C I N Q U E N A L E C T U R A D E L L E N G U A C A S T E L L A N A

EL SALÓN DE LA MODA DE MILÁN ACLAMA AL PÁJARO PU

La legendaria ave, nunca vista hasta la fecha, arrebata el trofeo a Carletta &

Cabbana y a Siham & Britninno en el desfile que cierra la exhibición de la Semana de la

Moda.

R.C.B. Milán

El máximo exponente de la moda a nivel mundial, el Salón de Milán, cerró sus puertas ayer

domingo con el tradicional y llamativo desfile final que, como viene siendo habitual en los

últimos años, la prestigiosa revista Vanity Hair ofreció a los asistentes al certamen, desfile que

fue retransmitido vía satélite a todos los rincones del mudo.

En la Scalla de Milán, el público, entusiasmado y ansioso por contemplar los diseños que

entraban en competición, emitía silbidos, gritos y hasta una especie de gorjeos incomprensibles.

Carletta & Cabbana se disputaba el primer puesto con la también archifamosa creadora de moda

Siham & Britninno.

Puntualmente, las modelos y los modelos empezaron a caminar con sutileza por la

pasarela enmoquetada de rojo, demostrando unas correctas aptitudes para dejar satisfechos y

ensimismados a los exigentes asistentes. Observadores de fama mundial, como el televisivo

Jorge Javier Ricárdez, tomaban buena nota de los vestidos y trajes que salían a concurso, para

luego poder criticarlos duramente en su programa Salsa Brava.

El estrepitoso aplauso que acompañaba a cada una de las salidas de las modelos se

combinaba con los flashes de las cámaras y las luces centelleantes de las pantallas de los

teléfonos móviles (artilugios que luchaban por conseguir la mejor foto). Ciertamente, el mundo de

la moda no podía reprochar nada a ninguna de las dos modistas: tanto Carletta como Siham

habían creado unos diseños espectaculares y sus ropas recordaban los frondosos tonos

verdes, amarillos y anaranjados de lugares remotos e islas muy lejanas. Así, Carletta centró su

colección en estampados propios de Polinesia y Siham, a su vez, había apostado por los vivos

colores de Hawai.

La única anécdota del concurso se produjo en el momento en que Oriol Schwartz, uno de

los modelos top ten en el ranking mundial, tropezó con una maceta situada en uno de los

laterales de la pasarela y, trastabillando, fue avanzando a trompicones hasta que finalmente

cayó de la tarima y fue a caer encima de Jorge Javier Ricárdez. El modelo, compungido, se

atusó el pelo, dibujó una sonrisa y, sujetándose los pantalones –se le habían caído durante el

aterrizaje-, subió nuevamente a la pasarela con todo el estilo que pudo. Desafortunadamente, el

público se rió de él. Schwartz desapareció airado a través del backstage y no volvió a aparecer.

La nota humorística (y a la vez auténticamente sorprendente) tuvo lugar en el último

momento, cuando ya el desfile tocaba a su fin. Cuando parecía que Carletta & Cabbana tenía ya

el primer premio en el bolsillo gracias a su diseño estrella, un vestido de volantes hecho de seda

y ribetes de oro, un último modelo apareció sobre la pasarela… Aunque parezca increíble, el ser

que desfiló ante la mirada atónita del público no era un humano… ¡Era una especie de pájaro!

Un bello ejemplar de ave, rarísima, hasta la fecha desconocida, se paseó con gracia y

estilo por delante de la concurrencia luciendo un bellísimo plumaje, una especie de collage muy

colorista formado por plumas de distintos pájaros: de loro, de cacatúa, de pelícano, de águila y

hasta de lechuza. Tan sublime fue la exhibición del ave que el jurado decidió concederle el

primer premio.

Carletta & Cabbana y Siham & Britnino quedaron estupefactas ante la decisión del jurado,

pero no tuvieron más opción que aplaudir la exhibición del ave.

Fuentes cercanas al pájaro nos han confirmado que se trata del pájaro Pu, un ave que por

primera vez da la cara, tras ser expulsada del bosque por sus iguales.

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