UNA NOCHE DE FANTASMAS

Por: Sebastián Maldonado Meza

Había una vez un niño llamado Jorge, que le gustaba mucho el deporte.Un día los compañeros le preguntaron ¿Quieres ver una película de terror? Él les contesto, de acuerdo. Se sentaron a mirar dicha película.Entonces al llegar la noche se acostó. De pronto sintió un ruido en la cocina, bajo las escaleras y vio que la cocina estaba encendida, al instante sintió que alguien lo miraba y con voz misteriosa le decía: Joooorge, Jooorge, Joooorge, ven acaaaa!!!!

El niño subió las escaleras gritando mamaaaaa, mamaaaa ¡!!!!!La madre se levantó asustada y vio a su hijo que estaba en el suelo espumeando por la presencia del fantasma, lo levanto, lo llevo a la cama; cuando el niño se recuperó le comento a la mama lo sucedido.

A la noche siguiente Jorge no podía dormir pensando en lo que le había ocurrido. Misteriosamente se abre la ventana de su cuarto ¡y siente que un viento fuerte movía sus cortinas, se apagó la luz, se quedó mirando fijamente en silencio y al instante ve un bulto envuelto en una sábana oscura, se levanta, corre desesperadamente gritando mama, mama, mama, la abrazo fuertemente sintiendo que no era su madre porque lo que tocaba era algo duro y frio.

Sacó abruptamente la sábana y vió que era el mismo fantasma que lo perseguía.En ese momento se enciende la luz y su madre va a su encuentro, lo abraza y le dice:

Hijo mío!!! No temas, ya estoy aquí para cuidarte. Pero todas las noches Jorge la pasaba mal porque seguía y seguía escuchando la voz del fantasma que lo llamaba, Joooorge, Joooorge, Joooorge, ven, ven, que te quiero llevaaar conmigooo y el gritaba, gritaba, desesperadamente y sin control, se arañaba el cuerpo al extremo de sacarse sangre de la piel, mamaaaa, mamaaaa, ya no puedo mas, me estoy volviendo loco, locoooooo, ayudenmeeeee por favor, que ya no puedo maaaaaaas.

La madre busco ayuda profesional para hacerle recuperar la paz y la tranquilidad que había perdido Jorge, la mamá tuvo que comprar otra casa, se cambiaron.Desde ese entonces Jorge fue un niño feliz junto a su madre y prometió no volver a ver películas de terror.

FIN