PROVERBIOS
DE SALOMÓN CON COMENTARIOS
✡ Biblia Versión Israelita Nazarena - VIN
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INTRODUCCIÓN
El vocablo hebreo para «proverbio» (mashal) significa «comparación» y se usa para
designar símiles, parábolas y proverbios propiamente dichos, es decir, sentencias
breves, ya sea de la llamada «sabiduría popular» o, como aquí, de la sabiduría
divinamente inspirada. Según 1 R. 4:32, Salomón compuso tres mil proverbios. La
mayoría de los que se contienen en este libro fueron compuestos por él,
concretamente las secciones 1:1 - 9:18; 10:1 -22:16 y 25:1 - 29:27, aunque los de
esta última sección fueron seleccionados por el rey Ezequías (25:1). El cap. 30 es
atribuido a un tal Agur, y el 31 a Lemuel o Muel, de los que nada sabemos. El libro
toca los aspectos más interesantes de la vida humana. El primero y principal de los
proverbios se halla en el v. 7 del cap. 1, un eco de Job 28:28, que ya vimos.
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✡ PROVERBIOS 1 ✡
En este capítulo tenemos:
1. El título del libro, que muestra el autor y el objetivo (vv. 1-6).
2. El primer principio, encomendado a nuestra consideración (vv. 7-9).
3. Una precaución necesaria acerca de las malas compañías (vv. 10-19).
4. Una representación fiel y viva de los razonamientos de la sabiduría con los hombres, y de
la ruina segura que les espera a los que se hacen el sordo a esos razonamientos (vv. 20-33).
1 Los proverbios de Salomón hijo de David, rey de Yisrael:
2 Para aprender sabiduría y disciplina; para entender palabras de discernimiento;
3 para adquirir disciplina para el éxito, la rectitud, la justicia, y la equidad;
4 para dotar al inexperto de astucia, al joven de conocimiento y previsión.
5 El sabio, al oírlas, obtendrá más sabiduría; el hombre de discernimiento
aprenderá a ser hábil;
6 para entender proverbio y adivinanza, las palabras de los sabios y sus enigmas.
✡ Comentario (Versículos 1-6)
1. Quién escribió estos dichos sabios y sentenciosos (v. 1). Leemos que son «Proverbios
de Salomón», cuyo nombre significa «pacífico». David, cuya vida estuvo llena de
fatigas y aflicciones, escribió un libro de devoción (Salmos), pues, como escribe
Santiago (5:13): «¿está alguno entre vosotros afligido? Haga oración». Salomón, que
llevó una vida pacífica, escribió un libro de instrucción, porque cuando las iglesias
tenían paz eran edificadas (Hch. 9:31). En tiempo de paz debemos aprender, y enseñar
a otros, lo que debemos practicar en tiempo de aflicción. Era hijo de David. Había sido
bendecido con una buena educación, y se había orado por él (Sal. 72:1); efecto de ello
era su sabiduría y sus buenos servicios. Fue rey de Israel, única vez que se le llama así
en los libros sapienciales (comp. con Ec. 1:1). Todo el mundo deseaba ir a ver a
Salomón para oír su sabiduría (1 R. 10:24), la cual era mayor que la de todos los
orientales (1 R. 4:30).
2. Estos proverbios fueron escritos (vv. 2-4) para uso y beneficio de todos. Este libro nos
ayudará: (A) Para formarnos nociones correctas de las cosas y tener ideas claras y
distintas, a fin de que sepamos cómo hablar y actuar con prudencia. (B) Para distinguir
entre la verdad y la falsedad, el bien y el mal. (C) Para ordenar rectamente nuestra
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conducta (v. 3). Este libro nos dará el conocimiento que puede disponemos para dar a
cada uno lo suyo, a Di-s lo que es de Di-s, en todos los ejercicios de devoción, y a los
hombres lo que a los hombres se debe.
3. Son útiles para todos, pero están destinados especialmente: (A) A los simples (v. 4), es
decir, a los que se dejan llevar fácilmente por las opiniones de otros y, por tanto, son
presa de la indecisión. Con estos proverbios adquirirán la instrucción necesaria para ser
sagaces y evitar pecados en los que la ignorancia juega gran papel. (B) A los jóvenes.
La juventud abunda en vitalidad, pero también en juicios precipitados, faltos de la
necesaria ponderación. (C) También las sabios aprenderán aquí, pues el verdadero
sabio es el que sabe que no sabe nada como se debe saber (comp. con I Co. 8:2). Si
estudian este libro, aumentarán su saber (v. 5) y adquirirán, si ya tienen alguna
discreción, destreza; el vocablo hebreo indica experiencia en manejar el timón de un
barco; en otras palabras: saber qué curso tomar en cada ocasión y circunstancia de la
vida. (D) Todos ellos aprenderán (v. 6) a entender proverbios, etc., es decir, a
interpretar los diferentes estilos y géneros literarios y las llamadas «figuras de dicción».
7 El respeto a es el principio del conocimiento; los necios desprecian la
sabiduría y la disciplina.
8 Hijo mío, hazle caso a la disciplina de tu padre, y no olvides la instrucción de tu
madre;
9 pues ellas son una hermosa guirnalda en tu cabeza, un collar en tu cuello.
✡ Comentario (Versículos 7-9)
En estos versículos, expone Salomón el principio y fundamento de todo el libro, que puede
resumirse en dos frases: temer a Di-s y honrar a los padres.
1. «El principio del conocimiento (lit.) es el temor de » (v. 7). La base de toda
sabiduría verdadera es el temor de Di-s. La frase aparece, con ligeras variantes, en Job
28:28; Sal. 111:10; Pr. 9:10 y Ec. 12:15, por donde vemos que «conocimiento» y
«sabiduría» son, a este respecto, sinónimos, aunque «conocimiento» expresa una
experiencia íntima, personal y práctica, no meramente intelectual, propia de la
«sabiduría» que es de lo alto (Stg. 3:12), equivalente al «saber de salvación» de 2 Ti.
3:15. La frase «temor de » ocurre 15 veces en este libro y, como ya sabemos,
significa respeto o reverencia, que incluye acatamiento u obediencia. Así pues, el
verdadero sabio comienza por respetar y obedecer a Di-s. Por contraste (v. 7b) los
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necios (hebreo, evilim), «los mentalmente tontos y moralmente irresponsables» -como
comenta el Dr. Ryrie, desprecian la sabiduría y la corrección (lit.).
2. A este principio sigue el honor a los padres, el cual se manifiesta primordialmente en la
atención que se presta a los consejos y avisos de los progenitores (v. 8). Notemos aquí
tres detalles sumamente importantes e interesantes: (A) Salomón supone aquí que los
padres cumplen con su deber de enseñar y corregir a sus hijos; y, en el decurso del
libro, va a insistir en la necesidad de cumplir con este deber. (B) Exhorta a los hijos a
escuchar (a someterse y agradecer) la corrección (reprensión, disciplina, etc.) del padre.
El vocablo hebreo (musar) es el mismo del final del v. 7 y corresponde al griego que se
traduce por «corrección» o «disciplina» en Ef. 6:4 y se refiere allí a los «padres»
(pater), no «progenitores» indistintamente. (C) también les exhorta (v. 8b) a no
descuidar (lit. dejar) la instrucción (hebreo, Torá -¡primera ley!) de la madre. Es
interesante observar que, mientras las leyes de los persas, los griegos y los romanos
mandaban que los hijos respetasen los avisos y preceptos de los padres, la ley de Di-s
manda que se respeten los avisos, instrucciones, y «preceptos» de las madres. Y es de
notar que, en realidad, la madre es la verdadera educadora de los hijos, la que les
moldea el carácter, mientras el padre les moldea el criterio: la «fijeza de la mente»,
equivalente literal de «amonestación», en Ef. 6:4. Once veces más aparecen juntos
padre y madre, en este libro, en esta tarea educadora. Y en dos lugares más (29:15 y 31;
1), sólo se menciona a la madre. «Hijo mío», en Proverbios, tiene el sentido de
«discípulo».
3. Con dos bellas comparaciones (v. 9) describe Salomón el buen resultado que al joven
se le seguirá de prestar atención a la corrección de su padre y a la instrucción de la
madre: guirnalda que agracia la cabeza y collar que adorno el cuello. Comenta J. J.
Serrano: «Las comparaciones son apropiadas, pues no es sólo la sabiduría el mejor
ornato de la persona, ciñendo la parte más noble del hombre, su entendimiento,
representado por la frente, sino que adorna también la voluntad simbolizada por el
corazón, sobre el que descansa el collar».
10 Hijo mío, si los pecadores te seducen, no cedas;
11 si te dicen: ―Vamos a poner una emboscada para derramar sangre, vamos a
asechar al inocente (sin motivo),
12 como la Fosa, vamos a tragárnoslos vivos; enteros, como los que bajan al Hoyo.
13 Obtendremos todo tesoro precioso; llena-remos nuestras casas de botín.
14 Echa tu suerte con nosotros; tendremos todos una bolsa común‖.
15 Hijo mío, no salgas con ellos; no pongas tus pies en la senda de ellos.
16 Porque sus pies corren al mal; se apresuran a derramar sangre.
17 A los ojos de cualquier ave el nido tendido no significa nada.
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18 Pero ellos ponen emboscadas a su propia sangre; se ponen en asecho de su
propia vida.
19 Tal es la suerte de todos los que persiguen ganancia injusta; le quita la vida a su
dueño.
✡ Comentario (Versículos 10-19)
Aquí Salomón da otra regla general a los jóvenes para que tengan mucho cuidado con las
malas compañías. Los pecadores gustan de tener cómplices en el pecado. Los ángeles que
cayeron fueron tentadores casi tan pronto como fueron pecadores. Los perversos (v. 10) no
amenazan ni discuten, sino que seducen con lisonjas. Por eso les dice Salomón a los jóvenes:
«No consientas, porque, aunque te seduzcan, no pueden forzarte». Para corroborar este
consejo que les da:
1. Presenta los falaces argumentos que los perversos usan en sus seducciones, a fin de
engañar a las almas inconstantes. Especifica a los bandidos que hacen cuanto pueden
para atraer a otros a su banda (vv. 11-14). «Ven con nosotros (v. 11); deseamos tu
compañía». Al principio, parece que se contentan con eso; pero pronto apuntan más
alto (v. 14): «Echa tu suerte entre nosotros; corramos los mismos riesgos y tengamos
las mismas ventajas; tengamos todos una misma bolsa», la del dinero o, más probable,
como sugiere J.J. Serrano, la de los dados (paralelismo con la primera parte del v.).
Tienen sed de sangre y odian a los buenos, porque con su honradez les avergüenzan y
condenan. Con el fin de enriquecerse (v. 13), no reparan en medios: «Preparan
asechanzas» (alevosía y premeditación) para matar sin motivo (capricho y saña) al
inocente (por tanto, homicidio con todas las agravantes). Llaman a las riquezas (v. 13)
«preciosa sustancia» (lit.), cuando no son ni sustancia ni preciosa; son una sombra y
son vanidad, especialmente cuando se adquieren por medio del robo (Sal. 62:10).
Comp. el v. 12 con Nm. 16:30-33.
2. Muestra lo pernicioso de tal conducta (v. 15): «Hijo mío, no vayas de camino con ellos;
aparta tu pie de sus veredas; no sigas su ejemplo, no hagas lo que hacen ellos.
Considera su camino (v. 16): Sus pies corren hacia la maldad, a lo que desagrada a Di-s
y es dañoso a la humanidad, pues van presurosos a derramar sangre». El camino del
vicio es como un plano inclinado hacia abajo, en el que no sólo no se puede parar, sino
que cada vez se cae más hondo y más deprisa mientras se continúa en él. Se les dice
que tal camino conduce a la perdición, y, sin embargo, persisten en él. El v. 17 ha
desconcertado a muchos comentaristas, pero, a la vista del contexto posterior, el sentido
es el siguiente: Un ave evita, por instinto, caer en la red o lazo que se tiende ante sus
ojos, pero a estos perversos les ciega de tal modo su codicia, que no se dan cuenta de
que se meten ellos mismos en el peligro.
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20 La sabiduría clama en las calles, levanta su voz en las plazas.
21 En la esquina de las calles transitadas llama; a la entrada de los portones, en la
ciudad, habla:
22 ―¿Hasta cuándo, inexpertos, van a estar amando la inexperiencia; ustedes,
burladores, a estar burlándose; ustedes, tontos, a estar odiando el conocimiento?
23 Ustedes son indiferentes a mi reprensión; ahora les voy a decir lo que pienso, les
voy a comunicar mis pensamientos.
24 Como ustedes me rechazaron cuando llamé, y no hicieron caso cuando extendí
mi mano,
25 menospreciaron todo mi consejo, y no quisieron oír mi reprensión,
26 yo me reiré de su calamidad, y me burlaré cuando venga el terror sobre ustedes,
27 cuando venga el terror como un desastre, y llegue la calamidad como un
torbellino, cuando el problema y la angustia venga sobre ustedes.
28 Entonces ellos me llamarán pero no responderé; me buscarán pero no me
hallarán.
29 Porque odiaron el conocimiento, y no escogieron el respeto a ;
30 rechazaron mi consejo, y despreciaron todas mis reprensiones,
31 comerán el fruto de sus caminos, y se hartarán de sus propios consejos.
32 La tranquilidad de los inexpertos los matará, y la complacencia de los tontos los
destruirá.
33 Pero el que me escucha habitará en seguridad, imperturbable por el terror de la
calamidad‖.
✡ Comentario (Versículos 20-33)
Después de mostrar cuán peligroso es prestar oídos a las tentaciones de Satanás, muestra
ahora Salomón cuán peligroso es no prestar oídos a los llamamientos de Di-s.
1. Por medio de quién nos llama Di-s? -Por medio de la sabiduría, la cual clama en las
calles, alza su voz, etc» (vv. 20, 21). El hebreo está en plural: «sabidurías», porque la
sabiduría de Di-s es, no sólo infinita, sino también «multiforme» (Ef. 3:10). Di-s habla
a los hombres por medio de todas las clases de sabiduría: (A) El entendimiento humano
es sabiduría, la luz y la ley de la naturaleza, los poderes y las facultades de la razón y el
oficio de la conciencia (Job 38:36). (B) El gobierno civil es sabiduría, cuyos
vicegerentes son los magistrados. (C) La revelación divina es sabiduría; todos sus
dictados, todas sus leyes, son sabios como la sabiduría misma. Por medio de las
Escrituras, de sus siervos los profetas y de todos los ministros de su palabra, Di-s
8
declara a los pecadores sus sabias enseñanzas, promesas, advertencias y amenazas. (D)
El Mesías es la sabiduría, pues en él están escondidos todos ¡los tesoros de la sabiduría
y del conocimiento (Col. 2:3), y él es el centro de la revelación divina; no sólo la
Sabiduría misma (V. Lc. 7:35), sino el Verbo de Di-s, la Palabra eterna, por medio de la
cual nos habla Di-s de forma definitiva y exhaustiva (He. 1:1-3), y a quien ha dado todo
juicio (Jn. 5:22).
2. La sabiduría clama: (A) Muy públicamente: en las calles, en las plazas, en los lugares
más concurridos, en las entradas de las puertas de la ciudad (vv. 20,21), para que todo
el que tenga oídos pueda oír. La filosofía humana se enseñaba en colegios y
universidades, pero la sabiduría divina se enseña en los lugares donde concurren, no
sólo los sabios, sino el pueblo llano. (B) Muy patéticamente: clama, grita, con toda
claridad y con todo afecto. Di-s desea ser oído bien y por todos, pues desea que todos
se salven y lleguen al conocimiento de la verdad (1 Ti. 2:4).
3. Cuál es el llamamiento de Di-s por medio de la sabiduría: (A) Reprende a los pecadores
por su necedad y por su obstinación (v. 22). Los simples aman la simpleza. Obran
neciamente y se gozan en sus necedades malvadas como quien se halla en su propio
elemento. Los insolentes se complacen en la insolencia y hacen burla de todo lo que se
les dice. Los insensatos aborrecen el conocimiento. Estos son los peores, pues se niegan
a aprender lo que más les conviene. Di-s desea la conversión de los pecadores y no su
ruina; por eso, espera paciente (¿hasta cuándo... ?»), dispuesto a razonar con ellos (Is.
1:18). (B) Les invita a arrepentirse y volverse sabios (v. 23): «Volveos, es decir,
convertíos, a mí reprensión: Recobrad la sanidad de juicio (comp. Lc. 15:17) y volveos
a Di-s y a vuestro deber, y viviréis. Los que aman la simpleza se encuentran en
impotencia moral de cambiar su mentalidad y su conducta; no se pueden convertir por
su propio poder. Por eso les dice Di-s: «He aquí yo derramaré mi espíritu sobre
vosotros (comp. Jl. 2:28); poneos a disposición del Espíritu Santo, y la gracia de Di-s
obrará en vosotros el querer y el hacer lo que, sin esa gracia, nunca podríais llevar a
cabo. El Espíritu de Di-s usa como medio de la gracia la palabra de Di-s: «Yos daré a
conocer mis palabras» (v. 23c), es decir, no sólo os las diré, sino que os las haré
entender. (C) A los que continúan obstinados en rehusar los medios de gracia les lee la
sentencia (vv. 24-32). El crimen es, en pocas palabras, rechazar el ofrecimiento de la
gracia y rehusar someterse a las condiciones del Evangelio, lo que les habría salvado de
la maldición de la ley de Di-s y del dominio de la ley del pecado. El Mesías extiende
los brazos para ofrecerles el perdón, pero no hubo quien atendiese (v. 24). Desecharon
su consejo y no aceptaron su reprensión (v. 25). Esto se repite en el v. 30. No admiten
el gobierno de la razón ni el de la revelación, ya que aborrecieron la sabiduría y no
escogieron el temor de (v. 29). Por no recibir el beneficio de la misericordia de
Di-s cuando les fue ofrecido, caerán justamente víctimas de su justicia (29:1). Les
llegará la desgracia (v. 26) que temían; vendrá como un torbellino (v. 27) y les tomará
por sorpresa, pues vendrá de repente. Los vv. 26-28 han de entenderse a la luz del
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contexto posterior. No significan que Di-s niegue su auxilio a quien lo pide, sino que, al
obstinarse en no escuchar la voz de Di-s, comerán el fruto de lo que sembraron, pues,
como las vírgenes de Mt. 25:10-13, hallarán cerrada la puerta, lo cual es una figura para
dar a entender que, con la muerte, se acaba el tiempo de la oferta de la gracia. (D)
Concluye asegurando que los que se someten a las instrucciones de la sabiduría
disfrutarán de paz y tranquilidad (v. 33). Estarán bajo especial protección del Cielo, de
forma que nada les producirá verdadero daño. No sólo están libres de desgracia, sino
también del temor a la desgracia.
10
✡ PROVERBIOS 2 ✡
En este capítulo, Salomón describe los buenos resultados de seguir las instrucciones de la
sabiduría.
1. Les muestra a los que están dispuestos a ser instruidos que, si usan los medios del
conocimiento y de la gracia, obtendrán de Di-s el conocimiento y la gracia que buscan (vv.
1-9)
2. Les muestra también las ventajas que se les seguirán con esto: 1. Serán preservados de las
redes y lazos de los malvados (vv. 10-15) y de las malas mujeres (vv. 16-19). 2. Serán
guiados y guardados en el camino de los buenos (vv. 20-22).
1 Hijo mío, si aceptas mis palabras y atesoras mis mandamientos;
2 si pones tu oído atento a la sabiduría y tu mente abierta al discernimiento;
3 si llamas al entendimiento y voceas al discernimiento,
4 si lo buscas como se busca la plata y vas en su búsqueda como tesoros,
5 entonces entenderás el respeto a y alcanzarás conocimiento de Di-s.
6 Porque concede sabiduría; el conocimiento y el discernimiento se dan por
Su decreto.
7 Él reserva la habilidad para el recto y es un escudo para los que viven sin tacha,
8 guarda las sendas de justicia, protege el camino de los que le son leales.
9 Entonces entenderás lo que es correcto, justo, y equitativo –todo buen proceder.
✡ Comentario (Versículos 1-9)
1. Los medios que hemos de usar para obtener sabiduría: (A) Hemos de prestar
atención a la palabra de Di-s, que puede hacernos sabios para salvación (vv. 1, 2,
comp. con 2 Ti. 3:15). Las palabras de Di-s son fuente y norma de sabiduría y
entendimiento. Muchas cosas sabias pueden hallarse en los escritos de hombres
sabios, pero en la divina revelación todo es sabiduría. (B) Hemos de pasar mucho
tiempo en oración (v. 3), clamando a la prudencia o discernimiento (hebreo, bináh)
y dando voces a la inteligencia (hebreo, tebunáh), vocablos sinónimos de sabiduría
(hebreo, jojmáh) y conocimiento (hebreo dáat). (C) Hemos de estar dispuestos
también a esforzamos y fatigamos (v. 4) por buscar la sabiduría; «como a la plata...
11
como a tesoros» no quiere decir que la hayamos de buscar como buscaríamos la
plata, etc., sino como se esfuerzan y fatigan los que excavan en las minas.
2. El éxito que hemos de esperar si usamos tales medios. Nuestras fatigas no serán en
vano, pues entenderemos el temor de , esto es, sabremos cómo hemos de
adorarle y servirle, y hallaremos el conocimiento de Di-s (v. 5), el cual es necesario
para que nuestro temor de Di-s sea como debe ser. También sabremos cómo
conducimos con los hombres (v. 9), pues entenderemos las tres cualidades que
proceden de la sabiduría: justicia, juicio y equidad (comp. con 1:3), que
corresponden a nuestras relaciones con Di-s, con el prójimo y con nosotros mismos
y vienen a equivaler (leyéndolos a la inversa) a «sobria, justa y piadosamente» de
Tit. 2:12. En efecto, justicia (hebr. tsédeq) es la cualidad que regula nuestra relación
con Di-s; juicio (heb. mishpat) equivale a la «honradez» en nuestro trato con los
demás; y equidad (heb. mesharim, de yashar = recto) expresa la «rectitud» personal.
3. El fundamento que tenemos para esperar el éxito en nuestra búsqueda de la
sabiduría; los ánimos para ello hemos de esperarlos únicamente de Di-s (vv. 6-8).
(A) «Porque da la sabiduría» (v. 6), pues él es la Sabiduría infinita y fuente de
toda sabiduría verdadera. (B) «De su boca nacen el conocimiento y la inteligencia»
(v. 6b). Todo lo que nos hace realmente sabios procede de la palabra de Di-s, tanto
escrita como predicada por sus fieles ministros. (C) Di-s provee de esa sabiduría a
los que están sinceramente dispuestos a hacer su voluntad (vv. 7, 8). Nótese que esa
sabiduría provee a los rectos, en paralelismo de sinonimia con los santos, de una
defensa completa: aptitud para improvisar soluciones acertadas (este es el
significado del hebreo tushiyáh), escudo, guardia y preservación. Y todo esto lo da
Di-s, por medio de su sabiduría. Así que, si buscamos la sabiduría en él, él nos
guardará en todos nuestros buenos caminos, que son los de la justicia, el juicio y la
equidad del v. 9, comp. con los vv. 7 y 8.
10 Porque la sabiduría entrará en tu mente y el conocimiento te deleitará.
11 La previsión te protegerá, y el discernimiento te guardará.
12 Te salvará del camino de los malos, de los que hablan duplicidad,
13 que abandonan las sendas derechas para seguir por caminos obscuros,
14 que se gozan en hacer lo malo y se alegran en la duplicidad de los malos,
15 cuyas sendas son torcidas y que se han desviado en su proceder.
16 Te librará de la mujer prohibida, de la extraña con palabras seductoras,
17 la que olvida al compañero de su juventud e ignora la alianza de su Di-s.
18 Su casa se hunde hasta la Muerte, y su sendero lleva a las sombras.
19 Nadie que vaya a ella puede volver y hallar otra vez las sendas de vida.
12
20 Así que sigue tú el camino de los buenos y atente a las sendas de los justos.
21 Porque los rectos habitarán la tierra, los intachables permanecerán en ella.
22 Mientras que los malvados desaparecerán de la tierra y los desleales serán
desarraigados de ella.
✡ Comentario (Versículos 10-22)
La verdadera sabiduría nos preservará de las sendas del pecado y nos hará mayor favor que si
nos enriqueciese con todos los bienes de este mundo. En efecto:
1. Nos libra del mal camino de los hombres perversos (vv. 11-13). Si la sabiduría de
Di-s entra en el corazón (v. 10), no sólo en la cabeza, da conocimiento, discreción e
inteligencia para protegerse, con claridad de juicio y sana libertad de voluntad, de
los principios corrompidos de hombres profanos y sin Di-s, que se complacen en el
vicio, buscan las tinieblas y andan por veredas tortuosas (vv. 12-15). Dice J. J.
Serrano: «Estos versos caracterizan a los enemigos del joven como depravados y
faltos de sinceridad en pensamientos, palabras y obras». Los que odian la luz, odian
la verdad y, por consiguiente, aman las tinieblas y la mentira.
2. Nos libra también de los peligros de la mujer extraña (vv. 16-19). Llama así a la
adúltera, porque es «ajena», es decir, de otro. Nótense sus malas cualidades: (A) Es
lisonjera (v. 16b), esto es, halaga con buenas palabras, pero es falsa en lo que dice,
pues siente tanto afecto como el que sentía Dalila hacia Samsón; sólo le interesa
satisfacer sus bajos instintos y hacerse con el dinero del joven. (B) Es infiel a su
marido (v. 17), lo que equivale a quebrantar el pacto de su Di-s (v. lib). Este es el
sentido que exige el paralelismo (comp. también con Ex. 20:14), por lo que el
adulterio es pecado contra Di-s y contra el hombre, contra la religión y contra la
justicia. Es menester que la discreción preserve al hombre no sólo de la mujer
extraña, sino también de su casa (v. 18), pues entrar en ella es ponerse en ocasión
incitante al pecado, y es un pecado que pronto se convierte en vicio que embota la
inteligencia, endurece el corazón y conduce al hombre por la pendiente que conduce
a la muerte. Por eso, es extremadamente raro el caso de que, una vez metido en las
redes de este vicio, se recobre el hombre hasta alcanzar otra vez los senderos de la
vida (v. 19).
3. Nos conduce y preserva por el camino de los buenos (v. 20). Cosa sabia es andar
por tal camino (V. Jer. 6:16; He. 6:12; 12:1), pues las veredas de los rectos son
sendas de vida (v. 21), mientras que los impíos van por caminos de muerte, pues
serán cortados y hasta desarraigados de la tierra (v. 22).
13
✡ PROVERBIOS 3 ✡
Este capítulo es uno de los más excelentes de todo el libro, tanto por las razones que da para
persuadimos a ser buenos como por las instrucciones que para ello nos ofrece.
1. Debemos ser constantes en el camino del deber, pues ese es el camino de la felicidad (vv.
1-4).
2. Debemos vivir dependiendo de Di-s, pues ese es el camino de la seguridad (y. 5).
3. Debemos conservar el temor de Di-s, pues ese es el camino de la sanidad (vv. 7, 8).
4. Debemos servir a Di-s con nuestros bienes de fortuna, pues ese es el camino de la
prosperidad (vv. 9, 10).
5. Hemos de soportar con paciencia nuestras aflicciones, pues ese es el camino de la
comodidad (vv. 11, 12).
6. Hemos de poner toda diligencia en obtener la sabiduría, pues ese es el camino de
alcanzarla (vv. 13-20).
7. Hemos de gobernamos con las normas de la sabiduría, pues ese es el camino de la
tranquilidad (vv. 21-26).
8. Hemos de hacer a nuestros prójimos todo el bien que podamos y ningún mal (vv. 27-35).
1 Hijo mío, no olvides mi enseñanza, que tu mente retenga mis mandamientos;
2 porque ellos te concederán abundancia de días, años de vida y bienestar.
3 Que no se aparten de ti la fidelidad y el amor; amárratelos al cuello, escríbelos
en la tabla de tu mente,
4 y hallarás favor y aprobación a los ojos de Di-s y de los hombres.
5 Confía en con todo tu corazón, y no te fíes de tu propio entendimiento.
6 En todos tus caminos tómalo en cuenta, y él suavizará tus sendas.
✡ Comentario (Versículos 1-6)
Una vida de comunión con Di-s produce inefables beneficios.
1. Hemos de observar continuamente los preceptos de Di-s (vv. 1, 2), haciendo de
ellos la norma de nuestra conducta. Y hemos de observarlos de todo corazón. Para
animarnos a sometemos a todas las restricciones y ordenanzas que nos impone la
ley de Di-s, se nos asegura aquí (v. 2) que ese es el camino cierto para la longevidad
14
y la prosperidad. Ni aun los días de la vejez serán malos, sino días en los que
hallaremos placer: «te añadirán...años de vida y paz». «Mucha paz tienen los que
aman tu ley» (Sal. 119:165).
2. Hemos de recordar continuamente las promesas de Di-s, que van anexas a los
preceptos de Di-s: «gracia y buena opinión ante los ojos de Di-s y de los hombres»
(v. 4) es promesa para los que obran con bondad y fidelidad (v. 3), ya que estas
cualidades se atribuyen precisamente, con mucha frecuencia, a Di-s, pero aquí,
como en 14:22; 16:6; 20:28 se atribuyen a los hombres (sin contar los lugares en
que sólo el jésed-amor o bondad- está explícito). Toda persona piadosa busca, ante
todo, el favor de Di-s, aunque no haya de despreciarse la estima de los hombres
(Est. 10:3).
3. Hemos de atender continuamente a la providencia de Di-s, a fin de depender de él,
con fe y oración, en todos nuestros asuntos. Hemos de fiarnos de con todo el
corazón (v. 5, comp. con Sal. 37:3, 5), no en nuestras propias opiniones, aunque nos
parezca que el asunto es como camino trillado, cosa fácil para la que no necesitamos
consejo de nadie. En todos nuestros caminos hemos de reconocerle (v. 6): tener
comunión con él y reconocer su mano, poniéndonos en todo a su disposición, pues
él hará derechas nuestras veredas, promesa que se repite en 11:5; 15:2 1 (comp. con
Is. 45:13); nuestro camino será seguro y fácil, con un feliz resultado.
7 No seas sabio en tu propia opinión; respeta a y evita el mal.
8 Será una cura para tu cuerpo, un tónico para tus huesos.
9 Honra a con tu riqueza, con lo mejor de todo tu ingreso,
10 y tus graneros estarán llenos de grano, tus lagares rebosarán de vino nuevo.
11 No rechaces la disciplina de , hijo mío; no detestes su reprensión.
12 Porque al que ama lo reprende, como el padre al hijo a quien favorece.
✡ Comentario (Versículos 7-12)
Tenemos aquí tres exhortaciones, cada una de ellas corroborada con buenas razones:
1. Debemos vivir en humilde y respetuosa sumisión a Di-s y a su gobierno (v. 7):
«teme a y apártate del mal», es decir, si temes a Di-s te apartarás del mal, pues
lo segundo es consecuencia de lo primero. Para animamos a vivir así en el temor de
Di-s, se nos promete (v. 8) que nos aprovechará incluso corporalmente como
alimento para los músculos (lit, el ombligo) y para el tuétano de los huesos. Con el
15
vigor del cuerpo, el espíritu adquirirá también mayor firmeza para tomar las
resoluciones pertinentes; por otra parte, la prudencia, la templanza y la sobriedad, la
calma mental y el buen gobierno de las pasiones, que la religión nos enseña, no sólo
fortalecen la salud del alma, sino también la del cuerpo.
2. Debemos hacer buen uso de nuestros medios de fortuna, pues ése es el camino recto
para incrementarlos (vv. 9, 10): «Honra a con tus bienes, etc... y serán llenos
tus graneros, etc». Las riquezas de este siglo son secundarias, frágiles, efímeras; sin
embargo, aun en esto suele Di-s bendecir al que honra a Di-s, especialmente al que
le honra con el buen uso de ellas. Nótese, sin embargo, como hace notar Cohen, que
la recompensa que esas bendiciones materiales suponen no se presenta en la Biblia
como un incentivo para la buena conducta. Por eso, dice el salmista (Sal. 1 l2:l)
«Dichoso el hombre que teme a , y en sus mandamientos (no en la
recompensa) se deleita en gran manera».
3. Debemos conducimos rectamente bajo las aflicciones (vv. 11, 12). No hemos de
menospreciar la reprensión (hebreo musar, el mismo vocablo de 1:8) de ; es
decir, no hemos de tomarla a la ligera como si nada tuviese que ver con nosotros,
sino que, viendo en ella un propósito benéfico de Di-s, hemos de sacar de ella el
beneficio que Di-s intenta. No se nos pide que seamos estoicos, duros como piedras,
a fin de que las aflicciones nos hagan menos daño, pero tampoco hemos de sentir
asco de ellas (ése es el sentido del verbo en hebreo, en vez de «fatigarse»), pues la
aflicción es disciplina del Creador (comp. con He. 12:6-11), y él conoce de qué
estamos hechos (Sal. 103:14) y hasta dónde podemos aguantar (1 Co. 10:13). No
estamos hablando de una justicia vindicativa, sino de una corrección paternal para
nuestro mayor bien.
13 Feliz el que haya sabiduría, el que alcanza entendimiento.
14 Su valor en el mercado es mayor que el de la plata, su fruto, mayor que el oro.
15 Es más preciosa que los rubíes; todos tus bienes no pueden igualarla.
16 En su mano derecha hay abundancia de días, en su izquierda, riqueza y honor.
17 Sus caminos son caminos agradables, y todas sus sendas, pacíficas.
18 Es un árbol de vida para todos los que le echan mano, y todo el que se aferra a
ella es feliz.
19 fundó la tierra con sabiduría; estableció el cielo con entendimiento;
20 Por su conocimiento reventaron los abismos, y el cielo destiló rocío.
16
✡ Comentario (Versículos 13-20)
Dichoso el hombre que halla la sabiduría, la verdadera sabiduría, que consiste en conocer y
amar a Di-s, y en conducirse enteramente de acuerdo con su verdad, su providencia y su ley.
1. Qué sabiduría es la que hace feliz. Feliz es el hombre que, al hallar la verdadera
sabiduría, la hace suya extrayendo entendimiento, como dice el original hebreo. No
la tiene en sí, pero la extrae con el cubo de la oración de la fuente que ofrece
generosamente sabiduría (Stg. 1:5). Se fatiga en ello, como quien extrae oro de una
mina, porque le da un valor mayor que el de la plata, oro o piedras preciosas (v. 14).
Es la perla de gran valor (Mt. 13:45, 46), por cuya adquisición bien vale la pena
venderlo todo. «Compra la verdad», dirá después (23:23); no dice a qué precio, pero
bien se da a entender que cualquier precio es bueno para obtenerla, antes que
perderla.
2. La dicha de los que la hallan es una dicha trascendente, como podemos ver (vv. 14,
15, comp. con Job 28:15 y ss.). Es un saber para salvación eterna (2 Ti. 3:15), con la
que no se puede comparar ningún bien de este mundo.
3. El universo entero no puede proveer el rescate de un alma que se va a perder por
falta de la verdadera sabiduría. Los (vv. 16-18) vienen a explanar lo que ha dicho en
el (v. 2). La sabiduría aparece aquí como una reina, repartiendo dones a diestra y
siniestra a quienes son sus fieles súbditos. Ofrece longevidad en su mano derecha,
pues da consejos y proporciona métodos para prolongar la vida (hasta la eternidad)
y en su mano izquierda ofrece riquezas y honor. El sentido de este binomio se
entiende mejor comparando este lugar con Ex. 28:2, 40 e Is. 35:2. El deleite (v. 17)
que ofrece es de la mejor calidad, pues ningún placer de los sentidos puede
compararse con el que las almas piadosas hallan en la comunión con Di-s y en hacer
el bien a todos. La mención del árbol de la vida (v. 18, comp. con Gn. 2:9) sugiere
que es para el alma lo que dicho árbol habría sido para nuestros primeros padres si
se hubiesen alimentado de él en lugar de comer del árbol prohibido (comp. también
con Ap. 2:7; 22:2). Llega a ser una participación de la propia dicha de Di-s (vv. 19,
20), quien con la sabiduría (8:22 y ss.) llevó a cabo la obra de la creación.
21 Hijo mío, no los pierdas de vista; aférrate a la habilidad y a la previsión.
22 Ellas le darán vida a tu espíritu y gracia a tu garganta.
23 Entonces seguirás tu camino con seguridad y no te lastimarás los pies.
24 Cuando te acuestes no tendrás miedo; te acostarás y tendrás un dulce sueño.
25 No temerás el terror repentino ni el desastre que les sobreviene a los malvados,
26 porque será tu confianza; guardará tus pies de caer presos.
17
✡ Comentario (Versículos 21-26)
1. Aquí se nos exhorta a tener siempre a la vista y en el corazón las normas de la
piedad sincera (v. 21): «Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; que no se
aparten de ellas tus ojos para irse tras la vanidad. Tenías siempre presentes,
cultívalas y practícalas mientras vivas. Guárdalas en tu corazón como en cofre de
tesoros, pues es ahí donde anidan la prudencia y la discreción».
2. El argumento para corroborar esta exhortación se toma de las inefables ventajas que
nos proporciona la sabiduría (v. 22): «Y serán vida para tu alma (comp. con y. 18);
te avivarán el sentido del deber y te fortalecerán durante tus aflicciones cuando
comiences a sentirte débil y decaído. También serán gracia para tu cuello, como un
hernioso collar de perlas o una cadena de oro. Entonces (v. 23) andarás por tu
camino confiadamente, y tu pie no tropezará (comp. Sal. 91:12); caminarás bajo la
protección de la providencia y de la gracia, mientras no seas tú quien se expone al
peligro. El camino del deber es el camino de la seguridad. Ella te servirá de
estupenda medicina contra los temores nocturnos a los ladrones, a los espectros, al
fuego, etc. (v. 24) y aun contra el pavor repentino (v. 25), es decir, contra una
experiencia aterradora que sobreviene de súbito, puesto que el Padre que vela por
nosotros no duerme ni puede haber cosa alguna que le tome por sorpresa. El mejor
remedio para tener una buena noche es tener una buena conciencia.
27 No le niegues un bien a quien lo merece, cuando tengas el poder de hacerlo.
28 No le digas a tu prójimo: ―Vuelve después; te lo daré mañana‖, cuando lo tienes
contigo.
29 No planees el mal contra tu compañero que vive confiado contigo.
30 No disputes con nadie sin motivo, cuando no te ha hecho ningún mal.
31 No envidies a un hombre sin ley, ni escojas ninguno de sus caminos;
32 porque el desviado es una abominación para , pero él intima con el sincero.
33 La maldición de está sobre la casa del malvado, pero él bendice el hogar
del justo.
34 De los burladores se burla, pero a los humildes les muestra misericordia.
35 El sabio obtendrá honra, pero los tontos consiguen desgracia como su porción.
✡ Comentario (Versículos 27-35)
Vienen ahora normas concernientes a nuestra relación con el prójimo.
18
1. Debemos dar a cada uno lo suyo, tanto lo que se le debe en justicia como lo que
exige la caridad, y eso sin dilaciones ni excusas (vv. 27, 28). El contexto indica que
se trata especialmente del prójimo pobre, a quien hay que dar lo que necesita sin
hacerle esperar. Prometer para mañana (v. 28) lo que se puede dar hoy, además de
ser injusto, es problemático pues nadie sabe si vivirá mañana ni el que debe dar ni el
que necesita recibir. Este deber incluye: (A) El pago de deudas; (B) El pago de
rentas y salarios; (C) La provisión para nuestros familiares necesitados; (D) Nuestra
contribución tanto para la Iglesia como para el Estado; (E) La buena disposición
para todo acto de amistad y humanidad, a fin de aliviar problemas y necesidades
locales, nacionales y mundiales de toda índole.
2. Nunca hemos de tramar ningún daño contra nadie (v. 29), sobre todo cuando
nuestro prójimo está confiado, es decir, no sospecha ningún mal de nuestra parte y,
por ello, no se pone en guardia.
3. No hemos de ser foco de contención o discordia (v. 30); «No tengas pleito con
nadie sin motivo». Es aquí donde el amor juega un importante papel (V. 1 Co. 13:4-
7), pues no piensa mal. La mayoría de los pleitos perjudiciales surgen de sospechas
infundadas, teniendo por mala intención lo que quizá fue inadvertencia. Ir a los
tribunales debe ser el último recurso.
4. No hemos de envidiar la prosperidad de los malhechores (v. 31, comp. con Sal.
73:3), ni ceder a la tentación de imitarles. Para mostrar cuán pocos motivos tienen
los santos para envidiar a los pecadores. Salomón compara, en los últimos cuatro
versículos de este capítulo, la condición de unos y de otros: (A) Los santos gozan de
íntima comunión con Di-s, pero los perversos son abominables a los ojos de .
El que no odia nada de lo que creó, se ve en la necesidad de abominar a quienes de
tal modo han corrompido lo que Di-s hizo en ellos. Los más dulces y benditos
secretos del amor de Di-s son comunicados a sus amigos (comp. con Jn. 15:15). (B)
Los santos, y su morada, descansan bajo la bendición de Di-s (v. 33), aunque su
morada sea simplemente un «aprisco de ovejas», como da a entender el original,
mientras que la «casa» (de suyo, morada fija y permanente) del impío está bajo la
maldición de ¿De qué le sirve vivir en un palacio, si es un palacio maldito?
(C) Aún lo que Di-s da a los escarnecedores o burladores (v. 34), lo da burlándose
de ellos. Este parece ser el sentido del original. En otras palabras, les paga con su
misma moneda. En cambio, a los humildes les muestra siempre su favor, pues al
que se humilla a sí mismo, no de palabra falsa, sino de obra sincera, Di-s lo
enaltece. (D) Los santos son los verdaderos sabios (v. 35), por lo cual recibirán
respeto y aprobación de quienes saben apreciar la verdadera sabiduría, mientras que
los necios en sentido moral (hebr. kesilim) terminarán en perpetua confusión e
ignominia.
19
✡ PROVERBIOS 4 ✡
En este capítulo, Salomón inculca, con gran vanidad de expresiones, las mismas cosas de las
que había tratado en los capítulos anteriores.
1. Una seria exhortación al deseo y estudio de la verdadera sabiduría (vv. 1-13).
2. Una necesaria advertencia contra las malas compañías (vv. 14-19).
3. Instrucciones para adquirir y conservar la sabiduría a fin de dar frutos de sabiduría (vv. 20-
27).
1 Hijos, háganle caso a la disciplina de un padre; pongan atención y aprendan
discernimiento,
2 porque yo les doy una buena instrucción; no olviden mi enseñanza.
3 Yo he sido hijo de mi padre, el tierno cariño de mi madre.
4 Él me instruía y me decía: ―Que tu mente se aferre a mis palabras; obedece mis
mandamientos y vivirás.
5 Adquiere sabiduría, adquiere discernimiento; no olvides mis palabras ni te
apartes de ellas.
6 No la abandones y ella te guardará; ámala y ella te protegerá.
7 El principio de la sabiduría es: Adquiere sabiduría; con todas tus adquisiciones,
adquiere discernimiento.
8 Abrázala y ella te exaltará; te traerá honor si la acoges.
9 Ella adornará tu cabeza con una hermosa guirnalda; te coronará con una gloriosa
diadema‖.
10 Hijo mío, haz caso y recibe mis palabras, y tendrás muchos años de vida.
11 Yo te instruyo en el camino de la sabiduría; te guío por senderos derechos.
12 Andarás sin perder el paso; cuando corras, no tropezarás.
13 Aférrate a la disciplina; no la dejes ir; retenla; ella es tu vida.
✡ Comentario (Versículos 1-13)
1. Invitación de Salomón a sus hijos (vv. 1, 2): «Escuchad, hijos, la instrucción de un
padre». Contra la opinión de J. J. Serrano y siguiendo la del rabino Cohen y del
propio M. Henry -creemos que aquí no se trata de «discípulos», sino de verdaderos
20
«hijos». La instrucción de un padre sabio ha de ser atendida con toda diligencia,
pues ese es el modo de adquirir cordura (hebreo, bináh, esto es, tanto entendimiento
como discernimiento). Tanto los magistrados como los ministros de Di-s han de
mostrar un particular interés en instruir a sus hijos, pues a mayor conocimiento
corresponde mayor responsabilidad. Comenta Malbim que la expresión de «un
padre»», en contraste con 1:8 («tu padre»), «insinúa que está impartiéndoles una
instrucción paternal que él mismo había recibido de su padre». Esto se confirma por
el vocablo usado en la primera parte del y. siguiente para expresar esa instrucción,
ya que el hebreo leqaj significa «lo que se ha recibido» de los antepasados. En 2b, el
vocablo hebreo es Torá, enseñanza que consiste en instrucciones basadas en la ley.
La religión tiene a la razón de su lado y nos da enseñanzas fundadas en verdades
ciertas y en normas seguras.
2. Instrucciones que les da. El las recibió de sus padres y enseña a sus hijos lo mismo
que a él le enseñaron (vv. 3, 4). Sus padres le amaban y, por tanto, le enseñaron:
«Yo fui hijo de mi padre» (v. 3), no es una perogrullada; el sentido es: «hijo
escogido y obediente», como entendieron los LXX (. «también yo fui hijo obediente
de mi padre»), aun cuando así trastornaron el orden del hebreo y tradujeron por
«obediente» el hebreo raj, tierno.
Para su madre (3b) había sido el «preferido» (hebreo yajid, único). Es cierto que
Betsabé dio a David cuatro hijos (1 Cr. 3:5), pero Salomón fue el preferido de sus
padres y el escogido de Di-s. Quizá fue David más estricto en la educación de
Salomón que en la de los otros hijos, pues, además de la excesiva condescendencia
que mostró con los caprichos de Amnón y Absalom, se nos dice expresamente en
cuanto a Adonías (1 R. 1:6) que «su padre nunca le había lastimado» (lit.; esto es,
«contrariado»). Aunque Salomón sobrepasó después a su padre en sabiduría, no
tuvo empacho en referirse con respeto a las enseñanzas que de él había recibido. Si
resulta útil buscar las sendas antiguas (Jer. 6:16) ¿por qué hemos de despreciar las
enseñanzas antiguas? Aunque no hemos de ser seguidores serviles de los maestros
que nos precedieron, tampoco hemos de despreciar lo mucho bueno que nos
legaron.
3. Pasando ya a detallar las principales instrucciones que les da, vemos que consisten
(vv. 4-13) en preceptos y exhortaciones acerca del valor de la sabiduría, conforme le
había enseñado su padre; y por cierto, lo había hecho con gran interés e insistencia:
(A) Le había preceptuado retener sus palabras (v. 4. Lit.), las buenas lecciones que
le había dado; sus dichos (v. 10), expresiones sueltas, llenas de prudencia; había de
retenerlos, guardarlos para vivir una vida honesta útil y dichosa (v. 4); retenerlos en
el corazón, no sólo en la cabeza, pues sólo cuando arraigan en convicciones dan
buen fruto las lecciones.
No había de olvidar ni dejar la sabiduría, sino guardarla, para ser guardado; amarla,
para ser protegido por ella; ensalzarla, para ser por ella ensalzado; abrazarla, para
21
ser honrado y adornado por ella (vv. 4-9). Ella otorga longevidad, rectitud,
seguridad, vida (vv. 10-13). (B) Para corroborar estas exhortaciones, que son
mandamientos (mitsvotay, v. 4), enaltece la sabiduría como algo que tiene valor
supremo (v. 7): «Lo primordial (es la) sabiduría; adquiere sabiduría» (ésta es la
mejor versión).
Todas las demás cosas de este mundo, comparadas con ella, son de valor
secundario; por eso, hay que adquirirla (v. 5), comprarla, a cualquier precio (23:23).
La sabiduría verdadera nos recomienda a Di-s, embellece el alma, nos capacita para
vivir una vida santa, útil, llena de sentido, y nos encamina derechamente a la vida
que no tendrá fin.
No es extraño, pues, que haya de adquirirse aun a costa de todas las posesiones (v.
1b).
Es cierto que esta sabiduría es un don de Di-s, como lo fue para Salomón, pero Di-s
la da a quienes la piden (Stg. 1:5) y a quienes se esfuerzan por hallarla.
Si no podemos llegar a ser maestros de sabiduría, seamos amantes (v. 6) de
sabiduría.
14 No entres en la senda del malvado; no andes por el camino de los perversos.
15 Evítalo; no pases por él; apártate de él; pasa de largo.
16 Porque no pueden dormir si no han hecho lo malo; a menos que hagan caer a
alguien se les espanta el sueño.
17 Comen el pan de la maldad y beben el vino de la violencia.
18 La senda los justos es como la luz del alba, que aumenta su brillo hasta el medio
día.
19 El camino de los malvados es todo oscuridad; no saben qué los hará tropezar.
✡ Comentario (Versículos 14-19)
Si esta porción continúa con exhortaciones de David a Salomón o marca un recomienzo de
los consejos del propio Salomón no es de fácil solución.
M. Henry se inclina por eso último, pero la mayoría de los autores no parecen advertir aquí
ningún corte, tanto más cuanto que toda la porción restante (vv. 14-27) no hace sino ampliar
la alegoría de los dos caminos, ya iniciada anteriormente, especialmente a partir del v. 11. En
los vv. que siguen, se nos previene contra los caminos de los malvados. Veamos:
1. La advertencia misma (vv. 14, 15): «No entres por la vereda de los malvados, etc».
El término hebreo reshaím connota los que pecan contra Di-s de modo directo,
mientras que el «raím» del segundo estilo (lit. malos) indica los que pecan
22
directamente contra el prójimo. La exhortación del v. 15 da a entender, no sólo la
precaución de no poner los pies en el mal camino, sino también la de mantenerse lo
más lejos posible de él. Nunca hemos de pensar que nos apartamos demasiado de tal
camino; un pequeño acercamiento supone una gran concesión a la tentación que
implica la compañía de los malvados.
2. Las razones que corroboran esta precaución: «considera el carácter de tales
hombres: Son tan malos que no duermen tranquilos si han pasado el día sin cometer
alguna maldad de bulto (v. 16); para ellos, el crimen es su comida y su bebida (v.
17); en realidad, comen y beben de lo que han robado a viva fuerza, por la rapiña y
la opresión. Pero, aunque ellos piensen que prosperan, su camino se va estrechando,
y aun oscureciendo, progresivamente; de forma que, faltos de luz verdadera, acaban
por tropezar y caer, sin percatarse siquiera de la causa de su final desventura (v. 19).
En cambio (v. 18), «la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en
aumento hasta llegar a pleno día» (comp. con Job 22:28). El Mesías es nuestra luz
(Jn. 8:12) y nuestro camino (Jn. 14:6). Los justos caminan guiados por la Palabra de
Di-s, la cual es luz para el camino y para los pies (Sal. 119:105); ellos mismos son
luz en el Señor (Ef. 5:8) y caminan en la luz como él (Dios) está en la luz (1 Jn.
1:7). Es una luz que brota en la oscuridad (Is. 58:10) y crece, brilla más y más; no es
como la luz del meteoro, que desaparece pronto, ni como la luz de la candela, que se
debilita hasta apagarse, sino como la del sol, que brilla más cuanto más sube.
20 Hijo mío, escucha lo que te digo; inclina tu oído a mis palabras.
21 No las pierdas de vista; retenlas en tu mente.
22 Ellas son vida al que las haya, sanidad para todo su cuerpo.
23 Más que todo lo que guardas, guarda tu mente, que ella es fuente de vida.
24 Aparta de ti el habla torcida; mantén lejos de ti el habla desviada.
25 Que tus ojos miren de frente, que tu mirada sea hacia adelante.
26 Examina el sendero a seguir, y todos tus caminos prosperarán.
27 No te desvíes a la derecha ni a la izquierda; guarda tus pies del mal.
✡ Comentario (Versículos 20-27)
Tras exhortamos a no hacer el mal, ahora nos exhorta a hacer el bien.
1. Los dichos de la sabiduría deben ser nuestras normas de conducta; por eso, hemos
de inclinar el oído a ellas (v. 20); escucharlas con sumisión y prestarles diligente
atención, sin perderlas de vista (v. 21, comp. con 3:21). Hemos de guardarlas en
nuestro interior (comp. con 2:1) como se guarda un tesoro que se teme perder. La
23
razón por la que hemos de estimar así las palabras de la sabiduría es que ellas serán
para nosotros alimento y medicina (v. 22), como el árbol de la vida (Ap. 22:3). Así
como nuestra vida espiritual comenzó mediante la palabra (Jn. 3:5; 1 P. 1:23), así
también se ha de conservar y mantener por medio de la palabra. La segunda parte
del v. 22 es una variante de 3:8. En la palabra de Di-s hay un remedio adecuado y
completo para todas las enfermedades espirituales y aun para muchas enfermedades
físicas.
2. Especial vigilancia necesita nuestro corazón (v. 23) «porque de él mana la vida».
Siendo el corazón el centro y la fuente de nuestra conducta, hemos de velar para que
de él salgan actividades santas, según las normas de Di-s y en docilidad a la
conducción del Espíritu, pues así no saldrán las corrupciones de nuestra naturaleza
caída. Guardar el corazón es albergar buenos pensamientos y acallar los malos,
poner el afecto en los objetos que lo merecen y dentro de los límites debidos.
Muchos son los modos de guardar un objeto: el cuidado, la fuerza y la petición de la
ayuda necesaria.
3. Otro objeto de especial vigilancia son los labios (v. 24), puertas por las que sale lo
que hay en el corazón (Mt. 12:34; Lc. 6:45). El hebreo usa dos vocablos que
significan respectivamente «torcedura» (de boca) y «desviación» (de labios). En
ambos casos vienen a significar, con la mayor probabilidad «falsificación de la
verdad», en la que se incluyen la mayoría de los pecados de la lengua.
4. El v. 25 nos exhorta a mirar rectamente; un corazón recto, así como incita a hablar
rectamente, también incita a mirar rectamente; ésta es la recta intención que el
Señor recomendó bajo la expresión «ojo sano» (Mt. 6:22). Si ponemos nuestros ojos
fijos en el Señor (He. 12:2), no los desviaremos a ninguna mala parte.
5. Finalmente, hemos de vigilar nuestros pies (vv. 26, 27): «Examina (lit, pesa) la
senda de tus pies». Como si dijera: «Pondera bien las alternativas para no vagar sin
rumbo, sino poder pisar firme y fuerte. Pon en un platillo de la balanza la palabra de
Di-s, y en el otro lo que has hecho o vas a hacer, y mira a ver si coinciden; no obres
con precipitación; y, una vez que hayas escogido el sendero recto, no te desvíes a
ningún lado (v. 27)».
24
✡ PROVERBIOS 5 ✡
El objetivo de este capítulo es parecido al del capítulo 2. Tenemos aquí:
1. Una exhortación a conocer y obedecer las leyes de la sabiduría en general (v. 2).
2. Una advertencia particular contra el pecado de prostitución (vv.3-14).
3. Remedios contra ese pecado:
a. El amor conyugal (vv. 15-20).
b. Consideración de la omnisciencia de Di-s (v. 21).
c. Miedo al final miserable de los malvados (vv. 22-23).
1 Hijo mío, escucha mi sabiduría; inclina tu oído a mi discernimiento,
2 para que tengas previsión, mientras tus labios se aferran al conocimiento.
3 Porque los labios de la mujer prohibida destilan miel; su boca es más suave que
el aceite;
4 Pero al final es más amarga que el ajenjo, afilada como espada de dos filos.
5 Sus pies bajan a la Muerte; sus pasos llevan a la Fosa.
6 Ella no transita por una senda de vida; su sendero es tortuoso por falta de
conocimiento.
7 Así que ahora, hijos, háganme caso, y no se aparten de las palabras de mi boca.
8 Mantente lejos de ella; no te acerques a la puerta de su casa
9 no sea que des tu vigor a otros, tus años a un despiadado;
10 no vaya a ser que unos extraños se sacien de tu fuerza, y tu trabajo sea para la
casa de otro;
11 y al final tengas que gritar, cuando se consuman tu carne y tu cuerpo,
12 y digas: ―¡Oh, cómo odié la disciplina, y desprecié de corazón la reprensión!
13 No les hice caso a mis maestros, ni quise escuchar a mis instructores.
14 Pronto estuve en serios problemas en medio de la congregación reunida‖.
✡ Comentario (Versículos 1-14)
1. Un solemne prefacio para dar paso a las importantes advertencias que siguen.
«Hijo» vuelve a significar «discípulo». Salomón quiere aquí que el alumno
concentre bien su atención sobre lo que le va a decir. No es «ciencia» lo que va a
25
comunicar, sino «conocimiento» (hebr. dáat) interior, penetrante, experimental. Las
enseñanzas de Salomón no tenían por objeto llenar de ideas la cabeza, sino de
normas prácticas el corazón.
2. La advertencia misma es que el alumno (todo el que esto lea) se abstenga de la
«mujer extraña», es decir «ajena», como en 2:16. No se trata aquí, por consiguiente,
del adulterio espiritual o idolatría, sino del adulterio camal. Bajo la metáfora de
«miel» (v. 3) se expresan las palabras seductoras de la mala mujer. La suavidad del
aceite (comp. Sal. 55:21) sirve aquí de símil por el que dichas palabras se asemejan
a la facilidad con que el aceite se desliza y penetra sin hacer ruido, sin golpear, sin
herir pero véase el contraste (v. 4): «su fin es amargo como el ajenjo, aguzado como
espada de dos filos». Así, sin notarlo, el que se adhiere a la mujer ajena, sigue la
misma ruta de ella: ruta de muerte, puesto que sus pasos, sus mismos caminos, están
desviados del camino de la vida (vv. 5, 6). Nótese que todos los «su» o «sus» de los
vv. 3-6 son femeninos («de ella») en el hebreo. Consideremos, pues, cuán falsos y
engañosos son todos los encantos, los atractivos, las palabras seductoras de la
adúltera. Es probable que, en lugar de «se percate» (v. 6), haya de leerse «te
percates», siendo la forma del verbo igual para ambas personas, lo cual cuadra
mejor con el contexto. Es, pues, ella la que no quiere que los hombres se percaten
de lo que les espera, pues si se percatasen, se apartarían de ella. Ignoran las
maquinaciones de Satanás (2 Co. 2:11) quienes no entienden que el principal
objetivo que persigue él en todas sus tentaciones es impedimos escoger la senda de
la vida.
3. La urgencia e insistencia de la admonición (vv. 7, 8): «Aleja de ella tu camino; si
llegas a cruzarte con ella en el camino, escoge otra ruta, antes que exponerte al
peligro; no te acerques a la puerta de su casa; camina por el otro lado de la calle;
mejor aún, vete por otra calle aunque tengas que dar un rodeo». Tal es la yesca que
nuestra corrompida naturaleza contiene, que es una locura, bajo cualquier pretexto,
ponerse cerca del fuego. La palabra que traducimos por «honor» (v. 9) suele
significar «esplendor» o «majestad», pero también «vigor» (Dan. 10:8), pero, a la
vista del contexto, podría significar las posesiones, y aun la vida, a manos del
marido ofendido. Sea por la pérdida de las fuerzas físicas a causa de la vida
disoluta, o de los bienes de fortuna a causa del despilfarro o de la revancha del
marido (tel «cruel» de 9b?), lo cierto es que el que se une a la adúltera terminará
mal en cuanto al alma, el cuerpo y los bienes (vv. 10, 11). Gemirá al final, cuando
ya no tenga remedio.
4. Arrepentimiento tardío (vv. 12-14). Salomón presenta al pecador convicto
reprochándose a sí mismo por haber desoído los consejos que se le habían dado (v.
12). No puede menos de confesar que sus padres y los emisarios de Di-s le habían
instruido y enseñado convenientemente (v. 13). El v. 14 ha de entenderse a la luz de
Dt. 22:22. Dice Cohen: «la frase final ocurre con frecuencia en Dt., en conexión con
26
pecados que se tienen por elementos desmoralizantes dentro de la comunidad y
deben ser de ella eliminados. Al reflexionar sobre esto, le viene a las mientes a ese
hombre que ha llegado a ser un gran mal en medio de la congregación y ha
incurrido en el peligro de ser exterminado de ella».
15 Bebe agua de tu propia cisterna, agua corriente de tu propio pozo.
16 Tus manantiales brotarán a raudales en las plazas públicas.
17 Serán tuyos solamente, otros no tendrán parte contigo.
18 Que sean benditas tus fuentes; deléitate en la esposa de tu juventud
19 gacela amorosa, graciosa cabrita montesa. Que sus pechos te satisfagan en todo
tiempo; sigue siempre enamorado de ella.
20 ¿Por qué enamorarte, hijo mío, de una mujer prohibida? ¿Por qué aferrarte al
seno de una extraña?
21 Porque los caminos del hombre están ante los ojos de Di-s; él examina todo su
proceder.
22 El malvado quedará atrapado en sus maldades; lo sujetarán las sogas de su
pecado.
23 Morirá por falta de disciplina, infatuado por su gran necedad.
✡ Comentario (Versículos 15-23)
Después de mostrar los males que brotan del adulterio, Salomón muestra los remedios que
han de adoptarse contra tales males.
1. El principal remedio es quedar satisfecho con los legítimos goces del matrimonio,
uno de cuyos fines fue preservar de la impureza. Que nadie se queje a Di-s por
impedirle gozar de los placeres a los que tan fuertemente le lleva el instinto natural,
cuando Di-s ha provisto el medio de satisfacerlo dentro de la santidad del
matrimonio. El que no se contenta con una mujer, no se contentará con dos ni con
cuatro, pues la concupiscencia nunca dice «¡Basta!». El joven que no pueda
mantenerse casto, que se case pronto, pues «mejor es casarse que estarse
quemando» (1 Co. 7:9). Comp. v. 15 con Cant. 4:15 para mejor entenderlo. En su
esposa ha de hallar todo su deleite. Es suya no sólo porque él la ha escogido, y debe
contentarse con la elección que hizo, sino también porque es la que la providencia
divina destinó para él. El v. 19 es como una explanación del v. 15. El original
hebreo dice «sus pechos» donde las versiones (la RV) dicen «sus caricias». Los vv.
16-18 han sido mal traducidos y se ha corregido el texto original por no entenderlo.
27
El 16 presenta los hijos abundantes jugando por las calles de la ciudad (comp. Jer.
9:20; Zac. 8:5), sin necesidad de añadir al texto negación o interrogación que no
figuran en él. El v. 17 se refiere a esos mismos hijos, todos del legítimo matrimonio,
no de dudosa paternidad («para los extraños contigo»). El «manantial» del v. 18 es
la propia esposa, fuente de los hijos, los cuales son bendición de Di-s.
2. El segundo remedio es andar en la presencia de Di-s (v. 21). «Los caminos del
hombre, todo cuanto piensa y hace, están ante los ojos de ». Di-s los ve como
son, con sus motivos, sus circunstancias y sus consecuencias. No sólo los ve, sino
que los «pesa» (v. 21b. lit) para dar a entender que conoce su verdadero valor
(comp. con Dn. 5:27) y, de acuerdo con ese valor, emite su juicio sobre ellos.
3. Finalmente, un buen remedio contra el adulterio es prever a tiempo los males que
acarrea (vv. 22, 23). Los que se habitúan a este pecado se prometen a sí mismos
impunidad, pero se engañan a sí mismos. No necesitan cárcel ni cadenas, pues
bastarán sus propios pecados para retenerlos en prisión. Dice el Talmud: «Al
principio, la mala inclinación es como una tela de araña, pero finalmente los hilos
aumentan hasta convenirse en sogas de carreta».
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✡ PROVERBIOS 6 ✡
En este capítulo tenemos:
1. Una advertencia contra la precipitación en salir fiador por otro (vv. 1-5).
2. Una reprensión de la pereza (vv. 6-11).
3. El carácter y el destino final del malicioso (vv. 12-15).
4. Recuento de siete cosas que Di-s odia (vv. 16-19).
5. Exhortación a familiarizarse con la palabra de Di-s (vv. 20-23).
6. Repetida admonición sobre las perniciosas consecuencias del pecado de prostitución (vv.
24-35).
1 Hijo mío, si has salido fiador de tu vecino, si has dado tu palabra por otro,
2 has quedado atrapado por las palabras de tu boca, entrampado por tus propias
palabras.
3 Haz esto, entonces, hijo mío, para librarte, porque has quedado en poder de tu
prójimo: Ve y humíllate –y molesta a tu vecino;
4 no le des sueño a tus ojos, ni dormitar a tus pupilas.
5 Escápate como un venado de las manos [del cazador], como un ave de las manos
de un trampero.
✡ Comentario (Versículos 1-5)
Una de las excelentes cualidades de la palabra de Di-s es que nos enseña, no sólo sabiduría
divina para el otro mundo, sino también humana prudencia para este mundo, a fin de que
llevemos nuestros negocios con discreción; y aquí tenemos una buena norma:
Evitar el salir fiador por otro, ya que, por no seguir esta norma, entran a menudo en las
familias la pobreza y la ruina.
(A) Hemos de considerar la fianza como una trampa y, de consiguiente, evitarla (vv. 1,2). Ya
es bastante peligroso quedar ligado por un amigo cuyas circunstancias y honradez
conocemos bien, pero chocar la mano (lit.) con Un extraño, de quien no se conocen ni las
circunstancias ni la honradez equivale a quedar preso. Si no hemos tenido la prudencia
suficiente para evitar salir fiadores, tengámosla para desenredamos cuanto antes (vv. 3-5).
De momento, el asunto parece que duerme; no oímos nada de él. No se demanda la deuda, y
29
el causante dice: «No tenga miedo; ya nos las arreglaremos». Pero la fianza sigue en vigor el
interés sigue su curso, y el acreedor puede llamar a tu puerta con urgencia y severidad para
exigir el pago. Por tanto, líbrate (v. 3), no duermas tranquilo (v. 4) y escápate a toda prisa (v.
5). No dejes piedra sin remover hasta que te hayas librado de la trampa en que te metieron
tus labios (v. 2).
(B) ¿Cómo hemos de entender esto? No hemos de pensar que es ilegal en todo caso el salir
fiador por otro; puede llegar a ser una exigencia de la justicia o de la caridad. Pablo salió
fiador por Onésimo (Flm. 19). Podemos ayudar a un joven honesto a comenzar un negocio
procurándole crédito y prestigio con nuestras palabras, haciendo así un gran bien al prójimo
sin dañarnos nosotros mismos. Pero, (a) Es muestra de prudencia evitar las deudas en lo
posible, pues si llegan a pesar gravemente sobre uno, se corre el peligro de enredarse con el
mundo y llegar a hacer el mal o a sufrirlo. (b) Una persona no debe ligarse como fiador por
más de lo que pueda y quiera pagar; y, si llega el caso, que pueda pagar sin perjudicar a su
familia.
6 Haragán, ve donde la hormiga; estudia sus caminos y aprende.
7 Sin directores, oficiales, ni gobernantes,
8 ella llena sus almacenes en el verano, recoge su alimento en la cosecha.
9 ¿Hasta cuándo estarás ahí acostado, haragán; cuándo despertarás de tu sueño?
10 Un poco más de dormir, un poco más de dormitar, un poco más de acurrucarte
en la cama,
11 y vendrá la pobreza a llamarte, y la necesidad como un hombre con escudo.
✡ Comentario (Versículos 6-11)
Salomón se dirige ahora al holgazán, al amante de la comodidad, que vive como un haragán
y no se aviene a seguir ningún trabajo ni oficio.
1. Trata primero de instruirle (vv. 6-8), pues los holgazanes deben comenzar por ir a la
escuela. El haragán no quiere ir a la escuela propia de los estudiantes; por eso, el
sabio le envía a una escuela apropiada para él, la más elemental que puede hallar:
«Ve a la hormiga» (v. 6. Lit.) es decir, «anda a su escuela» ¡Qué vergüenza es para
una criatura racional el degenerar de su rango hasta el punto de necesitar ir a un
insecto tan pequeño e insignificante para aprender a trabajar y ganarse el pan de
cada día! Aunque las hormigas viven en sociedad estupendamente organizada,
leemos aquí (v. 7) que no tiene jefes ni capataces en el sentido de que no necesita
que la obliguen por la fuerza a trabajar; le basta su instinto para desempeñar el
oficio que le corresponde dentro de su comunidad. Recogiendo en el verano para
30
tener sustento en el invierno (v. 8), según es su costumbre (así lo da a entender el
tiempo del verbo hebreo), la hormiga nos da una excelente lección, semejante a la
que nos dio el Salvador cuando dijo: «andad entretanto que tenéis luz» (Jn. 12:35) y
«viene la noche cuando nadie puede trabajar» (Jn. 9:4). Y, si es muestra de
prudencia estar prevenido en lo material, ¡cuánto mayor lo será el estar provisto a
tiempo de lo necesario para la vida eterna! Y cuando una hormiga no puede acarrear
un grano de cereal por resultarle pesado en demasía ¡cómo le ayudan otras a
llevarlo! ¡Ojalá existiese entre los creyentes una cooperación similar!
2. De la enseñanza, pasa Salomón a la reprensión (vv. 9-11). (A) Trata de despertarle
la conciencia: « ¿Hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo piensas que será hora de
levantarse de la cama? Al haragán hay que despertarle y hasta obligarle a
levantarse. El creyente haragán es más culpable todavía que el holgazán mundano,
pues tiene mayores motivos para obrar el bien mientras tenemos tiempo. (B) Le
pone al descubierto las excusas con que se cubre para no trabajar: ¿Por qué no se le
permite dormir un poco más? Durmiendo ahora lo suficiente, ¡ya se levantará luego
y recobrará con mayores fuerzas el tiempo perdido! Pero se engaña a sí mismo:
cada vez que se despierta, suplica que se le deje dormir un poco... un poco... otro
poco. Es decir, vive en una continua siesta, como lo describe la postura del v. l0b.
Así se va alargando el «poco» hasta dejar sin hacer los quehaceres más urgentes.
(C) Le amonesta sobre las fatales consecuencias de la pereza (v. 11). La necesidad y
la pobreza vendrán como salteadores que le roban al viajero todo su bagaje. De
modo semejante, y más terrible, el que es perezoso en el servicio de Di-s no puede
esperar otra cosa que la pobreza espiritual.
12 El canalla, el malvado vive hablando perversidades,
13 guiñando el ojo, barajando sus pies, señalando con el dedo.
14 Hay duplicidad en su mente; planea lo malo todo el tiempo; provoca contiendas.
15 Por eso vendrá sobre él la calamidad sin advertencia; en un momento quedará
quebrantado sin remedio.
16 Seis cosas detesta ; siete son una abominación para él:
17 una actitud altiva, una lengua mentirosa, manos que derraman sangre inocente,
18 una mente que fragua planes malvados, pies prestos para correr al mal,
19 un testigo falso que testifica mentiras, y uno que provoca discordias entre
hermanos.
31
✡ Comentario (Versículos 12-19)
1. Si es de condenar al perezoso por no hacer nada, ¿qué diremos de los que se afanan
por hacer todo el mal que pueden? (vv. 12-15). Por «hombre malo» (mejor vil), el
hebreo dice «hombre de Belial» que, en realidad, significa «persona sin valor
alguno»; pero, además, es «varón de iniquidad» (lit.), cuyo oficio es hacer el mal,
especialmente con su boca llena de falsedad y calumnia. Guiñar el ojo, arrastrar
(mejor restregar) los pies y hacer señas con los dedos (v. 13) son gestos que indican
el modo de pasar información secreta a quienes son cómplices en algún pecado.
«Anda pensando el mal» (v. 14), hacer el mal por el mal, sin sacar ningún bien. J. J.
Serrano ve en los siete gestos de 12-14 una cierta correspondencia con las siete
cosas que Di-s abomina (vv. 16-19). El final de este malvado no puede ser más
terrible: (a) La calamidad le llegará de repente, por lo que no podrá evitarla; (b) su
quebrantamiento será sin remedio, porque, como dice Malbim, «no se arrepentirá».
2. Catálogo de cosas que son, de manera especial, odiosas a Di-s y que como hemos
visto, se hallan en el «hombre de Belial». Di-s odia el pecado, pero hay pecados que
abomina de modo especial; todos los que se mencionan en esta lista son
perjudiciales para el prójimo. Lo que Di-s odia, deberíamos odiarlo también
nosotros: (A) Los ojos altivos (v. 17). Se cita primero el orgullo o autosuficiencia,
pues se halla en el fondo de todo pecado; ojo altivo es el que se sobre valora a sí
mismo y subvalora a todos los demás. (B) Después de una mirada altiva, no hay
nada tan odioso a Di-s como una lengua mentirosa; nada tan sagrado como la
verdad, ni nada tan necesario para la vida de relación como decir verdad. (C) Viene
ahora el asesinato del inocente; las manos que derraman sangre inocente llevan
grabada la imagen del diablo (Jn. 8:44, «homicida desde el principio»). (D) Las
maquinaciones perversas (v. 18, comp. con v. 14). Cuanto mayores y más astutas
son las artes empleadas para hacer el mal, tanto más abominable es a Di-s el pecado
que se comete. (E) La prisa y la determinación para correr al mal. La prisa y la
maña que se dan los malos para el mal habrían de avergonzamos a nosotros, que tan
indolentes somos en hacer el bien. (F) El testigo falso (v.19) es, y ha sido siempre,
digno de especial abominación. Basta con leer Dt. 19:16-21 para ver cuán en serio
lo toma Di-s. (o) Sembrar discordia entre hermanos, es decir, no sólo entre
parientes, sino también entre amigos, vecinos, socios, etc. Se incluye aquí el
enajenar los afectos de unos contra otros e incitar las pasiones de unos contra otros,
lo cual no puede menos de ser especialmente abominable al Di-s de amor y de paz.
20 Hijo mío, guarda el mandamiento de tu padre; no olvides la enseñanza de tu
madre.
32
21 Átalos siempre en tu corazón; amárratelos al cuello.
22 Cuando camines te guiará; cuando te acuestes te vigilará; y cuando estés
despierto hablará contigo.
23 Porque el mandamiento es una lámpara, la enseñanza es una luz, y la reprensión
que disciplina es el camino a la vida.
24 Ellas te guardarán de la mujer mala, de la lengua suave de la mujer prohibida.
25 No codicies su belleza ni te dejes cautivar por sus ojos.
26 El último pedazo de pan irá para una ramera; la mujer casada entrampa al
hombre de honor.
27 ¿Podrá un hombre echarse brasas en el pecho sin quemarse las ropas?
28 ¿Podrá un hombre andar sobre tizones vivos sin abrasarse los pies?
29 Lo mismo le pasa al que duerme con la mujer de su prójimo; nadie que la toque
quedará sin castigo.
30 A un ladrón no lo procesan por robar para aplacar su hambre;
31 aunque si lo atrapan tiene que pagar siete tantos; tiene que entregar todo lo que
posee.
32 El que comete adulterio carece de sensatez; solamente el que se quiere destruir
hace tal cosa.
33 Se enfrentará con la enfermedad y la desgracia; su deshonra nunca se borrará.
34 La furia del esposo será apasionada; no mostrará piedad en el día de su
venganza.
35 No aceptará ninguna compensación; no te aceptará un regalo, por grande que
sea.
✡ Comentario (Versículos 20-35)
1. La exhortación general a adherirse fielmente a la palabra de Di-s y a tomarla por
norma y guía de todas nuestras acciones. (A) Hemos de considerar la palabra de Di-
s como luz (v. 23) y como ley (v. 20, 23). Es luz que ilumina el camino e ilumina el
entendimiento para que vaya por el camino que la luz marca (Comp. Sal. 119:105);
luz para los ojos a fin de descubrir la verdad; luz para los pies para ver la ruta que
hay que seguir. La luz de la Escritura es luz segura, pues nos revela verdades de
certeza eterna. También es ley a la que nuestra voluntad ha de someterse. (B)
Hemos de recibirla como mandamiento de nuestro padre y como ley (lit.) de nuestra
madre. Es mandamiento y ley de Di-s, pero nuestros padres nos instruyeron y
educaron en ella y nos acostumbraron a observarla. En realidad, no creemos por lo
que ellos nos dijeron, sino porque hemos experimentado personalmente que
33
proviene de Di-s. Las advertencias, los consejos y preceptos que nuestros padres
nos dieron están de acuerdo con la palabra de Di-s y, por tanto, hemos de adherimos
a ellos firmemente. (C) Hemos de retener la palabra de Di-s y las buenas
instrucciones que, con base en ella, nos dieron nuestros padres: «Guarda el
mandamiento de tu padre... (v. 20) y no lo sueltes: Átalos siempre, no sólo en tu
mano (Dt. 6:8), sino en tu corazón (v. 21). De nada sirven las filacterias si no
suscitan pensamientos piadosos en la mente y santos afectos en el corazón.
«Enlázalos a tu cuello (21b), no sólo como un adorno, sino como guardas que
impidan la entrada del fruto prohibido y la salida de la palabra perversa. Así serán
siempre tu guía perfecta (v. 22). Te guiarán cuando andes, diciendo: «Este es el
camino, anda por él». Velarán por ti cuando duermas, expuesto a inesperados
ataques (Comp. 3:24); y hablarán contigo cuando despiertes, dándote consejo, aviso
y ánimos.
2. Admonición particular contra el pecado de impureza. (A) Cuando consideramos la
abundancia de esta iniquidad, no nos ha de sorprender la frecuencia con que se
repiten las advertencias contra ella. Las reprensiones de la disciplina (v. 23b. lit.)
son camino de vida, ya que están destinadas a guardarte de la mala mujer (v. 24),
quien, con la blandura de su lengua, de cierto ha de conducirte a la muerte; simula
amarte, pero intenta arruinarte. El mayor bien que podemos hacemos a nosotros
mismos es mantenemos lo más lejos posible de ese pecado (v. 25): «No codicies su
hermosura en tu corazón porque, si lo haces, ya habrás cometido interiormente
adulterio con ella (Mt. 5:28); ni te cautive con sus párpados» (lit.). Quizá se refiere
al «guiño» de que ha hablado en el v. 13. Dice el apócrifo Eclesiástico 26:9:«La
lujuria de la mujer se ve en la procacidad de sus ojos, en sus párpados se reconoce». (B) Argumentos con que corrobora Salomón dicha admonición: (a) Es un pecado
que empobrece, reduciendo a los hombres a la miseria (v. 26):«A causa de la
ramera se ve reducido (el hombre) a una hogaza de pan» (lit.). (b) Es un pecado que
conduce a la muerte (v. 26b); recordemos el caso de Sansón y Dalila. (c) Es un
juego peligroso. Así como el que juega con fuego, está en continuo peligro de
abrasarse (vv. 27,28), así también el que toca impúdicamente a la mujer de su
prójimo, no quedará impune (v. 29). Si no se le castiga conforme a la ley, lo
castigará el marido ofendido. (d) Es un pecado más grave que el robo. El que roba
para saciar el hambre no es tomado por un villano (el v. 30 ha de leerse sin signos
de interrogación); aun cuando sea sorprendido robando, le bastará con restituir lo
robado (v. 31), pero el que comete adulterio, no dispone de este recurso para
descargarse de responsabilidad, pues el marido ofendido no aceptará pago ni
excusas (vv. 34-35). (e) Produce insensatez, dolores e infamia (vv. 32, 33).
Recuérdese la insensatez de Sansón al descubrir a Dalila el secreto de su fuerza.
Recuérdese el pecado de David en el asunto de Betsabé: Hirió su propio buen
34
nombre, llevó deshonra a su familia, ocasionó graves desastres a su descendencia y
dio ocasión a los enemigos de Israel para blasfemar el santo nombre de Di-s.
35
✡ PROVERBIOS 7 ✡
1 Hijo mío, atiende a mis palabras; y atesora contigo mis mandamientos.
2 Guarda mis mandamientos y vivirás, mi enseñanza como la niña de tus ojos.
3 Átatelos en los dedos, escríbelos en la tabla de tu mente.
4 Dile a la sabiduría: ―Tú eres mi hermana‖, y llama pariente al entendimiento.
5 Ella te guardará de la mujer prohibida; de la mujer extranjera cuya habla es
suave.
6 Desde la ventana de mi casa, a través de mi persiana, miré hacia afuera
7 y vi entre los inexpertos, noté entre los jóvenes, a un muchacho falto de
sensatez.
8 Iba cruzando la calle cerca de la esquina, caminando hacia su casa
9 en el crepúsculo de la tarde, en las horas oscuras de la noche.
10 Se le acerca una mujer vestida como una ramera, con propósitos fijos.
11 Ella es inquieta y caprichosa; no para en su casa.
12 Se pasa en la esquina y en la plaza, acechando en cada esquina.
13 Ella le echó mano y lo besó; con picardía le dijo:
14 ―Tuve que hacer un sacrificio de bienestar; hoy cumplí mis votos.
15 Por eso he salido por ti, buscándote, y te he encontrado.
16 He adornado mi cama con colchas de lino egipcio teñido;
17 he perfumado mi cama con mirra, áloe y canela.
18 Ven, embriaguémonos de amor hasta la mañana; deleitémonos en un abrazo de
amor.
19 Porque el hombre de la casa está lejos; salió a un largo viaje.
20 Se llevó consigo la bolsa de dinero y no volverá hasta mediados de mes.
21 Ella lo convenció con la elocuencia de sus palabras, lo arrastró con su habla
zalamera.
22 Sin pensarlo la siguió, como buey al matadero, como necio al lugar de castigo
23 –hasta que la flecha le atraviesa el hígado, es como un pájaro que se apresura
hacia la trampa, sin saber que su vida peligra.
24 Ahora, hijos, escúchenme; presten atención a mis palabras;
25 que tu mente no se fije en los caminos de esa; no te extravíes en sus sendas.
26 porque muchos son los que han muerto por ella, y numerosas son sus víctimas.
36
27 Su casa es un camino ancho a la Fosa, que lleva a los cuartos interiores de la
Muerte.
37
✡ PROVERBIOS 8 ✡
1. La revelación divina es palabra y sabiduría de Di-s, y la religión pura e
incontaminada (Stg. 1:27) está edificada sobre ella; de eso habla Salomón aquí (vv. 1-21).
Di-s instruye, gobierna y bendice a los hombres por medio de su sabiduría.
2. El Verbo eterno de Di-s es la Sabiduría en persona. El es la Sabiduría que habla a los
hombres en la primera parte del capítulo, y el que está asociado al Padre en la obra de la
creación (vv. 22-31).
3. Concluye con una insistente exhortación a prestar atención a la voz de Di-s en su palabra
(vv. 32-36).
1 Es la sabiduría que llama, el entendimiento que levanta su voz.
2 Ella se para en las mayores alturas, por el camino, en las encrucijadas,
3 cerca de las puertas a la entrada de la ciudad; en los portones, clama:
4 ―Hombres, a ustedes llamo; mi clamor es para toda la humanidad.
5 Ustedes inexpertos, aprendan astucia; tontos, instruyan su mente.
6 Escuchen, que yo hablo cosas nobles; la rectitud brota de mis labios.
7 Mi boca expresa la verdad; la iniquidad es aborrecible para mis labios.
8 Todas mis palabras son justas, ninguna de ellas es perversa o torcida;
9 todas son directas para el inteligente, y correctas para el que ha logrado
conocimiento.
10 Acepten mi disciplina en vez de la plata, mi conocimiento en vez de oro selecto.
11 Porque la sabiduría es mejor que los rubíes; no hay bien que la iguale.
✡ Comentario (Versículos 1-11)
1. Las cosas reveladas son fáciles de conocer, pues pertenecen a nosotros y a nuestros
hijos (Dt. 29:29) y, por eso, son proclamadas de alguna manera por las obras de la
creación (Sal. 19:1); con mayor fuerza, por la conciencia humana y por las razones
eternas del bien y del mal; pero, con la mayor claridad, por medio de Moisés y de
los profetas. Los preceptos de la sabiduría son proclamados en voz alta (v. 1): « ¿No
dama la sabiduría?» Sí; como todo pregón importante, dama a voz en
cuello (Is. 58:1). En tres lugares, los cuales se expresan aquí (vv. 2, 3), se
pronunciaban en voz alta los pregones: en las alturas, en los cruces de caminos y en
38
la entrada de la ciudad. El corazón nos grita a veces, pues la conciencia tiene sus
clamores como tiene sus susurros. Desde lo alto del Sinaí se dio la Ley. La sabiduría
no se oculta, no habla por los rincones a unos pocos iniciados, sino en público y a
todos, desde lugares altos, desde los que puede ser vista y oída, en las encrucijadas
por las que transitan los viajeros, y a la entrada de la ciudad. Los necios no saben
por dónde ir a la ciudad (Ec.10:15); por eso está la sabiduría colocada, no sólo en
la encrucijada, para que nadie yerre el camino, sino también a la entrada de la
ciudad, presta a comunicar el lugar donde vive el vidente (1 5. 9:18). Repetidamente
insiste: «¡Oh, hombres, a vosotros clamo». A los hombres, no a los ángeles, que no
lo necesitan; ni a los demonios, que ya no pueden aprovecharse de ello; ni a los
brutos animales, que carecen de la capacidad natural para entenderlo. Su designio es
enseñar a los hombres discreción y cordura (v. 5. Comp. con 1:4); en especial, a los
que carecen de sano entendimiento.
2. Las cosas reveladas son dignas de aceptación. Son «excelentes» (v.6.
lit. «príncipes», esto es, «expresiones principescas»); con razón se llaman así,
puesto que se refieren a un Di-s eterno, a un alma inmortal y a un estado perpetuo -
para bien o para mal. Son también «rectas» (v. 6b. Comp. 1:3), verdaderas,
sinceras y razonables, sin mezcla de falsedad o torcedura (vv. 7-9). No hay en las
verdades divinas nada duro, nada que lastime la dignidad ni la libertad del ser
humano. Toda palabra de Di-s es verdad (Jn. 17:17); si y amén; nunca sí y no (2 Co.
1:18-20). Si son libro sellado, sólo lo son para quienes voluntariamente lo ignoran.
3. El recto conocimiento de esas cosas ha de ser preferido a todas las riquezas de este
mundo (vv. 10, 11): «Recibidme instrucción y no la plata, es decir, preferid mi
instrucción a cualquier riqueza de este mundo». No sólo es preferible la sabiduría a
la plata y al oro, sino también a las piedras preciosas y a cuanto se puede
desear. Además de ser de mayor valor, también se ofrece a mejor precio, pues se
obtiene gratis.
12 ―Yo, la Sabiduría, vivo con la Prudencia; yo logro conocimiento y previsión.
13 Respetar a es odiar el mal; yo odio el orgullo, la arrogancia, el camino
malo, y la duplicidad en el habla.
14 Míos son el consejo y la destreza; yo soy el entendimiento; el valor es mío.
15 Por mí reinan los reyes y los gobernantes decretan leyes justas;
16 por mí gobiernan los príncipes, los grandes, y todos los jueces justos.
17 Al los que me aman los amo, y los que me buscan me encuentran.
18 Las riquezas y el honor me pertenecen, la riqueza duradera y el éxito.
19 Mi fruto es mejor que el oro, oro fino, y mi producto mejor que plata selecta.
20 Yo ando por el camino de la rectitud y en las sendas de la justicia.
39
21 Yo le otorgo riquezas a los que me aman; llenaré su tesorería.
✡ Comentario (Versículos 12-21)
1. La sabiduría divina da a los hombres buena cabeza (v. 2): «Yo, la sabiduría, habito
con la cordura». Así que quien se familiariza con la aquí personificada sabiduría, se
familiariza también con esa cualidad tan deseable. Esa cordura no se aprende en los
teoremas de los matemáticos ni en los axiomas de los filósofos ni en las normas de
los estadistas, sino en las verdades de la palabra de Di-s.
2. También da a los hombres buen corazón (y. 13): El principio de la sabiduría y del
conocimiento es el temor de Di-s (1:7; 9:10. V. también Job 28:28; Sal. 111:10;
Ec. 12:15). Y el que teme a Di-s, aborrece el mal (v.13); especialmente, el orgullo,
la arrogancia, el mal camino y la boca perversa, que son los pecados más
peligrosos.
3. Tiene gran influencia en los asuntos públicos (v. 14); consejo, acierto, inteligencia y
poder son cualidades de incalculable valor para quienes están en puestos de
autoridad; quienes carecen de estas virtudes conducen la sociedad al desastre
político, social y económico. Por eso, añade (vv. 15, 16): «Por mí reinan los reyes,
etc», es decir, por ella reinan con tino, tacto, justicia y equidad. De los gobernantes
que temen a Di-s puede y debe esperarse que conduzcan rectamente los asuntos
públicos.
4. Hace dichosos a los que la reciben (vv. 17-21). Estos versículos vienen a ser una
ampliación de lo dicho en los vv. 10 y 11. «Yo amo a los que me aman» v. 17. Así
se lee en todas las versiones, aunque el texto hebreo dice: «la aman»). Los
que «madrugan» (y. 17b) para buscar la sabiduría son los que no perdonan esfuerzo,
estudio y oportunidades para alcanzarla. Los rabinos dicen: «Si alguien asegura:
"Yo me esforcé y no la hallé", no le creáis». Se otorga especialmente a los que con
interés y fe la suplican a Di-s en oración (Stg. 1:5 y ss.). Las riquezas que la
sabiduría ofrece son «duraderas» (v. 18), pues van acompañadas de justicia, y por
eso, son las únicas que se reconocen válidas en la aduana de los cielos (v. Ap.
14:13) y forman parte de la heredad (y. 21) incorruptible a la que se refiere el
apóstol Pedro (1 P. 1:4). Es una dicha que subsiste por sí misma, inserta en la
persona misma, sin el soporte de conveniencias o circunstancias exteriores. Las
cosas eternas y espirituales son las únicas que poseen solidez real y sustancial; no
sólo llenan las manos, sino también las arcas. Los bienes de este mundo
pueden llenar el vientre (Sal. 17:14), pero no las arcas, pues no pueden conservar
por muchos años sus bienes.
40
22 ― me produjo al principio de su camino como la primera de sus obras de
antaño.
23 En el pasado distante fui formada, al principio, en el origen de la tierra.
24 No había abismo cuando fui producida, ningún manantial rico en agua;
25 Antes de que se afianzaran [los fundamentos de] las montañas, antes de las
colinas nací yo.
26 El no había hecho todavía la tierra y los campos, ni los primeros terrones de
barro del mundo.
27 Yo estaba allí cuando él puso el cielo en su lugar; cuando fijó el horizonte sobre
el abismo;
28 cuando afirmó el cielo arriba, y brotaron las fuentes del abismo;
29 cuando le asignó sus límites al mar, para que sus aguas nunca transgredieran su
mandato; cuando fijo los fundamentos de la tierra,
30 yo estaba con él como confidente, una fuente de deleite cada día, gozándome
delante de él todo el tiempo,
31 gozándome en su mundo habitado, deleitándome con la humanidad.
✡ Comentario (Versículos 22-31)
Aquí la sabiduría aparece personificada con propiedades y acciones netamente personales y,
aun cuando pueda hablarse de una personificación poética, no cabe duda de que esta porción
forma el trasfondo de Juan 1:1 y SS. Viene, pues, a ser una anticipación de la doctrina
claramente revelada en el N.T. acerca del Verbo de Di-s, y en este sentido podemos
interpretar esta porción. Con respecto a este Verbo de Di-s, obsérvese:
1. Su personalidad distinta; es uno con el Padre (Jn. 10:30), pero es persona distinta de
la del Padre. «En el principio» (v. 22, comp. con Jn. 1:1), antes de que formase la
tierra (v. 23), los abismos, esto es, las aguas de los océanos (v. 24) y los mismos
cielos (v. 27), allí estaba ya la sabiduría, el Verbo, producido (v.
22), instalado (probable sentido del v. 23) y engendrado (vv. 24, 25) por Di-s.
Si allí estaba ya en el principio, antes de la creación del Universo y, por tanto, antes
de nuestro tiempo, está claro que existía desde la antigüedad.
2. Su intervención en la obra creadora de Di-s. No sólo tenía su ser antes de la
creación del mundo, sino que estaba presente en tal creación y su presencia era, no
la de un espectador, sino la de un arquitecto. El Verbo es el ordenador del Universo
(v. 30), puesto que, en él, por él y para él fueron hechas todas las cosas (Col. 1:16,
17). El es el arquitecto y el plano. Cuando en el primer día de la creación, dijo Di-
41
s: « ¡Haya luz!» (Gn. 1:3), este Verbo era su Palabra omnipotente. Igualmente
intervino en la creación de todo lo demás: «todo» (v. 30).
3. La suma complacencia que en él tuvo el Padre, y él en el Padre: «Era su delicia de
día en día, etc.» (v. 30b). En él ha tenido siempre su complacencia Di-s (Lc. 3:22,
entre otros lugares). Siempre hizo lo que veía hacer al Padre (Jn. 5:19) y lo que al
Padre agradaba (Jn. 8:29), obró conforme al mandamiento que había recibido del
Padre (Jn. 10:18), y en él tenía el Padre contentamiento (Is. 42:1). Puede también
entenderse de la satisfacción que mutuamente sentían con referencia a la gran obra
de la redención del hombre. En efecto, vemos que la Sabiduría se deleitaba en los
hijos de los hombres, más bien que en los más ricos productos de la tierra.
32 Ahora, hijos, escúchenme; felices son los que guardan mis caminos.
33 Háganle caso a la disciplina y háganse sabios; no la desprecien.
34 Feliz el que me escucha, que viene temprano a mis puertas cada día, que espera
tras mi puerta.
35 porque el que me encuentra, encuentra la vida y obtiene favor de .
36 Pero el que me pierde se destruye a sí mismo; todos los que me odian aman la
muerte‖.
✡ Comentario (Versículos 32-36)
Aplicación del discurso de la Sabiduría; su designio y tendencia es incitar a todos a
someterse a las leyes religiosas y a rectificar todo lo que no marcha bien en nuestro corazón
y en nuestra vida.
1. Exhortación a escuchar y obedecer la voz de la Sabiduría, y poder así discernir la
voz del Mesías, como conocen las ovejas la voz de su pastor: «Ahora, pues, hijos,
oídme» (v. 32). Que lean la palabra escrita, que se sienten bajo la palabra predicada,
que bendigan a Di-s por ambas y le oigan en ambas hablándoles a ellos. Que los
hijos de la Sabiduría la justifiquen escuchándola. Oigamos las palabras de la
sabiduría con corazón bien dispuesto (v. 33): «Atended mi
instrucción (hebr. musar)... No la menospreciéis, como si no la necesitaseis. Se os
ofrece como un gran beneficio y corréis un grave peligro si la rehusáis. Hemos de
buscar y escuchar la voz de la Sabiduría velando a sus puertas cada día (v. 44),
como mendigos para recibir una limosna, como clientes y pacientes para recibir un
buen consejo, y como siervos para esperar con humildad lo que el amo se digne
darnos o mandarnos.
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2. Seguridad de felicidad para todos los que escuchan a la Sabiduría. Hallarán lo que
buscan ¿Recibirán recompensa si la hallan? Sí (v. 35): «El que me halle, hallará la
vida» (comp. 1 Jn. 5:12), es decir, todo bien que pueda necesitar o desear.
3. La sentencia pronunciada contra los que rechazan las exhortaciones de la Sabiduría
(v. 36): Se arruinan a sí mismos, y la Sabiduría no lo va a impedir, por cuanto se
han negado a escucharla; han actuado en rebelión contra Di-s y en contradicción a
los propósitos de Di-s, que son para vida y no para muerte.
43
✡ PROVERBIOS 9 ✡
El Mesías y el pecado rivalizan por apoderarse del corazón del hombre. El objeto de este
capítulo es poner delante de nosotros la vida y la muerte, el bien y el mal; y basta con
proponer la alternativa en sus términos precisos para que podamos decidir lo que hemos de
escoger.
1. El Mesías, bajo el nombre de la Sabiduría, nos invita a su banquete para entrar en
comunión con él (vv. 1-6) y, después de predecir las diferentes respuestas a su invitación (vv.
7-9), muestra lo que requiere de nosotros (v. 10) y lo que nos tiene preparado si aceptamos
(v. 11), dejando luego a nuestra elección lo que hemos de hacer (v. 12).
2. El pecado, bajo la caracterización de una mujer insensata, nos invita también a su festín
(vv. 13-16), presentándolo muy atractivo (v. 17).
3. Pero Salomón nos advierte de lo que le espera al que acepta la invitación del pecado.
1 La sabiduría ha edificado su casa, ha tallado sus siete columnas.
2 Ha preparado la fiesta, ha mezclado el vino, y también ha preparado la mesa.
3 Ha enviado a sus criadas a anunciar en las alturas del poblado:
4 ―Que los inexpertos entren aquí‖; a los privados de sentido les dice:
5 ―Vengan, coman de mi comida y beban del vino que he mezclado;
6 dejen la inexperiencia y vivan, caminen en el camino del entendimiento‖.
7 Corregir a un burlador, o reprender a un malvado por su falta, es llamar el abuso
sobre uno mismo.
8 No reprendas a un burlador, porque te odiará; regaña a un sabio, y te amará.
9 Instruye a un sabio, y se hará más sabio; enseña a un justo, y crecerá en
conocimiento.
10 El principio de la sabiduría es el respeto a , y conocer al Santo es
entendimiento.
11 Porque por mí se aumentarán tus días, y se añadirán años a tu vida.
12 Si eres sabio, eres sabio para ti; si eres un burlador, lo llevas tú solo.
44
✡ Comentario (Versículos 1-12)
La Sabiduría es presentada aquí como una reina magnífica, grande y generosa. El vocablo
está en plural (sabidurías»), lo mismo aquí (v. 1) que en 1:20; es, con toda probabilidad,
plural de intensidad y perfección, pues en El Mesías están escondidos todos los tesoros de la
sabiduría (Col. 2:3).
1. La rica provisión que la Sabiduría ha hecho para la recepción de cuantos deseen ser
sus discípulos. (A) La recepción se va a celebrar en un majestuoso, regio, palacio
(v. 1). No hallando una casa lo bastante espaciosa para todos sus invitados, ha
edificado ex profeso este gran palacio y ha labrado sus siete columnas. Siete es
número de perfección. Según Cohen, se indica aquí «una mansión edificada en
tomo a un patio, con la estructura del edificio sostenida por tres columnas en cada
lado y una en el centro del tercer lado, dando cara al espacio abierto que es la
entrada». Podemos ver aquí una prefiguración del banquete de bodas del Cordero
(Ap. 19:7-10) y de las mansiones preparadas en la casa del Padre para los creyentes
(Jn. 14:2, 3). (B) Allí se va a celebrar un opíparo banquete (v. 2): «Mató sus
víctimas, mezcló su vino y puso su mesa». Es una mesa bien preparada, con todas
las satisfacciones que un alma pueda desear -justicia y gracia, paz y gozo, la
seguridad del amor de Di-s, la consolación del Espíritu y todas las garantías y arras
de la vida eterna.
2. La generosa invitación que hace, no a unos pocos, especiales, amigos, sino a todos
en general (v. 3): «Envió sus criadas a invitar». Los ministros del evangelio son
comisionados a dar noticia de las preparaciones que Di-s ha hecho, en el pacto
eterno, para todos los que quieran atenerse a los términos del mismo. Han de
predicarlo con pureza virginal, sin corromperse a sí mismos ni a la palabra de Di-s y
con exacta observancia de las órdenes que les han sido dadas, exhortando a todos a
venir al banquete que la Sabiduría ha preparado (comp. con Lc. 14:17, 23). Hay
invitación especial para los faltos de cordura y para los simples (vv. 4-6). La
Sabiduría urge a éstos con su invitación, pues son los que más la necesitan ¿Y quién
podrá decir que tiene una mente sana del todo? Equivaldría a decir que no tiene
pecado (1 Jn. 1:8). Somos, pues, invitados todos a su mesa (v. 5, comp. con
Is. 55:1): «Venid, comed de mi pan, es decir, de mis exquisitas viandas», pues
viandas exquisitas son el conocimiento, el temor y el amor de Di-s. Apropiándonos
por fe las promesas del evangelio, nos alimentamos de las provisiones que El
Mesías ha preparado para las almas perdidas. Pero hemos de romper con el pecado
(v. 6): «Dejad las simplezas y viviréis». Como diciendo: «No os contentéis con vivir
como animales; vivid como hombres; vivid espiritualmente y viviréis
eternamente» (Ef. 5:14).
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3. Instrucciones que da la Sabiduría, tanto a los ministros del evangelio como a todos
los que, en sus respectivos lugares, se esfuercen en servir a los designios de ella. Su
trabajo ha de consistir, no sólo en notificar en general los preparativos hechos para
las almas, sino que deben dirigirse en particular a los individuos, corrigiendo,
reprendiendo, enseñando (vv. 7-9), pues ése es el objetivo de la palabra de Di-s (v.
2 Ti. 3:16, 17). Sin embargo, añade (v. 9): «No reprendas al escarnecedor», puesto
que al escarnecedor (v. 15:12, el mismo vocablo que aquí) no le gusta que le
reprendan. Así también dijo El Mesías a sus discípulos, refiriéndose a los fariseos:
«Dejadlos» (Mt. 15:14. v. también Mt. 7:6). Hallarán también a otros dispuestos a
escuchar ¡Gracias a Di-s que no todos son escarnecedores! El sabio bien corregido
se hace más sabio (v. 9); crecerá en conocimiento y en gracia.
4. Instrucciones que las criadas enviadas por la Sabiduría han de inculcar en los
invitados: (A) Han de enseñarles en qué consiste la verdadera sabiduría (v. 10): «El
principio de la sabiduría es el temor de », afirmación semejante a la de 1:7,
pero con dos variantes que expone así Cohen: «Se emplea una palabra diferente
para principio; aquí significa el requisito esencial; allí denota el principal
ingrediente. Sabiduría sustituye a conocimiento por adaptarse mejor al contexto que
se refiere al "sabio"».
Esta es, pues, la condición esencial para alcanzar la sabiduría. (E) Han de darles a
conocer los beneficios que procura esta sabiduría (v. 11): «Porque por mí se
aumentarán tus años», es decir, contribuirá a la salud del cuerpo, con la
consiguiente longevidad. (C) También han de darles a conocer las consecuencias de
aceptar o de rechazar esta invitación (v. 12): «Si eres sabio, para tu provecho lo
serás.; tú serás el ganador, no la Sabiduría; y si eres escarnecedor, lo pagarás tú
solo».
13 La mujer tonta andareguea por ahí; es inexperta y no sabe nada.
14 Se sienta a la puerta de su casa, o en una silla en las alturas del poblado,
15 llamando a todos los transeúntes que van a sus asuntos:
16 ―Que los inexpertos entren aquí‖; y a los privados de sentido les dice:
17 ―Las aguas robadas son dulces, y el pan que se come en lo oculto es sabroso‖.
18 Ella no sabe que las sombras están allí, que sus huéspedes están en las
profundidades de la Fosa.
✡ Comentario (Versículos 13-18)
Veamos ahora las mafias de que se sirve el tentador para desviar a los ignorantes por las
sendas del pecado.
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1. Quién es el tentador -da mujer de insensatez» (v. 13. Lit.). Así como la sabiduría
aparece personificada en una mujer, también la necedad aparece personificada en
otra mujer. Se la describe como simple e ignorante, además de alborotadora (el
mismo vocablo de 7:11). Bien le cuadra el epíteto de insensatez, pues profana la
mente y llena de estupidez la conciencia ¿Qué otra cosa puede hacer, siendo simple
e ignorante? «Se sienta en una silla a la puerta de su casa (v. 14) y, como la
sabiduría, también se coloca en los lugares altos de la ciudad» para ser vista y oída
por todos.
2. Quiénes son los tentados -jóvenes que han sido bien educados y van por el camino
de la religión y de la virtud: «van por sus caminos derechos» (v. 15); al revés que el
joven de 7:8, no va camino de la casa de ella. Pero son jóvenes inmaduros, simples
y faltos de cordura (v. 16) y, por eso, son fácil presa de la insensatez, la cual les
invita a venir a su escuela para que se curen del freno y de las formalidades de su
religión.
3. Cuál es la tentación -das aguas hurtadas son dulces y el pan comido en oculto es
sabroso» (v. 17). Agua y pan, eso es todo, mientras que la Sabiduría invita a comer
de los animales que ha matado y a beber del vino que ha mezclado. Sin embargo, el
pan y el agua son suficientes para quienes tienen hambre y sed, especialmente
cuando son hurtados y se toman en secreto por miedo a ser descubiertos. El fruto
prohibido siempre atrae más que el fruto permitido.
4. Un antídoto efectivo contra la tentación (v. 18). El que carece de cordura y es
desviado del camino recto por oír los cantos de sirena de la insensatez, se precipita a
sí mismo, en su ignorancia, en una ruina inevitable:
«No sabe el hombre que allí están los muertos» (lit. las sombras). Es decir, no se ha
dado cuenta de que la casa de la insensatez es la puerta que conduce al Sheol [la
Fosa].
47
✡ PROVERBIOS 10 ✡
Hasta ahora nos hemos hallado en el pórtico o prefacio de los proverbios. Ahora comienzan.
Son frases breves, pero sentenciosas, serias; la mayor parte de ellas son dísticos, es decir, dos
frases en un solo versículo, iluminándose mutuamente; pero raras veces se halla entre los
versículos suficiente coherencia como para distribuirlos en secciones. Así que los
consideraremos por separado. Gran parte de los proverbios de este capítulo tratan del buen
gobierno de la lengua.
1 Los proverbios de Salomón: Un hijo sabio le trae gozo a su padre; un hijo lerdo
es la tristeza de su madre.
✡ Comentario (Versículos 1)
El consuelo de los padres depende, en gran medida, de la buena conducta de sus hijos. Los
hijos deben comportarse sabiamente y vivir conforme a la buena educación que se les ha
dado, para alegrar así el corazón de sus padres. También ellos pueden alegrarse de que, de
esta manera, hacen algo para recompensar a sus padres de los cuidados y fatigas que se
tomaron con ellos.
2 La riqueza mal adquirida no vale la pena, pero la rectitud salva de la muerte.
3 no dejará que el justo pase hambre, pero le niega a los malvados lo que
desean.
✡ Comentario (Versículos 2-3)
Estos dos versículos persiguen un mismo objetivo. Las riquezas mal adquiridas no serán de
provecho; al menos, no lo serán en el día de la ira (comp. con 11:4). Así que, por grande que
sea la ganancia material adquirida de esta forma, nunca podrá compararse con la pérdida
colosal que le espera (Mt. 16:26). En cambio, la justicia libra de la muerte. El vocablo
hebreo tsedakah, justicia, pronto recibió el significado especial de "beneficencia" (comp. con
Dan 4:24). Esto no quiere decir que las limosnas puedan procurar al hombre la salvación,
sino que son como un escudo que defiende contra el ángel exterminador y hacen que el
48
castigo de Di-s no sea tan fuerte ni llegue tan pronto. Di-s rechaza (lit. arroja) la
ambición (lit. el deseo) de los malvados (v. 3). Muchas veces, la justicia de Di-s esparce lo
que la injusticia del hombre ha reunido.
4 Las manos negligentes causan pobreza, pero las manos diligentes se enriquecen.
✡ Comentario (Versículos 4)
Por el camino de la pobreza caminan los perezosos. Ordinariamente, los perezosos acuden al
fraude, al robo, etc., para hacerse con dinero, pero al ser descubiertos, se encuentran con la
infamia, junto con la miseria. El cuarto mandamiento del Decálogo (Ex. 20:9-11) da la
misma importancia, o mayor, al trabajo de los seis días que al descanso del sábado. En los
proverbios, se tiene en cuenta especialmente la ociosidad como causa de pobreza. «El que no
trabaje, que no coma» era ya un aforismo rabínico que el apóstol recogió (2 Ts. 3:10).
5 El que almacena durante el verano es un hijo capaz, pero el que duerme durante
la cosecha es un incompetente.
✡ Comentario (Versículos 5)
Este proverbio guarda conexión con el anterior y nos recuerda lo de 6:6-11. Los que
aprovechan las oportunidades para proveerse de lo que les será innecesario después, recogen
en el verano, que es el tiempo de la cosecha. Este es "hijo de sensatez" (lit). En cambio, el
que duerme en verano, que es cuando tendría que recoger para el invierno, es hijo de
vergüenza (lit), pues es un hijo insensato, cuya insensatez se descubrirá especialmente
cuando llegue el invierno.
6 Las bendiciones alumbran sobre la cabeza del justo, pero la maldad cubre la boca
del malvado.
✡ Comentario (Versículos 6)
Gran variedad de bendiciones descenderán de arriba (v. Stg. 1:17) y se posarán visiblemente
sobre la cabeza del justo. Le servirán de diadema para dignificarle y de yelmo para
protegerle. La segunda parte, repetida en v. 11b, puede traducirse de dos modos
49
complementarios: «La boca de los malvados esconde violencia», en el sentido de tramar la
ruina de su prójimo; o, «La violencia cubre la boca de los malvados», en el sentido de que la
violencia engendra violencia que recae sobre los que comenzaron a practicarla.
7 El nombre del justo se invoca en bendiciones, pero la fama del malvado está
podrida.
✡ Comentario (Versículos 7)
Tanto el justo como el malvado han de morir cuando se les cumpla el tiempo. En el sepulcro,
no se aprecia diferencia visible entre los cuerpos de unos y otros; pero entre el alma de unos
y la de otros hay una gran diferencia. Los justos dejan tras de sí recuerdos de bendición, pues
los que honran a Di-s serán honrados por Di-s (v. Sal. 112:3, 6, 9), y deber de los
sobrevivientes es honrar la memoria de los justos. Los malos, en cambio, serán olvidados o
recordados con odio y desprecio.
8 El que tiene el corazón recto acepta mandatos, pero el que tiene habla necia
llega a sufrir.
✡ Comentario (Versículos 8)
El obediente tendrá por privilegio estar bajo el gobierno de otros y que le señalen su deber.
En esto está su sabiduría, pues será estimado y promovido, respetado y querido. En
cambio, el necio de labios (lit. como en el v. 10) corre a la ruina,, pues con tanto hablar sin
sentido, no trabaja, ni obedece ni escucha el buen consejo; con ello, nunca aprende, sino que
cambia constantemente de oficio, siempre fracasa y acaba en ruina.
9 El que vive intachablemente vive con seguridad, pero al que camina por
caminos torcidos lo encontrarán.
✡ Comentario (Versículos 9)
La integridad es garantía de seguridad; en cambio, el que pervierte sus caminos será
descubierto, pues, tarde o temprano, se darán cuenta los demás de que sus caminos eran
torcidos, pues algún día le sobrevendrá la desgracia. El hombre íntegro goza de la bendición
50
de Di-s y puede caminar por la vida con humilde osadía, bien armado contra las tentaciones
de Satanás, las tribulaciones del mundo y los reproches de los hombres. La deshonestidad de
una persona redundará en su propia infamia; será descubierto.
10 El que guiña el ojo provoca tristeza; el que tiene habla necia llega a sufrir.
✡ Comentario (Versículos 10)
Guiñar el ojo es uno de los gestos que descubren al malvado (6:13) en sus planes maliciosos
contra alguna persona, causando así disgustos, no sólo a la persona perjudicada, sino también
a sí mismo cuando de algún modo se descubren sus tramas, y a sus cómplices con quienes se
confabula por medio de tales gestos. Quizá tarde más en caer que el necio de labios, pero su
caída será peor, pues todos aborrecen más al perro que muerde sin ladrar, que al que ladra sin
morder.
11 La boca del justo es una fuente de vida, pero la maldad cubre la boca del
malvado.
✡ Comentario (Versículos 11)
¡Cuán beneficioso es el hombre bueno, pues comunica su bondad! Su boca, la puerta de
salida de la mente, es manantial de vida; es una fuente que mana palabras de edificación, de
consuelo, de consejo, de refrigerio. Para la segunda parte, véase lo dicho en el v. 6b.
12 El odio provoca contiendas, pero el amor cubre todas las faltas.
✡ Comentario (Versículos 12)
El gran sembrador de males es el odio, el cual, aun sin ser provocado, busca ocasiones de
hacer el mal, de sembrar rencillas entre amigos y aun entre hermanos, causando divisiones,
riñas y guerras. El odio es hijo del egoísmo y de la envidia, y padre de todos los demás
males. Goza en hacer el mal y se irrita ante el bien, la paz, la virtud. En cambio, el amor es el
gran sembrador de bienes. Procura la paz y excusa las faltas de los demás. Tiende a echar
todo a buena parte y así cubre (de modo que no se vean) todas las faltas (comp. con 1 Co.
13:4). Así se ha de entender siempre este proverbio, que vuelve a ocurrir en 17:9, Stg. 5:20;
51
1 P. 4:8. El amor, en lugar de proclamar y presentar como más grave la ofensa, la excusa
tanto como puede ser excusada. Y, cuando no se puede negar el hecho, tiende a pensar que
no hubo mala intención, sino que fue un descuido.
13 La sabiduría se ha de encontrar en los labios del inteligente, pero hay una vara
lista para la espalda del insensato.
✡ Comentario (Versículos 13)
Gran honor es para un buen hombre ser sabio, pero todavía mayor servir de instrumento para
hacer sabios a otros. Dice Gerondi: «De los labios de una persona que tiene el suficiente
discernimiento para trazar distinciones correctas entre lo que está bien y lo que está mal,
entre la verdad y el error, pueden oírse palabras de sabiduría concernientes incluso a materias
que él no aprendió». En cambio, los que carecen de esta cualidad necesitan ser llevados por
la fuerza en la dirección que deben tomar, como hace el jinete para conducir y apresurar (o
frenar) a la cabalgadura.
14 El sabio acumula conocimiento; la boca del necio es una ruina inminente.
✡ Comentario (Versículos 14)
Obsérvese, 1. Que es propio de sabios hacerse con un buen almacén de conocimientos
útiles, atesorándolos para no olvidarlos y para emplearlos en el momento oportuno.
Precisamente se halla la sabiduría en sus labios (v. 13), porque está atesorada en el corazón.
2. Que es de necios hablar mucho, pues así descubren la necedad que llevan en el corazón;
esta necedad no es simplemente ignorancia, sino que lleva maldad, por la que causan daño a
otros y a sí mismos.
15 La riqueza de un rico es su fortaleza; la pobreza del pobre es su ruina.
✡ Comentario (Versículos 15)
Los ricos se consideran felices a sí mismos por los bienes materiales que poseen, pero es un
error. En su opinión, las riquezas son su ciudad fortificada, pero no pueden protegerles del
peor de los males. Los pobres, por su parte, se consideran desgraciados por carecer de la
mayoría de las cosas que poseen los ricos; pero también se equivocan, pues una persona
52
puede ser feliz contentándose con poco y poseyendo una buena conciencia. Así se vive por
fe, que no es lo mismo que vivir por ocio.
16 El trabajo del justo le gana la vida; el producto del malvado le gana la necesidad.
✡ Comentario (Versículos 16)
La obra (mejor, lo que se gana con esfuerzo honesto) del justo es para vida, entendiendo
primordialmente este vocablo en el sentido de 27:27:‘mantenimiento’ para sí y páralos suyos,
aun para dar a otros que estén más necesitados (Ef. 4:28). En cambio, el fruto (ya sea del
trabajo o adquirido de otra manera) del impío es para pecado, pues le sirve de combustible
para su orgullo y su lujuria, haciéndole daño en lugar de bien.
17 El que sigue la disciplina muestra el camino a la vida, pero el que ignora la
reprensión se extravía.
✡ Comentario (Versículos 17)
Por buen camino van los que no sólo reciben instrucción, sino que también la retienen para
gobernarse por ella, así como para poder con ella instruir a otros. Por mal camino van los que
rechazan la instrucción; no quieren que se les diga cuáles son sus obligaciones, porque así se
les descubre lo mal que las cumplen. El viajero que equivoca su camino y no consiente en
que se le muestre la verdadera dirección, no puede menos de errar el camino de la vida.
18 El que esconde el odio tiene lengua mentirosa, mientras que el que suelta la
calumnia es un torpe.
✡ Comentario (Versículos 18)
Este versículo presenta, a primera vista, cierta anomalía, pues no se halla el consabido
contraste entre el bueno y el malo, pero es probable que Salomón quisiera aquí contraponer
dos extremos igualmente viciosos: La hipocresía en que la necedad y la maldad se encubren
por medio del disimulo y de la adulación -‘labios mentirosos’ - y la abierta propagación de
calumnias, igualmente maliciosa y más dañosa todavía. Dice Cohen: Solamente una persona
53
sin seso se entrega a tales prácticas, porque el hombre de sentido común sabe que, tarde o
temprano, se conocerá la verdad.
19 Donde se habla mucho no hay necesidad de transgresión, pero el que aguanta su
lengua muestra mucha sensatez.
✡ Comentario (Versículos 19)
De ordinario, los que hablan demasiado dicen cosas que no deberían decir, pues entre
muchas palabras no pueden faltar palabras ociosas. Hay personas a quienes les gusta oírse a
sí mismas y ni se percatan del tedio que causan a los que las oyen. Es, pues, señal de
prudencia poner freno a la lengua. Por algo le puso Di-s doble puerta: una de hueso, los
dientes; otra de carne, los labios.
20 La lengua del justo es plata selecta, pero la mente del malvado es de poco valor.
21 Los labios del justo sostienen a muchos, pero los necios mueren por falta de
sensatez.
✡ Comentario (Versículos 20-21)
El valer del hombre no está en su riqueza ni en su posición social, sino en su virtud. Los
hombres buenos son buenos para algo. Mientras tengan lengua para hablar, pueden usarla
para cosas de valor. Plata escogida, es decir, refinada y libre de escoria, es la lengua del
justo, porque es sincero, sin la escoria del engaño o de la mala intención. Los que le oigan
serán hechos ricos en sabiduría, serán apacentados con sano alimento del alma, pues están
recibiendo doctrina sustanciosa, sacada de la palabra de Di-s, que es pan de vida. En cambio,
los malos no son buenos para nada: el corazón de los impíos es como nada, es decir, no tiene
valor alguno; sus principios, sus nociones, sus pensamientos y propósitos y todas las cosas de
que está lleno y le gustan, son cosas mundanas y camales y, por tanto, de ningún valor. Así
que no sólo no apacienta a otros, sino que muere por falta de alimento espiritual.
22 La bendición de es lo que enriquece, y ningún trabajo puede aumentarla.
54
✡ Comentario (Versículos 22)
La mayoría de los hombres tienen puesto el corazón en las riquezas materiales, pero
generalmente yerran, tanto en la naturaleza de la cosa que desean como en el modo con que
esperan obtenerla. La riqueza deseable ha de esperarse no por medio de la codicia y del afán
mundano (Sal 127:2), sino por la bendición de . Esta es la que enriquece y no añade
tristeza, pues, al ir acompañada de la bendición de Di-s, libra al hombre de las ansiedades y
preocupaciones que lleva consigo una fortuna mal adquirida.
23 Como la maldad es el deporte del torpe, así es la sabiduría para el hombre de
entendimiento.
✡ Comentario (Versículos 23)
Para el insensato, el pecado es una diversión. Hasta se burla de las admoniciones y
exhortaciones que se le hacen (comp. 14:9). En cambio, el sabio encuentra su recreo en la
sabiduría misma. No le cuesta trabajo ser bueno, puesto que ama la bondad.
24 Lo que planea el malvado se le viene encima; lo que desea el justo se le concede.
25 Cuando pasa la tormenta se lleva al malvado, pero el justo es un fundamento
perpetuo.
✡ Comentario (Versículos 24-25)
1. A los malvados les irá peor de lo que temen; a los buenos, mejor de lo que desean.,
Aunque los malvados vivan confiados en su maldad y hasta se jacten de ella, no
dejan de sufrir a veces serios temores. En cambio, los justos pueden acallar
prontamente los temores que a veces puedan sufrir, pues saben que Di-s les ama y
les concede lo que más les conviene. Se les concede de acuerdo con su fe, no con su
miedo (v. Sal. 37:4).
2. La prosperidad de los malvados se acabará pronto y rápidamente, mientras que la
dicha de los justos no tendrá fin.
26 Como vinagre a los dientes, como el humo a los ojos, es un hombre perezoso a
los que lo envían en una misión.
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✡ Comentario (Versículos 26)
Los perezosos no son aptos para que se les encargue ningún asunto de importancia. Un
siervo perezoso causa a su amo una irritación parecida a la que produce el vinagre en los
dientes y el humo en los ojos. Más de un amo ha tenido que llorar por haber puesto su
negocio en manos de un haragán.
27 El respeto a prolonga la vida, mientras que los años del malvado se
acortarán.
28 El justo puede esperar gozo, pero la esperanza del malvado está condenada.
✡ Comentario (Versículos 27-28)
La religión sincera prolonga la vida del hombre y corona sus esperanzas y, si sus días no
llegan a ser muchos, al menos serán buenos, pues la esperanza de los justos es alegría, ya
que no avergüenza (v. Ro. 5:5), pues tiene cumplimiento seguro. En igualdad de
condiciones, la vida del malvado es más corta que la del justo, pues la merman los vicios.
29 El camino de es una fortaleza para el intachable, pero una ruina para los
malhechores.
30 El justo nunca será conmovido; el malvado no habitará la tierra.
31 La boca del justo produce sabiduría, pero a la lengua engañosa la cortarán.
32 Los labios del justo saben lo que es agradable; la boca del malvado [conoce] la
duplicidad.
✡ Comentario (Versículos 29-32)
La fuerza y la estabilidad están ligadas a la integridad: El camino de es fortaleza para
el hombre íntegro, es decir, todo lo que Di-s hace por él le fortalece y corrobora en su
integridad, incluso en los momentos adversos. La buena conciencia, purificada del pecado, le
confiere santa osadía.
El gozo de , que sólo se halla en el camino de , será nuestra fuerza (Neh. 8: 10) y,
por tanto, el justo no será removido; no será sacudido ni retirado de su sitio. En cambio, la
ruina y la destrucción son las consecuencias ciertas de la impiedad.
56
La prueba y la alabanza de la bondad de un hombre está en que habla bien y con sabiduría,
ya que su boca produce sabiduría de la misma manera que un buen árbol produce su fruto
para beneficio de quien lo come. Los labios del justo conocen lo que es aceptable (lit.), lo
que es agradable a Di-s, bueno para ellos mismos y beneficioso para el prójimo. En
cambio, la lengua del malo será cortada. Dice J. J. Serrano: «será cortada como se corta el
agua, para que no fluyan por medio de ella los engaños que de ella brotan naturalmente».
57
✡ PROVERBIOS 11 ✡
1 Las balanzas falsas son una abominación a ; la balanza honrada le agrada.
✡ Comentario (Versículos 1)
Nada más ofensivo a Di-s que el fraude en el comercio. Se menciona aquí el peso falso en
representación de todas las prácticas injustas y fraudulentas en el trato con otras personas. Es
abominación a . Los hombres suelen tener en poco tales fraudes y piensan que todo está
bien cuando se trata de ganar dinero. Mas la pesa cabal le agrada. Nada agrada tanto a Di-s
como el trato honesto y justo, y nada hay tan necesario para hacer que nosotros y nuestras
devociones agraden a Di-s.
2 Cuando aparece la arrogancia, sigue la desgracia, pero la sabiduría está con los
que son modestos.
✡ Comentario (Versículos 2)
El orgullo es una vergüenza para el hombre, el cual ha sido formado del polvo de la tierra,
vive de limosna, ya que depende de Di-s en todo y, con el orgullo, pierde el derecho a poseer
todo lo que tiene. El altivo se hace a sí mismo despreciable; es un pecado por el que Di-s,
con mucha frecuencia, abate a los hombres hasta lo más bajo, como hizo con Nabucodonosor
y Herodes, cuya ignominia vino inmediatamente después de su vanagloria. Así como en el
orgullo hay necedad, pues acarrea deshonra, con los humildes está la sabiduría. El vocablo
hebreo para ‗humilde‘ sólo ocurre aquí y en Miq. 6:8, porción sublime.
3 La integridad de los rectos los guía; pero el extravío de los traicioneros los lleva
a la ruina.
58
✡ Comentario (Versículos 3)
La integridad de un hombre honrado será su guía segura. Sus principios son fijos, su norma
es cierta y, por eso, su camino es llano y libre de peligros; su sinceridad le mantiene firme y
no tiene por qué cambiar de rumbo por muchas vueltas que dé el camino, pues le basta la
brújula de su buena conciencia. En cambio, la perversidad del pecador es su ruina, por muy
seguro que él se crea.
4 La riqueza no sirve de nada en el día de la ira, pero la justicia salva de la muerte.
✡ Comentario (Versículos 4)
En el día de la ira, cuando Di-s visite con juicio de condenación al pecador, de poco le
servirán todas las riquezas que haya acumulado: no le evitarán el golpe, ni le calmarán el
dolor, menos aún, le sacarán el aguijón de la muerte ¿para qué, entonces, la hacienda, el
poder y los títulos nobiliarios? Sólo una buena conciencia hará llevadero el día de la muerte.
Es privilegio de los justos no ser dañado por la muerte segunda ni ser tan herido por la
muerte primera.
5 La justicia del intachable le suaviza el camino, pero al malvado lo derriba su
maldad.
6 La justicia de los justos los salva, pero los traicioneros quedan atrapados por su
malicia.
✡ Comentario (Versículos 5-6)
Estos dos versículos tratan del mismo asunto que el v. 3. Los caminos de la religión sincera
son llanos y seguros, y en ellos se goza de una santa seguridad. La justicia del justo será su
blasón y su defensa, para librarles de las seducciones, lo mismo que de las amenazas, del
diablo y del mundo. Pero los malvados encontrarán en su pecado su castigo.
7 En la muerte las esperanzas del malvado están condenadas a la ruina, y la
ambición de los malos para en nada.
59
✡ Comentario (Versículos 7)
Como dice Cohen, el hombre impío suele indicar, en Salmos y Proverbios, el malvado que
está en posición de autoridad e influencia de las que abusa para actuar ilegalmente. Cuando
él muere, no sólo perece su esperanza (el ‘su’ no está en el hebreo), sino la de los
malhechores que con él tenían amistad y, por eso, quedaban impunes. Esta es la
interpretación más probable de este versículo.
8 Al justo lo rescatan de la angustia y el malvado toma su lugar.
✡ Comentario (Versículos 8)
Los buenos son sacados de los apuros en que se creían perdidos, y sus pies son colocados en
amplio espacio (v. Sal. 34:19; 66:12). Di-s tiene siempre medios de librar a los suyos cuando
se hallan a un paso de la desesperación. En cambio, los malvados caen en fosos de los que se
creían libres. Recuérdense los casos de Mordecay (Mardoqueo, en nuestras versiones) y
Amán, de los amigos de Daniel en el horno de fuego, y del propio Daniel en el foso de los
leones, así como del apóstol Pedro en la cárcel.
Mientras los israelitas hallaron la liberación a través del Mar Rojo, los egipcios hallaron allí
su cementerio.
9 El impío destruye a su vecino con su habla, pero con su conocimiento se
rescatan los justos.
✡ Comentario (Versículos 9)
Dice el refrán que más mató la lengua que la espada. Pero no hay lengua tan dañina como la
del hipócrita, pues la espada del calumniador se ve venir, pero la del adulador da la puñalada
por la espalda; añade así a la maldad traición.
El único remedio contra esta perversidad es el conocimiento (lit.) con el que los justos
pueden penetrar, a través de la adulación, en la falsedad de los impíos.
10 Cuando los justos prosperan la ciudad se alegra; cuando perece el malvado hay
gritos de gozo.
60
11 Una ciudad se edifica por la bendición de los justos, pero se derriba con el habla
de los malvados.
✡ Comentario (Versículos 10-11)
Estos versículos nos presentan el contraste entre los bienes que produce un buen gobierno, al
escalar los buenos los puestos de poder y responsabilidad, y los males que produce la
charlatanería de unos cuantos demagogos que embaucan a las masas y, con promesas de
falsa libertad, abren las compuertas de toda clase de desórdenes y desmanes. Los malos
pueden llegar a ser temidos, pero nunca amados, por eso hay regocijo casi general cuando
ellos desaparecen.
Aun el bien o el mal de las personas particulares tienen influencia en la sociedad, pero la
tienen sobre todo la bondad o la maldad de las personas que ocupan el poder.
12 El que habla con desprecio de su prójimo carece de sensatez; un hombre
prudente se mantiene calmado.
13 Una persona baja revela los secretos, pero el confiable guarda una confidencia.
✡ Comentario (Versículos 12-13)
Se recomienda el silencio como ejemplo de verdadera amistad. El que tiene prudencia y
entendimiento, sabe controlarse a sí mismo y calla aun en el caso de ser provocado, a fin de
no dar rienda suelta a su pasión ni encender la pasión de los otros mediante palabras dichas
en un momento de emoción malsana.
Pero el que carece de entendimiento, lo demuestra precisamente en esto: habla sin
reflexionar y, a la menor provocación, llama a su prójimo ‘raca’ o ‘insensato’ o palabras
peores en el lenguaje hodierno. Una de las personas más peligrosas y odiosas es la que anda
en chismes y divulga secretos (comp. con 20:19 y véase Lv. 19:16). No hay peste tan mala
como la de esta clase de personas, pues promueven discordias, ocasionan odios entre vecinos
y parientes y son causa de los peores males.
14 Por falta de estrategia cae un ejército, pero la victoria viene con mucha
planificación.
61
✡ Comentario (Versículos 14)
Comparando este versículo con 24:6, se advierte un contexto de guerra, de caída en manos
del enemigo o de liberación de las manos de éste; en una palabra, de caída física más bien
que de moral. Sin embargo, el proverbio tiene aplicación en todas las áreas. Donde hay
buena dirección, hay éxito; donde no la hay, ha de temerse el fracaso. Pero, como dice
nuestro refrán, «cuatro ojos ven mejor que dos», por lo que en la multitud de consejeros hay
seguridad. Se sobreentiende que estos consejeros son competentes, honestos y generosos; de
lo contrario, el número sólo sirve para aumentar la confusión. Basta con recordar el caso de
Roboam.
15 Perjuicio es lo que le espera al que sale fiador por otro; el que evita dar firmas
estará seguro.
✡ Comentario (Versículos 15)
Se insiste ahora en algo que ya vimos en 6:1 y ss. Parece ser que el caso era corriente cuando
Salomón escribió este libro; «De seguro sufrirá daño (lit.) el que sale fiador por un
extraño. En cambio, el que evita lanzarse precipitadamente a este peligro, vivirá tranquilo,
sin que le preocupe la responsabilidad que la fianza comporta, ni el riesgo de la bancarrota,
que no sólo le afectaría a él, sino también a su familia.
16 La mujer hermosa obtiene honor; los hombres despiadados obtienen riqueza.
✡ Comentario (Versículos 16)
El sentido de este versículo en el hebreo (no en los LXX) es: La mujer agraciada, más por su
prudencia que por su hermosura física, alcanzará honor (comp. 31:30), mientras que la
fuerza bruta de los hombres sólo alcanza riquezas materiales. El proverbio, pues, muestra
dónde está la verdadera fuerza del sexo débil, así como la debilidad del sexo fuerte.
17 La persona bondadosa se beneficia a sí misma; el cruel se crea problemas a sí
mismo.
62
✡ Comentario (Versículos 17)
El hombre de bien, compasivo, benigno, generoso, se hace bien a sí mismo, pues tiene el
placer del deber cumplido y de contribuir al bienestar de sus prójimos; su propio carácter se
enriquece con el ejercicio de su bondad, mientras que el cruel se atormentará a sí
mismo (lit. su carne, en contraste con ‘su alma’), puesto que en el pecado lleva la penitencia.
18 El malvado gana salarios ilusorios, pero el que siembra justicia tiene una
verdadera recompensa.
✡ Comentario (Versículos 18)
Se llama aquí falso’ al jornal del malvado, no porque lo haya ganado injustamente, sino
porque sólo posee valor temporal; así que edifica sobre arena; se mostrará su falsedad
cuando venga la tormenta. En cambio, el que siembra justicia
tendrá un galardón tan firme como la verdad en que se apoya (lit). galardón de verdad).
19 La justicia es un sostén de la vida, pero seguir el mal lleva a la muerte.
✡ Comentario (Versículos 19)
Este versículo parece confirmar y remachar lo dicho en los anteriores, pues la mejor
traducción del adverbio inicial (ken) es ‘sí’ (comp. Jos. 2:4), con lo que el proverbio, como
dice Cohen, ofrece una enseñanza que nos es familiar en este libro: «la justicia prolonga la
vida; la maldad la acorta».
20 Las personas de mente torcida son una abominación a , pero los de camino
intachable le agradan.
✡ Comentario (Versículos 20)
Nos interesa saber qué es lo que Di-s odia y ama, para conducirnos de acuerdo con ello.
Siendo Di-s la santidad infinita, necesariamente ha de amar al de camino
intachable, mientras que los perversos de corazón le resultan abominables (más
63
aún, abominación). En hebreo, se nota el contraste entre los ‗íntegros‘ (temimei) y los
‗torcidos‘ (iqshei).
21 Ciertamente el malvado no escapará, pero la prole del justo estará segura.
✡ Comentario (Versículos 21)
Este versículo comienza literalmente: « ¡Mano a mano!» (expresión que se halla también en
16:5b) y cuyo sentido es: «¡Te lo aseguro!». El origen de la expresión hebrea ha de hallarse
en la costumbre de chocar la mano para confirmar un asunto entre dos personas. Se expresa
así la seguridad que el escritor tiene sobre la enseñanza que ofrece al decir que (tarde o
temprano) el malo será castigado, mientras que la simiente (lit.) de los justos será
librada, esto es, escapará del castigo. Aunque es posible que se quiera dar a entender que la
justicia de los padres traerá bendición a su descendencia, la comparación que aquí se hace
favorece a la opinión que ve en el vocablo zéra algo parecido al término ‗generación‘,
perífrasis comente.
22 Como un anillo en hocico de un puerco es una mujer bella pero sin sensatez.
✡ Comentario (Versículos 22)
Muy expresiva es la comparación de una mujer hermosa, pero sin
seso (lit. sin (buen) gusto), con un anillo de oro en el hocico de un puerco. Era éste un
adorno comente entre las mujeres orientales (v. Gn. 24:22; Is. 3:2 1), pero, fuera de lugar en
el hocico de un cerdo. Esto da a entender, una vez más, que la hermosura es accidental en
una mujer (comp. 31:30) y que lo sustancial en ella es fe, amor, santificación y cordura (1
Ti. 2:15). Más aún, la belleza sin virtud sólo sirve de incentivo para las bajas pasiones,
propias y ajenas, y, por eso, una mujer bella sin seso vendrá a ser como la puerca
lavada que, con anillo de oro en el hocico, vuelve a revolcarse en el cieno (2 P. 2:22).
23 Lo que desea el justo puede ser únicamente bueno; lo que espera el malvado
[engendra] ira.
64
✡ Comentario (Versículos 23)
El justo desea solamente lo que es verdaderamente bueno, tanto para él como para otros; a
nadie quiere hacer ningún mal; a todos desea lo mejor, especialmente el favor de Di-s y el
testimonio de una buena conciencia. Tendrán lo que desean (Sal. 37:4). Los malvados, en
cambio, esperan y desean hacer mal a otros, pero el mal se volverá contra ellos mismos, pues
atraen sobre sí la ira de Di-s (comp. Ro. 1:18 y ss.).
24 Un hombre da generosamente y termina con más; otro retiene más de lo que es
justo e incurre en pérdida.
✡ Comentario (Versículos 24)
Una persona puede hacerse rica administrando sus haberes con prudencia, dentro de la cual
cabe emplear sumas razonables en obras de piedad y caridad, con lo que, en vez de menguar
sus bienes, los aumentará, como el cereal se aumenta sembrándolo. Por el contrario, el
hombre tacaño que llega a retener más de lo que es justo, ya sea por no pagar las deudas, por
no aliviar a los pobres o por no proveerlo que es conveniente para la familia, vendrá a
pobreza, pues carecerá de la bendición de Di-s.
25 La persona generosa disfruta la prosperidad; el que satisface a otros será
satisfecho.
✡ Comentario (Versículos 25)
El alma generosa, que ora por los demás, especialmente por los pobres y los afligidos, y
procura proveerles de lo necesario, será engordada (lit.), conforme al uso de este vocablo
para indicar prosperidad (comp. 13:4; 28:25 y Dt. 32:15, entre otros lugares). El que riega a
otros con las corrientes de su generosidad, también él será regado (lit.). Ciertamente Di-s
devuelve abundantes aguaceros de bendición.
26 El que esconde el grano se gana la maldición de la gente, pero hay bendiciones
sobre la cabeza del que lo distribuye.
65
✡ Comentario (Versículos 26)
Es pecado, cuando el grano está escaso, retenerlo con la esperanza de que se ponga más caro
y obtener así en el mercado un subido beneficio. En cambio, Di-s bendecirá y recompensará
la honestidad y la generosidad del que lo vende a su justo precio para satisfacer las
necesidades ajenas.
27 El que busca con empeño lo bueno, persigue lo agradable; el que se inclina al
mal, sobre él vendrá.
✡ Comentario (Versículos 27)
El que madruga (lit.) para procurar el bien de su prójimo, se granjea la buena voluntad y el
favor de sus semejantes; se hace de querer y, lo que es mejor, obtiene el favor de Di-s. Pero
el que busca el mal de otros (lo contrario de Est. 10:3), atraerá sobre sí el mal que busca.
28 El que confía en su riqueza caerá, pero el justo florecerá como el ramaje.
✡ Comentario (Versículos 28)
La virtud se mantiene en pie aunque caigan las riquezas, como un árbol que retoña y
reverdece aunque lo hayan cortado. En cambio, el que se apoya en riquezas sin virtud, caerá
sin remedio cuando caigan éstas y no volverá a levantarse.
29 El que le causa problemas a su familia heredará viento; el necio es esclavo del de
corazón sabio.
✡ Comentario (Versículos 29)
Se condenan aquí dos extremos en el modo de administrar los negocios de la familia: 1. La
tacañería en el uso del dinero, la ansiedad en el negocio y el miedo, rayando en el pánico, a
la bancarrota, hace que muchos siembren en sus familias el desorden. Al privar a sus familias
de lo necesario por temor a gastar innecesariamente, hacen que el dinero les resulte
prácticamente inservible. Viento es aquí, como en Jer. 5:13 y frecuentemente, en Eclesiastés,
símbolo de lo insustancial. 2. Por otra parte, el descuido y la falta de prudencia en la
administración de los negocios llevan a la bancarrota, con lo que la persona así
66
empobrecida, necia, llega a ser esclava de quienes tienen mejor sentido. Es probable, sin
embargo, que la segunda parte del versículo sea una secuencia de y que el sentido sea: al
esforzarse en acumular riquezas de cuyos frutos no saben gozar, se convierte prácticamente
en un esclavo de quienes le hereden y, siendo más sabios que él, sabrán emplear mejor el
dinero que recibieron.
30 El fruto del justo es un árbol de vida; el sabio cautiva a la gente.
✡ Comentario (Versículos 30)
Los justos son como árboles de vida (comp. 3:18); los frutos de su piedad y caridad, de sus
instrucciones, reprensiones, ejemplos y oraciones, así como su favor en el cielo y su
influencia en la tierra, son como los frutos de ese árbol, que contribuyen al mantenimiento
espiritual de muchos. Si son sabios, sus frutos son todavía mejores y más abundantes,
pues, ganan almas, es decir, atraen a otros para darles buenos consejos y comunicarles
sabiduría. No se trata aquí de la salvación eterna.
31 Si los justos reciben su merecido en la tierra, cuánto más el malvado y el
pecador.
✡ Comentario (Versículos 31)
Este es el único proverbio de Salomón que comienza con una nota de
atención «¡Mirad!» (lit.), lo cual insinúa que contiene una verdad, no sólo evidente, sino
eminente. El sentido del proverbio se comprende bien si se compara con 1 P. 4:18 y a la luz
de la segunda parte del versículo: El justo será retribuido, en sentido de castigado, por el
mal que haga y por el bien que deje de hacer en este mundo. Y si esto es así, ¡cuánto más el
impío y el pecador! Esto no significa que un determinado pecado sea menos grave en el hijo
de Di-s que en el pecador no convertido, sino que la práctica ordinaria del impío es el
pecado, mientras que el que es nacido de Di-s, no practica el pecado (1 Jn. 3:9); puede caer
en él (1 Jn. 1:8, 10), pero no persevera en él.
67
✡ PROVERBIOS 12 ✡
1 El que ama la disciplina ama el conocimiento; el que evita la reprensión es un
torpe.
✡ Comentario (Versículos 1)
Este proverbio dice literalmente: «El que ama la instrucción (hebr. musar, disciplina,
corrección), ama el conocimiento, y el que odia la reprensión (hebr. thokhájat, reproche,
reconvención) (es un) bruto». Puede traducirse invirtiendo los términos de la frase: «El que
ama el conocimiento, ama la instrucción, y el que es bruto odia la reprensión». La idea no
cambia por eso, ya que el sentido es siempre el siguiente: El que quiere conocer, desea ser
instruido y corregido; mientras que el que odia la reprensión, demuestra ser una persona en la
que los instintos propios del animal prevalecen sobre los elementos espirituales.
2 El bueno se gana el favor de ; el hombre de intrigas, su condenación.
✡ Comentario (Versículos 2)
Nuestro Padre Celestial juzga especialmente a sus hijos por el modo como se comportan con
sus hermanos (comp. 1 Jn. 4:20); por consiguiente, un hombre bueno, misericordioso,
caritativo, bienhechor, atrae sobre sí el favor de , pero condenará, como indigno
de obtener un lugar en su reino, al malvado que maquina intrigas contra su prójimo.
3 El hombre no puede ser estable en la maldad, pero la raíz del justo no se
aflojará.
✡ Comentario (Versículos 3)
Aunque los malos lleguen a prosperar por medio de sus pecaminosas artes, no pueden
asegurarse, afianzarse, echar raíces, por medio de la impiedad. Aunque lleguen a colocarse
68
en altos lugares, de cierto les serán por deslizaderos (Sal. 73:18). Los justos, en cambio, por
poco que posean en este mundo, se mantendrán firmes, pues gozan de buenas raíces.
4 Una mujer capaz es corona para su esposo, pero una incompetente es como
caries en los huesos.
✡ Comentario (Versículos 4)
El que ha sido bendecido con una buena esposa puede sentirse tan feliz como si estuviese
sentado en un trono, pues ella le sirve de corona. El vocablo hebreo
para virtuosa (mejor, hacendosa) es el mismo de 31:10 y comprende las cualidades de virtud
moral y capacidad mental sana. Estas cualidades se describen en detalle en 31:11 y ss. Es una
mujer piadosa, prudente, activa para el bien, consciente de su deber, que puede soportar
adversidades sin descomponerse, fiel a su marido y educadora, con el ejemplo y la palabra,
de sus hijos y criados. Por el contrario, una mala esposa no puede ser descrita con mejor
acierto que como carcoma en los huesos del marido, una enfermedad incurable, pues es
necia, perezosa, derrochadora, caprichosa y de mala lengua, con lo que arruina el prestigio y
el bienestar de su marido.
5 Los propósitos de los justos son justicia, las tramas de los malvados son engaño.
✡ Comentario (Versículos 5)
Se equivoca quien se imagina que el pensamiento es libre de toda norma de moralidad, pues
el pecado se origina en el corazón (V. Mt. 15:19) y Di-s ve y juzga el corazón. Un hombre
bueno puede ser tentado a pensar mal, pero no presta su consentimiento al mal. Puede
escapársele una palabra o acto fuera de lugar, fuera de tiempo, fuera de orden y propósito;
pero sólo el malvado piensa y obra con engaño, con plena intención de hacer el mal.
6 Las palabras de los malvados son una emboscada mortal, pero el habla de los
rectos los salva.
✡ Comentario (Versículos 6)
En el versículo precedente, se comparan los pensamientos del justo y del malvado.
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En éste, se comparan sus palabras. Ciertamente son malos aquellos cuyas palabras son
asechanza para derramar sangre; su lengua es como espada dirigida contra los que se
cruzan en su camino, los buenos a quienes ellos odian y persiguen (v. por ej. Lc. 20:20,21).
En especial (y éste parece ser el sentido preciso del proverbio), los malvados están prestos a
dar falso testimonio para que se condene al inocente, mientras que los justos dicen la verdad
en el juicio y, de este modo, lo ponen a salvo.
7 Derrota a los malvados y desaparecen, pero la casa de los justos perdurará.
✡ Comentario (Versículos 7)
«Trastornar (lit.) a los malvados y (ya) no son (lit.)» (comp. con 10:25). La idea es que, una
vez trastornados, se acabaron; no pueden ya recuperarse. Están en tal deslizadero, que al
menor golpe de adversidad se vienen abajo. En cambio, la casa de los justos permanecerá
firme. Aunque la muerte se los lleve de allí, sus familias quedarán en la casa, es decir, serán
preservadas.
8 A un hombre lo encomian según su inteligencia; una mente torcida se gana el
desprecio.
✡ Comentario (Versículos 8)
La mejor reputación es la que se adquiere con la virtud y una conducta prudente: El hombre
es alabado, no de acuerdo con su riqueza ni su posición social, sino según su sabiduría. Por
otro lado, el peor de los menosprecios es el que se merece con la maldad, la cual desvía al
hombre por caminos tortuosos.
9 Es mejor ser poco estimado y tener un siervo, que andar por las nubes sin tener
qué comer.
✡ Comentario (Versículos 9)
Hay algunos tan necios que se jactan de lo que no son ni tienen, a fin de alternar con los de
alta posición, con lo que gastan en cosas superfluas lo que necesitarían emplear para vivir. Se
visten así con plumas de pavo real cuando no llegan ni a gallos, expuestos siempre a quedar
desplumados en plena calle, pues, por lo regular, contraen grandes deudas. En cambio, hay
70
otros que parecen de baja condición, que se les desprecia como a menesterosos y, sin
embargo, están abastecidos no sólo de lo necesario, sino también de lo conveniente; no sólo
se alimentan bien, sino que tienen hasta un criado. Sin embargo, el hebreo ebed lo puede
traducirse mejor, como lo pide el paralelismo, se sirve a sí mismo; en otras palabras, ejecuta
las tareas humildes que suelen encomendarse á los criados.
10 El justo conoce las necesidades de su bestia, pero la compasión del malvado es
crueldad.
✡ Comentario (Versículos 10)
Un hombre verdaderamente bueno es compasivo y cuida del sustento de sus bestias, no sólo
porque están a su servicio, sino porque son criaturas de Di-s, de las que Di-s mismo cuida
(Sal. 104:14, 27). Se les debe dar, pues, suficiente alimento, descanso y buen trato. Balaam
fue reprendido por golpear a su asna. La ley se ocupaba también del buen trato que se ha de
dar a los bueyes (Dt. 25:4). En cambio, el malvado muestra su crueldad incluso con los
animales, pues carece enteramente de compasión.
11 El que cultiva su tierra tendrá comida en abundancia, pero el que persigue
vanidades es falto de sensatez.
✡ Comentario (Versículos 11)
Es propio de sabios, y aun de prudentes que carecen de grandes conocimientos, buscar un
oficio que sea apropiado a las cualidades que poseen y de este modo, con la bendición de Di-
s, ganarse el pan de cada día. Estar ocupado en un oficio honesto es el mejor modo de estar
sano de cuerpo y mente. «Guarda tu tienda y tu tienda te guardará», dice un adagio inglés. En
cambio, es señal de necedad ir a caza de naderías, pasar el tiempo en tonterías que nada
producen, con lo que muchas personas, aún jóvenes y suficientemente fuertes, se convierten
en parásitos de la sociedad, pues roban el pan de la boca de otros.
12 El malvado codicia lo que cazan los malos; la raíz de los justos produce [fruto].
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✡ Comentario (Versículos 12)
La traducción más probable de la primera parte es la siguiente: «El malvado codicia el fortín
de los malos». Comenta concisamente Ryrie: «El malvado codicia el fortín de otros
malvados, a fin de fortalecer su propia posición». También Cohen da como probable esta
versión. Así, mientras el justo da buen fruto para beneficio de otros y gloria de Di-s (Ro.
14:6), el impío desea el mal de los demás, incluso de los que son tan malos como él.
13 El habla pecaminosa es una trampa para el hombre malo, pero el justo escapa del
problema.
✡ Comentario (Versículos 13)
Muchas personas han pagado muy caro en este mundo por haber dicho lo que no debían,
quedando al fin enredados por no haber puesto freno a su lengua (Sal. 64:8). En cambio, el
justo habla lo necesario y lo verdadero, por lo que, a causa de la prudencia de sus labios,
queda finalmente vindicado, pues la verdad acaba por abrirse paso y Di-s viene también en
ayuda de él.
14 Un hombre se satisface con bien del fruto de su habla; a uno le pagan con
bondad por sus obras.
✡ Comentario (Versículos 14)
Hasta las buenas palabras producen su fruto. Con sus prudentes consejos y su conversación
edificante, el hombre bueno, además de la satisfacción del deber cumplido, obtiene muchos
otros bienes aun en este mundo. También las buenas palabras son buenas obras, las cuales
tienen su recompensa (Ap. 14:13).
15 El camino del necio es recto a sus propios ojos; pero el sabio acepta consejo.
✡ Comentario (Versículos 15)
El necio piensa que tiene razón en todo lo que dice y hace y, por eso, no busca ni recibe
buenos consejos. En cambio, el prudente desea que se le aconseje y corrija, pues desconfía
de sí mismo y tiene interés en aprender. El mayor defecto de muchos que se tienen, y son
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tenidos, por sabios es que se obstinan en sus opiniones y se niegan a escuchar las razones de
otros; con ello, se privan del mejor medio de aprender más y más.
16 La ira del necio se nota enseguida, pero el hombre listo oculta su humillación.
✡ Comentario (Versículos 16)
La pasión es loca, por lo que muchos hombres de ganado prestigio lo pierden en un momento
por no saber refrenar su enojo, mientras que un hombre prudente y ecuánime no hace caso
del insulto y se evita pendencias y peores males. Es un pacificador (Mt. 5:9), digno de ser
llamado ‘hijo de Di-s’, del Di-s de paz (Fil. 4:9). No hay nadie tan ‗señor‘ como el que sabe
dominarse a sí mismo. Dice el Talmud: ‗Dichoso el que oye y se hace el sordo; cien males le
pasarán por alto‘.
17 El que testifica fielmente dice la verdad, pero el testigo falso engaña.
✡ Comentario (Versículos 17)
El que respira (lit.) verdad (comp. con Hch. 9:1), declara lo que es justo, es decir, llamado a
dar testimonio ante un tribunal (en este sentido se usa el verbo hebreo en 6:19; 14:4, 25;
19:5, 9), dice siempre la verdad, porque la ‘respira’ tanto ante los tribunales como en las
conversaciones ordinarias. Lo contrario del que declara lo que es falso, mostrando así tener
un espíritu mentiroso.
18 Hay quien habla rudo como estocadas de espada, pero el habla del justo es
sanidad.
✡ Comentario (Versículos 18)
La lengua es muerte o vida, veneno o medicina, según se use. Las calumnias hieren, como
una espada, la reputación de aquellos contra quienes se profieren. Con un susurro o una mala
insinuación (hasta con silencios calculados) se dividen y quedan cortados los lazos del amor
y de la amistad, y se separan quienes han sido íntimos amigos o cercanos parientes. En
cambio, hay palabras que curan, incluso físicamente (por eso, el Prof. Laín Entralgo insistía
en la eficacia de la ‗logoterapia‘); en todo caso, pueden sanar las heridas que haya causado
73
una lengua ponzoñosa y restaurar así la paz, persuadiendo a los enemistados a que se
reconcilien.
19 El habla veraz permanece para siempre, la lengua mentirosa, por un momento.
✡ Comentario (Versículos 19)
El labio veraz participa de la veracidad de Di-s y, por eso, permanece para siempre. Lo que
es verdad, siempre ha sido, es y será verdad; puede uno fiarse de ello. En cambio, la lengua
mentirosa sólo puede sostenerse por un momento, ya que, no teniendo consistencia en sí
misma, acaba por ser descubierta. En efecto, una mentira necesita de muchas otras para
sostenerse; y esto es muy difícil, pues su falta de cohesión conduce a afirmaciones
contradictorias; por eso, se dice que «antes se da alcance a un mentiroso que a un cojo».
20 El engaño está en la mente de los que traman el mal; para los que planean el bien
hay gozo.
✡ Comentario (Versículos 20)
Hay engaño (lit.) en el corazón de los que maquinan el mal; es decir, los que traman el mal
tienen el corazón lleno de engaño y, como advierte Cohen, ‗donde existe esta mala cualidad,
no cabe tranquilidad mental, que es un constitutivo esencial de la dicha personal‘. Por otro
lado, los consejeros de paz (lit.) disfrutan de alegría, pues no hay mayor gozo para los
amantes de la paz que el verla conseguida. Recuérdese de nuevo Mt. 5:9.
21 Ningún mal le acontece al justo, pero los malvados están llenos de infortunio.
✡ Comentario (Versículos 21)
Al hombre realmente justo puede llegarle alguna ‗desdicha‘, pero no una ‗desgracia‘, un
verdadero ‗mal‘ (v. Sal. 9 1:10). Di-s, por medio de su providencia y de su gracia, los
guardará de forma que no sucumban bajo la tentación ni sean abrumados por la adversidad,
pues todas las cosas cooperan para bien de ellos (Ro. 8:28). En cambio, los malvados serán
colmados de males (comp. Sal. 32:10), pues los que se deleitan en el mal, bien está que se
sacien de mal.
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22 El habla mentirosa es abominación a , pero los que actúan fielmente le
agradan.
✡ Comentario (Versículos 22)
La idea de este versículo se repite en otros lugares (V. especialmente 11:20). Una vez más
vemos que Di-s se deleita en la veracidad, en la sinceridad, mientras abomino la mentira. La
mentira es, no sólo algo abominable para Di-s, sino también un elemento destructor de la
sociedad.
23 El hombre listo oculta lo que sabe, pero la mente del tonto, proclama necedad.
✡ Comentario (Versículos 23)
Este versículo es, a primera vista, una alabanza del cauto y una descalificación del
imprudente, pero se entiende mejor a la luz de 11:13 y 20:19. Se trata, pues, de ‗encubrir‘ u
‗ocultar‘, no el saber, sino lo que puede hacer daño, aunque se trate de hechos verdaderos. En
cambio, el necio descubre su propia necedad proclamando a los cuatro vientos lo que ha
visto u oído, sin percatarse del daño que puede causar.
24 La mano de los diligentes maneja la autoridad; a los negligentes los tienen en
sujeción.
✡ Comentario (Versículos 24)
La laboriosidad es el medio legítimo para alcanzar promoción. Salomón promovió a
Jeroboam porque vio que era ‘hombre activo’ (1 R. 11:28), es decir, laborioso. Quienes son
diligentes desde su juventud podrán llegar a conseguir la capacidad de gobernar a otros. En
cambio, la negligencia es el camino hacia la indigencia y la esclavitud. Y cuanto más
importante es para el bien común el oficio, tanto más reprensible es la negligencia en el
mismo.
25 Si hay ansiedad en la mente de un hombre, que la reprima, y que la vuelva en
gozo con una buena palabra.
75
✡ Comentario (Versículos 25)
Causa, y efecto, de la melancolía es la congoja en el corazón; es como un peso que agobia,
abruma, postra y hunde ¿Cómo se cura este mal? Con una palabra buena, es decir, amable,
afectuosa, alentadora. La palabra de Di-s, especialmente en el evangelio, es fuente de alegría
para los corazones acongojados y fatigados (v. Mt. 11:28).
26 El justo dirige a su amigo, pero el camino del malvado lleva al extravío.
✡ Comentario (Versículos 26)
La primera parte de este versículo es difícil de traducir. La versión más probable es: «Que el
justo investigue [su camino observando (mejor que, consultando)] a su prójimo», mientras
que «el camino de los malvados les hace errar». Comenta Ryrie: ‗la investigación es
necesaria, porque el camino del impío conduce al error‘. A él le parece que es buen camino,
pero se equivoca lamentablemente.
27 El negligente nunca tiene caza para asar; el diligente tiene preciosas riquezas.
✡ Comentario (Versículos 27)
Este es otro versículo difícil de traducir, en parte porque el verbo que se traduce por «asar»
es la única vez que sale en la Biblia. La versión más probable es la que ofrece la New
International Versión: «El perezoso no asa su caza, pero el diligente estima sus
posesiones». El sentido es el siguiente: El perezoso, aunque llegue a cazar una pieza, es
demasiado indolente para ponerse a asarla; es incluso posible que llegue antes otro a
recogerla; en cambio, el diligente pone interés en lo que posee, porque para él es como un
tesoro; reconoce en ello la mano y la bendición de Di-s, y le saca provecho para sí y para su
familia.
28 El camino de justicia lleva a la vida; en sus senderos no hay muerte.
✡ Comentario (Versículos 28)
La versión correcta de este versículo es como sigue: «En la senda de la justicia hay vida, y el
camino de esa vereda no es muerte». El propio rabino Cohen admite que ‗esto solamente
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puede ser una alusión a la inmortalidad que sigue al final de una vida justa en este mundo‘.
Sin embargo, muchos hebreos puntúan de distinta forma el adverbio hebreo al, no, haciendo
que se lea el, con lo que el sentido cambia por completo y, por cierto más en consonancia
con todo el resto del versículo. La segunda parte se leería, sin ningún trastorno gramatical ni
de sentido del modo siguiente: «Y hay un camino (el del error) que es una vereda hacia la
muerte».
77
✡ PROVERBIOS 13 ✡
1 Un hijo sabio es por la disciplina de su padre; un burlador nunca oyó reprensión.
✡ Comentario (Versículos 1)
Mucho se puede esperar de los hijos que respetan a sus padres y están dispuestos a recibir
instrucción (disciplina) de ellos. En cambio, poco se puede esperar de los insolentes que se
niegan a escuchar la reprensión, sino que al contrario, se insolentan y se burlan de quienes
con amor les corrigen ¿Cómo se podrán enmendar los que no quieren reconocer sus faltas y
defectos?
2 El hombre disfruta el bien del fruto de su habla; pero de la boca del traicionero
sale violencia.
✡ Comentario (Versículos 2)
Cada uno bebe lo que fabrica y come lo que habla; porque por las palabras es el hombre
justificado o condenado. Por eso, la comodidad y la satisfacción son el pan cotidiano del
hombre que tiene palabras de verdad, justicia y bondad; mientras que los traidores, los
desleales, comerán el mal, hasta llenar de él su vientre, pues el mal es lo que desean y
procuran de palabra y de obra.
3 El que guarda su lengua preserva su vida; el que abre mucho sus labios, esa es
su ruina.
✡ Comentario (Versículos 3)
El que guarda la boca (en este contexto, no precipitándose a hablar), guarda la vida (comp.
21:23). Bueno es pensar dos veces antes de hablar una. Más de una vez, una sola palabra ha
costado literalmente la pérdida de la vida. Dice el adagio español: «la perdiz, por el pico se
pierde». ¡Cuánto mayores y más numerosos serán los peligros del que mucho abre sus
labios!
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4 El perezoso desea, pero no tiene nada; el diligente festejará con ricos manjares.
✡ Comentario (Versículos 4)
El perezoso desea el manjar que el diligente come, pero odia el esfuerzo que el diligente
pone; codicia mucho, todo lo codiciable; pero no hace nada de lo que es factible; la
consecuencia inevitable es que no tiene nada; ni debe tenerlo, puesto que no trabaja (2 Ts.
3:10). En cambio el diligente será engordado (lit), es decir, prosperará en bienes y en honor.
5 El hombre recto odia las mentiras; el malvado es vil y desgraciado.
✡ Comentario (Versículos 5)
Es un elemento indudable del carácter de los justos aborrecer la mentira, como consecuencia
del amor que tienen a la verdad, a la justicia y, en último término, al Di-s verdadero y veraz.
En cambio, el malvado, con sus mentiras -aunque esto no se menciona explícitamente, lo
exige el contexto- se hace odioso (lit. causa hedor) y se cubre a sí mismo de ignominia.
6 La justicia protege al que es intachable; la maldad subvierte al pecador.
✡ Comentario (Versículos 6)
La justicia guarda al que es intachable en su camino (Lit. de camino), porque el intachable
obra sinceramente con Di-s y con los hombres; así que su integridad le preserva de las
tentaciones, etc. que podrían hacerle desviarse del buen camino, mientras que la maldad
pervierte (o tuerce, el mismo verbo de 19:3) al pecador (lit. pecado); le tuerce la mente y el
corazón de manera que sus pensamientos y afectos no pueden menos de ser perversos.
7 Un hombre pretende ser rico y no tiene nada; otro pretende ser pobre y tiene
mucha riqueza.
✡ Comentario (Versículos 7)
El mundo es una tremenda farsa, por lo que las apariencias suelen engañar. Hay quienes se
empeñan en dar la impresión de que son ricos (comp. 12:9), cuando quizás están
79
endeudados, mientras otros, por varias y comprensibles razones (no siempre justificadas)
dan la impresión de ser poco menos que mendigos vergonzantes, viviendo en una miseria
sórdida cuando podrían disfrutar de la vida de un modo agradecido a Di-s, respetuoso con el
prójimo y caritativo con los necesitados. También en el plano espiritual hay hipócritas que
pasan por santos, mientras otros que en realidad son ricos en la gracia y el favor de Di-s, se
tienen por pobres; cabe el peligro de que algunos de estos últimos, con dudas, temores y
necios escrúpulos de conciencia, lleguen a hacerse a sí mismos pobres.
8 Las riquezas son el rescate de la vida de un hombre, el pobre nunca oyó una
reprensión.
✡ Comentario (Versículos 8)
Se suele tener por dichosos a los que poseen muchos bienes de fortuna, pero Salomón
muestra aquí cuán grande equivocación es ésa. Los ricos están constantemente expuestos a
caer en manos de ladrones y -según la moda moderna- de secuestradores; si llegan a rescatar
la vida, es a costa de grandes sumas de dinero. Incluso gobernantes y funcionarios sin
escrúpulos saben el modo de sacar dinero, incitando al soborno o multando fuertemente, con
la menor excusa, a los que pueden pagar y conservar así un poco de tranquilidad. En cambio,
¿quién va a secuestrar al pobre, del que ningún dinero se puede sacar? Muchas veces, la
pobreza es saludable seguridad.
9 La luz del justo es radiante; la lámpara del malvado se extingue.
✡ Comentario (Versículos 9)
La luz de los justos crece en brillo (lit se alegra, esto es, arde alegremente). La luz es
símbolo de claridad, de santidad (1 Jn. 1:5 y ss.) y también de gozo y prosperidad (comp.
Est. 8:16; Job 18:5 y ss.). Un alma iluminada por la gracia de Di-s no puede por menos de
estar profundamente alegre. En cambio, la lámpara de los malvados se apagará, como una
candela que tarda pocos minutos en consumirse.
10 La arrogancia no deja más que discordia; la sabiduría le pertenece a los que
buscan consejo.
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✡ Comentario (Versículos 10)
La arrogancia es fuente de contiendas, pues los arrogantes (orgullo revestido de
menosprecio) no admite que se les contradiga, que se les pase por alto, que se les enseñe o
reproche. De aquí nacen discordias y tremendas luchas entre parientes y vecinos, entre
países y regiones, y aun entre las iglesias cristianas.
No se perdona ni mucho menos se olvida por la arrogancia de quienes no quieren dar su
brazo a torcer porque siempre creen tener razón y ser víctimas de la incomprensión o del
encono de la otra parte. En cambio los bien aconsejados (lit.), por ser humildes (comp. con
11:2, donde el hebreo tsenuim es tan parecido al noatsim de aquí, que las letras son las
mismas, pero en orden diferente), están dispuestos a que les avisen, enseñen, corrijan, etc.,
con lo que evitan las contiendas, dando así muestras de verdadera sabiduría.
11 La riqueza puede reducirse a menos que nada, pero el que recoge poco, poco la
aumenta.
✡ Comentario (Versículos 11)
Lo que mal se gana, poco puede durar (de ordinario); en todo caso, no es legítimo ni propio
de hombres que caminan en la justicia. El hebreo dice literalmente ganada por medio de
vanidad, lo que da a entender que no es precisamente por medio del crimen, sino más bien
por medio del juego o de la especulación financiera, pues en este sentido se entiende mejor
el que el dinero así ganado se disminuya y se pierda fácilmente. En cambio, lo que se gana
mediante la laboriosidad, aumenta mediante la diligencia que se pone en ganarlo y
conservarlo.
Lo que mucho se desea causa tanta más pena cuanto más tarda en llegar, mientras que el
deseo cumplido a tiempo (y aunque se demore, con tal que la demora se lleve con paciencia)
alegra tanto a una persona que la pone en una especie de paraíso; «árbol de vida» ya
mencionado en 3:18; 11:20, parece aludir a él. Así, y en grado inmensamente más elevado,
la dicha celestial será acogida con gozo inefable por los santos, que tan paciente e
intensamente la desearon como corona de sus esperanzas.
12 La esperanza que se tarda enferma el corazón, pero el deseo realizado es árbol de
vida.
13 El que desprecia un precepto se perjudicará por ello; el que respeta un mandato
será recompensado.
81
✡ Comentario (Versículos 12-13)
Los que prefieren gobernarse por medio de las normas de la carne más bien que por la
palabra de Di-s, desprecian esta palabra y a Di-s mismo; sufrirán por ello (lit. quedan en
deuda con ella), en el sentido (con la mayor probabilidad) de haber dado su palabra en
prenda, que sólo puede recuperarse cumpliendo la ley. Esto es precisamente lo que hace el
que teme el mandamiento, por lo cual es recompensado, mientras que el primero es
castigado.
14 La instrucción de un sabio es una fuente de vida, capacita a uno para evadir
trampas mortales.
✡ Comentario (Versículos 14)
La enseñanza (lit. ley) del sabio, por estar fundada en los principios de la ley de Di-s, es
manantial de vida (comp. 10:11), es decir, fuente de vitalidad espiritual. Los que siguen los
dictados de esta enseñanza escaparán de los lazos de la muerte, esto es, de las trampas
fatales a lo largo del camino de la vida que, si no se evitan, conducen a una muerte
prematura. Tal ocurre con la seducción de la mujer ajena (5:5; 7:22 y ss.)
15 El buen sentido gana favor; el camino del traicionero no cambia.
✡ Comentario (Versículos 15)
Los que se comportan con prudencia, gozan del favor de Di-s y de los hombres (comp. Ro.
14:18), mientras que el camino de los desleales es duro, difícil de recorrer para ellos mismos
y dañoso para los demás. El uso común del vocablo hebreo eitán es ‗permanente‘, pero aquí
cuadra mejor el de ‗duro‘, como en Nm. 24:21 (fuerte‘) y en Dl. 21:4 (‗sin cultivar).
16 Todo hombre listo actúa inteligentemente, pero el tonto expone su estupidez.
✡ Comentario (Versículos 16)
Todo hombre prudente obra con conocimiento, esto es, es cauto, pesa bien las circunstancias
y sabe lo que quiere, decidiendo con todo conocimiento el curso de acción que escoge; en
82
cambio, el necio manifiesta esta su necedad en el modo de proceder precipitadamente, sin
precaución y sin prever las consecuencias, con lo que se dalia a sí mismo y hace el ridículo.
17 Perjuicio le sucede al mensajero malvado; el corredor fiel trae sanidad.
✡ Comentario (Versículos 17)
Vemos aquí las funestas consecuencias de ir más allá de lo que a una persona se le ha
encargado decir o hacer. Se trata de un mensajero que, enviado a un determinado asunto,
resulta infiel al que le envió, con lo que acarrea desgracia, hace daño, a la persona que
confió en él al enviarle y, por supuesto se acarrea a sí mismo el castigo merecido. En
cambio, el enviado fiel (es) salud (lit.) pues, al actuar con prudencia y fidelidad, cura las
heridas que hayan podido causar los malentendidos entre personas o gobernantes y sabe
rectificar diplomáticamente los puntos débiles del convenio correspondiente.
18 La pobreza y la humillación son para el que desprecia la disciplina; pero el que
toma en serio la reprensión obtiene honor.
✡ Comentario (Versículos 18)
El que rehúsa ser corregido tendrá pobreza y vergüenza. Gerondi lo entiende del mensajero
desleal del v. anterior. ‗Si persiste en actuar a su antojo, rechazando el aviso de personas más
experimentadas que él y divulga los secretos del que le ha enviado, el efecto más probable
será el fracaso por el cual quedará empobrecido, pues se ganará el menosprecio de sus
semejantes, quienes se abstendrán de enviarlo a ninguna misión. En cambio, el que admite
corrección será enriquecido (lit. V. Gn. 13:1; Nm. 22:17)
19 El deseo realizado es dulce a la vida; apartarse del mal es aborrecible para el
estúpido.
✡ Comentario (Versículos 19)
El deseo cumplido resulta suave al alma (lit. Comp. v. 12b), pues la persona queda llena de
un sentimiento de satisfacción. Este era el sentimiento del salmista (Sal. 4:6, 7) al gozar del
favor de Di-s. En cambio, como todo el deseo de los malvados es hacer el mal, sólo están
83
satisfechos cuando lo llevan a cabo y les resulta abominación repugnante el apartarse del
mal.
20 El que anda en compañía del sabio se hace sabio, pero el que se junta con tontos
va a sufrir.
✡ Comentario (Versículos 20)
Los que quieran conservarse buenos han de buscar buenas compañías, y el buscar estas
compañías será una buena prueba de su bondad y prudencia (los hombres se conocen por los
compañeros y amigos que escogen). Dice el refrán español: ‗Dime con quién andas y te diré
quién eres‘. En cambio, son innumerables los que se han echado a perder por las malas
compañías (V. 1 Co. 15:33).
21 El infortunio persigue a los pecadores, pero a los justos se los recompensa bien.
✡ Comentario (Versículos 21)
Aquí se describe al mal, a la adversidad o a la desgracia, corriendo tras el malvado hasta
darle alcance. Quizá prospere por algún tiempo, pero su condenación no se tarda (v. 2 P.
2:3), aunque él crea que no le va alcanzar. En cambio, Di-s (implícito, pero probable)
recompensará (con) el bien (lit.); no siempre en esta vida, pero de cierto en el cielo.
22 El hombre bueno tiene qué dejarles a sus nietos, porque la riqueza de los
pecadores se acumula para los justos.
✡ Comentario (Versículos 22)
Una de las bendiciones más estimadas por un israelita era dejar una buena fortuna a sus
herederos: «a los hijos de sus hijos», incluyendo en los nietos a todos sus descendientes. La
mejor fortuna que se les puede dejar es la bendición de Di-s y sus promesas (comp. Sal.
103:17), mientras que las riquezas del malvado no permanecen en su familia, sino que van a
parar a la familia del justo. Así vemos que la fortuna de Amán fue a las manos de
Mardoqueo (lit. Mordecay), como vemos en Est. 8:1, 2.
84
23 La labor del pobre deja mucho alimento; pero la riqueza se disipa por falta de
moderación.
✡ Comentario (Versículos 23)
El sentido más probable de este difícil versículo es: «El duro trabajo del pobre arrendatario
produce abundante fruto para el dueño, mientras apenas le queda algo al que trabaja el difícil
terreno. Esto no es equitativo, pero aún queda otra injusticia mayor: Hasta eso mismo que le
queda al arrendatario, se lo arrebatan». Las modernas versiones evangélicas (New American
Standard Translation, New International Version, La Biblia de las Américas) dan bastante
bien este sentido. Las versiones católico-romanas modernas (Biblia de Jerusalén, Nueva
Biblia Española, La Sagrada Escritura-comentario de los jesuitas) se apartan totalmente del
texto hebreo, ya sea en la primera parte del versículo o en la segunda, para seguir a los LXX.
24 El que no usa la vara odia a su hijo, pero el que lo ama lo disciplina temprano.
✡ Comentario (Versículos 24)
Por contraste, este versículo es muy fácil de entender y es muy bien conocido. «El que
escatima la vara (lit.), es decir, el que no corrige debidamente (con vara de padre, no de
tirano) y a tiempo, a su hijo aborrece, es decir (según el frecuente uso bíblico de este verbo),
no le ama como conviene y debe. Pero el que lo ama de veras, desde temprano (antes de que
hayan echado raíces los hábitos viciosos) lo corrige.
25 El justo come hasta satisfacerse, pero el vientre del malvado está vacío.
✡ Comentario (Versículos 25)
Es una dicha para el justo tener siempre suficiente para comer y saber cuándo tiene
suficiente. En cambio, es una de las miserias del malvado el no tener nunca bastante por no
sentirse nunca satisfecho. Aun su vientre tiene necesidad, no porque le falte lo necesario,
sino porque es insaciable.
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✡ PROVERBIOS 14 ✡
1 La más sabia de las mujeres edifica su casa, pero la vanidosa la derrumba con
sus propias manos.
✡ Comentario (Versículos 1)
La versión literal de este v. es la siguiente: « (Cada una de) las mujeres sabias edifica su
casa, pero (cada una de) las necias la derriban con sus propias manos». En efecto, una
mujer prudente, piadosa, hacendosa, es buena administradora y, de este modo, hace que
prosperen los negocios de la familia, que se paguen a tiempo las deudas, que se eduque bien
a los hijos, y que toda la familia goce de comodidad en el interior y de buen nombre y
crédito de puertas afuera. Así es como se edifica la casa. En cambio, son muchas las familias
que van a la ruina por culpa de la mala administración o del derroche de las mujeres, tanto o
más que por la indolencia o el descuido de los maridos. Una mujer que no es prudente ni
hacendosa, aunque parezca a veces temerosa de Di-s, no lo es, pues, en lugar de edificar la
casa, la derriba con sus manos.
2 El que mantiene su integridad respeta a ; el de caminos desviados se burla
de él.
✡ Comentario (Versículos 2)
El proverbio es tan sencillo que no necesita comentario: El justo manifiesta su temor
reverencial, filial, a Di-s, comportándose como Di-s manda; en cambio, todo pecado es un
insulto a Di-s (v. Gn. 39:9).
3 En la boca del necio hay una vara de orgullo, pero los labios del sabio lo
protegen.
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✡ Comentario (Versículos 3)
En la boca del necio hay un retoño de soberbia (lit. El vocablo para ‗retoño‘ vuelve a salir en
Is. 1 l: l); es decir, lo único que brota de sus labios son palabras altivas que acaban por
arruinarle. La raíz está en el corazón y, a no ser que la raíz se arranque, su mal no tiene
remedio. En cambio, los labios de los sabios los preservarán (lit.) de decir lo que causa daño
a otros y, por consiguiente, serán para ellos mismos una buena protección.
4 Si no hay buey fuerte la era está limpia, pero una rica cosecha viene por la
fuerza del buey.
✡ Comentario (Versículos 4)
Sin bueyes, pesebre limpio (lit.); es decir, donde no hay animales de labranza, la casa puede
conservarse limpia, lo cual agrada a quienes les gustan las apariencias, pero aborrecen el
trabajo de limpiar la suciedad que los animales producen. De éstos son los que prefieren los
caballos a las vacas, y los perros a los cerdos. Pero las personas laboriosas consideran que
las desventajas que comporta cuidar a los animales de labranza son contrarrestadas por los
beneficios que proporcionan al emplearlos en las labores del campo.
5 Un testigo honrado no mentirá; un testigo falso testifica mentiras.
✡ Comentario (Versículos 5)
En la administración de la justicia, tienen mucho peso los testigos y, por tanto, es muy
importante para el bien común que los que han de testificar ante los tribunales sean personas
honestas y temerosas de Di-s. Un testigo concienzudo no se atreverá a dar un testimonio
falso. Pero el que se deja sobornar o intimidar dirá mentiras con el mismo aplomo que si
dijese verdades.
6 Un burlador busca sabiduría en vano, pero el conocimiento viene fácil al
inteligente.
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✡ Comentario (Versículos 6)
La razón por la que algunas personas buscan la sabiduría y no la encuentran es porque no la
buscan con ánimo sincero ni con temor de Di-s (comp. Sal. 111:10); menos todavía la
pueden encontrar los escarnecedores o insolentes, prestos a burlarse de lo que no entienden
(v. 2 P. 2:12; Jud. vv. 10 y ss.). En cambio, al hombre de entendimiento lit. El mismo
vocablo de 1:5), la sabiduría le es fácil, le resulta fácil hallarla porque posee la disposición
necesaria, sin prejuicios ni afectos corrompidos, con lo que fácilmente entiende lo que se le
enseña y guarda en el corazón lo aprendido.
7 Mantén tu distancia del tonto, porque no aprenderás habla sabia.
✡ Comentario (Versículos 7)
El hombre malvado es necio; de él debemos apartamos si no queremos contagiamos de su
necedad; de sus labios no se puede aprender nada digno de ser escuchado. A veces, el único
modo de reprender al que habla necedad o perversidad es marcharse a otro lugar.
8 Es la sabiduría de un hombre listo entender su camino; pero la estupidez del
tonto es engañosa.
✡ Comentario (Versículos 8)
No se trata aquí de la sabiduría (lit.) del científico, la cual consiste sólo en especulaciones,
sino la del prudente, la práctica, la del que sabe discernir su camino (comp. 4:26) y, por
tanto, sabe en cada caso cómo comportarse, la dirección que hay que tomar, sin mirar a lo
que otros hagan, ni criticarlos precipitadamente por seguir otros caminos. En cambio, la
estupidez de los necios es engaño, es decir, les hace equivocarse de dirección. Al no poseer
la discreción del prudente, el necio marcha por derroteros falsos.
9 Las reparaciones median entre los tontos, entre los rectos, la buena voluntad.
✡ Comentario (Versículos 9)
La mejor versión de este difícil versículo, parecida a la que ofrece la New International
Version, es la que da J. J. Serrano: «Al necio la indemnización le reconcilia; pero al íntegro,
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la buena voluntad». Y lo comenta así: ‗La interpretación que adoptamos significa
literalmente que el necio, cuando ofende a alguno, no puede aplacarlo sino por medio de
dones que sean garantía cierta de la sinceridad de su arrepentimiento. Esto es, que nadie
acepta la palabra sola del necio. En cambio, del bueno se fían y aceptan su buena voluntad
como garantía suficiente‘. Esta es también la interpretación que, como más probable, ofrece
el rabino Cohen.
10 Solamente el corazón conoce su amargura, y ninguno de afuera puede compartir
su gozo.
✡ Comentario (Versículos 10)
Cada persona siente su propia carga, especialmente la que pesa sobre el corazón y, por eso,
no debemos censurar la tristeza o la depresión de otros, pues no sabemos cómo se sienten;
quizás el golpe que sufren es mayor que el gemido que emiten. Por otra parte, algunos gozan
de consuelos divinos, de los que otros no se dan cuenta; mucho menos, pueden participar de
ellos.
11 La casa del malvado será demolida, pero la carpa del recto florecerá.
✡ Comentario (Versículos 11)
El pecado es la ruina de grandes familias, mientras que la virtud hace surgir y florecer la
estabilidad de familias poco importantes en el plano social. Aunque sólo tengan una tienda
de campaña por morada, los rectos disfrutarán de la bendición de Di-s, mientras que la casa
de los impíos, por muy espléndida que sea, será derribada o arrasada.
12 Un camino puede parecerle derecho al hombre, pero al final es un camino a la
muerte.
✡ Comentario (Versículos 12)
La primera parte de este proverbio se repite varias veces (v. 12:15; 16:2; 21:2). El camino de
la ignorancia y del descuido, de la sensualidad y del fraude, puede parecerle bueno, y
aun éticamente correcto, a un malvado, ya que, aparentemente, es un camino libre de
obstáculos. Pero estos necios que se engañan a sí mismos, acaban por destruirse a sí mismos.
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13 El corazón puede estar adolorido aun en la risa, y el gozo puede acabar en pena.
✡ Comentario (Versículos 13)
Este proverbio no es tan pesimista como a primera vista parece. Lo que quiere enseñar es
que la vida está llena de incertidumbres y que un comienzo de día soleado puede dar paso a
un inesperado chaparrón. Por eso, es prudente no entregarse a excesivas alegrías y ligerezas,
en especial cuando conducen al pecado y pueden terminar en dolor de cabeza y congoja de
corazón.
14 Un hombre sin principios cosecha el fruto de sus caminos; el bueno, de sus
obras.
✡ Comentario (Versículos 14)
El necio, aquel cuyo ‘corazón se vuelve atrás’ (la misma frase de Sal. 44:18), apartándose de
Di-s y del camino del deber, recibe «hartura» (no significa aquí ‗castigo‘) de su propios
caminos malos, mientras que el bueno alcanza verdadero contento en un camino que da
verdadero sentido a la vida y abundantes oportunidades de hacer el bien.
15 Una persona inexperta lo cree todo; un hombre listo pondera su proceder.
✡ Comentario (Versículos 15)
La fe es una necesidad, pero la credulidad es una necedad (el sentido es muy diferente del de
1 Co. 13:7, donde el que ama está inclinado a echar a buena parte lo que a otros hace
sospechar mal). Comenta Ryrie: «El prudente mira bien antes de saltar». M. Henry dice: «El
prudente prueba antes de confiar» (Ambos hacen un juego de palabras en inglés). Es un
proverbio sencillo, pero de inmensa sabiduría, por falta de la cual la gente se traga, sin
masticar, todo lo que lee en libros y periódicos, lo que oye en la radio y ve en la televisión.
Así se forma la llamada ‗opinión pública‘, tan necia y frágil como las fuentes de que
procede.
16 Un hombre sabio es tímido y se aparta del mal, pero el tonto se apresura
confiadamente.
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✡ Comentario (Versículos 16)
El temor de Di-s es una excelente protección de toda cosa santa y contra toda cosa no santa.
De sabios es apartarse del mal, no llegarse cerca del pecado, exponiéndose a caer en él. De
insensatos es confiarse hasta dejar toda precaución, pensando que lo saben todo y que nada
les puede hacer daño. Estos, además, no hacen caso a nadie que les avise.
17 Un hombre impaciente comete necedad; al hombre de intrigas lo odiarán.
✡ Comentario (Versículos 17)
Los que son demasiado susceptibles y se enojan enseguida, dicen y hacen cosas ridículas y
se exponen al menosprecio de los demás. En el extremo opuesto, igualmente vicioso, están
los que maquinan con calma el mal que pueden hacer a otros. Quizá son tardos en airarse,
pero es para mejor atrapar en su red a los incautos. Si los primeros están expuestos al
menosprecio, los últimos se exponen al aborrecimiento.
18 La insensatez es la suerte del inexperto, pero los hombres listos se glorían en el
conocimiento.
✡ Comentario (Versículos 18)
El pecado es la infamia y vergüenza de los malvados, y aun el simple, al que no le alcanza ni
para ser llamado propiamente malvado, no puede esperar otra cosa que necedad, puesto que
escogen neciamente. La necedad es su herencia, mientras que los prudentes tienen, no sólo
por herencia, sino también por corona, la sabiduría. Las cabezas sabias merecen ser
coronadas; en esto se ve que la sabiduría no sólo es justificada, sino
también glorificada, por sus hijos.
19 Los malos se rebajan ante los buenos, así el malvado a las puertas del justo.
✡ Comentario (Versículos 19)
Los malos se inclinarán, en señal de derrota y rendición, delante de los buenos. La Biblia
enseña la victoria final del bien sobre el mal. La segunda parte del versículo viene a ofrecer
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un paralelismo de sinonimia y debe suplirse ‗el verbo ‗inclinarse‘: «Y los impíos se
inclinarán a las puertas del justo» (singular colectivo, como en muchas ocasiones).
20 Al pobre lo desprecian hasta sus compañeros, pero el rico tiene muchos amigos.
✡ Comentario (Versículos 20)
Este proverbio es una expresión del adagio castellano: ‗poderoso caballero es don dinero‘.
La mayoría de los hombres son como las golondrinas que emigran en invierno. Por eso (y
por muchas otras razones), es bueno tener por amigo a Di-s, el cual no nos abandona si
somos pobres. El rico tiene muchos amigos mientras pueden sacar algo de él.
21 El que desprecia a su prójimo está mal; el que le muestra piedad al humilde es
feliz.
✡ Comentario (Versículos 21)
El carácter del hombre tiene su exacta medida en la forma como se comporta con su
prójimo. Peca el que menosprecia a su prójimo, peca incluso contra la Ley (Lv. 19:18). El
paralelismo indica que lo desprecia por ser pobre, puesto que se tiene
por ‘dichoso’ (hebr. ashraiv; lit. ‘dichoso de él) al que tiene misericordia lit. al que muestra
favor) de los pobres.
22 Ciertamente los que planean el mal se extraviarán, mientras los que planean el
bien ganan amor.
✡ Comentario (Versículos 22)
Aquí se da un paso más. Ya no se trata de los que menosprecian a su prójimo, sino de los
que maquinan el mal contra él. Para ello echan mano de todas sus malas artes y llevan
adelante sus intrigas con toda clase de medios, pensando que así les irá estupendamente en
sus planes, pero yerran grandemente, pues nadie puede ser más listo que el Di-s sabio y
justo en grado infinito; así que están planeando su propia ruina. En cambio, los que planean
el bien, aprovechando todas las oportunidades para extender su generosidad a un número de
personas cada vez mayor y en forma aceptable a los que están necesitados de
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ella, alcanzarán misericordia y verdad, amor fiel de parte de un Di-s que no deja sin
recompensa un vaso de agua fresca (dicho binomio, frecuente en la Biblia, salió ya en 3:3).
23 De toda labor se obtiene alguna ganancia, pero hablar sin hacer nada es pura
pérdida.
✡ Comentario (Versículos 23)
Los que son laboriosos suelen prosperar. El que se fatiga trabajando obtiene su fruto; éste es
el sentido de la primera parte. En cambio, los charlatanes suelen ser malos trabajadores, por
lo que no pueden esperar otra cosa que penuria y miseria. Lo mismo ocurre en el plano
espiritual, aunque el sentido del proverbio no va por ese camino: También en las
congregaciones se dan los dos grupos: los que edifican callando y los que molestan y
desedifican hablando demasiado o lo que no deben.
24 El ornamento de los sabios es su riqueza; la estupidez de los tontos es estupidez.
✡ Comentario (Versículos 24)
El texto hebreo dice literalmente: «Corona de los labios (son las) riquezas, pera la necedad
de los necios (es sólo) necedad». El sentido es el siguiente: La sabiduría es productora de
riquezas, y el honor que éstas comportan (así como el buen uso que de ellas se hace -caben
los dos sentidos) es como una corona, mientras que la insensatez sólo acarrea deshonra.
Comenta un antiguo rabino: ‗A veces, el sabio comete necedad; pero siempre es posible
hallar algún factor redentor en tal acto de necedad. En cambio, los actos de los necios son
completamente necios, vacíos de todo factor redentor‘ (es decir, que compense).
25 Un testigo veraz salva vidas; el que testifica mentiras [esparce] engaño.
✡ Comentario (Versículos 25)
El testigo fiel y veraz libra las almas, pues hace que se descargue al inocente de los cargos
que falsamente le han imputado; también puede traducirse por ‘vidas’, teniendo en cuenta
que el buen nombre es, para muchos, de mayor estima y valor que la vida misma. En
cambio, el testigo que respira mentiras es engaño (lit.). Los gobiernos deberían tener interés
en acabar con los testigos falsos, puesto que la verdad es el cimiento de la sociedad.
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26 El respeto a es una fortaleza, un refugio para los hijos de un hombre.
27 El respeto a es fuente de vida, que capacita a uno para evitar trampas
mortales.
✡ Comentario (Versículos 26-27)
La mejor versión, según Cohen, del versículo 26 es como sigue: «En la reverencia del
Creador lit. de ) hay fuerte confianza, y a sus hijos (los del temeroso de Di-s) les
servirá de refugio», con lo que se indica (comp. con 20:7) que las bendiciones de que gozan
los hijos son muchas veces consecuencia de la piedad de sus padres. El v. 27 da un paso más
(comp. con 10:11), pues asegura que el temor de Di-s es una fuente de vitalidad espiritual,
que rebosa amor, gozo y paz; con ello, es un antídoto soberano contra el pecado y la
tentación: para apartarse de los lazos de la muerte.
28 Un pueblo numeroso es la gloria de un rey; sin una nación el gobernante está
arruinado.
✡ Comentario (Versículos 28)
El proverbio da a entender que toda nación depende, tanto en la prosperidad de la industria,
la agricultura, etc., como en sus medios de defensa contra sus enemigos, especialmente los
países limítrofes, de la fuerza numérica de su población. Los países pequeños difícilmente
pueden conservarse independientes, pues suelen ser presa de otros más poderosos en
recursos naturales y humanos.
29 La paciencia resulta en mucho entendimiento; la impaciencia obtiene la necedad
como su porción.
✡ Comentario (Versículos 29)
La mansedumbre es prudente, puesto que el que tarda en airarse se ahorra muchos disgustos
y males físicos y morales; por otra parte, los mansos cooperan grandemente a mantener en la
sociedad una atmósfera de paz y tranquilidad. En cambio, el que es de genio pronto, el que
se encoleriza con facilidad, enaltece (lit.), no a sí mismo, sino su necedad, con lo que la
expone a la vista de todos.
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30 Una disposición calmada da salud corporal; la pasión es caries a los huesos.
✡ Comentario (Versículos 30)
El corazón apacible (es decir, un temperamento equilibrado), que no pierde fácilmente la
calma, es una fuente de salud: vida de las carnes (lit.); contribuye a la buena disposición del
cuerpo; la gente se engorda con el buen humor (así escribía M. Henry en una época en que
valía el adagio: «dame gordura y te daré hermosura»). En cambio, la envidia es carcoma de
los huesos; un ánimo descontento perjudica gravemente a la salud incluso corporal. Dice un
refrán castellano: «Amarilla pintan a la envidia, porque muerde, pero no come»; es decir,
hace daño a otros sin sacar ningún beneficio.
31 El que retiene lo que se le debe al pobre ofende a su Hacedor, el que le muestra
piedad al necesitado lo honra.
✡ Comentario (Versículos 31)
Todo el que hace daño a un pobre, debe saber que está afrentando al Hacedor (del pobre).
Di-s lo creó, le dio el ser, y se tiene por ofendido con las ofensas que se hacen al pobre, así
como honrado con las bondades que al pobre se hacen. Tuve hambre, y me disteis de
comer (Mt. 25:35).
32 Al malvado lo derriba su propia maldad; el justo halla seguridad en su muerte.
✡ Comentario (Versículos 32)
La doctrina de este proverbio está desarrollada en Sal. 73:19, 24. El malvado es llevado a la
ruina por sus propias maldades, mientras que el justo, aun en su muerte tiene
esperanza. Opina Ryrie que aquí se indica la muerte como ‗lugar de refugio e inmortalidad‘
para el justo. Cohen por su parte, descartando aquí la idea de inmortalidad, comenta: ‗El
pensamiento es que el justo, lleno de confianza en Di-s, no abandona su esperanza aun en el
caso desesperado de imaginarse que está a punto de morir‘.
33 La sabiduría reposa tranquilamente en la mente del hombre prudente, pero entre
los tontos se da a conocer.
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✡ Comentario (Versículos 33)
La modestia es la librea de la sabiduría; no sólo la lleva sobre el pecho, sino en el
corazón; aún así, sin ruido, se da a conocer a todos, incluso a los propios necios, los cuales
no pueden negarlo. Sin embargo, la segunda parte del versículo admite otra interpretación
más en consonancia con el contexto: el necio se jacta demasiado e inoportunamente de lo
poco que sabe.
34 La justicia exalta a una nación; el pecado es un reproche para cualquier pueblo.
✡ Comentario (Versículos 34)
Cuando la justicia impera en una nación, la llena de honra. Una justa administración en el
gobierno, la práctica de la equidad entre los ciudadanos, la caridad y la compasión hacia los
pobres y extranjeros, todo eso sirve de buena base al trono, eleva la mente del pueblo y
cualifica a una nación para recibir las bendiciones de Di-s. En cambio, el vicio es la
vergüenza de los pueblos. El pueblo de Israel gozó de fama y prestigio mientras honró a su
Di-s, pero cuando abandonaron a Di-s para irse tras de los ídolos, todas las naciones
limítrofes le insultaron y lo pisotearon.
35 El rey honra a un servidor capaz; se enoja con el incompetente.
✡ Comentario (Versículos 35)
El sentido de este proverbio es tan llano y natural que su versión corriente le resulta a Cohen
‗trivial y fútil‘, por lo que sugiere que se una al v. 1 del capítulo siguiente, con lo que el
proverbio gana en expresividad. Sin embargo, y sin negar que pueda caber alguna conexión,
el proverbio se sostiene por sí mismo con la enseñanza de que el servidor prudente es objeto
de la benevolencia del rey, porque en ese servidor halla el rey honra y prestigio, mientras
que el servidor necio no puede menos de causar al rey enojo, puesto que es una afrenta, una
ignominia, para el rey tener tal servidor.
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✡ PROVERBIOS 15 ✡
1 Una respuesta gentil aplaca la ira; una palabra dura provoca el enojo.
✡ Comentario (Versículos 1)
El mejor medio de mantener la paz es el uso de palabras suaves. Si el furor se levanta como
una tormenta amenazante, la respuesta blanda dispersa las nubes y hace salir el sol. Las
razones que no van en compañía de la mansedumbre no llegan a convencer (comp.
primera P. 3:15). No hay nada que tanto atice el fuego de la discordia como las palabras
ásperas, hirientes, en las que abunda el insulto y la recriminación.
2 La lengua del sabio produce mucho conocimiento, pero la boca de los tontos
vierte necedad.
✡ Comentario (Versículos 2)
La lengua de los sabios adorna el conocimiento (lit.). Así se usa este verbo en segunda R.
9:30 (<...adornó su cabeza»). El sentido es que el sabio conoce el modo de expresar sus
ideas en bellas frases, que deleitan y edifican a otros (comp. con Tito 2:10). En cambio, la
boca de los necios derrama necedad. Un corazón necio y malvado hace que la boca rebose
necedad y suciedad.
3 Los ojos de están en todas partes, observando a los malos y a los buenos.
✡ Comentario (Versículos 3)
Los ojos de están en todo lugar; no sólo lo ve todo desde lo alto (Sal. 33:13), sino que
está presente en todas partes; por lo que no se le oculta nada: pecados secretos, servicios que
nadie ve, penas que a nadie se comunican, todo está abierto a su vista. Esto sirve de gran
consuelo a los buenos y de temor a los malos.
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4 Una lengua sanadora es un árbol de vida, pero una desviada produce un espíritu
quebrantado.
✡ Comentario (Versículos 4)
La lengua apacible es árbol de vida. La diferencia entre esta frase y la del versículo 1 es que
allí se trataba de apaciguar la ira, mientras que aquí se trata de dar instrucción sana, curativa,
y edificante. Una vez más se menciona el árbol de vida, cuyas hojas sirven para la sanidad
de las naciones (Ap. 22; 2). En efecto, una buena lengua puede curar las almas enfermas
convenciéndolas de pecado y presentándoles la salvación que hay en El Mesías, y puede
también reconciliar a quienes han estado enemistados. En cambio, la lengua malvada, en
lugar de sanar, hiere, hace daño a los demás y a su propio dueño.
5 El necio desprecia la disciplina de su padre, pero el que le hace caso a la
reprensión se hace listo.
✡ Comentario (Versículos 5)
Los superiores (Padres, tutores, maestros, etc.) han de dar instrucción y reprensión a los que
están a su cargo. No sólo los han de educar con la luz del conocimiento, sino también con el
calor del celo; ambas cosas se han de hacer con afecto, a la vez que con autoridad. Es cierto
que la corrección, aun viniendo de Di-s (v. He. 12:11), causa tristeza; pero mejor es el dolor
que causa el cirujano que la muerte que ocasiona un tumor maligno. Y toda persona
prudente presta atención a cualquier corrección o consejo que sirva para mejorar su carácter
y sus actos.
6 En la casa del justo hay mucho tesoro, pero en la cosecha del malvado hay
problema.
✡ Comentario (Versículos 6)
Donde hay honestidad, puede esperarse que haya prosperidad. Y, si no llegan a conseguirse
muchos de los bienes de este mundo, hay siempre un gran tesoro en la gracia de Di-s.
Además, los que poseen poco, pero tienen el corazón dispuesto a contentarse con poco,
pueden disfrutar de la necesaria comodidad en esta vida. En cambio, donde hay maldad,
aunque llegue a abundar la riqueza, no puede haber bendición de Di-s y es frecuente que
haya maldición de parte de quienes son víctimas de la opresión del malvado.
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7 Los labios de los sabios diseminan conocimiento; no así las mentes de los
tontos.
✡ Comentario (Versículos 7)
Bien se usan los conocimientos cuando se comunican, no cuando se reservan para uno
mismo o para unos pocos íntimos. Hemos de esforzamos en propagar los buenos
conocimientos, enseñando a los más posible, a fin de que éstos los comuniquen, a su vez, a
otros (v. 2 Ti. 2:2).
8 El sacrificio de los malvados es una abominación a , pero la oración del
recto le agrada.
✡ Comentario (Versículos 8)
También muchos malvados ofrecían, y ofrecen, sacrificios a Di-s, pero estos sacrificios, por
muy costosos y numerosos que fuesen, no eran aceptados por Di-s, porque no se ofrecían
con las debidas disposiciones de fe y sinceridad de corazón. En cambio, la oración de los
rectos es la delicia de Di-s. No estará de más advertir que el proverbio no trata de
contraponer la oración al sacrificio, siendo el sacrificio la expresión externa de la oración
interior, por lo que han de estar juntos. La antítesis está en la disposición de justos y
malvados.
9 El camino de los malvados es una abominación a , pero él ama al que
persigue la justicia.
✡ Comentario (Versículos 9)
Este proverbio es como una secuencia del anterior y, al mismo tiempo, como el criterio
supremo que define la religión de una persona. El carácter piadoso de una persona no se
mide por la cantidad de actos religiosos que lleva a cabo, sino por el camino que ha
escogido, es decir, por la pauta que ha marcado a su conducta. No hay acto religioso, por
elevado o costoso que sea, que pueda compensar por la desobediencia a la voluntad de Di-s
(comp. Mt. 7:21 y SS.).
99
10 La disciplina le parece mal al que abandona el camino; el que desprecia la
reprensión morirá.
✡ Comentario (Versículos 10)
Esto muestra que los que no soportan ser corregidos han de esperar ser destruidos. De todos
los pecadores, los que dejan el camino, esto es, los apóstatas, son los que peor reciben la
corrección.
11 La Fosa y la Destrucción están expuestos ante , ¡cuánto más las mente de
los hombres!
✡ Comentario (Versículos 11)
Este proverbio corrobora lo dicho en el v. 3 acerca de la omnipresencia de Di-s, en orden a
sus juicios sobre el mal y el bien. En particular, el proverbio quiere poner de relieve que aun
las regiones que para el hombre son un profundo misterio (el Seol y el Abadón), para Di-s
son enteramente conocidas. El hebreo Abaddón significa ‗destrucción‘ y es uno de los
nombres que, en Ap. 9:11, se le dan al diablo. Este destructor, aunque tiene poder para
engañar a los hombres, no puede evadirse del conocimiento que Di-s tiene de él. Di-s conoce
todas sus mafias y todos sus disfraces (Job. 26:6). Y si Di-s puede atravesar las
profundidades de Satanás, mucho mejor puede escudriñar el corazón humano. Di-s es mayor
que nuestro corazón (primera Jn. 3:20), lo cual es un aviso para no ser remisos, pero también
un consuelo para no ser demasiado escrupulosos.
12 Al burlador le disgusta que lo reprendan; no le contestará al sabio.
✡ Comentario (Versículos 12)
El escarnecedor hace burla de Di-s y de la religión y, además, odia a los que tratan de
convencerle y corregirle. No quiere volver en sí y reflexionar sobre lo que le conviene, pues
no puede soportar el que su conciencia le acuse. Triste en verdad es el caso del hombre que
no está dispuesto a razonar consigo mismo ni, mucho menos, con Di-s (v. Is. 1:18).
100
13 Un corazón alegre produce una cara contenta; un corazón triste produce mal
humor.
✡ Comentario (Versículos 13)
El corazón alegre (con santa, sana y sabia alegría) contribuye a la salud de la persona
(comp. 14:30; 17:22), pues se siente dichosa (v. 15), y eso se refleja en el rostro, el cual, aun
cuando no sea naturalmente bello, aparece radiante y agradable a los que lo contemplan. Un
ánimo sanamente gozoso, bajo el gobierno de la prudencia y de la gracia, es un gran
ornamento de la religión, pues añade lustre a la hermosura de la santidad y capacita al
hombre para mejor hacer el bien. En cambio, la melancolía insana es un gran enemigo del
hombre; «la tristeza del mundo produce muerte» (segundaCo. 7:10).
14 La mente del hombre prudente busca conocimiento; la boca del tonto persigue la
necedad.
✡ Comentario (Versículos 14)
El sabio no se satisface con lo que ya sabe, sino que busca aumentar su sabiduría, mientras
que el necio se satisface con sus necedades y no intenta buscarles remedio.
15 Todos los días del pobre son calamitosos, pero el contentamiento es una fiesta
sin fin.
✡ Comentario (Versículos 15)
Hay personas de ánimo depresivo, con lo que todos sus días resultan difíciles, es decir,
malos. No hay que censurar a tales personas ni menospreciarlas, sino compadecerlas,
consolarlas y orar por ellas. El humor de una persona depende, en gran medida, de su
temperamento, y es difícil de remediar. Otras, en cambio, están bien dispuestas a ver el lado
rosa de la vida, por lo que tienen un banquete continuo, aceite para las ruedas de su
obediencia a Di-s.
16 Mejor es lo poco con respeto a que gran riqueza con confusión.
101
17 Mejor es una comida de vegetales donde hay amor que un buey cebado donde
hay odio.
✡ Comentario (Versículos 16-17)
El gozo creyente produce contentamiento y hace agradable y fácil la vida. Santidad y amor
le bastan al hombre, aunque posea pocas cosas del mundo. Los que tienen grandes tesoros,
tienen grandes temores y corren grandes peligros, especialmente cuando no tienen en cuenta
a Di-s ni a los pobres. Cuando los hermanos habitan juntos en armonía (Sal. 133:1), sienta
mejor una sobria comida de legumbres o verduras que el más sabroso banquete. En cambio,
donde reina el odio, la enemistad y la desconfianza, ni un buey engordado servirá para
alegrar la vida.
18 Un hombre de mal temperamento provoca peleas; un hombre paciente calma la
discordia.
✡ Comentario (Versículos 18)
El enojo enciende un fuego que consume ciudades y congregaciones, pues el hombre
iracundo suscita contiendas y hace que otros se peleen entre sí también. En cambio, el
que es tardo en airarse, no sólo impide la contienda, sino que, cuando se ha encendido,
contribuye grandemente a apagar el incendio, uniendo a los que se habían enemistado y
trayéndolos a concordia mediante mutuas concesiones.
19 El camino de un perezoso es como una verja de espinos, pero el sendero del
recto está pavimentado.
✡ Comentario (Versículos 19)
El perezoso inventa toda clase de excusas para librarse del trabajo; intenta convencer a los
demás de que su camino está bordeado de espinos, por lo que podría rasgarse el vestido; de
ahí su repugnancia a emprender cualquier tarea. En cambio, el que se esfuerza por cumplir
honestamente con su deber, lo halla fácil por la gracia de Di-s y, lo que para el otro es
camino de espinas, para él es una gran avenida bordeada de rosales.
20 Un hijo sabio hace feliz a su padre; un necio humilla a su madre.
102
✡ Comentario (Versículos 20)
Los hijos buenos son el gozo de sus padres, quienes bien pueden gozarse en ellos, después
de los cuidados y fatigas que les han costado. Y un motivo más de satisfacción para los hijos
es saber que han servido de consuelo y ayuda a sus padres cuando éstos han llegado a la
ancianidad. En cambio, los malos hijos menosprecian a sus padres, no reconocen su
autoridad y les pagan con malos tratos los beneficios que de ellos recibieron.
21 La necedad es un gozo para el que carece de sensatez; el hombre prudente
camina por senderos derechos.
✡ Comentario (Versículos 21)
El malvado peca, no sólo sin pesar, sino aun con placer. Careciendo de buena norma, carece
también de sinceridad y dirección sabia, pero el hombre entendido, el que tiene los ojos y el
corazón iluminados por el Espíritu Santo (Ef. 1:18), vive una vida bien ordenada y trata en
todo de conformar su voluntad a la de Di-s (Ro. 12:1, 2).
22 Los planes fracasan por falta de consejo, pero tienen éxito cuando hay muchos
consejeros.
✡ Comentario (Versículos 22)
Este proverbio viene a ser una repetición de 11:14, por lo que no necesita especial
comentario.
23 Una respuesta pronta es un gozo para un hombre, ¡y cuán buena es una palabra
dicha a tiempo!
✡ Comentario (Versículos 23)
Bien suele hablar el que habla a tiempo; es decir, cuando sus palabras pueden hacer bien y
se presenta la oportunidad de decir algo útil, edificante. Muchas buenas palabras han sido, a
veces, inútiles y hasta contraproducentes por haber sido pronunciadas de mala manera o a
destiempo.
103
24 Para un hombre inteligente la senda a la vida va hacia arriba, para evitar la Fosa
abajo.
✡ Comentario (Versículos 24)
El camino de la sabiduría y de la santidad es un camino de vida y, por camino hacia
arriba (en último término, hacia el Cielo); es el del Seol abajo, de la muerte (en último
término, del infierno).
25 derribará la casa del orgulloso, pero establecerá la finca de la viuda.
✡ Comentario (Versículos 25)
Los soberbios, es decir, los arrogantes que se valen de su posición de autoridad para oprimir
a los pobres, serán destruidos ellos y sus casas, en justo castigo por las expoliaciones que
cometieron. En cambio, Di-s es el gran protector de los oprimidos y despojados. Se
menciona la viuda como tipo de una persona sin protección, expuesta a la voracidad de los
opresores.
26 Los pensamientos malos son una abominación a , pero las palabras
agradables son puras.
✡ Comentario (Versículos 26)
Los pensamientos de los malvados son malvados y, por ello, no pueden menos de
ser abominación a , quien los ve y juzga conforme a toda su perversidad; en
cambio, las expresiones (lo que del corazón sale por la boca) de los limpios son
agradables (versión más probable). Advierte Cohen que el vocablo hebreo para ‘limpios’ (o
‗puros‘) parece ser usado aquí en su sentido técnico conforme se aplica a ‗los animales
limpios‘ que son aceptables para el sacrificio.
27 El que persigue ganancias mal habidas le busca problemas a su familia; el que
desprecia los regalos vivirá mucho.
104
✡ Comentario (Versículos 27)
El codicioso (comp. 1:19) alborota (es decir, pone en desorden) su casa (ya visto en 11:29),
por lo que el dinero que gana, por mucho que sea, sirve de poco provecho. El contexto
sugiere, en realidad, que gran parte de esa ganancia se debe al soborno, por lo que no es de
extrañar que su casa sufra ‗alboroto‘, es decir, contiendas y reclamaciones de los que se
creen perjudicados por la conducta deshonesta del codicioso. En cambio, el que aborrece el
soborno, vivirá libre de preocupaciones.
28 El corazón del hombre justo ensaya su respuesta, pero la boca del malvado tira
para afuera cosas malas.
✡ Comentario (Versículos 28)
El justo, como prudente que es, medita (lit.), es decir, reflexiona antes de hablar, de forma
que las palabras que profiere son beneficiosas y edificantes. En cambio, el malvado, presto a
echar por su boca la maldad que rebosa su corazón, no se para a reflexionar, pues tiene de sí
mismo tan alta opinión que no piensa necesitar de mesura ni ponderación.
29 está lejos de los malvados, pero oye las oraciones de los justos.
✡ Comentario (Versículos 29)
Dios se distancia de los que le desafían, aunque le invoquen con los labios; en cambio está
cercano y escucha a los que oran de veras (comp. Sal. 145:18).
30 Lo que ilumina el ojo alegra el corazón; las buenas noticias confortan a los
huesos.
✡ Comentario (Versículos 30)
Por el contexto se deduce, como advierten Ryrie y Cohen, que la luz de los ojos significa el
brillo que resplandece en los ojos cuando se recibe una buena noticia. Dice que esa buena
nueva conforta los huesos porque penetra muy hondo. Para una persona buena, no hay mejor
buena nueva que oír cosas buenas de otros (v. 3a Jn. versículo 4).
105
31 El que presta oídos a la disciplina de vida reside entre los sabios.
✡ Comentario (Versículos 31)
El oído que escucha bien la buena admonición ama al que amonesta. Las amonestaciones de
los buenos amigos son llamadas aquí reprensiones (lit.) de vida, porque son medios para
sustentar la vida espiritual y, en el sentido directo del proverbio, para prolongar la vida
natural. Al que tal escucha, se le asegura un lugar entre los sabios, porque quienes saben
escuchar y obedecer, también sabrán enseñar y dirigir bien.
32 El que desprecia la disciplina se odia a sí mismo; el que le hace caso a la
reprensión gana entendimiento.
✡ Comentario (Versículos 32)
El que rehúsa la corrección (lit.), menosprecia su alma; es decir (probablemente), lo hace
con peligro de su vida, ya que sus malos caminos, no rectificados, pueden conducirle a
situaciones peligrosas y aun fatales. El error fundamental de los pecadores es que tienen en
poco su propia alma; por eso, la dañan por complacer al cuerpo. En cambio, el que escucha
la corrección adquiere (lit.) entendimiento y, de este modo, se aparta de los malos caminos y
anda por buenas sendas, las que llevan a la vida eterna y aun favorecen aquí a la salud
corporal.
33 El temor de es la disciplina de la sabiduría; la humildad precede al honor.
✡ Comentario (Versículos 33)
El temor reverencial de es instrucción (lit, hebr. musar) de sabiduría; es decir, en
sabiduría o para sabiduría (comp. 1:7; 9:10). La segunda parte del versículo, además de
asegurar la verdad corriente en la Biblia de que «el que se humilla será ensalzado», parece
indicar que el que es humilde para ser instruido y corregido, puesto que es temeroso,
alcanzará el honor que la sabiduría lleva consigo.
106
✡ PROVERBIOS 16 ✡
1 Una persona puede ordenar sus pensamientos, pero lo que diga depende de
.
✡ Comentario (Versículos 1)
Este proverbio viene a ser una versión de nuestro refrán castellano: ‗El hombre propone, y
Di-s dispone‘. Las disposiciones (planes) del corazón y la mente son del hombre en el
sentido de que Di-s le ha dotado de entendimiento, con el que puede conectar ideas y sacar
planes y conclusiones para gobernarse en la vida, pero, como dice Cohen, 'la habilidad de
expresar las ideas en palabras apropiadas y convincentes es un don de Di-s'.
2 Todos los caminos del hombre le parecen derechos, pero prueba los
motivos.
✡ Comentario (Versículos 2)
Este proverbio repite ideas ya conocidas y se repite, casi a la letra, en 21:2. Al juzgamos a
nosotros mismos y a nuestros actos, es difícil, por no decir imposible, ser imparciales, pero
pesa los espíritus; él tiene una balanza justa e infalible y pesa bien, pone a prueba la
sinceridad de los impulsos que nos mueven a obrar de una manera u otra. Por eso, hemos de
preguntamos a menudo: ¿Cómo juzgará Di-s esto que voy a hacer?
3 Confía tus asuntos a , y tus planes tendrán éxito.
✡ Comentario (Versículos 3)
El mejor modo de que nuestros planes se realicen convenientemente es encomendar a
nuestras obras (comp. 3:6, así como Sal. 37:5; 55:22; 1 P. 5:7). Aquí, como en Sal. 37:5, el
vocablo hebreo para 'encomendar' es ―gol‖, del verbo ―galal‖, que significa ―hacer rodar‖; la
idea, pues, es de quitarse un peso de encima y hacerlo rodar hasta Di-s para quien no hay
107
nada demasiado pesado, por lo cual puede aliviar a quienes se sienten abrumados por
cualquier peso (comp. Mt. 11:28).
4 hizo todo con un propósito, aún al malvado para el día malo.
✡ Comentario (Versículos 4)
Dios es la causa primera y el fin último de todas las cosas. Siendo el Creador de todo, ha
fijado un destino y un propósito a cada ser creado. La 2ª parte del versículo no significa que
Di-s predestine a una persona para el mal. Comenta Cohen: 'La intención no puede ser que
Di-s se proponga que una persona haya de ser malvada, porque ello estaría en contradicción
con la doctrina de la literatura sapiencial, Di-s hizo al hombre recto, pero ellos buscaron
muchos planes perversos (Ec. 7:29). Entonces, conociendo que algunos hombres serían
malvados, Di-s ordenó que el esquema del universo incluyese un día de mal, un día de
castigo y retribución, para ellos'.
5 Toda persona arrogante es abominación a ; ciertamente, no quedará sin
castigo.
✡ Comentario (Versículos 5)
La primera parte de este proverbio es como la de 11:20, con la variante de 'altivo' en vez de
'perverso'. La segunda es una repetición de 11:21b, con la misma expresión hebrea 'yad
leyad', 'mano a mano' (chocar la mano), que indica seguridad completa. 'El vocablo
'abominación' -dice Cohen- es análogo al mencionado en la Torá con respecto a la idolatría y
la inmoralidad. Por eso, los rabinos equiparan la altivez a esos pecados'.
6 La maldad se expía por la lealtad y la fidelidad, y el mal se evita mediante el
respeto a .
108
✡ Comentario (Versículos 6)
La culpa del pecado se nos quita por la misericordia y la verdad de Di-s en El Mesías
nuestro Mediador, no por medio de sacrificios legales. Y el poder del pecado se quebranta en
nosotros por medio del temor de , pues así es como los hombres se apartan del mal.
7 Cuando se agrada de la conducta de una persona, puede hasta convertir a
sus enemigos en aliados.
✡ Comentario (Versículos 7)
Dios puede cambiar en amigos a los enemigos cuando le place. El que tiene en su mano el
corazón de cada hombre, puede volverlo con toda facilidad (21: l). Lo hará por nosotros
cuando lo crea conveniente. Di-s hizo que Esaú se pusiese en paz con Jacob, y Abimélec con
Isaac.
8 Es mejor lo poco con justicia que un ingreso grande con injusticia.
✡ Comentario (Versículos 8)
Aquí se repite el pensamiento de 15:16, y comparando ambos versículos se ve que 'justicia'
es equivalente de 'temor de ' o más bien, es su consecuencia.
9 Una persona puede planear su ruta, pero es quien dirige sus pasos.
✡ Comentario (Versículos 9)
Este proverbio es semejante, a primera vista, al del v. 1, pero hay entre ellos una notable
diferencia. El sentido aquí es que, si los hombres planean su camino de forma que tengan
por objetivo supremo la gloria de Di-s y por norma cotidiana su santa ley, pueden esperar
que Di-s dirija sus pasos por su Espíritu y su gracia, de forma que no equivoquen el camino
ni dejen de llegar a su destino (comp. 1 Ts. 3:11).
109
10 Hay magia en los labios del rey; él no puede errar en el juicio.
✡ Comentario (Versículos 10)
El proverbio admite la fama de un precepto para los reyes y los jueces, a fin de que emitan
sus preceptos y veredictos como algo sagrado, pues sagrado es el oficio para el que fueron
ungidos. De ahí que han de tener sumo cuidado a fin de no violar la justicia en sus
pronunciamientos, pues entonces su boca cometería' transgresión' (lit.) en el sentido técnico
que tiene en Lv. 5:15 sobre 'el uso impropio -dice Cohen-, de algo que ha sido dedicado al
santuario. El juicio es de Di-s (Dt. 1:17) y por tanto, en la categoría de lo santo; en
consecuencia, la violación de la justicia es sacrilegio'.
11 Pesas y balanzas honradas son de ; todas las pesas en la bolsa son obra
suya.
✡ Comentario (Versículos 11)
Este proverbio, según Cohen, es mal interpretado por los modernos expositores que ven en
él una apelación a la justicia en el uso de pesas y medidas en el comercio ordinario. El texto
dice literalmente: «Balanza y platillo de justicia (hebr. mishpat, no tsédek) son de ;
todas las pesas de la bolsa son obra suya». No se trata de transacciones entre particulares,
sino de la obligación de los reyes de hacer justicia, pues es cosa sagrada; el juicio es de Di-s;
bajo la imagen de la balanza y los pesos, se expresa la idea de que Di-s ha fijado las normas
de todo juicio justo y no está al arbitrio de los reyes y jueces el fabricarlas a su capricho para
usarlas en el juicio.
12 Las obras perversas son abominación para los reyes, porque el trono se establece
con justicia.
✡ Comentario (Versículos 12)
Siguiendo con el pensamiento de que el oficio del rey es sagrado, vemos ahora que el hacer
lo que no es justo es malo en todos, pero en los reyes es una abominación (V. lo dicho en el
v. 5). En cambio, la justicia es el mejor medio para afianzar el trono (comp. 25:5; 29:14).
110
13 El habla veraz se gana el favor de los reyes; ellos quieren a los que hablan
honradamente.
✡ Comentario (Versículos 13)
Todo buen gobernante ama la sinceridad y la rectitud, por lo que le conviene poner en
puestos de autoridad a hombres que hablan lo recto, pues no hay peores ayudantes en el
gobierno que los parásitos y los aduladores.
14 La ira del rey es un mensajero de muerte, pero un hombre sabio puede aplacarla.
15 La sonrisa del rey significa vida; su favor es como nube de lluvia en primavera.
✡ Comentario (Versículos 14-15)
Estos dos vv. muestran el poder de los reyes, el cual siempre suele ser grande, pero
especialmente en los países del antiguo oriente, en los que gobernaban de forma absoluta, y
aun arbitraria y despótica. Dichosos los pueblos en que la prerrogativa del príncipe no daña a
la libertad del súbdito. Por eso, se da aquí mucha importancia a los efectos, tanto de la ira
como de la benevolencia del rey, así como al buen servicio que una palabra sabia puede
realizar para aplacar la ira del rey (V. 1 S. 19:6). Se menciona como bendición especial a la
lluvia tardía porque, al caer en primavera, aseguraba la madurez de los productos del campo.
16 Cuánto mejor es adquirir sabiduría que oro; adquirir entendimiento es preferible
a la plata.
✡ Comentario (Versículos 16)
La sabiduría celestial se ha de apreciar más que la riqueza material. La gracia es más valiosa
que el oro, pues la gracia es don sobrenatural de Di-s, mientras que el oro procede de la
providencia común. La gracia es para el alma y para la eternidad, mientras que el oro es para
el cuerpo y para el tiempo. La gracia nos sostiene en la hora de la muerte, cuando el oro no
nos puede hacer ya ningún bien. Hay vanidad y sacudir al aire en la obtención del oro, pero
gozo y satisfacción de espíritu en la adquisición de la sabiduría.
17 El proceder del recto evita el mal; el que preserva su vida cuida su camino.
111
✡ Comentario (Versículos 17)
El camino (hebr. mesilath, camino real, bien construido y libre de obstáculos) de los rectos
es accesible a los que se apartan del mal (éste es el sentido), pues está señalado por Di-s y
hollado por los justos que nos han precedido. Y todo el que tiene interés en preservar su
vida, no camina a la ventura, sino que busca el camino real del que se habla en la primera
parte.
18 El orgullo viene antes de la ruina, la arrogancia, antes del fracaso.
✡ Comentario (Versículos 18)
Cuanto más alto se sube el altivo, mayor es la caída que sufre. Di-s, en su justicia, abate
hasta el suelo a quienes han querido subir hasta el cielo. Faraón, Senaquerib,
Nabucodonosor, Herodes, son ejemplos de esto. Por esto es que cuando los altivos se ponen
a desafiar a Di-s, su caída está a las puertas. No temamos, pues el orgullo ajeno, sino
temamos grandemente caer nosotros mismos en el orgullo.
19 Es mejor ser humilde y estar entre los de abajo que compartir despojos con los
orgullosos.
✡ Comentario (Versículos 19)
La humildad nos obtiene el favor de Di-s y nos preserva de muchas tentaciones, lo cual es
mejor que repartirse los despojos con los soberbios. La frase tuvo en un principio un tono
militar (V. Gn. 49:27; Ex. 15:9), pero después se aplicó -dice Cohen- al enriquecimiento de
los fuertes a expensas de los débiles.
20 El que es diestro en algo logrará el éxito; feliz el que confía en .
✡ Comentario (Versículos 20)
La prudencia se granjea el respeto y la estima de los hombres, y el éxito en los asuntos de
cada día; pero todavía son mayores los beneficios que reporta la piedad. Téngase, sin
112
embargo, en cuenta que ambas cosas no se contraponen en este proverbio, sino que más bien
se unen.
21 Al de corazón sabio le llaman entendido; el que tiene habla agradable obtiene
sabiduría.
✡ Comentario (Versículos 21)
Los que poseen sabiduría sólida, reciben también el crédito y el prestigio que la acompañan.
La dulzura de labios es un complemento muy deseable de la discreción, a fin de que el
tenido por prudente pueda ejercer su influencia de modo extenso y efectivo. El mejor modo
de hacer aceptable una enseñanza o una respuesta es hacerla en tono suave y con palabras
esmeradamente escogidas.
22 El buen sentido es una fuente de vida a los que lo poseen, y la necedad es el
castigo de los necios.
✡ Comentario (Versículos 22)
El sentido de este versículo, del que depende su apropiada interpretación, es el siguiente: la
prudencia (hebr. sékhel, variante del haskel de 1:3) es fuente de vida, de dicha, de
prosperidad, de vitalidad espiritual, mientras que la necedad es la disciplina (es decir, el
castigo; hebr. musar) de los necios, puesto que les priva de la fuente de vida que constituye
la dicha de los prudentes.
23 La mente del hombre sabio hace efectiva su habla y aumenta la sabiduría de sus
labios.
✡ Comentario (Versículos 23)
Cuando hay sabiduría en el corazón, hay también discreción en los labios, añadiendo a la
calidad de la enseñanza la capacidad para transmitirla persuasivamente a otros.
24 Las palabras agradables son como el panal de miel, dulce al paladar y una cura
para el cuerpo.
113
✡ Comentario (Versículos 24)
De nuevo se insiste en la eficacia persuasiva de la suavidad en el hablar, es decir, en el
empleo de palabras agradables; más aún, cuando se basan en la palabra de Di-s, cuya dulzura
pudo aprender Salomón de las enseñanzas de su padre David (V. Sal. 19:10). Hay muchas
cosas agradables que no son provechosas, pero estas palabras suaves son dulzura para el
alma (aquí la parte espiritual del hombre) y medicina para los huesos, para toda la estructura
corpórea.
25 Un camino puede parecerle derecho al hombre, pero al final es un camino de
muerte.
✡ Comentario (Versículos 25)
Este proverbio es repetición de 14:12. El hecho de que se repita también de varias formas en
otros lugares nos da idea de la importancia que para Salomón (y para el Espíritu Santo) tiene
la enseñanza que en él se nos imparte.
26 El apetito de un trabajador trabaja para él, porque su hambre lo impulsa.
✡ Comentario (Versículos 26)
El proverbio parece decir que el hombre trabaja para ganarse así el sustento y satisfacer el
hambre. Como este sentido parece demasiado elemental para ser incluido entre proverbios
de sabiduría, los rabinos buscan explicaciones más profundas, entre las que destaca la que
Cohen cita de Gerondi: 'A veces, el alma (lit.) del que trabaja, trabaja para él, es decir, para
su cuerpo, lo contrario del hombre sabio, quien trabaja para su alma'. Así, empalmaría con el
v. anterior, donde se expone el caso general de lo que 'le parece derecho a un hombre', pero
al final se da cuenta que, tras tanto trabajar, 'ha gastado vanamente sus días, olvidado de su
Hacedor y preocupado únicamente de satisfacer las necesidades de su cuerpo'.
27 Un canalla planea lo malo; lo que hay en sus labios es como un fuego abrasador.
28 un hombre falso enciende la contienda, y el quejoso ahuyenta a su amigo.
114
✡ Comentario (Versículos 27-28)
Hay quienes no sólo son viciosos en sí mismos, sino despectivos y dañinos para los demás,
siendo así los peores. «Excava el mal», dice a la letra el texto, como se cava una fosa para
hacer caer en ella a una persona (en este sentido se usa el verbo en Salmos); en sus labios
hay llama de fuego (mejor, un fuego abrasador) pues, con su maldad, abrasa todo cuanto
tocan sus labios, especialmente la reputación del prójimo, como se insinúa en el v. 28.
29 Un hombre violento extravía a su amigo, haciéndolo tomar el camino
equivocado.
30 El cierra sus ojos mientras medita el engaño; puchera sus labios mientras decide
lo malo.
✡ Comentario (Versículos 29-30)
Aquí tenemos otros malos efectos de los malos labios. La adulación (v. 29), mediante la cual
el malvado trata de atraer a otros para que sean sus cómplices en el mal (comp. 1:10 y ss.).
En el extremo opuesto, otro pecado de los labios sin decir una palabra, frunciéndolos, es
decir, apretándolos. 'El verbo -dice Cohen - se usa en conexión con los ojos en 6:13; 10:10,
una expresión callada que, sin embargo, habla más que las palabras'. Lo del 'guiñar los ojos'
como gesto de perversidad lo vimos ya en 6:13 y ss.
31 El pelo blanco es corona de gloria; se logra en el camino de la justicia.
✡ Comentario (Versículos 31)
El honor y respeto a los ancianos es algo característico en la Biblia, en contraste con el
desprecio que a los ancianos sentían los pueblos paganos (V. Lv. 19:32). Aquí se nos dice
que las canas son corona de honor si se hallan en el camino de justicia. En efecto, la
verdadera gloria de la ancianidad es la gracia; el anciano malvado pierde el derecho a ser
respetado, pues ha dejado que su corona fuese arrojada al fango.
32 Es mejor ser tolerante que poderoso, tener control propio que conquistar una
ciudad.
115
✡ Comentario (Versículos 32)
Abundando en un tema ya conocido, se insiste en los beneficios que reporta ser tardo en
airarse, pues denota dominio de sí mismo, que es la corona del fruto del Espíritu Santo (V.
Gá. 5:23). Dominarse a sí mismo cuesta más, y tiene mayor valor, que dominar por la fuerza
a otros. El más humilde de los hijos de Di-s puede así ser más grande, y digno de mayor
honor, que Alejandro Magno, Julio César o Napoleón Bonaparte. El dominio de sí mismo
requiere mayor sabiduría y fuerza de voluntad y, al mismo tiempo, no tiene necesidad de
sacrificar vidas ajenas ni bienes ajenos.
33 La suerte se echa en la falda; la decisión depende de .
✡ Comentario (Versículos 33)
Se menciona aquí un método de echar suertes que era frecuente en el antiguo Israel cuando
se había de tomar una decisión importante, la cual se consideraba así hecha por Di-s (comp.
Hch. 1:26). En un pliegue del vestido (comp. 6:27) se depositaban las dos suertes, y la
primera que se sacaba era la que decidía. Esto venía a significar que nada ocurre por
casualidad ni es determinado por el ciego destino, sino que todo es determinado, de un modo
u otro, por el consejo y la voluntad de Di-s. Todas las disposiciones de la Providencia con
respecto a nuestros asuntos han de ser consideradas como efectos del amor de nuestro Padre
Celestial, el cual lo dirige todo para su gloria y para nuestro bien.
116
✡ PROVERBIOS 17 ✡
1 Mejor es un bocado seco con paz que una casa llena de festejo con contiendas.
✡ Comentario (Versículos 1)
Las palabras de este proverbio recomiendan el amor y la paz de la familia, conducentes en
gran manera al bienestar de la vida humana. Los que viven en unidad y tranquilidad, y tratan
de ser mutuamente obsequiosos, gozan de la vida, aun cuando tengan que trabajar duro y
sufrir de recio. Un bocado seco sabe mejor a los que viven en paz que un sabroso banquete
en una familia llena de pendencias y discordias. El texto dice a la letra: «... que una casa
llena de sacrificios de contienda», pues entre los hebreos no era costumbre comer carne sino
cuando se degollaba un animal para el sacrificio, lo cual se consideraba banquete festivo
(comp. 7:14, así como Dt. 12:7; 1 S. 9:12 y ss.) ¿De qué servirá tal banquete en una casa
perturbada por la discordia?
2 Un servidor capaz dominará a un hijo incompetente y compartirá la herencia con
los hermanos.
✡ Comentario (Versículos 2)
El verdadero mérito no se mide por los honores mundanos. A veces, un esclavo prudente
proporciona a una familia mucho más beneficio y prestigio que un hijo necio, el cual es una
vergüenza y una deshonra para la casa. Un amo capaz de apreciar el verdadero mérito podía
incluir entre sus herederos a un esclavo prudente y leal (comp. el caso de Eliezer en casa de
Abraham, y el de Sibá y Mefi-Bóset, Gn. 15:2; 24:2; 2 S. 16:4, así como el de Yarjá en 1 Cr.
2:34, 35. V. también Ec. 10:7).
3 Para la plata el crisol; para el oro el horno, y prueba la mente.
117
✡ Comentario (Versículos 3)
Los hombres prueban y refinan en el crisol la plata y el oro (Jer. 17:10), pero sólo Di-s
puede probar y refinar los corazones. Los prueba mediante la aflicción (Sal. 66:10, 11; Is.
48:10) y así los refina también. Los hombres no tienen tal poder ni deben atreverse a
intentarlo.
4 El malhechor escucha el habla perversa; el mentiroso le presta oídos a las
palabras maliciosas.
✡ Comentario (Versículos 4)
'Cada uno busca a su semejante', dice el antiguo proverbio latino, y esto es lo que aquí se
señala: «el malo escucha al malo, y el mentiroso al mentiroso». Así se excusan a sí mismos
los pecadores y se fortalecen mutuamente las manos para el mal.
5 El que se burla del pobre se mofa de su Hacedor; el que se goza del infortunio
de otro no quedará sin castigo.
✡ Comentario (Versículos 5)
La primera parte del proverbio es semejante a la de 14:31, pero aquí va más hondo, pues en
vez del verbo 'oprimir', tenemos el verbo 'burlarse' o 'escarnecer'. Teniendo en cuenta que
es el que hace pobre o rico a un ser humano, mofarse del pobre es, según Cohen, una
blasfemia'. Algo parecido hace el que se alegra de la calamidad ajena, pues también las
calamidades entran en el plan de Di-s.
6 Los nietos son la corona de sus ancianos, y la gloria de los hijos son sus padres.
✡ Comentario (Versículos 6)
Es un honor para un hombre vivir lo suficiente para ver a los hijos de sus hijos (Gn. 50:23;
Sal. 128:6) y a su casa prosperando en ellos, si ellos sirven a su respectiva generación de
acuerdo con la voluntad de Di-s, pues es una corona que completa su bienestar en este
118
mundo. También es un honor para los hijos tener padres piadosos y prudentes y verlos llegar
a la ancianidad, mientras ellos mismos han crecido y se han establecido en la vida.
7 Las palabras elevadas no le van bien al villano; mucho menos las palabras
mentirosas al hombre grande.
✡ Comentario (Versículos 7)
El necio, en la literatura sapiencial, es siempre una persona de baja catadura moral, por lo
que no le va bien la altilocuencia, pues además de la altiva jactancia que eso supone,
encierra gran peligro para los oyentes, por la persuasividad que una palabra elocuente puede
conferir a las peores mentiras y seducciones. Peor todavía que a un necio metido a filósofo o
político, le va a un magnate aprovecharse de la ventaja que le da su posición para diseminar
mentiras y quebrantar la palabra dada.
8 El soborno le parece un encanto al que lo usa; tiene éxito todo el tiempo.
✡ Comentario (Versículos 8)
Los ricos estiman una moneda como si fuese una piedra preciosa, y se estiman a sí mismos
por ella como si les proporcionase no sólo adorno, sino también poder, de forma que todos
deberían respetarles y someterse a ellos, aunque sea con merma de la justicia y del derecho.
Pero, por mucho que sea el éxito material que se consiga de ese modo, no por eso deja de ser
criminal el soborno (V. Ex. 23:8; Dt. 16:19) o cualquier otro medio ilícito de hacerse valer
por medio de la riqueza.
9 El que busca amor pasa por alto las faltas, pero el que sermonea ahuyenta al
amigo.
✡ Comentario (Versículos 9)
El modo de preservar la paz entre parientes y vecinos es hacer todo lo posible para evitar la
discordia, ya sea no divulgando lo que se dice o hace en contra de ellos (a no ser que sea
necesario para que se defiendan), ya sea no dándose por enterado de lo que se oye o se sufre
de parte de otros. Mejor es excusarlo todo e interpretarlo lo mejor posible, diciendo: «Se le
pasó por alto, ¡pasémoslo por alto! Se le olvidó ¡Olvidémoslo!».
119
10 Una reprensión funciona en un hombre inteligente más que cien golpes en un
necio.
✡ Comentario (Versículos 10)
Una reprensión le aprovecha más, le hace mayor impresión, al inteligente (no al discreto -
hebr. nabón, el cual no la necesita) que cien azotes al necio, el cual no hace caso de
reprensiones verbales.
11 El malo sólo busca rebelarse; un mensajero violento se enviará contra él.
✡ Comentario (Versículos 11)
Malo es el hombre que busca todas las ocasiones posibles para rebelarse contra Di-s (en este
sentido ha de entenderse aquí `rebelión. Comoquiera que este tal no atiende a palabras
suaves, se enviará contra él un mensajero cruel, es decir, un agente de la justicia que le
castigue como se merece (para el sentido de 'mensajero' como símbolo de un medio de
retribución, véase 16:14, así como Sal. 78:49).
12 Es más fácil enfrentarse a una osa viuda que a un necio con su necedad.
✡ Comentario (Versículos 12)
Por 2 S. 17:8; 2 R. 2:24; Os. 13:8; Am. 5:19, etc., vemos que la fiereza del oso,
especialmente la de la osa cuando le han quitado sus cachorros, se había hecho proverbial.
Sin embargo, Salomón afirma aquí que todavía es peor encontrarse con un necio cuando está
en el colmo de su necedad, que es el tiempo en que se desatan sus pasiones.
13 El mal nunca se apartará de la casa del que paga mal por bien.
✡ Comentario (Versículos 13)
Muy fea es la ingratitud. Devolver mal por mal es brutal, pero devolver mal por bien es
incorrecto. La desventura que aquí se predice, como una maldición, sobre su casa, puede ser
el castigo de Di-s o, según opinan algunos, la falta de ayuda por parte de sus prójimos
120
cuando él se vea en grave apuro (V. el contraste con la exhortación de devolver bien por mal
en 20:22; 25:21).
14 Empezar una disputa es abrir una compuerta; antes de que se encienda una
contienda, déjala.
✡ Comentario (Versículos 14)
Muy expresiva es la comparación que se hace aquí del comienzo de una contienda con abrir
un agujero en un depósito de agua o una presa. Si no se tapa a tiempo, el agujero se va
haciendo cada vez mayor y sobreviene una terrible inundación. El único remedio, es pues,
abandonar la contienda antes de que estalle del todo.
15 Disculpar al culpable e inculpar al inocente – ambas cosas son abominación para
.
✡ Comentario (Versículos 15)
Este proverbio, muy importante para entender el concepto teológico de justificación (comp.
con Ro. 4:5), se basa en Ex. 23:6 y ss., y llama abominación a (V. lo dicho en otros
lugares de Prov.) al que declara justo al impío y condena como impío al inocente. Éste es el
único sentido correcto del proverbio, porque si justificar significase hacer interiormente
justo al que es malvado, esto no sería abominación, sino edificación y salvación. Indica,
pues, una violación flagrante de la justicia por parte de los que están encargados de
ejecutarla.
16 ¿De qué vale el dinero en las manos de un necio para comprar sabiduría, cuando
no tiene mente?
✡ Comentario (Versículos 16)
Dos ideas complementarias entran en este proverbio: 1. El necio carece del entendimiento
necesario para adquirir la sabiduría y hacer buen uso de ella. 2. La sabiduría no se adquiere
con dinero, sino con una actitud apropiada del corazón, la cual le falta al necio. Comenta
121
Ryrie: 'Esta descripción del necio intentando comprar sabiduría es satírica, pues la sabiduría
no se puede comprar a ningún precio'.
17 Un amigo es leal todo el tiempo; un hermano nace para compartir la adversidad.
✡ Comentario (Versículos 17)
El texto admite la interpretación (posible, pero no probable) de que un amigo verdadero ama
en todo tiempo y es como un hermano nacido para tiempo de adversidad. La lectura más
probable es la que aparece en la mayoría de las versiones. Ya no es tan fácil valorar el
contraste entre el amigo sincero y el hermano de padre y madre. Es muy interesante el
comentario de Ralbag, citado por Cohen: 'Un amigo permanece unido a su amigo en todo
tiempo, incluso en tiempo de adversidad a fin de estar unido con él en tiempo de gozo. En
cambio, un hermano no se interesa por su hermano en tiempo de gozo, sino en tiempo de
adversidad, pues su naturaleza le compele a unirse a él para asistirle en su aprieto'.
18 Falto de sentido es el que da una firma para salir fiador de su semejante.
✡ Comentario (Versículos 18)
De sabios es estar libre de deudas en lo posible, especialmente de las que se contraen por
salir fiador (lit. chocar la mano) de extraños (comp. 6:1; 11:15). Los que carecen de
entendimiento caen en esta trampa.
19 El que ama la transgresión ama la contienda; el que edifica un techo alto invita
huesos rotos.
✡ Comentario (Versículos 19)
El que ama la contienda, ya sea yendo fácilmente a los tribunales por cualquier minucia, o
buscando controversia en detalles de tipo religioso o deseando que siempre se le dé la razón
en la conversación corriente, ama la transgresión (aquí no indica directamente un pecado
contra Di-s, sino un perjuicio al prójimo). Añade el proverbio que quien alza su puerta,
busca su ruina. La interpretación más probable de la frase alzar la puerta es: vivir de una
manera ostentosa, especialmente en lo que se llama 'el tren de vida', con lo que suscita (a
veces, intencionadamente) la envidia del prójimo, con las funestas consecuencias que con
122
frecuencia produce la envidia. Algunos comentaristas judíos (también Ryrie) entienden lo de
`su puerta' (lit. su abrir, como en Sal. 119:130) aplicado a la 'boca', cuando se abre para
hablar palabras altas, arrogantes, ruidosas.
20 El hombre de mente torcida no llega a nada bueno, y el que habla duplicidad cae
en problemas.
✡ Comentario (Versículos 20)
El retorcido de corazón (lit.) que siembra discordias y está lleno de resentimiento, no puede
tener satisfacción verdadera pues sólo sabe crear antagonismos. Y el que está «vuelto»
("perverso" significa "muy vuelto") de lengua (lit.), mentiroso, despectivo, abusivo, caerá en
el mal, pues perderá sus amigos, provocará a sus enemigos y hará que los males que
ocasiona se vuelvan contra su propia cabeza.
21 Uno engendra un tonto para su propio dolor; el padre de un villano no tiene
gozo.
✡ Comentario (Versículos 21)
El nacimiento de un niño causa alegría, especialmente a su madre (V. Jn. 16:21), pero,
cuando resulta un insensato, sólo tristeza causa a quienes le engendraron (comp. 10:1).
Absalom significa (probablemente) paz de mi padre', pero fue en realidad la pesadumbre y el
tormento de su padre.
22 Un corazón gozoso da buena salud; el desánimo seca los huesos.
✡ Comentario (Versículos 22)
Este versículo es muy parecido a 15:13 y contiene la misma idea. El vocablo hebreo para
'remedio' no sale en ningún otro lugar de la Biblia, aunque el verbo de la misma raíz se halla
en Os. 5:13 (« ... ni os curará la llaga»). La frase 'seca los huesos' es la opuesta a la de 15:30
(«... engorda -lit.- los huesos»). Es un breve resumen de psico-biología: El gozo favorece a
la salud corporal; la depresión daña a la salud.
23 El malvado saca soborno de bolsillo para pervertir el curso de la justicia.
123
✡ Comentario (Versículos 23)
Aquí se denigra una vez más el soborno como uno de los pecados más sucios. La frase 'de
debajo del manto' expresa gráficamente la forma de recibir dinero solapadamente, a
escondidas, en una bolsa discretamente envuelta en el manto. De esta manera, el curso de la
justicia se torna curso de la injusticia.
24 La sabiduría está delante del inteligente; los ojos del tonto alcanzan hasta los
confines de la tierra.
✡ Comentario (Versículos 24)
Ante el rostro del inteligente (está la) sabiduría (lit.); es decir, la tiene cerca y delante de sí
como brújula y carta de navegación, como su constante objetivo; mientras los ojos del necio
vagan, van de un lado a otro, sin rumbo fijo, hasta los extremos de la tierra, tan lejos que no
ve lo que tiene delante de sí, sólo se alimenta de ilusiones.
25 Un hijo necio es la tristeza de su padre y el dolor de cabeza de la madre que lo
engendró.
✡ Comentario (Versículos 25)
Con mucha frecuencia repite Salomón (V. también 10:1; 15:20; 19:13 y en el v. 21 del
presente capítulo) el pesar que causa a un buen padre un hijo necio ¿Estaría pensando en su
hijo Roboam, quien demostró ser un necio? ¿No pudo dejar el trono a otro más sensato? ¿O
es que no tuvo más hijos (la Biblia no menciona a ningún otro), después de tener 700 reinas
y 300 concubinas? Como en 10:1, se menciona también la amargura que causa a su madre
(la de Roboam, de paso, era amonita, una extranjera. V. 1 R. 14:21, 31).
26 Castigar al inocente ciertamente no es correcto, ni azotar al grande por su
rectitud.
✡ Comentario (Versículos 26)
124
Aquí se repite lo del v. 15 en cuanto a la maldad de condenar al justo, aunque aquí el verbo
empleado significa específicamente 'castigar con una multa' (V. Dt. 22:19); por eso, no se
dice que es 'abominación' (v. 15), sino que 'no es bueno', es decir, es un procedimiento
impropio. La 2ª parte alude a un castigo más severo ('golpear') que una multa, y ejecutado
contra nobles (de noble estirpe) que precisamente hacen lo recto.
27 Un hombre entendido es breve en sus palabras; un hombre de entendimiento es
reservado.
28 Hasta un necio, si calla, es tenido por sabio; por inteligente, si cierra los labios.
✡ Comentario (Versículos 27-28)
He aquí una norma práctica para todos, necios y entendidos: El que calla y escucha, aunque
sea necio, es tenido por inteligente, pues nada suele satisfacer a los hombres tanto como el
que se les deje hablar, piensan que el que los escucha está de acuerdo con lo que ellos dicen
y que lo encuentran todo muy interesante ¡son, pues, casi tan inteligentes como ellos! Sin
embargo, el verdadero sabio no es el que siempre calla (no se puede ni se debe), sino el que
ahorra palabras (el mismo verbo de 10:19, 'refrena' sus labios); las mide, las pesa y evita
palabras ociosas y explicaciones innecesarias.
✡ PROVERBIOS 18 ✡
125
1 El que se aísla persigue sus deseos; desdeña toda competencia.
✡ Comentario (Versículos 1)
'El original aquí es difícil, dice M. Henry, y todos los mejores exegetas, incluido Cohen,
están de acuerdo. Sin embargo, nuestras versiones modernas (RV 1977, Biblia de las
Américas, New International Version, New American Standard Translation, etc.) dan el
sentido correcto que puede simplificarse del modo siguiente: la persona esquiva, insociable,
etc. es una persona que, como se suele decir, 'está llena de rarezas; por eso, dice el proverbio
que «busca sus caprichos y se irrita contra todo consejo» ¡no cabe mejor descripción! Todos
conocemos este tipo de personas, que son una verdadera carcoma.
2 El necio no desea entendimiento, sino solamente expresar sus pensamientos.
✡ Comentario (Versículos 2)
El necio llega a mostrar su necedad al apartar de sí todo deseo de poseer la discreción
suficiente para distinguir entre lo bueno y lo malo, lo oportuno y lo inconveniente.
Únicamente se deleita en que se manifieste su corazón, es decir, en que se descubra lo que
lleva dentro: sus necias ideas y sus opiniones personales, aunque están basadas en la más
crasa estupidez. Con todo, cree que sólo él tiene razón, lo cual suele ser el colmo de la
necedad.
3 Con el malvado viene la burla, y con el bribón, la rebeldía.
✡ Comentario (Versículos 3)
Este proverbio se puede entender de dos maneras: 1. Los malvados son menospreciadores de
los demás. Cuando llegan a una reunión, sea un estudio o un acto del culto, allí entra el
desprecio de Di-s, de sus ministros y de todo lo que se dice y hace allí. 2. Los malvados son
ignominiosos, que se cubren de vergüenza y afrenta ellos mismos, justo castigo de quienes
desprecian a los demás y, especialmente, a Di-s.
4 Las palabras que habla una persona son aguas profundas, un manantial que
fluye, una fuente de sabiduría.
126
✡ Comentario (Versículos 4)
Tanto Cohen como Ryrie (quien lo compara con 20:5) hacen un excelente comentario de
este no tan fácil proverbio: las palabras del hombre ordinario (hebr. ish) son profundas, no
en el sentido de geniales, sino de 'oscuras e incoherentes, que sólo con dificultad llegan a
entenderse', mientras que los sabios se expresan son claridad: «arroyo que fluye» (lit.)
naturalmente, con limpieza y frescura.
5 No es correcto ser parcial con el culpable y subvertir al inocente en el juicio.
✡ Comentario (Versículos 5)
Este proverbio condena justamente a quienes, estando empleados en la administración de la
justicia, pervierten el juicio, haciendo la vista gorda ante los crímenes de los ricos y de los
situados en alta posición. Hay que tener en cuenta la justicia de la causa, no la posición de la
persona.
6 Las palabras de un necio llevan a la disputa; su habla invita los golpes.
7 El habla del necio es su ruina; sus palabras son una trampa para él.
8 Las palabras de un hombre querelloso son hirientes; penetran las entrañas de
uno.
✡ Comentario (Versículos 6-8)
Los labios del necio provocan contiendas de muchas maneras, en especial dando a conocer
ideas y opiniones que han de desagradar a otras personas, provocándoles incluso a la
agresión física («llama a los azotes»). El v. 8 (repetido en 26:22) expone una triste verdad:
los chismes se entran como golosinas hasta lo más íntimo del ser de las personas dispuestas
a escucharlos; estas personas son la mayoría, no sólo en el mundo, sino, por desgracia,
también en las congregaciones, porque la mayoría se sienten en cierto modo justificados y
ensalzados (comp. Is. 65:5) con las miserias y debilidades de los demás.
9 Uno que es descuidado en su trabajo es hermano del vándalo.
✡ Comentario (Versículos 9)
127
Bien merece el calificativo de necio (aunque no esté explícito en el texto) el que derrocha su
hacienda, gastando más de lo que gana. De la misma clase es (según el sentido de 'hermano'
aquí, comp. con 28:24) el que es negligente en su trabajo. El primero arroja a los vientos lo
que posee; el segundo se lo deja escapar entre los dedos.
10 El nombre de es una torre de fortaleza a la que corre el justo y está seguro.
✡ Comentario (Versículos 10)
Aquí tenemos la suficiencia de Di-s para los santos: El nombre (es decir, la persona) de
(comp. con Sal. 20:7) es torreón fuerte en el que pueden hallar descanso cuando están
fatigados, y protección cuando son perseguidos. La riqueza acumulada en esta torre es
suficiente para enriquecerlos; la fortaleza de esta torre es suficiente para protegerlos.
11 La riqueza del rico es su fortaleza; en su fantasía es una muralla protectora.
✡ Comentario (Versículos 11)
Para entender bien este proverbio es menester unirlo con el anterior. Las riquezas de este
mundo son el torreón fuerte del que las posee. Son como un muro alto, que no se puede
escalar ni derribar, una ciudad fortificada, inexpugnable; pero se engaña a sí mismo; no lo
son en realidad, sino en su imaginación.
12 Antes de la ruina el corazón de un hombre es orgulloso; la humildad viene antes
del honor.
✡ Comentario (Versículos 12)
La primera parte de este proverbio se halla también en 16:18, donde ya se explicó. La
segunda parte nos enseña que, así como el orgullo precede a la caída, la humildad precede a
la elevación.
13 Responderle a uno antes de escucharlo es necio e inelegante.
128
✡ Comentario (Versículos 13)
Aquí se expone, llevado a su más alto grado, un defecto muy corriente: Responder antes de
haber escuchado toda la pregunta o exposición, y de haber comprendido bien el sentido de lo
dicho. No sólo es una necedad, sino que expone al oprobio, es decir, a la vergüenza, a la
persona que así interrumpe a otros antes de tener la cortesía de escucharles.
14 El espíritu del hombre puede sostenerlo en la enfermedad; pero el espíritu bajo,
¿quién puede soportarlo?
✡ Comentario (Versículos 14)
Muchas enfermedades y adversidades a las que estamos expuestos en este mundo, pueden
soportarse bien cuando la persona tiene una voluntad fuerte, robustecida por la gracia que
Di-s provee, para abrirse paso a través de ellas. En cambio, cuando la persona posee una
voluntad débil, no sabe ni puede soportar las dificultades y, lo que es peor, difícilmente
admite la ayuda de los demás.
15 La mente de un hombre inteligente adquiere conocimiento; los oídos del sabio
buscan conocimiento.
✡ Comentario (Versículos 15)
Cuanto más prudente es una persona, tanto más le interesa adquirir conocimiento; en
especial, conocimiento experimental de Di-s, de su deber y del camino del cielo. Hemos de
adquirir ese conocimiento para retenerlo en el corazón, para lo cual necesitamos oído atento.
16 El regalo de una persona le facilita su camino y le da acceso a los grandes.
✡ Comentario (Versículos 16)
La dádiva no indica aquí soborno, sino un regalo legítimo, inocente, cortés, que puede
suavizar el camino para establecer una relación personal conveniente (V. 1 S. 17:1$); le
ensancha el camino, de forma que le resulta más fácil llegar al objetivo que se proponía, y
llegar así a la presencia de los grandes, de quienes esperaba obtener favor, amistad o
protección.
129
17 El primero que presenta su causa parece tener la razón hasta que la otra parte lo
examina.
✡ Comentario (Versículos 17)
Aquí se nos muestra que el primero en referir una noticia o su caso particular parece siempre
tener razón, hasta que viene su prójimo (lit.), es decir, la otra parte del caso, y expone el otro
lado de la moneda. El proverbio enfatiza la necesidad de escuchar a ambas partes, antes de
pronunciarse, en juicio o fuera de él, a favor de una de ellas; para ello tenemos dos orejas.
18 El sorteo pone fin a la contienda y separa a los que se enredan en disputa.
✡ Comentario (Versículos 18)
Este proverbio enseña que, en las disputas sobre particiones de haciendas, límites de
heredades, etc., en las que es difícil hacer que las dos partes lleguen a un acuerdo mediante
razones, no cabe otro recurso que echarlo a suertes.
19 Un hermano ofendido es más formidable que una fortaleza; semejante contienda
es como las barras de un castillo.
✡ Comentario (Versículos 19)
El proverbio usa las figuras de 'ciudad fuerte' y 'cerrojos de alcázar' para poner de relieve que
cuanto más cercano es el parentesco, más acerba se hace la enemistad cuando surge una
discordia y más difícil resulta la reconciliación. Dice Cohen: 'es más difícil calmar su mutua
animosidad que capturar una ciudadela, y su querella crea una barrera para la restauración de
relaciones amistosas tan fondable como las barras de hierro que cierran una fortaleza'.
20 La barriga de un hombre se llena con el fruto de su boca; se llenará con el
producto de sus labios.
21 La muerte y la vida están en el poder de la lengua; los que la aman comerán de
su fruto.
130
✡ Comentario (Versículos 20-21)
Una vez más, se trata aquí de lo que la lengua puede hacer para bien o para mal de la propia
persona que habla. Comenta concisamente Ryrie: ‗La lengua del hombre puede proporcionar
satisfacción, vida o muerte. Quienes están inclinados a hacer uso de la lengua han de cargar
con las consecuencias de sus palabras'.
22 El que halla una esposa ha hallado la felicidad y ha ganado el favor de .
✡ Comentario (Versículos 22)
Una esposa (se sobreentiende buena) es para un hombre gran bendición; la que es mala no
merece ser llamada con un nombre tan honorable. La buena esposa es ayuda idónea para el
hombre, según el designio de Di-s (V. Gn. 2:18); es decir, alguien que ha de cooperar con él
en las varias actividades de la vida, que ha de contribuir más que ninguna otra cosa a su
bienestar, y ha de ayudarle a caminar hacia el cielo. Refiere el Talmud que, antiguamente,
cuando alguien se casaba, le preguntaban: ¿matsá o motsé? La clave de esta pregunta se
halla en los versículos que comienzan respectivamente por dichos vocablos hebreos: Pr.
18:22 y Ecl. 7:26. Con ello, se evitaba el preguntar descaradamente: ¿buena o mala?
23 El pobre habla con ruegos; la respuesta del rico es áspera.
✡ Comentario (Versículos 23)
Este versículo presenta ciertos defectos que se hallan en personas de posición social muy
distinta. El pobre, expuesto al complejo de inferioridad, habla suplicando, temiendo ofender.
En cambio, el rico, más expuesto al complejo de superioridad, suele hablar de forma áspera,
imperiosa. Ambos deberían percatarse de que el hombre no se mide por lo que tiene, sino
por lo que es y, en principio, todos somos iguales ante Di-s (comp. con Stg. 2:1-9).
24 Hay compañeros para tener compañía, y hay un amigo más devoto que un
hermano.
✡ Comentario (Versículos 24)
131
La 1ª parte de este versículo es dificilísima, por no estar claro cuál es exactamente el verbo
hebreo que allí se usa. Según se halla actualmente el texto masorético en la casi totalidad de
los MSS, dice literalmente: «El varón de amigos (es decir, el que tiene demasiados amigos)
[va] a despedazarse a sí mismo». La 2ª parte está clara: «pero hay un amigo (lit. amante,
vocablo muy distinto del de la 1ª parte, que significa meramente 'compañero') que se adhiere
(lit.) más que un hermano». El proverbio expresa, pues, en primer lugar, que un buen amigo
puede llegar a ser más valioso que un hermano de padre y madre (comp. con 17:17). La 1ª
parte significa, según Ryrie, que 'los amigos escogidos a la buena de Di-s'
(indiscriminadamente), pueden producir problemas. El verbo hebreo indica que, al tener
demasiados amigos, dicho 'varón' podría sentirse 'despedazado', al no poder complacer a
todos (un caso corriente de 'conflicto de lealtades').
✡ PROVERBIOS 19 ✡
132
1 Mejor es un pobre que vive sin tacha que uno que habla perversamente y es un
tonto.
✡ Comentario (Versículos 1)
Por su semejanza con 28:6, muchos comentaristas piensan que se trata del mismo proverbio,
con ligeras variantes. J. J. Serrano lo sintetiza así: 'más vale pobre sincero que rico hipócrita'.
Sin embargo Cohen sostiene que los dos versículos enseñan diferentes lecciones. Aquí el
punto en cuestión es: mejor es el pobre que se contenta con lo que tiene y retiene su
integridad, que la persona que trata de escapar de la pobreza recurriendo a una vida
deshonesta, pues este último es un necio al imaginarse que, con malos métodos, puede
prosperar realmente'.
2 Una persona sin conocimiento no es en verdad buena; el que se mueve
apresuradamente comete disparates.
✡ Comentario (Versículos 2)
La enseñanza de este proverbio, en gradación de mal a peor, es muy sencilla: actuar sin
precaución, con precipitación, es peligroso. Esto se expone de dos maneras: En la primera
parte, se habla de actuar sin conocimiento preciso de lo que se desea, lo cual no es bueno. En
la segunda, de precipitación, apresuramiento de pies, que expone a errar el blanco (el mismo
verbo que se emplea para expresar el pecado' en su acepción más genérica, por lo que
algunas versiones dicen peca.
3 La necedad de un hombre subvierte su camino, y su corazón rabia contra .
✡ Comentario (Versículos 3)
Los hombres se encuentran en la vida con cruces, problemas, males y desilusiones; en gran
parte, se deben a su propia insensatez; son castigados por sus errores y pecados. Sin
embargo, en lugar de reconocer en su necedad, o pecaminosidad, la causa de tales males,
llegan a echarle la culpa a Di-s, lo cual no sólo es necio, sino también blasfemo (comp. con
Stg. 1:13-17).
133
4 La riqueza hace muchos amigos, pero el pobre pierde hasta el último amigo.
✡ Comentario (Versículos 4)
Este proverbio, muy semejante al de 14:20, muestra una vez más la triste realidad de esta
vida, en la que 'tanto vales, cuanto tienes'. El que tiene dinero, puede disponer de todo lo
demás que el mundo puede ofrecer. 'Si tuvieres dineros, habrás consolación', escribía nuestro
Arcipreste de Hita ya en el siglo XIV. El rico puede hacer muchos regalos y favores, con lo
que se ganan muchos amigos, no de su persona, sino de su riqueza. Al pobre no le queda
ningún amigo: el único que tenía (nótese el contraste del singular con el plural de la 14.
parte) se le ha enfriado.
5 Un testigo falso no quedará sin castigo; el que testifica mentira no escapará.
✡ Comentario (Versículos 5)
Hay hombres que enseñan a su lengua a hablar mentira (Jer. 9:5), con lo que están
predispuestos a dar falso testimonio en un juicio, pero no escaparán del justo juicio de Di-s,
quien es celoso de su nombre y no permitirá que sea profanado al jurar en falso.
6 Muchos procuran el favor de un hombre grande, y todos son amigos del que da
regalos.
7 Todos los hermanos de un pobre lo desprecian; ¡cuánto más lo evitarán sus
amigos!
✡ Comentario (Versículos 6-7)
El príncipe o el potentado tienen poder para otorgar favores, así como beneficiarios que les
halaguen por lo que esperan de ellos y les colmen de reverencias por lo que ya han recibido.
Mucho más agradecidos deberíamos estar a Di-s, por las bendiciones que de él hemos
recibido, las cuales superan inmensamente a cualquier favor que se pueda obtener de ningún
noble de la tierra. Por otro lado (comp. con el v. 4), los pobres ven apartarse de ellos incluso
a sus parientes más cercanos, y por muchas palabras que dirijan a sus parientes y amigos que
se alejan de ellos, ya no les sirve; se marcharon sin querer escuchar (éste es el sentido más
134
probable de la última parte del v. 7). Traten, pues, todos y especialmente los pobres en tener
a Di-s por amigo, persíganlo con sus oraciones; no tardarán en hallarlo y jamás se apartará
de ellos.
8 El que adquiere sabiduría es su mejor amigo; preserva el entendimiento y
alcanza felicidad.
✡ Comentario (Versículos 8)
«El que adquiere cordura (lit. corazón) ama su alma (esto es, a sí mismo); el que guarda
entendimiento, hallará el bien». El proverbio no tiene ningún sentido espiritual directo;
expresa el hecho de que la cordura capacita al hombre para aprovechar en la vida las mejores
oportunidades; y guardando en buena forma el entendimiento, a fin de que no se deteriore
con el ocio y el olvido, hallará lo mejor que se puede estimar en este mundo. Advierte Cohen
que 'podría incluir también la recompensa en el otro mundo'.
9 Un testigo falso no quedará sin castigo; el que testifica mentira está condenado.
✡ Comentario (Versículos 9)
Este versículo es una repetición del versículo 5, con la variante de que aquí se termina con
un verbo más fuerte: perecerá' en lugar de 'no escapará'.
10 El lujo no le va bien al tonto, mucho menos que un siervo gobierne sobre
príncipes.
✡ Comentario (Versículos 10)
La comodidad y la libertad le sientan mal al necio. Una persona que carece de sensatez y de
gracia no tiene derecho a disfrutar de algo que sólo serviría para afianzarlo en su necedad.
Del mismo modo, a un mendigo de espíritu servil le va muy mal recibir poder y honor (V.
30:22; Ec. 10:7). Nadie tan insolente e intolerable como el mendigo montado a caballo, o
como la criada elevada a señora.
11 Un hombre demuestra inteligencia por su tolerancia; es su gloria cuando pasa
por alto una ofensa.
135
✡ Comentario (Versículos 11)
El hombre discreto observa estas dos reglas con respecto a su enojo: 1. No dar
precipitadamente rienda suelta a su resentimiento; detiene su furor hasta que haya
considerado con calma el peso y la medida de la provocación. Platón dijo una vez a su
siervo: Te golpearía si no fuese porque estoy enojado'. 2. No ser excesivamente quisquilloso
al ponderar las ofensas que se le puedan hacer, es un honor para él pasar por alto la ofensa
(comp. con 1 S. 10:27; 11:13, cuando Saúl estaba aún en su sano juicio).
12 La ira de un rey es como el rugido de un león; su favor es como rocío sobre la
hierba.
✡ Comentario (Versículos 12)
El enojo del Rey es más terrible, pues pueden hacer mayor daño que el de un cualquiera; y
su favor es más deseable, pues pueden otorgar mayores bienes que una persona ordinaria.
Por eso mismo, no deben abusar de su poder (V. Ro. 13:3). Esto debería animar a los reyes y
príncipes a ser justos y equitativos, y a los súbditos a cumplir fielmente en obediencia a las
leyes y a servir del mejor modo al bienestar común del pueblo. E símil del 'rocío sobre la
hierba' es muy expresivo y se aplica a Di-s en Os. 14:6.
13 Un hijo estúpido es la calamidad de un padre; las peleas de una esposa son como
un gotereo interminable de agua.
✡ Comentario (Versículos 13)
Una vez más se pone de relieve la aflicción y el pesar que a los buenos padres causan los
hijos necios, es decir, los que no se aplican a los estudios, al oficio ni al negocio de la casa,
que no hacen caso de los consejos que se les dan, que llevan mala vida, derrochan en vicios
y juegos, etc. La idea de la segunda parte se repite en 27:15. La frase es muy expresiva: Y
gotera continua, las contiendas de la mujer. Una gotera continua termina por horadar la
piedra; del mismo modo, una esposa pendenciera acaba con la paciencia del marido y le
expone a que se marche de casa, pues es como si el hogar se cuartease con el agua que
penetra por falta de la necesaria reparación (comp. Ec. 10:8) y para acostarse en seco hiciese
falta salir de allí.
136
14 La propiedad y las riquezas las dejan en herencia los padres, pero una esposa
eficiente viene de .
✡ Comentario (Versículos 14)
En contraste con la mujer del v. anterior (V. también 18:22), tenemos el caso de la mujer
prudente, que es de parte de (lit.), esto es, un regalo de Di-s, ya que, al contrario de la
pendenciera, asegura la casa y es una bendición para el marido y para los hijos. El versículo
contrasta este regalo de Di-s, debido únicamente al amor de nuestro Padre Celestial, con la
casa y las riquezas que llegan, siguiendo el curso natural de las cosas, como herencia de los
padres. La esposa no se hereda; se la encuentra en el lugar y el momento que Di-s dispone.
15 La pereza induce al sueño, y una persona negligente pasará hambre.
✡ Comentario (Versículos 15)
Una vez más se exponen las consecuencias funestas de la pereza. El haragán está durmiendo
cuando debería estar trabajando; sueña mucho, pero hace poco. De esta forma, hasta su
poder mental se oxida. Lo que le espera es el hambre, no como apetito, sino como
padecimiento ¿Y qué diremos del que es perezoso en los asuntos de la salvación, que no se
preocupa por lo espiritual ni inquiere sobre lo que es necesario para la vida y la verdadera
dicha del alma?
16 El que aprecia su vida aprecia los mandamientos; el que no presta atención a su
camino morirá.
✡ Comentario (Versículos 16)
Los que son diligentes en guardar el mandamiento en todo, hacienda de él la norma de su
conducta, guardan su alma, es decir, preservan su vida. Si guardamos la palabra de Di-s, la
palabra de Di-s nos guardará. En cambio, el que no pone diligencia en ir por el camino recto,
sino que menosprecia los caminos por los que debería andar, morirá prematuramente (así se
suele leer, pero el hebreo está en forma Pual 'se le dará muerte' mediante sentencia de los
tribunales).
137
17 El que es generoso con el pobre le presta a ; él le pagará a su debido
tiempo.
✡ Comentario (Versículos 17)
El deber de ser caritativo incluye dos cosas: 1. Compasión, la cual es el principio interior de
la caridad en el corazón. El vocablo para pobre' significa aquí 'débil', necesitado de ayuda,
no necesariamente en forma de dinero. 2. Generosidad. No sólo hemos de tener compasión
del pobre, sino que hemos de ayudarle efectivamente, de acuerdo con su necesidad y con
nuestras posibilidades (Stg. 2:15, 16). Lo que se da a los pobres se presta a , es como si
se le diera a Di-s. Y él lo recompensará, pagando un interés tan subido que superará con
mucho al capital que le hayamos prestado ayudando al necesitado.
18 Disciplina a tu hijo mientras haya tiempo, y no pongas tu corazón en su
destrucción.
✡ Comentario (Versículos 18)
Tan pronto como aparece un principio de corrupción en los hijos, hay que aplicar el
correctivo antes que se convierta en hábito. Si con la corrección se mejora, mejor que mejor;
si no, aplíquese el conveniente castigo físico, pero sin excederse, aunque la segunda parte
del v., contra la opinión del famoso rabino Rashi, significa, según dice Ryrie, 'no le causes la
muerte por negligencia en corregirle'.
19 Un hombre de mal temperamento incurre en castigo; si tratas de salvarlo
solamente lo empeorarás.
✡ Comentario (Versículos 19)
Es probable que este v. tenga conexión con el anterior del modo siguiente: el iracundo (el
padre que castiga al hijo sin medida) pagará la pena, esto es, las consecuencias de su ira
desmedida. O si el iracundo se refiere al hijo, significaría que no sirve castigarle, pues
volverá a las andadas: 'aguántalo, y ya pagará él las consecuencias'. Ryrie opina que se trata
de un caso diferente, más general: 'Es fútil rescatar a un hombre de su enojo, porque su mal
genio le hará recaer repetidamente en nuevos incidentes'.
138
20 Escucha el consejo y acepta para que seas sabio en el fin.
✡ Comentario (Versículos 20)
Hasta aquí, se había instruido a los padres acerca de los hijos; aquí se exhorta al hijo a
escuchar el consejo y la corrección del padre. Los que hayan de ser sabios al final, no en la
hora de la muerte, sino en los últimos años de su vida, han de estar dispuestos a ser
instruidos y corregidos cuando son jóvenes.
21 Muchos designios hay en la mente de un hombre, pero el plan de es el que
se realiza.
✡ Comentario (Versículos 21)
El vocablo que traducimos (RV 1977) por proyectos' significa (lo mismo que en Sal. 33:11)
'decisiones'. A primera vista, parece indicar algo parecido a lo de 'el hombre propone, y Di-s
dispone' (comp. 16:1, 9; 20:24). Cohen parece seguir la opinión de Gerondi, quien conecta el
v. 21 con el 20 del modo siguiente: 'Que no piense el joven que se volverá serio y aceptará la
instrucción en sus últimos años, pues nadie conoce los planes de Di-s, y quizás no viva
muchos más años'. M. Henry entiende «proyectos» en el sentido peyorativo de los rebeldes
del Salmo 2, pero la opinión más probable es que se cumplirá, no lo que el hombre decida,
sino lo que Di-s haya resuelto.
22 La codicia es un reproche para el hombre; mejor es ser pobre que mentiroso.
✡ Comentario (Versículos 22)
La primera parte de este versículo es, según Cohen, 'un acertijo para el intérprete'. La versión
más probable es la que ofrece la New American Standard Translation y que se halla al pie de
la letra en La Biblia de las Américas: «Lo que es deseable en un hombre es su bondad». El
sentido de la segunda parte es que es preferible asociarse con un pobre, aunque éste no
disponga de medios para mostrar su generosidad, antes que con un rico mentiroso, que
promete favores, pero no los cumple.
139
23 El que respeta a gana vida; morará en contentamiento, libre de infortunio.
✡ Comentario (Versículos 23)
Los temerosos de Di-s son protegidos del mal; es de esperar que sean visitados con
aflicciones, pero no habrá en ellas daño para su alma, mientras que las satisfacciones de los
sentidos se pasan pronto. La piedad sincera tiende directamente a la vida, aquí y después de
la muerte, pues aprovecha para todo (1 Ti. 4:8).
24 El perezoso mete su mano en el plato; ni siquiera se la lleva a la boca.
✡ Comentario (Versículos 24)
El uso de cucharas y tenedores es relativamente reciente. El uso corriente (perdura en
muchas aldeas) era meter la mano en el plato. Esta costumbre se toma aquí como ejemplo
para ridiculizar, una vez más, al perezoso: 'enterrar'(lit.) la mano en el plato' no necesita
ningún esfuerzo, pero levantarla hasta la boca (lit. hacerla volver a la boca) es para él tan
duro que prefiere morirse de hambre.
25 Golpea al burlador y el inexperto se hará listo, reprende al hombre inteligente y
ganará conocimiento.
✡ Comentario (Versículos 25)
Castigando al malvado, el que no es de suyo prudente (el 'simple aprende escarmentando en
cabeza ajena. Y el que de suyo es discreto (hebr. nabón) sólo necesita una pequeña
reprensión para aumentar de modo considerable su conocimiento, y para rectificar enseguida
un paso mal dado.
26 Un hijo que causa vergüenza y desgracia le roba a su padre, hace huir a su
madre.
✡ Comentario (Versículos 26)
140
Se expone aquí el caso triste, realmente infame y vergonzoso, de un hijo que hace causa
común con unos ladrones a fin de robar a su propio padre (que es el que tiene el dinero) y
compartir con aquellos criminales el despojo. Como consecuencia, su propia madre tiene que
marcharse de casa.
27 Hijo mío, deja de alejarte de las palabras de conocimiento y recibe disciplina.
✡ Comentario (Versículos 27)
La versión correcta de este v., conforme la trae la N. I. V. es la siguiente: «Cesa, hijo mío, de
escuchar la instrucción, y te extraviarás (lit. para extraviarte) de las palabras (lit. dichos) del
conocimiento». Esto es, el que no quiere escuchar la corrección se expone a extraviarse por
los derroteros del pecado.
28 Un testigo malicioso se burla de la justicia, y el habla del malvado esconde
perversidad.
✡ Comentario (Versículos 28)
Testigo impío (lit. de Belial) es el que da falso testimonio contra su prójimo, y perjura para
hacer gran daño a otro, llegando a burlarse de la justicia. Háblale de justicia y equidad, de la
ley, de la santidad del juramento y de la palabra de Di-s, de que llegará el día de la cuenta,
etc. y se echará a reír. Es codicioso y sólo le interesa el beneficio material que pueda obtener
del pecado.
29 Los castigos están reservados para los burladores y los golpes para la espalda de
los tontos.
✡ Comentario (Versículos 29)
«Preparados están los juicios (Lit.), esto es, los castigos de Di-s (con la mayor probabilidad).
Aunque los escarnecedores lleguen a escapar del castigo que impone la ley humana, no
escaparán del juicio de Di-s. Además (comp. 18:6b), esta clase de necios suelen recibir
golpes de sus propios amigotes.
141
✡ PROVERBIOS 20 ✡
142
1 El vino es burlador, la bebida fuerte es fanfarrona; el que se turba por ellos no se
hará sabio.
✡ Comentario (Versículos 1)
El vino y el licor se entran suaves, como con sonrisas, pero muerden al final. [Tomados en
exceso] Hacen daño a la salud corporal y, peor aún, a la salud mental. Cuando entra el vino
[en exceso], sale la prudencia y el hombre, dejado en manos de sus bajos instintos, se toma
neciamente petulante o se enfurece corno un loco. La bebida [excesiva], que pasa por ser una
exigencia social, vuelve a los hombres dañosos para la sociedad. El hebreo shekar significa
bebida fuerte (lo que llamamos licor). Los escritores del NT (no los LXX) lo vertieron por
síkera, licor fermentado, pero la Vulgata lo transliteró en sicera, sidra, vocablo que todavía
se halla en algunas versiones. Esta bebida fuerte, en realidad, se preparaba mediante la
fermentación, no de manzanas, sino de dátiles y, especialmente, de granadas (V. Cant. 8:2).
2 El terror de un rey es como el rugido de un león; el que provoca su ira arriesga la
vida.
✡ Comentario (Versículos 2)
Una vez más (V. 16:14; 19:12) se insiste aquí en el peligro que encierra el suscitar la ira de
reyes y príncipes, contra los que no hay apelación a poder superior humano. Por eso, el
terror que produce es gráficamente comparado al miedo que inspira el rugido de un león
cuando está a punto de lanzarse sobre su presa. El que los provoca peca contra su vida (Lit.),
es decir, la pone en peligro.
3 Es honorable para un hombre desistir de la contienda, pero todo necio se enreda.
✡ Comentario (Versículos 3)
De ordinario, se cree listo el hombre que se resiente de una afrenta y toma rápida venganza
de ella, pero los que de esta manera son muy puntillosos, se crean innecesariamente
143
enemigos y daños. En cambio, es un honor para el hombre evitar la contienda, porque
abandonando una disputa y perdonando una injuria, se mantienen la paz y los amigos.
4 En el invierno el perezoso no ara; al tiempo de la cosecha busca, y no encuentra
nada.
✡ Comentario (Versículos 4)
El labrador perezoso se abstiene de arar en invierno por temor al frío. En vano, pues,
mendigará en verano cuando los diligentes traigan con gozo sus gavillas a casa.
5 Los designios en la mente de un hombre son aguas profundas, pero un hombre
de entendimiento puede sacarlas.
✡ Comentario (Versículos 5)
Por muy ocultas que sean las intenciones de los hombres (V. en 18:4 el significado de aguas
profundas), siempre habrá hombres entendidos, especializados en psicología, que, de
diversas formas, descubrirán lo que los otros tratan de ocultar, lo sacarán (lit.), como se saca
de una honda vasija el vino.
6 El llama amigo leal a muchos hombres, pero ¿quién puede hallar un hombre
fiel?
✡ Comentario (Versículos 6)
El sentido del proverbio se expresa gráficamente en el refrán castellano: Una cosa es
predicar, y otra dar trigo. Muchos aparecen generosos y hasta prometen ser generosos, pero
cuando llega la hora de la verdad, se echan para atrás. Puede observarse que los que se las
echan de filántropos, esto es, amigos del hombre, se interesan muy poco en el bienestar de
los individuos humanos.
7 El hombre justo vive intachablemente; felices son los hijos que vienen después.
✡ Comentario (Versículos 7)
144
El que es bueno tiene conciencia y, con su integridad moral, está legando a sus
descendientes una gran bendición (Comp. Ex. 20:6).
8 El rey sentado en el trono del juicio puede aventar todo mal con su mirada.
✡ Comentario (Versículos 8)
Un buen rey, al ser juez supremo de la nación, puede favorecer la causa del inocente y
deshacer los entuertos de injustos subalternos. Con su prudencia, sabe aventar (lit.) todo
mal, separando lo falso de lo verdadero en las causas que le llegan; con su mirar significa
que, por su oficio, Di-s le ha dotado de intuición y discernimiento suficientes para el
desempeño de su cargo.
9 ¿Quién puede decir: ―Yo he limpiado mi corazón, estoy limpio de mi pecado‖?
✡ Comentario (Versículos 9)
Este proverbio declara una verdad frecuentemente inculcada en la palabra de Di-s: En esta
vida, no hay nadie perfecto, enteramente libre de pecado, excepto Jesús el Mesías (Jn. 8:46;
He. 7:26). Por tanto, la obvia respuesta a la pregunta de este versículo es: ¡nadie! Los que se
creen sin pecado, se engañan a sí mismos (1 Jn. 1:8, 10), mientras que los más santos son los
que mejor reconocen sus faltas y pecados.
10 Pesas falsas y medidas falsas, son ambas abominación a .
✡ Comentario (Versículos 10)
Una vez más (V. 11:1; 20:23) se pone de relieve lo abominable que es a los ojos de Di-s la
injusticia en las transacciones. El hebreo dice literalmente: piedra y piedra (peso), efá y efá
(medida), es decir, empequeñecidas para vender, y engrandecidas para comprar. Aquí se
incluyen todas las formas de engaño y fraude en el comercio.
11 Un muchacho puede ser fingido en su conducta aunque sus acciones sean
intachables y apropiadas.
✡ Comentario (Versículos 11)
145
El proverbio enseña una verdad muy sencilla: Desde la más tierna infancia, muestran los
niños las líneas caracterízales que señalarán su conducta durante toda la vida. Por eso, los
padres y maestros deben observar diligentemente a sus hijos y alumnos, a fin de descubrir
sus disposiciones e inclinaciones y, de este modo, dirigirles hacia la profesión que mejor se
aviene con sus cualidades.
12 El oído que oye, el ojo que ve – los hizo a ambos.
✡ Comentario (Versículos 12)
Este proverbio es muy sencillo (comp. Sal. 94:9), pero encierra una verdad muy importante.
Precisamente porque Di-s ha hecho el ojo y el oído, no sólo hemos de estarle agradecidos
por esos órganos maravillosos, sino que hemos de servirle con ellos de la mejor manera.
13 No ames el sueño para que no empobrezcas; mantén los ojos abiertos y tendrás
abundancia de comida.
✡ Comentario (Versículos 13)
Una cosa es buscar el sueño necesario para el descanso, y otra es amar el sueño, como quien
odia el trabajo. No ames el sueño por sí mismo, sino para restaurarte las fuerzas a fin de que
puedas seguir trabajando con nuevo vigor y con la mente alerta. Y, cuando despiertes, no
dejes pasar las oportunidades de obrar el bien y de aplicarte con diligencia a tu trabajo.
14 ―Malo, malo‖, dice el comprador pero al alejarse, se felicita.
✡ Comentario (Versículos 14)
¡Qué bien se las arreglan los hombres para hacer una buena compra y que les salga barato!
Delante del vendedor, le quitan valor a lo que saben que lo tiene: «Malo es, malo es. Tiene
este defecto o el otro: es demasiado caro. Lo puedo comprar más barato en otra parte, etc. »
Por otra parte, los vendedores suelen subir el precio, recomendando sus mercancías para
justificar así el alto precio que les ponen. Por tanto, hay falta por las dos partes. Pero,
cuando el comprador consigue que le den el artículo por el precio que a él le parece
146
razonable, se marcha muy contento de la mercancía y jactándose de sus artes para llevársela
a buen precio.
15 El oro es mucho, las joyas abundantes, pero el habla sabia es un objeto precioso.
✡ Comentario (Versículos 15)
Aquí se da a entender que un malvado o un necio puede poseer oro y piedras preciosas en
abundancia, pero su valor es inmensamente menor que la joya preciosa que son los labios
prudentes (lit. labios de conocimiento), pues un buen conocimiento que guíe nuestros labios
para decir la palabra apropiada (comp. 25:11) es de mucho mayor provecho para todos, así
como es más escaso que el oro y las perlas y más difícil de conseguir.
16 Quítale el vestido al que salió fiador de otro; tómalo como prenda, [porque salió
fiador] de una mujer desconocida.
✡ Comentario (Versículos 16)
Repetidamente se advierte en este libro contra los peligros de salir fiador por extraños
(desde 6:1, en muchos lugares). Parece ser que en 27:13 se repite a la letra este proverbio,
por lo que los judíos leen mujer extranjera donde el texto actual dice aquí extraños. Es
probable que el proverbio, según piensa Cohen, establezca una distinción entre el infortunio
que le sobreviene inadvertidamente a un hombre, quien, por ello, debería ser tratado con
cierta consideración, y el que le sobreviene a uno por estupidez y descuido voluntario del
consejo que se le dio. Añade M. Henry que los que tienen conexión con mujeres
abandonadas, pronto llegarán a mendigos; no se les debe dar crédito ni préstamo sin una
buena prenda. Para el trasfondo del proverbio véase Ex. 22:25-27.
17 El pan ganado con fraude puede ser sabroso para un hombre, pero después se le
llenará la boca de gravilla.
✡ Comentario (Versículos 17)
147
Se habla aquí del alimento obtenido por medios deshonestos; ese alimento resultará después
duro de digerir, cuando se descubra el engaño. Puede aplicarse a todos los placeres y
provechos del pecado (Rashi lo entiende de relación sexual con mujer casada), los cuales
son verdaderamente pan de mentira. Son falsos, robados, pues son fruto prohibido; y
engañan al hombre, pues no resultan ser lo que prometen. Por algún tiempo, parecen
sabrosos al paladar, pero después su boca será llena de cascajo. En algunas naciones se
castigaba a los malhechores mezclándoles el alimento con cascajo.
18 Los planes que se trazan en un consejo tendrán éxito; se hace la guerra con
estratagemas.
✡ Comentario (Versículos 18)
El proverbio aconseja consultar a hombres experimentados cuando uno proyecta una
campaña militar, como se ve por el contexto (no se trata directamente de pedir un consejo a
Di-s). Está claro que va dirigido a una persona puesta en autoridad civil o militar. Se repite,
con pocas variantes, en 24:6. Hay quienes piensan que basta la valentía para lanzarse a la
batalla, pero la valentía sin la estrategia no es suficiente para ganar la guerra (comp. con Lc.
14:31, 32).
19 El que revela secretos es una persona baja; no te juntes con un hablador.
✡ Comentario (Versículos 19)
La primera parte del proverbio es similar a la del que ya vimos en 11:13. En la segunda
parte, hallamos aquí la exhortación a no juntarse con tal sujeto, del que se dice literalmente
que abre mucho sus labios, describiéndole así como a un individuo que comunica a otros la
información que se le ha dado confidencialmente. El mal que esta clase de sujetos puede
hacer es incalculable, poniendo rencillas entre parientes y vecinos, sembrando rebeldía y
celos contra gobernantes y pastores, etc. Los aduladores suelen tener también esté defecto de
chismosos.
20 Al que insulta a su padre o a su madre, le fallará la luz cuando llegue la
oscuridad.
✡ Comentario (Versículos 20)
148
Un hijo desmandado se va pervirtiendo gradualmente. Comienza por menospreciar a su
padre y a su madre y acaba por maldecirlos, desafiando así a Di-s y a su ley, que condena tal
crimen con la pena capital (Ex. 21:17). Por lámpara puede entenderse, ya sea la vida o el
honor y la estima de los demás, o muchas otras cosas de las que la luz es símbolo: Falta de
consejo cuando lo necesite, falta de respuesta de Di-s a sus oraciones, etc.
21 Una propiedad que se adquiere con prisa al principio no será bendecida al final.
✡ Comentario (Versículos 21)
El proverbio se refiere (como en 28:22) al que se hace rico deprisa y, probablemente, por
medios ilícitos, engañando a sus padres y privándose a sí mismo y a su familia del alimento
necesario. Pero una fortuna que se levanta tan deprisa por esos medios, también suele
derrumbarse deprisa. Lo que madura antes de tiempo, se pudre pronto.
22 No digas: ―Me voy a vengar del mal‖; pon tu esperanza en y él te librará.
✡ Comentario (Versículos 22)
Similar a 24:29, este proverbio hace una exhortación que ya aparece en Dt. 32:35 y entra en
el NT (Mt. 5:39; Ro. 12:17). A Di-s hemos de encomendar nuestro caso y nuestra causa
(comp. Sal. 37:5, 6). Él hará valer nuestro derecho y llamará a cuentas a quienes nos hayan
hecho daño; lo hará del modo apropiado y en el tiempo conveniente.
23 Las pesas falsas son una abominación a ; las pesas deshonestas no son
correctas.
✡ Comentario (Versículos 23)
Para este versículo, véase el v. 10 de este mismo capítulo, así como 11:1. Se dice aquí de la
balanza falsa que no es buena a los ojos de Di-s. No debe usarse ni siquiera para engañar a
quien nos haya engañado a nosotros de modo semejante o distinto. Tampoco es buena, en
realidad, para el que la usa, pues lo que se adquiere por engaño no puede ser verdaderamente
beneficioso.
149
24 Los pasos de un hombre los decide ; ¿qué sabe un hombre de su propio
camino?
✡ Comentario (Versículos 24)
Este proverbio parece una cita de Sal. 37:23. Dice Cohen: El sentido es que, aun cuando una
persona tiene libertad para escoger su camino, comoquiera que el poder para caminar le es
dado por Di-s. Di-s podría retirarle ese poder si su camino es impropio. En todo caso, se
pone aquí de relieve la constante dependencia que tenemos de la providencia y de la gracia
de Di-s. Nosotros no tenemos el poder ni la prudencia necesarios para dirigir, por nosotros
mismos, nuestros pasos, por eso se nos viene a decir aquí que no podemos entender nuestro
camino, ya que sólo en la todo suficiencia de Di-s puede apoyarse nuestra insuficiencia; por
eso, se nos exhorta a encomendar a Di-s nuestro camino (Sal. 37:5).
25 Es una trampa para un hombre prometer un regalo sagrado apresuradamente y
ponerse a pensar en sus votos sólo después que los ha hecho.
✡ Comentario (Versículos 25)
Hay aquí una seria advertencia contra los votos hechos sin la suficiente ponderación,
reflexionando después cuando ya no tiene remedio, pues se ha dado el paso (comp. Ec. 5:4)
¿Tendría Salomón en su mente el triste caso de Jefté? (V. el comentario a Jue. 11:30-40).
Por eso dice que es un lazo, es decir, una trampa. El verbo que corresponde en hebreo a
hacer (lit. decir) a la ligera ocurre sólo aquí y en Job 6:3.
26 Un rey sabio avienta a los malvados y les tira la rueda encima.
✡ Comentario (Versículos 26)
El verbo avienta salió en el v. 8, pero aquí tiene el significado preciso de separar a los
súbditos desleales de entre los leales, a fin de que no se organicen o se rebelen contra él.
Siguiendo con el símil de la era, dice literalmente que hace volver sobre ellos la rueda (lit.),
es decir, la de la carreta que se usaba para trillar (comp. Is. 28:27).
150
27 El aliento de vida del hombre es la lámpara de que revela todas sus
interioridades.
✡ Comentario (Versículos 27)
El alma del hombre, a diferencia de la de los brutos animales, es una luz divina; es lámpara
de , candela que Di-s ha encendido en nuestro interior. La conciencia, esa noble
facultad, es el delegado de Di-s en el alma. Con ayuda de la conciencia, llegamos a
conocemos a nosotros mismos, aunque siempre con dificultad. El espíritu humano es
autoconsciente, uno de los elementos de la personalidad (V. 1 Co. 2:11). Esta luz es como
una candela suficiente para ver en la oscuridad, aun cuando no es un sol que todo lo ilumina.
Al escudriñar con ella lo más profundo del corazón, Di-s nos conoce de modo infinito,
exhaustivo (comp. con Sal. 139:1-12, 23, 24); nosotros podemos conocemos lo suficiente
para quedar sin excusa de lo que hacemos u omitimos indebidamente.
28 La fidelidad y la lealtad protegen al rey; él mantiene su trono por la fidelidad.
✡ Comentario (Versículos 28)
Un buen rey ha de tener misericordia y verdad (comp. con 3:3) para estabilizar su trono,
ejercitando la justicia con equidad y haciéndose de querer de sus súbditos (comp. con Is.
16:5).
29 La gloria de los jóvenes es su fuerza; la majestad de los viejos es su pelo blanco.
✡ Comentario (Versículos 29)
Tanto la juventud como la ancianidad tienen sus ventajas y sus desventajas y, por tanto, ni
los jóvenes deben despreciar a los viejos, ni los viejos envidiar a los jóvenes. Lo mejor de
los jóvenes es su vigor físico; lo mejor de los ancianos, su experiencia de la vida.
30 Las magulladuras y las heridas son la paga por el mal, golpes en las entrañas.
✡ Comentario (Versículos 30)
151
Muchas personas merecen reproches duros. Algunos criminales han de sentir el rigor de le
ley y de la justicia pública, ya que con ellos no valen los métodos suaves. El proverbio
enseña el poder medicinal de dichos azotes: de ordinario, hacen entrar en razón y llegan a
tener efecto purificador (comp. Sal. 119:71).
✡ PROVERBIOS 21 ✡
152
1 Como agua canalizada es la mente del rey en la mano de ; él la dirige a
donde quiera.
✡ Comentario (Versículos 1)
El corazón de cada hombre (aquí se especifica al rey) está en las manos de Di-s, y tiene el
poder de cambiarlo de lo que parecía cosa fija en él a lo más inesperado de tal persona (V. el
comentario a Est. 6:1). Los repartimientos de las aguas (hebreo, palguey máyim), según
explica maravillosamente Bullinger, se refiere al modo de regar los campos por medio de
canales que el labrador aprovechaba para hacer llegar el agua a los distintos surcos del
terreno por medio de un fácil movimiento del pie, con el que, al cerrar el paso hacia un
surco, hacía que el agua penetrase en otro que el pie había tenido cerrado hasta entonces.
Bullinger lo aplica al caso extraño del insomnio de Asuero, insomnio que facilitó la
promoción de Mardoqueo y, después, la caída de Amán. Así, de la misma manera que, sin
alterar la cantidad ni la calidad del agua, el agricultor la dirige con el pie a un surco o a otro,
así también, sin forzar la libertad que él mismo otorgó al hombre, Di-s puede moverle a
seguir un curso distinto del anterior, y servir así a los soberanos y amorosos propósitos de su
providencia y de su gracia.
2 Todos los caminos de un hombre le parecen correctos, pero prueba la
mente.
✡ Comentario (Versículos 2)
Este versículo es idéntico a 16:2, con dos pequeñas variantes: 1. Allí dice 'espíritus'; aquí
dice ‗corazones'; 2. Allí dice 'limpio'; aquí dice `recto'. Son, con todo, sinónimos.
3 Hacer lo que es correcto y justo es más deseable para que el sacrificio.
✡ Comentario (Versículos 3)
Este versículo repite el pensamiento del v. 27 y 15:8, y que se halla ya en 1 S. 15:22 y, con
frecuencia, en Salmos y en los profetas. Se engañan quienes piensan que, si ofrecen
sacrificios, ya por eso tienen aceptación con Di-s, sea cual sea su conducta. Vivir una vida
de justicia, sobriedad, piedad y obediencia es más aceptable a Di-s que la más pomposa
153
devoción. Los sacrificios eran de institución divina y eran aceptables a Di-s con tal que se
ofreciesen con fe y arrepentimiento; de lo contrario, no (V. Is. 1:11, etc.). Pero aun entonces,
los deberes morales tenían prioridad sobre ellos.
4 Miradas arrogantes, un corazón orgulloso —la labranza del malvado es
pecaminosa.
✡ Comentario (Versículos 4)
«Altivez de mirada y anchura de corazón (no `soberbia', sino 'codicia; la lámpara de los
impíos es pecado». Esta segunda parte del versículo es muy oscura. La gran mayoría de las
versiones traducen nir por 'lámpara' ; querría decir entonces que la conciencia (la luz del
hombre) del malvado está orientada siempre hacia el pecado, es decir, cauterizada (comp.
con 1 Ti. 4:2). M. Henry, siguiendo la A. V. (también Cohen), traduce nir por 'labranza' y
dice: 'El que se comporta altiva y burlonamente con Di-s y con los hombres y que está
siempre labrando y tramando algún mal, es de veras un malvado'. Cohen amplía esta idea del
modo siguiente: 'El labrador ara su campo en preparación para recoger una cosecha. De
modo similar, el orgullo y la ambición conducen metafóricamente a la labranza del terreno
para los malvados, para sus maquinaciones, cuyo objetivo es pecaminoso'.
5 Los planes del diligente se hacen sólo para ganar; toda prisa imprudente produce
sólo pérdida.
✡ Comentario (Versículos 5)
Si queremos vivir en abundancia y comodidad, hemos de ser diligentes en nuestros asuntos y
negocios y no evadirnos del esfuerzo y de la fatiga y aflicción que comportan. Los que son
precipitados en sus asuntos o quieren hacerse ricos muy deprisa (comp. 13:11; 28:20) suelen
acabar en desastre. La vía rápida hacia la pobreza es la prisa en enriquecerse por medios
ilícitos.
6 Los tesoros adquiridos por una lengua mentirosa son como vapor que sube, se
dirige a la extinción.
✡ Comentario (Versículos 6)
154
Empalmando quizá con el v. anterior, se nos muestra aquí que el enriquecerse deprisa por
medios deshonestos puede conducir a amontonar riquezas, pero no conduce a la satisfacción
que de ellas se espera; son como un vapor (lit.) llevado de una parte a otra: vaciedad y
persecución del viento (Ec. 1:14, etc.). Estos impíos se exponen a la envidia y mala voluntad
de los hombres y a la ira de Di-s.
7 La violencia de los malvados los arrolla, porque se niegan a actuar con justicia.
✡ Comentario (Versículos 7)
Los que recurren a la violencia para enriquecerse quedarán como arrastrados (el mismo
verbo de Hab. 1:15) en la red de sus planes malvados que ellos idearon para cazar a otros.
8 El camino de un hombre puede ser tortuoso y extraño, aunque sus acciones sean
intachables y apropiadas.
✡ Comentario (Versículos 8)
El hombre inclinado al engaño obra de forma tortuosa y extraña (quizá,
mejor, criminal, según probable versión del hebreo vazar); en todo caso, bien se puede
llamar extraño su camino, pues es contrario a todas las normas de honor y equidad; es
también extraño, pues no se sabe lo que va a hacer en la próxima ocasión. En cambio, las
obras del justo, del limpio, son rectas; no son extrañas, sino 'normales' (de acuerdo con la
norma); son aceptadas por Di-s y aprobadas por los hombres buenos.
9 Vivir en la esquina de un techo es mejor que una esposa contenciosa en una casa
espaciosa.
✡ Comentario (Versículos 9)
Este versículo, repetido en 25:24, contiene una idea similar a la del v. 19, así como a la de
19:13; 27:15. La enseñanza es clara: Mejor es vivir solo y dormir en un rincón de la
155
azotea que con mujer de contiendas y casa de compañía (Lit.); como dice el refrán: 'Mejor
solo que mal acompañado'.
10 El deseo de los malvados es la maldad; su prójimo no halla favor a sus ojos.
✡ Comentario (Versículos 10)
El malvado desea que se haga el mal y que él mismo tenga parte en él. Su prójimo, vecino o
pariente, no puede obtener de él ningún favor, porque el malvado es profundamente
egocéntrico.
11 Cuando se castiga a un burlador, el inexperto se edifica; cuando se le enseña a
un sabio, gana discernimiento.
✡ Comentario (Versículos 11)
La enseñanza de este versículo viene a ser idéntica a la de 19:25. El simple escarmienta en
cabeza ajena y se hace prudente; el sabio, al ser amonestado, recibe mayor conocimiento.
12 El Justo observa la casa del malvado; subvierte a los malvados hasta su ruina.
✡ Comentario (Versículos 12)
El justo (con la mayor probabilidad, el juez o el magistrado) que tiene consideración con el
malvado, por compasión a su esposa y a sus hijos, y no ejecuta en él la necesaria justicia, lo
precipita a la ruina, puesto que el malvado se aprovecha malamente de la lenidad que se
tiene con él y se anima a cometer más y mayores males. Esta interpretación rabínica del
proverbio tiene ventajas sobre cualquier otra.
13 El que cierra sus oídos al clamor del desdichado, él también llamará y no le
responderán.
✡ Comentario (Versículos 13)
156
El hombre sin compasión, que cierra su oído al clamor del pobre y no le socorre, clamará
también un día a Di-s, pero Di-s no le oirá, sino que le pagará con la misma moneda, pues el
juicio será sin misericordia para aquel que no haga misericordia (Stg. 2:13).
14 Un regalo en secreto calma la ira, un obsequio en privado, apaga el enojo.
✡ Comentario (Versículos 14)
Un buen presente (no precisamente para sobornar), bien presentado, aplaca furores y
consigue favores (comp. con 17:8).
15 El hacer justicia es un gozo para los justos, para los malhechores es la ruina.
✡ Comentario (Versículos 15)
Es un placer para los buenos ver que se hace justicia y practicarla ellos mismos. En cambio,
para los malvados es motivo de espanto ver que las leyes se ponen en práctica para ejecutar
juicio y justicia contra ellos.
16 Un hombre que se aparta de la senda de la prudencia irá a parar a la compañía de
los muertos.
✡ Comentario (Versículos 16)
El pecador vaga incesantemente al extraviarse del camino de la prudencia. El camino de la
piedad es camino de prudencia; no hay extravío para los que andan en él. Los que no son
piadosos no son, en realidad, inteligentes, sino que se extravían coma ovejas perdidas (comp.
Sal. 119:176). Según Cohen, la segunda parte del v. no se ha de entender como si se tratase
de una muerte prematura, sino de que el imprudente que vaga constantemente, sólo hallará
descanso cuando se muera.
17 El que ama el placer parará en necesidad; el que ama el vino y el aceite no se
hará rico.
✡ Comentario (Versículos 17)
157
El que vive como un epicúreo morirá como un mendigo. Di-s permite el uso moderado de
todo lo bueno que él ha creado, hasta el vino que alegra el corazón y el aceite que hace
brillar el rostro, pero el que abusa de esos dones, pensando solamente en regalar el gusto y
adornar la figura, se empobrecerá, pues esos artículos son muy caros.
18 Los malvados son el rescate de los justos; el traidor toma el lugar del recto.
✡ Comentario (Versículos 18)
La enseñanza de este proverbio es expuesta concisamente por Ryrie: «El impío, más bien
que el justo, sufrirá en última instancia el castigo» (comp. con 11:8). Por supuesto, la
ideología es típicamente la del AT 'antes de la división del reino', como dice J.J. Serrano. No
siempre paga el malvado por lo que se merece, mientras no se presente ante el `gran trono
blanco' (Ap. 20:11 y ss.).
19 Es mejor vivir en un desierto que con una mujer contenciosa y molestosa.
✡ Comentario (Versículos 19)
Se repite, con ligeras variantes, la idea del v. 9, así como de 19:13; 25:24 y 27:15.
20 Un precioso tesoro y aceite hay en la casa del hombre sabio, y un hombre necio
correrá a través de ellos.
✡ Comentario (Versículos 20)
Los prudentes saben administrar sus bienes e incrementarlos de modo honesto, pues su
prudencia les enseña a establecer la debida proporción entre los gastos y los ingresos y a
tener en reserva artículos de primera necesidad que en algún momento pueden escasear. Se
menciona específicamente el aceite, por ser algo, no sólo muy útil, sino también símbolo de
toda clase de comodidades, en las que abundaba Canaán.
21 El que se esfuerza por hacer bien y obras de bondad alcanza vida, éxito y honor.
158
✡ Comentario (Versículos 21)
El que sigue la justicia y la misericordia (comp. 15:9; Miq. 6:8; Mt. 5:6), hallará
vida (prolongación de días, como en otros lugares), justicia (lit.), no en el sentido de la
primera parte, sino del Sal. 24:5, donde, por paralelismo, es sinónimo de `bendición',
y también hallará gloria, es decir, honor.
22 Un sólo hombre sabio prevalece contra una ciudad de guerreros y derriba su
poderosa fortaleza.
✡ Comentario (Versículos 22)
Ésta es una ilustración práctica de nuestro adagio español: 'Más vale maña que fuerza'
(comp. con 25:5 y ss.; Ec. 9:14 y ss.). Una estratagema, bien preparada y llevada a cabo,
puede, como el mejor caballo de Troya, tomar fácilmente por asalto la plaza mejor
guarnecida. Del mismo modo, un sabio gobernante puede ganarse el afecto de los súbditos
por medio del poder de la razón, y eso es una conquista más noble que la que se lleva a cabo
por la fuerza de las armas.
23 El que guarda su boca y su lengua se guarda de problemas.
✡ Comentario (Versículos 23)
Se repite aquí una enseñanza bien conocida (comp. Sal. 141:3; Stg. 3:2 y multitud de otros
lugares en Proverbios). El freno en la boca supone sabiduría en el corazón. Guarda tu
corazón, y el corazón guardará de pecado la lengua; guarda la lengua, y ella guardará de
aflicciones al corazón.
24 El hombre orgulloso e insolente se llama burlador, actúa en un arranque de
insolencia.
✡ Comentario (Versículos 24)
159
Características del escarnecedor son la soberbia y la presunción. Se muestran en su
desprecio a todas las leyes, divinas y humanas. El vocablo hebreo para 'presuntuoso' ocurre
únicamente aquí y en Hab. 2:5.
25 Los deseos de un perezoso lo matan, porque sus manos no quieren trabajar.
26 Todo el día lo asaltan los deseos mientras que el justo da sin restricción.
✡ Comentario (Versículos 25-26)
Los haraganes están tan equipados para el trabajo como los demás hombres, pero, al negarse
a trabajar, se hacen enemigos de sí mismos, pues su pereza les lleva a pasar hambre y
pobreza. Y aunque sus manos rehúsan trabajar, su corazón no cesa de codiciar riquezas,
placeres, honores, etc. Esperan que todos trabajen para ellos. Muchos que desean dinero
suficiente para gastarlo en vicios, pero odian el trabajo que se requiere para obtenerlo
honestamente, se hacen bandidos y, prefiriendo el ocio al trabajo, caen en manos de la
justicia y pagan muy cara su pereza. En cambio, las personas laboriosas pueden ver
satisfechos sus legítimos deseos, además de la satisfacción de hacer bien a otros, pues
siempre están dispuestos a dar, mientras que los perezosos sólo están dispuestos a recibir.
27 El sacrificio del malvado es una abominación, y más si lo ofrece en depravación.
✡ Comentario (Versículos 27)
La primera parte es similar a la de 15:8, donde se añade a . Los sacrificios eran de
institución divina, lo repetimos, y cuando se ofrecían con las disposiciones interiores
debidas, eran agradables a Di-s. Pero le eran abominación cuando eran ofrecidos por
malvados, que no reformaban su conducta impía. Si esto ya era abominación, ¡cuánto más
ofreciéndolo con mala intención! Esta mala intención podría ser la de seguir adelante con
sus malvados planes, usando el sacrificio para impresionar a otros con su falsa devoción y
ganándose así su confianza para más fácilmente practicar el engaño y el fraude (comp. Is.
66:3-5).
28 Un testigo falso está condenado, pero uno que oyó de verdad testificará con
éxito.
✡ Comentario (Versículos 28)
160
Una persona puede decir una mentira en un momento de apuro o perplejidad, pero el que da
falso testimonio lo hace con toda deliberación y solemnidad, siendo así un pecado de
presunción. La venganza que imprecó sobre sí mismo al jurar en falso, caerá sobre él. En
cambio, el que escucha, es decir, obedece al comunicar fielmente a los jueces lo que conoce
de los hechos, hablará para victoria, o hablará para siempre (se puede traducir literalmente
de las dos maneras), es decir (con la mayor probabilidad), vivirá para seguir diciendo la
verdad, mientras que el testigo falso perecerá.
29 El malvado tiene cara dura; el recto discierne su proceder.
✡ Comentario (Versículos 29)
El impío endurece su rostro, es decir, es un desvergonzado, no se ruboriza por los pecados y
crímenes que comete y, de este modo, muestra al exterior su temple de desafío a la ley de
Di-s y su determinación a seguir sus tortuosos caminos, como se ve por el contraste que el
proverbio establece entre el malvado y el recto, el cual ordena sus caminos, pues sabe
discernir entre el mal y el bien.
30 Ninguna sabiduría, ninguna prudencia, y ningún consejo pueden prevalecer
contra .
31 El caballo se prepara para el día de la batalla, pero la victoria viene de .
✡ Comentario (Versículos 30-31)
Nadie puede tener éxito enfrentándose con Di-s (comp. 1 Co. 10:22). Aunque los hombres
piensen que tienen de su parte la prudencia de los políticos, la ciencia de los sabios y la
fuerza y estrategia de los militares, nada de eso puede prevalecer contra Di-s. Sólo con Di-s
se puede prevalecer y tener éxito. Es cierto que ni siquiera la obra de Di-s se puede llevar a
cabo sin instrumentos humanos ni recursos de toda clase, pues el caballo se apareja para el
día de la victoria, y también los pies de la infantería, mas es el que da la
victoria (comp., por una parte, Sal. 20:7; 33:17; 76:6; por otra, 1 S. 17:47).
161
✡ PROVERBIOS 22 ✡
1 Una reputación es preferible a gran riqueza, la gracia es mejor que plata y oro.
✡ Comentario (Versículos 1)
Un buen nombre, una buena reputación, ganada con bondad y honradez, es superior a
cualquier riqueza (comp. Ec. 7:1). Con las riquezas se puede aliviar la necesidad material del
prójimo, pero con el buen nombre se da testimonio convincente de la verdad del Evangelio,
con lo que se puede prestar ayuda en las necesidades espirituales que son las más urgentes é
importantes.
2 El rico y el pobre se encuentran; los hizo a ambos.
✡ Comentario (Versículos 2)
El rico y el pobre son iguales a los ojos de Di-s que hizo a ambos (comp. con 14:31) y ante
el que han de rendir cuentas por igual. Común es su origen, como es común su
responsabilidad. Ambos tienen un solo Di-s, un solo Mediador (1 Ti. 2:5), una sola Biblia,
un solo, espíritu, un solo pacto de promesas y un Cielo.
3 El hombre avisado ve el problema y se oculta; el inexperto sigue adelante y
sufre las consecuencias.
✡ Comentario (Versículos 3)
El prudente prevé el mal antes que llegue y se apresta a evitarlo. Al ver formarse el nublado
de la tormenta, corre a refugiarse en Di-s como en su refugio y fortín. El simple, en
cambio, pasa adelante, es decir, prosigue su camino sin percatarse del peligro y ha de pagar
las consecuencias. El verbo hebreo significa "ser multado' y significa que tiene que sufrir el
castigo que merece la transgresión.
162
4 El efecto de la humildad es respeto a , riqueza, honor y vida.
✡ Comentario (Versículos 4)
Este versículo pone de relieve el principal elemento de lo que Di-s exige de nosotros (V.
Miq. 6:8 (« y caminar humildemente ante tu Di-s»). Con ello se consiguen «riquezas, honor
y larga vida» en este mundo, en la medida que Di-s cree conveniente para cada uno de
nosotros y, con los privilegios sublimes del pacto de gracia, la vida eterna.
5 Espinas y trampas hay en la senda de los perversos; el que valora su vida se
mantendrá lejos de ellos.
✡ Comentario (Versículos 5)
La vida es comparada aquí a un camino bordeado de espinos, los cuales son lazos (es
decir, trampas o cepos) para el tortuoso (lit. retorcido), pues le atrapan con sus encantos
fugaces del pecado (comp. 15:19). Es de notar que en el hebreo no aparece la conjunción y
que las versiones añaden. En cambio, el prudente, que tiene discernimiento para apartarse de
lo que puede poner en peligro su vida, va rectamente, por en medio de la calzada, por lo que
los espinos no le hacen daño.
6 Entrena a un muchacho en el camino que debe seguir; y no se apartará del él ni
en la edad avanzada.
✡ Comentario (Versículos 6)
La época de la niñez y de la juventud es la época de la instrucción en el camino que se ha de
seguir en la vida; este camino es, ante todo, el camino de la rectitud moral, pero también se
implica aquí la senda más apropiada para cada individuo según su capacidad, habilidad y
buena inclinación (comp. Dt. 6:7). Todo lo bueno, en religión, ciencia y conocimientos
prácticos que en la juventud se aprende, será una buena base para crecer mental y
espiritualmente, de forma que no se aparte del buen camino cuando se haga mayor.
7 El rico gobierna al pobre, y el que coge prestado es esclavo del que presta.
163
✡ Comentario (Versículos 7)
La intención primordial de este proverbio no es denigrar al rico y ensalzar al pobre, sino,
como se ve por el paralelismo con la segunda parte, poner de relieve la dependencia que la
pobreza comporta, mientras que el que, por medios honestos se hace rico, alcanza una sana
independencia que le facilita gobernarse sin tener que satisfacer exigencias ajenas. La
pérdida de la independencia se ejemplifica en el caso del deudor, quien se convierte
prácticamente en esclavo del acreedor.
8 El que siembra injusticia cosechará infortunio; su vara de ira le fallará.
✡ Comentario (Versículos 8)
El proverbio enseña, 1. Que el malhechor recogerá la iniquidad que haya sembrado, es decir,
recaerá sobre él el mal que haya hecho. 2. Que la vara, símbolo de poder y autoridad, de su
insolencia, esto es, la autoridad que ha usado para obrar injustamente, ilegalmente, se
acabará, le será arrebatada (comp. Is. 10:24, 25).
9 El hombre generoso es bendecido, porque da de su pan al pobre.
✡ Comentario (Versículos 9)
El hombre caritativo es 'bueno de ojo' (lit.), es decir, bien dispuesto a ver las miserias ajenas
y tratar de aliviarlas; es lo contrario del 'malo de ojo' (lit.) de 23:6; 28:22. Pero no es sólo
'bueno de ojo', sino también 'bueno de mano', pues da de su pan al indigente; su bondad no
es teórica, sino práctica (comp. Stg. 2:15, 16). Nótese que no dice 'del pan', sino 'de su
pan', del que estaba destinado para su boca. Hay quienes dan de lo que quitan a otros, lo cual
no es caridad, sino hurto cubierto de hipocresía.
10 Expulsa al burlador y se va la contienda; la disputa y la injuria cesan.
✡ Comentario (Versículos 10)
El verbo hebreo indica que al escarnecedor se le ha de expulsar de la comunidad, y así lo
entendieron los LXX, porque mientras él esté dentro, no faltarán contiendas; en cambio, en
marchándose él, se irá la contienda, y cesarán las riñas y los insultos.
164
11 Un amigo de corazón puro, su habla es bondadosa; tiene al rey por compañero.
✡ Comentario (Versículos 11)
Un caballero de cuerpo entero, apto para los altos puestos de responsabilidad, es
alguien limpio de corazón, esto es, carente de engaño, de todo egoísmo y de malas
intenciones, y resuelto a mantener siempre limpia su conciencia. También es alguien que
habla con gracia (comp. Col. 4:6), sin adulación, pero expresando sus ideas en lenguaje
decente y limpio como su corazón. El rey, si es un rey sabio y bueno, que procura su propio
bien y el bien de sus, súbditos, lo tendrá por amigo (comp. con 16:13).
12 Los ojos de vigilan al sabio; él subvierte las palabras de los traicioneros.
✡ Comentario (Versículos 12)
Dios es el Guardián de la verdad, del conocimiento (entendido, como siempre en Proverbios,
en sentido ético) y, por consiguiente, preserva al que sigue la verdad, la sana doctrina, pues
a eso equivale aquí el conocimiento. Esta interpretación se corrobora por el paralelismo
antitético de la segunda parte: Di-s trastorna (lit) las palabras del desleal (lit), puesto que no
expresan la verdad.
13 El perezoso dice: ―Hay un león en la calle; me matará si salgo‖.
✡ Comentario (Versículos 13)
En 26:13 y ss se repite este proverbio, así como 19:24. Son un conjunto de frases satíricas
contra el perezoso. Aquí, el perezoso se inventa la excusa de que hay un león afuera; seré
muerto en plena calle. Eso es fruto de su imaginación, la cual viene en ayuda de su pereza.
Se imagina que hay un león afuera, pero no se da cuenta de que tiene un demonio junto a él,
ese león rugiente, que busca a quien devorar (1 P. 5:8) y lo hará, si continúa en la cama
ociosamente.
14 La boca de una mujer prohibida es un hoyo profundo; el que es condenado por
cae en él.
165
✡ Comentario (Versículos 14)
Este proverbio amonesta a todos, especialmente a los jóvenes, contra el vicio de la impureza
sexual. Los que sientan interés por el bien de su alma, huirán de la boca, de las frases
seductoras y de los besos, de la mujer ajena. Los que se abandonan a este vicio, son
abandonados de Di-s pues le provocan a ira y caerán en esa fosa profunda, que es la boca de
la mala mujer.
15 Si la necedad se asienta en el corazón de un muchacho, la vara de disciplina la
eliminará.
✡ Comentario (Versículos 15)
El pecado es necedad, pues es lo contrario a la sana razón y al verdadero interés de la
persona. Además, está ligado en el corazón del muchacho; en otras palabras, el estado
natural del hombre, desde la infancia, comporta una inclinación a la delincuencia. La
corrección de padres y maestros, etc., es el único remedio para impedir que esa mala
inclinación tuerca el árbol para siempre, y hacer que se enderece y se mantengan a raya los
malos brotes de amargura que pugnen por salir a la superficie. Todos, en realidad,
necesitamos la corrección de nuestro Padre Celestial (He. 12:6 y ss.) y hemos de besar la
vara que nos corrige.
16 Beneficiarse quitándole lo que se le debe al pobre es como darle regalos a los
ricos –pura pérdida.
✡ Comentario (Versículos 16)
El texto hebreo es ambiguo y puede interpretarse de varias maneras, pero la única que es
compatible con el tono general del libro (y aun de toda la Biblia) es la que concisamente
ofrece el Dr. Ryrie: Tanto la explotación del pobre para enriquecerse, como el sobornar al
rico, conducirán a la pobreza'. Muchos han llegado a la pobreza por el camino de una necia,
o pecaminosa, generosidad, pero nunca por medio de una prudente caridad (V. Lc. 14:12,
13).
17 Inclina tu oído y escucha las palabras de los sabios; presta atención a la
sabiduría.
166
18 Es bueno que las guardes dentro de ti, que todas ellas estén constantemente en
tus labios,
19 para que pongas tu confianza en . Yo te doy a conocer hoy a ti,
20 de hecho, escribí para ti una ciencia triple, consejo sabio,
21 para hacerte conocer palabras verdaderamente confiables, para que le des una
respuesta fiel al que te envíe.
✡ Comentario (Versículos 17-21)
Comienza aquí una colección de palabras de los sabios', la cual, en realidad, llega hasta el
final del cap. 24, como se ve por 25:1. El autor (o compilador) es desconocido y se admite
comúnmente (incluso con base en 25:1) que no los compuso Salomón, contra lo que opina
M. Henry; téngase esto en cuenta al comentar toda la sección. En los versículos que ahora
nos ocupan, hallamos:
1. Una seria exhortación a adquirir sabiduría y gracia atendiendo a estas máximas de los
sabios: Hay que escucharlas y estar dispuestos a ponerlas por obra, pues el oído no servirá de
mucho si falta el corazón.
2. Razones con las que corrobora esta exhortación: (A) El valor y el peso de las cosas
mismas que se nos recomiendan: Son cosas deliciosas (comp. 3:17), es decir, sus
consecuencias serán placenteras, pues tienen que ver con la gloria de Di-s, la santidad y
dicha de nuestra alma, el bienestar de la humanidad y, quizá, aptas para que los reyes las
hablen y los senados las oigan. Digo 'quizá', pues M. Henry sigue así la interpretación del
vocablo hebreo shi1shom en el sentido de 'cosas excelentes, principescas', cambiándolo así
en shalishim. Shilshom significa el día antes de ayer (lit), pero aquí no cabe duda de que
significa 'anteriormente'. (B) La claridad de estas cosas y la aplicación que para nosotros
tienen en particular. El énfasis está en esos pronombres personales `te', 'ti', tan repetidos en
estos versículos, como si fuese una carta dirigida a una persona con su nombre y apellido;
como si dijese: 'Es cosa apropiada para ti y para tu caso', para tenerla a punto sobre los
labios (v. 18b). (C) El provecho que se nos sigue de ellas. Las cosas excelentes (valga esta
versión para la aplicación) que Di-s ha escrito (v. 20) para nosotros no son como los
mandatos que un amo da a su criado, los cuales tienen por objeto el beneficio del amo, sino
como los que un maestro da a su alumno. No podemos confiar en Di-s saliéndonos del
camino del deber, es, pues, necesario que se nos enseñe nuestro deber, a fin de tener razón
para confiar en Di-s. Es deseable tener no sólo las palabras de verdad (v. 21), sino su
certidumbre (comp. Lc. 1:3, 4), a fin de que nuestra fe sea inteligente y razonable, hasta
crecer y convertirse en plena seguridad. Pero ha de preceder la obediencia (V. Jn. 7:17). El
conocimiento se nos da a fin de hacer el bien, a fin de que otros puedan encender en nuestra
lámpara su candela, y a fin de que, en el lugar y tiempo en que nos hallamos, podamos servir
a nuestra generación de acuerdo con la voluntad de Di-s.
167
22 No le robes al desdichado porque es desdichado; no oprimas al pobre en la
corte;
23 Porque defenderá su causa y despojará a los que los despojan de la vida.
✡ Comentario (Versículos 22-23)
Después de este solemne prefacio, esperaríamos hallar algo nuevo y sorprendente, pero no es
así; vemos aquí una admonición lisa y llana contra la práctica inhumana de oprimir a los
débiles. Gran pecado es robar a cualquier persona, pero mucho peor es robar al pobre, a
quien deberíamos aliviar. Quebrantar al afligido, añadiéndole nueva aflicción, y eso en la
puerta, es decir, ante el tribunal de justicia, es cosa malvada, vil y cobarde, aprovechándose
de alguien que no puede ayudarse a sí mismo; es ser peor que las bestias, puesto que es
antinatural. Pero el que de tal manera se comporta, lo hace para su propio mal, pues el
oprimido encontrará en Di-s su poderoso patrón (v. 23).
24 No te asocies con un hombre iracundo, ni andes con uno de mal temperamento,
25 para que no aprendas sus caminos y te veas entrampado.
✡ Comentario (Versículos 24-25)
Un oportuno consejo a no trabar amistad íntima con una persona de mal genio, pues quien
fácilmente se enfada, se ofende y se resiente, no es persona apropiada para tenerla por
amigo, pues no sólo se puede enfadar fácilmente con nosotros, sino que esperará que
también nosotros nos enfademos con otras personas, como él hace, y de ese pecado
tendremos nosotros la culpa.
26 No seas uno de ésos que da su mano, que sale fiador por deudas,
27 para que no te quiten la cama debajo de ti cuando no tengas dinero para pagar.
✡ Comentario (Versículos 26-27)
Una vez más se amonesta contra los peligros de hacer tratos (lit. chocar la mano) a la ligera,
y de salir fiadores por otros. Pero aquí se considera el caso especial, más grave, en que el
que así sale por fiador no tiene para pagar (v. 27), y el acreedor es tan cruel que no tiene en
cuenta las normas de Dt. 24:10 y ss. las cuales se aplican únicamente al deudor, pero no al
que sale fiador por él.
168
28 No quites la colindancia antigua que pusieron tus ancestros.
✡ Comentario (Versículos 28)
Los mojones o piedras grandes, frecuentemente encaladas, servían de testigos de los
derechos de propiedad de cada hombre (V. También 23:10). La ley (Dt. 19:14)
prohibía reducir los límites o linderos que marcaban las fronteras de las respectivas
propiedades. Cambiarlos de lugar no sólo es una injusticia en sí, sino que provoca disputas y
riñas sin cuento.
29 Mira a un hombre diestro en su trabajo —él le servirá a los reyes; no le servirá a
hombres obscuros.
✡ Comentario (Versículos 29)
Un hombre solícito, experto (lit. Comp. Esd. 7:6; Sal. 45:1b) en su trabajo, aunque no haya
nacido de noble estirpe, llegará a entrar al servicio de reyes, quizá como consejero, como
embajador y aun como primer ministro. No seguirá perteneciendo a los empleados
de oscura (lit.) condición, que carecen de la diligencia y de la pericia que él posee.
169
✡ PROVERBIOS 23 ✡
1 Cuando te sientes a cenar con un gobernante, considera bien quién está frente a
ti.
2 Pon un cuchillo en tu garganta si tienes mucho apetito.
3 No apetezcas sus manjares, que son alimento falso.
✡ Comentario (Versículos 1-3)
Estamos siempre expuestos a este peligro por falta de circunspección. Siempre es tentadora
una buena mesa, especialmente cuando se tiene apetito. Las razones para 'refrenarse' (ese es
el sentido del pon cuchillo a tu garganta) son dos: 1. Dar rienda suelta a la gula, sin tener en
cuenta las normas de urbanidad, puede provocar el desagrado del anfitrión, siendo éste
un gobernador o magnate. 2. Puede ser pan engañoso (v. 3b); es decir, la invitación del
magnate puede encerrar propósitos siniestros. Dice un aforismo rabínico: 'Mantente en
guardia contra el poder del gobernante, pues quienes lo detentan no dejan a nadie acercarse a
ellos, a no ser por sus propios intereses'.
4 No labores para ganar riqueza; ten sentido para desistir.
5 La ves ahora, después se ha ido; echa alas y se va volando, como un águila,
hacia el cielo.
✡ Comentario (Versículos 4-5)
Así como hay algunos dados a la gula (v. 2), muchos otros son dados a la codicia. Es cierto
que podemos y debemos ser diligentes en nuestro trabajo, a fin de ganar una condición de
vida acomodada para nosotros y nuestra familia; no se prohíbe aquí enriquecerse
honestamente. Lo que sí se ha de evitar es hacer de la riqueza un fin en sí misma (comp. 1
Ti. 6:9), pues eso lleva a ser esclavo, no amo, del dinero (comp. Sal. 127:2). Muy gráfica es
la comparación con las alas de águila (v. 5b), para expresar la fugacidad de las riquezas. Las
alas con que vuelan las fabricamos nosotros mismos muchas veces, pero ya en sí son
volátiles, puesto que llevan en sí mismas los principios de corrupción. Se van ágiles y son
irreversibles, como el águila que se remonta al cielo, que vuela fuerte, que pronto se pierde
170
de vista y no atiende a las voces que se le dan para que vuelva; así dejan las riquezas al
hombre en pesadumbre y aflicción, si se les pega el corazón a ellas.
6 No comas de la comida de un hombre miserable; no apetezcas sus manjares;
7 él es como el que lleva cuentas; te dice: ―Come y bebe‖, pero en realidad no
tiene esa intención.
8 El bocado que te comas lo vomitarás; desperdiciarás tus palabras corteses.
✡ Comentario (Versículos 6-8)
El caso que aquí se expone encierra los mismos peligros que en el comer con el magnate,
pero las circunstancias son distintas. Hay avaros que invitan hipócritamente a comer, quizás
esperan que el invitado se excuse, con lo que no pierden el agradecimiento que se les debe
ni el dinero que no han gastado: Pero el caso presente es peor. El invitado ha aceptado, y
el avaro (lit. malo de ojo) anfitrión, por no faltar a las corrientes normas de la cortesía, insta
al invitado a que coma y beba, pero no lo hace de corazón, sino que se comporta conforme
al cálculo que hace en su interior sobre lo que le va a costar la invitación (éste es el sentido
del v. 7 en su primera parte, no el que se le suele atribuir, como si el autor de Proverbios
anticipase el pensamiento de Séneca de que‘ cada uno es producto de la opinión que de sí
mismo ha formado'). Si alguien es tan vil que no puede hallar en su corazón un sincero
deseo de invitar a sus amigos, no debería añadir el pecado de disimulo al urgir a comer y
beber cuando no lo siente. Por eso advierte el v. 8: Vomitarás la parte que comiste, es decir,
sentirás náuseas ante la evidente hipocresía del anfitrión, y perderás tus suaves
palabras, esto es, en vano gastarás las palabras de gratitud y cumplimiento que la cortesía
demanda.
9 No le hables a un tonto, porque desdeñará tus palabras sensatas.
✡ Comentario (Versículos 9)
Es nuestro deber aprovechar todas las oportunidades para comunicar las verdades divinas,
pero hay quienes hacen burla de todo, y al sabio se le exhorta aquí a no hablar a oídos de
tales necios, pues aunque lleguen a entender lo que se les dice, no apreciarán el contenido,
sino se burlarán de él.
10 No mudes antiguas piedras de colindancia; no invadas el campo de huérfanos,
171
11 que ellos tienen un Pariente poderoso, y Él ciertamente defenderá la causa de
ellos.
✡ Comentario (Versículos 10-11)
Los huérfanos y las viudas son mencionados siempre como faltos de protección humana y,
por eso, están bajo la protección especial de Di-s. El es su redentor (lit.), esto es, el que hace
de pariente más próximo en la función de recobrar una hacienda que hubo de ser enajenada
(V. Lv. 25:25, comp. con Sal. 68:5). Por tanto, si está prohibido remover los linderos de
cualquier persona, mucho más los del huérfano (v. 10b).
12 Aplica tu mente a la disciplina y tus oídos a dichos sabios.
13 No le niegues disciplina a un niño; si le pegas con una vara no se va a morir.
14 Pégale con una vara y lo salvarás del sepulcro.
15 Hijo mío, si tu mente obtiene sabiduría, mi mente también se alegrará.
16 Me gozaré de todo corazón cuando tus labios hablen lo correcto.
✡ Comentario (Versículos 12-16)
Los padres deben persuadir a los hijos a prestar atención a las instrucciones que se les dan, a
fin de que tomen conciencia de sus deberes. Un buen padre siente repugnancia en castigar a
su hijo, pero, por el bien del propio hijo, lo castigará con vara, con la que se usa para
personas humanas, no para brutos animales. La vara, bien empleada, no lo matará, sino que
lo preservará de morir como un criminal (v. 14b). Y aprendiendo a hacer cosas rectas
cuando es joven, aprenderá después a hablar cosas rectas (v. 16b), con lo que a su padre se
le alegrará el corazón y también los riñones (lit., v. 16), considerados como sede de la
emociones. Bien pueden alegrarse los padres que ven a sus hijos aprovechándose de las
buenas enseñanzas que les dieron, pues, ¿qué mayor recompensa que ver andando por el
camino que lleva al Cielo a los hijos que Di-s nos dio?
17 No envidies a los pecadores en tu corazón, sino sólo a los respetuosos de Di-s,
en todo tiempo,
18 porque entonces tendrás un futuro, y tu esperanza nunca fallará.
172
✡ Comentario (Versículos 17-18)
La exhortación a no envidiar a los pecadores sale ya en Sal. 37:1; 73:3, comprendiendo el
fin de ellos (Sal. 37:38; 73:17); más merecen compasión que envidia. Hemos de ser
temerosos de Di-s y contentarnos con el cumplimiento de su voluntad y la contemplación de
su gloria. No debe confundimos el presente, cuando hay un mañana en que el pecador
recibirá su castigo, y la esperanza del justo no resultará fallida (comp. Ro. 5;5 y ss.).
19 Escucha, hijo mío, y obtén sabiduría; dirige tu mente por la senda apropiada.
20 No seas de ésos que se empinan el vino, o se hartan de carne;
21 que los bebedores y los glotones se empobrecerán, y la modorra te vestirá de
harapos.
22 Oye a tu padre que te engendró; no desdeñes a tu madre cuando sea vieja.
23 Compra la verdad y nunca la vendas, y sabiduría, disciplina, y entendimiento.
24 El padre de un hombre justo se alegrará; el que engendra un hijo sabio se
alegrará en él.
25 Tu padre y tu madre se gozarán; la que te dio a luz se alegrará.
26 Dame tu mente, hijo mío; que tus ojos observen mis caminos.
27 Una ramera es un hoyo profundo; una mujer prohibida es un pozo estrecho.
28 Ella también yace al asecho como por presa, y destruye a los infieles entre los
hombres.
✡ Comentario (Versículos 19-28)
Vienen aquí una serie de consejos sabios que un buen padre da a su hijo y que pueden
distribuirse en cuatro apartados: 1. Advertencia contra la intemperancia (vv. 19-21). Dentro de la sabiduría práctica entra
evitar los excesos, tanto en la bebida como en la comida, no sólo por el daño que pueden
causar a la salud, sino por lo caro que cuestan, con lo que el bebedor y comilón llega pronto
a empobrecerse, y la somnolencia (es decir, el sopor) causada por el licor hace que la
persona carezca de la disposición mental necesaria para el trabajo; y, sin trabajo, no hay
salario para comprar nuevas ropas, hay que vestirse de harapos. 2. Exhortación a la obediencia a los padres (v. 22). Aparece ya en 1:8 y se repite a lo largo
del libro. En cuanto a la segunda parte del versículo, ya aludida en 15:20, como también en
30:17, dice Cohen lo siguiente: «Cuando las mujeres se vuelven ancianas, se hacen con
frecuencia demasiado locuaces, gárrulas; un hijo no debe perder la paciencia con ella ni
desentenderse de lo que diga. Lo que ella le dice tiene por objeto el bien de él».
173
3. Cosas que dan contentamiento a los padres (vv. 23-25). (A) El que los hijos no ahorren
esfuerzos por adquirir la verdad: «compra la verdad y no la vendas» (comp. 4:5). Como
diciendo: «La verdad es la que rige y gobierna al corazón, pues sin la verdad no hay bien.
Así que adquiérela a cualquier precio, pues te saldrá tan barata que nunca te arrepentirás del
precio que hayas pagado. Las riquezas han de ser usadas para adquirir el conocimiento, no
es el conocimiento el que ha de usarse para adquirir exclusivamente riquezas materiales.
Y no la vendas, no te deshagas de ella por nada de este mundo: placeres, honores, riquezas».
(B) El que los hijos sean diligentes en practicar lo recto, en que sean justos (v. 24). Es una
consecuencia del versículo anterior, pues si el hijo aprende lo que la verdad
contiene: sabiduría, instrucción e inteligencia, no cabe duda de que también obrará con
justicia. 4. Admonición contra la inmoralidad (vv. 26-28). Por ser tan urgente e importante la
admonición de los vv. 27, 28, va precedida de una llamada de atención: «Dame, hijo mío, tu
corazón». La frase no tiene el sentido que se le suele dar; no es amor directamente lo que
demanda aquí el padre, sino atención. La frase equivale a «¡Préstame atención!». Por eso
añade: Y tus ojos observen, miren, mis caminos. El hijo ha de prestar atención, no sólo a la
enseñanza, sino también al ejemplo, de su padre. Tras este prefacio, el padre amonesta al
hijo contra los peligros de ir tras de la mujer ajena; ya lo ha hecho el sabio en otros lugares.
Dos detalles son de notar aquí: (A) Se llama 'fosa profunda' a la ramera, frase que en 22:14
se usa de la mujer extraña; aquí (quizá también en 22:14) significa la dificultad en que
puede uno encontrarse a causa de las exigencias monetarias de la mujer. De la extraña o
ajena (ordinariamente, de otra nacionalidad) se dice que es pozo angosto, es decir,
demasiado estrecho, del que uno no se puede escapar. (B) A esta mujer extraña, ajena, se la
tacha (v. 28) de ladrona (el verbo sale en Job 9:12 en el sentido de 'arrebatar por la fuerza'),
pues acecha, como animal de presa, para devorar al que puede y, por medio de su
seducción, multiplica entre los hombres los desleales (lit.) Simula amistad, pero sólo para
despojar a los hombres de su honor y de su dinero.
29 ¿Quién es el que grita: ―¡Ay!‖? ¿Quién dice: ―¡Ay bendito!‖? ¿Quién es el que
tiene contiendas, quién tiene quejas; quién tiene heridas sin causa; quién es el
que tiene ojos nublados?
30 Los que se quedan con el vino hasta altas horas, los que se reúnen para vaciar las
copas.
31 No te le quedes mirando a ese vino rojo cuando colorea la copa, cuando fluye
suavemente;
32 al final muerde como serpiente; pica como víbora.
33 Tus ojos verán cosas extrañas; tu mente hablará cosas distorsionadas.
174
34 Serás como uno que se acuesta en una cama en alta mar, como el que se acuesta
encima de los aparejos.
35 ―Me golpearon, pero no sentí nada; me pegaron, pero no me di cuenta; tan
pronto me levante, volveré a buscarlo‖.
✡ Comentario (Versículos 29-35)
Vienen ahora serias advertencias contra la ebriedad, para corroborar lo que ya vimos en el v.
20. «No mires al vino cuando rojea» (v. 31). El vino rojo era considerado en Canaán el
mejor; por eso se le llama la sangre de la uva. Nota de desearse lo que agrada a los ojos,
pero es dañoso: «al fin como serpiente morderá», con lo que se expresan las perniciosas
consecuencias de este vicio. El borracho perjudica a su salud, a su hacienda y a su
conciencia, enreda a los hombres en riñas y contiendas. Muchos profieren ayes y
quejas, sufren dolores y heridas sin razón (v. 29), donde no había motivo para entablar una
contienda. Los ojos se enturbian y ven cosas extrañas, distorsionadas, y la boca (de lo que
rebosa entonces el corazón estúpido por el alcohol) profiere perversidades (lit. cosas cabeza
abajo), contrarias a la religión, a la moral y a la cortesía natural. Su estado mental es
deplorable, pues, al sentirse incapaz de tenerse en pie, se tiende en el suelo, pero aun así, por
el mareo que sufre, le parece estar en medio del mar, mecido por las olas, o en la punta de un
mástil, de donde puede caerse y ahogarse (interpretación probable). Pero lo peor es que, a
pesar de los efectos desagradables de la borrachera, no sólo no siente los golpes recibidos en
la refriega a la que se alude en el v. 29, sino que, al despertar, todavía espera sentirse lo
bastante recuperado para pedir otra botella u otra ronda de beber (vv. 35, 36). Parece como si
la ebriedad convirtiese a los hombres en maderos o piedras; no se les puede reconocer como
hombres racionales, sino, y aun escasamente, como brutos irracionales; están como muertos
en vida.
175
✡ PROVERBIOS 24 ✡
1 No envidies a los malvados; no desees estar con ellos;
2 porque sus corazones hablan violencia, y sus labios hablan maldad.
✡ Comentario (Versículos 1-2)
«No tengas envidia de los malos, de los que han aprendido el oficio del crimen; no tengas
envidia del dinero que ganan inicuamente, ni desees estar con ellos, en compañía de ellos y
asociado con ellos (comp. 3:31; 23:17), porque su corazón medita violencia (Lit.), es decir,
perpetrar la rapiña, el robo con violencia; no les tengas envidia, pues sólo se merecen
indignación ante sus malvadas obras, y compasión por el daño que se hacen a sí mismos.
3 Una casa se construye por la sabiduría, y se establece por el entendimiento;
4 por el conocimiento se llenan sus cuartos de todo objeto valioso y hermoso.
5 Un hombre sabio es fortaleza; un hombre entendido ejerce poder;
6 porque por estratagemas se gana la guerra, y la victoria viene de mucha
planificación.
✡ Comentario (Versículos 3-6)
Una persona, mediante una prudente administración, puede levantar un hogar y, con la
bendición de Di-s, consolidarlo sobre una base firme (v. 3). Se puede edificar una casa con
base en prácticas injustas, pero así no se consolida porque el cimiento está corrompido
(Hab. 2:9, 10). Con conocimiento (v. 4. Los vocablos 'sabiduría' del v. 3 y,
aquí, 'conocimiento' no tienen connotación moral, sino mental) se adquiere buen mueblaje y
una despensa llena de todo lo bueno. Una mente sabia encuentra recursos para todo (v. 5).
Aun en circunstancias en que la fuerza es factor primordial, la sabiduría halla
la estrategia necesaria para ganar la guerra. Incluso robustece para las batallas contra la
tentación. La sabiduría levanta lo mismo una universidad que un consejo de Estado,
sirviendo también para obtener una paz ventajosa cuando el horizonte comienza a nublarse
con la negra perspectiva de una guerra.
176
7 La sabiduría está muy alta para el necio; él no abre la boca en la corte.
8 Al que hace planes para causar daño la gente lo llama maestro de intrigas.
9 Las confabulaciones de necedad son pecado, y un burlador es abominación a los
hombres.
✡ Comentario (Versículos 7-9)
No es cosa fácil adquirir la sabiduría, ya que, aun los bien dotados para ella en el plano
intelectual, si se vuelven holgazanes, se dan al vicio y cultivan las malas compañías, no la
alcanzan; les resulta demasiado alta (lit.) y, por falta de sabiduría, no son aptos para servir al
país en puestos de responsabilidad, como es el de actuar en función de jueces o consejeros en
la puerta de la ciudad, adonde se llevaban los casos de litigio; o si se les llega a admitir por
alguna otra causa (influencia, posición social, soborno, etc.), estarán allí como estatuas
mudas: por falta de sabiduría, no abrirá la boca (v. 7). Hay una necedad mayor, perversa:
Malo es hacer el mal, pero es peor estar siempre tramándolo, pues llegarán a descubrirse sus
planes y la gente le pondrá un mote muy apropiado: 'amo (hebr. baal, dueño o señor) de
planes malvados' (lit.). Su carácter moral y social se hará manifiesto, pues su pensamiento (el
vocablo hebreo es de la misma raíz que el que expresa los 'planes malvados' del v.
anterior) es pecado (hebr. jatat, errar el blanco), una desviación de Di-s, fin último del
hombre; y, en su aspecto social, es abominación a los hombres, porque, con sus planes
malvados, promueve contiendas (comp. 22:10). Este necio malvado es llamado
'escarnecedor', como merece ser llamado todo el que carece de principios morales y
religiosos. El paralelismo sugiere que se trata de la misma persona.
10 Si te muestras flojo en tiempo de problemas, falto de poder,
✡ Comentario (Versículos 10)
En el día de la adversidad (lit.), somos proclives al desmayo y al desánimo. Es señal de que
a una persona le falta resolución, firmeza de convicciones, fuerza de voluntad. El que es así
flojo (el mismo vocablo que el 'negligente' de 18:9), verá reducida su fuerza. La
interpretación de esta última frase, que parece una perogrullada, depende quizá del contexto
posterior, ya que muchos exegetas la creen conectada con el v. 11.
11 si no te ocupaste de rescatar a los que llevaban a la muerte, a los condenados a la
matanza
177
12 –si dices: ―No sabíamos nada de eso‖, ciertamente el que sondea los corazones
discernirá [la verdad], el que vela por tu vida lo sabrá, él le pagará a cada
persona lo que merezca.
✡ Comentario (Versículos 11-12)
Es nuestro deber ayudar a los inocentes que son objeto de la opresión de los potentados,
aunque no tengamos con ellos una particular obligación por razón de parentesco o amistad.
Es muy fácil excusarse diciendo: 'No nos dimos cuenta' o 'Se me olvidó'. Tales excusas no
valen ante el tribunal de Di-s (v. 12), pues él pesa los corazones (comp. 21:2) y dará al
hombre según sus obras, no sólo de comisión, sino también de omisión. Teniendo en cuenta
la posible conexión de estos vv. con el v. 10 podría entenderse así: Si eres flojo en acudir a
socorrer a otros cuando se hallan en grave peligro, tu fuerza será reducida, pues te retirará su
ayuda cuando tú la necesites. Si plural 'No nos dimos cuenta' sugiere, según Cohen, que ese
hombre no tenía excusa, porque aun cuando él solo no tuviese fuerza suficiente para
socorrer, pudo haber llamado a otros para que le ayudasen en la operación de socorro.
13 Hijo mío, come miel, que es buena; que sus dulces gotas estén en tu paladar.
14 Sabe esto: que así es la sabiduría para tu mente; si la alcanzas, hay un futuro; tu
esperanza no será cortada.
15 Hombre malvado, no aceches la casa del justo; no violentes su morada.
16 Siete veces cae el justo y se levanta, mientras que al malvado lo tumba un solo
infortunio.
17 Si tu enemigo cae, no te alegres; si tropieza, no se goce tu corazón,
18 no vaya a ser que lo vea y se desagrade, y aparte de él su ira.
19 No te dejes enojar por malhechores; no te dejes molestar por los malvados;
20 porque no hay futuro para el hombre malo; la lámpara del malvado se apaga.
✡ Comentario (Versículos 19-20)
La prosperidad material de que puedan gozar los malvados no nos ha de exasperar ni
llenamos de envidia (comp. Sal. 37:1 y el v. 1 del presente capítulo). Basta con reflexionar
sobre el fin de ellos (Sal. 37:38; 73:17). Por mucho que brille su lámpara, es decir, su gozo y
su prosperidad (comp. Est. 8:16), será apagada (comp. 13:9) sin tardar mucho. También se
puede entender 'lámpara' por 'vida', que no llegará al fin, o por posteridad' en la que se
prolonga la vida de la persona. Todas estas interpretaciones caben según se traduzca el
178
vocablo hebreo ajarit de la primera parte del v. 20, que literalmente significa 3o que viene
después'.
21 Respeta a , hijo mío, y al rey, y no te mezcles con disidentes,
22 porque de pronto sale de ellos el desastre; la condenación que ambos decretan,
¿quién puede predecirla?
✡ Comentario (Versículos 21-22)
La religión y la lealtad van de la mano, aunque, en conflicto de lealtades, hay que obedecer a
Di-s antes que a los hombres (comp. Hch. 4:19). Nótese que se nombra a antes que
al rey. Como creyentes y como ciudadanos, hemos de ser leales a Di-s y a las autoridades
civiles que Di-s ha puesto sobre nosotros (Ro. 13:1, 2). No son leales súbditos los que no son
religiosos, pero tampoco son religiosos los que no son leales súbditos. Los que se rebelan
contra la autoridad de Di-s o la del gobierno legítimamente establecido, han de temer el furor
de ambos.
23 Estos también son de los sabios: No es correcto ser parcial en el juicio.
24 Al que le dice al culpable: ―Tú eres inocente‖, la gente lo maldecirá, las
naciones lo condenarán;
25 pero les irá bien a los que deciden justamente; bendiciones de cosas buenas le
lloverán.
26 Dar una respuesta directa es como dar un beso.
✡ Comentario (Versículos 23-26)
Así como los súbditos deben cumplir con su deber de lealtad a los gobernantes, también
éstos deben cumplir con su deber de administrar justicia equitativa e imparcialmente,
pesando los méritos y las razones de una causa y no dejándose llevar de favoritismos de
ninguna clase. Un buen juez ha de reconocer la verdad, no el rostro de la persona. No ha de
ayudar a un amigo a salir bien en una mala causa, ni ha de omitir nada que sirva para
favorecer a un enemigo que presente una buena causa. Tanto los magistrados como los
ministros de Di-s han de denunciar la violencia, la injusticia y la inmoralidad, y reprender a
los malvados, de forma que vengan a arrepentimiento o a confusión; así tendrán felicidad y
bendición (v. 25), dándoles la conciencia testimonio de que han sido fieles en el
179
cumplimiento del deber. Dice Ryrie sobre el v. 26: «Así como un beso en los labios sella un
asunto entre una pareja, así también una respuesta honesta confirma un juicio equitativo».
27 Pon tus asuntos exteriores en orden, prepara lo que tienes en el campo, y
después te edificas una casa.
✡ Comentario (Versículos 27)
Aquí tenemos una norma de prudencia en la administración de los asuntos domésticos. Hay
que dar prioridad a lo más importante, antes de ocuparse de lo accesorio. Lo necesario ha de
procurarse antes de lo conveniente, y no se ha de gastar en ostentación lo que habría de
gastarse para el sustento de la familia. `Edificar la casa' (Comp. Rut 4:11) significa aquí
'casarse y formar un hogar'. Este versículo queda bien expresado en el siguiente dicho
rabínico: «Un hombre debe primero construir una casa (literalmente), plantar luego una viña,
y después de eso, tomar esposa».
28 No seas testigo contra tu prójimo; ¿vas a engañar con tu habla?
29 No digas: ―Le voy a hacer lo que él me hizo a mí; le pagaré lo que se merece‖.
✡ Comentario (Versículos 28-29)
Una vez más, se amonesta contra el falso testimonio, y aun contra un testimonio que no sea
claramente falso, pero en el que no haya motivo, es decir, fundamento alguno para presentar
evidencia de los hechos, únicamente por venganza contra el prójimo (v. 29). El texto sugiere
que ese prójimo, en un caso similar, dio testimonio contra él sin motivo (comp. con 20:22).
30 Pasé por el campo de un hombre perezoso, por la viña de un hombre insensato.
31 Estaba todo lleno de espinos; el suelo estaba cubierto de matojos, y su verja de
piedra yacía en ruinas.
32 Lo observé y lo medité; lo vi y aprendí una lección.
33 Un poco más de dormir, un poco más de sueño, un poco más de acurrucarse en
la cama,
34 y la pobreza vendrá a llamarte, y la necesidad, como un hombre con escudo.
180
✡ Comentario (Versículos 30-34)
Esta porción es semejante a 6:6-11 y, como en otros lugares también, se reprueba y ridiculiza
la conducta del perezoso. El escritor describe sus experiencias: Observó la condición del
campo y de la viña del perezoso (v. 30) y vio que el dueño era un hombre falto de
entendimiento por no percatarse de que el florecimiento de la agricultura depende del
trabajo que se haga en ella. El estado de la finca era deplorable (v. 31): llena de cardos y
espinos; el vallado de piedras, derribado. Esto le hizo reflexionar y aprender una lección (v.
32) sobre las funestas consecuencias de la pereza: La pobreza vendrá inexorable, como un
bandido que merodea para robar y como un hombre armado que asalta para matar. Plutarco
refiere un dicho de Catón el Viejo: «Los sabios sacan mayor provecho de los necios que los
necios de los sabios, porque los sabios evitan las faltas de los necios, pero los necios no
quieren imitar las virtudes de los sabios». También nuestra alma es como una viña que cada
uno de nosotros tiene el deber de cultivar y proteger. Con buenas labores se puede mejorar
grandemente, arrancando los cardos y espinos de nuestras pasiones desordenadas, y
reparando el vallado de la vigilancia contra las tentaciones del enemigo. Cuando el alma se
halla falta del necesario cultivo y de la oportuna defensa, ello se debe a la pereza espiritual
de la persona, lo cual es una tremenda insensatez.
181
✡ PROVERBIOS 25 ✡
1 Estos también son proverbios de Salomón, que copiaron los hombres del rey
Ezequías:
✡ Comentario (Versículos 1)
Este versículo es el título de esta última colección de los proverbios de Salomón. Los
editores fueron hombres de especial habilidad literaria que el rey Ezequías empleó para este
menester, ya que él mismo estaba interesado en la literatura (V. 2 Cr. 31:21, así como Is.
38:10-20, donde se conserva un poema compuesto por él mismo después de recuperarse de
su enfermedad). Esos hombres copiaron los proverbios de los archivos del reinado de
Salomón, y los publicaron como apéndice a una anterior edición de este libro. Es un ejemplo
digno de imitarse: Se ofrece un buen servicio a la Iglesia publicando tesoros de piedad y
sabiduría de santos que nos precedieron y que quizá yacen escondidos en la oscuridad.
2 Es la gloria de Di-s ocultar un asunto, y la gloria de un rey dejar caer un asunto.
3 Como el cielo en su altura, como la tierra en su profundidad, es la mente de los
reyes —insondable.
✡ Comentario (Versículos 2-3)
Las obras de Di-s son misteriosas, tanto en el plano de su providencia como en el de su
gracia (Dt. 29:29; Ro. 11:33). Vemos lo que hace, pero no comprendemos sus razones; ésta
es su gloria y hemos de reverenciarla y alabarla. Pero el honor del rey exige escudriñar los
asuntos que le son presentados, a fin de poder obrar con justicia y equidad en todos ellos. El
v. 3 describe la realidad: 'Así como es imposible, dice Cohen, para el hombre calcular la
altura del espacio que hay encima de su cabeza, y la profundidad de la tierra que hay debajo
de sus pies, así también está fuera del alcance de su poder comprender las maniobras
diplomáticas de la regia mente.
4 Tras separar la escoria de la plata, surge una vasija para el herrero.
5 Elimina al malvado de la presencia del rey, y su trono se establecerá en justicia.
182
✡ Comentario (Versículos 4-5)
El esfuerzo vigoroso de un príncipe para suprimir el vicio y reformar las costumbres de su
pueblo es el medio más eficaz de afianzar su trono. El deber de los magistrados es usar su
poder para infundir terror a los malhechores (V. Ro. 13:3), a fin de que no extiendan su
infección por todo el reino. Esto es lo que aquí (v. 4) se llama quitar las escorias de la
plata, lo cual se lleva a cabo por medio del fuego. La reforma de la corte promueve la
reforma del reino (Sal. 101:3-8).
6 No te ensalces en la presencia de un rey; no te pares en el lugar de los nobles.
7 Porque es mejor que te digan: ―Siéntate acá arriba‖, y no que te degraden en la
presencia de los grandes.
✡ Comentario (Versículos 6-7)
La religión, lejos de destruir las buenas maneras, nos enseña a dejar a otros el lugar que les
corresponde; más aún, nos instruye en la humildad y la abnegación, que es una enseñanza
superior a la de las buenas maneras en sociedad. Este es, por otra parte, el modo de alcanzar
una promoción, como lo muestra nuestro Salvador en una parábola que parece tomada de
este lugar (V. Lc. 14:8-10). Mejor es ser ascendido a un lugar cercano al rey con todo honor,
que ser degradado, lleno de vergüenza, por haber ocupado un lugar que correspondía a otro
más noble.
8 No dejes que lo que vean tus ojos te lleven rápido a una disputa; piensa en lo
que resultará al final, cuando tu prójimo te avergüence.
9 Defiende tus derechos contra tu prójimo, pero no reveles los secretos de otro,
10 para que no te reproche el que lo oiga, y nunca termine tu mala reputación.
✡ Comentario (Versículos 8-10)
«No entres apresuradamente en pleito, sin consultar con tus amigos y consejeros; sobre el
caso. Asegúrate de que llevas la razón de tu parte, no sea que no sepas qué hacer al fin al
hallar que el veredicto es dado en contra tuya ¿qué harás entonces, viendo que tu prójimo ha
ganado la causa y te ha avergonzado? Mejor es que arregles tu pleito con tu vecino a solas
(v. 9. Comp. Mt. 5:15; 18:15) y, si tienes información secreta acerca de él por ese medio, no
la descubras a otro; no sea que te delate como a un chismoso y no puedas reparar ya la mala
183
reputación que con eso te has granjeado (v. 10)». Esta parece ser la mejor interpretación de
todo este pasaje.
11 Como manzanas de oro en bandejas de plata es una frase bien dicha.
12 Como un anillo de oro, un adorno de oro, es la reprensión de un sabio a un oído
receptivo.
✡ Comentario (Versículos 11-12)
Un consejo, una corrección, una palabra de consuelo y aliento, o de testimonio, cuando se
dan a tiempo, se expresan lo mejor posible y se adaptan perfectamente al caso de la persona
a quien se dirigen, así como al carácter personal de la persona que habla, son
como manzanas de oro en engastes de plata (v. 11). El hebreo de esta frase admite dos
versiones igualmente probables: 1. Se trata de bolas de oro, o recubiertas de oro, en un
trasfondo escultórico de plata (lit. figuras de entalladura). 2. Se trata de un trabajo de
filigrana, en que las manzanas de oro están cubiertas por una red o encaje de plata; las
manzanas de oro se ven a través de la red. Sin duda, era alguna clase de adorno de mesa,
bien conocido en aquel tiempo. El v. 12 parece un símil del mismo género: La reprensión de
un sabio, es decir, de alguien con la discreción suficiente para dar una buena palabra de
corrección a tiempo, que cae sobre un oído obediente (lit. que escucha) es como pendiente
de oro y joyel de oro fino; buen adorno, que cae bien al que habla y al que escucha.
13 Como la frialdad de la nieve en el tiempo de la cosecha es un mensajero
confiable para los que lo envían; levanta el espíritu de su amo.
✡ Comentario (Versículos 13)
Un mensajero debe ser fiel al que lo envía y dar con toda exactitud el mensaje que se le ha
confiado sin falsificar en nada el contenido. Esto llenará de satisfacción al que le envió,
como el refrigerio que causaría un poco de nieve en el ardor de la siega si se la pudiese
conseguir de lo alto de las cumbres nevadas.
14 Como nubes con viento pero sin lluvia es el que se jacta de regalos que no ha
dado.
184
✡ Comentario (Versículos 14)
En contraste con el versículo anterior, vemos ahora a uno que se jacta falsamente de tener y
dar lo que nunca tuvo ni dio, inventando grandes proezas y provechosos servicios que sólo
existen en su imaginación; en vez de refrescar como la nieve, éste es como nube estéril y
viento que hace mucho ruido, pero que no traen lluvia (comp. con Jud. v. 12), causando la
desilusión del labrador.
15 Por la paciencia se puede ganar a un gobernante; una lengua gentil puede
romper huesos.
✡ Comentario (Versículos 15)
Dos cosas se recomiendan aquí en el trato con los demás: 1. Paciencia para soportar el ardor
de la ira ajena sin contagiarse de ese ardor, y para esperar una buena oportunidad de
presentar nuestras razones y dar a las personas el tiempo suficiente para considerarlas. Por
este medio, hasta un príncipe puede ser aplacado. 2. Suavidad, para hablar sin pasión ni
provocación: la lengua blanda quebranta los huesos. El hueso es una sustancia muy dura y
sirve aquí de símil. Una palabra suave ablanda los ánimos más duros y prevalece sobre los
más morosos, como pasa a veces con el rayo que quebranta el hueso sin pinchar la carne.
16 Si encuentras miel, come solamente lo que necesites, no vaya a ser que te hartes
y la vomites.
✡ Comentario (Versículos 16)
Este proverbio enseña moderación en cosas que, por otra parte, son muy agradables (comp.
v. 27). En 24:13, la miel era símbolo de sabiduría, pero aquí es símbolo de cualquier cosa
deseable, que ha de ser usada con moderación. Los placeres de los sentidos pierden su
dulzura con el abuso y se vuelven nauseabundos, como puede pasar si se come demasiada
miel.
17 Visita a tu vecino pocas veces, no vaya a ser que se canse de ti y te deteste.
185
✡ Comentario (Versículos 17)
Otro proverbio sobre la moderación. Esta vez sobre las visitas a vecinos y parientes. Es
norma de cortesía y afecto visitarles, pero es norma de prudencia no multiplicar las visitas,
no estar demasiado tiempo, no llegar a la hora de comer y no entremeternos en los asuntos
ajenos. La excesiva familiaridad engendra menosprecio. 'Después del tercer día, saben mal
pescado y compañía'. El adagio castellano dice que 'al tercer día hieden el cadáver y el
huésped'. Por aquí vemos que Di-s es un amigo mucho mejor que cualquier otro, puesto que
cuanto más vamos a él, tanto mejor nos recibe y agasaja.
18 Como un garrote, una espada, una flecha aguda, es el hombre que testifica
falsamente contra su prójimo.
✡ Comentario (Versículos 18)
Un falso testimonio es como un mazo con que le pueden romper a uno la cabeza, como
una espada que atraviesa desde cerca y como una saeta aguda que traspasa desde lejos. Por
eso tenemos necesidad de orar. «Libra mi alma, , de los labios mentirosos» (Sal. 120:2).
19 Como un diente flojo y una pierna tambaleante, es un apoyo traicionero en
tiempo de problema.
✡ Comentario (Versículos 19)
Como diente roto y pie que resbala (lit.) es la confianza en el desleal (o traidor) en tiempo
de angustia. Sólo al desastre conduce poner confianza en quien no es digno de ella, del
mismo modo que un diente roto produce un dolor que impide comer, y un pie que resbala no
permite tenerse de pie.
20 Desnudarse en un día frío, como vinagre en la soda, es el que le canta al que está
triste.
186
✡ Comentario (Versículos 20)
Aquí se expresa la tremenda inoportunidad de cantar canciones alegres a una persona que
está triste. Los que sufren alguna aflicción han de ser consolados mediante la simpatía y el
consuelo que puede ofrecer una persona comprensiva, pero vamos por el mal camino si
intentamos aliviarles sintiéndonos alegres e intentando que también ellos se pongan
alegres. Quitándole a una persona la ropa en tiempo de invierno, se la enfría más todavía, y
si se echa vinagre sobre soda caústica, se la pone en fermentación; la persona se enfada con
toda razón.
21 Si tu enemigo tiene hambre, dale pan para comer; si tiene sed, dale agua para
beber.
22 Harás que le arda la cara de vergüenza, y te recompensará.
✡ Comentario (Versículos 21-22)
El Apóstol cita estos dos vv. en Ro. 12:20. El mandamiento de amar a todos, aun a nuestros
enemigos, era ya un precepto del A. T., aunque nuestro Salvador le dio todavía más fuerza al
amamos y morir por nosotros cuando aún éramos enemigos suyos (V. Ro. 5:6-10). Si
devolvemos a nuestros enemigos bien por mal, los ablandaremos y refinaremos como se
refina en el crisol a los metales. Más aún, amontonaremos ascuas sobre su cabeza. Comenta
Cohen: Una acción amistosa de esta clase, tan inesperada y tan inmerecida, le producirá un
efecto (sanamente) doloroso y le causará remordimiento por su enemistad'. Ese es el mejor
medio de convertir en amigos a los enemigos.
23 Un viento norteño produce lluvia, y palabras susurradas, un rostro sonrojado.
✡ Comentario (Versículos 23)
El texto hebreo de este versículo dice literalmente: «El viento norte hace girar la lluvia, y
los rostros enojados (hacen cesar) la lengua de secreto» (lit.), es decir, la lengua solapada,
detractora. Los detractores no hablarían tan fácilmente si no se les oyese fácilmente, pues si
hallasen entre sus oyentes muestras de desagrado, se callarían. Si no podemos mostrar
nuestro desagrado por medio de palabras, hagámoslo por medio de un rostro ceñudo ¿Quién
sabe si eso bastará para corregir de una vez al detractor? Son muchos los que perjudican a
las personas de quienes hablan, únicamente por la esperanza que tienen de ganarse el favor
de las personas a quienes hablan.
187
24 Morar en la esquina de un techo es mejor que una mujer contenciosa en una casa
espaciosa.
✡ Comentario (Versículos 24)
Este versículo es una repetición de lo que ya vimos en 19:13 y 21:9.
25 Como agua fría a una garganta seca es la buena noticia de una tierra distante.
✡ Comentario (Versículos 25)
A veces, esperamos con impaciencia recibir buenas noticias de amigos o parientes que viven
en tierras lejanas; nuestra alma tiene sed de ellas. Así que, cuando llegan, caen como el agua
fresca a uno que está sediento. También el cielo, nuestra verdadera patria, es una tierra lejana
mientras peregrinamos por este mundo ¡cuán refrescante es oír buenas noticias de allí, tanto
en el evangelio que precisamente significa 'buena noticia', como en el testimonio que el
Espíritu da con nuestro espíritu de que somos hijos de Di-s! (V. Ro. 8:16).
26 Como una primavera fangosa, una fuente rota, es un justo que cae ante un
malvado.
✡ Comentario (Versículos 26)
Como fuente enturbiada (Lit. pisoteada. Comp. Ez. 34:18) y manantial corrompido (o
corriente contaminada) es el justo que claudica delante del malvado. El creyente que cae en
pecado manifiesto a la vista de los incrédulos entristece a los buenos, alegra a los malos y
contagia e infecta a otros animándolos a hacer lo mismo. La gloria de Di-s, el honor del
evangelio y el decoro de la congregación pierden mucho con la mala conducta de los
creyentes. Es un contra-testimonio. El versículo admite también otra interpretación: Cuando
los justos son oprimidos ('caen', no 'claudican') y pisoteados por la violencia de malos
hombres, y aun de malos gobernantes, se enturbian las fuentes dula justicia y se corrompen
los manantiales mismos del buen gobierno (comp. 28:12, 28; 29:2).
27 No es bueno comer mucha miel, ni es honorable buscar honor.
188
✡ Comentario (Versículos 27)
Los hombres no suelen estar satisfechos de los deleites ni aun cuando están hartos, por lo
que sufren las consecuencias de una ambición nunca satisfecha. Así pasa con los que buscan
su propia gloria a toda costa; buscar descaradamente el aplauso no es gloria, sino vergüenza;
todos se ríen de quien así se comporta. La primera frase repite la idea del v. 16. El hebreo de
la segunda frase dice así: «Y la búsqueda de su (de ellos) gloria (es) gloria». Tomado
literalmente no puede estar más oscuro, pero viene bien aquí la sabia explicación del rabino
Cohen: «Mediante la aplicación del paralelismo, se suplen en esta cláusula las palabras no y
mucha de la primera cláusula». Es, pues, uno de los frecuentes casos de elipsis.
28 Como una ciudad abierta sin murallas es un hombre de temperamento indómito.
✡ Comentario (Versículos 28)
Una persona prudente y virtuosa sabe frenarse, tiene dominio de sí misma. El vicioso, que
no sabe ni quiere dominarse a sí mismo, es como una ciudad derribada y sin muro; está sin
defensas, expuesto a todas las tentaciones del mundo y del diablo, siendo fácil presa de
Satanás.
✡ PROVERBIOS 26 ✡
189
1 Como nieve en verano y lluvia en tiempo de cosecha, así el honor no le va bien
al tonto.
✡ Comentario (Versículos 1)
Los necios, malvados, que no tienen seso ni gracia, son a veces puestos en sitios de honor,
poder y responsabilidad. Eso es un absurdo, una grave inconveniencia; cae tan mal como la
nieve o la lluvia en tiempo de siega, pues estorba a los labradores y echa a perder los frutos
del campo cuando están a punto para ser recogidos.
2 Como un gorrión tiene que revolotear y la golondrina volar, así una maldición
sin motivo tiene que caerle a uno mismo.
✡ Comentario (Versículos 2)
El que es maldecido sin causa, sea mediante furiosas imprecaciones o mediante solemnes
anatemas, no recibirá de ello más daño que el que causa un pájaro que revolotea en tomo a la
cabeza de una persona. Así David no recibió daño alguno (al contrario) de las maldiciones
que le lanzó Goliat (1 S. 17:43) ni de las que le lanzó Simef (2 S. 16:5 y ss.)
3 El látigo para el caballo y la brida para el burro, y la vara para la espalda de los
tontos.
✡ Comentario (Versículos 3)
Como en 10:13; 19:29, se expresa aquí la inutilidad de los buenos avisos y consejos a los
necios y malvados, por lo que, para dirigirlos por el buen camino, como a los caballos, o para
frenarlos de seguir por el mal camino, como a los asnos, hay que emplear la fuerza de la
severa reprensión y aun el castigo físico, impuesto por la autoridad competente, simbolizados
aquí por el látigo y el cabestro.
4 No le respondas a un tonto según su necedad, si lo haces te pondrás como él.
5 Respóndele a un tonto según su necedad, si no lo haces pensará que es sabio.
190
✡ Comentario (Versículos 4-5)
Estos dos vv. parecen recomendar actitudes contradictorias, pero no es así. Se trata de
circunstancias diferentes, en las que un hombre prudente sabrá tratar al necio de forma
también diferente. El proverbio viene a decir: «Si el necio se jacta, no le respondas
jactándote tú también; si grita desaforado, si maldice, etc. no le respondas con su mismo
lenguaje, pues te rebajarás al nivel de él. Pero si tienes motivos para pensar que tu silencio va
a ser interpretado como una muestra de debilidad, respóndele como se merece su necedad,
venciéndole con sus propias armas. Si profiere algo que tiene la pretensión de ser un
argumento a su favor, dale la respuesta conveniente, sabia, no sea que vaya a creerse que es
un sabio por haber presentado una razón a la que no has sabido responder».
6 El que manda un mensaje con un tonto malgastará las piernas y tendrá que
tragarse la maldad.
7 Como le cuelgan las piernas a un inválido, así es un proverbio en la boca de los
tontos.
8 Como una piedrita en la honda, así es el darle honor a un tonto.
9 Como le viene una espina a la mano de un borracho, así le viene un proverbio a
la boca de un tonto.
✡ Comentario (Versículos 6-9)
Salomón muestra aquí que el necio no sirve para nada útil: o es tan tonto que no sabe pensar
bien, o es tan malo que no sabe pensar otra cosa que el mal. Por eso, no se le puede
encomendar ningún asunto que comporte responsabilidad e importancia para el que les
ordena algo o les envía a cumplir un encargo. La persona que así hace uso de un necio es
como si se cortara los pies, pues se inhabilita (se queda inválido) para cumplir el objetivo
que se proponía; además, bebe su amargura, ya que un comunicado mal entendido por
haberlo distorsionado el criado necio, puede enfurecer a la persona que recibe el mensaje y,
creyendo que esa era en efecto la intención del amo, tomar venganza contra él, lo que sería
como un brebaje amargo. El símil del v. 7 da a entender que el proverbio del necio es una
forma de expresión tan inútil para los que le escuchan como las piernas de un cojo, incapaces
de soportar el peso del cuerpo al andar. Del mismo modo (v. 8), dar honores a un necio, que
no sabe apreciarlos ni usarlos debidamente es como atar la piedra en la honda, acción sin
sentido, pues la piedra no podrá, si está atada, ser disparada de la honda. No es claro el
sentido del v. 9, pero, en todo caso, indica un grado de necedad mayor que el del v. 7. El
sentido más probable es que un necio, con sus refranes o dichos, puede hacer a otros, y a sí
191
mismo, daños incalculables, como un borracho, a quien le viene a la mano (versión más
probable) un objeto punzante con el que hiere a diestro y siniestro, y también a sí mismo,
porque no sabe cómo manejarlo, debido al estado en que se encuentra.
10 Un hombre diestro puede producir cualquier cosa, pero el que emplea a un tonto
es él como el que emplea a transeúntes.
✡ Comentario (Versículos 10)
El texto de este proverbio es oscuro, pero el sentido se adivina. Creo que la explicación
mejor (similar a la versión que, al margen, ofrece La Biblia de las Américas) es la que da J.
J. Serrano: «El sentido del proverbio es claro: el jefe o maestro que, como el nombre y la
antítesis del verso suponen, es sabio, sabe y puede hacerlo todo, esto es, todo lo que
pertenece a su oficio. Pero el necio es tan inútil para todo como puede serlo un cualquiera
para un trabajo determinado que desconoce. Por eso se dice que alquilar al necio es como
alquilar al desconocido, al ignorante o, como dice el texto, al transeúnte».
11 Como vuelve un perro a su vómito, así repite un tonto su necedad.
✡ Comentario (Versículos 11)
En principio, el proverbio se refiere al necio que repite sus necedades, como el perro que,
siendo sin sentido, vuelve a comer lo que vomitó por resultarle indigesto. San Pedro alude a
esto (2 P. 2:22) para referirse a los pecadores que, convictos de pecado, pero no debidamente
arrepentidos de él, vuelven al pecado, a pesar de lo dañoso que les había resultado.
12 Si ves a un hombre que se cree sabio, hay más esperanza para un tonto que para
él.
✡ Comentario (Versículos 12)
192
Grave enfermedad espiritual es tener de sí mismo un concepto más alto del que debería tener
(Ro. 12:3). De ahí la exhortación de 3:7 a no ser sabio en la propia opinión, pues induce a la
persona al fanatismo, al orgullo y a la crítica insana. Más esperanza hay del necio que de él,
porque el necio tiene la posibilidad de aprender, pero el que se cree sabio no tiene remedio,
pues no sabe que le queda mucho por aprender (V. 1 Co. 8:2).
13 Un hombre perezoso dice: ―Hay un oso en el camino, un león en la plaza‖.
14 La puerta se voltea sobre sus goznes y el perezoso sobre su cama.
15 El perezoso mete la mano en el plato; ni siquiera se la lleva a la boca.
16 El perezoso se cree más sabio que siete hombres que dan buen consejo.
✡ Comentario (Versículos 13-16)
Esta porción vuelve a tomar el tema del perezoso. El v. 13 repite, con una ligera variante, el
proverbio de 22:13. El v. 14, bajo el símil de la puerta que gira sobre sus goznes, unas veces
a la derecha, otras veces a la izquierda, según se entra o se sale, pero sin salirse de quicio ella
misma, describe al perezoso dando vueltas en la cama: se halla cómodo en ella y, cuando se
cansa de estar echado de un lado, se da la vuelta al otro lado, pero sin salirse de ella, aunque
esté ya muy avanzado el día y haya trabajo que hacer. El v. 15 es casi idéntico al proverbio
de 19:24, con la variante aquí de `se cansa', como si el esfuerzo para llevarse la mano a la
boca le resultase demasiado fatigoso. El v. 16 nos recuerda los proverbios que ya hemos
visto en 3:7; 26:5 y en el v. 12 de este mismo capítulo, pero este perezoso del que aquí se
habla es el mayor necio que pueda darse, pues se cree más sabio que siete hombres lo
suficientemente sabios para saber aconsejar con prudencia (comp. con 27:1lb). El
número siete indica un número considerable. La buena opinión que de sí mismo tiene este
perezoso es una de las causas determinantes (quizá, la única) de su pereza; no se esfuerza por
adquirir la sabiduría porque piensa que es ya suficientemente sabio; si al menos se detuviese
a examinarse a sí mismo, se daría cuenta de su ignorancia.
17 Un transeúnte que se enreda en la pelea de otro es como uno que agarra un perro
por las orejas.
✡ Comentario (Versículos 17)
193
Lo que aquí se condena es, como dice la expresión castellana, meterse en lo que a uno no le
importa. El que se interfiere en asuntos ajenos o se mete a intermediario imprudente en
pleitos que no le van y en los que no sabe dar un consejo pacificador, se expone a causarse
problemas a sí mismo y encender más, en lugar de apagar, la disputa. Es como tomar por las
orejas al perro; no al perrillo doméstico, sino al que vagaba suelto por las calles en
Palestina.
18 Como un loco que esparce antorchas mortales, flechas,
19 es el que engaña a su prójimo y después dice: ―Solo estaba bromeando‖.
✡ Comentario (Versículos 18-19)
Se exponen aquí los peligros de las bromas que llamamos 'pesadas'. Del hombre en cuestión
se dice que enloquece, pues no se percata de las fatales consecuencias de sus acciones al
engañar a sus prójimos. Es tan loco como el que lanza llamas y saetas mortíferas por hacer
deporte, con evidente peligro para todo el que se acerque a él o pase cerca de él.
20 Por falta de leña se apaga un fuego, y sin un hombre querelloso se calma la
contienda.
21 Los carbones para el fogón y la leña para el fuego y un hombre contencioso para
encender la disputa.
22 Las palabras de un hombre querelloso son hirientes; penetran las entrañas de
uno.
✡ Comentario (Versículos 20-22)
De la misma manera que el fuego se apaga cuando le falta combustible, también la contienda
cesa donde faltan los chismosos (V. 16:28; 22:10). El v. 21 viene a expresar la misma verdad
de modo diferente: El hombre pendenciero enciende (mejor, inflama, aviva)
la contienda, como hace el carbón con las brasas, y la leña con el fuego. El v. 22 es una
repetición de 18:8. Estas repeticiones tienen por objeto, con sana pedagogía, poner de relieve
el tremendo daño que causan los que gustan de llevar chismes de un lado a otro, revelando
secretos, dando malas interpretaciones a lo que otros dicen, insinuando malas ideas y malas
intenciones con respecto a personas que son completamente inocentes o, al menos, no tan
malas como éstos las presentan. En fin, son incendiarios que, por el bien de la misma
sociedad, deberían ser tenidos a raya, pues dan fatales heridas al amor y al afecto fraternal (2
194
P. 1:7) que deben reinar entre los creyentes. Cuanto menos tratemos con tales personas,
mejor, porque es muy difícil evitar pendencias con quienes son pendencieros de oficio.
23 Escoria de plata derramada sobre cerámica son los labios ardientes con una
mente perversa.
24 Un enemigo disimula con su habla, por dentro abriga engaño.
25 Aunque hable bonito no confíes en él, porque hay siete abominaciones en su
mente.
26 Su odio puede esconderse por disimulo, pero su perversidad quedará expuesta a
la vista pública.
27 El que cava un hoyo caerá en él, y a todo el que rueda un piedra se le rodará
encima.
28 Una lengua mentirosa odia a aquéllos a quienes aplasta; el habla suave tira a uno
al suelo.
✡ Comentario (Versículos 28)
Hay dos clases de mentiras igualmente detestables: 1. La lengua mentirosa (lit.) que odia al
que ya es su víctima; la aflige con reproches y calumnias porque la odia. No lo disimula: le
hace daño porque la odia y así lo reconoce descaradamente. 2. La boca lisonjera, es decir,
aduladora, que actúa solapadamente; la víctima no sospecha nada malo y se perjudica a sí
misma por dar crédito a los halagos y cumplidos que le hacen, con lo que es empujada de
modo suave, pero fuerte, hacia el precipicio. Un hombre prudente temerá más al adulador
que le bese para matarle, que al calumniador que proclama la guerra.
✡ PROVERBIOS 27 ✡
195
1 No te jactes del día de mañana, porque tú no sabes qué traerá el día.
✡ Comentario (Versículos 1)
Este proverbio nos recuerda lo que dice el Maestro (Mt. 6:34) y, en otro contexto, Santiago
(Stg. 4:13, 14) sobre el día de mañana. Eso no quiere decir que no hayamos de proveer para
el día de mañana, sino que no hemos de presumir acerca del día de mañana. En especial, no
hemos de dejar para mañana la gran obra de la conversión, la única necesaria, como si
estuviésemos seguros del mañana, sino que hemos de procurar escuchar debidamente la voz
de Di-s mientras dura este Hoy (He. 3:13). No sabemos lo que dará de sí el día, lo que el
tiempo lleva encerrado en su seno antes de darlo a luz. Di-s nos tiene sabiamente en la
oscuridad acerca del futuro, a fin de que aprendamos a depender de él y a estar dispuestos
continuamente para cualquier eventualidad (Hch. 1:7). Hemos de darle gracias por
ocultamos el futuro; si ha de ser adverso, nos ahorra la preocupación; si ha de ser próspero,
nos encantará la sorpresa.
2 Que te alabe la boca de otro, no la tuya, los labios de un extraño, no los tuyos.
✡ Comentario (Versículos 2)
Así como el v. anterior trata de la jactancia sobre el porvenir, éste se refiere al pasado y al
presente (comp. 25:27; 2 Co. 10:12, 18; 12:11). Dejemos que sean nuestras obras, no nuestra
boca, las que publiquen nuestras alabanzas; alabarse a sí mismo es muestra evidente de gran
orgullo. Puede haber ocasión justa de vindicarnos, pero no de aplaudirnos.
3 Una piedra tiene peso, la arena es pesada, pero la majadería de un necio pesa
más que ambas.
4 Hay crueldad en la furia, hay desbordamiento en la ira, pero ¿quién puede
soportar los celos?
✡ Comentario (Versículos 3-4)
196
La cólera de un necio que, cuando se le provoca, no sabe lo que dice ni lo que hace, es más
pesada que una piedra grande o un saco de arena, pues los que no dominan sus pasiones se
hunden bajo su peso, como se hunde sin remedio la persona que se pone a nadar con una
piedra o con un saco de arena. Es pues, de sabios no provocar a un necio, cuya ira puede
hundir también a otros, sino si está de mal genio, dejarlo solo. Pero una maldad enraizada es
mucho peor. Cruel es la ira (v. 4) y da paso a bárbaras acciones, pero la enemistad secreta,
la envidia de la prosperidad ajena y el deseo de venganza por la menor afrenta, son mucho
más perjudiciales. Se puede evitar un enfado repentino, como evitaba David la jabalina de
Saúl, pero cuando se convierte en persistente envidia, como le pasó a Saúl, no hay modo de
sostenerse delante de ella.
5 La reprensión abierta es mejor que el amor oculto.
6 Las heridas de una persona amada son duraderas; los besos de un enemigo son
profusos.
✡ Comentario (Versículos 5-6)
Es muy bueno, y mucho se ha de apreciar, el que nos corrijan nuestros amigos y nos digan
nuestros defectos. No es genuino el amor que, por no ofender, encubre, es decir que omite la
reprensión. Fieles son (v. 6) las heridas del que ama (comp. con Sal. 141:5), pues son
heridas limpias que curan aunque duelan. El deber del médico es curar la enfermedad, no el
complacer al paladar del enfermo. En cambio, son peligrosos e importunos, es decir,
profusos y aparatosos (éste es el significado del verbo griego en Mt. 26:49), los besos del
que aborrece. Así eran los besos de Joab y de Judas.
7 Una persona saciada desdeña la miel, pero a un hombre hambriento cualquier
cosa amarga le parece dulce.
✡ Comentario (Versículos 7)
Aquí, como en otros lugares de este libro, muestra Salomón que, en algunos aspectos los
pobres llevan ventaja a los ricos, porque: 1. Saben disfrutar mejor de lo poco que tienen. El
hambre es la mejor salsa. El más rústico manjar, mezclado con buen apetito, es vianda
excelente. En cambio, los que banquetean a diario, llegan a sentir náuseas del manjar más
delicado; y, 2. Además, los pobres son más agradecidos, pues bendicen a Di-s por el pan y
el agua, mientras que los ricos piensan que las golosinas más exquisitas escasamente
merecen alguna gratitud.
197
8 Como un gorrión que vaga lejos de su nido es un hombre que vaga lejos de su
hogar.
✡ Comentario (Versículos 8)
Hay quienes no saben soportar una residencia fija; les gusta vagar, hallar una excusa para
irse al extranjero, sin interés por la obligación que les ata al hogar. Los que así abandonan el
puesto que se les ha asignado son como el ave que se va de su nido, volando de rama en
rama, descuidando los huevos o los polluelos que quedaron en el nido. Quienes gustan de
viajar al extranjero, dejan sin hacer el trabajo que tienen en casa.
9 El aceite y el incienso alegran el corazón, y la dulzura de un amigo es mejor que
el consuelo propio.
10 No abandones a tu amigo, ni al amigo de tu padre; no entres en la casa de tu
hermano en el tiempo de tu infortunio; un vecino cercano es mejor que un
hermano lejano.
✡ Comentario (Versículos 9-10)
El v. 9 es semejante, en cierta medida, al v. 6, aunque ahora no se trata de heridas, de
reprensiones, sino de consejo cordial (lit. del alma), sincero, de un buen amigo. En
consecuencia, se exhorta en el v. 10 a no dejar a un amigo de casa que así consuela al
hombre (v. 9), pues es un amigo bien probado en toda clase de experiencias; su compañía y
su afecto son como el aceite y el incienso (Lit.), cuyo perfume se difunde fácilmente y
agrada a todo el que lo huele. Roboam se perjudicó grandemente por no escuchar los
consejos de los mejores amigos de su padre y también suyos. El v. 10b parece decir, a
primera vista, que acudir a un hermano es como un último recurso en tiempo de aflicción
(comp. con 17:17; 18:24). Comenta concisamente Ryrie: «El versículo no hace de menos al
hermano distante, pero recomienda al amigo íntimo».
11 Obtén sabiduría, hijo mío, y alegra mi corazón, para tener qué contestar a los
que se burlan de mí.
✡ Comentario (Versículos 11)
198
Aquí el maestro estimula a su discípulo a que se comporte conforme a las enseñanzas que ha
recibido de él, a fin de que, si alguien pone en duda, o critica, la competencia del maestro,
pueda éste señalar a sus alumnos como prueba de su capacidad para el oficio, pues las
cualidades de un buen profesor se echan de ver en la conducta y en los éxitos de sus
alumnos. Puede acomodarse también a los padres con respecto a sus hijos: Los que han
recibido buena educación han de conducirse de forma que puedan hacer callar a quienes
dicen: ‗joven santo, diablo viejo', y probar lo contrario: joven santo, ángel viejo’.
12 El listo vio un problema y se escondió; el inexperto prosiguió y pagó por ello.
✡ Comentario (Versículos 12)
El mal se puede ver venir. Donde hay tentación, es fácil prever que, si nos metemos en ella,
habrá pecado y habrá castigo. Di-s avisa antes de golpear. Por eso, el hombre prudente ve el
peligro y se esconde, es decir, evita que el mal le alcance. En cambio, los simples, ingenuos
e ignorantes, no se percatan del peligro y, en lugar de esconderse, siguen adelante y reciben
el daño, pues les alcanza el mal.
13 Quítale el vestido, porque él salió fiador por otro; tómalo como prenda, [porque
salió fiador] por una mujer desconocida.
✡ Comentario (Versículos 13)
Este versículo es una repetición de 20:16 y los judíos lo leen de la misma forma, aunque el
texto ofrece aquí una variante: en lugar del ‗extraños’ de 20:16, aquí dice: ‗extraña’.
14 Al que saluda a su prójimo en voz alta temprano en la mañana se le contará
como maldición.
✡ Comentario (Versículos 14)
El texto del proverbio está claro, pero su interpretación, especialmente de la segunda parte,
no es tan fácil. Lo más probable es que se trate, más bien que de un amigo importuno, de
uno que aparenta cordialidad en público y gran interés por la persona (comp. con el ‗desde
temprano’ de Jer. 7:13), pero todo es falso. «Se le contará por maldición» puede significar
199
que Di-s le castigará por su insinceridad, o que se merece que la persona a quien saluda se dé
cuenta de sus sentimientos y tenga por maldición la bendición que le dirige.
15 Un goteo incesante en día lluvioso y una mujer contenciosa son iguales;
16 Reprímela tan pronto como reprimes el viento, o te pondrá en evidencia como
aceite en la mano derecha de uno.
✡ Comentario (Versículos 15-16)
El v. 15 repite, ampliándola, la segunda parte de 19:13. Las rencillas de un vecino son como
un fuerte aguacero del que uno puede librarse metiéndose en casa, pero las de la esposa son
como lluvia continua que moja dentro de casa, contra la cual no hay otro remedio que la
paciencia. Un hombre prudente hará todo lo posible por evitarlas, pero no conseguirá evitar
que los vecinos se den cuenta del mal carácter de ella, de la misma manera que no se puede
ocultar el sonido del huracán ni el olor del perfume. Los alborotadores publican su propia
vergüenza, incluso cuando sus amigos íntimos y sus parientes más cercanos tratan de
ocultarla por hacerles un bien.
17 El hierro afila al hierro así un hombre afila el juicio de su amigo.
✡ Comentario (Versículos 17)
Las conversaciones sabias y provechosas aguzan el talento y el ingenio de los hombres. Del
mismo modo, las cualidades espirituales de los hijos de Di-s se estimulan con el trato con
otros hermanos. Por eso es tan provechoso el estudio de la palabra de Di-s en grupo. El
carácter mismo se aguza, se afila y se afina mediante esos contactos sociales, tanto en lo
civil como en lo religioso, hasta el punto de que, con frecuencia, personas de genio áspero,
de mente obtusa y de voluntad inactiva, se hacen, mediante esa conversación, suaves de
genio, brillantes de ingenio y aptos para un oficio o negocio.
18 El que atiende una higuera disfruta de su fruto, y el que cuida de su amo será
honrado.
✡ Comentario (Versículos 18)
200
Por bajo que sea el oficio que se desempeña, si se cumple con toda diligencia y competencia,
obtendrá provecho. Un pobre hortelano, dedicado a cuidar higueras, no tiene por qué
desanimarse; aunque tenga que trabajar con esfuerzo para plantarlas y cuidarlas hasta que
hayan crecido, tiempo llegará en que comerá de su fruto (comp. con 1 Co. 9:7). Del mismo
modo, un pobre criado que es diligente en servir a su señor y mirar por sus intereses, tendrá
el honor y el provecho que le son debidos. Dios es un buen Amo que se ha comprometido a
honrar a los que le sirven con fidelidad (Jn. 12:26).
19 Como el rostro corresponde al rostro en el agua, así el corazón de un hombre al
otro.
✡ Comentario (Versículos 19)
Este versículo puede entenderse de dos maneras: 1. De la misma manera que el agua de un
estanque tranquilo refleja exactamente los rasgos de la persona que en él se mira como en un
espejo, así también en el corazón del hombre se refleja su interior. Si un hombre examina su
conciencia, sus pensamientos, afectos e intenciones a la luz de la palabra de Di-s, podrá
discernir su carácter espiritual, del mismo modo que puede ver en un espejo su rostro natural
(Stg. 1:23). 2. Así como una persona halla en el agua una copia como de su propio rostro, así
también halla en su propio corazón rasgos parecidos a los de sus semejantes, pues Di-s ha
hecho los corazones humanos de forma parecida. Especifica Meiri: «Si ama sinceramente a
su amigo, puede estar seguro de que su amigo le ama con la misma sinceridad». Esta
segunda interpretación es la más probable (M. Henry admite ambas, como hemos visto).
20 La Fosa y la Destrucción no se pueden satisfacer, ni pueden satisfacerse los ojos
del hombre.
✡ Comentario (Versículos 20)
Se comparan aquí tres cosas que nunca se sacian: El Seol o morada de los muertos, la
destrucción (hebr. Abadah; aquí, sin vocales en el texto actual) que, probablemente, es,
como el Seol, sinónimo del sepulcro, y los ojos del hombre, órganos que suscitan los deseos
(comp. 1 Jn. 2:16), nunca satisfechos, del corazón humano. Pero los que tienen los ojos fijos
en el Soberano quedan satisfechos, y por siempre lo estarán. Aquí vale lo de Agustín de
Hipona: «Nos hiciste, Soberano, para ti, y está intranquilo nuestro corazón hasta que
descanse en ti».
201
21 Para la plata, el crisol; para el oro, el horno, y a un hombre lo prueba su
alabanza.
✡ Comentario (Versículos 21)
De la misma manera que la calidad del oro y de la plata se descubre en el crisol, así también
el crisol del hombre son las alabanzas que se le tributan: Si se enorgullece con los aplauso es
un necio que se atribuye a sí mismo la gloria que le pertenece a Di-s y, por tanto, no se
merece dichas alabanzas. Pero si las alabanzas le inducen a ser más agradecido a Di-s, más
respetuoso con sus amigos y más diligente en hacer el bien a otros, demostrará con esto que
es sabio y bueno (comp. 2 Co. 6:8). El orgullo se reviste, a veces, con capa de falsa
humildad.
22 Aun si apilas al necio en pilón con la maceta junto con el grano, su necedad
nunca se le saldrá.
✡ Comentario (Versículos 22)
Salomón había dicho anteriormente (22:15) que la vara de la corrección aleja del muchacho
la necedad que está ligada en su corazón, pero ahora muestra que, si eso no se hizo cuando
el corazón del niño podía ser moldeado y los vicios no habían arraigado todavía en él, va a
ser punto menos que imposible conseguirlo después que se ha hecho mayor: los golpes de la
vara no hacen en él ningún efecto. Las nueces más duras despiden la cáscara cuando se las
machaca, pero al necio no se le va la necedad aunque lo machaquen en un mortero. Di-s lo
machacará un día con eficacia, pero los magistrados tienen la obligación de hacerlo
mediante el rigor de la ley. Cuando una persona no se deja gobernar por las fuerzas de la
razón, del amor y de su propio interés, hay que usar la razón de la fuerza.
23 Mira bien cómo luce tu rebaño; presta atención a tus manadas;
24 porque una propiedad no dura para siempre, ni una corona por todas las
generaciones.
25 La hierba se va, aparece nueva hierba, y el pastizal de las lomas se recoge.
26 Los corderos te proveerán ropa, los chivos, el precio de un campo.
27 La leche de cabra será suficiente para tu alimento, el alimento de tu familia, y el
mantenimiento de tus criadas.
202
✡ Comentario (Versículos 23-27)
En esta sección, Salomón ensalza las ventajas de la vida rural y pastoril. Según Cohen, ‗el
objetivo de esta sección es aconsejar a un joven en la elección de su carrera. El comercio
internacional que ofrecía la perspectiva de grandes ingresos tentaba a muchos a abandonar
las labores agrícolas de sus antepasados. El sabio describe el contento que ofrece la sencilla
vida campestre dándole preferencia sobre las ventajas y comodidades de la ciudad‘. Trata,
pues, de convencer a la gente de que el dinero obtenido en los negocios de la ciudad es
inestable (v. 24), fluctúa con los avatares del comercio y de la industria, mientras que el
campo ofrece mayor estabilidad, aunque sus beneficios no vengan tan de repente y requieran
esfuerzo y paciencia. Por otra parte, el ganado no requiere sembrar ni segar, el alimento del
ganado es fruto espontáneo de la tierra (v. 25), hierba que sale después de segado el heno; y
mientras tanto, los corderos le proveerán de lana que las mujeres hilarán en casa para la
confección de vestidos (v. 26), los cabritos se pueden vender para, con el precio, añadir
nuevas fincas a la hacienda (comp. con 31:16) y la leche de las cabras, mencionada como
parte de la dieta en Dt. 32:14, para mantenimiento de toda la familia.
✡ PROVERBIOS 28 ✡
203
1 El malvado huye sin que nadie lo persiga, pero los justos están tan confiados
como un león.
✡ Comentario (Versículos 1)
La culpa en la conciencia hace que los hombres se aterroricen de sí mismos, hasta el punto
de huir sin que nadie los persiga; como quien se esconde por estar en deudas, pensando que
toda persona con quien se encuentra es un alguacil. El pecado acobarda a los hombres. En
cambio, el justo está confiado como un león, puesto que en medio de los mayores peligros,
tiene a un Di-s omnipotente en quien confiar.
2 Cuando hay rebelión en un país son muchos sus gobernantes; pero con un
hombre que tiene entendimiento y conocimiento, la estabilidad es duradera.
✡ Comentario (Versículos 2)
Los pecados nacionales ocasionan desórdenes nacionales. Una defección general en la que
una nación, casi en masa, se aparta de Di-s y se entrega al materialismo y a la inmoralidad,
ocasiona la inestabilidad nacional, con frecuentes cambios de gobierno, divisiones del
pueblo en clases, facciones y partidos que se muerden y devoran unos a otros. Sólo una
persona de autoridad, honestidad, prudencia y competencia puede devolver la estabilidad al
país. No podemos imaginamos el gran servicio que una persona sabia y entendida puede
ofrecer a su país en una coyuntura crítica.
3 Un pobre que retiene lo que se le debe al desvalido es como una lluvia
destructiva que no deja alimento.
✡ Comentario (Versículos 3)
Quienes conocen por experiencia propia las miserias de la pobreza deberían ser compasivos
con los que sufren lo mismo que ellos sufrieron, y son bárbaros y crueles sin explicación y
sin excusa cuando oprimen y explotan a los pobres y débiles. Los pobres llegados a ricos
suelen ser los peores ricos (comp. con 30:21-23). Es como lluvia torrencial que deja sin
pan. Dice Thomson: 'Esta comparación ilustrativa es de lo más impresionante. Se funda en
un fenómeno que frecuentemente he presenciado y, a veces, sentido. Una pequeña nube
204
negra atraviesa el firmamento en la última parte del verano o al comienzo del otoño y arroja
un tremendo aguacero que se lleva por delante todo lo que encuentra a su paso... Cada
verano, las eras que caen a lo largo de la línea de su marcha (de la nube), quedan barridas de
todo su precioso producto, el ganado se ahoga y los rebaños desaparecen'.
4 Los que abandonan la instrucción alaban al malvado, pero los que le hacen caso
a la instrucción los combaten.
✡ Comentario (Versículos 4)
Los que abandonan (aunque la conozcan bien) la ley, alaban al malo, al que no cumple la
ley, al que la ley condena. Los malvados hablan bien unos de otros y, de este modo, se
fortalecen mutuamente las manos en sus malvados planes, esperando así silenciar el clamor
de su conciencia y servir los intereses del reino del diablo. Pero los que cumplen a
conciencia la ley de Di-s, se oponen vigorosamente al pecado, sea cual sea el puesto que
ocupen en la sociedad.
5 Los malvados no pueden discernir el juicio, pero los que buscan a lo
disciernen todo.
✡ Comentario (Versículos 5)
Así como el predominio de la concupiscencia en el hombre se debe al entenebrecimiento de
su inteligencia, este mismo entenebrecimiento se debe, a su vez, al predominio de la
concupiscencia, formando así un círculo vicioso. Los malos no entienden el derecho (lit.
juicio) porque son malos. Por su parte, los que buscan a ya demuestran con eso que
entienden mucho, y esa búsqueda de Di-s es, a su vez, el mejor medio de entender más, hasta
llegar a entender todas las cosas (comp. con Jn. 7:17; 1 Jn. 2:20, 27); es decir, a alcanzar
pleno discernimiento entre lo bueno y lo malo, lo falso y lo verdadero.
6 Mejor es un pobre que vive sin tacha que un rico cuyos caminos son torcidos.
✡ Comentario (Versículos 6)
La primera parte de este v. es una repetición de la primera frase de 19:1. La segunda dice
aquí textualmente: «que el perverso de dos caminos (es decir, el que obra con doblez,
205
tortuosamente) aunque sea rico él». Para un mundo cegado por el diablo (V. 2 Co. 4:4), la
riqueza, con salud, es fuente de todos los bienes, pero el hombre sabio conoce que la riqueza
es transitoria y exterior a la persona, mientras que la rectitud de carácter es algo íntimo que
enriquece al hombre, le hace aceptable a Di-s, le gana el respeto y el afecto de los buenos y
le proporciona una mejor vida y una mejor muerte.
7 Un hijo inteligente le hace caso a la instrucción, pero el que se junta con los
glotones desgracia a su padre.
✡ Comentario (Versículos 7)
Este sencillo proverbio muestra, una vez más, el honor y la prudencia que la observancia de
la ley de Di-s dan a un hombre ya desde su niñez, mientras que la amistad con jóvenes
libertinos es una vergüenza, no sólo para él mismo, sino también para su familiares más
allegados.
8 El que aumenta su riqueza por préstamos a descuento o interés la amasa para
uno que es generoso con el pobre.
✡ Comentario (Versículos 8)
Lo mal ganado, aunque aumente mucho, no durará mucho (Comp. 13:22). Por medio del
fraude y de la usura, una persona puede amasar una fortuna en poco tiempo, pero no ha de
permanecer por largo tiempo en su casa. Para sí mismo acumula riquezas, pero otro mejor
que él disfrutará, sin tardar mucho, de ellas. De esta forma, al parecer tan extraña, la
providencia de Di-s hace que el dinero mal ganado sea un día bien gastado.
9 El que presta oído sordo a la Instrucción, su oración en una abominación.
✡ Comentario (Versículos 9)
Dios nos habla por medio de su ley y espera que en ella le oigamos y le prestemos atención;
nosotros le hablamos a él por medio de la oración y esperamos que nos escuche y nos
206
responda favorablemente, pero no podemos esperar que él nos escuche si nosotros no le
escuchamos a él.
10 El que extravía al recto hacia el mal camino caerá en su propio hoyo, pero los
intachables prosperarán.
✡ Comentario (Versículos 10)
Los seductores que tratan de pervertir a los buenos hasta conseguir que vayan por el mal
camino (como en 8:13), esto es, camino de maldad, caerán en la fosa que cavaron (comp.
con 26:27) para otros. Al haber sido, no sólo pecadores, sino tentadores, su condenación será
mucho más severa (Mt. 23: 14, 15). En cambio, los íntegros, los intachables, no sólo serán
preservados de los males a los que los tentadores procuren lanzarlos, sino que disfrutarán de
los bienes que Di-s les otorgará, ya en esta vida (comp. 2:21).
11 El rico es listo a sus propios ojos, pero un pobre perceptivo puede ver a través de
él.
✡ Comentario (Versículos 11)
Los ricos están inclinados a pensar que son sabios e inteligentes; al haber prosperado en el
negocio, se tienen por expertos en toda clase de materias y esperan que sus opiniones sobre
cualquier asunto sean respetadas por todos, como si sus palabras fueran oráculos y leyes.
Pero el pobre que, a fuerza de trabajo y esfuerzo, ha logrado prudencia y experiencia,
lo escudriña (al rico) y puede demostrar que no es tan sabio ni entendido como él se cree.
12 Cuando el justo se alegra hay gloria, pero cuando se levanta el malvado
escasean los hombres.
✡ Comentario (Versículos 12)
Cuando un país es gobernado con justicia, prosperan los buenos y es grande la gloria, es
decir, el esplendor de la nación por las ventajosas condiciones de vida; hay riqueza, paz,
207
justicia y libertad. Pero, cuando suben al poder, se levantan, los malvados, se eclipsa la
belleza y la prosperidad de la nación; todo lo sagrado es perseguido y hasta los hombres han
de esconderse, es decir, los buenos desaparecen en la oscuridad; o, más probable (comp.
Abd., v. 6), `son escudriñados' (lit.) para saquearlos con toda clase de medidas injustas.
13 El que encubre sus faltas no tendrá éxito; el que las confiesa y las abandona
hallará misericordia.
✡ Comentario (Versículos 13)
De nada sirve negar o excusar el pecado, echando la culpa a otros; la propia conciencia le
acusará (comp. Sal. 32:3-5). Mientras el paciente oculta su mal, no puede esperar remedio.
Di-s perdona sólo al que confiesa sus pecados (Jer. 3:12, 13; 1 Jn. 1:9) y los abandona
(lit.), pues una confesión sin arrepentimiento, sin firme propósito de la enmienda, equivale a
hipocresía o a engañarse a sí mismo.
14 Feliz el hombre que siempre respeta, pero el que endurece su corazón cae en el
infortunio.
✡ Comentario (Versículos 14)
La traducción literal de este versículo es la siguiente: «Dichoso el hombre que tiene miedo;
pero el que endurece su corazón caerá en el mal». La mayoría de los comentarios, incluidos
los rabínicos, entienden por 'miedo', el temor al pecado y a las consecuencias del pecado;
por 'endurecer el corazón', entienden desechar ese temor, menospreciar el castigo de Di-s y
cometer el pecado a plena conciencia. J. J. Serrano (al que parece seguir la Nueva Biblia
Española) entiende por `miedo' la prudencia ante el peligro; por 'endurecer el corazón' un
atrevimiento temerario; compara esto con el v. 26. Opine el lector erudito.
15 Un león rugiente y un oso hambriento es el malvado que gobierna a un pueblo
indefenso.
✡ Comentario (Versículos 15)
La ley prohibía (Ex. 22:28) hablar mal del príncipe del pueblo; pero si es un malvado que
oprime al pueblo, la Escritura lo llama aquí león rugiente (comp. con Am. 3:4; 1 P. 5:8) y
208
oso hambriento (el mismo verbo de Jl. 2:9), que cae sobre un pueblo pobre, es decir, débil e
indefenso. Es, pues, un gobernante brutal, bárbaro, cruel.
16 Un príncipe sin entendimiento es muy opresivo; el que evita ganancias mal
habidas vivirá mucho.
✡ Comentario (Versículos 16)
Este versículo está conectado (probablemente; así opina Ibn Ezra) con el anterior, pues dice
textualmente al comienzo: «Príncipe que carece de entendimiento y (es) gran opresor». A
esta opinión favorece el paralelismo antitético de la 2'-.parte: «Los que (el gobernante y el
príncipe) aborrecen la ganancia injusta prolongará (lit.) (sus) días», lo cual era siempre una
muestra de especial bendición de Di-s.
17 Un hombre oprimido por culpa de sangre huirá al hoyo; que nadie lo apoye.
✡ Comentario (Versículos 17)
J.J. Serrano conecta ('probablemente', dice) este proverbio con el anterior: 'Al tirano
despiadado, a quien alcanza la justicia de la que huye, no hay que ayudarle, aunque se halle
en peligro de muerte, aunque huya hasta la fosa o el pozo'. El versículo es oscuro', dice
Cohen. Parece escrito cuando había cesado de funcionar lo de las ciudades de refugio (Nm.
35). Pero, ¿qué decir del mandato de Gn. 9:6? Aquí no se habla de matar al asesino, sino
sólo de no ayudarle. M. Henry lo compara al caso de Caín, perpetuo fugitivo. También Rashi
entiende así el vocablo hebreo bor, fosa: 'permanece fugitivo hasta la muerte', dice. Lo más
seguro, en todo caso, es que se trate de un asesino que huye del vengador de la sangre.
18 El que vive intachablemente será librado, pero el que es torcido en sus caminos
caerá de una vez.
✡ Comentario (Versículos 18)
Para estar a salvo de verdaderos males basta con ser intachable, ya que, quien tiene temor de
Di-s, no tiene por qué temer ninguna otra cosa ni a nadie más. Su integridad y rectitud le
darán una santa seguridad en el peor de los tiempos. Podrán herirle, pero no dañarle. Por el
contrario, los falsos y deshonestos nunca están seguros.
209
19 El que labra su tierra tendrá alimento en abundancia, pero el que persigue la
vanidad tendrá pobreza en abundancia.
✡ Comentario (Versículos 19)
Este versículo es muy semejante a 12:11, pero aquí hay una variante que pone de relieve el
contraste entre el diligente y el ocioso, pues mientras el primero se saciará de pan, el
segundo se llenará de pobreza. Como suele decirse, el primero tendrá 'para dar y vender;
para mantener a su familia y dar a los pobres; el segundo ha tomado el camino de la miseria.
20 Un hombre del que se puede depender recibirá muchas bendiciones, pero el que
se apresura a hacerse rico no quedará sin castigo.
✡ Comentario (Versículos 20)
El varón de fidelidades (Lit.), es decir, el que muestra lealtad en sus transacciones, tendrá
muchas bendiciones de parte de Di-s y de los hombres. En cambio, el que se apresura a
enriquecerse (comp. v. 22, y 20:21; 23:4; 1 Ti. 6:9), por los medios que sean, justos o
injustos, no quedará impune; mejor, no quedará libre de culpa; no será tenido por inocente
por sus vecinos, sino que su prójimo le cobrará desafecto y hablará mal de él. El texto no
dice, en efecto, que no puede ser inocente, sino que no podrá demostrarlo fácilmente, pues
su afán en acumular riquezas rápidamente puede tentarle a cometer fraude o robo.
21 Ser parcial no es correcto; un hombre puede hacer lo malo por un pedazo de pan.
✡ Comentario (Versículos 21)
Es un error fundamental en la administración de la justicia el tener en consideración las
personas más bien que el derecho, hasta el punto de favorecer a uno porque es rico o
pariente, o del mismo partido, de la misma opinión, etc., y cargar la mano a la otra parte
porque es pobre o porque ha sido de distinta opinión o porque ha votado contra mí, etc. Los
210
que son parciales serán perjudiciales. Quienes han quebrantado los vínculos de la equidad,
aunque al principio sólo se inclinen por un regalo de subido precio, una vez que han perdido
la delicadeza de la conciencia, se dejarán sobornar, a la larga, hasta por un bocado de pan.
22 El miserable corre tras la riqueza; no se da cuenta de que vendrán pérdidas.
✡ Comentario (Versículos 22)
Salomón muestra aquí el pecado y la insensatez de los que quieren ser ricos a todo
trance ("el malo de ojos', dice el hebreo, como en 23:6). El ojo malo es el que envidia a los
que tienen más (Comp. Mt. 20:15, lit.). 'No sabe, etc.', es decir, no se percata de que Di-s le
va a castigar con la indigencia.
23 El que reprende a un hombre, al final hallará más favor que el que lo elogia.
✡ Comentario (Versículos 23)
Los aduladores suelen agradar al principio a los vanidosos, pero, a la larga, se hacen pesados
y despreciables. En cambio, los que corrigen con amor suelen molestar al principio, pero
después, cuando el remedio amargo ha producido su buen efecto, pasado el primer momento
del mal gusto al paladar, se hacen de respetar y querer. El que grita contra el cirujano (en
tiempos de M. Henry no existía la anestesia de hoy) por el daño que le hace al escudriñar la
herida, le paga después a gusto y se lo agradece, cuando le ha curado.
24 El que le roba a su padre o a su madre y dice: ―Eso no es ofensa‖, es compañero
de los vándalos.
✡ Comentario (Versículos 24)
Así como El Mesías muestra la maldad de los hijos que piensan que no tienen la obligación
de mantener a sus padres (Mt. 15:5), así también Salomón muestra aquí la maldad de los que
piensan que no es pecado robar a sus padres, ya sea quitándoles el dinero o contrayendo
211
deudas y haciendo que las paguen sus padres. El que así se comporta es compañero de los
bandidos, pues se porta como uno de ellos.
25 Un hombre avaro provoca contiendas, pero el que confía en gozará de
prosperidad.
✡ Comentario (Versículos 25)
El codicioso (como correctamente traduce la New International Version la frase
literal `ancho de alma'. Comp. con 10:3) suscita contiendas a menudo, puesto que, debido a
su avaricia, tiende a apoderarse de lo que no es suyo, con lo que son inevitables las disputas
y contiendas. En cambio, el que confía en , el que depende de Di-s, el que, en lugar de
contender a favor de sí mismo, encomienda a Di-s su caso (Sal. 37:5) será
prosperado (Lit. engordado) con la bendición de Di-s (comp. 11:25).
26 El que confía en su propio instinto es un tonto, pero el que vive por la sabiduría
escapará.
✡ Comentario (Versículos 26)
El necio confía en su propio corazón, es decir, en sus propios planes y pensamientos, en su
propia fuerza, etc., puesto que tiene de sí mismo una opinión muy elevada. En cambio, el
que camina en sabiduría, esto es, por las sendas que la prudencia aconseja, será librado del
daño que le sobreviene al que confía en sus propios juicios, sin dejarse aconsejar por quienes
saben más que él.
27 El que le da al pobre no padecerá necesidad, pero al que cierra sus ojos lo
maldecirán.
✡ Comentario (Versículos 27)
El que da al pobre no carecerá de ninguna cosa necesaria (el mismo verbo de Sal. 23:1),
pues es como si prestara a Di-s (V. 19:17). Pero el que aparta sus ojos (comp. Lc. 10:30-32)
para no ver las miserias ajenas, temeroso de que los ojos le afecten el corazón y le arranquen
212
alguna muestra de compasión, tendrá muchas maldiciones, pues Di-s y los hombres le
maldecirán.
28 Cuando los malvados se levantan, la gente se esconde, pero cuando perecen,
aumentan los justos.
✡ Comentario (Versículos 28)
Este versículo es una variante del v. 12 (V. también 29:2). El verbo hebreo que cierra el
versículo puede significar 'aumentar', 'cundir', 'multiplicarse', 'prosperar', etc. El verbo que
mejor cuadra al contexto, conforme al paralelismo (comp. también el v. 12)
es prosperan, triunfan.
✡ PROVERBIOS 29 ✡
213
1 Aquél a quien reprenden a menudo, puede volverse testarudo pero de pronto se
quebrantará sin remedio.
✡ Comentario (Versículos 1)
Muy de lamentar es la obstinación de los malvados. Son reprendidos y amonestados con
frecuencia («el hombre de reprensiones, dice literalmente el texto) por padres y amigos, por
magistrados y ministros de Di-s, pero endurecen su cerviz (comp. Ex. 32:9), es decir, se
niegan a inclinar el cuello en señal de sumisión; lo cual es una locura, pues les espera un
quebrantamiento sin medicina. El que no se inclina ante la vara, será quebrantado con el
hacha.
2 Cuando los justos se hacen grandes la gente se alegra, pero cuando domina el
malvado la gente se lamenta.
✡ Comentario (Versículos 2)
Aquí tenemos otra variante de 28:12, 28, como ya indicamos allí.
3 El que ama la sabiduría le produce gozo a su padre, pero el que se junta con
rameras perderá su riqueza.
✡ Comentario (Versículos 3)
Para la primera parte del versículo, véase 10:1; 15:20. Podrá llamársele 'filósofo', que
significa 'amigo de la sabiduría', pero el verbo hebreo para 'amar' es aquí más fuerte que el
griego; además, la sabiduría semita, bíblica, es práctica, no es meramente especulativa como
solía ser, con pocas excepciones, la filosofía griega. Cohen hace notar que la sustitución de
'hijo' por 'varón' en este proverbio podría dar a entender un hijo ya mayor que es el sostén de
sus padres, por lo que éstos se alegran de que no gaste su dinero con rameras (comp. Lc.
15:30), quienes le arruinarían el alma, el cuerpo y la hacienda.
4 Por la justicia un rey sostiene el país, pero el fraudulento lo destruye.
✡ Comentario (Versículos 4)
214
Por medio de la justicia el rey afianza, esto es, estabiliza y hace prosperar, su país, pues se
asegura la paz, se respetan las libertades y las propiedades de los súbditos e impera el orden
en la sociedad. Mas el que lo carga de impuestos lo destruye, lo arruina. El vocablo hebreo
para 'impuestos' significaba la parte de las ofrendas en los sacrificios que se asignaba a los
sacerdotes, pero en Ez. 45:13,16 indica los dones presentados al príncipe de Israel.
Es curioso que Salomón diga esto (V. Mt. 7:3-5), cuando él mismo cargó de impuestos al
país (V. 1 R. 4:7 y ss.; 12:4). Es muy probable que Salomón escribiera esto antes de caer él
en el mismo vicio. El caso es muy frecuente.
5 El que elogia a su prójimo le tiende una red a los pies.
✡ Comentario (Versículos 5)
El hombre que lisonjea (Lit. suaviza, ya sea sus palabras o, más probable, la senda,
haciéndola resbaladiza) a su prójimo para atraérselo y conseguir de él algún favor no según
justicia, le está incitando al pecado, le tiende un lazo; sin embargo, tanto Cohen como Ryrie
opinan que se trata de los pasos del propio adulador (comp. con 26:27; 28:10).
6 Las ofensas del malvado son una trampa para él mismo, pero el justo canta
gozosamente.
✡ Comentario (Versículos 6)
Un pecado es tentación para otro pecado y hay calamidades que, como un lazo, caen de
repente sobre los malvados en medio de sus transgresiones. Esos lazos echan a perder todo
el placer que los malvados hallan en sus transgresiones; pero los justos son preservados de
tales lazos, caminan en libertad y, por eso, cantan y se alegran.
7 El justo se preocupa por la causa del oprimido; el malvado no puede entender
semejante preocupación.
✡ Comentario (Versículos 7)
El juez justo conoce (es decir, considera, investiga y reconoce) la causa (lit. el juicio, el
derecho) de los pobres, de los desvalidos. Todos deben tener consideración con los pobres
215
(V. Sal. 41:1), pero los jueces tienen un deber especial por el cargo que desempeñan. El
sentido de la justicia debe hacer a los jueces y a los abogados tan solícitos y laboriosos en la
causa del pobre como si se tratase de un magnate de quien esperasen grandes
beneficios. Mas el juez malvado no entiende conocimiento (lit.), no presta atención a los
derechos de los pobres, de los desvalidos, porque carece del discernimiento necesario para
reconocerlos (V. Job 29:16).
8 Los burladores inflaman una ciudad, pero los sabios ahuyentan la ira.
✡ Comentario (Versículos 8)
Comp. este v. con 11;11; 22:10, especialmente con el segundo. Los
escarnecedores siembran el desorden y la confusión, pues no se paran a pensar en las
consecuencias de sus acciones; se burlan hasta de pensar con reflexión, se burlan de ser
refrenados por leyes y constituciones; quebrantan la palabra dada, porque se burlan de verse
ligados por sus propias palabras. En cambio, los sabios calman la ira, es decir, se esfuerzan
en suavizar diferencias a fin de que impere una atmósfera de paz.
9 Cuando un sabio entra en litigio con un necio hay disparates y ridiculeces, pero
ninguna satisfacción.
✡ Comentario (Versículos 9)
Si un sabio contiende con otro sabio, puede esperarse entendimiento entre las partes y que se
resuelva el asunto amistosamente. Pero, si contiende (hebr. nishpat, contender enjuicio) con
un necio, no habrá arreglo posible, no habrá quietud (lit.) de ánimo. Lo mismo da que el
necio se enfurezca o se burle de lo que se le dice; no sacará nada de él. Si se entiende del
sabio (el sentido es ambiguo), ya se enoje o se ría, lo mismo si toma en serio que si toma a
broma el tratar con tal necio, ningún bien sacará con ello, sólo perderá la calma propia del
hombre prudente.
10 Los sanguinarios detestan a los intachables, pero los rectos los buscan.
✡ Comentario (Versículos 10)
Los sanguinarios, los sedientos de sangre inocente, aborrecen al íntegro, al intachable, pues
son como la descendencia de la vieja serpiente, el homicida desde el principio (Jn. 8:44),
216
mientras que los rectos van en busca del intachable, desean hacerle bien. Es cierto que la
frase 'buscar el alma' (o mejor, la vida) de alguien suele significar intención de dar muerte a
la persona, pero, como dice J.J Serrano, 'la mala intención queda excluida en el caso presente
por el paralelismo antitético'. Lo mismo opina el rabino Cohen, quien añade: 'Este es el
único modo satisfactorio de explicar el texto, y el argumento de que la frase tiene de
ordinario el sentido opuesto no es decisivo contra él'.
11 El tonto ventila toda su ira, pero el sabio la calma.
✡ Comentario (Versículos 11)
Necio es ciertamente el que ante la menor provocación, da rienda suelta a toda su
ira, diciendo lo que le viene a la boca, sin reflexión ni consideración. En cambio, el sabio se
domina a sí mismo; prudente y reflexivo, mide sus palabras con calma y escucha con
atención lo que se dice.
12 Un gobernante que escucha mentiras, todos sus ministros serán malvados.
13 Un pobre y un fraudulento se encuentran; le da lustre a los ojos de ambos.
14 Un rey que juzga honestamente a un oprimido, su trono se establecerá para
siempre.
15 La vara y la reprensión producen sabiduría, pero un muchacho fuera de control
es una desgracia para su madre.
16 Cuando aumentan los malvados aumentan las ofensas, pero los justos verán su
caída.
✡ Comentario (Versículos 16)
Cuanto mayor es el número de los pecadores, tanto mayor es el número de los pecados. En el
antiguo mundo, cuando comenzaron los hombres a multiplicarse (Gn. 6:1), comenzaron a
degenerarse y a corromperse a sí mismos y unos a otros. Y cuanto mayor es el número de
pecados, tanto más cerca está la ruina profetizada. Pero el aumento de pecados y de
pecadores no debe sacudir la fe ni la esperanza de los justos. Que no digan éstos que Di-s ha
abandonado la tierra, sino que esperen con paciencia y tendrán la satisfacción de ver la
ruina de los malvados.
217
17 Disciplina a tu hijo y te dará paz; te gratificará con golosinas.
✡ Comentario (Versículos 17)
Es un placer para los padres, sólo conocido de quienes disfrutan de esta bendición, ver el
feliz resultado de la buena educación que dieron a sus hijos, y contemplar la perspectiva de
un buen porvenir para ellos, tanto en este mundo como en el otro. Los niños deben ser
disciplinados; no se les debe permitir que hagan lo que quieran y que se vayan sin reprensión
cuando hacen algo que no es conveniente.
18 Por falta de visión pierde control un pueblo, pero feliz es el que le hace caso a la
Instrucción.
✡ Comentario (Versículos 18)
Sin profecía (lit. sin visión, esto es, sin visión profética), sin alguien que exponga la ley y
amoneste al pueblo de parte de Di-s (Comp. Ex. 32:25, el efecto de la ausencia de
Moisés), el pueblo se desenfrena (comp. 1 S. 3:1). Pero cuando se guarda la ley, hay dicha,
porque hay moralidad y orden, así como justicia y generosidad. Dice Cohen: 'Se indica aquí
que cuando los judíos son responsables de la cesación de la profecía, arrojan de sí todo freno
y adoptan caminos malvados'.
19 A un esclavo no se le puede disciplinar con palabras; aunque comprenda, no
responde.
✡ Comentario (Versículos 19)
Los malos sirvientes obedecen, no por amor, sino por miedo; no se corrigen con
palabras, esto es, con buenas razones, sino por la fuerza. Entienden lo que se les dice o se
les manda, pero no hacen caso; se portan como si fuesen sordos: no hay respuesta (lit.) de
ellos.
20 Si ves a un hombre apresurado en el hablar, hay más esperanza para un necio
que para él.
✡ Comentario (Versículos 20)
218
El que es ligero en sus palabras, que se precipita a hablar sin reflexionar (contra lo que dice
Stg. 1:19 'tardo para hablare es sin remedio; más esperanza hay del necio que de él (comp.
26:12 para esta frase). Al menos, el necio que reflexiona un poco antes de hablar, ya
reconoce algún tanto su necedad, con lo que puede comenzar a ir por el camino de la
sabiduría. Hay quienes, por naturaleza, son de cortos alcances y avanzan muy despacio en
sus estudios, pero llegan a obtener mayores conocimientos y ser de mayor provecho en la
vida que los que poseen genio vivo y clara inteligencia, pero carecen de reflexión y
prudencia.
21 Un esclavo mimado desde su juventud vendrá a parar mal.
✡ Comentario (Versículos 21)
La amonestación es clara, pero la predicción es oscura, porque el vocablo hebreo manón no
sale en ningún otro lugar de la Biblia. Los eruditos Ewald y Nowack lo traducen
por 'desagradecido'. Según eso, el proverbio diría: «El que mima desde la niñez a su
esclavo, al final se le volverá desagradecido», es decir, se creerá que es el amo, como si a él
le perteneciese la hacienda. Aunque los comentaristas difieren en cuanto a la traducción del
vocablo manón, el sentido que a la fiase le dan los modernos es, más o menos, el que aquí le
hemos dado.
22 Un hombre enojado provocará una contienda; el hombre de mal genio comete
muchas ofensas.
✡ Comentario (Versículos 22)
La primera parte del versículo es una repetición de 15:18, con la ligera variante del
vocablo 'iracundo' que, en 15:18, significa literalmente 'hombre de ardor', de genio pronto,
presto a enfurecerse, que es precisamente el vocablo que sale en la segunda parte del
presente versículo, y del que se dice aquí que abunda en transgresiones (lit.), porque, en su
furia, el sentido moral queda obnubilado por los humos del mal genio.
23 El orgullo de un hombre lo humillará, pero el humilde obtendrá honor.
✡ Comentario (Versículos 23)
219
Compárese este proverbio con 11:2; 15:33; 16:18 y 18:12. Cohen cita un adagio rabínico, de
autor desconocido: El que corre tras el honor, halla que el honor huye de él; pero al que huye
del honor, le persigue el honor'.
24 El que comparte con un ladrón es su propio enemigo; requerido bajo juramento,
no lo delata.
✡ Comentario (Versículos 24)
El cómplice del ladrón aborrece su propia alma, pues contribuye a su propia ruina,
conforme al contexto posterior: oye la imprecación, es decir, el conjuro, la invitación del
juez a testificar el hecho y no lo denuncia (comp. Lv. 5:1) porque se denunciaría a sí mismo;
será condenado, por tanto, por no querer testificar o, más probable por perjurio.
25 Los temores de un hombre vienen a ser una trampa para él, pero el que confía en
será salvaguardado.
✡ Comentario (Versículos 25)
La enseñanza de este proverbio es frecuente en la Biblia (V. 18:10; 28:25, además de Gn.
12:12; 20:2, 11; Sal. 91:1-6; Lc. 12:4; Jn. 12:42, 43). Aun hombres buenos, como Abraham
y Simón Pedro, por temor a los hombres, cayeron en el lazo; Abraham negó a su esposa, y
Pedro negó a su Maestro.
26 Muchos buscan audiencia con un gobernante, pero es de que uno obtenga
justicia.
✡ Comentario (Versículos 26)
El proverbio se refiere al caso en que una persona busca el favor (lit. el rostro, esto es, una
expresión facial favorable) del gobernante y, para ello, emplea cualquier medio (soborno,
220
adulación, etc.) con tal de obtener veredicto favorable en un juicio, litigio, etc. Pero el
juicio definitivo de cada uno en cada caso pertenece a Di-s, aun cuando un gobernante o juez
injusto condene a un inocente. Salomón mismo era un gobernante y, como se dice en
castellano 'conocía bien el paño; más de uno acudiría a él buscando favor por medios
deshonestos. Amán disponía del favor de Asuero, pero de poco le sirvió. Lo que importa de
veras no es el favor del príncipe, sino el favor de Di-s.
27 El hombre injusto es una abominación para los justos, y aquel cuyo camino es
recto es una abominación para los malvados.
✡ Comentario (Versículos 27)
El proverbio expresa no sólo la oposición innata entre el vicio y la virtud, sino también la
antigua enemistad, siempre existente, entre la simiente de la serpiente y la simiente de la
mujer (Gn. 3:15). Todos los que han sido santificados tienen arraigada antipatía a la maldad
y a los malvados. Con esta mutua repugnancia entre el justo y el impío, entre el mal y el
bien, se cierran los proverbios de Salomón, pues lo que queda son apéndices al libro.
✡ PROVERBIOS 30 ✡
221
Este capítulo y el siguiente son un apéndice a los proverbios de Salomón, pero ambos se
llaman expresamente 'oráculo profético' (lit. carga, término frecuente en la literatura
profética), por lo que se tienen también como inspirados. Este capítulo fue escrito por
alguien que lleva el nombre de Agur hijo de Yaqué. Tenemos aquí: I. Su profesión de fe (vv.
1-6). II. Su oración (vv. 7-9).III. Su aviso a los que perjudican a sus siervos (v. 10). IV.
Cuatro clases de mala gente (vv. 11-14). V. Cuatro cosas que no se sacian (vv. 15, 16), y se
añade a ello una severa, pero justa amonestación a los hijos que se portan mal con sus padres
(v.17). VI. Cuatro cosas inescrutables (vv. 18-20). VII. Cuatro cosas intolerables (vv. 21-
23). VIII. Cuatro cosas pequeñas, pero sabias (vv. 24-28). IX. Cuatro cosas majestuosas (vv.
29-31). X. Sobre la necesidad de ejercitar el dominio de sí mismo (vv. 32, 33).
1 Las palabras de Agur hijo Yaqué, el de Masá; el discurso del hombre para Itiel,
para Itiel y Ucal:
2 Yo soy bruto, soy menos que un hombre; no tengo sentido común.
3 No he aprendido sabiduría, ni poseo conocimiento del Santísimo.
4 ¿Quién ha subido al cielo y ha bajado? ¿Quién ha recogido los vientos en el
hueco de su mano? ¿Quién ha envuelto las aguas en su manto? ¿Quién ha
establecido todas las extremidades de la tierra? ¿Cuál es su nombre y el nombre
de su hijo, si lo sabes?
5 Toda palabra de Di-s es pura, un escudo para los que en él se refugian.
6 No añadas a sus palabras, no vaya a ser que él te acuse y resultes ser un
mentiroso.
✡ Comentario (Versículos 1-6)
Agur significa 'colector,', pero de ahí no se puede sacar ninguna conclusión para
identificarle. Se nombra a Itiel y a Ucal como a dos de sus alumnos. Según cierto rabino, se
duplica el nombre de Itiel para 'mostrar una estima superior a la de Ucal'. Tres son las cosas
que aquí se propone Agur:
1. Humillarse a sí mismo. Antes de hacer profesión de su fe, hace confesión de su
ignorancia y, en general, de la debilidad de la pura razón humana cuando no es
iluminada y gobernada por la fe. Cualquiera sea la opinión que los demás tengan de
nosotros, debemos tener modesta (realista; comp. Ro. 12:3) opinión de nosotros
mismos. Agur habla de sí mismo como de quien necesita una revelación que le dirija
por los caminos de la verdad y la sabiduría. VI hombre natural, es decir, el que se guía
por la luz de su naturaleza corrompida, sin haber nacido de nuevo, no capta las cosas
que son del Espíritu de Di-s (1 Co. 2:14).
222
2. Ensalzar a Di-s e, implícitamente, al Mesías, pues todas las preguntas que expone en el
v. 4 tienen por objeto mostrar que, para tener el conocimiento del Santo (v. 3b), haría
falta subir al Cielo (comp. con Jn. 3:13; Ef. 4:8). El Mesías bajó del Cielo, volvió a
subir y volverá a bajar por segunda vez. Las preguntas de este v. esperan, por supuesto,
una contestación negativa, y se parecen a las que Di-s hace a Job en los caps. 38 y 39
del libro de Job. La última pregunta del versículo encierra cierto sarcasmo, como
diciendo: Si conoces bien el nombre del que hizo todas estas cosas, quizá sabrás
también el nombre de sus familiares. 3. Asegurarnos de la verdad de la palabra de Di-s y recomendárnosla (vv. 5, 6). Los
alumnos de Agur esperaban ser instruidos por él en las cosas de Di-s. «¡Ay!», viene a
decir él, «yo no me siento competente para instruirlos en eso; id a la palabra de Di-s,
porque toda palabra de Di-s es pura» (lit. probada, acendrada); «acrisolada es la
palabra de », leemos en Sal. 18:30, de donde Agur parece citar. Por eso, no se le
puede añadir, quitar ni alterar (v. 6), pues dejaría de ser absolutamente fidedigna. En su
persona y en su palabra, Di-s es escudo, segura protección para todos los que en él se
refugian.
7 Dos cosas te pido; no me las niegues antes de morir:
8 mantén las mentiras y las palabras falsas lejos de mí; no me des pobreza ni
riquezas, pero provéeme el pan cotidiano,
9 no vaya a ser que, al estar satisfecho, reniegue, diciendo: ―¿Quién es ?‖, o
que, al quedar empobrecido, me ponga a robar y profane el nombre de mi Di-s.
✡ Comentario (Versículos 7-9)
Después de la confesión y del credo de Agur, ahora viene su letanía:
1. El prefacio a su oración: Dos cosas te pido; no me las niegues antes que muera (v.
7). Antes de ponemos a orar, bueno es considerar lo que necesitamos, y qué cosas son
las que le tenemos que pedir a Di-s. 2. La oración. Las dos cosas que le pide a Di-s son: (A) Gracia para su alma: Aparta de
mí falsedad (lit. vanidad) y mentira. Para vivir con rectitud, es menester amar la verdad
y la integridad, sin dejarse engañar por las vanidades de la vida. (B) Alimento
conveniente para su cuerpo: No me des pobreza ni riquezas; concédeme
mi (diaria) ración de pan (comp. con Mt. 6:11; 1 Ti. 6:8). Ruega contra los dos
extremos de la abundancia y de la miseria (v. 8b) y presenta (v. 9) buenas razones para
ello: No sea que me sacie y te niegue, es decir, me olvide de que dependo de ti en todo.
La prosperidad da paso al orgullo y al olvido de Di-s, como si ya no se necesitase de
223
él. O que siendo pobre (mejor, empobreciéndome, como en 20:13), hurte. La pobreza
extrema tienta a la deshonestidad y a profanar el nombre de Di-s (Ex. 20:7), ya sea
jurando en falso o quejándose de la providencia de Di-s.
10 No informes sobre un esclavo a su amo, no vaya a ser que te maldiga e incurras
en culpa.
11 Hay una clase de hombres que traen maldición sobre sus padres y no traen
bendición sobre sus madres,
12 una clase que se cree pura, aunque no está lavada de su suciedad;
13 una clase de porte muy arrogante, muy altanero;
14 una clase cuyos dientes son espadas, cuyas mandíbulas son cuchillos, listos a
devorar a los pobres del país, a los necesitados entre los hombres.
✡ Comentario (Versículos 10-14)
1. Amonestación contra el pecado de perjudicar al criado ajeno, acusándole ante su amo,
acto especialmente reprensible cuando la víctima es un esclavo, que no tiene quien le
respalde y no le creerán cuando niegue la acusación. Este pecado no queda sin castigo
(v. 10). 2. Una relación de algunas clases de personas especialmente abominables: (A) Jóvenes
rebeldes e ingratos que no quieren soportar el yugo de la obediencia y maldicen e
insultan a su padres (v. 11). (B) Hipócritas presuntuosos (v. 12), que se creen limpios
cuando están llenos de inmundicia por dentro (comp. 16:2; Le. 18:11). (C) Orgullosos
altivos (v. 13). Los párpados levantados en alto significan el desprecio con que miran a
sus semejantes (parecido a la frase 'mirar por encima del hombro'). (D) Codiciosos
insaciables, de 'dientes grandes' (lit. El mismo vocablo hebreo de Jl. 1:6), como bestias
de presa, que abusan de su poder para explotar sin compasión a los desvalidos.
15 La sanguijuela tiene dos hijas: ―Dame‖ y ―Dame‖. Hay tres cosas que son
insaciables; porque nunca dicen: ―Basta‖:
16 La Fosa, un vientre estéril, la tierra que no consigue suficiente agua, y el fuego
que nunca dice: ―Basta‖.
17 Los ojos del que se burla de un padre y desdeña el honor que se le debe a una
madre —los cuervos del arroyo los arrancarán, los aguiluchos los devorarán.
✡ Comentario (Versículos 15-17)
224
1. Aunque Agur menciona cuatro cosas que no se sacian, en realidad son cinco, pues
implícitamente dice lo mismo de la sanguijuela (v. 15), cuyas dos hijas, según Cohén,
son las dos aberturas por las que la sanguijuela chupa la sangre. En el original
hallamos: «... dos hijas: Dame, dame», por lo que puede entenderse de dos maneras:
(a) como una exigencia, según lo interpretan la mayoría de las versiones; (b) como los
nombres de las dos hijas; sus dos nombres iguales denotan idéntica disposición. Cuatro
veces en este capítulo, a tres cosas se añade una cuarta (comp. con Am. 1 y 2, donde
ocho veces se añade a tres pecados un cuarto), lo que tiene el significado de 'colmar la
medida'. 2. Las cuatro cosas restantes aquí (v. 16) son: (A) El sepulcro (hebr. Sheol, morada de las
'sombras'), que se va tragando a todos los que nacen, sin devolver a ninguno, excepto al
Soberano. (B) La matriz estéril, en el sentido de que no se sacia el deseo de la mujer de
tener hijos, llegando a preferir la muerte a la esterilidad (V. Gn. 30:1) (O La
tierra sedienta de agua, puesto que el suelo depende del agua para ser fértil; esto tiene
especial significado en países donde el calor aprieta, como en Palestina. (D) El
fuego que codiciosamente se apodera de todo objeto combustible. 3. Añade una terrible imprecación contra los hijos que menosprecian a sus padres (v. 17).
Se menciona al ojo por ser como la ventana por la que se muestran los sentimientos
interiores de la persona. A estos hijos que se mofan de sus padres cuando éstos les
reprenden, Agur les desea que los cuelguen tras muerte violenta (V. Dt. 21:18-23). Los
cadáveres de los malhechores no habían de estar colgados durante toda la noche, pero
antes de que se hiciese de noche, los cuervos les sacarían los ojos y los hijos del
buitre (lit.) devorarían el cadáver.
18 Tres cosas son demasiado para mí; cuatro no puedo escrutar:
19 Cómo hace un águila su camino sobre el cielo; cómo hace una serpiente su
camino sobre una roca; como hace un barco su camino en alta mar; cómo hace
un hombre su camino con una doncella.
20 Así es el camino de una adúltera: Come, se limpia la boca, y dice: ―No he hecho
nada malo‖.
21 La tierra tiembla por tres cosas, por cuatro que no puedo soportar:
22 Un esclavo que se hace rey; un canalla harto de comida;
23 una mujer detestable que se casa; una esclava que suplanta a su ama.
✡ Comentario (Versículos 18-23)
1. Un relato de cuatro cosas que son demasiado maravillosas para ser comprendidas;
mejor dicho, no se pueden saber porque no dejan rastro visible de su acción: (A) El
225
rumbo y la rapidez del águila (aun cuando el vocablo es el mismo del v. 17, donde
significa 'buitre'). (B) Sobre la arena se puede descubrir el rastro de la culebra, pero no
si se ha deslizado sobre una peña. (C) La nave en el mar deja, por un momento, una
estela de espuma que pronto desaparece. (D) El rastro del hombre en una doncella
suele entenderse comparándolo con el contexto del v. 20. La interpretación rabínica
difiere algún tanto en cuanto a (A), (B) y (D): Resulta misterioso el que un ave tan
pesada como el buitre vuele por largo tiempo sin caerse, el que una serpiente pueda
moverse rápidamente sin pies, y también es un gran misterio la procreación. 2. El v. 20 tiene cierta semejanza con la cuarta de las cosas ocultas del v. 19. Ambas
encierran una especial iniquidad: El hombre que usa de todas sus malas artes para
seducir y violar a una doncella es tan abominable como la adúltera que emplea todos
los medios posibles para que su pecado permanezca oculto a los ojos de los
demás. Come del fruto prohibido y se limpia la boca. Con todo descaro, se opone
incluso a su propia conciencia, diciendo: No he hecho nada malo. Así es como grandes
multitudes arruinan su alma llamando bien al mal y acallando las convicciones con el
intento de justificarse cada uno a sí mismo. 3. Un relato de cuatro cosas que resultan intolerables, cuatro clases de personas que
perjudican de modo especial: (A) El esclavo que llega a reinar (comp. con 19:10), caso
que no era raro en la antigüedad (V. 1 R. 16:9 y ss.), pues suele ser la persona más
insolente e imperiosa. (B) El necio que se sacia de pan, que llega a hacerse rico (comp.
el v. 9 en su primera parte). (C) La mujer aborrecida (lit.) no es la soltera que ha tenido
que esperar mucho tiempo a que alguien se enamorase de ella, sino la esposa de un
bígamo que la tiene en menor estima que a otra, como fue el caso de Jacob con Lea
(Gn. 29:31); cuando la desdeñada recupera el afecto de su marido, resulta desdeñosa.
Tanto Lea como Raquel mostraron su recíproca rivalidad en los nombres que les
ponían a sus hijos. (D) La criada que ha conseguido de su señora que la hiciese
heredera de toda su hacienda se vuelve imperiosa, intolerable y hasta maliciosa, pues
piensa constantemente que la dueña le escatima algo. Todos aquellos a quienes la
Providencia ha concedido o permitido prosperar desde bajos comienzos hasta los más
altos puestos, deben velar con diligencia contra el orgullo y la altivez.
24 Cuatro criaturas hay entre las más pequeñas de la tierra, sin embargo son las más
sabias de los sabios:
25 Las hormigas no tienen poder, sin embargo se preparan su alimento en el
verano;
26 el tejón no tiene fuerza, sin embargo hace su casa en la roca;
27 las langostas no tienen rey, sin embargo marchan todas en formación;
226
28 Uno puede coger al lagarto con las manos, sin embargo se encuentra en palacios
reales.
✡ Comentario (Versículos 24-28)
1. Después de haber enumerado cuatro cosas que parecen grandes y, sin embargo, son
despreciables, pasa Agur a enumerar cuatro cosas que son pequeñas y, sin embargo,
admirables, grandes en miniatura. Estas cuatro cosas nos enseñan: (A) A no admirar el
volumen, la belleza o la fuerza, sino a juzgar a los hombres por su sabiduría, rectitud y
laboriosidad. (B) A admirar el poder y la sabiduría del Creador en los animalitos más
viles e insignificantes; en una hormiga, lo mismo que en un elefante. (C) A
reprochamos a nosotros mismos por no actuar en favor de nuestros verdaderos
intereses con el mismo esfuerzo y la misma tenacidad que esos animalitos ponen para
lo que les conviene. (D) A no despreciar las cosas pequeñas de este mundo, pues
dentro de un cuerpo pequeño puede habitar extraordinaria sabiduría, ya sea por
instinto, como en los animalitos, o por gracia, como en las personas. 2. Las cuatro cosas que, en este apartado, especifica Agur son: (A) Las hormigas, tan
pequeñas y, al mismo tiempo, tan fuertes, hábiles, laboriosas y organizadas (comp. con
6:7, 8). Sin fuerza (lit. no fuerte)se las llama por comparación con otros animales, pero
no es porque no tengan más que suficiente fuerza en comparación con su propio
tamaño. (B) Los damanes, de tamaño muy inferior al de los conejos, y muy tímidos,
pero que muestran un instinto extraordinario en el modo de construir sus nidos en las
hendiduras de las rocas. (C) Las langostas que carecen de rey o reina, de la que no
carecen las abejas y, sin embargo, van en bandadas, como en regimientos (comp. con
JI. 2:2 y ss.), llegando a alcanzar tal número que llegan a oscurecer el sol y devorar, en
pocas horas, todo el verde de una provincia entera. (D) La araña o la lagartija, pues el
vocablo hebreo puede significar ambas cosas; que se agarra con las manos (Lit.), es
decir, se le puede agarrar, y hasta aplastar, con la mano (ésta es mejor versión que la
de `se sostiene con sus patas), pero no se asusta ante la magnificencia de un suntuoso
palacio; habita en cualquier edificio. Si se trata de la araña, es de admirar la destreza, la
exactitud y el ingenio que muestra al elaborar su tela.
29 Hay tres que tienen un paso hermoso, cuatro que caminan bien:
30 El león es el más poderoso entre las bestias, y no huye ante nadie;
31 el galgo, el chivo, el rey a quien nadie se atreve resistir.
32 Si has sido escandalosamente arrogante, si has sido un maquinador, entonces
tápate la boca con la mano.
227
33 Como la leche bajo presión produce mantequilla, y la nariz bajo presión produce
sangre, así la paciencia bajo presión produce contienda.
✡ Comentario (Versículos 29-33)
1. Enumeración de cuatro cosas que son majestuosas en su andar: (A) El león, rey de los
animales, llamado aquí el más fuerte entre las bestias, que no altera su, paso ni su
marcha por miedo a nadie que pueda hacerle frente. (B) El original dice (no se puede
asegurar de cierto): El ceñido de lomos. Las versiones modernas identifican a este
segundo animal, no con el caballo, sino con el gallo que se contonea delante de las
gallinas (M. Henry, siguiendo a la A.V. inglesa, lo traduce por galgo o lebrel; en
inglés, greyhound). (C) El macho cabrío que marcha al frente del rebaño con su barba
y con la altiva mirada con que recibe a cualquier desconocido. (D) El rey cuando
marcha al frente de su ejército. Del león, hemos de aprender a no asustamos ni
arredramos ante las dificultades; del gallo, dignidad y presteza; del macho cabrío, a
velar por los que tengamos a nuestro cargo; y del rey, a tener nuestros hijos en
sumisión con seriedad y afecto; y de todos ellos, a caminar con dignidad. 2. Un aviso a dominar nuestro genio en todo tiempo y bajo cualquier provocación (vv. 32,
33). Hemos de humillamos siempre que se nos acuse justamente de alguna falta; en
lugar de insistir en nuestra inocencia o enaltecer nuestra posición, mano a la boca
(Lit.). Si hemos albergado el pensamiento de hacer algún mal, arrepintámonos y no
dejemos que lo malamente pensado sea expresado al exterior, pues eso demuestra pleno
consentimiento en el mal. Provocando la ira con insinuaciones malévolas se causa
contienda, de la misma manera que la violenta agitación de la crema de la leche
produce cuajada, esto es, leche cortada, y el sonarse demasiado fuerte las narices
puede provocar hemorragia. Los ánimos se van calentando más y más cuando no se
dominan las pasiones; una palabra airada engendra otra, hasta que se acaba en una
enemistad irreconciliable.
✡ PROVERBIOS 31 ✡
228
Este capítulo fue añadido a los proverbios de Salomón; según algunos porque Lemuel es
otro nombre de Salomón; otros porque, aun viniendo de otra pluma, es de naturaleza
semejante. En todo caso, es un capítulo escrito bajo la inspiración de Di-s. I. Exhortación a
Lemuel, joven rey, para que evite ciertos pecados a que será tentado y cumpla con las
obligaciones a las que ha sido llamado por su alto cargo (vv. 1-9). II. Descripción de la
mujer hacendosa, 'la esposa ideal, dice J.J. Serrano, ejemplo práctico de la verdadera
sabiduría aplicada a la mujer, que cierra con broche de oro dándole perfecto complemento,
las instrucciones precedentes, dedicadas todas al varón'. Lo más probable es que esta
sección forme un grupo totalmente aparte, siendo obra de algún escriba verdaderamente
docto; de seguro, no pertenece a las exhortaciones de la madre de Lemuel (vv. 10-31).
1 Las palabras de Lemuel, rey de Masá, con las que lo amonestó su madre:
2 ¡No, hijo mío! ¡No, hijo de mis entrañas! ¡No, hijo de mis votos!
3 No les des tu fuerza a las mujeres, tu vigor a las que destruyen reyes.
4 El vino no es para los reyes, Lemuel; no es para los reyes el beber, ni las bebidas
fuertes para los príncipes,
5 no vaya a ser que bebiendo se olviden de lo que se ha ordenado, y violen los
derechos de los pobres.
6 Denle la bebida fuerte al que está en desgracia y el vino al amargado.
7 Que beban y se olviden de su pobreza, y se quiten los problemas de la mente.
8 Habla por el mudo, por los derechos de todos los desafortunados.
9 Habla, juzga rectamente, defiende al pobre y al necesitado. [Álef]
✡ Comentario (Versículos 1-9)
Hay quienes opinan que Lemuel es otro nombre de Salomón y que se le llama así por estar
dedicado "hacia (hebreo, lemo) Di-s (hebreo, El)'. En cambio, J.J. Serrano sostiene que su
verdadero nombre es Muel, siendo le la preposición de dativo, como lo muestra el
paralelismo con la 2da parte del versículo; en este caso, ha de traducirse «Palabras a Muel
rey de Massá; el oráculo (lit. carga) con que le instruyó (o corrigió) su madre». Sea como
sea, tenemos aquí 'la discreta solicitud maternal de la madre de un joven rey, a quien
advierte de los peligros que le acechan' (J. J. Serrano). Es deber de los padres y de las
madres (nótese el sustantivo de la misma raíz en 1:8, aplicado al padre) instruir a los hijos
en el bien, a fin de que lo practiquen, y en el mal, a fin de que lo eviten; cuando son muy
229
jóvenes, están más tiempo bajo el ojo de la' madre, y ella tiene entonces la oportunidad de
moldear el carácter de los hijos.
1. La apelación que hace esta madre a su hijo, en razón de la especial relación que tiene
con él (v. 2). Le llama `hijo mío', `hijo de mi vientre' e hijo de mis deseos' (lit. votos.
comp. con 1 S. 1:11). Ese «¿Qué?», tres veces repetido, parece ser una abreviatura
de «¿Qué habré de decirte?». Como diciendo: 'Hijo mío, tú eres algo de mi ser, algo
muy mío, tengo para ti afecto, autoridad, y buenos deseos. Sé prudente y bueno, y me
daré por bien pagada de haberte dado a luz'. 2. El aviso que le da contra dos pecados especialmente destructores: la lujuria y la
ebriedad (vv. 3 y ss.). Si para todos resultan fatales dichos vicios, lo son de modo
especial para los reyes, por estar más expuestos a ellos y por el deplorable efecto que
causan en la sociedad. (A) No agotes tus fuerzas físicas en el harén (v. 3), viene a
decirle, quedando así mal equipado para el desempeño de las importantes funciones
que un rey ha de ejercer. El verbo destruir' (v. 3b) tiene probablemente, un alcance más
largo que el de minar la salud del joven príncipe. Según Cohen, indica una conducta
que ocasiona revueltas en la población y conduce a la destrucción de la dinastía. (B) El
otro vicio es la embriaguez. Como siempre en la Biblia, no se recrimina el uso del vino,
sino su abuso. Más que a ninguno de los súbditos, al rey le es necesario no abusar del
vino ni del licor fuerte (v. 4), no sólo porque es una vergüenza para la majestad regia,
sino, especialmente, porque puede trastornarle el juicio e impedirle la discreción y la
imparcialidad que necesita en el gobierno de la nación y en la administración de la
justicia. También nosotros somos 'regio sacerdocio' (1 P. 2:9) y, por tanto, hemos de
abstenemos de los vicios que aquí se critican. Es muy triste la queja que se hace de los
sacerdotes y de los profetas (Is. 28:7) de que desvarían por el licor, están trastornados
por el vino. 3. El consejo que le da sobre el modo de comportarse con los demás. (A) En cuanto a la
bebida, viene a decirle: «Tienes vino y licores a tu disposición; en vez de hacerte daño a
ti mismo con ellos, haz bien a otros con ellos; que los usen quienes los necesitan, ya sea
por debilidad física (comp. 1 Ti. 5:23) o por depresión de ánimo (vv. 6, 7), pues del
vino se dice que alegra el corazón del hombre (Sal. 104:15). (B) Ha de hacer el bien
por medio de la justa administración, del amparo a los desvalidos, de la imparcialidad
en los juicios (vv. 8, 9). El mudo es aquí, en sentido figurado, el que, por alguna razón,
es incapaz de apelar o de defender su propia causa.
10 ¡Qué difícil es hallar una esposa capaz! Su valor supera por mucho al de los
rubíes. [Bet]
11 Su esposo pone su confianza en ella, y no le falta ningún bien. [Guímel]
12 Ella es buena con él, nunca mala, todos los días de su vida. [Dálet]
230
13 Busca lana y lino, y le pone la mano a la rueca. [He]
14 Es como una flota de mercaderes, que trae su comida de lejos. [Waw]
15 Se levanta cuando es aún de noche, y suple provisiones para su familia, la
comida diaria de sus criadas. [Zayin]
16 Pone su mente en un terreno y lo adquiere; planta una viña con sus propias
labores. [Jet]
17 Se viste de fortaleza, y realiza sus tareas con vigor. [Tet]
18 Ve que su negocio prospera; su lámpara nunca se apaga de noche. [Yod]
19 Dedica sus manos a tejer; sus dedos a hilar. [Kaf]
20 Da generosamente a los pobres; sus manos se extienden a los necesitados.
[Lámed]
21 No se preocupa por su familia a causa de la nieve, porque toda su familia viste
de escarlata. [Mem]
22 Se hace sábanas; su ropa es de lino y violeta. [Nun]
23 Su esposo es prominente en las puertas, cuando se sienta entre los ancianos del
país. [Sámej]
24 Hace ropa y la vende, y ofrece una guirnalda al mercader. [Áyin]
25 Se viste de fortaleza y esplendor; mira al futuro con alegría. [Pe]
26 Su boca está llena de sabiduría, su lengua de enseñanza bondadosa. [Tsade]
27 Supervisa las actividades de su familia y nunca come el pan de la pereza. [Qof]
28 Sus hijos la declaran feliz; su esposo la alaba: [Resh]
29 ―Muchas mujeres lo han hecho bien, pero tú las sobrepasas a todas‖. [Shin]
30 La gracia es engañosa, la belleza es ilusoria; es por su respeto a que debe
alabarse a una mujer. [Tau]
31 Elógienla por el fruto de sus manos, y que sus obras la alaben en las puertas.
✡ Comentario (Versículos 10-31)
Esta descripción de la mujer hacendosa tiene por objeto mostrar las cualidades de una buena
esposa, para estímulo de las mujeres mismas y para indicar a los hombres la clase de mujer
que han de buscar para esposa. La porción consta de 22 versículos, cada uno de los cuales
comienza por una letra distinta del alfabeto hebreo en sucesión ordenada; se trata, pues de
un poema acróstico. Podemos hallar en el N.T. dos como compendios de lo que aquí se dice
(1 Ti. 2:9, 10 y 1 P. 3:1-6).
I. Comienza por una pregunta: «Mujer hacendosa (éste es el sentido de la expresión hebrea,
lo mismo aquí que en Rut 3:11) ¿quién la hallará? Como diciendo: «Una mujer como ésta
231
es muy difícil de hallar, pero dichoso es el que la halle, pues es de valor inestimable».
Muchas son las virtudes que se incluyen en la expresión hebrea éset jayil con que se designa
a esta mujer: prudencia, fidelidad, laboriosidad, generosidad, iniciativa, como se verá al
analizar esta porción. Cuanto más escasas son estas mujeres, tanto más son de estimar (v.
10b). II. Una descripción detallada de sus excelentes cualidades:
1. Es muy de fiar, muy leal en todo, lo que le merece la estima y el afecto de su marido. Se
comporta de tal manera que él puede depositar en ella toda su confianza. Confía en su
castidad, y confía igualmente en la prudencia y discreción con que lleva ella todos los
asuntos domésticos. Cuando él se marcha de viaje para servir los intereses de su pueblo,
sabe que todo marchará bien en casa y no carecerá de ganancias (v.11). Ella, por su
parte, justifica plenamente la confianza que su marido ha puesto en ella (v. 12), tratando
a su marido con el amor y el respeto que las santas mujeres muestran hacia sus maridos
(1 P. 3:5, 6) y prestándole todas las atenciones de una buena esposa todos los días de su
vida; no conforme al humor del momento, sino siempre. Su marido es respetado y
honrado, por tener tan buena esposa, en las puertas (v. 23), es decir, en el lugar en que
los ancianos de la ciudad se sentaban para juzgar los asuntos locales (comp. con Rut
4:1). Es conocido especialmente por las buenas ropas que lleva, según insinúa el
contexto anterior y posterior. 2. Es una mujer que no ahorra fatigas para cumplir con sus deberes de ama de casa, y lo
hace de buena gana: no come el pan de ociosidad (v. 27b. Lit.). Emplea bien el tiempo,
de forma que no se pierda ni un minuto. Cuando se apaga la luz del día, ella enciende su
lámpara de noche para los quehaceres de puertas adentro (v. 18). Duerme únicamente
lo indispensable y se levanta muy temprano, cuando todavía es de noche (v. 15), a fin
de preparar el desayuno a la familia, incluyendo a los criados y criadas, y asigna a cada
criada la labor que debe hacer en el día. No es de las que gustan pasarla velada jugando
a las cartas o asistiendo a un baile de sociedad. Busca lana y lino (v. 13), a fin de
conseguir lo mejor en calidad y precio y trabajarlo con sus propias manos (v. 19), no
sólo para las ropas de la familia (v. 21), sino también para socorrer a los menesterosos
(v. 20). No piensa que, con eso, rebaje su rango. El huso y la rueca se mencionan aquí
en honor de ella, mientras que los ornamentos de las hijas de Sión se mencionan en
Is.3:18 y ss. para el deshonor de ellas. Y no se ocupa sólo en estas labores que se
pueden llevar a cabo en el reposo del hogar y sentada en una silla, sino que se emplea
en otros trabajos que requieren todas sus fuerzas (v. 17). 3. Hace todo lo posible para que las finanzas domésticas- lleven buen curso. Como nave
de mercader (v. 14), se aprovisiona de todo lo necesario, de forma que ni hambre ni
carestía la tomen por sorpresa. Puesto que el marido está ocupado en los asuntos del
lugar (v. 23), ella se encarga de negocios que suelen estar en manos de hombres. Por
ejemplo, observa una finca y la compra (v. 16) y planta una viña del fruto de sus
manos, lo cual no significa que la plante con sus propias manos, sino que la adquiere
232
con el dinero que su prudente administración y su trabajo manual han acumulado.
No teme al frío (v. 21. Esto es lo que significa aquí el vocablo 'nieve'), pues los
miembros de su familia llevan trajes no sólo vistosos (v. 22b), sino también
debidamente forrados, seguramente con lana. Ella misma se hace los tapices (v. 22) o
más bien, colchas de cama (es el mismo vocablo hebreo de 7:16). Comercia también
con los mercaderes (v. 24) con las telas y fajas que ella misma fábrica. Como quien se
viste de ricas vestiduras, ella se viste (en sentido figurado) de fuerza y honor (v. 25),
esto es, de una posición económica fuerte y de la estima y el respeto que acompañan a
un rango social honestamente alcanzado. Bien puede sonreír ante el porvenir la que tan
estupendamente lo prepara en el presente. 4. Con la discreción y prudencia que la caracterizan, siempre abre su boca con sabiduría y
la instrucción bondadosa está en su lengua (v. 26). Nótese que el vocablo hebreo para
'instrucción' no es aquí musar (corrección), sino torat (¡ley, en sentido de enseñanza!
Comp. con 1:8b, donde también se aplica a la madre esta función). No es charlatana,
criticona ni áspera, sino que sus palabras están llenas de bondad y de sabiduría celestial,
incluso cuando sus manos están ocupadas en faenas de índole material. Su lengua habla
de lo que lleva bien metido en el corazón. 5. Lo que corona y completa las buenas cualidades de su carácter personal es que teme a
(v. 30), que es el valor primordial y que da su verdadero valor a todas las demás
virtudes. El temor de Di-s reinando en el corazón es la genuina belleza del alma;
presenta a la persona como disfrutando del favor de Di-s y es, por otra parte, de gran
precio a los ojos de Di-s. Es algo que perdurará por toda la eternidad, cuando la muerte
haya consumido la hermosura del cuerpo de corrupción. 'Así, dice Ryrie, el libro acaba
por donde empezó (1:7)'. III. La felicidad de esta mujer hacendosa y virtuosa:
1. Tiene en su, mente el consuelo y la satisfacción de quien cumple con su deber (v. 25b).
De este modo, está bien equipada para todos los problemas, todas las adversidades y
contrariedades que la vida le pueda traer a ella y a su familia. Esta es su mejor
vestidura, lo mismo para defensa que para decencia. Como trata con honor a todos, bien
puede sonreír ante el porvenir, se alegrará en la ancianidad de haber sido diligente en la
juventud. 2. Es una gran bendición para sus familiares (v. 28). Sus hijos, y también su marido se
levantan y la alaban. El 'levantarse' puede entenderse de dos maneras: (A) Al levantarse
de mañana y hallar todo bien preparado; (B) Como una muestra de respeto. El v.
29 expresa la alabanza del marido. 3. Los vv. 30, 31 expresan las reflexiones del poeta sobre la descripción que acaba de
hacer de la mujer hacendosa y la lección que desea imprimir en la mente del lector. Sin
despreciar la belleza exterior de la mujer, da a entender que es superficial y efímera; y
tras exponer (v. 30b) dónde radica la hermosura verdadera y duradera, exhorta
retóricamente a todos a dar a esa mujer todo el crédito que se merece. Incluso en las
233
puertas (v. 31), públicamente, debería reconocerse la enorme contribución que, con sus
actividades, aporta al bienestar de la comunidad.
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