Mandela, el poder de la
integración
“Cambiar la forma de ver la vida, hace que la vida cambie de forma”
Número 5Director | Cristian Fhers
Año I
Tras 27 años en prisión, Nelson Mandela perdonó a quienes lo condenaron y modificó la estructura social de un continente entero. Conozca por qué triunfó contra el apartheid y cuál fue su intento fallido.
ANTICIPO
Causa de Noticias | Número 5 | Año 1 | SEPTIEMBRE 2013
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“Para saber qué tan bien te ha ido en la vida,
debes fijarte qué tanto has mejorado la vida de los demás”
Causa de Noticias | Número 5 | Año 1 | SEPTIEMBRE 2013
La política como el arte de la integración
Por Cristian Fhers
E D I T O R I A L
No sé cuando, pero dentro de muy poco la medicina occidental ya no va a necesitar que vaya-mos al hospital para “curarnos”. Será todo más fácil: directamente nos pedirán que le enviemos el ór-gano enfermo y que lo retiremos sano a las 48 ho-ras. ¿Cómo será ese envío? Creo que lo harán por taxi. O tal vez no, quizás el sistema de prepagas ya te cobrará durante todo el año un transporte que quizás no vayas a usar en tu vida. Pero estoy segu-ro de algo: nunca se darán cuenta que el hombre, así como el universo, es un todo. Con un simple acercamiento a la filosofía oriental se puede percibir que la enfermedad lle-gan cuando las funciones de los órganos no es-tán integradas. Un ejemplo es que cuando a un paciente se le diagnostica una mala función del meridiano hígado-vesícula lo que se intenta como terapia es fortalecer el vínculo con el meridiano anterior que es el de vejiga-genitales. Esta verdad que puede ser comprobada, también esta basada en que los conocimientos verdaderos no deben basarse en un juicio personal sino por la comprobación de la aplicación de las leyes de la naturaleza, en este ejemplo la sabidu-ría oriental dice, hay que hacer que el agua(vejiga-riñones) alimente el aire (higado-vesícula). Siguiendo la línea del método inductivo, es decir, yendo de lo particular a lo general, podría-mos comparar lo más pequeño que tiene una so-ciedad, que es el cuerpo humano, con su organiza-ción socio-política. Probablemente Nelson Mandela no apli-caba a los lineamientos de la sabiduría oriental
cuando en primera instancia creía que lograría jus-ticia para la raza negra a través de la violencia. Al punto que estaba convencido de que el régimen racista y totalitario sólo sería derrotado median-te acciones armadas, sabotajes y otras formas de violencia. Para ello formó un grupo de comandos activistas llamado Umkhonto we Sizwe, que envia-ba a adiestrarse a jóvenes militantes a Cuba, China Popular, Corea del Norte y Alemania Oriental. En nuestra comparación, esta actitud es como un órgano que supone que puede ser libre separándose del cuerpo como lo hace un tumor. El resultado no es solo su extinción sino también la muerte del propio nutriente que es el cuerpo. Le llevó muchos años al Nobel de la Paz convencerse de que toda esa concepción de la lu-cha contra la opresión y el racismo en Sudáfrica era errónea y que había que renunciar a la violencia y optar por métodos pacíficos. En la década de los ’60, pensar semejante cosa era como una fantasía para todos. La violen-cia con que se reprimía a la mayoría negra y los te-nues actos de terrorismo con que ellos respondían habían anidado dos venenos que podían presa-giar un final muy trágico. Eran el rencor y odio. Sin embargo, Mandela comenzó a conver-tirse en el político más extraordinario de todos los tiempos cuando reconoció su errory confió plenamente en que el poder de convic-ción, la paciencia, la voluntad fomentada con lar-gas meditaciones y el heroísmo que cultivó en muchos años debían ser el camino para ir con-venciendo de que la integración era posible sin
violencia, sin vencer, sino convencer. Lo hizo primero a sus propios compañeros, luego a sus correligionarios del Congreso Africano y, por último, a los propios gobernantes y a la minoría blanca. Es más grandiosa su obra porque tuvo como antesala la cárcel, ya que se gestó, en la soledad de una conciencia, en la prisión donde por 27 años, persistió. Viviendo confinado en una minúscula celda y con apenas unos pocos minutos al día para cambiar palabras con los otros presos, su tenacidad, su paciencia y su confianza llevaron a cabo lo que parecía imposible. Por esas virtudes, y a pesar de todo, se recibió de abogado. A medida que transcurría el tiempo se le permitieron mayores beneficios, hasta salir esporádicamente de la cárcel a conversar con los que fueron presidentes en ese ciclo. Nelson Mandela no podía desconocer la ley del karma, por lo menos en lo más profundo de su Alma. De otra forma no se explica cómo tras pasar 30 años en prisión, el deseo de venganza, el resentimiento o el rencor se convirtieron en agradecimiento. Entendió que con ello gestaba la desintegración, que es lo contrario a la política verdadera. Hasta pareció en sus años como presidente que les pedía perdón a quienes les habían encarcelado de manera tan cruel. Como sabiendo que con ello le facilitaban saldar alguna deuda kármica de muchas vidas anteriores. Esto es filosofía kármica pura, no solo perdonar, sino pedir perdón al victimario de esta vida. Cuando Mandela subió al poder, su popularidad en Sudáfrica era extraordinaria, pero el poder no modificó su carácter. Siguió su vida como el hombre sencillo, austero y honesto de siempre, con una particularidad que lo diferencia de cualquier mandatario: se negó a permanecer en el mando, como sus compatriotas le pedían. Mandela es un maravilloso ejemplo de
lo que debe ser la política como EL ARTE DE LA
INTEGRACIÓN, y lo que debe ser el político de la
nueva era en la que el planeta esta ingresando. La
juventud debe tomarlo como un gran ejemplo de
que la política no es, “separar para reinar” ni sólo
esa forma de lucha sucia y corrupta de manejar el
poder y comprar débiles voluntades, como lo que
cree tanta gente.
Se debe confiar que es posible que el
ser humano cultive virtudes que establezcan
un vínculo integrado con todos los de su
comunidad y con todo el mundo para reemplazar
el fanatismo, la separatividad, la arrogancia o el
odio. Actúan a nivel social, del mismo modo que
lo hace la enfermedad en el cuerpo humano:
termina destruyéndose así misma.
Asumamos la responsabilidad que cada
uno somos parte de un sistema que necesita
integrar virtudes que faciliten la integración del
cuerpo total de la humanidad y con ello hacer un
aporte para que la tierra sea un lugar donde reine
la luz, la paz y el amor.
Causa de Noticias | Número 5 | Año 1 | SEPTIEMBRE 2013
ANTICIPO
Las elecciones legislativas desatan la lucha por la sucesión presidencial. Qué dice la carta de los candidatos a ocupar el sillón de Rivadavia después de 2015.
El fracaso del éxito. Parecen tenerlo todo: fama, fortuna y poder; sin embargo su final termina en tragedia. Los casos emblemáticos.
POLÍTICA
SOCIEDAD
Nació el primer bebé con genes perfectos. Qué pasa cuando el hombre le corre los límitesa la naturaleza.
Una incógnita se desata debajo del lago antártico Vostok donde hallaron una forma de vida desconocida.
CIENCIA
SALUD
Suscribite!!causadigital.com.ar27/09/13
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“Los verdaderos líderes deben estar dispuestos a
sacrificarlo todo por la libertad de su pueblo”.
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