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INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL
SECRETARÍA DE INVESTIGACIÓN Y POSGRADO
CENTRO DE INVESTIGACIONES ECONÓMICAS, ADMINISTRATIVAS Y
SOCIALES
“El profesor Jesús Silva Herzog y el dictamen del Grupo Especial Número 7”
T E S I S
QUE PARA OBTENER EL GRADO DE
MAESTRO EN CIENCIAS
CON ESPECIALIDAD EN METODOLOGÍA DE LA CIENCIA
PRESENTA:
DAVID ALFREDO DOMÍNGUEZ PÉREZ
DIRECTORES: Dr. Humberto Monteón González M. en C. Gabriela María Luisa Riquelme Alcantar
MÉXICO, D. F. JUNIO DE 2009
Agradecimientos La realización de este trabajo fue posible gracias: Al apoyo que me brindó el Programa Institucional de Formación de Investigadores (PIFI) en complementar mis habilidades de búsqueda y realización de investigaciones. A quien aparte de haber sido mi director de tesis, me apoyó durante toda mi estancia en la maestría, como maestro, quien además me facilitó una parte importante de las fuentes primarias que se utilizaron en el presente trabajo. Mil gracias, Dr. Humberto Monteón González. A la paciencia y guía de mi otra directora de tesis la M. en C. Gabriela María Luisa Riquelme Alcantar. A los profesores que me impulsaron e inspiraron en esta aventura: al M. en C. Guillermo Aullet Bribiesca y la M. en C. Aída Castañeda Rodríguez Cabo. A la sencillez y gran aporte de información que me otorgaron el Maestro Benito Rey Romay y la Dra. Georgina Naufal Tuena investigadores del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México. A los consejos y guías que acertadamente me sugirió mi ex director de proyecto PIFI, el Lic. José Gilberto Reséndiz Romero. Finalmente, agradezco a los doctores Mario Sánchez Silva, Luis Mauricio Rodríguez Salazar y María del Pilar Longar Blanco, por sus atinadas observaciones que ayudaron a enriquecer en mucho al presente trabajo.
Dedicatorias
El conocimiento es como el agua pura y cristalina, que si alguien lo aprisiona y acumula, esta termina por enturbiarse, pudrirse y ser inútil. Pero si bebes de ella, y la dejes fluir está se enriquecerá con las aportaciones y reflexiones de quienes la han bebido, ya que este conocimiento seguirá incrementándose, y continuará alimentando con su saber, a quienes se acerquen a beber de su cauce.
David Alfredo Domínguez Pérez Al apoyo, confianza y amor que me brinda mi esposa Lic. María Natalia Pérez Rul durante y después de esta hazaña llamada maestría. Al tiempo y paciencia que tomé de mis hijos para concluir la maestría y después en la elaboración de la tesis, gracias Alan y Gabriela Domínguez Pérez Rul. A la confianza y respaldo que me brindo mi hermano el Arq. Juan Carlos Domínguez Pérez, durante y después de esta experiencia. A quien me enseñó y me guió en mis primeras tareas escolares, quien me impulsó a no ser un conformista, a la memoria de mi madre Sonia Rosario Pérez Castillo. A quien con su ejemplo me mostró como buscar lo que uno desea, quien me apoyó y respaldó en parte de mi vida, mi padre Alfredo Domínguez Galván. A quien en los momentos más difíciles de mi vida, me respaldaron y encaminaron, a la memoria de mi abuela Lorenza Castillo Alfaro y mi tía Lourdes Castillo.
Índice Glosario Acrónimos Resumen Abstract Introducción Capítulo I El intelectual 1.1 El intelectual 1.2 El intelectual desde la percepción del maestro Jesús Silva Herzog
1.3 El intelectual mexicano
1.4 Habilidades de Jesús Silva Herzog como investigador Capítulo II Jesús Silva Herzog: apuntes biográficos
1
5
6
7
8
12
13
17
24
32
56 2.1 El origen e infancia 56 2.2 Los estudios efectuados en Estados Unidos 64 2.3 Probando suerte en la capital del país 66 2.4 En la Facultad de Altos Estudios 69 Capítulo III Jesús Silva Herzog en la Administración Pública 76 3.1 Interpretación de la Economía para Jesús Silva Herzog 3.2 En el Departamento de la Estadística Nacional y en la reorganización de los Ferrocarriles Nacionales de México
77
80 3.3 Embajador plenipotenciario ante el gobierno soviético 89 3.4 Estudios en Alemania 101 3.5 Designación como Secretario de Acción Obrera y del Exterior del PNR 103 3.6 En la Oficina de Estudios Económicos de los Ferrocarriles Nacionales de México y en la Escuela Nacional de Economía 105 3.7 En la Secretaría de Educación Pública con el Lic. Narciso Bassols 113
3.8. En la SHCP con el Lic. Narciso Bassols 115 Capítulo IV Jesús Silva Herzog y el Grupo Especial Número 7 119 4.1 La situación de las compañías petroleras y el gobierno mexicano 125 4.2 La situación laboral de los trabajadores petroleros 143 4.3 El Grupo Especial Número 7 4.4 La elaboración del Dictamen
146
156
4.5 El proceso jurídico continúa
183
4.6 La expropiación petrolera
192
4.7 El bloqueo que ejercieron las compañías expropiadas al petróleo mexicano 4.8 Las negociaciones con las empresas petroleras expropiadas 4.9 Consecuencias de la expropiación 4.10 Las consecuencias del estudio pericial y el dictamen para Jesús Silva Herzog
198
207
209
215
Conclusiones 221 Bibliografía 226 Anexos Anexo 1 Los puntos principales de la demanda del Sindicato Anexo 2 Ley Federal del Trabajo Anexo 3 El laudo del Grupo Número 7 de la Junta de Conciliación y Arbitraje Anexo 4 Las demandas de amparo de las compañías petroleras Anexo 5 Parte del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Anexo 6 Renuncia al cargo de Gerente General de la Distribuidora de Petróleos Mexicanos que con fecha 6 de agosto de 1940, la dirige al Presidente Constitucional de la República Mexicana General Lázaro Cárdenas
234
235
237
239
242
251
Glosario Anuario económico sirven para orientar de una manera más sencilla a los negociantes y
empresarios, o en general a los interesados en las actividades productoras y en las
transacciones de intercambio comercial, ya sean nacionales o extranjeros.
Conflicto económico se le define como un conflicto de intereses, que no versa sobre a
interpretación de un derecho adquirido y fundado en la ley, o en el contrato, sino que representa
una reivindicación que tiende a modificar un derecho existente o a crear un derecho nuevo, es
decir, cuya solución se apoya exclusivamente en consideraciones de carácter social y
económico, para lo cual la Junta de Conciliación y Arbitraje nombra a 3 peritos cuando menos,
para que investiguen los hechos denunciados, y al mismo tiempo analicen en forma
pormenorizada las causas que dieron origen al conflicto, realizando los estudios que determinen
pertinentes, donde la comisión pericial formula un dictamen en el que propone la forma en que a
su juicio pueda solucionarse.
Crónica es lo más cercano al relato literario, del que difiere porque mientras la literatura es
ficticia, la crónica es real, ya que narra hechos que suceden, es neutra, explícita y detallada,
presenta los hechos que se relatan en una forma más personal.
Cultura se entiende ese universo de símbolos que comprenden el arte, la ciencia y la religión.
Ensayo se entiende no sólo como una reflexión moral y un ejercicio literario, sino que también
como un escrito especializado, que se apoya en el punto de vista de quien escribe, es una
1
forma libre, ya que tiene dudas o comentarios, es una forma escrita del pensamiento vivo, que
puede ser un intento o aproximación de algún tema.
Estilo periodístico tiene dos características: brevedad y actualidad, debido al costo del papel,
este se ve obligado a aprovechar al máximo sus espacios, de ahí que el estilo haya eliminado lo
superfluo al intentar proporcionar la mayor cantidad de información con el menor número de
palabras (síntesis), el periodista informa de los hechos recientes por lo que es el primer registro
de los hechos, debe ser objetivo, es decir, atenerse a los hechos, ser fiel a la realidad pero esto
conlleva a varios problemas, como distorsión (que surge por intereses económicos), pero como
los hechos no sólo están ahí acomodados, es necesario emplear la observación directa como el
conocimiento abstracto para reflejarla, el problema de las ideas predominantes en su medio que
le inculcan sus padres, la escuela y los autores, estas ideas pueden impedir hacer una crítica
del suceso, la veracidad es la norma del periodismo, por lo que los hechos son verificados al
corroborar la información, ya que el descuido en los datos o fuentes, conduce a la pérdida de
credibilidad, debido al bajo nivel educativo y al alto precio de los bienes culturales, se confirió al
periódico una tarea didáctica, su tipo de información no requiere de conocimientos previos y su
fácil lectura y accesibilidad lo convierten en un medio para ser leído por cualquiera.
Género académico, a las formas que asume la producción intelectual proveniente de los centros
escolares, que tienen como característica demostrar un conocimiento de la bibliografía sobre el
tema, es decir, sustentarse en el pensamiento previo de otro investigador, con carácter
sistemático que está en un conjunto ordenado de ideas y conocimientos vinculados entre sí, por
un hilo conductor formando un todo armónico, una vez delimitado el objeto de estudio, el
investigador tiene que someterse a tratar todos aquellos aspectos que son indispensables para
2
el cabal conocimiento del objeto de estudio, debe tener un rigor o validez, ya que se confrontan
con otros textos.
Gusher término inglés para denotar un pozo cuyo rendimiento de mineral es excepcionalmente
grande, cuya producción es asombrosamente rica.
Intelectual es un individuo dedicado preferentemente al cultivo de las ciencias, de la filosofía, de
la historia o de las bellas artes, que además debe ser capaz de investigar y pensar con la única
intención de descubrir la verdad.
Investigar proviene del latín investigare que significa registrar, indagar descubrir; se puede
definir a la investigación como un procedimiento reflexivo, sistemático, controlado, metódico y
crítico que conduce hacia el descubrimiento de nuevos hechos, datos, leyes o verdades en
cualquier campo del conocimiento humano.
Laudo es la decisión dictada por el árbitro para resolver un conflicto que haya sido sometido a
su análisis y estudio por los contendientes en un juicio. Resolución de equidad que pronuncian
los representantes de las Juntas de conciliación y arbitraje cuando deciden sobre el fondo de un
conflicto de trabajo, la cual se ajusta en su forma a las disposiciones jurídicas aplicables, el
laudo es un método de resolución de los conflictos obrero-patronales.
Oftalmia purulenta, una inflamación específica, más o menos intensa, sumamente grave, que
ataca a la conjuntiva oculo-palpebral, que puede extenderse a las demás partes del ojo, y que
va acompañada de diversos síntomas, entre los que sobresalen, un dolor vehemente, un
abundante flujo muco-puriforme y la hinchazón de los párpados en el estado agudo, y que
3
cuando llega al crónico produce varias alteraciones en los tejidos afectados, y en particular el
desarrollo de granulaciones en la mucosa palpebral, el remedio más utilizado era el nitrato de
plata.
Perito es un experto o especialista en alguna ciencia, técnica o arte, que por medio de una
investigación de hechos, ilustre al juez o magistrado, sobre el porque una situación se
encuentra en conflicto, donde también emite su opinión, que resulta necesaria para la
resolución de una controversia; para poder ser perito se requiere que no tenga ningún interés
en el litigio, o en su resultado o desenlace, un perito puede ser recusado cuando tiene intereses
en el conflicto y se de prueba de ello, o que se compruebe por cualquiera de las partes
afectadas que el perito es incompetente, por lo que también lo será el dictamen realizado por él
sobre determinada materia.
4
Acrónimos
CEN
CESU
CNP
CTM
Comité Ejecutivo Nacional
Centro de Estudios Sobre la Universidad
Consejo Nacional del Partido
Confederación de Trabajadores de México
ENE
ESIME
FCE
IIEc
IMIE
LER
PEMEX
PC
Escuela Nacional de Economía
Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica
Fondo de Cultura Económica
Instituto de Investigaciones Económicas
Instituto Mexicano de Investigaciones Económicas
Liga de Economistas Revolucionarios
Petróleos Mexicanos
Partido Comunista
PIPSA Productora e Importadora de Papel S. A.
PNA Partido Nacional Agrarista
PNR
PRI
Partido Nacional Revolucionario
Partido Revolucionario Institucional
RME
SCHP
SLP
SRE
STPRM
Revista Mexicana de Economía
Secretaría de Hacienda y Crédito Público
San Luis Potosí
Secretaría de Relaciones Exteriores
Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana
UNAM Universidad Nacional Autónoma de México
URSS Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas
5
Resumen
Este trabajo es resultado de una investigación documental y escribe, en primer lugar, las
características familiares, intelectuales y académicas que forjaron al profesor Jesús Silva
Herzog, uno de los primeros economistas del México posrevolucionario y dueño de un profundo
sentimiento nacionalista. Por eso, se afirma que sus habilidades formativas fueron la base para
su éxito laboral en diversas instituciones como: Ferrocarriles Nacionales, las Secretaría de
Hacienda y de Educación que fueron establecidas para la reorganización de la nación. Sin
embargo en una de las comisiones donde más hizo valer sus capacidades intelectuales fue la
coordinación de peritos en la solución al conflicto petrolero en 1937 durante el gobierno del
Presidente Lázaro Cárdenas del Río.
También en este trabajo se analiza el dictamen realizado por el Grupo Especial Número 7 ante
la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje. Esta tarea fue coordinada por el profesor Jesús
Silva Herzog a petición del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana. La
finalidad era resolver las diferencias entre los trabajadores petroleros y las empresas
extranjeras establecidas en México. Ante la negativa de estas empresas de acatar la resolución
jurídica resultado del estudio pericial y el dictamen, el profesor Silva Herzog asesoró al Primer
mandatario para aclarar la postura de los representantes de las empresas petroleras. La
revisión de esta página de la historia poco conocida, así como la importancia y relevancia de la
participación del profesor Silva Herzog en la cuestión petrolera, es motivo de esta tesis.
6
Abstract
This work is the result of the document investigation an describes, in first place, the familiar
intellectual and academic characteristics that forget the professor Jesus Silva Herzog, one the
firsts economist of the posrevolutionary Mexico, owner of a deep nationalist felling. Because of
this, it is affirmed that his formative abilities were the base for his labor success in many
institutions as: Ferrocarriles Nacionales de México, the Ministries of Finances and Education
that were established for the reorganization of the nation. However on one of the commissions
where his intellectual capacities where more recognized was the coordination of experts in the
resolution of the oil conflicts in 1937, during the government of the president Lázaro Cárdenas
del Río.
Also in this work is analyzed the dictamen done by the Special Group Number 7 in front of the
Junta Federal de Conciliación y Arbitraje. This task was coordinated by the professor Jesus
Silva Herzog on request of the Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana.
The finality was to resolve the differences between the oil workers and the foreigners companies
settled in Mexico. Due to the negative of the companies to obey this judicial resolution, the
professor advised the president to confront the position of the representatives of the oil
companies. The revision of this page of the history not known by many, as well as the
importance and relevance of the participation of professor Silva Herzog in the oil matters, is the
reason of this thesis.
7
Introducción
La inquietud de realizar este trabajo de tipo documental fue redescubrir a un economista
mexicano de fuerte espíritu nacionalista, quien en cierta manera ayudó no sólo a la
conformación de los estudios formales en Economía en México, sino que también creó varias
revistas para la divulgación de los estudios económicos, coadyuvó en la formación de
investigadores en el área económica, así como en la generación de fuentes laborales para
quienes aún estudiaban o habían concluido su licenciatura en Economía. Su obra no ha sido del
todo estudiada, especialmente en lo que se refiere a su participación en la elaboración del
dictamen para resolver el conflicto petrolero de 1937, durante el gobierno el Presidente Lázaro
Cárdenas del Río. Este dictamen sirvió de base en la expropiación petrolera un año después.
La realización de esta tesis se llevó tres años de búsqueda, análisis y estudio de diversas
fuentes tanto primarias como secundarias. En primer lugar se estudió la semblanza del profesor
Silva Herzog con la finalidad de entender sus múltiples preocupaciones e intereses, ya que su
vida fue muy productiva en varios aspectos intelectuales. Esta investigación se inició con una
búsqueda y recopilación bibliográfica acerca de su vida y obra, utilizando para este fin fuentes
secundarias y una gran cantidad de fuentes primarias provenientes de diversos archivos
históricos como los: de la Secretaría de Educación Pública (SEP), de la Secretaría de
Relaciones Exteriores (SRE), de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica
(ESIME) y del Centro de Estudios Sobre la Universidad (CESU) de la UNAM. También se tuvo
acceso a la Colección del Dr. Humberto Monteón González, Maestro Decano del Centro de
Investigaciones Económicas, Administrativas y Sociales (CIECAS) del IPN.
8
Asimismo, se tuvo la oportunidad de entrevistar de manera informal, a algunas personas que lo
conocieron y trataron en persona o que realizaron algún trabajo de investigación acerca de la
vida y obra de Silva Herzog. Así, se entrevistó al maestro Benito Rey Romay adscrito al Instituto
de Investigaciones Económicas en la UNAM, quien conoció personalmente al Maestro Silva
Herzog y convivió con él; al maestro Manuel López de la Parra de la Facultad de Economía,
quien fue alumno suyo, además de realizar un trabajo de investigación referente al periodo en
que Silva Herzog fue director de la Escuela Nacional de Economía y, finalmente, a la Dra.
Georgina Naufal Tuena, también del Instituto de Investigaciones Económicas, quien ha
realizado varios trabajos acerca de Silva Herzog durante los primeros años de su formación.
Esto permitió tener una aproximación a la vida y obra del maestro Jesús Silva Herzog.
Simultáneamente se realizó una búsqueda en diversas fuentes secundarias sobre lo que otros
autores opinaron sobre la vida y obra de Silva Herzog. Como parte de la investigación se logró
acceder a la colección personal del profesor Jesús Silva Herzog que se encuentra en custodia
en la Facultad de Economía de la UNAM. En esta biblioteca existe una extensa variedad de
temas, que reflejan la amplia gama de intereses del maestro.
Para realizar este estudio fue importante conocer cómo Jesús Silva Herzog abordaba y
trabajaba los problemas de orden económico, cuando en México aún no se formalizaban los
estudios en Economía en la Universidad Nacional de México. En la Universidad, la
incorporación de una licenciatura en Economía fue muy debatida y cuestionada a finales de los
años veinte, esta carrera comenzó a impartirse en 1929, cuando el maestro Jesús Silva Herzog
ya dictaba conferencias sobre evolución económica desde 1927.
9
No fue un teórico de la economía, ni un estudioso de problemas abstractos; sus obras van
desde “sus conferencias, apuntes sobre la evolución económica” fechados en 1927 hasta “El
Dictamen” de 1937 (periodo que abarca la tesis), pasando por diversos artículos, ensayos,
discursos y libros, Jesús Silva Herzog se distinguió por su espíritu crítico, sus ideas
progresistas, y por la búsqueda constante de su concepto de razón y verdad. Pese al tiempo
transcurrido, algunas ideas planteadas por el profesor Silva Herzog conservan aún su validez.
Jesús Silva Herzog incursionó en muchos campos del saber, era algo muy generalizado entre
los intelectuales de la época. De la obra del maestro destacan sus estudios de historia,
literatura, sociología, educación, política y economía. Investigador riguroso, ensayista,
conferencista que se formó en la lectura de los clásicos de la historia y literatura, también
abrevó en las enseñanzas de los padres de la Iglesia católica y en las obras de las distintas
corrientes socialistas en boga en esos años. Fue un hombre comprometido con los ideales y
principios revolucionarios. Todos estos atributos explicarían una de sus preocupaciones
intelectuales y morales más significativos: “El hombre, su bienestar y felicidad” y, el porqué de
su interés por conocer y resolver algunos de los grandes problemas nacionales, como eran: el
agrario, el de la identidad y soberanía nacional, el del progreso de México entendido como el
crecimiento económico con justicia social.
En el presente trabajo, nos limitamos a sus estudios de tipo económico, excluyendo sus obras
literarias como poesía y ensayos literarios, obras históricas, sobre todo las relacionados con la
Revolución Mexicana, trabajos filosóficos y sociológicos. Aún así, sus obras económicas fueron
muy considerables; por lo que se optó por hacer un análisis de su participación en el Dictamen
10
de la Comisión del Grupo Especial No. 7, realizada en 1937, donde él fungió como perito
coordinador.
El objetivo de este trabajo es analizar la participación del profesor Jesús Silva Herzog en el
Grupo Especial Número Siete, bajo la consideración de que sus habilidades académicas e
intelectuales adquiridas en su formación profesional y laboral fueron elementos de peso para la
realización de esta encomienda.
En el primer capítulo se establece la definición de intelectual por diversos autores; incluido la
propia concepción que tenía Silva Herzog. En el segundo capítulo se abordan orígenes,
estudios y conformación ideológica del maestro. En el tercer capítulo se describe su etapa
laboral, ya que en este trabajo se afirma que su experiencia en diversos organismos fue
fundamental para su formación como investigador. Finalmente, el cuarto capítulo analiza el
problema petrolero y por qué termina en una mediación gubernamental, en un conflicto de tipo
económico que es llevado por la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje por medio del Grupo
Especial Número Siete, donde Jesús Silva Herzog forma parte como perito; elabora el estudio y
dictamen pericial así como las consecuencias que tuvieron en el transcurso de la resolución del
conflicto petrolero.
En este trabajo se incluyen cinco anexos que precisan el conflicto y desenlace de la
problemática petrolera; asimismo, el último anexo es la renuncia del maestro Silva Herzog a la
gerencia de la distribuidora.
11
Capítulo I. El intelectual
Para entender bien el pensamiento de un escritor, mencionaba el maestro Silva Herzog, es
necesario conocer tanto el momento histórico así como el lugar donde le tocó vivir, ya que sin
este contexto no es posible comprender sus ideas y aportaciones, pero también es importante
analizar la influencia que ejercieron el entorno social y político en su obra intelectual, ya que una
época determina y condiciona en sus aspectos fundamentales las ideas de los grandes
pensadores e inventores, el pensamiento influye en la realidad, como la realidad influye en el
pensamiento (Silva,1947).
El contexto geográfico – histórico, así como socio-político, tienen una gran relevancia para la
formación, evolución del pensamiento y modo de percibir la realidad de los intelectuales, ya que
sus reflexiones tienen mucho que ver con su propia experiencia de vida, porque estudian la vida
y obra de cualquier intelectual en un entorno descontextualizado puede llevar a interpretaciones
erróneas, es por ello, que se debe conocer quien fue la persona, cuál fue su formación e
influencias, comenzando por la familiar, ya que estas primeras enseñanzas son de gran
importancia en su vida, pues lo vinculan con un grupo social determinado, el cual también le
inculca los valores que la familia y la sociedad considera importantes y que debe observar,
defender y preservar en su conducta, todo esto dejará su impronta en la personalidad del
intelectual.
Asimismo, para lograr un mayor acercamiento a la persona en estudio, siempre será de gran
utilidad conocer si fue una persona sana o padeció alguna enfermedad, que le obligara a
desarrollar otras habilidades al tener ciertas limitaciones.
12
En este orden de ideas, siempre ayudará saber quienes influyeron positiva o negativamente en
él, quiénes contribuyeron a desarrollar y corregir su pensamiento, esto es, con quiénes convivió,
por ejemplo, amigos, compañeros de escuela o de trabajo, maestros, parientes, entre otros.
1.1 El intelectual
Con el tiempo, la conceptualización del término intelectual ha sido motivo de debates y estudios
serios en todo el mundo. Bodin (1965) intentó precisar el término, para lo cual estudió multitud
de fuentes sobre el significado del concepto intelectual; así, intellectual en Inglaterra se utiliza
como sustantivo según el Oxford English Dictionary desde mediados del siglo XVIII. En cambio
en Francia, el neologismo intellectuel, aparece en los últimos años del siglo XIX. En 1935, el
Dictionaire d´ Académie francaise definía al intelectual como una persona en quien predomina
el empleo de la inteligencia. En este sentido se utiliza a menudo por oposición a lo manual.
Esta concepción es muy limitada, ya que se basa en los antiguos griegos, que menospreciaban
a los que usaban las manos, cuando ellos comenzaban a reflexionar sobre el porque de las
cosas; asimismo, el Diccionario Filosófico de la Unión Soviética define intelligentsia como quien
constituye una capa social intermedia compuesta por los hombres que se entregan al trabajo
intelectual, esa capa comprende a los ingenieros, los técnicos, los abogados, los docentes, los
artistas y trabajadores científicos. Mientras que el Diccionario de la Academia Española define
al intelectual como la persona dedicada preferentemente al cultivo de las ciencias y las artes.
Después de las definiciones tan generalizadas y pocas precisas que encontró Bodin, este autor
se apoya en reflexiones de varios autores, como Geiger (Cit. por Bodin, 1965) para quien son
13
intelectuales todos aquellos que crean, distribuyen y ponen en acción la cultura1; Lipset (Cit. por
Bodin, 1965) precisa una diferenciación importante en la concepción del intelectual, ya que
distingue dos niveles en el interior de este grupo: el primero está conformado por creadores de
cultura como sabios, artistas, filósofos, autores y algunos periodistas; mientras que en el
segundo incluye a todos aquellos que distribuyen lo que los otros crean, es decir, la mayoría de
los docentes y periodistas. En este orden de ideas, Gallimard en su artículo “De l’ engagement”
(Cit. por Bodin, 1965) señala la ambigüedad del término intelectual; para este autor, no era más
que una palabra de doble o múltiples sentidos mal entendidos.
Después de revisar las definiciones anteriores podríamos decir que la noción de intelectual
supone, por parte del individuo a quien se aplica, una conciencia de su situación y de su papel.
Uno de los primeros sociólogos en estudiar la categoría de intelectual fue Karl Mannheim. Este
investigador consideraba al intelectual como un ser desclasado, es decir, un ente que se
encuentra socialmente desligado de las clases; sin embargo, sí tiene pertenencia hacia alguna
de forma ideológica.
Según Eyssautier (2006) el desarrollo intelectual no es exclusivo de algunos seres con
capacidades cognoscitivas privilegiadas, lo intelectual se refiere a la aplicación metódica de la
inteligencia, debido a que todos los seres humanos tenemos la misma capacidad mental, sin
embargo no disponen en un momento dado del mismo nivel de conocimientos y experiencias
adquiridas, ni la misma intensidad de motivación e interés vocacional para el trabajo intelectual.
Para Bodin (1965), el origen del moderno intelectual se encuentra en las universidades, ya que
estas instituciones educativas han brindado a la mente humana un modo firmemente
1 Por cultura entendía ese universo de símbolos que comprenden el arte, la ciencia y la religión.
14
organizado de formación, expresión y propagación de las ideas. Careaga (1974) comparte de
alguna manera estas afirmaciones. Coincide en que la actividad intelectual moderna está
sistematizada y organizada debido a la influencia de la institucionalización del conocimiento en
las universidades. Según Careaga, el intelectual es un hombre público, pues no sería nadie sin
la atención de las demás personas. Asimismo, es alguien comprometido, ya que la figura del
intelectual no comprometido es una ilusión, ya que no existe uno que no tenga posiciones
implícitas o explícitas en relación a la sociedad en que vive.
Bolivar (2002) señala que el intelectual es un hombre que nunca parece estar satisfecho con las
cosas como son, se considera a sí mismo como guardián especial de ideas abstractas como la
razón, la justicia y la verdad, guardián celoso de normas morales que son ignoradas
frecuentemente en los mercados y recintos gubernamentales. La crítica social es parte de la
definición de un intelectual, quien en gran medida se caracteriza por preocuparse en obtener un
orden social más humanitario y más racional, ésta es una meta de la mayoría de los
intelectuales socialmente conscientes, es decir, el compromiso fundamental del intelectual es
con la verdad pública, su herramienta es la crítica, que como tal no es buena o mala, sino
correcta o incorrectamente justificada o fundamentada, ya que su responsabilidad consiste en
decir la verdad y denunciar la mentira.
El intelectual debe partir del principio universal de que todos los seres humanos tienen derecho
a la libertad y a la justicia, que la violación deliberada o inadvertida de tales pautas, deben ser
denunciadas y combatidas con valentía. Por lo que se puede decir, que el intelectual es una
persona de buen entendimiento e ilustración, que utiliza la facultad de conocer y razonar, busca
a diario el conocimiento por la vía racional, creando un hábito que puede resultar la diferencia
específica que venga a caracterizar al intelectual; éste no puede dejar de tener una propensión
15
crítica, el simple planteo racional de un problema lleva a ponderar estimativamente las
soluciones posibles, y cómo el análisis crítico requiere de cierto tiempo, la actitud del intelectual
tiene que ser de vacilación o de expectación mientras no la concluye.
Por su parte Goldfarb (2000), indica que la posición del intelectual es hasta cierto punto un
asunto de voluntad individual; con frecuencia se encuentra inserto en un contexto social; no se
pone simplemente en contra de un orden social sin una causa justificada. Así, este autor,
propone el estudio del contexto histórico-social donde subsiste el intelectual, con la finalidad de
explicar de mejor manera, el por qué de su pertenencia o repulsión hacia ciertos sectores
sociales; en las sociedades premodernas, la relación entre la vida religiosa, política, económica
e intelectual era íntima, no había una distinción tan marcada entre ellas, (incluso en la
actualidad, tampoco es muy clara), solamente la religiosa se podía en un momento dado
distinguir por la rigidez en sus dogmas; es decir, el conocimiento estaba tan limitado y en cierta
manera controlado por grupos que era difícil separarlo, por las variadas tareas que debía
desempeñar el intelectual y el dominio de temas, ya que pudo ser un clérigo con conocimientos
políticos-económicos.
Actualmente, la situación del intelectual en la sociedad tiene varios rasgos comunes, entre los
que destacan por ejemplo: los originarios de la burguesía; aquéllos que provienen de las clases
medias y los “raros” de origen popular donde su condición de intelectual lo proletariza en
diferentes formas y modos. Gramsci (1975) indica que cada grupo social tiene sus propias
categorías especializadas de intelectuales, que se conforman debido a la división del trabajo
que se origina por la producción económica, donde se conjuga con lo social y político; Kanapa
(Cit. por Bodin, 1965) sostiene en su libro La situation de l’ intellectuel, que la mayor parte de los
intelectuales franceses son asalariados y algunos de ellos, no viven mejor que los proletarios.
16
En cuanto a la misión del intelectual, Bodin (1965) manifestaba que debe ser la búsqueda de la
verdad y de juzgarla; en contraposición, Careaga (1974) señalaba que el intelectual debe
buscar no solamente la verdad sino también la razón y el conocimiento. Según éste último, las
cosas y los hechos sociales enajenados e irracionales deben transformarse con la ayuda del
intelectual, con la finalidad de que la sociedad sea mucho más racional y humana, pero requiere
del poder hacer realidad estas utopías sociales. También sostiene que en el papel del
intelectual dentro de la tradición sociológica liberal, el mundo se modifica por una evolución y, el
intelectual tiene que explicarlo y no transformarlo; en cambio en la tradición de la sociología
marxista el intelectual no sólo tiene que explicarlo, sino transformarlo.
El intelectual es una categorización que se usa para describir las características de algunas
personas, la cual sirve como referente para entender cómo es que surgen, o que características
tienen en común quienes han sobresalido por su capacidad cognitiva, los diversos estudios de
varias áreas sociales han denotado que, por ejemplo, en las condiciones que originan o
desarrollan al intelectual son tan variadas y complejas, que aún no se ha encontrado la
diferencia con la persona promedio, quien también pudo haber tenido similitud en experiencia
de vida con un intelectual, pero a diferencia de éste no trascendió; pero si han dado una serie
de características que predominan sobre los intelectuales que se pueden tomar como que en la
mayoría de ellos, las presentan o están en ellos.
1.2 El intelectual desde la percepción del maestro Jesús Silva Herzog
Cuando se le pidió al maestro Jesús Silva Herzog (1953) que definiera el término intelectual, su
respuesta fue contundente. Para él, un intelectual era un individuo dedicado preferentemente al
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cultivo de las ciencias, de la filosofía, de la historia o de las bellas artes; desde su concepción a
un individuo con estas características se le debía denominar “intelectual auténtico”. Silva
sostenía que un intelectual debería ser capaz de investigar y pensar con la única intención o
“anhelo apasionado” de descubrir la verdad. Además, el intelectual debía crear su obra
obedeciendo tan sólo a su propia inspiración; quienes se apartaran de estas normas –
sentenciaba Silva- dejarían de ser verdaderos intelectuales para descender a la categoría de
artesano de la ciencia. Daniel Cosío Villegas (Cit. por González, 1979), reconocido intelectual y
contemporáneo del maestro Silva Herzog, sostenía que el intelectual debía proceder de la clase
media; sin ser condición sine qua non que fuera profesionista. A diferencia, Hofstadter (Cit. por
González, 1979) propuso una comparación más radical: mientras que el intelectual vive por las
ideas, el profesionista vive de las ideas.
Según la concepción del profesor Silva Herzog, el primer deber del intelectual mexicano
contemporáneo consistía en una mezcla de honestidad y sinceridad; un individuo que no debía
dejarse seducir por la política realista.2 En sus conferencias, Silva Herzog pregonaba que el
intelectual debía ser guía y arquitecto de pueblos; alguien que debe hacer posible el avance de
la humanidad en el escenario histórico. El deber del intelectual mexicano contemporáneo
debería tener la capacidad de señalar los problemas nacionales y proponer su solución;
además, señalar con sinceridad y buena fe los errores cometidos y finalmente, hacer críticas
constructivas y ponderadas. Para el maestro Silva, el papel del intelectual en la cuestión
humanista de la ciencia y el arte era primordial:
El arte y la ciencia, si son ciencia y arte de verdad, deben estar al servicio de la sociedad,
por lo tanto, el intelectual debe considerar sus tareas como servicio indeclinable que ha de
prestar al hombre. Para mí todo auténtico científico debe ser humanista y todo auténtico
2 Entendida como política realista la de los banqueros, industriales, estadistas y comerciantes extranjeros.
18
humanista debe ser científico. Siempre he pensado que el arte por el arte y la ciencia por
la ciencia son fórmulas caducas del siglo XIX. (Silva,1973:58).
Para Silva (1944), la pérdida de valores motivada por el periodo entre guerras fue la crisis
humana más profunda de la historia; su crudeza abarcó a todos los hombres sin distinción de
oficio, profesión o clase social. En esos años, la actuación del intelectual, Silva la clasificó de la
siguiente manera: aquéllos que se han puesto al servicio de los regímenes autoritarios, algunas
veces traicionando sus ideas y otras siendo consecuentes con ellas, pero adaptándolas o
modificándolas en consonancia con las exigencias políticas; los que en los países totalitarios o
democráticos se han puesto al servicio de la propaganda con abandono de sus propias
convicciones; los que ante el espectáculo de una sociedad descoyuntada y sin rumbo, se han
tornado cínicos o escépticos, o ambas cosas, dedicando su esfuerzo a la posesión y goce de
bienes materiales; los que desilusionados se refugian en la religión; y los pocos que han
permanecido fieles a sus principios y que, a pesar de todas las vicisitudes y todos los fracasos
no han perdido la fe en la construcción de una nueva morada para el hombre que en palabras
del maestro Silva, debía ser noble, decorosa y limpia:
“Y el hombre no ha sido capaz todavía de crear valores nuevos que sirvan de norma a la
conducta humana” (Comercio Exterior, 1985:320).
Silva Herzog expone que si la intención del intelectual no es buscar la verdad, no tiene ningún
sentido, pero en esta búsqueda el intelectual debe ser independiente en su pensamiento, cuyo
único compromiso debe ser con la verdad, no con un grupo social o para obtener beneficios o
favores de tipo económico o político; debe de tener tacto sobretodo para exponer los problemas
que él vislumbra, sobretodo las de tipo social, ya que puede ser mal interpretado e incluso
deformadas sus conclusiones con la única finalidad de desprestigiarlo, y con ello pierda
credibilidad, aunque lo que denuncie exista.
19
Por ello Silva Herzog, hace mucho hincapié en que el intelectual sea social o de ciencia, debe
cuestionarse sobre la realidad que observa o la que otros en su momento plasmaron, ya que
gracias a ellos, es que avanzan la ciencias, esto lo comentó durante el discurso del cierre del
Congreso Científico Mexicano de 1951 sostenía:
El hombre de ciencia es un eterno inconforme, un buscador incansable de nuevas metas
desde donde pueda vislumbrar siquiera el tenue reflejo de la verdad, no hay hombre de
ciencia sin generosas rebeldías, sin alas en el pensamiento y sin dilatados horizontes
para ensayar el vuelo. (Silva,1973:22).
Es por ello que el maestro Silva Herzog estaba preocupado en definir y darle una postura,
sobretodo a la tarea que para él debía tener el intelectual, pero al mismo tiempo él se
autodefinía en esa inquietud, con lo cual no limitaba al intelectual a seguir ciertos cánones, a
estar en la seguridad de lo aprobado y acreditado, sino a la audacia del explorador.
Silva Herzog también consideraba que había dos tipos de crítica frente a los problemas de
México y la Revolución; la primera, la positiva que consistía en construir, es decir, bien
intencionada, así como la segunda, la negativa, que por el contrario se proponía hacer
retroceder los logros obtenidos por la Revolución. (Naufal,1996).
Pero también Silva Herzog tenía la capacidad de la auto crítica, cuando de alguna manera él
mismo hace un balance, ya que quiso hacer muchas cosas en el transcurso de su vida, pero
como la mayoría de la gente, no lo pudo hacer, por faltarle en algunas ocasiones creatividad e
intuición para hacerlo, pero no renunció, ya que tenía esas ansias de superación, que lo
impulsaba a continuar, aunque algunas veces se quedaba a la mitad del camino, es decir, los
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resultados no estaban a la altura del esfuerzo invertido; así, cuando él revisaba sus libros3 años
después de haberlos escrito, a algunos los calificaba de francamente “malos”; igualmente
criticaba sus conferencias y clases donde consideraba que a veces estaba al nivel de un
profesor de secundaria (es decir, dejaron mucho que desear), algunas veces fue con fervor y
plena entrega, otras fueron buenas y algunas excelentes
Pero, en general, dije, las cosas lo mejor que pude, pero no pude decirlas como hubiera
querido hacerlo. Algo me faltó, y no hay más remedio que resignarme. (Comercio
Exterior,1985:320).
En opinión de Silva Herzog existían en México cuatro tipos de intelectuales: I) los retrógrados
coincidían con las ideas del pasado; II) los inconformes pensaban que lo único que puede
hacerse en México es atacar; III) los utópicos se refugiaban en sistemas exóticos, inadaptables
al medio mexicano y, IV) los revolucionarios en cambio hacían críticas afirmativas que se
enfrentaban valientemente a la realidad, se esforzaban por hacer obra de orientación y
depuración, a fin de encauzar la Revolución Mexicana en el marco nacional.
Aunque Silva Herzog no identifica a los representantes de cada grupo, por las lecturas
realizadas en sus textos, se desprende que los primeros son los defensores del antiguo
régimen; los segundos son los críticos que negaban todo; los terceros son los comunistas que
buscan la revolución proletaria aunque no se adaptara a la realidad del país y, finalmente, en el
cuarto apartado se concentran los intelectuales revolucionarios que como él, eran realistas,
constructivos, prácticos y proposititos (Naufal,1996). De igual manera Bolívar (2002) menciona
que los intelectuales no son una clase homogénea, ya que según las ideas que sostienen y por
las que pugnan. Este autor propone su propia clasificación: progresistas o conservadores,
3 “He escrito, decía, una treintena de libros y folletos y numerosos artículos. Algunos libros cuando los leo, cuando los releo, sencillamente siento que enrojezco: son malísimos. Bueno hay algunos regulares y hay otros buenos: creo que tengo tres o cuatro libros que van a vivir mucho tiempo”. (Comercio Exterior,1985:320).
21
radicales o reaccionarios; por la ideología que defienden son libertarios o autoritarios, liberales o
socialistas; según la posición que guardan frente a las ideas que sostienen pueden ser
escépticos o dogmáticos, laicos o clericales.
Samuel Ramos (1999) sostiene que México se ha alimentado durante gran parte de su
existencia de cultura europea, y ha sentido tal interés y aprecio por su valor, que cuando se
independizó en el siglo XIX, la minoría mexicana ilustrada lo resintió; al intentar hacerse culta a
la europea fracaso, debido a la naciente reacción nacionalista la cual parecía justificada en su
resentimiento contra la tendencia cultural europeizante, a la que consideró responsable de la
desestimación de México, incluso por los propios mexicanos, esta hostilidad contra la cultura
europea encuentra aún nuevas razones en su favor, al considerar los múltiples fracasos
ocasionados por el abuso de la imitación extranjera; pero también los falsos conceptos de la
ciencia, que para definir a ésta sostiene que se trata:
De un concepto sumamente vulgar, efecto de la ignorancia o de la superficialidad, y en el cual
se advierte el eco distante del positivismo, consiste en creer que la ciencia se obtiene con
sólo abrir los cinco sentidos a la realidad. La función intelectual parece una cosa secundaria
en el proceso científico (Ramos,1999:93).
Este falso concepto lo atribuye al momento en que él vivió, ya que el positivismo era la corriente
ideológica dominante durante el porfiriato.
Otras veces, Samuel Ramos (1999) señala que se imita ciegamente lo extranjero, ahogando de
este modo el desenvolvimiento de las potencialidades nativas, en ocasiones al contrario, se
rechazan valores extranjeros que hacen falta en México, alegando una sana intención
nacionalista, aún cuando ésta sólo recubra la ineptitud. El maestro Silva Herzog no ha sido
ajeno a la larga lucha nacionalista, librada en diferentes frentes, que se ha dado en el itinerario
22
de nuestro país, ocupado a la vez en las tareas de la historia de la independencia nacional
como también en la creatividad teórica:
Es oportuno insistir en que no debe aplicarse servilmente la teoría de los grandes centros del
capitalismo, porque si así se hiciera, el fracaso sería inevitable. Toda adaptación teórica debe
hacerse después de un cuidadoso trabajo analítico, con los pies hundidos en la propia tierra y
con clara visión de las necesidades primarias y de las legítimas aspiraciones de su pueblo
consideraba "que el keynesianismo es una planta que no puede ser transplantada en suelo
extraño porque entonces muere, y resulta venenosa antes de morir”, él enfatizaba que la “teoría
de Keynes” lo mismo que las teorías elaboradas en las grandes metrópolis del capitalismo en
diferentes momentos históricos, han sido formuladas al contacto y bajo la presión de una
realidad determinada en el tiempo y espacio, Esa realidad o esas realidades han sido y son
diferentes, en gran medida diferentes a la realidad o las realidades de los países de la periferia
(subdesarrollados o en vías de desarrollo). En consecuencia no deben los economistas de
estos países tratar de aplicarlas en los territorios en que ejercen función rectora sin análisis
amplio y profundo, pues de lo contrario se expondrá a caer en errores de consecuencias
lamentables, La adaptación puede ser buena, pero la imitación indiscriminada siempre será
mala, indeseable y hasta perjudicial. (Silva,1984a:11,12,18).
Si los hombres no acostumbrados a la crítica (como el mexicano promedio) creen que todo lo
que no es elogio va contra de ellos, cuando muchas veces elogiarlos es la manera más segura
de ir contra de ellos, de causarles daño (Ramos,1999). Para el investigador como parte de sus
habilidades, debe conocer el manejo de la crítica, Para Silva Herzog el uso de la crítica era:
Señalar los errores con sinceridad y buena fe, hacer crítica constructiva y ponderada, son
deberes del intelectual mexicano contemporáneo. Este debe tener como móvil sustantivo de
sus actos servir a los intereses del pueblo, ponerse al servicio de la sociedad, trabajar para
que la mayoría de los pobladores del territorio gocen de los mayores bienes y sufran el menor
número de males aquí en la tierra. (Silva,1984a:9).
23
1.3 El intelectual mexicano
Crockcroft (1978) entiende al intelectual como una persona educada, el hacer referencia al
intelectual mexicano, pero se puede generalizar al concepto general del intelectual, se pueden
considerar como personas que poseen y continuamente hacen uso de una educación avanzada
y niveles relativamente altos de lógica y juicio crítico, que pueden sostener una conversación
técnica o ideológica, todos ellos adquiridos por una instrucción universitaria, por un
entrenamiento profesional o por auto educación; históricamente entre los intelectuales
mexicanos se han encontrado profesionales, personal universitario, sacerdotes, altos
funcionarios, escritores, filósofos, periodistas y artistas, los intelectuales son únicos, en toda la
amplitud de su extracción social, provienen de distintos clases desde la baja hasta la alta, su
educación más que su posición económico o social, pero los unifica dentro de un grupo.
Una de las cuestiones que desprestigiaron al intelectual mexicano, o que hicieron que se
tomara con cautela fue a causa de aquellos consejeros que tuvo Porfirio Díaz en los últimos 15
años de su gobierno, que muchos pensaron que fueron los causantes de las malas decisiones
políticas, y que sin ellos probablemente Díaz hubiese sido mejor gobernante, este grupo se
autodenomino como “científicos”, por lo que tuvieron la pretensión de ser tan inteligentes e
ilustrados que según ellos podían conducir científicamente al país, es decir, gobernarlo con la
razón pura, lo que les origino fue el repudio popular, por ello los caudillos revolucionarios
desconfiaron de los intelectuales.
Henríquez (2000) indicaba el nuevo despertar intelectual de México, que comenzó a adoptar
una actitud crítica de discusión, de prudente discernimiento, y no a la aceptación respetuosa
hacia la producción intelectual de los países extranjeros, ya que con Díaz el positivismo de
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Augusto Comte reemplazaba al escolaticismo en las escuelas oficiales, el liberalismo político y
económico del siglo XVIII regían en el México del porfiriato; se debió en parte a ese sentir de
opresión intelectual, política y económica, que ya se daban cuenta, donde la filosofía oficial era
demasiado sistemática, por lo que existe una rebeldía y búsqueda hacia aquellos filósofos que
el positivismo consideraba inútiles como Kant, Schopenhauer, Nietzche, Bergson, Boutroux,
Croce, etc., se dio una actitud crítica de observar por ellos mismos; la universidad al triunfo
maderista, no gozaba del favor político y carecía de medios para organizar los estudios de
ciencias puras y humanidades.
Luego del derrocamiento de Madero, muchos sectores de la comunidad universitaria (tanto
profesores, autoridades y estudiantes) eran anti maderistas, por lo que apoyaron los
movimientos de Reyes, Díaz y Huerta, a causa de esta oposición al gobierno maderista fue
considerable la participación de académicos e intelectuales en todos los gabinetes de Huerta
(Rodolfo Reyes, profesor universitario de jurisprudencia, Aureliano Urrutia, Francisco Léon de la
Barra, Carlos Pereyra, Federico Gamboa, Roberto Esteva Ruiz, José Ma. Lozano, Enrique
González Martínez, Agustín Garza Galindo, Jesús T. Acevedo, Carlos Díaz Dufoo y Salvador
Díaz Mirón, en la instrucción pública Jorge Vera Estañol y Nemesio García Naranjo) también
varios catedráticos que habían abandonado el país regresaron a la caída de Madero, como el
positivista Manuel Flores (colaborador de Justo Sierra).
Huerta prometió ser generoso y respetuoso con la universidad, por lo que fue una espléndida
etapa de ésta, tanto en lo institucional como en lo académico, pero propusieron una reforma
educativa, ya que no se retomó el modelo porfirista del positivismo; a la caída de Huerta se
modificó radicalmente la situación de la Universidad Nacional que carecía de una línea definida
de transformación y evolución durante un par de años; a la llegada de Carranza en 1914,
25
promete a la universidad su independencia, tenía como colaboradores a Félix Palavicini,
Valentín Gama y José Vasconcelos, sin embargo muchos de los profesores más aptos habían
colaborado con Huerta, por lo que tuvieron que exiliarse nuevamente en algunos casos o
esconderse, pero cuando hubo la escisión algunos se hicieron convencionistas como Gama y
Vasconcelos, Eulalio Gutiérrez desplazó al primer gobierno carrancista y confió su política
educativa a Vasconcelos quien era conocido en los medios intelectuales capitalinos, pero los
cambios de gobierno eran constantes (Roque González que sustituyó a Gutiérrez después fue
desplazado por Francisco Lagos Cházaro), al tomar el poder Carranza creó el Departamento
Universitario y de Bellas Artes al que dependería la Universidad, separó la Escuela Nacional
Preparatoria de la Universidad.
Los intelectuales mexicanos radicados en la ciudad dieron su apoyo a Carranza, debido a que
no había otras alternativas que se le opusiera, y las que había, los villistas y zapatistas eran
opciones inaceptables, Carranza crea la Escuela de ciencias Químicas con lo que la
universidad debía participar en la vida económica y tecnológica propia de los tiempos del país,
Vasconcelos terminó de establecer que la universidad sería una pieza clave para la
construcción del nuevo México y generadora de intelectuales.
En 1906 Alfonso Cravioto y Luis Castillo fundaron una revista juvenil “Savia moderna” la cual
tuvo muy poca duración, pero sirvió como espacio para la expresión de varios ateneístas; en
1913 el Dr. Ezequiel Chávez buscó hombres avanzados dispuestos a trabajar gratuitamente en
la organización de la Escuela de Altos Estudios,4 donde el grupo ateneísta5 participó, se creó la
4 La Escuela de Altos Estudios no reveló al público desde el principio los fines que iba a llenar, no presentó planes de enseñanza, no organizó carreras, sólo había 3 profesores extranjeros, Baldwin y Boas ilustres en la ciencia contemporáneo y Reicha en botánica americana, el primer director fue Porfirio Parra representante del positivismo quien no pudo consolidar el proyecto. (Henríquez,2000). Debía servir asimismo de centro a los diversos institutos de investigación científica ya existentes, pero nunca acudieron, fue duramente atacada por los políticos por no entender su razón de existir ni su finalidad. Chávez crea la facultad de Humanidades enteramente gratuita para el
26
subsección de estudios literarios y la de ciencias matemáticas y físicas ambas pretendían
además de ofrecer campo de estudio desinteresado, aspiraban a formar profesores
especialistas de cuyos alumnos salieron catedráticos para la Escuela Preparatoria; en 1907
marca la desaparición del positivismo en el grupo central de la juventud, se dio un cambio
decisivo de orientación filosófica donde también inician las aspiraciones humanísticas
(Henríquez,2000).
Este grupo había iniciado la revolución cultural en la filosofía, la literatura y las artes, faltaban el
derecho y la economía, hacia 1920 se logra el cambio de orientación en la enseñanza de la
sociología, la economía política y el derecho gracias a Daniel Cosío Villegas, Alfonso Caso,
Daniel Quiros, Manuel Gómez Morín, Vicente Lombardo Toledano, entre otros.
Durante los años de la revolución, México estuvo sólo entregado a sus propios recursos
culturales, el aislamiento forzado en que estaba el país por el curso de la lucha revolucionaria y
posteriormente por el conflicto mundial; los países latinoamericanos estaban demasiados lejos o
eran demasiado pobres para ofrecer alguna ayuda práctica, este aislamiento favoreció en cierta
medida la manifestación de un sentido de autonomía intelectual que se define en un libre
albedrío, debido a que poco se podía recibir del exterior, y por falta de recursos monetarios y de
existencia material poco se podía saber del extranjero, por lo que casi se nulificó el consumo de
material intelectual europeo o estadounidense; por lo que ellos mismos buscan satisfacer esa
público y el Estado, donde se impartía Estética por Caso, Ciencia de la educación por Chávez, Literatura francesa por González Martínez, Literatura inglesa por Henríquez Ureña, Lengua y literatura española por Reyes, latín por Mariano Silva, Arquitectura y crítica del arte por Lazo y Mariscal, además estaban el matemático Valentín Gama, el filólogo Jesús Díaz de León. (Reyes, 2000). 5 También algunos de sus miembros fundaron la Universidad Popular Mexicana en 1911, cuyo estatuto era no aceptar la ayuda gubernamental, esta institución duró 10 años siendo uno de sus rectores Alfonso Pruneda (Henriquez,2000). Era para gente que no podía costearse sus estudios superiores, ni tenían tiempo para concurrir a la escuela, tuvieron el apoyo de la prensa y de varias empresas para preparar sobretodo a obreros, cuyo primer rector fue Alberto J. Pani (Reyes,2000).
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necesidad de conocimiento, encontrando que existía un México como país con capacidades,
con aspiraciones y con problemas propios, naciendo una necesidad de reivindicación de lo que
le pertenece a la nación, la postulación del desinterés como esencia de la vida y de la intuición
como forma del conocimiento, un incipiente socialismo, universalista y humanitario, aunado a un
nacionalismo reinvindicador de vagas promesas.
México se dio cuenta que podía sustentarse sin ayuda ajena, en caso necesario también
comprende sus cuestiones sociales, sus problemas políticos, económicos y jurídicos, que son
de carácter único y no han de resolverse con la simple imitación de métodos extranjeros, así
sean ultraconservadores estadounidenses o ultramodernos soviéticos; es típico del momento la
carencia de maestros y de disciplina que hicieron imposible toda labor crítica, privaban la moral
y se daba al desenfreno y la corrupción.
Después de la convicción de que el espíritu mexicano es creador como cualquier otro, no se
hubiese logrado sin ese cambio de actitud, como los libros de pensamiento original de Alfonso
Reyes y su El suicida o el de José Vasconcelos El monismo estético, o el Antonio Caso La
existencia como economía, como desinterés y como caridad, investigaciones como las dirigidas
por Manuel Gamio en Teotihuacán, o el estudio de Adolfo Best M. sobre los elementos lineales
y los cánones del dibujo, y las interpretaciones artísticas reflejadas en los murales de Diego
Rivera, como en la arquitectura de Jesús T. Acevedo y Federico Mariscal en la tradición colonial
mexicana; por lo que se dio el preferir tanto los materiales nativos y los temas nacionales en las
ciencias como en el arte, junto con la decisión de crear métodos nuevos, cuando los métodos
europeos resultaban insuficientes ante los nuevos problemas. (Gómez,1973; Henríquez,2000).
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González (1985) señalaba lo que opinaba sobre los intelectuales de la generación del 15, Cosio
Villegas entendió que la ilusión de los intelectuales debían y podían hacer algo por el México
nuevo que comenzaba a fraguarse después de la revolución mexicana, y ese hacer algo no era
escribir o perorar, sino que era moverse tras una obra de beneficio colectivo, durante la época
de Carranza y Obregón no aspiraban a dirigir o aconsejar al gobierno,6 ya que muchos de estos
intelectuales tomaron parte o fueron espectadores del movimiento armado, porque las armas y
las letras no pudieron estar separadas, Zapata contó con un profesor rural (con el resultado de
que su literatura fue menos trabajada, pero más emotiva), Carranza contó con Luis Cabrera,
Villa tuvo en sus filas a Martín Luis Guzmán y José Vasconcelos (pero sin ninguna influencia y
si la hubo fue limitadísima).
Los escasos intelectuales aliados a los jefes revolucionarios tuvieron muy poca influencia en
ellos, ningún intelectual mexicano gozó de la plena confianza de un jefe revolucionario, ni
alcanzó una fuerza política directa o propia, la mayoría de los civiles que se acercaron a los
jefes revolucionarios eran gentes que sabían leer y escribir, como los periodistas que podían
redactar discursos, elaborar reglamentos y escribir ciertas leyes (como Silva Herzog que su
actividad de periodista lo acercó a Eulalio Gutiérrez).
Por lo que deben cierta legitimidad a los militares y políticos, que habían logrado la victoria en la
revolución con sus propios manos, por lo tanto les parecía exclusivo e indiscutible el derecho a
conducir al país, además le concedían la capacidad y resolución necesarios para efectuarlo.
Muchos de los intelectuales de la denominada generación del 15 siguieron a Vasconcelos, o 6 Desde la revolución francesa hubo intelectuales que participaron en la política, así como en los movimientos revolucionarios desde el siglo XVIII (Careaga,1974); Cosío Villegas determina que el intelectual que ingresa a la política debe hacer un lado su inteligencia y verbo, en cambio usa la intriga, convence con el engaño y no con la razón, por lo que cambian sus prioridades por escalar, por lo que primero es buscar hacerse útiles e indispensables después; otros utilizan sus habilidades para averiguar que busca el jefe, conseguido esto, entran en servilismo demostrando al jefe que tenía toda la razón, muchísima más de la que el había presumido o visto inicialmente (González,1985).
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Antonio Caso, o Pedro Henríquez o Martín Luis Guzmán. Pronto Vasconcelos se distanció de
Caso y Henríquez, por lo que se dividió en dos bandos a los miembros de esta generación,
Lombardo tomó partido contra Vasconcelos, pero aquellos intelectuales de esta generación que
siguieron a Vasconcelos se decepcionaron al ver que su verdadera pretensión no era como
creyeron aquellos jóvenes intelectuales en transformar la educación, sino en trepar hasta la
presidencia de la República.
La revolución en suma había creado un enorme y general vacío que de alguna forma tenía que
llenarse, no sólo había cambiado los cuadros políticos, militares y administrativos del país, sino
en buena medida también la jerarquía intelectual; a su término fueron regresando los
ateneístas, el único que no regresó a residir en México al triunfo de la revolución fue Alfonso
Reyes (pero lo haría tiempo después), aquella convicción suya de que el intelectual, antes que
nada y después de todo, debía escribir, debido en parte a que había sido removido de su cargo
como embajador, así entendió que los gobernantes mexicanos no toleraban ya al intelectual ni
siquiera en el exilio diplomático.
Muchos de la generación del 15 no entendieron el oficio del magisterio que todos abrazaron
arrobados como una empresa intrínsicamente intelectual, que entendían como una ocasión
providencial de hacer mejores ciudadanos capaces de seguir haciendo un México cada día
mejor; aquel México que les tocó vivir, poco o nada sensible a la palabra escrita, quizás más a
la palabra hablada, pero se perdió la oratoria (ya que se consideraba que las mejores
expresiones estuvieron en la Convención de Aguascalientes y en el Congreso Constituyente),
siendo Antonio Caso el último gran orador, que ninguno de sus discípulos (incluido Silva
Herzog) intentó imitarlo siquiera.
30
Había varios miembros de esta generación del 157 con capacidades intelectuales y con una
vida sorprendente que les toco vivir, en esta generación consideraba Cosío Villegas que no
hubo realmente escritores, reconoce que la mayoría de ellos dejaron algunos escritos, sin
embargo nada conmensurado en cantidad o calidad, que a su inquietud de espíritu o a su
buena madera intelectual, como a su cultura y en varios casos a dotes indudables de escritor;
se puede decir que su producción escrita se regulariza y abunda un tanto en los dos últimos
decenios cuando la mayoría tienen entre 50 años de edad, en donde su importancia política es
reducida en muchos de los casos, pero pocos son quienes concluyen un esfuerzo sostenido y
organizado que supone escribir un libro (como lo haría Silva Herzog).
Si la cuestión literaria no fue tan prodigiosa, si lo fue su aportación a las instituciones (como el
caso de Banco de México por Gómez Morín), en el gobierno (Ramón Beteta, Jaime Torres
Bodet, Narciso Bassols, Vicente Lombardo Toledano, etc.) como en los sucesos en que
tomarían parte (Bassols y la autonomía universitaria, Silva Herzog y su denominación como
perito en el conflicto petrolero, etc.), es decir, en el campo de la acción, que quizás fue una
disyuntiva entre escribir y el hacer entre algunos de sus miembros.
Garciadiego (2006) considera que Silva Herzog era un intelectual crítico e independiente, en
cuyas obras se aprecia esa rara cualidad de combinar análisis objetivo con frecuentes
apreciaciones personales donde se apoya con una sólida referencia documental.Los méritos
intelectuales de Silva Herzog sus aportaciones al progreso económico y cultural del país le
abrieron en 1948 su ingreso al Colegio Nacional, aunque con el tiempo se redujo
considerablemente el volumen de su trabajo, continúo siendo consultado por altos cargos
gubernamentales.
7 González (1985) menciona que hay quienes denominan a esta generación como la de los mil novecientos veintidós sabios, porque a la generación de 1915 se le sumaban los 7 sabios y daba como resultado 1922.
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Cosío Villegas considera que uno de los problemas de los latinoamericanos, es que o no
estudiamos del todo nuestros problemas, o lo hacemos tarde, o de manera insuficiente, pero al
verse forzados por alguna razón a opinar sobre ellos, intentan reparar esa desidia acudiendo a
estudios hechos por intelectuales europeos y estadounidenses sobre los mismos fenómenos o
análogos, pero dichos estudios se descubre no son un gran apoyo ya que ayudan muy poco, ya
que al hacerlos total o parcialmente válidos para las condiciones nuestras.8
I.4 Habilidades de Jesús Silva Herzog como investigador
Las habilidades requeridas para investigar, en el caso de Silva Herzog se fueron desarrollando
y perfeccionando en el transcurso de su vida, entremezclándose sus actividades laborales,
académicas como personales.
El investigador como toda persona que realiza en forma habitual trabajos de investigación, en
cualquiera de las ciencias, pero si éste está orientado a las ciencias sociales y humanísticas se
considera como investigador social, el perfil del investigador es el de un profesional con un
amplia rango de experiencia y con un pensamiento divergente y convergente, para observar la
situación desde distintos ángulos y puntos de vista dando unas soluciones viables y
seleccionados, el investigador se debe mantener al tanto en las últimos modelos de solución de
problemas, herramientas y técnicas estadísticas; debe ser objetivo, realista y crítico, debe ser
capaz de manejar abstracciones y diversos métodos lógicos del conocimiento, también debe ser
capaz de captar los problemas sociales y científicos, siendo un comunicador eficaz para
8 Como ejemplo plantea al esquema jurídico constitucionalista que había sido inspirado en la idea de una sociedad única, homogénea y de tipo urbano, mercantil e industrial, cuando la mayoría de la población mexicana era rural (González,1985).
32
divulgar los hallazgos de sus investigaciones con eficacia, honestidad y claridad, debe ser una
persona comprometida con la actividad profesional que desempeña. (Eyssautier,2006).
Para comprender la manera de llevar a cabo las investigaciones elaboradas por Silva Herzog,
es preciso detenerse a reflexionar, él porque las hizo, para entender la profundización y
relevancia de sus aportaciones, para lo cual se propone dos clasificaciones en función a la
causa del porque las efectuó, que se encuentra muy relacionada con las etapas de su vida:
I) Requerimientos laborales propios del cargo que desempeñaba, que lo llevaron a desarrollar
varios trabajos, destacándose los estudios de tipo descriptivo y posteriormente estadístico de
las situaciones, que observó y/o analizó en base a la información que reunió en un determinado
momento. Algunas de estas investigaciones eran únicas en su tipo en el tiempo en que se
elaboraron, por lo que se convirtieron en fuentes obligadas de consulta y modelo de otras; el
manejo sistematizado, ordenado y coherente tanto del discurso como de la información
presentada serán parte de los distintivos de estas obras.
Su labor como periodista inicia en el año de 1914 en el periódico El Demócrata, siendo sus
primeros trabajos 2 artículos “El peón” que escribe apoyado en sus recuerdos de la hacienda de
la Angostura, donde Silva Herzog, se ocupa de censurar el trato que daban los hacendados a
sus trabajadores en sus inmensas propiedades9 y “El obrero” de la Compañía Metalúrgica
Mexicana que en sí era la Sociedad Metalúrgica Mexicana, empresa filial de la American
Smelting Refining Company, a los cuales Silva Herzog entrevistaba cuando salían de trabajar
para conocer sobre su situación laboral y su realidad (Naufal,1996); posteriormente se cambió
9 “Años antes había vivido durante 3 ó 4 semanas en una gran hacienda y presencié de cerca la vida miserable de los peones, aquello me dejó una huella profundamente dolorosa y despertó mi indignación y vagos anhelos de justicia” (Silva,1964:9).
33
al periódico Redención en donde publicó un artículo en contra del general Adalberto de Ávila10
debido a la indignación que le ocasionó su abuso de poder.
Posteriormente se publican una serie de conferencias dictadas por Silva Herzog, en el
Departamento de Estadística Nacional en 1927 bajo el título de “Conferencias. Apuntes sobre la
evolución económica de México”, de las cuales aunque necesariamente cortas para una
completa exposición de la historia económica de México, tenían varias ideas nuevas
valientemente expuestas como que la conquista atrajo más males que bienes, donde crítica la
superficialidad de la historia escrita de México, que debiera reanalizarse más profundamente,
en este texto marcó al problema agrario derivado de la mala distribución de tierras, lo que a su
juicio es la causante de todas las desigualdades que existen en México, razón de todas
nuestras revoluciones y nuestros más serios problemas; el propósito de Silva Herzog era
demostrar que la revolución mexicana no representó un paso atrás en la historia del país como
pretendían creer los reaccionarios y detractores de ésta, sino un factor afirmativo de avance
económico, social, político y cultural.
Algunos años después su amigo y colaborador Jesús S. Soto del Departamento de Estadística
Nacional diría que gracias a este libro Silva Herzog ingresó como asesor en las altas esferas de
la administración pública, Aquel pequeño libro tuvo fortuna, pues abrió a muchos los ojos
respecto a los más arduos problemas y el resultado para Silva Herzog fue que se le llamase a
colaborar en la alta administración. (Silva,1992) Silva Herzog escribió en esa dependencia otros
2 libros: Aspectos estadísticos de un quinquenio 1921-1925 publicado también en 1927, pero
sin su nombre y sólo con el de la institución, que es un estudio estadístico-económico sobre los
principales rubros de la economía nacional durante el quinquenio estudiado, donde se reúne 10 Un revolucionario que estaba haciendo atrocidades y tropelías en contra de la población, él cual tenía la siniestra costumbre de fusilar paseando antes a sus víctimas entre las notas de “Las Golondrinas”, esto le ocasionó estar en alerta hasta que supo de la muerte del general a manos de sus enemigos. (Guillén,1969).
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una amplia información de tipo estadístico, que es analizada destacando los aspectos más
importantes de las actividades económicas, que se desarrollaban en ese tiempo en el país,
pudiendo permitir hacer ciertas deducciones sobre los problemas fundamentales de las mismas,
se utilizaron para su apoyo representaciones gráficas para mostrar los datos estadísticos
obtenidos; mientras que la otra obra Sonora, Sinaloa y Nayarit de 192911, es un libro colectivo,
donde colaboran: Jesús Soto, Antonio Espinosa de los Monteros, Francisco Soto, Miguel Torner
12 y Silva Herzog quien redactó los capítulos dedicados a la agricultura, ganadería, industria de
transformación y comercio; siendo otro estudio estadístico y económico social regional, que
destaca las riquezas naturales de esa región, la información en su mayoría salen de los mismos
datos recabados por la dependencia, en estos trabajos se insiste en que el objetivo era hacer
ver la utilidad práctica de las estadísticas en el diagnóstico de la situación económica y social
del país, subsanar las carencias de información que había en importantes renglones de la
realidad nacional, para aportar datos más completos, como exactos para un mejor estudio como
comprensión de los problemas de México y sus perspectivas, a lo que opina Silva Herzog:
La estadística ha dejado de ser para nosotros una rutinaria recolección de datos sin utilidad
práctica ni aprovechamiento inmediato, como lo fue hasta hace apenas unos cuantos años,
que se llevaba a efecto en diversas oficinas públicas sin plan y sin concierto, obedeciendo a
tratados diplomáticos especiales o a simple espíritu de imitación. Día a día la solicitud de
datos precisos, por parte de instituciones públicas y privadas, nos demuestran que los
programas de desarrollo económico, de funcionamiento administrativo y de reforma social,
comienza a basarse, o por mejor decir, pretenden basarse en lo futuro, en los datos concretos
y positivos que encierran los números o las gráficas estadísticas […] la necesidad de índices
de la vida económica y social del país, mal llenada por departamentos y secciones
11 (Padilla,1973), difiere de (Enríquez,1992) en el año de publicación del libro “Sonora, Sinaloa y Nayarit “ elaborado por el Departamento de Estadística Nacional año de 1927, imprenta Mundial, México, D. F. 1928. 12 Jesús Soto elaboró: Descripción geográfica, reseña histórica, población, minería, educación, comunicación, y hacienda pública; Antonio Espinosa de los Monteros con instituciones de crédito, Francisco Soto con riqueza forestal, caza y pesca y producción rústica; y Miguel Torner con trabajo, (Enríquez,1992).
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desvinculadas, ha dado nacimiento a una institución coherente en su plan y sistemática en
sus procedimientos, de la cual es producto Sonora, Sinaloa y Nayarit. (Naufal,1996 :78).
Uno de los problemas que enfrentaron este tipo de estudios económicos en México, es la
carencia de datos confiables, que sirvieran de base para dar conclusiones o argumentos más
fundamentados.
Silva Herzog fue designado ministro en la Unión Soviética donde estuvo del 9 de febrero de
1929 al 5 de enero de 1930. Durante su estancia en la URSS estudió cuidadosamente su
sistema cooperativo, también le impresionó el interés que se mostraba hacia la maternidad,
como la protección para el niño que en ningún país occidental tenía, es decir, fue a
documentarse de primera fuente mediante la observación detenida de lo que haya sucedía,
buscando explicaciones, a veces haciendo analogías con lo que conocía, para poder entender
lo que estudiaba.
El deseo de divulgar lo visto y analizado en una forma de narración objetiva, por medio de
conferencias dictadas en la SHCP, fueron publicadas en un folleto en los talleres del diario El
Nacional Revolucionario en 1930 bajo el título Aspectos económicos de la Unión Soviética13
cuyo prólogo fue realizado por Jesús S. Soto, quien se expresaba de Silva Herzog, aunque
escriba artículos y estudios, no es esencialmente lo que pueda decirse de un escritor, es un
conferencista más que todo, plática sencilla que encierra siempre interés e ir improvisando el
discurso donde tiene interesantes observaciones, debido a su práctica de profesor que tiene la
facilidad de dicción, así como atraer la atención de quienes lo escuchan, su palabra convence
13 Se reeditó en 1992 como manera de rendir homenaje por parte del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, a su fundador en el centenario de su natalicio, que se une al hecho de que la SRE en 1985 también reeditara el libro De lo dicho y de lo escrito 1928-1930: Un mal momento en las relaciones México-soviéticas (que publicara el autor en 1977), bajo el título de Jesús Silva Herzog. Cuestiones internacionales.
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fácilmente, y quien la oye va deduciendo sin trabajo las ideas que el orador sugiere conforme
transcurre el discurso. (Silva,1992).
En la Oficina de Estudios Económicos de los Ferrocarriles Nacionales, Silva Herzog era el
director, se realizaron varias investigaciones que se publicaron como: Los salarios y la empresa
de los Ferrocarriles Nacionales de México en 1931 por Jesús Silva Herzog en colaboración con
Manuel Mesa Andraca, Manuel Vázquez Díaz y Carlos Manuel Cox; en este trabajo se propuso
estudiar la situación financiera y laboral de la empresa antes y después de la revolución (entre
los periodos de 1908-1912 y 1925-1930), con el fin de encontrar las causas que la llevaron a la
bancarrota y emprender su reestructuración, expone información económico-estadística (alguna
de primera mano, sobre salarios, ingresos y egresos, número de empleados, toneladas y
pasajeros transportados, extensión de las líneas, número de máquinas, etc.) de los ferrocarriles
nacionales con otras empresas del ramo nacionales y extranjeras, se compara los salarios de
los ferrocarriles con el de otras actividades económicas ligadas a la producción y los servicios
para determinar el nivel de ingresos de los trabajadores en los distintos sectores de la sociedad.
También se establecen las diferencias entre el salario nominal y el salario real, el título se ve
rebasado por su contenido ya que además de analizar la cuestión de los ferrocarriles, también
plantea la del gobierno, la banca, y otras industrias como: la azucarera, la cervecera y minera
para sondear el costo y nivel de vida de esos trabajadores, se apoyo de material
bibliohemerográfico nacional como internacional del cual se hace referencia en el trabajo
(Naufal,1996). Los resultados del estudio Silva Herzog sostiene que:
A) Los salarios de que disfrutan actualmente la mayor parte del personal de los Ferrocarriles
Nacionales de México están dentro de límites normales, B) Los Ferrocarriles Nacionales de
México gastan anualmente en sueldos mucho más de lo que aconseja una sana y prudente
política financiera, C) Si los sueldos individuales están en la mayoría de los casos dentro de los
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límites que hemos calificado de normales, y por otra parte las cantidades que por concepto de
sueldos se gastan anualmente resultan excesivas, es lógico concluir que el mal estriba en que los
Ferrocarriles Nacionales de México hay más personal del necesario y del que requiere una
organización ponderada, sensata y eficiente, D) El hecho de que los Ferrocarriles Nacionales de
México gasten en sueldos más de lo debido, no muestra que sea éste el factor único de las
malas condiciones financieras de la empresa, es únicamente uno de los varios factores que han
contribuido a producir tales efectos. (Ferrocarriles Nacionales de México,1931a:236-237).
En el trabajo de 1931 Un estudio del costo de la vida en México14 de este libro hace una reseña
Humberto Tejera en el periódico El Economista en la sección bibliográfica, también Carlos Díaz
Dufoo lo cometa y celebra el estudio realizado en el periódico Excélsior, y Enrique Sarro en su
reseña en el periódico El Economista también señala el mérito que tiene el estudio en el manejo
y obtención de información de primera mano, que en México se comenzaba hacer estudios
técnicos serios y bien presentados al igual que las investigaciones europeas y estadounidenses
(Naufal,1996).
Fue redactado y dirigido por Jesús Silva Herzog, contó con la colaboración de Enrique Sarro,
Manuel Mesa A., Elpidio Martínez Trousselle en los trabajos de preparación del material; en
1932 otra de las obras realizadas fue México económico 1928-1930,15 se puede considerar
como uno de los primeros anuarios económicos que se editan en México, dirigido por Jesús
Silva Herzog quien elabora las partes de “Comunicaciones y transportes”, así como la de
“Ferrocarriles Nacionales de México”, donde también participaron: Daniel Cosío Villegas, 14 La primera edición la publicó Ferrocarriles Nacionales de México, posteriormente se reimprimió por la Facultad de Economía de la UNAM en 1989 en su colección clásicos de la economía mexicana. Con este libro el autor realiza una de las primeras investigaciones empíricas sobre las características del consumo de la población. El objetivo central fue conocer el nivel de vida de los habitantes del país, al considerarse como el mejor indicador para conocer la situación real y el grado de adelanto de una sociedad. 15 México económico 1928-1930 anuario estadístico de la Oficina de Estudios Económicos de los Ferrocarriles Nacionales de México publicado en 1932, reimpreso por la Facultad de Economía en su colección clásicos de la Economía Mexicana en 1989.
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Pascual Gutiérrez Roldán, Humberto Tejera y Ramón Fernández y Fernández (Facultad de
Economía,1989).
Al presentar un panorama completo de la situación que guardaba la economía del país en un
entorno de crisis mundial, en el capítulo desarrollado por él sobre “Comunicaciones y
transportes” reitera su preocupación de que la falta de contacto entre las zonas de producción y
los centros de consumo interno y externo16 impedían al país aprovechar plenamente sus
riquezas y desarrollar su potencial económico.
También llama la atención que los efectos de la crisis de 1929 no afectó por igual a la economía
del país; algunos sectores se desarrollaron pese a la contracción de otros. Silva Herzog utiliza
información, que comienza a reunir el 1o de abril de 1932, por medio de solicitudes a sus
conocidos como fue Aurelio Bueno quien le pidió al Secretario de Relaciones Exteriores datos
sobre tarifas de los ferrocarriles de una distancia de 50,100, 200 y 300 km. para las siguientes
mercancías: aceite comestible, algodón, azúcar, café, carbón de piedra, cemento, coque, fierro
para construcción, frutas, legumbres, ganado lanar, ganado vacuno, gasolina, maderas
corrientes, maíz, metales en barra, piedra mineral y trigo en los siguientes países: Inglaterra,
Francia, Alemania, Argentina y Brasil;17 la solicitud fue turnada a los consulados de: París,
Hamburgo, Londres, Barcelona, Yokohama y Buenos Aires por la SRE; durante esta
recopilación de información se prefirió no tomar en cuenta datos, que no creyeron que tuvieran
un rigor metodológico en su elaboración, con lo cual buscaban que esta obra tuviera seriedad y
solidez en el material acopiado. 16 Este tipo de postulados que dió Silva Herzog son ya propiamente de tipo económico, en la actualidad son parte de los estudios económicos para analizar la producción o inversión de nuevas empresas o expansión de las mismas. 17 (Archivo Histórico de la Secretaría de Relaciones Exteriores “Genaro Estrada”,1932) Expediente IV-619-3, documentos 1 y 2.
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En 1937 Silva Herzog forma parte de los peritos que debían estudiar la situación que tenía la
industria petrolera, para lo cual se lleva una exhaustiva investigación que se compone de un
estudio del problema petrolero, un informe con los resultados obtenidos del mismo, y un
dictamen en el que se fija la forma de solucionar el conflicto, dentro de los datos recabados hay
varios de tipo estadístico, que en algunas partes del estudio sirven de base para los diferentes
cálculos sobre rendimientos de impuestos, producción, consumo, etc. se hace uso de la
analogía con respecto a la industria petrolera en Estados Unidos, para entender mejor la
situación en que se encontraba la industria petrolera en México, encontrar las deficiencias y
desviaciones.
Después de estos trabajos en los cuales participó en su elaboración, redacción y busca de
fuentes; hay otros que realizó en calidad de editor, como los elaborados durante su
permanencia en la Dirección de Estudios Financieros de 1942 a 1945, la colección de
documentos del Archivo Histórico de Hacienda publicados bajo la dirección de Silva Herzog, en
1943, el volumen I “La libertad del comercio en la Nueva España en la segunda década del siglo
XIX”, con la colaboración de Luis Chávez Orozco en la introducción; en 1944, el volumen II
“Comercio extranjero por el Puerto de San Blas en los años de 1812 a 1817” cuya introducción
fue de Joaquín Ramírez Cabañas; en ese mismo año, el volumen III “Relaciones estadísticas de
Nueva España de principios del Siglo XIX”; en 1945, el volumen IV “Documentos relativos al
arrendamiento del impuesto o renta de alcabalas de la Ciudad de México y Distritos
circundantes” la introducción fue de Ricardo Torres Gaitán; finalmente en ese mismo año, el
volumen V “Mercedes y pensiones. Limosnas y Salarios en la Real Hacienda de la Nueva
España” cuya introducción fue de Joaquín Ramírez Cabañas.
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Entre estos trabajos se pueden considerar los realizados sobre el agrarismo, tema que le
interesó desde la cuestión revolucionaria, después puede ser que lo reafirmara, fuera
depurando y reuniendo información debido a las diversas tareas que lo vinculaban con la
cuestión agraria,18 de los primeros trabajos realizados al respecto La reforma agraria en México
y en algunos otros países, que fue una conferencia que se publicó en julio de 1934, en donde
esquematiza las causas de la organización agraria como factor de cultura, de bienestar y de
perdurabilidad de las naciones que se exponen, el siguiente trabajo más elaborado El agrarismo
mexicano y la reforma agraria. Exposición y crítica de 1959, esta obra la afina, corrige y edita
en una 2º edición en 1964, En su estudio que realiza sobre el Agrarismo Mexicano:
Se muy bien que este libro (el agrarismo mexicano y la reforma agraria) es solamente una
modesta aportación al estudio de un aspecto de la historia de México y del más serio
problema nacional, sin cuya adecuada y pronta solución no será posible desenvolvernos con
seguridad sobre bases sólidas; no será posible la industrialización, ni rebasar la etapa de país
subdesarrollado. Se que sobrará quien encuentre en el libro que falta esto, aquello o lo de
más allá; que no cité tal o cual suceso o a tal o cual autor. Todo esto puede ser cierto; mas
será cierto también que quien tal diga encontrará algo que no sabía en alguno de los
capítulos de esta obra. Lo que yo he querido es presentar la trayectoria del agrarismo
mexicano contrastando las ideas de autores representativos en cada momento histórico, con
la realidad en ocasiones prometedora y a veces punzante y amarga. Este libro con sus fallas
y aciertos, con sus defectos y cualidades que de todo ha de haber, es obra personal mía y en
consecuencia es mía toda la responsabilidad. Por mi pobrísima agudeza visual que apenas
llega a 5 ó 6%, tuve que valerme de lectores, como siempre lo hago. Mis lectores para la
consulta de libros, folletos, revistas y periódicos diarios desde el principio hasta el fin del
trabajo fueron la señorita Carmen Ruiz y mi hijo Claudio Silva Herzog. (Silva,1964:11).
18 Estas actividades fueron en 1921 al ingresar al PNA, cuando labora en 1926 sobre la reglamentación de los bancos agrícolas y ejidales, en 1927 como consejero de la Liga Nacional Campesina, pero también al dar clases en la Escuela Nacional de Agricultura donde imparte “Evolución social agraria de México” entre 1924 a 1927, al ser una de las principales problemática dentro de la economía nacional.
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II) Sus actividades como colaborador o editor en varias publicaciones, las cuales fueron tan
variadas en cuanto a los temas que abordaban que van desde cuestiones literarias, políticas
agraristas, económicas y sociales, que le requerían investigaciones en su mayoría inéditas para
publicarse, donde planteaba ciertos postulados o hipótesis sobre los temas a tratar, en el
desarrollo del trabajo va construyendo una serie de conclusiones o predicciones sobre los
mismos, en ocasiones trataba sobre las problemáticas que había en su momento. En sus inicios
a finales de mayo de 1917 con la formación de su primer proyecto editorial “Proteo”, donde
escribió algunas crónicas;19 Silva Herzog colaboró como escritor en el órgano de difusión del
PNA Combate entre 1921 y 1923.20
Posteriormente al fundar al IMIE y la RME en 1928, en su primer número incluye un artículo de
Silva Herzog titulado “Nuestros puntos de vista”; en la revista se analizaron distintos problemas
de la actualidad de aquel entonces que se presentaban en México, América Latina y el mundo;
referidos a la banca, el campo, la industria, las finanzas, el petróleo, etc. Algunos de estos
artículos fueron discutidos y comentados en otras publicaciones, así como en círculos de
intelectuales y políticos del país; Naufal (1996) argumenta que contribuye en el ambiente para la
creación de la carrera de Economía, y el surgimiento de otras revistas especializadas en esta
área del conocimiento, como el periódico quincenal El Economista dirigido por Francisco Borja
19 “Entonces yo andaba por los caminos de la literatura y la poesía; ya con preocupaciones sociales, con interés por los problemas sociales de México” (Wilkie & Monzón,1969:625). Entre sus obras que se publicaron en la revista están: “Viendo pasar mi vida”, “Ver desde las alturas”, “En la tumba de Othón”, “La patria futura”, “La cultura de los pueblos”, etc. (Padilla,1973). 20 Donde escribe “La clase media debe estar con la Revolución”, “La legalidad no consiste en la ocupación de un edificio vetusto”, etc. (Padilla,1973); puede ser que al entrar en contacto con esta organización política, Silva Herzog se interesara mayormente por los problemas de la distribución, repartición de la tierra y la pobreza del campesino.
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Bolando, esta publicación informaba las cuestiones económicas y hacendarias de México en la
cual Silva Herzog colaboró.21
Así también, participó en la Revista Economía 22 de la Asociación de Banqueros de México de
1929 a cargo de Miguel Palacios Macedo y Daniel Cosío Villegas, reflejaba los intereses de la
banca privada en el proceso de reconstrucción nacional, donde también es colaborador
(Escobedo,2000); otras de sus colaboraciones fueron en: el periódico El Nacional,23 en la
revista Futuro24 quincenal” que editaba la Universidad Obrera de México, de la cual formaba
parte del comité editorial, pero también colaboró con Vicente Lombardo escribiendo algunos
artículos en otra revista de la misma Universidad llamada UO,25 el Trimestre Económico26 del
cual fue director entre 1934 y 1941 (Colegio Nacional de Economistas,1972).
En 1936 se conforma el Sindicato Nacional de Economistas por iniciativa de Silva Herzog, que
utilizó como órgano de información a la revista Economía que aparece en 1937, que tenía la
intención de expresar la opinión de los economistas sobre los problemas económicos que
21 Entre los artículos realizados por Silva Herzog se encuentran: “El salario mínimo y la economía nacional” en 1928, “El problema de la moneda de Plata” y “El salario mínimo y el Código del Trabajo” ambos en 1931 (Padilla,1973). 22 Silva Herzog escribió: “El crédito agrícola en México” y “Los comienzos de nuestro comercio” ambos en 1930, “Liberalismo e intervención” en 1946, “La epopeya del petróleo en México” en 1948. (Padilla,1973). 23 Silva Herzog publicó: “Los comerciantes y la Revolución”, “Los comerciantes y la cuestión agraria”, “Los comerciantes, la industria y los obreros”, “Los comerciantes, el fisco y el petróleo”, “La Revolución mexicana” en 1930, “Los problemas de México y la juventud universitaria” en 1932, “Problemas mexicanos” y “El clericalismo y la educación” en 1934, “Perspectivas de México” en 1945 (Padilla,1973). 24 Silva Herzog contribuyó con: ”El panorama económico de México”, “Esquema de la sociedad capitalista”, “Un resumen de la concepción materialista de la Historia”, “Diecinueve años”, “La Convención de Aguascalientes” en 1936, “Riqueza minera y hambre popular” en 1937, “En elogio de Aníbal Ponce” en 1938, también utilizó el seudónimo de Armando Blázquez con el que escribió “Vasconcelos injuria a México” y “Las empresas petroleras y las demandas de sus trabajadores” ambos en 1937. 25 Silva Herzog escribió: “El pensamiento socialista en la época moderna” y “El pensamiento socialista en la antigüedad” ambos en 1936, “Bosquejo histórico de la Revolución Mexicana” en 1937. (Padilla,1973). 26 Silva Herzog participó con: “El problema de los monopolios” en 1934, “El capitalismo hasta el siglo XVIII” en 1938, “El desarrollo de la enseñanza de las ciencias económicas en México, 1925-1953” en 1954. (Padilla,1973).
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afectan al país, exponiendo los métodos y posibles soluciones a seguir, Silva Herzog escribió el
primer artículo “El sindicato de economistas y los problemas nacionales”; su proyecto editorial
más elaborado fue Cuadernos Americanos27 de 1941 hasta 198428 donde publicó la mayoría de
sus ensayos de tipo histórico, económico, sociológico e incluso político; en la Revista de
Investigación Económica29 en 1942 de la cual también es fundador. A parte de estas
publicaciones que son de carácter nacional también publicó en otras de tipo internacional como:
Amauta de Perú, El Repertorio Americano de Costa Rica, The Banker de Inglaterra, The
Montreal Star de Canadá, Claridad de Argentina, Annals of Collective Economy de Italia, Nueva
Democracia de Estados Unidos, etcétera.30
27 Silva Herzog realizó: “Lo humano, problema esencial”, “Temas 1942”, “Las democracias y España”, “La Revolución Mexicana en crisis”, “Franco y las universidades españolas”, “lealtad del intelectual”, “Independencia ¿Comunión Social?”, “Crisis humana y postguerra”, “La conferencia económica interamericana”, “La muerte de un hombre continental”, “¿Y después de la guerra qué?”, “Las Naciones Unidas y Franco”, “Las ideas económicas en México de 1821 a 1855”, “Imperialismo y buena vecindad”, “Meditaciones sobre México”, “Deberes del intelectual mexicano contemporáneo”, “La cultura y la paz”, “Recordación del drama contemporáneo”, “Las juntas militares de gobierno”, “la revolución mexicana ya es un hecho histórico”, “interpretación del drama contemporáneo”, “¿Los Estados Unidos o la Unión Soviética?”, “Tres comentarios breves”, “La reunión de cancilleres. Mi cuarto a espadas”, “Ciencia y sociedad”, “La concentración agraria en México”, “Reflexiones sobre las dictaduras”, “La epopeya del petróleo en México”, “Portes Gil un viaje y un libro”, “reflexiones sobre la energía nuclear y el desarrollo económico” entre 1942 a 1954, “Homilía para futuros economistas”, “La crítica social en Don Quijote de la Mancha”, “La vista a México del Dr. Eisenhower”, “El gobierno de Madero y la Decena Trágica”, “Arrojemos la bomba asesina al fondo del mar”, usa el seudónimo de Alfredo S. Duque para escribir “Niebla al amanecer” en 1958, “La propiedad de la tierra y el desarrollo histórico”, “La etapa maderista de la Revolución”, “La reforma agraria en México”, “Un esbozo de la revolución mexicana (1910-1917)” entre 1954 a 1960. (Padilla,1973) “Narciso Bassols un mexicano ejemplar”, “¿Quién fue Noyola Vázquez?”, “México y el vampirismo petrolero”, “Reflexiones sobre las guerrillas”, “Cárdenas en la presidencia”, “Breve historia del Fondo de Cultura Económica”, “Disquisiones capitalistas”, “Aspectos ideológicos de 3 economistas neoclásicos”, “Neruda, Allende y el pueblo de Chile”, “Una semblanza de Benito Juárez”, “La historia es una hazaña de la inconformidad”, “El polifacético Alfonso Reyes sus preocupaciones sociales”, “Respuesta”, “la crisis que todavía nos agobia”, “De la propiedad, el imperialismo y la guerra” entre 1968 a 1983; con el seudónimo de Alfredo S. Duque “Intelectuales de nuestro idioma y Cuadernos Americanos” en 1978. 28 Los últimos artículos publicados en Cuadernos Americanos por Silva Herzog fueron “La Revolución mexicana es ya un hecho histórico” en la revista de marzo-abril de 1984 y “Meditaciones sobre México” en la de noviembre-diciembre del mismo año, ambos trabajos ya habían sido publicados anteriormente en la revista en 1949 y 1947 respectivamente. 29 Silva Herzog contribuyó con: “Palabras iniciales” y “Bernardo Ward” en 1941, “Un gran utopista francés: Carlos Fourier” en 1942, “Las ideas económicas de los Constituyentes de 1857” en 1944, “El Doctor Mora Economista” en 1951, “La enseñanza de la Historia del pensamiento económico” en 1952, “Resumen histórico del desarrollo en la enseñanza de las ciencias económicas en México” en 1954, “Breves apuntes sobre la Revolución Industrial” en 1955, “Homilía para futuros economistas” y “Recordación de Fourier” en 1956; “Una silueta de Melchor Ocampo” en 1965, “Resumen histórico del desarrollo en la enseñanza de las ciencias económicas en México” en 1984 (Padilla,1973).
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III) Como docente, investigó sobre los temas que debía impartir a los estudiantes, lo que
también lo motivó a escribir parte de estas investigaciones, algunas en forma de compilaciones
o antologías, por la carencia de literatura en español de textos económicos, derivado de la
necesidad de contar con obras más apropiadas para dar la materia, de esta manera al
publicarlos los ponía a disposición de sus alumnos primeramente; en algunos de estos trabajos
se advierten sus comentarios personales sobre los autores o sucesos que aborda,
posteriormente algunos de estos trabajos los profundizó y los expuso en conferencias o se
publicaron en artículos. La importancia de que uno de los profesores de la Escuela Nacional de
Economía se dedicara aparte de dar su clase a investigar apoyó en su conformación como
centro de estudios serio, ya que era una de las escuelas de reciente creación, considerada
como una de las ramas especulativas que menos se había cultivado en el país.
En 1934 se publicó Historia de las doctrinas económicas. Libro 1 de la Antigüedad a la
fisiocracia, este trabajo fue editado por los alumnos de la Escuela de Economía, que comprende
las primeras elaboraciones del profesor Silva Herzog en los textos de los principales autores del
período a que hace referencia, de este trabajo se derivan obras posteriores como Historia y
antología del pensamiento económico. Antigüedad y edad media de 1939, Tres siglos de
pensamiento económico (1518-1817) de 1950 e Historia del pensamiento económico-social de
la antigüedad al Siglo XVI de 1961,31 donde se va corrigiendo y mejorando la obra inicial,
gracias a la recopilación como al surgimiento de nuevas fuentes bibliográficas sobre los temas.
30 Algunos de los trabajos publicados en estas revistas fueron: “El problema agrario de México” de 1929, “México y el imperialismo” de 1929, “Mexico’s Foreign Trade” de 1930, ”Agriculture in Mexico” de 1930, “Agrarian Reform and agricultural production” de 1932, “Foreign Trade between Mexico and Canada” de 1932, “La expropiación de las compañías petroleras de México” de 1938, “Mexico and oil companies” de 1939, “Imperialism and the Good neighbor policy” de 1948 (Padilla,1973). 31 Todos estas obras publicadas por FCE.
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Tras varios años de profesar con cierta constancia la cátedra de Historia de las Doctrinas
Económicas editó un folleto provisional en 1937 El pensamiento económico en la antigüedad,
Silva Herzog con esta obra le da una mayor difusión, ya que sólo quienes asistían a sus clases
podían escuchar tales explicaciones y disertaciones del profesor, en esta obra tiene
antecedentes sobre los autores que ayudan a entender su contexto, como breves síntesis para
comprender de una mejor forma sus aportaciones o ideas, donde también integró algunas de
las observaciones que consideró su autor como pertinentes al caso.
En el libro Antología del pensamiento económico del Siglo XVI hasta David Ricardo, Silva
Herzog retoma las ideas que a su juicio son fundamentales de los autores en temas
económicos del periodo comprendido entre los siglos XVI a XVIII, donde continua dando la
semblanza del autor y las notas que destacan la importancia en cada caso, como el lugar que
ocupan dentro de la historia del pensamiento económico.
Preocupado por el poco interés de estudiar las cuestiones del pensamiento económico
mexicano, del cual se le puede considerar como su principal promotor, como complemento al
pensamiento económico internacional que es materia obligada en la licenciatura, edita su
investigación para el análisis y crítica, El pensamiento económico en México de 1947, en donde,
Silva Herzog analiza las ideas económicas de 38 autores mexicanos.32
Los economistas latinoamericanos conocen bien la evolución del pensamiento económico
europeo, excluyendo el español del que se sabe poco, conocen sobre el pensamiento
estadounidense, nada o casi nada de su propia nación y todavía menos del resto de los países
32 Fray Servando Teresa de Mier, Esteban de Antuñano, Mariano Otero, Lucas Alamán, José María Luis Mora, Miguel Lerdo de Tejeda, Ponciano Aguirre, Ignacio Vallarta, Isidoro Olvera, Gregorio Payró, Francisco Zarco, Ignacio Ramírez, Guillermo Prieto, Matías Romero, Francisco Pimentel, Santiago Ramírez, Joaquín D. Casasús, José Ives Limantour, Pablo Macedo, José López Portillo y Rojas, Wistano Luis Orozco, Lauro Viadas, Jaime Gurza, Francisco Buknes, Carlos Díaz Dufóo, Enrique Martínez Sobral, Rómulo Escobar, Enrique C. Creel, Andrés Molina Enríquez, Fernando González Roa, Rafael Nieto, Luis Cabrera, Alberto J. Pani, Alberto María Carreño, José Luis Requena, Miguel Mendoza López y Schwertfeger, Miguel Palomar y Vizcarra.
46
latinoamericanos;33 el Prof. Silva (1947) comentaba que las naciones fuertes por sus grandes
industrias y sus grandes ejércitos, han dado a conocer al mundo la obra de sus filósofos, sabios
y artistas. Muchas veces esos artistas, filósofos o sabios han sido figuras de valor auténtico,
personalidades de alta calidad; pero no siempre ha sido así; a veces se trata de escritores
mediocres, de tercera o cuarta categoría.
En cambio, los países sin grandes ejércitos, ni grandes industrias, no pueden dar conocer en el
extranjero a sus mejores pensadores y a veces ni siquiera dentro de sus propias fronteras. No
son pocos los ejemplos de intelectuales latinoamericanos apenas conocidos, que superan en
mucho a sus congéneres europeos que gozan de fama internacional.
En su libro El pensamiento económico, social y político de México 1810-1964 de 1967, que
puede considerarse como un complemento del anterior, donde se aborda a 54 autores (29 del
anterior), de estos autores ninguno esta ya vivo, por lo que su obra puede ser analizada y
evaluada, Silva Herzog se disculpa de no abordar a más autores debido a su edad (que en ese
entonces es de 75 años).
La verdad es que a causa de mi edad pensé en más de una ocasión que podría faltarme tiempo
para terminar el trabajo […] No obstante que soy el primero en reconocer lo modesto de este
trabajo, que espero que pronto sea superado […] Hago presente mi agradecimiento a la señorita
Magdalena Sofía Alfaro, a mi hijo Claudio Silva Herzog, por haberme leído numerosos libros y
folletos utilizados en esta obra, así como también a la señorita Gloria Yolanda Padilla por lo
mismo y por haber revisado conmigo los mecanogramas ya listos para la imprenta.
(Silva,1967:8).
33 “Muchas veces hemos vivido a espaldas a nosotros mismos, a nuestra tradición cultural, a los pensadores nuestros. No hace mucho tiempo que un amigo mío al regresar a México, después de estudiar varios años en la prestigiosa Universidad de Harvard, aseguraba que en España jamás hubo economistas ni preocupaciones económicas y que lo mismo había ocurrido en la América Latina.” (Silva,1947: 7).
47
Por lo que considera que las nuevas generaciones se encarguen de continuar con este inicio
que él dejó; pero hasta el momento no se ha conocido algún autor que continúe con este
proyecto.
IV) Como conferencista con instituciones culturales nacionales o extranjeras, donde en algunas
ocasiones tenía que preparar discursos o conferencias basados en trabajos anteriores o
nuevos, según la intencionalidad o temática del evento al que asistiría, que usualmente Silva
Herzog proponía los temas a los organizadores, o a quienes lo invitaban con antelación al
compromiso, esta actividad se incrementa sobretodo al ser designado como miembro del
Colegio Nacional, en estos trabajos exponía los sucesos económicos e históricos, haciendo
referencia a su importancia o vigencia actual, mediante reflexiones de tipo moralista o
normativo. Algunos de estos trabajos eran posteriormente publicados como artículos, o folletos,
o pequeños volúmenes.
La otra forma de clasificar el motivo que lo originó a realizar sus investigaciones es:
A) Por haber participado o ser parte de un determinado suceso o momento histórico, como fue:
La Revolución Mexicana, momento histórico que a él le tocó vivir, primeramente como testigo y
posteriormente como uno de sus narradores, debido a su contacto con el periodismo y con
algunos de los protagonistas de la lucha armada como fue Eulalio Gutiérrez, en 1914 es
enviado como corresponsal del diario Redención a la Convención de Aguascalientes, en el caso
del artículo sobre la convención a principios de 1916, es uno de sus primeros trabajos del que
hay testimonio, ya que de los anteriores sólo se cuenta con referencias indirectas; donde su
autor se preocupa por describir los hechos y apegarse lo más posible a la realidad, será un
rasgo característico que tendrá a lo largo de su obra, prueba de ello son los documentos que
sustentan sus investigaciones de tipo histórico, como también los trabajos económico-
48
estadísticos, artículos, ensayos, discursos, etc. donde su preocupación principal, es decir la
“verdad”, tratar de llegar al fondo de las cosas (Naufal,1996).
De esta experiencia Silva Herzog escribe varias obras,34 que van de la descripción de los
sucesos, su análisis e importancia en su impacto de la cuestión actual, así como una crítica a la
misma, e incluso hace aportaciones u observaciones interesantes para entender a este suceso
histórico.
Yo he dividido la revolución mexicana en tres etapas: la maderista (duró seis meses) donde
predomina un pensamiento político, pero que ya se empieza a manifestar el pensamiento
social, la constitucionalista y la de la lucha de las facciones (de marzo de 1913 a fines de
1915) (Silva,1986:33; Wilkie & Monzón, 1995:310).
En las revoluciones, cuando son de verdad, se mezclan el bien y el mal, los ideales y el
crimen; son algo así como un torbellino, como un viento huracanado que derriba lo que está
en pie y suele levantar lo más bajo y aun la basura de los muladares; destruye, transforma,
después construye y crea formas nuevas de convivencia social, las revoluciones son
necesarias en determinados momentos históricos, son el único medio para marchar hacia
delante y abrir las puertas del porvenir. El hecho que tiene algún interés es que generales
improvisados y ejércitos improvisados, en su mayoría campesinos, vencieron a soldados
profesionales mandados por generales de academia. (Wilkie & Monzón,1969:609).
En el mes de septiembre de 1943 publicó un ensayo denominado “La revolución mexicana en
crisis” que inevitable provocó la crítica acerba de algunos de los logreros de la revolución, en
34 La revolución mexicana en crisis de 1944, Un balance de la revolución mexicana de 1945, Un ensayo sobre la revolución mexicana de 1946, Breve historia de la revolución mexicana en 2 volúmenes de 1960 (obra que se tradujo al francés “La Revolution Mexicaine” en 1968 e italiano “Storia della rivoluzione Messicana” en 1969), Trayectoria ideológica de la Revolución Mexicana de 1963, México a cincuenta años de su revolución de 1964, Trayectoria ideológica de la Revolución Mexicana. 1910-1917, y otros ensayos de 1973, Cuatro juicios sobre la Revolución Mexicana de 1981 (Padilla,1973).
49
una parte de dicho ensayo, al referirse a los niveles de vida de las grandes masas trabajadoras,
se plantea:
Ahora bien, aquí se impone una pregunta fundamental. Después de la lucha revolucionaria y de
la acción de los gobiernos revolucionarios ¿se ha logrado mejorar las condiciones de vida del
pueblo mexicano? En nuestra opinión la respuesta es tímidamente afirmativa. Algo se ha
hecho, pero no mucho de lo que hubiera podido hacerse. No se ignoran las dificultades del
problema, no se ignora que no es tarea fácil en unos cuantos años llevar la abundancia a un
pueblo secularmente explotado, andrajoso y hambriento. El nivel de vida del obrero calificado
que trabaja en las grandes industrias se ha elevado un poco, en términos generales; se ha
elevado un poco también la economía del campesino en algunas zonas agrícolas; empero, un
número considerable de habitantes de las ciudades y de los campos, que tal vez forman
mayoría no han aumentado su salario real, no han participado de los beneficios de la obra
revolucionaria. En algunas regiones apartadas hay núcleos de población que viven ahora como
vivieron sus antepasados hace 50, 100 ó 300 años, sin nutrición apropiada, sin cultura y sin fe
en los gobernantes. No se ha hecho lo que se debía y pudo haberse hecho por falta de
probidad, de patriotismo, y por sobra de codicia de no pocos de los encargados de la cosa
pública, desde muy arriba hasta muy abajo, desde la ciudad de México y las capitales de los
Estados, hasta el más pequeño municipio o centro ejidal.35 (Silva,1964:460-461).
En su artículo “México a cincuenta años de su revolución” de 1964, escribe una tesis sobre su
concepción del socialismo democrático, de cómo debe darse esta transición de un Estado con
mayor intervención en la vida económica, para llegar a un capitalismo de Estado con apoyo
popular no fascista, para después a un socialismo democrático realizado en nuestra propio
molde, sin imitar otros moldes (como el soviético o el polaco), es decir uno que esté en
conformidad con nuestra historia, nuestra geografía, nuestra idiosincrasia y de conformidad con
nuestros anhelos y sueños de superación. (Wilkie & Monzón,1995).
35 “La revolución mexicana en crisis” publicado en Cuadernos Americanos de septiembre-octubre de 1943.
50
Sus experiencias en la Unión Soviética como delegado en 1929, donde expone sus
observaciones e hipótesis que hizó al sistema económico socialista implantado en la Unión
Soviética, Soto concluye diciendo de la obra de Aspectos económicos de la Unión Soviética:
Silva Herzog ha sido un ejemplar testigo, Relata lo que pudo recoger en su pensamiento de lo
mucho que vio. Lo expone bien. Hay en él, como dijimos, la suficiente dosis de honradez para
ser creído. Es hombre de nuevas tendencias. Y su rápida síntesis de los diversos aspectos
económicos de la Unión Soviética, que nos presenta en estas páginas, como relación de cosa
observada, como clara exposición de algo visto atentamente, con deseo de conocerlo.
(Silva,1992:25).
En su momento la prensa se ocupó del libro como de las conferencias, que se publicaron en
artículos periodísticos sobre la propuesta soviética y sus impresiones: “La Rusia de los soviets”,
“Impresiones sobre Rusia”, “La Rusia de Silva Herzog” en el periódico El Nacional del 20 y 27
de mayo como del 16 de octubre del mismo año. (Naufal,1996); Pero también escribe otro libro
De lo dicho y de lo escrito 1928-1930: Un mal momento en las relaciones México-soviéticas de
1977 en edición privada fuera de comercio, amplía su experiencia como embajador.
Que el presidente de la República, licenciado Emilio Portes Gil […] Me dijo que deseaba que
el jefe de nuestra misión en Moscú fuera un economista para que le informara con
conocimiento de causa y en detalle al gobierno de México lo que realmente estaba
sucediendo en aquella lejana e importantísima nación. (Enríquez,1992:656).
Hay un artículo “La Unión Soviética y el capitalismo” que Padilla (1973) no precisa con exactitud
la fecha de publicación ni en dónde fue impreso, da como dato que en el periódico “El Nacional”
en 1932, como un capítulo del libro El Libro y el Pueblo de 1933 donde Silva Herzog escribe
“Rusia y México”
51
En la expropiación petrolera de la cual formó parte importante como analista, estudioso y
dictaminador del conflicto petrolero, le sirvió de base para publicar diversos trabajos como: “El
petróleo de México” de 1940 donde no aparece el nombre de Silva Herzog, en su lugar aparece
como autor el Gobierno de México; “Petróleo Mexicano. Historia de un problema” de 1941,
Mexico’s Oil. A compilation of official documents in the conflict of economic order in the
petroleum industry, with an introduction summarizing its causes and consequences también
aparece como autor Government of Mexico de 1940, La expropiación del petróleo en México de
1958, México y su petróleo. Una lección para América de 1959, Historia de la Expropiación de
las empresas petroleras de 1964 y La expropiación del petróleo 1936-1938. Álbum fotográfico
de 1981 contiene textos de Silva Herzog y fotografías de Miguel V. Casasola.
Y finalmente sus anécdotas que involucra su vida personal con los sucesos históricos del
momento en que los describe. Jesús Silva Herzog entrelaza sistemáticamente su vida personal
con la historia de México en el siglo XX en varias de sus obras como Mis trabajos y los años en
2 volúmenes de 1970 y 1971, Una vida en la vida de México de 1972 y Mis últimas andanzas
1947-1972 de 1973, en las cuales ha escrito parcialmente sus actividades públicas como
académicas, Jesús Silva Herzog es uno de los pocos mexicanos que han redactado sus
memorias (debido a que creyó en el decisivo papel que el individuo tiene en la historia); en una
carta fechada el 2 de marzo de 1971 dirigida al profesor Noel Salomon, Silva Herzog le envía su
obra, y le plantea de lo que se trata:
Son páginas autobiográficas y de historia mexicana, escritas con absoluta sinceridad y que
reflejan lo que pienso de hechos históricos en que me tocó intervenir, a la vez que opiniones
sobre personajes y personajillos a quienes traté a lo largo de mi vida, Es una edición de 300
ejemplares fuera de comercio para familiares y amigos a quienes estimo y que pienso que
quizás me tengan alguna estimación, el segundo tomo lo estoy terminando y creo se lo enviaré
allá por el mes de julio. Ahora bien […] me gustaría mucho que me escribiera dándome su
52
impresión con toda franqueza. Ello me será de inmensa utilidad para normar mi criterio y
resolver si alguna vez, tomando en consideración las observaciones que reciba, lo doy a la luz
pública dentro de uno o dos años con supresiones, adiciones y correcciones.
(Cardiel,1981:347).
B) Por la curiosidad intelectual que le despertaron ciertos temas, lo que le obliga a investigar e
incluso a consultar a especialistas en las materias de su interés, con el fin de poderlos entender
de mejor manera, exponiéndolos al lector como una contribución para que él genere su propia
conclusión, es decir, trabajos descriptivos con ciertas predicciones o reflexiones del autor, sin
embargo algunos de estos trabajos no vieron la luz pública, quedándose en su archivo
personal.36
Las formas en cómo llevaba a efecto sus investigaciones, se puede dividir en 2 periodos: El
primer periodo es un investigador autosuficiente, que abarcaría desde que comenzó a escribir
en el periódico potosino durante la revolución en 1914 hasta que pierde totalmente la vista en
1948, de las obras que consultaba subrayaba las partes más importantes o las ideas
principales, que posteriormente le ayudarían a plantear el problema, tratando de entender las
causas que lo originaron o provocaron, para después proponer una solución o recomendación;
mientras que el segundo periodo es un investigador dependiente, empieza desde que perdió la
vista en 1949 hasta 1985 momento de su fallecimiento, él maestro Silva Herzog mencionaba al
respecto “La cultura me costo un ojo de la cara”, en la recaída de su problema visual, durante la
convalecencia le leían las obras de Justo Sierra, aquí adecua su modo de efectuar la
investigación, cambiando de ocupar sus propios medios al de utilizar prestados otros ojos y
36 “Ideas sobre la riqueza en la Biblia” consta de 9 páginas escrito en 1956; “La concentración industrial” probablemente escrito entre 1962 o 1963 de 16 páginas; “Reflexiones al comenzar 1963” de 9 páginas; “La Revolución Mexicana no fue una revolución burguesa” de 5 páginas en 1963; “México independiente dentro de un piñón” de 17 páginas en 1964; todos ellos trabajos inéditos encontrados en el archivo del autor. (Padilla,1973).
53
manos para continuar con su labor intelectual. Él mencionó que su principal colaboradora fue su
segunda esposa Esther Rojas.
Esta situación al tener otra persona que le leía, da la oportunidad de establecerse una
retroalimentación y exposición de ideas sobre lo leído, que antes no ocurría porque esta labor la
realizaba sólo, esto pudo haber apoyado al maestro a que en su narrativa fuese más clara y
menos rebuscada de tecnicismos, para que quien lo leyera no importando su situación cultural
pudiera entenderlo sin dificultad; el maestro les indicaba a sus lectores que partes del texto
marcar, si una idea no le quedaba clara aprovechaba las constantes visitas de sus amigos y en
la plática introducía los temas e inquietudes que tenía, por lo que su interlocutor le
proporcionaba lo que sabía del tema y sus puntos de vista, cuando esto lo permitía; en otras
ocasiones pedía a quien estaba leyéndole que se lo releyera, pero también le solicitaba su
parecer o entender sobre esa parte del texto. Un periodista le preguntó en enero de 1959 sobre
la angustiosa limitación de sus ojos:
¿Cómo es posible que este hombre, que prácticamente no ve, desempeñe tareas en las que
son tan necesarias los ojos? […] Don Jesús lo explica con naturalidad: Porque yo amigo, tengo
muchos ojos. En eso soy afortunado. [Pregunta el periodista] ¿A quién pertenecen esos ojos?
[Contesta Silva Herzog] Desde hace tres años, los lunes, miércoles y viernes, trabajo en un
libro: El agrarismo mexicano y la reforma agraria. Durante dos años trabajé con los ojos de mi
hijo Claudio; y en el último año con los de su novia, Carmen Ruiz […] Durante cinco días a la
semana, y por sus tardes, en que tengo clases o lecturas, me ayuda mi secretario, en la
Escuela de Economía. Los martes, jueves y sábados por la mañana, que vengo a Cuadernos
Americanos, son los ojos de las señoritas que trabajan aquí conmigo. Por las noches, después
de la cena son los ojos de mi esposa Esther. [Pregunta el periodista] ¿Y es mucho lo que tiene
que leer en Cuadernos? [Contesta Silva Herzog] Para un número de 300 páginas debo leer – o
que me lean, claro- por lo menos 600. (Silva,1973:100).
54
La manera en como exponía sus trabajos de investigación, los presentaba escritos (mayoría de
sus trabajos escritos se pueden entender como ensayos sobre diversos temas) u orales (en
cambio los orales la técnica que más le agradaba o se sentía cómodo era la conferencia); Silva
Herzog comenta sobre su éxito dando conferencias:
Cabe decir que fue uno de mis mayores éxitos de profesor conferenciante. A los jóvenes les
gusta e interesa que se les diga algo nuevo, que no habían pensando, que se haga crítica
constructiva y honesta, fuera de los esquemas manidos, estereotipados, convencionales de los
profesorcillos que no desean comprometerse. […] Los que hemos dedicado nuestra vida a la
enseñanza en clases o conferencias sabemos bien que uno no es siempre el mismo,
dependiendo del momento psicológico y aun fisiológico en que se expone un tema dado. En
unas ocasiones se sube y en otras se baja, a veces se está inspirado y otras obnubilado o algo
semejante. (Silva,1973:51,218).
Formó parte o conformo redes de intelectuales, con quienes tenía constantemente intercambio
de opiniones o sugerencias hacia sus trabajos intelectuales, siendo una de las más importantes
la que realizó entorno a Cuadernos Americanos. Lo que le ayuda a desarrollar esa tolerancia
hacia quienes no estaban de acuerdo con él o con sus ideas, como también a reconocer
cuando se ha equivocado en sus planteamientos.
55
Capítulo II. Jesús Silva Herzog: Apuntes biográficos 2.1 El origen e infancia
Jesús Silva Herzog nació el 14 de noviembre de 1892 en la ciudad de San Luis Potosí, S.L.P.37
Hijo menor del matrimonio de Joaquín Silva Servín y Estefanía Herzog. Tuvo 2 hermanos,
Francisco y Sofía. Vivió prácticamente en esta ciudad hasta sus 25 años de edad. Sólo tuvo dos
cambios de residencia, pero de poca estancia, ya que después de un tiempo siempre regresaba
a su ciudad natal.38 Sus abuelos paternos, Francisco Silva Monedero y Josefina Servín de la
Mora pertenecían al círculo de familias católicas opulentas de aquella ciudad, situación que le
permitió a la familia Silva disfrutar de una vida cómoda hasta la muerte del abuelo.
Jesús Silva es considerado como un miembro de la llamada generación del 15,39 debido a que
nace dentro del quinquenio entre 1891 y 1905.40 Dentro de esta minoría rectora de la sociedad
37 Esta fecha es la que siempre reconoció Silva Herzog como la de su nacimiento; aunque también se maneja como fecha de su nacimiento la del 19 de febrero de 1893, según el acta del libro de nacimiento del Registro Civil de la Ciudad de San Luis Potosí, el cual se encuentra en custodia en el Archivo Histórico del Estado de San Luis Potosí. (García, 1993). 38 En 1898 radica en Morelia en donde realiza su primera comunión; posteriormente viaja la familia de Jesús Silva a Texas, Estados Unidos a pasar unos meses con su abuela materna, quien era médica; de regreso a México y a SLP; para 1901 cambia de residencia a Rioverde, SLP, donde conoce a sus parientes los Gallardo, uno de sus primos es con quien entabla una sólida amistad Salvador Gallardo, además de la separación física con su padre quien salió de cacería con unos amigos y ya no regresa. (Silva, 1970). 39 A si la llamó Manuel Gómez Morín en su ensayo “1915” publicado en 1927, mientras que Wigberto Jiménez Moreno la llamó la generación epirrevolucionaria, pero también se le conoce como generación agrarista ó generación de Lázaro Cárdenas; la cual produjo una minoría rectora de no menos tres centenares de individuos quienes por su sabiduría, espíritu laborioso, cordura y juventud contrastan con los rústicos, ignorantes y destructivos revolucionarios. Esta generación nace con el cine, la radio, la quimioterapia, el automóvil, el avión y la ley de la relatividad en la llamada “belle époque” europea y la paz porfiriana mexicana. (González,1979). También son considerados como miembros de esta generación Vicente Lombardo Toledano, Narciso Bassols, Cosío Villegas, Ignacio Chávez, Gómez Morín, etc. (Krauze, 1991). 40 “Es difícil definir lo que sea una generación, algunos pretenden que lo es todo grupo de hombres contemporáneos; […] Otros creen que un acervo común de ideas, una forma peculiar de reacción, una obra colectiva, determinan la existencia de una generación, pero hombres separados por muchos años, pueden formar generación, y la diversidad de estilos, las diferencias ideológicas, la falta de empresa común, son frecuentes en hombres de una generación, pero la esencia de la generación debe buscarse en una íntima vinculación establecida entre varios hombres por la existencia en todos ellos, de un mismo impulso inefable, de una inquietud peculiar, de ciertas maneras profundas de entender, valorizar la vida y plantear sus problemas (Gómez, 1973:26).
56
mexicana existió un alto porcentaje de hijos de extranjeros radicados en el país. La mayoría de
la generación del 15 proviene de la clase media, situación que propicia el desconocimiento de
las carencias y necesidades de los campesinos y de los obreros en una primera instancia, pero
no por ello están ajenos a las mismas (González, 1979).
Cuando Jesús Silva tenía tres días de nacido sufrió una grave infección en los ojos. El aspecto
era parecido a una supuración, la enfermedad que habría de padecer fue oftalmia purulenta, los
médicos la trataron con nitrato de plata. La enfermedad se expandió con tal rapidez que un mes
después de su nacimiento se había quedado completamente ciego. Un tío de profesión médico
se hizo cargo de su caso, logrando después de un largo tratamiento, que su sobrino alcanzara
una agudeza visual del 15 por ciento en el ojo izquierdo y de 5 por ciento en el derecho. Con el
tiempo Jesús Silva tuvo mejor visibilidad en el ojo izquierdo que en el derecho. Las secuelas de
esta enfermedad estuvieron presentes en él por el resto de su vida. (Guillén, 1980; González,
1979; Naufal,1996; Silva,1993).
Durante el tratamiento de la enfermedad oftálmica, sus familiares aseguraban que él no podría
asistir a la escuela a causa de su deficiencia visual. El mismo Jesús Silva comenta en sus
memorias:
Pronto supe que yo no era un niño como todos. No veía bien. Mi madre, mis abuelos, mis
hermanos, me lo decían diariamente y me sentía un poco triste. A los 8 años [hacia 1900] aún
no conocía ni las letras ni los números. Mis amigos de la misma edad ya sabían leer y escribir
y a veces me trataban con aires de superioridad. Cuando algún niño se burlaba de mí porque
no veía bien, yo reaccionaba violentamente y me arrojaba sobre él a puñetazos. (Silva,1986:
5; Silva,1970:13; Silva,1993:17).
57
Ante esta situación, Jesús Silva41 se sintió en desventaja ante los demás niños de su edad.
Quizá, esta fue la razón que lo motivó a aprender las letras y los números con el apoyo de sus
familiares más cercanos. Su método consistía en preguntarles a sus parientes la fecha del día,
la cual consultaba en un calendario, posteriormente dibujaba sobre un papel tanto las letras
como los números. De esta forma aprendió el alfabeto así como la numeración. Tiempo
después, con la ayuda de unos cubos de madera que tenían en sus caras las letras y que
habían sido un regalo de su madre, formaba palabras sencillas. En unos meses, su familia se
dio cuenta que ya sabía leer y escribir un poco. Al final sus padres aceptaron que asistiera a
tomar clases en una escuela privada de su ciudad natal (Silva,1986).
En 1901, cuando tenía 9 años de edad, inició el primer año de primaria. Su madre hacía
recomendaciones a la maestra para que no se le exigiera demasiado. Jesús Silva recuerda su
ingreso al colegio:
Muy pronto la profesora se le olvidó de la recomendación y me trató lo mismo que a los otros
alumnos. Eso me gustó mucho y fue un estímulo. Desde entonces tuve un gran deseo de
saber […] leía y escribía con el libro o el papel muy cerca del ojo izquierdo, de tal manera que
con frecuencia me manchaba la nariz […] ponía atención a las explicaciones de la profesora,
aun cuando en ocasiones sin éxito porque no podía ver lo escrito en el pizarrón.
(Silva,1993:20).
Al concluir su primer año escolar, sus abuelos cambiaron de residencia a una pequeña
población en Ríoverde, S.L.P. Allí radicó la familia de Jesús Silva Herzog por algún tiempo. En
esta localidad él y su hermano fueron inscritos en la escuela de un cura donde acudían los hijos
de familias privilegiadas de la zona. En esta etapa de su vida, Jesús Silva conoce la marcada
41 Comenta Guillén (1969) aunque Jesús Silva Herzog no podía participar en la mayoría de los deportes por su problema visual, encontró en la natación, el ejercicio físico que requería para su desarrollo y fortaleza, ya que al contar con salud proporciona seguridad y ayuda a entender mejor la existencia.
58
distinción de clases debido al modo de vestir de sus compañeros. Para entonces, su abuelo
comenzó a tener problemas de salud, lo que obligó a la familia a regresar nuevamente a la
ciudad de San Luis Potosí.
En 1902, su abuelo inscribió a Jesús y a su hermano en la primaria del Seminario de San Luis
Potosí.42 Nuevamente su mamá dio recomendaciones a la maestra sobre el rendimiento y
aprendizaje de su hijo menor. Como en la ocasión anterior, el maestro desatendió sus consejos:
Durante varias semanas no me hizo caso el profesor […] una tarde preguntó la lección a mis
compañeros y ninguno supo darla. Entonces me dijo a ver si tú, Silva. Me puse de pie y di la
lección. Desde entonces se le olvidó la recomendación y me trató como a todos mis
condiscípulos. (Silva,1986:13).
En esta escuela Jesús Silva realizó estudios de segundo y tercer grado de primaria; corría el
año de 1903. Para 1905, concluía el sexto grado. Así, a la edad de 13 años terminaba su
instrucción primaria.43 Desde esta edad comenzó a escribir versos, pero a nadie le comentó que
lo hiciera. En sus memorias él refiere que no recuerda como fue que inició con esta actividad.
Tal vez fue “su necesidad de exteriorizar sus ideas y sentimientos”. Años después, durante una
celebración familiar declamó un poema que le hizo a su madre con motivo de su cumpleaños. A
partir de esa fecha y ante el asombro de la familia, lo catalogaron como poeta (Silva,1965b).
42 Para entonces el Obispo de San Luis era Don Ignacio Montes de Oca y Obregón (1840-1921) quien vuelve a ocuparse del Seminario y cambia los planes de estudio, retomando la lectura de los clásicos griegos y latinos (Naufal,1996); Silva (1986) refiere al Obispo como un gran helenista que tradujo del griego en versos al castellano las Odas de Píndaro y a los bucólicos griegos, entre los árcades romanos su nombre fue Ipandro Acaico, fue además el campellán que acompañó a la comisión mexicana a ofrecerle Fernando Maximiliano de Habsburgo el trono de México. 43 Obtuvo reconocimientos por su desempeño académico, que eran entregados en un acto solemne por el obispo Don Ignacio Montes de Oca y Obregón. Silva Herzog reconoce que sus éxitos se debían a que le gustaba mucho el estudio, (Silva,1970).
59
Debido a que la madre de Jesús deseaba que él se convirtiera en sacerdote, éste continuó sus
estudios en el seminario de San Luis Potosí, al terminar su instrucción primaria. (Wilkie &
Monzón, 1995). Pronto inició sus estudios de secundaria donde aparte de las materias que
exigía el programa oficial de gramática castellana, aritmética, moral, urbanidad y elementos de
historia y geografía, él adquirió conocimientos básicos de gramática latina sobre los clásicos
griegos y latinos en sus clases de poética y retórica. (Naufal, 1996). A la edad de 14 años Jesús
Silva se ve obligado a interrumpir sus estudios de secundaria por una recaída en su
enfermedad visual. La gran cantidad de tiempo que empleaba en sus lecturas era el motivo de
su recaída. Para entonces él leía poniendo el libro muy cerca de su ojo izquierdo, y el ojo
derecho casi no lo ocupaba para esta actividad. Ante esta recaída, el médico le prohibió fijar la
vista, razón por la cual se vio obligado a suspender temporalmente sus estudios.
Entre los quince y diecisiete años, Jesús Silva fue sometido a dos intervenciones quirúrgicas,
una en cada ojo. Como resultado de estas cirugías alcanzó una agudeza visual entre 20 y un
25%;44 sin embargo, se le prohibió leer ya que esto podría ocasionarle una ceguera definitiva.
Naufal (2001) argumenta que estos problemas visuales afectaron el avance normal en los
estudios de Jesús, y por ende, se obstaculizó también su formación profesional. Entre los
estudiantes del seminario, pertenecientes a familias acomodadas, era común terminar sus
estudios de secundaria y continuar con los estudios profesionales. Esta situación retrasó los
estudios de Jesús Silva, sin embargo, tiempo después él los retomaría de manera autodidacta.
Al abandonar los estudios, su madre lo obligó a buscar empleo (Wilkie & Monzón, 1969). En
1907 obtuvo su primer trabajo como ayudante de bodeguero en una fábrica de muebles. En
este lugar laboró por espacio de 4 ó 5 meses. Hacia 1908 Jesús Silva vivió un mes en la
44 Esta es la visión que tendría desde 1909 hasta 1946 (Silva, 1993).
60
Hacienda de la Angostura (propiedad de los Espinosa y Cuevas, uno de ellos era el gobernador
del Estado). Allí, su hermano Francisco se desempeñaba como mayordomo. Entre los
privilegios de este cargo, estaba que el hacendado le proporcionaba tierras para sembrar, cuya
cosecha se dividía a la mitad. Durante su estancia en este lugar y, por las actividades que
Jesús Silva desempeñaba con su hermano, pudo observar la situación en que vivían los
hacendados, los peones y los curas. Muy pronto, descubrió las tretas, tanto de la tienda de raya
como del cura, para tener tranquilos a los peones. Al parecer, este hecho marcó el inicio de su
interés por analizar la problemática social y económica de los mexicanos.
Dos años después, Jesús Silva laboró como cobrador de contribuciones en la Tesorería del
Estado que en aquellos años se conocían como aduanas. Se desempeñó por 3 años en este
puesto. Su horario era de 8 de la mañana a las 13 horas. Al finalizar sus labores diarias Jesús
Silva entrevistaba a los trabajadores de la Compañía Metalúrgica Mexicana. Tenía cierta
curiosidad por saber lo que les ocurría en su trabajo cuando caían enfermos como resultado de
la exposición a los gases de la mina. Según sus investigaciones, éstos eran despedidos sin
otorgarles ninguna indemnización. Para Silva Herzog era importante contrastar lo que se decía
en la comunidad con lo que en realidad les sucedía.
Lentamente, sus dotes de investigador social empezaron a emerger en su mente. Este hecho,
lo insta a revisar y evaluar diversas fuentes primarias con la finalidad de corroborar la
información que había obtenido anteriormente de otras fuentes secundarias. Los resultados de
su investigación le causaron una gran indignación. Las cuestiones sociales que dominaban al
país en aquellos años fueron el motivo para que él escribiera, varios años después, sus
primeros artículos de carácter político; éstos serían publicados en el diario El Demócrata
(Naufal,1996).
61
El magnífico sueldo que Jesús Silva percibía como cobrador de la Tesorería le permitía vestirse,
comprar libros y otros menesteres (Silva,1993). También le permitió continuar con una de sus
actividades favoritas: la lectura. A este pasatiempo le dedicaba entre 5 y 7 horas diariamente.
Pese a las recomendaciones médicas y familiares de no forzar su vista, él hacía caso omiso y
continuaba leyendo diversos temas de interés personal.
En 1906 Jesús Silva decidió que era momento de continuar con sus estudios, aunque fuera de
manera autodidacta. Consiguió el plan de estudios preparatoriano45 del Instituto Científico y
Literario de San Luis Potosí.46 Cinco años después, en 1911, Jesús Silva concluye su
preparatoria47 (Silva,1986). Durante este mismo tiempo (1906-1912) él se interesó en las obras
de escritores como León Tolstoi (quien sufrió la injusticia social que reflejó en su obra, de él
Silva Herzog retoma la obsesión de la justicia social), Proudhon (quien realizó escritos del
pensamiento socialista, cuyos principales puntos fueron la propiedad y el derecho natural);
Víctor Hugo,48 a los historiadores Niceto de Zamacois, Gaston Maspero, Víctor Duruy, Ernest
Renán y Jules Michelet, como a los poetas y novelistas más importantes de la época. Poco a
poco, estos autores acercan a Silva Herzog al conocimiento de diversos campos del
conocimiento como la historia, la literatura universal y la profundización en los problemas
sociales.49
45 El cual comprendía entre otras las materias de Matemáticas, Física, Química, Etimologías grecolatinas, Botánica, Historia, Literatura, etc. (Silva,1970). 46 El Instituto fue fundado en 1859, se sumó a la nueva cultura laica, plural y positivista que iniciará Gabino Barrera. (Naufal,1996). 47 “Ya que la preparatoria en aquellos tiempos también incluía los estudios de secundaria es por ello que eran 5 años completos de estudio” (Wilkie & Monzon,1969:30). “Me gradué de bachiller ante mí en el cuarto de soltero de la casa materna” (Silva,1970:23). 48 “Por aquellos años los que más influyeron en mi pensamiento fueron León Tolstoi y Víctor Hugo, de quienes leí buena parte de sus obras” (Silva,1986:18); son literarios con conciencia social.
62
Yo era en esa época lo que podía llamarse un cristiano con anhelos revolucionarios. Por allí
comenzó mi inquietud intelectual y mi preocupación por los grandes problemas del hombre; y
por supuesto, empezaron a influir en mí todas las ideas más o menos vagas, más o menos
nebulosas de la revolución mexicana en esa etapa” (Wilkie & Monzón,1969:608).
En aquellos años Jesús Silva tuvo una crisis religiosa. Meditaba durante varias semanas,
razonando con la lógica y escudriñando en su conciencia. En sus pensamientos influyeron las
conductas reprobables de algunos clérigos que conoció en el seminario, así como la del cura de
la Hacienda, y todas aquellas ideas sociales de los autores que había estudiado. Después de
su análisis él dejó de creer en los dogmas y enseñanzas religiosas; sin embargo no renunció a
la idea de Dios. Con el tiempo se convirtió en un agnóstico. (Naufal,1996; Silva,1970).
Desde el punto de vista intelectual la personalidad de Jesús Silva también sufrió cambios. En el
año de 1911 estableció, junto con otros jóvenes de su época,50 el Ateneo Manuel José Othón.
El líder de la agrupación fue el Lic. Ambrosio Ramírez.51 Una vez a la semana, el grupo se
reunía para discutir sus trabajos literarios. Aunque fue corta la existencia del Ateneo, sirvió a
sus integrantes para que no descuidaran el estudio de la literatura, a pesar de sus profesiones y
otros intereses personales. (Wilkie & Monzón, 1969).
En cuestión política, Silva Herzog descubrió, entre 1908 y 1909, las ideas anarquistas y
liberales de la época. En 1910, a sus 17 años de edad, leía los periódicos de la oposición
49 A sus 19 años Silva Herzog se recordaba como un muchacho medio culto para su edad y que iba venciendo su adversidad, pero no todo era estudio, siempre se consideró una persona normal que realizaba las actividades de un joven de su edad (Silva,1993). 50 Entre estos jóvenes ateneístas estaban: Mariano Alcocer, Salvador Gallardo y Romeo Manrique (Wilkie & Monzón, 1969). 51 Ambrosio Ramírez (1859-1913) maestro de latín en el Seminario, abogado de profesión, se dio a conocer como poeta, humanista, traductor de Quinto Horacio e hizo numerosos estudios sobre los clásicos, escribió para diversos periódicos y revistas como “El Estandarte” y “El Tiempo Ilustrado." (Naufal,1996).
63
porfirista, como el Diario del Hogar52 y de vez en cuando, ciertos artículos del periódico
Regeneración.53 Sus lecturas y experiencias laborales anteriores crearon en Silva Herzog cierto
rechazo a la ideología porfirista. Con el tiempo se interesó cada vez más en la cuestión política
de México, aunque no podía figurar en algún partido debido a su corta edad. Para entonces, él
se sentía maderista. Al identificarse con el ideal revolucionario Silva Herzog participó en el
movimiento armado de la Revolución Mexicana. (Silva,1970).
2.2 Los Estudios efectuados en Estados Unidos
Por órdenes familiares, a la edad de 19 años de edad, Silva Herzog fue enviado a estudiar a
Nueva York. El motivo era perfeccionar el poco inglés que sabía y así, continuar sus estudios
profesionales. El 16 de mayo de 1912 viajó en ferrocarril rumbo a Estados Unidos. Para julio del
mismo año54 ya se encontraba en Nueva York. Se inscribió en la escuela de comercio Pain Up
Town Business School.55 Asistió sólo un mes, abandonándola por no gustarle. Decidió
permanecer en Nueva York. Durante un año y medio asistió a tomar clases de inglés en un
horario de las 8 a las 10 de la noche en las escuelas establecidas para enseñar el idioma a los
inmigrantes (Silva, 1979). El resto del día lo empleaba haciendo visitas a la New York Public
52 Cuyo director fue Filomeno Mata, quien en varias ocasiones estuvo en la cárcel por sus críticas al régimen porfirista. 53 Que se publicaba en Los Ángeles, California por Ricardo Flores Magón (Silva,1993), “Alguna vez me prestaban clandestinamente unos peluqueros de la ciudad de San Luis Potosí. Había leído uno dos o tres números sueltos” (Wilkie & Monzón,1995:311). 54 Vive un tiempo con su amigo Rafael Rodríguez en el mismo cuarto, después se cambia a una casa de huéspedes en la Avenida de San Nicolás número 888, muy cerca de la calle 155; recibía de México 50 dólares al mes, la estancia y las 3 comidas le cobraban 6 dólares a la semana; es decir 32 dólares sobrándole 18 dólares. La pasó bien mientras no se retrasarán el dinero por motivo de la revolución, que en ocasiones se veía en serios a prietos económicos por este motivo. (Silva,1993; Wilkie & Monzón,1995). 55 “Había una escuela en la Calle 58 ó 59 del lado oeste de Nueva York la “Paine Uptown Business School” cuya colegiatura costaba 5 dólares mensuales […] Y lo que hice fue decir…que iba a la escuela de comercio; pero yo no iba a la escuela de comercio sino a la gran Biblioteca de la Quinta Avenida y Calle 42” (Wilkie & Monzón, 1969:606).
64
Library y a algunas otras bibliotecas del barrio. Gracias al sistema de préstamo de libros, él
podía leer en su cuarto; así incrementaba su cultura leyendo en español, inglés y francés. El
dominio de estos idiomas le ayudaría posteriormente en su actividad como investigador. Sus
conocimientos de traducción en varios idiomas le permitieron revisar diversas publicaciones.
Poco a poco se familiarizaría con ciertas publicaciones extranjeras. Sus autores preferidos eran
Michelet, Hume (quien realiza algunos estudios sobre impuestos y comercio) y Altamira
(historiador, conociendo el pasado de los pueblos europeos, de donde en cierta medida
proviene nuestra cultura). En su estancia en Estados Unidos encuentra inspiración en la obra
del argentino Manuel Ugarte El porvenir de la América Latina.56 De este autor retoma ideas
sobre el antiimperialismo estadounidense, que tiempo después desarrollaría y mostraría en
algunas de sus obras. También leía a los más importantes poetas de la lengua inglesa.
Generalmente, su lectura la complementaba con la visita a diferentes museos en la ciudad de
Nueva York.
Durante su estancia en esta ciudad, Silva Herzog manifestó su deseo de convertirse en
profesor, poeta y escritor. Se dio cuenta que debía expresarse sólo en inglés, idioma que
consiguió dominar. Pese a sus múltiples actividades él siempre se mantuvo pendiente de la
situación imperante en México, sobre todo de aquellos sucesos de sublevación que se daban
en la capital del país en contra del gobierno maderista. Fue así como se enteró del asesinato de
Madero y Pino Suárez, lo que le provocó un sentimiento de indignación durante algún tiempo.
(Silva, 1986a).
56 Ugarte en su obra establece las diferencias que distinguían a la América Latina de los Estados Unidos, y de los peligros que le acechaban de no asumir su identidad, viendo al anglosajón y al latino como antagónicos, fundamentado en el pensamiento positivista y la idea del progreso.
65
A principios de febrero de 1914 dejó Nueva York, donde vivió durante 20 meses.57 Su estancia
en esta ciudad se resume en una parte de año 1912, todo el año de 1913 y una parte de 1914.
A su regreso a México trajo consigo su aprendizaje del idioma inglés que le daría las bases para
iniciarse en la docencia; además era portador de algunos libros que en México estaban
limitados tanto por su tiraje como por el movimiento revolucionario. Debido a las lecturas que
realizó obtuvo una amplia visión del pensamiento histórico-social contemporáneo de la época.
Arribó a su ciudad natal en marzo de 1914.
2.3 Probando suerte en la capital del país
Apoyado por Manuel Dávalos Aragón (un antiguo amigo de Silva Herzog), decidieron llevar
frascos de mercurio (azogue) a Nueva York y traer medicinas a México. Realizaron dos viajes
entre 1916 y 1917. Con esta operación obtuvieron dividendos de alrededor de 4 mil dólares.
Con sus ganancias, Jesús Silva decidió editar una revista semanaria denominada Prometeo.58
Su contenido versaba sobre temas de literatura, arte y variedades. El director fue Jorge
Adalberto Vázquez.59 Jesús Silva quedó como jefe de redacción. El primer número apareció a
finales de mayo de 1917. Se editaba los sábados de cada semana hasta diciembre. Entre los
colaboradores que trascenderían después se encontraban Jorge Ferretis, Jesús Zavala y
Luciano Joublanc Rivas. Entre los autores que influyen en Jesús Silva en esta etapa se 57 De su viaje de regreso, hace una parada en Brazoria, Texas donde se queda un par de semanas con sus familiares y asistió a la boda de su abuela Sofía Herzog; pero Naufal (1996) señala que los sentimientos de soledad lo empujaron a regresar a México, el contacto con la tierra natal, la familia y los amigos le devolvieron el entusiasmo que había perdido en Nueva York. 58 El nombre lo toman del libro “Motivos de Proteo” de José Enrique Rodó publicado en 1910, esta obra invita a sus lectores a pensar sobre la vida, la moral, la naturaleza del hombre y de sus posibilidades de renovación por medio de la fuerza transformadora de las ideas, donde toma como símbolo de esta renovación la figura mitológica de Proteo, para Silva Herzog y compañeros de la revista, será el símbolo del sentir de su generación, al buscar transformar la realidad por medio del poder de la palabra y de la fuerza de las ideas antes que por la toma de las armas y el uso de la violencia. (Naufal,1996). 59 Era profesor de literatura en el Instituto Científico y Literario, tenía una tendencia hacia el modernismo (Silva,1986).
66
encuentra el poeta andaluz Francisco Villaespesa cuya influencia religiosa es innegable. La
revista fue un éxito intelectual pero un fracaso económico. Silva Herzog dejó a sus amigos a
cargo de esta agonizante empresa. Sus colaboradores editaron unos números más con lo que
se terminó el dinero y la revista en enero de 1918. (Silva, 1970).
Animados por el éxito efímero de la revista, los amigos decidieron probar suerte en la capital de
la república. El 6 de diciembre de 1917, Silva Herzog, quien a la sazón contaba con 25 años, y
Jorge Adalberto Vázquez arribaron, vía ferrocarril, a la metrópoli. A su llegada a la ciudad de
México60, Jesús Silva se frecuentaba diariamente con sus amigos y paisanos como Salvador
Gallardo, estudiante de medicina, Aurelio de Alba, estudiante de derecho, José Campero,
periodista. En sus reuniones, Jesús Silva conoció a Ramón López Velarde, Pedro de Alba,
Rafael López y Julio Torri.61
Tras varios intentos fallidos por encontrar un empleo en la capital, Silva Herzog fue contratado,
por recomendación de su amigo Jorge Campero (Schmidt,1991); como oficial segundo del
Departamento de Personal, Estadística y Archivo del Gobierno del Distrito Federal el 21 de
febrero de 1918. Tiempo después, fue ascendido a oficial primero. Su trabajo consistía en dictar
oficios al mecanógrafo Enrique de Gortari. El 1º de enero de 1919 se suprimió este
Departamento. Silva Herzog fue transferido al Departamento de Gobernación con la misma
plaza.
60 La tendencia del intelectual mexicano de ir hacia la ciudad de México, tiene como explicación que en ella se centran los rasgos más importantes de la vida social, económica y política del país, porque la mayoría de las actividades culturales se localizan en esta ciudad, por lo que funciona como un imán para atraer a los intelectuales más prestigiosos, además que la vida tanto política como intelectual se centra en la ciudad de México, no en las provincias. (Camp,1991). 61 Salvador Gallardo médico militar, escritor y senador de la República; Ramón López Velarde poeta y abogado profesor de Literatura en Altos Estudios; Pedro de Alba médico, diplomático y escritor, director de la Facultad de Filosofía y Letras; Julio Torri escritor, profesor y abogado formo parte del Ateneo de la Juventud, jefe del departamento editorial de la Universidad Nacional (Silva,1980).
67
El 10 de abril de 1919, a la edad de 26 años, Silva Herzog fue nombrado profesor de inglés de
la Escuela Normal para Maestros, en sustitución de Federico Álvarez62 por acuerdo del
presidente municipal de la ciudad de México. En el transcurso de estos 2 años, Silva Herzog
tuvo dos empleos, es decir, conservaba su empleo en el gobierno y efectuaba también, sus
clases en la Normal de Maestros. En julio de 192063 Jesús Silva renunció al Departamento de
Gobernación. En este mismo año se le nombró profesor de lenguas vivas en la Normal. Desde
julio de 1920 y hasta fines de 1923,64 Jesús Silva vivió únicamente de la impartición de sus
lecciones en escuelas oficiales, pero también dio clases de forma particular. (Naufal, 1996;
Silva,1970).
Para 1920, llegaban a México las primeras lecturas marxistas. Silva Herzog se interesó en ellas,
pues ya tenía conocimiento de varios autores socialistas en su estancia en Nueva York. Los
intelectuales jóvenes de entonces empezaron a poner atención hacia el marxismo y en especial
a lo que ocurría en la Unión Soviética.
A mediados de 1921,65 Silva Herzog se reencuentra con su ex compañero del periódico
Redención, Francisco Soto quien lo invitaba a las sesiones del Partido Nacional Agrarista
62 Archivo Histórico de la Secretaría de Educación Pública, 1919 “Fondo Dirección General de E. P. en el D. F. sección colección de personajes sobresalientes, serie Silva Herzog Jesús”, (1919) Expediente S2 / 25 folio 158. 63 El 30 de enero de 1920 contraen nupcias por lo civil y religioso con Josefina Flores, con quien tiene 11 hijos, pero 3 de ellos mueren siendo muy pequeños a causa de meningitis, otro de ellos Alfredo muere a los 15 años de septicemia virulenta, esta pérdida fue la que más le dolió y sufrió. Los demás son: Claudio, Mario, Jesús, Daniel, Magda, Yolanda y María Cristina. (Silva,1970). Después del matrimonio Silva Herzog renuncia a seguir considerándose como poeta e incluso deja de escribir artículos para publicar en revistas y suplementos literarios. (Naufal,1996). 64 En 1921 impartió un curso de literatura general en la Escuela Preparatoria Libre, que estaba anexada a la Libre de Homeopatía. (Silva, 1986a). 65 Krauze (1991) señala que la iniciación de la generación del 15 en la vida pública fue 1921, ya que llenaban los vacíos en los cuadros académicos, culturales, técnicos y políticos; aunque para Silva Herzog fue unos años antes.
68
(PNA). Allí conoció a Antonio Díaz Soto y Gama, al general Ángel Barrios, a Felipe y Octavio
Santibáñez y a otros antiguos zapatistas. Como miembro del PNA, Silva Herzog apoyó la
restitución y distribución de tierras como solución al problema del latifundismo y la
proletarización de la mano de obra campesina, creía como los demás agraristas, en el estímulo
a la pequeña propiedad agrícola como vía para el mejoramiento de la producción agraria del
país y de las condiciones de vida de la población, lo importante era destruir los latifundios,
causa de la insurrección campesina, y el reparto de la tierra entre los que la trabajaran. (Silva,
1964).
2.4 En la Facultad de Altos Estudios
Silva Herzog sintió la necesidad de ampliar sus estrategias didácticas aprovechando la apertura
de cursos libres para maestros. Se inscribió en la Facultad de Altos Estudios de la Universidad
Nacional66 en los años de 1921 a 1923. En entrevista a James Wilkie él recuerda
Entre 1920 y 1924 desde el punto de vista intelectual fueron de mucho estudio para mí. En
primer lugar me dediqué a estudiar el pensamiento y la civilización griegos. Durante esos
años y un poco antes, leí las obras más importantes para mí. En primer lugar me dediqué a
estudiar el pensamiento y civilización. Recuerdo que entonces leí la Ilíada de Homero, los
trabajos y los días de Hesíodo; leí bastante de Aristóteles; todos los Diálogos de Platón; leí a
los trágicos: Sófocles, Eurípides, Esquilo; al gran autor de comedias, el genial Aristófanes;
también a los poetas Píndaro y los bucólicos; y a los historiadores: Los nueve libros de
Herodoto y la Historia de la guerra del Peloponeso de Tucídides. Claro que también leí a
66 Debido a la necesidad de contar con una institución donde se impartieran estudios más avanzados que en las escuelas existentes, Justo Sierra ve necesario fundar una nueva escuela que también formara parte de la reciente Universidad, se le llamo Escuela Nacional de Altos Estudios la cual se inauguro el 18 de septiembre de 1910, 4 días antes de la inauguración de la Universidad Nacional de México, posteriormente Vasconcelos modificaría su estructura original; de esta Escuela se derivarían posteriormente las Facultades de Ciencias y la de Filosofía y Letras. En 1913 se funda una subsección de estudios literarios con el objeto de formar profesores de humanidades, literatura y filosofía, así como críticos e investigadores de arte y literatura. (Krauze,1976).
69
Jenofonte […] Luego me pasé a los latinos: Virgilio, Horacio, Séneca, Julio César y lo más
importante de la cultura romana. De esa manera yo fui afianzando mis conocimientos con el
estudio de los clásicos. Todo eso ha tenido una gran importancia en mi formación cultural.
También en esos años me enfrasquen en la lectura de la Biblia, un buen número de los libros
del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento. También leí a algunos de los primeros
Padres de la Iglesia: a San Agustín, a San Jerónimo, a San Basilio, a San Juan Crisóstomo, a
San Clemente de Alejandría; a los doctores de la Iglesia latina y de la Iglesia griega. (Wilkie &
Monzón,1969: 634).
En su quehacer diario como profesor y, como resultado de sus lecturas juveniles y las
explicaciones de sus maestros, Silva Herzog encontró una mayor claridad en su pensamiento,
hecho que le permitió observar nuevas perspectivas que sólo se encuentran en la discusión
académica sobre algún tema de interés.
Para entonces, Silva Herzog había leído Las grandes corrientes del pensamiento
contemporáneo y los grandes pensadores, La decadencia de Occidente, así como los 3
primeros tomos del El espectador de José Ortega y Gasset. Silva Herzog recuerda que este
autor invita al lector a no dejarse llevar por la falsedad de la política y a defender los propios
argumentos, la idea de pensar y reflexionar por sí mismo, de buscar la verdad en el propio
punto de vista, cualidades por las que con el tiempo Silva Herzog será reconocido.
Camp (2006) sostiene que los mexicanos de origen rural como fue el caso de Silva Herzog, rara
vez accedían a los círculos de elite sin un mentor. Desde su perspectiva, esto les ayudaba a
competir contra sus pares nacidos en las urbes, al mitigar de alguna manera algunas
desventajas, por lo que la capital otorga el sitio urbano para establecer las relaciones entre el
mentor y su discípulo. Será en la Facultad de Altos Estudios donde Silva Herzog encuentre
estos apoyos.
70
En la Facultad de Altos Estudios Silva Herzog tiene como maestros a Carlos Lazo, profesor de
Historia del arte, Ezequiel A. Chávez, profesor de Ciencias de la Educación, Antonio Caso,
maestro de Estética e Historia de la Filosofía y Alfonso Goldschmidt67 quien le enseñó
Economía Política. Este último fue una gran influencia para el pensamiento de Jesús Silva.
Siguiendo a Camp (2006) se infiere que Goldschmidt fungió como uno de los mentores de Silva
Herzog. Considerando que el mentor es un individuo que influye en la elección de carrera de
una persona en sus valores profesionales e ideológicos. Su paso por la cátedra de
Goldschmidth le amplió su abanico de conocimientos. Quizá, por esta influencia, Silva Herzog
dejó en segundo término a la literatura y decidió dedicarse a esta rama del conocimiento.68 El
interés en el pensamiento marxista también tiene que ver con Goldschmidth. Para 1924, Silva
Herzog había adquirido ya cierta preparación de la ciencia económica.
Silva Herzog se identificó con la economía política de Marx, en la versión antiimperialista de
Goldschmidt, porque el marxismo con su método científico, su visión crítica de la realidad y su
propuesta transformadora de la sociedad le brindó una explicación de la Revolución Mexicana y
del papel que podría desempeñar en ella.
67 Goldschmidt profesor de la Universidad de Leipzig, quien fue contratado por Vasconcelos para venir a México a impartir la cátedra de economía política (Aguilera,1985), nació en Alemania en 1879 y murió en México en 1940, estudioso de los problemas políticos y económicos europeos, que para 1914 era ya un conocido y prestigiado economista especializado en el estudio de economía imperialista, la banca y los monopolios, fue él primero en la Universidad de exponer la teoría de Marx, dividía su curso en tres partes: 1) Historia económica: comunismo primitivo, esclavismo, feudalismo, capitalismo y socialismo; 2) Teoría económica: teóricos de la antigüedad, mercantilistas, fisiócratas, liberales y socialistas, y 3) Economía política: agraria, comercial, industrial y financiera, tal como aparece en su libro “Fundamentos de la ciencia económica” editado en 1924 (Naufal,1996); dio clases en Altos Estudios de 1921 a 1923 de economía política (Wilkie & Monzón,1995). 68 “Fui su alumno de economía política durante los años de 1922 y 1923, no sólo en sus clases sino en frecuentes conversaciones fuera del aula. En sus lecciones exponía las teorías económicas de Marx, que conocía con profundidad. La influencia que Alfonso Goldschmidt ejerció en mí fue definitiva. Se inició el viraje de la literatura a las ciencias sociales y particularmente a la ciencia de la economía política.” (Silva,1970:74).
71
Aunque él y Vicente Lombardo Toledano69 fueron compañeros y compartieron las enseñanzas
de Goldschmidt, mientras Silva Herzog concilió sus ideas socialcristianas con una concepción
materialista y dialéctica de la historia, Lombardo criticó a Marx debido a la influencia que tenía
de su maestro Antonio Caso. (Naufal, 1996).
De su maestro Chávez, Silva Herzog aprendió la visión positivista de la educación, además de
la paz y la unidad de todos los mexicanos para beneficio de la nación y las nuevas corrientes
pedagógicas que aplicaría Silva en su etapa docente. Fue entonces cuando él adaptó en sus
cursos de economía estos conocimientos, distinguiéndolo por su estilo disquisitivo y la manera
de hacer pensar a sus alumnos sobre los problemas de México. (Naufal, 1996).
De Antonio Caso, él comprendió la filosofía antiintelectualista e intuicionista, pero también
entendió que era muy importante conocer los diversos aspectos geográficos, sociales, políticos
y culturales de México, así como la manera de evitar la imitación de modelos ajenos con el fin
de guiarnos por nuestros propios moldes y leyes.
En este orden de ideas, Camp (1981) argumenta que fue el profesor Antonio Caso (aunque éste
no participó en la vida política), quien enseño a muchos a profesores universitarios de su
época. Así él pudo haber influenciado, a sus estudiantes aún después de su muerte, cuando
aquéllos se convirtieron también en maestros como fue el caso de Silva Herzog. Esto no implica
que los estudiantes absorbieran todas las ideas de sus profesores y se volvieran en
reproducciones ideológicas exactas de sus mentores, pero está comprobado que conservaron,
para su éxito profesional, esencias de sus métodos e ideologías.
69 Lombardo en una entrevista del 21 de septiembre de 1964 a James Wilkie le comenta “En todos los estudios que hice en la Escuela de Altos estudios acerca de temas filosóficos, estaban profundamente impregnados de la filosofía idealista” (Wilkie & Monzón,1969:287).
72
Así, durante su estancia en Altos Estudios Silva Herzog se identificó con la economía política de
Marx, en la versión antiimperialista de Goldschmidt, porque el marxismo con su método
científico, su visión crítica de la realidad y su propuesta transformadora de la sociedad le brindó
una explicación de la Revolución Mexicana y del papel que podría desempeñar en ella. Aunque
él y Vicente Lombardo Toledano70 fueron compañeros y compartieron las enseñanzas de
Goldschmidt, mientras Silva Herzog concilió sus ideas socialcristianas con una concepción
materialista y dialéctica de la historia, Lombardo criticó a Marx debido a la influencia que tenía
de su maestro Antonio Caso. (Naufal,1996).
Es innegable que la Escuela de Altos Estudios fue fundamental para la generación de Jesús
Silva Herzog, porque como estudiantes recibieron los nuevos valores y las nuevas ideas
sociales, políticas y económicas para encontrar o plantear soluciones a los problemas
nacionales, de ahí el interés de Silva Herzog en el estudio de la cuestión agraria, la relación de
México y América Latina con los países imperialistas, la estabilidad política, la ideología
revolucionaria, etcétera. Tiempo después, estos temas serían de gran ayuda a Silva Herzog
cuando formó parte del Grupo Especial Número 7.
La influencia ateneísta se vio reflejada en la Escuela de Altos Estudios. El grupo ateneísta se
formó en la tradición porfirista del positivismo que fue su filosofía oficial, pero que ninguno de
sus miembros impulsó. No cabe duda que el maestro Silva Herzog recibió una influencia
directa de sus preceptos. Entre los integrantes más destacados del grupo ateneísta se
encuentra Antonio Caso, quien indudablemente influyó con su ideología a Silva Herzog cuando
70 Lombardo en una entrevista del 21 de septiembre de 1964 a James Wilkie le comenta “En todos los estudios que hice en la Escuela de Altos estudios acerca de temas filosóficos, estaban profundamente impregnados de la filosofía idealista” (Wilkie & Monzón,1969:287).
73
fue su alumno. 71 Otros destacados ateneístas, a quienes a la postre serían grandes amigos
personales suyos, Alfonso Reyes quien interactuó y debatió todo el tiempo con él
(Krauze,1976); además de Isidro Fabela con quien compartió varios momentos importantes de
su vida académica.
Así, la transformación vasconcelista del sistema educativo que se llevó a cabo en 1922, permitió
a jóvenes estudiantes como Silva Herzog, que adquirieran conocimientos básicos para incidir
creativamente en su tiempo; de esta forma él descubre que formaba parte de una colectividad,
que los acontecimientos sociales y políticos de México encontraban perfecto acomodo en las
explicaciones de sus maestros. Él comprendió que no era suficiente con ser espectador o
testigo de los hechos, sino que había que profundizar en ellos, es decir, asumir una actitud
crítica estableciendo las condiciones para el desarrollo de un espíritu cooperativo, pragmático y
propositivo, de un sentimiento de unidad ideológica, útil y necesaria en las tareas de
reconstrucción nacional y que le dio contenido e identidad a su generación ante la realidad
nacional. (Naufal, 1996 ,2001).
Con los positivistas retirados o ya fallecidos, y con la mayoría de los ateneístas exiliados
(debido a que algunos fungieron en puestos públicos en el gobierno de Huerta, o por pertenecer
a fracciones revolucionarios derrotadas), se les dejó a los jóvenes de la siguiente generación
(la denominada del 15) una herencia político-académica. En esta época no existían profesores
ni funcionarios suficientes, por lo que hubo la necesidad de que se improvisaran algunos
intelectuales en estas tareas.
71 Daniel Cosío Villegas opinaba sobre la influencia de Caso, “[Nos daba] la impresión de un gran maestro que nos parecía extraordinariamente culto e inteligente con cierta flama interior capaz de despertar la adhesión, el entusiasmo y el propósito de seguirle […] sirvió para no desprendernos de la generación del Ateneo.” (Krauze,1976:71).
74
Una vez que Silva Herzog concluyó sus cursos libres para docentes en la Facultad de Altos
Estudios, se le presentó la oportunidad de trabajar como profesor de inglés en la Escuela
Nacional de Agricultura en marzo de 1924. El ingeniero Marte R. Gómez72 invitó también a
Daniel Cosío Villegas, quien disertaría sobre problemas nacionales que se hicieron evidentes
durante la Revolución, y a Eduardo Villaseñor, para impartir la asignatura de cooperativismo.
Esta escuela se fundó de forma oficial el 22 de febrero de 1854, en el Convento de San Jacinto
en el Distrito Federal.
72 Gómez formaba parte de un grupo de agrónomos interesados en llevar adelante la reforma agraria y la reivindicación del campesino, para lo cual se requerían conocimientos económicos que no se impartían en ninguna de las escuelas de agricultura, de ahí su interés por invitar a los pocos economistas revolucionarios, Gómez tenía un gran interés por cuestiones económicas (Cosio,1976).
75
Capítulo III. Jesús Silva Herzog en la administración pública
Silva Herzog supo conjugar durante gran parte de su vida, su labor al interior de la
administración pública con sus actividades y compromisos académicos; es por ello que mientras
desempeñaba algún cargo público, al mismo tiempo impartía clases o conferencias en algunas
instituciones educativas. Esta situación le permitió combinar magistralmente la teoría con la
práctica económica.
En 1926, el ingeniero agrónomo Gonzalo Robles, Director y creador de las Escuelas Centrales
Agrícolas, invitó a Silva Herzog a colaborar con él. Lo nombró Jefe de la Sección Técnica de la
Dirección de Escuelas Centrales y de Cooperación y Crédito Agrícola, dependiente de la
Secretaría de Agricultura. Allí colaboró con el ingeniero Gonzalo Robles en la elaboración de la
Ley del Reglamento de los Bancos Agrícolas y Ejidales.73 Según Silva Herzog, él y Robles
trataron de crear un sistema de crédito agrícola en beneficio de ejidatarios semejante al de las
capas rurales organizadas en Alemania. Una de las formas de impulsar una actividad
económica era mediante el financiamiento, por lo que al crearse estos bancos rurales se
buscaba fomentar de manera local la actividad agrícola y con ello se originaba una mejor
situación para la población campesina que había sido parte fundamental para el triunfo
revolucionario. Después de una visita al Banco Ejidal de Morelia, Silva Herzog se enteró de la
renuncia de González Robles, por diferencias con el Secretario de Agricultura el Ing. Luis L.
León. Por solidaridad amistosa, él también renunció. Este hecho lo continuará repitiendo a lo
largo de su trayectoria laboral. (Silva, 1986a).
73 El gobierno callista decreta la Ley de Crédito Agrícola en enero de 1926, la cual consideró la creación de un Banco Nacional de Crédito Agrícola (marzo de 1926) y de cuatro bancos agrícolas ejidales: Celaya, Morelia, Tula y Durango (mayo de 1926) para apoyar a las Escuelas Centrales Agrícolas y la Ley de Dotaciones y Restituciones de Tierras. (Naufal,1996).
76
3.1 Interpretación de la Economía para Jesús Silva Herzog
Cuando Jesús Silva Herzog descubrió la Economía dejó de lado otras aspiraciones, como la
literatura que fue una de sus primeras pasiones y quedó atrapado en la interpretación marxista
que le diera su profesor Goldschmidth cuando cursó sus estudios entre 1921a 1923, que fue
clave para que él pudiera desarrollar la investigación en este nuevo campo, y que fuese elegido
para poder llevar a cabo una de las aspiraciones revolucionarias de recuperar la riqueza
petrolera para México.
Silva Herzog explicaba a la ciencia económica como:
El edificio de la ciencia económica descansa en el principio de que todos los hombres tratan
de satisfacer sus necesidades con el menor esfuerzo posible, y en este principio, que no es
sólo psicológico sino también biológico, se encuentra la explicación de casi todos los actos
humanos y de los de todos los seres. (Silva,1984b:13).
El economista Juan Bautista Say opinaba que la Economía debía ser objetiva, concreta y
descriptiva; para Leonardo Sismondi la Economía era una ciencia moral cuyo objeto de estudio
no es la riqueza sino el bienestar físico del hombre; finalmente Stanley Jevons decía que la
Economía debía tener un carácter tan matemático como el que hay en las ciencias físicas. Silva
Herzog opinaba sobre lo expuesto por Say, que era reducir a la Economía a una ciencia
descriptiva y negarle su calidad científica, tampoco estuvo de acuerdo con Jevons ya que en
cierta medida si la Economía utiliza a las matemáticas es porque ocupa cantidades, por lo que
no debe tomarse como una única forma de explicación, porque reduce al hombre a una
expresión matemática que es equivocada, imperfecto y confuso; debido al carácter ideológico
socialista que profesó, en el cual no se puede concebir al hombre de otra manera, que no fuera
como ser humano, no deja de reconocer que las matemáticas son herramientas útiles e
77
indispensables al economista. Estuvo de acuerdo con el planteamiento expuesto por Sismondi,
el cual sintió aún incompleto.
Pero se hubiera aproximado más todavía, si hubiera escrito que la Economía es una ciencia
social que estudia cómo se producen y distribuyen los bienes materiales y cómo debieran
producirse y distribuirse; si hubiera añadido que su objeto no es la riqueza por la riqueza
misma, sino un medio para mejorar al hombre en todos los aspectos esenciales de su
existencia individual y colectiva (Silva,1961b:9).
Silva Herzog definía a:
La Economía se ocupa de estudiar los fenómenos y las leyes de la producción, circulación y
distribución de la riqueza; la Historia Económica refiere y examina los hechos económicos, es
decir, los hechos relativos a la producción, circulación y distribución de la riqueza a través del
tiempo; la historia del pensamiento económico analiza y clasifica lo que los escritores y
especialistas han dicho en los distintos países y épocas acerca de las leyes y los fenómenos
de la producción, circulación y distribución. (Silva,1939:V).
Concluía que la Economía es una ciencia humana y que sus leyes, con excepción de las de
carácter económico-biológico como las de la población y del rendimiento decreciente en la
agricultura, son leyes sujetas a cambios constantes e inevitables, derivadas de los cambios
sociales74 en la estructura económica, jurídica, política, histórica y geográfica. Una teoría
económica ayer verdadera, bien puede dejar de serlo en el presente, debido a esos cambios
sustanciales. Los cambios en la estructura económica exigen también cambios en la legislación,
en la organización política y en la conducta de los miembros de una sociedad, estos cambios
pueden originarse por lo siguientes motivos: I) descubrimiento científico; II) aplicación técnica;
III) cambios en la estructura económica que pueden ser totales o parciales en el corto o largo
plazo; IV) adaptación de las leyes y de la organización política a la nueva realidad; V) progreso
74 Actualmente también se considera a la tecnología como una de las formas que cambia la estructura social.
78
de todos, o por lo menos de una parte de sus habitantes. Pero este progreso puede darse de un
avance desigual entre las ciencias de la materia y las ciencias del espíritu75 (entre las ciencias
biológicas y la filosofía; entre la física y las ciencias sociales), para lo cual pone como ejemplo:
La Física de Aristóteles pertenece a la arqueología de la ciencia, nada ya es aprovechable.
En cambio la lectura de La Política del mismo autor es todavía útil y aún obliga a meditar a
quien la lee con atención. (Silva,1972:321).
Con lo cual expone el atraso entre ambas ciencias, donde la primera ha superado en mucho a
la “Física Aristotélica”, pero no así a su “Política”; Yacamán (1994) expone que la física es sin
duda una de las ciencias que tienen alta capacidad de predicción, basada en aproximaciones y
modelos simples, por lo que el físico trabaja aproximando el modelo a la realidad, mientras que
la tendencia en las ciencias sociales es aceptar la realidad y tratarla de explicar;76 Landreth &
Colander (2006) también concuerdan en que la Economía es una ciencia social que esta
estrechamente vinculada a cuestiones éticas, las cuales carecen de respuestas fáciles, donde
cada economista trabaja inmerso en un medio social más amplio, permeado por actitudes
normativas que resultan difíciles de excluir de la investigación y que son más arduas aún de
discernir, debido a estas mismas dificultades, la elección por parte de los economistas de una
metodología apropiada, resulta primordial para el avance y exposición del conocimiento
económico. Esta falta de metodología propia, se ve reflejado también por la falta de modelos
económicos, por lo que Silva Herzog resalta la importancia del estudio de la economía:
Muchos de los errores que se han cometido en el país desde 1821 hasta la fecha, han tenido
su origen en un desconocimiento de la realidad [económica y social]. De aquí la constante
importación de sistemas [ajenos al país] que han traído como consecuencia el fracaso
75 Esta clasificación es del filósofo idealista Guillermo Dilthey (Silva,1961b). 76 Bunge (2004) en su clasificación de ciencia sitúa a la economía como una ciencia factual, debido a que se dedica a averiguar, estudiar y entender hechos.
79
inevitable y doloroso. El empirismo gubernamental debe también señalarse como una de las
causas de nuestros más serios errores. (Naufal,1996:60).
Silva Herzog contribuyó de manera significativa al desarrollo de los estudios y la investigación
económica de México. Se dió cuenta de lo complejo que era estudiar los sucesos económicos,
ya que al momento de intentar analizarlos, no era tarea fácil separarlos del contexto social e
histórico, ya que se encuentra inmersos, por lo que a veces es difícil diferenciarlos.
Lo económico –social muchas veces no es posible establecer fronteras estrictas entre lo
social y lo económico, sobre todo tratándose de periodos en que aún no existía una doctrina
económica propiamente dicha. […] Lo económico influye poderosamente en la historia; más
también influye lo político, lo religioso, lo jurídico y las normas de conducta de una sociedad
en un momento histórico dado. (Silva,1967:9;Silva,1961a:9).
Silva Herzog (1961b) entendía que existen y han existido numerosos sucesos económicos en
todas las sociedades, que tales fenómenos obedecen a causas determinadas, si un hecho
económico se repite muchas veces y de igual manera, era porque obedece a la misma causa,
por lo que es posible descubrir los principios o leyes que expliquen la causa del fenómeno.
3.2 En el Departamento de la Estadística Nacional y en la reorganización de los Ferrocarriles Nacionales de México
En junio de 1926, después de renunciar a la Secretaría de Agricultura, Silva Herzog ingresó, por
recomendación de Daniel Cosío Villegas, al Departamento de la Estadística Nacional.77 El
77 La cual fue creado por Obregón en diciembre de 1922, que dependía directamente de la Presidencia de la República.
80
encargado de dicho departamento era Juan de Dios Bojórquez.78 En esta Secretaría Silva
Herzog impartió 9 conferencias con el tema “Evolución económica de México”.79 Aunque sus
exposiciones eran de corta duración, tenían varias ideas nuevas valientemente expuestas.
Entre las más novedosas se encuentran por ejemplo, que la conquista atrajo más males que
bienes. En esta conferencia Silva Herzog criticaba la superficialidad con que se había escrito la
historia de México, pensaba que ésta debería analizarse nuevamente pero ahora de manera
más profunda. En estas conferencias también trataba el problema agrario derivado de la mala
distribución de tierras. A su juicio esto era la causa principal de todas las desigualdades
existentes en México y razón de todas nuestras revoluciones. El propósito de Silva Herzog era
demostrar que la revolución mexicana no representó un paso atrás en la historia del país como
pretendían creer los reaccionarios y detractores de ésta, sino un factor afirmativo de avance
económico, social, político y cultural.
Silva Herzog escribió en esa dependencia dos libros: Aspectos estadísticos de un quinquenio
1921-1925 y Sonora, Sinaloa y Nayarit. La publicación de la primera obra fue con carácter
institucional. Por alguna razón se omitió el nombre de Jesús Silva. Salió a la luz en el año de
1927. Este trabajo se basa en un estudio estadístico-económico sobre los principales rubros de
la economía nacional durante el quinquenio estudiado. Se reúne una amplia información de tipo
estadístico que es analizada destacando los aspectos más importantes de las actividades
económicas que se desarrollaban en ese tiempo en el país. Esta obra permitió el análisis de
algunos problemas fundamentales relacionados con las actividades económicas en México. Se
utilizaron representaciones gráficas para mostrar los datos estadísticos obtenidos.
78 Para quien las estadísticas eran indicadores objetivos de los avances y retrocesos en el progreso del país, servían como elemento de comparación y evaluación de nuestra historia frente a problemas viejos y nuevos. 79 Guillen (1980) la califica como el eslabón inicial de una larga cadena de escritos, la primera aventura en letras de molde para decir lo que se piensa y siente. Este libro fue publicado por la Sociedad Mexicana de Estudios Económicos en editorial Cultura en 1927, posteriormente es reimpreso por la Facultad de Economía de la UNAM en su colección Clásicos de la Economía Mexicana en 1989.
81
Con respecto a Sonora, Sinaloa y Nayarit se puede decir que esta obra se publicó en el año de
1929.80 Su carácter fue colectivo. En ella colaboraron Jesús Soto, Antonio Espinosa de los
Monteros, Francisco Soto, Miguel Torner 81 y Jesús Silva fue quien redactó los capítulos
dedicados a la agricultura, ganadería, industria de transformación y comercio. Este trabajo es
otro estudio estadístico y económico social-regional. Destaca las riquezas naturales de esa
región. La información fue proporcionada por la propia dependencia.
En ambas publicaciones se insiste en observar la importancia de la utilidad práctica de las
estadísticas en el diagnóstico de la situación económica y social del país, subsanar las
carencias de información que había en importantes renglones de la realidad nacional, para
aportar datos más completos, como exactos para un mejor estudio como comprensión de los
problemas de México y sus perspectivas. Al respecto, Silva Herzog argumentaba
La estadística ha dejado de ser para nosotros una rutinaria recolección de datos sin utilidad
práctica ni aprovechamiento inmediato, como lo fue hasta hace apenas unos cuantos años,
que se llevaba a efecto en diversas oficinas públicas sin plan y sin concierto, obedeciendo a
tratados diplomáticos especiales o a simple espíritu de imitación. Día a día la solicitud de
datos precisos, por parte de instituciones públicas y privadas, nos demuestran que los
programas de desarrollo económico, de funcionamiento administrativo y de reforma social,
comienza a basarse, o por mejor decir, pretenden basarse en lo futuro, en los datos concretos
y positivos que encierran los números o las gráficas estadísticas […] la necesidad de índices
de la vida económica y social del país, mal llenada por departamentos y secciones
80 (Padilla,1973), difiere de (Enríquez,1992) en el año de publicación del libro “Sonora, Sinaloa y Nayarit “ elaborado por el Departamento de Estadística Nacional año de 1927, imprenta Mundial, México, D. F. 1928. 81 Jesús Soto elaboró: Descripción geográfica, reseña histórica, población, minería, educación, comunicación, y hacienda pública; Antonio Espinosa de los Monteros con instituciones de crédito, Francisco Soto con riqueza forestal, caza y pesca y producción rústica; y Miguel Torner con trabajo, (Enríquez,1992).
82
desvinculadas, ha dado nacimiento a una institución coherente en su plan y sistemática en
sus procedimientos, de la cual es producto Sonora, Sinaloa y Nayarit. (Naufal,1996 :78).
Una de las problemáticas que enfrentaron este tipo de estudios económicos en México fue la
carencia de datos confiables que sirvieran de base para dar conclusiones o argumentos más
fundamentados a los problemas nacionales.
Con motivo a su buen desempeño y gracias en parte a la divulgación del trabajo que se hacía
en la dependencia por medio de las obras citadas, pero también a su capacidad e interés sobre
economía política de cierta forma lo prepararon para desempeñar dicho puesto, el 11 de
septiembre del mismo año, Jesús Silva fue designado Jefe de la Oficina de Producción,
Distribución y Consumo del Departamento de la Estadística Nacional. En su estancia en este
puesto conoció a Adolfo Ruiz Cortines quien tenía el mismo cargo que él, pero en la Oficina de
Estadística Social. Silva Herzog colaboró con Gilberto Loyo en la reasignación y organización
del Departamento en dos direcciones: la de la Estadística Económica, responsable de las
estadísticas de comercio exterior e interior, finanzas e industria, y propiedad, agricultura y
comunicaciones y, la de Estadística Social que tenía a cargo el censo, el movimiento de la
población y las instituciones sociales.
El 1o de enero de 192782 Jesús Silva fue nombrado Director de Estadística Económica. Este
puesto lo ocuparía hasta finales de ese mismo año. Aquí organizó cursos para los empleados
sobre geografía, lengua castellana, historia económica de México y estadística. Personalmente
elaboró el curso de Historia Económica de México. Durante su estancia en el Departamento de
Estadística, tuvo lugar en México Primera Reunión Nacional de Estadística, organizada por el
Departamento de la Estadística Nacional, del 23 al 30 de abril de 1927. El propósito era dar a
82 Naufal (1996) con estos cambios se esperaba hacer más eficiente el trabajo de diseño y elaboración de las estadísticas económicas y sociales para contribuir con diagnósticos serios y ponderados al progreso del país.
83
conocer sus avances desde su fundación, así como discutir los nuevos métodos y sistemas de
la elaboración de estadísticas, diseño, captación y procesamiento de la información de acuerdo
con las necesidades de los distintos sectores de la sociedad. Silva Herzog participó en este
encuentro con la conferencia “La estadística como base del progreso económico”. Durante su
labor en esta dependencia conoció e hizo amistad con Eyler N. Simpson y Ramón Beteta. Para
finales de 1927 Silva Herzog renunció a su cargo por problemas personales (Wilkie &
Monzón,1969).
Entre 1927 y 1928 se conformó el Bloque de Obreros Intelectuales como una iniciativa de Juan
de Dios Bojórquez. Entre sus integrantes más distinguidos se encontraban el Dr. Atl, Antonio
Castro Leal, Miguel Othón de Mendizábal, Joaquín Ramírez Cabañas, Adolfo Ruiz Cortines,
Jesús Silva Herzog, Jesús S. Soto, Eduardo Villaseñor, entre otros. El grupo decidió publicar
sus aportaciones y reflexiones en una revista que en enero de 1929 aparece con el nombre de
Crisol, órgano mensual del grupo. Esta revista se publicó durante 3 años. (Silva, 1971). Esta red
de intelectuales pudo influir en la retroalimentación y exposición de diferentes enfoques de un
mismo problema, por la especialidad que va adquiriendo cada uno de sus integrantes, además
de convertirse en un sólido grupo de apoyo de tipo político para futuras recomendaciones
laborales.
Se puede observar que la trayectoria laboral de Jesús Silva marcó su ruta como investigador
reconocido. Durante su estancia en los diferentes cargos de la administración pública tuvo la
oportunidad de llevar a cabo investigación de campo, recolección, agrupación, manejo y
presentación cronológica de datos, mismos que servirán para el análisis cuantitativo de los
indicadores económicos que, tiempo después, le servirán para trabajos de investigación y
84
laborales, entre ellos los que efectuaría para Ferrocarriles Nacionales y para el Grupo Especial
Número 7.
En 192783 el Secretario de Hacienda, Luis Montes de Oca al tener conocimiento de su renuncia,
invitó a Silva Herzog a colaborar como asesor en el estudio de la reorganización de los
Ferrocarriles Nacionales de México, donde apoyaría a Henry Thornton (presidente de los
Ferrocarriles Nacionales de Canadá) quien por invitación del gobierno callista analizó la
situación de los Ferrocarriles Nacionales mexicanos. En las tres semanas de estancia de
Thornton y su equipo en nuestro país, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) por
medio de la Dirección de Estadística Económica que dirigía Silva Herzog, se encargó de
recopilar toda la información necesaria para el desarrollo de los trabajos. La prensa nacional por
su parte anunciaba sobre el desarrollo y avances del estudio, así como las tareas del asesor
Silva Herzog
El profesor Jesús Silva Herzog […] está laborando en doce ramas diferentes de estadística
ferrocarrilera; y al mismo tiempo, haciendo estudios económicos de importancia para
completar la labor estadística […] los estudios económicos que se realizan están
considerados como los primeros en su género que se hacen en México, pues jamás se
habían preocupado los ferroviarios mexicanos, por conocer el estado de los diversos factores
sociales que intervienen en el auge de los ferrocarriles, y que son causa directa de los
fenómenos que en ellos se registran. (Naufal, 1996:82).
83 Desde ese año y en adelante Jesús Silva Herzog es consejero de la Liga Nacional Campesina que dirigía Úrsulo Galván de tintes marxistas, él invito a Silva Herzog a una gira por Veracruz, para que lo ayudara a organizar sociedades cooperativas de producción y consumo (PRI-CEN,1985;González,1979); la Liga adquiere importancia sobretodo en Veracruz, fue una organización con ideología diferente al PNA, su estandarte era un lienzo rojo con la hoz y el martillo en el centro, por lo que se le asoció con el comunismo soviético. (Wilkie & Monzón,1995).
85
El hecho de que la prensa se ocupara de la labor desarrollada por Silva Herzog, da
constancia de que era considerado un intelectual de importancia en México. El
reconocimiento de los diarios hacia sus estudios económicos mismos que no se habían
efectuado con anterioridad den nuestro país, daban cuenta de la importancia que había
adquirido Jesús Silva al paso de los años. Quizá este prestigio pudo haber influido para
perfilarlo como un especialista económico de gran nivel, lo que ocasionó que fuese
seleccionado para llevar a cabo el complicado estudio económico de la industria petrolera
varios años después.
A finales de los años veinte, Jesús Silva conoció, por medio de un amigo común, a Narciso
Bassols, abogado marxista, que posteriormente lo invitaría a colaborar con él en algunos cargos
públicos. Silva Herzog recuerda que se hicieron amigos de inmediato, coincidían en varios
puntos de vista sobre los problemas fundamentales de México. Desde entonces procuraban
comer juntos, en compañía de otros buenos amigos como Samuel Ramos, Manuel Meza,
Eduardo Villaseñor y Gonzalo Robles. (Aguilar & Mesa, 1964).
El Instituto Mexicano de Investigaciones Económicas y la revista Mexicana de Economía
Al término de las conferencias en la Biblioteca Lerdo de Tejada, Silva Herzog propuso a los
asistentes, conformar el Instituto Mexicano de Investigaciones Económicas (IMIE);84 algunos
de los invitados fueron Daniel Cosío Villegas, Antonio Espinosa de los Monteros, Pablo
84 Esto sucede según ENE (1972) en octubre de 1928. En una entrevista que daría Silva Herzog posteriormente en septiembre de 1979 a la revista Comercio Exterior, comenta “Después de esa charla se fundó a propuesta mía el Instituto […] el primero de tal índole, según mis conocimientos, creado en nuestro país.” (Comercio Exterior,1985:311).
86
González Casanova, Ernesto Martínez de Alva, Fritz Bach, Alfonso Goldschmidt, Raúl Haya de
la Torre, Eyler N. Simpson, Humberto Tejera, entre otros.85
Según Naufal (1996) esta propuesta se llevó a cabo a iniciativa de Alfonso Goldschmidt, quien
solicitaba la creación de la sede en México del Instituto Europeo de Economía Latinoamericana.
Su creación se dio el 16 de mayo de 1928 con cincuenta destacados economistas
autodidactas,86 abogados, contadores, ingenieros y agrónomos como Pedro de Alba, Juan D.
Bojórquez, Ramón Beteta, Luis Chico Goerne, Manuel Gómez Morín, Eduardo Villaseñor,
Miguel Othón de Mendizábal, Miguel A Quintana, Joaquín Ramírez Cabañas, Roberto Casas
Alatriste, Antonio Manero, entre otros.
Silva Herzog fue designado presidente del instituto que tuvo una duración de un año y tres
meses. Durante la gestión del IMIE, dentro de sus actividades se publicaron 4 números de la
revista trimestral Revista Mexicana de Economía. Sus ediciones fueron posibles gracias a la
aportación de los socios así como a la venta de los números.
Intentos de la conformación de los estudios formales de la Economía
Esta idea de conformar un instituto especializado en estudios económicos fue ciertamente
innovadora. No se han encontrado precedentes de un organismo similar. La necesidad de
establecer estudios económicos formales tenía ya varios antecedentes. El más cercano se dio
en 1925 mediante el trabajo aislado de un grupo de autodidactas, en su mayoría economistas,
85 No se quiso adherir Narciso Bassols porque entonces él era predominantemente jurista y no economista. (Wilkie & Monzón, 1969). 86 En México se daba cursos de economía política como parte de la formación de otras carreras o áreas del conocimiento, pero no existían los estudios formales en economía en México sino hasta 1929 con la creación de la sección de economía en la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Nacional de México.
87
abogados y contadores que estaban dedicados al estudio de los problemas económicos y
sociales de México. Entre los más destacados se encuentran: Narciso Bassols, Antonio
Espinosa de los Monteros, Jesús Silva Herzog, Daniel Cosío Villegas, Marte R. Gómez, Manuel
Gómez Morín, entre otros. Su idea era conformar una carrera de Economía.87 El maestro Silva
Herzog comenta al respecto
Bassols, Mesa y yo pasamos en Taxco los últimos días de noviembre y primeros de
diciembre de 1928, allí conocimos la lista de los miembros del gabinete del presidente Portes
Gil, así también la designación de Antonio Castro Leal como rector de la Universidad, quien
era muy amigo de mis dos compañeros de viaje. Recuerdo que la noche del 1º de diciembre,
conversando en una banca del jardín Guerrero de la población precitada, hablamos de la
necesidad de crear una escuela de estudios económicos dentro de la Universidad. No
sospechábamos en aquellos momentos que dos semanas más tarde Bassols sería nombrado
Director de la Escuela Nacional de Jurisprudencia (el rector Antonio Castro Leal fue quien lo
nombró); ni mucho menos que él fundaría en breve la Sección de Economía en dicha
Facultad, germen de la Escuela de Economía, fundada por Enrique González Aparicio en
1935”. (Bassols,1964:IX)
Para enero de 1929, Jesús Silva laboraba en la SHCP. Dentro de su grupo de trabajo se
encontraban Federico Bach y Antonio Espinosa de los Monteros. Juntos elaboraron el plan de
estudios, de 4 años, para la carrera de Economía. Silva Herzog no recuerda si fue por una
comisión o por cuenta propia, pero sí recuerda que fue antes de que él partiera hacia Moscú.
(Comercio Exterior, 1985).
87 En la literatura existen por lo menos 3 versiones de la fundación de la Escuela Nacional de Economía de la UNAM: la del maestro Jesús Silva Herzog, la de Daniel Cosío Villegas y la del maestro Manuel Meza Andraca.
88
Entre tanto, Silva Herzog estudiaba diversos textos de consulta para mejorar sus clases. Entre
las lecturas que efectuó, entre 1925 a 1928, sobresalen las de economía. En esta etapa de su
vida, él estudiaba a los pensadores clásicos de la economía como Adam Smith, David Ricardo,
Robert Malthus, John Stuart Mill, Alfred Marshall y a Karl Marx; también empezó a leer las
nuevas corrientes de pensamiento propuestas por Lenin y Bujarin. Se reunía con algunos
amigos una vez a la semana para analizar y comentar la obra de Marx. Entre los más asiduos
asistentes se encontraban: Miguel Sánchez de Tagle (periodista, experto en asuntos
económicos), Santiago R. de la Vega (revolucionario), Antonio Espinosa de los Monteros
(Director general de la Nacional Financiera y embajador de México en los Estados Unidos
durante los gobiernos de Ávila y de Alemán), el ingeniero Gonzalo Robles (asesor del Banco de
México), Eduardo Villaseñor (Presidente del Banco del Atlántico) y el profesor Francisco
Zamora (profesor y autor de varios libros de economía) (Wilkie & Monzón,1969).
3.3 Embajador plenipotenciario ante el gobierno soviético
Debido a su interés por el pensamiento socialista, Silva Herzog solía frecuentar la embajada de
la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas (URSS). Con él asistían Manuel Gómez Morin,88
Francisco Zamora, Miguel Sánchez Tagle y Antonio Espinosa de los Monteros. Silva Herzog
mantenía un peculiar interés por estudiar las transformaciones socioeconómicas en el país
soviético. Estas inquietudes intelectuales eran resultado de sus lecturas sobre la ideología
socialista, así como los sucesos de la revolución rusa y de las clases de economía política que
impartió el maestro Goldschmidt en la Facultad (quien además había escrito en 1920 un libro
sobre su visita a Moscú). Silva Herzog por su parte, quiso confirmar y comprobar de primera
mano lo que sucedía en aquel país después de haber pasado una transformación política
88 Silva Herzog comenta que estaba en ese tiempo más cercano a Gómez Morín quien tenía una posición de centro izquierda, que con Vicente Lombardo (Wilkie & Monzón,1995).
89
debido a la revolución rusa. El interés intelectual de Silva Herzog tenía tintes de carácter
científico y político.
Ante la renuncia del entonces diplomático en la URSS, el profesor Basilio Vadillo, debida en
parte al cambio de gobierno en México; Silva Herzog recurrió a sus amigos, entre ellos a
Eduardo Villaseñor, con el fin de que lo apoyaran para obtener este puesto. Por mediación de
éste último con Genaro Estrada, subsecretario de Relaciones Exteriores y, con la del Secretario
de Agricultura, Marte R. Gómez,89 solicitaron al Presidente Emilio Portes Gil, para que le
concedieran a Silva Herzog el cargo de Embajador en aquél país. El 17 de diciembre de 1928
Silva se entrevistó con el subsecretario de Relaciones Exteriores. Se le informó de la aceptación
de su solicitud al cargo de Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario de México ante el
gobierno de la URSS,90 (Wilkie & Monzón, 1995:332), puesto que aceptó gustoso.91 Silva
Herzog confiesa en sus memorias que fue un salto en su carrera porque de ser jefe de un
departamento de Hacienda a ministro plenipotenciario era algo que tenía gran significación.
89 Marte R Gómez en entrevista del 11 de mayo de 1964 con James Wilkie le comenta “El fue nombrado ministro en la Unión Soviética por recomendación mía; yo fui él que lo recomendó para ese puesto, Yo tengo correspondencia muy interesante con Silva Herzog de esa época, porque él se comunicaba en forma privada más conmigo que con la Secretaría de Relaciones, y me escribió ya cuando la situación estaba muy tensa pidiéndome autorización, es decir, pidiendo que el Presidente de la República lo autorizará a salir de la Unión Soviética.” (Wilkie & Monzón,1969:106); debido a que el ing. Gómez conocía al Lic. Portes Gil desde que ambos eran obregonistas, después colaboró en la reforma agraria cuando Lic. Portes Gil fue nombrado gobernador de Tamaulipas en 1925, posteriormente al ser presidente nombra al ing. Gómez Secretario de Agricultura. 90 Era la primera delegación de un país latinoamericano acreditada en aquel lejano país, donde sólo 16 países habían instalado misiones diplomáticas. (Aguilera,1985); Silva Herzog se refiere que en su estancia había 14 representaciones extranjeras (Wilkie & Monzón;1969). 91 El presidente de la República, licenciado Emilio Portes Gil […] Me dijo que deseaba que el jefe de nuestra misión en Moscú fuera un economista para que le informara con conocimiento de causa y en detalle al gobierno de México lo que realmente estaba sucediendo en aquella lejana e importantísima nación. (Enríquez,1992:656).
90
El 13 de enero de 192992 Silva Herzog viajó rumbo a su misión diplomática.93 Hizo una escala
en Berlín, donde lo esperaban su profesor y amigo Goldschmidt así como el ministro de México
en Alemania, Primo Villa Michel. Llegó el 9 de febrero del mismo año a Moscú, donde fue
recibido por Florinsky, su amigo León Haikes y Dubrosky director del Instituto Internacional
Agrario de Moscú (Wilkie & Monzón, 1969). Se instalaron en una vieja casona zarista sede de la
Embajada Mexicana. En aquel país Silva Herzog se puso a estudiar ruso, a los quince días de
estar en Moscú ya tenía un profesor de ruso, quien le traducía del inglés al ruso. Visitó varias de
las universidades, institutos y grandes museos. Silva Herzog tenía 36 años cuando se presentó
ante el presidente del Soviet Supremo de la URSS, Miguel Ivanovich Kalinin, el 15 de febrero de
1929, como embajador plenipotenciario mexicano. (Guillen, 1980).
En Moscú comenzó la confrontación de su pensamiento con respecto a los aspectos teóricos
leídos y estudiados anteriormente durante su vida. Estos contrastes le generaron ciertas dudas
con respecto al modelo socialista soviético que tanto había estudiado contra la situación real del
socialismo que se vivía en la URSS en aquellos años. Algunos aspectos de la vida soviética lo
impresionaron bien, como el sistema cooperativista soviético (que es uno de los renglones de
importancia en la estructura socioeconómica de ese país), el interés que había hacia la mujer y
la protección al niño; mientras que otros aspectos lo desalentaron, como el haber visto una
ciudad de mendigos, gente vestida pobremente con abrigos de lana muy viejos, grandes colas 92 La generación del 15 a la muerte de Obregón hacia 1928, comienza su ascenso en el poder, Silva Herzog obtendrá cargos públicos de mayor nivel y responsabilidad; a partir de 1932 la mayoría de esta generación están en puestos claves de la administración pública que se venía caracterizando por su interés hacia los problemas sociales, algunos de sus miembros como Silva Herzog creían en el progreso del país a partir de la justicia social y el reparto equitativo de la riqueza, continúa principalmente con la xenofobia al imperialismo estadounidense, buscaba a un Estado benefactor (promotor del bienestar material y moral de la nación), por ello su orientación hacia el socialismo soviético; ya había dejado de sentir y practicar desde su juventud la religión católica, pero no llego al extremo de la intolerancia ó el fanatismo.(González,1979). 93 Se le asigna un importe de pasajes de $3,943.95 y de viáticos de $1,150 conforme a lo dispuesto en el artículo 75 del Reglamento del cuerpo diplomático. La Cámara de Senadores en sesión secreta del 25 de septiembre de 1929, aprobó el siguiente acuerdo, ratificando el nombramiento de enviado extraordinario y Ministro Plenipotenciario de México ante el gobierno de Rusia. (Archivo Histórico de la Secretaría de Relaciones Exteriores “Genaro Estrada”, 1928), Expediente 18-13-27, Folio 13.
91
de gente para comprar pan que durante la espera encendían en las calles fuego para
calentarse.
La valoración de estos aspectos le causó cierta desilusión a Jesús Silva (Wilkie & Monzón,
1995). Apoyándose en la observación directa así como en su espíritu analítico ya bastante
desarrollado, Jesús Silva fue exponiendo y estudiando los sucesos del país soviético. Poco a
poco fue deslindando y contrastando la realidad con la teoría. Teóricamente llegó a aquel lejano
país comunista siendo marxista, tiempo después ya no se encontraba tan seguro. Al parecer,
los resultados de sus observaciones propiciaron su conversión en marxista heterodoxo.
(Guillén, 1969). Esta situación le será de gran ayuda durante su trayectoria como investigador,
ya que será imparcial hacia los sucesos que observe e intente explicar. A partir de esta
experiencia ya no conservará un pensamiento ideológico rector que en cierta forma incline o
influya en su juicio científico.
El aspecto más estudiado por Silva Herzog fue el cooperativismo soviético. Incluso hizo un viaje
a Leningrado para verlo en práctica y estudiar su organización. Los resultados de su estudio los
envió a México tiempo después. Quizá, este estudio influyó en el desarrollo y perfeccionamiento
de las sociedades cooperativas, convirtiéndose en una forma alternativa de desarrollo
económico, que aún persiste en la actualidad en nuestro país. Durante su estancia en la Unión
Soviética se hizo miembro activo del Instituto Internacional Agrario,94 donde impartió algunas
conferencias sobre la reforma agraria mexicana.
El 16 de marzo de 1929, Silva Herzog se entrevistó con el jefe del Departamento de Países
Anglo-Romanos del Comisariado del Pueblo de Asuntos Exteriores de la URSS, con quien 94 Nombramiento de miembro activo del Instituto Internacional de Moscú, lo firman el Director interino Dubrousky y el Secretario Holzman el 28 de febrero de 1929 (Silva,1978).
92
intercambió opiniones acerca de la posibilidad de establecer una relación comercial entre
México y la URSS. Este convenio no se había podido concretar debido a las diferencias
existentes entre un país capitalista, como lo era México y la URSS. En Rusia la industria estaba
nacionalizada y el Estado tenía el monopolio de toda la actividad económica, incluyendo al
comercio exterior e interior. Silva Herzog también observó estas diferencias dadas por los
sistemas económicos de ambos países, pero estudió los convenios comerciales que tenía la
URSS con otras naciones capitalistas con la finalidad de plantear una propuesta al gobierno
mexicano que sirviera para futuras negociaciones (Naufal,1996).
En mayo de 1929 se difundió en la URSS el suceso de fusilamiento de los líderes comunistas
de la Liga Nacional Campesina, José Guadalupe Rodríguez95 y Salvador Gómez en Durango
por órdenes del General Calles. Silva Herzog informó a la SRE la necesidad de obtener más
información sobre este asunto debido al acoso de los periodistas, y también por ser él miembro
de la Liga en calidad de consultor. Días antes de su viaje hacia la URSS.
Silva recuerda en sus memorias que asistió a una reunión encabezada por Úrsulo Galván, en
donde el tesorero, Guadalupe Rodríguez, tomó la palabra diciendo que México estaba maduro
para hacer la revolución comunista y acabar de una vez por todas con el predominio de la
burguesía. Silva Herzog le objetó sus argumentos, ya que México no estaba preparado para
una transformación tan radical pues no había que olvidar nuestra vecindad con los Estados
Unidos. Para Silva, un intento de esta naturaleza sería un grave error porque expondría la vida
de los campesinos a una lucha sin ninguna posibilidad de triunfo (Naufal,1996).
95 Miembro del Partido Comunista Mexicano y tesorero de la Liga Campesina, (Aguilera,1985:34).
93
Como resultado del fusilamiento de los líderes comunistas mexicanos, la Tercera Internacional
dirigió una campaña en contra del gobierno mexicano, con lo cual agravó las relaciones entre
ambos países. Esta situación generó que se fueran retirando sus amigos rusos, por lo que Silva
Herzog sólo frecuentaba las reuniones de los demás embajadores; quedando la Legación
Mexicana en una delicada situación de aislamiento.
El 6 de mayo del mismo año, Silva Herzog envió un informe a la SRE sobre la realidad
económica, social y política de Rusia. No era un informe protocolario, sino un estudio
introductorio de los aspectos más relevantes del sistema soviético, desde el estallido de la
revolución a la fecha, indicando problemas, éxitos, fracasos e interrogantes. El estudio estaba
dividido en 2 apartados. Al primero lo denominó: La cuestión de la tierra y la producción
agrícola, las industrias del subsuelo, las industrias de transformación, los transportes, el
comercio interior y exterior así como el crédito y los bancos; mientras que en el segundo fue
nombrado: Las condiciones sociales y políticas.
En el aspecto político Silva Herzog sostenía que quien gobernaba realmente en la URSS era el
Partido Comunista, ya que de este dependía la política interior y exterior del país. Este partido
sostenía Silva, mantenía el control, la organización y el funcionamiento de todo el sistema, en
cuya dirección se encontraban un grupo de intelectuales que ejercían la dictadura del
proletariado (SRE, 1985). Con el informe él envío también una conclusión, donde indicaba que
la supervivencia de los bolcheviques y del régimen soviético consistía en hacer de un país
agrícola un país industrial, por lo que del éxito o fracaso del programa industrial del gobierno
soviético dependería el fracaso o éxito del experimento ruso. Sobre el experimento soviético
Silva Herzog opinaba que se podían desprender interesantes enseñanzas para México como
por ejemplo: las cooperativas de producción y consumo, las instituciones educativas, los
94
métodos de difusión cultural y el sistema de reclutamiento militar (Naufal,1996). Sus
observaciones eran las de un diplomático interesado en conocer, con realismo y profundidad, el
proceso de transformación radical en la estructura social y económica de aquél país.
El 10 de junio de 1929, Marte R. Gómez por instrucciones del presidente, le escribió a Silva
Herzog explicándole los últimos sucesos. El desafuero del diputado del Partido Comunista
Mexicano, Hernán Laborde así como la clausura del periódico El Machete, órgano informativo
de este partido. De acuerdo con la versión oficial, los comunistas emprendieron dentro y fuera
del país, una campaña de agitación y desprestigio en contra del llamado gobierno burgués de
Portes Gil. En otro documento Marte le explicaba a Silva Herzog, de manera interna, que el
presidente Portes Gil reconoció que los comunistas mexicanos representaban la misma
amenaza que fue Trotsky en la URSS, por lo que tolerar sus ataques sólo serviría para
robustecer a los reaccionarios y dar pie a la contrarrevolución (Naufal, 1996).
El 4 de julio de 1929, Silva Herzog envió un segundo informe a la SRE. Hacía partícipe al
gobierno mexicano de los últimos acontecimientos económicos imperantes en la URSS. Silva
Herzog argumentaba no estar tan seguro del éxito del programa de industrialización rápida
soviética, sobretodo con la aplicación del primer plan quinquenal (de octubre de 1928 a octubre
de 1933) impuesto por el dirigente soviético José Stalin, que podía amenazar con provocar una
grave crisis de alimentos, afectando el deteriorado nivel de vida de la población. Confirmaba los
nexos entre el Partido Comunista Mexicano y Moscú en la campaña de desprestigio contra el
gobierno de Portes Gil y del enfriamiento de las relaciones diplomáticas con la URSS. En dicho
informe Silva Herzog reconoció que el gobierno soviético no tenía ninguna simpatía por México
y que los lazos de amistad y entendimiento no habían sido más que un buen deseo de los
mexicanos, incluso a costa de sus propios recursos
95
Cuando estaba en México pensaba como muchos mexicanos que el gobierno soviético
tendría para nosotros especial simpatía, sobre todo si, se tomaban en cuenta los esfuerzos
que allá se han hecho para mejorar las condiciones económicas y sociales del proletariado,
como nuestra avanzada ideología. Pensaba además, con toda buena fe, que existían entre
ellos y nosotros puntos de contacto y propósitos semejantes. Creía, por último que nuestra
situación era bien conocida y que estimaban el gesto desinteresado y generoso que tuvimos
al reconocerlos, no obstante no tener ligas materiales de ninguna clase y a pesar del estado
de crisis en que por entonces se hallaban nuestras relaciones con Estados Unidos.
Lamentable error, error que debíamos haber conocido hace mucho tiempo. No se nos
conoce, no se nos entiende ni estima. En las etiquetas fabricadas por una ideología ortodoxa
y fanática nos corresponde el título de gobierno pequeño burgués, gobierno que, según ellos,
está aliado al imperialismo y es enemigo de las clases trabajadoras. Yo creo, francamente,
que en el fondo han de sonreír de nuestra noble actitud un poco romántica de tener en Moscú
una misión costosa, sin tener ningún interés material que defender. Todos los países
acreditados aquí son vecinos o tienen un intenso comercio con la Unión Soviética. (Naufal,
1996:105-106).
Silva Herzog insistía en denunciar que la embajada y la delegación mexicana en la URSS
estaban vigiladas y que la Tercera Internacional Comunista preparaba más campañas en contra
de México.96 Responsabilizaba al gobierno soviético del deterioro de las relaciones
diplomáticas, especialmente desde que José Stalin asumió la dirección del Partido Comunista
(PC). En correspondencia con Marte R. Gómez, Silva Herzog le explicaba su aislamiento Moscú
96 Ante los sucesos de los asesinatos de los comunistas mexicanos, la Tercera Internacional Comunista publicó en Pravda el 13 de julio, un manifiesto en contra de la reacción fascista en México en donde acusaba al gobierno de Portes Gil de agente imperialista norteamericano, traidor de los obreros como de los campesinos, lacayo del clero y del Papa, de haber cedido ante las exigencias estadounidenses en lo referente a las concesiones petroleras y mineras, postergar la expedición del código del trabajo, despojar a los obreros de las conquistas logradas en los años recientes y a los campesinos de las tierras que les habían entregado. El entonces embajador Silva Herzog, presentó al subcomisario de Negocios Extranjeros una nota diplomática, donde manifestaba su extrañeza por esos ataques, misma que fue respondida en un tono indiferente y frío, argumentando que el gobierno soviético carecía de influencia sobre la Internacional Comunista y sobre la prensa. (Aguilera,1985).
96
y sin posibilidades de hacer nada para remediar su situación. Le solicitaba intercediera ante el
Presidente para que éste ordenara su regreso a México. Marte le sugirió el 5 de septiembre de
1929, un nuevo acercamiento con los soviéticos justificando los principios de la revolución
mexicana.
Somos un país esencialmente agrícola, y que tratamos ante todo de aumentar la producción
agrícola de nuestros campesinos redimidos, […] queremos artículos industriales baratos, ya
sean nacionales o extranjeros, queremos en suma, que la revolución venga acompañada por
la prosperidad de las masas. (Silva,1977:54).
A finales de agosto de 1929, Silva Herzog viajó sin autorización de la SRE de Moscú a Berlín.
Esto le ocasionó una llamada de atención por parte del gobierno mexicano. En respuesta, Silva
Herzog escribió una carta con fecha 4 de septiembre del mismo año, en la que manifestaba su
inconformidad por el regaño. A su juicio, las relaciones diplomáticas con la URSS ya no tenían
ningún sentido ya que las ideologías revolucionarias de ambos países seguían caminos
distintos y hasta opuestos. No existían intereses económicos, es decir, de tipo comerciales
como para seguir manteniendo una misión tan costosa en el extranjero (Naufal,1996).
El Comisariado de Asuntos Exteriores de la URSS, M. Litvinov envió a Silva Herzog una nota
fechada el 20 de octubre de 1929, en la que negaba cualquier responsabilidad de su gobierno
con respecto a la publicación del Manifiesto de la Tercera Internacional. Para Silva Herzog esto
era señal de que las relaciones diplomáticas entre México y la URSS habían llegado a un punto
muerto. La SRE prefirió dejar pasar el incidente y evitar la ruptura de relaciones con la URSS
(Silva, 1977).
97
El 3 de diciembre de 1929, Silva Herzog envió su tercer y último informe a la SRE. En éste
analizaba los aspectos económicos, sociales y políticos, con una breve mención del conflicto
chino-soviético.97 Señalaba los efectos negativos del proceso de industrialización rápida del
país impuesto por la dirigencia soviética. Desde su punto de vista, el burocratismo había
ampliado la desigualdad social, problema que se manifestaba en la baja productividad laboral
por la falta de un incentivo económico, la escasez de alimentos y las restricciones en su
distribución, la baja calidad en la producción industrial. A su vez puntualizaba que los únicos
beneficiados eran los miembros del PC y los obreros, ya que el resto de la población vivía en
malas condiciones y con temor a la represión si manifestaban descontento. Sobre estos asuntos
Silva Herzog expuso
Ya en los momentos actuales puede adivinarse en ciertas disposiciones del Comité Central
del Partido Comunista, la tendencia a conservar, sobre todas las cosas, los privilegios
conquistados por el alto burocratismo triunfante. Algo se ha hecho indudablemente en
beneficio del pueblo ruso; pero es mucho más de lo que se habla. Los libros de propaganda
que en ocasiones se leen en México con una conmovedora buena fe, exageran. Los
positivamente beneficiados son los obreros de las grandes fábricas, quienes constituyen la
fuerza política del partido […] La cuestión fundamental consiste en saber si el régimen
capitalista ha logrado su estabilidad y si tiene posibilidades de renovarse, o si por el contrario
ha llegado definitivamente a su decadencia. En el primer caso el formidable experimento ruso
está destinado a fracasar sin remedio; en el segundo, sus principios se impondrán
inevitablemente a todos los pueblos. (Naufal, 1996:110).
97 En el conflicto fronterizo chino-soviético de noviembre de 1929, para Silva Herzog se debía al interés soviético en hacer de China una nación comunista, tanto para apoyarse en contra de occidente como para apropiarse de su vasto mercado “en el fondo la política soviética en China tiene puntos de contacto con la de las grandes naciones capitalistas en los países coloniales y semicoloniales” (Naufal,1996:110).
98
Por su parte, la SRE envió una nota al Comisario de Negocios Extranjeros de la URSS y al
ministro de Relaciones Exteriores de China en noviembre de 1929,98 apelando al tratado de
renuncia a la guerra que se había firmado en 1928 por los ministros de Asuntos Exteriores de
Francia, el Secretario de Estado de Estados Unidos y los representantes de México y la URSS.
Esta nota no se hizo del conocimiento del ministro mexicano en la URSS lo que provocó que las
autoridades soviéticas acusarán a México de querer intervenir en el conflicto chino-soviético y
de hacerle el juego al imperialismo estadounidense e inglés.
Silva Herzog se dio cuenta que no había sido tarea fácil sacar adelante su cargo diplomático. Él
mismo lo refiere en sus memorias
Pensé que ya no tenía nada que hacer en Moscú. La verdad es que nunca me gustó el cargo.
Llegué a la conclusión de que no servía para la diplomacia. (Silva, 1993:114).
Silva Herzog entendió que no era sencillo para un intelectual tener que seguir una línea o
estatutos políticos muy bien delimitados. Él consideraba estos estatutos como coercitivos que
impedían el actuar correctamente. Esta cuestión la criticaría él mismo durante gran parte de su
vida. Quizá esta sea una de las razones por las cuales Silva Herzog revaloró, ya estando en
México, su afiliación a algún partido político.
Al darse cuenta de su situación, Silva Herzog le envía una misiva a su amigo Marte R. Gómez,
para que solicitara autorización del gobierno mexicano para estudiar la organización de los
Archivos de Economía Mundial de Hamburgo a Berlín. El objetivo consistía en estudiar las
98 En este año estalla la guerra soviética-china por un conflicto fronterizo en Manchuria, motivo por el cual la SRE envía mensajes a ambos gobiernos para que resuelvan sus diferencias al margen de la confrontación. Pero estas misivas se mal interpretaron por el gobierno de la URSS que las considero análogas con las expresadas por Estados Unidos, Francia y Alemania. (Aguilera, 1985).
99
técnicas estadísticas del gobierno alemán. Días después recibió la carta de aceptación de su
renuncia. Un día antes de su partida, el 4 de enero de 1930, Silva Herzog le escribió a la SRE
sus últimas observaciones sobre la situación en Moscú. En este documento le informaba que se
preparaba una campaña en contra de México. Partió de Moscú al día siguiente (Guillen, 1980).
Silva sostiene que el tiempo que estuvo en Rusia fue de gran utilidad para él. Para entonces ya
era considerado un observador experto en economía, historia y sociología. Silva Herzog no
dejo de contrastar durante toda su estancia en la URSS, cómo es que el socialismo real (que él
observó, analizó y criticó), era tan diferente al que pensó en su momento, que ciertamente tenía
aportaciones interesantes en beneficio de la población. Pero también encontró contradicciones
en el modelo soviético, como la del campesino que continuaba viviendo oprimido, pero en esta
ocasión por nuevos opresores el obrero y la burocracia soviética. Así, hizo lo que mejor sabía
hacer, estudiar los problemas económicos que él encontró en la Unión Soviética.
Jesús Silva en sus memorias hace un resumen de su estancia en la URSS, donde vivió por 11
meses. Además de sus compromisos como diplomático, estudió su historia, los aspectos
relevantes de las revoluciones rusas de febrero y octubre, a sus ideólogos (ahondando a Marx,
Engeles, Lenin y Bujarin). Estudió también, los problemas derivados de su revolución agraria,
los esfuerzos para su industrialización acelerada, la organización de los transportes, el comercio
interior y exterior, lo relativo a los salarios, los precios, la banca y la moneda, así como las
formas de elevar el nivel cultural de la población como fue le caso de las universidades.
No escatimé esfuerzo para entender al país lo más posible. Las obligaciones del diplomático
quedaron subordinadas, muy subordinadas a las de economista. (Silva,1970:128).
100
Al terminar su aventura soviética, Silva Herzog añadió a su experiencia profesional, que
almacenaba desde sus años juveniles, aquéllos que obtuvo durante su estancia en aquel
lejano país. Como investigador adquirió una valiosa e importante lección: “aunque exista una
ferviente admiración o congruencia hacia algún modelo o tipo de pensamiento no se debe
permitir el investigador dejarse llevar por ello, porque perdería su objetividad al intentar
estudiar cualquier fenómeno que llamará su atención”. Al contrastar la realidad contra lo
teórico, generalmente surgen desviaciones, siendo las expectativas las primeras en
desalentarlo, pero si el investigador no tiene la suficiente capacidad de autocrítica, lo puede
llevar a extremos, como el no querer reconocerlo ó tornarse totalmente hostil hacia lo que
una vez creyó (escepticismo). En ambos casos se pierde la objetividad científica. Esta
lección será una de las mejores herramientas intelectuales que acompañarán a Silva Herzog
en su vida, sobretodo en el estudio del Dictamen del conflicto petrolero que coordinó varios
años después. Su ideología nacionalista no fue impedimento para demostrar que él podía
ser absolutamente objetivo en la solución de la problemática petrolera.
3.4 Estudios en Alemania
Después de su salida de la Unión Soviética, Silva Herzog permaneció en Alemania durante tres
meses (del 6 de enero al 11 de marzo de 1930) dedicado a sus trabajos de economía. El 24 de
enero del mismo año, el ministro de México en Alemania, Primo Villa Michel le mostró un
comunicado del gobierno mexicano “Informe a Silva Herzog que hoy hemos roto relaciones con
la Unión Soviética” (Guillén,1969; Silva,1986:117). En sus memorias Silva Herzog afirma que la
noticia lo dejó perplejo, a la vez que le ocasionó una inquietud. ¿Habría sido él el causante de
tal decisión, generada por su inexperiencia como diplomático? Esta situación dejó a Silva
Herzog pensando por algún tiempo después de lo ocurrido. ¿Hasta donde fue él responsable
101
que se tomara tal decisión? Ante esta situación escribe su libro 1928-1930 un mal momento en
las relaciones México-Soviéticas. Éste se publicó en 1977; contiene información sobre lo
ocurrido durante su gestión como embajador. Al revisar la obra Quince años de política
mexicana del entonces presidente Portes Gil, quien tomó finalmente la decisión de terminar las
relaciones diplomáticas con la Unión Soviética, en ambos documentos se observa que las
circunstancias de la ruptura fueron varias. Algunas de éstas las describió Silva Herzog, pero
también se puede imputar cierta responsabilidad a Alejandro Makar, entonces embajador
soviético en México.
Durante su estancia en Berlín, Silva Herzog trabajó en el Instituto de Coyuntura99 y en los
Archivos de Economía de Hamburgo, sitio donde conoció al economista alemán Ernesto
Wagemann quien era el director del Instituto para la Investigación de la Coyuntura y presidente
de la Oficina Central de Estadística del Reich. Silva Herzog estudió los archivos, además de las
técnicas estadísticas del gobierno alemán. Posteriormente se trasladó a Hamburgo para
conocer el sistema de los archivos de economía mundial. Se hizo miembro del Instituto
Económico Latinoamericano de Berlín. Impartió una serie de conferencias sobre “La Revolución
mexicana” en el Instituto Iberoamericano de Berlín. Visitó la Oficina Central de Estadística del
Reich. En ese país conoció a Víctor Raúl Haya de la Torre, quien le presentó al periodista
español Adelaido Fernández Arias, corresponsal de Crítica, un periódico vespertino de Buenos
Aires. Éste último le hizo una entrevista sobre su experiencia en Rusia, siendo ésta, quizá, de
las primeras impresiones sobre aquel país que Silva Herzog, comentaba fuera del ámbito oficial
y de sus amigos cercanos. El 11 de marzo se embarcó en Hamburgo. Su viaje lo hizo en el
99 El Instituto de Coyuntura era entonces famoso entre los especialistas europeos, por haber alcanzado cierta precisión en el pronóstico de la economía alemana a corto y mediano plazo. (Silva,1977).
102
barco de vapor “abril del mismo año.100 Días después se presentó en la SRE a disponibilidad
del gobierno federal.
3.5 Designación como Secretario de Acción Obrera y del Exterior del PNR
En abril de 1930, Silva Herzog fue invitado por Portes Gil para formar parte del Partido Nacional
Revolucionario (PNR) como uno de los secretarios del Partido.101 Fue designado secretario de
Acción Obrera y del Exterior del Comité Ejecutivo Nacional del PNR. En compañía de Miguel
Othón de Mendizábal organizaron la Universidad Obrera y Campesina en 1930,102 concebida
como un órgano de capacitación política. En esta institución se creó el Departamento de
Investigaciones Económicas (un pequeño instituto) siendo el jefe Renato Molina Enríquez. Silva
Herzog también invitó a 2 estudiantes de la Escuela Nacional de Economía a colaborar con él,
Elpidio Martínez y Félix Chaires. La función del departamento consistía en la investigación de
las condiciones económicas de los locatarios de los principales mercados citadinos (Pallares,
1952). Por su parte en la Universidad Obrera se impartieron clases de historia de México,
historia universal, economía política, aritmética, entre otras.
Al renunciar Portes Gil como presidente del PNR, por sus diferencias con el presidente de la
República Ortiz Rubio, fue sustituido por el general Lázaro Cárdenas del Río. Éste último es el
encargado de ordenar la supresión de la Universidad Obrera y Campesina, motivó por lo cual
100 Se le autoriza para el recorrido de Alemania a esta capital, por concepto de pasaje $2,289.73 y viáticos por $1,120, de Berlín a Hamburgo (Archivo Histórico de la Secretaría de Relaciones Exteriores “Genaro Estrada”, 1930), Expediente 18-13-27, folio 43. 101 Por inspiración de Calles y Portes Gil se fundó el Partido el 6 de marzo de 1929, en Querétaro en el Teatro de la República, para crear una mayor estabilidad política a las instituciones, Silva Herzog opinó que la formación del Partido significó la no intervención política del ejército en la política del país, el PNR quitó al ejército la función electoral en que había venido interviniendo desde el año de 1920 (Wilkie & Monzón,1969). 102 “Mi tarea en el Partido se limitó a fundar y dirigir la Universidad Obrera y Campesina. […] Queríamos contribuir a la elevación cultural del proletariado de la ciudad y del campo. Desgraciadamente, por cambios en la dirección del Partido, la vida de la Universidad sólo duró cuatro meses”. (Silva,1964:10).
103
Silva Herzog presenta su renuncia en octubre del mismo año.103 Lo cierto es que a Jesús Silva
le molestaban los giros de la política y la falta de independencia en la toma de decisiones
(Naufal,1996). Ésta fue la última vez que Silva Herzog tomó parte activa en la política nacional.
En adelante él emplearía sus virtudes políticas para llamar la atención sobre los errores y
desviaciones que hacían los gobiernos sobre la revolución y poner de relieve sus correctos
ideales y principios. A este respecto, Bolívar (2002) argumenta que el intelectual y su
pensamiento requieren de una capacidad de reflexión, es decir, de un pensamiento
independiente, que no este estereotipado, ya que su fidelidad esta en contradicción entre la
verdad y el compromiso político adquirido.
Silva Herzog no tuvo en sus planes hacer una carrera política, pero si influir en las decisiones
del poder, sin la necesidad de inmiscuirse directamente en la política. A esto es a lo que
Gramsci (1975) denomina convertirse en un intelectual orgánico del gobierno cardenista. Es el
presidente Cárdenas quien selecciona a aquéllos intelectuales que se harán cargo no sólo de la
especialización económica, sino también del desarrollo social y político. En el caso de Silva
Herzog, éstos elementos fueron producidos, primero, porque en esa época se contaba con
poquísimos intelectuales y segundo, porque sus pensamientos ideológicos contenían cierta
homogeneidad nacionalista.
Una vez liberado de sus compromisos políticos, por este mismo periodo, el entonces Secretario
de Hacienda, Luis Montes de Oca designó a Silva Herzog104 asesor del Comité reorganizador
103 Otra versión está en la entrevista que James Wilkie le hizo el 12 de mayo de 1961, en donde al cambio de Portes Gil por Cárdenas, Silva Herzog presenta su renuncia, y al poco tiempo desapareció la Universidad Obrera. (Wilkie & Monzón,1969). 104 Al mismo tiempo en ese periodo por unos meses es Secretario de Acción Obrera y del Exterior del PNR, asesor del Comité Reorganizador de los Ferrocarriles Nacionales y profesor en la escuela de derecho y ciencias sociales de historia del pensamiento económico (Wilkie & Monzón,1969).
104
de los Ferrocarriles Nacionales de México.105 De esta forma se encontraba nuevamente
asesorando sobre diversos aspectos relacionados con esta importante empresa de la época.
3.6 En la Oficina de Estudios Económicos de los Ferrocarriles Nacionales de México y en la Escuela Nacional de Economía
Silva Herzog se desempeñó en este cargo de mayo de 1930 hasta agosto de 1932. Realizó una
serie de estudios sobre los ferrocarriles y organizó un archivo económico-estadístico sobre
transportes.
En ese mismo año, la licenciatura en Economía de la recién creada sección de Economía de la
Escuela de Jurisprudencia de la Universidad Nacional se vio amenazada con desaparecer a
causa de un grupo de abogados y contadores que consideraron que carecía de interés entre el
estudiantado. Según ellos esta carrera duplicaba las funciones del abogado y el contador. El
asunto se llevó ante el Consejo Universitario, donde el rector Ignacio García Téllez invitó a Silva
Herzog y a Miguel Palacios Macedo como representantes de los economistas. En sus
discusiones estos intelectuales pronunciaron argumentos ante el Consejo Universitario de la
importancia y el impacto que tendría para México si esta carrera desaparecía. Su defensa fue
tan convincente, que la sección de Economía no desapareció. Actualmente se le conoce como
la Facultad de Economía de la UNAM.
Y es que para Silva Herzog estudiar una licenciatura en economía, significaba adentrarse en el
estudio de los grandes problemas económicos de México, problemas que no podían ser
105 En mayo de 1930 con motivo de la creación del Comité Reorganizador integrado conformado por el General Plutarco Elías Calles, el secretario de Hacienda Luis Montes de Oca y el presidente ejecutivo de la empresa el ing. Javier Sánchez Mejorada (PRI-CEN,1985; Silva,1989).
105
discutidos por representantes de cámaras de comercio de lugares pequeños y lejanos o por
contadores y abogados que no tenían conocimiento de esta problemática (Naufal, 1996).
Del periodo del 16 al 26 de mayo de 1930, Silva Herzog impartió 4 conferencias en la biblioteca
de la SHCP motivado por el deseo de divulgar su fallida experiencia diplomática en la Unión
Soviética. Fue una narración objetiva donde enunció su metodología. Mediante la técnica de la
observación directa, buscó explicaciones a los hechos. En ocasiones hacía analogías para
entender lo que estudiaba; de esta manera informó a los asistentes de sus experiencias,
observaciones y puntos de vista. Estas conferencias se publicaron en el periódico El Nacional,
en un pequeño volumen106 titulado “Aspectos económicos de la Unión Soviética”. El prólogo fue
realizado por Jesús S. Soto, quien opinaba sobre Silva Herzog “[…] es un conferencista más
que todo, su plática es sencilla, encierra siempre interés, tiene interesantes observaciones,
debido a su práctica de profesor tiene la facilidad de dicción; su palabra convence fácilmente, y
quien lo escucha es capaz de deducir las ideas que el orador sugiere conforme transcurre el
discurso”.
Silva Herzog ha sido un ejemplar testigo. Relata lo que pudo recoger en su pensamiento de lo
mucho que vio. Lo expone bien. Hay en él, como dijimos, la suficiente dosis de honradez para
ser creído. Es hombre de nuevas tendencias. Y su rápida síntesis de los diversos aspectos
económicos de la Unión Soviética, que nos presenta en estas páginas, como relación de cosa
observada, como clara exposición de algo visto atentamente, con deseo de conocerlo.
(Silva,1992: 25)
En el mismo año tanto el libro como las conferencias fueron comentadas en la prensa nacional,
mediante la publicación de algunos artículos periodísticos sobre la propuesta soviética y sus
106 El Partido Nacional Revolucionario lo edita en los talleres tipográficos de El Nacional Revolucionario
106
impresiones: “La Rusia de los soviets”, “Impresiones sobre Rusia”, “La Rusia de Silva Herzog”
publicados por el periódico El Nacional del 20 y 27 de mayo, así como el del 16 de octubre del
mismo año. (Naufal,1996).
En 1931 Silva Herzog impartió su primer curso de Historia de las doctrinas económicas, en la
Sección de Economía. Participó también como conferencista en los auditorios de la Facultad de
Filosofía y Letras y de la Escuela de Derecho y Ciencias Sociales, siempre hablando sobre
temas económicos.
En enero de 1932, Silva Herzog reorganizó la Oficina de Estudios Económicos de los
Ferrocarriles Nacionales de México, con el apoyo de la SHCP (la primera en su género y una
biblioteca especializada en transportes). Colaboraron con él Daniel Cosío Villegas (quien será el
subjefe de esta oficina durante un tiempo), Gonzalo Robles (será asesor posteriormente de la
dirección del Banco de México), Pascual Gutiérrez Roldán (quien sería director de PEMEX),
Moisés T. de la Peña (economista que tendrá renombre como autor de diversos libros),
Federico Bach y otros más. En trabajo en esta dependencia Silva Herzog consideró necesario
basar su actuación.
En el conocimiento serio y detallado de los asuntos que tiene a su cargo, tanto por medio de
estudios teóricos sobre organización ferrocarrilera como realizando investigaciones de
primera mano sobre las cuestiones de mayor importancia e interés. Al acudir al análisis
científico de los problemas que necesita resolver. (Silva, 1989:5).
En esta oficina se llevaron a cabo varios trabajos de investigación que se publicaron
posteriormente como: Los salarios y la empresa de los Ferrocarriles Nacionales de México, Un
estudio del costo de la vida en México, México económico 1928-1930 y Los seguros sociales en
107
el exterior.107 Estos trabajos fueron comentadas por la prensa y otros estudiosos, sobretodo por
su novedad y la manera de abordar los temas de interés.
Los salarios y la empresa de los Ferrocarriles Nacionales de México fue publicado en 1931 por
Jesús Silva Herzog en colaboración con Manuel Mesa Andraca, Manuel Vázquez Díaz y Carlos
Manuel Cox. En este trabajo se propuso estudiar la situación financiera y laboral de la empresa
antes y después de la revolución (entre los periodos de 1908-1912 y 1925-1930). La finalidad
era encontrar las causas que la llevaron a la bancarrota y emprender su reestructuración.
En el estudio se expone información económico-estadística (alguna de primera mano, sobre
salarios, ingresos y egresos, número de empleados, toneladas y pasajeros transportados,
extensión de las líneas, número de máquinas, etc.) de los ferrocarriles nacionales con otras
empresas del ramo nacionales y extranjeras, se compara los salarios de los ferrocarrileros con
el de otras actividades económicas ligadas a la producción y los servicios para determinar el
nivel de ingresos de los trabajadores en los distintos sectores de la sociedad.
También se establecen las diferencias entre el salario nominal y el salario real. Como era de
esperarse, el título se vió rebasado por su contenido, pues además de analizar la cuestión de
los ferrocarriles, también planteaba la situación del gobierno, la banca y otras industrias como la
azucarera, la cervecera y minera para sondear el costo y nivel de vida de los mencionados
trabajadores. Para este estudio Jesús Silva se apoyó de material biblio-hemerográfico nacional
e internacional (Naufal,1996). En los resultados del estudio, Silva Herzog sostiene que:
a) Los salarios de que disfrutan actualmente la mayor parte del personal de los Ferrocarriles
Nacionales de México están dentro de límites normales; b) los Ferrocarriles Nacionales de
107 En todas las obras a excepción de la “Los seguros sociales en el exterior” que es obra de Federico Bach, colabora Silva Herzog junto con otros integrantes de la Oficina de Estudios Económicos.
108
México gastan anualmente en sueldos mucho más de lo que aconseja una sana y prudente
política financiera; c) Si los sueldos individuales están en la mayoría de los casos dentro de los
límites que hemos calificado de normales, y por otra parte las cantidades que por concepto de
sueldos se gastan anualmente resultan excesivas, es lógico concluir que el mal estriba en que los
Ferrocarriles Nacionales de México hay más personal del necesario y del que requiere una
organización ponderada, sensata y eficiente; d) El hecho de que los Ferrocarriles Nacionales de
México gasten en sueldos más de lo debido, no muestra que sea éste el factor único de las
malas condiciones financieras de la empresa, es únicamente uno de los varios factores que han
contribuido a producir tales efectos. (Ferrocarriles Nacionales de México, 1931a:236-237)
En el subsecuente trabajo que se publicó en el mismo año, titulado “Un estudio del costo de la
vida en México”,108 fue redactado y dirigido por Jesús Silva Herzog, contó con la colaboración
de Enrique Sarro, Manuel Mesa A., Elpidio Martínez Trousselle en los trabajos de preparación
del material. siendo este el más sobresaliente de los trabajos efectuados, Silva Herzog se
proponían conocer los ingresos y los gastos familiares de los empleados del gobierno federal,
de los obreros de algunas de las industrias más importantes del país y de los trabajadores
ferrocarrileros, para determinar el costo de la vida en el país y proceder sobre bases más firmes
y ponderadas, al reajuste de personal en los Ferrocarriles Nacionales de México, en base a los
resultados de su investigación anterior, como parte del estudio Silva Herzog elaboró una
encuesta (primera en su tipo), en la que establecía la relación entre el número de miembros de
familia, sus ingresos y sus gastos en renta de casa, alimentos, vestido, hogar, salud, transporte,
cultura, diversiones, etc. El interés mostrado por las autoridades de Hacienda porque se
hicieran este tipo de estudios, influyeron para que se escogiera dicha dependencia para aplicar
la encuesta, porque era una de las mejor organizadas, además entre su numeroso personal se 108 La primera edición la publicó Ferrocarriles Nacionales de México, posteriormente se reimprimió por la Facultad de Economía de la UNAM en 1989 en su colección clásicos de la economía mexicana. Con este libro el autor realiza una de las primeras investigaciones empíricas sobre las características del consumo de la población. El objetivo central fue conocer el nivel de vida de los habitantes del país, al considerarse como el mejor indicador para conocer la situación real y el grado de adelanto de una sociedad.
109
encontraba representada toda la escala de la clase media mexicana. Al respecto Silva Herzog
sostiene
Los empleados del Gobierno representan toda la escala de la clase media mexicana, desde
la más modesta hasta la que se confunden con la gran burguesía, y un estudio de las
condiciones de vida de esa clase social, que papel tan importante ha desempeñado en la
historia de nuestra patria y desempeña en la actualidad, es sin disputa una cuestión de
positiva importancia. (Ferrocarriles Nacionales de México, 1931b:29).
Así se repartieron once mil ochenta y cinco cuestionarios entre los empleados de la SHCP,
según argumenta Silva Herzog ocurrieron algunas deficiencias y omisiones que en todo
caso pueden considerarse como no esenciales. Se recibieron 4,084 contestaciones que
sometido a cernido riguroso, vinieron a dejar 2,000 documentos útiles (o sea el 50% de las
recibidas). La información recopilada y expuesta se refiere al Distrito Federal, Matamoros,
Mazatlán, Nuevo Laredo, Progreso, Puerto México, Tampico, Veracruz, ciudades que por
razones peculiares habían sido escogidas como puntos de referencia (por su importancia), la
comparación del costo de la vida en la capital y en cada una de esas ciudades de la periferia
ofrece aspectos de interés confirmando a veces y destruyendo en otras ciertas afirmaciones
de sentido económico admitidas como axiomas.
Silva Herzog estableció con esta investigación, el primer estudio estadístico-económico en
utilizar los números índices del costo de la alimentación, con el objeto de detectar el efecto de
las oscilaciones de los precios de los alimentos, en las condiciones de vida de la población y de
la economía en su conjunto, (lo cual se puede dar como uno de los antecedentes del actual
índice nacional de precios al consumidor, con que se mide el aumento de los precios en
relación con el salario). Para Silva Herzog, el progreso de una nación dependía del bienestar de
110
las mayorías; de ahí su interés por determinar el nivel de vida de los mexicanos y conocer la
situación real junto con el grado de avance del país.
La prensa realizó varios comentarios favorables al estudio,109 como son los casos de Carlos
Díaz Dufoo, quien celebraba que se hicieran este tipo de monografías al margen de todo
principio doctrinario; Enrique Sarro en la reseña que publicó señalaba el mérito principal de la
obra, en la admirable labor ejecutada para obtener informaciones de primera mano, en su
opinión esto probaba que en México se empezaban hacer estudios técnicos, serios y bien
presentados al igual que las investigaciones europeas y estadounidenses; en tanto Humberto
Tejera, lo destacó por su probidad técnica que contenía el estudio. (Naufal,1996).
Otra de las obras, fue realizada en 1932, cuyo título México económico 1928-1930”110 Se puede
considerar como uno de los primeros anuarios económicos111 que se editan en México. En este
trabajo Silva Herzog coordinó los siguientes apartados: “Comunicaciones y transportes” y
“Ferrocarriles Nacionales de México”. Como colaboradores participaron Daniel Cosío Villegas,
Pascual Gutiérrez Roldán, Humberto Tejera y Ramón Fernández y Fernández (Facultad de
Economía, 1989).
En el capítulo “Comunicaciones y transportes” se presentaba un panorama completo de la
situación que guardaba la economía del país en un entorno de crisis mundial. En este estudio
109 Carlos Díaz Dufoo “El reajuste de los Ferrocarriles Nacionales” en el periódico Excélsior de fechas 5 y 12 de marzo de 1931; Enrique Sarro “El informe de los ferrocarriles” en El Economista del 1º de marzo de 1931 y Humberto Tejera “Un importante estudio sobre el costo de la vida en México” también en El Economista del 1º de febrero de 1932. (Naufal,1996). 110 México económico 1928-1930 anuario estadístico de la Oficina de Estudios Económicos de los Ferrocarriles Nacionales de México publicado en 1932, reimpreso por la Facultad de Economía en su colección clásicos de la Economía Mexicana en 1989. 111 El anuario económico sirven para orientar de una manera más sencilla a los negociantes y empresarios, o en general a los interesados en las actividades productoras y en las transacciones de intercambio comercial, ya sean nacionales o extranjeros.
111
Silva reitera su preocupación de que la falta de contacto de las zonas de producción y los
centros de consumo interno y externo112 impedía al país aprovechar plenamente sus riquezas y
desarrollar su potencial económico. Llama la atención que la crisis de 1929 no afectó de la
misma manera a toda la economía del país. Algunos sectores se desarrollaron pese a esta
problemática.
En su estudio Silva utiliza información reunida desde abril de 1932. La metodología empleada
consistió en el envío de solicitudes a sus conocidos en el gobierno sobre información relevante
del trabajo encomendado. Ejemplo de ello es el pedido que hizo a Aurelio Bueno para que éste
a su vez solicitara al Secretario de Relaciones Exteriores, datos sobre tarifas de los ferrocarriles
de una distancia de 50,100, 200 y 300 km. para las siguientes mercancías: aceite comestible,
algodón, azúcar, café, carbón de piedra, cemento, coque, fierro para construcción, frutas,
legumbres, ganado lanar, ganado vacuno, gasolina, maderas corrientes, maíz, metales en
barra, piedra mineral y trigo en los siguientes países: Inglaterra, Francia, Alemania, Argentina y
Brasil.113 La solicitud fue turnada por la SRE a los consulados de París, Hamburgo, Londres,
Barcelona, Yokohama y Buenos Aires. Durante esta recopilación de información se prefirió no
tomar en cuenta datos, que no creyeron que tuvieran un rigor metodológico en su elaboración,
con lo cual se buscaba que esta obra tuviera seriedad y solidez en el material acopiado.
A mediados de 1932, el gobierno de Abelardo Rodríguez tomó la decisión de entregar a los
trabajadores la administración de los Ferrocarriles Nacionales. Alberto J. Pani, nuevo secretario
de Hacienda, ordenó la desaparición de la Oficina de Estudios Económicos de los Ferrocarriles 112 Este tipo de postulados que dió Silva Herzog son ya propiamente de tipo económico, en la actualidad son parte de los estudios económicos para analizar la producción o inversión de nuevas empresas o expansión de las mismas. 113 (Archivo Histórico de la Secretaría de Relaciones Exteriores “Genaro Estrada”,1932) Expediente IV-619-3, documentos 1 y 2.
112
Nacionales por considerarla inútil; con ello se canceló la reorganización de éstos. (Naufal,1996).
Este hecho es lamentable porque de esta oficina se publicaron trabajos de investigación muy
interesantes que repercutieron en otros estudios. Esta situación propicia que Silva Herzog se
regrese a la docencia de tiempo completo, impartiendo clases en la Facultad de Derecho y
Ciencias Sociales, en la Sección de Economía. El 7 de octubre de 1932 presentó una solicitud
para obtener el grado de Maestro en Ciencias a la Comisión de Inspección y Revalidación de
Estudios, Títulos y Grados de la Universidad Nacional. El 20 de junio de 1933 le informaron que
su petición había sido rechazada por no cumplir con el requisito del tiempo de servicio
estipulado, como profesor de la Universidad. (Cardiel, 1981).
Por otro lado, en octubre de 1931, el General Calles le sugiere al presidente Ortiz Rubio, que
designará como Secretario de Educación a Narciso Bassols, quien posteriormente llevaría a un
grupo de colaboradores entre quienes figuraban: Luis Padilla Nervo, Jesús Silva Herzog,
Manuel Mesa Andraca, Luis Enrique Erro, Agustín Yañez, Carlos Chávez, Manuel Sánchez
Cue, Samuel Ramos, Juan O’ Gorman, Mauricio Magdaleno, Alfonso Cortina, a los hermanos
Lizt Arzubide y Federico Villaseñor. (Villaseñor, 1976).
3.7 En la Secretaría de Educación Pública con el Lic. Narciso Bassols
El Lic. Narciso Bassols Secretario de Educación Pública, le ofreció la Oficialía Mayor a Silva
Herzog, cargo que acepta a partir del día 28 de octubre de 1932. Sus actividades consistían en
supervisar que las escuelas particulares, dieran cumplimiento al artículo 3º constitucional
(ordenamiento en el cual se determinaba que la enseñaza debía de ser laica). Silva desempeñó
este cargo durante cuatro meses. (PRI-CEN, 1985). El 10 de febrero de 1933 fue ascendido, en
sustitución del Lic. Luis Padilla Nervo, como subsecretario de Educación Pública. Entre los
113
asuntos que atendió Silva Herzog se encontraban: proponer una iniciativa de ley que le otorgara
la plena autonomía a la Universidad, para lo cual trabajó con Luis Enrique Erro por indicaciones
de Bassols, al terminar la propuesta se la entregaron, pero Bassols presentó otro proyecto
totalmente diferente al realizado por Silva y Erro, el cual fue finalmente aprobado por la Cámara
de Diputados. La Universidad quedaba independiente del gobierno; se le dotaba de un
patrimonio propio además de un presupuesto (que consistía en los intereses que generaba 10
millones de pesos). (Silva, 1970).
Además, en colaboración con la Dra. Matilde Rodríguez Cabo, jefa del Departamento de
Psicopedagogía, Silva Herzog elaboró un estudio sobre la influencia de la alimentación en la
capacidad del aprendizaje de los niños. La metodología empleada en este estudio se puede
sintetizar da la siguiente manera: tomar 3 grupos de tercer grado de primaria de un barrio
proletariado; se les proporcionaría durante todo el año escolar alimentos conforme al grupo de
estudio: 150 niños a los que se les dio desayuno y comida durante 10 meses; 150 solamente se
les dio desayuno y a 150 no se les dio nada (estos niños servirían de comparación, es decir,
como grupo testigo).
Los resultados del estudio arrojaron que los niños que además de desayuno también se les
proporcionó comida tenían un 82% de aprovechamiento; los que solamente se desayunaron:
61%; y de los que no se les había dado nada, solamente el 48% había aprobado el examen
final. Se observó una relación directa entre la capacidad intelectual y la nutrición, por lo que se
concluyó que el problema educativo de México no sólo consiste establecer escuelas y más
escuelas, sino además, en gran medida es un problema de nutrición apropiada para el normal
desarrollo biológico del niño, del adolescente y del joven. (Silva, 1953).
114
Durante su gestión como Secretario de Educación Pública, Bassols, presentó su proyecto de
educación sexual para que se impartiera en 5º y 6º de primaria, así como en la secundaria.
Silva Herzog al conocer el proyecto, analizó y predijo las posibles consecuencias al secretario
de Educación; en su opinión este asunto acarrearía un mayor problema. El dictamen referente a
la educación sexual rendido por la Comisión Técnica Consultiva donde se expusieron las
ventajas y desventajas de tal medida, así como la conveniencia de que en las escuelas se
impartiera tal educación, así como las propias declaraciones del secretario de Educación se
publicaron en la prensa. Bassols fue muy criticado por sus ideas radicales, sobretodo por los
diarios de oposición como El Universal, Excélsior y Novedades. Debido a la reacción que
tuvieron los padres de familia al cerrar varios planteles, Bassols se vio obligado a renunciar el
11 de mayo de 1934. Silva Herzog presentó también su renuncia cuatro días después, al darse
cuenta de que sus opiniones disentían en lo fundamental con las del nuevo secretario de
Educación, Eduardo Vasconcelos. (Aguilar & Mesa, 1964).
3.8 En la SHCP con el Lic. Narciso Bassols
Uno de los asuntos más destacados, que Bassols y Silva Herzog lograron en la SCHP fueron
los asuntos relacionados con la compañía petrolera “El Águila”, la cual hacía mal uso de los
términos del convenio, concedidos por el gobierno a la compañía Pearson and Son en 1906.114
A partir de 1918, al establecerse el impuesto a la exportación del petróleo, esta compañía
pagaba mensualmente a la Tesorería de la Federación, una cantidad menor a la que realmente 114 Tal convenio se aprobó por la Cámara de Diputados, siendo un contrato entre Pearson & Sons y el gobierno federal para la explotación de petróleo en terrenos nacionales. La cía. debía pagar de las utilidades que obtuviera el 7% al gobierno federal y 3% a los estados en cuyo territorio obtuviera el petróleo; en compensación el gobierno le eximía del pago de todo gravamen fiscal con excepción del impuesto del timbre, Pearson & Sons traspasó el contrato a la Compañía Mexicana de Petróleo “El Águila” donde se estipulaba que la concesionaria solamente pagaría el impuesto del timbre; en 1917 el Secretario de Hacienda, Lic. Luis Cabrera estableció un impuesto sobre la producción de petróleo que debía pagarse en timbres. (Silva,1986).
115
adeudaba (bajo una nota de protesta “Bajo protesta, en calidad de depósito y a cuenta de
impuestos futuros”) (Silva,1986:158). Silva Herzog fue asignado para realizar el cálculo exacto
de aquello que no había pagado la compañía El Águila. Después del estudio realizado por Silva,
la compañía petrolera adeudaba un total de siete millones de pesos. Sus representantes
protestaron porque el secretario de Hacienda ordenó que se le prohibiera la salida de los
puertos mexicanos a cualquier buque de esta empresa hasta que no liquidaran su adeudo. La
compañía se veía en aprietos ya que tenía varios barcos en Tampico, Tamaulipas, en Tuxpan,
Veracruz y en Puerto México. Finalmente liquidó sus deudas con nuestro país pagando el total
de impuestos atrasados, sin embargo se hizo acreedora a la cancelación, por medio de un
acuerdo presidencial, de su concesión otorgada en 1906.
Debido a los constantes ataques del diario La Prensa hacía el gobierno cardenista, Bassols115
solicitó a Silva Herzog y a Roberto López a que propusieran una manera para que el gobierno,
ejerciera un cierto control sobre los periódicos, cuando su acción fuera perjudicial a la marcha
normal del país. Silva Herzog propuso fundar una compañía con capital mayoritariamente del
erario público federal. De esta manera surge la Productora e Importadora de Papel S. A.116
(PIPSA). 117 Gustavo Espinosa Mireles fungió como su primer gerente y Silva Herzog quedó
como uno de los miembros del Consejo de Administración. Una de las consecuencias que tuvo
la fundación de PIPSA fue que la principal productora de papel del país, la Fábrica de Papel
115 Las fuentes consultadas, no dan mayor información, si fue por encargo del mismo Cárdenas, u otro funcionario del gobierno, o si fue por iniciativa propia que decide llevar a cabo tal acción. 116 “PIPSA cuya función principal era proveer a la prensa de la materia prima necesaria para elaborar su producto. Está fue una forma novedosa de ejercer control por parte del gobierno sobre los periódicos y revistas mexicanos e indirectamente de establecer censura sobre sus contenidos” (Aliskyi M., 1981 “Latin America Media: Guidance and Censorship”, Iowa State University Press citado en Gómez Palacios,1998:7). 117 Por decreto del 21 de agosto de 1935, comienza a operar el 10 de septiembre del mismo año, con un capital de 500 mil pesos del Gobierno Federal y 40 mil de algunas publicaciones periódicas, su función fue vender papel a los diarios al precio de compra, sin el impuesto de importación, debido a que PIPSA recibía del Gobierno Federal un subsidio igual a dicho impuesto. (Silva,1988).
116
San Rafael dejó de producir papel para periódicos, en consecuencia, todos los diarios tenían
que adquirirlo a través de PIPSA, manteniendo así su control.
Debido al conflicto que se suscito entre Elías Calles y Cárdenas, Bassols fue comisionado por
Cárdenas para solicitarle a Calles su salida del país. Bassols se entrevistó con el General
Calles en su casa de Cuernavaca para pedirle su salida del país por instrucciones del general
Lázaro Cárdenas debido a las declaraciones que hizo Calles desaprobando algunos aspectos
del gobierno cardenista. Para esta encomienda Bassols se hizo acompañar de algunos de sus
amigos cercanos, entre ellos Jesús Silva Herzog, Padilla Nervo, Ricardo J. Zevada y Roberto
López quienes esperaron a Bassols en el auto, mientras éste llevaba a cabo la misión
encomedada por el presidente. Silva Herzog en sus memorias relata que al regresar Bassols
con ellos, les comentó que el general Calles estaba de acuerdo y saldría del país, asunto que
rápidamente informaron al Presidente (Silva,1970). Sin embargo, después de casi una hora de
entrevista con Cárdenas; Bassols les anunció que había presentado su renuncia al presidente.
Cárdenas le solicitó a Bassols que continuara al frente de la Secretaría. Bassols se negó a ello,
precisamente, por su lealtad con el general Calles.118 Bassols fue sustituido por Lic. Eduardo
Suárez; mientras que Silva Herzog continuó laborando por algún un tiempo más en la
Secretaría. Un altercado con el Oficial Mayor, José Raymundo Cárdenas (hermano del General
Lázaro Cárdenas) fue el detonante para que Silva presentara su renuncia a la Secretaría, al
parecer, su lealtad con Bassols fue el resultado de su decisión.
A petición del nuevo Secretario de Hacienda Lic. Suárez, Silva Herzog se convirtió en su
asesor. De 1936 a 1939 se dedicó exclusivamente a estudios económicos y hacendarios. En
118 Calles regresa a México en franca rebeldía el 13 de septiembre de 1935, iniciando una campaña contra el régimen cardenista retorna a su domicilio donde agrupa a sus seguidores, la llegada de Calles provoca una agitación nacional, por lo que es consignado, pero ante las amenazas contra su persona o terminar encarcelado, Cárdenas lo manda al exilio junto con Luis Morones, Luis L. León y Melchor Ortega en abril de 1936 (Portes,2003)
117
este lapso de tiempo creó la Comisión de Estudios Financieros, institución que existió hasta
diciembre de 1941. En esta etapa de su vida, Silva Herzog combina sus cargos
gubernamentales con la docencia en la Universidad que para entonces le había retirado
temporalmente el Estado su carácter nacional. Por algunos años sería conocida como
Universidad Autónoma solamente.
118
Capítulo IV. Jesús Silva Herzog y el Grupo Especial Número 7
Anteriormente, Silva Herzog había realizado algunas investigaciones acerca de la importancia
del petróleo. En mayo de 1926 impartió en la Universidad Michoacana de San Nicolás de
Hidalgo en Morelia, una conferencia intitulada “El problema del petróleo.” Años después, el 12
de septiembre de 1930 publicó un artículo relacionado con esta temática en el periódico El
Nacional; le denominó: “Los comerciantes, el fisco y el petróleo”.
Con el paso del tiempo sus intereses intelectuales sobre el asunto petrolero se incrementaron
considerablemente. Su mayor experiencia en este campo la consiguió al colaborar en 1934,
como funcionario gubernamental con Narciso Bassols en la Secretaría de Hacienda. Ahí,
descubrió algunas de las artimañas que la compañía petrolera ”El Águila” utilizaba para evadir
impuestos en nuestro país.
La experiencia profesional adquirida por Silva Herzog en asuntos fiscales de evasión de
impuestos así como sus conocimientos en el área económica de México, le permitieron
adentrarse en la problemática petrolera. Su experiencia en la dirección de investigaciones, de
cierta importancia que había efectuado anteriormente en Ferrocarriles Nacionales, lo perfilaban
como uno de los hombres más capaces para llevar a cabo el estudio, peritaje y dictamen que
terminaría no sólo con el conflicto petrolero, sino que llegarían a ser pilar para la toma de
decisiones del gabinete del presidente Cárdenas a favor de la expropiación petrolera.
En entrevista del 12 de mayo de 1961 a James Wilkie, Silva Herzog sostiene:
A mí me nombraron Secretario de la Comisión Pericial, es decir, me nombraron para que yo
hiciera el trabajo. Efectivamente, con un grupo muy numeroso de ayudantes hice en muy
poco tiempo –en unas cuantas semanas- un informe sobre la industria petrolera y un
119
dictamen sobre la manera de resolver el conflicto. Ese informe y ese dictamen fueron la base
del laudo119 de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje. Más tarde fue la base de la
sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. El informe fue un trabajo de equipo
dirigido por mi; y el dictamen fue dictado por mí desde la primera página a la última. (Wilkie &
Monzón,1969:671-672).
Con esta declaración Silva asevera que no fue una casualidad su nombramiento e intervención
para la solución del conflicto petrolero. En esta decisión quizá influyeron las opiniones que
sobre de él tenían Narciso Bassols y Vicente Lombardo Toledano para que fuese elegido, entre
muchos otros candidatos. Pero también su prestigio como un connotado investigador en la
solución de los problemas económicos de México fue un factor esencial para su designación.
Tal vez, en el caso de la investigación que Silva Herzog realizaría para solucionar el conflicto
petrolero, él se apoyó de varios tipos de investigación siguiendo a Méndez et al. (1990). Entre
los más representativos que se pueden deducir de su participación en este conflicto se
encuentran: el estudio prospectivo, ya que seguramente toda la información que utilizó para
efectuar el estudio pericial fue recabada bajo una metodología y una planeación ex profeso; así
también, él utilizó el estudio longitudinal con la finalidad de llevar a cabo un seguimiento de
ciertas variables que actuaban en esta problemática para determinar su evolución en el tiempo.
Ejemplo de ello son la producción, los precios, etcétera. Al final Silva Herzog realizó un estudio
comparativo mediante el análisis de los sucesos acontecidos en varias empresas petroleras en
diferentes localidades e incluso países como Estados Unidos. Fue un estudio observacional ya
119 Laudo es la decisión dictada por el árbitro para resolver un conflicto que haya sido sometido a su análisis y estudio por los contendientes en un juicio. Resolución de equidad que pronuncian los representantes de las Juntas de conciliación y arbitraje cuando deciden sobre el fondo de un conflicto de trabajo, la cual se ajusta en su forma a las disposiciones jurídicas aplicables, el laudo es un método de resolución de los conflictos obrero-patronales. (Instituto de Investigaciones Jurídicas,1985b).
120
que no modificó los hechos estudiados, por el contrario, sólo pudo describir e interpretar el
fenómeno social.
Según la clasificación de Tamayo (2007), Silva Herzog se apoya en la investigación histórica
para situar el problema en un contexto y de esta forma va desarrollando los sucesos que
afectaban a la industria petrolera en México. Estos hechos fueron presentados en forma
cronológica por el mismo Silva y datan desde el descubrimiento del chapopote en la época
prehispánica y su continúa evolución hasta el momento en que se efectuó el estudio en 1937.
Del análisis a la documentación encontrada en diversos archivos se infiere que Silva se apoyó
en un marco legal correspondiente al problema petrolero. Quizá esto fue así, porque quienes
solicitaron la investigación eran abogados. En el estudio pericial resultado de la investigación se
cuenta con diversos anexos sobre leyes, decretos y acuerdos en materia de petróleo. Del
análisis al conflicto petrolero también se infiere que Silva Herzog se valió de la investigación
descriptiva para elaborar el registro, así como para controlar las variables relacionadas con el
origen de la problemática petrolera. Pero en sí se puede considerar al estudio pericial como una
investigación del tipo de estudio de caso, debido a que se analizaron varias empresas que
realizaban una misma actividad productiva; pero también se le puede considera como un
estudio de tipo exploratorio, debido a que un estudio con estas características no se había
efectuado, por lo que seguramente tuvo que realizar una metodología propia por el caso tan
particular en que se dio.
Es importante mencionar que el conflicto petrolero fue una investigación que se le asignó a
Silva Herzog en el gobierno cardenista. Según la información estudiada, él debió evaluar el
problema al que se enfrentaría, ya que tuvo que haber determinado si dicha problemática era
factible de solucionarse mediante la aplicación de procedimientos investigativos. Así también se
121
observan los cronogramas de solución al problema en cuestión, la correcta aplicación de
recursos, la preparación propia de la investigación y las exigencias en los requisitos en que
debía elaborarse y presentarse, así como detalles de orden ético que representaba su solución.
Cuando Silva Herzog describe el problema presenta los antecedentes del estudio, para lo cual
utilizó varios marcos en los que se basó implícitamente (teórico) explícitamente (legal e
histórico), el problema que se le asigno, era ver si las empresas petroleras tenían la capacidad
económica de hacer frente, a las demandas salariales y de prestaciones que solicitaban los
trabajadores, para lo cual debía demostrar como las empresas petroleras podían hacer frente a
ello, por medio de datos estadísticos sobre la producción y los ingresos que les generaba, así
como los impuestos, sueldos y prestaciones que se ahorraban, ya que con el estudio pericial
que efectuó encontró las técnicas contables como organizacionales para poder incrementar sus
utilidades; el había tenido experiencia con la empresa El Águila sobre sus artimañas para no
pagar lo que justo al gobierno mexicano, por lo que dichas medidas las generaliza hacia las
demás empresas petroleras que estaban analizando, es posible que haya encontrado otras
formas que usarán las otras compañías, pero indudablemente también encontraría el mismo
comportamiento de evasión fiscal; en cuanto a la cuestión de los trabajadores y los abusos a los
que era objeto, Silva Herzog debió recordar su análisis que hizo de los mineros, sobre sus
derechos no cumplidos, y después su relación con el estudio de los ferrocarrileros, para lo cual
también en el estudio pericial dedicó un apartado para revisar las condiciones en las que eran
tratados los trabajadores mexicanos, Es posible que Silva Herzog tuviera varias hipótesis sobre
como resolver el conflicto, pero sin lugar a dudas, la información que le fue dando el avance del
estudio le dio fortaleza a algunas de sus hipótesis, por lo que apoyado de los datos duros que
obtuvo pudo, encontrar las recomendaciones indicadas para resolver el conflicto petrolero, pero
estas debían ser contundentes por sí mismas y no dejar ninguna duda, puesto que de dejarla
122
permitiría que los peritos o abogados de las empresas pudieran desmeritarlas e incluso
nulificarlas, la meditación sobre las palabras adecuadas fue también parte de su tarea, ya que el
lenguaje se puede distorsionar a conveniencia, y más en las cuestiones legales, pero al mismo
tiempo debía usar un lenguaje común sin muchos tecnicismos; Silva Herzog concentró toda la
información, ya sea que la leyera o pidiera que se la leyera, él conocía toda la investigación, es
decir, en su conjunto la situación de dificultad (de conflicto), que aquellos personas que están
dentro de ella (empresarios y trabajadores), en este sentido, fue fundamental la experiencia
que ya tenía sobre su manejo de la ciencia económica, como de las formas en que estableció
las relaciones que permitan dar una visión más amplia de la solución del problema, que
sirvieran a su vez de explicaciones.
El problema del conflicto petrolero incluía tan variadas aristas, que Silva Herzog no pudo
investigarlo simultáneamente en todos sus aspectos, por lo que tuvo que reducirlo a una
manera en que se pudiera abordar en un trabajo único. Para su estudio integral, Silva lo dividió
en cierto número de sub-cuestiones o subtemas que se resolvieron cada uno por separado. En
el primer paso en la solución del conflicto, Silva Herzog y colaboradores definieron sus
objetivos.120 De hecho, estos objetivos marcaron la pauta para la investigación. Se efectuó una
revisión de la literatura sobre el petróleo. Tal vez, se formularon una serie de hipótesis o
supuestos de trabajo, mismos que sirvieron de guía para ordenar y sistematizar la investigación
hacia lo que quería demostrar. Quizá, la hipótesis o supuesto principal de la solución de este
conflicto radicaba en demostrar que las empresas extranjeras sólo habían servido a sus propios
intereses económicos en prejuicio del país.
120 El objetivo general consiste en enunciar lo que se desea conocer, lo que se desea buscar y lo que se pretende realizar en la investigación. El objetivo específico son los que se identifican con las acciones que el investigador va a realizar para ir logrando dichos objetivos, los cuales se van evaluando en cada paso de la investigación; de acuerdo a la complejidad de la investigación se determinará el número de objetivos generados y sus correspondientes logros (Tamayo,2007).
123
Por su parte, la selección de las unidades o sujetos de observación y la determinación de las
técnicas de recolección del estudio pericial incluyó la realización de varios cuadros estadísticos.
Éstos mostraban la relación existente entre la producción no sólo en México sino a nivel
mundial (donde se destacaba la importancia y lugar que ocupaba México), la exportación de
petróleo, el pago de impuestos, los precios de productos derivados del petróleo, entre otros. Se
demuestra la tendencia o comportamiento de las unidades observadas en un lapso de tiempo, y
las consecuentes explicaciones que servían para interpretar y analizar los cuadros estadísticos
presentados. Las pruebas de confiabilidad de los cuadros estadísticos, así como el diseño de la
investigación121 se encontraron bajo la supervisión de Silva Herzog. Ya que este punto era de
suma importancia en la investigación, ya que debía probar con datos duros lo que sucedía con
las empresas petroleras, y no solamente con descripciones o conjeturas que se obtenían de la
observación, que pudieran ser refutadas por parte de los representantes de las compañías
petroleras con mayor facilidad; también utilizo cuadros de referencia donde demostraba la
consolidación de la empresas petroleras.
Sánchez (1951) sostiene que la técnica preparatoria del trabajo científico es un tipo de tarea
que difícilmente se aprende en libros, que por lo general sólo se adquiere por el conducto de
una prolongada y difícil experiencia. No cabe duda que Silva Herzog modeló y perfeccionó en el
transcurso de su vida su propia forma de elaborar y conducir investigaciones, experiencia que
llegó a su clímax en esta investigación sobre el conflicto petrolero.
121 Tamayo (2007) señala que el diseño de la investigación hace relación con el manejo de la realidad por parte del investigador, por lo que hay cuantos diseños en función a cuantos investigadores hay, ya que cada investigación genera un diseño propio que sobre una determinada realidad presenta el investigador. Es la estructura a seguir en una investigación, ejerciendo el control de la misma a fin de encontrar resultados confiables y su relación con las interrogantes surgidas de los supuestos. También se refiere a un planteamiento de una serie de actividades sucesivas y organizadas que pueden adaptarse a las particularidades de cada investigación y que indica los pasos y pruebas a efectuar, así como las técnicas a utilizar para recolectar y analizar los datos.
124
En este orden de ideas, dos fueron los factores esenciales en su formación como investigador:
su gusto por el conocimiento de forma autodidáctica y su interés por la investigación de toda
clase de asuntos económicos y sociales. Para cumplir con el trabajo de investigación que Silva
Herzog desarrollaría como parte del Grupo Especial Número 7, independientemente de los
conocimientos que tenía base de sus investigaciones anteriores sobre el petróleo, él recabó
información relativa a los antecedentes de la industria petrolera en México, su evolución en el
tiempo y la importancia económica que tenía el petróleo en aquellos años.
4.1 La situación de las compañías petroleras y el gobierno mexicano
En los años treintas del siglo XX la importancia adquirida por el petróleo a nivel mundial,
propició la conformación de una industria petrolera sin igual. Su progreso y desarrollo muchas
veces se explica mediante el interés y la codicia, tanto económica como política, de ciertas
empresas extranjeras y sus respectivos gobiernos. Con frecuencia se encontraban ansiosos de
poseer las fuentes petroleras de otras naciones. Esto se debe a que después de la Primera
Guerra Mundial, el petróleo se convirtió en la principal fuente mundial de combustible.
Para el logro de sus fines, las empresas trasnacionales hicieron uso de variadas artimañas.
Entre las más destacadas se pueden citar aquéllas de tipo legal (como que se dictaran
legislaciones en materia petrolera que les favoreciera); e ilegal (desde el soborno hasta el
asesinato) y aseguramiento de su dominio.
En muchos casos, estas pretensiones tenían el respaldo de sus respectivos gobiernos. México
no era la excepción. Nuestra historia en cuestión petrolera se ha venido conformando de una
serie de intervenciones extranjeras donde se presiona e incluso se intimida para conseguir que
no se les retiraran o redujeran los beneficios que habían obtenido años atrás para la explotación
125
del petróleo por alguna legislación en materia petrolera. Otras más, comienzan a principios del
siglo XX con la conformación de guardias blancas quienes defendían los intereses de las
petroleras por medio del uso de las armas de fuego.
En cuestión económica, uno de los obstáculos más recurrentes de las empresas petroleras
extranjeras consistía en limitar las inversiones en los países donde explotaban este importante
recurso natural no renovable. Sólo invertían en cuestiones de tipo productivo-operativo, como
por ejemplo: la construcción y perforación de los pozos, la conducción del petróleo hacia los
trenes o buques tanque, algunas instalaciones para su estancia, entre otras.
Las empresas petroleras extranjeras no invertían en ninguna obra permanente de utilidad
económica o social para el pueblo explotado, no obstante que dejaban completamente
arruinadas grandes hectáreas de explotación agrícola en aquellos sitios donde se instalaban.
Así, cuando la explotación dejaba de ser productiva no quedaba en el campo de sus
operaciones otra cosa que el recuerdo de la riqueza emigrada. Ejemplo de ello es un caso que
los investigadores Bach & De la Peña (1938) documentaron sobre una zona petrolera de
Veracruz en México.
Quienquiera que haya conocido los centros petroleros del Norte de Veracruz en la
época del auge y haya recorrido los mismos lugares a últimas fechas, puede
constatar que allí no se hizo otra cosa que extraer el petróleo con la mayor
precipitación posible, sin dejar ninguna huella permanente de utilidad económica o
social para la región. Centros como Cacalilao, Juan Casiano, Chinampa, Amatlán,
Naranjos, Zacamixtle, Cerro Azul, Potrero del Llano, etc. cuyos campos produjeron
más de dos mil millones de pesos en treinta años, son de nuevo humildes aldeas y
las que no lo son están en vías de serlo, en las que sus habitantes se limitan una
vez más a cultivar pequeñas extensiones de tierra para el consumo familiar, sin
126
comercio, sin vías de comunicación ni mejoras urbanas ni de saneamiento, y con
grandes extensiones de tierra inutilizadas para el cultivo. (Bach & De la
Peña,1938:25).
Esta situación fue denunciada en su momento por Silva Herzog. En las conclusiones 2ª y 3ª del
Dictamen en cuestión, él demostró que la avaricia de las empresas extranjeras se reflejó en los
bajos salarios de los trabajadores y mínimos impuestos que el Estado les retenía a estas
empresas por su trabajo en el país. Asimismo, Silva Herzog (1940) insistía que esta práctica
negativa por parte de las empresas petroleras había afectado severamente los campos vecinos
del Puerto de Tampico:
[…] Y este puerto por donde se ha exportado riqueza tan enorme, todavía en la
actualidad (1940), no tiene los servicios de sanidad urbana indispensables, ni
siquiera agua potable suficiente para el consumo de sus habitantes; la tifoidea y
otras enfermedades infecciosas hacen centenares de víctimas cada año, entre niños
y adultos que viven en esa zona. (Silva,1940:93)
Chávez (2005: 128) por su parte, argumenta otro testimonio de lo acontecido en Tampico en
aquellos años:
Cuando una zona se convierte en petrolera, el encarecimiento de la vida se hace
presente, esto paso en Tampico, al principio del auge petrolero el dólar se cotizaba
a $2, en 1937 la paridad estaba fijada en $3.60, lo cual revelaba la diferencia de
costos que la vida en general había resentido en los últimos años.
A manera de contraste también se observa en este Dictamen que las empresas petroleras se
comportaban de diferente manera cuando explotaban el petróleo en países como México, como
cuando trabajaban en sus países de origen; este fue el caso de los Estados Unidos. Aquí, la
industria petrolera dio lugar a la creación de florecientes centros urbanos dotados de obras
127
públicas de utilidad social. Originó otras actividades conexas en beneficio de la sociedad donde
se encontraban inmersas estas empresas, dando lugar a obras permanentes como carreteras,
vías férreas, escuelas, hospitales, bancos, etcétera, situación que contrastaba cuando estas
empresas salían a otros países a trabajar. En estos casos no proveían ningún beneficio social ni
económico a estas naciones, pese a que hacía uso de sus recursos naturales (Castillo,1949).
La duración media de un pozo productivo es en México de 6 años, aunque hay pozos con vida
útil de más de 20 años, la producción es brotante en casi la totalidad de los pozos, es decir, no
hay necesidad de extraerlo con técnicas de bombeo como en otros países. Esto se traduce en
beneficios económicos para la industria, ya que no requiere de gastar en infraestructura y
maquinaria para extraerlo, el rendimiento de los pozos mexicanos es de 10.52 barriles promedio
diario contra los 8.1 que se obtienen en los pozos estadounidenses.
Algunos de estos pozos se conocen como “gusher”, México tuvo varios de ellos, como: El
Potrero de Llano No. 4 situado en Tuxpan, propiedad del Águila, que comenzó a producir a
finales de diciembre de 1910 y hasta el inicio de 1937, en 26 años ha producido 117 millones de
barriles de petróleo; el Casiano No. 7 situado también en Tuxpan, propiedad de Tamiahua
Petroleum Co. que inicio actividades el 11 de septiembre de 1910 y en 9 años produjo 75
millones de barriles; el Zurita No. 3 situado en la cuenca del Río Panuco, propiedad de la
Mexican Sinclair Petroleum Co. que en 14 años se extrajeron 21 millones de barriles; y el Cerro
Azul No. 4 situado en el estado de Veracruz, propiedad de la Huasteca Petroleum Co.122 que
brotó el 26 de noviembre de 1916 y produjo hasta diciembre de 1936 la cantidad de 84 millones
de barriles; en comparación con el rendimiento de otros pozos extranjeros considerados de
122 El descubrimiento de petróleo en la Huasteca fue en 1901, con lo cual se originó una dramática transformación de esta región, la cual fue reclamada por Edward Doheny y socios, quienes adquirieron 450,000 acres de tierra en el Ébano, SLP y crearon The Mexican Petroleum Company, mejor conocida como la Huasteca Co. que se extendieron hacia otros nuevos campos petroleros como Chijol, Cerro Azul y Juan Casiano. (Fowler,1991).
128
mayor productividad, como el pozo 54 de la parcela 147 en el Campo Grozni en Rusia que
produjo en 10 años 15 millones de barriles; el The Church del Condado de Crane en Texas,
Estados Unidos ha producido 10 millones de barriles, el Barroso No. 2 en Venezuela donde se
han extraído un millón de barriles.
Un ejemplo de la riqueza petrolera es la explotación del cerro de Totero que desde enero de
1922 a 1935 produjo 75,421,522 barriles de petróleo, que a un precio promedio por barril de
$3.63 se obtuvieron por concepto de venta $273,795,466, se dice que pagaron por ello a los
mexicanos $51,000 ya que no hay forma de comprobar que esta erogación se ha hecho. Desde
1901 a 1937, México produjo según la comisión pericial llevada en 1937, la cantidad de
1,865,609,081 barriles de petróleo con un valor comercial de $3,726,245,000 a precios
corrientes; El activo total de las empresas petroleras establecidas en México era antes de la
expropiación de 360 millones de pesos, de los cuales el 40% representaba al capital inglés, el
42% al capital estadounidense, el 2.5% al capital mexicano y el restante 15.5% a capitales de
diferentes nacionalidades. (Bach & De la Peña,1938; Amendolla,1940; Basurto,1976).
La situación de la explotación petrolera extranjera en México123 inició en la primera década de
1900124 y se prolongó hasta los años 30’s del siglo XX. Existen numerosos antecedentes
documentados de cómo las compañías extranjeras engañaron a antiguos propietarios de la
tierra mexicana para despojarlos de ésta. Por su parte el gobierno mexicano también fue parte
123 El 24 de diciembre de 1901 se expidió la primera ley petrolera, donde establece, la facultad del Gobierno federal para otorgar concesiones en las zonas pertenecientes a la nación, esta ley de tendencia liberal, concedía franquicias y todas clases de facilidades a los que encontraran petróleo; esta ley beneficio a empresas como a la S. Pearson & Son Limited, la Huasteca Petroleum Company, y a la Compañía Transcontinental de Petróleo S. A. (Silva,1941). Pero en la Ley Minera de los Estados Unidos Mexicanos del 25 de noviembre de 1909, consideró en su artículo 2º, que el petróleo era propiedad exclusiva del dueño del terreno, lo cual propago más las actividades de despojo que venían haciendo las empresas petroleras. (Gobierno de México, 1940). 124 Hacia 1918, México se colocaba en el segundo lugar entre los países productores, sitio que conservó hasta 1926, en el año de 1921 se obtienen cerca de 200 millones de barriles, cifra correspondiente a la cuarta parte de la producción mundial. (Castillo,1949).
129
de este engañoso negocio petrolero. Muchas de estas empresas no cumplían con las
obligaciones contraídas como era la construcción de oleoductos. Aunque la mayor parte de las
veces estas empresas incumplían, el Estado mexicano les otorgaba ciertos privilegios como
exenciones fiscales, importación de maquinaria, tuberías, bombas, tanques, etcétera.125
Incluso, algunos autores sostienen que estas empresas trasnacionales llegaron a fomentar
revoluciones al sostener rebeldes y bandidos, así cómo de disponer de las cancillerías de sus
respectivos gobiernos para intervenir mediante la diplomacia, con la finalidad de continuar su
enriquecimiento ilícito.
Pero cuando estas empresas no lograban sus objetivos de forma pacífica, entonces acudían a
la intimidación por medio de la amenaza de una intervención militar. De esta forma presionaban
al Estado, pues se incluían en asuntos políticos del país, si así lo exigían sus intereses. Por otro
lado, también contaban con la corrupción de algunos mexicanos, ya que mientras más
inmorales eran los funcionarios, más baratos eran los privilegios y mejor se lograba la
explotación, pues no existían restricciones ni control de las riquezas naturales (Bach & De la
Peña, 1938).
Algunos gobiernos mexicanos posteriores al Porfiriato, hicieron varios intentos para resarcir las
concesiones que les brindaban las leyes de 1901 y 1909 a las empresas petroleras extranjeras.
Francisco I. Madero estableció un decreto el 3 de junio de 1912 para el pago de un impuesto a
la industria petrolera, un impuesto especial del Timbre sobre el petróleo crudo de producción
125 Tanto la S. Pearson & Son, como la Huasteca Petroleum y la Transcontinental, aprovecharon sólo en su beneficio las concesiones que les daba la ley de 1901, defraudaron al fisco y al gobierno ya que algunos derechos estaban concesionados a cambio de realizar obras de infraestructura como oleoductos, los cuales jamás se llevaron a cabo. (Silva,1941).
130
nacional a razón de veinte centavos por tonelada. También intentó por medio de la circular No.
590 expedida el 11 de julio de 1912,126 reglamentar el funcionamiento de la industria petrolera,
lo cual se interrumpió debido a la caída de su gobierno.
Venustiano Carranza, por su parte, también intentó restablecer el control sobre la industria
petrolera. Poco después de su llegada al poder estableció, el 21 de julio de 1914, el impuesto
de barra. Se cobraban 10 centavos por tonelada de petróleo, con esto se intentaba revindicar
los derechos del Estado sobre el petróleo, pero también era una manera de hacerse de
recursos monetarios para continuar su lucha contra Villa y los convencionistas.
Pronto, las compañías petroleras (Standard Oil Company de New Jersey y la Royal Dutch
Shell127) descubrieron que Carranza se perfilaba como triunfador de la revuelta armada, por
este motivo, persuadieron a Manuel Peláez a que se sublevará contra Carranza. El 10 de
noviembre de 1914, Peláez ganó el control desde Papantla al Sur, la Huasteca Potosina al
Oeste hasta el Río Pánuco al Norte. Sin embargo, los puertos de embarque en Veracruz y
Tampico estaban en poder de los constitucionalistas, por lo que se aseguraba el pago del
impuesto.
Carranza creó también, por medio de un Acuerdo del 19 de marzo de 1915, la Comisión
Técnica del Petróleo, dependiente de la Secretaría de Estado y del Despacho de Fomento,
Colonización e Industria. En esta comisión participaron el general Cándido Aguilar, Modesto C. 126 En esta misma fecha se estableció la más grande refinería de la Compañía El Águila, después de tender el oleoducto desde Veracruz a Villa Cecilia en Tamaulipas, en ese lugar; las refinerías se hicieron presentes en toda la vida de la comarca de Villa Cecilia, que entonces formaba parte del municipio de Tampico, donde había potentes silbatos que marcaban a las 7:00 la hora de entrada al trabajo, a las 12:00 y 13:00 anunciaban el intermedio del almuerzo, para que a las 16.00 daban la hora de salida, se daba un último silbatazo a las 12:00 de la noche, dichos silbatos se oían a kilómetros de distancia, convirtiéndose en sonidos familiares que ayudaban a regular el ritmo de vida local. (Chávez,2005). 127 La Royal Dutch Shell se constituyó en 1890 en la Haya, Holanda con un capital de 1,300,000 florines, en 1898 se asoció con la compañía inglesa Shell and Transport Co. y en 1907 se hizo la fusión (Gobierno de México,1940).
131
Rolland, Manuel Urquidi, Salvador Gómez, Joaquín Santaella, Alberto Longoria y Pastor Rouaix.
Este último realizó una investigación completa sobre la industria petrolera y sus relaciones con
el gobierno. La finalidad era elaborar una propuesta que incluyera la normatividad, leyes y
reglamentarios necesarios para la industria petrolera.
Esta Comisión dictaminó el 7 de abril de 1916 a favor de la nacionalización del petróleo y de la
restitución de la nación de la riqueza del subsuelo. En el texto, la Comisión puso en claro
primero, que en materia de petróleo se había regido por las reales ordenanzas de minería
de1783 promulgadas por el rey Carlos III de España, las cuales estuvieron vigentes hasta 1884,
cuando el manco González declaró que el petróleo era propiedad exclusiva del superficiario y
dio motivos para que Porfirio Díaz, con el Código de Minas de los Estados Unidos Mexicanos
del 22 de noviembre de1884, otorgara al superficiario la facultad de explotar el suelo sin requerir
de concesiones estatales. Como segundo punto, la Comisión sostuvo que la Ley del Petróleo
tenía por objeto favorecer al inglés Pearson y posteriormente al estadounidense Doheny, pero
también empezó a plantear que la cuestión del petróleo de 1917 era de utilidad pública y que
por lo menos, el Estado tenía derecho a cobrar impuestos, que la nación debía empezar a
prepararse para los asuntos doctrinarios, técnicos y fiscales que este tema plantearía en lo
futuro (Chávez, 2005).
Poco tiempo después, Carranza impuso el uso del sistema métrico decimal en las medidas que
debían usar los industriales, incluidos los de las empresas petroleras. Como respuesta a este
hecho, Cándido Aguilar gobernador de Veracruz expidió el 15 de enero de 1916 el Decreto del
Gobierno del Estado de Veracruz, sobre enajenación y arrendamiento de terrenos petrolíferos,
con lo cual regulaba los contratos con fines petroleros, sancionando aquellos que no fueron
autorizados por el gobierno de dicho Estado.
132
El 5 de febrero de 1917 se promulgó la nueva Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos. En su artículo 27 párrafo IV,128 señalaba que correspondía a la nación el dominio
directo de todos los minerales o sustancias que en vetas, mantos masas o yacimientos que
constituían depósitos cuya naturaleza era distinta de los componentes de los terrenos, tales
como: los minerales donde se extraían metales y metaloides utilizados en la industria, los
yacimientos de piedras preciosas, de sal gema como las salinas formadas directamente por las
aguas marinas que necesitaban trabajos subterráneos para su explotación, así como los
fosfatos, los combustibles minerales sólidos, el petróleo y todos los carburos de hidrógeno
sólidos, líquidos o gaseosos.
No se hicieron esperar las compañas dirigidas contra la nueva constitución mexicana por parte
de las empresas petroleras, las cuales iniciaron en Estados Unidos, principalmente por la
Standard Oil Company; ya que las empresas veían en la constitución un intento por nacionalizar
el subsuelo. Aún en aquellos terrenos petroleros que habían sido adquirido antes de la vigencia
de la constitución que fue el 1º de mayo del mismo año.129
128 Dio origen a una serie de reglamentos, como el del 19 de febrero de 1918 Decreto por el cual se establece un impuesto sobre terrenos petrolíferos y contratos petroleros, el del 8 de julio del mismo año Decreto que da a conocer las prescripciones reglamentarias del artículo 14 del decreto del 19 de febrero, este fue derogado por el del 8 de agosto Decreto por el cual se reforman las prescripciones reglamentarias del artículo 14 del decreto del 19 de febrero, el cual agudizó los conflictos entre el gobierno y las compañías petroleras, ya que este decreto permitía la explotación del subsuelo únicamente por medio de títulos de denuncio otorgados por la Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo, que obligaba a las empresas a pagar una regalía al gobierno del 5% de la producción bruta (Gobierno de México,1940). 129 Carranza expidió el Decreto del 12 de agosto de 1918. En este documento se aclaraba que no serían denunciables los terrenos donde se hubieran hecho inversiones con fines petroleros (en explotación o exploración), como consecuencia de lo anterior las empresas petroleras estadounidenses conformaron la Asociación de Petroleros. Los decretos dictados por Carranza en 1918 no habían sido aplicados en la práctica debido a una serie de amparos dictados por la Suprema Corte de la Nación en el caso de la The Texas Co. of Mexico que fue el camino para las demás. (Gobierno de México, 1940). El decreto del 12 de agosto fue seriamente discutido por los abogados de las empresas petroleras, quienes alegaban una retroactividad, de tal manera que no pudo entrar en vigor dicho ordenamiento; se provocó que de 1918 a 1925 se diera un periodo de anarquía en materia de legislación petrolera, ya que sus disposiciones serán ignoradas por las empresas petroleras durante mucho tiempo (Chávez,2005).
133
Carranza para reforzar a los lineamientos de la reciente constitución, decretó el 13 de abril de
1917 que el impuesto especial del Timbre, tenía efecto no solamente sobre el petróleo crudo
sino también sobre sus derivados, como era el caso del gas de los pozos que se extraía para su
exportación.130 Facultó a la Secretaria de Hacienda para que fije bimestralmente el precio del
petróleo en el mercado, debido a que las empresas extranjeras siempre reportaban pérdidas en
la venta del mismo. Sin embargo, lo que en verdad sucedía era que las empresas subsidiarias
vendían a bajo precio el petróleo a las empresas trasnacionales. El objetivo era que estas
últimas pagaran los más bajos impuestos y así, aparentar además que no tenían utilidades, por
lo que no podían atender las demandas de los trabajadores. En contraparte estas empresas
subsidiarias revendían el petróleo a muy altos precios. Don Luis Cabrera, entonces Secretario
de Hacienda, supervisaba que este gravamen al petróleo fuese pagado en timbres para evitar la
concesión que tenía la Compañía Mexicana de Petróleo “El Águila”. Dicha concesión la excluía
del pago de todo impuesto a excepción de la renta del Timbre, la cual buscaba, siempre que
podía eludir este pago. Cuando no podía hacerlo, pagaba pero en calidad de depósito y a
cuenta de impuestos futuros. Este gravamen originó la creación de las Inspecciones Fiscales
del Petróleo con su respectiva reglamentación.
Por su parte, Carranza declaraba en el Decreto del 31 de agosto de 1917, nulas las leyes o
disposiciones dictadas por los gobiernos de los Estados en el ramo de fomento, otorgándole al
Ejecutivo la facultad de expedir leyes obligatorias para toda la República sobre minería,
comercio, instituciones bancarias, bosques, terrenos nacionales, ejidos, aguas de jurisdicción
federal y sobre organización del trabajo en las diversas industrias; debido a que en las ramas
anteriores se encontraba inmersa la riqueza nacional.
130 Los impuestos que causaran: Gasolina refinada medio centavo por litro, gasolina cruda un centavo por litro, kerosina cruda medio centavo por litro, kerosina refinada un cuarto de centavo por litro, lubricantes un cuarto de centavo por litro, parafina dos pesos por tonelada, asfalto un peso y cincuenta centavos por tonelada y gas 5% ad valorem (Gobierno de México, 1940).
134
Carranza decretó que estas riquezas debían ser vigiladas por una sola Dirección y
Administración para un mejor control. Su misión sería fomentar el adecuado desarrollo del país,
dentro de estas fuentes de riqueza se consideraba al petróleo. Carranza ordenó el 22 de
septiembre del mismo año, que se hiciera un registro de las compañías petroleras activas que
operaban en México.
La recaudación fiscal permitió al gobierno carrancista la resolución de problemas de tipo
económico. Así, en 1919 la producción de petróleo aumentó de 10 millones de metros cúbicos
en 1918 a 14 millones, por lo que los impuestos también se incrementaron de 12 millones de
pesos a poco más de 17 millones.
El 12 de marzo de 1920 se expidió un acuerdo relativo a las bases generales a las que debían
sujetarse las concesiones que desearan explotar el petróleo y demás hidrocarburos que existían
en el subsuelo de las zonas federales, playas y cauces de los ríos, arroyos, esteros y lagunas
del territorio nacional, dicho acuerdo retoma la soberanía nacional sobre el petróleo, ya que
marcaba un plazo de 10 años de concesión para la explotación petrolera, entre los criterios para
otorgar dicha concesión, daba prioridad a los mexicanos, después a los naturalizados y
finalmente a las sociedades organizadas bajo las leyes mexicanas, los concesionarios debían
pagar una renta de $100 pesos por kilómetro o fracción de zona federal concedida, además de
una participación diaria sobre la producción (por los primeros mil metros cúbicos o menos el
5%, el excedente de 1, 000 hasta 2,000 metros cúbicos el 10%, el excedente de 2,000 hasta
5,000 metros cúbicos el 15%, y el excedente de 5,000 metros cúbicos el 20%; esta medida
también fue motivo de muchas protestas por las empresas petroleras, pero finalmente se
sostuvo.
135
En el primer tercio de 1920 se vino abajo el gobierno de Carranza. Durante el interinato de
Adolfo de la Huerta se suavizaron las relaciones con las empresas petroleras, quienes habían
suspendido desde el año pasado la exploración de nuevos pozos y continuaban sin hacerlo.
Peláez se rinde al nuevo gobierno el 20 de mayo de ese año, por lo que las empresas perdieron
su guardia y protección.
Álvaro Obregón ocupó el gobierno de México a partir del 1º de diciembre de 1920; se mantuvo
en el poder por cuatro años. En este lapso de tiempo no existieron cambios de importancia en la
cuestión petrolera. La producción petrolera seguía en aumento: de casi 14 millones de metros
cúbicos en 1919 a 25 millones de metros cúbicos en 1920 y prácticamente a 31 millones de
metros cúbicos en 1921. Este aumento propició la creación de nuevos oleoductos131 que
rápidamente fueron insuficientes por las cantidades tan grandes que brotaban de los pozos.
Después de este análisis se observó que a la industria petrolera mexicana poco le afectaron los
movimientos armados o los desajustes políticos. En los únicos casos donde se vio afectada fue
en la aplicación de leyes que afectaban directamente a la industria petrolera y su producción.
Por el contrario, entre empresas competidoras sí había luchas internas de poder que inclusive
llegaron al despojo y robo entre ellas. Existieron casos donde filiales y subsidiarias de un mismo
grupo tuvieron enfrentamientos legales por la posesión de algún pozo o terreno petrolero que
en varias ocasiones terminaron en asesinatos.
131 Los oleoductos que se construían desde Pánuco y la Faja de Oro a Tampico, y de la Faja de Oro a Tuxpan; en 1918 gracias a obras de ingeniería petrolera se desarrollo el Puerto Lobos en las islas que limitan al este la Laguna de Tamiahua, una estación de bombeo que llenaba los buques-tanque, donde aprovechando los bajos salarios que se pagaban a los mexicanos, se instalaron 3 plantas primarias de refinación (la de la Texas Co. of Mexico, la Atlántica y la de Agwi) que estaban en continua actividad (Gobierno de México,1940).
136
A pesar de que los movimientos políticos no afectaron a la producción, esta se vio afectada en
1922, debido a que comenzó a bajar a casi 29 millones de metros cúbicos, para 1924 era de 22
millones de metros cúbicos, su baja se debió a varios descuidos en los pozos petroleros, ya que
algunos se incendiaron hasta consumirse, otros se mezclaron con agua de mar;132 (Gobierno
de México,1940; Silva,1940).
En 1925, durante la gestión de Plutarco Elías Calles, se formó una Comisión integrada por el
diputado Jesús Yépez Solórzano, el senador Ignacio Rodarte, Joaquín Santaella, representante
de la Secretaría de Hacienda y Manuel de la Peña, representante de la Secretaría de Industria,
Comercio y Trabajo. Esta comisión formuló un proyecto de Ley del Petróleo que sirvió de base a
la legislación vigente; entró en vigor el 29 de diciembre de ese año. Este proyecto tenía una
línea antiimperialista. Buscaba retener parte del beneficio económico (alguna ganancia) para el
pueblo de México. Entre otras cosas, reducía la confirmación de concesiones a sólo cincuenta
años, sin distinguir entre derechos de propietarios y arrendatarios de terrenos petrolíferos. Esto
provocó nuevamente el descontento de las compañías petroleras que amenazaron al gobierno
con abstenerse de ejecutar trabajos de perforación, así como de abandonar el país, aún cuando
ya no existía la unanimidad por parte de las empresas petrolera como ocurrió en 1918, si
volvieron a utilizar el argumento de la retroactividad para evitar que la nueva normatividad le
quitara su concesión vitalicia que el gobierno porfirista les había concedido.
A causa de ello, varias empresas petroleras que operaban en México decidieron trasladarse
hacia Venezuela, pues su gobierno brindaba mayores y mejores facilidades para la operación
petrolera, debido también a que en 1924 este país comenzaba a ser un importante productor de
petróleo. La ausencia de compañías extranjeras en México y las presiones de la cancillería 132 Se explotaron los pozos mexicanos de manera inmisericorde entre 1919 a 1924, sin acatos a las normas técnicas de respeto al yacimiento, en 1923 se dieron los primeros síntomas de contaminación del aceite de los pozos con agua salada que existía en el yacimiento. (Chávez, 2005).
137
estadounidense motivaron al Presidente Calles a dar marcha atrás a su iniciativa de Ley de
Petróleo. Para buscar una salida legal a tal situación, Morones entonces encargado de la
Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo le transmitió las órdenes que diera el Presidente
Calles al encargado de la Suprema Corte de Justicia de la Nación:133
Señor Presidente de la Corte, el Gobierno está en peligro y es menester que antes de que
nos obligue la fuerza de afuera a claudicar, que la Suprema Corte declare la Ley del
Petróleo contraria a la Constitución del país, y ampare a las Compañías Petroleras.
(Universidad Obrera,1939:44).
Otro intento por parte del gobierno callista para forzar a la compañías petroleras extranjeras a
beneficiar en algo a los mexicanos dio inicio a partir del 30 de noviembre de 1926; para lo cual
el gobierno federal realizó programas para dotar de reservas petroleras a México en terrenos
que le pertenecían. Creó un organismo para su explotación, este fue un departamento dentro
de los Ferrocarriles Nacionales que se limitó a explotar los pozos en el Ébano y Pánuco. Esta
medida fue atacada duramente por las empresas extranjeras que propiciaron el cierre definitivo
de este departamento. Poco tiempo después, se creó el Control de Administración del Petróleo
Nacional que heredó los terrenos del Ébano y Pánuco donde habían perforado.
El 29 de noviembre de 1927 se expidió el reglamento de trabajos petroleros;134 su objetivo
principal era proteger la vida y salud humana; evitar despilfarros y desperdicio de petróleo.
Calles para resolver la pugna con los petroleros consistió en realizar ciertas reformas a la ley.
Éstas se publicaron el 10 de enero de 1928; en su contenido especifican las diferencias entre
superficiarios y arrendatarios, confirmándoles a los primeros sus derechos por tiempo indefinido
para la explotación petrolera. Esta medida fue tomada como una demostración del gobierno 133 Discurso pronunciado por Vicente Lombardo Toledano el 22 de febrero de 1938 en el 1er Congreso General Ordinario de la CTM y que se refiere al conflicto del petróleo. 134 Publicado en el Diario de la Federación No. 43 del 22 de diciembre de 1927, el cual se reformo por Decreto el 7 de enero de 1930 que se publico también la misma publicación en el No. 36 del 13 de febrero de 1930.
138
mexicano de respetar los derechos obtenidos antes de la Constitución de 1917, por el entonces
embajador estadounidense en nuestro país, Morrow quien hizo esta declaración pública el 28
de marzo de 1928, con ello el Departamento de Estado del gobierno de Estados Unidos dio
también terminado el problema petrolero, declarando que en los conflictos que pudiera haber en
lo sucesivo tendrían que resolverse únicamente ante las autoridades administrativas y los
tribunales mexicanos. (Domingo,1950).
A pesar de las maniobras políticas efectuadas por Calles para que México pudiese participar de
la riqueza petrolera, la producción seguía disminuyendo; en 1926 era de un poco más de 14
millones de metros cúbicos; para 1929 se obtenían un poco más de 7 millones de metros
cúbicos, es decir, casi un 50% menos. En octubre de 1929 estalló la depresión mundial, por lo
que las exportaciones de crudo decayeron. Varias regiones petroleras como Cacalilao,
comenzaron a disminuir su producción; en 1931 resurgió otro campo petrolero en la zona
totonaca, específicamente en Papantla, Veracruz; la producción de 1930 fue de un poco más de
6 millones de metros cúbicos, en los siguientes 3 años se mantuvo en poco más de 5 millones
de metros cúbicos.
El 30 de noviembre de 1928 asume la presidencia del país, el Lic. Emilio Portes Gil, que en
materia petrolera se ocupo principalmente de la confirmación de derechos, tanto de propiedad,
como de explotación, siendo la Secretaría de Industria donde se efectuó; el 5 de febrero de
1930 ocupa la presidencia Pascual Ortiz Rubio, durante su gestión las relaciones con la
empresa petrolera El Águila se mejoraron extraordinariamente, debido a que Ortiz Rubio tenía
amistad personal con Deterding quien era el principal accionista de Royal Dutch, durante este
periodo El Águila estrenó el oleoducto de Azcapotzalco y la refinería,135 como medida
135 La Royal Dutch en su tratado de paz con la Standard Oil, se quedo que el mercado interno de México, en cambio permitía el ingreso de la Standard al mercado de la India; además de que se dictaron disposiciones
139
reconciliatoria se expulsó del país de forma irregular al Lic. Luis Cabrera, el pretexto fue que
había dicho en una conferencia cosas ofensivas para la Revolución, la desorganización política
del gobierno de Ortiz Rubio permitió que las compañías petroleras pudieran a su conveniencia
disponer por medio del soborno de los altos funcionarios, pero debido a los numerosos cambios
en el gabinete y la agitación política, impidieron mayor intervención en cuestiones petroleras.
El 1º de septiembre de 1932 ocupó la presidencia del país el Gral. Abelardo L. Rodríguez, quien
expidió un decreto del 15 de mayo de 1933, por el que quedan constituidas las reservas
petroleras nacionales; también promulgó una ley para que se constituyera una sociedad por
acciones de participación mixta, y que se encargara de la regulación del mercado petrolero,
atendiendo las necesidades oficiales y las de los ferrocarriles, el capital se fijó en 10 millones de
pesos y las facultades de operación fueron muy amplias, pero debido a que algunos de los
funcionarios de este gobierno también se dejaron sobornar por las compañías, gracias también
a la conducta del embajador estadounidense Daniels, no hubo mayores incidentes con el
gobierno estadounidense, que se hubiesen dado en otros tiempos.
Para dar una idea del poder que tenían algunas de las empresas petroleras que operaban en
México; en 1933 la Standard Oil, la Gulf Oil y Texas Oil que eran compañías estadounidenses
controlaban el 43% de la producción mundial, mientras que la Royal Dutch Shell y la Anglo
Persian inglesas poseían el 28%. Estas empresas controlaban el 71% de la producción
mundial.136 Su control e influencia no sólo se limitaba a la explotación del petróleo, sino que se
oficiales mexicanas sobre los grados de octano que debían tener la gasolina, y esto fue causa para que las empresas estadounidenses que tenían sus refinerías más antiguas, no realizarán ninguna mejora, dejando el mercado interno en manos de los ingleses. (Domingo,1950). 136 La Standard Oil contaba con un capital social de más de 1,000 millones de dólares, la Gulf Oil y la Texas Oil cuentan con un capital de 237 millones de dólares, la Royal Dutch-Shell de 217 millones de dólares y la Anglo – Persian con 34.5 millones de dólares, en total su capital social era de 1,568 millones de dólares, que al tipo de cambio representaban cerca de 6,000 millones de pesos. (Bach & De la Peña, 1938:7).
140
había extendido a otra serie de actividades como transportes, bancos e industrias
manufactureras.
Su poder les permitía también el control de gobiernos, parlamentos, políticos, periódicos y todo
lo que fuera de utilidad en su camino de expansión y consolidación. Una vez logrado el control
imperialista sobre los yacimientos petroleros de un país, poco les importaba a las empresas, el
bienestar y seguridad de sus trabajadores. Sostenían que si éstos morían, habrá otros que los
reemplazaran. El objeto era obtener las materias primas al precio más bajo; como la mayoría de
lo extraído era exportado no les interesaba la capacidad adquisitiva de sus obreros, por lo que
las compañías petroleras estaban desligadas totalmente de las necesidades de las necesidades
económico-sociales de los países donde se establecían.
El proyecto nacionalista que se da en México, tiene su primer periodo de 1929-1933, cuyo
origen económico se dio debido a la Gran Depresión de 1929, lo cual reduce el comercio
externo, en el segundo periodo de 1934-1939, será con Cárdenas que se consolida un proyecto
económico-político para México de cierta autonomía del exterior, desde el área económica el
Estado se convierte de un observador, a un agente activo que da las bases del cambio para el
desarrollo económico del país; desde la perspectiva política se incorporan los sectores obreros,
campesinos, militar y clase media al Partido de la Revolución Mexicana. Cárdenas consideraba
que los 3 problemas más importantes de México eran: educativo, económico y religioso
(Daniels,1949; Villarreal,1976).
La aplicación del primer plan sexenal aprobado por el PNR como el programa del gobierno
debiera ejecutar en 1934-1940, entre sus estipulaciones sobre política económica nacionalista:
141
Las actividades mercantiles y de la producción deberán como mira: impedir que las empresas
extranjeras continúen monopolizando los depósitos minerales existentes; facilitar las
actividades de mineros mexicanos; desalentar la exportación de concentrados minerales;
establecer fundiciones y talleres centrales, bajo la supervisión del Estado; estimular la
concurrencia nacional en la industria petrolera; aumentar la producción del petróleo; cambiar
el sistema para otorgar concesiones y rehusar éstas cuando se opongan a los intereses
nacionales, e impedir la exportación de productos que regresan al país semimanufacturados.
(Daniels,1949:71).
Así, las perforaciones totales llevadas a cabo hasta 1937 fueron 5,743 de las cuales resultaron
2,716 pozos productivos. La cantidad total del petróleo extraído hasta 1937 asciende a
1,865,609,088 barriles con un valor comercial por arriba de $3,700,000,000 pesos, sin contar el
aumento de valor de la producción por la refinación, este incremento de valor en 1936, en el
valor comercial del petróleo extraído fue de $135,378,417.00, las ventas realizadas por la
industria fue de $276,000,000.00 (Bach & De la Peña,1938). Esta información económica
permite conocer el por qué era necesario expropiar; las cantidades ofrecen una dimensión de la
riqueza que extraían las empresas extranjeras, que cuando se establecería que debían pagar
26 millones de pesos como compensación a los trabajadores, estas mismas empresas decían
que no lo podían hacer, porque le significaría la quiebra.
En 1938, Francisco Castillo Nájera fungía como embajador en los Estados Unidos de América.
Durante su gestión diplomática, él reconocía el valor que tenía el petróleo para los mexicanos:
Ningún producto rivaliza con el petróleo en la vertiginosa carrera que lo ha convertido de
humilde coadyuvante, en factor esencial de la industria moderna. En menos de un siglo, el
combustible apenas utilizado, el modesto lubricante substituto de las grasas comunes, el
auxiliar restringido de la iluminación, […] rompe la estrechura de sus aplicaciones […] se
142
prodiga en múltiples derivados, invade los anchurosos dominios industriales y se coloca,
junto con el hierro, el zinc, la hulla, el caucho, el algodón y la quinina, entre las materias
primas consideradas por la economía internacional, como dones de la naturaleza,
destinados al provecho de la familia humana, toda, no al beneficio particular de las
naciones cuyo suelo encierra aquellos minerales privilegiados. (Castillo,1949:11).
Actualmente, el petróleo es una de las materias primas más importantes para la industria
mexicana. Todas las actividades industriales y de transportes dependen de manera directa o
indirecta de él. Su empleo revolucionó la técnica productiva en mayor escala, como en su
momento lo hiciera el carbón y la madera que alimentaron a las máquinas de vapor. Hoy se
piensa que quien controla el petróleo del mundo gobierna todas las actividades industriales y de
transporte a nivel mundial. (Bach & De la Peña,1938).
4.2 La situación laboral de los trabajadores petroleros
En el marco jurídico, los trabajadores mexicanos sólo contaban con lo establecido por la
Constitución de 1857 donde se estipulaba la libertad de trabajo. Posteriormente en el Código
penal de 1872 en su artículo 925, tipificaba como delito cualquier reunión hecha con el
propósito de mejorar los salarios. Durante la Revolución mexicana, el gobierno maderista
intentó reglamentar la relación laboral para mediar en los conflictos obrero-patronales, creando
para ello en diciembre de 1911, la Oficina del Trabajo adscrita a la Secretaría de Fomento; para
diciembre del siguiente año se convirtió en el Departamento del Trabajo. Entre sus funciones
más importantes se encontraba el intervenir en los contratos de trabajo y de árbitro en los
conflictos.
143
En la Constitución de 1917, en el artículo 123 quedaron incluidas algunas propuestas laborales
aunque de manera muy incipiente,137 por lo que surgieron diferentes leyes laborales en varios
estados donde se abordaban y daban soluciones muy diferentes aún a problemas muy
similares. Con el crecimiento del movimiento obrero se generaron mayores conflictos y
confusiones debido a la falta de una legislación federal, la Suprema Corte de Justicia se
encargó de orientar la actividad de las Juntas de Conciliación y arbitraje, reglamentando y
ajustando los procedimientos a seguir. (Herrera,1998).
El 10 de marzo de 1927, el presidente de la República Elías Calles facultó a la Secretaría de
Industria, Comercio y Trabajo para conocer de los problemas surgidos entre los patrones y sus
trabajadores en las industrias minera y petrolera. El 23 de septiembre del mismo año se creó la
Junta Federal de Conciliación y Arbitraje. El proyecto de una Ley Federal del trabajo se aprobó
por unanimidad el 4 de agosto de 1931, ratificado el 13 del mismo mes por la Cámara de
Senadores. La Ley se aprobó y publicó en el Diario Oficial de la Federación el 18 y se promulgó
el 27 de ese mismo mes por el presidente Abelardo Rodríguez; a partir de enero de 1933 la
Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo se convierte en Secretaría de la Economía Nacional
y el Departamento del Trabajo pasa a ser autónomo. (Herrera 1998).
Hasta el año de 1933 el reclutamiento de trabajadores en las diversas compañías petroleras, se
efectuaba con la demanda de los obreros locales por la inmigración de obreros de otras partes
del país y por extranjeros. Los mejores puestos de la empresa, eran dados según la
nacionalidad del solicitante, ya que preferían primeramente a sus connacionales, después a
cualquier extranjero y al último a los mexicanos; muchas veces estos extranjeros ni siquiera
137 La fracción XX del artículo 123 constitucional establece que las diferencias o los conflictos entre el capital y el trabajo se sujetarán a la decisión de una Junta de Conciliación y Arbitraje, formada por igual número de representantes de los obreros, como de los patrones y uno del gobierno; las Juntas de conciliación tuvieron por objeto crear un órgano especial de investigación, de previsión y de resolución de los conflictos entre los obreros y los patrones (Herrera,1998).
144
eran evaluados en sus capacidades y aptitudes laborales. Ello habla de la discriminación que
había hacia los mexicanos por las mismas empresas petroleras, que incluso en algunas se
instalaban comedores para mexicanos y otro para los extranjeros, los trabajadores extranjeros
tenían mayores comodidades que los nacionales como alojamiento, luz, agua, hielo y comida
por cuenta de la empresa.
Los obreros se dividían en dos categorías, en obreros de trabajo fijo en refinerías y terminales
(para estos se construían casas aceptables para su alojamiento), y en obreros de trabajo
aleatorio o efímero que era en el campo. En esta zona existía constantemente demanda de
trabajadores, ya que a veces se incrementaban el trabajo al ir descubriendo más pozos, pero
más a menudo era que los trabajadores no duraran más de dos o tres quincenas por haber
contraído paludismo u otras enfermedades que diezmaban a las poblaciones trabajadoras.
Muchas veces se utilizaban a enganchadores sobre todo en Tampico, Ciudad Victoria y el Bajío.
Éstos prometían a los trabajadores un salario de tres a cuatro pesos diarios, que comenzaban
desde el día en que emprendían el viaje, con gastos pagados por cuenta de la empresa.
Durante el viaje podía suceder que otros enganchadores de otras empresas les ofrecieran
mejores condiciones salariales.
A su llegada a los campos petroleros, la empresa proporcionaba carpas para una familia o para
4 ó 5 trabajadores cuando eran campamentos ambulantes, o en los primeros días los
trabajadores los dedicaban a construir barracas con madera y cartón impermeable.
Generalmente las empresas instalaban comisarías (tiendas) para proveer de lo necesario a los
trabajadores, sin embargo, cuando llegaba el momento de paga se les descontaba lo que
debían; los excesos en los precios era una situación normal, ya que no existían otros
145
proveedores en muchos metros a la redonda; no existían trabajos de saneamiento y carecían
de servicio médico. Por el contrario, los empleados extranjeros tenían alojamiento, luz, agua,
hielo y comida por cuenta de la compañía, con sueldos muy elevados por trabajos mínimos.
Para 1926, las indemnizaciones por muerte o incapacidad de carácter profesional, las empresas
fijaban diferentes sumas cuando existían reclamaciones; pero normalmente era por ajustes, los
ceses eran por caprichos del jefe del campo sin ninguna responsabilidad. Las circunstancias
cambiaron al entrar en vigor la Ley del Trabajo, se empezaron a organizar los sindicatos tanto
en las refinerías como en los campos petroleros, por lo que comenzaron las exigencias a que
tenían derechos según la ley. Para evitarse tales responsabilidades las empresas extranjeras
abandonaron su política de perforar los pozos por administración y adoptaron la perforación por
“contrata”, es decir, los contratistas sustituyeron a las empresas en su posición de patrones de
trabajadores. (Gobierno de México, 1940). Las empresas petroleras se beneficiaron
económicamente porque de esta forma ellas no pagaban las prestaciones de ley, ni se hacían
cargo de los trabajadores, ellas sólo contrataban a un contratista quien le aseguraba que sus
trabajadores realizarían el trabajo requerido, es decir se desentendían del trabajador, puesto
que legalmente ellas no los contrataron.
4.3 El Grupo Especial Número 7
La baja de precios del petróleo inició en 1925 y se prolongó hasta 1931; las causas principales,
una sobreproducción de petróleo a nivel mundial y la depresión económica de 1929.138 La
reducción de la producción petrolera fue una de las medidas que el gobierno realizó para tratar
138 La producción mundial era de 693,195,928 barriles en 1920, llega a 1,411,905,000 barriles en 1930 (un incremento del 203.68%), la producción de Estados Unidos en este mismo periodo fue de 442,929,000 barriles a 898,011,000, pero su valor en dólares de 1,360,745,000 en 1920 a 1,070,200,000 en 1930 debido a una fuerte baja de precios (Gobierno de México,1940).
146
ajustar la baja en los precios del petróleo. Esto propició a su vez, el reajuste en los salarios de
los trabajadores dedicados a esta rama. Por citar un ejemplo, se puede decir que en 1932, a los
trabajadores petroleros en promedio se les pagaba 50% menos de los que se pagaba en 1920-
1925, aunque el costo de la vida en ese tiempo también se había reducido.
Los trabajadores mexicanos pasaron momentos difíciles. Esta cuestión llevó a desigualdades
en los salarios de los trabajadores aún de la misma compañía y con el mismo trabajo, lo que
propició la conformación de múltiples organizaciones obreras. En contraparte, las empresas
petroleras organizaron sindicatos blancos para disminuir la importancia de las congregaciones
de trabajadores mexicanos.
En 1934, el precio del petróleo eran superior a 1925, por lo que el sector obrero no sólo
consideró que había llegado el momento del reestablecimiento de sus salarios que conservaban
desde hacía 10 años, sino que también tenía derecho a mejorías compensatorias a las cuales
renunciaron cuando se dio la crisis económica de 1929. Con estos argumentos plantearon la
demanda de nuevas prestaciones en materia de previsión social; pero las empresas no
aceptaron. Esta situación originó varias huelgas en los centros de producción petrolera
mexicana.
En los últimos años, la suspensión de trabajos de exploración para descubrir nuevos campos
petroleros, y la decreciente producción de los antiguos campos propició que las inversiones
disminuyeran considerablemente. En 1936, estas inversiones alcanzaron una suma de
$346,211,748.02. Esta cantidad se había reducido en los últimos 15 meses (desde enero de
1937 a marzo de 1938) en más de 20 millones de pesos por concepto de amortización y
depreciación. De la suma anterior, $174,017,073.48 correspondían a gastos diversos y el resto
147
a capital circulante, el cual en buena parte fue retirado por las empresas en los últimos meses.
Esto significaba que si se tomaba en cuenta el monto de la producción y el de las utilidades
obtenidas por la industria, se podría concluir que del capital invertido en México por las
empresas petroleras no provenía del exterior. (Bach & De la Peña,1938).
En 1936 operaban en México más de 20 compañías petroleras. La empresa más importante,
por su producción e inversión, era la Compañía Mexicana de Petróleo El Águila 139; era
subsidiaria de la Royal Dutch Shell. La segunda en importancia era la Huasteca Petroleum
Company, filial de la Standard Oil Company de Nueva Jersey. La tercera empresa correspondía
al Grupo Sinclair.140 Cada compañía petrolera establecía su contrato de trabajo con sus
empleados y obreros. Los trabajadores petroleros efectuaron en octubre de ese año una
convención, en la cual surge el proyecto de contrato colectivo único, basado y apoyado en el
principio constitucional de que a igual trabajo debe corresponder igual renumeración.
Así, el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) tiene sus
orígenes en 1935,141 constituyéndose debidamente el 3 de noviembre de 1936. En sus
estatutos, éste exigía de todas las empresas un contrato colectivo de trabajo,142 con la finalidad
139 En la obra “La lucha mundial por el Petróleo” de 1922 cuyo autor L’Espagnol de la Tramerye analiza los balances de la empresa “El Águila” correspondientes a los años de 1911 a 1920, donde da las ganancias netas en dicho decenio que sumaban $164,248,000 dólares, comparándolas con el capital de 30 millones con que se fundó en 1907. (Idem). 140 En 1930 la Sinclair Consolidated Oil Corporation adquirió en Estados Unidos a la empresa Pierce Petroleum Company comprando la mayoría de las acciones al corporativo Pierce, pero se le informó hasta 1932 a la Secretaría de Industria de México de esta transacción, en 1937 la Pierce Oil Company comunicó a esta Secretaría que en asamblea de accionistas se había acordado modificar la denominación de la empresa por la de Sinclair Pierce Oil Co. (Herrera,1998). 141 El 15 de agosto de 1935 de acuerdo a la fracción III del artículo 233 de la Ley Federal del Trabajo. El 29 de diciembre del mismo año obtiene del Departamento del Trabajo el registro número 1131. (Herrera,1998). 142 Anexo 1.
148
de que todas las compañías petroleras que en México operaban, pagaran los mismos salarios a
sus trabajadores y otorgaran las mismas prestaciones de carácter social.
En aquellos casos donde no se atendían satisfactoriamente las peticiones de los trabajadores
petroleros, éstos se emplazaban a huelga. Esta situación motivó la intervención del
Departamento del Trabajo logrando la atención de las empresas petroleras. En los últimos
meses de 1936, los representantes de las empresas petroleras aceptaron entablar pláticas con
los dirigentes sindicales. Sin embargo, el 29 de noviembre se dio un conato de huelga, pues los
trabajadores consideraban que era la manera de presionar a las empresas para que aceptaran
sus peticiones.
Por lo delicado del asunto, el Gobierno Federal intervino entre ambas partes con la finalidad de
que las negociaciones continuaran. Las pláticas se dieron en el último trimestre de 1936 y
principios de 1937. Las empresas accedieron a diversas peticiones sociales como la semana
del trabajo de 40 horas con pago de 56, 8 días festivos anuales y 8 de descanso obligatorio.
También concedieron uniformar los salarios al nivel de los más altos que en ese momento
pagaba “El Águila”143 en Poza Rica, Veracruz.
Las empresas petroleras estimaron que los aumentos salariales y las prestaciones sociales les
implicarían nuevos ingresos cercanos a los 13 millones de pesos anuales, pero debido al
aumento en el costo de la vida que fue de 88.96%, los salarios sólo lo hicieron en 45.91%. Los
obreros pedían aumentos de algo más del 100% sobre los salarios y prestaciones vigentes en
1937, en cambio las empresas sólo ofrecían algo menos del 25%, aduciendo que su situación
económica no les permitía acceder a mayores prestaciones. 143 El Águila por 30 años, de 4 propiedades: Tierra Amarilla, Palma Real, Llano Grande y Cuchillo de la Cal en total una extensión de 6,881 hectáreas. La empresa pagaba 20 pesos por hectárea, o sea $137,620 pesos al año (Fowler,1991).
149
Las posiciones entre empresas y trabajadores se alejaron aún más sin llegar a ningún acuerdo,
lo que propició el rompimiento en las pláticas. El 28 de mayo de 1937 se declaró la huelga
general a las empresas petroleras extranjeras que operaban en el país; los trabajadores
fundamentaban sus quejas de malos tratos, la desigualdad salarial entre nacionales con
extranjeros, así como la discriminación de que eran objeto por parte de estas empresas.
Por su parte, las empresas petroleras pagaron importantes sumas en publicidad para
desprestigiar el movimiento obrero. Buscaban que el pueblo mexicano repudiara a los
trabajadores petroleros. Esta situación provoco la escasez de sus productos y prácticamente
paralizaron al país, por lo que tuvo que intervenir el presidente Lázaro Cárdenas del Río,
solicitándole al sindicato que levantara la huelga y plantearon de otra forma su conflicto. La
huelga duró 13 días, regresando los trabajadores petroleros a sus labores el 9 de junio del
mismo año. (Escobedo, 2000; Petróleos Mexicanos,1971).
Las magníficas prestaciones que recibían los trabajadores extranjeros eran negadas a los
trabajadores mexicanos. Al suscitarse el conflicto, las empresas extranjeras solicitaron a las
autoridades del trabajo la realización de una inspección de las condiciones en que vivían sus
obreros, lo que supuestamente había de servir para demostrar que no había razón para ceder a
las peticiones laborales. Contrariamente a lo esperado por las compañías, que tal vez confiaban
en lograr un veredicto favorable por estar acostumbradas a comprarlos, los resultados de la
investigación constituyeron una prueba en contra de ellas.
El licenciado Gustavo Corona Figueroa fue quien dio cumplimiento a la inspección de los
servicios médicos. En su informe redacta la existencia de lugares donde no se encontraron ni
150
los elementos más necesarios para curaciones de emergencias La misma comisión encontró
que los poblados no contaban con agua y que las condiciones de higiene eran deplorables. Ya
que fueron las mismas empresas quienes solicitaron la investigación y que conocían la fecha en
que se realizará la comisión, los resultados de tal investigación fueron desastrosos para ellas.
Por otro lado, se encontró que era costumbre de las compañías el pago por medio de vales
canjeables sólo en sus tiendas; allí, los precios eran tan elevados que el salario venía a ser, en
realidad, la tercera parte de lo que nominalmente percibían (Basurto,1976; Menéndez,1958).
Como resultado de la investigación, el lic. Eduardo Soto Innes,144 Secretario General y Carlos
G. Flores, Secretario de Conflictos del STPRM (PRI-CEN,1985) demandaron a las siguientes
compañías petroleras (Secretaría de Relaciones Exteriores,1974):
1. Compañía Mexicana de Petróleo El Águila S.A.
2. Huasteca Petroleum Company
3. Pierce Oil Company S.A.
4. California Standard Oil Company de Mexico
5. Petróleos de México S.A. (en liquidación)
6. Compañía Petrolera AGWI S.A.145
7. Penn Mex Fuel Oil Company
8. Stanford Company
9. Richmond Petroleum Company of Mexico S.A.
10. Explotadora de Petróleo “La Imperial”, S. A.
144 Ocupo dicho cargo del 23 de agosto de 1935 al 27 de diciembre de 1937, fue sustituido por Juan Gray quien renunciará después de la expropiación para hacerse cargo de la Dirección General de Personal de Pemex (Herrera,1998). 145 En 1918 las empresas de navegación Atlantic Gulf y West Indies constituyeron una empresa petrolera cuyo nombre se conformo con las iniciales de ambas quedando AGWI, que empezó denunciando terrenos con el apoyo del gobierno carrancista, las cuales consumían su propia producción. (Gobierno de México,1940).
151
11. Compañía Explotadora de Petróleo “La Imperial” S.A.
12. Compañía de Gas y Combustible “Imperio” y empresas asociadas
13. Compañía Naviera “San Cristóbal”, S. A.
14. Compañía Naviera “San Ricardo”, S. A.
15. Compañía Naviera “San Antonio”, S. A.
16. Mexican Sinclair Petroleum Corporation
17. Consolidated Oil Company of Mexico S.A.
18. Sabalo Transportation Company S.A.
19. Mexican Gulf Petroleum Company
El 7 de junio de 1937 se interpuso la demanda ante la Secretaría del Trabajo, en la Junta
Federal de Conciliación y Arbitraje. Se exigió el establecimiento de determinadas condiciones
de trabajo sobre la base de una contratación en los términos del proyecto aprobado en la 1era.
Gran Convención extraordinaria del Sindicato, asunto que al no resolverse satisfactoriamente,
se planteó como un conflicto de orden económico (Capítulo 7º del Título 9º de la Ley Federal
del Trabajo).146 Con base a los artículos 570, 571 y 572 de la Ley Federal de Trabajo se abrió el
expediente 305 (Gobierno de México, 1963). En sus propias palabras, Silva Herzog explicaba
entonces el significado del conflicto de orden económico:147
En la Ley de Trabajo de México cuando existe un conflicto, y el capital y el trabajo no
llegan a un acuerdo porque la empresa interesada afirma que no tiene capacidad
146 Anexo 2. 147 Conflicto económico se le define como un conflicto de intereses, que no versa sobre a interpretación de un derecho adquirido y fundado en la ley, o en el contrato, sino que representa una reivindicación que tiende a modificar un derecho existente o a crear un derecho nuevo, es decir, cuya solución se apoya exclusivamente en consideraciones de carácter social y económico, para lo cual la Junta de Conciliación y Arbitraje nombra a 3 peritos cuando menos, para que investiguen los hechos denunciados, y al mismo tiempo analicen en forma pormenorizada las causas que dieron origen al conflicto, realizando los estudios que determinen pertinentes, donde la comisión pericial formula un dictamen en el que propone la forma en que a su juicio pueda solucionarse. (Instituto de Investigaciones Jurídicas,1985a).
152
económica para acceder a las demandas de los obreros entonces se ofrece la posibilidad
de que cualquiera de las partes plantee el conflicto de orden económico, a fin de que la
autoridad, en este caso la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje designe peritos que
analicen las condiciones económicas de la empresa, e informen a la misma Junta acerca
de si puede o no acceder, en todo o en parte, a lo solicitado por sus trabajadores.
(Silva,1965a:16).
Para todos los actores de esta problemática estaba claro que la solución de este conflicto no se
encontraba en la huelga. Los representantes sindicales establecieron sus demandas ante la
Junta Federal, mediante la queja de un conflicto de orden económico. De conformidad con la
Ley se designaron tres peritos148, quienes en un término de 30 días debían presentar ante la
Secretaría del Trabajo, 2 documentos que consistían en un informe acerca del estado de la
industria petrolera en todos sus aspectos fundamentales; así como un dictamen sobre la
manera de resolver el conflicto.
La Junta Federal por su parte, ordenó una investigación sobre el estado financiero de las
empresas extranjeras para comprobar si podían cumplir con las demandas sindicales. Esta
investigación se apoyaba en la política laboral de Cárdenas quien, en septiembre de 1936,
había hecho mención en que el incremento salarial se haría a partir de la capacidad económica
de la industria en revisión y no de acuerdo con la ley de la oferta y la demanda del mercado
laboral. (Herrera,1998; Silva,1988).
148 Perito es un experto o especialista en alguna ciencia, técnica o arte, que por medio de una investigación de hechos, ilustre al juez o magistrado, sobre el porque una situación se encuentra en conflicto, donde también emite su opinión, que resulta necesaria para la resolución de una controversia; para poder ser perito se requiere que no tenga ningún interés en el litigio, o en su resultado o desenlace, un perito puede ser recusado cuando tiene intereses en el conflicto y se de prueba de ello, o que se compruebe por cualquiera de las partes afectadas que el perito es incompetente, por lo que también lo será el dictamen realizado por él sobre determinada materia. (Instituto de Investigaciones Jurídicas,1985c).
153
Son atribuciones y facultades de la Junta Central de Conciliación y Arbitraje conocer todas las
diferencias o conflictos colectivos que se susciten entre trabajadores y patrones, siempre que se
deriven del contrato de trabajo o de hechos íntimamente relacionados con éste, que afecten a la
industria en cuestión. Por su parte, el Estado es el encargado de resolver por medio de un
arbitraje, todas las diferencias o conflictos suscitados, para lo cual se puede apoyar en Juntas
Especiales de la rama afectada por el conflicto quien lo tratará en Conciliación y Arbitraje.
En este orden de ideas, las atribuciones que se le confirieron al Grupo Especial de la Junta
fueron:
I) Conocer en conciliación los conflictos individuales o colectivos suscitados en su
demarcación;
II) Conocer en arbitraje los conflictos cuando las partes no hubiesen llegado a un
acuerdo;
III) Conocer en conciliación cuando la afectación comprendía más territorios
jurisdiccionales y,
IV) Conocer los reglamentos interiores de trabajo.
La Junta Federal designó como peritos a Efraín Buenrostro, Subsecretario de Hacienda y
Crédito Público; Mariano Moctezuma, Subsecretario de la Economía Nacional y Jesús Silva
Herzog,149 asesor del ministro de Hacienda. El Presidente Cárdenas le solicitó al Lic. Vicente
Lombardo Toledano, Secretario General de la Confederación de Trabajadores de México
(CTM), que por parte de la representación obrera, propusiera una terna para designar a uno de
los 3 peritos150 que debía nombrar el Grupo No. 7 de la Junta Federal. La terna presentada por
149 Silva Herzog impartía la cátedra de Historia del pensamiento económico en la Universidad Nacional, quien era apolítico pero con ideas radicales. (Amendolla,1940). “Quien disfruta de una sólida reputación como economista y financiero.” (Gobierno de México,1940:701).
154
Lombardo fue: Víctor Manuel Villaseñor, Luis Fernández del Campo y Jesús Silva Herzog,
quedando designado este último. En la primera reunión de los peritos se nombró a Buenrostro,
presidente; a Moctezuma, vocal y a Silva Herzog, secretario.
En julio y agosto de 1937, Silva Herzog fungió como Secretario de la Comisión Pericial en el
Conflicto de Orden Económico de la Industria petrolera.151 Su función primordial consistía en
estudiar y proponer soluciones a la situación que tenía la industria petrolera mediante un
informe y un dictamen en el que se debía fijar la forma de solucionar el conflicto.152 Dentro de
los datos recabados en el Dictamen hay varios de tipo estadístico, que en algunas partes del
estudio sirven de base para los diferentes cálculos sobre rendimientos de impuestos,
producción, consumo, etc. En otra parte del mismo, se hace uso de la analogía con respecto a
la industria petrolera en Estados Unidos, para entender mejor la situación en que se encontraba
la industria petrolera en México, encontrar sus deficiencias y desviaciones.
La designación oficial de Silva Herzog como integrante del Grupo que resolvería el mayor
conflicto obrero-patronal de la época, situaba a este intelectual en lo que se podría considerar
su investigación más importante y trascendental. Por eso llama la atención la poca difusión y
estudio que se le dio en la historiografía a esta importante investigación. Dadas las condiciones
de reconocido investigador social que respaldaban a Silva Herzog, éste sabía que no podía 150 Según el artículo 396 de la Ley Federal del Trabajo de 1931 para ser representante de los trabajadores o patrones, se requiere: ser mexicano, mayor de edad, estar en el pleno goce de sus derechos civiles, saber leer como escribir, no pertenecer al estado eclesiástico y no haber sido condenado por delitos infamantes. 151 Señala Amendolla (1940) que para tal tarea, Silva Herzog se dedico por entero al estudio y a la investigación, en 4 horas formuló el plan de trabajo y en las siguientes 48 horas organizó en una oficina al personal que lo apoyaría, que eran 80 individuos. 152 “Llevaron a cabo una intensa y profunda investigación hasta dar cuerpo en el curso de dos meses a un bien documentado estudio en el que se analizan las más importantes características de la industria, sobre todo lo relativo a la situación financiera de las empresas, a la producción, salarios, previsión social, precios, comercio interior y exterior, impuestos, rentas, regalías, transportes, técnica de la producción, perspectivas de la industria, etc.; se analizan las listas de raya de todas las empresas, los contratos colectivos vigentes y anteriores y se hace una comparación entre las condiciones de trabajo de la misma industria que opera en México y en los Estados Unidos, y con los de la minería y los ferrocarriles de México.” (Bach & De la Peña,1938:46).
155
ofrecer un veredicto de la problemática, sin llevar a cabo todo un estudio de la industria
petrolera tendiendo como principal adversario el poco tiempo que les habían asignado para la
investigación. Sobre todo sabiendo que por tratarse de un conflicto de tipo económico, las
empresas petroleras ya no enfrentaban al STPRM sino al mismo gobierno mexicano.
4.4. La elaboración del dictamen
La importancia de este trabajo se puede analizar desde varias aristas: su relevancia e impacto
histórico; su originalidad (ya que no tenía precedentes); así como la organización y dirección
para cumplir con el plazo establecido.
Según el Instituto de Investigaciones Jurídicas (1985a) el Dictamen Pericial es el informe que
rinde un perito o experto en cualquier arte, profesión o actividad, en el que da a conocer sus
puntos de vista o resultados respecto del examen, o análisis que haya hecho de una cuestión
cometida a sus conocimientos sobre una materia específica. Este dictamen en materia pericial o
en materia jurídica puede ser libre o estar sujeto a determinadas reglas o condiciones
impuestas por la autoridad judicial que le solicita o difiere.
En el primer caso, el perito examina las cuestiones respecto de las cuales ha de emitir una
opinión fundada y que son sometidas a su criterio, experiencia o conocimientos, sin sujetarse a
orientaciones u órdenes precisas realiza por su parte las investigaciones que estima
procedentes. Acude a las actuaciones de un proceso si ello resulta indispensable; solicita
informes, realiza inspecciones, estudia documentos y puede inclusive pedir, alguna instrucción
o la realización de una diligencia específica, todo ello con la finalidad de obtener los elementos
que le sean útiles para llegar a una concusión, que según él considera es la correcta. En
156
materia judicial, la autoridad judicial le indica sobre cuáles temas en particular o cuestiones
profesionales o técnicas de una controversia en las que requiere auxilio, para estar en
condiciones de dictar una sentencia justa y correcta.
En materia laboral, tratándose del procedimiento que sigue en conflictos colectivos de
naturaleza económica, el dictamen debe contener los hechos y causas que dieron origen al
conflicto. En el caso que nos ocupa, la relación entre el costo de la vida por familia y los salarios
que percibían los trabajadores, los salarios medios que se pagaban por la empresa, sus
condiciones económicas y condición general; las condiciones generales de los mercados, los
índices estadísticos que tiendan a precisar la economía nacional eran factores a considerar en
esta disputa nacional.
Para que un dictamen tenga eficacia probatoria, pueda adoptar una determinación respecto de
las cuestiones técnicas, científicas o jurídicas que hayan sido planteadas por las partes y
permita a la autoridad judicial apoyarse en él, su contenido se debe ajustar a los siguientes
lineamientos:
I) El planteamiento de la cuestión sobre lo que ha de pronunciarse con un criterio
profesional, técnico o científico, debe ofrecer pruebas periciales que indiquen su
objeto y naturaleza, esto es con la finalidad de conocer que se persigue con ello, es
decir, se trata de ilustrar al juez o a la autoridad judicial con respecto a los hechos o
circunstancias del juicio. Por su parte, el juez es quien solicita se le asesore en
determinados aspectos de la controversia; también será quien determine la forma en
que tal asesoría le sea útil;
II) En los alcances de la controversia en el dictamen pericial, se fijarán con precisión los
puntos en que se oponen las partes a efecto de distinguir las distintas posiciones en
157
que se hayan ubicado, en todo caso deben reproducirse textualmente los términos de
ofrecimiento de la prueba. A partir de ellos en el examen de los aspectos
controvertidos tal como lo haya dispuesto la autoridad y sólo respecto de aquellos
habrá de pronunciarse juicio;
III) En el examen de cada punto de estudio en el dictamen, no sólo se formularán las
aclaraciones conducentes, sino que se incluirán los documentos o instructivos que
complementen la opinión que se sustente y que sirvan para ilustrar las cuestiones
sometidas a examen pericial, éstos además se estudiaran por separado,
IV) Las conclusiones del dictamen deben tener como propósito proponer soluciones.
Deberán estar fundamentas en el análisis efectuado de los puntos controvertidos con
expresión de las causas o motivos, si los hubiere, que hayan permitido llegar a
determinadas propuestas. Las conclusiones serán precisas, claras que no dejen lugar
a dudas.
V) El dictamen pericial es en suma un auxiliar eficaz para el juzgador, que no puede
alcanzar todos los campos del conocimiento técnico o científico y quien debe resolver
conflictos que presentan aspectos, complejos que exigen una preparación
especializada, de la cual carece, puede o no vincularse a la resolución que se
pronuncie, pero en cualquiera de los extremos que se adopte, la valoración que se
hará constituye un apoyo para una más completa aplicación de la justicia. (Instituto de
Investigaciones Jurídicas,1985b).
En este orden de ideas, Cárdenas (1937) señalaba que en el caso de las compañías petroleras,
su conflicto se había sometido a la decisión de un tribunal arbitral. Se les había dado una amplia
oportunidad, la misma que para los trabajadores para que presentaran todo tipo de pruebas y
158
ambos serían escuchados conforme a sus derechos. Los peritos designados para la solución de
este conflicto, Cárdenas los calificó como
[…] Personas de reconocida responsabilidad y buena fe, que han aportado, con toda
serenidad, el fruto de su capacidad (Cárdenas, 1937:11).
Para la realización de esta tarea fue instalada una oficina, al Prof. Silva Herzog le designaron
alrededor de sesenta colaboradores entre los que se encontraban: contadores,153 economistas,
estadígrafos, calculistas, taquimecanógrafas, etcétera. Su función consistía en la búsqueda y
análisis de información relacionada con la situación de la industria petrolera nacional.
Como colaboradores cercanos de Silva Herzog se encontraban: Miguel Manterola Flores,
Federico Bach, Moisés T. de la Peña, José López Portillo y Weber, Gustavo Ortega, Gilberto
Loyo, Humberto Tejera, Gustavo Martínez Cabañas, Macedonio Garza, Joaquín Ramírez
Cabañas, José B. Durán, Manuel J. Zevada, José B. Durand, Manuel Aguilar Uranga, Adrián
Reyes y Leonardo Galván (quien tuvo a su cuidado la parte administrativa del trabajo). Según el
testimonio del propio Silva, todo su equipo trabajó entre diez y catorce horas diarias durante la
elaboración del estudio colectivo.
A cada grupo, Silva Herzog154 les designó una parte de conformidad con un plan que
previamente había elaborado. Durante esta gestión realizó tareas de director y coordinador.
Para terminar con el estudio se trabajó intensamente de 10 a 12 horas diarias. A medida que el
153 Dentro del campo de trabajo del investigador contable, los profesionales con experiencia en el trabajo contable contribuyen a la solución de los problemas que confrontan sus clientes y empleados, entre lo que investiga son problemas relacionados con la teoría, el proceso y los estudios contables; problemas relacionados con la teoría de la auditoria contable, estudios sobre distintas aplicaciones de la contabilidad como costos, impuestos y ganancias. (Eyssautier,2006). 154 Señala Amendolla (1940) que Silva Herzog estaba poseído por un extraordinario sentimiento de responsabilidad, laboraba entre 16 y 18 horas diariamente.
159
informe iba efectuándose era revisado por los otros peritos, quienes aprobaban lo hecho sin
ninguna observación o corrección. Al terminar se hicieron 20 ejemplares en una máquina Dito,
en papel tamaño oficio, que equivalió a unas 2,500 páginas escritas en máquina a doble
espacio.
A los colaboradores de Silva Herzog se les dieron pequeños gratificaciones al terminar el
trabajo. Todos eran empleados del gobierno y no dejaron de percibir sus sueldos. Las
gratificaciones se pagaron con 15,000 pesos que donó el Departamento del Trabajo por
gestiones del Subsecretario de Hacienda.
En este importante y trascendente trabajo a cargo del profesor Silva Herzog, uno de sus
colaboradores, José López Portillo y Weber155 detalla su experiencia personal:
El prof. Silva Herzog dirigió la investigación y redactó el dictamen. Tuve el honor de
colaborar en la redacción de varios de sus capítulos, juntamente con otros 13
profesionistas o especialistas en varias ramas. La contabilidad, base forzada del fallo, fue
analizada por 28 contadores […] el Prof. Silva Herzog es hombre capaz, recto, de firmes
convicciones, de voluntad imperiosa, y con tal capacidad de trabajo, que sorprende haya
organismo humano que pueda resistirlo. Su don de organización es excepcional, Por
medio de una atinada división del trabajo, de selección de personal y de energía
implacable para impulsar las actividades de todos, pudo concluirse en tiempo oportuno el
análisis de contabilidades, contratos de venta, situación mundial de los mercados,
antecedentes históricos, condiciones técnicas, transportes, etc. y resaltar el carácter
extranjero de la industria petrolera, desvinculada de México no obstante sus enormes
utilidades y en cambio, con sus compañías integrantes afiliadas a grandes monopolios
extranjeros. Su egoísta intervención casual en nuestros asuntos. La carestía a que
155 La participación del Ing. López Portillo consistió en escribir el primer capítulo del Informe presentado por los peritos, que se denominó “La industria petrolera en México hasta 1933”, contiene 80 páginas escritas a máquina a renglón cerrado y varios cuadros alusivos. (Silva,1980).
160
vendían sus productos en el país. Las utilidades enormes. El abandono en que tenían la
exploración. (López Portillo,1976:76-77).
Otro de los colaboradores que intervino en el estudio, el contador Alejandro Hernández de la
Portilla, recuerda que los libros contables de las compañías petroleras contenían fallas en
adulteración de cuentas y ocultamiento de utilidades por medio de gastos y sueldos inflados. El
veredicto no dejaba dudas de que estas empresas podían pagar los 26 millones de pesos que
los obreros exigían y no sólo los 12 millones de pesos que estaban ofreciendo. (Krauze,1997).
Para comprobar este estado de cosas, el gobierno requirió un minucioso estudio que reflejó un
ingenioso sistema por parte de las empresas para reducir sus utilidades, ya que en los libros de
contabilidad,156 a los precios de exportación del petróleo, debían pagar un impuesto sobre la
base de lo extraído. Para reducir lo que se pagaría por este concepto, estas empresas
cargaban a sus costos de operación el pago por concepto de transporte del producto, siendo
que tal servicio era cubierto por sociedades transportistas ficticias, que eran propiedad de las
mismas compañías.
También era muy común el uso de doble tubería para cargar los buques, una de pequeño
diámetro que era la que permitían inspeccionar a las autoridades y, otra de un diámetro mucho
mayor con la cual se hacía en realidad el cargado de los buques. Con base en este estudio de
los libros de contabilidad presentados por las empresas, la comisión de peritos determinó que
las ganancias anuales reales de las compañías era de $56,260,176.00 en promedio en los años
de 1934, 1935 y 1936, contra los $22,889,637 que habían declarado haber ganado oficialmente,
156 Acreditación de Quitin Botas y Miguel Manterola como auxiliares de la Comisión Pericial para inspeccionar los libros de contabilidad, según oficios No. 11 y No. 30 girados por el Secretario de la Comisión Pericial, Jesús Silva Herzog dirigidos a la Cía. Mexicana de Petróleo El Águila con fecha 18 de junio de 1937. (Gobierno de México,1940).
161
es decir, habían obtenido ganancias del 16.53%, 17.82% y 16.05% sobre el capital invertido,
cuando en Estados Unidos, esas mismas compañías difícilmente obtenían tales ganancias.
(Basurto,1976).
Meyer (1968) señala que el informe de los expertos fue más allá de la pura investigación
financiera, para convertirse en un examen oficial de la realidad petrolera. Para poder llevar a
cabo el dictamen, Silva Herzog realizó un estudio de la situación en la que estaba la industria
petrolera mexicana, el cual se estructuró en 3 volúmenes.
En el volumen I del Informe que rinde a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje la Comisión
Pericial en el conflicto de orden económico en la industria petrolera contiene 422 páginas
fechado en México D. F. Su contenido se resume de la siguiente manera:
Capitulo I La industria petrolera en México hasta 1933
1. El petróleo en la época precortesiana
2. El petróleo durante la época de la dominación española
3. El petróleo a partir de 1821
4. Geografía de las zonas petroleras
5. Aspectos geológicos de los campos petroleros
6. Empresas que han trabajado en México hasta 1933
7. Rentas y regalías
8. Técnica industrial
9. Distribución e impuestos
10. Salarios y previsión social
162
Capítulo II La industria petrolera en los Estados Unidos de Norteamérica y algunas referencias a
la de otros países
1. Aspectos generales
2. Producción, comercio exterior y consumo
3. Transportes y precios
4. Salarios
5. Utilidades y regalías
6. Impuestos y legislación
Capítulo III Aspectos generales de la industria petrolera en México en la actualidad
1. Las empresas petroleras que operan en México
2. Condiciones legales de las empresas y su actuación en México
3. Zonas petroleras
4. Descripción de los campos de petróleo y gas actualmente explotados
5. El agotamiento de los campos explotados en la actualidad
6. Pozos perforados
7. Refinerías y plantas de aprovechamiento de gas
8. Perspectivas de la industria
Capítulo IV Producción, comercio exterior y consumo
1. Producción
2. Comercio exterior
3. Consumo
Capítulo V Transportes y precios
163
1. Transportes
2. Precios
Capítulo VI Salarios y Previsión social
1. Los salarios en la industria petrolera establecida en México
2. Previsión social
3. Salarios y condiciones de trabajo en la minería y en los ferrocarriles
4. Precios de los principales artículos de primera necesidad y estimación del costo de un
cesto de provisiones
5. Los salarios en la industria petrolera norteamericana
Volumen II contiene 820 páginas. Su contenido se resume de la siguiente manera:
Capítulo VII Impuestos
1. Los impuestos en México
2. Los impuestos en Estados Unidos de Norteamérica
3. Comparación de los impuestos de Estados Unidos de Norteamérica con los de México
Capítulo VIII Condiciones financieras de las empresas petroleras en el periodo 1934-36
20. Introducción
21. Compañía Mexicana de petróleo El Águila S.A.
22. Huasteca Petroleum Company
23. Pierce Oil Company S.A.
24. California Standard Oil Co. de Mexico
25. Petróleos de México S.A. (en liquidación)
164
26. Compañía Petrolera AGWI S.A.
27. Penn Mex Fuel Co.
28. Stanford y Compañía Sucrs.
29. Richmond Petroleum Company of Mexico S.A.
30. Compañía Explotadora de Petróleo “La Imperial” S.A.
31. Compañía de Gas y Combustible “Imperio” y empresas asociadas
32. Mexican Sinclair Petroleum Co.
33. Consolidated Oil Company of Mexico S.A.
34. Sabalo Transportation Company S.A.
35. Mexican Gulf Petroleum Company.
36. Resumen
37. Algunos datos sobre las condiciones financieras de la industria petrolera norteamericana
Capítulo IX Antecedentes del conflicto de orden económico
En el volumen III, 161 páginas. Su contenido se resume de la siguiente manera:
Apéndice del informe que rinde a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, la Comisión
Pericial en el conflicto de orden económico en la industria petrolera
1. Ley del petróleo de 24 de diciembre de 1901
2. Decreto de 14 junio de 1896 ampliando ley de contribuciones directas a refinerías de
petróleo
3. Ley minera de 25 de noviembre de 1909
4. Decreto de 3 junio de 1912 que establece un impuesto sobre petróleo crudo
5. Circular No. 590 de 11 de julio de 1912 para que se registren las compañías petroleras
165
6. Acuerdo de 21 julio de 1914 que fija el derecho de barra sobre el petróleo crudo
7. Acuerdo de 19 marzo de 1915 creando la comisión técnica del petróleo
8. Acuerdo de 15 de enero de 1916 sobre enajenación y arrendamiento de terrenos
petroleros
9. Decreto del 31 de agosto de 1916 nulificando leyes o disposiciones dictadas por
gobiernos de los Estados en el ramo de fomento
10. Decreto del 13 de abril de 1917 fijando impuesto especial del timbre
11. Decreto de 19 febrero de 1918 estableciendo un impuesto sobre terrenos petrolíferos
12. Decreto de 8 de julio de 1918 con prescripciones reglamentarias del Artículo 14 del
decreto del 19 de febrero de 1918
13. Decreto de 8 de agosto de 1918 reformando prescripciones reglamentarias del Artículo
14 del decreto del 19 de febrero de 1918
14. Decreto 12 de agosto de 1918 declarando que no son denunciables fondos petrolíferos
objeto de inversión de capital
15. Acuerdo de 12 de marzo de 1920 con base a que deberán sujetarse concesiones que
otorgue la Secretaría de la Economía
16. Reglamento de trabajadores petroleros
17. Reservas petroleras nacionales
18. Gráfica de correlación entre la producción de petróleo mexicano, los sucesos políticos
nacionales e internacionales y las disposiciones fiscales
19. Gráfica de promedio de consumo de gasolina por habitante
20. Cartograma de oleoductos refinerías y plantas de almacenamiento
21. Cartograma de la frontera norte de los campos petroleros
22. Cartograma de los campos petroleros de la región de Pánuco- Topila
23. Cartograma de los campos petroleros de la región Tuxpan y la faja de oro
166
24. Croquis de las regiones petrolíferas de Tabasco con las limítrofes de Chiapas, Veracruz y
Campeche
25. Plano de la zona petrolífera del Istmo
26. Empresas petroleras inscritas en el Departamento de Petróleo de la Secretaría de la
Economía Nacional
27. Empresas petroleras afectadas por el conflicto obrero -.patronal mayo- junio de 1937
28. Empresas petroleras afectadas por el conflicto obrero patronal mayo-junio de 1937 según
publicaciones norteamericanas
29. Corporaciones que encabezan los grupos de empresas petroleras que operan en México
30. Producción de petróleo crudo en México en el año de 1936
31. Diagrama del Grupo Kononklijke Shell Royal Dutch a principios de 1924
32. Diagrama del Grupo Royal Dutch y sus afiliadas
33. Acuerdo considerando inexistentes las franquicias de impuestos y nulos los derechos de
exploración y explotación concedidos a El Águila S.A.
34. Diagrama de la Standard Oil de Indiana y la Standard Oil de New York antes de la
incorporación de la segunda del grupo de subsidiarias en el extranjero, controladas por la
Pan American
35. Diagrama de la Standard Oil de Indiana y la Standard Oil de New York después de
incorporadas a la segunda, el grupo subsidiarias en el exterior controladas por la Pan
American
36. Cuadro esquemático del grupo de la Standard Oil a fines de 1925
37. Plano de campos petroleros en explotación
38. Producción de petróleo crudo periodo de 1934-36 resumen por empresas y campos
39. Petróleo crudo y sus productos tratados en la refinería del país periodo 1934-36 resumen
por producto y empresas
167
40. Exportación de petróleo crudo y sus derivados de producción nacional
41. Fotografías comparativas de habitaciones de empleados extranjeros y nacionales en
zonas petroleras del país
42. Legislación fiscal del impuesto sobre producción
43. Legislación fiscal del impuesto a la exportación
44. Legislación fiscal del impuesto a la importación
45. Legislación fiscal sobre el impuesto al consumo de gasolina
46. Legislación fiscal del impuesto sobre fondos petroleros. 157
A su vez, el estudio se dividió en varios sub-estudios:158
I) El antecedente histórico, que establece los diferentes momentos del petróleo desde la época
precolombina hasta nuestros días, a través de la importancia en su uso;
II) el análisis técnico: A) el geográfico, que da la ubicación de las zonas petroleras, cartogramas
y planos; B) el económico, al analizar las empresas como agentes económicos, producción,
comercio, precios, consumo, distribución y perspectivas de la industria; C) el contable-
financiero, en el cálculo de salarios, utilidades, estados financieros e impuestos; D) el legal,
condiciones de trabajo, previsión social y conflicto laboral, así como una recopilación de las
leyes que afectaron (como las fiscales sobre producción, exportación e importación) o fueron
dictadas expresamente para regular al petróleo.
Este estudio, como otros que también dirigió Silva Herzog, comienza con un antecedente
histórico; en este caso es sobre la situación del petróleo en México desde la época prehispánica
157 (Archivo Histórico de la ESIME,1937) fondo “Archivo Ing. Antonio García Rojas”, caja No. 62, expediente 1, número de fojas 4d. 158 Para entender bien el pensamiento de un escritor, menciona Silva Herzog, “Es útil conocer el momento histórico y la zona geográfica en que le tocó vivir, no será posible explicar correctamente las ideas del escritor, sin tener por lo menos nociones del cuadro social y de la atmósfera política que influyeron en su obra intelectual. (Silva,1947:11); lo cual también se puede aplicar a una industria.
168
hasta el momento del análisis, también establece cuestiones técnicas como: las características
geográficas de las zonas petroleras; establece el marco jurídico de todas las disposiciones
legales que regularon la actividad de extracción y distribución del petróleo en México.
Una de las condicionantes que marcaba la Ley de Conciliación era que el informe debía darse
en 30 días, a lo que Silva Herzog observó:
El legislador no pensó indudablemente, al redactar la Ley del Trabajo, en la posibilidad de
un conflicto entre el capital y el trabajo de toda una rama industrial; pensó en conflictos
entre una empresa y sus trabajadores y es tal vez por eso por lo que fijó un plazo tan
reducido. (Silva, 1963:67).
El 29 de julio de 1937, cinco días antes de la fecha en que debían entregarse el Informe y
Dictamen a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, se presentaron en la oficina de Silva
Herzog, tres abogados de las compañías petroleras. Estaban interesados en conocer si ya se
había concluido el informe y el dictamen:
De manera irónica le preguntaron – ¿Cree usted, señor profesor que terminará sus
trabajos para la fecha que fija la ley?- Y viendo que Silva Herzog quedábase un momento
callado, agregaron sin transición., -Porque si hemos de serle franco ni nosotros, ni los
mismos trabajadores creemos que eso sea posible. […] Silva Herzog no respondió
directamente; toco un timbre se presento un empleado, dio una orden y momentos
después salió este para regresar varias veces llevando en cada viaje un cerro de papeles
que fue amontonando sobre la mesa, ante el azoro, la sorpresa de sus visitantes. Los
papeles de marras eran de poco más de 3,000 cuartillas escritas a máquina en los dos
espacios reglamentarios […] A los representantes de las empresas petroleras se les heló
169
la sonrisa en los labios y excusándose apresuradamente se marcharon.
(Amendolla,1940:19-20)
Para su sorpresa el Informe ya estaba listo, el Dictamen lo estaba realizando en esos
momentos Silva Herzog; para hacerlo se apoyaba en el estudio ya concluido.
Silva Herzog realizó sin ayuda el Dictamen. En éste expone las tretas legales de las compañías
extranjeras para no pagar impuestos que al derivarse las reales utilidades, el informe concluyó
que las empresas petroleras sí podían pagar sueldos y prestaciones más justas a sus
trabajadores. También analizó los libros de contabilidad de las compañías, sus contratos de
ventas, la situación mundial de los mercados de petróleo, los antecedentes históricos de la
industria en México, sus condiciones técnicas, el capítulo de los transportes, la situación
existente entre empresas y trabajadores.
Con la información sintetizada, Silva Herzog contó con todos los elementos necesarios para
estar en condición de informar, si las empresas podían acceder o no a las demandas laborales
interpuesta por los obreros. Con los resultados de la investigación estipuló las tabulaciones de
salarios y fijó los considerados. Las recomendaciones fueron discutidas y aprobadas por
Moctezuma y Buenrostro, los otros peritos. Por la importancia que conlleva el Dictamen para
este trabajo de investigación, a continuación se resumen sus conclusiones:
Dictamen que la Comisión Pericial en el Conflicto de Orden Económico de la Industria Petrolera,
rinden a la H. Junta de Conciliación y Arbitraje Grupo Especial Número 7, con fecha 3 de agosto
de 1937, en cumplimiento de la comisión que se confirió, se dan las siguientes conclusiones de
orden económico:
170
1. Las principales empresas petroleras que operan en México forman parte de grandes
unidades económicas norteamericanas o inglesas.
2. Las principales empresas petroleras que operan en México nunca han estado vinculadas
al país y sus intereses han sido siempre ajenos, y en ocasiones hasta opuestos, al
interés nacional.
3. Las principales empresas petroleras que operan en México no han dejado a la República
sino salarios e impuestos sin que en realidad hayan aportado su cooperación al progreso
social de México.
4. Las principales empresas petroleras que operan en México han obtenido utilidades de la
explotación del subsuelo positivamente cuantiosas. No es posible calcular su monto; pero
puede afirmarse, con criterio conservador, que la mayoría de ellas recuperaron el capital
invertido hace más de un decenio.
5. La industria petrolera, mundialmente considerada es en su aspecto financiero más
importante que cualquiera otra gran industria
6. Los grandes intereses petroleros han influido en más de una ocasión en acontecimientos
políticos tanto nacionales como internacionales.
7. La producción petrolera en México, iniciada en 1901 en cantidad insignificante, adquiere
su mayor volumen en 1921 y decrece constantemente hasta 1932. A partir de ese año se
nota ligera mejoría que se origina en la explotación de los campos de Poza Rica y El
Plan.
8. La disminución de la producción petrolera en México se debe al agotamiento de los
yacimientos, principalmente a los de la Faja de Oro y Cocalilao; a la falta de nuevas e
intensas exploraciones para descubrir otros campos, y posiblemente también a la política
de las compañías petroleras.
171
9. La actividad en la perforación de pozos ha disminuido en forma alarmante en los últimos
años. En 1936 es muchas veces menor que en 1926, a pesar de que el porcentaje de
pozos perforados que han resultado productivos es mayor en la actualidad que hace 10
años.
10. Todos los campos petroleros de México están a punto de agotarse, excepción hecha de
los de Poza Rica y El Plan cuya producción se estima que puede ser de 50 millones de
barriles al año durante un periodo de 10 a 12 años.
11. La exploración de nuevos campos y la perforación de nuevos pozos es un problema de
magnitud nacional que precisa resolver. De lo contrario, existe el peligro de que en
México crezca de petróleo en un plazo relativamente corto y de que se vea obligado a
importarlo.
12. Existen grandes zonas de terrenos posiblemente petroleros en la llanura costeña del
Golfo de México, en la parte norte de los Estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas
y en algunas otras zonas del país.
13. La producción en 1936 aumento en 7.48% en comparación con la de 1934. Esto se debe
a una elevación muy importante en la producción de petróleo crudo ligero, que ha sido de
26.17% porque la de crudo pesado ha disminuido en 33.14%
14. Las características de la industria petrolera establecida en México se han modificado en
los últimos años. De 1920 a 1924 y aun en los años subsecuentes se exportaba la mayor
parte de la producción, en tanto que en 1936 el consumo nacional representaba el
16.86% de petróleo crudo pesado, el 99.9% de crudo ligero y el 43.50% de productos
refinados.
15. Muy cerca del 60% de la producción mexicana del petróleo crudo y derivados se exporta
a dos países. Estados Unidos e Inglaterra.
172
16. La Compañía Mexicana de Petróleo “El Águila” con sus empresas filiales, representó en
el año de 1936 el 59.33% sobre la producción total. Esto acusa una tendencia
monopolística.
17. La curva de los precios del petróleo y derivados en los últimos mese es ascendente, lo
que indica que son buenas las perspectivas de la industria, por lo menos durante los
próximos años.
18. Los precios de los artículos de primera necesidad que forman el cesto de provisiones de
una familia obrera compuesta de cinco miembros, habían aumentado en los centros de
trabajo petroleros en junio de 1937, en comparación con los promedios de 1934, en
88.96%.
19. Los salarios reales de la gran mayoría de los trabajadores petroleros son en la actualidad
inferiores a los que se ganan los de la industria minera.
20. Los salarios reales de la inmensa mayoría de los trabajadores petroleros son inferiores
en la actualidad a los que ganan los de los Ferrocarriles Nacionales de México.
21. Los salarios reales de la inmensa mayoría de los trabajadores petroleros son en la
actualidad inferiores a los que ganaban en 1934, por lo menos en un 22 a un 16%,
siendo menor la disminución a medida que el salario es mayor.
22. Los salarios reales de los trabajadores petroleros norteamericanos en el segundo
trimestre de 1937 eran un 7.84% mayores que los que ganaban en 1934.
23. Los precios a que según las contabilidades de las empresas petroleras venden sus
productos son invariablemente inferiores a los precios que aparecen en las publicaciones
especialistas, los que reflejan con toda exactitud las condiciones del mercado.
24. Los precios a que las compañías venden los productos derivados del petróleo en México
son considerablemente más altos que los precios a que venden esos mismos productos
en el exterior.
173
25. El precio a que la Compañía de Petróleo “El Águila” y lo mismo puede decirse de otras
compañías, vendió el gas oil en México (promedio de 1934-1936) fue de 171.75% más
alto que el precio a que vendió la misma mercancía en el exterior.
26. El precio a que la Compañía de Petróleo “El Águila” y lo mismo puede decirse de otras
compañías, vendió la gasolina en México (promedio de 1934-1936) fue de 134.40% más
alto que el precio a que vendió la misma mercancía en el exterior.
27. El precio a que la Compañía de Petróleo “El Águila” y lo mismo puede decirse de otras
compañías, la kerosina en México (promedio de 1934-1936) fue de 341.18% más alto
que el precio a que vendió la misma mercancía en el exterior.
28. El precio a que la Compañía de Petróleo “El Águila” y lo mismo puede decirse de otras
compañías, vendió los lubricantes en México (promedio de 1934-1936) fue de 350.76%
más alto que el precio a que vendió la misma mercancía en el exterior.
29. Posprecios a que las compañías petroleras venden sus productos derivados del petróleo
en México, son de tal manera elevados que es evidente que constituyen un obstáculo
para el desarrollo económico de la nación.
30. El promedio anual del capital social de las empresas petroleras demandadas, excepción
hecha de la Mexican Gulf que no permitió la revisión de su contabilidad, fue en el trienio
de 1934-1936 de 164 millones de pesos.
31. El promedio anual del capital invertido no amortizado de las empresas petroleras
demandas, excepción de la Mexican Gulf, en el trienio de 1934-1936 fue de 335 millones
de pesos.
32. Las reservas y superávits de las empresa petroleras demandadas (promedio de 1934-
1936) excepción hecha de la Mexican Gulf, fue de 79 millones de pesos.
174
33. El por ciento de utilidades en relación con el capital social de las empresas petroleras
demandas, excepción hecha de la Mexican Gulf, fue en promedio en los años de 1934 a
1936 de 34.28%.
34. El por ciento de utilidad en relación con el capital invertido no amortizado de las
empresas petroleras demandas, excepción hecha de la Mexican Gulf, fue en promedio
en los años de 1934 a 1936, de 16.81%.
35. Las principales empresas petroleras establecidas en los Estados Unidos tuvieron en el
año de 1935 una utilidad en relación con su capital invertido de 6.13%.
36. Las utilidades de todas las empresas petroleras establecidas en los Estados Unidos, en
relación con el capital invertido, fueron en el año de 1931 de 2.76%, en el año de 1932
no hubo utilidades sino pérdidas, en el año de 1933 de 1.70%, en el año de 1934 de
2.20% y en el año de 1935 de 1.44%.
37. Las utilidades de las empresas petroleras que operan en México, son considerablemente
mayores que las de las que operan en los Estados Unidos.
38. El capital invertido en la industria petrolera establecida en México en el año de 1935
representaba apenas el 0.73% en comparación con el capital invertido en la industria
petrolera norteamericana, en tanto que la producción petrolera de México, representaba
el 4.05% en comparación con la de aquel país.
39. En el año de 1935 fue necesario haber invertido en México $8.64 (dólares) para producir
un barril de petróleo crudo y en los Estados Unidos la suma de $48.12 (dólares). La
necesidad de inversión en México equivale al 17.96% respecto a la de Estados Unidos.
40. Las compañías petroleras demandas han obtenido en los tres últimos años (1934-1936)
utilidades muy considerables; su situación financiera debe calificarse de
extraordinariamente bonancible y, en consecuencia, puede asegurarse que sin prejuicio
alguno para su situación presente ni futura, por lo menos durante los próximos años,
175
están perfectamente capacitados para acceder a las demandas del Sindicato de
Trabajadores Petroleros de la República Mexicana hasta por una suma anual de
alrededor de 26 millones de pesos. (Silva,1963:69-74).
Dentro del Dictamen establece en algunas de las recomendaciones, el método comparativo
donde establece una relación entre la situación de la empresa petrolera estadounidense con la
mexicana, donde analiza también cuestiones económicas propias de la industria, como:
producción, consumo, salarios, utilidades e impuestos, también las financieras de las empresas
analizadas.
El 3 de agosto de 1937, se presentaron los 3 peritos con los 3 volúmenes del informe y el
dictamen159 ante el Grupo Especial Número 7 de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje
(que se había creado el 1º de enero de 1936). También estaban presentes los representantes
de la prensa, de los trabajadores y de las empresas. La ley otorgaba a las partes 72 horas para
presentar objeciones. Los documentos fueron recibidos por el Lic. Gustavo Corona, presidente
de la Junta; a petición del representante legal de las compañías, el Lic. Jacobo Pérez Verdía,
consiguió que el Lic. Corona accediera a cambiar el plazo de ley por 27 días. Es decir, se
amplio el plazo legal para las empresas para que presentara sus objeciones al dictamen
(Amendolla,1940;Herrera,1998; Silva,1970).
Meyer (1968) sostiene que Cárdenas se mostró de acuerdo con los resultados y
recomendaciones del Informe. También hizo saber a Castillo Nájera, que el conflicto petrolero
no podía tener otra solución, que no fuera el aumento del control gubernamental de la industria.
159 El informe presentado constaba de 2,500 páginas y el dictamen de 90 (Guillen,1980).
176
En adelante, la fijación de salarios e impuestos se haría de acuerdo con los estudios realizados
por las dependencias oficiales, informó el Presidente.
La segunda etapa del conflicto consistió en una audiencia de pruebas en la Junta Federal. Inició
el 27 de agosto de 1937, para lo cual tanto el sindicato como las empresas nombraron a sus
respectivos peritos para discutir los puntos de divergencia que hubiesen derivado del informe y
el dictamen pericial.160 Los trabajadores presentaron unas cuantas objeciones sin importancia,
se podría decir, que solamente para cubrir el expediente. En cambio, los representantes de las
compañías mientras preparaban las objeciones al informe pericial, al mismo tiempo iniciaron
una campaña de desprestigio y calumnia contra el peritaje y los peritos. Argumentaban que se
habían cometido irregularidades y graves exageraciones.
El día de la audiencia los abogados de las compañías petroleras llevaron consigo una gran
cantidad de documentos, los cuales ocuparon casi la totalidad de un enorme salón de la Junta,
mismo que se utilizaba entonces como gimnasio. Mientras que Silva Herzog, llevó un discreto
archivo de metal con 4 cajones. Los 20 días que se prolongó la audiencia (concluyó el 20 de
septiembre) hubo interminables controversias, discusiones y duelos.
Para ayudar al fallo se propuso por parte de los trabajadores a la Junta Federal, una visita
ocular a los campos petroleros. Esto fue aceptado por las compañías petroleras. Una comisión
salió del aeródromo de Balbuena al aeropuerto de Tampico. La visita fue a las oficinas, a la 160 Por el Sindicato: Eduardo Soto Innes, Manuel Gutiérrez V., Carlos G. Flores, Víctor F. Sánchez, Vicente Lombardo Toledano, Celestino Pérez, A. M. Barragán y José Piña Stein; por las empresas: El Águila, Naviera San Ricardo y Naviera San Cristóbal, Juan Manuel Torres; por la Huasteca Petroleum, José Calero; por la Sinclair Pierce Oil, Manuel White Morquecho; por la California Standard Oil, A. R. Carruthers; por la Richmond Petroleum Co. of Mexico, W. C. Hulme; por la Mexican Sinclair Petroleum, Stanford y Cias Sucrs. y Penn Mex Fuel Co. Miguel R. Cárdenas; Cía. de Gas y combustible Imperio, Alejandro Quijano, Genaro Fernández Mac Gregor y Eduardo Murguia Quijano; The Consolidated Oil Co. of Mexico, José Luna y Parra; Sabalo Transportation, Emilio S. Cervi; Cía. Explotadora de Petróleo la Imperial, Luis Araujo Valdivia; Mexican Gulf Oil, Juan García Aguirre; Cía. petrolera el AGWI, Ricardo Monges López. (Gobierno de México,1940).
177
refinería, a los campamentos, a los bungalows de los extranjeros, a los zahurdos de los
mexicanos. La inspección ocular fue una prueba más en contra de las compañías, como sabían
los trabajadores que sucedería. (Amendolla,1940; Silva,1986).
Entre las afirmaciones que dio la Comisión Pericial, que provocaron mayor disgusto a los
directores de la Compañía Mexicana de Petróleo “El Águila”, fueron:
I) que dicha empresa formaba parte del consorcio de la Royal Dutch Shell, ante
las reiterativas declaraciones por parte de sus representante de que eran una
empresa mexicana, que sólo tenían un convenio de ayuda técnica con el
mencionado consorcio;
II) No habían aportado su cooperación al progreso social del país en toda su
estancia, después de obtener grandes beneficios económicos, creyendo que
por ello se les debe gratitud. (Silva,1941).
La Comisión pericial de 1937 reconoció a 16,000 trabajadores de planta y transitorios, en
cambio la CTM decía que eran 30,000 en el mismo año. En marzo de 1938, el STPRM decía
contar con 12,020 trabajadores. (Herrera, 1998).
La fuerza publicitaria de las compañías petroleras se dirigió contra los peritos y su informe, ya
que afirmaban que el estudio, aún cuando estaba firmado por 3 personas, era en realidad de
una sola que era Silva Herzog, a quien calificaron como
Un economista teórico161 que nunca había tenido contacto con los negocios y que era un
declarado miembro del Partido Comunista. (Basurto,1976:35).
161 Weber (1994) diferencia al intelectual aficionado del especialista, en una sola cuestión que el aficionado carece de la seguridad en los métodos de trabajo, de ahí que en la mayoría de veces no está en condiciones de valorar, asimismo dirigir la idea y menos de llevar a efecto. Por lo que Silva Herzog no podría ser según esta diferenciación
178
Eso explicaba, según las compañías petroleras, que el informe tuviera prejuicios y desbordada
hostilidad hacia éstas y al sistema capitalista en general. Además, según estas empresas, el
Informe contenía flagrantes errores de contabilidad y práctica comercial. Por otro lado, las
conclusiones a que habían llegado los peritos según las empresas, estaban basadas
principalmente sobre estudios limitados, en estimaciones indignas de confianza y ventas
teóricas inferidas que habían obtenido los métodos de inferencia basados en revistas de
negocios, sin considerar los verdaderos costos de operación, ni otros datos pertinentes
proporcionados por las compañías y por el cónsul general de México en Nueva York.
Aseguraban también las empresas, que la investigación de los expertos carecía de una base
racional y científica, porque se limitaba a estudiar 3 años en los que, por cierto había existido
una ligera mejoría en sus negocios e insistían en que debía abarcarse un periodo mínimo de 10
años para manejar conclusiones confiables.162 Un examen imparcial de los libros de
contabilidad había revelado según las compañías, que las ganancias durante ese periodo de 10
años (1926-1937) escasamente habían alcanzado un promedio anual de 4.25% sobe el capital
depreciado.
Cabe mencionar que en este periodo sugerido por las compañías se encontraba la gran crisis
mundial de 1929 que afectó de manera importante a la producción de petróleo como a las
empresas petroleras, por ende a sus ganancias. Pero este es un fenómeno económico
un intelectual aficionado, ya que él tenía una metodología de trabajo que fue realizándose a lo largo de sus trabajos, por lo que supo cómo organizar y llevar a cabo el trabajo que se requirió para el dictamen que elaboró. 162 En el oficio número CP-37 No. 38 de fecha 2 de julio de 1937 que las empresas demandas enviaron a Silva Herzog, donde le señalan “Francamente manifestamos a usted que somos de la opinión de que el periodo de 3 años sugerido por usted para la investigación es insuficiente y que los datos por ese corto periodo no reflejarían el estado verdadero de nuestro negocio, por lo que nos permitimos recomendar a usted que esta investigación se lleve a cabo comprendiendo el periodo de 1927 a 1936 inclusive, pues somos de la opinión de que cuanto más amplio sea el periodo para investigar, con más facilidad se acercara su resultado a la exactitud”. (Gobierno de México,1940:605).
179
extraordinario que en rigor de haberse tomado, hubiese falseado también los resultados a favor
de las compañías. Quizás esta fue una de las razones por las cuales sólo se estudiaron esos 3
años, donde se supone que la economía mundial había salido del periodo de crisis y se había
recuperado.
Aducían también que desde 1934 el gobierno mexicano había fijado el precio al cual había que
venderse la gasolina en todo el país, lo cual junto con las crecientes cargas fiscales, habían
dejado a las compañías petroleras con ganancias anuales que promediaban poco menos de 23
millones de pesos. Asimismo, señalaban que muchos de los misterios en la cuestión petrolera
no fueron estudiados por los peritos mexicanos por desconocerlos, ya que dichos secretos se
encontraban en archivos que las compañías no mostraron al gobierno mexicano, y al agravarse
el conflicto petrolero, concluyeron entregarlos para su custodia a la legación del gobierno
británico para que estuvieran a salvo de las manos de las autoridades mexicanas.
Afirmaban que el salario de los 18 mil obreros petroleros era en promedio 3 veces mejor al que
percibían 743,103 obreros de otras ramas y 7 veces más que lo que recibían los jornaleros
agrícolas, sin contar que las compañías proporcionaban también gratuitamente muchas
prestaciones tales como casa, combustible, electricidad, educación, transporte, instalaciones
recreativas, cuidados médicos y hospital para toda la familia, lo cual equivalía a un pago
adicional de 36% sobre sus salarios nominales, por lo que acusaban a los obreros petroleros de
que con sus pretensiones aspiraran a crear una aristocracia petrolera, cierto es que en la
industria petrolera los salarios eran más altos que en otras ramas, pero también era cierto que
las ganancias de las empresas dedicadas a la explotación petrolera eran muy superiores, y lo
que ofrecían en salarios era muy miserable, por lo que no había una relación justa entre el
salario y las utilidades.
180
Además, se demostró en el informe pericial que los productos alimenticios en las regiones
petroleras, se habían establecido arbitrariamente por las propias empresas, y que una familia de
un obrero petrolero debía dedicar un 89% más que en 1934 para cubrir sus necesidades de
artículos de primera necesidad, en tanto que los salarios habían aumentado un 46% en el
mismo lapso. (Basurto,1976).
No estaban de acuerdo tampoco con los comparativos que se efectuaron directamente con la
industria petrolera estadounidense, ya que según ellos no tenían nada que ver, debido a que
prevalecen situaciones diferentes con la realidad mexicana, así como el antecedente histórico
del petróleo en la época prehispánica que también calificaron de ajenas al conflicto actual,
donde indicaban que los peritos en lugar de haber perdido el tiempo en desarrollar dichos
temas, pudieron haber ahondado en la petición de haber realizado el estudio de los últimos10
años. (Gobierno de México,1940).
En resumen las compañías se quejaban de que el estudio pericial estaba compuesto de
falsedades e invenciones de quienes lo elaboraron, ya que señalaban que lo dicho en el
dictamen no era cierto, por lo que las empresas no tenían la capacidad de pago para aumentar
las prestaciones y salarios en la cantidad establecida arbitrariamente por la Comisión pericial.
Ante los ataques los peritos no respondieron a la provocación pública.
A fines de agosto de 1937 el gerente general del Águila B. T. W. Van Hassetl, le manifestó al
presidente Cárdenas su inconformidad con el dictamen, ya que insistía que dicha empresa era
mexicana que siempre había cumplido y respetado las leyes del país, que nada tenía que ver
181
con la Royal Dutch;163 Cárdenas lo escuchó atentamente pero requería la otra versión para
poder establecer un juicio, para lo cual citó nuevamente en el salón de la presidencia a los
representantes de las compañías, pero acompañado esta vez por los peritos, lo cual sucedió el
2 de septiembre en su despacho del Palacio Nacional, en donde el representante inglés de la
Compañía Mexicana de Petróleo El Águila, continuaba afirmando que su compañía era
mexicana y no era cierto que fuese subsidiaria de ninguna otra, a lo que Silva Herzog le sacó un
periódico financiero londinense Financial News editado el 15 de marzo de 1937 cuyo
encabezado decía Twin eagles good 1936 results 164 donde la Royal Dutch Shell,165 hablaba
sobre su subsidiaria la Compañía Mexicana de Petróleos El Águila como de las buenas
utilidades que ha tenido. Posteriormente muestro otro documento El informe de los Directores
de la Compañía de Petróleo El Águila S. A. que fue sometido a la Asamblea General de
Accionistas reunida en Londres el 28 de junio de 1928, donde muestra como evadían el pago
fiscal que debían hacer al gobierno de México, en el capítulo V de dicho informe se menciona la
división de la Compañía El Águila de México y El Águila del Canadá donde se transfiere parte
del capital de la primera a la segunda en una proporción del 60%, por lo que reducía
considerablemente sus utilidades y por ende el pago de impuestos, en 1936 el precio promedio
del barril de petróleo crudo era de $3.28, el Águila México lo vendía al Águila Canadá en $1.96,
163 Formaban parte de este grupo, las siguientes empresas: Cía. de Petróleo “El Águila” S.A., Cía. Petrolera “El Centenario” S.A., Cía. Mexicana Holandesa “La Corona” S.A., P. J. Jonker S en C Surs., Román López Filgrana, Metlac Pet. Co. S.A., Rafael Ortega S en C., Cía. Unida de Petróleo S. A., Cía. Mexicana de Petróleo “San Cristóbal” S. A., Cía. Mexicana de Bienes Inmuebles S. A., Cía. Petrolera de Tierra Amarilla y Anexas (Gobierno de México,1940). 164 Cuya traducción “Los magníficos resultados obtenidos por las Águilas gemelas en 1936”, a lo que dice la nota “Los resultados de las operaciones de la Compañía Mexicana de Petróleo El Águila S. A: después de deducir las depreciaciones y proveer para las contingencias, muestran una utilidad de 1,026,850 libras esterlinas, un aumento sobre de 130,959 libras esterlinas sobre la cifra de 1935”. (Amendolla,1940:47). 165 Esta afirmación resultó falsa porque de haber sido cierta, los gobiernos de Gran Bretaña y Holanda no se hubiesen interesado como lo hicieron desde el principio del conflicto petrolero a través de sus embajadas; ni siquiera el The Times de Londres que no era partidario de México, pudo sostener en su edición del 21 de marzo de 1938 tal farsa, ya que aseguraba que las inversiones afectadas tenían un valor de 400 millones de dólares algo así como 80 millones de libras esterlinas, divididos en partes aproximadamente iguales entre los intereses estadounidenses e ingleses cuyos intereses están representados principalmente por el grupo Royal Dutch Shell que operaba bajo la denominación de The Mexican Eagle Oil Co. (Basurto,1976).
182
para que esta lo vendiera al precio internacional, a lo que el representante inglés al ver que su
farsa se cayó arremetió contra Silva Herzog, a lo que Cárdenas le pidió respeto. Después de
rebatir con fundamentos los argumentos de los representantes de las empresas petroleras, el
presidente Cárdenas felicitó por su brillante desempeño al perito Silva Herzog. Quien gracias a
su cultura así como a su formación de investigador, que lo llevó a buscar la información no sólo
limitándose a las fuentes de habla española, sino también en fuentes diferentes al idioma
materno, como lo fue en diarios ingleses, encontró la información que le sirviera para refutar los
argumentos falsos de los dirigentes de las empresas petroleras, como fue el caso con “El
Águila.” (Amendolla,1940; Silva,1970).
4.5 El proceso jurídico continúa
La Junta Federal otorgó el plazo conforme marca la ley, para que las compañías presentaran
objeciones, al vencimiento del plazo, el Lic. Gustavo Corona, en su calidad de Presidente del
Grupo Especial Número 7 de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, citó a los
representantes de ambas partes para que finalmente se pronunciará el laudo el 18 de diciembre
de 1937,166 apoyándose en lo sustancial al dictamen pericial, poniendo énfasis en los 26
millones de pesos167 que se establecían como pago de sueldos y prestaciones sociales,
dejando al descubierto las prácticas poco éticas de las empresas, como la omisión de la
situación financiera real y la evasión del pago fiscal. Por lo que las empresas lanzaron
nuevamente más ataques en los medios escritos contra la Junta, recurrieron al recurso de
apelación (una demanda de Amparo en contra del Grupo Especial Número 7 de la Junta
Federal de Conciliación y Arbitraje) presentado el 28 de diciembre ante la Suprema Corte de
166 Anexo 3. 167 Krauze (1997) señala que eran $26,332,752 pesos que debía pagar las empresas a los obreros, además de otorgar trabajo a 1,100 empleados de confianza.
183
Justicia168 que contenía la exposición de los hechos, materia de amparo y las violaciones a la
Ley en que el Grupo Especial Número 7 había incurrido en perjuicio de las compañías al dictar
su resolución, el 2 de febrero de 1938 la Corte acusó de recibo del expediente en cuestión que
constaba aproximadamente de 7,000 páginas, comenzando el estudio sobre puntos de
inconstitucionalidad del laudo, señalados supuestamente por las compañías en su recurso de
Amparo.
El 22 de febrero de 1938, Vicente Lombardo Toledano en su discurso en el Primer Congreso
General de Ordinario de la CTM, al referirse al conflicto petrolero, comentó.
Después de la sentencia ¿que va a ocurrir? Después del fallo de la Corte, ¿Qué va a
acontecer? Llegará un momento, camaradas, parece inevitable, en que las compañías
petroleras tendrán que ser reemplazados por los representantes del Estado y de los
trabajadores mexicanos para mantener la producción del petróleo. Estamos dispuestos a
asumir la responsabilidad técnica, económica, legal, moral e histórica que compete a un
pueblo de hombres libres […] ¿A quién vender el petróleo si los dos grandes consorcios
internacionales, la Standard Oil Company y la Royal Dutch Company, propietarias, además,
de todas las flotas de los buques-tanques harán muy difícil la colocación del petróleo
mexicano? […]¿Qué otros medios empleará el imperialismo petrolero para agudizar una
crisis artificial creada por ellos, y que apenas se inicia? […] Es indudable que recurrirán al
sabotaje, es indudable que a la burguesía nacional tendrá que prestarse a la maniobra del
imperialismo […] en donde haya una tribuna de la reacción o de la burguesía, o del
imperialismo, se presentará el argumento fundamental: “un puñado de hombres, veinticinco
mil trabajadores petroleros, han orillado a México entero a un fracaso. ¡Qué egoísmo el de
los trabajadores petroleros! ¡Qué espíritu de avaricia! ¡Qué ruindad de su parte! Veinticinco
mil hombres en un conjunto de dieciséis millones de habitantes colocan a la patria ante el
168 Anexo 4.
184
peligro de morir sólo por querer sacar mayores ventajas personales cuando ya viven bien y
son los niños mimados de la industria.” (Universidad Obrera,1939:47).
Había un entorno de total incertidumbre entre los trabajadores y los mismos jefes sobre como
se resolvería el conflicto petrolero, incluso algunos trabajadores mexicanos recibieron
propuestas por parte de sus jefes extranjeros de irse a trabajar a otras instalaciones
petroleras,169 mientas tanto las empresas petroleras extranjeras habían sacado su dinero de los
bancos y dado instrucciones a sus carros y buques tanque de no permanecer en territorio
mexicano, también propagaron la noticia de que el tipo de cambio de 3.60 por dólar no podía
sostenerse, a principios de febrero de 1938, vino a México desde Nueva York un representante
especial de las compañías petroleras, con facultades para intentar extraoficialmente un arreglo
en la controversia, este representante discutió con el presidente Cárdenas, con el Secretario de
Hacienda y Crédito Público y con el Jefe del Departamento del Trabajo, sobre un arreglo
satisfactorio ofreciendo un aumento salarial y otros beneficios, que representaban una mejoría
sustancial respecto de la anterior oferta de las compañías, pero el Sindicato al conocer tal
ofrecimiento lo rechazó; el 28 de febrero del mismo año, se daba la posibilidad de que las
compañías petroleras no se sometieran a la sentencia de la Suprema Corte. El representante
en México de la Standard Oil declaro abiertamente en conferencia de prensa que no podían ni
deseaban pagar (Basurto,1976).
Cárdenas reafirma las conductas que están llevando a cabo las compañías petroleras, las
expresó en la Asamblea del Congreso General Ordinario de la CTM, el 24 de febrero de 1938:
169 Como en el caso de Félix Chávez Olivares quien trabajaba para la Sinclair, quien recibió el ofrecimiento de sus jefes estadounidenses de irse a trabajar a otras instalaciones de Sinclair Pierce Oil que tenían en East Chicago, o las de Indiana o Marcus Hook en Pensilvania, o incluso en Venezuela; le argumentaban que si quedaba, no era seguro que el refrendaran el trabajo y que en todo caso dejaría de ganar en dólares y se le pagaría en pesos mexicanos, lo cual implicaba una baja considerable en sus ingresos y la venida a menos de su familia (Chávez,2005).
185
Es necesario que en todo momento estemos preparados para resistir, aun a costa de serios
sacrificios económicos, los ataques de los que no han comprendido la justicia de la causa
de México y que se empeñan en hacerla fracasar creando situaciones de incertidumbre y
de alarma. Tal parece el caso de las empresas petroleras en su reciente actitud frente al
conflicto con sus trabajadores, al hacer el retiro violento de sus depósitos y efectuar
intencionada campaña de publicidad para inquietar a los hombres de empresa y restringir o
negar el crédito a las industrias, como si se pretendiera usar de coacción ilegítima para
forzar el sentido de la resolución definitiva en beneficio de sus intereses comerciales, e
impedir el normal y recto desarrollo del proceso ante los Tribunales correspondientes.
(Universidad Obrera, 1938:53).
De acuerdo al procedimiento judicial mexicano en los asuntos de competencia de la Suprema
Corte, uno de los ministros formula un proyecto de sentencia, que es leído en Sesión Pública y
en ella discutido y votado por los demás Miembros de la Sala, la Cuarta Sala o Sala del Trabajo
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se reunió el 1º de marzo de 1938 para escuchar
la lectura del proyecto de sentencia en el Amparo promovido por las compañías contra el Laudo
de la Junta Federal de Trabajo, al votarse la sentencia170 por los ministros fue aprobada por
unanimidad, por lo que el Amparo fue negado; la Suprema Corte de Justicia de la Nación ratifico
el laudo de la Junta Federal, negando cualquier recurso presentado por las compañías, por lo
que se fija como fecha límite el 7 de marzo para el pago. (Gobierno de México,1940; Poder
Judicial de la Federación,1999).
Por órdenes del presidente Cárdenas, se le encomienda a Silva Herzog que viaje a Washington,
con la finalidad de que pusiera al tanto al embajador mexicano Francisco Castillo Nájera. El 2
170 Ver anexo 5.
186
de marzo de 1938 Silva Herzog llega a Estados Unidos; de la plática con el embajador, Silva
Herzog menciona:
[El embajador le pregunta] ¡Qué cree usted que va a pasar?, respondí una intervención
temporal […], eso yo lo arreglo (responde el embajador), añadí o la expropiación, ah
chingao si hay expropiación hay cañonazos, así veía el problema nuestro representante
diplomático ante la Casa Blanca” (Silva, 1993:171).
El 8 de marzo se reúnen el presidente Cárdenas con el representante de las compañías
Armstrong, estando presente Silva Herzog; Cárdenas le aseguraba que con el pago de los 26
millones el gobierno se comprometía a la reglamentación del laudo para evitar posteriores
dificultades, pero Armstrong en forma irónica no confió en la palabra dada por Cárdenas, por lo
que este dio por terminada la reunión, al día siguiente Cárdenas apuntó:
Soy optimista sobre la actitud que asumirá la nación en caso de que el gobierno se vea
obligado a obrar radicalmente, considero que cualquier sacrificio que haya que hacer en el
presente conflicto lo hará con agrado el pueblo. México tiene hoy la gran oportunidad de
librarse de la presión política que han ejercido en el país las empresas petroleras que
explotan, para su provecho, una de nuestras mayores riquezas, como es el petróleo y cuyas
empresas han estorbado la realización del programa social señalado en la Constitución
Política, como también han causado daños las empresas que mantienen en su poder
grandes latifundios a lo largo de nuestra frontera y en el corazón del territorio nacional y que
han ocasionado indebidos reclamos de los gobiernos de sus países de origen. Varias
administraciones del régimen de la revolución han intentado intervenir en las concesiones
del subsuelo concedido a empresas extranjeras, y las circunstancias no han sido propicias,
por la presión internacional y por problemas internos. Pero hoy que las condiciones son
diferentes, que el país no registra luchas armadas y que está en puerta una nueva guerra
mundial, y que Inglaterra y Estados Unidos hablan frecuentemente a favor de la democracia
y de espeto a la soberanía de los países, es oportuno ver si los gobiernos que así se
manifiestan cumplen al hacer México uso de sus derechos de soberanía. El gobierno que
187
presido, contando con el respaldo del pueblo, cumplirá con la responsabilidad de esta hora.
(Cárdenas,1972:387).
De cierta manera Silva Herzog compartía lo expresado por Cárdenas, de que las empresas se
habían enriquecido a costa del sufrimiento y miseria del pueblo mexicano.
El 9 de marzo el Secretario de Relaciones Exteriores, Ramón Beteta enviaba un mensaje a las
misiones diplomáticas mexicanas en el extranjero, para informarles sobre las posibles
soluciones al problema petrolero: I) que se nombrara por parte de los obreros un interventor en
las diferentes empresas, o II) declarar nulos los contratos y aplicar la ley de expropiación, que
de darse esta opción, se suscitarían algunas dificultades económicas y quizás algunas
reclamaciones internacionales. (Meyer,1968).
El 10 de marzo Cárdenas se encontraba reunido en Morelos con el general Múgica, ambos
meditaban sobre el conflicto internacional que se avecinaba, concluían que ello impediría tanto
a Estados Unidos como a Gran Bretaña intervenir militarmente en México, de optarse por la
expropiación, por lo que Cárdenas le solicita a Múgica que preparara un proyecto de manifiesto
a la Nación anunciando la expropiación de la industria petrolera. (Meyer,1968).
El 14 de marzo, la Junta estableció un plazo de 24 horas a las compañías para que, en ese
término, llevaran a debido efecto y cumplimiento la resolución del 18 de diciembre de 1937, que
la Suprema Corte de Justicia de la Nación consideró Constitucional al dictar la resolución del 1o
de marzo de 1938,171 al término del plazo se presentaron los representantes de las compañías,
comparecieron formalmente ante la Junta para manifestarle que se encontraban imposibilitados
171 En la 4ta Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que estaba integrada por los ministros J. López Sánchez, Octavio M. Trigo, Salomón González Blanco y Alfredo Iñárritu, quienes dieron el fallo negando la protección de la justicia federal a las empresas petroleras y confirmando el laudo laboral. (Chávez, 2005)
188
para poner en vigor el laudo dictado por el Grupo Especial Número 7, cumplir con el laudo les
significaría la ruina de sus negocios. Este hecho también lo hicieron saber ala opinión pública ya
que argüían que los cálculos de la Junta eran muy inexactos, pues según sus propios estudios
hechos en forma cuidadosa estimaban que el cumplimiento del laudo significaba una erogación
no menor de 41 millones de pesos, sin tomar en cuenta los gastos que ocasionarían las
cláusulas referentes a aspectos pasados del conflicto que alcanzarían la suma de 21 millones,
más 2 millones aproximadamente por concepto de salarios caídos completos devengados
durante la huelga de mayo-junio de 1937; por lo que calculaban que la erogación total
solamente durante el primer año sería de 64 millones, la enorme diferencia entre lo calculado
por los peritos y lo sostenido por las compañías derivaba según las empresas, del hecho de que
no los expertos ni la Junta habían tomado en cuenta las auditorias efectuadas por firmas
internacionales de contadores reconocidos; entendían que sólo las que fueron examinadas y
presentadas a la Junta fueron realizadas por contadores de nacionalidad mexicana que incluso
ocupaban posiciones semioficiales en varias instituciones bajo supervisión del gobierno, razón
por la cual hacían elevarse las utilidades a los 68 millones de pesos. (Basurto,1976).
A partir de esa fecha las compañías no acataron la resolución por lo que se considerando
legalmente en rebeldía, quienes también iniciaron nuevas campañas en contra de las
autoridades mexicanas por medio de la prensa, la cual publicó que las empresas no estaban
dispuestas a obedecer el laudo del Tribunal Superior y que al Gobierno le tocaba dar el
siguiente paso. Silva Herzog comento al respecto:
Las empresas petroleras arrojaron el guante en actitud de desafío al gobierno y al pueblo de
México. (Petróleos Mexicanos,1988:76).
El presidente Cárdenas tuvo posteriormente varias entrevistas con los representantes de las
compañías petroleras, donde les prometía que no se rebasaría la cantidad fijada de 26 millones
189
que según el estudio pericial corresponden a los trabajadores, es decir quedaba el pago a
solamente a ello; pero las empresas seguían en su negativa, lo más que ofrecieron fue algo así
como 22 millones; los representantes argumentaron en contra, señalando que había algunas
cláusulas redactadas vagamente en el laudo, a lo que el presidente les propuso establecer una
comisión mixta donde el ejecutivo tuviese representación, para reglamentar el fallo de las
autoridades. Pero los representantes manifestaron que las empresas no pueden reconocer el
laudo, por lo que Cárdenas les manifestó:
Si se daban cuenta del alcance que tenía su actitud, contestando que sí. En estas
condiciones, les dije, que se seguiría el procedimiento que marca la Ley. (Universidad
Obrera,1938:91).
Días antes de la declaración de expropiación, en Washington, Estados Unidos el Sr. Armstrong
directivo de la Standard Oil de New Jersey, se entrevistó con el embajador mexicano Castillo
Nájera, al que le comentó de manera irónica:
Embargo, pudiera ser, pero Cárdenas no se atreverá a expropiarnos, (Castillo,1949).
Dicha opinión era compartida por varios políticos estadounidenses, que no creían que Cárdenas
se atreviera a dar el siguiente paso, que era la expropiación, pensaban en un embargo parcial
que se arreglaría diplomáticamente.
Mientras que el gobierno inglés estaba al tanto de los sucesos en México, desde el inicio del
conflicto petrolero por medio de su ministro, Owen O’ Malley172 quien informaba sobre lo que
sucedía principalmente a la Foreign Office; entre sus informes, señalo que tenía conocimiento
172 O’ Malley pensaba del mexicano “ [Que era] una combinación de lo siniestro y lo oropelesco […] encuentro imposible creer que la mezcla de la sangre española con sangre de numerosas tribus de indios degenerados pueda dar ninguna contribución valiosa a la humanidad”, su opinión de Cárdenas “Un dictador astuto, temerario y terco que entiende poco de economía y menos aún de leyes, mezcla del complejo de inferioridad indio y el orgullo español” (Basurto,1976:62-63)
190
de que secretamente se habían girado órdenes a la corte para que se fallara en el sentido
deseado por el gobierno mexicano, ello era posible, según los representantes de las empresas
debido a que Cárdenas había reformado la Constitución mexicana para permitir al presidente
nombrar a los jueces de la Suprema Corte y hacerlos coincidir con el periodo en funciones del
ejecutivo, con base a tal reforma Cárdenas había removido de supuesto a aquellos jueces que
no compartían sus principios, ni estaban de acuerdo con su política, por lo que había nombrado
a nuevos funcionarios que gozaban de su completa confianza; dicha reforma no fue hecha por
Cárdenas como anunciaba O’ Malley, sino fue llevada a cabo el 20 de agosto de 1928 por el
general Calles, esto era una prueba de la deformación de la información que se presentaba
tanto al público como al gobierno inglés (muy común en estos tiempos para desacreditar tanto a
la medida como al gobierno mexicano). Los representantes de las compañías y el gobierno
inglés se entrevistaron el 10 y 16 de marzo de 1938 con Cárdenas, donde le manifestaban que
el gobierno de la Gran Bretaña estaba muy intranquilo por la situación de la industria petrolera
con motivo de la resolución de la Suprema Corte (la cual le exigió a las empresas que en el
transcurso de las 24 horas siguientes cumplieran con la resolución emitida o de lo contrario se
aplicaba la fracción XXI del artículo 123 constitucional, que establece que si el empresario se
niega a someterse al arbitraje o no cumple con una resolución de este tipo, el contrato colectivo
de trabajo puede considerarse anulado y el empresario debía pagar al obrero una
compensación igual a 3 meses de salario) ante la negativa de las empresas; fueron los
representantes de los obreros acudieron a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje para
solicitar la cancelación de los contratos, lo cual fue concedido, al no haber impedimento legal, el
sindicato ordenó el paro de labores el 18 de marzo de 1938. (Basurto,1976).
191
4.6 La expropiación petrolera
La noche del viernes 18 de marzo de 1938, Cárdenas se reunió con su gabinete y le expreso al
general Hay que era preferible destruir los campos petroleros con tal de que esa industria dejara
de ser el obstáculo al desarrollo del país, como hasta entonces había sido, a las 21:45 se firmó
el acta de expropiación y a las 22:00 el presidente constitucional de los Estados Unidos
Mexicanos, el Gral. Lázaro Cárdenas del Río dió a conocer al pueblo de México por medio de
las estaciones de radio, el Decreto de Expropiación173 de la industria petrolera174 mexicana por
causa de utilidad pública, basado en el artículo 27 constitucional.175 Cárdenas al anunciar el
motivo de la expropiación denotaba que las empresas habían rechazado de manera tajante
todos los esfuerzos y medidas conciliatorias ofrecidas antes y después del juicio de amparo, se
tornaron en una actitud intransigente; esta actitud conciliadora fue mal interpretada por los
representantes de las compañías como signo de debilidad, incluso uno de ellos el Standard Oil
Co. señalaba que el gobierno mexicano no tendría “los nervios” tan fuertes para sostenerse en
la aplicación de la resolución de la Suprema Corte. Cárdenas encargo al Secretario de
Hacienda efectuar el pago de la correspondiente compensación a las compañías expropiadas
conforme a lo dispuesto en el artículo 123 constitucional y los artículos 10 y 20 de la Ley de
Expropiación, los cuales se refieren que el pago será en efectivo y en un plazo no mayor a 10
años. En cuanto a las bases para la fijación de indemnización se refería exclusivamente a los
bienes que las compañías tenían en la superficie, puesto que el petróleo del subsuelo era
propiedad de la nación conforme al artículo 27, y no era negociable en manera alguna. Esa
173 Ignacio García Téllez, Secretario de Gobernación; Francisco J. Múgica, Secretario de Comunicaciones y Transportes (autor del Manifiesto histórico de la expropiación petrolera que el Presidente Cárdenas leyera el 18 de marzo de 1938); y el Coronel de Caballería Román Campos Viveros (quien firmó el Decreto Expropiatorio y el Decreto de creación de PEMEX a nombre del Senado de la República). 174 “Otros cálculos llegan a la conclusión de que las empresas, al ser expropiadas, habían ganado sumas diez veces superiores a las que invirtieron” (Castillo,1949:30). 175 Por lo que los acuerdos de Bucareli y el de Calles –Morrow quedaron sin efecto.
192
noche el gobierno mexicano contraía una deuda que oscilaba entre los 500 y 600 millones de
dólares. (Basurto,1976; Meyer,1968).
Mientras tanto Silva Herzog después de estar en Washington viaja a Canadá, ya que como
presidente de la PIPSA fue a buscar varias fábricas de papel en este país, el 19 de marzo se
enteró en Nueva York estando en el Hotel Roosevelt por medio del New York Times del decreto
de expropiación, por lo que en la tarde de ese mismo día toma el tren de regresar a México.
Castillo Nájera relata lo sucedido en Estados Unidos después del decreto de expropiación:
El 19, todos los diarios de la capital norteamericana publicaron, íntegro, el Decreto que
produjo sorpresa y desconcierto. A primeras horas me visitó un senador, amigo de México,
preguntando las posibilidades de una devolución, en caso de que las compañías cedieran a
las disposiciones del Gobierno. Manifesté que la solución hubiera sido ideal 48 horas antes,
ahora resultaba tardía. El embajador Daniels, de paso por Washington, pocos días
después, pulsaba mi opinión en igual sentido; mi respuesta fue la misma. El Presidente se
había comunicado conmigo por la vía telefónica, instruyéndome para que a cualquier
pregunta oficial, diese yo la contestación categórica: el Decreto se cumplirá.
(Castillo,1949:41-42).
El 19 de marzo se constituyó el consejo administrativo de Petróleos, el cual se integró con
2 representantes de la Secretaría de Hacienda (Eduardo Suárez y Enrique Ortín), 2
representantes de la Secretaría de Economía (Efraín Buenrostro y Rafael Michel) y 3 del
Sindicato de Trabajadores Petroleros (Juan Grey, Fernando Vázquez y Rubén de la
Fuente), (Chávez,2005).
193
El 20 de marzo el embajador estadounidense, Josephus Daniels, dio una conferencia de
prensa, el New York Times publicaba al día siguiente, Daniels declaro que el
Departamento de Estado no sabía de la expropiación.
El embajador Josephus Daniels afirmo que Estados Unidos había sido agarrado
“completamente dormido” por el plan del gobierno mexicano para expropiar las compañías
petroleras extranjeras, preguntando si era correcta la impresión mexicana de que
Washington había consentido de antemano a la expropiación el Sr. Daniels respondió Ni
el presidente Roosevelt ni el secretario de Estado Cordel Hull ni yo sabíamos de
antemano sobre la expropiación, la impresión general aquí era que habría una incautación
por parte del gobierno. La expropiación fue un rayo en cielo sereno. (Gilly,1994:77).
Pero aún los representantes hacían público de que acatarían los ordenamientos del laudo,
pero el plazo para tal caso ya había concluido y la expropiación se había anunciado, estas
declaraciones sólo demostraron que la supuesta incapacidad económica era fingida,
puesto que al final habían aceptado pagar. (Basurto,1976).
Los dirigentes petroleros confiaron en que su gobierno presionará176 y lograría la devolución de
las empresas, pero el gobierno de Franklin Roosevelt y el Senado de los Estados Unidos eran
signatarios del “Protocolo de No-Intervención177” convenido en la Conferencia de Buenos Aires,
de diciembre de 1936. Ante esta situación, buscaron otros mecanismos, uno de los cuales fue
denunciar la política izquierdista mexicana como un peligro eminente que hay que atacar.178
176 Actitudes firmes dieron resultados satisfactorios ante propuestas mexicanas de regularizar a la industria petrolera en los gobiernos de Carranza, Obregón y Calles. (Idem). 177 Cuyo documento fue presentado por la Delegación Mexicana y redactado por Castillo Nájera (Idem). 178 El 8 de julio de 1938 en la Universidad de Viriginia, el Sr. Armstrong pronunció un discurso, donde pretendía atemorizar al pueblo estadounidense con el tétrico fantasma del izquierdismo, sostenía la ilegalidad de la expropiación, en su discurso pronunció: “La política de confiscación de propiedades extranjeras, como todo lo que representa obtener algo por nada, ha constituido un explicable imán para los respectivos políticos [mexicanos y estadounidenses] del ala izquierda, que hacen atronar el espacio con promesas de honor nacional, emancipación
194
Otra medida, fue que sus centros de propaganda dieron la versión de que las compañías
petroleras eran descritas como filantrópicas, creadoras de la industria, vinieron a México por
invitación expresa del Gobierno; sanearon las zonas tropicales; arriesgaron enormes cantidades
de dinero, a los que no correspondían las ganancias; a un puertecillo de pescadores lo
transformaron en una bella ciudad porteña (Tampico); las familias de los obreros, gracias a los
salarios substanciales pudieron alcanzar altos niveles de vida; introdujeron medicina moderna y
educación; algunos periódicos sirvieron también para difamar al gobierno mexicano como The
New York Times, Washington Post, Wall Street Journal que afirmaban que México era un país
comunista, que era parte del fascismo internacional, un país de Londres, etc. (Basurto,1976).
El presidente estadounidense, Franklin Delano Roosevelt hizo declaraciones que reconocía el
derecho del Estado Mexicano al haber decretado la expropiación,179 lo que permitía que fuesen
discutidas las bases de las indemnizaciones consiguientes; en Estados Unidos algunos
sectores de la prensa se volvieron francamente hostiles y protestaban contra la confiscación,
pero también surgieron simpatizadores que denunciaban las culpas de las compañías y
justificaban, como un acto defensivo la resolución del Gobierno Mexicano.
En cambio en Londres al contrario que Washington, los contactos petroleros con el Foreign
Office y el Petroleum Department Gubernamental, defendieron tenazmente a sus intereses
petroleros en México, incluso como posibles soluciones al problema, plantearon deshacerse del
gobierno de Cárdenas y buscar uno más amigable como la instauración de una dictadura
económica y expropiación de los bienes extranjeros”; señalaba el peligro creciente que significa para los Estados Unidos, la tolerancia de la política de confiscación: “Que no beneficia a los países confiscadores ni, naturalmente, a los propietarios estadounidenses, de los bienes confiscados. Producirían (esas políticas) en la América Latina, un periodo de desorden y desharían la trabazón social toda, pues ello equivaldría, a reducir a la miseria a aquellos a quienes la clarividencia, la prudencia y la inteligencia les han permitido acumular capital y conocimientos sin los cuales sería imposible la creación de la riqueza” (Castillo, 1949:49). 179 El 1º de abril desde Hot Springs, Estados Unidos, el presidente Roosevelt declaraba que a la expropiación petrolera no se le concedía mayor interés que a las agrarias u otras que México había efectuado. (Idem)
195
reaccionaria, aunque para ello se tuviera que ir a la acción armada, O’ Malley informaba a la
Foreign Office que Cárdenas era impopular y que había grandes sectores mexicanos que no
estaban de acuerdo con su política e ideología; el encargado de negocios de Holanda en
México, Mothofer también envió notas donde demandaba la devolución de los bienes
expropiados o el pago sin tardanza alguna. Por lo que el gobierno inglés envió 3 notas de
protestas en términos muy severos donde exigían la devolución de la industria petrolera a sus
legítimos dueños, además le pedía al gobierno estadounidense hacer frente común, en una
nota de reclamo Gran Bretaña reclamaba el adeudo por daños a propiedades inglesas en
época de la revolución cuyo daño ascendía a $362 mil pesos, para lo cual la SRE llamó al
ministro inglés le entregó un cheque por la cantidad mencionada y su pasaporte, por lo que
México retiro su delegación diplomática de Londres el 13 de mayo de 1938. Gran Bretaña no
aceptaba la expropiación por causa de utilidad pública, pero la llevada por Cárdenas no lo era,
sino que era un acto político arbitrario de confiscación llevada con artimañas legales; pensaba
en imponer sanciones a México, como un alza en los aranceles para los productos mexicanos,
pero México exportaba principalmente a Gran Bretaña, era petróleo y mercurio (que era en ese
tiempo difícil de conseguir, ya que otro de los productores era España), por lo que la medida
podía resultar contraproducente, por lo que iniciaron una campaña para evitar que México
obtuviera créditos, además de hacer un boicot con los demás países productores de petróleo,
para evitar que México pudiera vender o importar insumos necesarios para la industria petrolera
(Basurto,1976;González,1981).
Algunos empleados de las empresas expropiadas, le comentaron al Lic. Castillo Nájera, que
desde el arribo a la presidencia del general Cárdenas, tenía decidida la expropiación y que el
conflicto económico fue pretexto y no causa, Cárdenas le confió en mayo de 1937 que no
aprobaba los procedimientos de las empresas, ya que tenía conocimiento de los manejos
196
turbios de algunas de ellas, que ameritaban acción judicial, de lo que resultarían al menos para
una, penas fiscales superiores al valor de las pertenencias; en septiembre del mismo año, al
comentar sobre la huelga existente en esos días, el presidente Cárdenas expuso a Castillo
Nájera que las bases para la solución del problema, era un control gubernamental efectivo de la
industria, así como la fijación de salarios y de impuestos conforme a un estudio imparcial, en el
que participaran representantes del Gobierno, de las compañías y de los trabajadores.
(Castillo,1949).
La posición de las compañías petroleras llevó a Morgenthau del Departamento del Tesoro de
Estados Unidos a suspender las compras de plata180 a largo plazo provenientes de México,
cuyas exportaciones se redujeron en un 50% en relación a las del año anterior; posteriormente
Estados Unidos suspendió los créditos destinados al financiamiento de operaciones del
gobierno mexicano ó de las empresas privadas mexicanas. (Villaseñor,1976).
Se dudaba de la competencia de los mexicanos para manejar la industria, se señalaba la falta
de transportes y de mercados, estas opiniones circulaban en los Estados Unidos, pero también
se propagaban en México por agentes de las empresas incautadas; durante los primeros días
después de la expropiación surgieron planes y soluciones rápidas e inmediatas al problema,
pero todas se basaban en la devolución o en la colaboración con las compañías expropiadas.
(Castillo,1949).
180 González (1981) señalaba que el gobierno de Roosevelt no quería afectar la compra plata a México, porque perjudicaría a las empresas mineras estadounidenses, que controlaban casi toda la producción argentífera mexicana; y tampoco no quería poner en peligro la política de buena vecindad, ya que pudiese orillar a que Cárdenas presionado por las dificultades económicas buscara apoyo en las potencias fascistas. Pero tampoco Cárdenas no sabía como reaccionarían las potencias, por lo que había planeado que ante cualquier agresión militar hacia México, daría la indicación de que se incidieran los pozos, refinerías y tanques e inutilizar todo lo que fuera útil para la industria petrolera.
197
4.7 El bloqueo que ejercieron las compañías expropiadas al petróleo mexicano
Posteriormente a la expropiación se fundan 2 compañías: Petróleos Mexicanos encargada de
todo lo relativo a la parte industrial, en la cual se nombra como su Gerente General al ing.
Vicente Cortés Herrera, y la Distribuidora de Petróleos Mexicanos encargada de las finanzas y
el comercio donde es nombrado Gustavo Espinosa Mireles como su gerente, pero éste muere a
fines de abril o principios de mayo de 1939, por lo que es designado por acuerdo presidencial
del 10 de mayo como gerente general a Jesús Silva Herzog.181
El Consejo de Administración de la Distribuidora de Petróleos Mexicanos estaba conformado
por: Eduardo Suárez, Secretario de Hacienda; Efraín Buenrostro, Secretario de Economía;
Ramón Beteta, Subsecretario de Relaciones Exteriores y Silva Herzog, gerente general. Entre
las primeras prioridades que tuvo que resolver Silva Herzog en su nuevo cargo, era buscar
mercados para el petróleo mexicano, debido a las negativas para poder vender petróleo a
Francia y a otros países democráticos, debido al bloque que habían establecido tanto las
empresas petroleras como el gobierno inglés.
México se vio obligado a ofrecer su producto a un precio por debajo del que regía en el
mercado mundial (para que de esta manera pudiera tener alguna oportunidad de venta), y
ofrecerle a quien se interesara, aunque fueran las potencias del Eje, las cuales se negaron a
ceder bajo las presiones que sobre de ellas ejercieron tanto los ingleses como las Standard Oil
y Shell182, para el Eje se les presentaba la oportunidad de adquirir petróleo a un precio casi del
50% menor que el precio del mercado, con la ventaja de que no lo pagarían de inmediato y una
181 Dura en este puesto 15 meses (PRI-CEN,1985). 182 La Standard Oil y Shell esperaban que Italia se uniera al boicot contra México, en reciprocidad por la ayuda que los consorcios petroleros le habían prestado en su campaña de ocupación militar en Etiopía. (Basurto,1976).
198
parte ni en efectivo, lo cual les ayudaría a aliviar su escasez interna de divisas, por lo que se
estableció contratos, con Alemania183 a cambio de maquinaria y estructuras de puentes, México
le vendía diesel, gas combustible y gasolina aproximadamente 200 mil toneladas anuales para
sus fuerzas armadas y otra más adicional para usos no militares (los primeros serían pagados
al contado, los segundo constituirán un trueque a cambio de equipo para refinerías, incluso el
agregado comercial de Alemania en México, le comunicaba al secretario de Hacienda, que
tenía instrucciones de decir al gobierno del general Cárdenas que una vez obtenido el triunfo
sobre los aliados, le ofrecía si México lo aceptaba, a imponer a Gran Bretaña entre las
condiciones de paz, la cancelación de la deuda correspondiente a los bienes expropiados a El
Águila, tal ofrecimiento fue rechazado por Cárdenas, (Silva,1975); con Italia aceptó comprar
petróleo mexicano a través de la compañía estatal ACIP, aún cuando el pago sería a largo
plazo, adquirió entre 1938-1940 3 millones de barriles de petróleo, también daría a cambio 3
barcos petroleros e incluso Japón compró alguna cantidad. México ofreció en repetidas
ocasiones al gobierno de Estados Unidos que cesaría la venta de petróleo a Alemania e Italia, y
se integraría a un frente de lucha contra ellas a cambio de suspender el boicot de que era
objeto. (Basurto,1976).
Después se logro vender pequeñas cantidades a Brasil y Japón; se estableció un contrato con
The Eastern States Petroleum Co. de Houston, Estados Unidos que era una empresa
refinadora. Estas ventas no eran ventajosas para México, pero se trataba de romper el boicot
que habían organizado las empresas expropiadas. México comenzó a vender petróleo a
Estados Unidos: 3 millones de barriles de petróleo extraídos de Pánuco a la Cities Service Co. 183 México había hecho un contrato con Alemania para que le suministrara los rieles necesarios para terminar el ferrocarril que se construía en el Estado de Campeche, cuyo valor se cubriría con petróleo, a manera de trueque. (Daniels,1949). En 1938 el convenio le significaba para México la cantidad de 27 millones de dólares, de los cuales la tercera parte era en efectivo, el resto en maquinaria y otras mercancías. (Basurto,1976). Pero debido a la guerra se tuvo que perder este mercado; Cárdenas le escribe a Roosevelt el 28 de septiembre de 1938 “México podría prescindir desde hoy del mercado alemán para sus materias primas inclusive el petróleo, no obstante que esté y sus derivados han podido colocarse ya en aquel país en cantidad considerable.” (González,1981:214).
199
(quienes posteriormente propagaron un folleto a favor de México); y se celebraba contrato por
otros 20 millones de barriles a la The National Oil Corporation de Nueva York, incluso una
compañía estadounidense de ferrocarriles Missouri Pacif alquilo sus carros tanque;184 aún
cuando una de las empresas expropiadas estaba ahí la Standard Oil Company de Nueva
Jersey, esto se logra gracias al apoyo que brindo el jefe de División Latinoamericana del
Departamento de Estado de Estados Unidos, Lawrence Dugan, para poder surtir (ya que
México se había quedado sin buques-tanque antes de la expropiación), se tuvo en primera
instancia que alquilar 2 barcos noruegos, después se logra ganar el litigio por un barco que
estaba en Estados Unidos que se renombró como “18 de marzo” (antes se llamaba “San
Ricardo”, el cual se mando a reparar a Mobile, Alabama) y un viejo barco cubano,185 de esta
manera se fue surtiendo el petróleo al exterior, finalmente se compran 2 barcos noruegos, que
fueron nombrados como el “Cerro Azul” (en honor al pozo que produjo durante mucho tiempo
millones de barriles) y “Tampico” (Basurto,1976; Silva,1970).
También las compañías petroleras exigían que se embargara el petróleo mexicano, por estar
comerciando con un producto robado, para lo cual las presentaron demandas de embargo al
petróleo mexicano en los tribunales de Estados Unidos, Francia, Holanda, Bélgica y Suecia,
pero fueron rechazadas por los mismos tribunales, por lo que el boicot contra México iba
perdiendo fuerza.
184 Según informes del British Petroleum Department Estados Unidos constituía el segundo importador de petróleo mexicano después de Alemania; la Cía. Centralamer que comerciaba el petróleo mexicano le comunicaba al Foreign Office que no podía unirse al boicot contra México, aunque simpatizaba con el gobierno británico, debido a que había firmado un contrato antes de la expropiación, y que no podía deshacer por sus compromisos adquiridos. (Basurto,1976). 185 Señala Alonso (1972) que de hecho fue el primer buque tanque que Petróleos Mexicanos pudo adquirir, el cual era un buque mielero llamado “Amolco” que fue posteriormente de adquirido por PEMEX como “Cuauhtémoc”, este buque cubrió la ruta ciudad Madero-Veracruz.
200
En febrero de 1940 el gobierno de Cárdenas tenía serios problemas con los dirigentes
sindicales, ya que estos presionaban para que se aplicara el laudo de 1937, pero la situación
financiera de la empresa y el boicot contra la producción petrolera impedían que éste se
cumpliera, los dos primeros años de la expropiación se siguieron utilizando las prácticas de las
empresas extranjeras, con todos sus vicios, que provocaría un segundo conflicto en las
relaciones de trabajo entre la empresa y el sindicato; la ordenación de las actividades y salarios
de los puestos de toda la industria exigía de una racionalización y sistematización de las
categorías (había aproximadamente 6,000 categorías que se redujeron a 1,000), se elaboró un
reglamento de labores especificando las actividades que constituían la materia de trabajo y el
trabajo realmente ejecutado para formar la base salarial, así como fijar las obligaciones de cada
puesto, para lograr una distribución adecuada de labores y mantener un principio de
proporcionalidad e igualdad del salario.
La situación económica del país no permitía cumplir las demandas de los petroleros, Cárdenas
les pidió esperar un tiempo para aplicar el laudo de 1937, pero dada la persistencia del sindicato
de exigencia, Cárdenas propuso el 28 del mes en curso, una reestructuración de la industria a
través de 14 puntos:
1) reducir el número de empleados permanentes al prevaleciente el 18 de marzo de 1938 y
contratar empleados transitorios únicamente para trabajos especiales y por recomendación de
la junta de directores.
2) Eliminar puestos innecesarios.
3) Reducir los salarios administrativos a un nivel más equitativo, teniendo en cuenta que los
administradores de Pemex disfrutaban de compensaciones más grandes que los puestos
comparables con otras industrias.
201
4) Reducir el número de empleados transitorios a no más del 10% de los empleados
permanentes.
5) Incrementar los esfuerzos del trabajo durante las horas laborales, hasta en tanto las
condiciones de la industria mejoran, así como evitar gastos innecesarios por tiempo extra y
vacantes indispensables surgidas de ausencias temporales o vacaciones.
6) Suspender por el tiempo que fuera necesario el pago de subsidios de renta a empleados que
recibieran, más de 10 pesos por día.
7) Suspender el fallo de diciembre de 1937 hasta el momento en que la industria pudiera
liquidar la indemnización y modernizar su equipo. Más tarde esa sentencia iba a ser
considerada como una aspiración mínima.
8) Relajar los rígidos requerimientos por antigüedad para completar las vacantes indispensables
surgidas de ausencias temporales o vacaciones.
9) Dar a la administración poder discrecional en la designación de las posiciones que eran
indispensables y necesarias de completar por vacante temporal.
10) Dar libertad a la administración para movilizar al personal entre zonas o para nuevas
oficinas donde sus servicios fuesen más necesitados.
11) Revisar las asignaciones administrativas para adaptar la capacidad del personal a las
obligaciones de las oficinas.
12) Sopesar profundamente la capacidad en las promociones, así como mantener incentivos
para progresar.
13) Reorganizar a escala nacional el sindicato para ajustarlo a la nueva organización de la
industria y así reducir el número de secciones locales.
14) Incluir en el contrato colectivo, a ser negociado, una disposición para dar a la administración
completa libertad de escoger a los superintendentes regionales. (Herrera,1998).
202
Debido a problemas con los trabajadores y el sindicato petrolero, Silva Herzog decidió presentar
su renuncia186 el 8 de agosto de 1940 al presidente Cárdenas por medio de su secretario
particular el Lic. Agustín Leñero, explicaba que el exceso de personal administrativo en la
Distribuidora y los sueldos muy por encima de lo normal en el país, hacían excesivas las
erogaciones y ponían en peligro la marcha de la organización.
Ante su renuncia también se presento la oportunidad de ataque y desprestigio de supuestos
trabajadores petroleros,187 en esta carta se le acusa de no tener moralidad como tanto
presume, ya que no debió asumir el cargo como perito en el conflicto petrolero, señala la carta
que él mismo se ha manifestado como un elemento radical y socialista, que siempre ha luchado
para transformar la estructura económica capitalista, es decir, siendo un comunista consagrado
(aquí se demuestra, el mal manejo de los términos socialista y comunista, que siempre se
asociaron como sinónimos, pero que no lo son, por los capitalistas), continua la carta
exponiendo que Silva Herzog se había declarado enemigo de las empresas petroleras, por lo
que no iba hacer imparcial en sus decisiones que daría en la comisión de la que se hizo cargo;
este supuesto trabajador lo acusa de ser un egoísta (que se dejo llevar por su ideología
marxista y la oportunidad de transformar la estructura económica), ya que hace caso omiso a
los intereses de su patria, al aceptar dicho nombramiento (si uno analiza que los intereses de la
patria fueron precisamente los que el enunció, y que desde hace tiempo se buscaba desde
Carranza, el retorno a México de la soberanía sobre el petróleo, que estaba en manos
extranjeras), aquí se denota el enmascaramiento que hay detrás de esta carta, se denota el
resentimiento de alguna de las empresas expropiadas, ya que indirectamente lo culpan de llevar
186 Renuncia al cargo de Gerente General de la Distribuidora de Petróleos Mexicanos con fecha 6 de agosto de 1940, dirigida al Presidente Constitucional de la República Mexicana General Lázaro Cárdenas. Ver anexo 6. 187La Redacción del periódico El Economista, publico tales notas que van dirigidas a la redacción o a M. H. Güereña que son observaciones de supuestos trabajadores petroleros acerca de la renuncia que hiciera el prof. Silva Herzog. Colección Humberto Monteón González, caja 5 expediente 14, 1940.
203
al país a una crisis que va en ascenso; por lo que se le acusa de ser un traidor a la patria, a la
constitución y a la revolución, es decir, un enemigo de las instituciones mexicanas, del orden
jurídico y de la vida social (aquí cabe cuestionar quien se beneficio y quien se perjudico con la
expropiación petrolera; señalarlo como traidor, no es correcto, quizás es más acertado el
término de enemigo, ya que él estaba en contra de la desigualdad social, como de que sólo
unos cuantos obtuvieran los beneficios, mientras que la mayoría vivía en la pobreza y
marginación).
En cuanto a su puesto como gerente y darse cuenta según él, de que había mayor personal
administrativo del que realmente se requería, además de altos sueldos en comparación de los
salarios a nivel nacional, lo cual significaba mayores erogaciones que podían poner en peligro la
estabilidad financiera de la empresa, el supuesto trabajador lo acusa de no haber planteado
otro conflicto de tipo económico, que corrigiera las supuestas anomalías que él había
encontrado, y en caso de que el presidente o los altos funcionarios no hubiesen encontrado
tales irregularidades o que tales funcionarios le hubieran impedido cumplir con su deber, lo
honesto era presentar su renuncia; pero no hizo ni lo uno ni lo otro, en cambio señala el
trabajador petrolero que lo más patriótico para él fue alcanzar su independencia económica, 188
Este supuesto trabajador petrolero reatribuye la autoría del plan de reorganización de la
industria petrolera a Silva Herzog, que en febrero presentará el presidente Cárdenas, al cual lo
pone sólo como el ejecutor; lo acusa de haber engañado a los trabajadores petroleros, ya que
proporcionaba escenarios optimista cuando tomo el puesto de gerente, pero conforme fue
pasando el tiempo, él mismo desmintió tales escenarios, dando incluso un nuevo discurso
pesimista que llegaría de continuar perdiéndose los mercados a no poder cubrir los sueldos de 188 Este hecho se contradice con lo que Domingo (1950) señala de la integridad moral de los peritos, “Aunque los honorarios legales por este peritaje representaban cuantiosas sumas, ninguno de los peritos los hizo efectivos, desempeñando su trabajo por patriotismo” (Domingo,1950:181).
204
los trabajadores; lo acusa también de salirse por la salida fácil, que es la renuncia ya que él
mismo hundió a la industria petrolera en el problema en que se encuentra, y que sea otro quien
se hunda con ella.
Le critica una de las medidas que Silva Herzog plantea en su carta de renuncia de crear un sólo
organismo institucional que coordine el petróleo mexicano, mediante la fusión de sus entidades,
lo señala de vanidoso y concluye que esta iniciativa fue una medida original del presidente
Cárdenas (Aquí como que el supuesto trabajador cae en contradicción porque para la
reorganización que afectaba a los trabajadores petroleros no fue obra del ejecutivo, pero si de
Silva Herozg, mientras que esta idea que a la postre fue una solución para ajustar los gastos
administrativos en la industria petrolera, no se lo atribuye).
También se le atribuye a Silva Herzog la mala situación económica de la industria petrolera, ya
que el supuesto trabajador petrolero, señala que la causa de tal desajuste entre los ingresos y
los egresos, no se debe a la pérdida de los mercados europeos (alemán e italiano), sino a los
bajos precios a que se vendía el petróleo, los cuales fueron pactados por Silva Herzog, en su
cargo como Gerente General de la Distribuidora. Le atribuye la responsabilidad del desastre de
la industria petrolera, desde que elaboro el Dictamen de la Comisión Pericial (que sirvió de base
para el laudo expropiatorio) que privó a la industria de los servicios que le prestaba las
empresas propietarias, mediante las funciones de administración, control y dirección de sus
negocios, y si fuera poco el realizo los maravillosos contratos que están llevando a la ruina a la
industria petrolera (pero aquí se menciona una realidad distorsionada, una de las tretas más
empleadas por los agentes de las empresas expropiadas, ya que no se menciona sobre el
bloqueo político-económico al que se sometió a los productos mexicanos en el exterior).
205
Comenta el supuesto trabajador, que el Prof. Silva Herzog se quejo de las calumnias y
amenazas incluso de muerte que recibió de algunos trabajadores y líderes, pero que él no era
tenía tal responsabilidad, acuso que dichos actos estaban dirigidos por las empresas petroleras.
Señala el trabajador que la realidad es que fue por su mala administración y el descontento de
los trabajadores quienes lo obligaron a renunciar. Lo considera un funcionario improvisado (Este
tipo de acusaciones, son muy parecidas a las que le hicieron las empresas petroleras de que
era improvisado sin conocimientos, al conocer el dictamen, es mucha la semejanza e incluso los
mismos términos de desprestigio para alguien quien realizo uno de los primeros estudios sobre
la industria petrolera del país), pero aún en son de burla le atribuyen el título de “as de los
economistas nacionales” o “nuestro máximo economista” (aquí demuestra que le atribuyen
cierto dominio o manejo de la ciencia económica).
Posteriormente como lo señalaba Silva Herzog, el 9 de agosto se decretó la fusión de las 2
compañías, La Distribuidora con Petróleos Mexicanos, una vez creado el nuevo organismo, este
se subdividió en 32 secciones sindicales propias (Chávez,2005).
Silva Herzog concluye que los factores que ayudaron a la expropiación petrolera, fueron que el
presidente estadounidense Roosevelt, se mantuviera neutral ante la presión que ejercieron las
empresas petroleras estadounidenses de que interviniera como mandatario, so pretexto de
cuidar los intereses económicos, así como la Segunda Guerra Mundial, debido a que a ocho
días antes del 18 de marzo, Hitler invadió militarmente a Viena, por lo que Inglaterra y Estados
Unidos se veían inevitablemente involucrados en la guerra. (Wilkie & Monzón,1969).
Otro de los factores que ayudaron a este proceso de expropiación fue que contó con hombres
comprometidos con su país, que no sucumbieron al soborno que sin duda ofrecieron las
206
empresas petroleras por diferentes canales, que no se amedrentaron ante las amenazas y
calumnias que se difundieron en su contra; Silva Herzog en un discurso que pronunció el 16 de
noviembre de 1972 señaló:
Desempeñé modestos puestos públicos, y tuve altos puestos públicos, y en algunos
casos me dio mucho trabajo no hacerme millonario. En los altos puestos públicos jamás
mis labios se mancharon con el vino de la adulación, y mis manos quedaron limpias,
absolutamente limpias de peculado ¡Por eso tengo el honor de ser un hombre pobre¡
(Silva,1985:320).
Weber (1994) señala que aquel que vive para la política hace de ello su vida, en el
sentido íntimo o se solaza simplemente en el ejercicio del poder que conserva, o
mantiene su equilibrio y la tranquilidad en su conciencia por haber dado un sentido a su
vida al haberla puesto al servicio de algo; existe una diferencia entre vivir “para” y vivir
“de “ la política, ya que el individuo que vive de la política se coloca en un nivel más
burdo, esto es el nivel económico que intenta convertirlo en una profesión, para valerse
de ella para convertirla en fuente permanente de ingresos, no importando vivir del botín,
el pillaje, la confiscación, las contribuciones o la corrupción.
4.8 Las negociaciones con las empresas petroleras expropiadas
El 2 de noviembre de 1938, el coronel Patrick J. Hurley se comunicó con el embajador
mexicano en Estados Unidos, Francisco Castillo Nájera, solicitando una entrevista, durante el
desarrollo de la reunión, Hurley se acredita como negociador del Grupo Sinclair,189 expresando
el deseo de concertar un arreglo por separado, del cual ya estaba al tanto el Secretario de 189 El Grupo Sinclair era la tercera compañía en importancia, después de “El Águila” y la Huasteca Petroleum Co., al momento de la expropiación la Consolited Oil Corporation of Mexico era propietaria de las acciones (excepto las que pertenecían a los consejeros) del capital social de la Sinclair Pierce Oil Co. S. A., la Compañía Terminal de Lobos S. A. y la Standard Oil S.A. (Herrera,1998).
207
Departamento de Estados Unidos, Hull que no tenía ninguna objeción al respecto, por lo que
Castillo Nájera le comenta a Hurley que trajera por escrito las proposiciones para abrir las
negociaciones, exceptuando la devolución de los bienes expropiados; en los últimos días de
diciembre de ese año, Hurley se entrevistó con el presidente Cárdenas; en enero de 1939 le
comunica Hurley a Castillo Nájera sobre la entrevista con Cárdenas y le expresó su deseo de
un arreglo próximo; finalmente el 12 de noviembre del mismo año, después de varias
entrevistas, Hurley expone una proposición de arreglo190, que consistía en recibir 30 millones de
barriles de petróleo crudo y concretar un acuerdo de compra con la Distribuidora de Petróleos
Mexicanos por 15 millones de barriles a precios que fijarían una comisión mixta de ambas
partes. Castillo Nájera le avisa a Cárdenas de la propuesta de Sinclair, para lo cual Cárdenas le
responde el 18 de diciembre del mismo año, que el Secretario de Hacienda Eduardo Suárez,
acompañado del experto Jesús Silva Herzog se trasladarían a esa ciudad el 2 de enero de 1940
para ver los términos de los acuerdos. (Labastida,1988).
En 1940 el presidente Cárdenas, le solicita a Silva Herzog asesore al embajador Castillo Nájera
en Washington, para que colabore en los arreglos con Sinclair. El 19 de abril inician las
190 A finales de diciembre de 1939 en Washington, se reunieron en 5 ocasiones: Sinclair, Hurley, el líder obrero Lewis, el Lic. Suárez y el señor Silva Herzog perito de esa Secretaría, pero en las 2 últimas no concurrió el Prof. Silva Herzog; las elevadas pretensiones de Sinclair imposibilitaron cualquier arreglo; pedía ser pagado con 30 mil barriles de petróleo crudo (que después se bajó debido a los regateos hasta 23 mil, cantidades excesivas en opinión de los técnicos); otra proposición era la del pago, al contado de 14 millones de dólares, que Sinclair se conformaba con 13, al preguntarle el embajador Castillo si creía que ese era el precio de sus propiedades, le respondió que probablemente, su valor fluctuaría entre 8 y 10 millones, pero que él necesitaba 13, para cubrir las inversiones recientes de sus accionistas; el embajador Castillo le propuso 8 millones y para completar el resto, un contrato comercial por el número de barriles necesarios, a precio que fuera costeable para el vendedor, y por el número de años indispensable, para completar la suma requerida, Sinclair concluyó las conversaciones con esta frase “su plan es tan sencillo que me parece monstruoso, por irrealizable”; 5 días después Hurley se volvió a entrevistar con Castillo Nájera, manifestándole que Sinclair había meditado y que encontraba su proyecto como el único viable. Ya estaban encargándose algunos expertos del estudio relativo a las condiciones de compra, el borrador del arreglo fue enviado al embajador Castillo Nájera a mediados de marzo, la suma al contado en dólares era de 10 millones; Castillo Nájera regresa a México para obtener la autorización del presidente Cárdenas, después de consultar con sus colaboradores se ofrecían 9 millones, pero los estudios de Silva Herzog lo llevaron a concluir que no era aceptable el precio fijado para el petróleo; los peritos de las dos partes fijarían lo referente al contrato comercial. (p 66,Idem).
208
conversaciones191 con el coronel Hurley, durante lo que quedaba del mes; al final se llegó al
arreglo de pagarle una suma inferior por concepto de indemnización, en comparación con la
que exigían en un principio ( que era de 24 millones, después de 18 millones, luego de 14
millones al fin quedo de 8 millones y medio de dólares), 192 pero al formalizar el acuerdo, en la
redacción del documento se decía que se pagaba a Sinclair esa suma por el derecho soberano
de México de expropiar, Sinclair estuvo inconforme argumentando que mejor dijera que se
pagaba tal suma por la compra, después de varias discusiones sobre este asunto, finalmente se
aceptó dicha cláusula,193 gracias a ello se mejoraron las relaciones entre México y Estados
Unidos194 que estuvieron tensas durante todo el proceso expropiatorio, porque México
demostraba que quería indemnizar y podía hacerlo, de regreso a México Silva Herzog recibió
trato de héroe nacional durante dos semanas a sus 47 años. (Wilkie & Monzón,1995).
4.9 Consecuencias de la expropiación
Para intentar tranquilizar a la opinión pública estadounidense, Cárdenas concede una entrevista
a Bruce Rae del The New York Times donde le señala:
191 “Todo el mes de abril tuvimos largas sesiones, algunas duraron de las 9 de la noche a las 7 de la mañana. El complicado asunto del contrato, lo gestionó Silva Herzog a quien acompañaba otro perito, el Ing. Abel de la Cueva, yo tuve como auxiliar al primer secretario de la Embajada, señor Salvador Duhart.” (Castillo,1949:66) 192 “El 1º de mayo se firmaron los Convenios, habíamos logrado la reducción de la suma en dólares, a ocho millones y medio y que los pagos se hicieran en abonos de un millón, debiendo liquidarse, en total, en tres años. El contrato comercial fue por veinte millones de barriles que se entregarían en un periodo de cinco años.” (Castillo,1949:67); el primer pago se hizo en octubre de 1940 (Herrera,1998). 193 Después siguió operando como empresa refinadora y distribuidora de petróleo y derivados, exportando pequeñas cantidades de crudo y sus derivados. (Archivo General de la Nación, Caja 938, Expediente 1.3.24.0 011 /I Departamento del Petróleo). 194 El 17 de abril de 1942 se terminaron las negociaciones en lo referente a indemnizaciones petroleras con el dictamen pericial conjunto “Zevada-Cooke” (Castillo,1949).
209
No tenemos ninguna intención de tomar medidas semejantes en ninguna otra industria …
Con respecto a la expropiación petrolera el gobierno se vio obligado a actuar en la forma en
que lo hizo, debido a la actitud desafiante de las empresas petroleras. (González,1981:207).
La SEP se encargó de impulsar y dirigir campañas para contrarrestar la propaganda negativa
que las empresas petroleras estaban realizando, estas fueron de diversa índole como ciclos de
conferencias, los libros de texto que en más de una ocasión los textos gratuitos que
proporcionaba la SEP, se convertían en voceros del gobierno, para explicar y justificar las
razones que lo llevaron a tomar tal o cual determinación, tal es el caso de la expropiación
petrolera, por los que se denunciaba la explotación de que eran víctimas los trabajadores
petroleros mexicanos, por parte de las compañías extranjeras, en especial señalan las
injusticias condiciones en que laboraran los trabajadores extranjeros y a los mexicanos; un
ejemplo de ello se encuentra en el libro de lectura de 4º año para la escuela nocturna de
trabajadores de 1940.
Los trabajadores del petróleo poseen un gran sentido de clase, son combativos y duros
para la lucha y vaya si hay razón para que sean así; hemos visto cómo diariamente las
toneladas de petróleo extraídas por nosotros mismos huyen al extranjero. La salida de tal
riqueza ha fomentado en nosotros un sentimiento hostil para todos aquellos que
aprovechando nuestros esfuerzos, acumulan poder que después utilizan en nuestra contra.
(Loyo & Torres,1991:536).
En el texto se reafirma que la decisión tomada por el presidente Cárdenas respecto a la
expropiación petrolera fue la mejor. Todas estas medidas que la SEP efectuó, contribuyeron a
crear una conciencia popular que respaldara al gobierno mexicano, que se demostró en mítines
y actos cívicos durante y después del proceso de expropiación. (Ramírez,2008).
210
A causa de la expropiación de los bienes de las empresas petroleras, el tipo de cambio no pudo
sostenerse en $3.60, por lo que se estableció en $4.85 pesos por dólar; el Lic. Eduardo Suárez
pensó que el gobierno, debía participar con 12% de la ganancia cambiaria que obtenían los
exportadores, ya que tenían los costos en pesos y vendían en dólares sus productos, al mismo
tiempo se pensó que podrían otorgarse subsidios a las importaciones cuando fuesen
necesarias; para lograr estos fines, se elaboró una ley y se organizó en 1938 al Comité de
Aforos y Subsidios al Comercio Exterior, donde también participan Silva Herzog y Manuel
Sánchez Cuen.
Estados Unidos decretó un boicot contra el petróleo de procedencia mexicana, prohibiendo a
las dependencias gubernamentales su consumo. A su vez daba preferencia al procedente de
Venezuela y de las posesiones holandesas, México quedo excluido al fijarse las cuotas de
importación de Estados Unidos, y sólo podía competir por el 3.8% del total de compras
estadounidense que era la proporción que no estaba sujeta al sistema de cuotas; México
respondió en julio de 1938 con un nuevo impuesto que afectó principalmente los intereses
mineros estadounidenses (Basurto,1976); pero ante la situación de no poder vender el petróleo
aunado a la devaluación del peso y el boicot comercial-financiero hacia México, afectaron a los
programas de infraestructura como a los empleos de muchas otras ramas industriales,
principalmente las relacionadas directa o indirectamente con la petrolera, el comercio interno
descendió, el mercado de capitales estaba casi cerrado, el gobierno tuvo que hipotecar las
reservas del Monte de Piedad y otras asociaciones similares.
Cárdenas opinaba sobre la expropiación en un discurso al Bloque Nacional Revolucionario de la
Cámara de Senadores:
211
El Gobierno considera que vive momentos de excepcional importancia en sus situación
social y económica, pero también nos encontramos ante una magnifica oportunidad para
que el país pueda colocarse en una posición de verdadera independencia política y
económica, frente a la intervención constante que en los asuntos nuestros han querido
tener las compañías petroleras. Estas quieren intervenir en la situación política y económica
del país y eso no podemos admitirlo. El artículo 27 y toda la legislación, obligan al Gobierno
a quitar privilegios indebidos a las compañías, que siempre han querido hacer uso de su
fuerza económica. (Universidad Obrera,1938:92).
El subsecretario de Estado británico Lord Plymouth intentaba que se regresara bajo cualquier
costo la devolución de los bienes expropiados, que ya era considerado como la única forma de
hacerse justicia a las compañías, esto se debía que el petróleo era una materia prima
estratégica que se ocuparía en la posible defensa de Gran Bretaña ante la guerra mundial que
se avecinaba, además de que había peligro de que el combustible escaseara debido a que
otros países latinoamericanos deban muestras de haberse inquietado por las medidas
mexicanas y tal vez pudieran imitarlo. En Bolivia195 en 1938 se inicio un proceso contra la
empresa petrolera Standard Oil por la falta de ciertos impuestos y la exportación ilegal de
combustible, el fraude hizo que se le negara toda compensación a la empresa afectada, por lo
que se ratifico en la Suprema Corte boliviana el decreto de expropiación el 11 de marzo de
1939, pero el gobierno de Estados Unidos intervino retirando toda ayuda y evitando que
recibiera de terceros países el apoyo para el manejo de la empresa expropiada, además de las
presiones externas, obligaron al gobierno boliviano a devolver sus bienes a la compañía en
1942; en junio de 1938 el gobierno brasileño insinuaba la posibilidad de un proyecto de
expropiación; en Argentina se presentaba al congreso una ley que diera a la Agencia Petrolera 195 En junio de 1935 acabo la guerra del Chaco entre Bolivia y Paraguay que costó la vida a 90 mil combatientes bolivianos y paraguayos, debido a que la Royal Dutch Shell quería los pozos bolivianos que controlaba la Standard Oil, para lo cual alentó a Paraguay a tomar Chaco, aunque después de la contienda se quedo con las dos terceras partes de la región, no obtuvo la zona petrolera; en 1937 el presidente boliviano Germán Busch nacionalizó la riqueza petrolera y se creó la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos. (Mansilla,2007).
212
Oficial el control del manejo del petróleo y forzaría a las empresas extranjeras a salir; en
Venezuela ya había en el Congreso un proyecto de ley de expropiación que se estaba
discutiendo. El gobierno inglés acusaba a México de ser responsable de la actitud de los otros
países latinoamericanos, donde O’Malley aseguraba el 11 de marzo de 1938 por medio de un
telegrama a la Foreign Office que era un plan de Cárdenas en convencer a sus contrapartes
sudamericanas a emprender una política común frente a loas compañías petroleras extranjeras;
El subsecretario de Estado estadounidense Summer Welles informaba a Ronald Lindsay
embajador inglés en Estados Unidos, que tal situación era poco probable que se diera en otros
países latinoamericanos, de ser así ya tuvieran conocimiento de ello.
(Basurto,1976;Meyer,1968) Agrego Welles que no estaba de acuerdo en el proceder de las
compañías petroleras en México.
Que con honrosas excepciones habían obtenido valiosas concesiones y en todo momento
máximos beneficios, sin la más mínima consideración para los trabajadores, ni para ningún
otro interés como no fuera el suyo, por lo que le era imposible simpatizar con tal proceder
(Basurto,1976:104).
Gran Bretaña se disgustó por la complacencia estadounidense ante el problema petrolero en
México, acuso a Estados Unidos de tener una política relajada, que por ello Cárdenas había
podido salirse con la suya.
Incluso la Iglesia apoyó públicamente la medida tomada por el gobierno cardenista, el arzobispo
de México, Luis María Martínez colocó al patriotismo por encima de la política,
No existe ningún impedimento para que los católicos cooperen con el gobierno para el pago
de las indemnizaciones a las compañías petroleras, esto no es un asunto político, en cuyo
caso no nos mezclaríamos sino un caso patriótico. (Gilly, 1994:255)
213
Posteriormente, el conflicto con las empresas extranjeras faltantes de indemnizar se efectuara
en los siguientes gobiernos; el 19 de noviembre de 1941 se aprobó el convenio para indemnizar
a las compañías expropiadas estadounidenses, previos avalúos de sus bienes, por lo que
México entregaría como garantía 9 millones de dólares (los cuales serían devueltos en caso de
que los peritos designados por ambos gobiernos no se pusieran de acuerdo en el monto), el 17
de abril de 1942 se presentó el dictamen conjunto pericial elaborado por Manuel J. Zevada
(perito mexicano) y Morros L. Cooke (perito estadounidense), donde se fijó la suma de
$23,995,991 dólares por concepto de indemnización, que se repartió $18,391,641 para el Grupo
Standard Oil de Nueva Jersey (que eran la Huasteca Mexican Petroleum, la Tuxpan Petroleum,
la Tamiahua Petroleum, la Compañía Petrolera Ulises, la Compañía Transcontinental de
Petróleo y la Compañía Petrolera Minera); $3,891,158 al Grupo Standard Oil de California
(conformado por California Standard y la Richmond Petroleum); $630,151 al grupo Consolidated
Oil Co. (que estaba integrado por Consolidated Oil, Cía. Franco Española y Cía. Petrolera
Aldamas y Bravo); $897,671 al grupo Sabalo (conformado por Sabalo Transportation, Cía.
Petrolera Clarita y la Cía. Petrolera Cacalilao); $487,379 al grupo Seabord (constituido por
internacional Petroleum y Cía. Internacional de Petróleo y Oleducto); a esta indemnización se
sumaron el 3% de intereses a partir del 18 de marzo de 1938 por lo que México pago
$29,137,700 más, para lo cual se tomaron el depósito de 9 millones, se pagaron el 3 de
septiembre de 1943 la suma de $3,796,391.04, y se dieron 4 anualidades de $4,085,327.45 a
partir del 30 de septiembre de 1944. El 18 de mayo de 1948, México acordó con la Cía Mexico-
Cities Service Petroleum Co. que constituían Sabino Gordo, Mexico Texas, Terrenos y Mexico
Eastern, una indemnización total por un millón de dólares. Finalmente, México indemnizo al
Águila y subsidiarias por $130,339,000 que incluían intereses desde el 18 de marzo de 1938
hasta el 17 de septiembre de 1948, además de intereses por cantidades insolutas del 18 de
214
septiembre de 1948 al 17 de septiembre de 1962; el pago se estableció fuera en 15
anualidades. Silva Herzog opinó sobre los acuerdos establecidos
A mi parecer México fue más allá de toda generosidad. La historia será muy severa para
quienes celebraron este convenio contrario al interés de la nación. (Alonso,1972:219)
4.10 Las consecuencias del estudio pericial y el dictamen para Jesús Silva Herzog
Naufal (1991) indicaba que el punto 40 del dictamen es la base del decreto expropiatorio del 18
de marzo de 1938.
Utilizando los criterios para evaluar el valor potencial de la investigación de Hernández et al
(2004): I) la conveniencia del estudio, fue tan importante que ayudo a determinar y resolver el
conflicto petrolero; II) la relevancia social, su trascendencia esta en los planos social-política-
económica, ya que socialmente se reivindicaron las propuestas laborales del trabajador
petrolero, políticas porque México recuperaba su soberanía sobre el petróleo y económica ya
que ahora toda su riqueza será para el beneficio del país; III) las implicaciones prácticas fue el
descubrir las diferentes tretas y artimañas que usaron las empresas petroleras para no pagar
impuestos, ni mejores salarios a sus trabajadores, ni desarrollar a las poblaciones en donde se
establecieron; IV) el valor teórico de este estudio es que fue el primero de su tipo, y puede
servir de modelo para futuros estudios.
En cuanto a las consecuencias que tuvo para su investigador Silva Herzog, además de los
ataques que intentaron desprestigiarlo como un investigador capaz y honesto,
215
Para él fue la satisfacción de haber logrado algo que se venía buscando, que era reglamentar a
la industria petrolera, los alcances que tuvo, nadie lo sabía, porque los sucesos se fueron
dando, y se fue desarrollando como se fueron presentando,
De la experiencia que tuvo Silva Herzog de la expropiación petrolera de la cual formó parte
importante como analista, trabajador, estudioso y dictaminador del conflicto petrolero, le sirvió
de base para publicar diversos trabajos como: “Las empresas petroleras y las demandas de sus
trabajadores” firmado con el seudónimo de Armando Blázquez en la Revista Futuro de junio de
1937, “La expropiación de las compañías petroleras de México” en la Revista Claridad de
octubre-noviembre de 1938, “Mexico’s Case in the Oil Controversy” en Internacional Conciliation
Carnegie endowment for internacional peace de 1938, “Mexico and the Oil Companies” en
Annals of Collective Economy de enero-abril de 1939, El petróleo de México de 1940 donde no
aparece el nombre de Silva Herzog, en su lugar aparece como autor el Gobierno de México; “La
cuestión del petróleo en México” en Trimestre Económico de 1940, Mexico’s Oil. A compilation
of official documents in the conflict of economic order in the petroleum industry, with an
introduction summarizing its causes and consequences, cuyo autor es Government of Mexico
de 1940, Petróleo Mexicano. Historia de un problema” por Fondo de Cultura Económica en
1941, “La epopeya del petróleo en México” en Revista de Economía de marzo de 1948, “The
epic history of Mexican Petroleum” en 1948 en el archivo del autor, “la epopeya del petróleo en
México” en Cuadernos Americanos de mayo-junio de 1953, México y su petróleo. Una lección
para América por la Universidad de Buenos Aires en 1959, Historia de la expropiación petrolera
por Cuadernos Americanos en 1963, Historia de la Expropiación de las empresas petroleras por
el Instituto Mexicano de Investigaciones Económicas en 1964, Historia de la expropiación de las
empresas petroleras, versión aumentada e ilustrada por el Instituto Mexicano de Investigaciones
Económicas en 1973, La expropiación del petróleo 1936-1938. Álbum fotográfico por Fondo de
216
Cultura Económica de 1981 contiene textos de Silva Herzog y fotografías de Miguel V. Casasola
y “México y el vampirismo petrolero” en Cuadernos Americanos de enero-febrero de 1981.
También dio algunas conferencias con el tema del petróleo: “La expropiación de las compañías
petroleras en México” en el Instituto de Negocios Públicos de la Southern Methodist University
en Dallas, Texas el 25 de abril de 1938; “El petróleo y la guerra” en la Sociedad Mexicana de
Geografía y Estadística en 1940; “la epopeya del petróleo en México” en la Escuela de
Economía de la Universidad Central, Caracas, Venezuela el 25 de agosto de 1947; ciclo de 4
conferencias con el título general de “la epopeya del petróleo en México” en el Colegio Nacional
julio-agosto de 1952; “La experiencia mexicana como productor de petróleo”, en la Universidad
de Córdoba, Argentina en mayo de 1958, “Recordemos una vez más la expropiación de los
bienes de las empresas petroleras” en el Colegio Nacional en julio-agosto de 1959; “la
expropiación de los bienes de las Empresas Petroleras” en la Sección 2 del STPRM en Poza
Rica, Veracruz el 14 de marzo de 1961; Curso sobre “Expropiación de los bienes de las
empresas petroleras. Veinticinco años después” en el Colegio Nacional en julio-agosto de 1963;
Recuerdos de la expropiación del petróleo en el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la
Refinería de Salamanca en marzo de 1967; La expropiación de la industria petrolera en el
Ateneo Español de México en 1967; sobre el petróleo en la Escuela Superior de Economía del
Instituto Politécnico Nacional el 25 de marzo de 1971; mis recuerdos de la expropiación de las
empresas petroleras a 35 años de distancia, en el Colegio Nacional de Economistas el 20 de
marzo de 1973. (Padilla,1973).
Silva Herzog explicó en entrevista realizada por James Wilkie, la causa del porque estuvo en
tanto cargos, en ocasiones tan variadas:
217
[He] tenido muy diferentes tareas durante [mi] vida, no puede explicarse el hecho
fácilmente. Sin embargo, la explicación es sencilla. Cuando comienzan los gobiernos
revolucionarios del general Obregón en adelante, los revolucionarios necesitan la ayuda
en diferentes cargos, sobre todo aquellos de tipo técnico, sobre todo aquellos que exigían
una cierta acumulación de conocimientos; pues no podían acudir estos gobiernos
revolucionarios –ni Obregón, ni Calles, ni los siguientes- a los antiguos intelectuales del
porfirismo y del huertismo. Algunos de ellos habían muerto, otros estaban desterrados, y
no faltaba quienes, viviendo en la ciudad de México, tenían ideas contrarias a las ideas de
estos gobiernos revolucionarios. Así es que se vieron obligados a echar mano de la gente
joven. Podemos ver que Manuel Gómez Morín a los 22 años, fue subsecretario de
Hacienda; que Vicente Lombardo Toledano y Alfonso Caso en otra fueron secretarios
generales del gobierno del Distrito Federal; y como estas personas que menciono, hubo
muchas otras en niveles más modestos; hombres jóvenes a los que tuvieron que acudir
los gobiernos revolucionarios. Entre estos hombres desde luego debemos citar a Narciso
Bassols; también entre ellos […] estuve yo. Y eso explica por qué una vez fui diplomático
improvisado y otras veces me ocupé de asuntos educativos, otras veces de asuntos
económicos, de asuntos hacendarios. (Wilkie & Monzón,1995:352).
¿…lo más importante de cuanto ha hecho usted en la vida? Le pregunto un periodista el 18 de
enero de 1959, a lo que contestó en ese entonces Silva Herzog:
Para no hablar de los hijos, pues tengo tres, yo considero que lo más importante que he
hecho en la vida es lo siguiente: 1) Haber contribuido a la formación de jóvenes
economistas, como maestro; 2) Cuadernos Americanos; y 3) Mi intervención en la
expropiación del petróleo. (Silva, 1973:99).
El Dr. Jesús Silva Herzog falleció a consecuencia de un paro cardíaco, el miércoles 13 de
marzo de 1985 en la Ciudad de México a los 92 años de edad. Emilio Mújica Montoya comentó:
218
Cuántas veces le escuché decir: El día anterior a mi muerte todavía estaré haciendo planes
[…] lo visité días antes al infausto miércoles […] todavía hablaba de escribir otro libro sobre
petróleo. (Mújica,1994:48).
Camp (1981) señala que según otros autores sugieren que Silva Herzog mezclaba las
interpretaciones clásicas marxistas con humanismo y racionalismo, para crear un socialismo
demócrata en el sentido mexicano, creía que México podía crear sus propias soluciones y que
el mantenimiento de la libertad individual era esencial, en opinión de Silva Herzog la crisis más
grande de la revolución era de tipo moral, como Bassols a través de sus años de servicio en el
gobierno estableció un ejemplo de integridad moral, honradez personal y franqueza como
ferviente nacionalista, sentía que la expropiación petrolera era la base de la economía de
México y que debía salvaguardarse a toda costa.
Debido al fallecimiento del profesor Jesús Silva Herzog, el entonces presidente Miguel de la
Madrid Hurtado en una entrevista periodística en la Ciudad de México, al ser cuestionado al
respecto respondió:
Quiero expresar a nombre del gobierno de la República el pesar que México siente por el
fallecimiento de este mexicano ejemplar del siglo XX, creó que debo destacar, entre sus
múltiples cualidades relevantes, la de haber sido un patriota apasionado y un hombre
honrado en todos los aspectos de su vida, principiando por la honradez intelectual por el
culto a la verdad, deja un ejemplo a los mexicanos que debemos profundizar y de
reflexionar. Afortunadamente nos deja un legado de obra intelectual muy vasto y muy
diverso fundamentalmente sobre temas mexicanos, sobre la revolución, sobre la reforma
agraria, sobre el petróleo, sobre los grandes problemas económicos y sociales del país.
Nos sentimos apesadumbrados pero al mismo tiempo muy satisfechos de que México haya
dado hombres como Jesús Silva Herzog. (Gobierno de Guerrero,1987:427).
219
Uno de los aspectos por lo que es ampliamente reconocido el maestro Silva Herzog, es su
estudio y análisis de la economía mexicana, su posición de ideas progresistas y su pensamiento
crítico, constituyen los elementos más importantes en la elaboración de sus trabajos. (Burgueño
et al, 1987).
Yo les digo a mis amigos que soy un economista muy impuro. La economía política me ha
interesado porque creo que puede ser útil para mejorar la existencia del hombre, siempre
que su enfoque se base en un sentido profundamente humano, que es el problema
esencial. En los últimos años he dejado un poco de lado esa disciplina, prefiriendo dedicar
mi tiempo disponible al estudio de cuestiones históricas. En resumen soy un poco
economista, un poco historiador, un poco sociólogo y me sigue interesando hoy, lo mismo
que en años juveniles, la literatura, la música y las demás bellas artes.196
(Cardiel,1981:166).
196 Carta de Silva Herzog al Sr. Julián Izquierdo Ortega con fecha 26 de agosto de 1965.
220
Conclusiones
La lucha del profesor Jesús Silva Herzog en contra de su limitada capacidad visual lo convierte
desde temprana edad, en un intelectual autodidacta de los años treinta del siglo pasado. Al
paso del tiempo, su desempeño como periodista le proporcionó elementos críticos y analíticos
que perfeccionaría a lo largo de su vida. Estas habilidades se observan en sus investigaciones
tanto de corte económico como histórico que se reflejaron en algunos trabajos económico-
estadísticos de su autoría, publicados en aquellos años.
El uso ordenado que hacía del discurso y la forma sistemática de exponer los hechos, le
evitaron que perdiera la vida, cuando fue detenido y procesado ante un Consejo de Guerra en
el año de 1917. Este hecho marcó su actuar cuando se convirtió en funcionario público años
después. Ya en el gobierno del Presidente Lázaro Cárdenas se vio obligado a señalar
cuestiones con las cuales no estaba de acuerdo y a denunciar la corrupción de algunos
funcionarios públicos, así como ciertas anomalías y atropellos de las compañías petroleras
extranjeras durante el conflicto petrolero.
Las investigaciones de corte económico e histórico que realizó el profesor Silva Herzog durante
su vida, le permitieron desarrollar un estilo intelectual propio basado en múltiples lecturas, que
hacía de autores de habla española, inglesa o francesa; idiomas que dominó a la perfección. En
1937, sus conocimientos y habilidades intelectuales le permitieron encontrar información diversa
para la elaboración de un estudio sobre la industria petrolera que le había encomendado la
Junta Federal de Conciliación y Arbitraje.
221
Mediante sus investigaciones en el campo petrolero descubrió, entre otras cosas que la
compañía petrolera “El Águila”; que se auto-nombraba mexicana, no lo era; o las anomalías que
empleaban algunas empresas petroleras para no pagar impuestos en nuestro país defraudando
así, a la Secretaría de Hacienda. La forma como resolvió la encomienda que le dio la Junta
Federal, consistió primero, en ofrecer los antecedentes históricos del problema en estudio;
después, con observaciones y búsquedas de información que coordinó él mismo, elaboró los
argumentos que exponían el problema en general y, finalmente ofreció, en un documento de
carácter oficial, una serie de conclusiones con respecto a esta problemática.
La experiencia obtenida por el profesor Silva Herzog en la coordinación de equipos de trabajo,
como aquéllos que efectuó durante su estancia en la Oficina de Estudios Económicos de los
Ferrocarriles Nacionales, fue trascendental para la planeación y ejecución del estudio pericial
elaborado bajo su supervisión, sobre la problemática petrolera. Una de las grandes limitantes de
este trabajo fue el plazo para su elaboración. De hecho, de no haber llevado el profesor Silva
Herzog una correcta metodología y coordinación tan meticulosa, se corría el riesgo de no
concluir el estudio en el tiempo señalado por la Ley, lo que pudo haber cambiar toda la historia
del conflicto petrolero.
La importancia y relevancia del dictamen pericial para la solución de estos asuntos, fue un
acierto de la comisión pericial conformada por el profesor Jesús Silva Herzog, Efraín Buenrostro
y Mariano Moctezuma, quienes realizaron la investigación en base al conflicto económico que
interpuso el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana en contra de las
empresas petroleras extranjeras.
222
El profesor Silva Herzog enfrentó múltiples obstáculos en el desarrollo del estudio pericial. Entre
los más significativos se encontraban una gran cantidad de presiones y amenazas de tipo
personal, social, político y sobretodo económico de las grandes compañías petroleras para que
desviara su fallo a favor de éstas. De hecho, se sabe que durante y después de haber concluido
su trabajo fue severamente criticado por todos los medios a que tenían acceso las empresas
extranjeras; la intención era descalificarlo, para que perdieran credibilidad sus investigaciones y
por ende, los resultados obtenidos en contra de estas empresas petroleras.
Las características tan puntuales que se dieron en la investigación para la elaboración del
estudio pericial, lo convierten en un documento único en su tipo y poco conocido. Generalmente
es el investigador quien selecciona el tema que va abordar; en el caso del conflicto petrolero,
este era un caso real que requería de un especialista con dominio en la investigación
económica, histórica y social relacionada con la industria petrolera. La Junta de Conciliación
sabía que el profesor Silva Herzog era el candidato ideal para este trabajo; sus atributos
intelectuales y académicos le permitieron la elaboración del dictamen impecable a favor de los
trabajadores nacionales dedicados a esta rama de la producción.
El dictamen pericial contiene cuarenta conclusiones. En su contenido se establece que la
industria petrolera mexicana se encontraba en manos de algunas empresas extranjeras, las
cuales sólo habían velado por sus propios intereses económicos. En este apartado se
denotaron los bajos salarios de los trabajadores petroleros en comparación con las altas
ganancias que estas empresas obtenían. También se indica en términos económicos, la
situación de la industria petrolera en cuanto a su producción y ganancias; pero el punto más
importante de todo este documento es la última conclusión, Al ser el dictamen resultado de una
investigación de tipo económico se debía conocer si las empresas estaban en condiciones
223
económicas de poder aumentar los salarios y prestaciones a los trabajadores. El dictamen
concluye que estas empresas eran capaces de solventar los reclamos salariales sin ningún
perjuicio para su desarrollo y operación.
Desde el punto de vista metodológico el dictamen del conflicto petrolero es un estudio de alto
valor que no se había efectuado antes en México. No cabe duda que podría servir de referencia
para estudiosos relacionados con esta temática. Su valor histórico es de mayor valía, ya que fue
la base para que se decidiera una expropiación, situación que las empresas petroleras
extranjeras no contemplaban. Pero lo más importante es que en sus intentos por evitar tal
medida gubernamental, se vieron expuestas sus verdaderas intenciones confirmando así, las
correctas apreciaciones que diera el profesor Silva Herzog en sus investigaciones.
Como consecuencias del dictamen pericial, las empresas extranjeras petroleras recurrieron
conforme a derecho, a presentar sus objeciones a este documento ante la Junta Federal de
Conciliación. Una vez evaluadas por esta dependencia gubernamental se dictó el laudo, en el
cual fallaron a favor de los trabajadores y en contra de las empresas petroleras extranjeras. En
respuesta, las empresas amenazaron con retirar sus inversiones en México, así como equipo y
transportes de su propiedad. También solicitaron un amparo ante el laudo; este fue llevado por
la Suprema Corte de Justicia. La notificación de improcedencia del recurso de amparo obligó a
las empresas a acatar el laudo de la Junta Federal; no obstante que la Ley solicitaba su
cooperación, éstas decidieron ignorar el mandato de la Suprema Corte de Justicia mexicana. Al
parecer, estas empresas esperaban que fueran intervenidas sólo en forma temporal, en la
realidad lo sucedió es que fueron expropiadas.
224
El haber realizado la genealogía del profesor Silva Herzog conllevo a estudiarlo no solamente
en el ámbito humano, sino en su proceso de formación intelectual, así como la influencia que
tuvieron diversos autores y personajes en su modo de pensar. Esto permitió también reconocer
la importancia de su asignación como coordinador del Grupo Especial Número Siete para la
solución del conflicto petrolero. La forma en que realizó la investigación; el entender el contexto
histórico, económico y social donde se movió este acontecimiento, así como el análisis del
estudio y dictamen (los cuales fueron evaluados por especialistas extranjeros en economía y
contabilidad principalmente y no pudieron objetarlo), establece reconocer que la metodología
empleada por el profesor Silva Herzog para la solución de esta problemática fue bien dirigida y
ejecutada, por esta razón culminó con éxito su encomienda.
225
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233
Anexo 1 Los puntos principales de la demanda del Sindicato
1. Que sólo debían existir 114 puestos de confianza más un número ilimitado de abogados para cada empresa. Todos los demás empleos serían controlados por el Sindicato
2. Que en casos de reajustes las compañías pagarían una indemnización equivalente a 90 días de salarios, más 25 días de salarios por cada año, o fracción mayor de seis meses de servicios prestados, a los trabajadores que fueran reajustados
3. Cunado renunciara al trabajo un obrero que hubiera prestado servicios durante diez años o más, se le indemnizaría con el importe de 25 días de salarios por cada año de los servicios prestados. Si la renuncia era motivada por rescisión del contrato por culpa del patrón, a más de la indemnización se pagaría al trabajador la cantidad equivalente a noventa días de salarios.
4. Se solicitó el establecimiento de la jornada semanaria de cuarenta horas de trabajo 5. Impartición, por parte de las empresas, de atención médica teniendo como base la
prevención de las enfermedades, pidiéndose los medios indispensables de diagnóstico y los elementos adecuados, así como la supresión de trámites humillantes
6. En caso de muerte por causa no profesional, se pidió el pago de sesenta días de salarios para gastos de funerales, más una indemnización del importe de veinticinco días de salarios por cada uno de los años de servicios prestados por el obrero.
7. En caso de muerte a consecuencia de riesgo profesional, el pago de una indemnización equivalente al importe de 1,400 días de salarios
8. Para el caso de que el riesgo profesional realizado produjera incapacidad total permanente, pago de una indemnización equivalente a 1,825 días de salarios más el equivalente a veinticinco días de salarios por cada de servicios prestados. Si el obrero hubiera trabajado más de 10 años al resultarle incapacidad total permanente por riesgo profesional se le jubilará.
9. Se pidió el establecimiento de jubilaciones conforme a una tabla que fluctuaba entre la de treinta años de servicios con 100% del salario y diez años de servicios con 60% del sueldo.
10. La fijación de 18 días al año como de descanso obligatorio 11. Vacaciones: para los trabajadores que tuvieran hasta cinco años de antigüedad,
veinticinco días de vacaciones anuales; de cinco a diez años de antigüedad, cincuenta días de vacaciones anuales; de 10 a 15 años de antigüedad, cincuenta días de vacaciones anuales; y de 15 años en adelante sesenta días de vacaciones anuales.
12. La constitución del fondo de ahorros de los obreros por medio de un descuento de 10% del salario del trabajador más un 15% del mismo salario, que aportaran las empresas.
13. Establecimiento de cuarenta y cinco becas para trabajadores o hijos de trabajadores 14. Que se permitiera a los trabajadores mexicanos adquirir la práctica necesaria para
reemplazar a los técnicos extranjeros 15. Las empresas petroleras debían proporcionar habitaciones cómodas e higiénicas a todos
sus trabajadores, o pagar, como compensación de esa prestación, la cantidad de dos pesos diarios a cada obrero.
16. El Sindicato solicitó como aumento en los salarios la cantidad total de $28,149,460.00 17. Aumento total del costo anual del contrato: $65,474,840.00 18. Costo total anual del contrato, solicitado por el Sindicato $114,611,460.00
Fuente: (Universidad Obrera de México,1939:16-18)
234
Anexo 2
Ley Federal del Trabajo Poder Ejecutivo
Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo
Título IX Del procedimiento ante las Juntas
Capítulo VII De los conflictos de orden económico
Artículo 570 Cuando se trate de conflictos colectivos que obedezcan a causas de orden
económico relacionadas con el establecimiento de nuevas condiciones de trabajo,
suspensiones o paros y que por su naturaleza especial no pueden resolverse en los términos
establecidos en el Capítulo IV (Del procedimiento ante las Juntas Centrales y Federales de
Conciliación y Arbitraje) de este título se tramitarán de acuerdo con las disposiciones de este
capítulo.
Artículo 571 La Junta inmediatamente que tenga conocimiento del conflicto procurará que se
mantengan las cosas en el estado que guardaban antes de surgir aquél, recomendado que no
se llegue a la huelga o al paro, o que se reanude el trabajo si aquélla o éste ya hubieren sido
declarados, entre tanto se hace la investigación de las causas determinantes del conflicto de las
condiciones de la industria afectada, y sin que esa reanudación presuponga conformidad de las
partes respecto a las condiciones del trabajo
Artículo 572 La Junta después de oír a las partes, mandará practicar una investigación que
estará a cargo de tres peritos que ella designe, quienes se asesorarán de dos comisiones, una
de obreros y otra de patrones, iguales en el número de sus componentes.
Artículo 573 Los peritos haciendo uso de la mayor libertad llevaran a cabo un completo estudio
del conflicto planteado, de sus causas y circunstancias, pudiendo practicar toda clase de
inspecciones permitidas por la ley en los establecimientos de la industria de que se trate,
recabar de todas las autoridades, comisiones técnicas, instituciones y personas, los informes
que le sean necesarios y formular a las partes, autoridades, etc. los cuestionarios que crean
235
convenientes para el esclarecimiento del conflicto, siendo obligación de aquellos a quienes se
dirijan esos cuestionarios dar contestación a los mismos.
Artículo 574 El plazo para hacer las investigaciones será fijado por la Junta atendiendo a la
gravedad y demás circunstancias del conflicto, y no podrá exceder de 30 días.
Artículo 575 Terminado el estudio, los peritos formularán desde luego un informe en el cual
consignarán el resultado obtenido, y un dictamen relativo a la forma en que según su parecer,
pueda solucionarse el conflicto y prevenirse su repetición.
El informe y el dictamen de los técnicos se pondrá a la vista de las partes por un término de
sesenta y dos horas, para que formulen sus objeciones y sí se hace alguna, se señalará día y
hora para la celebración de una audiencia de pruebas. Esa audiencia de pruebas tendrá por
objeto aportar nuevos elementos o destruir el valor que se asigne por los técnicos a algunos de
los consignados.
Artículo 576 Si las partes no hacen objeción o bien después de celebrado la audiencia a que se
refiere el artículo anterior, la Junta dictará la resolución que dé fin al conflicto, fundándola en el
informe y dictamen rendidos por los peritos y en las objeciones y pruebas presentadas por las
partes. La resolución dictada en esos términos tendrá el mismo carácter y producirá los mismos
efectos jurídicos de un laudo. Las juntas podrán acordar en su resolución disminuir o aumentar
el personal, la jornada o la semana de trabajo, modificar los salarios y, en general, cambiar las
condiciones de trabajo, de acuerdo con los resultados que arroje la tramitación, sin que, en
ningún caso se alteren los mandatos de esta ley.
Artículo 577 Si las partes hacen objeciones al dictamen de los peritos y ofrecen como prueba la
pericial, los patrones estarán obligados a facilitar a los peritos que designen las partes cuantos
libros y documentos se soliciten por ellos y que se relacionen con la situación económica del
negocio.
México, D. F. a 27 de agosto de 1931, el subsecretario de Gobernación, encargado del
despacho, Octavio Mendoza González.
Fuente: Diario Oficial de la Federación el viernes 28 de agosto de 1931
236
Anexo 3 El laudo del Grupo Número Siete de la Junta de Conciliación y Arbitraje Los principales puntos resolutivos de dicho laudo establecen las siguientes condiciones de trabajo en la industria petrolera:
1. Se consideran como empleados de confianza de las compañías, los comprendidos en 49 grupos de personas. Según el cálculo que se hace en el mismo laudo, 1,100 trabajadores quedan comprendidos como empleados de confianza
2. En los casos de reajustes, las compañías deben pagar a cada obrero reajustado una indemnización de noventa días de salarios, más el importe de veinte días de salarios por cada año, o fracción mayor de seis meses, que haya laborado el trabajador reajustado.
3. Los trabajadores que hayan prestado servicios durante 10 años o más, tienen derecho a renunciar, sin expresión de causa, al empleo, y la compañía respectiva debe, en estos casos, indemnizar al obrero con el importe de veinte días de salarios por cada año que aquél hubiera trabajado a su servicio. Cuando el obrero, después de haber trabajado diez años o más, se ve obligado a rescindir el contrato por culpa del patrón. Además de la indemnización de veinte días de salarios por cada año de servicio, la compañía debe pagarle una indemnización equivalente a tres meses de salarios.
4. Se establece la jornada de 40 horas semanarias, repartidas en cinco jornadas diarias de ocho horas cada una.
5. Las compañías están obligadas a destinar una cantidad total de un millón de pesos para el mejoramiento de los servicios médicos. Por cada 1,500 trabajadores, las compañías deben sostener un hospital, que cuenten con médicas especialistas en ojos, oídos, nariz y garganta. Debe existir un puesto de socorros por cada 400 trabajadores, y cuando no llegue a ese número el de obreros, debe existir una enfermería. Por cada grupo de 150 a 400 trabajadores debe asignarse un médico con los ayudantes que éste necesite; por cada grupo de 400 a 1,000 o más trabajadores, se destinará al servicio un cirujano dentista, un médico cirujano especialista en ojos, un médico cirujano especialista en oídos, nariz y garganta, y un pediatra, los que harán visitas por lo menos una vez al mes. Los médicos deben ser mexicanos que tengan título debidamente expedido y registrado; y el nombramiento de ellos no queda al arbitrio de las empresas.
6. En los casos de muerte por causa no profesional, la compañía respectiva debe pagar a los deudos del obrero el importe de treinta días de salarios por conceptos de funerales.
7. Todos los trabajadores petroleros deben tener un seguro de vida por la cantidad de $4,000.00, y las primas respectivas serán pagadas por mitad, por la empresa y por el Sindicato.
8. Como indemnización en casos de muerte a consecuencia de un riesgo profesional, la compañía respectiva debe pagar el equivalente a 1,280 días de salarios.
9. En los casos de incapacidad total permanente a consecuencia de un riesgo profesional, la compañía debe pagar al obrero el equivalente a 1,460 días de salarios. Cuando el trabajador incapacitado tiene una antigüedad de 15 años o más en el servicio, en vez de pagarle la indemnización antes señalada la empresa debe jubilarlo.
10. Se establecen dos casos de jubilaciones: a) por vejez. En estos casos, cuando el trabajador cumple 55 años de edad y ha prestado servicios por 25 años, se le jubila con un 70% del salario; y cuando el trabajador ha cumplido 55 años de edad y tiene 30 de servicios prestados, se le jubila con el 80% de su salario. b) Por incapacidad total permanente derivada de riesgo profesional. En estos casos, cuando el trabajador ha
237
prestado servicios desde 15 hasta 19 años, se le jubila con el 65% de su salario; cuando el obrero ha trabajado de 20 a 24 años se le jubila con el 80% de su salario.
11. Los trabajadores disfrutarán de los 4 días de descanso obligatorio que fija la Ley, más 12 días festivos en el año.
12. Vacaciones: los trabajadores que tengan una antigüedad hasta de 10 años en el servicio, disfrutarán de 21 días laborables de vacaciones al año; los que tengan antigüedad mayor de 10 años, gozarán de vacaciones durante treinta días laborables al año. Los trabajadores transitorios, o sea aquellos que no son de planta, gozarán de un periodo de vacaciones después de haber laborado 275 días.
13. El fondo de ahorros se constituirá con un 10% de descuento al salario del trabajador más un 10% de ese salario que aportará la empresa. Además, ese fondo de ahorro recibirá un incremento de 6% anual correspondiente al rédito que pague la institución bancaria ante la cual se depositen los fondos de ahorro.
14. Las compañías están obligadas a establecer 50 becas, con un pago de $150.00 mensuales a cada una de ellas, para trabajadores o hijos de trabajadores que designe el Sindicato.
15. Por cada uno de los empleados técnicos extranjeros, debe colocarse a un practicante mexicano, y las compañías tienen la obligación de sustituir a los extranjeros por mexicanos, en un término de tres años.
16. Las compañías tienen obligación de proporcionar casas a sus trabajadores cuando emplean a más de 100 obreros. Esta obligación es susceptible de compensarse mediante el pago de $1.00 diario a los trabajadores cuyo salario diario es de $10.00; y de $1.50al día a los trabajadores que tengan un salario diario mayor de $10.00.
17. El laudo establece un aumento total de salarios por $8,657,647.50. 18. El aumento total del costo anual del contrato establece el laudo es de $26,332,756.00 19. El costo total anual del contrato, según lo establecido por la Junta es de $75,469,376.00. Fuente: (Universidad Obrera,1939:29-32)
238
Anexo 4 Las demandas de amparo de las compañías petroleras El día 28 de diciembre de 1937, los representantes de las compañías petroleras presentaron, ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, una demanda de amparo en contra del laudo dictado por el Grupo Número Siete de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje Los agravios principales que se aducen en dicha demanda de amparo son los siguientes:
1. Incompetencia de las autoridades que dictaron la resolución, porque estiman las compañías que no correspondía al Grupo Especial Número Siete de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje conocer del conflicto, sino que la competencia residía en el Pleno de la Junta en virtud de que dicho conflicto afectaba a los Estados de Veracruz , Tamaulipas y al Distrito Federal.
2. Que las compañías fueron juzgadas por un tribunal especial, porque conoció del caso un representante oficial designado al efecto en virtud de la excusa presentada por el Presidente de la Junta, habiendo hecho la designación el C. Jefe del Departamento del Trabajo, no obstante que la Ley establece que el Secretario General de la Junta es quien debe reemplazar al Presidente.
3. Que la resolución condena a las compañías a prestaciones que no formaban parte de las demandas originales de los trabajadores, pues el Sindicato pedía el establecimiento de determinadas condiciones de trabajo sobre la base de un contrato en los términos del proyecto aprobado en su primera Convención Extraordinaria, y la Junta, en vez de definir si las compañías estaban obligadas a firmar ese contrato o no, las condena al establecimiento de nuevas condiciones de trabajo, algunas de las cuales no formaban parte de las demandas originales; que además, el Sindicato se había resistido a someter el movimiento general de huelga al arbitraje de las autoridades y en su demanda no hacía mención alguna a la imputabilidad del conflicto y, no obstante, la resolución atribuye esa imputabilidad a las compañías por el pretendido desequilibrio entre los factores de la producción.
4. El Sindicato de Trabajadores Petroleros pretendía llegar a la celebración del Contrato-ley de esta industria, previsto en el artículo 58 de la Ley Federal del Trabajo, y esa situación jurídica sólo podría alcanzarse mediante un proceso natural, por los medios que fija la Ley.
5. Que el llamado conflicto de orden económico planteado por el Sindicato no era el establecido en el capítulo VII del Título IX de la Ley Federal del Trabajo, pues este es un procedimiento legal destinado especialmente a utilizarse como recurso de los patrones cuando ciertas condiciones económicas, tales como un descenso brusco en los precios, o una elevación igualmente brusca en el valor de las materias primas hacen imposible que sigan operando sobre las bases de las obligaciones contractuales en vigor, y como las demandas del Sindicato implicaban la revisión de contratos en vigor y el establecimiento de un contrato colectivo de aplicación general, el procedimiento que debió seguirse fue el ordinario que establece la Ley y no el de orden económico a que se refiere el capítulo VII, Título IX de la Ley Federal del Trabajo.
6. Los principales derivados de los artículos 42, 85 y 335 de la Ley Federal del Trabajo consagran la libre contratación para la fijación del salario y la celebración de contratos colectivos, y si se interpretara en forma ilimitada el artículo 576 de la misma Ley, como lo hizo la Junta, se destruirían los principios de libre contratación.
239
7. Que no existe precepto alguno de ley, ni razón alguna, que determine que las demandas de los trabajadores sólo estarán limitadas por la capacidad económica de las empresas. Que en el presente caso la violación consistía en que la resolución condenaba a las compañías a un aumento substancial en los salarios y en las demás prestaciones a sus trabajadores, tomando en cuenta, la Junta, que las empresas estaban económicamente capacitadas para soportar tal aumento, no obstante que con, excepción d puntos tales como el salario mínimo y otros que son objeto de disposición semejante en las contrataciones y en la Ley, los demás se gobiernan únicamente por la libre voluntad de las partes en el campo de la contratación, y al resolverlos en la forma en que lo hizo, la Junta desconoció el derecho de libre contratación reconocida expresamente por la Ley Federal del Trabajo, y además, al basar un contrato colectivo de aplicación general sobre la llamada capacidad económica de las compañías el Grupo partió de una premisa falsa, pues la capacidad económica de las diferentes compañías afectadas es también diferente.
8. Que al dictarse la resolución algunas del as pruebas de las compañías no se habían estudiado y otras fueron impropiamente apreciadas. Que la mayor parte de las pruebas presentadas por las compañías fueron, o ignoradas en lo absoluto, o simplemente mencionadas, sin que se intensase siquiera estudio o consideración sobre ellas, y de otras se hacían derivar conclusiones ilógicas y falsas, destruyendo su verdadero valor. Que se daba aceptación completa a todas las pruebas presentadas por el Sindicato.
9. Que el laudo presenta en forma errónea la verdadera capacidad económica de las compañías, pues pasa por alto muchas de las pruebas rendidas por los patrones y al fijar arbitrariamente la cifra de veintiséis millones de pesos como la capacidad económica de loas compañías, la Junta pasó por alto en lo absoluto hechos debidamente comprobados durante las audiencias.
10. Si bien el laudo se habla de erogaciones por valor de $26,329,393.00, señalando que esa suma es la que pueden las empresas satisfacer en beneficio de los obreros, en realidad las prestaciones a que el laudo condena tienen un valor que asciende a $41,000,000.00
11. Que la resolución priva a las compañías de los derechos que los contratos colectivos en vigor les otorgan, pues aun cuando las compañías tienen contratos en vigor que rigen el trabajo material de los mismos, el laudo modifica tanto las condiciones como las renumeraciones, substituyéndola por nuevas condiciones mucho más onerosas e ilegalmente impuestas contra su voluntad, particularmente si se toma en cuenta que las nuevas condiciones de trabajo sólo pueden hacerse obligatorias por el acuerdo voluntario de las partes contratantes, y además, el establecimiento de nuevas condiciones de trabajo no puede hacerse al arbitrio de los trabajadores y de manera tal que el patrón quede colocado en una situación que le impide seguir operando a causa de cargas excesivas e indebidas.
12. Violación del artículo 4º constitucional, en atención a que, al fijarse a las empresas obligaciones desproporcionadas frente a sus trabajadores, se les impide a aquellas dedicarse al libre ejercicio del trabajo, industria o profesión.
13. Que al establecerse en el laudo que sólo los empleados de la más alta jerarquía que desempeñan puestos de dirección y de inspección de labores son de confianza, se violan los artículos 4º y 48 de la Ley Federal del Trabajo.
14. Se obliga a las empresas a sustituir a los técnicos extranjeros por nacionales, excediendo en la proporción fijada por los artículos 9º y 112 fracción V, de la Ley Federal del Trabajo.
15. En el laudo se declara que son imputables a las compañías las causas del conflicto, no obstante que la imputabilidad de la huelga no fue materia de la controversia y a pesar,
240
también, de que la huelga y el conflicto de orden económico que promovieron los obreros son independientes.
16. Al establecerse en el laudo que los aumentos de salarios y otras prestaciones debían cumplirse por las empresas a partir del 28 de mayo de 1937 (fecha anterior a la en que se dictó el mismo laudo) se dan efectos retroactivos al fallo de la Junta.
Fuente: (Universidad Obrera,1939:35-39).
241
Anexo 5
Parte del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
El fallo fue dictado el martes 1º de marzo de 1938 2/938/2a
1. La cuestión de competencia no fue planteada ante la Junta Especial Número Siete en
forma de excepción y no fue esa Junta Especial la que resolvió la cuestión, sino el Pleno
de la Junta Federal, lo cual es causa suficiente para desestimar este concepto de
violación, pues en el juicio de amparo promovido por las compañías no se reclama la
resolución del Pleno de la Junta. Por otra parte, en el laudo reclamando se establece que
la Junta Especial es competente en consideración a que el Pleno declaró tal
competencia, de donde resulta que la Junta Especial no podía hacer otra cosa que
aceptar su competencia, toda vez que no puede sostener al Pleno de la Junta de que
forma parte una contienda de competencia. En esa virtud, y como en realidad no es
cierto el acto que se atribuye a la Junta responsable, por este concepto debe dictarse
sobreseimiento.
2. Que no existe violación del artículo 13 constitucional, pues aún admitiendo los hechos
que señalan las compañías quejosas, la intervención del licenciado Gustavo Corona,
como presidente de la Junta que dictó el laudo, en calidad de representante del
Gobierno, no puede implicar la existencia de un tribunal especial de los que prohíbe el
citado artículo 13 de la Constitución, pues éstos son los que integran por ley para juzgar
a determinadas personas, y en los hechos y razonamientos que hacen las compañías no
se dice que se haya creado un tribunal especial, sino que la Junta Número Siete, o sea el
Tribunal ordinario se integró indebidamente, lo que es un concepto totalmente distinto al
que contempla el citado artículo 13 constitucional, Que se señala como violado, también,
el artículo 16 de la Constitución que protege la jurisdicción y la competencia, pero las
compañías no alegan la incompetencia de la Junta Especial Número Siete porque se
hubiera violado alguno de los principios de valor universal relativo a la jurisdicción y a la
competencia, sino que sostienen que la Junta no se encontraba debidamente integrada
(en vez) de la ilegalidad de la designación del licenciado Corona, lo cual coloca la
cuestión dentro del llamado problema de incompetencia de origen o ilegalidad de los
funcionarios, problema que no puede ser analizado en el juicio de garantías, según se
establece en jurisprudencia sentada por la Suprema Corte desde hace muchos años. Al
designarse al licenciado Gustavo Corona para que fungiera como Presidente de la Junta
242
en sustitución de Romeo León Orantes, quien se excusó manifestando que estaba
impedido para conocer del conflicto suscitado entre las compañías petroleras y sus
obreros, no se cometió violación a ley alguna, pues en el caso tiene aplicación el artículo
498 de la Ley Federal del Trabajo, conforme al cual , cuando es recusado algún
representante ante la Junta, a menos que se trate de un representante obrero o patronal,
la persona que lo haya designado hará nuevo nombramiento, lo que quiere decir que,
cuando es recusado el Presidente de la Junta, el Jefe del Departamento del Trabajo
debe nombrar a la persona que lo sustituya, y esto fue lo que se hizo en el presente
caso.
3. Es infundado el concepto de violación que se hace consistir en infracción de los artículos
535, 536, 537 y 539 de la Ley Federal del Trabajo, porque estas disposiciones legales
tienen aplicación cuando se trata de los laudos que se dicten en el procedimiento
ordinario de los conflictos de trabajo, pero no los casos a los que la Ley comprende bajo
la denominación de “conflictos de orden económico”, como fue el que se suscitó entre las
compañías y el Sindicato petrolero, y en el cual recayó el laudo reclamado.
4. Es injustificable el agravio que se hace consistir en que el laudo de la Junta impuso
condiciones de prestación de servicios diversas de las exigidas por el Sindicato en su
demanda y de las propuestas por las empresas, pues el artículo 576 de la Ley Federal de
Trabajo dispone, con toda claridad, que la Junta, al resolver los conflictos de orden
económico, puede fijar esas condiciones, sin que su facultad se encuentre restringida por
las peticiones de las partes, lo que fácilmente se corresponde considerando en función
que a las Juntas corresponden en los conflictos colectivos de carácter económico, que no
es la de fijar los derechos que se deriven, para las partes, de los contratos vigentes o de
la ley, sino crear el estatuto conforme al cual habrán de regirse en el futuro las relaciones
obrero-patronales. En estos conflictos la Junta ejerce una función de distribución de la
riqueza, que no puede quedar restringida por las peticiones de las partes, puesto que lo
que se procura, no decidir si la distribución de la riqueza ha de hacerse conforme a las
peticiones de cada una de las partes, sino fijar las normas más equitativas y justas de
dicha distribución. Los conflictos entre el capital y el trabajo tienen una doble naturaleza:
pueden ser de carácter jurídico o bien de carácter económico; ocurre lo primero cuando
la cuestión debatida se refiere a obligaciones existentes entre las partes, y
consiguientemente lo que se reclama es el cumplimiento de obligaciones adquiridas en
los contratos o derivadas del derecho vigente; y ocurre lo segundo cuando los
trabajadores o los patrones estiman que las normas contractuales que rigen la prestación
243
de los servicios no corresponden a las necesidades de los trabajadores, o ala situación
real de la industria, y, entonces, lo que se pide es la equitativa y justa distribución de la
parte en que la producción corresponde a cada uno. Estos conceptos están claramente
fijados en la Exposición de Motivos de la Ley Federal del Trabajo. En los conflictos de
carácter jurídico se encuentra ligada la Junta de Conciliación y Arbitraje por el derecho
pre-existente y por las peticiones de las partes, puesto que las violaciones al orden
jurídico sólo pueden decidirse por el Estado cuando el interesado solicita la protección
del derecho violado en su prejuicio; por el contrario en los conflictos de carácter
económico desempeña el Estado una función distinta, que no es la de reparación de una
violación al orden legal sino la de creación de un estatuto que regule la vida de la
empresa, unidad económica integrada por trabajadores y patrones. Esta función del
Estado es consecuencia de la naturaleza de la legislación del trabajo, la cual, por una
parte, asegura el mínimo de beneficios que corresponden a los obreros en el fenómeno
de la producción, y , por otra parte, señala los medios a través de los cuales puede
llegarse al mejoramiento de las condiciones de los trabajadores y al equilibrio entre los
factores de la producción por medio de la justa distribución de la riqueza. El derecho del
trabajo da oportunidad a trabajadores y patrones para que, mediante el contrato
colectivo, busquen ese equilibrio; mas cuando ese acuerdo no se logra, interviene el
Estado, por la necesidad en que se encuentra de asegurar el equilibrio entre las clases; y
este es el resultado del abandono de la política abstencionista y de la adopción del
intervencionismo del Estado como forma de resolver el problema social, y esta
intervención se efectúa, de manera esencial, a través de dos instituciones: el contrato
colectivo obligatorio previsto en el artículo 58 de la Ley Federal del Trabajo y la sentencia
que se dicte en los conflictos de orden económico, denominada sentencia colectiva en
razón de que afecta a una pluralidad de relaciones, no sólo a las vigentes en el momento
en que se dicta, sino a las que se constituyan en el futuro, y, lo que es más importante, a
las relaciones de todos los obreros de las empresas en donde vaya aplicarse,
independientemente de que todos los trabajadores o sólo una parte de ellos hayan
solicitado la intervención de la Junta. Como resultado de las razones antes expuestas
esta diversidad de conflictos y de funciones trae consigo una diferencia en los principios
que rigen los laudos, pues en tanto que en las controversias jurídicas exige el artículo
551 de la Ley Federal del Trabajo, que los laudos sean congruentes con las peticiones
de las partes, el artículo 576 de la mismas Ley, aplicable a conflictos de carácter
económico, da facultad a las Juntas para fijar, de acuerdo con las necesidades de la
244
industria, con la equidad y con la justicia las condiciones de prestación del servicio, sin
que haya de sujetarse a las peticiones de los interesados, pues la Junta interviene para
aplicar el criterio del Estado sobre la forma de distribución de la riqueza. La tesis sobre la
forma de distribución de la riqueza. La tesis antes señalada ha sido sustentada por la
Cuarta Sala en varias ejecutorias, entre las cuales pueden citarse las siguientes: Toca
4785/934/3ª., Compañía San José Río Hondo, S. A. pronunciada el 9 de septiembre de
1935; Toca 4818/35/2ª., promovido por la Huasteca Petroleum Company, pronunciada el
4 de marzo de 1936.
5. De autos aparece que el Sindicato de Trabajadores Petroleros elevó una solicitud ante
las empresas quejosas, pidiéndoles la celebración de un contrato uniforme para todas las
negociaciones y que, además, estableciera nuevos beneficios a favor de los obreros;
aparece igualmente que, no obstante que existían celebrados contratos colectivos, las
empresas aceptaron discutir un nuevo contrato, y aparece también que en el convenio de
27 de noviembre de 1936 se obligaron las partes a discutir ese nuevo contrato. Ahora
bien, si las empresas se obligaron a discutir un nuevo contrato resulta indudable que esa
discusión debía llevar a un fin práctico, que era la celebración de un nuevo contrato
colectivo y que en caso de que las partes no se pusieran de acuerdo podía acudirse a la
autoridad para que ésta fijara las condiciones de trabajo. Consecuentemente, al fijarse
las cláusulas del contrato quedaron insubsistentes las que regían las relaciones en la
industria petrolera, y en esa virtud, es infundado el agravio que se hace consistir en que,
existiendo celebrados entre las partes contratos colectivos de trabajo no podían exigir los
obreros que la Junta fijara las condiciones de un nuevo contrato.
6. Sostienen las compañías petroleras que el laudo es contrario a los dispuesto por el
artículo 58 de la Ley Federal del Trabajo, pues alegan que lo que el Sindicato pretendía
era llegar a la celebración del contrato-ley previsto en ese artículo, y esa situación
jurídica sólo podía alcanzarse mediante un proceso natural, por los medios que fija la
Ley. Este concepto de violación es infundado porque no es exacto que la Junta, en su
laudo, hubiera creado un contrato-ley, ni que los trabajadores hubieran exigido dicha
situación jurídica, sino que los efectos del laudo de la Junta sólo se refieren a empresas
determinadas y no a todas las empresas petroleras que existen en el país o que vengan
a trabajar en el futuro. Lo que los trabajadores exigieron fue que se uniformaran las
condiciones de trabajo en empresas determinadas y a esto fue a lo que condenó la
Junta, fijando a la vez las condiciones de esa uniformidad, lo cual no significa la creación
de un contrato-ley.
245
7. Las empresas alegan que para que proceda el conflicto de orden económico se requiere
que sea el patrón quien solicite la fijación de las nuevas condiciones de trabajo, por lo
cual en el caso no debió tramitarse el conflicto en esa vía, pues la demanda de los
trabajadores para que se fijaran nuevas condiciones de trabajo implica la petición de
celebración o revisión de un contrato colectivo, para lo cual existen procedimientos
especiales en la Ley. Este agravio es infundado por lo siguiente: en primer lugar, no es
cierto que exista un procedimiento especial para la revisión de los contratos colectivos,
puesto que el artículo 56 de la Ley Federal del Trabajo dice únicamente que los contratos
podrán revisarse por las partes al terminar su período de vigencia, siempre y cuando la
solicitud de revisión se hubiera hecho, por lo menos, sesenta días antes del vencimiento,
sin que la Ley indique cuál de los procedimientos consignados en la misma, o sean el
ordinario y el de orden económico, deba seguirse; y en estas condiciones, para resolver
la procedencia de una u otra vía es indispensable atender a la naturaleza del conflicto
planteado. Carece de justificación el argumento de las empresas en el sentido de que el
procedimiento para los conflictos de orden económico puede únicamente abrirse cuando
son los patrones quienes piden la fijación de nuevas condiciones de trabajo, porque para
la determinación de la naturaleza del conflicto no puede atenderse a la parte que
presenta la solicitud, sino a la naturaleza misma del conflicto que se plantea, y es
indudable que la situación es idéntica cuando los trabajadores solicitan la fijación de
nuevas condiciones de trabajo. El establecimiento de nuevas condiciones de trabajo se
funda en la necesidad de regular equitativamente las relaciones obrero-patronales,
tomando en cuenta la situación de la industria y las necesidades de los obreros, y, por
tanto, cuando son los trabajadores quienes presentan la solicitud, debe juzgarse la
situación real de la industria y sus necesidades , esto es, se plantea un problema
evidentemente económico, como también lo es cuando son los patrones quienes piden la
reducción de las condiciones de trabajo. De tal suerte, si la naturaleza del conflicto es
idéntica en ambos casos, resulta absurdo pretender que se tramite en vías distintas.
8. El principio de libre contratación rige en forma absoluta en el Derecho Civil, pero
encuentra numerosas limitaciones en el Derecho del Trabajo, que es independiente de
aquél. La formación de las relaciones de trabajo depende de la voluntad de las partes, en
cuanto no puede obligarse a ninguna persona a que establezcan una industria, ni a los
trabajadores a que presten sus servicios en ella; pero cuando la empresa está trabajando
y cuando existen ya celebrados contratos de trabajo, el principio de libre contratación
queda restringido en lo que se refiere a los contratos colectivos y a los individuales,
246
existentes, y vencidos los términos de vigencia de esos contratos pueden las partes
solicitar su revisión, siendo indudablemente que cuando no se ponen de acuerdo puede
acudir a las Juntas de Conciliación y Arbitraje para que éstas fijen las cláusulas de los
contratos; de donde resulta que el principio de libre contratación no rige en forma
absoluta, puesto de otra manera habría que dar por terminados los contratos sin que las
Juntas pudieran desempeñar la función, que les ha asignado el Estado, de intervenir,
mediante sus fallos, para la fijación de las nuevas condiciones de trabajo. Las empresas
petroleras sostienen que los patrones se encuentran facultados para exigir la reducción
de las condiciones de trabajo, y esta afirmación no se compagina con el principio de libre
contratación, puesto que si éste rigiera en forma absoluta no sería posible que los
patrones demandaran dicha reducción, pues esto implica la destrucción del repetido
principio de libre contratación, y es absurdo pretender, dada la naturaleza de la
legislación del trabajo, que ésta destruya el repetido principio en prejuicio de los obreros
y que lo deje vigente a favor de los patrones. El contrato de trabajo es tan sólo el acto
inicial de las relaciones obrero-patronales, y las condiciones que en ese contrato se fijen
están sujetas a modificación, pudiendo ésta resultar de acuerdos entre las partes, de la
celebración de un contrato colectivo, de que se establezcan una costumbre o un uso, de
que se modifique la Ley y también de las modificaciones que se hacen los fallos de las
Juntas de Conciliación y Arbitraje al revisar los contratos. El Estado, por virtud del
artículo 123 de la Constitución, ha modificado la política abstencionista del sistema liberal
substituyéndola por el intervencionismo como medio de regular la justa y equitativa
distribución de la riqueza; y esta política del Estado no puede reducirse a la creación del
citado artículo 123, que constituye únicamente el mínimo de garantías a favor de la clase
trabajadora, porque si respetando ese mínimo se dejara a las partes libertad absoluta
para fijar las cláusulas de los contratos, resultaría que el Estado intervino una sola vez en
el fenómeno de la producción e inmediatamente después adoptó de nueva cuenta una
actitud abstencionista. La actitud abstencionista trae consigo que el Estado se vea
obligado a intervenir a medida que van cambiando las condiciones económicas del país y
que, por tanto, a mejores condiciones de las empresas deben corresponder también
mayores beneficios para los obreros, y si las partes no se ponen de acuerdo para fijar
esos beneficios debe intervenir el Estado para fijarlos, función que desempeña a través
de las Juntas de Conciliación y Arbitraje. Esta facultad del Estado está claramente
expresada en la Exposición de Motivos de la Ley Federal del Trabajo, en la que se dice,
a propósito de los conflictos de orden económico, lo siguiente: “El Estado ya no se limita
247
a cumplir con sus funciones de administrar la justicia en su forma conmutativa, sino que
interviene, para decidir por vía de autoridad, lo que a cada uno de los partícipes en la
producción le corresponde , lo que antes quedaba encomendado a la voluntad de las
partes y al juego de las leyes económicas.
9. Las compañías petroleras alegan en su demanda de amparo que no existe ley ni razón
que determine que las prestaciones de los patrones a favor de los obreros no tienen más
límite que la capacidad económica de las empresas; pero según se ha dejado
establecido en los razonamientos anteriores, toca al Estado fijar lo que corresponde, en
la producción, a trabajadores y patrones, y es claro que para la decisión de ese problema
precisa tomar en cuenta la capacidad económica de las empresas. La intervención del
Estado en el fenómeno de la producción implica un doble principio: por una parte, que los
trabajadores tienen derecho a que, cuando las condiciones de la empresa lo permitan, se
eleve su nivel de vida, para lo cual habrán de otorgárseles mayores beneficios; y por loa
otra parte, que los límites de las Juntas de Conciliación y Arbitraje para esa fijación,
consisten en el respeto al derecho de las empresas para obtener una utilidad
proporcional al capital invertido, ya que si los trabajadores tienen derecho a que se
mejore su nivel de vida, ese derecho se encuentra subordinado a que las empresas
obtengan una utilidad, porque si se obligara a los patrones a trabajar con pérdida se les
impondría, en realidad, la obligación de hacer donaciones a favor de los obreros. Lo
expuesto significa que el principio de la capacidad económica de las empresas se
traduce en el respeto a una utilidad de las negociaciones, proporcional a su capital, y en
el mejoramiento de las condiciones de vida de los obreros, el cual habrá de obtenerse
justamente con la utilidad restante. El artículo 123 constitucional fija el mínimo de
condiciones para los obreros, de tal manera que, cuando las utilidades de una empresa
no alcanzan a cubrir ese mínimo, el Estado mexicano no autoriza la apertura de la
negociación, pero cuando la condición de la industria y cuando sus utilidades son
mayores, deben fijarse nuevas prestaciones para los obreros, puesto que, de otra
manera, no existiría un equilibrio entre los factores de la producción, ni habría tampoco
una distribución equitativa de las utilidades entre los dichos factores.
10. En la Ley del Trabajo existen dos procedimientos distintos, que son el ordinario y el de
conflictos de orden económico; y la diferencia entre estos dos procedimientos responde a
la diversa naturaleza de los conflictos y a la distinta función que en unos y otros
desempeña el Estado. En el procedimiento ordinario el impulso procesal corresponde a
las partes en el juicio y el laudo que dicta el Tribunal se apoya, exclusivamente, en los
248
elementos que se le hubieran aportado, lo que quiere decir que estas pruebas son el
elemento básico para la solución del conflicto, como consecuencia de que la misión del
Estado consiste en decidir el derecho en la medida en que le fue pedida su decisión y
conforme a lo que las partes hubieran probado, actitud que corresponde a lo que
tradicionalmente se ha entendido por función jurisdiccional del Estado. En el
procedimiento de orden económico la situación es distinta, pues ya no se trata de decidir,
tan sólo sobre el derecho alegado por las partes sino de crear un estatuto jurídico para
una multiplicidad de relaciones jurídicas, presentes y futuras; por esta razón, el impulso
procesal fundamental en esta clase de negocios corresponde a la autoridad cuando
designa, en los términos del artículo 572 de la Ley Federal del Trabajo, a una comisión
pericial, de técnicos en cuestiones económicas, para que practique una investigación y
formule el dictamen correspondiente. El dictamen de esta comisión pericial, que puede
ser auxiliada por los asesores que designen los trabajadores y los patrones, constituye la
base de todo el procedimiento y el elemento primordial para dictar el laudo, según lo
dispone el artículo 576 de la misma Ley. EL dictamen de los peritos se apoya de un
laudo, en los datos que ellos mismos obtengan y, de otro, en los elementos que las
partes les presenten, lo que, en realidad, significa que el conflicto se discute una primera
vez ante los peritos y que la conclusión a que éstos lleguen es el resultado técnico de su
actividad y de la controversia de las partes a través de las objeciones y pruebas que
presenten ante los mismos peritos. La justificación de este procedimiento es obvia, ya
que no se trata de decidir cuestiones jurídicas sino estudiar situaciones económicas que
exigen una preparación especial y una libertad de acción que no permite el
procedimiento ordinario. En consecuencia, la Junta se encuentra con que existe una
primera discusión y un primer análisis de los elementos fundamentales del problema y
que las objeciones y pruebas de las partes constituyen una nueva oportunidad para que
se comprueben los errores en que hubieran podido incurrir los peritos; más es indudable
que el laudo debe, ante todo, estudiar el dictamen de los peritos y decidir hasta qué
punto se encuentra fundado y sólo podrá rechazarlo en aquellos puntos en que aparezca
erróneo. Dentro de este criterio procedió la Junta que dictó el laudo que recusan las
compañías petroleras según se encuentra claramente establecido en el considerando
tercero del laudo. No puede exigirse, como pretenden las compañías, que la Junta haga
referencia a cada uno de los párrafos del dictamen, del escrito de objeciones y de las
pruebas aportadas, porque independientemente de que ya los peritos hicieron el estudio
técnico del problema, resultaría ocioso que la Junta reprodujera íntegro el dictamen, las
249
observaciones y las pruebas de las partes, ya que lo lógico es analizar todos los
elementos y determinar en qué aspectos se equivocaron los peritos, y es también
manifiesto, como se dice en el laudo, que dada la multiplicidad de elementos que existen
en el expediente tiene que hacerse el examen de cada una de las conclusiones del
dictamen en relación con las pruebas aportadas a propósito de esa conclusión, y que lo
que la Junta está obligada a expresar en el laudo es el resultado de su confrontación, o
lo que es lo mismo, a exponer las razones por las cuales, atentas las objeciones y
pruebas presentadas, aceptó o rechazó las diversas conclusiones del dictamen.
Aducen las compañías petroleras que la Junta falsea el contenido de algunas probanzas y que,
de haberlas estimado en su justo valor habría visto que la situación económica de las empresas
era diversa de la señalada en el dictamen de la comisión pericial. Pero la Cuarta Sala no puede
entrar al estudio de esta cuestión, porque el amparo tiene por objeto reparar las violaciones que
se hubieran cometido al derecho existente, y en manera alguna es posible, en el juicio de
amparo, estudiar la situación económica de las empresas, ni menos decidir cuál haya de ser el
criterio para la justa distribución de la riqueza. La Suprema Corte tiene como función vigilar que
se cumplan las garantías individuales, y en relación con el artículo 14 de la constitución, que en
las controversias entre las partes
Fuente (Gobierno de México,1940:833-863
250
Anexo 6 Renuncia al cargo de Gerente General de la Distribuidora de Petróleos Mexicanos que con fecha 6 de agosto de 1940, la dirige al Presidente Constitucional de la República Mexicana General Lázaro Cárdenas
“Con toda atención vengo ante usted a presentar mi renuncia irrevocable del puesto de Gerente
General de la Distribuidora de Petróleos Mexicanos; más antes de expresar las razones en que
la fundo, deseo respetuosamente puntualizar, señor Presidente, los hechos siguientes:
Inmediatamente después de la expropiación de los bienes de las compañías petroleras fui en
dos ocasiones invitado a ocupar un alto puesto en la Institución creada en lugar de aquellas
habiéndome rehusado a aceptar el honor que se me hacía por haber sido uno de los Peritos en
el Conflicto de Orden Económico y por que pensé que era preferible para el Gobierno que yo no
desempeñara, por lo menos durante los primeros meses, cargo alguno en la nueva unidad
económica.
Catorce meses después, es decir a mediados de mayo de 1939, tuvo usted la bondad de
solicitar por conducto del señor Secretario de Hacienda y Crédito Público mi cooperación al
Gobierno en la Gerencia General de la Distribuidora de Petróleos, a lo que accedí, con hondo
agradecimiento, por considerar que era deber mío como mexicano, aportar mi modesta
capacidad y esfuerzo decidido en la consolidación de la industria petrolera nacionalizada.
Pocos días después de haberme hecho cargo de la Gerencia General, me dí cuenta de que en
la Distribuidora había más personal administrativo del necesario y sueldos por encima de lo que
es normal en nuestro país, lo que significaba excesivas erogaciones que desde luego me
pareció que podían poner en peligro la marcha de la organización; en tal virtud pensé que era
sensato iniciar desde luego una política de economías y comencé por renunciar a la suma de
$1,500.00 mensuales que como gastos de representación se habían asignado a mi antecesor
en la Gerencia, renuncia que consta en el acta número 29 del Consejo Directivo de fecha 2 de
junio de 1939; además me rehusé a que se cubrieran con cargo a la Institución, los salarios de
dos chóferes y preferí pagarlos de mi propio sueldo, lo que he venido haciendo invariablemente
hasta la fecha.
251
Por otra parte, no sin grandes esfuerzos porque fue preciso vencer en algunos casos
resistencias sindicales, pude lograr la supresión de cinco plazas en la Gerencia de Exportación,
obteniendo así una economía de $80,000.00 al año en números redondos.
El 19 de julio de 1939 me dirigí en carta REF-106 al Comité Ejecutivo General del Sindicato de
Trabajadores Petroleros de la República Mexicana pidiendo su conformidad para poner en
práctica un plan con la tendencia a hacer economías y consistente en que no se cubrieran las
vacantes temporales o definitivas que ocurriesen cuando no fuese necesario. El Sindicato me
contesto en oficio 8723 de fecha 19 de agosto rechazando las sugestiones que me había
permitido proponer en bien de la Industria. En conversaciones que tuvo con varios
representantes obreros me manifestaron al insistir yo en el peligro que veía en los enormes
gastos, que la Segunda Gran Convención de Petroleros reunida en la ciudad de México desde
el mes de junio, se ocuparía de estos problemas y formularía para resolverlos determinadas
proposiciones a Petróleos Mexicanos y a la Distribuidora. La Convención clausuró sus sesiones
en el mes de diciembre sin haber examinado a fondo la cuestión financiera y habiendo costado
su sostenimiento a la Administración algo más de medio millón de pesos. La Convención
nombró nuevo Comité Ejecutivo General, delegados obreros a los Consejos de Administración y
una Comisión que debía presentar a las instituciones un proyecto de Contrato de trabajo, el cual
había sido estudiado en las sesiones de la Asamblea. Este documento es en la mayoría de sus
cláusulas copia fiel del primer proyecto de Contrato presentado a las empresas petroleras en
noviembre de 1936 y que fue el origen del conflicto. La Comisión Pericial que lo estudió llegó a
la conclusión de que las compañías no tenían capacidad económica para aceptarlo, puesto que
las erogaciones que hubieran tenido que hacer sobrepasaban de $120,000,000.00 anuales y
fijó la de $75,000,000.00.
La pérdida del mercado alemán desde fines de agosto de 1939 vino a reducir los ingresos de la
Distribuidora, y cuando en el mes de enero se discutieron los presupuestos en sesiones de los
Consejos, yo fui uno de los que llamaron insistentemente la atención, como consta en las actas
correspondientes, sobre el desequilibrio existente y la necesidad de que la industria se
desenvolviese por canales de una acción financiera sana y ponderada.
A principios de febrero, señor Presidente, seguramente recordará que en el acuerdo que con
usted tuvimos el señor ingeniero don Vicente Cortés Herrera y yo, me permití plantearle con
toda franqueza la situación económica y administrativa en que la industria se encontraba,
252
situación que no vacilé en calificar de peligrosa. Entonces usted se sirvió llamar a los
Secretarios de Hacienda y de Economía y en presencia de ellos insistí en mis puntos de vista,
habiendo, tanto el señor licenciado Suárez como el señor Buenrostro y el propio ingeniero
Cortés Herrera, aceptado expresamente que yo interpretaba con exactitud la realidad. Como
resultado de este hecho y de una conversación que tuvieron con usted algunos de los miembros
del Comité Ejecutivo General del Sindicato y de la representación obrera en los Consejos, leyó
usted su mensaje de fines del mismo mes de febrero ante representantes de todas las
Secciones, sugiriendo una serie de medidas para restablecer el equilibrio de la industria del
petróleo. El Sindicato contestó sus sugestiones dos meses después aproximadamente,
manifestando en el fondo su desacuerdo con ellas. Al regresar yo de los Estados Unidos
después de trabajar con el Doctor Castillo Nájera en las negociaciones con el grupo Sinclair y
de haber efectuado algunas ventas importantes de petróleo, me encontré con que las
condiciones económicas tanto de Petróleos Mexicanos como de la Distribuidora se hacían cada
vez más difíciles; y en junta que con usted tuvimos los Secretarios de Hacienda y Economía, el
Gerente General de Petróleos y yo, se volvió a tratar el problema, habiendo usted a fines de
mayo, expresado de nuevo ante los trabajadores petroleros, que era inaplazable reducir las
erogaciones, y comisionó a los Consejos para que trataran con el Sindicato de buscar los
medios apropiados que debían emplearse para conseguir el fin deseado.
Es indudable que usted recordará que yo sostuve la tesis de que Petróleos Mexicanos, la
Distribuidora de Petróleos Mexicanos y la Administración General del Petróleo Nacional se
fusionaran en una sola unidad industrial, tesis que a la postre fué aceptada; y consecuente con
mi opinión y por razones de personal delicadeza con fecha 29 de mayo le envié por escrito mi
renuncia, afirmando en ella que estimaba que era preciso que desde luego hubiera unidad de
mando y de acción para resolver la situación. También afirmé ante usted que consideraba que
el señor ingeniero don Vicente Cortés Herrera, tenía más méritos que yo y él debía ser el que
se quedara al frente de la industria. Días después tuvo usted la gentileza de manifestarme que
el Gobierno deseaba continuar con mi colaboración, por lo que retiré mi renuncia y le manifesté
mi sincero reconocimiento.
Los consejos como ya es bien sabido nombraron una Comisión formada por los señores
Alvarez García y Gómez, representantes obreros y por los Gerentes Generales para que
estudiaran el plan de reorganización de la industria, de conformidad con la gráfica elaborada por
el Sindicato y que en principio usted se sirvió aprobar. Se acordó también que se invitara al
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Comité Ejecutivo General para que nombrara un representante especial, lo que se hizo
inmediatamente por escrito; pero durante todo el mes de junio que duró el trabajo a que me
refiero no se presentó el mencionado representante, y ya se ha dicho públicamente que la
excusa que dio el Secretario General fue la de que la invitación había sido hecha al Comité
Ejecutivo y no al Sindicato, lo cual no es posible explicar lógicamente, sino como táctica dilatoria
a efecto de que no se llevase a cabo la reorganización.
En vista de que la entrada de Italia a la guerra trajo como resultado la pérdida de ese mercado y
una nueva disminución en nuestros ingresos, de que las maniobras de las compañías
expropiadas hicieron que no pudiera realizarse un contrato de compraventa de combustóleo
que yo había firmado en abril con la “Petroleum Heat and Power” de Nueva York, y de que todo
parecía indicar que los dirigentes del Sindicato, o por lo menos algunos de ellos, no trataban
sino de alargar las discusiones, el señor ingeniero Cortés Herrera y el suscrito, en una de
nuestras últimas entrevistas con usted le hicimos patente la seriedad de una situación que nos
había conducido a un punto extremadamente peligroso, toda vez que ya no estábamos
cumpliendo con obligaciones financieras inaplazables y el peligro inminente de no poder cubrir
en breve plazo los salarios de los trabajadores. Días después envío usted su acuerdo de 15 de
julio a los Representantes Oficiales en los Consejos y en la sesión en que fue conocido se
autorizó al ingeniero Cortés Herrera y a mí para tomar las medidas necesarias a fin de
cumplimentar inmediatamente las órdenes de usted, lo que hicimos desde luego, solicitando
ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, con apoyo en el artículo 581 de la Ley del
Trabajo, la autorización para tomar las medidas que de su acuerdo se derivaban y planeando
un Conflicto de Orden Económico.
El Sindicato por diversos medios manifestó su oposición a las medidas tomadas y se hicieron
preparativos de paros en varias Secciones. El jefe del Departamento del Trabajo a solicitud del
mismo Sindicato ofreció su intervención en el Conflicto, y hemos celebrado Cortés Herrera y yo,
dos largas conferencias ante dicho alto funcionario con los trabajadores petroleros y
representantes de la C. T. M. Tenemos la satisfacción de que en ellas quedó patentizado
nuestro propósito conciliador, nuestra actitud amistosa para los trabajadores y nuestro celo por
defender la estabilidad financiera de la Industria.
Mientras tanto señor Presidente, se ha desatado una campaña de calumnias y amenazas en
contra de los Gerentes Generales por algunos componentes del Sindicato Petrolero y hasta por
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cierto líder calumniador que pertenece a una importante Central Obrera. Se ha llegado hasta a
incitar al asesinato en vista de que, según se afirma en volantes anónimos que distribuyen a
centenares, la culpa de las graves condiciones en que se encuentra la industria no se debe sino
a los errores cometidos por Cortés Herrera y por mí. Es penoso mencionar también el hecho de
que existen informes confidenciales de que usted seguramente conoce, en los cuales se afirma
que en el fondo de tan injustificada agitación anda la mano y el dinero de las compañías
petroleras expropiadas, que han logrado corromper a algunos trabajadores ambiciosos, sin
escrúpulos y sin patriotismo.
Se ha iniciado una lucha innoble en la que la ocultación de la verdad y el engaño sistemático
son normas de acción. Se insiste siempre en que es la ineptitud de los Gerentes la que ha
originado la crisis que la industria padece en estos momentos, como si la guerra en Europa, el
boicot de las compañías petroleras, las inversiones de más de cien millones de pesos que ha
sido preciso hacer para mantener el negocio en movimiento y la elevación en los gastos por
aumento en las prestaciones no fueran realidades indiscutibles, claras y objetivas.Yo inicié mi
actividad pública militando como periodista con la brigada del General Eulalio Gutiérrez desde el
año de 1914, desde entonces hasta la fecha he estado siempre como revolucionario, como
escritor y como economista en la vanguardia de nuestro movimiento social; se me ha acusado
muchas veces de radical y socialista; se me ha catalogado entre los que luchan por transformar
profundamente, desde su raíz, la estructura económica capitalista; y esto señor presidente es
cierto, fue verdad en el pasado, lo es en el presente y lo será en el futuro, y precisamente por
esto es por lo que no puedo tolerar que se trate de presentarme con perfiles que no tengo y de
manchar mi vida por gentes sin antecedentes y sin honestidad, a quienes tal vez mueve el
dinero de las compañías expropiadas en México, que como es bien sabido, me cuentan y con
razón entre sus más decididos enemigos. Por otra parte, no estoy dispuesto a participar en una
lucha en la que se usan medios perversos, pues yo no tengo experiencia ni quiero tenerla para
defenderme en ese terreno. Y ante esta situación, prefiero, señor Presidente, presentar la
renuncia irrevocable a que al principio me refiero. Al dejar el alto puesto que hasta hoy he
ocupado lo hago con hondo reconocimiento para usted por la confianza que en mí depositó; lo
hago con la certeza de haber servido lealmente a su Gobierno, y con la satisfacción de salir de
la Gerencia General de la Distribuidora tan pobre como a ella entré y sin mas patrimonio que mi
trabajo para ganarme limpiamente la vida.”
Fuente: (Cardiel,1981:41-46).
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