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cicio. Podra considerarlo como una es-pecie de programa informtico para suirente, para que sta se concentre sloen el pioceso en el que usted est tra-bajando. Cuando se diga a smismo queva a realizar una tarea concreta, y cuan-do est muy convencido de ello, su xi-to en el enipleo de la visualizacin au-mentar.

El entorno curativo requiere dos clasesde tranquilizacin: externa e interna. Laexterna nos ayuda a concentrarnos en latarea de profundizar en uno mismo. Lasdistracciones y preocupaciones de lavida diaria impiden este tipo de atencinDeterminadas clases de ruidos puedencontribuir a la consecucin de la tranqui-lizacin interna: el trino de los piaros,los ruidos de los agentes meteorolgi-cos, hasta el rumor leano del trfico.Pero la visualizacin curativa posee suspropias condiciones, y funciona mejor enun spacio aislado y en un momento ais-lado. Yo recomiendo que se realicen losejercicios de visualizacin tres veces aldia: antes del desayuno, al atardecer, yantes de acostarse.

El aspecto interno de la tranquilizacines la relajacin. Para el trabajo de visua-lizacin que prescribo, exhalar una oms veces, segn requiera cada caso,es suficiente para crear el grado de rela-jacin apropiado.

La postura corporal ms efectiva parala prctica de la visualizacin consiste ensehtarse en la postura del faran, sin-tese erguido en una silla de respaldo rec-to, con los brazos cmodamente recos-tados sobre los brazos del asiento y lasmanos abiertas. No cruce los brazos nilas piernas, ni los ponga en contacto concualquier otra parte del cuerPo.

Con el fin de estimular la presencia deimgenes, ordnese a s mismo estartran(uilo y relajado. Respire rtmicamen-te, inspirando por la nariz y espirandopor la boca. Las exhalaoones han de serms largas y lentas que las inhalaciones,que sern normales, sin esfuerzo.

Yo antepongo la exhalacin a la inha-lacin porque la respiracin para relajarelcuerpo empieza por una espiracin. Laforma habitual de inhalacin-exhalacinnos estimula excitando el sistema nervio-so simptico y segregando adrenalinaLa frmula exhalacin-inhalacin, porotro lado, estimula el sistema nerviosoparasimptico y el nervro vago, lo queavuda al cuerpo a sosegarse y relajarse

-Cuando se sienta cmodo con su res-

piracin V est preparado para iniciar eltrabajo cje visualizacin, ordnese espt-rar tres veces (o dos veces, o una, se-gn cada caso). Primero espira, luegoinspira. Seguidamente ya puede empe-zar el ejercicio de visualizacin, respiran-do con regularidad.

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Si no puede visualizar

Si experimenta dificultades para reali-zar los ejercicios contenidos en este li-bro, obsrve imgenes o fotografas depaisaies naturales durante 1 a 3 minutos,iuego cierre los ojos y trate de ver Iasmismas imgenes en su mente. Otro re-curso consiste en recordar una escenaaoradable de su Pasado, con los ojosaiertos. Luego cierre los ojos y trate derecrear todos los detalles de la escena.Puede utilizar tambin sus sentidos no vi-suales.

Si sigue teniendo Problemas, Puedeser qudno utilice, o no perciba, las im-oenes oue acuden a usted. Podra sentirlgo aubtivo, somtico (sentidos corpo-rales) o cinestsico (posicin del cuer-po), y sin embargo no Yer esas imge-nei. ZQu sentido utiliza o responde a lcon mayor presteza? Por ejemplo, si us-ted es na persona auditiva escuche elsonido del mar y vea las imgenes quese derivan del mismo. Cuando ustedconcentra de manera consciente suatencin en aquello que siente, puedetrasladarse lentamente a Ia imagen visualrelacionada. Todos los sentidos estnconectados y se hacen visuales en cuan-to usted se pide a s mismo que descri-ba su experiencia.

Cuando intente mejorar su visualiza-cin, haga un esfuerzo por relajarse ydeie que la visualizacin llegue por ssoa, esto es, agurdela. Y cuando lle-gue, acptela.- Cuanto ms breve sea la visualizacin,ms poderosa resulta. Cuando usted haexoerimentado una sensacin, la visuali-zabin ha hecho su efecto. Si no perci-be alguna sensacin o emocin al cabode un perodo relativamente corto, no seesfuerce por conseguirlo alargando sutrabajo con esa imagen concreta. En lu-gar d'e eso, pruebe con otra imagen. Mu-chos de nosotros tendemos a creer queun mayor esfuerzo aporta ms resulta-dos, pero la visualizacin funciona ensentido inverso.

La visualizacin requiere una prctica,oero no ha de convertirse en una obse-bin. Mediante la visualizacin, nos con-dicionamos para estimular procesos cu-rativos a partir de una imagen mentalLas sensaciones Pueden tardar mstiempo en aparecer a rnedida que noshacemos mayores pero, con paciencia yconfianza, aparecern.

El momento de visualizar

Quisiera insistir en la conveniencia deefectuar el trabajo de visualizacin antesde iniciar la rutina cotidiana y de que loincorpore en su ritualde desperezamien-to y aseo personal. La visualizacin en

ese momento del dia supone una buenapreparacin para los sucesos y activida-des que vendrn a continuacin. Esta-blece una actitud positiva a la hora deafrontar la jornada. Ejerce una profundainfluencia en nuestro rendimiento y rela-cin con las personas durante las veinti-cuatro horas siguientes. El estableci-miento de un estado de nimo equilibra-do a travs de un ejercicio de visualiza-cin por la maana, sobre todo median-te una imagen sacada de un sueo noc-turno, resulta beneficioso en la determi-nacin de su actitud y comportamientopcsteriores.

Puede ocurrir que usted modifique losejercicios espontneamente en el trans-clrso del proceso de visualizacin. Sigaadelante. Descubra adnde lleva ese ca-mino. Si encuentra su propia visualiza-cin, utilcela. Usted se ha llamado a smismo a participar en su propia cura-cin. Aquello que descubra en su interiorresultar muy til para esa curacin.

Puede usted grabar las instruccionespara cada ejercicio en una cinta y escu-bhar su propia voz como gua. Llegarun momento en que inventar sus pro-pios elercicios y se dar sus propias ins-trucciones en silencio.

Algunos ejercicios son variantes deuna [cnica denominada Curacin egip'cla, Puede emplearse para ayudar a cu-rar infecciones corporales externas,como erupciones cutneas, conuntivitisy acn, ascomo trastornos relacionadoson la superficie mucosa de cualquiermembrana y muchas molestias corpora-les internas.

Cmo proceder

1. Sintese en la postura del faran.2. Propngase una intencin Para

realizar el ejercicio.3. Cierre los ojos.4. Exhale e inhale tres veces. Re-

cuerde que la espiracin es larga y len-ta, mientras que la inspiracin se efectade la manera normal.

5. Empiece a realizar sus ejerciciosde visualizacin especficos. Deje que re-ciba las imgenes sin esfuerzo.

Curacin egipcia

Cierre los ojos y exhale tqes veces.Luego, imagnese que est en un vastocampo de verde csped, estirndose ha-cia un sol radiante en un cielo azuly des-pejado. Vea cmo sus brazos se vuelvenmy largos, extendindose en direccinal sol, Los rayos solares caen sobre suspalmas y circulan a travs de palmas ydedos, y salen de las yemas de los de-dos de forma que cada una de ellas pro-

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yecta un rayo. Si es usted diestro, obser-ve una mano pequea y completa al fi-nal de cada rayo que emana de los de-dos de su mano derecha. Al final decada rayo que emana de los dedos dela mano izquierda, ver un ojo. Hay cin-co manos y cinco ojos. Si es usted zur-do, los dedos estarn en su mano iz-quierda, y los ojos en la diestra.

Vuelva ahora esas manos y ojos haciasu cuerpo y utilice los ojos para abrirsecamino a travs del cuerpo, emitiendo luzdentro o hacia la zona que investiguepara que pueda ver lo que est hacien-do. Puede colocar en las manos peque-as un cepillo de cerdas doradas paralimpar, tubos de rayos lser para curar,escalpelos de oro para operar, botes deungento dorado o azuldorado para un-cir, ascomo hilo de oro para coser. Unavez finalizado su trabajo, salga de sucuerpo por el mismo camino que utilizpara entrar. Anoje todos los desperdiciosque se ha llevado con las manos peque-as defrs de usted. Eleve sus manos ha-cia el sol y deje que las manos peque-as y los ojos regresen al interior de suspalmas y queden allguardados para suuso en el futuro. Luego abra los ojos.

lmagnese su salud

Este es el ejercicio que puede emplearcualqurer persona para contribuir a curarun catarro comn. El ejercicio se llamael ro de la vida.

Ciene los ojos. Exhale kes veces pararelajarse. lmagine que sus ojos se vuel-ven l'r,.quidos y muy brillantes. Vea luegocmo fluyen hacia dentro, convirtindo-se en dos ros que bajan desde los se-nos hacia la cavidad nasal y la gargan-ta, a la vez que su corriente arrastra to-dos los residuos, el dolor y la rigidez.Descienden por su pecho y abdomen,por las piernas, y desembocan comoefluvios negros o grises que ve filtrarseprofundamente en el suelo. lmagine quesu aliento sale en forma de aire oscuro,y vea cmo sus desperdicios emergencon 1. Sienta los ros palpitando rtmica-mente a travs del cuerpo, y fjese en unaluz procedente de arriba que inunda lossenos, la nariz y la garganta, al tiempoque todos los tejidos se vuelven rosadosy sanos. Cuando experimente el flujo rt-mico y la luz invadiendo esas cavidadesa la vez, exhale y abra los ojos.

Realice este ejercicio cada tres horas,durante tres a cinco minutos hasta quesu resfriado desaparezca.

AnsiedadoF lntencin: Rematar la ansiedad cuan-E do se presente.

Frecuencia: Haga el ejercicio que leaporte ms alivio, o una combinacin deellos, cada vez que experimente ansie-dad, durante sesiones de tres minutos.

Respiracin

Concentre su atencin inmediatamen-te en su respiracin. La respiracin estsiempre alterada cuando nos sentimosansisos. Una respiracin controladapropicia el control de la ansiedad. Em-piece a realizar exhalaciones largas ypausadas por la boca, y tome inhalacio-nes normales

-no exageradas- por lanariz. Siga haciendo esto hasta que sesienta tranquilo No efecte inhalacioneslargas y profundas, que aumentarn laansiedad y podran provocarle un mareo.

Luz azul

lmagnese accediendo a un hermosoprado, Vase baado por una luz azuldorada, una mezcla de sol dorado bri-llante y cielo azul despejado, y exhalan-do el dixido de carbono en forma dehumo gris, que se desvanece en elaire.Deje que la luz azul circule por su flujosanguneo, alcanzando todos los recove-cos de su ser y ayudndole a tranquili-zarse y relajarse. Deje que la luz azul dis-curra por sus dedos y salga por las ye-mas, hasta envolver su cuerpo con unresplandor uul zafio. F'rjese en cmo laluz azul interior y exterior se fusionan.Sepa que su cuerpo es el puente quepermite esa fusin. Cuando vea que am-bas luces azules se han unido en unasola, sabr que su ansiedad ha pasado.

Dolores

lntencin: Detener el dolor.Frecuencia: Cada diez a quince minu-

tos, de uno a tres minutos, hasta que de-saparezca el dolor.

Viaje indotoroVisualice el dolor. Despus, obsrve-

se a simismo entrando en su cuerpo conuna lata de oro llena de aceite caiiente ydorado. Dirjase hacia el dolor. Lleve unaluz y examine el dolor desde todos losngulos. Luego eche el aceite caliente ydorado sobre el dolor, cubrindolo porcompleto. Fjese en cmo se disuelve eldolor hasta volverse dorado. Dese lavuelta y ver rayos dorados de salud ybienestar emergiendo de este punto ha-cia todas las partes del cuerpo. A conti-nuacin, abandone su cuerpo por la mis-ma ruta que utiliz para entrar, conscien-te de que su dolor ha desaparecido.

Reconciliacin con el dolorVisualice el dolor. Sepa que usted >

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tambin conseguir algo para usted que do lenta" como la fatrga, determinados ti-quiso obtener ese da, pero no pudo. Si:.:loe.cedsrelirii:o,.el ,jvssl-,llega a una discusin que haya sosteni- cula brliar o los riones, emplee imge-do con alguien recuerde la conversacin nes rpidas. cmo sabr si su afecclnde la forma ms literal posible, slo que es demasiado rpida o demasiado rn-ahora las palabras de su interlocutor sa- ta? No tiene ms que diriir su atencinlen de sus propios labios y lo que usted a su dolencia pi'lns iftffieg, perci.:

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dijo es expresado por la otra persona. bir entonces elritmo O,Su.,cuerpaysQ:, .

Esta experiencia le relajar, puesto que br si es rpido o lento. puede:dijsiit#.comprenderloqueelotroestabasin-tambinconSUmdico..............

' .:ii .: t:' r:::j. t.:..i:t:., ., ..... .. .;i:rrrrrtlrrrr. r::r:aqqntecjmiento,,del' O{a, y,,s\rivalo.cn,r[a'i: ri eu trA$JOrnO,:{ i

ti-endo en ese instante (si lo desea, pue- 5. Puede apticar una aproximacittde llamar a esa persona al da siguiente paradjica al problema con et qu*;gif,,,para hacer las paces). Contine con este trabajando, aplicar aquello que en apa-,ejercicio hasta que se duerma.

lr .,:,'lntencin: Desterrar la ira..,,Frecuencia: Cada vez que se experi-mente ira; tres.minutos para El lazo dera, un minuto para Satir de ta ira.

Et tazo oe E traDesate el lazo que le est oprimiendo.

Observe en cada nudo -un lazo tienehasta trece nudos- qu es lo que pro-

picra su ira y corrjalo. No se deje involu-crar en otras emociones durante esteejercicio; concntrese nicamente en Iaira. En cuanto termine de desatar todoslos nudos abra los ojos, consciente deque Ia ira ha desaparecido.

Siete consejos para desarrollar supropia visualizacin

.Cuando empiece a trabajar con visua-liacin, ns.tadar en sentirse familiari-ado,coh. etkyamenzar a servirs..de:imf,ge.ns,,propia.' Par ayudarle a dise-'ar sus propios ejercicios, le dar sieterecomendaciones para hacer de la vi-sualizacin una herramienta eficaz.1. Empiece siempre por su puntoconflictivo. Sea cual fuere el problema in-mediato, afrntelo.

2. Cualquier imagen que encuentrees vlida para usfed No efecte juicio al-guno sobre el tipo de imgenes que acu-dan, ni considere si tienen algn sentidoo merecen la pena, y no trate de inter-pretarlas ni buscarles un significado.

3. Deber confiar en que podr sa-car parlido a su imagen.4. Cuando estamos enfermos, nues-tros ritmos corporales se vuelven dema-siado rpidos o demasiado lentos.

En la prctica de la visualizacin, us-ted debe tener presentes los ritmos de

riencia tiene menos sentido en una situa:cin dada, algo que no obedece a su vi-sin lgica de las cosas. Por ejemplo,cuando padece algn dolor, es com-prensible que desee volver la espalda yalejarsg de 1. Haga justamente lo con-trano. Unase al dolor, sea el dolor, ofrez-ca su mano al dolor. Este paso aparen-temente ilgico puede brindarle un con-trol sobre el dolor porque el acto de unir-se a l

-sin atribuirle eptetos corTto 0s-pantoso,, "aoz" o .insoportable,-

puede hacerlo casi impotente.Esto es as porque todos los modos

de experimentacn de sensaciones,emociones, imgenes o palabras sonformas de pensamienfo. La paradoja re-side en afrontar la causa de nuestra in-quietud, volverse hacia ella, no alejarse,Haga con esa causa lo que nunca anteshaba soado hacer'. vaya hacia ella.

6. Sea lo que fuere lo que descubrapor s mismo, las respuestas que puedaencontrar, la informaein que reciba,pracure sacarles las ventajas que nece-sita llevar a su realidad cotidiana comosi se tratara de una experiencia vivida,

7.,,. Por encima de todo, no se com-pare a smismo con nadle. No tiene im-portancia alguna que usted se recuperems de prisa que otra persona que su-fre un problema similar. Su nica preo-cupacin ha de residir en usted, en elrestablecimiento de su propia salud. Q

Este texto ha sdoextrado det fibro deGerald Epstein,Visualizacin cufitiva,publicado por la .editorial Robin Book+n Barcelona en'lsr1.

Ar|rocEnoDlrector: Enrique de Vicente. Dl.reclor adiuto: Salvador HernezRedasior ,efe: Jos Len Cano.Redccir: Yolanda Bejarano, Seqetala de Rdacsu: Ins Cerqzo Dtector de tei Tito Carazo.Dlector de Fbsdad: Jos LuisCalvo Plcldad Madrd: Montse Cumia. Fotgator: Enrique Ba-lari Carlos Bullejos, Oscar Burriel,Daniel Font, Paco Higuera, Kim Pe-drs. DibEralles: Pancisco L.Frontn, Angel Navas, J. M. Ponce.Colaoradores: A.lejandro AgostLnelli, Rafael A]arcn, Miguel Bla'co, Manuel Carballal, GabrielCarrin, Rafael Casares, Jos Ca-taln, Michel Coquet, SebastinD'tub, Hilary Evans, Vicente Fde Bobadilla, Miguel c, tuacil, An'geles G. Estalayo, Jess Gilcla,Francisco Gaviln, Marysol Oonz-lez Sterling, Migue} cuallar, JosepGuijarro, Abelardo Herndez,Isabela Herranz, Guillermo He[e-ra, Thamara Hormaechea, AntonioHuneeus, Stanley Krippner, RafaelLaIla, Francisco Lpez Seivane,Lus Maggi, Jos Antonio Mayo,Antonio Medrano, Piot Melnikov,Vicente Moros, Cristian Page, Ra-mos Perera, Luis Racionero, Ato,nio Ribera, Carmelo Rlos, fuiel Rcsales, jaYier Ruiz, Alejandro Sa,cristn, Miguel Seguf, JavierSierra Larissa Vilenskaia.vtr.g2.Folocompollclr Texcom, S. A.C/ San Romualdo, 26. 28037 Ma-drid. FotoBsllca: Duvial. C/ AI-fonso Gmez, 42. 4" planta.28037 Madrid. IEprl6e: Rivadetrelaa, Cuesta de San Vicente,28.Madrid.

4Mundo Futuro

El hombre est mutando

74Hstoria ignorada

Felipe ll, un alquimishignorado

22Glaves defAo Cero

Espaoles que aspiran a la.inmortelidad

Eldorno d lbs duidasEs el (yetil extratenostre?

34: ptofecfa*, ' "Pr,oieas del oalendirfo rnaya

L ser humano y la Tierra estn en un procesode cambio, cuya aceleracin es cada vez mspaipable, El riesgo eyidente de esta etapa es

que la marea de transfomaciones nos impida leneruna vlsln global de este'fascinante proceso alqumt-co, Cada vez ms visionarios estn convencidos de quela Humanidad y Ia Tierra no estn irremisiblemente n-fermos, Estn transformndose en algo sustancialmen-te nuevo, que supera todo lo que podamos imaginar, Yese cambio cclico formara pafie de un plan evolutivotrazado en la noche de ios tiempos, Por caminos dis-tintos, Argelles, McKenna y otros llegaa a Ia sorpren-dente conclusin de que la mutacin alcanzar su pun-to culminante en torno al ao 2012 y que 1992 es detranscendental importancia dentro de este proceso,como informamos en este nmero,

Se anuncian crisis cada vez ms sorpresivas y con-tundentes que nos conductn a situaciones extremas,Pero la conmocin que crecer por momentos no debeconfundirnos. Son los estertores de aquello que agoni-za y los estremecimientos que preceden al nacimientode algo nuevo. La transicin puede ser dolorosa o gozosa. Lo viejo siempre se resiste a desaparecer y nosangustia con el miedo ai cambio, Pero si nuestra acti-tud es de calma, desapego y comprensin, estaremosabiertos a 10 nuevo y asumiremos Ia mutacin que seest gestando dentro y fuera de nosotros,

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t4EETIPE II, ET REY

ATQUIMISTAEste artculo pone demanifiesto uno de los

aspectos del rey Felipe II msocultados por los

historiadores: su pasln por laaiqulmia.

ENRIQUEIDE VICENTE

TABORATORIOS DEPARAPSICOTOGA

En Espaa tambin se investigan Iosfenmenos paranormaies con todo

tipo de aparatos. Esta es una crnicasobre esos increbles laboratorios.

Edita: Amrica Ibrica Preside!.te: Germn Snchez Ruiprez.Preridente Eie@tivo: OustayoGoulez Lewis. Coueiero Delegado: Jaer Maas Rueda. Direelor Gerelte; Carlos Gonzlez Ga,In Dectora Etorial Sandradel Rfo de Ortzar. DLeqtor deEdDEcle A]fonso Estalrich.Dlestor de Mkethg: A.lfonsoAcebal. Direciora Producci:Guadalupe Gisbert, Rosa MarfaMartfnez (Ayudante). Dector desucipciones: Ra-f ael Caballeo.Dlshdbuclu ESPAA| GesdisaC/ Miquel Yuste, 26. Madrid. Te].(91) 3041345. ARGENTINA: Im.portador Ed. Vanidades, C. A.Penl, 269-3,' Buenos Aires. Distri'bucin capitali Vaccaro SnchezCfa., Moreno, 7949." Buenos Aires.Distribucin intedor Distribuidcrai Beltr, S.A.C. Santa Magdalena, 541 Buenos Aires.Depsito Legal: M'2?522-i 99 I. Pre'cio 325 Pta., Canilias 350 Pta.

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DE MARTEQu provoc la destruccin

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