ZAQUEO – Un Hombre de Valor

Pastor DANIEL CHÁVEZ shalom4you@hotmail.com danielchavezbarahona

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EELL VVAALLOORR DDEE ZZAAQQUUEEOO Lectura Bíblica: Lc. 19:1-10.

INTRODUCCIÓN.

1. Esta es una historia de la vida real que muestra de un lado el amor

de DIOS y de otro lado, el valor de una persona que tuvo un encuentro personal con el SEÑOR JESÚS.

2. En este mundo no es común hallar personas que decidan cambiar sus valores temporales por los principios y valores del Reino de

DIOS; mas aquí hallamos a un hombre valiente, que a pesar de sus

limitaciones supo tomar las decisiones correctas que dieron un nuevo rumbo a su vida.

3. La Biblia dice que el SEÑOR JESÚS “vino a buscar y a salvar”. Esta verdad continúa siendo real en el día de hoy; Él está

buscando hombres y mujeres dispuestos a experimentar un

cambio verdadero en su vida, que se atreven a recibirle con toda sinceridad.

Si el SEÑOR JESÚS estuviera caminando por su barrio, ¿A qué persona buscaría? ¿A qué casa le gustaría entrar?

EL VALOR DE ENFRENTAR SUS LIMITACIONES.

1. Era publicano.

Los publicanos eran agentes

recaudadores de impuestos, establecidos por el imperio

romano en las regiones que

estaban bajo su dominio.

Judío que se hacía

Publicano era considerado un

lacayo de los odiados romanos y un traidor de Israel.

* LAS TARIFAS ERAN ARBITRARIAS

Y SUJETAS A SU CAPRICHO PERSONAL

Había 2 clases de cobradores de impuestos:

Los Gabbai: Cobradores de impuestos generales. Ellos cobraban impuestos a la propiedad, a los ingresos, impuestos a cada persona.

Los Mokhes: Cobraban impuestos sobre exportación e importación, sobre artículos comerciales, sobre todas las cosas que se transportaban por los caminos. Establecían peajes en los caminos y puentes; cobraban por las bestias de carga y por los ejes de los carros; aplicaban tarifas a paquetes, cartas y a cualquier cosa que podían exigir impuesto.

También había 2 clases de Mokhes:

Los Mokhes Grandes. Eran jefes de los cobradores de impuestos (este era el caso de ZAQUEO).

Los Mokhes Pequeños. Tenían una oficina ambulante para cobrar impuestos. Tenían trato personal con la gente (como MATEO).

2. Era rico y ‘exitoso’.

Zaqueo llegó a ser ‘jefe de los publicanos’, fue promovido a un puesto de gran responsabilidad.

Zaqueo no sólo tuvo éxito en su trabajo, sino que también alcanzó prosperidad económica.

3. Era marginado por la gente.

Los publicanos eran personas odiadas y despreciadas por la gente. En aquellos tiempos, aceptar el oficio de publicano era convertirse en un marginado social, despreciado por los demás. Se le consideraba como un traidor a la nación, pues ellos cobraban impuestos a sus compatriotas para entregar una parte al imperio invasor.

La marginación se expresaba especialmente en el ámbito religioso; como los publicanos eran tenidos por ‘pecadores’, no se les permitía especialmente el acceso a las sinagogas y al templo de Jerusalén.

Estas personas normalmente no participaban de las fiestas y ritos religiosos, prácticamente estaban condenados al destierro

religioso.

4. Era bajo de estatura.

Zaqueo era físicamente diferente a las demás personas por causa de un pequeño detalle: Era ‘bajito’ o de estatura pequeña. Algunos estudiosos creen que podía medir 1.50 m.

Lamentablemente, en todas las culturas las personas que tienen algún impedimento o carencia física son constantemente objeto de burla y humillación cruel.

¿Se pueden imaginar a Zaqueo siendo joven o adolescente? ¿Qué tipo de trato recibiría de los demás? ¿Cuánto crees que debió sufrir y soportar a causa de ese ‘pequeño detalle’?

5. Era una persona solitaria.

En muchos casos se cree que hay una cercana relación entre el éxito y la soledad, pues las personas exitosas tienden a volverse esquivas e inaccesibles para otros y poco a poco se convierten en seres solitarios.

El dicho secular “mientras más arriba estás, más solo te encuentras” se puede aplicar muy bien al caso de Zaqueo; mientras una multitud de habitantes estaba acompañando al SEÑOR JESÚS, Zaqueo se encontraba inmerso en la más profunda soledad.

EL VALOR DE ESFORZARSE POR ENCONTRAR A JESÚS.

1. No se desanimó por la adversidad.

“Pero era de poca estatura y no podía ver por encima de la

multitud.” – v. 3

2. Se apresuró a buscar otra oportunidad.

“Así que se adelantó corriendo y se subió a una higuera

sicómoro que estaba junto al camino” – v. 4a.

3. Esperó con paciencia el momento de su oportunidad.

“Porque JESÚS iba a pasar por allí” – v. 4b.

El SEÑOR JESÚS valoró el esfuerzo hecho por Zaqueo para encontrarse con ÉL.

EL VALOR DE SER CONFRONTADO POR JESÚS.

1. El SEÑOR JESÚS quiso pasar por donde se encontraba Zaqueo.

“Cuando JESÚS pasó…” – v. 5

2. El SEÑOR JESÚS conocía quién era Zaqueo.

“Miró a Zaqueo y lo llamó por su nombre: ¡Zaqueo!” – v. 5

3. El SEÑOR JESÚS se auto invitó para ir a la casa de Zaqueo.

“¡Baja enseguida! Debo hospedarme hoy en tu casa” – v. 5

EL VALOR DE RECIBIR A JESÚS.

1. Se apresuró en recibirle con alegría.

“Zaqueo bajo rápidamente y, lleno de entusiasmo y alegría…” – v. 6

2. Lo llevó a su propia casa.

“…llevó a JESÚS a su casa.” – v. 6

3. No se preocupó de lo que la gente podía opinar.

“Pero la gente estaba disgustada, y murmuraba: ‘Fue a

hospedarse en la casa de un pecador de mala fama’” – v. 7

EL VALOR DE CAMBIAR SU VIDA POR CAUSA DE JESÚS.

1. Tomó decisiones concretas.

“Zaqueo se puso de pie delante del SEÑOR y dijo: SEÑOR” – v. 8

2. Mostró fruto de verdadero arrepentimiento.

“Daré la mitad de mi riqueza a los pobres y, si estafé a

alguien con sus impuestos, le devolveré cuatro veces más.”

– v. 8

CONCLUSIÓN.

1. Como resultado del valor mostrado por Zaqueo, el SEÑOR JESÚS

le concedió la salvación, que es un regalo de DIOS y no tiene comparación con las riquezas de este mundo.

“La salvación ha venido hoy a esta casa” – v. 9

2. Cuando Zaqueo experimentó el amor de DIOS y la amistad que el

SEÑOR JESÚS le ofreció, esto cambió completamente su sistema

de valores; por eso es que no le costó desprenderse de sus bienes materiales, porque su confianza ahora estaba puesta en el SEÑOR.

3. Hoy día, el SEÑOR JESÚS sigue recorriendo las ciudades, barrios y aldeas buscando personas de valor, que estén dispuestos a abrir

su corazón y su hogar para que Él ingrese en su vida y

experimenten un cambio que perdure para siempre.

“Pues el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar a los que

están perdidos” – v. 10