Una vez que cerro el libro: el libro de relatos cortos de los niñ@s de 5ºD

5ºD CEIP Arquitecto Leoz 2015-2016

Relatos cortos

23 de abril. Día del libro

Una vez que cerró el libro...

Primera Edición: Abril de 2016

Nuestro trabajo lo hacemos para compartirlo. Se permite cualquier copia y reproducción de este libro. En cualquier caso, os animamos, si sois alumnos y alumnas de otro

colegio, a que elaboréis vuestro propio libro con vuestro maestro o maestra de Ciencias de la Naturaleza. Más importante que el libro es todo el proceso que se genera a su alrededor y durante su elaboración. Autores y autoras: alumnos y alumnas de 5ºD Julia Arellano Pavón, Iván Beardo Casas, Noa Caro Romero, Sandra Crespo Brnjos, Claudia Fernández García, Manuel Gómez Álvarez, Zamara González de Tapia, Daniela González Galisteo, Marcos Hernández Fernández, Darío Hernández Romero, Julia Lago Sánchez, Alejandro Moreno Caña, Luis Mosteiro Iglesias, María Pérez Chulián, Carmen Poquet Cejudo, María Prado Chamaoui, Lucía Vega Báez y Anael Me rcedes Wahnich Mamam. Coordinador y editor: tutor de 5ºD José A. Téllez Ediciones “Verdades en Papel” CEIP Arquitecto Leoz Puerto Real Cádiz Una clase fantástica: el blog de nuestra clase http://unaclasefantastica5d.blogspot.com.es/

1 Una vez que cerró el libro...

Índice 1. Siendo tú mismo por Julia Arellano Pavón ......................................................... 10 2. Un libro extraño por Iván Beardo Casa ............................................................. 13 3. Libro tras otro por Noa Caro Romero ........................................................... 15 4. El segundo capítulo por Sandra Crespo Brnjos ..................................................... 18 5. Peter y las aventuras del libro por Claudia Fernández García ............................................... 20 6. La mutación por Manuel Gómez Álvarez .................................................... 23 7. David y los muñecos encantados

por Zamara González de Tapia ............................................. 25 8. Pablo

por Daniela González Galisteo ............................................... 27 9. El sueño

por Marcos Hernández Fernández ........................................ 29 10. De humano a ratón

por Darío Hernández Romero ............................................... 31

Libro de relatos cortos de los niñ@s de 5ºD 2

11. No al bulling por Julia Lago Sánchez ......................................................... 33 12. Un amigo de verdad por Alejandro Moreno Caña .................................................. 35 13. Los niños que no sabían leer por Luis Mosteiro Iglesias ...................................................... 37 14. Un día muy corto por María Pérez Chulián ........................................................ 39 15. Un mundo por explorar por Carmen Poquet Cejudo .................................................. 41 16. El libro que una vez abierto no quiso volver a ser

cerrado por María Prado Chamaoui ................................................... 44 17. La historia de miedo de María por Lucía Vega Báez ............................................................. 46 18. Un libro de aventuras por Anael Mercedes Wahnich Mamam .................................. 48


Introducción

Escribir es una de las mejores formas que tenemos para animar a la lectura, eso lo saben muy bien en la Librería El Aprendiz, y es por ello, que este año vuelven a convacar el III Certamen de Relatos Cortos para todo el alumnado de nuestra localidad.

Nos gustaría agradecer a los organizadores del certamen la promoción de esta y otro tipo de iniciativas que enriquecen el ambiente cultural de Puerto Real.

A continuación incluimos los relatos cortos escritos por los niños y niñas de nuestra clase. Todos y cada uno de los relatos, siguiendo las bases del certamen, comienzan con la frase que da título a este recopilatorio. Ahora, y después de abrir el libro, pasa la página y dejate llevar por la imaginación de nuestros niños y niñas. Una sola frase encierra mil y una historias.

Y una vez abierto el libro...


1. Siendo tú mismo Autora: Julia Arellano Pavón

Una vez que cerró el libro Ana para irse a la cama, el libro se sintió infeliz porque él siempre que tenía abierta sus hojas era muy feliz. Él decía a los habitantes: -Chicos soy yo, simplemente he cerrado mis hojas. Pero ell@s decían: -No, no eres tú, el verdadero siempre era feliz y estaba abierto. Pero el libro no entendía muy bien el porqué nadie le creeía. Fue a dar un paseo por el bosque para despejar su mente y de repente, se encontró con una niña llamada Alicia. Era muy amable con el libro, tanto que el libro quiso contarle que le pasó. Y se lo contó:


-Ali, yo no entiendo por que mis amig@s no me reconocen, simplemente porque cerré mis hojas y.... nadie me reconocía. Y ella le respondió: -Libro, chiquito, tu sólo tienes que abrirte de nuevo o... simplemente sé tu mismo. Él le preguntó: -¿Qué es ser tu mismo? Ali respondió: -Es hacer tus costumbres y dejarte llevar por el mundo. Empezó a pensar, qué era, pero por dentro se decía: ¿qué es “ser tu mismo”?. No entendía la explicacion de Ali, Ali, le vio pensativo y le susurró al oido: -Tranquilo yo te ayudaré a ser tu mismo librito. El libro dijo:


-Pues... ¡EMPECEMOS A TRABAJAR! Ali le hizo pruebas para ver si lo entendía. Y vio que sí y que estaba preparado para ser él mismo. Salío del bosque y se puso a hacer locuras de las suyas, Y tod@s dijeron: -¡Pues sí eres tú, tú!. Y se dio cuenta de que la vida tiene obstáculos difíciles que superar pero hay que llegar al sueño que quieres alcanzar.


2. Un libro extraño Autor: Iván Beardo Casa

Una vez que cerró el libro vino un hombre que era muy grande y muy gordo, como una ballena. Se llamaba Benito. Él le dijo que si cerraba el libro otra vez aparecería otro personaje. Y también que si acercaba el libro a un personaje se lo tragaría. El niño se llamaba Pepe. Pepe abrió y cerró el libro y salió el ejército de esqueletos. Eran todos pequeños como hormigas. Benito exclamó:

-¡Son malos! Mételos en el libro antes de que hagan daño.

Pepe, sin querer, le acercó el libro demasiado a Benito y se lo tragó. Pepe volvió a cerrar el libro y salieron los hijos de Benito, se llamaban Penelope, Pepa, Rodolfo y Eustaquio. Los niños tenían miedo y Pepe los volvió a meter. Luego salió Benito. Pepe acercó el libro a los esquletos. Se los tragó. Pepe quiso ver a su


personaje favorito, al langostino Rufino. Cerró el libro otra vez y salió Rufino. Rufino estaba enfadado con Benito porque Rufino queria ser libre y no su esclavo. Rufino y Benito empezaron a pelearse. Rufino le clavó las pinzas en la cara. Benito le pisó, pero se clavó los pinchos. Pepe los metió a los dos en el libro y se deshizo del libro lanzándolo por la ventana.


3. Libro tras otro Autora: Noa Caro Romero

Una vez que cerró el libro, Cleo lo metió en la maleta y salió hacia la escuela. Una vez allí, llegó la hora del recreo, y Cleo, en un rincón del patio, se adentró en su lectura. Cuando de repente algo la golpeó por la espalda haciendo que el libro saliera disparado por los aires.

-Ups!, lo siento mucho - se disculpó un chico mientras recogía el libro del suelo. -No importa, da igual.

Cleo cogió el libro lleno de tierra y apenada lamentó:¡ Mi libro ! se ha llenado de tierra. Espero que no se hayan estropeado las hojas - dijo hojeando las hojas con cara preocupada.


Terminó el colegio, y Cleo iba de camino a su casa. Estaba muy tranquila, hasta que vio una tienda extraña. Ella nunca la habia visto por allí y eso que pasaba por alli siempre que iba a la escuela. Curiosa, Cleo entró. La tienda estaba muy descuidada, tanto por fuera como por dentro. Las estanterias estaban a rebosar de botellas llenas de mejunjes nauseabundos. En medio de la tienda, se encontraba una gran olla. Cleo se acercó, y una vieja salió de la trastienda.

-Bienvenida, jovencita ¿qué es lo que quieres?-dijo la anciana. -Eh... la verdad es que sólo estaba mirando -contestó Cleo. -Bueno, ya que has venido, te regalo esto -comentó la anciana, entregándole un frasco que contenía un líquido amarillento.


La chica ya estaba de vuelta en casa, dejó el frasco sobre la mesa. Sacó el libro de la mochila y lo puso en la mesa. Cleo, sin darse cuenta, le dio un golpe al frasco haciendo que se derramara sobre el libro. El libro empezó a brillar y del libro salió una montaña de libros. Cleo empezó a leer muy contenta ansiosa por leerse todos aquellos libros, porque cada uno de ellos le transportaba a una gran aventura.


4. El segundo capítulo Autora: Sandra Crespo Brnjos

Una vez que cerró el libro, Claudia fue a su madre y le dijo:

-Mamá estoy preocupada -¿Por qué, Claudia? -Porque es el primer capítulo y necesito el segundo para seguir.

Entonces la madre muy pensativa y decidida respondio:

-Vamos a ir al Carrefour a comprarte el segundo capítulo del libro.

Y la niña se puso muy contenta. Se fueron al coche y fueron al Carrefour. Después de media hora buscando aparcamiento. Entraron y estuvieron buscando el libro y... ¡por fin lo encontraron! El precio era de 39’99€, la madre se sorprendió al ver el precio y dijo:

-¡Dios, que caro!


Y la hija respondió:

-Normal, es tan gordo y grande, tiene 600 páginas. -Ya, pero es muy caro, creoooo... que no te lo voy a comprar.

La hija gritando respondio:

-¡Nooooooooooooooooo! -¡por queeeeeeeeeeee!


5. Peter y las aventuras del libro Autora: Claudia Fernández García

Una vez que cerró el libro, Peter fue a la biblioteca a coger un libro nuevo.Ya en la biblioteca, le preguntó a la bibliotecaria:

-¿Dónde están las libros de caballero?

La bibliotecaria le contestó: -Están en el pasillo 40, estantería 2. Entonces Peter salió corriendo al pasillo 40. En el pasillo 2, un libro le llamó la atención, aunque estaba sucio y con mucho polvo. Entonces lo sopló y todo el polvo salió volando. El cuento se llamaba:los caballeros de la corona plateada. Lo observó con mucho entusiasmo y Estefania, la bibliotecaria le escaneó el libro y ya se lo podía llevar a su casa. Entró en su casa y nada más entrar su hermano pequeño, Dario, le preguntó con voz sigilosa:


-Hermanooo, ¡¿que libro es ese?! Entonces Peter le contestó un poco nervioso:

-Es un libro de la biblioteca. Dario preguntó:

-¡¿Cómo se llama?!, ¿¡cómo se llama?! Peter respondió:

-Los caballeros de la corona plateada. Dario entusiasmado le dijó:

-Yo también lo quieroleer Peter contesto :

-Ahora no Dario. Peter se fue a su cuarto a leer y entonces su madre le llamó para comer.


Cuando volvió estaba Diego, el caballero más flaco y menos fuerte de toda la caballería, sentado sobre la cama. Peter preguntó algo asustado:

-¿Qué haces aquí? Vengo a que me ayudes a ser más fuerte. Estuvieron entrenado día tras día hasta que se convirtió en el más fuerte del mundo. Entonces Peter gritó:

-No quiero que te vayas. El caballero Diego contestó:

-Pero tengo que volver. Se quedó un rato más. Se hizo de noche y entonces se fue dejando una nota: “ Me lo he pasado genial este año contigo.

Espero verte pronto” .

Y colorín colorado este cuento se ha terminado.


6. La mutación Autor: Manuel Gómez Álvarez

Una vez que cerró el libro se fue a merendar unas magdalenas con leche. Después de merendar. Benito se fue a jugar al parque con Carmela, una vez allí jugaron al fútbol, unos niños de 18 años le echaron. Se aburrían y a Benito se le ocurrió una idea. Voy a llamar a: Paco, Eustaquio, Jonas, Maria, Luis y Ale. Llegaron al parque todos y les echaron un partido, obviamente iban ganando los de 18 años, 0 a 16. Le pidieron la rebancha y lo que paso fue increible se… ¡FUSIONARON! Se quedaron pasmados y ganó la superfusion. Pero después no sabían como transformarse, todos pensaron y no daban en el clavo. -Bueno, ya se está haciendo de noche tenemos que llamar a nuestros padres y madres.


Luis llamó a su madre y no se lo creía. Llegaron a casa de Benito y la madre se quedó impresionada. Al final leyendo el libro dieron con la solución, se transformaron y se quedaron a dormir.


7. David y los muñecos encantados Autora: Zamara González de Tapia

Una vez que cerró el libro, todos los muñecos del libro de David cobraron vida y se escondieron por la ciudad. Por la mañana David fue a leer su libro favorito, pero cuando lo abrió, ¡estaba totalmente vacío! No tenía ni letras ni dibujos, sólo tenía hojas en blanco. David no sabía lo que pasaba, así que sin pensarlo se fue a su colegio. Cuando entró, ¡todo el colegio estaba lleno de muñequitos de su libro! Él sin pensarlo dos veces, corrió detrás de ellos, pero corrían mucho y no pudo alcanzarlos. El pensó y pensó, hasta que se le ocurrió una idea. Tranquilamente se fue a clase, y espero a que fuera la hora del recreo, cuando llegó la hora del recreo, se fue corriendo al almacén de su cole y cogió una aspiradora que había por allí, y buscó a los muñecos, todos estaban en el pasillo. David encendió la aspiradora, consiguió


aspirar a la mayoría, pero los demás consiguieron escapar. Cuando acabó el colegio, David fue corriendo a su casa y le dijo a su madre que no iba a volver hasta la hora de cenar, así que cogió una mochila y se fue a buscar a los muñecos faltantes. Los buscó por todos los sitios públicos, pero no había ninguno, hasta que fue a un campo de fútbol y encontró los que faltaban, pensó un plan para distraerlos y se dio cuenta de que tenía una pelota en su mochila, la cogió y la tiró al centro del campo, los muñecos fueron a por ella y se pelearon, y David aprovechó y los aspiró. Cuando llegó a casa cenó y se fue a su habitación y colocó todos los muñecos en su sitio. Seudonimo: Marina Fernández


8. Pablo Autora: Daniela González Galisteo

Una vez que cerró el libro, había un niño que se llamaba Pablo, vivía con sus padres en una casita. Pablo tenía 9 años, sus padres siempre viajaban para tener dinero. Pablo se sentía solo y entonces dijo:

-¡Papá, mamá! ¿Puedo tener un perro pequeño?

Sus padres dijeron que si, Pablo se sentía muy contento. Compraron un perro y era bonito, lo llamaron Juan. El niño dijo:

-¡Ven aquí! ¿Dónde estás?

Juan no ha venido y Pablo se puso muy triste. Pero de repente oyó un ruido en su cuarto, era el perro. Estaba escondido debajo de la cama. Pablo dijó:

-¡Oh! menos mal, creía que habías escapado. Entonces Pablo y Juan durmieron.


Por la mañana Pablo se despertó, miraba afuera y pensó:

-¿Qué es esto? -¡Dios mío!¿pero si es mi perro?que hace ahí. Pablo se fue al parque y había una roca que se parecía a su perro. -¡Hola !¿hay alguien ahí?

Estaba solo, pero el perro se despertó y ladro a Pablo. Pablo se despertó ¡era una pesadilla!. El perro y Pablo fueron felices.


9. El sueño Autor: Marcos Hernández Fernández

Una vez que cerró el libro, abrió otro con mucha más emoción y aventura. Su protagonista se llamaba Baltasar, un niño adolescente cuyo sueño era ser militar. En su clase lo único que daban eran lengua, mates, etc. Un día Baltasar se atrevió a decírselo a su madre y ella respondió que no, porque decía que era muy pequeño y él le respondió que ella no sabía nada de él y se fue de casa, se fue a vivir a casa de su abuela. Baltasar estuvo leyendo todos los libros de su abuelo y estuvo entrenando estrategias y entrenamiento militar. Un día cuando cumplió los 19 se fue a vivir solo a un gran apartamento que estaba cerca de casa de sus tios. Ellos le visitaban casi todos los días, un día cuando cumplió los 22 años se fue a una gran academia de policía.


Allí al principio sus compañeros decían que no estaba preparado para el gran peso de ser policía. Una tarde él estaba corriendo y vio a un hombre sospechoso entrando a una casa, miró por las ventanas y vio a muchísimos criminales. Luego fue corriendo a la academia de policía y les dijo que había visto una casa con criminales, luego todos fueron a la casa. El capitán entró primero. Al capitán le dispararon en la pierna, un criminal estaba apunto de disparar al capitán cuando Baltasar fue a por él y le bloqueó, de ahí le vino su apodo: el metralleta. Cuando volvió alegre a casa de su abuela, lo único que vio fue una ambulancia. Cuando entró el abuelo le dijo que la abuela había fallecido. Baltasar cayó en una gran depresión, el día después le asignaron para ser militar. Jota8


10. De humano a ratón Autor: Darío Hernández Romero

Una vez que cerró el libro, nuestro científico, Luis Miguel, se echó una larga siesta en la que soñó que era un ratón en un laboratorio y que todo estaba en blanco y negro. En el sueño había muchos más ratones. De repente se escuchaba unos pasos que parecian de un GIGANTE. Entonces todos los ratones vieron un científico gigante y entonces Luis corrió a toda mecha y fue a pedirle información al chamán de la aldea.

CHAMÁN: Solamente el más nuevo de la aldea de Ratónland (diferente a Ratonia) puede sacrificarse luchando contra el científico gigante, si quiere claro está, no podemos obligarlo.

Y en aquel momento Luis le contó al chamán todo lo que habia pasado y el chamán le contestó.


CHAMÁN: Iré al herrero a que te haga una armadura, tú dureme para descansar. Hasta mañana.

LUIS: Hasta mañana.

A la mañana siguiente, Luís y el chamán estaban con el herrero en el salón, y éste le dijo:

HERRERO: Tu armadura con espada incluida está en el armario, pruebatela antes de nada.

La armadura le quedaba bien a Luis así que ya estaba listo. En la vida real Luis practicaba esgrima y más deportes de espada, así que necesitó practicar.

Ya llegó el momento. El científico llegó y entonces Luis se puso en marcha El pobre Luis tras mas de 1.000.000 horas de combate épico no pudo más. Cuando se rindió el científico le cogió y se dio cuenta de que el cientifico era el. Entonces se despertó y decidió no hacer más experimentos con ratones.


11. No al bulling Autora: Julia Lago Sánchez

Una vez que cerró el libro, Laura se fue a la cama un tanto preocupada porque en el colegio lo pasaba fatal. Su problema sólo lo sabía su mejor amiga María. Al dia siguiente Laura se preparó muy rápido porque venía una niña nueva a clase, ésta se llamaba Antonia. A ella le gustaba mucho jugar a la play. A Antonia no le gustaba mucho Laura y Antonia le susurró al oido:

-Voy a quitarte tu puesto de delegada y voy a acabar contigo.

Laura se puso muy triste al oir eso, ella se lo dijo a María, María se quedó sorprendida al oir eso y le dijo:

-¿Qué vas a hacer ? -Pues....no lo sé - respondió preocupada .


Pasaron los días y el plan de Antonia seguía en marcha. Tenía planeado tirarle globos, ella se enfadaría, le pegaría y le quitarían el puesto de delegada, el plan perfecto. Laura se entero de su plan gracias a su gran amiga María. Llego el jueves y Laura ya sabía qué hacer, se dispuso a hablar, esa era la mejor solución siempre. Ésta le dijo a Antonia:

-¿Antonia por qué me odias? -Porque eres la más popular del colegio y quiero ser como tú. -Pero yo sólo quería ser tu amiga. -Vale, yo también quiero ser tu amiga. -Pues claro, seamos buenas amigas.

Ellas fueron buenas amigas y nunca más se pelearon.


12. Un amigo de verdad Autor: Alejandro Moreno Caña

Una vez que cerró el libro, el hombre se dio cuenta de la importancia que tenía poder leer un libro. Le parecía tan fascinante que lo llevó a casa de su amigo Adrián.

-Toc,Toc,Toc -¿Quién es?-dijo Adrián. -Soy Oscar, te traigo un libro muy chulo. -Anda, pasa.

Oscar se sentó en el sofá de Adrián. Adrián empezó a leer el libro, cuando lo leyó se quedó alucinando y empezó a llorar por la historia tan bonita que describía. Luego se fueron a la playa, se pusieron a hablar, pero un fuerte viento tiro el libro al mar.

-¡Noooo! -¡Mi libro! -¡Mi querido libro!


Unos días más tarde fueron al barco del padre de Adrián, que se llama Pepe. Ya con los trajes de buzo se tiraron en plancha al agua.

-¡Adrian esto es flipante! -¡Tienes razón, Oscar!

Media hora más tarde, ya con poco oxígeno, encontraron el libro.

-¡Mira! ¡Oscar voy a por el! -¡No, hay poco oxigeno!

Al día siguiente, ya en el hospital, le dieron el alta a Adrián, ya que arriesgó su vida por el libro de su amigo.


13. Los niños que no sabían leer Autor: Luis Mosteiro Iglesias

Una vez que cerró el libro, había dos niños que no sabian leer, pero no paraban de intentarlo aunque no lo conseguían. Los niños se llamaban Alejandro y Marcos. Un anciano se dio cuenta de que Alejandro y Marcos no sabian leer. La verdad era que Alejandro y Marcos nunca habían leído un libro pero querían aprender a leer porque creían que leer es muy divertido e interesante. El anciano sí sabía leer y quería ayudar a Alejandro y Marcos. Entonces el anciano cogió un libro llamado Gerónimo Stilton en busca del tesoro. Alejandro y Marcos querían intentar leer un poco ese libro, pero por mucho que lo intentaban leer no sabían leer. Además querían intentarlo otra vez pero no sabian leer.


El anciano les dijo a Alejandro y a Marcos que si ellos mismos confiaban en si mismo podrían conseguirlo. Pero no les salía. El anciano vio el problema que tenían Alejandro y Marcos. El problema era que no estaban concentrados. Ni Alejandro ni Marcos sabían cuál era el problema pero, en cambio, el anciano sí. Entonces el anciano se lo dijo a Alejandro y a Marcos. Al final Alejandro y Marcos se concentraron y confiaron en ellos mismos y aprendieron a leer. Alejandro y Marcos fueron felices.


14. Un día muy corto Autora: María Pérez Chulián

Una vez que cerró el libro, Ricky lo llevó a la estantería de su habitación, se metió en la cama y cayó en un sueño bastante profundo. Esto es lo que pasaba en su sueño:

-Perdone, ¿me podría decir dónde estoy? -Usted está en mi pueblo, al norte de Texas -respondió un texano del pueblo. -No puede ser ¡Pero si vivo en España!-contestó Ricky confundido. -Bueno, ya que estás aquí porque no te lo enseño - respondió el texano. -Muy bien, por cierto ¿cómo te llamas?-dijo Ricky. -Me llamo Sergio, y tú eres... - dijo Sergio para que terminara. -Ricky, soy Ricky - respondió. -Bueno Ricky te voy a enseñar esto -dijo Sergio.


Anduvieron y anduvieron y cuando el sol cayó, a casa de Sergio se fueron los dos.

-Hoy te quedas aquí a dormir, insistió- dijo Sergio a Ricky. -Gracias ¡qué amable! -dijo Ricky.

Le sonó la alrma a Ricky y se tuvo que despertar y dijo:

-Wow, ojalá Sergio fuera real.

Se visitio y 20 minutos antes de salir de casa siguió leyendo y era igual de emocionante que su sueño. Cuando el libro cerró, dijo:

-Esta noche te veré otra vez Sergio.


15. Un mundo por explorar Autora: Carmen Poquet Cejudo

Una vez que cerró el libro, una niña llamada Marina de 11 años se dio cuenta de que tenía un secreto. Tenía un libro mágico, que cuando lo abría, tenía que decir unas palabras mágicas para que se pudiera meter en el cuento y vivir la historia que había en él. Su madre llamó a María para que bajara a cenar. Una vez que terminó de comer se fue para su habitación para entrar en el cuento, ella dijo las palabras mágicas, “Estregetus Cuadradus” . Ya metida en la historia de el Valle Silvestre, tuvo que empezar a visitar hasta el último rincón del valle. Allí había hadas, pegasos, grifos, pegasos... Ya era la hora de irse a dormir para un día duro de colegio, la madre se lo recordó para que se acostara pronto.


Al dia siguiente viniendo del colegio, le dijo a sus amigos que se fueran a su casa. Ya en su casa, les dijo muy segura que tenía un libro mágico y que podían entrar. Los amigos se llamaban Artur, Noa, Carmen y Emma. Noa le dijo que quería probar a ver si era cierto. Marina dijo las palabras mágicas pero Artur tenía miedo, todas le dijeron que no pasaba nada, entonces lo intentó. Una vez que entraron el la historia, Emma, a la que le encantaban los animales mitológicos, fue cogiendo apuntes del grifo, pegasos, unicornios... Ya llevaban 1 hora y media en el Valle y empezaron a merendar. Mientras que merendaban, estaban escuchando un ruido muy extraño en un arbusto y se empezaron a asustar.


Emma, la más valiente, fue a ver qué era. Después de un rato, salieron ella y un pegaso del arbusto y se hicieron amigos. Luego Carmen se encontró a un grifo y se montó en él, pasó un rato y Noa se encontró con un unicornio pero no se atrevía a montarse, pero sus amigos le convencieron y se montó. Finalmente Artur se encontró con un gran dragón. Todos juntos se dieron un paseo y finalmente se despidieron de “ sus mascotas mitologicas” . Muy contentos se fueron a sus casas, pero antes de irse hicieron un trato: nada podía salir de esas cuatro paredes.


16. El libro que una vez abierto no quiso volver a ser cerrado Autora: María Prado Chamaoui

Una vez que cerró el libro, cerró los ojos y los volvió a abrir, cogió el marcapáginas y marcó la hoja 124. Dejó el libro encima de la mesa, se acurrucó en la manta, poso la cabeza en la almohada, levantó la mano y apagó la luz. Se sentía cansado de leer, así que no tuvo otra opcion que irse a dormir. Al día siguiente, era un día soleado de mayo, con los cánticos de los pájaros y ese ambiente a vivo. A él no se le ocurrió nada más que refugiarse bajo la sombra de un árbol, y volver a leer ese libro. Podía pasarse leyendo todo el tiempo posible. Volvió a cerrar el libro un poco apenado porque tan solo le faltaban 100 páginas para terminárselo. Entonces dejó de leer por un momento y se fue a la librería más cercana a comprarse el nº 2. Volvió


a sentarse en la sombra fría del árbol, le faltaban tan solo 1 hoja para terminárselo. Al cabo de un rato se lo terminó. Lo cerró bruscamente, con cada mano en un extremo del libro, cerró los ojos y suspiró profundamente, pero cuando quiso darse cuenta tenía el nº 2 a unos centímetros de él. No quería seguir leyendo pero aquella historia le enganchó tanto que no pudo contenerse, entonces leyo en voz alta:

-Capítulo 1.


17. La historia de miedo de María Autora: Lucía Vega Báez

Una vez que cerró el libro, la niña no quería leer más porque pensaba que esa historia era de miedo,y vio un fantasma que salió del libro. A continuación la maestra le dijo:

- ¿Maria por qué has cerrado el libro? Y le respondio:

-Porque el que me ha tocado es de miedo. Además, he estado leyendo y de repente vi un fantasma salir del libro,y no voy a volver a abrir el libro.

La seño lo abrio, y probó y dijo que no habia nada, nadie confiaba en ella. Luego, terminó el colegio, se lo llevó a su madre para probar si veía el fantasma, y dijo que no. Ella siguió leyendo y vio una bruja haciendo una sopa y le dijo a ella: - Maria voy a salir del libro con la olla y te meteré adentro. Ella se asustó y cerró el


libro, y se fue a casa de su amiga para que también probara si era verdad. Probó y le dijo que había una bruja pero que no se movia. Llegó a clase y la seño le preguntó: -¿Maria has leído el cuento? Y ella dijo: -Sí, pero muy poco porque me habló una bruja. La maestra tomó el libro, se puso a leer y se asustó, la bruja le habló también a ella. Y la bruja le dijo:

-Te voy a hacer magia, para que tú no seas maestra y seas malvada. -María - le dijo -, cambia el libro y coge otro y tira este libro de miedo. Si, coge otro de Bob Esponja que es más divertido que este.

Maria se lo contó a su familia y todos la creyeron.


18. Un libro de aventuras Autora: Anael Mercedes Wahnich Mamam

Una vez que cerró el libro, Henry cayó en un sueño profundo. Se encontró en otro sitio, no sabia nadar, pidió ayuda y lo rescataron unos piratas. Se encontró en un cuento, el de Alicia en el País de las Maravillas. Tenía que agacharse porque era gigante y se comió una chocolatina que le hizo más pequeño. Se fue por una puerta y se encontró en un castillo, era de la princesa Aurora. Ella como era de tan buen corazón le ayudó y lo agrando. Cuando llegó la hora de dormir Henry durmió allí. Al día siguiente se encontró en una casa donde estaba Cenicienta. Henry le ayudó para ir al baile pero no tenía vestido, así que llegó el hada madrina y fue al baile. Henry se durmió y se encontró en la cabaña de Blancanieves. Llamaron a la


puerta, Henry le dijo que no abriera la puerta y no abrió. Cerró los ojos y se encontró en su cuarto, se lo contó a su madre y ella le dijo que eran tonterías. Se enfadó y volvió a leerse el libro pero siempre vivía las mismas aventuras, así que cogió otro libro y vivió otra aventura. Autora: Anael Seudonimo: Analoa


ALUMN@S DE 5ºD DE PRIMARIA

Julia Arellano

Iván Beardo Casa

Noa Caro Romero

Sandra Crespo

Claudia Fernández

Manuel Gómez

Zamara González

Daniela González

Marcos Hernández

Darío Hernández

Julia Lago

Alejandro Moreno

Luis Mosteiro

María Pérez Chulián

Carmen Poquet

María Prado

Lucía Vega Báez

Anael M. Wahnich

José A. Téllez

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