PxM7

download PxM7

of 138

description

Como siempre dedicado a Madrid es este numero veras, el crecimiento de la ciudad en los primeros años después de llegar la Corte, la Inquisición, las pinturas eróticas de nuestras colecciones reales, Un intento de magnicidio real, Un Templo egipcio en Madrid y como puedes descargarte la publicación entera desde nuestra web.

Transcript of PxM7

  • Nmero 7Junio 2015

    PASEA POR MADRID PASEA POR MADRID Historia, turismo cultural y tiempo libreHistoria, turismo cultural y tiempo libre

    Revista digital, formato 16:9, interactiva y multimedia para ordenador, tablet y smartphone.

    EL DESNUDO EN LA PINTURA Y LAS CAMARAS SECRETAS

  • SUSCRIPCINANUAL

    20

    QUIERES RECIBIR ESTA REVISTA EN TU CORREO DE FORMA PERIDICA??

    suscrbete a nuestra intranethttp://www.autoediciones.com/login.php

    En libreras PVP 28.10

    Y remitiremos a tu domicilio sin gastos de envo el libro:

    EL RETIRO PASO A PASOGUA DEL PARQUE258 paginas color.

    Plano del Parque de Retiro.

    Descripcin detallada de 50 puntos de inters.

    Extensas monografas de jardines y zonas especiales.

    Puedes ver mas de150 paginas del libro en:

    http://issuu.com/pasea_por_madrid/docs/el_retiro_paso_a_paso_present

    Promocin valida para 100 ejemplares

    ISBN 978-84-606-8681-1

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid3

    ISSN (EN TRAMITACIN)

    Portada, editorial, diseo, maqueta-cin, composicin grfica, fotogra-fa, de www.autoediciones.com

    AGRADECEMOS LA COLABORACIN DE:

    Castro Martn, ngel - Garca Gmez, Luis - Mateo del Pera, l L. Regino - Mediero, Mara Isabel - Mjica Cuellar, Isabel - Saavedra Alcal, Emilio - Snchez Ceballos, Amadeo - Turrado Vidal, Martn

    Edicin digital

    EDIT

    ORI

    AL

    twitter @paseapormadridemail: [email protected]

    Las opiniones, comentarios y notas son responsa-bilidad exclusiva de los firmantes o de las entida-des que facilitaron los datos para la confeccin de los artculos.

    CRDITOS EDITORIALES

    El prximo nmero de Pasea por Ma-drid sera el octavo, dos aos ya de nues-tra incorporacin a la edicin digital de una revista de historia de nuestra ciudad.

    Insistimos en todos los nmeros pu-blicados hasta la fecha la necesidad de contar con el apoyo de los suscriptores y por ello queremos ofrecerles un incentivo mas para premiar su ayuda.

    Tanto, a los que poco a poco se incor-poran con un incesante goteo mes a mes, como a los que desde un primer momen-to nos ayudaron a sacar la idea de Pasea por Madrid del cajn de los proyectos, les regalamos por su suscripcin la Gua del parque del Retiro, paso a paso, cuyo coste en libreras es el 150 % del valor de la suscripcin a nuestra web, para poder descargar las revistas sin coste.

    El libro es el primero de una coleccin de guas sobre Madrid que se complementa-ra con app para que desde tu smartphone tengas acceso a todo lo que desconoces cuando pasea por nuestra ciudad.

    El prximo libro, ya esta en preparacin para la primavera del prximo ao y te des-cubrir los monumentos del Parque del Oeste, junto a monografas, especificas de este importante jardn.

    En pginas interiores puedes conocer ms sobre esta coleccin y en especial sobre el libro ya editado, del que puedes descargar-te sin coste, mas de 100 paginas de las 260 que tiene la edicion completa.

    Esperamos tu colaboracin.

    PROXIMAMENTE CUMPLIREMOS 2 AOS

    El editor

    PASEA POR MADRID

    Y DAMOS LA BIENVENIDA A ... [email protected]

    cuya presencia se hacia imprescindible.

  • Pasea por Madrid4

    BIENVENIDO

    ... nos hacas mucha falta y como sabemos que otros autores, edito-res, publicistas y muchsima gente ms est en la misma situacin que nosotros, queremos que conozcan tu direccin de email para que puedan solucionar los problemas que se escapan en los tex-tos como, frases demasiado largas, el uso inadecuado de comas, la utilizacin incorrecta de maysculas, comillas y cursivas, el mal uso de gerundios y de la voz pasiva y por ltimo, poner freno a los duendes de imprenta que producen errores de concordancia de gnero y algn acento .... Se puede pedir ms.

    [email protected] garantiza: rapidez, eficiencia, explicacin detallada del motivo de la correccin, cuidado con el detalle, eficacia, consejos prcticos, y sobre todo, un trato amable y cordial que facilita la relacin laboral.

    Correccion de textos profesionalesK

    SACAFALTASs

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid5

    SUM

    ARIO

    3 NUESTROEDITORIAL

    6 NOTICIAS YEVENTOS

    111 EL SEOR DEPUONROSTRO

    10 UNA BODA REAL ENSANGRENTADA

    66 DEBOD, EGIPCIOS EN MADRID

    90

    EL D

    ESN

    UDO

    EN

    LA

    PIN

    TURA

    48

    La revista crece en nmero de pginas y hemos incluido enlaces para favorecer la navegacin.

    Desde el sumario puedes enla-zar con los artculos (hacer clic so-bre cada imagen) y desde cualquier pgina puedes regresar al sumario (clic sobre sumario).

    Desde la ltima pgina de cada artculo tambin puedes navegar al siguiente articulo, segn tu prefe-rencia.

    137 pginas y 250 imgenes que pue-des visionar a gran tamao en un nuevo formato de revista 16:9 para tablet y smartphone.

    Espero resulte ms cmoda su lectura.

    IMPA

    CTO

    DE

    LA

    CORT

    E EN

    MA

    DRI

    D

    39

    CO

    NST

    ITUC

    IN

    DE

    1812

    CA

    RIDA

    D O

    BEN

    EFIC

    ENCI

    A

    127

  • Pasea por Madrid6

    secc

    in

    A SUMARIO

    ENERO2015

    Los autores firmantes de los artculos que habitualmente presenta Pasea por Madrid

    nos han remitidos sus ulti-mas publicaciones de ensa-yo y ficcin que analizamos para su consideracin de lectura ... (continuar)

    Luis Garca

    LA CRUZ DE PUERTA CERRADA

    El primer ttulo de la colec-cin Guas de Madrid, paso a paso, ya esta editado y puesto a disposicin del pblico desde la caseta

    de la librera Multicolor en la Feria del Libro, tras la clausura podrs encontrarlo en nuestra web y en las libreras (continuar pg 108 )

    En el Saln Prncipe del Casino de Madrid, el pasado jueves, da 18, asist a la ponencia de mi buen amigo

    Rafael Flrez. Acto presidido por Gerardo Seco Rdenas, tesorero-contador del Casi-no....(continuar el pg. 59)

    EL MADRID DE RAFAEL FLREZ, EL ALFAQUEQUE

    Regino Mateo del Peral

    El 30 de junio de 1680 se celebra en Madrid un Auto de Fe pblico, aconteci-miento muy poco frecuente

    en la corte de los Austrias. Lleg a tener tanta trascen-dencia meditica que fue solicitado al pintor Francisco de Ricci un lienzo para el palacio del Buen Retiro .... (continuar Pg. 29)

    Isabel Mjica

    NOT

    ICIA

    S Y

    EVEN

    TOS

    A SUMARIO

    ENERO2015

    AUTO DE FE EN LA PLAZA MAYOR DE MADRID

    Es muy comn cuando se habla de la Cruz de Puerta

    Cerrada, terminar hablando de los viajes de agua pero poco mas se dice de...(conti-nuar pg. 80)

    GUA DEL PARQUE DEL RETIRO

    HEMOS LEDO PARA USTEDES

  • DESCARGA LIBRE DE NUESTRAS REVISTAS: PASEA POR MADRID

    Interactiva200 pginasMas de 300 imgenesVdeos y audios

    Tanto nuestra revista como el resto de publicaciones que puedes descargar de nuestra web esta en formato 16:9 como pdf interactivo y mul-timedia, que facilita la lectu-ra en cualquier ordenador, tablet o smartphone.

    Pasea por Madrid7

    VENTAJAS PARA LOS SUSCRIPTORESDESCARGA LIBRE DE NUESTROS LIBROS DIGITALES DE: PARQUES DE MADRID

    El parque del RetiroPlano del itinerario54 fichas de lugares signifi-cativos6 Monografas de intersAudios para incorporar al smartphone o tablet

    SUSCRIPCIN ANUAL

    20 Garantizamos 2 libros anuales similares al parque del Retiro y parque del Oeste de nuestra web:

    www.paseapormadrid.com

    COEDICION DE LIBROS A TRAVS DE NUESTRA EDITORIAL: AUTOEDICIONES.COM

    SIN CARGO:Diseo de cubiertas. Maquetacin de textos.Correccin ortogrfica.Optimizacin fotogrfica.Solicitud de ISBN.Creacin cdigo de barras.Presentacin Deposito Legal.Venta en web propia.

    http://www.autoediciones.com/intranet.php

    Con el obsequio del libro

    EL RETIRO PASO A PASOGUA DEL PARQUE

  • ?CON UN SOLO CLIC SOBRE LA IMAGENENTRARAS EN NUESTRA NUBE, TENDRS ACCESO A NUESTRA CARPETA DE HIST-RICOS Y PODRS BAJAR LOS NMEROS QUE TE INTERESEN DEL PASADO AOS.

    6 nmeros publicados en 2014 2015 - 5742 lectores on line y 116 521 pginas visionadas (a travs de ISSUU) y 40 GB (5800 revistas) de

    descargas directas desde nuestra web (www.autiediciones.com) - 69 Seguidores reconocidos en ISSUU- Peticiones de envo directo a travs de email: 953- Distribucin mundial segn ISSUU (en el grfico) - Espa-

    a ultimos 6 meses 2336 lecturas y resto de pases 1080

    Pasea por Madrid8

    ?

    Tambin puedes hacer las descar-gar desde el buscador google:

    QUIERES DESCARGARTE TODAS LAS REVISTAS DE 2014

  • LA V

    IVIE

    NDA

    OBRE

    RA

    HACE

    CIE

    N A

    OS

    Pasea por Madrid9

    ...Y PORTUGAL SOLT AMARRAS de Carlos Jimnez EscolanoHE

    MO

    S LE

    DO

    ...

    DEL ASILO DE SAN BERNARDINO AL ASILO-ESCUELA DE LA PALOMA de Amadeo Sanchez Ceballos

    SAN ISIDRO ANTES DE SU CANONIZACIN de Emilio Guerra Chavarino

    IMGENES DE LA FIESTA - FOTOGRAFAS TAURINAS de Carlos Gonzalez

    VIAJE DE REGRESO A MI de Eliezer Marrero Correa

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid10

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    El atentado contra el rey Alfonso XIII el da de su boda, el 31 de mayo de 1906, se debe enmarcar dentro de una secuencia protagonizada por grupos anarquistas en contra de los mandatarios de los ms diversos pases.

    Los anarquistas crean que, eli-minando la cspide de la pirmide social y, por una especie de milagro, se producira la revolucin que ellos preconizaban. La mayor parte de la gente ignoraba cules eran las ideas anarquistas y que los grupos que en-tonces existan en nuestro pas nunca hubieran sido capaces de gestionar cualquier tipo de cambio revolucio-nario.

    UNA BODA REAL ENSANGRENTADA: VICTORIA EUGENIA DE BATTENBERG Y ALFONSO XIII

    Por: Martn Turrado VidalInspector Jefe del C.N.P. Vicepresidente del Instituto de Estudios Histricos del Sur de Madrid Jimnez de Gregorio

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid11

    El estudio de este atentado presenta una serie interesante de cuestio-nes que vamos a tratar de recoger de la forma ms abreviada posible. Una muy importante es todo lo relacionado con la posibilidad de pre-venir atentados de este tipo. Otra cuestin sera narrar lo que ocurri, que son datos sobre los que, afortunadamente, no existe discusin y la tercera, las consecuencias y repercusiones de ese atentado.

    Es de gran ayuda para desa-rrollar este tema el conocimien-to de las tcnicas empleadas en la proteccin de personali-dades, porque nos ayudarn a comprender mejor las dificulta-des que entraa la prevencin de aquellos atentados en los que acta un solo autor que no quiere huir del lugar porque est dispuesto bien a morir o bien a ser detenido. Este es el tipo de atentado que mejor en-caja con los hechos que vamos a relatar.

    PROBLEMAS DE PREVENCINMao Tse Tung dijo en una

    de sus obras sobre la guerra de guerrillas: Mata a uno y asustars a diez mil El aten-tado contra una personalidad tiene varios mensajes, que conviene descifrar.

    Primero: para los iguales a aquel contra quien se ha aten-tado se les viene a decir que nadie de la misma categora escapar a la larga mano de la organizacin terrorista.

    Segundo: a los de cate-gora inferior se les dice: Si podemos matar al Rey, lo po-demos hacer con cualquiera.

    El llamado efecto eco o de propaganda es tambin un elemento importantsimo que influye tanto en la eleccin de la posible vctima y del mo-mento adecuado como en el medio empleado para hacer-lo. Se debe matar haciendo el mayor ruido que sea posible, por eso es la bomba el instru-

    Primer monumento en homenaje a las victimas realizado a iniciativa de la duquesa de la Conquista por el escultor Alguer, proyectado por el arquitecto Enrique Mara Repulls y Vargas y destruido durante la Segunda Repblica que tambien cambio el nombre de la calle por el de Mateo Morral, autor del atentado.

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid12

    mento ideal, o provocando mucha sangre, lo que con-vierte al pual en la mejor al-ternativa a la bomba. Ambos, pual y bomba, fueron los instrumentos ms utilizados por los terroristas anarquistas. Por todo esto se debe elegir con sumo cuidado el momen-

    to en que debe tener lugar el atentado. La boda del Rey era una oportunidad nica dada la calidad y la cantidad de los invitados y de los periodistas acreditados para la ocasin. Cualquier cosa que sucediera tendra una resonancia garan-tizada en todo el planeta.

    Estamos, pues, ante un he-cho extraordinario una boda real que atrae la atencin de los terroristas. Las autoridades de la poca eran conocedoras de este riesgo y, ms an, que a estos invitados indeseables se iban a sumar con gran entusiasmo otros muchos como los pimpis madrileos, especializados en desvalijar a los transentes por la Villa y Corte y que, por lgica,

    tambin se estaban preparan-do para hacerlo con cuantos acudieran a participar en las fiestas; los timadores; los carteristas; los pasteros (que eran los modernos trileros) y otros muchos, dignos de figurar sin desdoro en el patio del ilustre Monipodio. Madrid, durante el tiempo que dura-ran los fastos programados con motivo de la boda real, se iba a convertir en la tierra de Jauja, o en El Dorado de toda la gente incluida la des-perdigada por las provincias vecinas que viva dedicada a la industria, muy tradicional por otra parte, de desplumar a los primos, trabajando con la mente para no dar ni golpe con las manos. Frente a estos dos grupos de riesgo se toma-ron las oportunas medidas de prevencin.

    La carga de Ramn Casas.Represin de la conflictividad social derivada de las psimas condiciones de trabajo de los obreros en las fbricas. En estos centros de produccin se extenderan las ideas revo-lucionarias que pretendan la revolucin social que estallo con la Semana Trgica.

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid13

    las diez delegaciones en que estaba dividida y, al lado de ellas, coexistan, dependiendo directamente del gobernador civil, las rondas especiales para el control de la delincuencia y otros servicios ms especializa-dos como eran los del control de viajeros y el de higiene de la prostitucin. Cada uno de ellos actuaba por su cuenta, no exista ningn organismo que estuviera encargado de centra-

    b) La estructura de la PolicaLa estructura de la Polica

    estaba diseada de tal forma que la misma coordinacin dentro de sus propios servi-cios no digamos ya con otros Cuerpos, por ms afines que fueran como poda serlo el de Seguridad poda conside-rarse como algo milagroso. Si tomamos, por ejemplo, el caso de Madrid, tenemos que parte de los servicios dependan de

    terrorismo anarquista, como desarrollo de las leyes antiterro-ristas de 1896, haba fracasado estrepitosamente hasta el punto de que el 31 de marzo de 1906 se haba ordenado su disolucin y se le haba integrado como una seccin especial dentro del Cuerpo de Vigilancia. Con mo-tivo del atentado, nadie lo ech de menos ni culp al Gobierno de haberlo disuelto. Las causas de su fracaso se deben buscar en su excesiva militarizacin y en su dependencia del Cuerpo de Vigilancia, que era quien de verdad controlaba las fuentes de informacin relacionadas con el anarquismo.

    PROBLEMAS INSTITUCIONALES

    Las dificultades para enfren-tarse a los anarquistas eran de dos clases: unas, externas a ellos, otras, internas. Las primeras no dependan, en absoluto, de su voluntad o de la forma de hacer de los anarquistas sino de quienes se oponan a ellos. En esencia se puede decir que las principa-les eran tres: la falta de unos buenos servicios de informa-cin, la desestructuracin de la Polica y la malversacin del dinero destinado a pagar confidencias.

    a) Los servicios de informacin

    No exista un buen servicio de informacin ni en el Ejrcito ni en la Guardia Civil ni en la Polica. El intento de crear un Cuerpo de Polica Judicial que se encargara solamente del

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    En los primeros aos del siglo XX no se pudo asegurar si la Mano Negra andaluza era o no una derivacin anarquista a pesar de las causas juzgadas.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid14

    narramos a continuacin. En plena Guerra de Cuba se detect en Madrid la presen-cia de tres agentes cubanos. Se orden a tres inspectores que no les dejaran ni a sol ni a sombra con la firme promesa de que se les abonaran todos los gastos. Los inspectores de Polica se tomaron este asunto muy a pecho: les siguieron durante mes y medio y gracias a ello el Gobierno pudo tener una informacin puntual y exacta de todos los movi-mientos de esos agentes en Madrid. Cuando termin el servicio, pasaron una factura de 87 pesetas que no sola-mente no les reembolsaron sino que adems les expulsa-ron del Cuerpo de Vigilancia con una nota que impeda su reingreso.

    era que fueran empleadas para sobornar periodistas tanto del Gobierno como de la Oposi-cin (de donde le vino el apela-tivo por el que esta partida fue conocida: fondo de reptiles). La consecuencia prctica para la Polica fue que si quera informacin la tena que pagar de sus propios bolsillos, por lo cual no era tan anormal que sucedieran cosas como la que

    gastos se contemplan invaria-blemente como una partida de los presupuestos desde los primeros Consolidados del Es-tado en 1827. Por esta poca se asignaba al Ministerio de la Gobernacin una cantidad de 425.000 pesetas, que terica-mente debera ser empleada en obtener informacin, cosa que suceda en muy raras ocasiones, ya que lo normal

    lizar las informaciones recibidas desde cualquier cauce. Por esto afirmbamos que poda consi-derarse como milagroso que se coordinaran entre ellos.

    c) Los gastos reservadosLa tercera pata de este pecu-

    liar banco viene determinada por la utilizacin que se haca desde el Gobierno de los gas-tos reservados. En contra de lo que algunos piensan, estos

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Manifestantes durante la Semana Trgica de Barce-lona, (entre el 26 de julio el 2 de agosto de 1909), como consecuencia del decreto del ministro Antonio Maura de enviar tropas de reservistas a las posesiones a Marruecos, formadas por padres de familia de las clases obreras.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid15

    una seccin a emprender una accin para la que no estuvie-ra preparada. Esto tena una consecuencia prctica muy importante: en caso de llevarse a cabo la represin, no se centraba ms que en las sec-ciones que haban secundado la huelga o llevado a cabo la accin revolucionaria. Lo cual quera decir que, imaginando la ms dura de las represiones, siempre haba alguna seccin que sobreviva y que era un ex-celente punto de partida para comenzar de nuevo1.

    Las dos caractersticas orga-nizativas expuestas, tomadas conjuntamente, suponan un serio obstculo para la accin policial. Primero porque, como ya se ha dicho, era imposi-ble llegar al ncleo de los militantes ms convencidos.

    nados servicios que confirman plenamente la veracidad de las afirmaciones de este autor.

    La primera y ms notable era la elasticidad de la misma. Tan pronto reuna a muchsi-ma gente alrededor de un n-cleo como se quedaba el n-cleo completamente aislado y solo. Reunan a unos cuantos obreros simpatizantes, hacan una huelga y, en caso de que triunfase, se duplicaba o tripli-caba el nmero de afiliados. Vena despus la represin y la masa simpatizante se iba des-haciendo, pero impeda que su represin llegara al ncleo anarquista.

    La segunda era que toda accin se realizaba de acuerdo con las bases, y procediendo de ellas. Nunca se obligaba a

    PROBLEMAS DERIVADOS DE LA ORGANIZACIN ANARQUISTA

    Las dificultades internas provenan de la propia estruc-tura de los anarquistas y de los apoyos que reciban, tanto de forma voluntaria como in-voluntaria, para llevar a cabo sus atentados.

    La organizacin anarquis-ta era sumamente peculiar. Como explica Gerald Brenan, tena dos caractersticas que la hacan prcticamente ina-bordable desde afuera y que garantizaban su pervivencia. Es interesante hacer constar en este punto que la tradi-cin oral dentro de la Polica coincide plenamente con estas apreciaciones del Dr. Brenan. Yo mismo he odo contar a vie-jos policas relatos de determi-

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Busto del hispanista Edward Fitzgerald Brenan, (Malta,1894 Mlaga, 1987) que public El laberinto espaol (The Spanish Labyrinth, 1943), el primer anlisis sobre las causas de la Guerra Civil espaola.

    1.- Gerald Brenan, El Laberinto espa-ol, Pgs. 192 y ss.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid16

    Estos atentados son imposi-bles de evitar y puede usted creer que mi nico dolor es pensar que hubiese sido vctima de l, M. Loubet, por acompaarme.

    Por lo tanto, sigue, siendo verdad lo que Alfonso XIII contest al presidente francs, Loubet, cuando le presentaba sus excusas por el atentado de Pars:

    tena que hacer una escala en esa ciudad para embarcarse con rumbo a Cuba. Estevnez tena prohibida la entrada en Espaa, debido a una larga trayectoria de conspiraciones, por lo cual Alejandro Lerroux, en el apogeo de su radicali-zacin, pidi personalmente permiso al conde de Bivona, gobernador civil, para que pudiera embarcar en Barce-lona. El Conde concedi la autorizacin con la condicin de que su paso por Espaa se realizara con el ms riguro-so incgnito. Claro que se hizo como el gobernador de-seaba e impona! Estevnez trajo la bomba desde Pars, la entreg a Ferrer Guardia y desapareci en direccin a Cuba.

    Y segundo, porque era muy difcil saber quin era anar-quista y quin no, porque la organizacin tena un carcter tan abierto como poco estruc-turado, lo que haca muy difcil saber quin era un simpatizan-te, un cotizante, un agitador o simplemente un curioso.

    Las colaboraciones

    Otro problema aadido fue la colaboracin prestada por los republicanos en la fase preparatoria del atentado y la colaboracin involuntaria del Gobierno Civil de Barcelo-na. Segn Romero Maura la bomba utilizada en l la trajo desde Pars a Barcelona el ex-ministro de la I Repblica, D. Nicols Estevnez, am-parndose para ello en que

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Nicols Estvanez Murphy, poltico espaol (18381914). El anarquista Mateo Morral tuvo en el uno de sus princi-pales mentores ideolgicos, y escribi una obra titulada Pensamientos revolucionarios de Nicols Estvanez.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid17

    realizar esa accin. De ello se ocup Soledad Villafran-ca, profesora de la Escuela Moderna y amante de Ferrer Guardia, quien asegur:

    No hay que buscarlo ms, pues le tengo yo. Pensad vo-sotros en lo dems, porque yo tengo juventud suficiente para enloquecer a quien necesitemos.

    Lo encontr muy cerca suyo. Mateo Morral tambin trabajaba en la Escuela Mo-derna como bibliotecario, y se haba enamorado de ella. Sin ninguna necesidad de buscar-lo lo haba encontrado.

    A la luz de estos hechos el papel de Francisco Ferrer Guardia, que result absuelto tras muchas presiones en el juicio que sigui al atentado,

    LA EJECUCIN MATERIAL DEL ATENTADO

    La bsqueda del hombre

    Fue en Pars, tras el aten-tado fallido, donde se de-cidi volver a intentarlo de nuevo en una reunin a la que asistieron republicanos y anarquistas. Como primera medida haba que buscar al hombre que fuera capaz de

    Portada del diario Le Petit Journal n 760 (11/06/1905) en donde se ofrece la noticia del atentado de Alfosxo XIII en Paris.A la salida del teatro de la Opera, Jess Na-varro Botella, joven torrevejense de 23 aos, arroj una bomba contra el carruaje de S.M. don Alfonso XIII y el presidente de Francia, Monsieur Loubet, ambos resultaron ilesos. El Rey, al escuchar la detonacin, se puso en pie y dio vivas a Francia, hecho por el cul fue ovacionado.

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid18

    Entre estos otros pequeos detalles uno concreto debe fi-gurar en un lugar destacado: las instrucciones que Ferrer dio a Morral para que, en el caso de que no fuera deteni-do inmediatamente despus del atentado, se pusiera en contacto con Jos Nakens, el editor de un peridico repu-blicano, El Motn, y que haca trabajos de imprenta para la Escuela Moderna. Ferrer le haba enviado a cuenta

    sente en la financiacin del atentado. Pequeo detalle, sin duda, pero que unido a otros hace comprender que sin su participacin activa el atenta-do hubiera sido imposible de realizar.

    no fue el de cmplice ni el de mero encubridor. Fue el de verdadero coautor. La caja alquilada en el banco y la cuenta corriente, compartidas ambas con Mateo Morral, demuestran que estuvo pre-

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Soledad Villafranca y Francisco Ferrer. Profesora de estudios elementales de la Escuela Moderna, se relacion ntimamente con Ferrer y Guardia, fundador y director de dicha escuela. Aqu conoci a Mateo Morral, que ejerca como bibliotecario. Cuando este realiz el atentado contra los reyes en 1906, se vio envuelta en l junto con su compaero, pero no fue encarcelada, a diferencia de Ferrer, a quien acusaban de haber colaborado en el suceso.

    La escuela Moderna se abri en la calle Bailen, 52 de Barcelona en 1901. Se llevar a cabo una enseanza inspirada en el libre pensamiento, practicando la coeducacin -de sexos y de clases sociales-, insistiendo en la necesidad de la higiene personal y social, rechazando los exmenes y todo sistema de premios.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid19

    cuencia de ello, el primero pint un aguafuerte que regal al segundo. Se sabe a ciencia cierta que la noche in-mediatamente anterior al da del atentado estuvo presente en esa tertulia2.

    una bomba en la Iglesia de los Jernimos. Este hecho le oblig a buscar otro lugar desde el que cometer el aten-tado y encontr entonces una pensin que estaba dentro del trayecto por el que tena que pasar la comitiva real.

    En los das previos al atentado tuvo tiempo para pasearse por Madrid y asistir a la tertulia que los escritores y artistas modernistas cele-braban en La Horchatera de Candelas en la calle Alcal. Pio Baroja se inspir en sus andanzas para escribir una novela: La dama errante y Va-lle-Incln le dedic una poesa titulada Rosa de Llamas. El pintor Ricardo Baroja y Valle Incln se personaron en el depsito de cadveres para reconocerle. Como conse-

    de dos trabajos futuros, 1.000 pesetas que Nakens, sospechando algo, se haba abstenido de cobrar. Este ltimo declar en el proceso que estaba convencido de que Ferrer haba impartido instrucciones a Morral en este sentido.

    Mateo Morral viaj a Madrid y se hosped en una pensin para mudarse poco despus a otra en la calle Mayor que tena un balcn al exterior, precisamente por donde tena que pasar la comitiva real despus de la boda camino al Palacio de Oriente. La causa que motiv este cambio de pensin fue que, de las averiguaciones que realiz Mateo Morral, result que era poco menos que imposible penetrar con

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    2.- Ms detalles sobre este asunto pueden verse en el artculo de Jess M Monje, Rosa en Llamas: Valle Incln y Mateo Morral en Los aliados, www.elpasajero.com

    Tanto Nakens como Ferrer fueron procesa-dos y encarcelados. En 1907 el Gobierno de don Antonio Maura, ante la evidencia de la inocencia de Nakens, decidi ponerlo en libertad tras una peticin popular de in-dulto presentada por Benito Prez Galds.

    El Motn fue una publicacin espao-la de finales del siglo XIX y principios del XX, (18811926). Semanario satrico, republicano y anticlerical, entre sus objetivos se encontraban la crtica a los conservadores, la defensa de la unidad del partido republicano y la lucha contra el poder del clero.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid20

    direccin que el Rey le indi-caba, y al hacerlo se acerc a la izquierda del carruaje. Llegaban en aquel momen-to frente a la casa nmero 88 de la calle, situada a la mano derecha. Asomado a la ventana del cuarto piso de ella, un anarquista, Ma-teo Morral, lanz sobre la carroza un gran ramo de flo-res, que fue a caer a pocos pasos del vehculo. Hubo una repentina llamarada,

    de rosas blancas el da 31 de mayo de 1906.

    He aqu lo que sucedi tal y como lo cuenta Julin Corts Cavanillas:

    Cuando la comitiva avan-zaba por la calle Mayor, el Rey llam la atencin de la Reina acerca de la gente que agitaba banderas y les arro-jaba flores desde los balco-nes de un edificio oficial. La Reina volvi la cabeza en la

    LA ROSA DE LLAMAS

    Nada ms instalarse en el 88 de la calle Mayor, Mateo Morral pidi a la duea que le trajera un ramo de rosas blancas eran las que le gus-taban a Soledad Villafranca y que las sustituyera cuando se marchitaran arguyendo que as podra escribir ms contento.

    La tarde anterior, como se ha dicho ms arriba, la pas en la tertulia de La Horchate-ra de Candelas, pero regres pronto a la pensin, ya que a las diez estaba de vuelta en ella. Por la maana pidi bicarbonato, alegando moles-tias de estmago y se encerr en su habitacin. De ella ya no saldra hasta que arrojara la bomba envuelta en el ramo

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA Mateo Morral.

    Fotografiado en el deposito de cadve-res de Madrid.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid21

    de Wad-Ras, que cubra la carrera y no rompi su lnea, se evit la avalancha de pnico. Tom del brazo a la Reina y me dirig a pie con ella en busca del coche de respeto, entre escenas de horror y entusiasmo. De no haber sido por mi deseo de que la Reina retribuyese los saludos del personal de aquellos edificios oficiales, no estara hoy viva. La bom-ba estall del lado derecho de la carroza3.

    Segn testigos presencia-les, lo que ocurri fue que el ramo de flores que contena la bomba se enganch en una guirnalda que colgaba en el edificio. Este hecho hizo que se desviase de su tra-yectoria lo suficiente para no alcanzar de lleno su objetivo, al caer, no dentro del veh-

    una explosin aterradora, ruido de cristales al romper-se, alaridos, gritos

    Percib un fortsimo olor cido refiere el Rey y durante dos minutos por lo menos, me ceg un humo espeso. Cuando ste se disip vi que los lises y las rosas del vestido de novia de la Reina estaban manchadas de sangre. Haba salido ile-sa, pero varios de nuestros guardias fueron lanzados de sus cabalgaduras descuarti-zadas. Sangraban profusa-mente hombres y caballos. La calle Mayor ofreca un terrible espectculo. Vein-tiocho personas resultaron muertas y cuarenta heridas. Todo el mundo gritaba fre-nticamente: Han matado al Rey y a la Reina! Slo gracias a la disciplina sobre-humana de mi regimiento

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    3.-Confesiones y muerte de Alfonso XIII, ABC, 1951. Se trata de una larga serie de artculos.

    culo como era la intencin del autor, sino a unos metros del carruaje. Fue suficiente para que los Reyes salvaran la vida.

    A sus 23 aos public La cada de Alfonso XIII (Causas y episodios de una revolucin), en defensa del Rey recin exiliado, con gran xito, y cerca de 50.000 ejem-plares vendidos. A partir de 1933 el Monarca le hizo a su principal bigrafo y unas extensas confidencias que se han hecho imprescindibles para que los historiadores conozcan el pensamiento y la persona

    Enrique Gonzlez Fernndez. En el centenario del nacimiento de Julin Corts Cavanillas. 20 de marzo de 2009.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid22

    Nakens le llev a Cuatro Caminos, donde tuvieron que hacer algo de tiempo esperando a un inspector de tranvas, llamado Ibarra. Se entretuvieron tomando unos vinos con unos correli-gionarios republicanos, igual que Nakens. Cuando lleg Ibarra, se fueron a la Ciudad Lineal, donde viva un antiguo anarquista llamado Daza, y en cuya casa crean que podra encontrar refugio Morral.

    LA HUIDA

    Lo que ocurri entre el lanzamiento de la bomba y la salida de Madrid de Mateo Morral lo cont Jos Nakens en una carta que fue publi-cada por La Correspondencia de Espaa el da 8 de junio de 1906. A continuacin repro-ducimos un resumen.

    A las cuatro de la tarde del da 31 de mayo se present en la redaccin de El Motn Mateo Morral, confesndole a Jos Nakens que haba sido l quien haba tirado la bom-ba, que saba que no haba alcanzado al Rey, pero que se haban producido muchas desgracias y rogndole que no le delatara. Saba cmo pensaba Nakens porque haba ledo lo que haba escrito sobre Angiolillo, a raz del ase-sinato de Cnovas del Castillo.

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Una bomba Orsini, artefacto explosi-vo esfrico y que se activa mediante unos resaltes llenos de fulminato de mercurio que explota por impacto.

    Vista general de la calle mayor frente a la actual Capitana (en la derecha de la imagen) donde ocurri el atentado que no llego a ser magnicidio por las sujecio-nes de una pancarta que aparece desenganchada en la fotografa y que desvi la cada del artefacto.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid23

    ventorro denominado Los Jaraces y pidi que le hicieran una tortilla francesa de tres huevos.

    Aquel da haca calor. Le sirvieron la comida y la bebi-da. Coma con mucha avidez, porque la larga caminata le haba abierto el apetito. La mujer del tabernero comenz a preguntarse por la identidad de aquel mecnico que llevaba una ropa que no haba sido usada en trabajos de su oficio. Sera un escapado del presidio? Una consulta urgente con el marido, el tabernero, y otros clientes fue suficiente para tomar una resolucin: llegarse hasta el cuartel de la Guardia Civil pero antes, como les caa de paso, avisar al vigilante jurado de una finca prxima para

    Morral, quien se cambi y se march de la casa sin despe-dirse y sin tomar el desayuno que le haban preparado.

    Debido a la intensa bsque-da policial de la que estaba siendo objeto no se atrevi a coger el tren para Barcelona en Madrid. Por ello el da 1 de junio, Mateo Morral sali an-dando de Madrid en direccin a Ajalvir, con la intencin de llegar a una estacin ferrovia-ria desde la que pudiera coger el tren en direccin a Barce-lona. En Ajalvir compr algo de comida y le indicaron que la estacin de Torrejn era la ms prxima, y hacia all se di-rigi llegando sobre las seis de la tarde. Como le informaran de que el tren para Barcelona pasaba por all a las ocho y media de la tarde, se fue al

    Pero Daza se neg en redon-do a acogerle, porque segn deca haca mucho tiempo que haba abandonado toda actividad poltica y su resisten-cia aument ms an cuando le insinuaron que podra ser el autor del lanzamiento de la bomba sobre la comitiva real.

    Entonces se acordaron de un tal Sargento Mata , que viva en Ventas y se dirigie-ron a su casa, situada en el nmero 247 de la calle Alcal. Este hombre, un antiguo sar-gento del Ejrcito que haba participado en la intentona de golpe de Villacampa, era tambin republicano. Estuvo de acuerdo en acogerle, pero solamente por una noche. A la maana siguiente, es decir, el da 1 de junio, su mujer compr ropa nueva para

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Actual monumento de Coullaut Vale-ra erigido en 1963 en recuerdo de las victimas (veinticinco muertos y cerca de un centenar de heridos).

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid24

    Al anochecer se traslad el cuerpo a Madrid, donde lleg al amanecer del da 3.

    Las 25.000 pesetas ofreci-das por el Conde de Roma-nones a quien diera pistas que llevaran a la localizacin y detencin del autor del inten-to de regicidio fueron entre-gadas a la viuda e hijos de Fructuoso Vega. Asimismo se realizaron cuestaciones para ayudar a paliar su desgracia a travs de varios peridicos, como era tambin habitual entonces.

    LAS CONSECUENCIAS

    Fueron de dos tipos: unas, a corto plazo, y otras, a ms largo plazo. Las inmediatas fueron la cada de Segis-mundo Moret, presidente del Consejo de Ministros, y

    Mateo Morral se levant de la mesa sin decir palabra y, con la misma actitud sumisa y muda, sigui al vigilante que iba andando delante, dando la espalda al deteni-do. No haban andado ms que unos cincuenta metros, cuando Mateo se par, sac un revlver de la faja y dispar dos veces contra el guarda que cay de bruces hacia delante, muriendo en el acto. A continuacin, se suicid. Su cadver fue encontrado a unos veinte metros del de Fructuoso Vega.

    La Guardia Civil de Torrejn se limit a comprobar que los rasgos del muerto coincidan con los del presunto regi-cida y a avisar al Ministerio de la Gobernacin de que haba aparecido el cadver.

    Rog a Mateo Morral que le acompaara hasta el cuartel de la Guardia Civil para iden-tificarle. Se produjo entonces una discusin entre el vigi-lante y algunos clientes del establecimiento que queran acompaarle y ayudarle para evitar la fuga del detenido. Al parecer, Fructuoso zanj la discusin afirmando que para llevarle hasta el cuartel se bastaba y se sobraba l solo, y que no necesitaba ayuda de ninguna clase.

    que le identificara. Es cierto que algunos declararon en el proce-so que haban ido ms lejos en sus suposiciones y creyeron que estaban ante el autor del intento de regicidio. Pero esto pudo ser simplemente un farol que surgi a posteriori, cuando la identidad de Mateo Morral estaba plena-mente establecida.

    El vigilante, Fructuoso Vega, de la finca Soto de la Alborea no se hizo mucho de rogar y se pre-sent enseguida en el ventorrillo.

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Mateo Morral naci en Saba-dell (Barcelona) en el 1880. Hijo de un empresario textil, estudiante muy brillante, dotado para el aprendizaje de idiomas, termino sus estudios de ingeniera mecnica en Alemania, donde entr en contacto con el anarquismo.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid25

    la Casa de S.M. el Rey se libraron de la cesanta porque no haban participado en la elaboracin de los dispositi-vos de seguridad, y porque se sucedieron muy seguidas dos crisis de gobierno que no dejaron tiempo para tomar medidas. Cuando el 8 de junio fue nombrado D. San-tiago Alba gobernador civil de Madrid, era un novato en estas lides y prefiri abrir un expediente en lugar de tomar medidas ms expeditivas. Con ello se dilat en el tiempo la decisin, y como la investiga-cin termin sustancindose un mes ms tarde, cuando ya haba pasado la mayor efervescencia, dej para la siguiente reorganizacin de la Polica no tuvo lugar hasta febrero de 1908 el tema de las cesantas.

    estamos relatando, las prime-ras en sufrir sus consecuencias eran personas concretas, y despus, la institucin en ge-neral. Esta regla ha conocido pocas excepciones.

    Los funcionarios policiales lo sufran de una forma especial porque les supona, sencilla y llanamente, quedarse en la calle. Esto ocurri tras el atentado que le cost la vida a Cnovas, pues declararon cesantes a todos los miem-bros de la Ronda Especial de la Presidencia del Consejo de Ministros. En esta ocasin los de la Ronda Especial de

    equivale a su reorganizacin. Es cierto que esta era, ya por aquel entonces, una vieja as-piracin del Cuerpo. Como es natural, cuando se produca un hecho de extrema grave-dad, tanta como la del que

    por lo tanto, tambin la de Romanones como Ministro de la Gobernacin. A la vez, no pasaron de la mera transitoriedad, dado que a ninguno de ellos este hecho le supuso el final de su carre-ra poltica. Al contrario, para alguno signific su comienzo. Qu verdad es aquello de que no hay mal que por bien no venga! Tal fue el caso de Santiago Alba, nombrado, como consecuencia de esta crisis ministerial, gobernador civil de Madrid.

    Para la Polica signific el pistoletazo de salida para la gran reforma que culmin en febrero de 1908, y que mu-chos creen errneamente que es su fecha fundacional. Tra-ducido a un roman paladino actual, la reforma de la Polica

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Segismundo Moret, pintado por Ma-drazo en 1855. A causa del atentado se vio obligado a dimitir como presi-dente del Gobierno, regresando aos mas tarde (1909) como consecuencia de la Semana Trgica de Barcelona.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid26

    Sorprendentemente, nadie ech en falta al Cuerpo de Polica Judicial, no a la Brigada Social como dice errneamen-te Joaqun Romero Maura . Haba sido creado en 1896, y por una ley de 31 de marzo de 1906 dos meses antes de estos acontecimientos se la haba integrado en el Cuer-po de Vigilancia como una seccin especial para luchar contra el terrorismo. Es cierto que la Polica Judicial vena arrastrando problemas muy serios y que su desenlace era algo muy previsible. Lo curioso del caso es que en ningn peridico se culpara al Gobierno de haberla suprimi-do precisamente en vsperas del mayor atentado anarquis-ta cometido hasta entonces en Madrid.

    jefe de polica que coordinara todas sus actuaciones, pero en un primer momento no se hizo nada. Al fin y al cabo, lo que pretendan los reformistas era que cambiaran las condi-ciones de entrada y de trabajo y se les dotara de una mayor estabilidad en el empleo, se mejoraran los sueldos y se es-tableciera un escalafn nico para toda Espaa. Todas estas reclamaciones tenan que ver ms con el status del personal que con la organizacin insti-tucional de la Polica.

    La reforma que se estaba re-clamando, y que no se llev a cabo, para organizar la Polica era que se dejase de fragmen-tarla en secciones y rondas y se unificase toda bajo un nico mando.

    el que se elabor un temario que dio origen a los prime-ros libros preparados para opositar al Cuerpo. Muchos, pero que muy numerosos funcionario s, fueron los que no superaron este examen que, dicho sea de paso, de blando no tuvo nada, y por lo cual fueron expulsados del Cuerpo.

    La Institucin policial no su-fri demasiados cambios. Se vio la necesidad de que en las grandes capitales hubiera un

    La consecuencia inmediata para los policas fue que todos los miembros del Cuerpo de Vigilancia tuvieran que demostrar su aptitud al ser sometidos a lo que se llam Exmen de continuacin, para

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Madrid, febrero de1923, Ho-racio Echeverrieta y el ministro Santiago Alba Bonifaz, nombra-do gobernador civil de Madrid a causa de la crisis de gobierno que sigui a la atentado. Co-menzar aqu una carrera poltica que le llev a sel ministro en ocho ocasiones diferentes.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid27

    totalmente intil para los fines que se pretendan conseguir. Semejante error haba sido puesto en evidencia en numerosas ocasiones anteriormen-te: ningn atentado, por grave que hubiera sido, con el resultado de muerte para reyes y presidentes de repblica, haba logrado cambiar ningn sistema poltico. La utopa anar-quista era incompatible con cualquier sistema po-ltico. Bastaran solamente treinta aos en la historia de Espaa para que se obtuvieran las pruebas palpables de ello.

    de seguridad que se haban tomado, pero no por ello desisti de su intento. Busc un nuevo escenario desde el cual pudiera lanzar la bomba y, aunque no lo-gr su objetivo por causas ajenas a su voluntad, que no era otro que el de matar a los Reyes, s que produjo numerosas vctimas entre muertos y heridos.

    La segunda no puede ser otra que la peligrosidad de las utopas. Morral estaba convencido de que matan-do a los Reyes destruira el sistema poltico sobre el que se basaba la monar-qua parlamentaria. Como si todo ello dependiera ni-camente de una persona. Esta utopa dio origen a un verdadero bao de sangre,

    CONCLUSIONES

    A la luz de lo expues-to y del enfoque que se ha dado a los hechos, gravsimos, que tuvieron lugar, as como de sus consecuencias, se pueden sacar algunas conclusiones aunque, a buen seguro y a estas alturas, los lectores ya tendrn las suyas propias.

    La primera de ellas es que contra la voluntad de matar todas las medidas de seguridad son impotentes. Mateo Morral hubiera pre-ferido lanzar la bomba des-de el coro de la Iglesia de los Jernimos, porque los efectos hubieran sido mu-cho ms devastadores y se hubieran multiplicado por el efecto del pnico. No lo pudo hacer por las medidas

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Escultura en la fachada de la Sagrada Familia, un demonio entrega una bomba Orsini a un obrero anarquista.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid28

    Fue tambin lo que hizo Mateo Morral quien, no pudiendo sacar adelante su primer plan, lanzar la bomba desde el coro de la Iglesia de los Jernimos, lo cambi y lo hizo desde el cuarto piso del nmero 88 de la calle Mayor de Madrid.

    incidentes de la Semana Trgica, que Ferrer pudo preparar con toda tran-quilidad desde su exilio francs.

    Finalmente, hay que recordar que la seguri-dad total es una utopa. Cuando alguien tiene una voluntad decidida de que-brar y saltarse las medidas de seguridad, lo termina por conseguir. Al que trata de prever las situa-ciones de riesgo siempre se le escapar algo, que ser encontrado por el que lo examine atenta-mente. Esto es justamente lo que hacen todos los delincuentes, desde el que hurta al descuido hasta quien coloca una bomba.

    La tercera es la impuni-dad con que salieron de sus juicios los verdaderos coautores de los aten-tados sobre todo Ferrer Guardia, Soledad Villa-franca, Nicols Estevnez y otros. Todos ellos ejecu-taron actos sin los cuales no hubiera sido posible la comisin del atentado. Debieron ser condenados con las pruebas existentes a determinadas penas de crcel. Sin embargo, siguiendo una tradicin que se inici con Ramn Sempau fueron absueltos. La impunidad alienta la comisin de mayores deli-tos. Tambin en este caso, por desgracia, este axioma result cierto: su corro-boracin estuvo en los

    UN

    A BO

    DA R

    EAL

    ENSA

    NG

    REN

    TADA

    Coro de la Iglesia de los Jerni-mos, desde donde estaba planea-do el lanzamiento del artefacto por Mateo Morral.

    PORTADA

    UNA BODA REAL ENSANGRENTADA

    PUOENROSTRO, UN VASALLO REBELDE

    EL DESNUDO Y LAS CMARAS SECRETAS

    EL MADRID DE RAFAEL FLREZ, ALFAQUEQUE

    LA CRUZ DE PUERTA CERRADA

    BENEFICENCIA Y CONSTITUCIN DE 1812

    EL RETIRO PASO A PASO, GUA DEL PARQUE

    DEBOD, UN TEMPLO EGIPCIO EN MADRID

    HEMOS LEDO ...

    NAVEGACIN

    EL IMPACTO DE LA CORTE EN MADRID

    AUTO DE FE EN LA PLAZA MAYOR DE MADRID

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid29

    AUTO

    DE

    FE E

    N LA

    PLA

    ZA

    MAY

    OR D

    E M

    ADRI

    DEl 30 de junio de 1680 se celebra

    en Madrid un Auto de Fe pblico, acontecimiento muy poco frecuente en la corte de los Austrias. Lleg a tener tanta trascendencia meditica que fue solicitado al pintor Francisco de Ricci un lienzo para el palacio del Buen Retiro y un relato descriptivo del evento a Joseph del Olmo, maes-tro mayor de la Villa de Madrid.

    Con el lienzo y el relato, hemos compuesto un artculo que permite constatar un hecho muy poco fre-cuente en Espaa pero muy habitual en las cortes europeas, como expone el hispanista Henry Kamen en su ya clsico libro La Inquisicin espaola.

    AUTO DE FE EN LA PLAZA MAYOR DE MADRID

    Imgenes y pies de fotos Gale-ra online museo de el Prado.Madrid.

    Texto de Isabel Mjica Cuellar

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid30

    AUTO

    DE

    FE E

    N LA

    PLA

    ZA

    MAY

    OR D

    E M

    ADRI

    DEl auto de fe era un simple rito religioso en que se hacan las abjuraciones y

    reconciliaciones de los procesados y se comunicaba la penaimpuesta a cada reo. Las causas en que intervena el Santo Oficio estaban relacionadas contra los falsos conversos, quedando las acusaciones de brujera en simples anc-dotas por lo escaso de su nmero y lo nfimo de las sentencias, salvo casos muy atpicos; los delitos contra la moral eran competencia de la justicia civil.

    Segn investigaciones actuales, el porcentaje de reos que se entregaban al brazo secular para que aplicara la pena de muerte era inferior al 2 %.

    El Acto de Fe presidido por Santo Do-mingo de Guzmn pintado por Pedro Berruguete (ca. 1450-1504). Data de aproximadamente 1495. El autor dibujaba a los personajes en funcin de la dignidad que le otor-gaba observese los tamaos de los monjes respecto a los reos albigenses

    Carlos II haba mostrado un cierto inters en asistir a la celebracin de unauto general de fe y el inquisidor general, Sarmiento de Valladares, que tena conocimiento exacto de los procesos que estaban en vas concluir y emitir sentencia, ofreci al monarca la posibili-dad de presidir uno de estos actos en la ciudad de Toledo. El rey acepta el ofrecimiento

    pero reclama la celebracin en Madrid, a fin de que quedara evidencia fehaciente del inte-rs de la Corona en la defensa a ultranza de la fe.

    Se decidi la fecha del 30 de junio, festividad de san Pablo, para que en l se celebrase tambin este gran triunfo de la fe catlica y vencimiento de la obstinacin judaica, como

    cita Joseph del Olmo que des-empeaba los cargos de furriel del rey, maestro de obras del Palacio del Buen Retiro y maestro mayor de la Villa de Madrid a quien se encarg el diseo y ejecucin de todo el escenario donde tendra lugar el acto y que ms tarde pu-blicara detalladamente todos los pormenores del mismo a finales de 1680.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid31

    Del Olmo dirigi ocho comi-siones con tareas especficas: para construir en la plaza el entablado necesario para el desarrollo del escenogrfico del auto; para la confeccin de los estandartes procesionales y las arquillas donde se guardaran las sentencias; para los prepara-tivos de los familiares del Santo Oficio que, a caballo y con varas de justicia, acompaa-

    El lugar elegido fue la plaza Mayor de Madridy se contara con la presencia activa de la Corte represen-tada por miembros de los consejos y las autoridades civiles y eclesisticas de la capital, la presidencia delrey Carlos II en compaa de su reciente esposa, Mara Luisa de Orleans, y de la reina madre, Mariana de Austria, junto con la flor y nata de la sociedad madrilea que acompaara al monarca des-de la balconada de la plaza Mayor. Adems, se ofreca la posibilidad de asistir al auto a los miembros de los tribunales de la Inquisicin de Toledo y Valladolid y a los miembros de los concejos de vila, Segovia y otros lugares cercanos a la Corte.

    El auto se celebr en la plaza Mayor. por lo que se construy un estrado con andamios de madera Al fondo vemos la tribuna real situada en un balcn del primer piso de la Casa de la Panadera, y en ella a Carlos II, a su mujer Mara Luisa y a su madre. En los balcones, se ubican personas distinguidas de la corte.

    AUTO

    DE

    FE E

    N LA

    PLA

    ZA

    MAY

    OR D

    E M

    ADRI

    D

    ran al Consejo de la Suprema Inquisicin, todos bajo dosel, con sillas y bufetillos que per-mitieran cierta comodidad en la larga sesin judicial que durara varias horas; para la publicidad y comunicacin que se dara al acto, las colgaduras, asientos y adornos del escenario; para la organizacin de las dos proce-siones previas, de la Cruz Verde y de la Cruz Blanca; el servicio

    de guardias, tanto en el recinto de la plaza como en el quema-dero, as como el ajusticiamien-to de los reos; para agilizar las labores jurdicas, correcciones de sentencias, traslado de la causa y alojamiento de los numerosos reos, que deberan ser vestidos con los hbitos penitenciales y en su ausencia, en efigies simuladas; y por ltimo para la preparacin de los manuales de abjuracin y absolucin de los reos que as fueran sentenciados.

    Se reclamaron a los distintos tribunales los reos cuyas sen-tencias se hallaban preparadas en los trminos siguientes: salamos a recibir los minis-tros de este santo tribunal en coches y con armas para que pudiesen entrar los reos ms recatadamente, y sin ser vistos,

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid32

    les conceden las gracias e indulgencias por los sumos pontfices, dadas a todos los que acompaaren y ayuda-ren a dicho auto. Mndese publicar para que venga a noticia de todos.

    Al paso de los pregoneros, la multitud exclamaba:

    Viva la fe de Cristo!.

    Se constituy la Compaa de Soldados de la Fe, integra-do por 250 hombres alojados

    y moradores de esta villa de Madrid, corte de S. M., estantes y habitantes en ella, como el Santo Oficio de la Inquisicin de la cuidad y reino de Toledo, celebraba auto pblico de la fe en la plaza mayor de la corte, el domingo treinta de junio de este presente ao, y que se

    clarines y timbales. Se con-voc a ms de 150 personas vinculadas con el Santo Oficio ante la fachada de las casa del inquisidor para que, desde all, pregonaran por las princi-pales calles y plazas el da de celebracin del auto:

    Sepan todos los vecinos

    ni reconocidos del pueblo, por-tndose con la circunspeccin, secreto y prudencia que estilan los ministros del Santo Oficio.

    El jueves 30 de mayo la co-misin encargada de publi-citar la convocatoria colg en el balcn de los aposentos del Inquisidor General el estandarte del Santo Oficio, adorn con colgaduras toda la fachada y anunci la pu-blicacin del Auto de Fe con

    Los caballeros montados son los agentes de la inquisicin, y los de a pie formaban la compaa de soldados de la fe. puede observarse la altura sobre la que se cons-truyo el escenario, que equivala a la altura de un jinete y su cabalgadura. En un rincn los asnillos que llevaran a los reos al cenicero de la puerta de Fuencarral.

    AUTO

    DE

    FE E

    N LA

    PLA

    ZA

    MAY

    OR D

    E M

    ADRI

    D

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid33

    de Bilbao). La actuacin de la Compaa terminaba cuando despus de conocidas las sentencias se entregaba a los reos, que previamente haban sido conducidos a la plaza Mayor, a la justicia civil para la ejecucin de las penas dictadas.

    EL AUTO DE FE

    A las tres de la maana los reos reciban los vestidos penitenciales (distintos segn la sentencia), desayunaban y cada uno era asistido por dos religiosos antes de sa-lir en procesin en un orden prefijado tras haberles sido comunicada individualmen-te su sentencia. En este Auto concreto, Joseph del Olmo relata que, por retrasos en las audiencias individualizadas, la pro-cesin de la Cruz Verde sali a las siete de la maana del Tribunal de Corte, a solo dos pasos de la plaza Mayor por un largo camino que les llevara a la casa del inquisidor general en la plazuela de la En-carnacin y haciendo un largo recorrido por el Madrid de los Austrias llegar a la plaza Mayor donde fueron colocados en

    en el Tribunal de Corte (hoy palacio de Santa Cruz). Tenan como misin la custodia de los lugares donde se desarrollara el Auto y la vigilancia de los 118 reos, sumados los trasladados a los locales; adems participaban en los desfiles procesionales y en ciertos usos protocolarios, como la recogida de haces de lea y la simblica entrega de uno de ellos al rey para simbolizar que l sera el primero en alimentar la ho-guera del quemadero en el momento de la ejecucin de sentencia; despus los haces serian depositados en el brasero pblico en los extrarradios de la puerta de Fuencarral (actual glorieta

    A la izquierda, rica alfombra y sobre ella el altar con la cruz verde, simbolizando la esperanza de perdn de los reconciliados, y el estandarte del Santo Oficio. Al lado, las gradas de los cargos pblicos, y el solio del inquisidor general vaco, ya que este se en-cuentra junto a la tribuna del rey despus de haberle tomado juramento.

    AUTO

    DE

    FE E

    N LA

    PLA

    ZA

    MAY

    OR D

    E M

    ADRI

    D

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid34

    atados y amordazados para que no pu-dieran proferir blasfemias o responder a los insultos del gento que los azuzaba.

    Una vez en la plaza, despus de misa y sermn, comenzaba la parte ms larga del acto, con un ceremonial individua-lizado, reo por reo, que consista en su traslado desde la grada a las jaulas del centro de la plaza donde se daba lectura a la causa completa y despus a la sentencia. A las cuatro de la tarde termin esta lectura y se dio paso a la conduccin de los diez y nueve reos de ejecucin que, saliendo por la calle

    las gradas de la derecha, despus de pa-sar por delante de los reyes y teniendo frente a ellos al inquisidor general, sus diconos y los miembros del consejo.

    El orden de salida de los reos estaba prefijado por el delito cometido: los primeros treinta y cuatro eran reos de pena de muerte y todos, excepto dos que llevaban sambenitos, iban vesti-dos con corozas pintadas con llamas; algunos portaban unas arquillas y sus nombres, bien visibles, pintados sobre el pecho. Les seguan los once que haban cometido delitos leves -sospechas de herejas, bgamos, embusteros- con corozas y sogas con nudos en el cuello que indicaban el nmero de azotes que iban a recibir. Continuaban los judaizan-tes reconciliados (vestidos con sambeni-tos de media aspa entera) seguidos de los veintiuno condenados a relajar o entregar a la justicia secular- para recibir la mxima pena; iban ataviados con coroza, capotillos de llamas y algunos

    A la derecha estn las gradas para los familiares de la Inquisicin y los reos en

    persona o en estatua (muertos o huidos), la cual lleva una inscripcin con sus delitos y

    una caja con sus huesos. Los reos podan ser penitenciados (castigados con diversas penas y que al abjurar de sus errores se convertan

    en reconciliados) o relajados (condenados a muerte en garrote, o en hoguera si eran

    reincidentes).

    AUTO

    DE

    FE E

    N LA

    PLA

    ZA

    MAY

    OR D

    E M

    ADRI

    D

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid35

    de Boteros y recorriendo la calle Mayor, la plaza de las Descalzas, el postigo de San Martn y la calle de San Bernardo, alcanzaron el bra-sero a las afueras de la puerta de Fuencarral.

    En la plaza Mayor continuaron las lecturas de causa y sentencia hasta las nueve de la noche y tras ellas comenzaron las abjuraciones frente al altar que conducan a la absolucin de la pena. Los conde-nados encendan un cirio que les acompaaba desde su salida por la maana en la procesin de la Cruz Verde, y ya redimidos, emprendan la procesin de la Cruz Blanca bien entrada la noche.

    Y el rey, que haba entrado en la plaza Mayor a las ocho de la ma-ana, sala de ella a horas cercanas a las diez de la noche. El Auto de Fe, haba concluido.

    En el centro del cuadro vemos a dos reos vestidos como en el siglo XV, con coroza y sambenitos con llamas, a los relatores o lectores de causas y sentencias en los plpitos, y a unos dominicos con el predicador en el plpito central.El pblico se agolpa, a pie de calle, para seguir el Auto de Fe.

    AUTO

    DE

    FE E

    N LA

    PLA

    ZA

    MAY

    OR D

    E M

    ADRI

    DNAVEGACIN

    PORTADA

    UNA BODA REAL ENSANGRENTADA

    AUTO DE FE EN LA PLAZA MAYOR DE MADRID

    EL IMPACTO DE LA CORTE EN MADRID

    EL MADRID DE RAFAEL FLREZ, ALFAQUEQUE

    DEBOD, UN TEMPLO EGIPCIO EN MADRID

    LA CRUZ DE PUERTA CERRADA

    EL DESNUDO Y LAS CMARAS SECRETAS

    EL RETIRO PASO A PASO, GUA DEL PARQUE

    PUOENROSTRO, UN VASALLO REBELDE

    BENEFICENCIA Y CONSTITUCIN DE 1812

    HEMOS LEDO ...

  • ww

    w.a

    uto

    edic

    ion

    es.c

    om

    SI ESCRIBES SOBRE MADRID COEDITAMOS TU LIBRO AHORA OFRECEMOS:

    Impresiones desde 50 ejemplares.

    Diseo de cubiertas con y sin solapas.

    Servicios de maquetacin de textos.

    Inclusin de ndices de contenido.

    Correccin ortogrfica Servicios de optimizacin

    de imgenes.Localizacin y creacin de

    apoyos visuales de la obra.Solicitud de ISBN y crea-

    cin de cdigo de barras.Solicitud de registro

    propiedad intelectual.Presentacin a Deposito

    Legal.Venta en web propia.Distribucin en comuni-

    dad de Madrid.Booktrailer (Vdeos

    promocionales)

    Calcula tu propio presupuesto en nuestra calculadorahttp://www.autoediciones.com/ediciones.php

    Si eres un autor novel y quieres publicar tus primeras obras.

    Si eres un autor con libros ya descatalogados. y quieres reeditarlos de nuevo.

    Si eres universitario y no consigues publicar tu tesis.

    Si quieres editar pequeas tiradas de los textos que guardas des-de hace tiempo.

    Si estas descontento de los resultados econmicos que aporta la difcil tarea de autor y quieres encargarte de la edicin por ti mismo.

    SEGURO QUE NOS NECESITASinfo@autoediciones,com

    Pasea por Madrid36

  • HEM

    OS

    LED

    O

    PARA

    TI

    A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid

    AUTOR Emilio Guerra Chavarino es ingeniero Industrial como profesin pero investigador histrico vocacional, Su proceso investiga-dor se basa en poner en tela de juicio cualquier premisa previa, buscando las bases primarias de cualquier suceso o hecho narrado, sus obras Los viajes de agua y fuentes de Madrid y La Capilla del Obispo, lo ratifican.

    Formato 21x30 cm, Pginas 220 (1 tomos)ISBN 978-84-606-8503-6 Edicin y venta autoediciones.com Solictalo en : [email protected] Felipa. Calle Pilar de Zaragoza, 37 (Madrid) Telf.: 91 3559647

    REFLEXIONES SOBRE SAN ISIDRO Y SANTA MARA DE LA CABEZA

    Lo que vas a leer te resultar casi totalmente nuevo, No se trata de un documento religioso sino el fruto de varios aos de investigacin sobre unos personajes considerados Santos; l patrn de Madrid. Te expondr una serie de hechos fehacientes basndome en documentos oficiales (fuentes primarias) y en los escritos sobre este matri-monio por los autores mas importantes

    SAN ISIDRO ANTES DE SU CANONIZA-CIN A TRAVS DE SU BIBLIOGRAFA

    TOMO I

    37

  • HEM

    OS

    LED

    O

    PARA

    TI

    A SUMARIO

    En 1561, Felipe II (1556-1598), decidi trasladar la Corte a Madrid, la que hasta entonces era itinerante. Al igual que las iglesias tenan que estar sacralizadas (con-sagradas) a un Santo, a una Virgen o a Jess, las locali-dades deban tener un Santo como Patrn, a quien se le encomendara cuidara de los madrileos, y quien mejor que San Isidro, por ser ma-drileo, tener un cdice que lo converta en personaje histrico, y tener su cuerpo completo e incorrupto como reliquia.

    Adems, su biografa era muy sencilla, y con un espacio vaco, su juventud, como ocurri con Jesucristo, que ofreca la posi-bilidad de ser rellenado a gusto de las fuerzas vivas, segn las necesidades del momento. Que ms se poda pedir! Ningn otro pretendiente dispona de tantas posibilidades. El nico inconveniente era que se trataba de un Santo extravagante. Las fuerzas vivas madrileas, inclui-do el Rey, pidieron en 1562 la canonizacin de Isidro.

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid38

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid39

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    DEL IMPACTO DE LA CORTE SOBRE

    LA VILLA DE MADRID El lunes 19 de mayo de 1561 Felipe II sali de Toledo hacia Aranjuez y desde all se dirigi a la que ms adelante sera la capital estable de Espaa. El 27 parti la reina y al da siguiente el prncipe. En este momento Madrid se convirti en la sede del gobierno del reino, pues Felipe II decret que en ella residieran perma-nentemente todas las oficinas centrales de gobierno y que los Consejos se reu-nieran, peridicamente y en horas y das prefijados, en el Palacio Real....

    ... a la vista de un paisaje urbano como el que plasma Antonio Lopez en el lienzo Vistas de Madrid desde Torres Blancas creemos que es bueno recordar el inicio de esta casualidad urbanistica.

    Texto y seleccin de imgenes de Mara Isabel Mediero

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid40

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    DSin duda el mrito fundamental que Madrid ofreca era ser villa de realen-go y estar a una cuantas leguas del Primado de Toledo y el Cabildo de su catedral quienes podan oponerse a cualquier regia pretensin por invocacin de una Cesacin a divi-nis, apoyndose en un Breve del papa Paulo IV que las autorizaba.

    Como ya haba ocurrido en 1556 cuando el rey intent apoderarse de las rentas de los clrigos argu-mentando sus cuantiosos gastos y fue respondido con la supresin de servicios religiosos a la poblacin durante veinticinco das, lo que ocasion una importante alteracin social.

    Y volvi a repetirse en 1559 cuando hubo discrepancias con la Inquisicin a causa de un conflicto entre la justicia real y la eclesistica y fue fray Bartolom de Carranza el arzobispo que interpuso otra Cesacin a divinis ante la que hubo de replegarse, de nuevo, el monarca.

    Toledo (1572) grabado de Franz Hogenberg que representa la ciudad de Toledo vista desde las colinas que la rodean, con el ro Tajo en primer trmino.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid41

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    D

    A la familia real le acom-paaban los soldados de tres guardias reales y el rgano de gobierno, compuesto por el personal de los con-sejos, los tribunales y otros rganos de gobierno, los embajadores extranjeros y un selecto grupo de ban-queros y proveedores de la

    Corona. En total, cerca de 3.000 nuevos vecinos para la villa que se ampli a 20.000 cuando llegaron su familiares y criados. La poblacin de Madrid se duplic y muchos recin llegados no encontra-ron acomodo de manera que tuvieron que instalarse en Alcal de Henares.

    La llegada del squito corte-sano, seguido de comercian-tes y proveedores, aglutin a la sociedad estamental de la poca en tres zonas de la villa. El Alczar, como residencia regia, se convirti en el centro de un entorno cortesano que ocup la antigua villa vieja. La Plaza Mayor y sus alrededores, fueron el emplazamiento de las actividades comerciales y artesanales que dinamizaron la economa. Y la zona del Rastro, al sur de la poblacin, se trasform en el enclave de la produccin de bienes y sus trasformados: matadero, curtidores, etctera.

    La sociedad del siglo XVI era estamental conforme a la ley, el privilegio y la costumbre. Esto no quiere decir que fuera

    Si en 1561 la villa tena 2811 vecinos (unos 12.700 habitantes aplicando un coe-ficiente de 4.5); en 1571, diez aos despus, ya pasaba los 42.000 habitantes; en 1584 llegaba a 55.000, y en 1597, cerca de 90.000. Es decir, en apenas 40 aos la poblacin madrilea se haba multipli-cado por 4.5, rebasando con creces la tasa de crecimiento anual del resto de las ciu-dades castellanas, y convir-tindose en una de las 20 ciudades ms populosas de Europa.

    Ao 1561 Traslado de la Corte a Madrid por Felipe II.(Dibujo de C. Mugica.)

    Prof.:Velasco Medina.Curso Madrid Historia de una Villa Milenaria

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid42

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    D

    En la Corte se asentaron aquellos que tenan una rela-cin directa con la corona por el desempeo de sus funcio-nes, fuera en la Casa Real, en las instituciones del Estado, en el ejercicio militar o en otros cargos polticos de la periferia territorial de la monarqua. Se

    giada ante la ley, respaldada por las concesionesde la Corona en el pasado y la figura judicial delmayorazgo que, junto con el principio de primogenitura, vinculaba las propiedades aperpetuidad a la misma familia e impeda su enajenacin.

    una sociedad muy homog-nea sino todo lo contrario ya que cada estamento man-tena una organizacin muy jerarquizada de tal modo que dentro de cada grupo espe-cifico definido por profundas races corporativas o gremiales convivan otros grupos dife-renciados que, aunque muy permeables, mantenan sus seas de identidad propias.

    EL ESTAMENTO NOBILIARIO

    En l se integraban des-de lospoderosos grandes de Espaa y los adinerados ttulos hasta los empobreci-dos hidalgos. Unos posean propiedades que abarcaban provinciasenteras y otros eran simples campesinos pero, en general, todos goza-ban de una posicin privile-

    acentuaban as las diferencias entre esta nobleza cortesana y la que permaneci afincada en sus feudos.

    El nmero de caballeros e hidalgos que trajo la corte consigo fue de unos doscientos hasta llegar a una cifra cercana a los tres mil en 1591, mientras que los ttulos nobiliarios con ms poder econmico en la misma fecha eran de cincuenta y cinco prcticamente la mitad de los censados en Castilla. Se deduce de ello que el resto continu en sus asentamientos tradicionales sin or los cantos de sirena de las supuestas ven-tajas de aproximarse al poder real en la villa de Madrid.

    Vista de Madrid. Annimo. Hacia.1550-60. Museo Muni-cipal de Madrid.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid43

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    DFlorencia, y la del prncipe de frica Muley Xeque aunque solo son estrictamente nobilia-rias 37 y el resto corresponden a extranjeros y viudas. 28 de estas matrculas de confesin pertenecen a personas rela-cionadas con el servicio al rey a travs de los rganos de la administracin, la judicatura, el ejrcito y la diplomacia.

    A la luz de los resultados obtenidos con la ubicacin de las residencias nobiliarias, se puede afirmar que la mayora de los nobles -veintiuno- esta-ban afincados en las jurisdic-ciones parroquiales que se ex-tendan por el centro urbano. Este ncleo estaba por aquel entonces un tanto desplazado hacia el oeste y se articulaba en torno a lo que haba sido

    Letrn de llevar una exacta anotacin del cumplimiento Pascual que obligaba a los fieles a partir de los siete aos:

    Cada uno de los fieles de uno y otro sexo, despus que han llegado a los aos de discre-cin, deben confesar indivi-dualmente con toda fidelidad al propio sacerdote todos sus pecados, al menos una vez al ao de otro modo, durante la vida ser apartado de la entrada de la iglesia, y tras la muerte ser privado de cristiana sepultura.

    Han sido localizadas las matrculas correspondientes a algunos aos de finales del siglo XVI de las que se puede extraer una relacin de 43 residencias nobiliarias. Entre ellas las de Pedro de Mdi-cis, hermano del Duque de

    clero y las universidades para ocupar las altas instancias del poder y la toma de decisiones y para costear a sus expensas los gastos que se derivaban de embajadas, jornadas reales y festejos.

    Un documento muy preciso para el anlisis de las familias nobiliarias asentadas en la ciudad, su lugar de residencia y la composicin de todos los miembros de su casa, son las Matriculas de Confesin, derivadas de la obligacin legal que impuso el IV Concilio de

    En esto podemos ver la clara preferencia de los dos primeros austrias nacidos en Castilla (Felipe II y Felipe III) por los miembros de la baja y la mediana nobleza para la provisin de los cargos pblicos y el servicio de la Casa Real as como por los miembros cualificados del

    Libro de matrcula de confesin de la Parroquia del Sagrario de la Catedral de Jan. Archivo Histrico Diocesano de Jan. Similares se han localizado en las parroquias madrileas.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid44

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    Dindica la bsqueda de esa proximidad a los centros del poder. Adems, muy proba-blemente, disfrutaban de las ventajas de tener en sus casas agua corriente, porque por all en las actuales calles de San Bernardo, Torija y la plaza de Santo Domingo- discurra el antiguo viaje de agua de Ama-niel, que iniciaba su recorrido en los acuferos del norte y lo conclua en la residencia regia.

    EL CLERO

    En general la Iglesia acumu-laba unporcentaje despropor-cionado de la riqueza del pas y comparta con la aristocracia elmonopolio de la propiedad de la tierra. Pesea los privile-gios y la riqueza, el clero inte-graba en sus filas tanto a hijos de artesanos y campesinos

    correspondientes dotaciones que eran la Casa del Tesoro y los Consejos- como la sede del regimiento madrileo.

    Muy prximos al centro y lindando con l estaban las re-sidencias de nueve de los diez ttulos adscritos a la parroquia de San Martn, cuya situacin

    parte de la villa vieja, es decir, prcticamente coincida con el permetro de la antigua muralla medieval, cuyos restos tan irresponsablemente hemos perdido hace poco. Y es que es en este permetro donde estaban ubicados tanto el Alczar -centro neurlgico del poder de la monarqua con sus

    En el Madrid de 1597 encontramos que en la parroquia de San Martn residan diez de estas per-sonalidades, en la de Santa Mara residan seis, en la de San Nicols cinco, en la de San Sebastin otros cinco, en la de los Santos Justo y Pastor tambin cin-co, en el anexo parroquial de San Luis residan tres, en la de San Juan otros tres, en la de Santa Cruz dos, en la de San Andrs otros dos, en la de Santiago tambin dos, y en la de El Salvador uno.

    Recreacin actual en acuarela del posible aspecto que pudiera tener la iglesia de San Pedro en Viejo en la poca.

    Prof.: Gili Ruiz.Curso Madrid Historia de una Villa Milenaria

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid45

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    DDos objetivos de distinta

    naturaleza atraan al clero a la villa, segn fuera el secular o el reglado. Por un lado se crearon nuevas instituciones eclesisti-cas vinculadas a la monarqua, como la Nunciatura. Puesto que la Iglesia ceda importantes subsidios econmicos como compensacin a la exencin parcial de los impuestos ordi-narios tena especial inters en estar cerca del monarca y velar por sus intereses mundanos. Esto sin duda influy en la composicin tradicional del clero madrileo, pero tambin tuvo mucho que ver la presencia en la ciudad de prelados y clrigos pertenecientes a la Capilla Real y a nuevas fundaciones mons-ticas integrados en el grupo de servidores que se instalaron en los primeros momentos.

    como a representantes de la pequea y de la alta nobleza. Su misin era compartida tan-to porlos privilegiados (Santa Teresa de vila) como por gente del pueblo llano (San Juan de la Cruz).

    Las dicesis ms importantes, las que daban los beneficios ms apetecibles, estaban en

    manos dehombres nacidos en familias aristocrticas ya que, hasta que se pusieron en prc-tica los decretosdel Concilio de Trento, no haba seminarios para la educacin de sacer-dotes, de tal modo que los candidatos de origen humilde con una escasa preparacin estaban en desventaja en el momento de la designacin.

    Construccin de gran-des edificios en el siglo XVI destacando San Felipe el Real, fundado por fray Alonso de Madrid en 1546; las Descal-zas Reales, fundado en 1559 por doa Juana de Austria; monasterio de Santa Mara de los ngeles, fundado en 1563 por doa Leonor de Masca-reas; en 1564 fray Gaspar de Torres, funda el convento de la Merced, situado en la hoy plaza de Tirso de Moli-na; en 1573 se funda sobre la antigua manceba el convento de San Dmaso, de carmelitas calzados, en la calle del Car-men.

    Fachada del convento de las Descalzas Reales.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid46

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    D

    15 conventos y monasterios, de los que 9 correspondan a rdenes femeninas y el resto eran masculinas. Adems, los templos parroquiales se hallaban establecidos mayo-ritariamente en el interior de la villa vieja y los cenobios ubicados preferentemente en los arrabales.

    en los 32 conventos de la corte en el ao 1591, frente a los 800 seculares repartidos entre las distintas parroquias, cura-tos, capellanas y fundaciones. Por el contrario, con anterio-ridad al establecimiento de la corte haba un cierto equilibrio entre ambos: hay registradas 14 sedes parroquiales frente a

    El clero reglado, inspirado por el espritu de la Contra-rreforma, se asent en la Villa poniendo un renovado nfasis en la caridad y por otra lado con un claro deseo de que su actividad fuese percibida de forma directa por el poder real. Su intensa actividad dio lugar a que entre 1561 y 1600 se rompiese el equilibrio entre clero regular y seglar con la fundacin de 17 nuevos con-ventos, como el de las Descal-zas Reales, el de la Merced, el de la Santsima Trinidad, el de Doa Mara de Aragn, el de San Felipe, etc., de ellos 13 eran masculinos y 4 femeni-nos. Como resultado el clero reglado fue adquiriendo ms presencia que el clero secular: se estima en 1.500 los regula-res de ambos sexos que haba

    El clero secular de origen humilde era muchas veces indigente y su posicinsocial estaba muy prxima a la de los desheredados. Se asentaba libremente en la corte en bus-ca de la proteccin econmica de nobles que necesitasen su servicio de capellana para atender y dar cura de almas a sus nutridas servidumbres. Su labor iba desde ofrecer auxilio espiritual, hasta cantar una santa misa diaria en sus capi-llas privadas que por turnos rigurosos se ofrecan desde hora muy temprana, sin olvi-dar la obligacin de ensear doctrina cristiana a los escla-vos para su rpida incorpora-cin a los preceptos pascuales e inscribirlos debidamente en las Matriculas de Confesin antes mencionadas.

    Primer convento mercedario en Madrid. Dibujo de Antonio Oli-vera Garca (1983).

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid47

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    D

    de la edificacin de cenobios y templos, ampliando algu-nas iglesias parroquiales, em-belleciendo el interior de los lugares de culto y atesorando costosos ajuares litrgicos procedentes tanto de sus propias adquisiciones como, sobre todo, de donaciones de sus feligreses.

    Sebastin y San Justo) dieran servicio al 68 % de la feligre-sa.

    Por ltimo, el clero contri-buy a fomentar la demanda urbana y junto a otras lites sociales ayud a orientar el mercado madrileo hacia los bienes suntuarios por medio

    junto a las ms alejadas de San Gins y San Sebastin -esta ltima creada en 1541- fueron las que ms crecieron por su posicin perifrica. Teniendo en cuenta estos aspectos, no nos resulta tan extrao que a finales del siglo XVI slo cuatro parroquias (San Gins, San Martn, San

    Este mismo desequilibrio surge en el mbito parroquial ya que presencia permanente de la corte y el dinamismo urbano de la villa vinieron a incrementar los desequilibrios jurisdiccionales de la tradi-cional estructura parroquial de la villa. As, de las nueve parroquias que haba ence-rradas en el recinto medieval, solo las de San Andrs y San Justo lograron romper el cerco que supuso la antigua muralla y ampliar su juris-diccin por el casero de los arrabales. Otra de las viejas parroquias, la de Santiago, intent un crecimiento similar pero se top con el poderoso monasterio de San Martn que finalmente se anexio-n los terrenos que aquella reclamaba como propios. La parroquia de San Martn,

    Capilla del palacio de los condes de Paredes (actual Museo de San Isidro) y segn la tradicin edificada en los hipotticos aposen-tos de San Isidro y esposa. Dndonos una idea de las dimensiones de las capillas que atendan los clrigos seculares en el cuidado es diario de las necesidades espirituales de la numerosa servidumbre.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid48

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    Doportunidades a losindustria-les y comerciantes castellanos, pero el alza de los precios en los mercados colonialesse convirti entonces en una desventaja porque atrajo a un nmero cada vez mayor demanufactureros y comer-ciantes extranjeros al comer-cio colonial de modo que Castilla no pudo resistir la presin dela competencia ex-tranjera.Adems del prejuicio social contra las actividades comerciales y en favor de los valores tradicionales de la no-bleza-prejuicio que encontra-ba expresin en la conviccin de que l no vivir de rentas, no estrato de nobles- la am-bicin de casi todos aquellos que habanconseguido su riqueza en el mundo de los negocios, especialmente la

    No se puede negar queen el siglo XVI existan factores econmicos que dificultaban las actividades de losnego-ciantes espaoles. La apor-tacin de metalespreciosos y la apertura del mercado americano dieron nuevas

    las veinticinco casas dedicadas al crdito una veintena eran genovesas y slo haba cinco o seisque pudieran ser con-sideradas como plenamente castellanas.

    EL ESTADO LLANO: CAMPESI-NOS, ARTESANOS Y BURGUE-

    SA MERCANTIL.

    La clase media en Castilla era escasa aunque existaun sector mercantil tradicional en Burgos y Medina del Campo que obtena buenos resul-tados econmicos. Tambin es cierto que con la riqueza de lasIndias se formaron las fortunas de muchos espaoles y de numerosas casas comer-cialesextranjeras y no falta-ban entre los acreedores de la corona apellidos espaoles, aunqueera una minora.Sin embargo, no caba esperar que se desarrollaran opera-ciones comerciales a gran escala en un pasescasamente urbanizado y con una pobla-cin que no tena tradicin en el mundo de losnegocios. De

    El recaudador de impuestos, obra de Pieter Brueghel el Joven.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid49

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    Dla nobleza, a la Iglesia y a las ciudades. As que, adems de explotarsus propias tierras, el campesino frecuentemente tena tierras en arrendamiento concontratos a largo plazo llamados censos. En muchos casos, las condiciones de estos censos eran msfavorables que las que derivaban de la condicin de propietario mien-tras que en algunos lugareslos campesinos tenan acceso a las tierras comunales. La mayor parte de los campesinosvivan en los lmites de la subsis-tencia, con solo lo suficiente para alimentar a susfamilias una vez satisfechas todas sus obligaciones para con el Rey, la Iglesia y elseor. Cualquier excedente slo poda proceder de un trabajo adicional, como laindustria domstica.

    El pueblo llano castellano del siglo XVI, confrontado con la prspera nobleza, tena prue-bas evidentes para sustentar laconviccin de que el trabajo era degradante y con ello tanto el terrateniente como el artesanoperdan confianza en el trabajo como medio de progreso. Trabajaban simple-mente porque notenan otro remedio. Si un campesino ob-tena un excedente de sutierra y su trabajo, los impuestos, cada vez ms gravosos, se lo arrebataban. Aunque, posi-blemente, tan slo una quinta parte de la tierracultivable en Castilla era propiedad de los campesinos, mientras que el restoperteneca a la corona, a

    result ruinosa para Espaa y su poblacin.En una sociedad en la que la pauta era marca-da por la aristocraciaterrate-niente haba pocas perspec-tivas para los trabajadores y artesanos.

    segundageneracin de una empresa familiar, era abando-nar el mundo mercantil, que slo eraconsiderado como un paso intermedio en la jerar-qua social, y vivir comoaris-tcratas. Esta mentalidad

    Consecuencia del que el trabajo era degradante fue la proliferacin de tabernas, donde entretenan el ocio picaros, jugadores y truhanes.

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid50

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    D

    pra especulativa de todo gnero de mantenimien-tos en un radio de ocho leguas, reducidas a 5 para la fruta y a una legua (5,6 km) para las hortalizas. Dentro de este grupo de los abastecimientos los productores agropecua-rios, los labradores y los hortelanos se concentra-ban principalmente en el norte y este de la ciudad, en la periferia y en la pa-rroquia de San Martn. Los gallineros y los cabriteros estaban repartidos entre las parroquias de San Gins -calle de Hortaleza

    exquisitos manjares de las mesas de los hombres pudientes, el abasto de productos agropecuarios fue el sector que moviliz ms recursos tangibles en la economa madrilea. No obstante, los oficios urbanos de este sector se dedicaban ms a la transformacin y comer-cializacin de los produc-tos que a su produccin primaria, puesto que la ciudad dependa cada vez ms del suministro de los productores rurales. De hecho, el rea de abas-tecimiento de algunos productos se infiere de una norma dictada por la Sala de Alcaldes de Casa y Corte en 1585, por la que se prohiba la com-

    El Madrid del siglo XVI estaba compuesto por una gran variedad de gru-pos sociales que podemos clasificar en funcin de las labores que realizaban. As, haba toda una varie-dad de gremios y oficios dedicados a los abastos, a la construccin y el mobi-liario, al textil y las fibras, al cuero, al metal, a la produccin miscelnea, al comercio, a la adminis-tracin, a las profesiones liberales y a los servicios.

    De todos estos sectores el dedicado a los abastos era el ms importante porque la alimentacin supona ms de las tres cuartas partes del gasto domstico y, junto a los

    Reproduccin de un auca (juego de la cultura catalana) que repre-senta una serie de oficios del siglo XVI, que se utilizaba para ensear a leer a los nios

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid51

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    Dbodegueros, quienes consti-tuan el nico oficio que tena permiso para establecerse en la zona residencial de la villa vieja. Tambin los taberneros y los fruteros se volcaron en la comercializacin de abas-tos aunque siguiendo pautas distintas pues, mientras que los primeros se establecieron por toda la ciudad, los segun-dos se fueron concentrando en la zona oriental de la plaza Mayor. Y es que el vino era un buen negocio ya que se consu-ma ms vino que agua, para evitar el riesgo de la contami-nacin que implicaba la mala gestin de las conducciones de los antiguos viajes. El del vino llevaba adosado, adems, un buen negocio para los zapate-ros que ganaban ms dinero haciendo odres que zapatos.

    lacin de productos crnicos, como triperos, desolladores y cortadores, se localizan al sur de la ciudad, en la zona del Rastro, puesto que era donde se haba instalado el matadero de la ciudad desde comienzos del siglo XVI, y sus ingresos de-pendan ms de un salario que de las ventas que realizaban.

    Un nutrido grupo de oficios se dedicaba a la preparacin de platos para mesas ajenas y a la elaboracin de conservas, golosinas, embutidos, ahuma-dos, salazones y forrajes para las caballeras. Los pasteleros, entendiendo como tales los que hacan trabajos al horno, eran los que ms se beneficia-ban con este negocio, segui-dos por confiteros y mesone-ros y, en ltimo lugar, por los

    hacan que slo vendedores, propietarios y eclesisticos sacaran provecho de l.

    Los oficios relacionados con la transformacin y manipu-

    y sus alrededores- y la de San Sebastin y, al igual que los anteriores, apenas se benefi-ciaron del floreciente mercado urbano pues los mrgenes comerciales, rentas y diezmos

    El banquete nupcial, de Brueghel el Viejo (c. 1567)

  • A SUMARIO

    JUNIO2015

    Pasea por Madrid52

    EL IM

    PACT

    O DE

    LA C

    ORTE

    EN

    LA V

    ILLA

    DE M

    ADRI

    Dlos comerciantes. Por lo tanto son est