¿Cómo alimentar a un estudiante?Posted on mayo 22, 2013 by Libreria LEO
Si bien sabemos que toda la carrera de medicina es una gran batalla
académica diaria que exige el máximo a sus estudiantes; también sabemos
que en la época de exámenes todo se intensifica. Si se contaba con poco
tiempo libre, ahora se tiene menos. Se inicia a comer cosas rápidas y
“llenadoras”, pero es en este momento que necesitamos más todos los
nutrientes de comida saludable para que nuestro cerebro supere la presión.
Ya sea por ansiedad o presión los estudiantes tienden a recurrir a alimentos
con más azúcares refinadas, sal o grasas saturadas. Esto con la falsa idea
de generar un placer que los libere del estrés. Sin embargo esto es lo peor
que pueden hacer, esto afecta directamente al cerebro.
Los alimentos que se deben evitar en exámenes, y en general son:
refrescos, panadería industrial, embutidos o carnes grasas, caramelos y
dulces. Si se comen este tipo de alimentos los nutrientes en nuestro
organismo empiezan a descender. Contrario a lo que muchos estudiantes
creen acerca de los dulces y golosinas, estos no generan mayor
rendimiento mental, al contrario, decrece la vitamina B en nuestro cerebro
y dejan trazas de aluminio que afecta directamente a nuestra memoria.
¿Entonces que deben comer los estudiantes?
Frutos secos. Altos en vitamina B, excelentes para agilizar la mente y
nutrir el cerebro.
Agua. Es fundamental mantenerse hidratado, es recomendable tomar
aproximadamente 6 vasos al día.
Pescado. Es muy bueno para nuestro organismo gracias a su alto
contenido de fósforo.
Plátano. Gracias a su contenido de potasio nos llena de energía para
aguantar largas jornadas de trabajo o estudio.
Nueces. Llenas de aceites que se traducen en energía pura.
Dato curioso, a lo que nosotros conocemos como nueces de la India, los
alemanes lo llaman anacardo, que significa alimento de estudiante.
Otros puntos muy importantes son. Tener tus tres comidas a un horario
decentes, sabemos que puede parecer imposible a veces tener el tiempo de
comer. Pero un desayuno rico en fruta y un poco de mermelada nos darán
un muy buen comienzo. Así entonces llegaremos a la comida no con un
hambre voraz, y así no nos sobrecargaremos de comida, evitando tener ese
descensos de sangre y rendimiento por una digestión pesada.
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