tejiendo territorios desde el arte y la gestión cultural
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TEJIENDO TERRITORIOS DESDE EL ARTE Y LA GESTIÓN CULTURAL:
ESCENARIOS DE FORMACIÓN COMO PROPUESTA
DE CONOCIMIENTO EXPERIENCIAL
Trabajo de grado presentado por
JOSUE GABRIEL SANTAMARIA PEREZ
Para optar al título de Magíster en Gestión cultural
Asesora Magister ANGÉLICA SERNA SALAZAR
Maestría en Gestión Cultural
Facultad de Artes
Universidad de Antioquia
Enero de 2016
AGRADECIMIENTOS
A mi madre, quien siempre me acompaña.
A mis hermanos, sobrinos y familia.
A Rodrigo, por su paciencia y acompañamiento.
A mi asesora Angélica, por creer en este proyecto.
A Morelia Mesa Pérez, por acompañarme en este camino de la Gestión Cultural.
A todos aquellos Gestores en formación que aportaron con sus reflexiones a construir
este texto.
A Barbora, en Brno, quien con su amor y paciencia me mostró los secretos del Setkani.
INTRODUCCION
El proceso de reflexión desarrollado en la investigación que se presenta aquí,
responde a un esfuerzo de sistematización de dos experiencias personales que me
han llevado a la reflexión acerca de la formación del Gestor Cultural en nuestro
contexto. La primera fue la vivida en las participaciones en el evento internacional de
Escuelas de Teatro Setkani Encounter, Brno Republica Checa y la segunda se trata de
las experiencias como docente con los estudiantes de Gestión Cultural VI en el curso
de Artes Escénicas en diferentes regiones del Departamento de Antioquia.
La preocupación de este ejercicio investigativo, se orienta a la construcción de
un camino formativo de la Gestión Cultural desde una perspectiva Latinoamericana,
en un claro compromiso por desarrollar conocimientos y acciones situadas,
comprometidas con los procesos de vida de las comunidades.
Es un ejercicio reflexivo que reconoce el papel del Gestor Cultural como
movilizador de procesos sociales contextualizados y pertinentes. A partir de
teóricos como Gustavo Restrepo, Carlos Yáñez Canal, Rubens Bayardo, Alfons
Martinell, David Hernández Montesinos, Lucina Jiménez López, que plantean la
necesidad de volver a mirar el concepto de cultura, pero para modificarla,
reinventarla y acomodarla a nuevas necesidades, el escrito invita a pensar en la
formación de los Gestores culturales desde acciones que permitan crear impactos
significativos en un contexto que día a día exige mecanismos que le permitan
dinamizar de otra manera espacios vulnerados por los conceptos tradicionales de
cultura y la urgencia de revisar el tema de la formación del Gestor Cultural a la luz de
los cambios que propone la modernización y la globalización. Sus reflexiones invitan
a replantear los roles del gestor cultural situado en el actual contexto
latinoamericano.
Se reconoce aquí, que el lugar y sentido de un Gestor Cultural en América Latina debe
entonces buscar nuevas formas de re-significación y organización que desafían estas
mismas lógicas de mercado, en aras de la construcción de ciudadanía e inclusión
social.” (Gestión Cultural, ciudadanía e inclusión social. Carlos Yáñez Canal.
Universidad Nacional de Colombia. 2014), es decir, enfrentar los procesos de
globalización, desde un ejercicio de dinamización y reconocimiento de lo propio, un
volver a mirar y reconocerse para configurar una acción del campo cultural desde la
propia singularidad y potencia, enfrentando la homogeneización y banalización, del
mundo contemporáneo.
Como se dijo al iniciar, la inquietud investigativa, se basa en un ejercicio de
recuperación de las experiencias de formación en torno a las Artes Escénicas y la
Gestión Cultural: Encuentro Internacional de Escuelas de Teatro, que se realiza año
tras año en la ciudad de Brno- Republica Checa, desde hace 25 años y es organizada
por los estudiantes de la Academia Janacek Academy of Music and Performing Arts.
(De aquí en adelante Jamu, como es su nombre más conocido) con la que tuve
contacto y participación entre los años 2010, 2012 y 2015. Este evento académico,
utilizando el teatro como pretexto, posibilita el proceso de formación de los estudiantes
de las diferentes áreas que ofrece esta escuela, en especial para los estudiantes de
Gestión y Managers, de forma consecutiva. Se plantea aquí como la experiencia de
vivir su construcción durante un año, permite una reflexión acerca de la profesión, de la
preparación para el campo laboral y la importancia del estudiante en un rol que va más
allá del aula de clase.
La segunda recupera mi experiencia como docente por varios años en el
mencionado pregrado de Gestión Cultural con un curso que acerca a los estudiantes de
Gestión a las Artes Escénicas.
Respecto a la recuperación reflexiva de ambas experiencias surge como pregunta
desde el punto de vista formativo y pedagógico,
¿Qué aprendizajes se pueden derivar del análisis de caso de dos experiencias:
Setkani Encounter y el curso Artes Escénicas para Gestión Cultural, para delinear
una ruta formativa en perspectiva experiencial del Gestor Cultural de la
Universidad de Antioquia?
Tomando esta como punto de partida, se asume el abrir diferentes posibilidades
sobre la formación de los Gestores Culturales y su actual búsqueda de un perfil
adecuado a las nuevas necesidades generadas en el contexto de transformación de las
localidades, atravesadas por las intervenciones de la modernidad globalizada, la
aparición y de las nuevas tecnologías y la apertura a nuevos conocimientos a través
de ellas, se propone también vincular inquietudes acerca del Gestor en formación
desde lo institucional y desde lo social, campos que le competen y deben comprender a
cabalidad.
Por lo anterior, en este trabajo se podrá encontrar cinco capítulos que, reflexionan en
torno a la formación del gestor cultural:
De esta manera, presentaré estas reflexiones iniciando con un capítulo I llamado
Hacia una pregunta por la Formación del Gestor Cultural. En él se pretende reflexionar
acerca de la formación del Gestor en Latinoamérica desde la profesionalización, de
manera que se interroga por las posibles maneras de aportar a consolidar un perfil
acorde a los cambios, asociados a dinámicas de los contextos donde el gestor cultural
se desenvuelve, específicamente en el programa de regiones de la Universidad de
Antioquia.
Posteriormente, se presenta el Capítulo II Concepción de Gestión Cultural como
referente de base de la ruta de formación del Gestor Cultural, en la que se presentan a
partir de una afirmación estructurante, que parte de afirmar que la idea de la Gestión
Cultural, debe incidir en los procesos de formación de los gestores culturales, de
manera que el proceso aporte a la consolidación no sólo de profesionales, sino de un
campo de actuación para su desarrollo. En el capítulo se presenta una reflexión
descriptiva sobre los enfoques dominantes de la gestión cultural hoy y las rutas que se
han propuesto en torno a la formación de profesionales en este campo, para
finalmente fundamentar una ruta propia, que articula saberes de la gestión en contexto
y el saber de la Gestión Cultural, una perspectiva situada latinoamericana.
El Capítulo III aborda la ruta metodológica de la investigación, donde se detallan el
enfoque y las herramientas utilizadas desde donde emergieron los aportes que
permiten el estudio de las dos experiencias a analizar cómo es la del Encuentro de
Escuelas Setkani Encounter y el Curso de Artes Escénicas, un proceso que se
reconoce en la sistematización y la construcción de saber desde la experiencia
reflexionada, es este sentido una perspectiva metodológica cualitativa, donde se ha
enfatizado en la recuperación narrativa de los procesos vividos .
Posteriormente, en el capítulo IV, aborda dos casos de estudio: el Setkani
Encounter y el Curso de Artes Escénicas para Gestión Cultural , que han sido
sistematizados, a partir de un proceso de generación de categorías emergentes en la
ruta de reconocer los aportes de ambas a una propuesta formativa de gestores
culturales
En un capítulo V se enfoca en la elaboración de una propuesta que, recuperando los
aprendizajes de los casos estudio ya señalados, cuyo centro es la dinamización de
procesos formativos desde un tejido regional en un campo especifico las Artes
Escénicas, es pues una perspectiva, que ofrece un camino para consolidar la formación
del gestor Cultural de la Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia, desde una
perspectiva más propia.
Finalmente, se presenta un cierre de conclusiones como Capítulo VI. Estas se
orientan a pensar la formación del Gestión Cultural, desde hacer Gestión Cultural como
alternativa emergente y de propuesta, surgida de esta investigación.
TABLA DE CONTENIDO
CAPITULO I
Hacia una pregunta por la formación del gestor cultural.
CAPITULO II
La concepción de Gestión Cultural como referente de base de la ruta formativa del
Gestor Cultural.
CAPÍTULO III:
Diseño metodológico.
CAPITULO IV:
Análisis de Caso.
Primer caso: Encuentro Internacional de Escuelas de Teatro Setkani Encounter.
Brno, República Checa.
Segundo caso: Artes Escénicas para Gestión Cultural: Caucasia, Envigado y Turbo
CAPITULO V
Aprendizajes para una propuesta para el pregrado de Gestión Cultural, Facultad de
Artes de la universidad de Antioquia.
Identificación de los hallazgos en clave de experiencia, como premisas y acciones.
Perfil del proyecto
CAPITULO VI
Conclusiones
CAPITULO I
Hacia una pregunta por la formación del Gestor Cultural.
Reconocer la experiencia de la Gestión Cultural como posibilidad formativa
La reflexión de esta propuesta está vinculada a las Artes Escénicas, específicamente
con teatro, y los procesos de gestión cultural relacionados con este saber, y deviene de
mis experiencias como docente en el programa de Gestión Cultural de la Universidad
de Antioquia y otras como participante en un evento de teatro escuela realizado en la
Republica Checa El Setkani Encounter, Brno. Republica Checa y se articula a una
búsqueda por potenciar la formación de gestor cultural en nuestros contextos.
Es pues una indagación por la formación del Gestor Cultural desde una perspectiva
situada y contextualizada, esto es, un lugar que asocia la necesidad de construir
conocimiento propio, formar profesionales vinculados a los territorios y un compromiso
ético y político con las singularidades de nuestros pueblos.
Cabe señalar que aunque se ha hecho gestión cultural, desde hace muchos años, la
preocupación por los programas de formación en nuestro contexto se consolida
institucionalmente hacia los años 80 del siglo XX. En otros lugares, la formación de
Gestores Culturales desde perspectivas curriculares y universitarias, surgió alrededor
de los años setenta, cuando entidades como la Unesco1, la impulsaron. El campo de
formación se consolidó y fue creciendo y expandiéndose desde diferentes enfoques, y 1 La capacitación orientada al desarrollo en materia de gestión cultural aparece con frecuencia en la agenda de
la UNESCO desde mediados de los años setenta. Desde entonces, la UNESCO ha organizado encuentros y generado proyectos de cooperación para satisfacer la evolución de las necesidades de capacitación, de programas y métodos de formación, así como realizado talleres de capacitación para el personal cultural en diferentes regiones. Los profundos cambios que se han producido a lo largo y ancho del mundo desde la segunda mitad de los años ochenta en lo económico, lo tecnológico y lo cultural, han dado lugar al surgimiento de nuevas exigencias en las profesiones culturales y en la formación de los especialistas en desarrollo cultural. En el mismo sentido se inscriben los esfuerzos de la UNESCO en materia de formación de gestores culturales para los países iberoamericanos, los que se realizan en cooperación con la Organización de los Estados Iberoamericanos (OEI) y la red IBERFORMAT de Centros y Unidades de Formación en Gestión Cultural. (Formación en Gestión Cultural y Políticas Culturales. Directorio Iberoamericano de Centros de Formación. 2005) Unesco: Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. La constitución de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura fue aprobada por la Conferencia de Londres de noviembre de 1945 y entró en vigor el 4 de noviembre de 1946, una vez que 20 Estados depositado sus instrumentos de aceptación. (http://www.unesco.org/comnat/elsalvador/que_es.htm)
en particular hacia los años ochenta, se asocia la gestión cultural a los grandes
cambios a nivel económico, tecnológico y cultural, de la expansión neoliberal y la
globalización, donde la cultura emergió como producto de mercado, particularmente
asociado a las industrias culturales, esto llevó a que diferentes entidades pensaran aún
más en la formación de los especialistas de este campo en consolidación, ha sido
recurrente la presencia igualmente de otras rutas de gestión cultural, provenientes de
enfoques participativos, comunitarios y de fortalecimiento político particularmente en
América Latina, esto permite reconocer un campo de tensiones, entre el mercado y el
tejido social, entre la gratuidad y el valor económico, asociado a la cultura, en sentido
amplio y en sentido restringido y asociado a las manifestaciones artísticas.
Lo anterior se expresa en los enfoques de estas propuestas formativas, que son
disimiles, pero es factible diferenciar dos grandes derivas: Una vinculada al saber
gerencial y administrativo y una segunda más con los saberes sociales, donde se
planteaba la gestión cultural, desde una comprensión asociada a la animación
sociocultural y esta como eje fundamental del desarrollo cultural de un territorio. Es
esta una tensión compleja, entre saberes para el mercado y saberes para el tejido
social, que atraviesa muchas de las propuestas de gestión cultural existentes hoy en el
mundo.
.Reconociendo la tensión y la necesidad de construcciones propias respecto a la
gestión cultural que requerimos consolidar de cara, a los territorios, contextos y
expresiones culturales propias, la pregunta de este proceso investigativo se orientó a
pensar y aportar a la construcción de escenarios de formación de nuestros gestores
culturales. Lo central de la búsqueda se enfoca a la formación contextualizada y capaz
de problematizar la realidad, aportar soluciones y crear alternativas, que permitan
consolidar la labor de los nuevos profesionales gestores culturales en nuestros
territorios.
La propuesta es una investigación aplicada que busca reconocer caminos para
fortalecer el proceso formativo de los gestores culturales del programa ofrecido por la
Universidad de Antioquia en las sedes regionales.
Uno de los temas de reflexión recurrente en la formación profesional, es el de la
relación que se hace entre lo práctico y lo empírico en contraposición a lo reflexivo y
conceptualizado. Es desde esta tensión entre estas dos manifestaciones del saber,
adquieren desde la pregunta investigativa que se construye aquí, una posibilidad de
dinamizar el proceso formativo de los gestores culturales.
Desde una perspectiva pedagógica, continuando con el tema de la teoría y la
práctica, la profesora Carmen Álvarez Álvarez, del Departamento de Educación de la
Universidad de Cantabria, plantea en su tesis de doctorado “La relación teoría-práctica
en los procesos de enseñanza-aprendizaje” (2012), las dudas que aún existen en la
correspondencia entre lo que se sabe, lo que se dice y lo que se hace en la educación,
la coherencia pedagógica. Señala en esta reflexión que pese a que es un asunto de
enorme relevancia, apenas se han realizado estudios empíricos al respecto para saber
cómo es la relación que establece el profesorado entre la teoría pedagógica y la
práctica de enseñar. ¿Qué es exactamente la relación teoría-práctica? ¿Cómo puede
propiciarse? ¿Qué efectos produce?
Hay algunas respuestas, lo que emerge con claridad es que tanto teoría como
práctica se necesitan una a la otra, la indagación responde a la manera como se
articula esta relación; las prácticas, los ejercicios de clase articulan a procesos de
contexto, la participación en labores pertinentes a la profesión
Así es posible afirmar que es un lugar recurrente, el de reconocer que la aplicación de
los conocimientos aprendidos, es fundamental en la consolidación de un profesional,
sin embargo es un asunto para reflexionar cuando se da este proceso, es decir, en qué
momento y de qué manera se configuran y ofrecen oportunidades de práctica de
quiénes son formados? este es un asunto que genera diferentes preguntas y acciones,
asuntos que me propongo explorar y reflexionar.
Abordando el programa que ofrece la Universidad de Antioquia, algunas de las
preguntas que surgen en la formación de un gestor cultural desde la propuesta
consolidada en el programa ofrecido para las regiones, son las referidas a consolidar el
enfoque y oferta curricular, de manera para que potencie las acciones que el Gestor
cultural puede implementar. Como se puede observar en el informe final de
Autoevaluación del año 2013:
Factor Procesos académicos
Teniendo en cuenta que en los Procesos Académicos se ven
involucrados los contenidos de las asignaturas, las actividades
académicas, sus métodos, procedimientos de transferencia de
conocimientos y aplicación de saberes propios de la Gestión Cultural, se
le asignó a este factor un valor de 35 puntos.
Las preguntas que surgen al abordar el proceso de formación del Gestor Cultural,
son múltiples, relacionadas con los actores vinculados al proceso docente – estudiante,
los saberes puestos en relación, los tiempos y en particular las posibilidades de
aplicación y de generación de conocimiento en torno a lo que se espera que haga
desde el perfil de un Gestor Cultural egresado del pregrado ofrecido en regiones
( Administrar proyectos culturales, elaboración de proyectos, construir ciudadanía a
través de procesos culturales, diseña estrategias de participación ciudadana, evaluar
prácticas culturales, ejecutar proyectos culturales con impacto en comunidad, entre
otras). ¿Cuál es el lugar del docente y el del estudiante en el proceso formativo del
gestor cultural? ¿Cómo circulan, se articulan y configuran los momentos de formación
que constituyen las posibilidades de esta formación? ¿Cuál es el lugar de los
conceptos y la teoría y cuales las posibilidades de su aplicación?
Interrogantes que son abordados de diferentes maneras y hacen parte de la
constitución del campo de saber que se ha ido construyendo, en la perspectiva de la
profesionalización de este y el fortalecimiento de su acción en la sociedad que lo
recibe y a la que se vincula. En particular el camino que se ha ido construyendo en este
trabajo investigativo, se enfoca en las posibilidades que ofrece a la profesionalización
de la gestión cultural, procesos de aprendizaje en tiempo real y expandidos de lo
curricular. De esta manera, la reflexión que se construye aquí, se enfoca a la
necesidad de realizar gestiones pertinentes, para la participación en eventos artísticos
de relacionados con los procesos académicos. La ruta que se busca aclarar en el
recorrido investigativo se enfoca a considerar la vinculación de estudiantes a eventos,
como lugar fundamental de consolidación de la profesionalización de la gestión
cultural, reconociéndola no sólo como una certificación asociada a la ruta de un
currículo, sino claramente a un procesos formativo de construcción de conocimiento y
de intervenciones en los territorios donde se despliegan.
Es en este sentido relevante para una Facultad que es pionera y marca las pautas
de derroteros hacia la formación que permita promover, experiencias significativas,
transformadoras, posibilitando que estas se conviertan en un verdadero reto para los
estudiantes en formación, exigiéndoles el desarrollo y aprendizajes de competencias
novedosas, tanto para la comprensión de los fenómenos estéticos como formativos
involucrados en la creación escénica, como claves fundamentales en clave de la
Gestión Cultural.
Las experiencias de caso abordadas y sistematizadas, se reconocen como caminos
que toman como punto de partida la reflexión sobre la posibilidad de diseñar en los
procesos formativos del gestor cultural, espacios de reconocimiento de otros procesos
artísticos y lenguajes, además de reconocer, posibilidades movilizadoras de
metodologías y estrategias particulares de enseñanza de los quehaceres propios de la
producción escénica y de la Gestión de las Artes Escénicas.
En síntesis, los interrogantes en torno al proceso de formación del gestor cultural,
que surgieron de las experiencias focalizadas para este trabajo y que son retomadas
como rutas de elaboración en este ejercicio investigativo, se orientan a abordar temas
que permitan la reflexión acerca de los contextos en clave de la experiencia en los
estudiantes de la Academia Jamu con la actividad académica llamada Setkani
Encounter en la ciudad de Brno de la Republica Checa, que se realiza año tras año
desde 1991, en el mes de abril durante cinco días y en el cual participan como
organizadores los estudiantes de todas las áreas artísticas que la escuela ofrece y La
experiencia del curso de artes escénicas ofrecido a los estudiantes del pregrado de
Gestión Cultural en regiones de la Facultad de Artes, donde se generan
transformaciones del rol del estudiante en ambos casos, la posición del docente frente
a la organización el evento y la comprensión de que la organización de un evento, es
también un espacio de aprendizaje, donde la relación de concepto y acción se
compaginan para fortalecer la experiencia de formación.
¿Método clásico versus práctica?
Explorar las posibilidades de entablar un balance entre teoría y práctica adquiere un
lugar fundamental para el proceso formativo del gestor cultural, lo que hace necesario
desde esta propuesta considerar un enfoque formativo que aporte a un ejercicio situado
de su acción profesional, es decir, formar un gestor cultural en las regiones adquiere un
reto adicional al de otro lugar de formación, el de constituir escenarios de acción para el
profesional, que apenas emergen asociados a la Ley de Cultura y algunos procesos de
validación de la condición diversa de nuestros contextos que permita intervenir sus
contextos desde acciones culturales concretas:
La propuesta formativa es así profundamente activista y fundamentada en la
construcción del conocimiento como experiencia individual y colectiva,
recogiendo el saber teórico y práctico de la gestión cultural y de la cultura, y por
otro lado, en el aprender a pensar, como posibilidad para intervenir en la
transformación de contextos y entornos locales y regionales. Pero también se
proponen procesos formativos relacionados con la administración cultural y la
reflexividad del quehacer cultural, entendidas éstas como acciones vitales del
desarrollo humano de las localidades y las regiones”. (Solicitud de Renovación
Urabá, Antioquia, mayo 2012 de la página 19)
Es pues un currículo que busca la formación en el pensamiento en torno a la gestión
cultural, vinculando está ultima a los contextos de las regiones. Emerge la
fundamentación con claridad, y sin embargo las posibilidades reales de acción son
limitadas, aspectos como las condiciones de movilidad entre los diferentes poblados
que acceden a las sedes de la Universidad de Antioquia, las pocas experiencias de
articulación entre estas, más allá de procesos cotidianos, mercado, familias y la
carencia de procesos organizados y pensados que favorezcan la presencia de los
gestores culturales como actores de acciones vinculadas a su saber.
De otro lado, en contraste la experiencia de formación en el Setkani, que a través de un
evento internacional, favorece que los estudiantes vivencien, la importancia de la
práctica como eje fundamental para entender la teoría. En este caso los ejercicios
prácticos, son recurrentes y fortalecidos desde la propuesta formativa, esto es que el
programa curricular los incluye como lugar de formación y aporta desde sus recursos la
consolidación de escenarios de acción tanto para el gestor cultural, como para otros
profesionales que son vinculados al desarrollo de eventos-
En JAMU tenemos más práctica que teoría. Tenemos clases de teoría
(historia de teatro mundial y de teatro checo, computadoras, lenguajes (tenemos
que asistir las clases de inglés por 3 años y una lengua otra (español, ruso o
alemán) por lo menos 1 año), clases de gestión, marketing, política de cultura,
economía, derecho... y muchos proyectos. Trabajamos en los proyectos en
nuestro tiempo libre. Tenemos que trabajar en Setkani Encounter (S/E) por los 3
años, en monodramas en el año segundo y los otros proyectos son voluntarios.
Unas clases son ensayadas solo con método clásico (la historia y gestión - el
profesor es muy viejo y no quiere intentar métodos nuevas, pero el año próximo
se jubilará). En otras clases discutimos con profesores y hacemos deberes (por
ejemplo escribir cálculo por proyecto imaginario, pacto...). Para nosotros es muy
importante la práctica. Por supuesto necesitamos también teoría, pero la teoría
es muchas veces algo que tenemos que estudiar para un exámen y después de
varios meses olvidamos todo. (Fragmento de entrevista a Barbora Rosochová.
Estudiante de Gestión en Jamu. Abril de 2015)
Se evidencia, que es posible encontrar espacios o maneras de construcción de
conocimiento desde estrategias que vinculen saberes, a favor de una formación más
enriquecedora donde es posible la relación teoría y práctica de un saber que se
enuncia y un saber que se hace.
De esta manera, podríamos decir que la teoría es distinta de la práctica porque
constituye un reflejo y una reproducción mental, ideal de la verdadera realidad o la
acción como los hechos que permiten la comprobación practica sin proyección
subjetiva que lleva a la realidad misma del concepto, como una prueba mecánica que a
su vez permite una reflexión sobre la misma:
En el proceso de la práctica, el hombre no ve al comienzo más que las apariencias, los
aspectos aislados y las conexiones externas de las cosas. El conocimiento racional
depende del conocimiento sensorial, y éste necesita desarrollarse hasta convertirse en
conocimiento racional: tal es la teoría materialista dialéctica del conocimiento. (-Tung,
1993)
La práctica académica, de algún modo, ha permitido que estos dos conceptos
puedan ser visibilizados utilizando algunas estrategias como el semestre de prácticas
en los pregrados regulares. En el caso de la Gestión Cultural, este espacio se puede
dar en el ejercicio de organización de un evento, de diverso índole, que permite la
aplicación allí de estos conceptos.
¿Que entendemos por evento?
Es hoy frecuente que vinculemos a nuestra vida colectiva y a destacar momentos de
la existencia, lo que asociamos a un evento, se comprende esto como el punto de
encuentro de culturas desde donde se puede compartir el gusto en común por un
hecho cultural, por ejemplo. El evento se puede considerar como un espacio donde se
puede observar el comportamiento social al ser lugares donde simbólicamente se
construyen y modelan identidades; donde objetos, acciones y discursos adquieren un
significado que dota de sentido el entorno sociocultural en el que ocurren.
Desde la mirada de la Gestión Cultural, podríamos definir el evento como: Un
acontecimiento donde se difunde la cultura, creencias, valores, tradiciones de
alguna sociedad, actividades que estimulan la creación, difusión y reproducción
de fenómenos como actos que permiten un conocimiento y fortalecimiento de la
identidad cultural de los individuos y comunidades. En el país existen cientos de
eventos que a través de presentaciones, competencias y encuentros de los
creadores y su público promueven la difusión de la cultura nacional.
Estas actividades son apoyadas por el gobierno nacional, y por las
administraciones departamentales y municipales, así como también por
entidades educativas y entidades privadas sin ánimo de lucro, que han logrado
consolidar espacios de intercambio y promoción de las manifestaciones
culturales para un público regional y nacional. (Actividad y Cultura, Bogota D.C,
2013)
De esta manera, podríamos decir que para el gestor cultural, estas propuestas son
claves, en tanto aportan al desarrollo la capacidad de pensarse en la posibilidad de
afrontar escenarios de acción del campo cultural, llamase feria, encuentro o festival,
pues es allí donde los quehaceres de la gestión Cultural (animación, creación,
divulgación, presentación) pueden hacerse visibles estas competencias del Gestor en
formación. De la misma manera, la gerencia cultural que propone Víctor Guedez en su
libro Gerencia, cultura y educación (Caracas. 1995), apoyan desde la planificación, la
coordinación, el seguimiento y la dirección como complementos para llevar a buen fin
un evento cultural.
Desde esta afirmación, se llama la atención aquí a uno de los retos del proceso de
formación de gestores culturales en el programa ofrecido por la Facultad de Artes de la
Universidad de Antioquia, la generación e identificación de escenarios de acción para
los egresados quienes son los llamados a dinamizar procesos instalados como lo
expresa en el perfil del egresado plasmado en su programa:
El pregrado en Gestión Cultural propende por un egresado con capacidad
para la investigación, la acción para la transformación y la construcción de
sentido estético. A partir de estos tres ejes fundamentales se aspira a que el
egresado tenga reconocimiento en el medio cultural, la administración cultural, y
la construcción de procesos sociales con un nivel ético y estético, además con
un alto nivel de reflexión sobre la gestión cultural como practica interdisciplinaria.
El reto, responde a las condiciones actuales de las dinámicas regionales, donde el
desarrollo del sector cultural institucionalizado es incipiente, particularmente asociado a
Secretarias de Cultura, Casas de la Cultura y donde las expresiones tales como danza,
teatro, cine, impulsadores de lectura en bibliotecas son espacios con diversas
condiciones de su manifestación. La expansión reciente de ciudadelas, y Parques
Bibliotecas, pone en juego otra concepción de acción que podrían configurarse como
un escenario de acción para el Gestor Cultural.
De otro lado, la concepción del curso de animación sociocultural que hace parte de
la propuesta formativa del gestor cultural del programa de la Universidad de Antioquia,
se enfoca a la dinamización, reconocimiento y potencializacion de las diversas
expresiones culturales de las regiones, es en este sentido una ruta de acción que no
está definida sólo para la institucionalidad y se enfoca también a la generación de
procesos, al diseño de experiencias y al impulso de lecturas contextualizadas de los
posibles acciones a realizar.
Lo anterior implican desde la fundamentación que aquí se impulsa, una
responsabilidad de la propuesta formativa en el estímulo de estas posibilidades, en
tanto la ruta no es solo la de formar profesionales para ofrecer a una sociedad, sino la
necesidad de acompañarlos en la creación de acciones en las regiones, es en este
sentido una ejercicio que implica a la Universidad y su propuesta formativa como un
gestor de gestores. Entre las experiencias que ha venido implementando el programa
hay algunas que se enfocan a dinamizar la aplicación de los saberes aprendidos, en
escenarios tales como Organización de algunos eventos académicos:
Espacio de Cátedra Abierta2: En este evento, los estudiantes de Gestión Cultural
han podido reunir y compartir con gestores de otras regiones, lo que ha permitido
involucrarse con algunos procesos de organización de eventos y procesos
administrativos para llevarlo a cabo en su respectiva sede.
También durante los primeros semestres, deben organizar un evento dentro de
algunos cursos de eje contextual como Arte y Cultura en Colombia, para confirmar
saberes aprendidos en la teoría.
Así mismo, se han realizado seis experiencias de organización de final de curso de
Artes Escénicas para Gestión, cuyo objetivo se ha consolidado buscando acercar al
2 La Universidad de Antioquia, con el propósito de establecer en las regiones un escenario académico para la
reflexión y el análisis de temáticas sociales, culturales, políticas, ambientales y económicas que inciden en los procesos de desarrollo de sus localidades, ha creado el programa Cátedra Abierta Regional Universidad de Antioquia.http://reunidosmed.webnode.es/products/catedra-abierta-regional-universidad-de Antioquia/
estudiante de gestión cultural, a la compleja realización de propuestas de artes
escénicas, no desde afuera sino con un acercamiento a al lugar del otro –actor,
productor – es decir, los lugares de desarrollo de una obra teatral: escenografía, luces,
espacios escénicos, maquillaje, vestuario, entre otros.
Lo implementado se ha dirigido a acercar no solo a la escena como actores,
pasando por la creación escénica, sino por los lenguajes de la producción teatral, con
la tesis de que de esta manera podrán entender las posibilidades que como
profesionales de la gestión se verán abocados más adelante como profesionales, en un
ejercicio real. Esta ruta en particular es la que se busca fortalecer y expandir como
análisis de caso de la reflexión que se ha considerado en este trabajo:
Se llegó a un ejercicio de reflexión que identifica que esta experiencia requiere ir
más allá de un acercamiento a la estética del teatro, a su sensibilidad, es decir, una
concepción de corto plazo, así el proceso que se constituye en la reflexión se enfoca a
lo personal. Sin embargo, es en este curso donde se permite utilizar la estética del
teatro, hay una experiencia de este tipo que lo asocia fundamentalmente a una acción
de corto plazo, hay una propuesta en este trabajo, que va más allá pues se intenta
visibilizar allí la posibilidad de hablar del territorio, de llegar a la escena no desde el
texto impuesto por un docente sino desde la creación colectiva que implica entender el
contexto en el cual se va desenvolver el futuro Gestor.
Por eso es importante que se entienda que la propuesta debe trasgredir los
lenguajes de la escena para crear reflexión como gestores, no como actores pues se
permite la experiencia que permite construir con los estudiantes de gestión cultural eso
de que lo que ponen en escena, actúan, se genera desde una mediación que permite
poner en juego el relato de teatro, de una obra con sus propias experiencias.
En la teoría de los rituales y fiestas emerge una posibilidad de considerar una
entrada diferente, el proceso de articulación de rito – teatro, podría ser una entrada
muy potente para pensar lo que implica en la construcción de procesos socio-
culturales, los actos colectivos que recrean concepciones de la vida. La realización de
eventos surge hoy como una de las actividades que identifican la labor de un Gestor
Cultural, en nuestro contexto y en particular en la ciudad de Medellín son muchos los
procesos de esta índole que han ido constituyendo la oferta de la ciudad, pues
podemos ver como la ciudad poco a poco se ido equiparando en relación a otras
ciudades vanguardista como Bogotá, transformase en un espacio con capacidad de
afrontar eventos de alta envergadura y calidad como conciertos de artistas de talla
internacional ( Madona con dos conciertos, Beyoncé), la inauguración y clausura de los
juegos olímpicos Juveniles, conferencias, Foros y congresos mundiales, entre otros.
De esta manera, el gestor puede hallarse ante posibles salidas profesionales a las
cuales se ve abocado por el medio comercial:
Genéricas: Gestor o técnico cultural en administraciones públicas, Gestor cultural en
empresas privadas dedicadas al mundo de la cultura, profesional de gestión de
patrocinio y mecenazgo.
Arte: Gestor de exposiciones en galerías de arte, museos, salas, casas de cultura,
fundaciones, mediador entre coleccionistas de arte y galerías de arte, museos, salas,
casas de cultura, fundaciones.
Sociedad, medio ambiente y cooperación al desarrollo: Mediador intercultural,
trabajador en organizaciones de cooperación al desarrollo y ONG, animador
sociocultural en centros públicos o privados.
Música y artes escénicas: productor de espectáculos de música y artes escénicas,
responsable de comunicación de organizaciones que operan en el ámbito de las artes
escénicas y la música.
Marketing y relaciones públicas: Organizador de eventos corporativos y lúdicos,
responsable de eventos en empresas privadas.
Formación: La educación de otros Gestores Culturales
Sin embargo cabe preguntarse, ¿cuál la ruta y la posibilidad de construir una
alternativa propia desde el perfil del gestor cultural de la Facultad de Artes de la
Universidad de Antioquia, que define su campo de acción en las regiones? Cuál sería
la manera más pertinente de articular este proceso a las regiones? Como construir esto
como un campo de acción que moviliza la formación de sujetos, pero también la
dinamización de espacios de intercambio y construcción de cultura que permita nuevas
miradas al tema cultural o de recuperación y resignificación cultural. De esta manera,
podríamos destacar algunas preguntas que han ido surgiendo al detallar la vivencia
personal con el Setkani Encounter en varias ocasiones y que han sido la motivación de
este trabajo en relación de encontrar posibilidades para un espacio de formación como
el que hace más de 10 años viene construyendo en la Facultad de Artes de la
Universidad de Antioquia con su programa de Gestión Cultural ofertado en las
regiones, pensándose como un área necesaria en territorios con problemáticas
complejas relacionadas con la cultura y el ámbito social.
Algunas de estas cuestiones son:
¿Cuál es el lugar del docente y el del estudiante en el proceso formativo del gestor
cultural del programa de regiones ofertado por la Facultad de Artes de la Universidad
de Antioquia, teniendo en cuenta que este es un programa en el cual la presencia del
docente no es continua y que debido a esto, muchos procesos no tienen continuidad?
¿Cómo circulan, se articulan y configuran los momentos de formación que
constituyen las posibilidades de esta formación?
¿Cuál es el lugar de los conceptos y la teoría y cuales las posibilidades de su
aplicación?
¿Cómo se vinculan experiencias desde los lenguajes de las Artes Escénicas, en
especial desde el lenguaje del teatro, a la vida cultural de los lugares donde el Gestor
Cultural desarrolla su acción?
Las situaciones vividas y las reflexiones emergentes
La pregunta se articula a situaciones que constituyeron experiencias de reflexión y
que permitieron la emergencia de preguntas respecto a la formación del Gestor Cultural
en nuestro medio que se han ido constituyendo en las preguntas orientadores y de
problematización en este ejercicio investigativo. Entre las más significativas reconoceré
dos, que de manera singular se articulan a la pregunta orientadora de esta
investigación: mi participación, como docente, representando al Departamento de
Artes Escénicas de la Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia, en un evento
académico internacional que reunía Escuelas de teatro, organizado por estudiantes de
Gestión Cultural y Management, el Setkani, en la República Checa y la orientación del
curso artes escénicas para estudiantes del pregrado de gestión cultural ofrecido en las
sedes regionales de la Universidad de Antioquia.
Respecto a ambas experiencias, es importante señalar los lugares disimiles de
ambas, por trayectoria y por ubicación territorial y sin embargo hay una profunda
cercanía respecto a los interrogantes que emergen de mi encuentro con ellas y que
retomo como una posibilidad reflexiva y de aprendizajes en torno a la formación de los
gestores culturales, en un acercamiento particular a las artes escénicas.
Los campos de indagación que surgieron de estas experiencias se constituyen en
rutas reflexivas para la construcción de caminos propios en torno a la gestión cultural y
la formación de gestores culturales.
Los equipos en la Gestión Cultural y la vivencia de la formación: ¿Cuál es el
lugar del estudiante en su proceso formativo en clave de gestión cultural?
¿Cómo se articulan los saberes y se hace trabajo de equipo?
Estas preguntas adquieren interés al considerarlo como una posibilidad para
retomar, es posible que en la formación en Gestión Cultural entender la formación de
nuestros estudiantes desde espacios que permitan el acompañamiento como una
estrategia permanente que busca una mejor preparación?, como articular esto a los
territorios con sus particularidades específicas? Es el caso de Turbo donde se pueden
observar los encuentros y desencuentros entre la cultura tradicional como el
Bullerengue y la cultura popular de los tablados y el vallenato, por ejemplo como el
Festival Nacional del Bullerengue en Necoclí y Puerto Escondido3 que se celebran
3 En Festival y Reinado Nacional del Bullerengue de Puerto Escondido se dan cita a finales del mes de junio los
grupos de Bullerengue de Urabá, Córdoba, Bolívar, Sucre y Bogotá, que asisten con sus candidatas al reinado nacional del Bullerengue donde tienen que mostrar todas sus habilidades en cada uno de los aires que se interpretan durante los tres días del festival: Bullerengue sentao, chalupa y fandango, para alcanzar el cetro y la corona del reinado nacional del baile de Bullerengue. De la misma manera, con la interpretación de estos mismos aires, concursa cada uno de los grupos participantes, de los cuales se escogerá el que mejor lo haga, también es premiada la mejor bailadora del grupo, el mejor tamborero y el mejor bailador. De igual manera concursarán las mejores canciones inéditas del Bullerengue. El Festival se fundó en 1988 y se tomó como fecha para su realización
desde hace muchos años con el pretexto de mantener viva la tradición pero que
actualmente se han convertido en espacios para fiesta y el jolgorio donde ya propios y
extraños convergen no para admirar un ritual de otras épocas sino para esperar en la
tarima el cantante famoso de vallenato o champeta, ritmos que atraen a la población
más joven de la región.
¿Cómo articular dinámicas académicas y curriculares a eventos de
gestión cultural?
En nuestra experiencia, el proceso formativo regular muchas veces se
interrumpe, cuando se abre el escenario de acción, por el contrario en esta
experiencia, las dinámicas académicas, formativas se mantienen en el proceso
del evento, de manera que se constituye en un escenario de formación en la
acción.
Cómo incentivar que las situaciones emergentes que se vinculan al
proceso formativo?
La porosidad del proceso formativo, evento y situaciones emergentes permite el
constituir procesos flexibilidad que permite la vinculación de situaciones renovadas y
situadas a la formación del gestor cultural:
¿Cómo incrementar los encuentros entre campos disciplinares diferentes
como experiencia y no como mandato?
Una de los exigencias contemporáneas en toda profesión, pero que además es
particularmente fundamental en el ejercicio de un gestor cultural es el dialogo
interdisciplinar. Esta pregunta indica una referencia posible para la formación en
los días finales del mes de junio para que coincidiera con las Fiestas de San Juan. Con su fundación se pretendían alcanzar tres objetivos. El primero, rescatar y difundir su cultura ancestral afrodescendiente, la más rica tradición cultural como lo es el Bullerengue, canto negro de voces, tambores y palmadas que venía en decadencia y olvido por las nuevas generaciones, debido a que sus exponentes tradicionales no encontraban apoyo para seguir su añeja tradición. El segundo, buscar la integración y presencia en un mismo sitio de todos los bullerengueros de la costa caribeña colombiana, convencidos de que, en el marco geográfico de la Costa Caribe, Puerto Escondido, es un sitio ideal como punto de encuentro debido a su posición geográfica equidistante para los bullerengueros del sur como los de Urabá Antioqueño y para los del norte como los de Córdoba, Bolívar y Sucre. El tercer objetivo estratégico era la de buscar la máxima difusión de esta tradición folclórica ante propios y extraños.( http://www.bibliotecanacional.gov.co/CDM/festivales/festivales/view/71
Gestión Cultural, una manera de entender la formación de nuestros estudiantes, desde
espacios que permitan el acompañamiento como una estrategia permanente que busca
una mejor preparación, en unos territorios con unas particulares muy específicas, en
encuentros con otros saberes
Cómo dinamizar procesos organizativos, de circulación de información, más allá
de las jerarquías y como tejido articulador de experiencias de gestión cultural?
Comprender la importancia de la comunicación en la organización del encuentro, de
cuál es su sentido , así se identifica que la información circula para tomar decisiones,
no para determinar quién dirige, de manera cómo cada actor del proceso sostiene la
comunicación en pos de un mismo objetivo, esta manera de operar surge como
referencia clave para considerar los procesos de determinación de responsabilidades y
la toma de decisiones en un proceso de este tipo.
¿Cómo ir en la ruta de la comprensión de la experiencia de los eventos de
gestión cultural como procesos y más allá del activismo?
Como ir a los largos plazos a ejercicios con continuidad de manera que cada paso,
cada acción por más mínima que sea, es valorada como un aporte valioso a la
construcción del proceso, que se reconoce como un valor colectivo y como un lugar de
la propia formación.
La indagación en torno a la constitución de un escenario de gestión cultural, como
evento que fortalezca el proceso formativo del gestor cultural, se enfoca aquí a
visibilizar la importancia de un proceso de empoderamiento del estudiante en
formación, que al tomar las riendas de un acontecimiento, ya sea desde la
organización o desde el rol que sus potencialidades le permitan ejecutar, se constituye
en estrategia formativa, sensibilizadora e introductora al universo de la gestión cultural
Por esto estudiar experiencias que aportan a este tipo de ejercicios formativos
permitirá alternativas en un programa apenas naciente en nuestro país y aún más en
nuestro entorno local, Esto es posible en la medida que sea posible que el estudiante
adquiere un lugar central: el trabajo colectivo, el aporte de todos, con liderazgos sin
jerarquías, propiciando el encuentro y la relación de otras áreas que aportan fortalezas
diferentes, el aporte de una comunicación asertiva, aprovechar los acontecimientos
inusuales dentro del evento para aprender no para discutir, así el rol del docente
cambia en la medida que este se transforma en un orientador y no en un “recipiente de
sabiduría”.
Entonces, el estudiante de Gestión ahí puede desbordarse en creatividad, en
liderazgo, en propuestas, ya que su participación deja de ser pasiva para convertirse
en el eje de una actividad que propende en una continuidad en el tiempo y en la
experiencia al estar inmerso en una responsabilidad que implica el trabajo en equipo, el
compromiso y el encuentro con el otro. Así, el evento o acción de gestión cultural deja
de ser un espacio efímero para convertirse en una experiencia que moviliza sentidos,
que puede transformar territorios e impactar en muchos sentidos: en lo personal y en lo
colectivo.
Es esta la búsqueda que este trabajo emprender y donde los casos de estudio se
convierten en referentes de aprendizaje.
OBJETIVOS
Objetivo General
Analizar la importancia de la experiencia en la formación del gestor cultural a partir
del análisis de dos experiencias de caso: El Setkani Encounter y el curso de gestión
cultural para las Artes Escénicas del programa de Gestión Cultural de la Facultad de
Artes de la Universidad de Antioquia.
Objetivos Específicos
Sistematizar las experiencias de participación en el Setkani Encounter de la región
de Brno –República Checa y la experiencia como docente con el curso de Artes
Escénicas para Gestión Cultural del programa de pregrado de Gestión Cultural ofrecido
en las sedes regionales de la Universidad de Antioquia.
Identificar los aprendizajes y construcciones en clave de la formación de un gestor
cultural de las dos experiencias significativas reflexionadas el Setkani Encounter y el
curso de Artes Escénicas para el pregrado de gestión cultural en regiones.
Derivar recomendaciones para la formación del Gestor Cultural del pregrado de la
Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia, a partir de la implementación de una
propuesta de evento académico interregional de Artes Escénicas y afines.
CAPÍTULO II
La concepción de Gestión Cultural como referente de base de la ruta de
formación del Gestor Cultural. La relación entre proceso de formación del Gestor
Cultural y la concepción de Gestión Cultural
El proceso de formación del gestor cultural está directamente relacionado con la idea
de Gestión Cultural que se tiene o que orienta la acción formativa
Que implica la formación del Gestor Cultural
Para responder a la interrogante detonadora, es importante comprender que el
campo de conocimiento de la Gestión Cultural, es emergente, un lugar de cruce
múltiple de conceptos y experiencias, venidas de diversas disciplinas y acciones que se
integran en un escenario múltiple de lo que se vive hoy como gestión cultural.
El proceso de profesionalización de la gestión cultural exigencias de la
construcción de un campo de saber emergente La institucionalización de la Gestión
Cultural se da hacia los años 80`s en el proceso de ampliación de la cultura como lugar
de potenciación de la vida social moderna y la inclusión de la cultura en el orden del
mercado, es un proceso por el que la cultura en la perspectiva de la cultural en sentido
amplio adquiere una valoración en la construcción de la nación y también en su
visibilización como valor económico, dicho proceso va acompañado, como manifiesta
el Maestro Carlos Yáñez Canal en su libro Emergencias de la Gestión Cultural en
América Latina:
…del desmantelamiento del Estado de Bienestar por medio de políticas
neoliberales como la privatización y desregulación. También está asociado con
la creación de Ministerios de Cultura, consejos, secretarías, institutos
descentralizados, etc., en muchos países de la región, los cuales apelan a las
políticas (Canelas Rubim y Bayardo (Orgs.), 2009) del multiculturalismo en el
marco constitucional, en un nuevo modelo de democracia centrado en la
participación, la descentralización, autonomía y en la diversidad cultural, y
proponen y diseñan leyes y planes de cultura orientados a consolidar los
procesos de administración de la cultura, de intervención estatal en los procesos
culturales y la economía de la cultura (incluyendo la financiación de la cultura),
en las que prima una política de la despolitización.
De esta manera, menciona Yáñez Cañal, los procesos culturales deben debatirse
entre los designios del Estado o el mercadeo de la cultura en aras de asirse a las
exigencias de la ya establecida globalización. Este proceso investigativo ha buscado
entender lo que es la Gestión Cultural (que aún no termina de definirse) desde nuestro
contexto local y latinoamericano, y en diálogo con esta comprensión adentrarse en lo
que refiere a una posibilidad de responder a la pregunta sobre el lugar de la práctica y
el saber experiencial en la formación del Gestor Cultural, esto teniendo en cuenta que
la gestión cultural viene en un proceso de un conocimiento propio debido a que todo lo
que habla, escribe y trabaja proviene de otras áreas.
En la actualidad, es posible responder interrogantes lo que hace importante abordar
estos conceptos desde su evolución, no desde su significado, y desde las necesidades
que pide el entorno actual, la modernidad, con una serie de posibilidades que se
brindan ahora como es el tema de la formación. Es decir, definir la gestión cultural no
buscando un significado etimológico sino un significado desde su propio desarrollo, que
inicia como animadores y dinamizadores culturales, hasta ahora que se ha convertido
en un área que permite la profesionalización y la formación desde diferentes ópticas.
La Gestión Cultural como opción de profesionalización.
Dentro del abanico de posibilidades que se presentan actualmente a los aspirantes a
una carrera universitaria, la Gestión Cultural aparece como una profesión que permite
pensar en los propios contextos donde se instala En el caso de la Universidad de
Antioquia, esta emerge como una posibilidad de profesionalización en el lugar de las
regiones de Antioquia donde la Facultad de Artes hace presencia en la cual esta opción
permite ver nuevas perspectivas para un campo que requiere ser atendido como
pueden ser las regiones que se encuentran alejadas de la ciudad o de centrales de
formación a las cuales se desea acceder.
Esto implica pensar esta profesión ligada al contexto donde se instala, es decir, el
profesional de la gestión cultural que emerge como propuesta construye su formación y
el escenario de su labor a la par. El sentido de este profesional es el de expandir su
campo de actuación fortaleciendo su capacidad de entender los procesos culturales y
las actividades vitales involucradas con el desarrollo de su comunidad de su región:
“…con competencias para apreciar la diversidad, valorar críticamente su
desarrollo, propiciando procesos de animación, promoción, creación,
divulgación, preservación e investigación de la cultura.4
La Gestión Cultural una opción en el contexto local de Antioquia: De esta
manera, la apuesta de la Facultad de Artes por avocar en una formación desde el Arte
y la Cultura que fortalezca la construcción de una nueva sociedad, pues, es allí donde
el Gestor Cultural con sus acciones se podrá acercar a situaciones qué buscan
intervenir en territorios con características muy definidas que podrían estar
relacionadas con poblaciones marginadas, por fuera de las políticas de desarrollo como
la pobreza, la inequidad y la discriminación (que son situaciones muy fuertes en la
vida cultural del Departamento de Antioquia) donde las manifestaciones de
intolerancia y la negación del otro y su construcción como sujeto con criterios y
reflexivo, se hace cada vez más evidente por las mismas dinámicas del entorno social y
demográfico
Esto, de alguna manera, permite revisar el territorio con otras miradas para luego
ser impactadas desde las estrategias antes mencionadas, el Arte y la Cultura, pues,
como aporta el profesor German Benjumea, docente de la Facultad de Artes de la
Universidad de Antioquia:
“Las transformaciones de las tres últimas décadas (en los campos de la participación
ciudadana, lo público y las instituciones no gubernamentales), han llevado a sectores
antes marginados de la discusión económica y política el desarrollo a ser protagonistas
esenciales para la construcción de una nueva sociedad.” (Benjumea, 2011)Exigencias
del contexto de las regiones
4http://www.udea.edu.co/wps/portal/udea/web/inicio/institucional/unidadesacademicas/facultades/artes/pr
ogramas-academicos/programas-pregrado
Una de las discusiones claves a hacer visibles es el sentido de la construcción de un
proceso formativo, en este caso el de la Gestión Cultural en las regiones, uno de los
movilizadores de este proceso se articula a la regionalización de la Universidad de
Antioquia y desde esta perspectiva, como la profesionalización como proyecto
universitario señala, no solo “otorgar títulos”, sino la responsabilidad de formar para
fortalecer los territorios.
Esto implica tomar decisiones sobre cuál es proceso o la profesión que puede
aportar a esto, en el caso de la propuesta de gestión cultural de regiones que oferta la
Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia, se convierte en un lugar que justifica
su creación e instalación en las sedes regionales del Alma Mater.
Es por ello que esta formación que se propone, se basa en asuntos como dinamizar
procesos que requieren ser visibilizados, temas relacionados con la recuperación de la
vida tradicional, es decir, con aquello que se conserva de los saberes culturales. Como
un ejemplo de ello, podemos mencionar ritmos tradicionales como el Bullerengue, que
se basa en la improvisación y creación de las mujeres que la interpretan de manera
magistral:
Esta danza es efectuada sólo por mujeres. Es quizás uno de los bailes en los
cuales se destaca con mayor fuerza la ascendencia africana. Ésta se pone en
evidencia en los tambores, el palmoteo y el canto coral que acompaña su
ejecución. Al parecer, surgió como una reacción cultural dentro del contexto
ceremonial de las comunidades cimarronas, probablemente en el Palenque de
San Basilio. En esencia es una danza ritual que se realiza de manera especial
cuando las jóvenes llegan a la pubertad. El Bullerengue simboliza la fecundidad
femenina, aunque no se descarta que también en tiempos coloniales haya tenido
connotaciones fúnebres.5
La historia en los pueblos ”Bullerengueros” por tradición, se ven afectados por las
condiciones sociales, laborales, de lucha de tierras, el narcotráfico, el poco apoyo de
las administraciones locales, conflicto armado, la penetración de música foránea por
5 http://www.colombiaaprende.edu.co/html/etnias/1604/article-83214.html
encima de la música tradicional, entre factores, han hecho que la práctica del
Bullerengue sea cada vez menor, poniendo en peligro su existencia.
A esto se suma la utilización de esta manifestación artística como espectáculo y lo
que hace que no se expanda su capacidad de expresión de la vida cultural de la zona.
Participar en las Políticas Públicas de su región, dinamizar proyectos culturales,
organizar eventos artísticos, entre otros, hacen parte de las propuestas a las cuales la
formación desde las regiones se puede tener como lineamientos para el nuevo Gestor
Cultural que se desea formar como profesional. Sin embargo, estas acciones deben
permitir asuntos particulares, que vayan más allá de los quehaceres de la Gestión
(Administrar, gestionar, organizar) pues existen tópicos que podrían ser aún más
importantes como la recuperación de la Memoria de un territorio que necesita
reflexionarse cobre su propia identidad, es decir, preguntarse por acciones pertinentes
a dejar un legado a las nuevas generaciones, un legado que hable de las dinámicas de
convivencia, de cómo se llegó allí, que pasaba con las relaciones en la vida cotidiana?
¿Como aportan los ancianos a recuperar esta memoria de un pueblo a través de sus
narraciones, por ejemplo?
Este ejercicio, el de recoger las historias de los abuelos, de aquellos que tienen la
experiencia, de un proceso de transformación de un entorno, permitirá la reflexión
acerca de cómo estas narraciones sobre la historia de su pueblo y la pregunta
acerca del lugar de la memoria.
La frase “un pueblo sin memoria está condenado al olvido”, un aforismo que se
relaciona con la memoria colectiva de un territorio al cual le hace falta conocimiento, el
cual es fundamental para trasmitir cultura. De esta manera, se hace importante que el
Gestor Cultural aporte a la revaloración de la memoria como una herramienta que le
permitirá conservar en el tiempo y para el futuro expresiones de identidad colectiva de
duración cíclica o efímera.
Para llegar a esto, se puede apoyar en acciones como la oralidad de los ancianos,
de aquellos que han vivido, en todas sus formas, la evolución y la transformación de un
determinado lugar o entorno, de manera que se pueda construir una memoria colectiva:
…Al no poder hacerlo no tendríamos identidad y no podríamos
reconocernos como parte de un todo y, finalmente, no podríamos
relacionarnos con el mundo que nos rodea. La memoria colectiva es tan
decisiva para la vida social como lo es la memoria individual para cada
uno de nosotros. (Repetto, abril-junio 2006)
Lo anterior, servirá para para entender como se ha expandido el territorio, de donde
se viene como eran los hábitos antes y los factores que podría ayudar a construir una
ruta de ciudadanía, no solo en las manifestaciones de hoy sino lo que se ha
construyendo desde los tiempos de inicio del poblamiento, cuales son las dinámicas del
proceso inicial de llegada, que se ha ido transformando y a que es lo se enfrenta a la
modernidad y entender los hábitos que tienen y a que responden.
Exigencias de transformación del campo laboral con las implicaciones
relacionadas con lo que se busca en la formación de un profesional de la
Gestión Cultural
De esta manera, es importante reflexionar acerca de cómo se prepara el campo de
la Cultura para atender las solicitudes de aquellos interesados en capacitarse en este
campo pues, de esta manera se podrá atender en este campo de la formación, las
exigencias de un entorno que exige nuevas competencias desde la mirada de una
época en constante desarrollo y transformación en el campo laboral, en nuevos
mercados y posibilidades para los profesionales de la Gestión Cultural en la que
pueden ver en el intercambio cultural herramientas para la gestión de nuevos procesos
que propendan en beneficio de su comunidad.
Es aquí donde entran a jugar un papel importante los espacios académicos como las
instituciones y universidades pues son ellos los encargados de formar estos nuevos
profesionales para que sean aptos, es decir, que tengan muy claro su rol, estar muy
convencidos para poder generar nuevas reflexiones encaminadas a la planeación, a
dinamizar procesos desde conceptos como la creatividad, la imaginación, la audacia,
la operatividad, la indagación y la búsqueda, virtudes muy apetecidas en la figura de un
gestor, para ello, es necesario una preparación desde un punto de vista que en un
campo especifico de una manera crítica para afrontar los cambios obligados que trae
consigo la globalización, por ejemplo.) Ser aptos con relación a la región, a local, y a lo
global.
Podríamos plantear, entonces que se trata de una adaptación a la globalización o
una re- lectura de los acontecimientos actuales del “aquí el ahora” y los efectos que
produce en la vida cultural de un territorio o región. .
Hay que adaptarse a los cambios que da la globalización pues esta nos trae nuevos
retos que implican modificar las manera de hacer las cosas con otras estrategias, las
dinámicas empiezan a cambiar debido a la llegada de las nuevas tecnologías que
afectan la manera de enseñar o de transmitir conocimientos modificando la educación,
por ejemplo. Un docente, entonces debe entender cómo aplicar estas herramientas al
aula de clase.
De esta manera, esto hace que surja exigencias de nuevas maneras de
comunicación en la relación docente –estudiante, estudiante-estudiante, estudiante-
familia. En fin, los procesos como los de la comunicación, deben ser también revisados
para una mayor comprensión del otro ya que su función es reconocer como y donde va
a intervenir, además de preguntarse por la eficacia. Es decir, las relaciones cambian
pues los sujetos están afectados por otras instancias que trae consigo la Globalización.
Por ellos, se hace necesario los espacios de encuentro relacionados con lo
interdisciplinario, como propuesta para que se invite al encuentro con el otro desde la
diferencia, espacios o lugares simbólicos que permitan construir adscripciones
identitarias y también construcción de territorio pues es allí donde se dan los procesos
culturales.
Lo interdisciplinario: Un requerimiento del mundo de hoy y su función social.
Las exigencias del mundo contemporáneo ya no se determinan desde un saber
específico para enfrentar las necesidades actuales de los seres humanos que viven
vertiginosamente el día a día, lo que hace necesario otras miradas que permitan
reconocer lo complejo de la realidad y en este sentido a los territorios de región donde
la idea de lo cultural, se articula a una idea que va más allá de los saberes de las bellas
artes –música, pintura , teatro – y que a su articulación a la vida social de estos
lugares, tejiendo estas manifestaciones a la construcción colectiva, al tejido social de
estos territorios, así incluso desde una idea de la formación de alta cultura, los saberes
de las bellas artes, el proceso en las regiones, no tiene viabilidad si no se teje a una
proceso de construcción colectiva que permita la creación de espacios para su
recepción.
Es importante esta mirada desde la perspectiva que el gestor cultural no va solo al
acto de la manifestación artística, sino entendiendo como esta articula al entorno
donde se desarrolla, por contenido, por actores vinculados y por tiempos en los que se
realiza.
Con ello, el interés por lo interdisciplinario puede ser una gran herramienta que
sabiéndola utilizar desde la Gestión Cultural, permitirá reconocer la función social de
todo aquellos que allí habita como las artes, la cultura y el territorio6.
Para Liliana López Borbón, doctora en Estudios Latinoamericanos, la
interdisciplinariedad en la Gestión Cultural permite crear sistemas especializados para
generar procesos sociales:
“Si seguimos pensando que la cultura es una de las Bellas Artes, o que
la comunicación es solo difusión, no hay transformación”.
De esta manera, podemos entender la interdisciplinariedad como la hibridación y la
creación colectiva de todas aquellas disciplinas que se aproximan a la comunidad y al
espacio desde una esfera relacional y sistémica.
Gestión Cultural y manifestaciones artísticas: Su importancia en la
construcción de territorios en paz e inclusivos
Una de los posibles caminos de la gestión cultural en las regiones, es la de retomar,
interpretar y articular las manifestaciones artísticas a los procesos de dinamización de
6 Estos tres elementos pueden verse como instrumentos para impulsar el reconocimiento, valoración y
reinterpretación de lo propio, a través de escenarios que promuevan la participación activa de los sujetos, recogiendo las estéticas locales, la historia; motivando la imaginación mediante el uso de símbolos, promoviendo la observación del entorno, favoreciendo la formulación de preguntas y propiciando circuitos culturales a manera de red. (
la vida de las regiones, más allá de los espacios definidos institucionalmente, tales
como las bibliotecas, los parques bibliotecas y las casas de la cultura.
Aquí es importante resaltar como las Artes, en todas sus áreas, han aportado al
desarrollo de las comunidades, con un aporte importante que tiene que ver con la paz y
el progreso de una nación.
En algunos de nuestros contextos de violencia y pobreza los grupos artísticos,
musicales, de teatro y danza han aportado a la articulación de procesos sociales.
Casos como el del Festival Titereteatro Internacional Región de Urabá, en Apartadó,
que en su desarrollo logra articular y vincular los jóvenes y generación de una dinámica
de consumo cultural asociado a las manifestaciones artísticas.
Este es un festival organizado por la Corporación Camaleón de Urabá y
muchos aliados del arte, que se desarrolla en la subregión del Urabá Antioqueño
en Colombia, específicamente en el municipio de Apartadó. El evento tiene la
intención de convocar a grupos de carácter internacional, nacional,
departamental y subregional en torno a un encuentro de intercambio de
experiencias artísticas, diversión, alianzas estratégicas en torno al teatro y
exposición de las diversas estéticas.7
Gestión Cultural y memoria
Uno de los aspectos más importantes en el contexto de nuestros territorios es la
construcción de una memoria que reconozca las múltiples memorias que nos
constituyen y es este uno de los lugares desde donde el gestor cultural debe articular
propuestas que permitan dinamizar procesos de construcción y recuperación de
7 El encuentro propicia para la comunidad de Apartadó una experiencia estética y un banquete teatral en el que
se incluye el arte de los títeres. Durante el evento se realizan además charlas y conversatorios de interés para nuestro oficio teatral y las presentaciones se realizan en diferentes espacios como auditorios y otros concertados en Apartadó ó la subregión que son intervenidos por tendencias como el teatro callejero que se toman las principales plazoletas y espacios públicos, llegando así a la mayor cantidad de gente posible.
El festival abarca el interés de toda la población, durante el desarrollo del mismo, lugares como la Biblioteca
Federico García Lorca, Instituciones educativas y medios radiales, permiten propiciar un impacto de tipo cultural pero además pedagógico, con la historia del teatro en Antioquia, escritores para teatro en Apartadó, talleres formativos en técnicas teatrales y pedagógicas, entre otros. (http://titiriteatro.blogspot.com.co/2010/10/antecedentes-titiriteatro.html)
memoria a través de instrumentos como el patrimonio, los museos, reconociendo de
esta manera que el Arte y la Memoria son maneras de representar la vida, permitiendo
a las diferentes generaciones que den testimonio de lo que somos, abriendo nuevas
perspectivas en la búsqueda de unas identidades que nos representen utilizando todos
aquellos objetos materiales e inmateriales que pueda ser estimable (patrimonio) y que
permita un tipo de comunicación desde el lenguaje y el pensamiento.
De esta manera se produce un reconocimiento y una aceptación de todo aquello que
le haga bien, que le interese, dándole un valor a aquello que le llama la atención. Es así
como se produce un acto de circulación de aquellos bienes, materiales e inmateriales,
validándolos al tomarlos como actos de trascendencia que permiten esta permanencia
en el tiempo.
El Gestor Cultural mediador entre manifestaciones artísticas, la creación de
otras a los procesos de construcción colectiva de los territorios donde se
desarrolla su acción:
En este sentido un gestor cultural, puede desde su actuación construir un procesos de
dinamización y reflexión de la vida regional a partir de dos rutas: una que recupera las
manifestaciones artísticas desde los saberes locales y desde ellos estimula su
mantenimientos, recuperación , visualización y su profundo sentido de construcción
colectiva, pero de otra lado puede vincular los saberes otros de las artes, a procesos de
dinamización de la región, en este sentido, no como un acto de traslado de estas
manifestaciones de lo urbano a lo regional más de orden rural, sino como una
posibilidad de que el arte y el artista como creador desarrolla con su obra artística una
visión amplia de la sociedad que lo rodea, y de esta manera es posible que el aspecto
ideológico en su obra se pueda leer más allá del hecho estético, permitiendo, por
ejemplo, establecer parámetros de cómo se establecían algunos grupos sociales,
comunidades familiares, asociaciones, bandas, sectas, la naturaleza y el vigor de los
vínculos que las han reunido y todo los otros aspectos que se puedan estudiar de una
comunidad especifica.
La animación sociocultural: ¿Antecedente de la gestión cultural reglamentada?
Es importante detenernos un poco en aquellas acciones que dieron al inicio de lo que
hoy es el centro de esta reflexión: la Gestión Cultural. Esto debido a que esta ha
evolucionado pues es relativamente nueva y que se comienza a dar desde la práctica y
es solo hasta los años 80´s que se empieza a “teorizar” desde la llamada animación
sociocultural desde las propias experiencias de los involucrados en el campo del
trabajo de la cultura como estrategia para incidir en las comunidades afectadas en ese
momento por un desarrollo económicos y políticos de algunos territorios.
Para la profesora Martha Bravo8, experta en el tema de la Gestión Cultural en
Colombia, existe un interés en el estudio del campo de la cultura desde hace un par de
décadas atrás:
Asimismo considero como una gran oportunidad, que el interés por el
desarrollo de la ciencia y la investigación en la universidad colombiana a
partir de los años 80 y 90 tenía un objetivo claro: la necesidad de la
producción y circulación del conocimiento en consonancia con los retos
que demandaba una universidad moderna en un contexto cada vez más
exigente de internacionalización, lo que la obligaba a tratar de ponerse a
tono con avances vertiginosos que se daban en los países desarrollados
del mundo y con la construcción de una sociedad del conocimiento.
En Latinoamérica se volvió un imperativo. Por tradición e historia, había
países más avanzados como México, Argentina, Brasil, Chile. No trato de
equiparar los desarrollos científicos y tecnológicos con los de la
universidad como el centro de cultura, pero percibo que esto fue
encrucijada y coyuntura, y que fue una oportunidad para que se
8 Estudió Filosofía y Letras en la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín. Realizó cursos de posgrado en
políticas y gestión cultural en Buenos Aires, Londres y Caracas. Ha sido docente de la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas de la Universidad Nacional (Medellín). En la década del 90 participó en la formulación de los planes de cultura para el departamento de Antioquia (Colombia). También participó en la formulación del Plan Nacional de Cultura 2001-2010 y del Plan Estratégico de Cultura 2006-2020 para Antioquia. Co-fundadora y durante muchos años co-directora de la Revista de Extensión Cultural de la Universidad Nacional (sede Medellín).
Publicaciones: (2008). Itinerarios culturales 1985-2007. Voces y presencias. Medellín: Lealón.
propusiera al menos en igualdad de circunstancias, el desarrollo a la par
de la ciencia y la tecnología, también de la cultura.
Por consiguiente ésta no debería estar circunscrita a una oficina o
dependencia, como se ha reiterado ya constantemente en encuentros
universitarios como éste. Una propuesta de convergencia más que de
aislamiento, en los términos que usaba Germán Rey ayer. (IV Encuentro
Nacional de Políticas Culturales Universitarias 2012. Martha Bravo)
Después de diez años de gestión cultural salida de las urnas municipales, se abre la
primera oportunidad de reflexión con una cierta perspectiva. La línea de reflexión se
centra en la gestión cultural, concepto que sustituye al de animación cultural y que se
define como aquellos métodos que tienden a armonizar las exigencias de los proyectos
creativos con las exigencias de desarrollo integral de un territorio. "Gestionar la cultura"
es gestionar el conflicto entre proyectos surgidos de iniciativas creativas (y, como tales,
frecuentemente particularistas, centrífugas e individualistas) y las exigencias del
territorio, que obligan a una visión de conjunto de necesidades de participación,
cooperación y solidaridad. El cambio importante a constatar en la intervención cultural
en nuestro país desde la década de los 80 es el paso de un paradigma educativo y
asistencial, a un paradigma de arte y comunicación.
Aparecen, entonces, los Gestores Culturales como protagonistas del espectáculo
generado por la combinación de este con el Arte, provocando un discurso pertinente a
tener en cuenta en el proceso de enseñanza y formación de líderes, de maestros, de
ciudadanos y de profesionales que ayuden a concebir el desarrollo cultural inherente a
todos, en especial a los educadores artísticos, permitiendo también la función social de
los artistas y de los gestores culturales en las diferentes sociedades.
En este punto, es importarte reconocer que todo lo anterior es posible gracias a las
acciones generadas desde la animación sociocultural pues sin ella, la gestión cultural
no tendría un campo donde trabajar pues “el campo de la animación se traslada a algo
más profundo que implica compromiso social, militancia y sentido de cambio de
realidades sociales y marginales”. 9 Es así como la Animación Sociocultural está
presente durante mucho tiempo en países como Brasil, México, Argentina y hasta
mediados de los años ochenta en Colombia, donde se venían realizando una cantidad
de procesos comunitarios liderados por animadores y promotores de la Cultura.
La Ley de cultura (años 90^s)
En la última década ha habido un avance significativo en el tema del
patrimonio cultural. Con la promulgación de la Constitución Política de
1991 y de la Ley General de Cultura, el Estado generó un nuevo marco
general de actuación, al reconocer el carácter multiétnico y pluricultural de
la Nación. Esta valoración hizo que el texto constitucional fuera explícito
en la mención del patrimonio como un bien constitutivo de la identidad
nacional, y de lo cultural como factor determinante “para la construcción
de un país”, sin violencia ni discriminación, integrado y tolerante.
La Ley General de Cultura obliga al Estado a la protección,
conservación, rehabilitación y divulgación del patrimonio cultural,
coordinando labores que habían desempeñado independientemente
distintas instituciones públicas y privadas. La novedad está en el nuevo
marco institucional constituido por el Ministerio de Cultura y en la
obligatoriedad de incorporarse el tema al Plan Nacional de Desarrollo y a
los planes de desarrollo departamental y municipal. A su vez, mediante la
Ley 388 de 1997 -o Ley de Planificación Urbana- se adoptan los planes de
ordenamiento territorial, que buscan articular, por primera vez, la
conservación del patrimonio y el desarrollo de las ciudades, así como
contextualizar el patrimonio inmueble dentro de la totalidad del patrimonio
cultural y fortalecer sus vínculos con los modos de vida de las
comunidades.( tomado de http://www.oei.es/cultura2/colombia/07.htm)
Es así como a mediados del siglo XX, con la ley de Cultura (1991) y la creación de
Colcultura como ente que acoja y regule a los trabajadores de la cultura, permitiendo
9 Cabañas, José María. Relaciones de la Animación sociocultural y la Gestión Cultural. Pedagogía social 12
de alguna manera, la posibilidad de formar a estos que venían de forma “empírica”
trabajando en el campo de la Cultura y permitiendo la participación ciudadana en este
mismo campo. De esta manera, se empiezan a crear Políticas Públicas y Culturales
que permiten visibilizar la importancia de la Cultura y las Artes como estrategia de una
mejor construcción de tejido social.
Ahora bien, como la Gestión Cultural empieza a ser un factor común en casi toda
Latinoamérica, debido a que se empiezan a crear sitios de formación en Europa, sobre
todo en España, a los cuales empiezan a acceder líderes y trabajadores culturales, lo
que permite empezar a pensarnos en nuestro propio contexto al participar de estas
formación desde lo administrativo y gerencial. Ya en este momento, la Gestión Cultural
comienza a fortalecerse debido a que usa conceptos que la animación cultural no,
como desarrollo cultural, inversión cultural, consumo cultural, bienestar cultural, igual y
política cultural: en la animación sociocultural se produce un cambio respecto al :
Desarrollo cultural
Inversión cultural
Consumo cultural
Bienestar cultural
Política cultural
Es así como desde espacios de formación universitaria y de parte de instituciones de
formación superior como la Fundación Polar de Venezuela (Curso de Gestión Cultural.
1992), o Gestión Participativa y Gobernanza de la Cultura para los agentes culturales
de la ciudad de Bogotá (2014), Red Colombiana de Universidades en Gestión Cultural y
el emprendimiento Cultural (2012), vemos como se comienzan a ofertar diferentes
modalidades desde diplomados, actualizaciones, talleres, cursos, charlas y
actualmente, pregrados y posgrados en Gestión Cultural, con la intención de
profesionalizar a aquellos que se encuentran inmersos en ámbitos culturales. Sin
embargo, esta capacitación ofertada se orienta a la administración y gerencia de
procesos culturales
Este es el punto de partida para la pregunta acerca de la formación profesional 10 de
aquellos que reflexionan acerca de todas las acciones que permiten la relación de las
diferentes manifestaciones artísticas como una posibilidad de cambiar el entorno y que
de esta manera puede hacer ciudadanía más sensible.
De alguna manera, las transformaciones a la cual se ha visto sujeta la Gestión
Cultural, permite seguir en la búsqueda por una formación que aún no termina de
definirse como la más correcta en relación a consolidar un Gestor que mire su oficio
más allá de una mirada administrativa a la cual se ve abocado por su construcción en
el aula de clases. Esto no es malo, ni mucho menos, pero es importante pensar en un
gestor autocritico y sensible, menos formal, que vaya más allá de lo administrativo y
gerencial, con capacidades de entender su territorio desde la diferencia con el otro,
siendo factores nuevos a trabajar la proxemia, las relaciones, la comunicación cultural:
nuevas estrategias para trasmitir el hecho cultural.Los nuevos retos que surgen ahora,
teniendo en cuenta las nuevas generaciones y los cambios que implica la modernidad
como la globalización, permiten a autores como Alfons Martinell, preguntarse si es
suficiente esta formación para atender las necesidades actuales, necesidades que se
dan por la modernidad que implica otras miradas que vayan más allá de la formación
dirigida a la administración, que es importante, claro que lo es, pues si bien es ciertos,
estos espacios educativos ayudan a canalizar los saberes propios de la Animación
Cultural de una manera más idónea:
Es necesaria una reflexión con profundidad de las aportaciones y críticas que la
cooperación cultural internacional sugiere a los perfiles y formaciones de la gestión de
la cultura (Martinell, 2002-2003)Demandas de cambio de los perfiles de la
formación de la Gestión Cultural
10
la denominación de animador cultural incide en la necesidad de animar la cultura, en peligro de anquilosamiento y fomentar la creatividad. El término mediador cultural prima la idea de que es necesario fomentar la intermediación entre los agentes culturales -productores y receptores de la cultura- implicados. La denominación de trabajador cultural suscita la necesidad de interrumpir la distinción entre trabajo material e intelectual. El término agente cultural incide en la visión de que la práctica cultural debe ser activa con el fin de que todos los ciudadanos puedan ser considerados agentes de cultura y dedicarse al quehacer cultural. Por último, los términos de gerentes y administradores culturales, hacen hincapié en la necesidad de organizar la actividad cultural con principios y criterios empresariales ya que se considera que la cultura se ha convertido en un poder público y en un importante sector económico.
De esta manera, Martinell reflexiona acerca de las nuevas habilidades que debe
tener el Gestor Cultural relacionado con la Internacionalización dado las constantes
transformaciones del actual entorno cultural y social. Algunas de estas
transformaciones tienen que ver con las que se pueden apreciar en las diferentes
culturas en las que la Universidad de Antioquia, en las regiones, hace presencia. Estas
tienen que ver los cambios económicos, el surgimiento de nuevas tecnologías y los
nuevos paradigmas que ponen en zozobra creencias y convicciones populares.
La parte más compleja del asunto tiene que ver con la transformación que se da por
la cohabitación cada vez más estrecha de la gran diversidad de culturas que conviven
ahora mismo por el mundo.
En las regiones, territorios establecidos tenazmente por largo tiempo, se hace
imperativo entender que estos cambios permean lentamente las costumbres y
dinámicas de los sujetos que los habitan. Aquí, el Gestor Cultural debe pensarse en
dinámicas que lleven a cruzar la frontera de lo académico para adaptarse a unas
posibilidades que irrumpen muy fuerte. Es aquí donde los diálogos interculturales, las
posibilidades de fusionar áreas, pueden ser herramientas a utilizar para atender estos
requerimientos.
De la misma manera, otros autores en América Latina y Europa como lucina Jiménez
López11 (México), David Hernández Montesinos12 (España), José Luis Mariscal
Orozco,13 (México), Carlos Yáñez Cañal14 (Colombia) y Rubens Bayardo15 (Argentina)
11
antropóloga mexicana, doctora en Ciencias Antropológicas por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)-Iztapalapa. Especialista en políticas culturales y desarrollo sostenible, educación en artes, derechos culturales y cultura de paz.. Integrante, desde el año 2000, de la Cátedra Unesco de Políticas Culturales y Cooperación de la Universidad de Girona, España.
12 Asesor técnico especializado en procesos metodológicos para la gestión y la gobernanza, orientado hacia las
tendencias en innovación social y procesos colaborativos. Experto en comunicación y desarrollo cultural. Socio Director en Gloria Transmedia equipo profesional español especializado en comunicación cultural e innovación desde la gestión de contenidos.
13 Profesor investigador Gestión Cultural, cultura popular, educación virtual, empresas culturales, políticas
culturales 14
Profesional Universitario Sociólogo, Especialización Especialista en Docencia Universitaria. Especialización Especialista en Gerencia y Gestión Cultural. Actualmente, docente de tiempo completo en la Universidad Nacional de Colombia, Sede Manizales.
15 Doctor en Filosofía y Letras, Área Antropología, UBA. Docente e Investigador en Economía de la Cultura,
Políticas Culturales y Gestión Cultural. Director del Programa de Antropología de la Cultura, FFyL-UBA. Director de la Carrera de Especialización en Gestión Cultural y Políticas Culturales, IDAES-UNSAM.
perciben que si bien es necesario ir a la par con las transformaciones que devienen de
la modernidad en campos como la comunicación, las nuevas tecnologías, se hace
necesario reflexionar en los nuevos agentes de la Gestión Cultural, pues ya en la
escena aparecen demasiadas posibilidades académicas que pueden redundar en lo
teórico o academicista, por lo que se requiere estrategias innovadoras que faciliten una
mejor formación pensada más en la práctica que en lo teórico, por ejemplo.
Surgen posiciones que señalan la necesidad de la expansión del perfil del
Gestor Cultural.
De alguna manera, las posibilidades que los anteriores autores exponen, permiten
mirar la formación del gestor Cultural de una manera diferente, que permita salir de
unos paradigmas que se empiezan a anclar por la avalancha de espacios formativos
dirigidos a lo administrativo o gerencial. Sus propuestas abarcan posibilidades desde la
virtualidad, campo muy atractivo para las jóvenes generaciones y que puede ser
aprovechado para la expansión de la cultura compartiendo por este medio,
experiencias del arte y la cultura con otros agentes que posiblemente antes sería
imposible de hacerlo. De alguna manera, este aparece como un nuevo territorio a
explorar para la gestión Cultural.
También podemos visibilizar experiencias donde se pueda vincular lo administrativo, lo
gerencial y lo operativo de la gestión en la Artes, como una manera de entender que
puede ser posible esto dependiendo de la idea de Gestión y Cultura que se tenga y el
contexto en que se dé. Para el Dr. Rubens Bayardo, las competencias en las cuales se
debe formar al Gestor Cultural deben darse en una labor prolongada:
Los profesionales de la gestión cultural absorbidos por las
responsabilidades del hacer aquí y ahora, en circunstancias tan críticas
como cambiantes, muchas veces añoran el „reflexionar‟ y lamentan no
poder detenerse a analizar y sistematizar sus experiencias, profundizar o
actualizar sus conocimientos.
Gestión Cultura desde la Diferencia También, en este recorrido de posibilidades
que empiezan a emerger alrededor de la pregunta por la actual formación del Gestor
Cultural, aparece para tener en cuenta la formación desde la Diferencia, propuesta por
maestro Carlos Yáñez, quien plantea algo nuevo e innovador pues tiene que ver con la
tendencia dirigida al trabajo con comunidades, que no se deja a un lado, ya que viene
ligado a muchos problemas del conflicto en el territorio, y que tienen que ver con la paz,
la democracia.
Con base en el reconocimiento constitucional de la diversidad cultural, encuentro la
necesidad de formar nuestros gestores desde la diferencia. Por esa razón, planteo
como eje fundamental algo que defino como una estética de la existencia, en la cual los
elementos esenciales se centran en el rescate de sujetos corporizados que establecen
vínculos y relaciones con otros, pero que, a su vez, deben partir de la empatía y la
proxemia para trabajar con ese otro” (Yañez, 2013)Sostiene el investigador de la
Universidad Nacional de Manizales, Colombia, que el Gestor Cultural debe pensarse
no solo desde la relación con el otro sino consigo mismo, es decir, que pueda
desarrollar una serie de sensaciones y percepciones con el entorno y se convierta en
un ser visceral. De esta manera, el otro con quien trabaja deja de ser un objeto de
estudio para transformarse en un aliado con el cual puede transformar una nueva
sociedad
Al mismo tiempo, el Gestor Cultural se prepara para la arremetida de los fenómenos
de la contemporaneidad como el mercado, el consumo, el poder, entre otros. Por eso,
la propuesta se basa en poder preparar al Gestor para que sea capaz de ser creativo y
proponer nuevas relaciones sociales que permitan otros espacios de convivencia y de
existir.
Pero además hay un tipo de gestión cultural definido en el marco de las identidades,
que se plantea desde la diversidad y que también es muy trabajado por la animación
sociocultural. Partiendo de estas posibilidades, que nacen de su propia experiencia
con la universidad Nacional de Colombia, el profesor Carlos Yáñez, cuando se le
solicita diseñar un pregrado en Gestión Cultural que permitan al estudiante “Construir
narrar tramas y urdimbres socioculturales desde la diferencia”, expone la su idea de la
estética de la Existencia como la pedagogía para la Gestión Cultural, pues es allí,
reconociendo al otro que se da la construcción de un nuevo proceso donde la gestión y
la cultura sean agentes facilitadores de Bienestar.
Por ello, para el maestro Yáñez, es posible que la formación se pueda basar en
construir pensamiento desde la práctica, en la medida en que se intenta un alejamiento
de “los paradigmas macro teóricos, de los refritos disciplinarios que no contribuyen al
darse cuenta y dar cuenta de la realidad construida en forma colectiva y en permanente
movimiento”.
Es así que se hace necesario continuar con la reflexión acerca de la formación de
los Gestores Culturales en nuestro contexto, con la invitación a utilizar acciones muy
puntuales que inviten a la innovación, a la creatividad, a lo espontaneo. De esta
manera, el gestor podrá entender que se debe ir más allá de la saberes previos para
re- entender su entorno, leerlo de otra manera pues la necesidad de entender al otro
provoca encontrar esos lugares comunes donde se pueda entender lo que quiere el
otro. De otra forma, estaríamos repitiendo simples formulas.
La reflexión acerca de la Formación del gestor Cultural debe ser constante y
permanente de acuerdo a unas condiciones dadas desde la contemporaneidad que
invita a pensarnos el territorio como ese espacio de encuentro o común en el cual las
diferencias nos acercan cada vez más permitiendo retroalimentarnos del otro, por eso
el gestor debe tener esa capacidad de analizar, de pensar y de sentir al otro. Este lugar
común debe permitirse llenar se nuevas sensaciones, de contacto, en todos los
sentidos, con el otro pues estas “modernidades tecnológicas” en las cuales nos
hallamos inmersos, no permiten mirar al otro, sentir al otro. Claro, la gestión, para esto,
debe formar también desde lo multi y lo transdisciplinario, desde lo poético y lo social,
permitiendo una adaptación a los nuevos contextos.
También es posible, teniendo en cuenta las anteriores reflexiones, permitir el ingreso
de la Experiencia como una posibilidad en la formación, teniendo en cuenta que lo
relacionado con lo interdisciplinario en las artes y la cultura, permite reivindicar la
posibilidad de pasar por unas sensaciones únicas al permitir que “algo nos pase”:
Como lo establece Brinnitzer16 “...la experiencia requiere detenerse, hacer una pausa
en nuestra actividad y así posibilitar que algo nos pase. Pausa para sentir, para pensar,
para escuchar y escuchar-se, para suspender la opinión y el prejuicio, para cultivar la
mirada atenta, para el encuentro con los otros, para darse un tiempo y un espacio” “La
verdadera experiencia es experiencia de la propia historicidad, la toma de conciencia
de que no siempre hay tiempo para todo” (Brinnitzer, E.V.)
Debemos entonces, pretender que de esta manera, la Experiencia puede
transformarnos, tocarnos cuando somos permeables a estas posibilidades
La Gestión Cultural como concepto
Resulta importante, antes de continuar con el tema de la formación, detenernos un
poco en el origen de este término pues es importante tener claro cuáles son las pautas
que desde allí se originan.
Una de las acepciones más apropiadas es la que publica la Organización de
Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura en la que
dicen que: “La noción de Gestión Cultural ingresa al discurso cultural en
Iberoamérica con bastante influencia hacia la segunda mitad de la década de los
ochenta, tanto en las instituciones gubernamentales como en los grupos
culturales comunitarios. Pretendió ser en sus inicios simplemente una propuesta
distinta de actividad cultural a la realizada por denominaciones como
"animadores y promotores culturales", "administradores y gerentes culturales" o
"trabajadores culturales"; tal vez, las tres nociones utilizadas con preferencia en
nuestra región, ya que denominaciones como "mediadores culturales",
"ingenieros culturales" o "científicos culturales", importantes en otras latitudes, no
tuvieron eco en nuestro medio. (http://www.oei.org.co/cultura.htm)
Hoy tenemos que reconocer que estos diversos usos en los países iberoamericanos
no son solamente la expresión de un ánimo renovador o diferenciador, sino que
contienen insinuaciones y consecuencias relevantes en la dimensión cultural.
16
Profesora de Educación Física, licenciada con orientación en tiempo libre y recreación, y especialista en Pedagogía de la Formación (UNLP). Profesora del área estético expresiva en la formación de docentes de nivel primario en el IFDC Bariloche. Argentina.
Cada una de las tres denominaciones ha tenido un origen histórico y unas
intenciones particulares en su sentido; así también su recontextualización práctica y
cultural necesariamente ha modificado su sentido histórico originario.
La noción de Animadores y Promotores Culturales posee una importante tradición en
España. Parte del presupuesto de la necesidad de animar lo inanimado y del constante
riesgo de que la cultura caiga en lo inanimado. Intenta aportar herramientas de
conocimiento y de educación artística para enriquecer la creatividad personal y de las
comunidades. Otorga a la actividad cultural la función de incrementar y fortalecer la
mediación entre los productores y los receptores de cultura. Sus tesis principales son el
incremento de las comunidades y el necesario apoyo a la intermediación, que conlleva
una gran importancia de lo pedagógico.
La denominación de Gerentes y Administradores Culturales, con un peso
significativo en Estados Unidos y Francia, acentúa la posibilidad y necesidad de
organizar la actividad cultural con principios y criterios empresariales. Responde a nivel
mundial al incremento de los presupuestos en cultura en la década de los setenta y a la
conversión de la cultura en un poder público y un sector económico. No insiste tanto en
la creatividad como en la urgencia de consolidar equipamientos culturales como
empresas. Tal vez su proclama principal es: del equipamiento a la empresa cultural. En
Iberoamérica esta visión ha adquirido importancia desde los inicios de los ochenta y
existen en la región variados programas de formación con esta denominación.
La construcción Trabajadores Culturales constituye una noción característica y
bastante difundida ante todo en América Latina. Posiblemente se basa en una relectura
de la obra del pensador italiano Antonio Gramsci, e intenta sugerir la necesidad de
romper la distinción entre trabajo material e intelectual. Todo trabajo de alguna manera
es un quehacer cultural. Postula por ello la tarea de convertir a todos los ciudadanos en
trabajadores de la cultura. Posee una noción extensa de cultura, realiza acciones para
el rescate de lo popular y plantea un nexo indisoluble entre educación y cultura. El
investigador chileno José Joaquín Brunner, llama a esta presencia gramsciana en el
continente latinoamericano un modelo de "competencia hegemónica".
Los diversos países de la región adaptaron a sus realidades y expectativas estas
nociones, como también otras (tales como Agentes Culturales, Tejedores o Actores), y
conformaron su propio concepto de la actividad cultural. Algunas comunidades y
países las preservan hoy con algunas modificaciones.
Con el ingreso discursivo en los años ochenta de la expresión Gestión Cultural se
han planteado por lo menos tres tesis diferenciables y significativas en Iberoamérica:
La sostenida por el escritor peruano Jorge Cornejo, que afirma que la Gestión
Cultural incluye y asimila las denominaciones anteriores (ante todo Animadores y
promotores Culturales), pero sin existir oposiciones, contradicciones o modificaciones
relevantes entre ésta y las anteriores. Comparten sus objetivos, principios y criterios
generales; simplemente la Gestión Cultural subsume las denominaciones precedentes.
Aquellos autores que sostienen la necesidad de preservar las denominaciones
anteriores, ya que la inclusión del predicado gestión en el ámbito cultural termina
borrando las fronteras entre las actividades económicas y los procesos culturales y, por
esto, rechazan la expresión Gestión Cultural como una intromisión excesiva de lo
económico o mercantil en la dimensión cultural.
Los investigadores que plantean la pertinencia del concepto, como
Jesús Martín-Barbero y Néstor García Canclini, quienes consideran que existen
transformaciones importantes en la dimensión cultural que insinúan la búsqueda de una
expresión próxima a la actual praxis cultural. Advirtiendo en todo momento que lo
gestionable en la cultura sólo puede entenderse a la luz de lo no gestionable, ya que la
libertad, la autonomía y la independencia de los procesos culturales no son
gestionables.
Para finalizar, la expresión Gestión Cultural está ligada por lo menos a cuatro
grandes transformaciones contemporáneas de la dimensión cultural:
a. La extensión de la noción de cultura por motivos filosóficos, sociales, políticos y
jurídicos.
b. La crisis de las nociones de política y desarrollo a partir de la década de los
setenta.
c. La necesidad de políticas culturales que gestionen ámbitos más allá de la cultura
artística, la cultura tradicional y el patrimonio.
d. La aceptación e importancia de repensar rigurosamente las interrelaciones entre
Economía y Cultura.” (Organización de los Estados Americanos, OEI. 2012)
Desde este punto de vista, podemos entender que la Gestión Cultural no está
limitada o delimitada a acciones concretas y de conocimientos enfocados a un área en
específico ya que esta no preocupa por conseguir fines, sino que se esfuerza en
conseguir medios, su acción es la mediación.
Es así como apenas en los años 90 s se comienza a hablar de unas dimensiones de
la Gestión Cultural en Colombia pues la tendencia que se empieza a destacarse un
intento por definir la gestión cultural para América Latina, con las particularidades que
se tienen ya que es en ese momento donde se comienza a pensar en la Gestión
necesita un sector para intervenir. Es así como más adelante se empieza a fortalecer el
tema de la cultura del emprendimiento y las industrias culturales poniendo de
manifiesto el arte como una base fundamental del Desarrollo del país y no como un
simple ornamento o accesorio sin olvidar el trabajo para el contexto social, el trabajo
con comunidades ya que este viene ligado a los problemas de violencia y conflicto en el
territorio, Además, cabe mencionar como la Gestión Cultural viene trabajando sobre el
tema de identidad que se encaja en el marco de las diversidades.
Es aquí donde se empieza a preguntar por la función del Arte ya que en nuestro
entorno podemos encontrar muchos procesos multiculturales, interculturales e
interculturales: el cruzamiento de culturas. Todo esto dificulta que podamos pararnos a
decir que tenemos una identidad propia que podamos vender u ofrecer.
Fomentar, gerenciar y diligenciar son los tres verbos principales que constituyen el
triángulo que serán la fortaleza que acompañaran las acciones que permiten nuevos y
mejores resultados en el ámbito cultural. De la misma manera, el termino cultura,
termino comodín en la actualidad, también la podemos identificar desde la producción
artística, desde la cultura popular, desde la industria cultural y desde el patrimonio
Cultural.
De esta manera, en la búsqueda de responder a la pregunta con la que se inicia este
apartado, se hace necesario indagar en lo referente a la profesionalización de los
Gestores Culturales, la cual puede estar ubicada en dos aspectos:
Espacios dedicados a la formación de profesionales como la Universidad,
algunos centros de formación , centros de formación, seminarios, talleres,
centros de documentación y de información, así como en espacios de discusión
que surgen de la necesidad de adaptación para la regulación de los diferentes
procesos de ejecución identificados en cual sea de los sectores, bajo la lógica de
que es necesario regular los procesos administrativos que manejan los
diferentes ámbitos culturales de una manera más adecuada.
Asumir la Gestión Cultural como un proceso que puede ir más allá de su
formación pues este puede ser partícipe de las situaciones reales determinadas
por el llamado “encargo social” donde su mayor expresión puede ser vista como
la auto-gestión, que es la formación de un sector que está en contacto con las
necesidades inmediatas de su entorno y que comprende las diferentes
dinámicas culturales que se gestan alrededor de este profesional, que surge en
la praxis e incurre en espacios tales como casas de culturas, museos de pueblo,
talleres o espacios donde los artesanos reproducen sus prácticas culturales así
mismo el profesional de la cultura debe tener claro que son los mediadores para
obtener los recursos necesarios, así como de cubrir los requerimientos legales
bajo los cuales se regulan los espacios de desarrollo de la cultura.
En lo que refiere a los espacios de intervención, estos están en estrecha relación
con una de las actividades del Gestor Cultural, el análisis, un análisis de las
condiciones reales del contexto así como del espacio e inclusive de las necesidades de
los sectores a los que se pretende intervenir, para así definir las posibles líneas de
acción.
Es así como se llega a la posibilidad de hablar de las estrategias para formar al
aspirante a Gestor Cultural de manera que permita ir más allá, como se menciona
anteriormente, de traspasar las líneas que separan las líneas de lo meramente
administrativo porque permiten entender que la ruta planteada en la pregunta inicial,
puede variar ya que se descubren nuevas posibilidades en relación con un evento que,
desde esta otra mirada, arroja la posibilidad de sustentar el hecho pedagógico en la
formación del Gestor Cultural como un espacio de construcción personal fuera del aula
de clase, nos arroja un nuevo derrotero al mostrar las posibilidades que puede ofrecer
las “nuevas” alternativas ofertadas instauradas desde la base de un profesor que guía,
desde el ejercicio de asumir responsabilidades, desde el liderazgo compartido que
busca permear al estudiante en un proceso de formación, que desde una propuesta
pedagógica que busca entender y fortalecer las necesidades del medio con la
pertinencia de formar un ser humano capaz de tomar decisiones, de manera autónoma
y eficaz: ”La Gestión Cultural es hacer” (Torres, 2015)
Desde esta perspectiva y experiencia, considero que las prácticas en organizaciones
(ya bien sean del ámbito público o privado, de gran o pequeña dimensión, son
esenciales pues no solamente permiten al estudiante aplicar los conocimientos teóricos
en el mundo profesional, sino que también facilitan el contacto del estudiante con el
mundo real (con los problemas, las soluciones, las necesidades reales y diarias) y con
los profesionales con los que después tendrá que interactuar, colaborar, apoyar,
trabajar. Así mismo, la estadía en una organización permite analizar en profundidad su
estructura, sus actividades, sus estrategias de financiación, de comunicación, de
recursos humanos, lo cual ofrece también un nuevo conocimiento.
Surge la pregunta ¿Cuál es el momento para hacer esta inmersión en el ámbito
profesional? Puede ser que dependa del perfil o el bagaje del estudiante. Hay algunos
que ya tienen cierta experiencia en el ámbito profesional y pueden comenzar antes y
otros que nunca han trabajado en el sector cultural y necesitan adquirir más
conocimientos. En el actual entorno, se debería estudiar este perfil y recomendar
tomar un cierto rodaje en el medio de la Gestión Cultural para que las prácticas
puedan ser los más provechosas posibles.
Es interesante y necesario utilizar herramientas pedagógicas diferentes en la
formación en Gestión Cultural pero también en cualquier otro tipo de formación. En
nuestro campo, se hace necesario intentar innovar, en este sentido, con actividades
diferentes que permitan al alumno obtener los conocimientos a través de otros canales.
Por ejemplo, realizar visitas a organizaciones culturales en las que los responsables
expliquen el modelo de gestión y muestren sus instalaciones. También hay que
considerar que los alumnos pueden organizar viajes de estudios a un país diferente
encargándose de concretar los vuelos, los hoteles, las visitas a organizaciones
culturales, entre otros. De igual manera pueden ofrecerse ejercicios de rol, en los que
el alumno adquiera un papel ante una situación pueda resolver casos prácticos
basados en situaciones totalmente reales. También es importante que aprendan a
utilizar, a favor propio, aquellos teman que generan debate en el aula. Con muchas de
estas actividades el alumno no solo está adquiriendo conocimientos sino que también
se está formando en valores y en otras competencias de carácter más genérico y
transversal que, por otro lado, destacan que también son imprescindibles y necesarias.
CAPÍTULO III
METODOLOGIA DE LA INVESTIGACIÓN
Diseño de la investigación
Este trabajo de investigación retoma como enfoque el cualitativo - hermenéutico,
desde una metodología etnográfica y el análisis de Caso. La elección de esta ruta se
hizo reconociendo la necesidad de recuperar experiencias de Gestión Cultural desde
una perspectiva interpretativa. Este ejercicio de investigación cualitativa, basado en la
sistematización de la experiencia, en la cual se han aplicado técnicas de observación y
de entrevista al estudiante, se ha intencionado la herramienta llamada la bitácora
constituyéndose como una estrategia y a la vez como instrumento aplicado para la
generación de información que permita generar reflexiones a favor de la pregunta de
investigación.
A partir de estas herramientas es posible continuar con el rastreo de las
sensaciones y de las experiencias surgidas durante dos procesos académicos en los
cuales se involucra la formación del Gestor Cultural, tema principal de esta
investigación, y que gracias a esto, es posible con el proceso de la sistematización de
ambas, por tratarse de dos experiencias significativas que permiten desde unas
acciones realizadas, extraer ideas para la construcción de nuevas teorías que permitan
aportar a la formación de nuestros gestores de la Universidad de Antioquia en miras de
fortalecer las regiones en las cuales se ubican.
Lo que se expone frente a la sistematización son ideas que pueden contribuir
de manera significativa al proceso del trabajo educativo, como parte de la
estructura de un puente que nos puede llevar desde la experiencia a la
teorización de lo que hacemos. Construir teoría desde nuestras acciones y
actividades. Desde nuestra experiencia, dar orden lógico a un proceso que va de
una acción a un conocimiento, que puede ser compartido por otros. La
sistematización implica la organización y ordenación de la información; es darle
un orden lógico a los pensamientos, las actividades y la información entorno a
nuestro objeto de estudio. (Lissonia, 2009)
La importancia, entonces, de Incluir lo que aporta la sistematización a un proceso de
experiencia, es decir, a una experiencia reflexionada, es que lo que implica en este
proceso donde el investigador es parte fundamental del mismo, es posible desde allí
observar lo que genera descentramiento de la experiencia ha sido complejo, un
ejercicio de desentrañar y extrañarse de lo realizado para identificar los aprendizajes.
La selección de la Metodología de Caso
El análisis de caso recupera procesos luego de la culminación de un ciclo de acción
e implementación, es en este sentido un ejercicio investigativo donde el fundamento fue
el de la sistematización.
El acercamiento y la construcción de categorías emergentes, un proceso de orden
inductivo a lo deductivo, de lo particular a lo general y que recupera la palabra de los
actores participantes.
Etapas del proceso de análisis de caso
Setkani Encounter. Brno,
Republica Checa. Encuentro
Internacional de Escuelas de Teatro.
Curso Artes Escénicas para el
pregrado de Gestión Cultural de la
Facultad de Artes de la Universidad
de Antioquia en Regiones.
1. Diseño y aplicación de los
instrumentos de recolección de
información: Definir personas
participantes que van a ser
entrevistadas y que aportaran los
datos necesarios.
1. Recolección de información
relacionada con el curso: Entrevista
con la primera docente del curso y la
coordinadora del curso.
Charla con algunos egresados del
programa que pasaron por el curso.
2. Revisión Bibliográfica para la
construcción teórica del texto .Rastreo
bibliográfico. Buscar los textos y temas
sobre los cuales anclar el proyecto.
2. revisión del programa del curso y
del plan de estudios del Programa de
Gestión Cultural para las regiones.
3. Tabulación, análisis y evaluación
de los resultados obtenidos en la
recolección de información.
Selección del material pertinente a
reseñar
3. Recuperación de Bitácoras
personales que sirvieron de
seguimiento al curso en Turbo,
Caucasia y Envigado como
herramienta de análisis.
4. Sistematización de los resultados
del trabajo de campo incorporados a
un constructo teórico. Escribir el
constructo teórico, a partir de los
resultados de los datos obtenidos.
4. Sistematización de los resultados
del trabajo de campo incorporados a
un constructo teórico. Escribir el
constructo teórico, a partir de los
resultados de los datos obtenidos
5. Escritura y Divulgación de los
resultados de la experiencia.
Sustentación. Entrega de material
escrito trabajo de grado a la biblioteca
y centro de documentación.
5. Escritura y Divulgación de los
resultados de la experiencia.
Sustentación. Entrega de material
escrito trabajo de grado a la biblioteca
y centro de documentación.
Corpus de la investigación
La participación de la Universidad de Antioquia y el programa del Departamento
de Teatro de la Facultad de Artes en dos versiones (año 2010 y 2012) en el
Encuentro Internacional de Escuelas de teatro Setkani Encounter.
También fue importante para el método de investigación recuperar como técnica de
investigación, el uso de la Bitácora, entendiendo esta como un ejercicio de la
experiencia de formación, es decir, desde una perspectiva pedagógica, sirvió como
referente de datos que aportaron información valiosa respecto a la manera como los
estudiantes participantes de las experiencias formativas en este caso el cursos de
Artes Escénicas. para Gestión cultural, frente al proceso vivido a nivel personal y
colectivo
Desde la idea anterior, podríamos decir que esta herramienta o método permite
llevar un registro de experiencias para que el alumno sienta la importancia de su labor.
También facilita la retroalimentación y así mismo permite autoevaluar su proceso.
Esta herramienta ayuda recoger cierta información en un escrito, pero teniendo en
cuenta que esta información despierta, desarrolla y perfecciona habilidades y actitudes
en quien la hace.
Desde el punto de vista del área del Lenguaje, la bitácora se puede elaborar:
1. Al responder tres preguntas: ¿Qué paso? ¿Qué sentí? ¿Qué aprendí?
2. En el nivel analítico: ¿Qué propongo? ¿Qué integré? ¿Qué inventé?
3. En el nivel crítico: Combinación de las preguntas anteriores más: ¿Qué quiero
lograr? ¿Qué estoy presuponiendo? ¿Qué utilidad tiene?
Con base en lo anterior, podemos observar que el ejercicio de la Bitácora puede
arrojar muy buenos resultados, también para:
Apoyar la memoria.
Desarrollar meta cognición
Despertar actitudes de autogestión y autorresponsabilidad.
Organizar las ideas.
También se puede deducir que el uso de la Bitácora da ventajas al alumno porque
puede proporcionar una modalidad de comunicación escrita con el orientador, con el
grupo y consigo mismo a la vez que esta se convierte en una memoria del estudiante.
No podemos olvidar que la elaboración frecuente de la bitácora estimula las
habilidades de pensamiento y la habilidad de redactar y que la retroalimentación de la
misma contribuye a una redacción pertinente, atinente, coherente.
Como proceso pedagógico, la experiencia de escuchar la bitácora de los demás
también permite que el estudiante se reconozca en el discurso del otro y así identificar
sentimientos no expresados o reconocidos por él. Le permite centrar la atención y
hacer explícito lo implícito, lo obliga a la reflexión, permite la Meta cognición.
Le permite ver el proceso de construcción de conocimientos cuando habla de lo que
aprendió. Le permite darse cuenta de lo que siente cuando piensa y por tanto de la
relación de emociones con los procesos de pensamiento. Le permite vivir y darse
cuenta de lo que es la enseñanza basada en procesos y no en contenidos y le obliga a
responsabilizarse de lo que dice, al hablar en primera persona.
Pero también hay que tener en cuenta los obstáculos para el uso de la bitácora no
se lleve.
Obstáculos como resistirse: A escribir, a leer en público, a intentar un desarrollo
integral en conocimiento - habilidad y actitud, perder la continuidad, escepticismo.
Es por esto que el uso de una herramienta como la bitácora, diario de campo, diario
personal o como se quiera llamar (lastimosamente cambiada ya por el ingreso de
nuevas tecnologías) se vuelve fundamental en un proceso complejo por el tipo de
población a la que va dirigida y el mismo docente puede con ella llegar a fortalecer sus
propias reflexiones acerca de lo que está haciendo y como lo está haciendo.
Para finalizar, es importante resaltar que la Bitácora que se pretende retomar hace
alusión a aquella usada por los marinos, aquella que era más personalizada al entrar
en contacto con la tinta y el papel y que al leerla producía imágenes, recuerdos y
sensaciones.
Metodología de recolección de información
Para recoger información necesaria para el objetivo esperado, se retomaron
diferentes técnicas o estrategias:
Setkani Encounter. Brno,
Republica Checa. Encuentro
Internacional de Escuelas de Teatro.
Curso Artes Escénicas para el
pregrado de Gestión Cultural de la
Facultad de Artes de la Universidad
de Antioquia en Regiones.
1. Entrevista: Diseño de una guía de
preguntas para entrevistar a estudiantes
y profesores de la Facultad de Artes
participantes en el evento.
1. Encuestas a egresados del
pregrado de Gestión Cultural Facultad
de Artes Universidad de Antioquia.
2. Entrevista cualitativa :La
entrevista a participantes locales
2. Entrevista cualitativa a docentes
que presenciaron los trabajos finales.
3. Entrevista a participantes
extranjeros de forma virtual.
3. Recuperación de las Bitácoras más
significativas de los estudiantes.
4. Seleccionar material gráfico del
evento, recopilación de material digital
como videos y fotografías.
4. Recuperación de material gráfico
de los procesos de puesta en escena y
proyección del ejercicio de final de
curso.
5. Posibilidad de hacer trabajo de
campo en contacto directo con el
evento.
5. Recuperar evidencias del proceso
de producción realizado por los
estudiantes: programas de mano,
afiches, publicidad, bitácoras.
Metodología de análisis de la información
La sistematización y construcción de categorías
Luego de la recolección de toda la información en la que fue pertinente la
transcripción de entrevistas de audio a texto escrito, por ejemplo, fue necesario realizar
el ejercicio de sistematización del cual emergen las categorías que orientaron el trabajo
hacia una reflexión pertinente sobre las experiencias objeto de estudio.
Para poder tener claro el anterior proceso, la sistematización se realizó teniendo
claro los siguientes pasos:
1. Un punto de partida: Es decir, haber participado de ambas experiencias como
participante y como docente, lo cual permite partir de la propia práctica, además
de tener material visual como fotografías, videos y contactos de personas que
han participado de los espacios de la experiencia.
2. Unas preguntas iniciales: son las que permiten encontrar la ruta sobre la cual se
va a trabajar o a buscar. Preguntas como ¿Qué aspectos centrales de esas
experiencias nos interesa sistematizar? Son básicas para una sistematización
pertinente.
3. Recuperación del proceso vivido: Esta puede hacerse reconstruyendo la historia
lo permite recoger una visión global de los principales acontecimientos
ordenados cronológicamente, para lo que será importante contar con registros
de los hechos. Esto puede hacerse a modo de cuento o narración.
Posteriormente, esta información se organiza ordenándola y clasificándola, en
este caso, juntando asuntos que se repiten por ejemplo. Desde allí surgen las
categorías que son los asuntos claves para la investigación.
4. Este es el punto clave del proceso y consiste en interpretar de forma crítica el
proceso vivido. Ahora se trata de ir más allá de lo descriptivo, para lo que será
de utilidad responder a la pregunta ¿Por qué pasó lo que pasó?
¿Qué sucedió allí?
5. Finalmente, toda la información recopilada permite llegar o formular unas
conclusiones y propuestas para luego compartir de otra manera estos
aprendizajes.
La construcción de Categorías serán producto de la sistematización y que permitirán
un mejor análisis de lo hallado en la misma pues estas categorías se entienden como
un análisis de contenido que permiten ahondar en el asunto problema desde lo macro a
lo micro, con la posibilidad de hallar nuevas miradas que permiten otras reflexiones.
Estas categorías se convierten en punto de llegada y a la vez en “piedra angular
pues al cotejar unas con otras es posible un mejor análisis de una experiencia:
CONSTRUCCION CATEGORIAS EMEREGENTES
Consolidado de las Entrevistas:
Entrevista No
Cargo u ocupación
SRP01 Actor / Egresado. Facultad de Artes. UdeA
CAO02 Actor / Director / Productor/ Docente. Facultad de Artes. UdeA
AUM03 Actor /Egresado. Facultad de Artes. UdeA/ Director Grupo Divina Obscenidad Teatro
VZT04 Actor / Productor Artístico.
CAPITULO IV: EN TORNO A LOS HALLAZGOS
Los casos abordados se presentan aquí de manera separada, identificando en cada
uno los aprendizajes y conocimientos surgidos desde la pregunta por la formación del
gestor cultural
A continuación se presenta el Setkani Encounter y sus detalles desde el cual parte
esta reflexión ya que durante las dos participaciones en calidad de docente
representando al Departamento de Teatro de la Facultad de Artes de la Universidad de
Antioquia, fue posible entablar un dialogo más allá de la participación encontrando
desde ahí la respuesta a la pregunta ¿Por qué estudiar un evento académico en un
país tan distante de nuestro contexto?
Lo que normalmente se encuentra en un evento de Artes es poder mostrar procesos,
confrontar metodologías, nuevos públicos, entablar contactos y confirmar el propio
trabajo. En el caso de Setkani Encounter fue posible transmitir nuevas sensaciones en
las cuales se percibe el evento de otra manera no solo desde la mera producción y
organización característica sino que fue posible reconocer lo que hay allí desde la
apropiación de los estudiantes del mismo hasta la posición de los profesores que
comparten el Setkani como una gran estrategia pedagógica en el cual los estudiantes
de la Academia organizadora ven allí un gran potencial para prepararse.
Es desde allí que se retoma el Setkani Encounter, un espacio académico que lleva
más de veinticinco años presentándose como una posibilidad para todos los
estudiantes, sobre todo para los de Gestión y Management de poder asumir un rol y
una responsabilidad en un espacio que se toma como propio, como un pretexto para
analizar las posibilidades y falencias de un espacio paralelo como el curso de Artes
Escénicas para el pregrado de Gestión Cultural de la Facultad de Artes en las
regiones.
Reflexionar acerca de este curso desde una perspectiva como la de del Setkani
Encounter posibilita pensar esta actividad académica ya dentro de un contexto más
sólida donde podamos acercarnos a la interrogante sobre la formación de nuestros
Gestores en un contexto muy definido y especial como son las regiones sobre las
cuales se hace indispensable formular nuevas estrategias donde pueda pararse el
estudiante en formación. Es esta la posibilidad de mirar una acción con años de
experiencia donde el estudiante es el protagonista para, desde la observación, ser
capaces de identificar tópicos que fortalezcan el contexto local.
Acercamientos a otra orilla: El Setkani Encounter. Brno, República Checa.
La reflexión que surge aquí, se nutre de las experiencias vividas con anterioridad
(2010 y 2012) pero se consolida con la participación realizada en el 2015.
Actualmente, la Gestión Cultural permite a través del teatro, y de las Artes en
general, ser una herramienta poderosa que ofrece no solo ser un manager o un
productor que promueva un producto, dándolo a conocer o realizando marketing, que
puede ser una opción de vida o de profesión ya que existen escuelas y academias
especializadas en formar profesionales encargados de producir administradores de
Arte, sino que también existe la posibilidad desde allí sensibilizar una población
generando un impacto social importante que permita reflexionar acerca de sus
potencialidades, de su relación con el otro, pensándose en una manera de dejar huella
de alguna manera para las generaciones presentes y futuras que puedan continuar con
el legado desde las alternativas que pueden aportar desde la relación Gestión Cultural
y Arte.
En un gran ejemplo de esto se ha convertido el Setkani Encounter,
que de una u otra manera, por medio de siguiente sistematización es
posible entender su proceso interno, su historia y su influencia no solo
en el contexto local por haberse convertido en un evento de ciudad,
sino en los estudiantes de una Academia de Artes que ha creado en
ellos, con el desarrollo continuo del evento, una relación afectiva y a
su vez con su entorno mucho más fuerte, interpretando de forma
diferente su realidad al reconocer, por medio del teatro en su caso,
sus raíces o su memoria y de esta manera pueden proyectarse como
mejores ciudadanos y profesionales.Sin duda, el Setkani Encounter
es considerado uno de los eventos más importantes en la vida de los
estudiantes de la Facultad de Artes de JAMU, especialmente para los
estudiantes de Gestión y Management teatral que dedican parte de su
tiempo de formación a su preparación durante todo el año. Sin
embargo, muchos más estudiantes se suman a la " fiebre del festival"
gradualmente hasta la semana del Encuentro, cuando toda la escuela
pone “patas arriba”. Sin embargo, detrás de todo este caos creativo se
encuentra una estructura organizativa firme, una jerarquía precisa y
un sistema que se ha desarrollado de tal manera que transformó
una reunión de amigos a un encuentro internacional que aún
permanece. (Memorias Setkání Encounter 2010-2014. Pág. 12)
El Setkani Encounter viene realizándose en la ciudad de Brno por la Academia Janeck
de forma ininterrumpida desde 1990. A lo largo de todo este tiempo ha logrado
mantener su doble cita, tanto como con el público local como con los grupos de
estudiantes de Teatro de esa zona de Europa y, algunas veces, de diferentes partes
del mundo. En la actualidad se destaca como el evento académico más importante de
la Republica Checa, ocupando un alto reconocimiento por entidades culturales como el
Ministerio de Cultura y la Administración local, las cuales participan con apoyos
económicos para la realización cada año del mismo.
Análisis del Entorno y del Sector.
Características Sociodemográficas, económicas y territoriales.
Brno es la segunda ciudad más grande de la República Checa por población y
superficie, la ciudad más grande de Moravia y la capital histórica del Margraviato de
Moravia. Brno es el centro administrativo de la Región de Moravia Meridional en la que
forma un distrito separado (Ciudad-Distrito de Brno). La ciudad se encuentra situada en
el sureste del país, a 40 km de Austria y a 60 km de Eslovaquia, en la confluencia de
los ríos Svitava y Svratka y tiene alrededor de 400 000 habitantes; su área
metropolitana4 acoge a más de 800 000 personas, mientras que su zona urbana más
grande tenía una población de alrededor de 730. 000 habitantes en 2004.
Brno es la sede de la autoridad judicial de la República Checa, sede del Tribunal
Constitucional, el Tribunal Supremo, el Tribunal Administrativo Supremo y la Oficina del
Fiscal Supremo. La ciudad es también un centro administrativo importante. Es la sede
de una serie de autoridades estatales, incluido el Defensor del Pueblo y la Oficina para
la Protección de la Competencia. Brno es también un importante centro de educación
superior, con 33 facultades pertenecientes a trece institutos de educación superior y
alrededor de 89 000 estudiantes.
Los lugares más visitados de la ciudad incluyen el castillo y la fortaleza de Špilberk y
la Catedral de San Pedro y San Pablo en la colina Petrov, dos edificios medievales que
dominan el paisaje urbano y que a menudo se representan como sus símbolos
tradicionales. El otro gran castillo conservado cerca de la ciudad es el Castillo Veveří
junto al embalse de Brno. Este castillo dio pie a una serie de leyendas, al igual que
muchos otros lugares en Brno. Otro monumento arquitectónico de Brno es la Villa
Tugendhat, de estilo funcionalista, que ha sido incluida en la lista de Patrimonio de la
Humanidad de la UNESCO. Uno de los lugares de interés natural cercano es el Karst
de Moravia.17
La Academia Janácek de música y artes escénicas en Brno, República Checa es
una de las instituciones de Educación superior más reconocida y apetecida por los
jóvenes que desean continuar estudios enfocados a las Artes ya que esta cuenta con
espacios y docentes de alta calidad, en la cual, cada año se matriculan más de 1.500
estudiantes para más de 12 titulaciones.
También es capaz de proveer asistencia a estudiantes talentosos de bajos ingresos
a través de su programa de becas sociales. Los estudiantes cuyo ingreso familiar se
sienta debajo de un cierto nivel son beneficiados de estas becas como forma de
compensar los costos de asistir a la Universidad. La beca se presenta como un
estipendio mensual donde la cantidad es determinada por el decano de la Universidad.
El salario puede durar tanto como 21 meses desde el momento en que primero se
emite.
La situación del Sector
17
https://es.wikipedia.org/wiki/Brno
El Setkani Encounter de la Escuela de Artes Janacek, se inscribe en el sector de las
Artes Escénicas con un predominio del teatro el cual ha sido proyectado como un
espacio de encuentro con otras escuelas de formación en teatro con la característica
que desde su creación, no se ha probado con otras disciplinas artísticas pues además
de la música, el teatro hace parte de una de sus líneas de formación con mayor
aceptación entre los aspirantes a la Academia.
Desde su creación, el Encuentro de Escuelas es financiado por algunos entes
culturales de la región como el Ministerio de Cultura de la Republica Checa, la Alcaldía
local y recursos propios.
Respecto al tipo de teatro que se presenta en el Setkani, se podría decir que existen
dos tipologías:
Por su origen geográfico cultural: inicialmente, se aceptan propuestas de
escuelas pertenecientes a los países cercanos a la Republica Checa como
Rusia, Eslovenia, Bratislava, Austria, Eslovaquia, Polonia.
De esta manera, se pueden compartir estéticas similares y reflexiones acerca de la
formación relacionada con las Artes Escénicas y algunas nuevas áreas que empiezan a
permear las Academias tradicionales como el cine, la televisión, la Gestión Cultural y
Management.
Por sus propuestas estéticas y temas: Cada año, los estudiantes organizadores
del Setkani pueden aceptar propuestas de Escuelas alejadas de su contexto de
acuerdo a unas temáticas establecidas por ellos mismos. De esta manera,
pueden verse en el Festival obras de países tan lejanos como Estados Unidos,
África, Grecia, Canadá, Israel, entre otras. Todas presentadas en su idioma
original.
Cabe anotar, que debido a los altos costos de dinero, tiempo y tramites, el Setkani
Encounter ha recibido muy pocas veces la visita de escuelas de Latinoamérica, salvo
de México y Colombia.
Debido a que la Republica Checa es tradicionalmente un país con gran énfasis en la
música y las Bellas Artes, el público que acude cada año a este Encuentro
Internacional, se asegura pues este acude a los espacios masivamente teniendo en
cuenta que el principal espectador se centra en los jóvenes estudiantes de la misma
Academia, además del público local que paga su boleta sin problema.
De esta manera, sobresalen algunos aspectos positivos que han reforzado este
proceso Académico:
Renovación de las aulas de clase transformándolos en espacios más modernos
para la formación de los estudiantes con mejores equipos y mejoras en los
espacios académicos. De la misma forma, la otorgación por parte de las
Administraciones Locales de nuevas salas de teatro para ser administradas por
la Academia como aporte para mantener el nivel del Encuentro Internacional.
Presupuestos públicos asegurados cada año para la realización del evento
académico pues este se ha posesionado como un gran evento de ciudad que
beneficia a la población estudiantil y local.
Recuperación de gran parte del patrimonio dramático del país, que permanecía
en el olvido por motivos políticos o económicos, favoreciendo a los estudiantes
de artes escénicas al recuperar su producción teatral.
El proyecto Setkani Encounter: Antecedentes y características.
En 1990 la Facultad de Teatro de la Academia Janáček de las Artes Escénicas en
Brno- República Checa, se concretó la idea de conocer las tres escuelas de teatro de la
antigua Checoslovaquia (DIFA JAMU, la Academia de las Artes Escénicas de Praga y
la Academia de las Artes de Bratislava); en febrero de 1991, durante un fin de semana,
se reunieron los profesores y estudiantes de las tres academias con el fin de conocer
los métodos de sus trabajos y compartir a través de ejemplos las experiencias y
resultados de sus procesos creativos, artísticos y culturales.
Con el tiempo el festival comenzó a adquirir la relevancia a nivel nacional e impulsó,
entre otras cosas, al Ministerio de Cultura de la República Checa, Moravia del Sur
Región, al Gobernador y el Alcalde de la ciudad de Brno a fijarse en este evento como
un elemento integrador de la cultura de la región. ¿Qué hace entonces al festival tan
único y específico? La fundadora y mayor organizadora es la Escuela Janacek de
Música y actuación, Jamu, una facultad de Artes con más de 50 años de existencia en
la tradición cultural Checa, con un gran prestigio en el resto de Europa.
Sin embargo, si bien la Facultad de teatro ha tenido su forma actual desde su
formación en 1990, fue fundada libre y es por ello que su teatro se desarrolla sin el
peso de la historia, con búsquedas que van más acorde a la cambiante necesidad del
teatro actual sin estar amarrada a las estéticas de un teatro tradicional.
El Festival SEKTANI ENCOUNTER es único también gracias a las premisas
teatrales donde hace énfasis el performance. En 1991 el estudio Martha recibió su
nueva forma combinando la caja negra y el taller. Su forma y características siguieron
el proyecto de la gran sala del Teatro Ganso en la Cuerda de las riendas del centro de
teatro experimental, el cual es uno de los mejores espacios teatrales variables del
centro de Europa.
Aparte de estos dos lugares, el festival ha tenido otras premisas: el pequeño taller de
Kabinet Muz (cabinet de musas), el proscenio tradicional del escenario en el teatro
BolekPolivka y en el teatro Polarka, y desde 2004 la nueva caja negra construida en el
sótano de la arcadia del Alfa funcionalista en el centro de Brno.
La Facultad de Teatro en la calle Mozart sirve como centro de organización donde
todos los días se realizan reuniones, discusiones y programas, algo extra tiene lugar.
Este edificio Nouveau Art fue originalmente lugar de la Cámara de Comercio y fue
construido en 1909.
La Facultad de Teatro se mudó allí en 1922. Actualmente la idea de que el gran
Wolfgang Amadeus Mozart, ilustre personaje Austriaco que vio en Praga su refugio al
ser rechazado por la ciudad de Viena en un momento crucial de su vida, y que a pesar
de su presente status clásico, fuera un gran experimentalista en la historia de la música
mundial, es utilizada como pretexto para provocar en los estudiantes de la Escuela de
Arte, la iniciativa de explorar con las Artes Escénicas en todos sus campos.
Experimentación, creatividad mirando hacia el futuro, es lo que forma los detalles
específicos del Festival Setkani Encounter. Los premios del jurado y las sobresalientes
y creativas investigaciones experimentales estudiantiles de cada año. El festival no es
una competencia, las estatuas de Marta son un premio para jóvenes actores de teatro
en su búsqueda de nuevos lenguajes teatrales al comienzo de sus vidas profesionales.
El Festival en su forma creativa y organizacional fue creado y concebido para no ser
pasivo sino como un crisol de experiencias entre los profesores. (Setkani Encounter
Home, 2014)
Desde hace un tiempo hacia nuestros días, el festival refuerza su producción
involucrando a todos sus estudiantes de los diferentes programas, en especial, el de
Gestión Cultural, para que refuercen sus procesos de aprendizaje con esta práctica
artística de carácter internacional.
Actualmente, los estudiantes del programa de Gestión Cultural de la Academia
Janacek preparan la edición número 25 posicionando el Setkání Encounter como uno
de los más importantes en su género a nivel internacional.
En este contexto, el encuentro anual se convierte en un espacio de formación para
todos los estudiantes de Artes Escénicas de una institución de Educación Superior,
pues es allí donde, a través de la práctica directa sobre un evento real, se puede
evidenciar las fortalezas y debilidades a las cuales se enfrentaran cuando se gradúen.
Es por esto que los estudiantes de Gestión Cultural que se forman en la academia
JAMU, son los primeros convocados a construir cada año este magnífico evento teatral.
Finalidades del Setkani: Lo pedagógico
Los estudiantes que organizan el Encuentro Internacional cada año, desde 1990,
tiene claro su objetivo: el encuentro de diferentes países desde el lenguaje del teatro
para intercambiar conceptos, estéticas y procesos de creación desde sus propias
metodologías.
Por otro lado, el Setkani Encounter hace parte del currículo del área de pedagogía
convirtiéndose en el eje transversal de todas las áreas ofrecidas en la Academia Jamu,
evolucionando este espacio en una herramienta pedagógica capaz de formar a sus
estudiantes de diversas áreas artísticas y afines, permitiendo la amalgama de estas
con el único fin del encuentro con el otro, como un ritual que se realiza año tras año.
De esta manera, la posibilidad de la creación y el arte como el medio por el cual
pueden aplicar muchos conceptos adquiridos en el aula de clase, conceptos que van
desde la organización hasta el encuentro con el otro, se convierte en una fortaleza de
la Institución.
El evento se transforma, entonces, en un espacio de convivencia, intercambio y
dialogo de saberes entre estudiantes de diferentes escuelas de teatro, siendo este el
pretexto para que los estudiantes involucrados en el, asuman responsabilidades
acordes a su oficio, tomen posiciones críticas antes alguna situación que lo pueda
llevar a enfrentarla de una manera más adecuada, casi que sin la intervención del
docente.
Infraestructuras
Las infraestructuras que sirven de soporte físico al Setkani Encounter han sufrido
cambios durante el trascurrir de los diez primeros años pues como al inicio solo se
invitaba a tres o cuatros escuelas de teatro de sitios cercanos (de Praga y de
Bratislava), como idea de evento para el aprendizaje de los estudiantes de Gestión
Cultural y Management teatral y para la inauguración del nuevo Teatro Estudio Marta
en 1991. Pero con el paso del tiempo, los espacios teatrales para albergar los montajes
de nuevas escuelas tuvieron que ser conseguidos en préstamo pero con la intención de
utilizar sus propios espacios académicos.
De esta manera, se le otorga el Teatro Orlí Street para ser utilizado como un espacio
de exploración o laboratorio escénico en el 2012, siendo dotado con una excelente
maquinaria para atender las necesidades de la escena moderna.
La sala Goose on a String fue fundada en 1967 como un espacio de teatro
alternativo, está actualmente al servicio del Festival como una plataforma de
exploración para los estudiantes de la Academia Jamu, ya que en 1993 fue remodelado
para ser catalogado como un patrimonio de Europa.
Otros espacios que pertenecen al estado de Brno pero que permanecen a
disposición de la población estudiantil y profesional de la ciudad, son Teatro Hadivadlo,
el teatro Reduta y la sala del teatro Bolka Polivky.
Igualmente, las aulas del edificio que componen la Academia Janeck, son espacios
adecuados con tramoya, luces y telones que permiten la realización de pequeños
ejercicios o montajes de pequeño formato.
Programación
El Setkani Encounter, obviamente, centra su programación en espectáculos
teatrales con temáticas muy variadas pero en general se busca que las obras
escogidas, muy meticulosamente por el equipo de estudiantes organizadores, hablen
de su propio entorno y problemática, traten temas locales. En realidad, tratar los temas
que proponen los clásicos no es tan atrayente pues la idea es poder compartir las
sensaciones que produce un montaje tratado desde su propia perspectiva.
De esta manera, se realizan espacios de conversación entre los profesores donde se
exponen y argumentan los por qué y los para que de la puesta en escena, ya que de
esta manera, los estudiantes de las escuelas participantes pueden observar más de
cerca estéticas, técnicas y demás.
Otro espacio interesante es el encuentro de Docentes, organizado por los
estudiantes, para que las escuelas sean conocidas un poco más, para que los
profesores puedan conocerse un poco más y se puedan entablar contactos y temas de
reflexión acerca de los procesos de formación en actuación a la luz de los cambios que
afectan este campo como el cine, la televisión y los grandes espectáculos., por
ejemplo.
Presupuesto
Cada año, el equipo de estudiantes que lidera el proceso de producción del Setkani
tienen a su disposición un recurso establecido por la Escuela para dar inicio a la
organización del mismo, sin embargo, como parte del proceso de formación, los
estudiantes deben enviar las cartas y hacer los debidos procesos ante instituciones
claves que cada año aportan o apoyan el evento como el Ministerio de Cultura,
administraciones locales, emisoras, restaurantes, entre otros, para conseguir el resto
de los recursos económicos para cubrir los gastos que van desde el hotel para los
visitantes hasta los afiches de publicidad.
Sin embargo, durante el evento, se generan unos ingresos con diferentes estrategias
de marketing como venta de las entradas, a bajos precios, dulces, llaveros, bolsos,
accesorios y demás elementos que se propongan por parte de los estudiantes
organizadores. De esta manera, se aseguran que se pueda tener recursos extras que
de alguna manera, ayudan a darle continuidad para el siguiente año al hacer buen uso
del gasto.
Conclusiones a esta mirada.
En este caso, el del Setkani Encounter, existen elementos suficientes para plantear
que este evento es el resultado de apostarle a un proyecto ambicioso que propende en
beneficio de los estudiantes ya que estos se han apropiado de tal modo que han
reconocido allí un espacio que fortalece no solo vínculos entre países cercanos y
lejanos, si no los procesos de aprendizaje fuera del aula de clase convirtiéndose no
solo en una experiencia pedagógica de gran alcance sino un en gran evento de ciudad.
En la actualidad, el Encuentro Internacional está en su plena madurez en su versión
número XXV y presenta un alto nivel de consolidación.
La Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia con su Departamento de
Teatro ha logrado participar en tres ocasiones, siendo la más reciente en abril
del presente año 2015.…Esta vez, fue posible tener la calma de detenerme a
observar con más detalles el engranaje de cada estamento dirigido a que todo
saliera de la mejor manera. Pude así constatar como una de las características
de este evento es que todo es liderado por una estudiante. Al conversar con ella
después de la ceremonia de apertura, pude darme cuenta de la pasión y el
deseo que despierta ser el líder de este proceso.
El trabajo en equipo es fundamental, por lo tanto, el ser un líder y desarrollar
las habilidades del mismo, hace que estar al frente del Setkani sea un privilegio.
De esta manera, también resulta importante el detalle de que todo este proceso
de llevar a un solo espacio escuelas de teatro, sea orientado por un grupo
conformado solo por estudiantes de diversas áreas, esto hace que se articule
desde diferentes miradas con miras a un proceso no solo operativo sino de un
proceso personal de aprendizaje que le permitirá más adelante sacar a flote
todas sus capacidades. Es así como vemos los estudiantes activos dentro de
sus capacidades y saberes propios de su área aportando al éxito del evento y
no solo recibiendo órdenes. Por lo tanto, su aporte es tenido en cuenta y
apreciado por el equipo.
Otro factor importante, fue apreciar como toda la responsabilidad era de los
estudiantes y no recaía en los profesores, quienes, según supe, orientan este
proceso desde sus clases con aportes desde su propia experiencia. De esta
manera, los conceptos asimilados en la teoría pueden ser comprobados en la
práctica dentro de un espacio de formación tan contundente como el Setkani.
De esta manera, entiendo como es de importante la labor de trabajo en equipo,
la relación de los estudiantes y sus propios saberes al objetivo común, inclusive
durante el tiempo académico antes de la realización del Encuentro, la valiosa
relación de los docentes con los estudiantes que permiten que el estudiante
tome sus propias decisiones. Esto último, hace parte de una estrategia de
formación clave que permite al docente pensar en su alumno como un sujeto con
altas capacidades e integrador de su entorno a su proceso de aprendizaje.
(Bitacora de viaje, 2015)
El equipo coordinador era de estudiantes
A pesar de tener experiencias en anteriores participaciones en festivales y
encuentros de esta índole, los cuales ya tienen una infraestructura conocida por todos
los participantes como es la inauguración, palabras del director y la muestra cada día
de cada escuela participante y en algunos casos, charlas de los profesores directores,
la primera sensación que nos invadía era de sorpresa o de extrañeza en algunos
aspectos que empezaban a surgir, pues aunque queríamos involucrarnos en el
Encuentro, nos era un poco difícil pues las dinámicas de este espacio eran diferentes a
las conocidas por nuestra propia experiencia en organización en eventos similares. En
particular, nos sorprendió que las personas que dirigían el proceso de organización del
evento que nos presentaban eran estudiantes de algún programa, quienes
desempeñaban los cargos de acuerdo a su formación y en las actividades del
encuentro como:
Gestión Cultural y Management Teatral.
Técnicos de Escenografía e iluminación escénica
ATD: Especialidad en que los estudiantes estudian fotografía, cámara, rodar
películas etc.
Dirección Escénica
Dramaturgia.
Actuación.
Comunicador Social.
En un momento del encuentro tuvimos la oportunidad de oír a la coordinadora del
evento:
…” la persona que lideraba el evento era una estudiante del pregrado de gestión
y management que estaba ya en su última instancia para graduarse. De esta
manera, también pudimos conocer a la directora del Setkani de ese año,
acercándosenos a saludarnos manifestándonos su sentimiento de
agradecimiento por participar dado la que nuestra presencia significaba no solo
la posibilidad de establecer nuevas relaciones con otras escuelas, sino la
posibilidad de crecimiento del Setkani hacia nuevas perspectivas para otros
Setkani que vendrían en próximos años”
La sincronización y el trabajo de equipo
Contrariamente a lo que emerge en ocasiones respecto a la duda respecto al lugar de
un estudiante en la organización de un evento, en esta experiencia surgia ante
nuestros pasos numerosos ejemplos de diferentes grupos de estudiantes claramente
sincronizados y articulados, que atendían a los asistentes y distribuían los participantes
con claridad,
“…cuando fuimos llevados al Infocenter, lugar epicentro de la
organización localizado en la parte principal de la escuela, un grupo de
estudiantes de la escuela prestaba el servicio a los grupos de invitados
como entrega de escarapelas, material de información sobre los
espectáculos, venta de boletería y todo lo relacionado con la información
pertinente del evento. Lo curioso era que todos eran estudiantes de la
escuela que se movían “como hormigas”, de manera sincronizada y
atenta por todo el lugar. La actividad allí era constante y era evidente la
organización y la planeación pues en el fondo se podía ver una gran valla
con los nombres de patrocinadores del evento y un tablero de acrílico con
fechas, nombres, lugares, indicando que debían estar atentos a los
detalles de los grupos invitados”.
El lugar de los docentes en el Encuentro:
El lugar de los docentes en la experiencia que focalizamos acá, llamó mi atención ya
que la presencia de estos durante el festival era participativa, orientadora y no de
dirección:
“ al igual que cualquiera de los asistentes, los acompañamientos a los
momentos de las obras se hacían con todos los estudiantes haciendo sus
filas, compartiendo con los estudiantes de la misma manera que hacían
todos”.
Parece emerger así una manera de ser docente, como acompañante, esto claro está
en una de las fases del proceso formativo, lo se reconoce aquí, como una posibilidad
para retomar, es posible que en la formación en Gestión Cultural entender la formación
de nuestros estudiantes, desde espacios que permitan el acompañamiento como una
estrategia permanente que busca una mejor preparación, en unos territorios con unas
particulares muy específicas que se encuentran vinculadas a procesos arraigados por
el tiempo. Es el caso de Turbo donde se pueden observar los encuentros y
desencuentros entre la cultura tradicional como el Bullerengue y la cultura popular de
los tablados y el vallenato, por ejemplo...
Dinámicas académicas articuladas al evento
En nuestra experiencia, el proceso formativo regular muchas veces interrumpe,
cuando se abre el escenario de acción, por el contrario en esta experiencia, las
dinámicas académicas, formativas se mantienen en el proceso del evento, de manera
que se constituye en un escenario de formación en la acción.
“ ….este momento , nos permitió establecer cómo las dinámicas
académicas – formativas se mantenían durante los días del evento, ,
fuimos contactados para realizar un par de entrevistas que hacían parte
del canal de televisión TV Encounter, en el cual se detallaban los
pormenores y detalles que ocurrían en el transcurso de la semana del
Setkani. Fue un interesante constatar que este espacio estaba a cargo de
un profesor cubano residente allí hacía más de veinte años, el cual que
cubría la nota de cómo fue nuestra llegada al encuentro, los detalles de
nuestro performance.
De manera particular pudimos ver que la intención de esta actividad
era doble: informar sobre los diferentes momentos del evento y
constituirse en un espacio práctico de aprendizaje a un grupo de
estudiantes del área de comunicación social. Temas como hacer
entrevistas, edición, manejo de cámara y sonido, relacionados con el
cubrimiento de medios de comunicación y producción audiovisual,
emergieron y se articularon. El docente encargado aprovechaba esta
ocasión para enseñarles a sus estudiantes como realizar una entrevista,
como hacer las preguntas pertinentes, como manejar el micrófono, como
desenvolverse ante la cámara, el profesor, dirigía, corregía a un
estudiante que le proponía donde poner la cámara, buscando un mejor
ángulo para la entrevista”
De esta manera, se aprovechan las oportunidades que brinda el Setkani Encounter
para la preparación y el aprendizaje de los estudiantes a su cargo en un espacio
práctico real.
Situaciones emergentes que se vinculan al proceso formativo
Uno de los asuntos que llamaron mi atención en la porosidad del proceso
formativo – evento y situaciones emergentes, lo que parece constituir un momento muy
claro de flexibilidad que permite la vinculación de situaciones a la formación del gestor
cultural.
“…..entonces, pudimos entender lo que pretendía la situación:
Aprovechar el momento para explicar cómo en una clase, ya que en 20
años de vida del Encuentro Setkani, era la primera vez que participaba un
grupo de Latinoamérica. La charla pretendía además del encuentro con
los invitados especiales, -nosotros-, ser un espacio de aprendizaje a
través de la historia de cómo dos profesores colombianos llegan a una
ciudad y evento teatral poco conocido. Este encuentro se realizó en un
restaurante, a la hora del almuerzo, el cual fue buscado por el mismo
docente, se trataba de un lugar antiguo similar a una bodega. Nuestra
acompañante nos contaba la historia de ese lugar, Y luego nos
preguntaron acerca de los detalles de nuestra escuela, buscando la
historia detrás de la historia, algo que le pudiera servir para darle
información a la estudiante que haría de presentadora, contrario a lo que
pensábamos, él docente aquí solo era un guía para los estudiantes que
los acompañaban. La entrevista la realizó una chica, que preguntaba en
checo mientras nuestra traductora o el mismo profesor nos traducía”.
Lo mismo ocurrió en el teatro, antes de la función para el público del Setkani, donde
seguía nuestros pasos con la cámara, como un pequeño documental sobre nosotros y
nuestra experiencia. El profesor cubano les proponía la idea, pude percibir, era crear
una pequeña puesta en escena para durante nuestros ensayos y preparación de la
obra. Él estaba atento a todos los detalles, los estudiantes preguntaban y el, muy
presto, los orientaba para que todo saliera muy bien.
“Como centro de la nota para el TV Encounter, podíamos tener de
cerca las acciones y movimientos del profesor cubano, quien se movía
con destreza para dar indicaciones y corregir a sus estudiantes en el
momento preciso, de manera que no solo se lograba una nota excelente
para el Setkani, sino que, además, se permitía el espacio académico para
sacarlo del aula de clase”
Esta vez la historia, la llegada de una par de profesores colombianos era la excusa
perfecta para que los estudiantes pudieran desarrollar habilidades relacionadas con su
quehacer académico en un espacio similar a un set de televisión, como normalmente
ocurre con los estudiantes de periodismo en nuestro contexto. Era el espacio
adecuado para que una de las estudiantes asumiera el rol de entrevistadora, mientras
que el profesor corregía manejo de cámaras, sonido, luces y demás, en un ir y venir
para que sus estudiantes pudieran obtener una buena historia: la de dos colombianos
que llegaban por primera vez a un encuentro de estudiantes de una Facultad de artes
que nunca habían tenido escuelas de teatro latinoamericanas en sus escenarios. Era la
historia perfecta para practicar.
Pudimos percibir así, como se relacionaba las dinámicas propias del Encounter con
las posibilidades formativas que generaba los espacios del mismo, en la que eran los
estudiantes los que se apoderaban de toda la situación en la cual el objetivo es el
proceso del aprendizaje en un ambiente real pues, según nos contaba el mismo
profesor, “la responsabilidad de los estudiantes es grande, al hacer este tipo de
ejercicios durante el Setkani Encounter, pues de ellos depende la memoria del evento.
Con esta responsabilidad en sus manos, el festival puede crecer al tener que, al final,
poder entregar en videos, los archivos con las memorias de lo acontecido durante los
cinco días del Encuentro”.(Morales Rodrigo. Setkani Encounter. Abril 2010)
Lo que surge de manera particular respecto al interés de este trabajo es el hecho de
que la vinculación de los estudiantes como actores principales y responsables del
encuentro, permite en este caso, que el empoderamiento de lo que se hace, sea
efectivo, funcional que no solo relaciona a los estudiantes en un evento, en labores
operativas; entregar un material, registrar personas, orientar en los espacios, sino con
la posibilidad de la reflexión sobre lo que se hace y como se hace. De esta manera,
empezábamos a entender la aparición de las diferencias de este Evento con otros
encuentros académicos de este tipo; la importancia que empiezan a tener las acciones
de los estudiantes no solo desde lo operativo, si no desde lo formativo.
Procesos interdisciplinares como experiencia
Una de los exigencias contemporáneas en toda profesión, pero que además es
particularmente fundamental en el ejercicio de un gestor cultural es el dialogo
interdisciplinar, otro momento del Setkani Encounter, pudimos observar la participación
masiva de los estudiantes de todos los programas de la escuela pues se trataba del
encuentro con profesores, espacio donde se podía compartir con otras escuelas, no
solo desde lo artístico, lo expresivo, sino desde la formación de estudiantes de teatro.
Allí se convocaron otras escuelas, compartiendo su historia y sus experiencias de
formación en teatro.
“…los estudiantes de dramaturgia y de dirección escénica fueron los
encargados de tener todo listo para recibir a los docentes y
representantes de las Escuelas invitadas. Estaban totalmente conectados
en atender a todos desde la comida ofrecida a tan distinguida audiencia,
el material que cada uno necesitara, las traducciones, las presentaciones,
las memorias de la charla, todo esto muy planeado por la estudiante
coordinadora del Setkani, quien lideraba lo mejor posible este espacio.
Fue allí donde no solo pudimos conocer a la directora del evento quien
se dirigió a los docentes abriendo el espacio con unas palabras muy
precisas dando la bienvenida y recordando la importancia de ese espacio
donde los profesores podrían aprovechar para el intercambio de saberes y
así fortalecer el encuentro”.
En otros momentos del evento, la participación de estudiantes de otras
escuelas y formaciones era claramente identificable lo que mostró a nuestros
ojos, las múltiples interrelaciones y vinculaciones de saberes en el desarrollo del
mismo
” … los cinco días del festival se consumieron, y al igual que en la
ceremonia de Apertura, con la ceremonia de clausura, la presencia de
todos los estudiantes participantes era manifiesta, en las palabras de la
directora de Setkani y la participación de los estudiantes de actuación y de
escenografía, encargados de estos dos rituales, en los cuales
desplegaron todas las herramientas artísticas tomadas en las aulas para
plasmar en ellos, una festividad que permitiera llamar la atención en las
calles y en el protocolo, lo que para todos los partícipes, significaba no la
clausura sino la preparación inmediata del siguiente Setkani”
El proceso de participación en este evento movilizó, en nuestros cuerpos, mentes y
corazón, grandes interrogantes acerca de este espacio que descubrimos en un país
lejano y que nos permitió entender las posibilidades que pueden aportar a nuestros
propios procesos. Lo vivido allí nos demostró que vincular a los a los estudiantes a un
evento se convierte en un proceso clave de formación, que relaciona realidad,
saberes, situaciones emergentes, diferentes profesionales en sus respectivas áreas.
Finalmente esta experiencia recuperada aquí para la reflexión, indica una referencia
posible para la formación en Gestión Cultural, una manera de entender la formación de
nuestros estudiantes, desde espacios que permitan el acompañamiento como una
estrategia permanente que busca una mejor preparación, en unos territorios con unas
particulares muy específicas.
Así la experiencia de participar en el Setkani Encounter permitió reflexionar acerca
del papel del estudiante no como un simple operador que cumple unos roles dentro de
una maquinaria para lograr un objetivo, si no como un sujeto capaz de tomar
decisiones. A esto debemos apuntar en relación a la formación de la Gestión Cultural.
Procesos organizativos, de circulación de información, más allá de las
jerarquías y como tejido articulador del encuentro.
Teniendo el antecedente y la experiencia de la primera participación, se dio la
posibilidad de participar por segunda vez en el Setkani en el año 2012 con dos
alumnos de la Facultad de Artes quienes prepararon un ejercicio teatral para
representar a la Universidad de Antioquia en el certamen. Como participantes en la
programación, debíamos estar más enfocados en la responsabilidad de las
presentaciones, de los ensayos, de la preparación de utilería, en fin, estar enfocados
en hacer una muy buena presentación, esto nos permitió, al estar más inmersos, en el
encuentro ver como los mecanismos que articulaban el mejor funcionamiento del
Setkani, giraba en torno a los informes que debían pasar a la directora los guías o los
encargados de cada país, reportando sus necesidades, problemas, aciertos y en
algunos casos, exigencias:
“… pudimos constatar cuando solicitamos unas rosas para tener en la
escena, que estaban pedidas desde el inicio de la convocatoria. Al no
tenerlas en la preparación de la puesta en escena, nuestra acompañante
paso el informe a la directora y esta a su vez, llamó a la estudiante que
había estado en contacto con nosotros antes del viaje, para saber qué
había pasado, así muy rápidamente se determinó que la chica
responsable no había pasado el dato de nuestra necesidad.
En este proceso pudimos comprender la importancia de la comunicación en la
organización del encuentro, de cuál es su sentido , así se identifica que la información
circula para tomar decisiones, no para determinar quién dirige, asía, poder entender
esta faceta del Encuentro, permitió entender, como cada miembro del proceso
sostiene por la comunicación en pos de un mismo objetivo, esta manera de operar
surge como referencia clave para considerar los procesos de determinación de
responsabilidades y la toma de decisiones en un proceso de este tipo
Desde esta perspectiva, las posibilidades formativas que puedan ser aplicadas como
una posibilidad a la interrogante relacionada con la formación de los gestores culturales
en nuestro contexto, poco a poco se van haciendo visibles en el Setkani Encounter
cada vez que nos adentramos en sus características estructurales.
La Experiencia del Encuentro, más que un momento en clave de evento.
Uno de los aspectos que emergió, como una particularidad del encuentro Setkani,
fue el sentido de continuidad del proceso, lo que lo articula muy claramente a una
concepción de proceso y no a una acción práctica. Esta continuidad se dejó ver de
manera muy explícita en el evento de clausura, donde el aula máxima se articula en un
evento de clausura y a la vez en la apertura del siguiente, donde en un acto colectivo,
se valida el evento como un momento especialmente significativo para el grupo
organizador, pero también para Escuela Jamu, donde los estudiantes emergen como
actores a los que se les entrega una responsabilidad y a la vez ellos reconocen esta
como un privilegio que valida su saber y lugar en la Escuela que los ha formado.
”… observar el ritual de la ceremonia de premiación, realizado al final
de encuentro, iba más allá de la participación como estudiantes de la
Escuela, se trataba además de la entrega de la organización del
encuentro del año siguiente, al nuevo grupo de estudiantes encargados
de la organización. La recepción de esta responsabilidad se acogía con
gran aprecio y orgullo. Esto, entonces, pasaba de un acto ceremonial, a
un ritual que involucra a los estudiantes de gestión cultural y
Management al compromiso de mantener vivo este espacio año tras año.
Desde la lúdica se entregaron varitas mágicas de Harry Potter,
medallones heráldicos; objetos que simbolizaban la oportunidad de que
ese grupo de nuevos estudiantes pueda darle la continuidad a este
proceso. Podía verse en sus caras el cansancio de una ardua labor
durante los cinco días donde se duerme poco pero se aprende mucho, la
satisfacción de haber podido llevar a cabo su cometido”
Es posible afirmar que toda acción que allí se haga, por más mínima que sea, es
valorada como un aporte valioso a la construcción del proceso, que se reconoce como
un valor colectivo y como un lugar de la propia formación.
Desde nuestras orillas: Sistematización de la experiencia del curso Artes
Escénicas para Gestión Cultural: Caucasia, Envigado y Turbo
El acercamiento reflexivo al curso de Artes Escénicas en el pregrado de Gestión
Cultural, ofertado en las sedes regionales de la Universidad de Antioquia desde el
año 2010 hasta el más reciente en junio de 2015 es una gran oportunidad no solo para
los estudiantes del pregrado de Gestión Cultural de acercarse a las artes, en muchos
casos por primera vez, sino también para nosotros como docentes fortalecer la triada
gestión-territorio-formación.
Este curso de Artes Escénicas, centrado en el teatro como campo disciplinar
fundamental, aparece en el pensum de la carrera como parte del proceso formativo del
Gestor Cultural, con la intención de fortalecer la creación de líneas de acción,
investigación y exploración, la vinculación de los estudiantes a procesos creativos,
metodológicos y técnicos dentro de su formación profesional. y abrir así sus campos
referenciales en los ámbitos laborales posteriores. Pero para lograr este objetivo, se
requiere no solo de un trabajo práctico donde el estudiante perciba en las Artes
Escénicas algunas herramientas de la profesión del teatro sino que además pueda
reflexionar acerca del proceso personal y de la experiencia estética que la clase le ha
brindado.
Por lo anterior, se hace valioso poder realizar una sistematización de la propia
experiencia del curso pues es desde allí donde es posible reflexionar acerca de las
fortalezas y debilidades de un proceso que se ha caracterizado por ser un espacio
esperado por los estudiantes con gran expectativa en el cual pueden identificarse con
los contenidos que allí se ofrecen pero con el siguiente ejercicio también es posible
entender desde que óptica es seguirlo u orientarlo, cuáles son sus verdaderos impactos
y su verdadera relación con la formación de los Gestores Culturales.
De esta manera, a partir del análisis y reflexiones que surgen de este ejercicio, es
posible que el curso deje de verse como un espacio de esparcimiento o una catarsis
que libere deseos contenidos y se pueda orientar a una acción que genere alto impacto
no solo en el ejecutante sino en aquellos que tengan contacto con él, entendiéndolo
como una actividad ideal para el desarrollo de las competencias sociales,
comunicativas y un potente componente motivador.
Recuperando la experiencia La Bitácora
En la ruta de construcción reflexiva de esta investigación, se retoma el análisis
realizado a las narraciones registradas en bitácoras personales de los estudiantes,
acerca de las experiencias vividas con el curso de Artes Escénicas. Las bitácoras
fueron la elección realizada como parte de una estrategia de seguimiento, adaptada a
las condiciones de ofrecimiento del curso tiempos de encuentro, la distancia, el entorno
y la población18.
Al iniciar el curso de Artes Representativas se hizo imprescindible encontrar un
derrotero que permitiera un dialogo entre el docente y los estudiantes con el fin de
precisar acuerdos y que se hablara el mismo “idioma” Se cita lo anterior para hacer
referencia en este caso, a una labor que se iniciaba con estudiantes de sexto semestre
del pregrado de Gestión Cultural en jornadas de ocho horas en fines de semana.
Así la bitácora19, se propone a manera de diario de campo, es una herramienta
clave en la formación de estudiantes de teatro en algunas escuelas y en particular en el
Departamento de Teatro de la Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia, siendo
un articulador de suma importancia en la comunicación entre el docente y el estudiante.
Esta posibilita un dialogo permanente que va más allá del vínculo dentro del aula de
18
A los diferentes programas que ofrece la universidad de Antioquia en Regiones, llegan estudiantes que deben viajar desde regiones muy apartadas del lugar donde se ubica la sede principal. Adicional a esto, muchos de ellos son docentes, funcionarios públicos o personas con diferentes ocupaciones que ven en los programas de la Universidad la posibilidad de profesionalizarse. De esta manera, el único punto de encuentro se da en las clases los viernes, sábados y domingos.
19 El cuaderno de bitácora oficia como la memoria acumulada de las experiencias recibidas y producidas por
cada estudiante a lo largo del desarrollo de la materia, permitiendo además a los docentes contar con un medio complementario y útil de evaluación del proceso de aprendizaje. Este conjunto heterogéneo de textos, colores, grafías, agrupamientos, etc., son señales de la impronta personal del estudiante, el resultado directo de su pensar, su estilo, su individualidad.
clase y desde allí fortalecer el proceso académico encaminado a obtener conciencia de
un mejoramiento profesional desde el ejercicio de la escritura que brinda una
autorreflexión, la autodisciplina y la comunicación. Incluir este elemento didáctico
posteriormente en las clases enriquecería el proceso pedagógico en la medida que
como docente, al leer sus reflexiones personales, podía ir encausando el curso de
acuerdo a las mismas. Fue así como surgió la iniciativa de replicar el uso de la
herramienta de la Bitácora en la clase de artes escénicas con el grupo de estudiantes
del pregrado en gestión cultural en los diferentes espacios en los que se ha realizado,
con el fin de sistematizar las clases, esta práctica generó información interesante a
nivel pedagógico ya que, además de ser fundamental en el proceso evaluativo del
curso, se observaron muchas reacciones inesperadas las cuales posibilitaron abrir
nuevas visiones frente a un campo desconocido para muchos de ellos hasta ese
momento.
Uno de los aprendizajes más significativos registrados en este ejercicio, fue la
comprensión de la importancia de las artes en su formación como gestores culturales,
en una región como Envigado tan necesitada de acciones pertinentes para explorar
sus recursos artísticos y culturales:
Ha habido un gran aporte de tiempo y energía por parte del docente, lo cual
es muy positivo para el trabajo creativo del grupo de Gestión Cultural. Ese
aspecto es muy notable porque aporta nuevos conocimientos en artes escénicas
a todos los compañeros. Estos aprendizajes se hacen cada vez más propios, lo
que se ve reflejado en la coreografía, como de los elementos expresivos del
teatro.
Se ha comprendido que la comunicación y la enseñanza, más que una
transmisión de teorías y palabras, constituyen un lenguaje que se puede
experimentar tanto desde el cuerpo, como desde las intervenciones artísticas
que hacemos con los otros. Esto nos aporta nuevas estrategias para nuestra
profesión y hace parte de una nueva forma de acercarse a las realidades.
(Bitácora de José Pablo Montoya Quintero. Gestión Cultural VI. Envigado 2013)
Con el transcurrir del proceso, el gestor en formación va comprendiendo que se verá al
frente de una encrucijada: como gestor, podrá trabajar para que el Arte y la Cultura
sean la base de la economía simbólica de ciudades y regiones que compiten en la
captación de recursos, inversiones y turistas o bien seguir trabajando para que sean
una herramienta de inclusión cultural ante la exclusión económica, un factor de
cohesión y de integración social, un instrumento de transformación social.
El proceso de acercamiento a estas narraciones ha permitido la identificación del
ejercicio realizado y la construcción de categorías asociadas a los procesos más
significativos en la ruta de aportar a la investigación sobre la experiencia en la
formación de gestores culturales.
Es así, como este ejercicio se realiza desde la perspectiva como docente de un
curso que se viene ofertando como un espacio que permite al estudiante reflexionar
sobre su territorio y cultura, y además, configurar una experiencia de formación como
gestores haciendo Gestión Cultural en un campo especifico. El proceso implementado
vincula la formación a la realización del montaje y puesta en escena de una obra
teatral. El argumento que fundamenta esta concepción del ejercicio formativo parte de
considerar que se requiere implementar acercamientos desde sí mismos, en este
sentido, se busca incentivar la relación de gestores culturales en formación, con
experiencias como la de las artes escénicas, para estimular el proceso de la creación y
fortalecimiento de estos espacios colectivos como escenarios de su actividad
profesional en las regiones.
Lo anterior reconoce que las manifestaciones artísticas son una posibilidad para la
construcción y fortalecimiento de formas de encuentro, de mediación respecto a los
procesos que se enfrentan, posibilidades expresivas de las condiciones de vida de para
este caso, en las regiones, y que su implementación como experiencia en los gestores
culturales permite el inicio de la construcción de un campo de sentido y sensibilidad
frente a estas manifestaciones. Por esto asociar a los gestores culturales en formación,
a las dos acciones fundamentales de una producción de artes escénicas, el montaje y
la proyección de una obra teatral, fortalece la comprensión de las acciones que implica
un evento de este tipo, de manera que identificar y construir los roles , como el de
organizar y participar de un evento artístico y cultural, en este caso desde la puesta en
escena de una pieza teatral, permite identificar otros campos relacionados con los
propios contextos desde la organización de esta propuesta académica generada
desde el curso. De otro lado se implementan en una experiencia de este tipo, el
acercamiento a procesos expresivos que permitan reflexionar acerca de si mismo, su
cuerpo y su relación con el otro.
Lo que se presenta a continuación responde al proceso de construcción de
categorías emergentes en el acercamiento sistemático a las experiencias de estos
cursos en las diferentes cohortes y subregiones donde se desarrollan, y se ofrecen
como una recuperación reflexiva de la experiencia, como un reconocimiento del
trayecto vivido para pensar y fortalecer este ejercicio.
Enfoque orientador: relacionar Artes Escénicas- (teatro) - Gestión Cultural y
Territorio.
Cómo ya se ha dicho el curso de Artes Escénicas para gestión cultural se orienta
desde un enfoque que propone el acercamiento del estudiante de gestión cultural a uno
de los campos de su acción profesional, desde una manera que estimula la
comprensión experiencial de lo se gestionaría, en este caso, una obra de teatro.
Cabe señalar que la orientación del ejercicio es clara respecto a los gestores
culturales en formación, respecto a que no es un curso de teatro enfocado a la
actuación, sino un espacio que permite, de manera experiencial, acercarse interior
de un proceso de creación de un evento artístico teatral y las posibilidades que
emergen allí en favor de la formación desde la misma gestión y la posibilidad de
entender su propio entorno desde el arte.
“…pensé que se iban a trabajar otros asuntos y al enfrentarme o al enterarme
de que íbamos a ver teatro, pues fue por un lado un choque para mí porque
fue prácticamente el primer acercamiento que he hecho a la actuación, a hacer
un ejercicio de teatro, y por el otro lado fue un gran logro, debido a algunos
conocimientos teóricos que adquirimos allí y a la posibilidad de acercarnos a ese
mundo del teatro, donde además, convergen otras expresiones artísticas desde
donde puedo entender la Gestión Cultural de otra manera” (Bedoya, 2011)
Acercarse a un proceso artístico o cultural, en este caso, al de la puesta en escena
de una obra teatral implica identificar todo aquello que permite que se construya el gran
engranaje que constituye llevar a buen término una producción ante el público.
Al hacerlo, el estudiante de gestión cultural podrá identificar los elementos que
constituyen o entran a ser importantes con lo relacionado en la organización de un
evento de esta característica: artístico –cultural.
Es decir, el estudiante deberá pasar por un proceso que conlleva una preparación y
un conocimiento de ese espacio al cual se debe abordar como ejercicio que le
permitirá comprender la puesta en escena como una partitura sobre la cual existe un
entramado de elementos que permiten que esta pueda generarse, :
Como puede apreciarse en las palabras lo propone del director y dramaturgo del
colectivo Matacandelas, uno de los grupos más reconocidos del país, Cristóbal
Peláez20 en su Cuaderno de Reflexiones sobre la Cosa Teatral, publicado en el
periódico El Mundo en 1998: ….
Es importante consignar que de una misma partitura varía la representación
conforme a la interpretación del equipo artístico, que puede enfatizar o privilegiar
uno u otro de los siguientes aspectos: El texto, el actor, la música, lo visual, la
sonoridad, danza y movimiento, espacio escénico, aspectos sociales, aspectos
sicológicos.
Un texto dramático en su género y su estilo ya está dando las pautas de lo
que será su forma final, no importa que el director y la compañía quieran realizar
un nuevo experimento. Shakespeare puede ser rastreado bajo cualquier
envoltura.
21
La media máscara deviene de la Comedia del Arte. La Commedia dell'Arte es una forma de teatro de improvisación, que se inició en el siglo XVI y fue popular hasta el XVIII. Se creaba un escenario al aire libre para ofrecer diversión con una mezcla de malabarismos, acrobacias y humor sobre una base de personajes con una historia áspera de enredos, típicas de la sociedad.
El montaje así mismo puede estar condicionado por factores externos de lugar
y tiempo. La realidad social y la realidad geográfica casi siempre imponen sus
condiciones. (Pelaez, 1996)
De esta manera, cobra importancia el tema de lo relacional, pues no se trata de
acercar al estudiante de Gestión a un montaje teatral, no solo hablar de las artes, sino
de incluir la función de los gestores culturales, y desde allí entender la importancia del
arte como herramienta para dinamizar territorio y contextos.
Esta búsqueda, como parte fundamental del curso, se orienta desde entender la
importancia del trabajo en equipo se permite involucrar unas estrategias que van desde
la preparación física, que tienen que ver con el estudiante actor, pasando por el dilema
de escoger el texto o la historia contar. Esta historia será el “pívot” sobre la cual podrán
girar intereses grupales para contar acontecimientos, sucesos importantes, que den
cuenta de una realidad muy cercana a los estudiantes.
Y esto se puede dar desde que el mismo proceso permita el juego teatral con el cual
sea posible permear no solo a los participantes, sino al mismo texto, desde la
dramaturgia misma que puede ser modificada con otros textos, con nuevos personajes,
con nuevas lógicas que hacen que el texto se convierta en un pretexto para que,
desde el lenguaje de la Gestión Cultural, sea posible encontrar un nuevo discurso
reflejado en la puesta en escena
Se hace, entonces, fundamental la mediación del arte y de la gestión cultural como
estrategia que permite dinamizar y crear impactos importantes en espacios o territorios
que requieren ser intervenidos desde nuevas estrategias, como las que puede ofrecer
el arte, y en este caso el teatro.
Las Artes como herramienta de transformación de una comunidad, logra comunicar,
ser punto de encuentro de una comunidad especifica que requiere espacios para ser
escuchada y desde allí, el gestor puede hacer presencia.
En el proceso de desarrollo de la experiencia es posible diferenciar dos acciones
estructurantes del proceso: una que está relacionada con el montaje de la obra y una
segunda con la proyección de la misma, las categorías emergentes del proceso de
sistematización de la experiencia de los cursos abordados aquí, se agrupan en esos
dos campos. Cabe señalar como parte del proceso reflexivo de esta experiencia que se
entiende el rol del gestor cultural en función de la segunda, pero es un presupuesto
orientador de este ejercicio, el que las posibilidades de desarrollar una gestión cultural
de cara a la proyección, en este caso de una obra de teatro, requiere un acercamiento
a la experiencia teatral, tanto en el montaje, como en la de ser espectador. En el caso
de los contextos de las regiones, la proyección de obras teatrales desde un lugar
profesional es un hecho esporádico, ello adiciona al proceso de formación un
ingrediente adicional que podría nombrarse como formar público para la experiencia de
ser espectador de una obra de teatro.
Proceso formativo desde el montaje de la obra
El acercamiento al proceso del montaje de la obra, pone en juego los diferentes
momentos y capacidades a implementar para realizarla, estas van desde la conciencia
respecto al cuerpo como lugar personal que aporta a la narración, el texto y los
personajes hasta el conocimiento del lugar de la obra en el espacio físico, los procesos
administrativos que la acompañan y la confrontación con el público, ya que sin este, la
obra no tiene sentido.
Sensibilización desde la relación Cuerpo – Espacio
El proceso a implementar parte de reconocer que para actuar se requiere de una
preparación y sensibilización que permita darse cuenta de las posibilidades de su
cuerpo, de su voz y de la importancia de la presencia del otro. Para esto, se busca que
el participante se permita o se deje llevar al lenguaje de la escena desde técnicas del
trabajo actoral, que aunque son tomadas desde la preparación de un actor de
profesión, en este caso son tomadas para entrar en este diálogo.
Para lograr esto, se retoman algunas estrategias formativas del actor que permiten
una mayor comprensión, pero desde situaciones menos complejas como los juegos
teatrales, buscando que desde allí se logre tomar conciencia del cuerpo, también se
implementan juegos tradicionales, experiencias estas de sensibilización y conciencia
hacia la relación cuerpo - espacio:
“…El segundo día de clase en la mañana del 04 de agosto; se realizaron
varias dinámicas como “el pañuelo, la cola del zorro, cámara lenta y el túnel”;
otra dinámica consistió en dividir el grupo en dos partes que se ubicarían a lado
y lado del salón, en la mitad un pañuelo rojo que va a ser tomado por el más
hábil para su grupo; los compañeros están numerados secretamente entre sus
grupos para asistir al combate; en el momento en que el profesor dice el número,
los dos participantes oponentes acuden al encuentro y cuando se está tornando
más difícil, el profesor llama a otro número por ayuda, he aquí cuando se ve qué
tan coordinado está el trabajo en grupo porque mientras uno cubre, el otro puede
perfectamente tomar el pañuelo.
La segunda dinámica de este día fue igualmente para probar la habilidad de
cada uno, se trabajó individualmente, se colocaba una prenda a la altura de la
cintura en la parte trasera a manera de cola, cada quien debía cuidar su cola e
intentar arrebatar la de los demás; al final quien tuviera más colas y conservara
la suya sería el ganador. El espíritu de competencia y capacidad de reacción es
prioritario en este ejercicio.
Con la tercera dinámica se pretendió forzar el cuerpo a realizar una caminata
en cámara lenta; cada movimiento debía ser limitado a un tiempo que amarraba
la habilidad de los participantes. Todo ello requirió de muchísima concentración.
La última dinámica fue una mezcla entre el trabajo individual y el grupal se
debía tener la mirada puesta en lo que los demás hacían con el fin de buscar
esa centralidad y llenar el espacio. Mientras colocaban las manos arriba se
sentían en el espacio más alto, el punto medio fue tomado por los estudiantes
con las rodillas un poco flexionadas caminando como lo hacen los monos y el
estar en cuatro para la mayoría fue ubicarse en la posición más baja; caminaban
alrededor del salón en distintas direcciones; el caminar sin una dirección fija
mientras se tiene otras situaciones en que ocupar la mente, desconcentra al
participante quien termina por adoptar una ruta en forma de 8 que se hacía
rutina.
Esto muestra que las personas tienden a imponerse reglas y a adoptar
costumbres; explorar otras formas de recorrido requiere de mucha
concentración, los compañeros en su mayoría buscaban estar bien repartidos
pero fue difícil para el grupo cubrir el espacio proporcionalmente, estaban unos
más cerca de otros y siempre quedaban vacíos muy grandes. Al imaginar que
estaban en un túnel que se hacía cada vez más estrecho, el cuerpo se exponía a
vivir condiciones difíciles casi sofocantes, pero esos límites siempre fueron
mentales; los efectos de luz hicieron del ejercicio algo realmente dramático.
(Quintero, 2013)
También es posible la ayuda de estrategias teatrales para el trabajo del cuerpo como
La técnica de la Media Máscara Cotidiana21 que permite un acercamiento más de orden
personal, que en la medida que el participante logre entenderla y trabajarla, no solo da
la posibilidad de trabajar el cuerpo, sino que posibilita construcción del personaje y
ganar confianza con sí mismo y con los demás.
21
La media máscara deviene de la Comedia del Arte. La Commedia dell'Arte es una forma de teatro de improvisación, que se inició en el siglo XVI y fue popular hasta el XVIII. Se creaba un escenario al aire libre para ofrecer diversión con una mezcla de malabarismos, acrobacias y humor sobre una base de personajes con una historia áspera de enredos, típicas de la sociedad.
El trabajo de articulación entre lo corporal, la palabra, la creatividad, el juego y las máscaras, ha permitido elaborar un trípode de aplicación que contempla las máscaras, las escenas del ejercicio profesional y el cuerpo del estudiante que se pone en juego en el ejercicio del rol. Esta metodología da lugar en el escenario pedagógico a esa otra escena donde se considera la corporeidad como un territorio escénico, poblado de escenas, personajes y máscaras que responden a la historia personal y social del ejecutante y que puede involucrar a toda la comunidad.
Programa de mano La Farsa de Maese Pathelin. Artes Escénicas Gestión Cultural Envigado 2010.
Diseño: Daniel Pareja. Estudiante de Gestión Cultural VI. I Cohorte. Envigado 2010.
Algunos de los ejercicios que se le plantean al Gestor cultural en formación están
relacionados consigo mismos y con el otro y a la vez con su entorno, es decir, el
espacio teatral y su transformación, ya que estos dan razón de la importancia del
conjunto de elementos que la creación teatral implica.
El Teatro tiene una particularidad: que se trabaja con personas, personas con
personas y el producto es para personas, hecho por personas y las personas están
vivas, se torna en un hecho inherente, inexorable y vivo.
De esta forma, es posible que el estudiante de Gestión Cultural perciba de que las
experiencias de teatro, y las diferentes expresiones artísticas a las cuales puede
acudir, sea cual fuere el contexto social, se constituyen en una potente herramienta que
va mostrando la realidad a las comunidades o territorios en los que se desenvuelve, de
tal manera que pueda generar una conciencia de aquellos aspectos cotidianos,
positivos o negativos, no solo en los integrantes de un colectivo particular, pero que se
transforma en un objetivo consiente desde el grupo hacia su comunidad; desde este
punto de vista es posible generar una dinamización de los espacios comunitarios que
motivan la transformación social.
Es sumamente importante dejar en claro que estos aspectos dados en lo local,
poseen y deben perseguir objetivos que se relacionen con la realidad social, para que
posean un sentido transformador, de lo contrario se convierten en el mero espectáculo.
Es por esto que se plantea Transformación como un proceso que se da a nivel
individual, comunitario y social y por ende se entiende que las transformaciones
individuales se relacionan con las comunitarias, y que éstas se proyectan a las
sociedades y territorios.
Elección del texto a escenificar y relacionamiento con este desde los
personajes.
Luego de la etapa de preparación física y psíquica, como sensibilización requerida
para abordar la experiencia de la escena, se llega al otro momento que se relaciona
con la búsqueda del texto, la historia que se desea trabajar, lo que se busca narrar.
Este momento es el que más genera expectativa pues es allí donde convergen no
solo intereses, sino los deseos de contar algo, de asumir el reto de un personaje. Para
esta elección se genera un proceso que vincula el saber del docente y los intereses de
los gestores culturales en formación, se escuchan propuestas, se discute y se llegan a
acuerdos sobre el norte que se debe seguir en el proceso.
En la tercera parte hablamos de la obra para presentar en el montaje de trabajo
final. Una discusión que se extendió bastante sin poder llegar a un acuerdo
grupal concreto, algunos no queríamos descartar propuestas que se habían
comentado en el inicio del curso como la opción del teatro ciego o teatro de los
sentidos, otros preferían una puesta en escena tradicional, pero en el fondo
todos coincidíamos en aceptar nuestro desconocimiento del tema y que por ello
no alcanzamos a dimensionar la complejidad del montaje, sin contar el asunto
del tiempo que no está muy a nuestro favor. Decidimos de manera creo yo muy
sabia, dejar la decisión en manos del profesor que al fin y al cabo es quién más
conoce y tiene toda la experiencia.
El profesor se ha mostrado muy dispuesto a escuchar propuestas y atender
sugerencias, nunca se ha mostrado imponente o autoritario, mayor razón para
valorar su presencia como docente en el pregrado, pero lo necesitamos al frente
dirigiendo y moderando en este caso porque nosotros no vamos a poder
ponernos de acuerdo. Para concluir, el profesor propone una nueva obra dónde
podamos manejar el asunto del tiempo y acomodar de acuerdo a nuestras
habilidades, nosotros quedamos atentos. Salimos al almuerzo. (Bitácora de
Patricia Orozco Toro. Gestión Cultural. Envigado. I Cohorte. 2012)
Uno de los principales criterios para la elección del texto es que nunca es una
imposición del orientador del curso, siempre es un consenso en el que todos estén de
acuerdo, pues de otra manera, el proceso podría convertirse en una molestia y no en
un disfrute.
Un segundo criterio tiene que ver con la conexión con la cual el orientador y los
estudiantes, un texto, una historia o unos personajes, con los cuales todo el grupo se
sienta identificado o se sienta reflejado. De esta manera, esta conexión invisible
permitirá una mejor comunicación entre todos, permitiendo el fluir de las propuestas.
Un tercer componente podría ser la importancia de creer en el proyecto y en el
orientador que se encuentra fuera, escuchando las propuestas de todos y de esta
manera, tomar las mejores decisiones. Esto también se da en forma contraria en la cual
el docente orientador cree en las ideas y sugerencias de los estudiantes que aportan
desde sus conocimientos y propias experiencias.
De esta manera, se hace posible darle al texto una nueva mirada, una construcción
diferente cuando el estudiante lo aborda desde su propio deseo y se apropia de sus
conocimientos, de lo que allí se propone. El texto, o la historia se convierte en un
pretexto para asumir nuevos roles escénicos que permiten responder a la pregunta de
¿qué queremos decir con el texto?
Agosto 25 de 2012, siendo las 8:15 de la mañana el profesor propone
el trabajo sobre el montaje de la obra la farsa de Maese Pathelan,
resolvemos dudas sobre cómo tratar el texto que está escrito en verso y
sus personajes son del siglo XV, pero entre todos y las sugerencias vimos
como el tema central de la obra, puede ser traído a nuestro contexto. Más
cerca aun, a los acontecimientos que se dan en los pueblos de Medellín.
De esta manera, nos entregamos a las tareas de investigar un poco más y
damos inicio al montaje: primero el profesor nos da libertad de escoger el
personaje con que nos sintamos más cómodos, segundo la idea de
escenografía, la música y por último el vestuario.
Cada uno escogió personaje y quedamos Alexa, patricia, trinidad y yo
sin personajes el profesor nos dio la idea que fuésemos quienes
contáramos la historia al público como hilo conductor para los cambios de
escena y así fue; preparamos en tan corto tiempo personajes y textos
para las 5 escenas que tiene la obra, A partir de hoy me llamo Doña
Catalina soy una mujer que vive de apariencias y que no desperdicia
oportunidad para meterse en la vida de los demás como buena
(chismosa).
Empezamos a ensayar y me sentía muy cómoda trabajando con las
muchachas el profesor es una persona que nos aporta muchas ideas para
que exploremos más estos personajes, es toda una aventura, en la tarde
fuimos a bodega del Departamento de Teatro para buscar cómo vestir el
personaje me pareció complicado debido a que hay que ser muy
consciente de que no vaya a reñir con la obra, entonces cogí de todo y
todo fue descartado por el profesor así que vuelva y empiece pero la meta
era que me tenía que ir con mi vestuario listo. Por fin me acomode con un
vestido de color naranja con estrellas beige de corte señorero pero no
muy aparente el cual se acomodó a mi cuerpo a la máscara y al
personaje, esa tarde todos salimos con los vestuarios listos. (Bitácora de
Diana Puerta. Gestión Cultural VI. Envigado I Cohorte. 2012)
Me gusta mucho como está quedando el comienzo de la obra El otro
Hijo de Luigi Pirandello luego de todas las discusiones sobre cual obra
montar. Reconozco que fui muy insistente en imponer los temas que me
eran más fáciles o familiares por mi experiencia en el grupo Hermetus
Teatro como “Toque de Queda”, una comedia donde todos podíamos
estar. Pero me agrada la idea de repartirnos el monólogo y la partida de
los hombres. Algo que no pensé que podríamos lograr para hablar de otro
tema como Gestores Culturales a partir de nuestro contexto. Para muchos
es muy duro trabajar los domingos hasta tarde, pero deberíamos hacer un
último esfuerzo porque ya nos metimos en este trabajo y es bueno
sacarlo adelante, también es un reto para muchos. La propuesta del
profesor de meter otros textos como los monólogos de la obra Doña
Rosita, la Soltera ha permitido que mis compañeras que nunca han hecho
teatro puedan entender mejor como el teatro permite jugar desde la
dramaturgia para mejorar las propuestas. Me siento muy contenta de
hacer teatro desde otra perspectiva, desde lo que hoy estudio. (Bitácora
de Yesika María López. Gestión Cultural VI. II Cohorte. 2013)
Como lugar particular de la ruta a seguir, se privilegia más que pensar en un autor u
obra específica, se hace necesario responder a la pregunta en clave de gestión
cultural, es decir preguntarnos sobre que se quiere decir desde la escena que esté
relacionado con el contexto, con la época, con los acontecimientos del entorno, con los
deseos de sus habitantes, con las problemáticas de la modernidad. En fin, poder tener
una narrativa que permita que el texto se convierta en un “pre-texto” para reflexionar
acerca de procesos más íntimos o locales.
El texto teatral presenta unas características muy especiales en tanto no es
un texto con validez por sí mismo, como ocurre con la poesía y la novela.
Está pensado y escrito como texto para la representación,
independientemente de que sea o no representado. El autor desaparece por
completo, cediendo la voz a sus personajes, que deberán ser interpretados por
actores, con vestuario, escenografía, utilería, iluminación, música, efectos, etc.,
(siguiendo las indicaciones que el dramaturgo ideó).
No siempre se consideran estos aspectos en el comentario dramático, que
suele reducirse a un comentario literario, del texto, sin atender a los otros
factores que, sin ser estrictamente literarios, están de forma implícita (a veces
más que explícita) en el texto. (anonimo, s.f.)
Podría ser que para llevar a buen fin el curso, se podría montar cualquier texto o
cualquier autor que permita que simplemente el estudiante pase por la experiencia de
las artes escénicas asumiendo un personaje, realzando un ejercicio para cumplir con el
curso como sucedió en las dos primeras experiencias de Gestión Cultural en Oriente y
Turbo I Cohorte, en los cuales el espacio propuesto fue a partir de un cuento y un
performance en la playa, respectivamente. Hasta ahí.
Considero importante, en esta propuesta, que el gestor cultural en formación al
hacerse la pregunta sobre el texto y sobre su propio contexto, se permita ir más allá de
la idea del autor jugando con los elementos dramatúrgicos que allí se proponen para
que le permitan hacer otra lectura o interpretación.
El resultante puede ser un asunto formativo mucho más provechoso pues además
de ser un espacio más cercano, podrá hallarse en un contexto que abrirá nuevos
diálogos con los espectadores que buscan identificarse con lo ofrecido en la escena, ya
que, si bien es cierto que montar un clásico de Shakespeare puede ser interesante
para un actor en formación o profesional , para un gestor cultural que apenas se acerca
al lenguaje de teatro, puede serle útil e interesante si este, llevado a un contexto local,
puede generar reflexiones acerca de los conflictos de familia que llevan generaciones
en las regiones, afectando relaciones y generando nuevos conflictos, por ejemplo.
De esta manera, es posible que la creación de personajes, que asumen la voz del
autor, cuenten la historia desde un punto de vista mucho más local, más cercano al
propio contexto del estudiante será posible reinterpretar el texto con la creación de
personajes cercanos a él, entendiendo el contexto y sus fortalezas.
Por otro lado no debemos olvidamos hablar de la construcción artística de la
obra teatral.
A pesar de ser un texto construido por otras personas y pensado en otros
momentos la adaptación construyó y transformó la obra utilizando cada uno de
los rasgos de los personajes permitiendo el desarrollo de una obra fluida, que
atrapó la atención en cada escena y generó diferentes reacciones, hasta el
punto que la dramaturgia superó la ausencia de la iluminación y escenario.
(Bitácora de Gildardo Muñoz. Gestión Cultural VI. Turbo III Cohorte. 2015)
Entonces, el proceso creativo, orientado por el docente, se puede desarrollar no solo
desde el aporte de ideas para la puesta en escena, sino desde su propio re-
conocimiento de sus fortalezas y debilidades para proponer personajes que,
adaptados a un campo conocido, aporten a desarrollar lo que se quiere decir, en
colectivo desde lo individual.
Entender el contexto desde donde se trabaja, relacionar la obra y los
personajes con el lugar y sus problemáticas y dinámicas.
Como enfoque orientador de la ruta formativa se busca estimular el vínculo del
gestor cultural en formación, con las condiciones y experiencias de los lugares donde
viven y donde se busca que implementen su labor, esta ruta se expresa de diferentes
maneras , en el caso del montaje de una obra teatral, se fortalece el proceso de
articulación del lenguaje expresivo de las artes no como experiencia traída de afuera
que se instala como lenguaje hegemónico, sino como una posibilidad de estimular
procesos de reflexión colectiva a través de la apertura y vínculo con expresiones
creadoras de sentido.
En el proceso de elección del texto de la obra, se parte de señalar que lo
fundamental es traspasar la idea de espectáculo, se trata de encontrar un texto que
permita mostrarse no como actores formados, sino como gestores reflexivos por su
contexto. La manera de abordar esta búsqueda, es invitar a considerar un texto o una
historia como pretexto para llegar a un contexto más local o en algunos casos, más
universales, pero relacionados con lo local, es decir, que aporten a la comprensión de
la existencia. De esta manera, para el estudiante de gestión cultural que nunca ha
abordado las artes de manera directa, puede desde sus conocimientos previos,
proponer su propia mirada de un personaje o de una historia.
El verismo, no como representación fiel, sino como experiencia “autentica” del
actor, es otro aspecto que nos introduce al universo del oficio escénico, donde la
formación técnica, conceptual y estética es fundamental. Y hablo de oficio,
porque es precisamente a partir de este reconocimiento de la actividad escénica,
como un campo de trabajo y de quehacer profesional, que es posible
comprender y comprometerse con la complejidad creativa, pero también con la
complejidad gestora de los procesos de promoción, proyección, circulación y
sostenibilidad de un ámbito artístico que tiene intereses propios y específicos.
Llegar a la responsabilidad de asumir el rol del juez de la escena final fue
todo un reto ya que mi oficio de toda la vida como artista plástico no me permitió
sentir mi cuerpo y voz de otra manera que fuera la imagen. Pero con la ayuda de
mis compañeros y la experiencia del docente, logre asumir un papel acorde al
casting realizado como un juego en las primeras lecturas, por la edad y por la
voz. Transformado con la máscara y carpetas, para mí fue de gran ayuda crear
vínculos con los personajes de las chismosas para que pudiera estar más
seguro en la escena. (Bitácora de Luis Fernando Restrepo Garcés. Estudiante
Gestión Cultural VI. Envigado 2012)
Por ejemplo, un texto como El Otro Hijo, del escritor italiano Luigi Pirandello, puede
dar cuenta de una situación de las madres que quedan solas cuidando un pueblo
abandonado mientras sus hijos salen en busca de fortuna y nunca regresan pero al
mismo tiempo no presta atención al tercero, bastardo, nacido del bandido que degolló
a su esposo y la violó. Ese hijo en cuyo rostro ve al asesino, se ha quedado a su lado y
se desvive por ella. Esta fue la trama para uno de los procesos que fue retomado
como pretexto para hablar de las madres en Colombia, una situación que se repite a
diario.
Este proceso se da escuchando las expectativas de todos con relación a lo que se
aspira a montar para la muestra final. Luego de algunas discusiones en las cuales una
de las estudiantes, Yesika López, ampliamente conocida en el grupo por su trayectoria
en teatro independiente, comienza en una de las clases a proponer algunos textos
llevados más por sugerencia de su director , algunos textos como Toque de Queda o
algunos textos de teatro colombiano del grupo Colombiano de la Candelaria como
Guadalupe Años cincuenta.
Luego de leer textos similares el grupo no sienta afinidad con los temas propuestos
ni sienten que esos deban ser las situaciones por la complejidad que pueden tener para
la puesta en escena desde la concepción de los personajes, la escenografía y el
vestuario. Además, se argumentó que textos como Toque de Queda eran propuestas
demasiadas representativas abordadas desde conceptos muy superficiales como la
prostituta, el policía, el borracho, el homosexual o la sirvienta.
De esta manera, teniendo en cuenta un diagnóstico inicial de las potencialidades del
grupo y el interés de ellos como gestores, se lanzó la propuesta del Otro Hijo como una
posibilidad de indagar en un tema como el abandono de las madres, que luego de la
lectura, fue la situación que impactó en el grupo. Adicional a esto, temas como la
invasión a los territorios por bandidos que buscan poder y el dolor de las mujeres que
envejecen esperando el amor.
Un espacio vacío, vestuario sencillo y cuatro maletas fueron las herramientas sobre
las cuales se construyó una historia que dejó huella en ellos como actores - estudiantes
y en el público asistente al día del estreno.
Afiche promocional del montaje del curso Artes Escénicas de Gestión Cultural VI, El Otro Hijo de Luigi
Pirandello. Envigado 2013. Diseño y Fotografía: Jubert Palacio. Estudiante Gestión Cultural VI.
Envigado 2013
La obra de teatro nos acerca a nuevas posibilidades del lenguaje como a la
comprensión del teatro para las diversas manifestaciones culturales. Se ha
aprendido, por ejemplo, a desarrollar una gama de expresiones para el rostro,
como otra gama para las expresiones verbales. Por otro lado, se ha
comprendido la estructura de una pieza teatral como la de Pirandello, es decir, el
sentido de los diálogos, como lo que ellos pretenden generar en el público. Ello
llama la atención sobre otras dimensiones de expresión como el vestuario y el
maquillaje.
Es importante que el grupo converja sobre la responsabilidad de ejercitar y de
generar espacios para la configuración de la obra teatral. Esta será presentada a
un público y, por lo tanto, exige que sea perfeccionada, de no ser así, será una
obra muy floja, pues no alcanzará el potencial de expresión que el autor inserta
en ella y lo que nosotros queremos decir.
Toda obra teatral debe llevar consigo el signo de un gran esfuerzo, es decir,
de un trabajo interpretado que alcance las emociones del público y los
transforme por ese instante. Por esa razón, cada vez se debe ser más
consciente de lo que significa la disciplina, como de lo que somos en la
representación de una obra teatral. En este sentido, ha habido una buena
disposición por parte del docente, pero un bajo nivel de compromiso por parte
del grupo. El grupo debe generar estrategias para participar activamente de las
producciones de la asignatura, sin necesidad de que este cree escusas
constantemente. (Bitácora de José Pablo Muñoz. Gestión Cultural VI. Envigado
II Cohorte. 2013)
Otra experiencia interesante relacionada con la elección del texto, se refiere a la
reciente experiencia con el grupo de Gestión Cultural III cohorte Turbo 2015. Al iniciar
el proceso con el curso de Artes Escénicas, los estudiantes estaban entusiasmados
con la idea de recuperar una idea de un espectáculo que habían trabajo previamente
para otra clase en la cual hablaban de las diversidades de su región.
Al leer la propuesta, esta se presentaba como:
COMISIÓN ENSAMBLE Y MUESTRA GASTRONÓMICA. GESTION CULTURAL V
Integrantes
Lina Marcela Pereira Benítez, Alexander Torres Cuesta, Brahidis Córdoba, Stefany
Penagos.
Título: Urabá diversa: Etnias y Cultura una sola región.
PRESENTACIÓN
Este ensamble es la materialización representada desde algunas manifestaciones
artísticas con el fin de hacer una muestra de cada una de las etnias, pueblos o grupos
característicos que convergen en la región de Urabá.
Es la unión de música, sonidos en vivo y grabados de instrumentos y objetos.
Además fotografías, videos, representaciones teatrales, declamaciones y
escenografía que se unen en una sincronía para hablar de seres humanos, distintos
desde sus etnias pero semejantes al compartir el mismo territorio: Urabá.
JUSTIFICACION
¿Por qué un ensamble? ¿Cómo representar las estrellas si son redondas?
Con círculos, con puntas alrededor para demostrar la luz que nos refleja en las
noches. Representar a Urabá en un solo lugar es una tarea de mucha responsabilidad
porque se trata de hablar de todos y no de nadie en particular
OBJETIVO GENERAL
Mostrar a través de la danza, música, oralidad, teatro, gastronomía y escenografía
la diversidad étnica y cultural de la Región de Urabá, contando nuestra historia.
Con este insumo, el deseo y los aportes de todos desde el conocimiento de su
entorno, la orientación del profesor y la necesidad de decirle al público sobre la riqueza
cultural de una región, la propuesta se transformó y evoluciono al montaje teatral
Historias Impuestas, Memorias impuestas (título creado y propuesto por el grupo)
como un reflejo de entender desde lo aprendido en el tiempo que llevaban en el
pregrado, lo que significa para ellos no solo la región sino un país tan sufrido como el
nuestro. De esta manera, el grupo logra comprender que el término “Diverso” no es
solo de una región, sino de todo un territorio como el colombiano.
Para dar este sentido al texto, se propusieron además de los textos de los
estudiantes, otras miradas como las propuestas aportadas desde investigaciones cobre
el desplazamiento forzado en la región de Granada, historias recogida en un texto
teatral llamado Viajero de Ausencias de la licenciada Ángela Gómez, egresada del
Departamento de teatro de la Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia. De
esta manera, el texto se nutre de otras áreas artísticas propias de la región como el
Bullerengue para dar como un resultado, una pieza rica en historias e imágenes
impactantes para el espectador.
Afiche promocional de la Obra. Fotografías y Diseño Gildardo Muñoz. Estudiante Gestión Cultural VI.
Turbo 2015
La selección de la obra se concibe, entonces, como el lugar nodal del trabajo de la
puesta en escena y al darse el vínculo con el contexto, el gestor puede permear al re -
interpretar y explorar con el apoyo del docente orientador, contextos sociales y propios
al permitirles verse reflejados allí.
Recuperando saberes previos de los estudiantes gestores culturales al
montaje de la obra.
En cada uno de los procesos realizados con el curso Artes Escénicas para Gestión
Cultural, ha sido común encontrar uno o dos estudiantes que han tenido experiencia
teatral lo que podría facilitar acciones del curso pero algunas veces esta virtud se ha
convertido en un escollo que no permite el fluir de los temas o de los objetivos del
curso, ya que la ansiedad por tener un espacio para desarrollar su propio proceso
teatral no permite que se entienda la prioridad del tema. Es decir, entender el teatro y
las Artes Representativas como una herramienta que permite al gestor entablar nuevos
diálogos con la comunidad, proponer desde allí nuevas posibilidades de relación con el
entorno y su territorio y dejar la idea del espectáculo por el espectáculo.
Luego de que era posible entender cómo se podría articular el tema del Arte a la
Gestión Cultural, se hace posible entablar, entre docente y estudiante, una relación
más directa y un proceso pedagógico diferente con los integrantes del grupo pues si
bien con los estudiantes con experiencia teatral se puede avanzar de una manera, con
el resto del grupo se hace necesario otro tipo de relación donde se pueda realizar un
impacto más personal que grupal.
Lo que se desea lograr en este espacio de formación es más que un docente que
propone e impone una ruta de trabajo sobre la cual los estudiantes deben seguir la ruta
sin posibilidad de nada. Este espacio es para que el gestor en formación pueda
acceder a los conocimientos desde lo colectivo, aprender que el aporte del otro es
valioso y la relación docente- estudiante puede variar, puede ser una relación nivelada,
de tú a tú, en la medida que puede aportar, proponer y tomar decisiones asumiendo
responsabilidades compartidas donde el docente no solo acompaña sino que orienta y
estimula para que el proceso sea mucho más productivo.
Proceso formativo desde la proyección de la obra
Realizar un proyecto creativo como proceso de formación puede ser interesante en
la medida que los estudiantes logren los objetivos del curso pero este puede
enriquecerse con otras acciones que permitan al estudiante validar ciertos campos
adscritos al mismo proceso. Es decir, un ejercicio como el de salir del aula de clase
para realizar una segunda presentación en lo que se podría llamarse “proyección”,
dará al Gestor en formación la oportunidad de encontrase con otros campos que tienen
que ver con el contacto con otros públicos, otros contextos y relacionarse con sus
propios compañeros, fuera del aula de clase, de otra manera. Como ejercicio, se
busca con el ejercicio de participar en otro espacio, el gestor pueda involucrarse en los
elementos que son necesarios para esto: Liderar el grupo, tener información clara para
todos, lo pertinente al componente administrativo (permisos, cartas) y lo que fuere
necesario para poder realizar una segunda presentación fuera del espacio académico.
Como se dijo al inicio de esta elaboración, la proyección de la obra es un momento más
claramente vinculado al perfil del gestor cultural, es en este sentido uno de las
acciones que posiblemente desarrollara en su proceso profesional, adquiere en el
proceso formativo del curso que se sistematiza aquí, un lugar de diálogo con la
experiencia de montaje y la puesta en público.
De cara a los otros: confrontando en otros espacios.
El momento de proyección de la obra, es la posibilidad de salir del proceso de
creación, del trabajo personal y grupal a diferentes espacios. Esto estimula y permite
confrontar sus propias experiencias con otros, salir del aula de clase, ponerse en juego
en la vida del lugar de otra manera, permite al Gestor cultural en formación participante
de esta experiencia entender en la práctica conceptos tratados en clase de manera
teórica. Desde el ejercicio de la proyección, el gestor puede percibir otros contextos,
otros públicos que retroalimenten su propio proceso, lo que permite enriquecer su
experiencia personal.
En el ámbito de la formación artística, la proyección de un proceso creativo es tan
valioso como el producto mismo, pues este no sólo permite que el espectáculo sea
conocido en otros ámbitos, sino que permite el aprendizaje de todos componentes que
acompañan el mismo proceso de sacar la obra de su espacio local. Estos procesos van
desde lo administrativo (permisos, seguros, contactos) hasta lo operativo (consecución
de transporte, sitios apropiados, la publicidad, entre otros)
En los hechos, nos encontramos frente a algo diferente, y es la necesidad
desde la especificidad formativa de los gestores culturales, de entender la
complejidad del engranaje escénico que tiene un muy importante componente
formativo, pero en el que es fundamental el creativo, el de producción, el de
montaje, el de proyección, el de circulación y el de sostenibilidad. Y esta
comprensión, hablando desde lo personal y subjetivo, la posibilita el docente por
la confianza que ofrece en cuanto a su conocimiento escénico y a su capacidad
práctica para transmitirlo. Esto me ha generado un sentimiento y sensación de
inclusión, de novedad e innovación en el aprendizaje, hecho significativo y por
tanto conocimiento significativo. (Bitácora. Luis Fernando Restrepo. Agosto.
2012)
Uno de los casos que se pueden destacar donde los estudiantes de Gestión Cultural
pudieron estar comprometidos con la experiencia de proyectar su trabajo fue en año
2011 con el proceso de A la Diestra de Dios Padre en el Municipio de Yolombó para
participar en el festival de Teatro que allí se realiza año tras año:
Hola a todos ¡Ya se nos acerca la hora otra vez. Como pudieron ver en
el material que les envié, Ya estamos programados en el festival con otros
grupos nacionales e internacionales. Es un gran reto que tenemos que
sacar adelante. Ya le comente a Mónica sobre las fechas para los
permisos desde el 24 pues necesitan organizar equipajes y preparar
utilería y demás cosas. Les recuerdo que deben asistir a la reunión de hoy
a las 6 y 15 pues urge organizar algunos asuntos. Ya está organizado el
transporte desde la u pero hay que recoger dinero para gastos del viaje,
también el asunto de la estadía en Medellín. También es necesario
confirmar la participación del elenco para saber cómo se hacen los
ensayos y los posibles reemplazos ya que allá tendremos poco tiempo
para ensayos. Por favor, mucha comunicación entre todos, no dejemos
todo para última hora y recuerden la importancia del trabajo en equipo¡¡
un abrazo. (Josué Santamaría. Docente encargado del Curso Artes
Escénicas. Caucasia 2011)
De esta manera, se hace necesario que el estudiante comprenda que una
participación como estas requiere de liderazgos en la medida que ya el profesor
acompaña este ejercicio por voluntad ya que no existe un contrato pata esto.
Por lo tanto el estudiante de Gestión debe empoderarse de situaciones como:
Tramitar los documentos necesarios para conseguir desde la Institución, los
posibles apoyos como transporte desde Bienestar Universitario.
Mantener contacto permanente con el profesor y con los compañeros.
Tramitar los permisos pertinentes (de la coordinación del programa, de la
Institución educativa, de los profesores con los cuales habrían tenido clase)
Liderar los ensayos sin el profesor.
Buscar recursos económicos extras para imprevistos.
Estar atentos a que no falte nada de lo necesario para la obra (utilería, vestuario,
maquillaje)
Tomar decisiones relacionadas con el equipo de trabajo en ausencia del
profesor y notificarlas.
Ser líder de sus propios compañeros.
Esta preparación también implica asumir y solucionar las dificultades que se
presenten como cambios a última hora, comunicar con detalle y a tiempo decisiones
personales que afectan al colectivo, no tramitar asuntos a tiempo. Esto debe de alguna
manera, poner al Gestor alerta y decisivo en relación a sacar un proyecto adelante.
Además, la importancia de entender el trabajo en equipo es fundamental en este caso.
Muchachos por favor traten de asistir hoy a la reunión hora: 6:15 a más tardar
lugar udea., es importante saber con quienes se cuentan para este gran logro de
nuestra vida profesional de ante mano les comento q todo aquel q trabaja y
quiere asistir debe pedir el permiso desde el día jueves 25 y de retorno el día
lunes 29 o domingo para el q pueda pagar su pasaje de Medellín a Caucasia
también les digo que el q desee regresarle el domingo rápido Ochoa y Brasilia
tienen ofertas en sus precios"15.000"
.... .Me gustaría que todos podamos ir hagan lo q más puedan x asistir a Yolombó.
(Mensaje de Vivian Londoño, estudiante de Gestión Cultural VI, Caucasia al
grupo en Facebook. Agosto 10 de 2011)
Gestión Cultural VI sede Caucasia recibiendo reconocimiento por su participación en el XX Festival
Internacional de Yolombó Orlando Cadavid Restrepo. 2011 con la obra A la Diestra de Dios Padre,
resultado del curso Artes Escénicas. En la foto: actores y equipo técnico y logístico con el señor Párroco
de Yolombó.
Poder participar de festivales internacionales y universitarios, aceptar invitaciones a
espacios académicos, a actividades sociales22, como sucedió con la mayoría de los
procesos, es una oportunidad única de ver de cerca otros procesos artísticos, modos y
experiencias de gestión, la posibilidad de compartir con otros colegas estudiantes y el
poder asumir responsabilidades desde lo operativo y funcional que facilite su
desplazamiento sin dificultades.
Además de todas las posibilidades mencionadas anteriormente, salir con un
proyecto artístico proporciona reconocer otros territorios, modos de vida y dinámicas
22
Con algunos procesos se pudo participar en el XXV festival internacional de Yolombó en el 2010, dos veces en el Encuentro Nacional Universitario de la Teatro 2012 y 2013, Catedra Abierta, evento académico en Sonsón.2012 y 2015. Funciones en el teatro municipal de los municipios de Don Matías y la Unión. 2012.
diferentes en las cuales el Gestor se puede detener para luego de reflexionar sobre
ella, pueda tenerla en cuenta más adelante, en su vida profesional.
Las expectativas del proceso formativo de las experiencias vividas
Hay dos situaciones que emergen en la memoria de la experiencia vivida, en primer
lugar la expectativa que se genera de manera previa y lo que deja como marcaje
positivo posteriormente en su vida como egresado del programa o en su vida
profesional en la Gestión Cultural.
Lo anterior puede entenderse como la experiencia del curso aplicado que se espera
como lugar de inquietud en la formación, pues este emerge en algunos relatos de los
estudiantes participantes en que rememoran en su bitácora del proceso académico,
como lo señala un estudiante:
“…Aun no olvido que mi gusto por las artes representativas- desde mi primer
semestre - me mantuvo contando los semestres para que llegara este curso, y
se llegó el día y si, fue mejor de lo que esperaba” (Ferney Herrera, estudiante de
Gestión Cultural, sede Bajo Cauca. 2011)
En este mismo sentido de la movilización que la experiencia genera en el estudiante
de gestión cultural, llama la atención que la experiencia se reconoce como un dejar
huella:
“Desde el primer momento sentí tan buena energía, tanta tranquilidad, tanta
calidad pacificadora y humana, que quede sorprendido”
Esto se traduce a una reflexión interesante en la ruta de dinamizar los procesos de
gestión cultural en la regiones, la posibilidad de avizorar una posible continuidad de
experiencias de este tipo que permitan darle continuar a experiencias de este tipo y
consolidar escenarios de acción, lo que parece quedar es solo el recuerdo de lo vivido
que al ser de corto plazo -un semestre- tiene así un lugar de articulación a la
formación, pero la instalación en región no se constituye en un lugar deseable y
posible.
Lo anterior llama la atención en tanto que muchos de los estudiantes, a pesar de las
dificultades que produce el tener al siguiente semestre el curso de prácticas
profesionales, piensan y movilizar acciones orientadas a darle una continuidad al
montaje permitiendo la posibilidad de desarrollar su personaje, su vivencia de la
Gestión Cultural desde una de sus manifestaciones:
Hoy 2 de septiembre que estoy escribiendo mi última bitácora me siento
plena y feliz de haber sido capaz de tener un público dispuesto a verme
con otra faceta, a conocer otras fortalezas de mis compañeros y de haber
tenido la posibilidad de que mi profesor me enseñara a ver el teatro
desde adentro y con otros ojos a favor de la Gestión Cultural, Por ultimo
quiero dar las gracias a cada uno de mis compañeros incluido Wadell…
por haberme soportado y aceptado como soy. Los quiero de verdad y
estoy orgullosa de tenerlos como colegas. (Bitácora Diana Puerta,
Coordinadora de la Casa de la Cultura de Envigado. 2012)
Comprensión de lo teórico administrativo de la gestión cultural, desde la
práctica aplicada a la proyección de la obra.
Como en todo proceso de formación los conocimientos previos son posibilidades
para retomar, en el caso del curso de Artes Escénicas, es frecuente que surjan de parte
de los estudiantes participantes aportes acerca de la forma de abordar un evento,
como proponerlo desde un proyecto evaluable que le permite visualizarlo o proponerlo
en la teoría ya sea para una clase o para su entorno laboral, que están vinculadas a
sus experiencias y conocimiento del lugar.
Como generar conexiones entre estas maneras de conocer y las que se instalan en
el proceso de formación académico? En algunos casos se presentan dificultades de
relación y conflictos respecto a la toma de decisiones, posiciones de poder y afirmación
que bloquean y que generan bloqueos para el proceso, se convirtió en un ejercicio
constante de reconocimiento y vinculación de estos saberes previos y la articulación al
proceso, esta constante apertura en la perspectiva de la formación permite construir un
ejercicio de creación y gestión de manera participativa donde la acción no es de
instalación de acciones y decisiones en tono jerárquico, sino en una perspectiva que
estimula los procesos de comprensión, de dialogo de saberes y habilidades y por sobre
todo la articulación a un proyecto que se hace común en el camino.
“No mano estos si son agua fiestas pilas que yo hice lo posible por ir a
hora no me van a salir que no vamos y si ese es el caso avisen pues para
yo que darme tranquilo trabajando pues en Yarumal y ya tengo
compromisos en ese sitio con el Sena. Miren, ni siquiera tuve en cuenta
que Ferney y Carmen Mendoza me estuvieran buscando reemplazo
sabiendo que yo había dicho que si iba desde el primer momento pilas
seriedad pues. (Mensaje de Yoani Alexi Gamboa, estudiante de Gestión
Cultural VI, al grupo en Facebook. 19 de agosto 2011)
Yo había tenido la fortuna de hacer teatro antes del curso, pero luego de
terminarlo no solo puedo decir que aprendí demasiado si no que pude
constatar lo poco que sabía del teatro y lo mucho que me falta por
explorar y conocer de él, a pesar que mi actitud no fue la mejor durante
algunas de las clases y me mostré escéptico, tengo que decir también que
hice un buen esfuerzo personal y que el resultado presentado fue muy
bueno a pesar de todas las dificultades.( Bitácora de Miguel Cardona.
Gestión Cultural VI. Envigado 2013)
El proceso de reconocimiento, negociación e inclusión de saberes previos y su
articulación a los saberes que se implementan desde la formación académica, se teje a
un proceso que desde la práctica favorece la comprensión, la aplicación y la
generación de conocimientos situados tanto en la experiencia, como en el lugar donde
se implementan. Así este proceso favorece que el gestor se acerque a un espacio de
práctica donde puede proponer desde sus propios conocimientos, conocer instancias
administrativas necesarias para poder llevar a cabo la salida de su ámbito académico
sin problemas, de manera que esta actividad lo pone frente a la necesidad de usar los
conocimiento de procesos importantes y necesarios en la vida profesional a la cual
aspira: conductos regulares a seguir, protocolos, permisos, procesos administrativos e
institucionales, informes, entre otros. Por último es posible señalar que la posibilidad
que da la proyección de una puesta en escena de una obra, posibilita que el estudiante
de Gestión cultural pueda comprender de qué manera aquellos conceptos teóricos
aprendidos en el tiempo que lleva con el Alma Mater, puedan ser aplicados
El aprender a hacer equipo, tomando decisiones en equipo: asumir otras líneas
de la puesta en escena que deben llevarse a cabo desde lo colectivo, como
tomar decisiones grupales.
El trabajo en equipo es el concepto base o principal que fundamenta todos los
procesos de este estilo, como docente durante varios años en este tipo de procesos,
se logra a partir de la experiencia vivida y repetida identificar los aspectos
fundamentales para el buen desarrollo de un ejercicio de montaje y proyección de esta
naturaleza.
Las relaciones y las maneras como están se hacen, deshacen se restablecen hacen
parte de todo el proceso creativo y de puesta en juego de una obra teatral en un
contexto especifico. En el caso que se recupera aquí, se parte de las relaciones en un
aula de clase, lo que puede ser una ganancia a la hora de acometer el proceso que se
busca crear. En este sentido las posibilidades y experiencias de construcción colectiva
son fundamentales en el desarrollo de procesos de gestión cultural y también en el
montaje y proyección de una obra teatral, la organización en la perspectiva de una
acción de este tipo, requiere que la estructura que la sostiene e imbrica, fluya
comunicativamente, que las relaciones de compañerismo y la solidaridad hagan parte
del proceso. Cuando el grado de relación es más alto y efectivo, mayor índice de
productividad y de calidad existirá dentro de un proyecto.
Es decir, mientras el trabajo en equipo se realice en un ambiente sin asperezas, sin
conflictos, donde el apoyo a los compañeros se dé sin reclamar nada a cambio, es
posible que el objetivo se logre de una manera más cómoda y fácil:
Por otra parte, con el transcurso del trabajo en las clases ha crecido el apego
hacia las artes escénicas, en lo que respecta a los ensayos de la coreografía y la
obra de teatro. Ya se comprende mejor estos dos ámbitos, como lo motivantes
que pueden llegar tanto para crear nuevas potencialidades en nuestra vida. De
esta naturaleza son las diferentes formas que comprendemos el mundo y las
vivencias que tenemos todos los días con las personas.
Es notable el aprendizaje que se ha hecho alrededor de los procesos de
gestión que conllevan las obras de teatro, tales como la determinación de los
espacios en la que será presentada, como el diseño de los carteles y la
indagación del maquillaje. El apoyo que nos brindamos unos a otros en la
medida que todo esté en el momento indicado. Ello se orienta a crear en el
espectador un marco de emociones y afectividades, que lo lleve a querer volver
a ver la obra de teatro, además de verse tocado por ella.
La propuesta de asumir esta posición con el curso de Artes Escénicas es clave para
poder entender como el trabajo colectivo funciona de manera articulada desde los
campos que implican o están imbricados para que el producto se pueda dar. Por tal
razón, en este espacio académico se proponen posibilidades de entender este
concepto con asuntos como aprender a tomar decisiones en conjuntos, ponerse de
acuerdo sin generar conflictos y de alguna manera, generar un buen ambiente de
trabajo.
Para esto, se proponen algunos espacios como la participación en campos
relevantes para que se puedan el ejercicio final: equipos de producción como el
encargado de todo lo técnico (luces, sonido, tramoya, telones), el responsable de
vestuario y maquillaje, el responsable de conseguir recursos económicos, entre otros.
Funciones y equipos necesarios en las representaciones escénicas.
Como toda empresa, la producción de un montaje o evento requiere de equipos de
trabajo que faciliten su ejecución. Estos equipos al ensamblarlos, son los responsables
de que un proyecto artístico puede llegar a un buen fin y tener éxito. Aunque este gran
engranaje consta de muchos campos y sub grupos que, como se ha mencionado,
permiten el buen funcionamiento de todo el proyecto desde que se concibe hasta que
es llevado al público, A “grosso modo”, para el ejercicio que se viene desarrollando se
han escogido los siguientes campos para tener en cuenta en la producción en el
ejercicio académico:
Equipo de administración: Productor y sus asistentes.
Equipo de Fundraising: son los encargados de captar bienes y recursos.
Equipo artístico: Dramaturgo, director artístico, asistente de dirección, actores.
Equipo Técnico: Diseñadores, iluminadores, escenógrafos, técnicos de sonido,
cargadores.
Equipo de Maquillaje y Vestuario: Aunque este equipo hace parte del equipo
artístico, son fundamentales en su aporte para el actor con los diseños visuales.
Equipo de publicidad y comunicaciones: son los encargados de diseñar la
imagen del espectáculo con ideas propias o del director o del equipo de actores.
Además, deben acudir a las herramientas que ofrecen los medios de
comunicación para la publicidad de la obra y llevar a conocimiento de todo el
evento con estrategias como la radio, periódicos, televisión y redes sociales.
La palabra inglesa production como equivalente de puesta en escena o
realización escénica sugiere claramente el carácter construido y concreto
del trabajo teatral que precede a la realización de cualquier espectáculo.
Se habla a veces de producción del sentido o de la productividad del
escenario para indicar la actividad conjunta de los artesanos o creadores
del espectáculo (del autor al actor). En efecto, la producción del sentido
no acaba en absoluto cuando termina la obra; se prolonga en la
conciencia del espectador y experimenta las transformaciones y las
interpretaciones que exige y produce la evolución de su punto de vista en
la realidad social. (Pavis, 1998)
De esta manera, el estudiante de Gestión Cultural, en el curso de Artes Escénicas
deberá asumir un rol dentro de estos otros campos pero teniendo en cuenta que no
debe actuar solo sino relacionado con los otros campos para que entre todos, puedan
estar conectados como un buen engranaje.
Maneras de hacer y aprender que vinculan montaje y proyección
El sentido de esta articulación, en la ruta de lo que se ha venido argumentando, es
que la experiencia de montar una obra aporta a la construcción de una manera de
hacer gestión cultural desde el lugar del otro, también desde el conocimiento
comprensivo de lo que implica hacer una obra, es decir, una gestión cultural cerca al
arte y la cultura, no desde una gerencia en el dominio distante, sino una posibilidad de
reconocimiento de los saberes y requerimientos, una manera de hacer gestión con
sensibilidad, comprensión de lo que implica poner en juego en una comunidad una obra
de arte y también lo que implica para los que la montan como esfuerzo no instrumental
sino de construcciones colectivas y humanizantes.
De esta manera, podemos entender el termino proyección como la manera de poder
explorar en colectivo los temas tratados en las clases de manera teórica permitiendo
que el estudiante pueda palpar en acciones necesarias para que el grupo pueda salir
de su lugar de la creación hacia otros espacios donde los verán de otra manera.
Estas acciones, trabajo en equipo, colaborativo, maneras de relacionarse con el otro,
deben llevar al estudiante a la reflexión de que todo proceso que implica la obra de
Arte, el esfuerzo de no solo llevarla a escena sino los costos económicos y humanos
que esto conlleva más allá de una posición administrativa, debe estar en el campo de lo
comunicativo y lo relacional.
Este ejercicio, el de unir montaje y proyección, será para el gestor en formación una
posibilidad de asumir responsabilidades ya no solo académicas sino aún más
comprometedoras con su propio colectivo y con el colectivo que lo invita y cuenta con
él en una programación.
La construcción de roles diversos en la experiencia (preestablecidos y
emergentes)
Durante el proceso de creación, se fundamentaron unas directrices que permitieron
entender la importancia de tener la experiencia de creación y comprender la etapa de
proyección desde la mirada del gestor Cultural y no desde la mirada del artista:
“Cuando se es gestor, el artista debe quedar afuera: el artista tiene obra, el
gestor público” (Fernando Vicario. Seminario. Maestría Gestión Cultural.2015).
Poder comprender la importancia de las artes escénicas para la Gestión Cultural,
sobre todo en territorios particulares, es muy valioso no solo en términos de
comprender los procesos de creación de una obra teatral, los elementos importantes
para evaluar una obra en términos de diseño, funcionamiento, fundamentación estética,
planeación y presupuesto, sino para el desarrollo del ser desde dos perspectivas; una
relacionada en estrategias para la convivencia y el trabajo en equipo y la otra con la
misión o la función del Gestor Cultural como sujeto de cambio, utilizando las artes
escénicas para la contribución y transformación de las comunidades
El resultado de entender a cada uno de los componentes del colectivo que buscan
indagar, desde la gestión y el arte, es un producto que puede permanecer por más
tiempo en las memorias de quienes tienen contacto con él. Además, permite que cada
uno de los integrantes explore y pase por las sensaciones del proceso de aprendizaje
desde la organización y la confrontación con el público, con el otro, permitiendo una
nueva forma de comunicación que va más allá de las palabras.
La ruta metodológica: el trabajo en equipo o la importancia del trabajo
colectivo herramienta fundamental para el gestor cultural.
La complementariedad de cada uno de los cursos vistos en el proceso de formación
de los gestores culturales es algo que se debe dar en algunos espacios propicios para
ello durante su estancia en el pregrado, más si se encuentran en un alto nivel de su
carrera. Por tal motivo, una metodología basada en el concepto de Trabajo en Equipo ,
como se viene proponiendo en el ejercicio del curso Artes Escénicas, puede no solo
enlazar temas tratados en sus cursos como pueden ser la investigación, de
construcción de territorio, y lectura de contexto como la identidad, la historia local,
fenómenos actuales, los ritos y rituales propios de cada región sino enfocar al Gestor
en formación a entender que todo su bagaje académico puede ser potencializado en
cuanto pueda ser articulado desde el concepto de Trabajo en Equipo el cual le
permitirá poner en juego sus conocimientos teóricos en asuntos como el manejo de
grupo, aprender a delegar funciones, en el trabajo colaborativo , con metodologías y
técnicas para trabajo en equipo.
También desde la Resolución de conflictos, pues debe tener en cuenta la situación
contextual, el respeto y reconocimiento hacia el otro, hacia su ser y su saber, más aun
cuando se tiene conocimiento de caracteres y modos de ser de sus compañeros de
trabajo. Pero sobre todo, el trabajo en equipo no permitirá desviar la mirada del
objetivo principal, logrando un éxito al pasar del conocimiento individual al colectivo.
La construcción de equipo dentro de un grupo de gestores culturales en
formación:
El proceso para el curso de Artes Escénicas no puede dar inicio sin tener claro el
concepto de trabajo en equipo pues en cada uno de los contextos donde se aplica este
curso, se encontró como primer escollo las dificultades de trabajar en equipo por
diferentes razones de contexto, de procesos individuales, de egos, de saberes previos
en artes, en fin. Quizás por las actuales dinámicas de la contemporaneidad que afectan
el desarrollo de las nuevas generaciones, ya que asuntos como el uso de herramientas
tecnológicas como el internet o las redes sociales no permiten relaciones más cercanas
al otro, se pierde el contacto físico con el otro produciendo nuevos tipos de relaciones
personales en las cuales es cada vez más difícil el encuentro con el otro.
Pero si es el arte uno de los elementos principales para expresarnos y no limitar
nuestra necesidad y capacidad de ser yo, de ser con el otro. De forma personal
me sentí totalmente tocada por los compañeros en el ejercicio de mirar sus ojos,
de descubrirlos; y como lo mencione anteriormente de ser con el otro, no me
gusta hacer contacto visual con nadie, en algún punto me dieron miedo los ojos
de las personas, creo que en algún momento de mi vida comencé a mirar más al
suelo que al cielo, entonces que una persona transmitiera tanto y contara toda
su vida con la mirada me cohíbe hasta el punto de llorar y saber que todos
tienen una historia. (Bitácora de Brahidis Paola Córdoba. Gestión Cultural VI.
Turbo 2015)
De esta manera, la implementación de propuestas que permitan la reflexión del
territorio desde el arte son valiosas pero se hace necesario construirla como espacio
que requiere acciones conjuntas, pues se requiere de la experiencia fundamental y la
capacidad de un gestor cultural para ir reduciendo las barreras para la construcción
conjunta de posibilidades que propendan en beneficios para todos. Esto no es sólo
porque las Artes Escénicas en particular requieran del trabajo colectivo, del otro, para
que se pueda dar. Es por que para el Gestor cultural, el trabajo en equipo es básico en
la medida que este trabaja con comunidad, con lo social, la cual esta avocada al trabajo
colaborativo de este.
Así se hace necesario reconocer que para todo el colectivo la importancia de la
construcción desde lo grupal, como posibilidad de la articulación de las diferentes
miradas que permiten diferentes miradas sobre un mismo tópico y luego avanzar a la
construcción de una misma meta a la cual deben llegar juntos y no de manera
individual.
Entre las situaciones emergentes y que surgieron como diferencias que dificultaron
la construcción del equipo de trabajo y llegar a acuerdos están: diferentes edades,
saberes y experiencias y orígenes culturales diferentes, todas estas desde afuera
pueden verse como elementos positivos que pueden enriquecer la experiencia, pero
que en el camino de construcción surgieron como dificultades, reconocerlas y
reelaborarlas, fue permitiendo un proceso de fortalecimiento y reconocimiento, acción
no exenta de dificultades.
Diferencias de edades, por saberes y experiencias y de orden cultural
Las diferencias al interior de los grupos con los cuales hacer el montaje y la
proyección de la obra grupos: temas a considerar para la construcción grupal
Una de las características de las diferentes cohortes que han pasado por el curso de
Artes Escénicas es la heterogeneidad de los que se componen los mismos. Es decir
que allí llegan estudiantes de diferentes edades que van desde adolescentes, jóvenes y
adultos. Esto de alguna manera, ha permitido que confluyan de manera espontánea
diferentes puntos de vista y posiciones relacionadas con las experiencias previamente
adquiridas al ingresar al programa.
Pedagógicamente considero que como gestores en formación representó, la
vivencia de una práctica artística que traspasó lo teórico en lo que se queda
la mayoría de los cursos que son abordados, permitió por un lado ponernos
al mismo nivel con los compañeros que por su edad, pensamos sería difícil
ponernos de acuerdo en un momento ya que desde el primer semestre ha
sido complicado la convivencia por la diferencias de edades y por ende, de
experiencias y miradas sobre un asunto de clase, y por otro lado, mirar la
opción de hacer arte, a sabiendas que profesionalmente no es necesario ser
artista, pero si, conocer el cómo se realizan y funcionan las diversas
expresiones artísticas, conocer sus valores, sus formas, además tener
latente la sensibilidad por las diversas formas de arte más aun cuando en
las artes escénicas convergen diferentes expresiones (Bitácora de Idelfy
Cuesta. Gestión Cultural VI. Turbo 2015)
De esta manera, en un grupo puede confluir en un solo lugar características propias
estudiantes de diversas zonas del entorno en el cual se ofrece el programa. Es posible
así encontrarnos con infinidad de comportamientos, criterios y saberes que
enriquezcan el proceso de formación del Gestor Cultural.
Pero por otro lado, esta situación puede ser un arma de doble filo pues también es
posible encontrarse con caracteres difícil, posiciones radicales frente a un asunto.
En lo que se refiere a la formación del Gestor cultural, es desde estas diferencias
que es posible crear reflexión, llevar a otra dimensión la idea de la diferencia no como
una confrontación, sino como una posibilidad de crear y dinamizar con los otros
espacios necesarios para una comunidad especifica.
Entonces, una de las labores a la cual el curso de artes escénicas se enfoca es
poder hacer comprender al gestor en formación que es imposible generar dinámicas,
posibilidades para una comunidad desde una sola mirada pues al igual que el teatro, y
las artes escénicas en general, es necesario el trabajo con el otro, relacionarse con el
otro de manera que ambos puedan fortalecerse mutuamente.
Creatividad y liderazgo: fundamentos del trabajo en equipo para tomar
decisiones con criterios
El trabajo en equipo es el concepto base o principal que fundamenta todos los
procesos de este estilo ya que este permite la base de relaciones que se presentan
en una organización, en ese caso en un aula de clase para la formación del gestor
cultural desde la mirada del Arte, siendo esta una de las mejores garantías para
incentivar los buenos resultados ya que la relación de cada individuo que conforma
una organización es la estructura que sostiene e imbrica elementos como la
comunicación el compañerismo, la solidaridad, entre otros valores, cada uno de estos
ayudan a interactuar al ser humano con el otro y con las dinámicas de relaciones de su
entorno. Cuando el grado de relación es más alto y efectivo, mayor índice de
productividad y de calidad existirá dentro de un proyecto.
Todo lo relacionado con el trabajo en equipo, es una fortaleza que permite la fluidez
del proceso en la medida en la comunicación fluye mejor, las relaciones mejoran y el
objetivo final se puede lograr con mayor claridad.
Por otro lado, el trabajo en equipo requiere de un líder que sea capaz de ayudar a
organizar y actuar a los miembros de su equipo en cuanto los objetivos del grupo sean
más complejos y amplios.
“El líder es un producto no sus características, sino de sus
relaciones funcionales con individuos específicos en una situación
específica” (Betancurt, 2010)
De esta manera, los líderes sobresalen en algunos casos relacionados con el curso
de artes escénicas que hacen que el proceso sea más ágil y productivo. Estos ayudan,
con todas sus habilidades a que se dé una mejor relación y que la reflexión acerca de
las funciones de un gestor está relacionada con el liderar procesos que permitan
reconocer la diversidad y lo más importante, que sea capaz de tomar decisiones de
manera acertada ya sea de manera individual o de manera colectiva.
En este sentido, la formación del gestor debe enfocarse en la idea de la gestión
desde la diversidad y desde el otro como sujeto que aporta. Por ello, es importante ser
consciente de la evolución en la que estamos inmersos, siendo partícipes de un
desarrollo en la formación y la capacitación de nuevos agentes culturales, con valores
adecuados a un momento en el que el desarrollo cultural se encuentra en un momento
lleno de nuevas posibilidades y retos.
Lo complejo de la construcción de lo colectivo desde la diferencia: egos e
imposiciones. El texto como pretexto.
Lo ideal para cualquier proceso colectivo es el encuentro en un ambiente que
permita el normal desarrollo de las actividades y mejore las dinámicas propuestas, pero
también es cierto que dentro de todo colectivo es posible encontrar complejidades que
dificulten que esto se dé. Los egos, las formas de ser, las ideas y conceptos de cada
individuo pueden ser factores determinantes en la construcción de espacios colectivos.
Si esto no se tiene claro, es posible que se generen fricciones al no tener establecido
un norte común donde es necesario detenerse en el camino para tener en cuenta al
otro, la diferencia de pensamientos, de ideas, puede aportar a nivel personal y
colectivo.
Frases como “Yo me acojo a las decisiones del grupo”, “lo que digan todos”, “Es que
yo no quiero pelear con nadie”, solo hablan de las debilidades colectivas y de
imposiciones que pueden generar contratiempos para lograr el cometido.
La complejidad de las relaciones personales y el individualismo versus el trabajo en
equipo, crearon un ambiente complicado. Este fenómeno al interior de los grupos no
permite el desarrollo y la reflexión acerca del arte como estrategia que conduce a la
vinculación con el entorno.
“..Al entrar al aula de clase, se sentía un ambiente pesado, los ejercicios que
se proponen no evolucionan por la falta de interés en algunos. O simplemente
porque los estudiantes no llegan.”
Es frustrante no poder lograr entablar el dialogo artístico en clave de Gestión Cultural
cuando existen muchas barreras desde los egos, la falta de dialogo y el
reconocimiento del otro.
Estrategias para construir equipo: identificándose con el personaje de la obra
y desde la construcción de roles para generar vínculos.
Una forma de evidenciar la importancia del trabajo en equipo y la labor en conjunto
se da en la propuesta de asumir una puesta en escena de una de las áreas de las artes
escénicas, en este caso, el teatro, con la posibilidad de asumir allí no solo el rol desde
la escena sino desde los demás lenguajes escénicos que confluyen allí: la luz, el
vestuario, el maquillaje, la escenografía, la utilería, el sonido y la música, los efectos
especiales.
Además, para que esto se pueda llevar a la escena en buena armonía, se deben
trabajar aspectos importantes que acompañan esta estrategia, como lo relacionado con
la producción y la administración: la logística, entendida esta como la consecución,
adecuación y preparación de espacios, los recursos humanos y monetarios en lo que
actualmente se denomina Fundraising, diseño y creación de espacios comunicativos
como la publicidad, la imagen de la obra, los contactos para relacionar la obra en otros
espacios.
Luego de escoger el texto que permita trazar el derrotero a seguir, es necesario que
desde allí el texto mismo permita al estudiante que se identifique con la propuesta, las
primeras lecturas en voz alta son importantes porque permiten visualizar o imaginar
donde puede estar o quien puede hacer que.
“En el ejercicio de construcción colectiva de la obra, y siguiendo las
recomendaciones hechas por el profesor para una creación asertiva y
productiva que permita hablar desde nuestro entorno, donde cada uno, si
así lo deseaba aportaba a la parte dramatúrgica del montaje, por ello el
siguiente paso en la sesión fue la socialización de algunas propuestas
para la obra, el trabajo final de nuestra experiencia del curso artes
escénicas donde cada uno podía encontrarse desde su propio deseo o
experiencia”. (Bitácora Idelfy Cuesta. Gestión Cultural Turbo. 2015)
El texto o la historia es el camino a seguir, lo que permite que desde allí confluyan
desde los diferentes roles en los cuales se deben ocupar, ya que la propuesta
pedagógica así lo exige. El pertenecer a cualquiera de los roles ofrecidos, es la
posibilidad de entender que es necesario estar en contacto con el otro, un evento como
este requiere la cooperación y la coordinación de todos los posibles estamentos que allí
operan. De esta manera, se podrá entender, en la práctica, todas las posibilidades que
ofrece el trabajo colectivo.
Territorios y contextos desde la dramaturgia del gestor cultural
El texto aparece una directriz que permite reconocer la base sobre la cual se va a
estructurar el evento artístico pero esto no es del todo una regla establecida ya que el
hecho mágico del teatro es que el texto permite cambios, permite la inclusión de otras
posibilidades que le permitan enriquecer su historia, su drama y sus posibilidades de
llegar a otros públicos.
De esta forma, el gestor tiene en sus manos una herramienta con la cual puede
trabajar muchos aspectos de su labor, puede decir cosas que de otra manera, serian
complicadas de expresar.
Más que pensar en un autor u obra específica, se hace necesario responder a la
pregunta en clave de gestión cultural, es decir que debe haber una pregunta sobre que
queremos decir desde la escena, que esté relacionado con el contexto, con la época,
con los acontecimientos del entorno, con los deseos de sus habitantes, con las
problemáticas de la modernidad. En fin, poder tener una narrativa que permita que el
texto se convierta en un “pre-texto” para reflexionar acerca de procesos más íntimos o
locales.
La articulación de contextos diversos en la construcción narrativa: una
estrategia es la adaptación de la obra, que se deja permear por la inclusión de la
experiencia de mixtura de los contextos regionales.
Si bien es cierto que el curso de Artes escénicas comenzó involucrando a los
estudiantes de Gestión Cultural al lenguaje teatral con montajes sencillos de cuentos o
retomando el tema del performance, al realizarse el cambio de docente del curso, se
hizo evidente la necesidad de cambiar la metodología desde la posibilidad de que el
gestor pudiera dejar de lado prejuicios como el de “no soy capaz”, “eso es para los que
han estudiado teatro” o “ a mí me da pena estar en público” y mirar este espacio desde
otra perspectiva.
Es así como se comienza, desde lo colectivo, a pensarse textos que permitan al
estudiante entender historias cercanas a su vida personal, a su historia local o sobre
acontecimientos importantes desde donde pueda sentirse cómodo para proponer y
crear la escena.
El gestor en formación puede entonces comprender con mayor facilidad un texto
como La Maestra de Enrique Buenaventura23, el cual aunque fue escrito en los años
70´s en la cual se relata de forma poética la época violenta de un país en guerra por
ideales políticos, aun su historia genera sensaciones similares en un nuevo contexto
como podría ser el de Turbo, el de Caucasia, o en cualquier lugar de nuestro país.
Habiéndose practicado la coreografía varias veces, se procedió con el
desarrollo de la obra de teatro. Con respecto a esta, había quedado como
obligación aprenderse los guiones correspondientes a cada personaje desde una
propuesta más local, más de nuestras mujeres, que habían sido ya definidos.
Con esto ya se había pensado en un primer marco de acción, en el cual se
ubicaban todas las mujeres, para leer un monologo que daba cuenta de sus
vidas, muy ceñido a lo que expresa la obra de Pirandello “El otro hijo”.
Con ello se integraron los demás personajes masculinos con una acción
performatica al fondo de la escena, ya sea interviniendo los monólogos como
expresando las líneas directas de la pieza dramática. En este último punto se
dieron importantes avances en la dramaturgia de la obra la cual pensamos solo
desde el contexto italiano y ahora cobra otro sentido, así paulatinamente se
fueron integrando nuevas acciones y las acciones fluyeron con los personajes
femeninos. (Bitácora José Pablo Montoya. Gestión Cultural Envigado. 2013)
Este tipo de ejercicios permiten al participante abrir sus conceptos a otras
posibilidades que propendan en propuestas innovadoras que logren un mayor impacto
en el espacio en el que se desenvuelven.
Desde el concepto Dramatúrgico: leer el contexto o articular el contexto desde
la construcción de personajes desde lo local.
23
Enrique Buenaventura y Colombia han tomado a Brecht como maestro y lo han asimilado para darnos algo distinto y nuevo, reinventando a partir de nuestra realidad. Y ése es el modo de practicar a fondo las teorías. Los papeles del infierno es un álbum de imágenes atroces, tiene el don de la gran variedad de tonos y tratamientos; cubre la crónica de los más terribles años de la violencia en Colombia y se vuelve a la vez una imagen de todas las violencias.
Como se ha mencionado anteriormente, las posibilidades que ofrece el arte de
dejarse moldear a favor de un interés particular, hace que sea posible la creación, la
creatividad y la imaginación para proponer desde la gestión cultural a contextos que
requieren ser reflexionados desde otras ópticas.
Poner en escena personajes cotidianos como un médico que lucha contra sus
convicciones, tres chismosas que cuentan una historia del siglo XV, o un simpático
costeño con su alegría narra las peripecias de Jesús en la Tierra o que tal la modista
sensual que ayuda a una pobre anciana a escribir una carta a su hijo, o un venerable
anciano que busca sus personajes creados en libros o que se dice de tres cantaoras
de Bullerengue que con sus cantos cuentan la historia de una región de nuestro país24,
permiten al espectador conectarse con la historia y al gestor crear expectativas y
reflexiones acerca del lugar de encuentro con el otro.
El lugar del gestor como dinamizador de procesos en sus propias
comunidades.
En este punto, el Gestor Cultural puede darse cuenta que la magia del Arte puede
generar sensaciones, impactos personales y sobre todo impactar en una comunidad
que busca ser escuchada.
La tarea del arte no es solo formar artistas profesionales, es crear momentos
mágicos que superen la realidad en la que se vive diariamente permitiéndose el
encuentro lleno de miles de sensaciones con una imagen, una palabra, un olor, un
sonido:
Con respecto al producto en sí, fue una sorpresa para mí enterarme por boca
de los espectadores que el mensaje que entregaba la obra era tan claro y
contundente, ya que hasta el día de la presentación no lo era para mí, no podía
creer que con elementos tan simples y con una estética tan minimalista se
24
En su orden: La Autopsia de Enrique Buenaventura, Turbo 2010, La Farsa de Maese Pathelan de autor Anónimo. Envigado 2010, A la Diestra de Dios Padre de Tomas Carrasquilla. Caucasia 2012, El Otro Hijo de Luigi Pirandello. Envigado 2013, Corazón de Gorrión de Rafael Pombo. Envigado 2014, Historias Impuestas, Memorias Opuestas. creación colectiva Turbo 2015.
pudiera transmitir tanto, eso demostró el gran potencial que tenemos como
grupo de trabajo.
Porque es precisamente a partir de este reconocimiento de la actividad escénica,
como un campo de trabajo y de quehacer profesional, que es posible comprender y
comprometerse con la complejidad creativa, pero también con la complejidad gestora
de los procesos de promoción, proyección, circulación y sostenibilidad de un ámbito
artístico que tiene intereses propios y específicos.
Reflexionando al crear nuevos lugares para la escena teatral en la región:
espacios de consumo y espacio físico
Pero para lograr un resultado positivo en un proyecto artístico donde el Gestor en
formación pueda realmente desarrollar su creatividad, debe tener, además de todo lo
que implica el engranaje escénico, el lugar de encuentro de la obra terminada con el
público local, un espacio de encuentro realmente adecuado para que todo funcione a la
perfección.
Esto no siempre es posible. Los lugares o espacios académicos en los que se
desarrollan este tipo de programas no son pensados para este tipo de eventos
aunque se pide al final un producto de calidad.
Los espacios donde se ofrece el programa de Gestión Cultural, aunque se hace un
esfuerzo grande desde la coordinación por ganar espacios adecuados, cuando el
docente llega, se encuentra ante un aula con sillas y tablero. Puede ser útil pero en
relación a las necesidades del curso de Artes Escénicas, no es el más idóneo.
Entonces como parte de la formación del Gestor, se le encomienda la misión de
hallar espacio más acorde a la realidad que se le ofrece en teoría, cuando de
producción se les habla.
Por eso, el gestor ha debido adecuarse a los lugares que habita transformado aulas
de clase en espacios teatrales utilizando telones prestados para cubrir ventanas,
atando de donde se pueda reflectores prestados, transformar baños públicos en
improvisados camerinos. Esto aunque incomoda, se ve como parte de su formación al
aprender a trabajar con lo que se tiene.
Por otro lado, es inquietante que aunque la institución construye espacios y
locaciones para la comunidad universitaria y para comunidad, no son espacios en los
cuales se ha pensado en la región, en sus dinámicas o sus necesidades.
Por ejemplo, el Auditorio de Ciencias del Mar, en la sede de la Universidad de
Antioquia en el Urabá, es un espacio que además que se construyó para conferencias
y charlas no para eventos musicales o eventos cultures, tiene demasiadas
restricciones: no pegar cintas, no colgar nada , no clavar en las paredes.
En la sede de Sonsón, se termina de construir un auditorio pero lo único que es
aprovechable es que las sillas son móviles, permitiendo un espacio para las dinámicas
de un Arte actual, que ya no busca afectar al espectador de la manera clásica sino de
manera más directa como salirse del escenario y tener más contacto con el público.
Es aquí donde el Gestor debe aparecer para dinamizar territorios que permitan una
mayor posibilidad desde el Arte, para que el ciudadano del común aprecie y vaya más
allá de lo ofertado por las administraciones locales: tablados, música fuerte y licor
como única posibilidad para definir el concepto Cultura.
CAPITULO V
La experiencia como escenario de la formación del Gestor Cultural, una
propuesta de articulación regional contextualizada: Una propuesta de
fortalecimiento de la formación del Gestor Cultural desde la experiencia pensada.
Los aprendizajes y la propuesta.
La propuesta que se esboza a continuación emerge de la lectura de los procesos
está claramente articulada a una idea de construcción de un escenario de corte
regional para desarrollar un lugar de ejercicio de la gestión cultural, un lugar de avance
a la dinamización del pensamiento y la acción en la perspectiva de lo local.
La búsqueda apunta a una acción donde el Gestor en formación pueda reflexionar
acerca de su oficio desde la idea de que “la Gestión es Acción, es hacer”, pues solo
desde allí es posible pasar de los conceptos a la práctica, entiendo cuál es su función
social dinamizando, proponiendo y arriesgándose a la tomar decisiones que
favorezcan a la comunidad.
En su libro “Emergencias de la Gestión Cultural en América Latina25”, el profesor
Carlos Yáñez Canal manifiesta que:
En ese camino de profesionalización, y a partir de algunos referentes, se
percibe un intento de definición de la profesión, pero que en muchos casos las
particularidades se desdibujan no sólo en relación con otros agentes culturales,
sino que se confunden con otras especialidades. En ello influyen,
definitivamente, las tradiciones que se arrastran en el ejercicio de la práctica, las
cuales remiten a la animación cultural, la acción cultural, la mediación cultural, y
a la incidencia de los límites disciplinarios de la sociología, la antropología, la
psicología, el trabajo social, la administración, la economía.
Tal vez, en el proceso que puede surgir de la relación entre disciplinas, y
deseablemente en la transdisciplinariedad, se puede llegar a conjugar un
25
EMERGENCIA DE LA GESTIÓN CULTURAL EN AMÉRICA LATINA: Hacia una sociología de la gestión cultural Carlos Yáñez Canal Universidad Nacional de Colombia
ejercicio que enriquezca la gestión cultural en sentido teórico-práctico. Por eso,
“la gestión cultural requiere tanto de la formación de base, como del análisis a
posteriori de estas disciplinas, pues no es ella en sí misma una disciplina sino
una práctica profesional asentada en conocimientos pluridisciplinarios, ligada al
acontecer y a la acción, que exige la intervención, la valoración y la no
neutralidad, aunque presuponga también cierta ambigüedad por su papel
mediador” (Bayardo, 2002: 5).
En la anterior reflexión, el profesor Yáñez evidencia las fortalezas que se pueden
obtener con la diversidad de actores y los factores de tensión al tenerlos como un
estímulo al servicio del interés general.
Entonces, los Gestores en formación deberían estar más interesados por la utilidad
de las teorías asimiladas en el aula de clase en la práctica, en la acción ya que esto
permite situarlo en su lugar como Gestor Cultural, y estimularlo a reflexionar sobre las
problemáticas a las cuales se enfrentaran, con el conocimiento de que el escenario
propuesto contribuye a enriquecer el arsenal de perspectivas y herramientas de las
cuales el participante pude hacer uso en su carrera profesional.
Y es que el estudiante al cual el programa de Gestión Cultural desea apuntarle, no
solo deberá enfrentarse a aquella batalla entre las Bellas Artes y la Cultura Popular,
asunto complejo en territorios manejados por temas políticos y burocráticos, sino a otra
cantidad de asuntos que le competen desde su cercanía con los pocos procesos
artísticos en los puede desenvolverse, de los cuales podemos nombrar algunos como:
Pocos procesos con continuidad.
Necesidad de formar públicos.
Construir tejido social.
Favorecer e impulsar expresiones del Arte como una manera de verse y
transformar y reflexionar las condiciones de este en la región.
Aporte institucional de la Universidad a una ruta de extensión que apoye la
creación y dinamización espacios de formación no convencionales para los
estudiantes de gestión cultural.
Poco acercamiento a Instituciones culturales con trayectoria en la región.
Falta de redes culturales que apoyen procesos académicos.
La creencia que la Universidad debe aportar todo para la formación.
Aporte institucional para la proyección de las propuestas artísticas generadas
en procesos académicos.
Pocas alianzas para mantener proyectos Culturales de interés para la
comunidad universitaria propuestas por los Gestores Culturales.
Desde las experiencias vividas en el Setkani Encounter, el Encuentro Internacional
de Escuelas de Teatro en Republica Checa, los procesos académicos con el curso de
Artes Escénicas para Gestión Cultural en Regiones y la presentación de algunos
resultados del curso en diferentes espacios de la ciudad como colegios, eventos
pedagógicos, espacios públicos entre otros, es posible evidenciar asuntos focales
como el Trabajo en Equipo, la importancia de los lideres, entender el territorio, el arte
como estrategia de transformación social y personal.
También vemos que es importante resaltar y continuar un proceso artístico más
depurado que canalice la energía, la imaginación, el dinamismo y dé posibilidades de
creación artística y personal de los jóvenes estudiantes del pregrado de Gestión
Cultural, en un proyecto serio en el que ellos se sientan involucrados y gustosamente
comprometidos, pensando el Arte como un elemento transformador del desarrollo
humano y de su entorno local.
La postura desde el cual se propone este proyecto, es la de promover aprendizajes
desde el teatro, la plástica, la música, la danza y las artes representativas en general,
favoreciendo una organización metodológica adecuada desde el planteamiento de
metas, acordes a la realidad que les toca vivir, ya que la propuesta es brindar un punto
de reflexión para la vida y el entorno individual, habilitando inquietudes artísticas,
saliendo de la rutina para dar paso a la capacidad de crítica, creación y de asombro.
Por lo tanto, con la posibilidad de un evento artístico y teatral, surge un espacio
pertinente no solo para la proyección y muestra de los productos artísticos de los
estudiantes, para la práctica de gestión y producción de eventos, sino un espacio se
convierta en la posibilidad de formar gestores desde la experiencia, haciendo, y que
permita la integración, la convivencia y la pertinencia de un Arte más cercano al día a
día, que se enfoque a una forma más interactiva, preocupada en ampliar la audiencia
del arte e involucrarse directamente en cuestiones relevantes para la población local en
cuestión.
ENCUENTRO DE EXPRESIONES: HILANDO ARTE, TEJIENDO TERRITORIOS
La siguiente propuesta está basada en las siguientes premisas que surgieron de las
anteriores sistematizaciones de las dos experiencias, las cuales buscan que el proyecto
sea orientado a la formación del gestor desde una práctica que le permita tener una
experiencia vivencial que aporte a una formación acorde a las necesidades del mundo
moderno.
Estas premisas o ruta que orienta la propuesta, emergen del estudio del primer caso,
así:
Equipo coordinador de estudiantes de diferentes procesos formativos
De cara a los otros: confrontando con otros espacios
Funciones y equipos necesarios en las representaciones escénicas
La sincronización y el trabajo en equipo
La expectativas del proceso formativo de las experiencias vividas
Comprensión de lo teórico – administrativo de la gestión cultural, desde la práctica aplicada a la proyección de la obra.
El lugar de los docentes como acompañantes y orientadores
Maneras de hacer y aprender que vinculan montaje y proyección
El aprender a haciendo, tomando decisiones en equipo: asumir otras líneas de la puesta en escena que deben llevarse a cabo desde lo colectivo, como tomar decisiones grupales
Dinámicas académicas formativas articuladas al evento
Funciones y equipos necesarios en las representaciones escénicas
La ruta metodológica : el trabajo en equipo o la importancia del trabajo colectivo, herramienta fundamental para el gestor cultural
Situaciones emergentes que se vinculan al proceso formativo
Maneras de hacer y aprender que vinculan montaje y proyección
La construcción de roles diversos en la experiencia ( preestablecidos y emergentes)
Procesos interdisciplinarios como experiencia y no como declaración
Proceso formativo desde el montaje de la obra
Sensibilización desde la relación cuerpo - espacio
Procesos organizativos de circulación de información, más allá de las jerarquías y como tejido articulador del encuentro
Las expectativas del proceso formativo de las experiencias vividas
Elección del texto a escenificar y relacionamiento con este desde los personajes
La experiencia del encuentro, más allá del evento/ La experiencia del encuentro como proceso y más allá del activismo
Proceso formativo desde la proyección de la obra
Entender el contexto desde donde se trabaja, relacionar la obra y los personajes con el lugar y sus problemáticas y dinámicas
Estrategias para construir equipo: Identificándose con el personajes de la obra y la construcción de roles
Territorios y contextos desde la dramaturgia del gestor cultural
Recuperando saberes previos de los estudiantes gestores culturales al montaje de la obra
Reflexionando al crear nuevos lugares para la escena teatral de la región
El aprender a hacer equipo, tomando decisiones en equipo: asumir otras líneas de la puesta en escena que deben llevarse a cabo desde lo colectivo, como tomar decisiones grupales
De cara a los otros
La construcción de roles diversos en la experiencia ( preestablecidos y emergentes)
Relación docente – estudiante al mismo nivel.
Comprensión de lo teórico – administrativo de la gestión cultural desde la práctica aplicada a la proyección de la obra
Posteriormente, las anteriores premisas se organizaron por Derivas o Caminos a
tomar, lo que permite visibilizar las necesidades más urgentes a trabajar y los
diferentes caminos que se desprenden desde el inicio y que permiten orientar la
siguiente propuesta en la cual se pretende atender alguno de los asuntos acá
mencionados:
Algunas de las premisas que orientaran el trabajo son:
Deriva de la visión
en red
El trabajo en Equipo.
El lugar del docente como orientador.
El rol del estudiante asumiendo responsabilidades
El trabajo interdisciplinario.
La importancia del trabajo colectivo, herramienta
fundamental para el gestor cultural
Deriva de la
flexibilidad y
apertura en el
camino
Otras dinámicas académicas articuladas al evento
Otras áreas artísticas articuladas al evento
Deriva de la
continuidad y la
construcción de
sentido
La experiencia del encuentro como proceso y más allá del
activismo
Deriva de La
proyección
Maneras de hacer y aprender que vinculan montaje y
proyección.
Maneras de aprender desde el encuentro con nuevos
territorios.
De cara a los otros.
Confrontando con otros espacios
Deriva de la
permeabilidad a
los contextos
Territorios y contextos desde la dramaturgia del gestor
cultural
Entender el contexto desde donde se trabaja, relacionar la
obra y los personajes con el lugar y sus problemáticas y
dinámicas.
En la propuesta de la obra, la inclusión de personajes
locales o cercanos que permitan una mirada más local al
conflicto propuesta en la dramaturgia
Creación de nuevos lugares para la escena teatral de la
región.
La construcción de roles diversos en la experiencia.
Deriva de proceso
personal.
Sensibilización desde la relación cuerpo – espacio
Recuperar saberes previos de los estudiantes gestores
culturales al montaje de la obra.
Proceso formativo desde el montaje de la obra
Deriva del evento
como formación
La construcción de roles diversos en la experiencia
( preestablecidos y emergentes)
Funciones y equipos necesarios en las representaciones escénicas.
Elección del texto a escenificar y relacionamiento con este
desde los personajes
Perfil del proyecto
El pregrado de gestión Cultural ofertado para las regiones como una alternativa para
entender su territorio y dinamizar procesos que allí se vienen generando, tiene en su
plan de estudios el curso de Artes Escénicas como una de las materias que permite al
estudiante acercarse a las Artes con la posibilidad de entender como desde una de las
dimensiones del Artes, se puede no solo realizar un proceso personal al relacionarse
directamente con un texto, con la escena y una producción, sino con las posibilidades
que ofrece el teatro como herramienta que posibilita un acercamiento a los territorios
que de alguna manera, se pueden realizar acciones de intervención social ya que esta
disciplina permite la Gestión y la resolución de conflictos al cual pueden acudir como
estrategia pedagógica pues esta es una ayuda dinámica, efectiva y participativa que
fomenta la reflexión, la motivación, la participación, el espíritu crítico, el trabajo en
equipo, el respecto por el otro y todos aquellos valores al cual el ser humano está
llamado como ser social:
El teatro es una excelente forma artística de expresión pero también es
una forma de conocimiento, tanto de nosotros mismos como de nuestro
entorno, y puede ser también una forma de conocer mejor el mundo en
que vivimos para transformarlo de la mejor manera.
Nos ofrece herramientas y estrategias para analizar los conflictos y
encontrar nuestras propias soluciones. En ámbitos como la educación y la
intervención social, el teatro l es una herramienta transformadora que
facilita la gestión y resolución de los conflictos de manera pacífica y
pactada. (Caubet, 2001)
Pero luego de la participación en el Setkani Encounter, evento que sirve de
referencia para este proyecto, la concepción de este curso para este pregrado de
Gestión Cultural comienza a ser replanteado debido a la reflexión que genera observar
de cerca cómo se construye un Encuentro internacional que permite el acercamiento de
los estudiantes de diferentes disciplinas y organizado en su totalidad por estudiantes de
Gestión y Management teatral. De esta manera, la pregunta de ¿para qué estudiar un
evento? Permite abordar la experiencia de las Artes escénicas de otra manera, desde
otra perspectiva de manera que permita ir más allá del ejercicio teatral para culminar un
curso, buscando que los estudiantes encuentren en este espacio académico una
mayor reflexión desde la propuesta de un gran evento que dinamice interrelaciones no
solo con el texto sino con su propio territorio en clave de Gestión Cultural, por
supuesto.
Con la más reciente experiencia en la sede de Turbo, con la III Cohorte de gestión
cultural, se dio inicio a un cambio en la metodología para abordar este curso de Artes
Escénicas en el cual se dieron buenos resultados al crear una reflexión diferente en
torno a la pregunta de que montar como ejercicio final ya que no solo se pretendía
buscar un texto que hablara de su inquietud por el territorio de Turbo, sino que se
pretendía una abordarlo desde una apropiación del mismo por parte de los estudiantes
de manera que se involucraran no solo en el proceso de puesta en escena, desde la
actuación, si no desde la responsabilidad de asumir un área fundamental para la misma
relacionadas con los lenguajes artísticos que componen la escena: el sonido, las luces,
el vestuario, el maquillaje y la consecución de recursos económicos.
Teniendo en cuenta que esta última experiencia académica, arrojo buenos
resultados que permiten arriesgarse a asumir una nueva propuesta, para este curso, de
crear un evento artístico que genere posibilidades más profundas acerca del entorno en
el que desenvuelve el futuro gestor cultural y derive en una posibilidad que permanezca
en el tiempo y no se diluya al no tener continuidad.
Para que esto suceda, el curso deberá ser abordado con la idea de dinamizar otras
instancias o áreas que fortalezcan la creación de un proceso artístico que no solo
beneficie a los estudiantes de gestión, sino a toda la comunidad universitaria y de la
región aledaña.
Entonces, se propone la construcción de un proyecto artístico que abarque las
diferentes áreas del quehacer cultural: organizar, planear, administrar, entre otras, para
generar equipos responsables de diferentes comisiones desde las cuales se puedan
coordinar áreas de su tema asignado.
Estas comisiones o equipos de trabajo se podrán constituir a partir de un tema
establecido por los mismos estudiantes y los cuales podrán ser coordinados a su vez
por uno de los integrantes del curso que asuma la responsabilidad de coordinador todo
el proyecto.
Las especialidades que podrían participar, emulando un poco la estructura del
Setkani Encounter podrían ser: gestión Cultural y management técnicos de luces y
sonido, medios de comunicación (fotografía, video y prensa del evento) un estudiante
que coordina la dirección de la escena, otro de dramaturgia, un de escenografía, otro
para maquillaje y vestuario y los actores.
Gestión Cultural y Management: Los estudiantes que trabajen en este equipo
pueden tener la experiencia en liderar el proyecto, realizar la selección de las obras y
grupos invitados, marketing y Fundraising (consecución de recursos), consecución de
espacios, realizar contactos, los protocolos requeridos como permisos, avales, alianzas
administrativas, entre otros.
Técnicos: Los estudiantes de esta comisión preparan espacios para los espectáculos
resolviendo asuntos de iluminación y sonido del montaje y de los espectáculos
invitados. Después de cada el espectáculo deben limpiar la escena. Podrán, también,
encargarse de transportar escenografías o equipamiento teatral.
Medios de Comunicación: Los estudiantes que trabajen en este equipo, deberán
responder por el registro del evento con las grabaciones de los espectáculos,
fotografía. Ellos podrán realizar alianzas con otras dependencias de la Universidad
como el área de diseño, por ejemplo, para diseñar el afiche y piezas de publicidad
Dramaturgo: puede ser un estudiante quién ayuda al director con la concepción de
festival, este dramaturgo también ayuda a elegir las obras, hacer adaptaciones, buscar
autores de textos locales.
Escenógrafo: Ayuda a resolver asuntos de escenografía como utilería y demás
requerimientos para la escena.
Actores: Estudiantes del curso Artes Escénicas para Gestión Cultural VI como base.
Pero esta organización, que es solo la parte operativa, deberá aportar a la lectura de
un contexto en el cual se puedan identificar acontecimientos artísticos en los cuales se
pueda involucrar o imbricar como rituales, fiestas o fechas importantes, que permita
generar una actividad artística importante donde se pueda articular el arte en todas sus
dimensiones. De esta manera, el evento se podría proponer dentro de una estas
festividades locales permitiendo un acercamiento a la idiosincrasia o a hacer alusión a
ella.
Los estudiantes podrán entonces, tener la posibilidad desde la práctica,
comprender aquellos supuestos teóricos visto durante su proceso de otras
áreas de la Gestión. Por supuesto que la teoría se ve como un elemento
importante, pero la teoría es muchas veces algo que se debe ver y pasar
con un examen y después de varios meses se puede olvidar. Pero cuándo
se vive una experiencia como la del proyecto propuesto, la experiencia y
conocimiento puede permanecer en los estudiantes por mucho tiempo y
puede que para toda la vida , porqué eso no es algo que una persona ha
escrito en un libro, eso se vive a nivel de su propia vida:
La experiencia no se debe quedar en un solo momento o por días o
semanas. Eso también debe quedar en sus corazones. (Rosachnova,
2015)
Sobre la propuesta. Antecedentes
Luego de que la primera cohorte de Gestión Cultural en Oriente y Turbo trabajaran,
en el curso de Artes Escénicas, orientado por la profesora Ángela Chaverra Brand,
representaciones de cuentos y algunos performances que fueron presentados para
este curso como solo un acercamiento estética a esta área, se propuso para la
segunda cohorte una toma teatral pues debido a que el grupo era numeroso, se decidió
trabajar por parejas y grupos. La metodología utilizada esta vez, consistió en proponer
un grupo de estudiantes que asumieran el rol de la producción de todos los ejercicios
mientras que el resto asumía el rol de actores. Esta experiencia produjo un gran
impacto en la comunidad universitaria de la sede de Turbo pues los estudiantes de
Gestión Cultural se tomaron dos aulas para transformarlas en espacios escénicos
donde se alternaban los ejercicios y el público pasaba de uno al otro. Con la anterior
experiencia, se puede afirmar que este tipo de proyecto puede realizarse y generar un
gran impacto a nivel pedagógico y personal.
Es por esto que se puede pensar en un gran evento donde se involucre no solo las
áreas del quehacer teatral y lo administrativo, sino generar desde allí un espacio para
la reflexión acerca de la formación misma, del entorno y las herramientas alternativas
para afrontar la llegada de nuevos retos que como profesionales, se verán abocados.
De esta manera, será posible generar un evento académico que permanezca en el
tiempo, que genere intercambios y alternativas para otras áreas académicas que
puedan integrarse allí para desarrollar sus propias fortalezas (como el pregrado de
música en Turbo y la tecnología en Artesanías)
EL PROYECTO
1. TÍTULO:
HilandoArte: Un momento para el Encuentro de las Artes Tejiendo Territorios.
2. DESCRIPCIÓN BÁSICA:
HilandoArte es una propuesta de intervención de las Artes Escénicas en los
diferentes espacios que tengan que ver con Universidad de Antioquia y sus seccionales
donde la Facultad de Artes hace presencia con sus diferentes programas que permitirá
el encuentro no solo de Gestores Culturales con el pretexto del teatro sino de
estudiantes de otros programas, con el ánimo de no solo dinamizar un espacio que
convoque a la participación y al encuentro de los estudiantes de la misma Facultad,
sino de mostrar otra faceta de estos estudiantes relacionados con el teatro, la música,
la danza, entre otros, un evento organizado por ellos mismos en el cual los estudiantes
de Gestión Cultural son protagonistas.
Se propone inicialmente el proyecto que surge como producto final del curso de
Artes Escénicas y también otros grupos teatrales y artísticos de la sede o de la región.
También la participación de otros estudiantes interesados en el arte con sus diferentes
manifestaciones que puedan aportar al proceso de creación y de programación Todo lo
anterior, se encuentra en clave de Gestión Cultural en el cual el trabajo de producción y
de organización deberá ser parte del proceso de formación del estudiante de Gestión,
con el apoyo de la administración institucional, la comunidad estudiantil, docentes y
por qué no, administraciones locales que se unan al proyecto. Esto permitirá la
demostración de las capacidades artísticas de los estudiantes y la capacidad de
integración por medio del teatro a la comunidad.
Esta iniciativa, que también es un pretexto para institucionalizar un evento que se
celebre en un semestre académico, convoca a la participación de otras instancias que
se desarrollaran al mismo tiempo como pueden ser conciertos, trueque de elementos
artísticos y artesanías, muestras de estudiantes de otros programas que pueden
intervenir desde sus capacidades instaladas.
De esta manera, HilandoArte: Un momento para el encuentro de las Artes Tejiendo
Territorios será el eje fundamental para fomentar un proceso de construcción de un
espacio de encuentro que es esperado para albergar a propios y extraños dentro del
lenguaje universal del teatro.
3. REFERENCIAS TEÓRICAS:
La Universidad de Antioquia, con sus diferentes programas en región apuesta por
una educación de alto impacto en los territorios donde los estudiantes y egresados de
los mismos pueden intervenirlos con acciones pertinentes que favorezcan un entorno
social enriqueciendo desde sus valores aprendidos, las potencialidades de toda una
comunidad:
La regionalización es uno de los principios rectores de la Universidad de
Antioquia y le señala a la Institución el camino para ofrecer el servicio público de
la educación superior en las diferentes regiones del Departamento, a través de
sus tres funciones básicas: investigación, docencia y extensión. (Antioquia)
Es por eso que los diferentes pregrados del Alma Mater en las regiones permiten dar
apoyo desde lo Institucional canalizando inquietudes de los estudiantes que permitan
su desarrollo tanto en lo académico como en lo personal:
La regionalización de la Universidad contribuye a la creación, desarrollo y
adaptación del conocimiento en beneficio del crecimiento humano con criterios
de igualdad, universalidad, responsabilidad y autonomía. Y se fundamenta en los
criterios de excelencia académica, interdisciplinariedad, pertinencia, convivencia,
cooperación, participación y compromiso social.(Idem)
Con el fin de consolidar un evento académico que permita que se cumplan las
anteriores premisas, es necesario un enfoque transdisciplinario de las situaciones
institucionales. En este sentido La Universidad de Antioquia cuenta con una Política de
regionalización arraigada en su estructura organizativa, en donde uno de sus
principales objetivos es: "Interactuar con las regiones para generar programas y
proyectos de investigación, cuya transferencia de conocimiento permanente y aportes a
la solución de la problemática regional dentro de un contexto globalizado, proporcionen
las herramientas necesarias para liderar los procesos de cambio y desarrollo acordes
con el comportamiento social, cultural, económico y político de las mismas".
Formar desde la Experiencia
En el capítulo La formación de gestores culturales: un camino por construir del
profesor Carlos Yáñez Canal de la Universidad de Manizales de Colombia, publicado
en el libro Profesionalización de gestores culturales en Latinoamérica: Estado,
universidades y asociaciones, de la Universidad de Guadalajara en México, el autor
reflexiona acerca de la importancia de replantear las estrategias o herramientas
utilizadas para la formación del actual gestor cultural pues para él, el gestor cultural no
puede limitarse a la actividad artística y la industria cultural.
Esta postura la plantea como una urgencia dada por los actuales acontecimientos de
la modernidad a la cual el gestor debe enfrentarse por lo cual es necesario reivindicar
su papel en cuanto constructor social.
Por lo tanto, el docente responsable de la formación de los nuevos Gestores, sobre
todo de aquellos que serán los llamados a fortalecer los territorios para los cuales se
hace necesario si intervención, debe plantea una propuesta pedagógica como que
aporte para esta formar profesionales desde donde se respalde la idea de un gestor
que se oriente a “hilar tejido” social. Y que mejor manera que desde las Artes se pueda
articular una manera de hacer pedagogía permitiendo que la experiencia de acercarse
a esta, le permita desde el ejercicio práctico, reflexionar acerca de su oficio y de su
responsabilidad con el entorno.
Como trabajar juntos? Como aceptar las experiencias del otro? Como formar desde
la diferencia?’ son las preguntas que me merecen ser contestadas desde la posibilidad
que brinda la experiencia de pasar por la organización de un evento pues, como
estrategia, es posible que allí el gestor puede establecer una nueva mirada no solo del
otro sino de sí mismo, de su cuerpo que requiere ser “tocado” con nuevas sensaciones.
Para el profesor Yanes se hace indispensable que el gestor actual tenga un nuevo
cuerpo, que lo sienta y sea visceral, es decir, aún más sensible para poder entender al
otro. (Desde la diferencia)
De esta manera, el proyecto presentado, apoyado por el proceso académico del
curso de Artes Escénicas para el pregrado de Gestión Cultural de la Facultad de Artes
para las regiones, utilizando el teatro y las demás manifestaciones del Arte, se
presenta como una oportunidad para que los estudiantes de una Facultad que busca
ser reconocida por sus logros artísticos y la formación en profesionales completos,
también se vislumbre como un espacio de encuentro no solo pedagógico sino para
Arte, juego y fiesta
Otro de los elementos que sustentan esta propuesta está relacionado con la
propuesta de Hans George Gadamer con su teoría del Juego y la Fiesta como espacios
de relaciones espacio temporales donde las fronteras se rompen y se establecen
nuevos diálogos:
Relación con el aspecto comunicativo que Gadamer atribuye a la experiencia
hermenéutica. En la fiesta se rechaza el aislamiento, es comunidad, celebración.
En la experiencia hermenéutica del Arte se establece un diálogo.
-Diferencia entre tiempo para algo, vacío que se identifica con suma de
“ahoras” sujetos al reloj (tiempo vacío: aburrimiento, no tener nunca tiempo:
trajín) y tiempo lleno o propio (fiesta, arte y experiencia vital) La fiesta se celebra
y no se distingue en duración de momentos sucesivos, cuando hay fiesta el
tiempo está lleno de ella.
Juego, símbolo y fiesta definen la esencia del Arte. Pero se trata de una
esencia ligada a lo antropológico (vínculo obra y mundo, contextos, horizontes,
tradiciones) no a un mundo de ideas trascendentes por fuera del mundo
humano. (Gadamer, 1991)
4. COMPONENTES:
Evento:
• Propuesta por parte de los estudiantes: Presentación por parte de los
estudiantes del curso Artes Escénicas para Gestión Cultural VI ante la Coordinadora
del Pregrado de Gestión Cultural de la Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia
el proyecto HilandoArte: Un momento para el Encuentro de Expresiones Tejiendo
Territorios
• Convocatoria: se propone un número de grupos teatrales y artísticos mínimo.
Estos deberán ser escogidos por los representantes de los diversos comités que se
proponen para la producción y socializar con el resto del grupo
• Curaduría: Se propone que el equipo organizador de estudiantes proponga el
número límite de grupos y actividades que tendrá el Encuentro. Las actividades y
funciones propuestas por los estudiantes participantes.
• Evento central: presentación de la obra o producto final del curso artes
escénicas para el pregrado de Gestión Cultural VI. Durante el día o la noche, se
presentaran los otros grupos invitados. Puede ser en espacios alternos o uno luego del
otro. Otras actividades tendrán programación alterna.
- Expositivo: Un comité de comunicaciones conformado por estudiantes de gestión
o de otras áreas, realizará registro fotográfico y de video de cada grupo participante.
Copia de este material será entregado a cada grupo en un cd, con lugar, fecha y datos
del grupo.
- Pedagógico:
El programa de Gestión Cultural con este evento fomenta no solo conceptos
teóricos aplicables en esta área, sino conceptos vitales en sus estudiantes como el
trabajo en equipo, lo relacional, la responsabilidad y la toma de decisiones, además de
incidir en la comunidad con la presencia de un evento artístico que propende en la
formación de públicos al tener acceso a una actividad como el teatro que se aleja de
las actividades populares a los cuales el espectador del común está acostumbrado a
asistir como conciertos, tablados, corralejas, entre otros.
Para que poder llegar al asunto pedagógico, se parte del resultado del estudio de
Caso, de la cual emergieron las siguientes categorías:
Posteriormente, con el ejercicio de agrupar por colores, en este caso, fue posible
identificar las categorías emergentes que fundamentan la directriz desde la que se
aborda este proyecto:
Categoría 1:
Enfoque orientador: las acciones.
En la metodología se debe tener en cuenta en el programa la relación Artes-
Gestión Cultural - Territorio. Factor importante en la formación. Puede ser un
enfoque.
Resuelto la metodología de trabajo y las condiciones del curso, entró a jugar un
factor importante entender el contexto. (Entender el contexto)
La proyección del trabajo como estrategia que permite entender procesos
administrativos desde la práctica. La comprensión de lo teórico en la práctica
aplicada a la proyección de la obra. La acción.
La construcción de roles diversos en la experiencia:
Estrategias pedagógicas: la técnica de la media mascara cotidiana
La proyección de la obra, oportunidad generadora de nuevas experiencias
El lugar de los conocimientos previos de los estudiantes gestores.
El aprender Haciendo: asumir otras líneas de la puesta en escena que deben
llevarse a cabo desde lo colectivo.
Entender las fortalezas de cada estudiante a favor del objetivo del curso.
fomentar la creatividad para organizar la escena desde sus propias fortalezas y
“pelearse” sus miedos a enfrentar públicos: asumir retos.
Categoría 2
Trabajo en equipo, lo colectivo
La construcción de equipo dentro de un grupo de gestores culturales en
formación: el proceso de inicio de la experiencia de gestión aplicada a las artes
escénicas encontró como primer escollo las dificultades del trabajo en equipo.
Maneras de construir y entender el trabajo en equipo teniendo en cuenta
liderazgos asociados a los saberes previos y reacciones de los grupos frente a
ello.
Diferencias de enfoque y dificultades de construcción de procesos en colectivo.
Implementar acciones conjuntas, la experiencia fundamental de la capacidad de
un gestor cultural, reduciendo las barreras para la construcción conjunta.
Unir el grupo por encima de las diferencias.
Construcción de lo grupal: como articulación de miradas diferentes.
El aprender Haciendo: asumir otras líneas de la puesta en escena que deben
llevarse a cabo desde lo colectivo
Categoría 3
Entendiendo el territorio desde la puesta en escena.
Escenificando lo propio y expandiendo para la representación una motivación.
La Gestión Cultural y su relación con el contexto desde las Artes: Una
experiencias desde el Teatro como espacio de reflexión y formación
Desde el concepto de la de la dramaturgia, es posible leer el contexto o se
articula el contexto desde la construcción de personajes desde lo local.
La articulación de contextos diversos en la construcción narrativa: es una
adaptación de la obra que se deja permear por la inclusión de la experiencia de
mixtura de los contextos regionales permitiendo apertura de la historia a los
contextos
Creando lugares para la escena teatral en la región: Espacios de consumo y
espacios físicos lo que posibilita ver al gestor como un “profeta en su propia tierra” y
como un agente dinamizador de procesos en sus propias comunidades. 5.
ALCANCE: (Departamentos/áreas que involucra)
El proyecto busca principalmente consolidarse como un evento semestral de la
Facultad de artes para conmemorar el final del semestre del curso de Artes Escénicas
s. A partir de allí, se busca involucrar a los demás estamentos de la universidad como
Regionalización, Bienestar Universitario con sus diferentes programas como Tejiendo
Redes: Arte y Cultura para el Bienestar.26
Así mismo, pretende involucrar a otros grupo y corporaciones artísticas de las
sedes de la Universidad de Antioquia y la capacidad instalada de la seccional en que
se realice el evento..
También busca involucrase con programas similares en otras Universidades de la
región desde una propuesta de Regionalización como proyecto de Extensión que
permita concebir recursos para su continuidad.
Este espacio buscar involucrar a la Facultad de Artes desde su administración la
Decanatura como cabeza visible hasta el programa de los cursos de extensión con el
cual puede generar convenios y acuerdos con otras actividades artísticas que esta
sección maneje para proyectar.
26
La Universidad de Antioquia, como centro de conocimiento y proyecto cultural más importante del Departamento, deberá ser escenario por excelencia del dialogo intercultural, mediante la promoción interna y externa de las distintas manifestaciones y prácticas culturales de sus miembros y de la sociedad. Así mismo, posibilitar el acercamiento a actividades artísticas concretas, con el fin de lograr la validación de saberes y el desarrollo de habilidades, que fomenten el intercambio de experiencias.
6. TIPOLOGÍA:
Teatral: Encuentro de grupos de teatro y afines.
7. AGENTES:
Curaduría: Estudiantes del Pregrado de Gestión Cultural de la Facultad de
Artes, docente del curso Artes Escénicas para Gestión Cultural.
Montaje: Equipo de estudiantes del curso Artes Escénicas para Gestión
Cultural.
Apoyo logístico: Estudiantes de otros programas, estudiantes del programa
Fondo EPM que paguen horas, voluntarios.
Comunicaciones: Unidad de Comunicaciones de la Facultad de Artes.
Unidad de Comunicaciones Bienestar Universitario
Comité de estudiantes responsables del curso Artes Escénicas.
Proveedores: Facultad de Artes.
Colaboradores: Concejo de Facultad de Artes
Bienestar Universitario de cada sede.
Programa Regionalización Universidad de Antioquia.
Coordinadores de Seccionales.
Administraciones locales.
Grupos, colectivos y corporaciones culturales y artísticas de
la cercanas a la región.
8. OBJETIVOS:
- Posicionar proyecto HilandoArte: Un momento para el Encuentro de
Expresiones Tejiendo Territorios como un evento Artístico teatral para cierre de
semestre a cargos de los estudiantes del pregrado de Gestión Cultural de la Facultad
de Artes.
- Posibilitar a los estudiantes del pregrado de Gestión Cultural de la Facultad de
Artes, un espacio para dar a conocer y difundir los productos académicos realizados
durante el semestre.
- Abrir un espacio para generar reflexiones acerca del Arte y su función social a
través del Teatro, la formación del Gestor haciendo Gestión y posesionar un evento
académico desde la Extensión de los programas de la Universidad de Antioquia.
9. PÚBLICO OBJETIVO:
- Estudiantes, docentes y administrativos de la Facultad de Artes de la
Universidad de Antioquia.
- Colectivos artísticos de la zona cercana a la sede y los grupos artísticos que
promueve la misma universidad a través de sus espacios como Tejiendo Redes.
- Publico General.
10. INGRESOS ESPERADOS:
No aplica
11. COSTOS:
Aplica como ejercicio de Fundraising (Consecución de recursos) para los
estudiantes de Gestión Cultural.
12. FECHAS DE TRABAJO:
Las labores para este evento comprenden:
PREPRODUCCIÓN:
- Acuerdos para la selección de los grupos con los voceros de cada grupo o colectivo
- Reunión para acuerdos de los términos del encuentro.
- Recepción de necesidades técnicas de cada grupo
- Reunión con los implicados en el evento: líderes de los colectivos, docentes encargados de
muestras académicas en el evento, vicedecana, coordinadores de los comités de estudiantes
de Gestión, Coordinador de Bienestar Facultad de Artes correspondiente
-Acuerdos sobre qué lleva cada grupo y que se debe gestionar ante la universidad.
-Publicidad por parte de los estamentos encargados.
-Gestión y Organización de los espacios a utilizar para el encuentro y los eventos alternos
durante el evento.
-Construcción del guion del orden que llevara el encuentro, planos y mapas de ser
necesarios.
-Permisos requeridos para los estudiantes que trabajan, para ingreso de externos, entre
otros.
PRODUCCIÓN:
-Recibimiento de los grupos, acomodación de camerinos y resolución de necesidades.
-Definición del espacio para presentación de los grupos.
-Montaje de tarima o sitios para actividades alternas.
-Montaje de aforo (telones) luces y sonido.
-Montaje de publicidad
-Adecuación de los espacios para las actividades artísticas alternas al encuentro de bandas.
1. FECHAS DE EJECUCIÓN:
HilandoArte:
-De acuerdo a fechas de programación del Curso de Artes Escénicas por parte del pregrado
de Gestión Cultural. Todo el día.
POSTPRODUCCIÓN:
-Despedida de los grupos y entrega de certificados de participación.
-Desmontaje y recogida de material de sonido y equipos.
- Entrega de material prestado a sus respectivos lugares de origen.
-Evaluación.
14. FUENTE DE FINANCIAMIENTO:
Capacidad Instalada de cada seccional.
Facultad de Artes, Universidad de Antioquia
Departamento de Extensión Cultural, Universidad de Antioquia.
Programa de Regionalización.
Otros operantes gestionados por el grupo de Gestión Cultural VI en su región.
15. LÍDER // ALIANZAS:
Este es un proyecto que surge del curso de Artes Escénicas del pregrado de Gestión
Cultural VI de la Facultad de Artes apoyados por la Coordinación de Regionalización de la
Universidad de Antioquia.
CAPITULO VI
CONCLUSIONES
Luego del recorrido por dos experiencias donde la Gestión Cultural fue reconocida
como un lugar fundamental de movilización e intervención, se identificaron algunos
aspectos claves como aprendizajes a retomar.
Podríamos hablar de la Gestión Cultural desde los cambios de la cultura, las
políticas públicas, es decir, temas que pueden aportar desde un discurso fundamental
en la formación de los gestores culturales, claves para la formación de los Gestores
Culturales, sin embargo cabe hacerse la pregunta ¿Para qué hacer Gestión Cultural? .
Las respuestas podrían ser muchas: Desde la justificación que la asocia al
mejoramiento de la calidad de vida de las comunidades, dinamizar procesos y
aumentar el capital simbólico y estético de una sociedad, para aportar al crecimiento
personal de una ciudadanía, para permitir el fortalecimiento de un tejido social con el
intercambio y la circulación de bienes y servicios culturales, para crear nuevos
proyectos de vida.
Para esto, temas como el de la Gerencia Cultural hacen presencia de manera que
esta permita un mayor impacto posible en la comunidad, colaborando en la
transformación del entramado social, innovando e involucrando de manera directa a los
actores. Todo esto, poniendo de manifiesto prioridades y organizando los recursos.
Indiscutiblemente, la Gestión Cultural sigue siendo un fenómeno en construcción,
que no termina de definirse y por ende, su definición no es única. Para América Latina
se hace importante seguir trabajando por una Gestión Cultural propia que permita
hablar de sus propios asuntos ya que a diferencia de otros procesos en Europa, por
ejemplo, la problemática en países suramericanos y en América Latina en general,
sustenta la Gestión Cultural desde la intervención social y el trabajo con comunidades.
De igual forma, es evidente que de ahí se derivan asuntos como la identidad, el
patrimonio y la diversidad.
Como manifiesta el Profesor Yáñez Cañal en su ponencia sobre la Gestión en
Cultural en América Latina realizada en México en el 2012:
Así mismo las universidades desde cada uno de sus pregrados, sin importar el
enfoque que tenga desde las artes, las ciencias humanas o las escuelas de
negocios, deben propender porque la tendencia se siga definiendo hacia el
trabajo comunitario y fortaleciendo el tema de la identidad, aunque los procesos
de globalización y las políticas neoliberales lleven al desarrollo de las industrias
culturales.
Desde ahí es necesario retomar el tema de la formación del Gestor Cultural en el
contexto de la vida contemporánea de manera en que mueven las comunidades
actualmente y cabe hacernos la otra pregunta:
Como formamos al Gestor Cultural hoy? También existen muchas respuestas desde
la idea de formar administradores y gerentes culturales capaces de proyectar
comunidades a través de proyectos, en los cuales se ha capacitado. Sin embargo, un
programa como el pregrado de Gestión Cultural para las regiones de Antioquia, debe
traspasar esa línea gerencial, apuntándole a proyectos que impacten el territorio y que
sean este tipo de proyectos los que a su vez genere un campo de formación para el
Gestor Cultural de la Universidad de Antioquia.
De esta manera, se visibiliza otro asunto y es la necesidad de formar en el largo
plazo, es decir, permitir que con proyectos artísticos que perduren en el tiempo, donde
los estudiantes sean quienes lideren y se apropien del mismo, es posible generar una
reflexión mucho más sentida. Así se podría dar sentido a una profesión como la
Gestión para el territorio, en contexto.
La formación de un gestor implica en este sentido la enseñanza y el
aprendizaje de un repertorio de disposiciones para la flexibilidad,
interculturalidad y, aún más, de la transculturalidad y sus sincretismos. Es
necesario que el gestor comprenda y dialogue en términos de las diferencias que
existen en una comunidad más allá de sus aspectos comunes, lo que demanda
una disposición a un nomadismo rizomático (Restrepo, 2002).
El tipo de formación que surge de esta investigación está basado en la experiencia
que se da en el evento como acción, una experiencia que permite la reflexión acerca de
lo que se hace por qué ha pasado por ella, liderando, asumiendo responsabilidades o
tomando decisiones.
Jorge Larrosa propone en su texto Sobre la Experiencia que:
La experiencia es algo particular de cada persona, la experiencia son cosas que
me pasan a mí, sobre mí, son cosas que pasan fuera de mi y me afectan de tal
modo que pueden hacer cambiar mi forma de pensar, de sentir, de vivir; esas cosas
que pasan no dependen de mí, no soy yo quien actúa, es lo que pasa afuera que
actúa sobre mí, puede alterarme según reciba eso que me pasa.
A eso que nos pasa de afuera hacia adentro, es reflexivo pues nos hacen pensar
sobre nuestra vida; la experiencia es subjetiva, se puede ver abiertamente desde
diferentes puntos y según se mire transforma algo dentro de nosotros.
Tener como referencia un evento como el Setkani Encounter en Brno, Republica
Checa posibilita entender una experiencia propia como el pregrado de Gestión cultural
de la Facultad de Artes desde otra perspectiva. Lo primero es entender que ambos son
procesos formativos pero con estrategias diferentes que buscan el mismo resultado.
Y es que desde el curso de Artes Escénicas para Gestión Cultural se puede construir
un nuevo derrotero que permite, en relación a la otra experiencia, preguntarnos por la
relación docente – estudiante. Es valioso recuperar este ítem ya que se evidencia en la
propuesta europea una posición clara del estudiante de Gestión ante su evento, digo
“su”, porque este se ha apropiado de tal manera que el docente solo orienta en los
casos donde el estudiante acuda a él. Para el pregrado de gestión, se hace
indispensable que el estudiante asuma un rol que lo anime a ser proactico, líder y
autónomo, sin la autoridad del docente que obliga por notas.
Lo que es importante acá es que el nuevo gestor debe estar preparado para afrontar
nuevos retos que se imponen por las dinámicas actuales generadas por la modernidad
y sus efectos. En este sentido, el proceso de formación debe enfocarse en esa
dirección con nuevas estrategias donde el estudiante antes de ser un sujeto pasivo en
un aula de clase, se transforme en un profesional capaz de entender la gestión desde
una de estas dos ópticas: una gestión cultural de orden Institucional, que muchas veces
es la que más prima por considerarse un estudiante con derechos donde la institución
debe aportarle todo para su formación o desde una gestión cultural de orden social.
En lo que respecta a la mirada que se busca, el gestor en formación debe ubicarse en
aquella gestión de orden social pues es desde allí que se permite reconocer al otro en
la diversidad y la diferencia, también desde el orden social es que se requiere el
profesional de la Gestión ya que es lo investigativo y lo creativo lo que lo caracteriza y
esto se logra, al menos desde esta propuesta, teniendo presente que se puede formar
haciendo gestión.
A manera de colofón, tres asuntos más quedan de esta reflexión:
El proceso de formación del gestor cultural para las regiones articulando
experiencias de gestión cultural desde el evento como acontecimiento
complejo, es decir, ir más allá de la experiencia de lo operativo, lo
administrativo y de la producción. Este debe aportar a una transformación
personal y a una transformación de un territorio.
La Universidad de Antioquia, la Facultad de Artes y demás instituciones
culturales locales, deben aportar para generar encuentros que faciliten
acciones en la labor y la formación del Gestor Cultural.
Una formación desde la práctica y la experiencia debe aportarle al egresado
de Gestión Cultural la posibilidad de dinamizar otros asuntos apostándole a
nuevas estrategias y no quedarse con las mismas dinámicas al regresar al
lugar donde surgió su motivación para la Gestión Cultural. El titulo se vuelve
un adorno.
BIBLIOGRAFIA
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mecanismos causales, validación. Universidad del CEMA. 2004
Yáñez Canal. Carlos. Gestión Cultural, ciudadanía e inclusión social. Universidad
Nacional de Colombia. 2014
Yáñez Canal. Carlos (editor) Emergencias de la Gestión Cultural en América
Latina. Universidad Nacional de Colombia.2014.
Vélez, Carlos Mario. Informe de Autoevaluación: Universidad de Antioquia,
Facultad de Artes. Pregrado Gestión Cultural. Regionalización. Junio 2013.
ANEXOS
PRIMER PROTOCOLO DE PREGUNTAS A PARTICIPANTES POR LA
FACULTAD DE ARTES EN EL SETKANI ENCOUNTER, BRNO REPUBLICA
CHECA. ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCUELAS DE TEATRO
ENTREVISTA N 1:
Cargo:
Dependencia:
Área:
Año de participación en el evento:
1-¿Cómo logra usted ser invitado al Encuentro Setkani Encounter Brno
Republica Checa?
2-¿Qué lo motiva a aceptar y participar en el Encuentro?
3-¿Cómo fue el apoyo recibido por parte del Departamento y de la universidad
para este viaje?
4-¿Qué impacto y reacciones generó la presentación de su trabajo en el público
de este país?
5-¿Cuántos países estaban presentes en el festival?
6-¿Cuáles fueron las experiencias más significativas de este encuentro?
7-¿Al regreso en la escuela tuvo la oportunidad de exponer estas experiencias?
8-¿Cuáles fueron las principales dificultades que afronto a lo hora de realizar el
viaje?
9-¿Por qué cree que es importante para los estudiante, profesores y para el
Departamento consolidar este tipo de encuentros?
10-¿Conocías antes otros Encuentros de este tipo?
11-¿Qué piensas al respecto de ese tema organizativo?
12 - ¿Y sobre este tema, qué opinas? ¿Crees que esto es algo que podríamos
replicar en la escuela de teatro?
13-¿Crees que es importante tener un espacio donde los estudiantes puedan
realizar algo similar?
14-¿Pudiste entender cómo funciona el Setkani Encounter?
15-¿Quieres agregar algo más sobre tu experiencia como participante?
ENTREVISTA N 1:
Nombre: Mario Wilson Bustamante.
Cargo: Docente vinculado medio tiempo.
Dependencia: Artes Escénicas.
Área: Actuación, expresión corporal y técnica vocal.
Año de participación en el evento: 2010
Tipo de participación: Docente Actor.
Fecha:?
1-¿Cómo es usted invitado al Encuentro?
La invitación se produce por intermedio de Josué Santamaría quién tenía el
contacto de Republica Checa porque ya había estado en un festival de teatro
independiente y amateur en Praga y desde allí surge la invitación para el
Departamento de Teatro al festival de Teatro en Brno. En principio estaba
propuesto que viajar a otro grupo, el de Emisiones de medianoche que era el
montaje de aquella época, pero por razones logísticas y presupuestales se propone
el monólogo Nada entre los Dientes del estudiante Camilo Cuartas, quien no pudo
viajar y por esa razón presentamos los monólogos Jhon Hp y La Puerta, que hacen
parte de un repertorio personal.
2-¿Qué lo motiva a aceptar y participar en el Encuentro?
La posibilidad de proyección de nuestro trabajo en una cultura casi desconocida
para nosotros.
3-¿Cómo fue el apoyo recibido por parte del Departamento y de la
universidad para este viaje?
Ha habido un apoyo institucional adecuado a los requerimientos formales e
institucionales. En lo financiero sabemos que la Universidad ofrece un apoyo muy
parcial y que corresponde al grupo o las personas gestionar o subvencionar el resto
de los gastos.
4-¿Qué impacto y reacciones generó la presentación de su trabajo en el
público de este país?
Muy positivos, porque abrieron la puerta para ser invitados a posteriores
festivales de manera directa, es decir sin pasar por el filtro de la selección y además
porque se generaron invitaciones a otros festivales, a los cuáles no podíamos
asistir.
5-¿Cuántos países estaban presentes en el festival?
12 Escuelas de Teatro de diversos países de Europa.
6-¿Cuáles fueron las experiencias más significativas de este encuentro?
Ampliar el panorama de nuestro trabajo tanto en lo artístico como en lo formativo
a través de los trabajos observados de actores en formación y el intercambio con
profesores de otras escuelas de teatro de Europa, y dar a conocer a nuestro país,
universidad, Facultad y Departamento.
7-¿Al regreso en la escuela tuvo la oportunidad de exponer estas
experiencias?
Se presentó un informe general a los profesores y quedó pendiente la
presentación a los estudiantes.
8-¿Cuáles fueron las principales dificultades que afronto a lo hora de
realizar el viaje?
Las dificultades financieras y el visado.
9-¿Por qué cree que es importante para los estudiante, profesores y para el
Departamento consolidar este tipo de encuentros?
Rompemos el endogenismo del Departamento, confrontamos nuestras
propuestas artísticas y pedagógicas, revaloramos nuestra labor, ampliarnos la visión
general sobre el teatro y la formación, abrimos nuevas posibilidades de proyección,
ampliamos la oferta de estudios e intercambios con escuelas Europeas.
10-¿Conocías antes otros Encuentros de este tipo?
El Departamento de Teatro tiene al año varias invitaciones a nivel Nacional e
internacional para asistir a encuentros de Escuelas de Teatro para intercambiar
experiencias y procesos de formación, por ejemplo, con las escuelas de Bogotá
Cali, Brasil y Chile pero este, el de Brno tiene un componente muy interesante y es
que es organizado en su totalidad por estudiantes de diversas áreas de las Artes
Escénicas, asesorados por sus docentes. De esta manera, el Encuentro no es solo
un espacio de intercambio de estéticas y procesos, sino también un espacio de
formación para los estudiantes organizadores.
11-¿Qué piensas al respecto de ese tema organizativo?
Pues fue muy gracioso al principio porque cuando participamos en eventos de
este tipo, estamos acostumbrados a estar siempre rodeados de profesores para
charlar, tomar café y resolver los problemas de los estudiantes desde los
conversatorios, ponencias y demás. Pero en este caso, todo giraba por los
estudiantes, con los estudiantes y para los estudiantes. Después supe que todo el
evento debe ser organizado por un estudiante de gestión cultural o gestión de
eventos culturales, algo así, y el resto de participantes son todos de áreas afines.
En este caso, los profesores aprovechan este momento para realizar sus prácticas
ahí, en el momento del festival.
12 - ¿Y sobre este tema, qué opinas? ¿Crees que esto es algo que
podríamos replicar en la escuela de teatro?
Je,je,je, sería muy interesante ver cómo están preparados nuestros estudiantes
para organizar ellos mismos un evento de esta categoría. Sobre todo, porque en la
Facultad, los estudiantes de teatro reciben poca formación en organización de
eventos, de pronto el curso de gestión cultural con el profesor German Benjumea.
13-¿Crees que es importante tener un espacio donde los estudiantes
puedan realizar algo similar?
Como te digo, la Facultad tiene poco experiencia en estos temas, hace mucho
tiempo que no organizamos encuentros de escuelas de teatro, hemos organizado
dos versiones del congreso de estudios teatrales con éxito pero todo en cabeza de
los docentes. Pienso que armar un proyecto de esta envergadura, organizado como
practica de los estudiantes sería algo muy novedoso y necesario. Tendríamos que
acudir al programa de Gestión Cultural, un programa nuevo que se oferta en
regiones por la facultad, para ver como funcionaria.
14-¿Pudiste entender cómo funciona el Setkani Encounter?
Tereza, la guía que teníamos, nos explicaba que ella era estudiante de
“managers”, que el Setkani se organizaba cada año siempre por un estudiante
diferente, uno de último año y que cada vez debían proponer un tema que
permitiera la convocatoria. Por ejemplo, el año que participamos era el Metting Point
o Punto de Encuentro. De allí entendimos el logo del festival que era un punto rojo.
Desde parte la publicidad, diseños, la escogencia de las escuelas, el marketing, y
todo lo relacionado con el festival.
15-¿Quieres agregar algo más sobre tu experiencia como participante?
Pues pienso que para nosotros es importante poder seguir en contacto con este
evento, que debemos aprender a ser más organizados para esto pues allá, en
Europa todo lo organizan con un año de antelación y el ritmo nuestro es dejar todo
para lo último. El evento es muy rico porque todo está muy organizado, revisado y
planeado.
-Muchas gracias, profesor.
-Con todo gusto.
ENTREVISTA N 2:
Nombre. Hibened Carreño Ortiz. Estudiantes que participaron en el Setkani
Encounter, Brno – Republica Checa.
Cargo: Actualmente, Egresada Maestra en Arte Dramático.
Dependencia: Artes Escénicas.
Área: Actuación.
Año de participación en el evento: 2012
Tipo de participación: Estudiante actriz.
1 - Cuándo estudiabas teatro, ¿Qué conocías del Setkani Encounter y su
conexión con el programa de Teatro?
Pues sabia de la participación del profesor Mario Wilson Bustamante y de
Josué Santamaría en el 2010 por un informe que ellos presentaron en lo que
llamamos clase inaugural, un encuentro que se hace con todos los estudiantes de
teatro y danza con los profesores y el Jefe del Departamento antes de empezar el
semestre. De allí, supe, que se creó un contacto con el festival que tenían mucho
interés en seguir llevando trabajos de la Escuela pero con estudiantes pues ellos
fueron en calidad de profesores.
2- De que manera logras participar en el Evento de Brno?
Supe que para el año siguiente se intentó llevar un ejercicio de personaje pero
fracaso porque los estudiantes renunciaron al proyecto en el proceso de selección.
Por eso, el profesor Mario Wilson me invita al finalizar el 2011 a trabajar sobre una
obra que él pensaba podia interesar a los organizadores del festival. También invito
a otro estudiante con el cual ya conocía de otros procesos académicos. La
propuesta era Tristán e Isolda del autor chileno Marco Antonio de la Parra. Con el
profesor Josué de apoyo, enviamos la propuesta en las fechas establecidas y
quedamos preseleccionados porque ellos argumentaban que temían por el proceso
de la visa pero que les gustaba la propuesta. Finalmente, una de las escuelas
escogidas canceló su participación, por lo que al final nos invitan oficialmente para
representar a la Facultad de Artes.
3-¿Cómo es el proceso, entonces, para conseguir los recursos económicos
para asistir al Encuentro?
Fue muy complicado por la premura del tiempo ya que la respuesta la dieron a
finales de febrero y el festival era en abril, lo que solo nos dejaba un mes para
conseguir recursos y hacer el trámite de la visa. Ese fue otro tema pues
pensábamos que era fácil sacarla en Medellín o en Bogotá pero luego nos
enteramos de que había que viajar a Lima, Perú pues la embajada la habían
trasladado allí a finales del 2010. Eso nos complicó todo
4- Crees que es importante tener un apoyo desde la gestión cultural para
este tipo de proyectos?
Es importantísimo, porque yo tuve que asumir un rol que no conocía a
profundidad como la de manejar protocolos, enviar cartas, hacer citas, hacer
cotizaciones, llamadas, llenar formatos, conseguir firmas.
5 – Desde los formativo en el Departamento de teatro, crees que hace falta
profundizar en estos temas de gestión?
Como estudiantes, durante la carrera, solo recibimos dos semestres de gestión
cultural y son más teóricos que prácticos donde terminamos presentando un
proyecto de un evento o aprendiendo a presentar una buena hoja de vida. Eso es
interesante pero en la vida real, eso exige mucha experiencia y práctica.
6- Es posible, de acuerdo a tu experiencia, crear espacios académicos para
fortalecer a los estudiantes en estos temas de la gestión?
Pues hacen falta. La Facultad tiene al año muchos eventos y espacios donde los
estudiantes pueden participar para coger experiencia en estos temas y que los
prepare para el mundo real. Pienso que la academia debe pensarse en eso.
Además, se están abriendo espacios académicos como el pregrado en gestión
cultural y la maestría que deben fortalecer estos campos, no sé, acompañando de
alguna manera proyectos de este tipo.
7- Supe que estuviste liderando el proyecto Delta 6, Encuentro de Escuelas
de teatro a nivel latinoamericano en la Facultad de Artes. Crees que te sirvió la
experiencia del Setkani para estar al frente de este otro evento, en lo que a
gestión se refiere?
Mucho. Por la experiencia en este viaje, la Jefe del Departamento de Teatro
Adriana Upegui me propuso que liderara junto a otra estudiante, un comité para
conseguir los recursos para el Delta 6, el cual se realizó en el 2103 en la Facultad
de Artes. El Delta se realiza cada año en una escuela diferente donde todas las
escuelas montan el mismo ejercicio y luego se expone el proceso. Para esto,
tuvimos que movernos en las dependencias de la Universidad y en otras instancias
externas como alcaldía y empresas culturales pues debíamos conseguir recursos
en alojamiento, alimentación y transporte interno para escuelas de Chile, Perú,
México, Argentina y Colombia.
8-Para terminar, podrías hacer un paralelo entre lo que viviste en República
Checa como participante y el evento Delta 6 como organizadora?
Pude ver como en Brno existe una preparación muy meticulosa y organizada.
Todo está muy calculado con un estudiante o una persona responsable. Esto hace
que todo salga como un relojito. Acá nos falta tener personas con experiencia en
este tipo de organización de eventos, lideres pues casi siempre toda la
responsabilidad cae en una o dos personas. Y no debe ser así. Hay que saber
delegar. Lo otro es el tiempo. Hay demasiados protocolos y poco tiempo.
Muchas gracias
Con gusto.
PROTOCOLO DE PREGUNTAS A PARTICIPANTES EXTRANJEROS, BRNO
REPUBLICA CHECA. ENCUENTRO INTERNACIONAL DE ESCUELAS DE
TEATRO
ENTREVISTA N 3:
Nombre: Mauricio Estrada Aguilar
Cargo: Docente
Dependencia: Instituto Bilingüe Rudyard Kipling
Área: Teatro y Literatura
Año de participación: 2012
1-¿Cómo es tu primer contacto con el Encuentro?
A partir de mi estancia en Brno, en la cual realizaba estudios de investigación.
Viví de cerca toda la organización.
.2-¿Qué lo motiva a aceptar y participar en el Encuentro?
La organización tan profesional hecha por los mismos estudiantes aunada a la
diversidad cultural que se experimenta con trabajos de altísimo nivel.
3-¿Cómo fue el apoyo recibido por parte de tu Universidad para este viaje?
Yo obtuve una beca por medio del Gobierno Checo y la Secretaría de Relaciones
Exteriores de mi país.
4-¿Qué impacto y reacciones te generó conocer de cerca este evento?
Fue muy impactante pues en México los festivales de esta índole son realizados
por empresas profesionales, mientras que los escolares no llegan a tener la calidad
de organización y programación con la que cuenta el Setkaní.
5-¿Cuántos países estaban presentes en el festival?
12
6-¿Cuáles fueron las experiencias más significativas de este encuentro?
Sin duda el poder conocer las perspectivas escénicas de los diferentes países y
poder convivir con los creadores escénicos tanto en momentos meramente
relacionados con el teatro, así como en momentos de esparcimiento.
7-¿Al regreso a tu país y universidad, tuvo la oportunidad de exponer estas
experiencias?
Sí, de hecho he dado una ponencia al respecto en el encuentro de la Asociación
Mexicana de Investigación Teatral.
8-¿Cuáles fueron las principales dificultades que afronto a lo hora de
realizar el viaje?
Económicas, especialmente para el vuelo.
9-¿Por qué cree que es importante para los estudiante de teatro, profesores y
para la formación consolidar, participar en este tipo de encuentros?
El estudiante se forma, sus estudios se complementan a partir de la experiencia
de conocer en vivo otras culturas escénicas. El profesor enriquece su conocimiento
y proporciona elementos que domina hacia los otros participantes.
10-¿Conocías antes otros Encuentros de este tipo?
Sí, pero no escolares. El de Tijuana, en México.
11-¿Qué piensas al respecto de ese tema organizativo de este evento
organizado por estudiantes de Gestión?
Es la forma en cómo deberían organizarse las universidades en Artes Escénicas,
ya que dan todas las armas de la vida profesional al estudiante desde los primeros
años de estudio.
12 - ¿Y sobre este tema, qué opinas? ¿Crees que esto es algo que
podríamos replicar en nuestras Escuelas de teatro?
Desconozco todo el contexto latinoamericano, pero sin duda habría que ofrecerlo
como un buen negocio, y de esta manera conseguir los presupuestos necesarios
para ser llevado a cabo.
13-¿Crees que es importante tener un espacio donde los estudiantes
puedan realizar algo similar?
Totalmente, eso los hace llegar más armados a la vida profesional.
14-¿Pudiste entender cómo funciona el Setkani Encounter?
En parte, pues no estuve de lleno con el equipo de Gestión, pero sí pude
observar que a la Facultad de Teatro se le valora y por tanto se le otorgan las
difusiones y presupuestos que requiere.
15-¿Quieres agregar algo más sobre tu experiencia como participante?
Sólo recomendar ampliamente el Setkaní. Considero que es una oportunidad
invaluable para todo el realizador, gestor y estudiante teatral.
PLAN DE VIAJE, PARTICIPACIÓN EN EL 25 SETKANI ENCOUNTER. ABRIL
14 AL 18 DEL 2015
Se requiere fundamentar más la ruta del viaje, como ejercicio investigativo
además del que se va a seguir como participante.
La fundamentación:
Es un ejercicio de investigación cualitativa, donde se observa y obtiene
información como parte del proceso.
Las diferentes acciones para realizar el ejercicio de observación son:
1. Diario de campo: se registrarán todos los días, los procesos que se vivan
e identifiquen a manera de bitácora, nombrando lo que se ve, las preguntas que
emerjan, lo que llama la atención.
2. Registro fotográfico: detallar lo que va a hacer
3. Grabaciones y entrevistas
Para poder establecer una búsqueda más acorde a mi interés, propongo el
siguiente plan de trabajo o ruta de indagación:
Saberes previos: es importante empezar a escrudiñar sobre la
organización del encuentro pero es importante resaltar:
Objetivos: Identificar los saberes previos que permiten el acercamiento al evento
por parte de los estudiantes. Se plantea el siguiente derrotero
¿Durante la carrera de formación, como se preparan para la organización del
Setkani?
¿De qué manera se enlazan las otras áreas o materias durante el año previo al
Setkani?
¿Existen reuniones para informar a la comunidad estudiantil sobre la
organización del evento?
¿Qué saben los estudiantes de otras áreas o carreras de la Facultad sobre la
organización del Setkani?
¿Cómo se escogen los estudiantes que apoyan la organización del Setkani?
¿Son voluntarios? ¿Cuál es el interés de cada estudiante en participar en las
dinámicas de organización del evento?
En las clases corrientes, ¿se habla o se preparan las clases pensadas en el o la
organización del evento?
Organización: Conociendo que cada año, el tema del Encuentro de
Escuelas es diferente.
Objetivo: Diferenciar o comparar los saberes emergentes a partir de la
experiencia previa
De los académicos, cuál es su nivel de incidencia en la organización?
¿Cómo se organizan los estudiantes para llevar este evento?
Existe un plan o programa pre establecido?
¿De qué manera intervienen los profesores en esta organización?
¿Cómo eligen al estudiante que coordinara el siguiente año la organización del
evento?
¿Qué libertades o potestades tiene el estudiante para organizar el Encuentro?
¿De qué manera se prepara el estudiante organizador para liderar este proceso?
Durante el proceso
Objetivo .Describir los actores vinculados durante el proceso, identificar roles,
relaciones de poder, las tensiones emergentes, cual es el vínculo en función de los
saberes que se requieren en el desarrollo del evento, el lugar del docente y el
estudiante gestor del evento
Cómo intervienen los docentes para la organización del evento? Durante el
proceso de organización, a nivel académico
¿Cómo cambian las dinámicas de la Facultad?
Como resuelven inconvenientes o dificultades antes y durante el evento? ( que
cuenten anécdotas si las tienen, casos donde han pasado situaciones y lo que
emergió, que se aprendió)
¿Quién y cómo se toman las decisiones finales?
Para la organización del evento, como imbrican los demás estamentos de la
Facultad o Universidad?
Como es el acompañamiento de los profesores de las diferentes asignaturas
durante la organización?
Como evalúan: El estudiante responsable entrega de informes? Como se verifica
o analiza los logros y ajustes, en diferentes instancias?
Sustentación oral? Socialización?¿Cuál es el plan de capacitaciones para la
organización? O todo se da desde las aulas de clase?
Recursos:
Objetivo: Establecer los procesos de gestión de recursos que se dinamizan
durante para el evento y cuál es el lugar de la facultad y sus diferentes instancias en
este ejercicio.
Para organizar el evento, existen recursos asignados por la Facultad?
Que incidencia o aporte tiene el estado o las entidades culturales para la
organización del Setkani?
Los estudiantes se preparan en sus clases para ayudar a conseguir los
recursos, en caso de no tenerlos todos?
Como asumen los daños o perdidas de objetos, elementos de propiedad
de la Escuela y que están a disposición del evento?
Que estrategias utilizan para obtener ganancias extras durante el evento
además de venta de boletería para los espectáculos?
Como se manejan los recursos obtenidos durante el festival: ganancias y
pérdidas?
Cuáles son los procesos para conseguir los recursos locativos para las
presentaciones y encuentros? Se alquilan, prestan o intercambian
beneficios?¿ A qué otras alternativas acuden para obtener los
instrumentos requeridos para el Encuentro?
Servicios:
Objetivo:
De qué manera fortalecen las acciones dirigidas a proveer y mantener el
Encuentro año tras año?
Ofrecen alternativas de intercambio para los estudiantes y profesores?
Existe un plan de estudio o estrategias para formación de espectadores?
Metodología
Objetivo:
De qué manera, el Encuentro ha servido como herramienta de formación
de los estudiantes de las diferentes áreas que ofrece la Facultad Jamu?
Cuál ha sido el impacto en la ciudad y sus habitantes?
De qué manera este proceso ha servido a la proyección de los egresados
de la Facultad JAMU de Brno?
Construcción del conocimiento emergente de la experiencia de organización del
evento.
Objetivo: Determinar las maneras de construcción de conocimiento emergentes
del proceso y en relación a que saberes se visibilizan
Existe una sistematización de este proceso en cada versión?
¿Hay una evaluación o seguimiento del impacto a nivel social y cultural
durante los últimos años? ¿Se podría hablar de este espacio como un
punto de encuentro y formación para los estudiantes de esta Facultad?
Esta estrategia ha motivado los procesos en la formación de los
estudiantes por parte de los docentes?
De qué manera se evalúa todo el proceso luego de terminado el Setkani
Encounter?
Cuáles son los mecanismos de comunicación para mantener contacto
permanente con las escuelas participantes?
Procesos de intercambio convocados en el evento
Objetivo: Determinar y describir el concepto de intercambio de conocimiento
emergente en la organización del evento, que implica los criterios de selección o de
invitación que se construyen
De qué manera se seleccionan los invitados, los jurados y las escuelas
participantes?
Cuál es el sentido del intercambio, como lo leen a que se le da más
reconocimiento ¿
Que parámetros se tienen en cuenta para que las Escuelas sean
convocadas?
Los vínculos con escuelas de otros países y continentes se tienen? Como
se establecen y cuáles son las posibilidades o limitantes frente a esto? Por
qué el Encuentro no ha abierto canales más fuertes con escuelas
latinoamericanas?