8/16/2019 Enalba Gamboa Entrevista
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El señor Eliecer Torres Arango acudiente de él en Bogotá. Él todos los sábadosvenia de Zipaquirá a Bogotá a quedarse a dormir donde mis tíos porque él seiba de ahí al Espectador a llevar sus cuentos no sé qué. Entonces cuando!uimos a un paseo a Zipaquirá nos !uimos al colegio lo sacamos" para queestuviera con nosotros paseara. Eso !ue hace muchos años. #o estaba con
mis tíos en Bogotá. #o me cono$co con él desde niño por la !amilia. %ero losadolecentes eran ellos Eliecer Torres Arango &ictoria 'amboa %aternina de Torres. %or que el papa de 'abito les escribi( les di)o que él se iba a Zipaquiráentonces que le daba permiso para que !uera a Bogotá a la casa de ellos.
En ese paseo este 'abito" esto o" una prima mía.
El papa de él. 'abriel Eligio 'arcía %aternina que es de *incé +*ucre, era primohermano de mi papá por lo %aternina" mi papá era -anuel 'amboa %aternina.
osotros mi !amilia nos !uimos de *incé a vivir a -agangé él nos iba a pasarvacaciones con nosotros. osotros queríamos mucho a 'abriel Eligio.
/on las 'amboa grandes a compartir !ritos. 0bamos un grupo de pelados unode ellos di)o a mí la que me gusta es la 1aquita.
Esta !ueron tomadas con mi cámara. Aquí esto o2 Enalba 'amboa. Esta esEsther Berrio 'amboa 3. Al!redo 'arcía Burgos sobrino de un senador " le dioun pasa)e gratis para el tren +el de adelante,. Estos son amigos nuestros queiban de paseo. El de atrás Enrique /aballero 4abori !ue político" abogado ensanta marta. -ercedes %i$arro. Ana Elvira Bustamante. 'abito. Este es 4ucho
Torres 'amboa +el de sombrero, hi)o de Eliecer Torres Arango 3 amigo intimode 'abito.
Eso !ue un domingo por que el sábado era sagrado para él" llegaba a escribirsus cuento se iba para el espectador para ver si se los publicaban. 5elcolegio salía para donde mis tíos donde se quedaba sábado domingos.
En la entrada de las *alinas Zipaquira sept. 67 89:;.
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'abriel Eligio. Ella vive en Barranquilla. uito el telé!ono porque los periodistasla tenían loca.
El día que o me case" que !ue en Bogotá. 4a noche antes del matrimonio élestuvo con nosotros" en una despedida que nos hicieron se e cuso" o nopuedo venir mañana a tu matrimonio porque tengo que estar en la =. acional.
Post escrito por Juan de la Hoz
Cuando e ra u n n iño en Barranquilla, mis p adres hablaban de un tal Gabito, con q uien habían
compartido adolescencia en los p ueblos polvorientos e hirvientes de la rivera del Magdalena.
Las h istorias f antásticas q ue contaban de ese "pariente" excéntrico y fantasioso llenaban
muchas de nuestras conversaciones vespertinas.
Algún tiempo después d escubrí que n o e ra u n pariente a quienes m is pa dres ve ían de cuando
en vez cuando pasaba d e visita por Barranquilla, sino el más g rande escritor en lengua
castellana. Cuando leí Cien Años de Soledad o currió u na r evelación: muchas d e las h istorias
de la novela e ran h istorias q ue describían m itológicos p ersonajes d e mi propia familia, desde
el bisabuelo n eura q ue s e h abía e ncerrado e n s u c uarto d e la c ola d el patio a hacer pececitos
de oro, pasando p or la p arienta q ue había nacido sin lengua y e stuvo encerrada e n s u cuarto
toda su vida, hasta a quella m ujer de m ágica belleza q ue u n d ía d esapareció d el patio m ientras
colgaba l a r opa.
Ese era e l mundo y l as historias q ue contaban mis pa dres m ientras hablaban de Gabito, el de
las m edias a marillas y la imaginación desmesurada. El mito s e h acía r ealidad e n m i propia
casa c on la p resencia d e m i abuela, Fernanda Atencia d el Carpio, de quien con se guridad
Gabito tomo p restado e l nombre de uno de los p ersonajes d e Cien Años de Soledad. Mi
abuela tenía una bacinilla con bisel de hoja de oro, lo que hacia aún más m ágico el paralelo.
Cuenta la leyenda familiar que en la época en que mis p adres y G abito vivían en Cartagena, la
casa de mis p adres e ra refugio del joven escritor los d ías e n que no alcanzaba a llegar a la
pensión y terminaba dormido en el sofá entre parranda y p arranda. En esa casa estuvo, tirado
en el suelo de algún rincón y envuelto en una corbata, el manuscrito de l a H ojarasca. Algunos
años después, en 1955, aparece u n tiraje d e 4.000 ejemplares de esa, su primera novela. Mi
padre lo co nservo co n m imo durante toda su vida y l o recibí yo co mo u n regalo y u n recuerdo
de aquel "pariente" excén trico. La última vez que se vio con mi padre, uno de esos m ediodías
ardientes de Barranquilla, Gabito le grito en mitad del restaurante: PRIMOOOO, con esa voz
inolvidable que hacia temblar los v idrios y ret umbar el caribe.
8/16/2019 Enalba Gamboa Entrevista
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El círculo se cerró m uchos a ños de spués co n u na llamada r epentina en Ciudad de México.
Del otro lado de la línea, Gabo me decía: recuérdame esas h istorias de tus padres en
Magangue. Que buenos t iempos...