrichidae y Scolytidae,estos últimos conocidos comúnmente como«barrenillos».

La madera fresca también se ve afectadapor otro grupo de insectos pertenecientes alas familias Scolytidae y Platipodidae, cuyashembras practican galerías en la madera pararealizar la puesta, al mismo tiempo que siem-bran en ellas unos hongos, llamados «hongosde Ambrosía», que sirven de alimento a laslarvas recién nacidas. Debido al color ne-gruzco que los hongos producen en las gale-rías, a este tipo de insectos se les conocevulgarmente como «Polilla negra» . Los dañosque causan no son de gran importancia, yaque al ir disminuyendo la humedad de lamadera, los hongos no pueden proseguir sudesarrollo, por lo que las larvas, al carecer dealimento, mueren.

ORGANISMOS QUE DEGRADANLA MADERA UTILIZADAEN INSTALACIONES RURALES

La madera en cercas, invernaderos, etc.tiene unas características particulares: estaren contacto directo con el suelo, caso de lascercas, invernaderos, piquetes para espalde-ras, etc., o cuando menos a la intemperie, obien, en condiciones en las que pueda alcan-zar una humedad elevada, como es el casode las cajoneras para el cultivo de fresas,comederos, etc. Estas condiciones, las másadversas a que puede estar sometida la

madera, determinan el tipo de agentes des-tructores que van a actuar sobre ella y laintensidad del ataque. Los principales agentespueden agruparse en cuanto a su forma deactuar en: hongos de pudrición, insectos deciclo larvario e insectos sociales.

Hongos de pudrición

Los hongos son vegetales inferiores que,por carecer de clorofila, necesitan tomar sualimento, bien en forma parásita, o bien, enforma saprofita, de otros vegetales. En elcaso que nos ocupa, los hongos de pudriciónse alimentan de los componentes celulares dela madera (celulosa, lignina, etc.), por lo quelas propiedades mecánicas de ésta se venafectadas notablemente, incluso en ataquesaparentemente ligeros.

Los hongos necesitan para su desarrollooxígeno gaseoso, en pequeña cantidad, puestienen suficiente con el que se encuentra enel interior de las células de la madera, asícomo una humedad elevada, por encima del20%. En cuanto a temperatura no son muyexigentes, ya que si bien el óptimo seencuentra, para la mayoría de los hongos,entre los 18 y 28°C, son capaces de vivirentre los 3 y los 80°C. Todas estas condicio-nes se dan habitualmente en la madera utili-zada en las explotaciones.

Atendiendo a la forma en que los hongosdegradan la madera, podemos distinguir trestipos diferentes de pudriciones: pudriciónparda, pudrición blanca y pudrición blanda.

En la pudrición parda los hongos se ali-mentan, fundamentalmente, de la celulosa,por lo que la madera atacada toma colorpardo y al secarse se forman grietas perpen-diculares entre sí, que le comunican el as-pecto de cubos unidos unos a otros, por loque también se la suele conocer como pudri-ción cúbica. Al apretarla entre los dedos sedisgrega en forma de polvo.

La pudrición blanca se caracteriza portomar la madera color blanco al haber des-aparecido de ella la lignina que ha servido dealimento a los hongos; por consiguiente sedisgrega en forma de fibras, circunstancia porla que también se conoce con el nombre depudrición fibrosa.

Estos dos tipos de pudrición afectan a lamadera en profundidad, mientras que el ter-cero, es decir, la pudrición blanda sólo atacaa la superficie, dándole un aspecto espon-joso. En este último caso las exigencias dehumedad de los hongos que la producen sonmuy elevadas, por lo que solamente actúancuando la madera está en contacto perma-nente con una fuente de humedad.

Insectos

En función de su ciclo vital, los insectosxilófagos que atacan a la madera puesta enobra se pueden dividir en dos grandes gru-pos, el de los insectos de ciclo larvario, quecomprende a todos los tipos de carcoma y lapolilla, y los insectos sociales, constituido porlas termitas o termes.

Pudrición parda o cúbica.

Insectos de ciclo larvario

Se conocen como insectos de ciclo larvarioaquellos que a lo largo de su vida pasan porlos tres estados de: huevo, larva y adulto oimago.

Estos insectos hacen daño a la madera úni-camente en su estado de larva. Su ataque esindependiente de las condiciones de puestaen obra de la madera, ya que, al contrario delo que ocurre con los hongos, el factorhumedad interviene muy poco; sin embargo,en muchos casos, dicho ataque se ve favore-cido por una pudrición incipiente del tejidoleñoso que les sirve de alimento.

La presencia de estos insectos no se ponede manifiesto, en la mayoría de los casos,

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hasta que los adultos de la primera genera-ción salen al exterior para aparearse, perfo-rando orificios en la superficie de la madera,debido a que el desarrollo de las larvas serealiza en su interior, teniendo siempre cui-dado de dejar una película superficial queimpide detectar su presencia.

Esta película superficial, más o menosgruesa, que las larvas respetan siempre du-rante su desarrollo y propagación por eltejido leñoso, impide detectar el comienzo deun ataque hasta la salida al exterior de losadultos de la primera generación.

El tamaño y forma de los orificios de salida,así como las características de las galeríaspracticadas por las larvas sirven para diferen-ciar entre sí los distintos tipos de ataques ysus insectos causales, conocidos tradicional-mente como: carcoma, carcoma gruesa ypolilla.

Los insectos conocidos como carcoma per-tenecen a la familia Anobidae, en la que exis-ten especies (Anobium punctatum, Xestobiumrufovillosum Geer, etc.), que atacan a laalbura de frondosas y coníferas. Las hembrasde estos insectos ponen los huevos en lassuperficies rugosas de la madera, en las fen-das e incluso en antiguos orificios de salida.De estos huevos nacen las larvas que pene-tran en la madera practicando galerías y pro-duciendo un serrín granuloso y áspero altacto. Al cabo de tres o más años, las larvas setransforman en adultos que salen de lamadera perforando orificios circulares de 2-3milímetros de diámetro. El desarrollo de estetipo de ataque se ve favorecido por unapudrición incipiente de la madera afectada.

Adulto de Hylotrupes bajulus L. (Carcoma grande).

Dentro del grupo de insectos conocidocomo carcoma grande, el más extendido yque produce mayores daños, es el Hylotrupesbajulus L. que ataca a la albura de las conífe-ras. Este insecto al igual que los demásCerambicidos, familia a la que pertenece, secaracteriza por poseer dos grandes antenas,perforar galerías de sección oval orientadas,generalmente, en la dirección de la fibra, querellena de forma compacta con una mezclade serrín y excrementos, y producir orificiosde salida de sección oval, igual que las gale-rías, de 5 a 7 mm de diámetro. Su ciclo vitales muy variable, pudiendo estar comprendidoentre 2 y 12 años, según que las condicionesde temperatura y el valor alimenticio de lamadera sean más o menos favorables.

Los daños conocidos como polilla son pro-ducidos por los lictidos, insectos que atacanexclusivamente a maderas de frondosas quecumplan las siguientes condiciones:

— Poseer vasos de un diámetro superior oigual a 0,07 mm, tamaño a partir del cual lashembras pueden depositar los huevos en suinterior.

— Presentar un contenido de almidón su-perior al 3% con respecto al peso anhidro.

— Tener una humedad comprendida entre6 y 32%.

Estas condiciones se dan entre otras espe-cies en el roble, olmo, eucalipto, etc.

El ciclo biológico de los líctidos es de unaño generalmente, pero puede reducirse a 3-4meses si el valor alimenticio de la madera es

Ataque de lictidos (po-lilla) en una estaca

de eucalipto.

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muy grande y las condiciones de temperaturason favorables. Sus daños se reconocen porestar constituidos por galerías circulares de 1a 2 mm de diámetro siguiendo la dirección dela fibra y estar llenas de un serrín muy finode consistencia parecida a los polvos detalco. Los orificios de salida de los adultosson al igual que las galerías, circulares, y de1 a 2 mm de diámetro.

Insectos sociales

Las termitas son insectos que viven encolonias con una organización similar a la delas hormigas y abejas, aunque pertenecen aun orden completamente diferenciado, el or-den Isoptera, estando su hábitat restringido alas zonas templadas y cálidas.

En España se encuentran tres especies, delas que solamente una, Reticulitermes lucifu-gus Rossi, produce daños en la madera deuso agrario. Esta especie anida en la tierradonde encuentra las condiciones de humedady temperatura necesarias para su desarrollo.A partir del centro de la colonia, construyennumerosas galerías para acceder a la maderade la que se alimentan.

En una colonia de termes, las funciones dereproducción, defensa de la colonia y alimen-tación están asignadas a individuos diferen-ciados entre sí, y que constituyen las distintascastas: la pareja real, los soldados y los obre-ros; sin embargo, si desaparece la pareja realpuede ser sustituida en su función por ma-chos y hembras neoténicos que adquierennaturaleza sexual. Esta circunstancia tieneuna gran importancia, ya que si por cualquiermotivo queda aislado del resto de la colonia

Colonia de termes en un ensayo de eficacia de protec-tores.

un grupo de soldados, obreros y ninfas,puede reconstruir perfectamente una nuevacolonia, lo que facilita la propagación de laespecie.

Para llegar a la madera, fuente de alimento,los obreros pueden recorrer grandes distan-cias fabricando pequeños túneles donde semantiene el microclima que ellos necesitan, esdecir, oscuridad, humedad y temperatura,siendo capaces de perforar los materiales nodemasiado duros como el yeso, y de sobre-pasar los más duros, como el hormigón o lapiedra, mediante los túneles anteriormentemencionados.

Las maderas más fácilmente atacables porlos termes son aquellas de frondosas y coní-feras que se encuentran en contacto con elsuelo, caso que se presenta en la mayoría delas utilizaciones de la madera en el campoagrario. Este ataque, lo mismo que ocurríacon la carcoma, se ve favorecido por unapudrición incipiente de la madera.

Los daños que los termes producen semanifiestan por la presencia de cavidadesparalelas a la dirección de la fibra, respe-tando una película superficial, que tapizan deuna especie de cemento fabricado con saliva,excrementos, tierra y partículas de madera, loque permite mantener en su interior el micro-clima que ellos requieren.

Aparte de los daños producidos por losorganismos xilófagos, conocidos genérica-mente por agentes bióticos, la madera tam-bién se ve afectada por la acción de otrosagentes, conocidos como agentes abióticos,entre los que se pueden citar los atmosféri-cos, mecánicos, etc., pero cuya repercusiónes menos importante y, sobre todo, su acciónmás lenta.

De todo lo expuesto hasta el momentopodría deducirse que los riesgos de ataqueque presenta la madera para su uso en elmedio agrario hacen más recomendable lautilización de otros materiales más resistentesa la acción de estos organismos, aunqueestuvieran en desventaja desde otros puntosde vista. Nada más lejos de la realidad, puesaunque estos riesgos no pueden ni debenolvidarse, la técnica actual, a un coste relati-vamente reducido, permite su tratamiento ypor consiguiente el aumento de su duración.

A. Navarrete VarelaDepartamento de Maderas

Instituto Nacional de Investigaciones Agrarias