Texto: Miguel Ángel Mesa Bouzas. Presentación: M. Asun Gutiérrez Cabriada. Música: Barber. Adagio para cuerdas. Texto: Miguel Ángel Mesa Bouzas. Presentación: M. Asun Gutiérrez Cabriada. Música: Barber. Adagio para cuerdas.

La alegría, para celebrar el gozo de existir,como un brindis por cada instante de nuestra vida, sin que nos dobleguen los fracasos, haciendo que la luz que nos alumbra por dentroilumine a los demás por medio de nuestra sincera sonrisa.

La solidaridadLa solidaridad, para no encerrarnos en nuestro propio yo, , para no encerrarnos en nuestro propio yo, para sentir como nuestro el sufrimiento de los demás, para sentir como nuestro el sufrimiento de los demás,

para caminar a su lado, buscando una alternativa liberadora a su para caminar a su lado, buscando una alternativa liberadora a su dolor. dolor.

Para sentir que cualquier persona, en cualquier parte del mundo, Para sentir que cualquier persona, en cualquier parte del mundo, es nuestro hermano/aes nuestro hermano/a

La sobriedad, para vivir en plenitud, no dejándonos consumir por un consumo absurdo,

para valorar lo que tenemos, para percibir que somos partícipes en el empobrecimiento del

mundo, en el deterioro de nuestra madre Tierra, realizando acciones concretas para remediarlo.

La interioridadLa interioridad, para detenernos un momento ante tanto estrés , para detenernos un momento ante tanto estrés diario, para que, en el silencio y la soledad, callemos tanto ruido diario, para que, en el silencio y la soledad, callemos tanto ruido

y nos adentremos en nuestro interior, y nos adentremos en nuestro interior, para reconocer la Presencia que nos vivifica, para reconocer la Presencia que nos vivifica,

para valorar nuestra existencia, para gozar de nuestro propio para valorar nuestra existencia, para gozar de nuestro propio corazón corazón

y de tantos rostros impresos en él.y de tantos rostros impresos en él.

 La cooperación, para mostrar nuestro rechazo ante una competitividad inhumana,

para unirnos a los demás en contra de cualquier causa injusta, para romper con el egoísmo que nos aísla.

La com-pasiónLa com-pasión, para seguir siendo , para seguir siendo verdaderos apasionados por la vida, verdaderos apasionados por la vida, para padecer/sentir-con-los-demás para padecer/sentir-con-los-demás

sus sufrimientos y sus alegrías, sus sufrimientos y sus alegrías, para abandonar la dureza del corazón, para abandonar la dureza del corazón, para salir al encuentro de quienes se para salir al encuentro de quienes se

encuentran tirados en las cunetas de los encuentran tirados en las cunetas de los caminos del mundo.caminos del mundo.

La autoestimaLa autoestima, pero no la de los manuales que te encierran en ti mismo, , pero no la de los manuales que te encierran en ti mismo, en nuestra propia autosatisfacción, en nuestra propia autosatisfacción,

sino la que te ayuda a reconocer tus cualidades y a valorar tus capacidades, sino la que te ayuda a reconocer tus cualidades y a valorar tus capacidades, poniéndolos gratuitamente al servicio de los otros.poniéndolos gratuitamente al servicio de los otros.

La sociabilidadLa sociabilidad, para no aislarnos en nuestra propia casa, , para no aislarnos en nuestra propia casa, en nuestra propia familia, en nuestro propio barrio o comunidad, en nuestra propia familia, en nuestro propio barrio o comunidad,

para abrir y derribar fronteras que nos separan, para abrir y derribar fronteras que nos separan, para sentir el inmenso y sencillo placer de estar juntos.para sentir el inmenso y sencillo placer de estar juntos.

La acogidaLa acogida, para encontrarnos y hacernos cercanos a cualquier persona, , para encontrarnos y hacernos cercanos a cualquier persona, de cualquier parte del mundo, de cualquier religión, idea o cultura, de cualquier parte del mundo, de cualquier religión, idea o cultura,

y así mostrarnos felices y orgullosos de formar parte de nuestra humanidad.y así mostrarnos felices y orgullosos de formar parte de nuestra humanidad.

El perdónEl perdón, ante tanta violencia, , ante tanta violencia, ante tanto dolor causado a los demás o por los otros, ante tanto dolor causado a los demás o por los otros, ante los engaños que sufrimos, ante las decepciones. ante los engaños que sufrimos, ante las decepciones. El perdón que nos enseñó Jesús a practicar siempre, El perdón que nos enseñó Jesús a practicar siempre,

como nos muestra en cada momento nuestro buen Padre y Madre Dios, como nos muestra en cada momento nuestro buen Padre y Madre Dios, hagamos lo que hagamos, hagamos lo que hagamos,

el perdón como semilla y fruto de un mundo nuevo y reconciliado.el perdón como semilla y fruto de un mundo nuevo y reconciliado.

La convivenciaLa convivencia, como una mesa bien dispuesta y abierta al otro, , como una mesa bien dispuesta y abierta al otro, como la alegría de charlar con el que llega de fuera de nuestro pequeño como la alegría de charlar con el que llega de fuera de nuestro pequeño mundo, como respeto y tolerancia hacia uno mismo y hacia los demás, mundo, como respeto y tolerancia hacia uno mismo y hacia los demás, creando una sociedad más abierta, más colorida, más pluriforme, más creando una sociedad más abierta, más colorida, más pluriforme, más

gozosa.gozosa.  

La pazLa paz, para alcanzar el diálogo auténtico, , para alcanzar el diálogo auténtico, para solucionar los conflictos como seres humanos, para que llene el para solucionar los conflictos como seres humanos, para que llene el

corazón, para combatir la violencia que hay en uno mismo y en los corazón, para combatir la violencia que hay en uno mismo y en los demás, demás,

para que, de la mano de la justicia y la verdad, para que, de la mano de la justicia y la verdad, se avance hacia un horizonte de plena armonía y cordialidad.se avance hacia un horizonte de plena armonía y cordialidad.

La amistadLa amistad, como regalo continuo, como fuente de satisfacción, , como regalo continuo, como fuente de satisfacción, como gratuidad y alegría, como poder compartir los gozos y las penas, como gratuidad y alegría, como poder compartir los gozos y las penas,

como dejarse deslumbrar por la belleza del instantecomo dejarse deslumbrar por la belleza del instante en que compartes y celebras la vida con tu amigo/a. en que compartes y celebras la vida con tu amigo/a.

La esperanzaLa esperanza, como una planta que no se deja abatir por el , como una planta que no se deja abatir por el temporal, temporal,

como trabajo permanente ante la adversidad, como horizonte y como trabajo permanente ante la adversidad, como horizonte y camino,camino,

utopía y empeño diario, como signo de que nada está perdido, utopía y empeño diario, como signo de que nada está perdido, como fruto del esfuerzo por no dejarse abatir por nada. como fruto del esfuerzo por no dejarse abatir por nada.

Y ofreciendo confianza, perspectiva y ánimo a quienes se encuentran Y ofreciendo confianza, perspectiva y ánimo a quienes se encuentran abatidos y desilusionados por los golpes de la vida.abatidos y desilusionados por los golpes de la vida.

 La alegría, para celebrar el gozo de existir, como un brindis por cada instante de nuestra vida, sin que nos dobleguen los fracasos, haciendo que la luz que nos alumbra por dentro ilumine a los demás por medio de nuestra sincera sonrisa. La solidaridad, para no encerrarnos en nuestro propio yo, para sentir como nuestro el sufrimiento de los demás, para caminar a su lado, buscando una alternativa liberadora a su dolor. Para sentir que cualquier persona, en cualquier parte del mundo, es nuestro hermano/a.

La sobriedad, para vivir en plenitud, no dejándonos consumir por un consumo absurdo, para valorar lo que tenemos, para percibir que somos partícipes en el empobrecimiento del mundo, en el deterioro de nuestra madre Tierra, realizando acciones concretas para remediarlo. La interioridad, para detenernos un momento ante tanto estrés diario, para que, en el silencio y la soledad, callemos tanto ruido y nos adentremos en nuestro interior, para reconocer la Presencia que nos vivifica, para valorar nuestra existencia, para gozar de nuestro propio corazón y de tantos rostros impresos en él. La cooperación, para mostrar nuestro rechazo ante una competitividad inhumana, para unirnos a los demás en contra de cualquier causa injusta, para romper con el egoísmo que nos aísla.

La com-pasión, para seguir siendo verdaderos apasionados por la vida, para padecer/sentir-con-los-demás sus sufrimientos y sus alegrías, para abandonar la dureza del corazón, para salir al encuentro de quienes se encuentran tirados en las cunetas de los caminos del mundo.

La autoestima, pero no la de los manuales que te encierran en ti mismo, en nuestra propia autosatisfacción, sino la que te ayuda a reconocer tus cualidades y a valorar tus capacidades, poniéndolos gratuitamente al servicio de los otros. .../...  

La sociabilidad, para no aislarnos en nuestra propia casa, en nuestra propia familia, en nuestro propio barrio o comunidad, para abrir y derribar fronteras que nos separan, para

sentir el inmenso y sencillo placer de estar juntos.

La acogida, para encontrarnos y hacernos cercanos a cualquier persona, de cualquier parte del mundo, de cualquier religión, idea o cultura, y así mostrarnos felices y orgullosos de formar parte de nuestra humanidad.

 

El perdón, ante tanta violencia, ante tanto dolor causado a los demás o por los otros, ante los engaños que sufrimos, ante las decepciones. El perdón que nos enseñó Jesús a practicar siempre, como nos muestra en cada momento nuestro buen Padre y Madre Dios, hagamos lo que hagamos, el perdón como semilla y fruto de un mundo nuevo y reconciliado.

 

La convivencia, como una mesa bien dispuesta y abierta al otro, como la alegría de charlar con el que llega de fuera de nuestro pequeño mundo, como respeto y tolerancia hacia uno mismo y hacia los demás, creando una sociedad más abierta, más colorida, más pluriforme, más gozosa.

 

La paz, para alcanzar el diálogo auténtico, para solucionar los conflictos como seres humanos, para que llene el corazón, para combatir la violencia que hay en uno mismo y en los demás, para que, de la mano de la justicia y la verdad, se avance hacia un horizonte de plena armonía y cordialidad.

 

La amistad, como regalo continuo, como fuente de satisfacción, como gratuidad y alegría, como poder compartir los gozos y las penas, como dejarse deslumbrar por la belleza del instante en que compartes y celebras la vida con tu amigo/a.

 

La esperanza, como una planta que no se deja abatir por el temporal, como trabajo permanente ante la adversidad, como horizonte y camino, utopía y empeño diario, como signo de que nada está perdido, como fruto del esfuerzo por no dejarse abatir por nada. Y ofreciendo confianza, perspectiva y ánimo a quienes se encuentran abatidos y desilusionados por los golpes de la vida. (Miguel Ángel Mesa Bouzas)