ESTIMACION DEL CAMBIO ESTRUCTURAL POR MEDIO DE LOS MODELOS DE
INSUMO-PRODUCTO PARA COSTA RICA DE 1969 Y 2011
Carlos Leiva Juan Rafael Vargas
RESUMEN
El artículo tiene el propósito fundamental de probar la hipótesis la existencia de cambio entre los
años 1969 y 2011 empleando para ello las dos matrices de insumo-producto de ambos años,
recurriendo a comparaciones de los coeficientes técnicos totales, índices de arrastre directos
hacia atrás y hacia delante de Chenery y Watanabe y los índices del poder de poder de dispersión
y de sensibilidad de Rasmussen. El documento se inicia con una presentación general sobre la
naturaleza, la gestación, la medición de los efectos del cambio tecnológico, sin embargo, como
se indica más adelante, éstos son solamente algunos de los factores que intervienen en la
generación de un cambio estructural entredós sistemas económicos. Luego se hace una
referencia al cambio estructural determinado por medio de modelos de insumo-producto (IP).
Posteriormente se hace se enuncian algunas características de las dos matrices empleadas en el
análisis, algunos ajustes que se debieron realizar previo al cotejo de las mismas, luego se hace un
recuento parcial acerca de las aplicaciones de insumo-producto más importantes hechas en el
país; y finalmente se introducen algunas aplicaciones concretas para medir la presencia de
cambio estructurales entre 1969 y 2011.
I. INTRODUCCION
El presente artículo tiene como propósito fundamental evidenciar si han ocurrido cambios
estructurales en la economía costarricense entre los años 1969 y 2011, recurriendo para ello a
las tablas de insumo-producto de ambos años. Se postula que las variaciones estructurales,
identificados por modificaciones en los coeficientes técnicos totales lo mismo que en los directos
e indirectos, obtenidos de las tablas y la matríz inversa en base a los insumos domésticos,
respectivamente.
Es importante para comparar la estructura productiva de las tablas referenciadas emplear sus
coeficientes técnicos totales que son al final los que deben ser empleados para determinar si la
hipótesis de constancia de ellos se mantiene en el tiempo; a pesar de que, por el gran período
que media entre ellas, hay una cantidad innumerable de factores que habrán concurrido a
explicar las diferencias entre los dos sistemas. Dentro de ellos pueden señalarse como más
importantes el cambio tecnológico, es decir por emplear diferentes formas de mezclar los
insumos intermedios y primarios, ceteris paribus, la aparición o extinción de bienes en el sistema
económico, las variaciones en los precios relativos, las mezclas de productos en una rama
industrial, mayor o menor utilización de la capacidad instalada en las ramas, en las metodologías
de construcción de las tablas, por ejemplo, factores de agregación de sectores productivos o
bien, por errores estadísticos, entre otros.
Poder determinar en forma aislada la importancia de la presencia de los anteriores hechos
requiere de estudios sectoriales detallados, por lo cual en lo que compete a este informe, sólo se
indicará que todos ellos y probablemente muchos más están presentes y afectándose
mutuamente para explicar el traslado de la estructura productiva de 1969 hasta arribar a la
correspondiente a 2011.
El cambio tecnológico y el modelo de insumo producto
El cambio tecnológico introduce consecuencias en los sistemas económicos tales como
reemplazo de productos, nuevos procesos de producción, diseños y técnicas. En los años
cincuenta y setenta, la idea corriente sobre el tema de la naturaleza de la tecnología y la
transferencia de la misma se planteaba mediante un esquema muy simple, en donde la
tecnología se consideraba como un instrumento que permitía avanzar linealmente por las
etapas: investigación, desarrollo, transferencia e innovación (Aroche, F. El análisis de la
innovación tecnológica, el análisis de redes y el modelo de insumo-producto, 2013).
En la actualidad más bien se piensa que los descubrimientos científicos entregan aportes a la
tecnología y la misma, por su parte, le solicita a los investigadores, nuevos métodos e
instrumentos. Finalmente, el proceso de innovación no termina en la incorporación de mejores
tecnológicas a la producción; más bien con ello se inicia un período de aprendizaje tecnológico
incremental comprendiendo las mejoras sucesivas a los que son sometidas todos los productos o
procesos para logar un aumento en la productividad general.
Schumpeter (1944) define al desenvolvimiento económico- el desarrollo – como la puesta en
práctica de nuevas combinaciones de los materiales para producir ya sean los mismos o nuevos
productos, lo que puede resumirse en el concepto de innovación. La aparición de estas nuevas
combinaciones es un fenómeno discontinuo y así también lo es el desarrollo. El fenómeno de la
competencia y la aparición de nuevas empresas facilitan la innovación entendida de este modo –
y el desarrollo -, en la concepción de Schumpeter.
En el modelo de IP la innovación y el cambio técnico en un sector de la economía conducen a
cambios en los coeficientes en una columna de la matríz A o en los coeficientes de los insumos
primarios (trabajo y capital), ello significa también que cambia la manera en que los sectores se
relacionan entre sí, por lo cual cambia la estructura de la economía (Aroche, 2007).
Fontela y Pulido (1991) resumen algunas conclusiones respecto del cambio técnico para aducir
que el mismo es relativamente suave en períodos relativamente cortos para tablas de insumo-
producto distantes entre sí entre tres a cinco años:
1) Los coeficientes técnicos cambian lentamente porque en una rama operan diversas
tecnologías y no todas cambian simultáneamente.
2) No hay evidencia de que las ramas en distintas economías adopten el cambio técnico
simultáneamente. Ello debido a que las mezclas de actividades en una rama en cada país
tienden a ser distintas y esas actividades pueden tener dinámicas diferentes.
3) El peso que tiene cada coeficiente en la estimación del producto de una rama es muy
diferente. Sólo el cambio en algunos coeficientes es relevante para la estimación del
producto. Estos se denominan coeficientes relevantes.
4) Si el cambio en el uso de los insumos está motivado por el cambio en los precios relativos,
todas las filas de la matríz tienden a observar un cambio en la misma dirección: por ejemplo;
si un insumo de uso generalizado se abarata (por ejemplo, la energía), todas las ramas
tenderán a incrementar su demanda por este insumo.
5) Cuando una rama proveedora de insumos crece rápidamente, el uso de estos insumos
crecerá más rápidamente en los sectores cuyo producto crece más rápidamente. En éstos la
inversión crece y permite la pronta adopción de nuevas tecnologías.
Obviamente que las razones mencionadas por Fontanela y Pulido no pueden mantenidas en el
análisis actual, porque entre los cuarenta y dos años que median entre las dos matrices de
insumo producto de 1969 y la del Banco Central de Costa Rica de 2011; el supuesto de relativa
constancia de los coeficientes técnicos indicados en los numerales anteriores tiene muy poca
posibilidad de lograrse. Pues en ese período, el país logró alcanzar los frutos generados de su
integración al Mercado Común Centroamericano, especialmente por medio de la sustitución de
importaciones, los del modelo diversificado de exportaciones y los del arribo de la participación
creciente de servicios tanto de empresas nacionales como de capital extranjero, hechos que sin
duda alguna han venido dejando rastro a partir de 1969 y hasta el sistema económico actual.
Hay algunas hipótesis que pueden ser externadas a priori y que no requieren un análisis
detenido, pues con la información pública cotidiana suministrada por las instituciones públicas,
son de conocimiento general. Por ejemplo, es de esperar que el sector agrícola haya dejado
espacio para una mayor participación en la estructura de producción relativa al sector industrial
y especialmente del sector servicios en la economía actual. Sin embargo, es importante conocer
qué ramas han liderado los cambios y qué sectores han contribuido a los resultados alcanzados,
cómo ha cambiado la estructura de producción sectorial en el tiempo, previendo un valor
agregado sectorial relativo mayor, motivada por el cambio tecnológico, una productividad
acrecentada del recurso humano, gerencial y laboral, como respuesta a la mayor cobertura y una
calidad superior de la educación nacional y a la participación creciente de empresarios de
empresas transnacionales.
Procedimientos para homologar los modelos IP
En primer lugar, aprovechando la realización del Foro sobre Insumo Producto organizado por el
Banco Central en noviembre del 2014, se realizó un análisis integral de toda la matríz de
insumo - producto de 1969, digitalizando las transacciones intersectoriales totales y las
nacionales, los coeficientes técnicos totales y los locales, y se invirtió la matríz correspondiente
para obtener los parámetros directos e indirectos de la misma y se compararon los valores
brutos de producción de 1969 provistos por el BCCR, con los que resultaron de dividir las
compras nacionales de este año entre los coeficientes técnicos domésticos de la Tabla de Insumo
Producto de 2014 (TIP-2014).
Por otro lado, para cumplir el propósito de comparar las diferencias estructurales de ambos
modelos de forma aceptable y válida, fue preciso realizar algunos ajustes a la información
incluida en ambas tablas, por lo que resulta útil y necesario señalar las principales diferencias
entre ambos sistemas y cómo fueron abordadas, como medio de justificar lo realizado por los
autores de este documento, antes de proceder a realizar la tarea requerida para demostrar si fue
válida la hipótesis de cambio estructural y en qué amplitud, considerando las variaciones en los
coeficientes técnicos totales y en los índices de dispersión y de sensibilidad de Rasmussen, éstos
últimos derivados de las matrices inversas de ambas tablas.
En primer lugar, las matrices originales la TIP-2011 del BCCR como la TIP-1989, están valoradas a
precios básicos de 2011 y de 1969, respectivamente. Es decir las transacciones de compra y
venta entre los sectores económicos están sin los márgenes de distribución (comercio y
transporte) e impuestos indirectos netos, tanto sobre los insumos intermedios como sobre los
productos finales.
Sin embargo, como se anotará más adelante, la valoración a precios básicos de la TIP-1969, se
realizó en pasos sucesivos, extrayendo los impuestos indirectos de las transacciones
intersectoriales; tanto en los flujos de comercio interno como externo; mientras que la TIP-2011
del Banco Central de Costa Rica, los insumos intersectoriales se obtienen completamente
limpios, por medio de cruces de información automáticas entre las instituciones involucradas.
En segundo lugar, los márgenes de transporte y comercialización del MIP-1969, fueron tomados
del modelo de insumo producto mexicano de 1960, lo mismo que los coeficientes técnicos de fila
y columna del sector minas y canteras, dado que la información de las transacciones
intersectoriales de ambas, obtenidas en las encuestas realizadas presentaron muchas
incongruencias. Esto es importante tenerlo en mente más adelante al valorar los resultados
comparativos a obtener de uno y otro modelo respecto de estas actividades. Una diferencia
perceptible entre los márgenes mexicanos y los del país, afectarían en parte los coeficientes
técnicos de otros sectores por su amplia cobertura sectorial; sin embargo, como el resultado
sería de tipo diferencial se presumió que tal inconveniente no sería de gran cuantía.
II. ANTECEDENTES
Al presente, en el país sólo se han construido dos modelos de insumo-producto (MIP) que han
desagregado todos los sectores de la economía costarricense con datos que coinciden con el año
base de los mismos. El primero fue construido en el año 1972 y se le denominó: Modelo de
Insumo-Producto para Costa Rica-1969: Un Ensayo de Economía Interindustrial, el cual sirvió
como requisito parcial para obtener la Tesis de Grado y para optar por la Licenciatura en
Economía en la Universidad de Costa Rica, de Carlos Rodríguez Picado y los suscritos, el cual para
fortuna de los estudiantes fue dirigida con toda propiedad por el Dr. Miguel Rodríguez
Echeverría.
El segundo modelo de insumo-producto fue elaborado por el Banco Central de Costa Rica
mediante un convenio suscrito con el Ministerio de Comercio Exterior (COMEX) y la Promotora
de Comercio Exterior (PROCOMER), el cual partió de un cuadro de oferta y utilización (COU) muy
amplio en cuanto a los sectores agrícolas, industriales y de servicios, el que integra 136
actividades económicas (CII4) y 183 productos (CCP2.0). A partir de esa base de datos, que es lo
recomendado para construir un modelo de tal envergadura, el Departamento de Estadística
Macroeconómica del BCCR elaboró dos matrices simétricas nacionales y totales de 76 y 35
sectores para el año 2011 (Vargas, H., BCCR, 2013). La última fue la tabla utilizada para
compararla con la de 1969.
Con anterioridad y posterioridad a la tabla de insumo-producto de 1989 (TIP-89), hubo otras
aplicaciones de economía interindustrial más simples, porque o no desagregaron el sistema
económico completamente, o no consideraron la información de las transacciones
intersectoriales coincidente con la del año de la TIP respectiva. En el caso de la primera
condición, cabe citar la que elaboró el Departamento de Investigaciones de la Universidad de
Costa Rica para 1959, en la cual se hizo una desagregación de las actividades industriales,
tomando en forma agregada el sector agropecuario y el de servicios, pues su objetivo era
estudiar la estructura industrial del país y proponer medidas de impulso a la industria
manufactura como una forma de acelerar el crecimiento económico y social del país.
En cuanto a las tablas posteriores a la de 1969 se destaca la construida en el año 1973 por el Dr.
Bulmer-Thomas, la cual empleó los coeficientes intersectoriales y otros datos obtenidos de las
encuestas empleadas en la MIP-1969, y los totales de compras y ventas sectoriales de 1968 del
Banco Central de Costa Rica (BCCR), con lo cual efectuó el primer procedimiento en el país,
denominado “Research Adjasting System” o “RAS”, sobre los coeficientes técnicos del MIP-1989,
para obtener la primera matríz de insumo-producto “raseada” de 1968. Con la construcción de
este MIP, Bulmer-Thomas obtuvo su Doctorado en Economía en la London School of Economics
de Inglaterra.
A partir de tal matríz se sucedieron muchos otros “raseos” en el país practicados sobre el modelo
estimado 1968 de Bulmer - Thomas, e inclusive, el Instituto de Investigaciones en Ciencias
Económicas y Sociales (IICE) de la Universidad de Costa Rica (UCR), llevó a cabo una
investigación para actualizar esa tabla, considerando los totales de ventas y compras
intersectoriales lo mismo que las demandas finales sectoriales de las Cuentas Nacionales del
Banco Central de Costa Rica, empleando el procedimiento de “ras”.
Si bien, posteriormente, algunos investigadores en la materia se dirigieron al Banco Central de
Costa Rica (BCCR) y al Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica (MIDEPLAN) para
solicitar la construcción de una matríz actualizada; esto no fructificó sino hasta finales de la
primera década del presente siglo en que, el BCCR y con participación de los patrocinadores
indicados, finalmente se dispusieron a efectuar esa investigación para el 2011, utilizarla, hacerla
disponible al público y servir de base para el análisis y los resultados de la aplicación de políticas
alternativas, por un alto número de especialistas, en su mayoría nacionales, que fueron
presentados en el primer Foro de Insumo- Producto en Costa Rica en noviembre del 2014.
III. PROCESOS PARA HOMOLOGAR LAS TABLAS DE 1989 y 2011
Para lograr que las dos estructuras fueran comparables entre sí, fue preciso, en primer lugar,
determinar las compras intermedias de cada sector de producción a precios de 2011 para los 34
sectores de la TIP-1969; empleando índices de precios, como se explicará más adelante, con lo
cual se obtuvieron las compras intermedias de cada sector y, al dividir éstas por sus coeficientes
domésticos, se obtuvieron los valores brutos de producción sectoriales en millones de colones de
2011.
Una vez que se obtuvo la TIP-1969 en millones de colones de 2011, se procedió a hacer
agregaciones tanto en ella como en la TIP-2011 del Banco Central de Costa Rica (BCCR) hasta
lograr que ambas tablas tuvieran los mismos 20 sectores; contemplando un sector para la
agricultura, silvicultura, caza y pesca; y manteniendo un desglose apropiado para el sector
manufacturero y para algunos sectores de servicios; dado que el MIP-1969, por la poca
importancia de estas actividades en 1969, se incluyeron en este sólo los siguientes sectores:
electricidad, gas y agua; banca, seguros y bienes inmuebles y comercio, transporte y otros
servicios; mientras que la tabla del BCCR 2011; exhibe una pronunciada desagregación, la cual es
congruente con la importancia creciente del sector indicado.
3.1 Estimación de los flujos intersectoriales en precios de 2011.
El proceso de actualización de los flujos intersectoriales de la TIP-1969 se realizó en dos pasos. En
primer lugar, se decidió dividir el espacio temporal existente entre ambas tablas, el primero
terminando 20 años después en 1989 y el segundo hasta concluir en el 2011. Para el primer
período se recurrió al cambio del índice general de precios al consumidor entre 1969 y 1989 y en
el segundo período, se retrotrajo el índice general de precios al productor al año 1989 y su
estructura sectorial, y luego se determinaron los cambios entre 1989 y 2011.
El factor promedio de actualización entre 1969 y 1989 fue de 25,77 y para pasar de los precios de
1989 a 2011 fue de 15,41; destacándose el sector de electricidad, agua y gas, pues en último
período el mismo fue el mayor de todos con un coeficiente amplificador de 21,0. Se obtuvieron
índices con las mismas bases para 1969 y 2011 para el sector agropecuario, el de explotación de
minas y canteras; los productos del tabaco; la construcción y para varios servicios públicos y
privados; sin embargo para el sector manufacturero, el asunto resultó más complejo, porque
sólo se dispuso de índices sectoriales de precios al productor a partir del año 2000. Este y el
tratar de dividir el espacio temporal en dos partes, fueron los motivo principales por los cuales
los índices de precios se estimaron en dos tractos.
Una vez revaloradas las transacciones intersectoriales de la TIP-1969 a precios de 2011, se
procedió a estimar los valores brutos de producción sectoriales (VBPS), mediante el cociente
entre las compras sectoriales nacionales y los coeficientes domésticos. El paso siguiente fue
realizar las agregaciones requeridas en ambas tablas, hasta dejarlas con los mismos sectores,
más que siguiendo criterios técnicos de homogeneidad de los sectores, normalmente requeridos
la teoría de insumo-producto, por lo escaso del tiempo disponible para la investigación, se hizo
por conveniencia, y para pasar rápidamente a realizar los cálculos para estimar los cambios
estructurales en base a la TIP-1969 y la TIP-2011.
Puesto que se empleó la TIP-2011 de 35 sectores, fue preciso presentar un único sector
constituido por la agricultura, silvicultura, caza y pesca; además la TIP-1999 obligó a concentrar la
mayor parte, de un grupo amplio de sectores de servicios del BCCR en sólo tres rubros; puesto
que la mayoría de ellos en la TIP-1989, estaban agregados en un sector denominado “comercio,
transporte y otros servicios”. Otros sectores de la tabla del BCCR que se agruparon en uno sólo
fueron las actividades bancarias, seguros y de bienes e inmuebles. Obviamente, estas
agregaciones resultaron más fáciles puesto que las transacciones estaban ya en colones de 2011.
Por la premura de terminar el trabajo a tiempo en 1972, la TIP-1969 sólo tuvo salidas para las
compras intersectoriales, los coeficientes técnicos nacionales y extranjeros y la tabla de insumos
indirectos e indirectos; por lo que fue necesario obtener otros datos para posibilitar la
comparación de las tablas de insumo-producto mencionadas y aprovechar esa circunstancia para
obtener en forma digital mucha información valiosa para entender y realizar comparaciones
válidas entre los dos sistemas que se han venido considerando.
IV. PRINCIPALES CARACTERISTICAS DE LAS TABLAS DE INSUMO-PRODUCTO DE 1969 y 2011
4.1 La tabla de insumo-producto de 1969
Una característica importante que debe destacarse, con la debida modestia, es resaltar la
magnitud del trabajo que fue realizado para construir la tabla de insumo producto de 1969, dado
que por aquélla época no se disponía ni de “software” ni equipo mecanizado fácil de emplear, e
inclusive el programa para invertir la matríz simétrica de 35 sectores debió ser elaborado por uno
de los estudiantes con la ayuda de otros especialistas en informática. Además, a pesar de las
dificultades señaladas, las transacciones intersectoriales de la TIP-1969 cuenta con los
coeficientes técnicos sectoriales desglosados en: nacionales, centroamericanos y del resto del
mundo.
La tabla de insumo producto de 1969 contiene 35 sectores económicos: 10 de producción
agrícola (café, banano, caña de azúcar, ganadería de leche, ganadería de carne, granos básicos, y
cacao), beneficiado de café, los cuales correspondían con los principales productos de
exportación y consumo interno a fines de la década del sesenta, explotación de minas y canteras
y otros productos agropecuarios; 22 sectores industriales (producción de alimentos, bebidas,
tabaco, textiles, calzado y prendas de vestir, productos de madera y corcho, fabricación de
muebles, productos de papel, imprentas, productos de cuero, productos de caucho y plástico,
productos químicos, coque y derivados del petróleo y carbón, producción de minerales no
metálicos, producción de metales básicos, productos metálicos, producción de maquinaria,
producción de maquinaria eléctrica, producción de equipo de transporte y otros productos
manufactureros); construcción y 3 sectores de servicio (electricidad, agua y gas; banca, seguros y
bienes inmuebles y comercio, transporte y otras actividades de servicios).
A falta de un censo agrícola reciente, la estimación de los coeficientes agropecuarios se hicieron
en base a estudios de costos, denominados por aquel entonces “avíos bancarios”, para los
últimos tres años, elaborados por el Banco Nacional de Costa Rica (BNCR), el Consejo Nacional de
Producción (CNP), la Oficina del Café (OFICAFE), Fertilizantes de Centroamérica (FERTICA), la Liga
industrial de la Caña (LAICA), Asociación Bananera Nacional (ASBANA), Ministerio de Agricultura,
entre otros.
De la misma forma, dada la inexistencia de censos industriales y de servicios actualizados se
recurrió a diseñar y correr sendas encuestas en todo el territorio nacional, lo cual, incluida la
codificación, el análisis de los datos y la obtención de los resultados fueron financiados por la
Agencia Internacional de Desarrollo (AID) de los Estados Unidos. El número de boletas
industriales fue muy pequeño de 317 y de 139 para el sector servicios; sin embargo, se tuvo el
cuidado de contar con un marco muestral adecuado provisto por la Caja Costarricense de Seguro
Social, clasificado por empresas y el número de empleados, lo cual permitió realizar un muestreo
estratificado, considerando simultáneamente los ingresos por ventas y el número de empleados,
para asegurar, en términos estadísticos, la obtención de una muestra industrial representativa.
Los flujos intersectoriales de 1969 se obtuvieron de los datos de ingresos y gastos de las
empresas entrevistadas para el período fiscal, entre el 1 de setiembre de 1968 y el 31 de octubre
de 1969, considerando que el supuesto de coeficientes técnicos constantes era aplicable a ese
pequeño desfase en relación al año completo de 1969. Los márgenes de comercio, de transporte
y de minas y canteras de los distintos de los sectores económicos de la tabla de 1969 fueron
tomados del MIP de México de 1960.
La valoración de las transacciones intersectoriales de la TIP-1999 fue hecha, inicialmente, a
precios de productor, es decir incluyendo los impuestos netos sobre la producción y las materias
primas. A pesar de ello, se pasó a precios básicos mediante varias fases, dado que existían
estadísticas de impuestos diferentes que afectaban a diferentes actividades. Así, con datos
globales provenientes del Ministerio de Hacienda sobre los responsables del impuesto de ventas,
se obtuvieron datos desglosados del tributo para la actividad manufacturera y la agrícola y los
mismos fueron distribuidos entre sus sectores de acuerdo al valor bruto de cada uno de ellos, y
luego se dedujo el monto del impuesto correspondiente de acuerdo al peso en el valor de las
compras intermedias.
En segundo lugar, los impuestos sobre el consumo fueron obtenidos de la Dirección de
Tributación Directa y se aplicaron al sector productivo correspondiente. Los impuestos sobre las
importaciones consiguieron de las listas de comercio exterior del Instituto Nacional de Estadística
y Censos y fue necesario reclasificar los datos para hacerlos compatibles con las entradas de la
tabla.
Finalmente, los otros impuestos indirectos restantes fueron estimados a partir del residuo del
total de los cuantificados por el BCCR y los considerados en los párrafos anteriores. Ese residuo
fue reasignado según los valores brutos de producción. Así, el MIP-1989 partió de una valoración
de precios al productor y al estimar los montos de los impuestos indirectos netos de subsidios
sobre la producción, la valoración final intersectorial de la misma se aproximó a precios básicos;
los tributos indicados fueran ubicados al pie de la tabla de insumo producto de 1969.
Las actividades secundarias fueron reasignadas a los sectores de producción primaria; en este
caso, el tratamiento hecho en la TIP-1969 y el de la TIP-2011 es coincidente en ambas y por lo
tanto se considera que no debe hacerse ningún ajuste previo para confrontarlas, en este sentido,
para la comparación de ambas matrices es inmediata.
4.2 La tabla de insumo-producto de 2011
Las tablas simétricas TIP-2011 constan de 76 y 35 sectores, es decir la primera consta de 41
sectores económicos más que la TIP-1969. Pese a que el sector agrícola, silvicultura, caza y pesca
ha venido perdiendo importancia dentro del producto interno bruto, la primera de ellas consta
de 7 actividades económicas lo mismo que la de la TIP-1969; sólo que las actividades de que
consta cada uno de los sectores son muy diferentes, puesto que la segunda hizo un detalle
amplio para los sectores productivos que en aquella época, eran los responsables de exportar al
resto del mundo lo mismo que a la demanda doméstica; situación que ha venido cambiando al
presente, fuertemente, dado el proceso amplio de diversificación del comercio exterior del país.
Es obvio que, cuanto mayor es el grado de desglose de las actividades del sistema económico,
mayor es el grado de precisión y de confianza de la estructura de costos de cada sector principal,
dado que, en el caso de contarse con sectores de producción de grandes dimensiones, las
estructuras de las de menor tamaño son arrastradas por la influencia de las primeras si no se
hacen ajustes para considerar los efectos sobre los coeficientes técnicos derivados de la
producción conjunta.
Dichosamente, en ambos modelos confrontados, la producción secundaria de productos fue
reasignada al sector de producción principal correspondiente; sólo que en el caso del MIP-1969,
en la mayoría de los casos por falta de tiempo, la reasignación de actividad fue hecha para la
producción secundaria más importante, excepto en el caso de que se dispusiese de la
información requerida en los cuestionarios industriales y de servicios.
4.3 Cambios en las tablas de insumo-producto para su confrontación
Antes de iniciar las transformaciones de las tablas, especialmente las de la de 1969 fue preciso
traer a precios de 2011, los flujos intersectoriales de aquélla, tal y como fue indicado con
anterioridad.
Una vez que la TIP1969 estuvo a precios de 2011, con las compras intersectoriales y los
coeficientes técnicos de tabla original se obtuvieron los valores brutos de producción de cada
sector de la misma, empleando la relación:
SumaComSec69nacj / Coe69nacj = VBPj (1)
en donde:
SumaComSec69nacj = Compras totales del sector j de la TIP 1969
Coe69nacj = Coeficiente técnico doméstico del sector j de la TIP 1969
VBPj = Valor bruto de producción del sector j de la TIP 1969
En vista de que la comparación de la TIP-1969 se efectuó con la TIP-2011 de 35 sectores del
BCCR, las nueve actividades del sector agrícola, silvicultura, caza y pesca de la TIP-1969, se
unieron en un solo sector, proceso que fue reforzado por el hecho de la pérdida de importancia
de este sector en el valor bruto de producción total, puesto que se estimó que era más
importante prestarle mayor atención a los sectores industriales y a los de servicios.
Otros sectores industriales de la tabla de 1969 fueron agregados para homologarlos a los de la
TIP2011; entre ellos se destacan los sectores: alimentos, bebidas y tabaco; textiles y productos
de confección; madera y muebles, productos de papel e impresión, entre otros. Las actividades
que fueron más agregadas en la TIP2011 correspondieron a los servicios; así por ejemplo,
comercio, transporte y otros servicios, incluyendo transporte ligado al turismo, hotelería,
comercio al por mayor y al por menor, servicios comunales, entre otros. Esa clasificación tan
desmenuzada del BCCR, responde a la importancia que ha alcanzado y lo seguirá haciendo el
sector servicios en el futuro; mientras que en el año de 1969, el mismo apenas empezaba a
emerger.
Una vez estimadas las nuevas TIP-1969 y la TIP-2011 homologadas de 20 sectores, se
reestimaron los coeficientes técnicos nacionales de ambas tablas, lo mismo que la resta de las
matrices de identidad respecto de cada matríz de insumos técnicos nacionales y finalmente, se
obtuvieron las matrices inversas de las dos anteriores. Seguidamente, se presentan algunas
metodologías para estimar el cambio estructural partiendo de los coeficientes técnicos locales
como de los coeficientes directos e indirectos derivados de las matrices inversas de una y otra
tabla.
V. METODOLOGÍAS PARA LA COMPARACIÓN DE DOS MODELOS DE INSUMO-PRODUCTO
Dos sistemas económicos se pueden considerar como conjuntos idénticos de coeficientes de
insumo-producto si pueden ser calificados como estructuralmente idénticos y, sistemas con
matrices técnicas diferentes, como estructuralmente diferentes. Cambio estructural, en otras
palabras, es un cambio en la matríz estructural del sistema1.
Una columna de coeficientes, entonces es una descripción cuantitativa detallada de la técnica de
producción utilizada por cada sector, como una receta de sus productos con insumos
específicamente enumerados como ingredientes. La columna de coeficientes de I/O para cada
sector, brinda una descripción estructural completa de toda la economía para un año en
particular. El cambio estructural significa cambio en los coeficientes I/O2.
1 Leontief, W. Studies in the Structure of the American Economy, Oxford University Press, 1953, pag.18
2 Carter, A. A Structural Change in the American Economy; Harvard University Press, 1970.
La columna de los coeficientes de insumo producto para cada sector, brinda una descripción
estructural completa de toda la economía para un año particular. Un cambio estructural debe de
detectarse en términos de variaciones físicas experimentadas por los coeficientes de insumo-
producto, por lo cual es importante partir de coeficientes técnicos obtenidos a partir de
transacciones intersectoriales en términos reales, o lo que sería lo mismo que los coeficientes
técnicos de ambas matrices estén a precios bases iguales. Por esta razón, en la TIP-1969 lo
primero que se hace es computar las transacciones intersectoriales y los valores brutos de
producción sectoriales en colones de 2011.
El análisis de las relaciones intersectoriales se desarrolló en la década de los años cincuenta del siglo XX, directamente relacionado con las políticas de desarrollo y la planificación económica. Fue Albert O. Hirschman, uno de los autores fundamentales de la economía del desarrollo, el que destaca en su obra “La estrategia del desarrollo”, la utilidad de la información que suministran las tablas insumo producto a la hora de cuantificar los efectos de arrastre hacia atrás que produce un sector como demandante (Backwards linkages) y/o hacia delante como proveedor (forwards linkages). La idea central de los estudios sobre las relaciones intersectoriales (Analysis of linkages) es que no todas las actividades económicas tienen la misma capacidad para inducir efectos sobre otras, diferenciándose entre oferentes/proveedores y demandantes/clientes. (Hirschman, 1958).
En el cálculo de las relaciones de interdependencia son utilizados dos enfoques con mayor frecuencia: el enfoque clásico. Este surgió a finales de los años 50 y se vincula a los encadenamientos directos (sin ponderar y ponderados) de Chenery-Watanabe (1958) y los encadenamientos totales (directos e indirectos) a través de los índices de Rasmussen (1956).
5.1 Los coeficientes de Chenery - Watanable: Encadenamientos Directos hacia Atrás y hacia Delante
El objetivo es encontrar un coeficiente de interdependencia interindustrial que permita comparaciones entre sectores para lo cual se cuantifican los eslabonamientos adelante y atrás y se efectúa una clasificación de actividades económicas según los eslabonamientos sean superiores a la media de todas las ramas en su conjunto. Para ello, los autores utilizan la matriz de coeficientes técnicos.
La intensidad de los efectos de arrastre o encadenamientos directos hacia atrás que ejerce un sector j se calcula como:
j
n
i
ij
jX
x 1
, (2)
siendo μj el coeficiente de input de Chenery - Watanabe del sector j, definiendo xij como las compras que el sector j hace de productos de la rama i para llevar a cabo su
producción y Xj el valor de la producción efectiva de la rama j. El coeficiente hacia atrás mide la participación de los insumos intermedios en el valor final de la producción. Estos coeficientes se calculan utilizando el modelo de demanda.
De forma similar, la fuerza del arrastre o encadenamientos hacia adelante se calculan de la siguiente forma:
i
n
j
ij
iX
x
1
, (3)
siendo ωi el coeficiente de output de Chenery-Watanabe del sector i, definiendo xij como las ventas que el sector i realiza a la rama j y Xi el destino total de la producción de la rama i. El coeficiente hacia adelante mide el peso de los destinos intermedios en el total de los empleos de la rama i; Estos coeficientes se calculan utilizando el modelo de oferta.
Hasta el momento se han expresado teóricamente los coeficientes interindustriales que reflejan los eslabonamientos directos sin tener en cuenta el peso que ocupa cada sector en el total de producción generada en la región. Para obtener una serie de coeficientes que reflejen más adecuadamente la realidad económica, se calculan unos encadenamientos directos ponderados, es decir, teniendo en cuenta el tamaño del sector dentro del conjunto. En este documento se ponderan los encadenamientos directos por el valor bruto de la producción (VBP).
Encadenamientos directos hacia atrás µpj y hacia delante wi, ponderados por la proporción entre el valor bruto de producción sectorial bruto (Xj y Xi) respecto al valor bruto de producción total tal (Xj), se definen como:
j
j
j
jX
Xwpj wpj
j
j
ii
X
X (4)
5.2 Indices generados por los cambios en los coeficientes domésticos de las tablas ponderados
por las ventas intermedias.
Para determinar los índices de variaciones en los coeficientes totales de la matríz de 1969 y la de
2011 del BCCR, se definen los siguientes términos:
X2011 = La matríz de insumo-producto de 2011 compatible con los sectores de la TIP-1969 a
precios de 2011.
X1969 = La matríz de insumo-producto de 1969 compatible con los sectores de TIP-2011, valorada
a precios de 2011.
aij = coeficiente técnico de ventas del sector i al sector j de la tabla de insumo-producto
transformada correspondiente a 1969.
bij = coeficiente técnico de ventas del sector i al sector j de la tabla de insumo-producto
homologada del BCCR correspondiente a 2011.
yij = ventas intermedias del sector i al sector j de la TIP- 2011
xij = ventas intermedias del sector i al sector j de la TIP-1969
Aij = Coeficientes de requisitos directos e indirectos de la TIP-1969
Bij = Coeficientes de requisitos directos e indirectos del año 2011
n= número de sectores en consideración
xi, n+1: Demanda final del sector i (i = 1, 2,,,,,n)
xi = Valor bruto de producción del sector i (i = 1, 2, ,,,n)
Los cambios entre los coeficientes técnicos nacionales aij y bij, de las matrices homologadas
TIP-1989 y TIP-2011, se pueden observar, examinando las variaciones absolutas en los
coeficientes entre ambos años, las cuales se indican así:
aij - bij (5)
En el tanto en que los coeficientes técnicos totales de la TIP-2011 respecto a los de la TIP-1969
hayan sido mayores, la diferencia en el término (3) sería negativa. El valor promedio de esos
coeficientes es:
(aij + bij) / 2 (6)
Dividiendo (5) entre (6) se obtiene la variación porcentual de los coeficientes, o sea se
determinarán los índices:
2 (aij - bij ) / (aij + bij) (7)
La relación (7) no aporta mucha información sobre el cambio estructural, ya que para ello es
necesario tomar en consideración los pesos que ejerce cada industria en particular,
especialmente para destacar los que son más importantes, para diferenciar las variaciones
relevantes de las irrelevantes3.
3 Leiva, C., Rodríguez, C. y Vargas, J.. Modelo de Insumo Producto para Costa Rica: Un Ensayo de Economía
Intersectorial (1972).
Siguiendo a Leontief, se puede introducir como elementos ponderadores a las ventas
intermedias promedio. Se relacionan por lo tanto los cambios en la ecuación (8) con la media de
las ventas intermedias de las dos matrices, se obtienen los siguientes índices:
[(aij –bij) / (aij + bij) * ( xij + yij ) (1,2, ,n) (8)
5.3 Cambios en coeficientes técnicos totales comparando columnas de las tablas
Otra manera de comparar los cambios en los coeficientes de insumo totales sería mediante la
confrontación de columnas de ambas matrices. Una columna de TIP-1989 y otra de TIP-2011
transformadas, mostrarían el desglose de los factores de una determinada industria. El cálculo se
puede hacer para cada una de las columnas, tal y como se especifica en la ecuación (9). En la
parte superior se van sumando las variaciones en los coeficientes de insumos divididos por la
suma de ellos y a su vez se van multiplicando por su respectiva ponderación. La expresión
inferior lo que hace es normalizar los resultados, o sea sacar un porcentaje de variación total. La
relación (9) daría un total de índices igual al número de columnas de las tablas, es decir n índices
o valores de Qj.
Q´j = 1/ (1/2 ∑i (xij + yij) * ∑ i (aij – bij) / (aij + bij) * ( xij + rij) (j = 1, 2, n) (9)
Nuevamente, en el tanto los coeficientes técnicos domésticos hayan disminuido entre 1969 y
2011, la expresión (9) arrojaría un resultado positivo y a la inversa si los últimos hubiesen
aumentado respecto a los de 1969.
5.2 Coeficientes de Rasmussen
Paul Rasmussen (1956), en su obra titulada “Studies in Inter-sectorial Relations” utiliza los coeficientes de la inversa de la matriz de Leontief para calcular los efectos totales (directos e indirectos) de una industria sobre las demás, observando, por lo tanto, cambios puramente tecnológicos (en los coeficientes técnicos).
Indices de poder de dispersión y de sensibilidad de Rasmussen.
Para poder conocer los efectos relativos de “arrastre” hacia atrás o hacia delante de un sector, con independencia de su tamaño, Rasmussen propone el cálculo de los índices de Poder y Sensibilidad de Dispersión. Según, lo dicho por el autor, el poder de dispersión “describe la extensión relativa sobre la que un aumento de la demanda final de los productos de la industria j se dispersa a través del sistema de industrias”. (Fanjul y Rodríguez, 2000)
Así, define el índice de poder de dispersión de j (IPDj) como:
n
j
ij
n
i
n
i
ij
jj
r
r
n
nUIPD
11
1
2
. 1
1
, (10)
siendo n el número de ramas y ijr el elemento genérico de la matriz inversa de Leontief
calculada a partir de los coeficientes de producción interiores. Si U.j>1 significa que la rama j tiene poder de dispersión, o capacidad de arrastre, superior a la media.
Índice de sensibilidad de dispersión de i (ISDi):
n
i
ij
n
j
n
j
ij
ii
r
r
n
nUISD
11
1
2
. 1
1
, (11)
Siendo n el número de ramas y ijr el elemento ij de la matriz inversa de Leontief calculada
a partir de los coeficientes de producción interiores. Igual que en el caso anterior, si Ui.>1 indica que la rama en cuestión es arrastrada de forma superior a la media y tendrá que incrementar su producción más que otras ramas para soportar un incremento dado en la demanda.
Rasmussen, resalta la importancia de incorporar un elemento de ponderación a los índices de poder y de sensibilidad de dispersión para medir la diferente importancia de las ramas en la demanda final. Esto sucede dado que dichos índices han tenido unas fuertes críticas al tratarse de medias no ponderadas, es decir, industrias con índices iguales pueden no afectar de igual forma (o ser afectadas) al resto del sistema debido, a que todas las industrias no tienen el mismo peso sobre la demanda final y, también, una industria puede tener un alto índice de dispersión pero muy concentrado en un reducido número de industrias. Por estas razones, estos índices se han ido perfeccionando a través de los índices ponderados.
Si se entiende que un incremento en el valor bruto de la producción se reparte entre las ramas en función de su participación en la misma, se tendrá que un incremento igual a n se distribuirá entre las ramas, para la rama j, de la siguiente forma:
j
jD
jD
X
nXP
, (12)
donde: P es la ponderación, el numerador la participación de j en el VBP (para un total de n ramas) y el denominador es el total del VBP. Multiplicando los índices IPD (U.j) y ISD (Ui.) por estas ponderaciones se destaca mejor el poder de dispersión o la sensibilidad de las diferentes ramas. (Fernández, 2001)
Indices de poder de dispersión y de sensibilidad de Rasmussen.
Los índices de poder de dispersión y de sensibilidad de Rasmussen se emplean para poder conocer los efectos relativos de “arrastre” hacia atrás o hacia delante de un sector, con independencia de su tamaño. Según, lo dicho por el autor, el poder de dispersión “describe la extensión relativa sobre la que un aumento de la demanda final de los productos de la industria j se dispersa a través del sistema de industrias”; mientras que los índices de sensibilidad detectan el arrastre relativo hacia adelante por aumento de la demanda final, hecho que obliga a emplear la matríz inversa de Leontief.
Así, define el índice de poder de dispersión de j (IPDj) como:
Hay varios procedimientos que se pueden aplicar para determinar los cambios estructurales y/o
tecnológicos entre dos tablas de insumo-producto. Aquí, se mostrarán algunos y de los mismos,
sólo se obtendrán resultados para algunos de ellos, dado el tiempo disponible reservado para la
preparación del artículo.
5.2.1 Obtención de los flujos intersectoriales de la TIP-1969 para satisfacer la demanda sectorial
final del año 2011
El cambio estructural puede cuantificarse más apropiadamente, considerando la demanda final
sectorial de un año, en este caso, la de 2011, y empleando la estructura sectorial de 1969 a
precios de 2011, para determinar los flujos intersectoriales, y los requerimientos de los factores
de producción trabajo, capital, entre otros, en base a la última tabla para satisfacer esa demanda
final de 2011. Partiendo de las ecuaciones fundamentales del sistema se tiene lo siguiente:
X1969 = ( I – A )-11969 Y1969 (13)
X2011 = ( I – A )-12011 Y2011 (14)
en donde
X = vectores de producción sectorial bruto
A = estructura sectorial de las tablas
Y = demandas finales sectoriales
Dadas las matrices A para 1969 y 2011, para estimar un cambio estructural entre estas dos
fechas se puede emplear la matríz inversa de 1969 para satisfacer la demanda final de 2011. Por
lo tanto, se tiene el siguiente sistema:
X1969,2011 = ( I – A )-11969 Y
2011 (15)
X1969,2011 = Vector de producción bruto para suplir la demanda final sectorial de 2011,
empleando la estructura de producción de 1969.
A1969 = matríz de coeficientes técnicos del MIP1969
Y2011 = Vector de demanda final sectorial de 2011
Al mantener el nivel de la demanda final sectorial de 2011, pero usando la matríz estructural de
1969, se pueden comparar las transacciones intersectoriales de la TIP-2011 y las de la TIP-1969
requeridas para satisfacer la demanda final de 2011. También se podría comparar el vector de la
producción bruta total X1989 y X2011. La diferencia entre las transacciones intersectoriales y entre
los dos vectores evidenciaría un cambio de estructura4.
VI. RESULTADOS DE LA APLICACIÓN DE LAS METODLOGIAS
6.1 Los coeficientes de Chenery - Watanable: Encadenamientos Directos hacia Delante
Los coeficientes de Chenery – Watanable tanto de encadenamientos hacia atrás y hacia adelante calculados para las tablas de insumo-producto analizadas es necesario para percibir la ocurrencia de cambios estructurales entre 1969 y 2011. Por razones de tiempo, sólo se estimarán los encadenamientos hacia adelante los simples y los ponderados por la participación del sector correspondiente respecto al valor bruto de producción total y se mostrará una salida parcial, pero la de todos los sectores se exhibe el Anexo No. 2.
4 Del Valle, J. (1990)
Cuadro No. 1
Factores de arrastre hacia delante de los sectores productivos de 1969 y 2011
Sectores Electricidad, gas y agua
Comercio, y otros servicios
Banca, seguros e inmuebles
1969 2011 1969 2011 1969 2011
Agricultura, Caza, Silvicultura y Pesca 2,1371543 1,8283696 0,1146403 0,0980766 0,4663336 0,3989558
Explotación de minas y canteras 0,0000000 0,1174480 0,0000000 0,0063001 0,0000000 0,0256275
Alimentos, Bebidas y Tabaco 0,3355388 1,0565065 0,0179988 0,0566726 0,0732156 0,2305329
Textiles y productos textiles 0,0550451 0,1644205 0,0029527 0,0088198 0,0120110 0,0358771
Pieles, Cuero y Calzado 0,0130411 0,0091301 0,0006995 0,0004898 0,0028456 0,0019922
Madera y Productos de Madera 0,2236648 0,1282998 0,0119977 0,0068822 0,0488043 0,0279954
Papel, Pulpa de Papel y Publicaciones 1,2682920 0,6091942 0,0680331 0,0326781 0,2767452 0,1329280
Coque, refinación del petróleo 0,3209562 1,0950076 0,0172166 0,0587379 0,0700336 0,2389340
Sustancias y productos químicos 0,8010362 0,8712659 0,0429688 0,0467360 0,1747885 0,1901129
Caucho y Plásticos 0,3121186 0,7737670 0,0167425 0,0415061 0,0681052 0,1688383
Del Cuadro No. 1 se aprecia que el sector agropecuario y el de papel e imprenta tenían más arrastre hacia adelante sobre la actividad electricidad, gas y agua en el año 1969 en relación al 2011. Lo mismo ocurre con el sector de comercio, transporte y otros servicios dónde la repercusión hacia adelante fue superior en 1969 que en el año 2011. Por el contrario, se intensifican dichos efectos sobre explotación de minas y canteras; alimentos bebidas y tabaco y la producción de coque y refinación de petróleo. Esta última actividad, que representaba cerca del 30%de la oferta total de hidrocarburos, al presente no existe y sólo prevalece la distribución al por mayor y al por menor de aquéllos.
En banca, seguros e inmuebles su efecto ofertista se destaca en las ramas de producción: explotación de minas y canteras; alimentos, bebidas y tabaco y en textiles y productos textiles.
6.2 Los coeficientes de Chenery - Watanable: encadenamientos directos hacia adelante ponderados.
Los coeficientes de arrastre hacia atrás y hacia adelante directos se pueden ponderar para contemplar el peso de la actividad la cual se originan. Dado que, en el Cuadro No. 1 se estimaron los segundos sin ponderar, en este apartado se calcularán ambos para las dos tablas de insumo-producto 1969 y 2011.
Cuadro No. 2
Los hallazgos más importantes se encuentran en la provisión de pieles, cuero y zapatos al sector de electricidad, gas y agua lo mismo que explotación minas y canteras y en la producción de coque. El sector comercio, transporte y otros servicios gana participación en el 2011 en los casos de minas; alimentos, bebidas y tabaco, textiles y productos textiles y coque y refinación de petróleo. En banca, seguros y bienes inmuebles tienen efectos hacia adelante especialmente en los casos de: minas; alimentos, bebidas y tabaco; coque y producción de derivados del petróleo. Por lo tanto, los ganadores en los sectores oferentes incluidos en el Cuadro No. 2 son especialmente: minas y canteras, bebidas y tabaco y en la rama de coque y refinación de petróleo.
6.3 Cambio en los coeficientes por columnas
El Cuadro No. 3 contiene los principales cambios en los coeficientes de insumo-producto
totales de las matrices de 1969 y 2011, destacándose los presentes en las siguientes
actividades productivas: Agricultura, silvicultura, caza y pesca, pues sus requerimientos por
unidad de producción de su propio sector disminuyó, ya que la fórmula (8) que define el
cambio estructural por columnas tiene en el numerador la diferencia entre los coeficientes de
1969 menos los del 2011. Algo similar ocurre con los requerimientos del sector agrícola por
parte de la rama de producción: Alimentos bebidas y tabacos y los de Sustancias y productos
químicos por parte del sector Alimentos, bebidas y tabacos.
Por el contrario, los coeficientes técnicos totales del sector Agricultura, silvicultura, caza y
pesca, se reducen apreciablemente con relación a las ramas productivas Alimentos, bebidas y
tabaco y Sustancias y productos químicos. En el sector de Explotación de minas y canteras, no
ocurre nada extraordinario; mientras que hay evidencia de cambio estructural también las
adquisiciones del propio sector de Alimentos, bebidas y tabaco. En el Anexo No. 3 se incluyen
Electricidad, gas y agua Comercio y otros servicios Banca, seguros e inmuebles
1969 2011 1969 2011 1969 2011
Agricultura, Caza, Silvicultura y Pesca0,1842454 0,1576249 0,0127097 0,0108733 0,4663336 0,398955806
Explotación de minas y canteras0,0000000 0,0101253 0,0000000 0,0006985 0,0000000 0,025627507
Alimentos, Bebidas y Tabaco0,0289270 0,0910821 0,0019955 0,0062831 0,0732156 0,230532937
Textiles y productos textiles0,0047455 0,0141748 0,0003274 0,0009778 0,0120110 0,035877055
Pieles, Cuero y Calzado 0,0011243 0,0007871 0,0000776 0,0000543 0,0028456 0,001992214
Madera y Productos de Madera y Corcho0,0192823 0,0110608 0,0013301 0,0007630 0,0488043 0,027995409
Papel, Pulpa de Papel, Impresiones y Publicaciones 0,1093403 0,0525190 0,0075426 0,0036229 0,2767452 0,132928038
Coque, productos de la refinación del petróleo y combustible nuclear0,0276698 0,0944013 0,0019087 0,0065120 0,0700336 0,238934
Sustancias y productos químicos0,0690578 0,0751124 0,0047638 0,0051814 0,1747885 0,190112873
Caucho y Plásticos 0,0269079 0,0667069 0,0018562 0,0046016 0,0681052 0,168838305
Encadenamientos hacia adelante ponderados
Sectores
los índices de cambios de los coeficientes técnicos totales para todos los 20 sectores
productivos.
Cuadro No. 3
Determinación de cambio estructural entre 1969 y 2011 por columnas
No.
Sectores
Agricultura, Caza,
Silvicultura y Pesca
Explotación de minas y canteras
Alimentos,
Bebidas y Tabaco
1 Agricultura, silvicultura, caza y pesca 470,6 0,1 828,0
2 Explotación de minas y canteras -4,8 #¡DIV/0! -9,7
3 Alimentos, bebidas y tabaco -221,8 0,012 -1.312,3
4 Textiles y productos textiles -12,1 0,041 -35,6
5 Pieles, cuero y calzado 1,8 0,010 -0,2
6 Madera y productos de madera y corcho 82,3 0,009 -19,2
7 Papel, pulpa de papel, impresiones y publicaciones -107,5 0,085 -66,6
8 Coque, productos de la refinación del petróleo y combustible nuclear -25,9 0,394 -396,6
9 Sustancias y productos químicos -275,2 -2,155 1.301,1
De acuerdo con las pruebas realizadas se puede inferir que efectivamente han ocurrido
cambios estructurales en la economía costarricense; quedando algunas otras pruebas que
serán efectuadas en el resto de la semana siguiente, da tal forma que se seleccionen entre
todas las más importantes.
VII. BIBLIOGRAFIA
Aroche, F. El análisis de la innovación tecnológica, el análisis de redes y el modelo de
insumo-producto, Versión preliminar, UNAM, México, 2013.
Carter, A. A Structural Change in the American Economy; Harvard University Press, 1970.
Carter, A. and Brody, A. Applications of Input- Output Analysis. Noth Holland, Volume II, 1970.
Fontanela, E y Pulido, A. Input-Output, Tecnical Change and Long Waves, en Peterson, W.(ed.).
Advances in Input-Output Analysis, Oxford University Press, Oxford, pp. 137-148.
Fontela, E. y A. Pulido (1991): “Input-Output, Technical Change and Long Waves”, en Peterson,
W. (ed.), Advances in Input-Output Analysis, Oxford University Press, Oxford, pp. 137-148.
Leiva, Rodríguez y Vargas. Modelo de Insumo Producto para Costa Rica: Un Ensayo de Economía Intersectorial (1972). Universidad de Costa Rica. Tesis de Grado, 1972. Leontief, W. Studies in the Structure of the American Economy, Oxford University Press, 1953, pag.18. ---------------, The Structure of the American Economy 1919-1929. Oxford University Press, 1951. Rasmussen, P. Relaciones Intersectoriales, Editorial Aguilar, 1963.
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