Sekai 19
-
Upload
habimaru-aburame -
Category
Documents
-
view
220 -
download
0
description
Transcript of Sekai 19
192
Capítulo Decimonoveno
Conclusión
La brutal colisión de ambas jugadas destrozó el suelo, lo que creó una densa
nube de arenilla, a través de la cual nadie podía ver nada. Me tapé los ojos con una de
las mangas del uniforme por un instante para evitar que ésta entrase.
—¡Parece que la cosa se acerca a una conclusión! —anunció el comentarista—.
Podríamos encontrarnos ante un... ¿Empate?
El polvo del aire comenzó a ceder su espacio a la imagen del combate. Frente a
frente, ambos luchadores yacíamos sobre el suelo, respirando agitadamente junto al
inmenso cráter del ring.
—¡Demos unos segundos a nuestros combatientes para reincorporarse al
combate! ¡Contemos todos juntos!
¡Tres! Apoyé mi puño contra el suelo.
¡Dos! No podía. Era incapaz de levantarme. Shin ya estaba consiguiendo
alzarse con la victoria.
¡Uno! No me rendiría. Con mis últimas fuerzas, me puse en pie.
Una inmensa ovación llenó el Coliseo. Las pancartas se agitaban con ímpetu y
los gritos de apoyo por ambas partes no cesaban.
—¡Y continúa el combate! —anunció Ryûta con ímpetu—. Cuando parecía que
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
193
todo había acabado, tanto Shin como Keitsuke son capaces de sacar energías de
cualquier parte.
Shin tomó en su mano una última carta: el As de corazones. Él tampoco
conservaba energías como para conseguir poner un sólo naipe más en su mano.
Comenzó a caminar lentamente hacia mí, con una sonrisa en la cara.
—Es tu última carta, por lo que veo —apreté el puño izquierdo para intentar
atestarle un puñetazo, pero mis reservas energéticas siquiera llegaban a eso.
—Mis últimas fuerzas. Espero que sean suficientes para mi victoria —desplegó
la carta y me la acercó al cuello.
Se hizo el silencio por unos instantes, sin dejar otra cosa que nuestra acelerada
respiración haciendo vibrar el aire.
—Buen combate —admití—. Sin duda, eres un gran rival, Shin.
La gravedad hizo a mi brazo izquierdo desplomarse. Una gota de sudor se
precipitó de la punta de mis dedos hacia el suelo
—Me rindo.
Shin parecía tranquilo, pero todos los demás se sorprendieron por mi actuación.
Exhausto, caí de rodillas al suelo. Mi rival, algo aliviado, se dejó caer de espaldas,
para reposar un poco.
—¡Y el combate cuenta con un final inesperado! Pero, finalmente, el ganador
es... ¡Shin Shirokawa! ¡Enhorabuena!
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
194
—Gracias por el combate —Shin me miró desde el suelo—. Parece que esta
vez la diosa Fortuna me ha sonreído a mí.
—No —negué levemente con la cabeza—. Sólo has sabido guardar bien tu as
bajo la manga. Nunca mejor dicho.
Aunque hubiera perdido, muchos espectadores aún coreaban mi nombre,
contentos por el espectáculo que habíamos dado. Ryûta apareció sobre el escenario
para ayudarnos a salir, no sin antes felicitarnos por el combate.
Al abandonar el escenario, lo primero que encontré fue a Tamaki, dándome una
mirada de desaprobación. Con energía, me propinó un buen puñetazo en la cara, que
acepté sin más.
—¿Eres imbécil? —me gritó— ¿Cómo se te ocurre rendirte? ¿Dónde ha
quedado todo ese valor tuyo? ¿Es que una promesa no significa nada para ti?
Tras de él apareció su hermano con sigilo para darle un golpe seco en la nuca.
—Tú sí que eres imbécil, enano. ¿No ves que era absolutamente incapaz de
hacer nada?
—Exacto —Shirona posó su mano sobre el hombro del chico—. Siquiera tenía
energía para desplegar de nuevo su katar.
—Shin, en cambio, guardó su última carta, viendo la situación.
—Yo... Lo anticipé —reconocí con desgana—. He perdido sólo por un fallo de
cálculo. Por arriesgar.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
195
—Pero has sabido retirarte a tiempo —Shin se unió a la conversación para
defender mi conducta—. Perecer es de cobardes. Conocer tu límite es lo que te honra.
Dejarlo a tiempo te permite volver.
—¿Qué quieres decir con eso, maldito emo? —preguntó Tamaki.
—Primero —Shin parecía algo molesto—. Se llama Visual —giró la mirada
hacia mí—. Y segundo, Keitsuke lo ha entendido. No te debo la más mínima
explicación.
—Claro —respondí—. Si eso es lo que quieres, aceptaré gustoso una revancha.
—¿Amigos, entonces?
—Claro —choqué los nudillos. A Shin se le iluminó la cara.
Por un momento, me pareció ver una lágrima en su cara. Quizá fuese el
cansancio. Aún así se giró con prisa.
—Pero —Tamaki aún parecía algo enfadado—. Deberías haber asumido tu
derrota como un hombre.
—Cállate, anda —le reprimió su hermano—. No todo es ganar o perder. Vale,
esto ha sido sólo un combate amistoso. Pero, ¿y si estuviera en juego tu vida? A veces
es mejor volver a intentarlo en otra ocasión. ¿Sabes? Los muertos no pueden volver a
combatir.
—Kei... —Hanako se acercó con timidez—. Todos estamos muy orgullosos de
ti. Has quedado entre los cuatro primeros, y eso es más de lo que podrías haber
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
196
soñado hace un tiempo.
—Entonces tendré que vengarme yo mismo —sentenció Tamaki—. Tú, rubito
emo, ¡te veo en las finales!
—Espero, entonces, que seas capaz de vencer a Chaos —respondió sin volver a
girarse. Por su tono, parecía estar a medio camino entre desearle suerte y
compadecerse por el arduo combate que tenía por delante—. Bueno, amigos, nos
volveremos a ver.
Tamaki parecía algo impaciente por el combate que se avecinaba. Por su
expresión, pude deducir que era consciente de que no tenía tantas oportunidades
como le gustaría, pero que, aún así, no le importaba y se aferraría hasta la última
posibilidad de victoria que tuviera.
—¡Este último enfrentamiento ha sido de los que hacen época! —Ryûta volvió
a la pantalla con la más carismática de sus sonrisas—. Sin duda, será el eje central de
las tertulias de hoy. ¡Pero el espectáculo debe continuar! Así que me gustaría llamar a
luchar a Tamaki Tsuji y a Chaos Valentine... ¡Que empiece el combate!
Los demás tomamos asiento en las gradas, mientras veíamos que Chaos miraba
el combate con frialdad, bloqueando muchas de las balas con sólo un kunai.
—Esta vez no escaparás —sentenció la grave voz del ninja—. Fue un error
dejaros escapar en la primera fase. Ahora... Todo es más complicado.
—Eso es lo que tú crees —vaciló, lanzando una ráfaga de disparos a los pies de
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
197
su rival.
Como respuesta, Chaos se limitó a saltar lo más alto que pudo.
—Te tengo donde quiero —rió Tamaki, para disparar varias balas desde abajo.
Sólo la primera de ellas impactó en su pierna derecha. Chaos, con agilidad,
pudo bloquear las demás.
— Cómo osas... —Chaos parecía enfadado—. Es la segunda vez que me hacen
daño en este estúpido combate. ¡Maldito Sakurai! ¡Maldito Tsuji! ¡Cabrones!
El oscuro agente blandió su katana con fuerza. Tamaki se limitó a quedarse
quieto mientras veía a su rival acercarse.
—¿Qué pretende este chalado? —preguntó Hanako.
—Típico de Tamaki —Ethan rió, dándole una palmada en la espalda—.
Atiende.
El chico de cabello claro usó una de sus pistolas para bloquear el golpe y saltó
por encima de su contrincante, disparando desde el aire.
—¡Le ha dado en el hombro! —se sorprendió su hermano.
—Claro —rió Wataru, como si ya supiera lo que iba a pasar—. Creo que ya
dejó claro ayer que su mayor baza es el elemento sorpresa, ¿no?
—Tamaki siempre ha sabido dar un buen espectáculo —sentenció su hermano
sin más.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
198
—Niñato Chaos envainó su katana con suma presteza y se llevó la mano al
cinturón, de donde colgaban algunos objetos extraños—. Ya me has hartado.
Acabemos rápido con esto.
Tomó de su cinturón un objeto de forma esférica, que resultó adoptar una
función de lanzallamas.
—No quería tener que recurrir a esto, pero... Arde, Tsuji. ¡ARDE!
A Tamaki le pilló desprevenido el ataque y le impactó de lleno en un brazo.
Lanzó un alarido de dolor mientras observaba que el antebrazo supuraba humo
plateado.
—¡Tamaki, no puedes hacer nada, nya! —gritó Dahlia con fuerza—. ¡Retírate!
—Espera... Ese lanzallamas... —pensó Reiji—. Creo que esto cierra nuestras
sospechas... ¡Vamos!
Los cuatro mentores bajaron hacia el escenario con prisa, mientras que en éste,
Chaos había tomado ya la ventaja en el combate. Con violencia, desenvainó su katana
para dar un tajo a la cabeza de nuestro amigo, haciéndola volar.
Tamaki había perdido. Y de una forma bastante grotesca. Reapareció fuera del
escenario tocándose el cuello, como si estuviera alegre de volver a tenerlo en su sitio.
Sin duda, eso debería haber dolido.
Chaos, por su parte, abandonó el escenario sin dar siquiera tiempo al
comentarista a anunciar el resultado del combate.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
199
Los espectadores parecían escandalizados por el abrupto final del combate.
Ryûta intentaba calmar los ánimos entre las masas.
Yo bajé rápidamente para ver cómo estaba Tamaki. El resto de mis compañeros
me siguieron.
—Ese tío no es normal —admitió.
—Pero le has hecho daño —sentenció Sato, que estaba observando la escena
desde lejos—. Y parece que eso le cabrea.
—¿Quién es ese Chaos? —pregunté.
—Ha huido. ¡Malditos trucos pirotécnicos!
—Pero eso me tranquiliza —Daigo estiró sus brazos—. Eran ellos. Se ha
delatado él solo.
—Hijos de puta... —Wataru rompió su habitual calma para dar un puñetazo a la
pared que más cerca tenía.
—Tras este desagradable accidente, rogamos a los espectadores que abandonen
el Coliseo. ¡Volved mañana para ver el final de esta Batalla!
Una vez en casa, nos congregamos todos los compañeros de la Decimotercera
Rama. Reiji también invitó a Shin y a Sato a la reunión.
—Antes de nada, disculparme por no haber hecho antes pública esta
información —el joven se apretó su sombrero contra la cabeza—. Necesitábamos
tenerlo bajo vigilancia y sólo podíamos hacer eso si dejábamos que la Batalla
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
200
avanzase con naturalidad.
»Perdonadnos, sobre todo Tamaki y Sato, que se han visto en un buen apuro.
Eso sí. Tengo que aplaudir tu impecable actuación en el combate —le dio una
palmada en la espalda, lo que hizo al chico sonreír por una vez tras la lucha.
»Ahora bien, como podréis habido deducir por nuestro comportamiento, Chaos
es un... Infiltrado. No es un miembro de Sekai.
—¿Entonces? —quise saber—. ¿Cómo es que ha logrado colarse?
—Es... —Wataru resopló un poco—. Es del enemigo. No sabemos cómo ha
logrado evadir toda la seguridad, pero lo ha hecho.
—¿Y cómo es que no os habéis dado cuenta antes?
—El primer aviso de que había alguien fuera de lugar lo recibimos durante el
Battle Royale. Aún así, era pronto para sospechar de Chaos.
—¡Pero si era un bestia luchando! —Tamaki parecía algo cabreado.
—También podría haberse escondido como un novatillo sin habilidad, haber
perdido en la primera ronda y deambular por la Quinta Rama a sus anchas. Pero... —
admitió—. Sí. Era uno de nuestros principales sospechosos.
Sato asintió. La observación de Reiji tenía bastante lógica.
—Eso no es todo —prosiguió Daigo—. Dos agentes han desertado. Y estoy
seguro de que ha sido por su influencia.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
201
—¿Quiénes? —preguntó Hanako.
—No lo hemos averiguado aún.
—Creo que yo lo sé —dejó escapar Shin de forma casi imperceptible. Pensé
que no era buena idea ahondar en el asunto.
—De todas formas... Es alarmante. Han obtenido mucha información y
desconozco qué otras trastadas pueden haber hecho por aquí.
—Pero mantened la calma —aconsejó Shirona—. El asunto está controlado.
Ahora estamos comprobando todas las fuentes de información y control de la rama y
parece estar todo correcto. No han robado ningún documento importante.
—Entonces... —intenté recapitular—. Se nos ha colado el enemigo, se ha reído
en nuestra cara, nos ha robado un par de agentes y recopilado información sobre
nosotros... ¿¡Y no pasa nada!?
—Ahora mismo no es prioridad —asintió Reiji—. Lo importante es concluir
con la Batalla, tiene demasiada repercusión mediática como para preocupar a los
diligentes de los universos y causar estragos en todo Sekai. Ese Chaos volverá a
aparecer en algún momento y será entonces cuando caiga.
—Exacto. Todo está bien.
—Y, ahora, deberíais descansar. Mañana será un día largo. El final de la
Batalla.
El grupo comenzó a dispersarse. Daigo fue con sus alumnos hacia la casa que
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
202
les había sido asignada. Wataru se marchó a tomar algo, indicando a Reiji y Shirona
que les esperaba. Shin y Sato se marcharon algo pensativos y mis compañeros
subieron al dormitorio. Yo quise marcharme también, aunque no sabía para qué.
Quizá sólo necesitase dar una vuelta para despejar mi mente.
—Espera, Keitsuke —Reiji me hizo parar en seco sobre el primer peldaño de
las escaleras.
—Dime.
—Hay algo que deber saber de Chaos... —su voz sonaba totalmente seria—.
Trabaja con ella.
—¿Pero quién es ella? Y, aún más importante... ¿Quiénes son ellos?
—Hay cosas que es mejor que no sepas por el momento —Shirona era incapaz
de mirarme directamente—. Compréndelo.
—¿Por qué?
—Te prometo que lo sabrás cuando llegue el momento. Pero ahora no puedo
hablarte sobre ellos. Sólo pondrían tu estado emocional en peligro.
—Vale —intenté ser comprensivo, aunque mi mente estuviese llena de
curiosidad por el tema—. Entonces respóndeme una pregunta. ¿Qué es lo que delató
completamente a Chaos? Es algo que me ha llamado la atención.
—Ese lanzallamas. Ese pequeño lanzallamas esférico.
—¿Qué tiene de especial?
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
203
Reiji se deshizo de la chaqueta que llevaba puesta y se remangó lo suficiente
como para mostrar una cicatriz de una quemadura en el antebrazo.
—La medicina aquí es más que buena, sí —admitió, tocándose con suavidad la
cicatriz—. Pero quiero mantener el recuerdo de esa herida vivo.
—¿Ya habéis luchado antes? —me sorprendí.
—Así es —resopló con tristeza—. Shino siempre fue un buen amigo mío...
Hasta ese día.
—Cada uno ha seguido su camino —sentenció Shirona—. No debes
atormentarte por ello, cielo.
—¡Claro que tengo que hacerlo! —gritó Reiji en un arrebato de furia atípico en
él—. ¡Shino siempre estuvo conmigo! ¡Shino me apoyó! ¡Shino fue quien me dio el
último empujón para ir a Sekai con mis padres! ¡Y yo le dejé tirado!
—¡Pero ahora es el enemigo! ¡Si la última vez no pudiste acabar con su vida,
ten seguro que no fue por mi culpa! ¡Ni la de Wataru! ¡No debes dejar que los
sentimientos tomen parte en esto!
—Por muy inconscientes que estuvieseis, fui incapaz de hacerlo. Lo siento.
—Fue un gran error por tu parte. ¡Mira dónde ha llegado ahora la cosa!
—Lo sé —dejó escapar, decaído—. Sé que ya no es el Shino que conozco. Sé
que ya no es ese chico con el que pasaba todas mis tardes jugando a videojuegos. Sé
que debería destrozar de una vez ese vínculo.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
204
—Comprendo cómo te sientes —le di una palmada en la espalda—. Me dolería
tener que derrotar a alguien tan importante para mí con mis propias manos.
—Por eso no quiero que te metas en...
—Calla, Reiji —la chica abrazó a Reiji con dulzura—. Tranquilízate. Ahora no
has podido hacer nada. Shino ya no está aquí.
—Pero por qué... ¿Por qué, entre todos, él?
—Ya ves que se ha convertido en un condenado ninja. Eso le hace ágil y
evasivo. Además, estoy seguro de que querían provocarme. Al menos agradece que
no hayan enviado a Sa...
—Ni menciones ese nombre —Shirona le cortó con un gesto.
Se hizo el silencio durante un momento. Al verlos fundidos en un abrazo sin
mediar palabra, sentí que aquél no era mi lugar en ese momento, por lo que me
marché dejando sólo un débil “Buenas noches” en el aire.
Tomé asiento en el desierto parque. Un par de gotas de lluvia caían dulcemente
sobre el suelo, pero no me importaba. Intenté dejar mi mente tan clara como la
superficie del lago helado, pero todos los acontecimientos asaltaban mi mente. El
combate contra Shin, mi conversación pendiente con Hanako... Pero había uno que
destacaba sobre todos los demás.
—¿Qué haces aquí? ¿Preocupado por Reiji? —una voz familiar apareció a mis
espaldas sosteniendo un paraguas.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
205
—¿Daigo?
—A mí también me mata verlos así. Reiji sigue tomándose muy en serio el
tema de Shino. Y Wataru, simplemente... No se perdona a sí mismo aquella derrota —
paró para sacudir un poco el paraguas—. Bueno, más bien, no se perdona el no haber
estado consciente para darle un puñetazo a Reiji en ese momento.
—Qué se le va a hacer. Es algo muy duro.
—Pero ahora no hay nada que podamos hacer al respecto. Así que... —estiró
los brazos —. Supongo que es hora de pasar a otra cosa.
—¿Pero qué hacía aquí?
—Ya lo sabes. Simplemente, un espía del enemigo.
—Pero... ¿Quién demonios es el enemigo?
—Lo siento, Keitsuke, no es algo que pueda decirte yo.
Daigo se marchó sin una sola palabra más, dejando el paraguas atrás. Yo, por
mi parte, volví a la pequeña casa.
En la habitación, el ambiente era totalmente distinto. Tamaki hablaba con las
chicas tumbado sobre la litera superior mientras que Hanako leía el último volumen
de Samurai Red sentada en los pies de su cama.
—¡Hey, Keitsuke! —gritó Tamaki, lanzándome el comunicador, como si nada
hubiese pasado—. ¡Saluda a las chicas!
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
206
—Eh, ¡hola! —me coloqué el auricular como pude—. ¡Qué de tiempo! ¿Cómo
os va por allí?
—¡Genial! —la alegre voz de Selene saludaba al otro lado de la línea—. ¡Ya
nos queda poco para acabar los exámenes!
—¡Suerte en los que os quedan!
—Muchas gracias... Y, enhorabuena, Keitsuke... ¡Has quedado entre los cuatro
mejores! ¡Como Tamaki!
—Gracias... —respondí, algo tímido.
—No podíamos separarnos de la pantalla durante el combate —intervino la
otra melliza—. Ese Shin es un máquina. ¿Por qué te rendiste?
—Ya había perdido. No tenía sentido seguir combatiendo.
—¡Nya! ¡Eres tan guay! —se entrometió emocionada la otra hermana.
—¿Eh? ¿Qué hace Dahlia ahí? —me mofé de sus hábitos heredados—. Si hace
veinte minutos estaba en el salón con nosotros.
—¡Qué tonto eres, Kei-kun! —rió Selene.
—¿Y ese mote? ¿A ti también te ha poseído Dahlia? —solté una sonora
carcajada—. Eh, tenemos que ir a tomar algo todos juntos cuando volvamos. ¡Que
tenemos muchas cosas que contaros! Bueno, os paso de nuevo con Tamaki.
Lancé el dispositivo hacia el chico de cabello claro y me acerqué junto a
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
207
Hanako, que estaba leyendo las últimas páginas del libro.
—Oh... ¡SPOILER! —grité, aunque no hubiera mirado nada.
—Así que muere Red —se burló la chica viendo mi reacción.
—¿¡Qué!? — se escandalizó Tamaki al otro lado de la habitación—. ¡No, Red
no! ¿Ahora quién llevará el legado de los Ippongi? ¡No!
—Tamaki... —respondió Hanako con un tono algo cortante—. Era una broma.
Ya sabes, esas mentiras que se dicen por diversión.
—Ah... ¡Casi me matas del susto! ¡No vuelvas a hacer eso! —y, tras
recuperarse del duro “golpe”, prosiguió su conversación—. Perdonad, chicas,
tenemos una bromista en la habitación.
—Y... ¿Por dónde íbamos? —Hanako me acarició la mejilla de una forma
sugerente.
—Estoy algo preocupado —comenté, ignorando sus insinuaciones.
—¿Qué te pasa?
—Es por Chaos. Nunca había visto a Reiji tan afectado por algo.
—Pero, ahora, no puedes hacer nada.
—Lo sé.
—Y, bueno, las cosas no han acabado tan mal. Habéis quedado los dos entre
los tres primeros. Sólo tenéis por encima a ese rubito tan estrafalario.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
208
—Y nos lo hemos pasado muy bien juntos, que es lo que importa.
—Un día estás aburrida en casa y sólo unas semanas más tarde te ves aquí. La
vida da muchas vueltas, ¿verdad?
—¿Qué? ¿Que están diciendo qué de mí en la tele? ¡Eso no me lo pierdo! —
Tamaki salió corriendo hacia la planta de abajo.
— Y todo ha acabado —sonrió la chica—. Pronto podremos volver a nuestro
tejado. De nuevo me tumbaré contra ti mientras tocas tu armónica...
—...Y tomaremos algo juntos, como siempre.
—No puedo esperar a volver a vivir esos momentos.
—Pero... Serán distintos... ¿No crees? —dijo la chica tumbándose sobre la
cama.
—Nunca dos momentos son iguales. Sobre todo si es contigo —me recosté,
mirándola a los ojos.
Pero estábamos muy cansados. Sobre todo, yo. Aunque el combate sólo fuese
una virtualización, ya no me quedaban energías para seguir despierto. Había sido un
día con muchas emociones y mi cuerpo no podía con más.
Mis párpados se cerraron poco a poco hasta sumergirme en un profundo sueño.
—Bueeenos días —saludó Reiji algo más animado—. ¡Y buenos días,
hermanito!
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
209
—¿Pero qué haces aquí arriba de tan buena mañana? —Tamaki parecía algo
adormilado.
—Vaya, qué susceptibles estáis por la mañana. Encima de que os traemos unos
churros para desayunar.
—¡Oh, churros! —a Tamaki se le cambió instantáneamente la expresión de su
cara.
—Oh... —me llevé la mano a la cabeza—. Debo de haberme quedado dormido.
— Buenos días, Kei —saludó la chica con una sonrisa—. Y, sí, te quedaste
dormido. Yo me acosté en tu cama, no quería levantarte... Estabas tan mono...
—Tan mooono —se burló Tamaki.
—Tsuji, te la estás jugando —advirtió Hanako.
—Bueno, arreando —insistió Tamaki—. ¡Que tengo hambre!
Cuando los dos hermanos habían abandonado la habitación, cambié mi pijama
por algo de ropa para andar por casa. Fui al cuarto de baño para lavarme la cara y así
espabilarme un poco y entonces bajé para encontrarme un desayuno... Familiar.
Quizá la palabra familiar no fuese del todo correcta, pero, sin lugar a dudas, me
sentía como en mi propia casa. Tamaki peleando con Ethan por ser quien más
comiera, Dahlia mojando dulcemente los churros en su taza de chocolate caliente y
Shirona compartiendo un café entre risas con Reiji. Hanako agarró mi hombro con
firmeza y me dio un dulce beso en la mejilla, que me hizo sonrojar un poco.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
210
—¡Ya estamos todos! —anunció Wataru.
—No —negué con la cabeza, cabizbajo—. Aquí falta un buen amigo nuestro.
Toc, toc.
—¿De verdad creías que yo iba a faltar? —Shin abrió la puerta y se precipitó a
por una taza de capuccino.
—Si ahora eres uno más de la banda —rió Hanako—. Y una leyenda, el único
que ha vencido a Keitsuke por ahora.
Ethan y Tamaki tosieron al unísono. Si bien nuestros combates no habían sido
oficiales, me habían vencido en más de una ocasión. Lo mismo podría decirse
también de Hanako.
—Oficial, oficial —corrigió.
—No creo que sea tal y como lo pintas —sonreí—. Tampoco soy el mejor del
mundo.
—Pero uno de los tres mejores de este año, sí —me congratuló Daigo—. No
como vosotros dos, que sólo habéis quedado entre los ocho finalistas —les miró con
recelo y, tras un incómodo silencio, añadió—. ¡Es broma! ¡Estamos todos muy
orgullosos de vosotros! ¡Menos de Hitoshi, que es un manco!
Hitoshi lanzó una mirada asesina que hizo al mentor de cabello plateado
retractarse instantáneamente de lo que había dicho.
—Por cierto —comentó Reiji, dejando su taza sobre la mesa—. Al parecer, hay
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
211
que volver al Coliseo después de comer. Parece que van a hacer un par de anuncios
importantes.
—Me pregunto si tendrá algo que ver con Chaos — susurré.
—Puede. O puede que no, quién sabe.
—¿Y qué vais a hacer hasta entonces, chavales?
—Eso ni se pregunta —Tamaki parecía decidido—. Ya era hora de tomarme un
descanso de tanta lucha y jugar un poco a Digital Clash.
—¡Me apunto! —coreó Ethan—. Pero también quiero probar un poco los
nuevos ajustes de mi patín en abierto.
—Yo... —comenté—. Me limitaré a vaguear un poco, pero, si eso, quizá me
plantee echarme unas partidas contigo.
—Yo me quedaré tocando un poco la guitarra, nya...
—¿Puedo quedarme contigo? —preguntó Shirona—. Podríamos tocar algo
juntas. Mi bajo tiene que estar ya oxidado.
—¡Genial, nya!
—Pues eso de tocar no es tan mala idea... Pero se me apetece tocar la armónica
en solitario, lo siento.
—Pues yo —Reiji se colocó bien el sombrero—. Me voy con mi hermanito.
Hace tiempo que no le dejo en ridículo jugando a estas cosas.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
212
—¿Y nadie quiere jugar a las cartas? —sugirió Shin, y, ante el sepulcral
silencio que le procedió, añadió—. Vale, jugaré con vosotros a ese Digital Clash.
—Todos decididos, entonces —sentencié impetuosamente—. Vámonos,
entonces.
Yo emprendí mi camino hacia el parque, donde encontré banco donde
sentarme. Hanako me siguió.
—¿Qué haces aquí, princesita?
—Sólo quería oírte tocar de nuevo —sus ojos se clavaron en mí.
Tomé de nuevo la armónica y, como tantas otras veces, comencé a tocar de una
forma tranquila y suave, mezclando la nostalgia con la alegría. La chica se acurrucó
contra mí. El tiempo pasaba sin que nos percatáramos de ello. El momento era
mágico.
—Keitsuke...
—Lo sé, todo esto ha acabado ya, tenemos que hablar.
—No —movió la cabeza de un lado a otro—. Aún no ha acabado todo... ¿Qué
te parece esta noche? Cuando se cierre esta Batalla, nos veremos de nuevo en este
banco. No lo olvides. Estaré aquí, esperándote.
—Me parece bien. Aquí mismo. No lo olvides tú tampoco.
La chica me abrazó de nuevo con todas sus fuerzas.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.
213
La tarde llegó, y, con ello, la clausura de la Batalla. Los palcos estaban llenos
de nuevo mientras que los siete finalistas saludábamos desde una plataforma instalada
en el centro del escenario.
—Chaos Valentine se ha retirado de la Decimotercera Batalla —al parecer, la
idea de la Directiva era ignorar directamente lo sucedido—, por lo que hemos
decidido hacer un pequeño cambio en las posiciones finales. Éstas se anunciarán más
tarde. Pero antes...
Una pegadiza canción llenó el estadio y un helicóptero que lo sobrevolaba dejó
caer a un hombre en paracaídas. Iba trajeado y una máscara tapaba la mitad superior
de su cabeza.
—Y en esta Decimotercera Batalla... —anunció su magnificada voz—,
daremos paso por primera vez al Combate Especial.
La figura se retiró la máscara de la cara para dar paso a un conocido rostro.
Y la segunda saga se va acercando a un final. Ya se han librado todas las batallas, pero... ¿Qué es esto? ¿Un
Combate Especial? ¿Pero qué diantres?
Y, bueno. Chaos era malote. Qué inesperado, ¿no? ¡Pero sí que ha sido una sorpresa que fuera un amigo de la
infancia de Reiji? ¿Qué saldrá de todo esto? Lo sabremos... ¡Algún día!
Porque ahora la Batalla ha de acabar.
Sekai – Segunda Saga © Javier Escámez "Habimaru" '09-11.