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Page 1: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

SUMARIO:

LA CLASIFICACION DE' SITIOS Y EL CRECIMIENTO DEL

Cupress us 1usitanica EN ANTIOQUIA, COLOMBIN'

Por: Heinrich TschinkeF';:

RESUMEN

En plantaciones jóvenes de Cupressus 1usitanica, en la Cordillera Central del Depmtamento de Antioquia, Colombia, se midieron 57 par­celas de las cuales se derivaron curvas de índice de sitio. Por med\::> de análisis de regresión se desarrolló una tabla de rendimiento ex­presando el volumen, área basaL y diámetro a la altura del pecho en función de la edad y del índice de sitio. Fueron notables, la amplia variación de la productividad entre sitios y la excesiva densidad de las plantaciones. Dentro d e distancias de pocos metros el índice de sitio (con edad base de 15 años) puede variar entre 7 y 21 m. y el vo ­lumen en pie a los 15 años puede fluctuar entre 3Cl y 300m~/ha. Para el (),riente Antioqueño se desarrolló un método senciHo para pronos­ticar e l índice de sitio antes de plantar, con base en la pendiente y en una clasificación visual O.e la convexida d o concavidad topográ­fica. Esta especie parece excepcionalmente sensible al sitio y su cre ­cimiento e s k,nto sobre formas topográficas convexas.

AGRADECIMIENTOS

Este trabajo no hubiera sido posible sin la colaboración efectiva de varias entidades forestales y muchas personas.

En especial el autor agradece a la Secretaría de Agricultura de Antioquia, por permitir que e l Ing. FOL Alberto Villegas, el señor Her­nán Rodríguez, el Ing. FOL Daría Sanín V., y varios Prácticos Fo¡esta­les ayudaran en estas labores .

También se expresa el más cordial agradecimiento a Cipreses de Colombia, S. A. que hizo posible la colaboración entusiasta de los Ings. Fors. Gabriel Vélez, Carlos Castrillón y también de otras p9rso­nas.

A los doctores E. K. Haller y Hugo John del Proyecto UNDP/FAO COL 16, se les agradece sus sugerencias y orientaciones en cuanto a la metodología, el análisis de los datos y la programación del com­putador y al Ing. FOL Jaime Raigosa, por su dedicación al revisar el manuscrito.

Finalmente se dan las gracias a los numerosos reforestadores y finqueros, quienes generosamente ofrecieron Su tiempo y pusieron sus fincas a nuestras órdenes.

'.' El estudio se llevó a cabo dentro del marco del Proyecf0 UNDP/ FAO, Centro de Educación e Investigación Forestal.

...... Oficial Forestal'. Departamento de Recursos Forestales y Proyecto UNDPlSF - FAO COL 16,

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1 - INTRODUCCION

La planeación efec tiva de plantaciones forestales, en escala co­mercial, requiere información sobre el rendimiento de la especie en cuestión en diferentes condiciones de sitio.

La reforestación con Cupressus lusitanica (Mil!.) en la Cordillera Centml del Departamento de Antioquia , Colombia, ha llegado a una e tapa en su desarrollo donde es posible llegar a conclusiones prác ­ticas , en cuanto al crecimiento de esta especie, que ya cubre varios miles de hectáreas en la región.

Por lo tanto, los objetivos específicos del presente trabajo fueron :

19- Averiguar la tasa de crecimiento de Cupressus en Antioquia , y

29- Correlacionar la calidad de sitio con características topográficas y del suelo, utilizando, de p refe rencia, criterios simples para su aplicación en el campo, de manera que se pueda llegar a una clasificación adecuada de sitios más aptos para la plantación de Cupressus.

2 - CURVAS DE lNDlCE DE SITIO

Cualquier expresión de l rendimiento de plantaciones debe tomar en cuenta la variación de un lugar a otro. Quizás la medida más p rá c­tica para expresar cuan titativamente la calidad de un lugar para pro­ducir madera sea la altura que los árboles dominante s alcanzan a cierta edad, lo que comúnmente se conoce con e l nombre de "índice de s itio" (también "índice de e stación").

Las curvas de índice de sitio son una represen tación idealizada del crecimiento de la altura de los árboles dominantes de un rodal durante su vida (Fig. 1). Su construcción, utilidad y limitaciones han sido discutidas por Bruce y Schumacher (1965) y Husch (1963) y han sido confeccionadas para nume rosas especies. Básicamente su cons­trucción requiere la medición de la altura de los árboles dominantes de numerosas parcelas cuya edad se conoce y e l cálculo d e a regre­sión entre la edad y la a ltura. Para facilitar el cálculo, Bruce y Schumacher (965), proponen un método para convertir esta re lación curvilinear en una relación linear, transformando la altura e n su lo­garitmo y la edad en su recíproca.

Pues to que se quiso aprovechar las mismas parcelas de mues­treo, no solamente para confeccio, a r curvas de índ ice de sitio, sino también para conseguir datos sobre crecimiento en volumen (véase Seco 3), fue necesario medir además de la altura de los árboles do­minantes otras características del rodal. Por lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas d e re ndimien to des­critos por Bruce y Schumache r (1965).

2. 1. Método de Campo.

Se midieron 57 parcelas temporales de muestreo cubrien do todo el 'rango de edades y de sitios que fueron de in terés.

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1 - INTRODUCCION

La planeación efectiva de plantaciones forestale s, en escala co­requiere información sobre el rendimiento de ¡,.,. ~~"ecie en en diferentes condiciones O¡:¡. coa' ­ ¡-o

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Fig. 1. R elación cntre edad y alt.ura de los árboles domi­nantes. Las curvas indican el índice de sitio, toman­do como base la edad de 15 años. Cada punto repre­sen ta una parcela y lleva el número de identificación del cuadro 2.

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Para calcular la tasa d e crecimiento, er necesario estar seguro de la edad d e la plantación en la cual se ubicó la parcela de muestreo. Debido a la forma empírica como anteriormente se establecie ron las p lan taciones en la región de e studio, fue su­mamente difícil encontrar plantaciones d e edad conocida mayo­res de cinco años. La plantación de mayor ed a d que se encon­tró y que reunía los requisitos de se16 ción tenía sólo 15 años.

La se lscción de las parcelas de mues treo no fue al a za r sino que cad a parce la tenía que re unir los siguientes requisitos de selección de a cuerdo con las normas pma la preparación de ta­blas de rendimie nto de Bruce y Schumacher (965): 2.2.

l. Seguridad en cuanto a la edad, con un máximo d e 10 % de error.

2. Se r un rodal, de densidad "normal", es d ecir, un rodal en e l cua l los árboles utilizan e l sitio a l máximo posible.

3. Tener por lo menos cinco años de edad, d ebido a que e n plantaciones más jóvenes, las prácticas de plan tación y lim­pieza p ueden tener mayor efecto sobre el crecimiento in ic ia l que las diferencias de sitio.

4. Se trató de que las parcelas es tuvie ran repmtidas aproxi ­madamente igual en el intervalo de edades de 5 a 15 años.

5. La s parcelas se ubicaron pma cubrir toda la gama de ca­lidades d e sitios que comúnmente había en la región. Es decir, en cualquie r fin ca o p lan tación se in ten tó establecer parcelas no sólo en lugares de crecimiento promedio sino también en sitios muy buenos hasta muy malos.

2.3 6. Se distribuyeron las parce las e n el máximo número posible

de fincas en los municip ios de Guarne (Piedras Blancas), Rionegro, El Re tiro, La Ceja y Caldas.

Todas las parcelas fueron redangulares debido a que es ta for ­ma es más fácil de delimitar en la topograHa quebrada de la región . Se hicieron de ta l tamaño que cada pCllTcela tuviera un minimo de 100 á rboles, por lo tanto sus áreas fueron d e 240 m:! hasta 1.000 m~ .

Se midió el d.a.p. (diámetro a la a ltura del pecho) de todos lo árboles vivos den tro de la parcela con forcípula y se anotaron los diámetros en clases diamétricas d e 1 cm. Aque llos árboles que no alcanzaron la a ltura del pecho, se anotaron en la clase cero.

Con base en las mediciones del diámetro, se localizaron los 250 árbole s de mayor diámetro por hectárea y se midieron sus al­turas totales. Es de cir, en una parcela d e 0.1 Ha., se selecciona­ron los 25 árboles de mayor d.a.p. para medir sus alturas. El promedio de las alturas medidas en es ta forma corresponde a la altura d ominante ("top he ight") y es un parámetro usado para caracterizar objetivamente la altura de los árboles dominantes de un rodal (Foggie, 1944).

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Además se midieron las alturas de ciertos árboles no dornin tes de tal manera que quedaran totalmente distribuídos a vés de todas las clases diamétricas. La finalidad de es ta ffio

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Para calcular la tasa de crecimiento, era necesario estar seguro de la edad de la plantación en la cual se ubicó la parcela de muestreo. Debido a la forma empírica como anteriormente se establecieron las plantaciones e:n la región da estudio, fue su­1ll0Dl ntA .rlif~,..¡l n ...__...._ '¡da mayo­

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Además se midieron las alturas de ciertos árboles no dominan­tes de tal manera que quedaran totalmente d is tribuídos a tra­vés de todas las clases diamétricas . La finalidad de esta medi­ción fue la construcción de la curva d .a.p. contra altura, nece­saria para calcu lar el volumen. En árboles menores de 12 m. de altura, se midieron las alturas con barras graduadas y ex­tensibles de a luminio. En árbole s de mayor altura, se empleó el clinómetro Blume-Leiss. Todas las a lturas se anotaron con una precisión de O. 1 m. , anotando e l d.a.p. del mismo árbol hasta e l milímetro.

2.2. Método analítico y Resultados.

Las edades y alturas de árboles domin antes de las 57 parcelas se encuentran en el Cuadro 2. La ecua ción de regresión fué:

lag H = 1. 228 - 1.804360 í E)

En donde H e s la a ltura de los árboles dominante s en metros y E es la edad de la plantación en años*. Se se leccionó la eda d de 15 años como edad base y se arregló la ecuación e n la s i­guiente forma:

lag 1.S. = lag H - 1. 80436 (l í l 5 - l/E)

en la cual 1. S. es el índice de sitio con base en 15 años de e dad. Se aplicó esta ecuación para cons truír las curvas de la figura l.

2 .3 Aplicación y Limitaciones.

Para determinar e l índice de itio de cualquier parcela en tre 5 y 15 años de edad, simplemente se averigua la edad de la p lantación y se miden las alturas de los 250 árboles d e mayor diámetro por hectárea. Interpolando enlre las curvas de la Fi­gura 1, se obtiene directamente e l lndiee de sitio con base en los 15 años de edad. Es decir, e l índice de una pdrcela se ría. igual a la a ltura que los á rboles domin ntes alcanzarían a los 15 años d e edad.

En la práctica, los á rboles cuyas alturas se deben med ir, p ue­den se leccionarse a ojo sin causar mayore s errores. Suponiendo que la p arce la de in terés tiene un área de 0.1 Ha. , deben bus­carse los 2S árboles de mayor diáme tro' en la parcela, una ta­rea rela tivamente fácil y Se puede h6ce r sin usar ningún ins­trumento.

Se agradece la cooperación del De. Gerard Schreuder, en aquel en­tonces profesor asistente de la Universidad de Yale, New Haven, Conn ., quien am ablemente procesó los datos en la computadora electrónica.

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Desde luego es arriesgada cualquier extrapolación más allá de los 15 años de edcrd que fue el límite superior de los dat03. De ninguna manera se debe aplicar las curvas a plantaciones ma ­yores de 20 años. Plantaciones menores de 5 años, no son lo suficientemente diferenciadas para poder clasificarlas.

La construcción de curvas de indice de sitio con la técnica aquí empleada, se basa en tres suposiciones:

l. Que dentro de cada clase de edad, las parcelas muestra cubren adecuadamente todo el rango de calidades de sitio que ocurren.

2. Que el eff~cto de diferencias en calidad de sitio sobre el crecimiento en altura sea igual para todcrs las edades.

3. Que la curva de crecimiento en un sitio malo, tenga 1 mis ­ma forma que la de un sitio bueno.

La distribución de las parcelas en la figura 2, indica que la primera suposición es válida para estos datos. Una prueba es ta ­dística, usando la ,elación de la de sviación estandard de los residuos de la regresión con le) edad (Bruce y Schumacher, Fig. 2, 1965), demosiró que también se puede aceptar la segunda su ­posición. Es imposible comprobar la validez de la tercera supo· sición, pero según SpurT (1952), e l posible error in troducido pro bablemente no sea importante.

Es notable la gran variación de la calidad de sitio que se en­cuentra en es tas regiones. Los Índices de sitio varían desde men03 de 9 m., hasta más de 21 m ., o sea una relación de apro­ximadamente1:2 . 5. Obviamente, para el reforestador en busca de un alto rel"ldimiento, es importante identificar los sitios más productivos.

Durante los levantamientos de campo, se notaron marcadas di ­ferencias d e índice de sitio a distancias sumamente cortas. Por eiemplú, las parcelas 6 y 7, ambas de 14 años de edad , dis ­taban solamente 30 m., pero tenían alturas de árboles domi ­nantes de 6.4 Y 17.5 m., respectivamente. No se notó diferen­cia apreciable de calidad de sitio de una parte del Oriente An­tioqueño a la otra. En cambio, una comparación de las parce ­las ubicadas en Caldas con las del Oriente (Cuadro 2), clara­mente demostró la superioridad de aquella región para el cre­cimiento de ciprés. Con la misma edad y en posiciones topo­gráfica s comparables, se puede apreciar que las parcelas de Caldas tienen alturas de árboles dominantes más altas que la s del Oriente.

Cabe señalar que el Índice de sitio promedio de la Figura 1, va representa necesariamente el Índice de sitio promedio de to ­das las plantaciones de la región. Para averiguar este dato se· requeriría un inventario con otra técnica de selección de las parcelas distinta a la empleada aqu i.

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Fig. 2. Rendimiento en volumen total para los diferentes índices de sitio. Los número sobro las curvas indican el índice de sitio en metros.

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3 - TABLAS DE RENDIMIENTO PARA PLANTACIONES ¡OVIENES

La predicción del rendimiento de plantaciones sobre varias calida ­des de sitio, es la base de cualquier mane jo intensivo y e la planea ­ción de inversiones. Una de las técnicas comunes para estllnar e l Cie­cimiento futuro ha sldo el d e:' las " tablas d e rendimiento", las cua le s expresan varios pmámetros del mda l, tale s como el volumen, el área basal, el número de árboles por hectárea, etc., en función de la edad y de la calidad del SiilO, y a veces ta mbién en función d e alguna ms ­dida d e la densidad del rodal.

Aunque a lgunos autores ya ha:n estimado e l crecimiento d e p I n­taciones de Cupressus en Antioquia, como Iilencik citado por falla (1967), ninguno ha ca lificado el rend imien to segun las diferentes cali­dades de sitio, diferencias que pueden ser extremadamente grande s en la región y que tienen p rofunda s implicaciones prác ticas.

Con el fin de ha.cer una primera aproximación a una tabla d e rendimiento para plarlla ciones de Cupressus en An tioquia, se calcu­laron las existencias de las misma s parcelas usadas para la construc­ción de curvas d e índice de sitio. El mé todo de campo fue descrito en la Sección 2. 1.

3.1 . Preparación de la Ecuación de Vobmen.

La tabla de volumen d Barrera (964) para Cupressus . tiene co­mo entradas d.a.p. y altura total y fue la base para todas la s estimaciones de volumen. Para facilitar los cálculos con la com­putadora electrónica, fue preciso transformar la tabla en una ecuación.

Debido a que los datos origina les no estaban disponibles, se to­ma ron sistemáticamente valores de le::: tabla y se calculo la re­gresión múltiple:

v = 0.00888 + 0.00003 D~H

en la cual, V es e l volumen total del árbol con corteza en me­tros cúbicos, D es e l d.G.p. en cm., y H es la altura total en metros.

El coeficien te de regresión múltiple de 0.99, indicó que la ecua ­Clan se ajusta bien a la tabla en el rango usado que fue has ta 30 cm., d .a.p. y hasta 32 m. de altura.

3.2. La Estimacióru de la Altura con Base en el Diámetro.

En vez d e medir la s alturas de todos los árboles de la parce la , generalmente se miden los diámetros y a lturas de unos po:::os árbole s muestras, se establece la regres ión entre diámetro y a.l­turas y se utiliza esta regresión para es timar la altura promedier de los árboles de cader clase diamétrica. Puesto que la forma de los árboles y por lo tanto la relación d .a.p. - altura varía según la calidad de sitio de la parcela, se clasificaron toda s

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las parcela s en una de tre s categ orías segÚn su índice dE tia, luego se calculó una regresión para cada ca tegoría. mejore s ecuaciones de los cin o modelos que se probaron prese tan en e l Cuadro l.

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3 - TABLAS DE RENDIMIENTO PARA PLANTACIONES JOVENES

La predicción del rend imien to de plantaciones sobre varias calida­de sitio, es la base de cualquier manejo intensivo y de la planea­de inversiones. Una de las técnicas comunes para es limar e l cre­

futuro ha s ido el d~ las "(ThJ-- ·to" , las cuales IrnlC':":rTn varios onr~--' en, e l área

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las parcelas en una de tres categorías según su Índice de s' ­tia, luego se calculó una regresión para cada categoría. La s mejores ecuaciones de los cinco mode los que se probaron, se presentm1 en el Cuadro 1.

CUADRO N') 1- ECUACIONES USADAS PARA ESTIMAR ALTURft TO­

TAL EN METROS (A) CON BASE EN EL d.a.p. EN CM.

GI)) , SEGUN CATEGORIAS DE INDICE DE SITIO.

N' de Ar· Ll rolles de In Rongo hales usn ­( oteMr io de rua ci ón Móx . dol dos en In 1. S. D. A. P. Reg resión

Menor que 12 la g A = 0.342 0. 558 lag D 0.81 478 16

12 hasta 16 ¡ g A = 0.432 -t 0.549 lag D 0.75 545 23

Igualo mayor que 16 lag A = 0.504 + 0.555 lag D 0.78 524 35

La difere-ncia apreciab le entre las tres ecuaciones, confirma la necesidad de cla sificar primero según e l indice de si tio para o· der es tima r a lturas con precisión. La forma logarítmica de las ecuar.iones tiene la gran ve n taja de que se transforman en rec ­tos al dibuiarlas sobre papel con dos ejes logarítmicos, lo que simplifica mucho el procesamiento manual cuando no hay acce· so a una computadora electrónica.

Se cree que estas ecuaciones dan estimaciones aceptables d e alturas para la mayoría de las p lantaCiones menores de 15, años en Antioquia, pues to que los datos básicos cubrieron un rango muy amplio de sitios .

3 .3. Cálculo de las Existencias de Cada Pa~cela.

La com putadora e-lectrónica calculó las existencias de cada [­cela partiendo de las distribuciones de los árboles en las clases diamétricas y aplicando las ecuaciones de diámetro-altura y de volumen. Los resultados de es tos cálculos están resumidos en el Cuadro 2.

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CUADRO RESLUEN DE DATOS BASTeas DE LAS PAR:ELAS DE CuPfiE65US

3 .4 . El Rendimiento en Relación a la Edad y al In dice de Sitio. Todo~ los árbol es oon d. P . ArtJoles con d. ti. P

10 cm. A~l b. Como el objetivo principal fué el d e pronosticar volumen, á.>. 15 cm .

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26 15.6 10.6 12. 0 201 6 . 12. 9 11 8 .1 121~. 19.2

... 9 0 . 0 0 . 0 0.0 100 2 7

703 3.5 5 0 .~ 0. 0 O • 6.0 203 5 291. • 2 O • 425. B • 2 50. 2~.I 22. 8 lJ ) .3 30 1

21 16.2 1 303 12.7 12.0 2150. 24.7 165 0 . l ,- "'. ó 14.7 11 • ~ 5S. 5 0.0 0 . 0 3018.8 901 9.2 19 . 0 9~ .6 1180. O. 1201 28 24 . CUJB...8.8 9 . 6 o. 0 . 0 0 . 0 30 110.2 6 .9 7.7 2025. 9 • • '-4.6 250. 20329

30 8.8 11.7 9.7 7 •• 2 5. O•• 1. 9 JO l7.~ 8.8 2050. 1:/ . 5 5 •• 0 725 . 31 .0 C. . 0 0 .08.8 o •• 2 . 5 301

32 8.3 7. 3 5 . 8 5.6 38. 1 7 2 . H 25 30. 6 . "

.076 8. 8.0 35.9 O. o. e 3018.8 75 . 212.~ la. ) d.7 25 .. 4.H .~ l"'.~U., 7.2 46. 2 5 . ~ 0 . 0 0. 0 3 0 1 3 ..

5.2 •• 1 •• 0 2 625 • 7. 5 125. 1.1 O.13 49. 5 C. O 0. 0~ .2 I. ~ 5.2 3275. 7. 0 SO . 003 l •• 30 1". 71".2

0 . 0 0. 035 S.2 3 . 9 2.8 210 2 S . 1. 5 O. 0 . 0 0 . 0 o. 3 0110.s 6. 3 2'-. 5 ) . 0 0 . 0 7.5 b . .. 21 75 . 7 .0 4 1 ... 0 .6 O. 0 . 0 •• 2 15.7 9.3 H. 3n

31 310

44.6 O.l •• 0. 0 0 .0 20 0 38

6.2 11.9 801 5 .8 5. 8 7 .6 190 . 6 . 2 2833. 0 . 1 o.e 0. 0 200

39 ... 6 3.8 2 . 6 0.6 O.1.9 5 .3 2312. 2•• 0 2 1.6.2

200 I.S, , "O

..... 29. 7 0 . 0 o. e o. 0. 0 0.06.2 8 .7 6.0 5. 0 2 .. 50. 3 01 O. 10 ... 93. 5 7S.6 3.86.2 U ... 10.0 10 . 8 2050. 18 . 8 1300. l S.3 200. 19. 8 2 00

I.. 1 0 .0 o. 0 .0 0.06.2 703 •• 9 3. a 2 • • 29 .9 O. 0. 0 200 .. 2

3031. 1 . 7 llt. _ 2 .. 0.7 125. 29 ...37. 9 19 2 . 3... 2.0 lS.2 2125 • 38 . 9 2..6.6 1 8 ~ 0.17 .0 1 ~ .9 2

.. 3 0.0 0. 0 1000 I6.5 5. 0 J913. 7 . 8 55.9 33 • 0.3 I 1.5 O.13.5 8 .1'.3 .... 0.0 0 . 0 ..00

.. 5 8.9 8.8 O • 5.3 1001 6 .3 13.0 83.2 200. 1.51.. 3 "08 3 .

0.09 . 1 100109. 110. 1 87.9 2.3 13 .2 O. 0.0 100 05.1 10 .9 6.6 2 50.17 . " 18 .. 6 9.1 7 •• 0 .6603 3050 • 9 •• 56.0 6 7. 2.9 O. 0.0 0. 0 40 0 47

5.3 1" .9 0.7 0. 0 .. ocH ... 7 .3 69.6 3 •• O. 0. 09 .0 10.1 3920. 11 .8 80.'.3

10 .6 7.8 0 .0 40 C "9 .. e ~.3 1 .6 10.3 C> O.3 17. C ol 0.5 O. 0.013.1 '''0.

l • • .. 03 50

7 •• 6.6 3 .8 18.7 17. 0.210.7 13.7 9 . 8 15.1 87.0 383.' 3 16 . l~.", 12 .H 800 . 7.2 192 . 0 loa..19.6 19.8 1 5 .2 19 12. 34.7 236.3 1287. 223.615.5

.. o..2... 7 122.615 . 0 13.9 1216. 157.8 I 700. 18.610.5 16.8 161 6. 2S.9 165.651 1".2 15 7 ... l1t6.3 400 . 51.9 1001 1.89.7 lt..o 12.8 12.2 2275. 26.9 1900. 25.0 80352 18.6

9.7 20 ... 35.0 2 ..6.323.7 16.7 19.7 1230. ~7.6 261.7 170. 37.6 261.7 96 0. .01H,.. 9.7 22.3 17.5 196.916S 0 . 31.' ZOO .3 1525. 30.6 8 12. 22.31".6 1"8.31'.5 "al 1.....6.9 H.O 2.....H 20.6 B.l 138 1 . ~S.O 156. 0 128a. lS2.9 72S. 17.9 115. 8 "02

S6 17.8 110. 7 22 .59.9 20 ... l~.e 1625. 31.9 ~OIo.O 1562. 31.6 202.2 812. 150.1 1002 57 l't._6.7 20.2 11.3 9 • • 3737. 128.2 163.1 19.3 303 ..0316~0. 111.2 162. 20.9

I.8

Cod1g0 de lncd 1 i cktd

~ o - Pi edras 8 1n(lC8 5, LU jt'15

1 icores 91e (lcas , Vr·r..q;Bz I.8 2 - Piedras Bll~ncli s f BUBMvista

100 - Rio Ne'.)ro, rtÍ t1 fT\f 1

200 - L. Ceja . San José Ltdo. JOCI - El Aet !ro , Emau5

1 - n Re tiro . La Gu i ja aoo Caloo9 , Lo VÍ. 401 - Ca loos , nondal1ft

02 - Caloos, Co r s iC:H

403 - Cs l d8 5 , Esperenz6 404 - C ~ lde5 , Geles

Page 11: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

CUADRO 2

17 '& .~ ~~ "O E <i..al-o. f"~~

.8 ~ !." . 1 .. 2~1"- ..!!"i ....,~I ....,U..,., ... . .....;3!! ....M·82 ~:....... ~:",e .... e H g~g..!.g..!. ~ 8." .. :@ 8. ti..... ~8. < ~ <­o c.< E <"­

) ~.7U.9 2el. 1>.1>91 . 9 U d 21l.7 12 •• 10 ... 11. t. lt.1I1I • 0 1011.12.0 .. . 0 .. u. b • • 1>1... 9 1...0 23 .:; 2 .812.0 11.0 1 2 .9 1933. 31.1 2,.6 1... 0 300. 1> . 3 12.3 12 ol 10.7 120l 92 .9 33 .0 O11>99. 02 . 1

1... 0 11.7 1>.11 7.3 3.711 •• 0.62 Sbll. ~9 .1 1 ~. ~ H. 2.7 O 1... 0 8.0 7.2 .... . l . 12.1 8.0 O.~0 2 .2 39. 012.' H. 2.9 O

... 91'0.0 11 ... ... 2t..~ ..09~. ~ .) O. 0.0 0.0 O2 2.3 17.71<0.0 17.~ 11.9 10.8 3999. ].~1.5 e~ . 9 650. o' 3 .~. ...1...0 .... ..2 •• 0 11. 1232 ' •...1 ..... A

~

RESWEN DE DATOS 8ASICOS DE LAS P~ELAS DE CtJ>RESSUS

Todos loe droo185 A~l lO",:~ . d . 8. P . Aroo~s ~~n~: 8. p

........8' .... 1II]' ,,~ñ i·-e' .81.81 í!n:

3 .4. El Rendimienlo e n Relación a la Edad y al Indice de Sitio.

Como el objetivo principal fué el de pronosticar volumen, á rea basal y diáme tro promedio con base en e l índice de sitio y en la edad, se desarrollaron ecuaciones de regresión partiendo de los datos del Cuadro 2.

Los resultados derivados de estas ecuaciones de regresión, es­tán resumidos en e l Cuadro 3 y para mayor claridad algunas de las relaciones se presentan también en forma g ráfica (Fig. 2). La técnica usa d a p a ra preparar el Cuadro 3, fue la siguiente [se mejante a la empleada por Benne t, e l a l. (1959) para planta­cione s jóvenes de Pinus ellio lliiJ: Para cada variable que se quiso pronosticar (es d ecir, las variables q ue figuran en las co­lumnas 3 hasta 7 del Cuadro 3), se calculó la regresión múlti­p le , usando esta variable como la variable depe!1.diente y la edad y el (nd ice de sitio como las variable s independien tes . También se ensayaron varias transformaciones de las variables tan to depe ndientes, como independientes, como por ejemplo e l logarit mo del volumen, e l recíproco d e la edad, y algunos tér­minos de interacción entre las variables . Todos los cálculos fue­ron hechos en la comp utadora e lectrónica, dan do como resu l­ta do varias ecuaciones pOSibles para estimar cada variable de­

ndiente . Se escogieron las ecuaciones que mejor se ajustaron a los d a tos, es de cir a quéllas con e l mayor valor del coefici en­te de d eterminación (W), para la e laboración del Cuadro 3.

C UADRO W) 3 - Tabla de rendimiento para plantaciones jóvenes de CupresslIs lusi/anica en Antioquia, Colombia.

A1t. de O. A. P. A. Basa l Volumen Arca Basal Vol umen

Fdod Dominantes (m)

Promedio (cm)

Tota l (m" / ho)

Total (m"/ho)

:.. 10 cm. (m'/ ho)

~ lO cm. (m'/ho )

(1) (2) (3) (4 ) ( 5) (6) (7)

5 5.2 1.6 2.1 33.1 O O 10 7. 8 6. 1 6.3 42.6 2.6 5.0 15 9.0 7.6 9.0 45.7 5.0 8.6 20 9.6 8.4 10.8 47 .8 4.8 11.0

5 6.9 4.0 4.4 43. 7 O 6.3 10 10.4 8.5 10.3 66.1 9.5 31.8 15 12.0 10.0 13.6 74.2 13.3 41.1 20 12.9 10.7 15.7 79.4 13.8 47.0

5- ~ 6.4 9.0 60-:-2 1.2 25.1 10 13.1 10.9 16.7 100.0 16.5 70.5 15 15.0 12.4 20.5 120.3 2 1.6 93.6 20 16. 1 13.1 22.7 13 1.9 22.7 106.8

5 10.2 8.7 18.6 77T ~- 45.0 10 15.7 13.2 27.3 1.54.9 23.4 133.1 15 18.0 14.7 31.0 195.0 29.8 178.8 20 19.3 15.5 33.0 218.8 31.6 205.9

- 5- 12.1 1l.l ­ 3 8.4 - 104.8 7.2 76.0 10 18.3 15.6 44.5 239.9 30.4 230.0 15 21.0 17.1 46.8 316 .3 38.1 316.3 20 22.5 17.8 48.0 363.1 40.6 363.1

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Page 12: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

Abajo se detallan es tas ecuaciones empleadas para calcular los valores del Cuadro 3:

Las variables independien tes se definen como sigue:

E. = la edad de la p lan tación en años

1.S. = e l índice de sitio en metros , con base en 15 oños .

Pues to que los árboles con diámetros muy pequeños son de/ co interés económico, a veces es muy util restf1 ~g¡rse ,C;l a r basal o al volumen de árboles por encima de c¡er~o dlOmet De las 51 parcelas q ue tenían árboles con el .~.a.p. Igual o rr yor de !O cm. se desarroíló la siguiente ecuaClon:

A B. I " = - 22.91 + 46.36 O/E) + 3.64 O.S.) = 13.23 O.S./E!, e

R~ n o.: •• ....,...n."l rI'CIr tan da le;¡ media = 4.48 m- /1

3.4.1. Altura de árboles dominantes en m. mi. :3.4.6.

Una simple transformación de la ecuación de la Sección 2.2, permite calcular la altura de los árboles dominantes según la ecuación siguiente:

log H = log 1.S. + 1. 80436 (l/l S ­ l / E)

o también se pueden leer las altura s en la Figura l.

En la práctica, por supuesto, se util iza la a ltura de los dominan­tes a cierta edad para estimar el índice de sitio.

3.4.2 . D.A.P. promediO en cm . (D).

El d.a.p. promedio se define como e l diámetro a !el a lturo del pecho del árbol de área basa l promedia. Es un valor q ue com o bia debido a entresacas y distancias de p loTI toción y que aqu ; simplemente refleja las densidades comúnmente e ncontradclS en la región de estudios. Se estima con bose en la ecuación

D = 3.51 - 44.95 (l / E) 0.79 (l.S.)

con 1 43

R~ =

cm. 0.88 y con e l e rror e sta ndard de lo med ia ual a

3.4.3. Area basal total en m 2 / ha. (A. R)

El á rea bosal to tal, e s la suma de las áreGs basale s a la aJturo de l pecho de todos los árboles estimados por:

log. A.B. = 0.9360 = 7.7603 O/E) + 0.0370 O.S.) + 0.3389 (I.S./E) con A? '= 0.83. Nótese que la forma de é t y la s iguien te ecua­ción es muy pare cida a la ecuación sugerida por Bruc y Schumache r (1965) mencionada en la Sección 2.

3.4.4 . Volumen to ta l en m :1 /ha. (V).

El volumen tota l e- la suma d e los volúmenes individua le s de todos los árbole s y la mej or ecua ción fué :

log V = 0.9788 + 0 .8397 (l / El + 0.0840 (l.S.) - 0.2131 (l.S./El con W = 0.88. La Fi . 2, fué construíd usondo é s ta ecuación.

3.4.5. Area basol en árboles con mJjha (A. B. lo)·

I1n d .a.p. igualo mayor de 10 cm. en

- 14­

Page 13: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

Abajo se detallan estas ecuaciones empleadas para calcular los valores del Cuadro 3:

Las variables independientes se definen como sigue :

E = la edad de la plantación e n años

Puesto que los árboles con diámetros muy pequeños son de po­co interés económico, a veces es muy útil restringirse al área basal o al volumen de árboles por e ncima de cierto diámetro. De las SI parcelas que tenía n árboles con el d .a.p. igual o ma­yor de 10 cm. se desarroiló la siguie nte ecuación:

.1.

1.S. = el Índice de sitio en me tros , con base

Al/ura de árboles dominantes en m. (f-li

en 15 a ños .

3.4.6.

A. B. I" = - 22.91 + 46.36 (l/E) + 3.64 n.s.) - - 13.23 (I.S ./E) ca:l R~ = 0.86 y con e l e rror estandard de la media ~ 4. 48 m~ fha .

Volum en en árboles con un d.a .p. ig ualo mayor de 10 cm. ei: m'/ ha. (V 101).

Se encontró una relación l'near estrecha en tre e l volumen total (V) y e l volumen cm. (V lO), lo cua l

en árboles con d.a.p. igua l se puede expresar co mo:

o mayor de 10

VI n = - 43 .S + l . 14 V

con W mJ/ha .

= El

0.94 y con e l error intercepto negativo

es tandard de la m~dia = indica q ué rodales tienen

17 .2 que

supero 38 m:1/ha . antes de que haya a lgún V 10. Se a plicó esta relación a los valores de volumen total de l cuad ro para cal­cular la columna 7.

Dado el pequeño número de parcelas disponibles , espe cia lmen te la escasez de parcelas de la s ed des ava nza da s, la s e::: uaciones y cuadros an teriores deb en usarse con mucha ca utela . Pues to que las ;:rrcelas ma yores tuvie ron sol men te 15 a ños de e ..Jad , los datos para mayor eda d, fueron extrapola dos . Se advierte que de ninguna manera d eben proyectarse las re lac iones más allá de los 20 años.

De n tro de es las limitaciones , sin e mbar o, e l Cua dro 3 uede se rvir como una guía e n el rncmejo de plant ciones jóve es de Cupressus y en la plcrneación de proyectos de refores t:::rción . Es difí:::il decir para cual reg ión realme nte tiene va lidez . Es tric ta ­mente hablando, deben a plicarse única men te a la zona en la cua l se tomaron la s parcelas mue s tras, e s decir, al Orien te An­tioqueño y a l municipio de Calda s. En la ráctica, sin embargo, se opina que la s re laciones tienen validez pa r:::r una re ión má s amplia. Es decir, que, d a do el indice de sitio, a cierta edad debe e sperarse la misma producción por h ec tá rea tanto de tro como fuera de la zona de estudio, aún bajo condic'ones climáticas y edáficas d ife re ntes , siempre que las práct'cas de plantación, es­pecialmente la s densida des, sean parecida s. Las gran des dUe­rencias que se espera ocurran en o tr s reg iones. se deberán a que los Índ ices de s itio que comúnmen t se encuenlrcrn en e ca mpo son inferiores o superiore s a los silios . romedios de la zona de estudio. Va le la pena d iscutir alg unos a spectos de l Cuadro 3 y de la figura s re lacionadas. Lla mo: la a te ción la culminación rá ida del crecimiento en altura d e los á rboles dominantes (Fig. ]), en volume n total (F ig. 2) y e n á rea ba sal (Cu dro 3). Es so:b ido que e l á rea ba sal tiende a nívelcnse tempranamente en 10 vida de un rodal, pero normalmente no tan temprano, especialmente

- 15­

Page 14: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

para los índices de sitio buenos, como sucede aquí entre los 15 y 20 años. Es menos probable todavía que el crecimiento en altura y volumen a.lcancen su culminación tan rápidamen te . Los únicos sitios que todavía muestran un crecimiento neto apre­ciable entre los 15 y los 20 años son aquéllos con un índice ma ­yor de 18 m. (Fig. 2). Las curvas se conforman a la observación general de que los sitios infe riores tienden a nivelar su produc­ción antes que los sitios buenos. Queda la d lida si la nive l ,ción realmente viene tan temprano o si es una peculiaridad de los datos limitados y del mode lo de regresión usado. La s curvas de índice de 3itio para Cupressus Jusi/anica en Afriea Oriental Pudden 1958, Griffith and Howland 1961), ciNtamente no ct ­eanZffi1 una nivelación tan temprana. Las implicaciones de una nivelación son de suma importancia práctica, e ro lcr dud so ­lamente podrá clarificarse extendiendo este estudio a parcelas de mayor edad, tarea que se volverá más fácil con e l trans­curso de tiempo cuando existan más plantaciones de mayor edad. Tal estudio podría utilizar los datos del Cuadro 3 y s im ­plemente complementarlos con parcslas de edad mayor, o lo que es preferible, podrb basarse sobre porce b s perma nen tes de rendimiento.

Debe recordarse que las pendientes de las curvas de la Fig. 2 indican solamente e l crecimiento neto en volumen e l cual no es de tanto interés práctico en p lan taciones d e mayor edad. El crecimiento bruto en volumen, que incluye las entresacas , se rá bc:.stante mayor que el ne to en plantaciones. de edad avanzada y no tiende a nivelarse tan temprano como lo confirman los primeros resultados de parcelas perma nen tes en la región de e studio (Tschinkel, 1971).

Lo que más se destaca en la Fig 2, e·s la gran diferenc ia en rendimiento entre los índices de sitio. Mientras un mejoramien­to en el índice de sitio de 9 a 12 m. conlleva un a umento de 28 m.:l/ha. a los 15 años, un mejoramiento en el índice de sitio de 18 a 21 m., está acompañado por un aumento de 121 m. :: /ha. a la misma edad, lo que es 4.3 veces mayor. De a hí la gr an importancia de dar preferencia a los mejores sitios en progra­mas de reforestación, especialmente con una especie exigente como es el Cupressus. Sin duda alguna, en s itios buenos, e l rendimiento del Cupressus es comparable con el de casi cual ­quier especie del mundo.

Debe anotarse que el número de árboles por hectárea no fig ura en el Cuadro 3. Esto se debe a que no se encontró una corre­lación entre esta variable y la edad y el indice de sitio. Pro­bablemente, esto se debe a que el número de árboles por Ha., en estas plantaciones jóvenes no obedece ninguna ley na tural de crecimiento, sino simplemente a las. densidade s de planta­ción y a las intensidades de entresaca.

3.5. Aplicación de Jas Tablas de Rendimiento.

Dentro de las limitaciones ya discutidas, estas tablas de ren­dimiento pueden ser una guía útil en e l pronóstico d el creci­

- 16­

miento de plantaciones existentes y para una idea de !os lír tes de productividad de te rrenos por pl~tar y esp.e;lalmer para predecir e l crecimiento de plantaCiones ya eXlslentes. proced imiento para lograr esta l:lIedicción ~n0i\1" ni,"..!.. d,.. .

3.6.

l

\

Page 15: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

para los índices de sitio buenos, como sucede aquí entre los 15 y 20 años. Es menos probable todavía que el crecimiento en altura y volumen alcance n su culminación tan rápidamente. Los únicos sitios que todavía muestran un crecimiento neto re­dable entre lo::; 15 y los 20 años son aqué llos con un índice ma­yor de 18 m. (Fig. 2). Las curvas se conforrnrcn - ~r:ión1_

<;¡eneral el ,... ....... 1-- - '"

miento de plamaciones existentes y para una idea de los lími­tes de productividad de terrenos por p lantar y especialmente para predecir e l crecimiento de plantaciones ya exis tentes . El procedimiento para lograr esta predicción es sencillo. Dividien ­do la plantación (que debe tener por lo menos 5 años) en áreas homogéneas en cuanto a edad y a altura del rodal, se miden las a lturas de algunos árboles dominantes. Con base en e sta información, se determina el índice de sitio de la Fig. 1 o de l Cuadro 3. El mismo cuadro indica las existencias hasta los 20 años de edad y las alturas y diámetros promedios del rodal. Si el área basal actual del rodal en cuestión difiere mucho del valor de la tabla, será necesario h acer un ajuste proporcional.

3 .6. Rendimiento y Diámetro Promedio Relacionados con la Edad, e l In dice de Sitio y la Densidad del Rodal.

Usondo los m ismos métodos de la Sección 3 . 3, se calculó a regresión en tre e l volumen to tal en m.::/ha. (V) y la ed a d (El, e l índice de sitio (l.S.) y el núme ro de árboles por Ha. (N), re­s ulta ndo la ecuación:

lag V - 0.7850 - 0.5137 (l/E) + 0.091 2 (l.S.) - 0.2451 (l.S./E)+ 0.00007 N con R2 - 0.92. La Fig. 3 ml estra lo mismo ara tres Sndices de sitio seleccionados.

Igualmente, se encontró la siguiente re ación para el d iá metro promed io en cm. (O)

D = 5.66 - 33 . 80 (l/E) + 0.732 (l .S.) - 0. 00106 (N) con R~ = 0 .94 y con el error estandard de la media -= l. 12 c m.

De esta ecuación puede gene ralizarse que para cualquier com­binación de edad e índice de sitio, el aumen to de 1000 árbo­les/ ha. causa una reducción de 1 cm. en e l diáme tro prom io.

Una ne cesida d urgente e n las p lantaciones d e Cupressus en An­tioquia es el desarrollo de normas para la entresaca. Aunque la de terminación de la densida d óptima de las plantaciones probablemente requieren inves tigaciones locale s, es e cial men ­te e nsayos de entresaca , se podrá egar muy ce rca al óptimo por medio de la a plicación de p rincipios ge nera les, de la com­paración con otras especies, y ds l análisis de las rela~ iones aquí nre sentadas . .Entre los reforestc:rdores locales comúnme nte se no ­la la tendencia de mantener pla n ta ciones con un excesivo nú mero de árboles por hectárea, con la esperanza de a sí aumen ­tar el rendimien to d el volumen . Esta o:~ i n ión es correcta. como también lo indica la Figura 3, pero su.bestima e l efecto negativo qus- el excesivo Eúmero de árboles tier'!e sobre e l d.a.p.

Se tratará de ilus trar estas interre laciones con el ejemplo de un rodal de 15 aÍl.os de edad con un índice de sitio de 18 m, Inser­tando estos valores e n las d os ecuaciones anteriores se con­feccionó e l Cuadro 4 que cubre de nsidades desde 4.000 heslcr 1.000 árboles por Ha. Tomando e l volumen que corresponde a 4.000 árboles por ha. como 100 % se nota que una disminución

--17­

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hasta el 75% en el número de árbcles resultada en un vo men total de 85% del original. Es decir, que el número de ( boles por Ha. puede reducirse sin una disminución proporc nal en el volumen. Paralelo a esta reducción, el diámetro pron dio tiende a incrementarse de 12.3 a 13.4 cm. La última colum muestra que el volumen p romedio por árbol individual se inc menta rápidamente (en proporción al cuadro del d.a.p.).

CUADRO W' 4 - Efecto del número de árboles por Ha. sobre el ve men total y las dimensiones de .los árboles individ\ les, para un rodal con 15 años nA .:.ri,....l - t __ _ • •

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E DA D en años

Fig. 3. R endimiento en volumen total en relación con el nú­mero de árboles por hectárea para tres Indices de si ­tio seleccionados. Los números sobre las curvas indi­can el número de árboles por hectárea.

Page 17: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

4000 hasta el 75% en el número de árbcles resultaria en un volu­men total de 85% del original. Es decir, que el número de ár­boles por Ha. puede reducirse sin una disminución proporcio­nal en el volumen. Paralelo a esta reducción, el diámetro prome­dio tiende a incrementarse de 12.30 13.4 cm. La ú ltima columna muestra que el volumen promedio por árbol individual se incre­menta rápidamente (en proporción al cuadro del d.a.p.).

CUADRO N'-) 4 - Efecto del número de árboles por Ha. sobre e l volu­men total y las dimensiol1es de ,los árboles individua­les, para un rodal con 15 años de edad e indice de sitio de 18 m.

Arboles por ha. Volumen por ha. I

Diámetro promedio

cm. I

Vol . promedio por árbol

m t1Número % m'; %

4.000 100 255 \00 12.3 0.064

3.000 75 217 85 13.4 0.072

2.000 50 185 73 14.5 0.092

1.000 25 157 62 15.5 0.157 I

Aunque estas interrelaciones simplemente ilustran un principio fundamental de la silvicultura (vea resultados semejantes para Pinus elliotlii, Bennett 1963), las magnitudes aquí derivadas de datos locales, podrían servir de guías para la entresaca. Por ejemplo, puede fácilmente obtenerse una información como la que contiene el Cuadro 4, para varias edades e índices d e si­tio . Esta informacióll puede servir de base para cálculos econó­micos que tratan de encontrar el rendimiento máximo económi­co, comparando el sacrificio que implica la disminución en el volumen total con las ventajas de tener árboles de mayores dimensiones.

Volúmenes totales por Ha. pueden fácilmente dar impresio nes falsas de productividad si no se toma en cuenta la distribución de diámetros. El volumen de madera en fustes de diámetro pe­queño (menores de 10 a 15 cm.) es de poco interés económico, aún para pulpa. Por esto es importcmte desarrollar faGtores de corrección para la tabla de volumen de Cupressus con el fin de poder calcula.r el volume n por encima de cierto límite de utilización ,

Con el objeto de encontrar otras normas para la densidad ópti­ma de las plantaciones, se compararon los datos de Antioquia con datos tomados de las tablas de rendimiento de Africa Orien­tal (Griffith y Howland 1961) donde hay una experiencia larga con Cupressus lusitaniea. Es importante anotar que la variación de los Índices de sitio es mucho menor en Afriea Oriental que

-19­ UNI

Page 18: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

Antioquia y que allí casi no existen plantaciones sobre sitios muy malos. Además para todos los sitios, las curvas de creci­miento son más inclinadas y no tiende n a: nivelarse tan rápido. En consecuencia, debe tenerse bastante cuidado al tratar de aplicar las tablas de Africa directamente a Antioquia. A pesar de ésto es razonable esperar que una parcela de igual altura e igual edad en Alrica y Antioquia deben tener aproximada­mente igual volumen, siempre que las densidades sean apro­ximadamente iguales. Por lo tanto para cada parcela de An­tioquia, con un índice de sitio mayor de 12 m. se consultó la tabla de rendimiento de Alrica Oriental para calcular el volu­men que esta parcela tendría con la edad y altura de los árbo­les dominantes dados. Estos volúmenes se comparan con los volúmenes reales en la Fig. 4. Se notó que para la misma edad y la misma altura de dominantes las parcelas africanas tienden a tener un volumen ligeramente superior a las antioqueñas.

Se siguió e l mismo procedimiento para comparar el número de árboles por Ha. en los dos países (Fig. 5). Es obvio que las par­celas en Antioquia tienen mucho más árboles por Ha. que las parcelas comparables en Africa Oriental. a menudo cuatro ve ­ces más árboles. A pesar de pequerlas imprecisiones tanto en las tablas africanas como e n 102 datos antioqueños, no se pue­de negar que en Africa se logra aproximadamente la misma producción de volumen por Ha. que en Antioquia, aunque con menos árboles por Ha. (y por lo tanto con árboles de mayores dimensiones) .

Uiiliza ndo estas comparaciones y las relaciones expuestas en el Cuadro 4, se podría resumir que , en promedio, las plantaciones d e Cupressus en Antioquia son excesivamente densas y que de­ben entresacarse lamitad o más del número de árboles. Para evitar daños al rodal, debido a una. abertura demasiado abrup­ta, posiblemente sea mejor efectuar las entresacas en dos eta­pas.

3 .7. Guías para la Estimación Rápida de Existencias de Madera en Plantacio nes Jóvenes .

Los inventarios de b osques normalmente requieren parcelas de muestreo en las cuales se miden los diámetros de todos los ár­boles y las alturas de algunos. Estos métodos pueden simplifi­carse mucho cuando se trata de plantaciones puras y jóvenes. Especialmente recomendable es el uso de prismas para 10) es ti­mación del área basal. Para ayudar en la estimación del vo!u­men total en m.:i/ha. (V) con base en el área basal total en m~ fha. (A. B.) se desarrolló la siguiente regresión linea r, u tih­zando las 51 parcelas que tenían árboles con el d.a.p. igual o mayor de 10 cm.:

V = - 4.52 + 6.19 (A. B.)

con W = 0.96 y un error estandard de estimación de 12.8 m:i/ha. para el volumen promedio de 99 m~/ha. Esto! estrecha re lació 1

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250L----­

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Page 19: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

Antioquia y que allí casi no existen plantaciones sobre sitios muy malos. Además para todos los sitios, las curvas de creci ­miento son más inclinadas y no tienden a nivelarse tan rápido. En consecuencia, debe tenerse bastante cuidado al tratar de aplicar las tablas de Africa directamente a An tioquia. A pesar de ésto es razonable esperar que una parcela de igual altura e igual edad en Afr ica y Antioquia deban lener aproximada­

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VOLUMEN en ~ho. - ANTIOQUIA

Fig. 4. Comparación del volumen para parcelas de la misma edad y al t ura de dominantes en Antioquia y Africa oriental.

Page 20: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

No. ARBOL ES /HA.- AFRICA irnp ca q ue pa r a ma yorlcr de las aplicaciones prácticas p lantaciones con árboles con 10 cm. o más de d .a.p., puede cerse una estim ~ ión del volumen total por Ha. simpleme midiendo el área basal COn un p risma y a pli ando la ecuae anterior y ev itar a sí la laoorio.,o medición de las alturas.

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Page 21: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

No. ARBOLES IHA.- AFRICA imp!ica que para la mayoria de la s aplicaciones . ráctic s en plantaciones con árboles con 10 cm. o más de d..p ., puede ha ­cerse una estima ción del volumen total por Ha. simplemen te midiendo el área basal con un prisma y aplicando la ecuación anterior y evitar así la laborioso me dic ión de las alturas.

Otra e la d ó n útil es la que existe entre la a ltura de los. árboles dominan te s (H) tal como se definió en le Sección 2 . I Y la al tu ra promedia (Hp) d e finida como la altura de l á bol de m ea basal promedio, calculada por medio d e las ecuaciones de l Cuadro l.

La regresión fU E:

Hp = - 0.1 5 + 0 . 82 H

con R:.! = 0.92 y un error estandard d e es timación d e 1 m . co­rrespondiendo el promedio de H = 8.8 m.

4 _ . ESTIMACION DEL INDICE DE SITiO CON BASE EN

FACTORES FISIOGR AFICOS

Aunque las curvas d e índice do sitio on la base de un me ta do fáci y práctico para clasificar la ca pacida p roduc loro de la tie rra a ­ra el Cupressus, ellas requie ren lantac iones ya exis tentes. Un p roble­ma común del re forestador consiste e n estiro . la al id d del sit io an­tes de pla.r¡tar, para a <'Í evitar á re s d e baja productividad. La unive r­sa idad de este problema ha estimulado numerosas investigaciones y la e eación de varios métodos. Ta l v ez el mé todo que mayor éxito y llSO ha ten ido. especiolmente en Norte América, es la re lación d e índice de sitio con uno o más fac tores del med io ambiente que se cree limi tan el crecimie nto. Var i03 autores tales como eoile (]952), Rals ton (]964), Tarnm e t a l. (967) y Jones (]969) han re sumido investigaciones usando esta té cnica. Partiendo de mediciones d e muchas parcelas de m uestreo se d esarrolla la regresión entre el Índice de sitio con b a se sn la altura d e los árboles dominantes y varias variables indepen­dientes que posiblemente limitan e l crecimie nto. La forma general de la ecuación resultante es:

I.S. = b o + b l XI + b:.! x:.! . . . + b"xn

en la cual Xl hasta XII pueden ser fac tores tales como e l porcentaje de a rcilla y limo en el suelo, e l espesor del horizonte supe rior, lo pendiente , la posición sobre el relieve, etc. Variables no ~gnificantes que no meJo­ran la estimación d e l índice de sitio son e li minadcrs . Los coeficientes bu hasta b" se determinan por análisis d e regresión . La s ecuaciones pue­den involucrar muchas variables y por 10 tanto ser d e poca u tilldad práctica, como las de Kormanik (1966) para varias especies de Pinus en Virginia, una de Jas cuales incluye lO variables independientes ; o p ueden dar estimaciones a ceptables usando sola men te una o dos va· riables. Para desarrollar una relación útil, es esencial limitarse a un universo relativamente homogéneo, por ejemplo a l clima .

-23­

Page 22: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

4.1. Mélodo1ogía.

Se usó esencialmente e l mismo mé todo descrito arriba. En las mismas 57 parcelas establecidas para calcular el índice de sitio y el rendimiento se tomaron mediciones de variables que se cre­yeron limitan tes para el crecimiento, a saber: la distancia de la parcela del filo y del valle más cercano, la exposición la ele­vación, la concavidad o convexida d del relieve y la pendiente. Se observó que las 15 parcela s del municip io de Caldas se des­tacaron d las de l Oriente Antioqueño, por su índice de sitio más alto a ún te niendo a proxima damente los mismos factores fisiográficos, razón por la 'cual se separaron los datos en estos dos grupos. En o tro traba jo se tra tará de determinar las po· sibles causa s de e stas diferencias. Por inspección se eliminaron algunas de las variables poco prometedoras y se calcularon va ­rias ecuaciones de regresión múltipÍe .

4.2. Resultados .

La ecuación que ara e l Orien te An iioque ño dió me jor es tima ­ción de l índice d e sitio fué:

LS . = 9.28 + 0.133 C. T. - 0. 145 P

La cual explicó 72 % de la variabilidad en los índices de sitio (es decir, R2 = 0.72) y con el e rror e standard de la media igual a 1. 9 m.

La variable P e s la pendien te mínima de la parcela expresada en grados, es decir, en una parcela de e rfil marcadamente cóncavo la pendiente mínima se mide en la parte inferior de lo parcela. Se optó por usar la pendiente mínimo en vez de la promedia de la parce la, puesto que los árboles dominantes, que de terminan el {ndice de sitio, suelen crecer en lo parte más plana de la parcela. Sin embargo, el error incurrido al usar la pendiente promedia en la ecuación es mínima ya que normal­mente dentro de parcelas pequeñas la variación de pendiente no e s amplia . Es de notar que para parcelas ubicadas sobre fi ­los u hondonada s, la pe ndiente mínima se retiere a la pendien· te que sigue e l eje del filo o la hondonada.

La variable C.T., el código topográfico, se basa en una clasifica· ción ocular de la topografía según su convexidad o concavida d . Cualquie r parcs-la o área situada sobre una pendiente puede te­ner un perfil topográfico cóncavo, convexo o recto como lo ilus t a la Fier. 6A. Pero ta mbién el contorno de la misma parcela visto desde arriba como en un mapa topográfico puede se r descrito por cotas de nive l de forma cóncava, convexa o recta como lo demuestra la Fig. 6B. AsÍ, la curvatura topográfica de cua lquier área puede describirse por tres clases de curvatura en perfil y tre s clases de curva tura en contorno, dando un total de nueve posibles combinaciones , más la clase que incluye áreas planas. Puesto que algunas de estas combinaciones son raras en la

- 24­

A.

B.

c. e

d

j J

F.

Page 23: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

.1. Método1ogía.

Se usó esencialmente e l mismo mé todo descrito arriba. En las mismas 57 parcelas establecidas para calcular el índice de sitio y el rend imiento se tomaron mediciones de variables que se cre­yeron limitan tes para e l crecimiento, a saber: la distancia de la parcela del fil o y del valle más cercano, la exposición la e le­vación, la concavidad o conv,,"vl..l- · . la pendiente. Se observó rn'~ 1 se des­

de sitio fac tores

V Q­

estimc-

A.

B.

c. CURVATURA 'rOPOGRAFICA.

Código Topografico ContornoPerfil

convexo ~ concavo ~ recto "­

recto ~ concav~

10Convexo ~ convexo ~ I 20

convexo v¿¿¡ 30 40 concavo ~ 6 0 conc avo ~

Fig. 6. Descripción de un area en cuanto a su curvatura to­pográfica.

Page 24: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

naturaleza solamente se encontraron cinco en el área de estu ­dio. En la Fig. 6C, se señalan estas cinco combinaciones d e cur ­vatura topográfica con símbolos que ilustran cada una. A cada clase se le asignó u n "código topográfico" variando de 10 hasta 60, el cual es la variable C. T. que figura en la ecuación.

La determ~na~!ón del código topográfico simplemen te requiere una apreClQClOn ocular para determinar la curvatura en perfil y e~ contorno. La Fig . .~C representa el código topográfico que se mserta en la ecuaClOn para calcular e l Índice de si tio del área en cuestión, o con el cual se entra a la Fig. 7 o al Cua­

15 E O

(,Je QI G:

c(O a:

C!)1­ 10 OCf) Q. O~ ....

l&I O

S (J

5 C!)

Oz O U

O 10 20 30 40 50

PENDIENTE MINIMA en grados

Fig. 7. Estimación del indice de sitio en base a la pendiente mínima. y al códIgo topOgráfico.

-26­

CU

N

4.

dro 5, derivados de la misma ecuaClOn para facilitar los cálc~ los El código topográfico fue asignado a cada clase despuE de 'an:e glorlo:s en orde ~cendente segÚn 'dice de sitio pr

Page 25: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

naturaleza solamente se encontraron cinco en el área de estu­dio. En la Fig. 6C, se señalan estas cinco combinaciones d e cur­vatura topográfica con s ímbolos que ilustran cada una. A cada clase se le asignó un "código topográfico" variando de 10 hasta

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Cua­

dro 5, derivados de la misma ecuaClOn para facilitar los cálcu­los. El código topográfico fue asignado a cada clase después de arreglarlas en orden ascendente según su índice de sitio pro­medio. Aunque el C. T. igual a 50 (perfil recto, contorno recto) no figura, éste sí ocurrió en a lgunas parcelas d e Caldas.

CUADRO N'·' 5 - Estimación del índice de sitio ' con base en la pendien­te m;nima y en el código topográfico. Los símbolos se refieren a la curvatura topográfica en perfil (Per.1 y en contorno (Con.)

CODIGO TOPOGRAfICO

PENDUNTE HI-NUlA EN GRADOS

Per.. CODCo, ~

10

Per.. COD.

~~ 20 I

Per Coa. ,~

30

Pero COD ...

,~ 40

Per. COD.

~ do

O

10

20

30

40

50

10.6

9.2

7.7

6.2

4.8

3.3 i

Indic

11.9

10.5

9.0

7.6

6.1 I

4.7

de sitio en

13.3

11.8

10.4

8.9

7.4

6.0

m.

14.6

,1 13.1

11.7

10.2

8.8

7.3

17.2

15.8

14.3

12.9

11.4

10.0

Aunque se calcularon varias ecuaciones de regreslon para las 15 parcelas de! municipio de Caldas, ninguna de ellas dió una estimación adecuada del índice de sitio, lo que se debe en par­te a la menor variación que 'existe en estas parcelas, todas las cuales tienen un índice de sitio superior a 12 m . valor más alto que el de la mayoría de las parcel.')s del Oriente.

4.3. Discusión.

Covell y McClurkin (1967) observaron que las ecuaciones para estimar el índice de sitio con base en factore.s del medio ambien ­te, raras veces explican más que 50 Ó 60 % de la variación en el índice de sitio .

En comparación, la ecuación CJquí desarrollada, que explica 72 % de la variación, es relativa mente precisa, lo que probable­mente se debe en parte al universo limitado al cual se refiere, que comprende las tierras de colinas de los municipios de Guar­ne, Rionegro, La Ceja y el Retiro, un área de aproximadamente 800 km~. Una e xtrapolación a otras regiones es arriesgada como lo demuestra la falta de correlación para las parcelas del mu­

-27­

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Page 26: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

nicipio de Caldas. El riesgo de extrapolación posiblemente sea menor si se aplica dentro de una zona c limática parecida y con suelos semejantes, como ocurre, por ejemplo, en partes d e l mu­nicipio de El Peñol.

Obviamente la sencillez del método e s una ventaja grande. Am ­bas variables tales como la pendiente mínima y e l código topo ­gráfico se determinan fácilmente en el campo por capataces u obreros entrenados e n la técnica, o aún pueden obtenerse de fotografías aéreas.

De .la Fig. 7 se observa q ue pa:-a ciNta pendiente, la disminu­c ión de 10 unidades en el C. T. está acompañado por una re ­ducción de aproximadamente 1. 3 m. en el Índice de sitio. Esta es casi la misma reducción que ocurre a l mantener el mismo C. T. y aumentar la pendiente en 10 g rados. As! que para mu­chas aplicaciones prácticas se rá suficiente estimar la pendien ­te en clases de 5 o aún de 10 grados, simplificando aún más el trabajo.

Debe p regu ntarse cuál es la relación causal entre el crecimien­to de Cupressus, la pendien te y la forma topográfica. Obvia­mente , ninguna de las últimas dos variables influye sobre el crecimiento directa mente, sino que ambas condicionan una se­ri e de factores que sí pueden influÍr sobre los procesos fisioló­gicos del árbol. Ambas influyen sobre e l desplazamiento dei agua sobre y den tro del sue o, que a su vez determina el de­sarrollo del suelo mismo, la disponibilidad de nutrientes y un complejo de otros factores. El aislamiento d e los pos ~bles fac to ­res que más directamente limitan el crecimie to es complicado y tema de otra inves tigación.

4 .4 Aplicación Práctica del Método.

En la práctica se p resentan dos situaciones comunes donde es te método podría aplicarse para estimar e l Índice de sitio antes d e p lantar. Primero, en proyectos de re forestación la estimación pre­via del índice de sitio permite concentrar las plantaciones de C upressus en sitios b uenos dejando los sitios de inferior calidad a o tras especies menos exigentes (por ejemplo, Pin us palula). La clasificación puede hacerse por el capataz, en el mismo día de la plantación, el cual señala los límites con estacas para guiar a sus obreros. En la p ráctica, e l valor principal del método no es tá e decir que ésta área tiene un índice de sitio igual a 14 m. y aque lla área u no igual a 17 m" sino en mostrar ten­dencias, es decir, cuáles suelen ser los te rrenos me jores y peo­res para e l Cupresus. Esto se debe en parte a la p recisión siem­pre limitada de métc.dos tan sencillos y al hecho de que un pe­queño error en ei Índice de sitio conlleva un error grande en e l volumen de mad era q ue este lugar podría producir, especial ­m ente para sitios buenos (Fig. 2).

-28­-,

Es poco probable que terrenos con Índice de sitio inferiores a 1: m. vayan a ser económicamente valiosos caro r.¡¡nrAAII'" P"r 1 ta!'"- - .

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Page 27: SUMARIO - Universidad Nacional De ColombiaPor lo tanto, se emplearon los métodos clásicos para la preparación de tablas de rendimiento des critos por Bruce y Schumacher (1965).

nicipio de Caldas. El riesgo de extrapolación posiblemente sea menor si se aplica dentro de una zona climática parecida y con suelos semejantes, como ocurre, por ejemplo, en partes d el mu­nicipio de 'El Peño!'

Obviamente la sencillez de l método es una ventaja grande. Am­bas variables tales como la pendiente mínima y el código topo­gráfico se d i1jarminrm .;"~;I---.- ­ - . 1 ~apataces u

Es poco probable que terrenos con índice de sitio inferiores a 13 m. vayan a ser económicamente valiosos para Cupresus. Por lo tanto, er.. la práctica, puede afirmarse que no se debe plantar sobre terrenos con un C. T. igual a 10, 20 ó 30, los cuales nunca alcanzarán un índice de sitio de 13 m. Así, las únicas formas topográficas que aún deben considerarse son aquellas con uno curvatura cóncava al contorno, una regla muy fácil para recor­dar.

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La segunda aplicación del método puede ser durante la evalua­ción de tierras con fines de reforestación. Es fácil hacer un muestreo de la propiedad por puntos sistemáticamente ubicados y estimar el índice de sitio de cada punto, para así tabular el número de puntos con un índice de sitio por encima de cierto límite. Esto dará una idea aproximada del área de la propiedad apta para plantaciones de Cupressus. Con buenas fotografías aéreas todo este muestreo probablemente puede hacerse con su­ficiente precisión en la oficina. También pueden delimitarse cla­ses de indice de sitio sobre las fotografías.

SUMMARY

For young Cupressus Jusitanica plantations in the Central Cordille­ra of the Department of Antioquia, Colombia, site index curves were derived, based on the measurement of 57 sample plots. By means of regression analysis a yield table was deve:oped e xpressing the volume, basal area and diameter at breast height as a function of age and site indexo The p lantations were excessively dense and showed unusually large variations in growth between the dillerent sites. Within a distance of only a few meters, site index (base age 15 years) may vary between 7 and 21 m, and stanainq volume at 15 years may range hom 30 to 300 m:l/ha. For ¡he region of the Oriente Antioqueño a simple method of estimating site index before planting was developed, based on the slope and cm ocular classilication of the topographic concavity or convexity. This species see ms to be exceptionally sensitive io site and its growth is slow on convex landforms.

BIBLIOGRAFIA

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SINOPSIS SOBRE EL GENERO MASDEVALLIA EN COLOMBIA

POR Fernando Sarmiento Alvaro Femández Pérez'::

INTRODUCCION

Con motivo de la Séptima Conferencia !'Aundi~1 de ~?rquideolo y correspondiendo a un solicitud del Dr. Jmme ~lvera, Dlrec~or ~E Sección de Botánica de la Facultad de Agronomla de la Ul1lVer~l( Nacional en Medellín, hemos preparad? este lrabajo sobre el gen Masdevallia I amiliCL de las 01'0 rt""",Q

P' botá co, Pal: de Las le y Mas ron ECUG

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