Valery, P. El Misterio de Los Tres Cuerpos

5/17/2018 Valery, P. El Misterio de Los Tres Cuerpos - slidepdf.com

http://slidepdf.com/reader/full/valery-p-el-misterio-de-los-tres-cuerpos 1/5

Valery, Paul. "El problema delos tres

cuerpos", enDiscurso a los cirujanos.

Mexico: Universidad Autonoma

Metropolitana, 1998

. . . .' : :: : . + . . j-----__:.___;--_;...-_...;...;.;.;....;_-_-1- . ........._.~-.--........,;;."....~

PRODt.~...V. PE i.OS TR~ CllER.P: ' )Seo-roqut! de nuestra visicn inrelectual, que

sobre el d es ca ns a e lmundo, v q ue e ste m un cio

sc re tie re a Cl : 0 bien que ~ l m ism o no es mas

que una especie de a c on c e cim ie n ro i n fi n it a~ .

m en te in im p ore an ce e in esta ble d e e ste m u n-

do.

Perc n i 1;,1alabra "ob jeto " de 1 3 0 eual m e

a ca bo d e se rv ir, ni 1:1palabrn "aconeec imiento '

son aqu i las pa lab ras que mas convendr ian .

No hay n omb re p ar a d e si gn e r e l s en ti rn ie n to

qu t: tenernos de u na s ub sr an cia d e n ue stra

p re se nc ia , d e nuestras acc iones y afeceos, no

solarnence a cc ua le s, s in o e n e st ad o inminence ,o diferido, 0 puramente p os ib le , -3.1 go m a s

• ..I . I • •

:~:::-';~\"IC, y 5 4i1 em b arg o m e no s mnrno que

n ues tro s p en sam ic ne os rec on dito s: h alla mo s

e n n os otro s u na c ap ac id ad d e m o dific ac io ne s

casi tan variadas como ·13S -c i rcunsmncias del

en rorno. Esa COS:l obedece 0 desobedece ...

. cumole U obstaculiza nuesrros des ignios : de

ella nos vienen fuerzas y desfal lecimientos

sorprendenees, asociadas a esra rnasa mas . o

menos sensible, en su conjunto 0 por partes.

que can p ron to se c ar ga b ru sc ar ne nr e de

e ne rg ie s irn pu ls iv as q ue la h ac en " ac eu ar' e n Iirtud de qu e s e yo que m is te rio in te rio r; ).

· 85

El nombre de Cucrpo responde en el uso a

V:U1:lS n e ce si da d es d e ex-presion l l1UY diferen-

res. Pod ria d ecirse qu e a cad.a uno de nosorrcsc orr es po nd en . e n s u p en sa m ie nto Tre s CH~r.

pt'i -por 1 0 menos

Es 1 0 qu e voy yo a exp li ca r,

E1 primero es el ob je to p riv ilegiad o co n

cue .nos enconrramos a cada i n st an te , a u nqu e

;h :onocim. iento qtl~ te ne rn os d e -tlP U t : " c i . 1 set '

m u y v ar ia ble y sujeto J i lu si on e s, - como

todo 1 0 q u e e s i ns ep a ra b le dd i n st an c e. Ca d a

uno l lama . a .e s te objeco . \1i-Ctlcrpo; perc no le

d am es n in gu n n om bre ell uosotros ltJisHlOJ; !!S

decir, e n ii.Hablamos de el a cerceros corno

de una cOS:J.que nos pertenece: perc. para

nosotros, el no es de ninguna rnanera una

cosa: y nos perrenece a nosotros un r'0r;o

menos de 16que ncsotros le percenecernos a

el....

E l es para.xada uno, esencialmente, elobjero m a s importance del rnundovque se

o po ne a e sre , y d el c ua l s e s ab e e st re ch am en re

dependience, Podem os decir, con una igual

Ievidencia, perc cambiando simplernenre el

84



ta n pronto p arece v olv erse ella m ism a el p eso

mas aplastance y mas inm u ta blc ...

Es ta COSl es inc lusive a rnorfa : de ella co-

nocemos por la vista s610 algunas partes me-

v ile s q ue lle ga n a la .re gio n v id en ce d el e sp ac io

de esteMi-Cue tpo , espacio extrafio, as imerrico,

y en el cual las d istancia s son relaciones

excepcionales. No tengo ninguna idea de las

r ela cio n es e sp ac ia le s e ntr e " 1Y1 iF re nt e" y "Mi

Pie", entre HMi Rodilla" y "Mi Espalda'' .,.

D e a hi r esu lta n e xtra fio s d esc ub rirn ie nto s. M i

mano derecha ignora generalmenre a rI D

rnano izquierda. Tomar la una con la otra es

tornar un objc to r ID-Yo. E st as e xtr af ie za s h and eju gar u n p ap el d uran te el suefio y, s i e l sudio

exis te , .ordenarle y ofrecerle combinaciones

infinitas.

.... Esc cosa tan rnia, y sin embargo tan

misteriosamente, ya veces, yfinalrnente siern-

pre, nuestro mas ternible antagonisra , es la

m a s instance, la m a s constance y la m a s varia-

b le .d e la s casas; p orq ue to da c on sta nc ia y coda

variaci6n le pertenecen. Nada se mueve fren-

. te a nosotrcs, si no es por una especie de

modificaci6n correspondiente que ella esbo-

za y que sigue 0 irnita a ese movirniento

" .

86

percibido; y nada se inrnobiliza si ella no se

detiene en alguna parte.

Eiia C : . 7 T t ! C e d e p a sa d o. Esta palabra no tien e

sentido para ella, qu~ es el presente rnismo,

to do su ceso s e in rn in en cias. A v eces ciertas d e

sus partes 0 regio nes se m an ifies tan , se ilu m i-

nan! ternan una importancia frente a la cual

todo se vuelve nada , e irnponen al in sta nc e su

dulzura 0 su ngorjncomparabre.

. 0 Nuestro S eg und o C ue rp o es e l q ue nos ven

los orros, 'i'que nos es m a s 0menos ofrecido

p or e l e sp ejo y los re traces. Es el qu e tiene una

forma y que cogen las artes: aque l sobre e l

cual se ajustan las telas, los adornos, las anna-duras. Es el que ve el Amor, 0 al que quiere

veransioso de tocarlo, Ignora el dolor! per 10

tanto no hace mas que ungesto.

Es este mismo Cuerpo el que le fue tan

querido a Narciso, peroque desespera a

muchas gentes, y qU(! las entristece y ensom-

brece casi codas, liegado ei 'uempo, cuando

nos es precise aceptlr que este viejo ser en el

espejo tiene relaciones terriblemente estre-

c has, a .u nq ue in co rn pren sib les, co n rode 10

que le incumbe y que [10 1Q.acepra, No se

consiente uno ser esta ruina ...

87



Perc el conocimiento de nuestro Segul ld"

C u e r p o ~penas va m a s . : i l l s . de la v ista de : una

superficie. Se puede vivir sin jarnas haberse

visro, sin eonocer el color de SU piel: es la

suerte de los ciegos, Pero toda persona vive

sin que la vida Ie imponga la necesidad de

sabe r 10 que r ev is te e st a p ie ! ta n lis a d e nuestro

S eg und o C u er po . Es notable que el ser vivo,

pensante y actuante, no tengl nada que· ver

c on s u o rg an iz ac io n in te rio r. N o e st.l c alific a-

do pat7.conocerla, Nada lo hace suponer que

tenga u n h ig ad o, un cerebro, rifiones y todo

1 0 dernas: por otra parte codas estas inforrna-

ciones le serian inutiles, puesto que no tiene,

en el estado natural de las cosas, ningUn

mediode acruar sobre esos6rganos. Tcdas las

faculeades de accion esran dirigidas hacia el

"rnundo exterior", a ta l punto gue podriarnos

Ilarnar "rnundo exterior" aquel que pueden

asir nuesrros medios de action: por ejemplo,

rodo 1 0 que y o ve o puede transforrnarse par m i

m ov i m i en t a ; actuo sobre rni entomo, pero no .

se mediante q ue m a q uin as .

H ay po r 1 0 tanto lin T e r c er C u e r p o. Perc este

no tiene unidad m a s que en nuestro pensa-

mienrc, puesto que no se le conoce m a s que

88

" .

,:.(i

..',.

por haber side escindido 'y o p~rtido-.en peda-

205. Conocerlo es haberio descuartizado y

desgarrado en jirones. De el se escurrieron

Hquidos escarlatas 0 pilidos, 0 hialinos, a

veces muy viscosos, De el se sacan rnasas de

diversos tarnafios, rnodeladas para empalmare xa cta rn en te : s on esponjas, v as es , r ub os , h i ' _

10·s,barras articuladas ... Todo esto reducido a

rebanadas m uy delgadas 0 a goritas, rnuestra,

bajo e l microscopic, figuras de corpusculos

que rio se parecen a nada. Trata uno de

descifraresros criprograrnas hisrologicos. Se

pregunra uno ~c6mo I : !S que esta fibra produ-

cia fuerza rnotriz? ~yque relacion estes pe-quefios asterisrnos de f inas raicillas podian

tener con lasensacion y el pensamiento? Perc

~que harian un Descartes, un Newton, igno-

ranees como serian de· nuestro eleccromag-

netisrno, de la inducci6n y de todo 1 0 que se

descubri6 despues de ellos, si se someriera asu ..

exarnen, sin explicacion, una rnaquina dlna-

rnoelectrica, diciendoles solamente sus efec-

c o s?H anan 10 que hacernos nosorros con un

c er eb ro : d esm on ra ria n e l apararo, desenrrolla-.

nan las bobinas, notarian queencuencran

aqui cobre, i l i a carbonos, a n a acero, y final-

mente se ccnfesarian vencidos, incapaces de



adivinar el funcionarnienro de esta nuiquina,

de 13 c ual se les ha dicho que U -:\,::.a cabo las

funciones que nosotros sabernos,

Entre estos T re s C u er po s que acabo de da-

ros, numerosas rclaciones exiscen necesaria-

mente. que seria muy interesante.aunque muylaborioso, tratar de esclarecer. Prefiero en

esre mornenro entrar en cierta fantasia.

Yo digo que ha y para cada uno de n050-

tro s u n C u ano C u er po , que puedo l la r nar i nd is -

tintamente ei C u e rp o R ea l, 0 bien el C I I C r p O

[ m a g i , .: a ri o .

Este es considerado indivisible del medio

desconocido e inconocible que nos hacen

suponer los fisicos cuando atormenran al

mundo sensible, y por el desvio de r ele vo s d e

relevos hacen aparecer fenornenos cuyo o n -gen. colocan muchornas alli 0 rnas ad. de

nuestros senridos, de nuestra irnaginacion, y

finalmente de nuestra inteleccion rnisma.

De este media inconcebible, rni C!tarto

C u e r p o no se distingue ni m as ni menos que

un remolino se distingue delliquido en quese forma. (Tengo rodo el derecho de disponer

de lc inconcebible como ya quieta).

No es ninguno de los Tres arras Cuerpos,

puesto gue no es elMi-Cuerpo, ni el T erce-

" .

ro, quees el de los cienrif icos, y:l que esei

'hecho de 1 0 que ellos igncran .. Y agrego que

la cognici6n por la mente es una producci6n

de 10 que ese C ua no C ue r po no ES . T od o lo qu e

e S J para nosotros, enrnascara necesariamentee

irrevocablemente a lg u llQ c os a qu e sea .i, .,Mas para que inrroducir aqui esta noci6n

tan perfecramenre vanaiEs qu.e una idea. aun

cornplecamente absurda, nunca esta sin algun

valo r; y que una expres ion , un signo vacio,

nunca esci sin picar a Ia mente can algun

aguijon. ,De donde me vine esta expresi6n

de Cuarto Cuerpo?

Cuando yo pensaba ala noci6n de Cuer-

po en general, 'ia mis T ie s C u er po s de hace un

momento, los ilustres problemas que estes

ternas excitaron se destacaron vagarnente en

. b . penumbra derni pensamiento. Coniieso

que .tengo la cosrurnbre de apartarlos del

punto mas sensible y mas instance de rni

atencion. Yo casi no me pregunto cual sea el

origen de lavida y de las especies: sila muerte

es un simple cambia de clima, de cosrurnbrey de habicos: S 1 el espiriru es 0 no es un sub-

producto del organisrno: si nuestros aetas

pueden a veces ser 1 0 que se llama l ibres (sin

que nadie haya jarnas podido decir 1 0 que ';1 . 1

90



entiende exacrarnente con cso): etc.

Es sobre este fondo de dificultades tatigJ-

das que vino a dibujarse rn i idea absurda y

luminosa: "Llarno yo C u a n o C I I C r p O , me dije,.al inconocible objeto cuyo conoamien to so luao-

I I l Z r i a de un s o . .e o / p e t o d D S estos p rob l emas , p u e s t o

· q iJ e. i s . l J l J w i mp li ca n . "

y. a t elevarse una protesta en mi, l : i Voz

del Absurdo agreg6:" Piensalo bien: !de don-

de qu ic res saca r a lgun as respuestas a estas

p r eguncas fi losoficas? Tus im agenes, tu s abs-

·tracciones no se derivan m a s que de las pro-

piedades y experiencias de tus T r es C u er po s.Pero el primero no re ofrece mas que instan-

te s; e l s eg un do , algu na s visiones: y e l r e rc e r o,

al precio de acres horrendos y de preparacio-

nes com plicadas, una caneidad de figuras m a sin de sc ifr ab le s 'q ue te xr os e tr us co s, T u mente,

con su lenguaje, tritura, compone, dispone

rodo esco; estoy de acuerdo que saque, me-

diante el abuse de su familiar cuestionario,

estes famosos problemas; pero no puede dar-les u na s or nb ra de sentido, sino essuponien-

· d o, s in c on fe sa rs el o, a lg un a In ex is re nc ia , de 1 3 .

cual rni Cuarto Cuerpo es una forma de.. ~ ,. ..

encarnacion.

92

S3

. '

Valery, P. El Misterio de Los Tres Cuerpos

Documents

Transcript of Valery, P. El Misterio de Los Tres Cuerpos