RETIRO MAYO 2009

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“YO SOY LA PUERTA”

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� CONTENIDO “Yo soy la puerta: quien entra por mí se salvará; podrá entrar y salir y encontrar pastos” (Jn

10,7; 9)

� OBJETIVO Tomar conciencia de que el Buen Pastor es la PUERTA del redil y que por esta puerta se entra y se sale “Yo soy la puerta de las ovejas… Si uno entra por mí estará salvo” (10,7b.9ab).

I. UN TIEMPO PARA ABRIRME Y ACOGER.

1. Me doy el tiempo necesario para acoger la significación de puerta para mí. ¿Qué me dice? Escribo lo primero que me brota del corazón.

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2. ¿Qué han significado las puertas en mi vida…hay alguna más importante que otras?

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Señor, contemplo las imágenes que me propone este retiro;

tú me invitas a entrar por tu puerta que es tu Cuerpo en cruz salvadora.

Enséñame a penetrar los misterios de tu cruz

para abrir mi puerta a tu luz resucitadora.

II. UN TIEMPO PARA CONTEMPLAR Y DAR GRACIAS.

1. Comentario

El sentido de “entrar por la puerta al redil” no es entrar por la puerta al “corral de las ovejas”, sino

a la institución judía, donde los fariseos, -malos pastores- dominan y gobiernan tiránicamente el

rebaño de Dios.

En griego “redil” se emplea en la versión de los LXX de la Biblia, para indicar el recinto donde se

encontraba la Tienda del Encuentro y, en épocas posteriores, designaba los atrios del templo (Ex

27,9.12.16; Lv 8,31), patios cercados (2 Sm 17,18; cfr. Jn 18,15) y palacios reales (1 Re 3,1; Est

1,1.5; 2,19).

El Ungido penetra en la institución judía con la finalidad de llamar a sus ovejas y formar el rebaño

de Dios (Jn 10,3b).

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Ha venido a crear una comunidad nueva para Dios.

Jesús mismo se autoproclama la “puerta”, no sólo por donde deben entrar los dirigentes, sino

también las ovejas (10,7.9).

El que entre por esta puerta encontrará “pastos” (10,9), es decir, “nomê” (“pasto”) y no nomos

(“ley”); nótese el juego de palabras en griego), y el “pasto” que ofrece Jesús es el pan de vida

que es él mismo (Jn 6,35.48-51) y su palabra que salva de la muerte (Jn 8,51). La Ley no da vida,

si el verdadero alimento (pan y palabra del Mesías) otorgan la vida en plenitud (Jn10,10b).

a. Jesús se me revela como “la puerta”. Releo el texto y comentario al texto. Es una importante

revelación de Jesús que saboreo y me lleva a orar.

� ¿Qué resonancia me producen los textos mencionados?-

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2. “Yo soy la puerta…” (Jn 10,7-9)

“En verdad, en verdad os digo: yo soy la puerta de las ovejas.

9Yo soy la puerta; si uno entra por mí, estará a salvo; entrará y saldrá y encontrará pasto”.

La imagen de la puerta había aparecido antes en Jn 10,1-2, allí era el lugar de entrada correcto para acceder al redil. Ahora se da un paso adelante: Jesús es esta puerta.

Un antecedente bíblico puede ser el Salmo 118, el cual fue interpretado como profecía mesiánica –bajo la luz de la Pascua- en el cristianismo primitivo, particularmente el v.20: “Aquí está la puerta de Yahvé, por ella entran los justos”.

Esto quiere decir que solamente a través de Jesús se puede tener el acceso adecuado a las ovejas y que por medio de él las ovejas pueden salir hacia los espacios amplios de la vida representados en las verdes praderas, como se describe en Jn 10,9. Ya no tanto la ley, sino pasto abundantes. Finalmente Él mismo es comida y bebida.

Jesús va a proveer a las ovejas con todo lo que necesitan para vivir (“ por medio de mi”, v.9b; es el sentido de una puerta) y por Él el redil se encuentra protegido y seguro. Es decir, que quien “entra” se salva por medio de él y quien “sale” encuentra un ámbito de vida.

El “entrar” y “salir” connota también la libertad de la que se habló en la parábola, en Jn 10,3b-4 (verbo “sacar”). La puerta permanece grande y abierta, las ovejas van y vienen, no son aprisionadas sino que se las hace salir y son siempre conducidas por aquel a quien escuchan. Entre libertad y vida se establece una estrecha relación.

El don de Dios se da con toda magnanimidad. Valga recordar que la imagen del “encontrará pastos” (v.9d) parece retomar la promesa de Dios en Ezequiel 34,14 que se había convertido en anhelo del Pueblo de Dios: “Las apacentará en buenos pastos, /y su majada estará en los montes

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de la excelsa Israel. /Allí reposarán en buena majada; /y pacerán pingües pastos por los montes de Israel”.

� Subrayo y reflexiono lo que me toca el corazón en la palabra de estos

textos.____________________________________________________________________

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3. Jn 10,22-30: Las ovejas que siguen a su pastor se inicia con una información local (Jesús en el

templo, paseando por el pórtico de Salomón) y estacional (“era invierno”).

� Releo el texto, cierro los ojos, e imagino a Jesús…lo que hace, lo que dice… ¿con qué me

quedo?

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Contemplo y me sorprendo una vez más con Jesús “puerta” de mi vida.

Doy gracias porque puedo entrar y salir con libertad, y reposar en verdes praderas, y sentirme segura.

Les muestro e invito a entrar, a aquellos/as que están en el umbral,

de la puerta abierta de par en par.

III. ME PREPARO PARA VIVIR EL PERDÓN.

4. ¿Qué puedo decir de mis puertas “abiertas o cerradas” para con Dios, los demás, yo misma?

Miro mis actitudes y las describo.

a. En mis experiencias de vida:

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b. En mi vida espiritual:

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c ¿Qué he de perdonarme?

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5. En el segundo tiempo contemplé la palabra de Dios en el Evangelio de San Juan 10, y mi

escucha me hizo penetrar más hondamente lo que Jesús me dice de Él mismo.

a. ¿En los años de mi vida consagrada, he reflexionado, orado y estudiado asiduamente el

capítulo 10 del evangelista Juan? ¿Tiene alguna novedad para mí Jn 10,1: la puerta del corral?

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b. Jn 10,7-10. ”¿Me dice algo nuevo la explicación de la puerta del corral, que se inicia con la

autorrevelación de “Yo soy la puerta”?

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6. Jn 10,39,40-42: ..”Él se les escapó de las manos. Pasó de nuevo a la otra orilla del Jordán”

Pasar a la otra orilla;” entrar y salir”, ¿no me habla acaso de un nuevo éxodo. ¿Cuál es mi éxodo

en esta etapa de mi vida religiosa?

� Nuevas metas

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� Lo que dejo atrás

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Señor Jesús, tú eres la puerta

de la nueva vida que me conduce al Padre. Enséñame a escudriñar las Escritura, para reconocerte como puerta

del nuevo hogar donde se calienta el pan .

Te pido perdón porque muchas veces te he leído con frialdad.

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IV. ME DOY A JESÚS.

1. Jesús no ha venido a reimpulsar y potenciar las instituciones de Israel, sino a crear una

comunidad nueva para Dios (cfr. Lc 5,36-39).

Compromiso 1

Abrir más aún la puerta de Cristo a aquellos/as con quienes vivo.

¿Quién/es? ______________________________________________________________________ ______________________________________________________________________

¿Cómo?______________________________________________________________________________________________________________________________________ 2. La autorrevelación de Jesús como “puerta” (Jn 10,7-10) permite deducir el tipo de comunidad que se está inaugurando: suscitada y reunida por el Mesías de Dios; la comunidad contará con pastores legítimos quienes contribuirán a su crecimiento y fortalecimiento con el alimento mesiánico adecuado (pan y palabra del Mesías) a fin de que obtenga la vida en plenitud y la libertad (10,9: “salir y entrar”). Compromiso 2

Mi pastoreo: dejaré entrar y salir sin retener ni apropiarme de los, las demás. Buscaré cómo

mejorar este aspecto de respeto a la libertad del otro/a.

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3. El nuevo éxodo de Jesús a la cabeza del rebaño.

Compromiso 3 Este retiro me ha abierto nuevos horizontes. El éxodo que Dios me pide y que estoy dispuesta a realizar es:

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Al final de este retiro, estaré en condición de ver a Cristo como la Puerta que muy abierta,

me muestra los pastos de la nueva creación

inaugurada con su pascua.

“Si uno entra por mí, estará salvo” Jn 10 7b-9.)