Autenticidad en la práctica de conservación de Canadá

8/8/2019 Autenticidad en la prctica de conservacin de Canad

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INTERAMERICAN SYMPOSIUMON AUTHENTICITYINTHE CONSERVATIONAND MANAGEMENTOF CULTURAL HERITAGE

SAN ANTONIO, TEXAS, USA MARCH, 1996

ICOMOS CANADA

Autenticidad en la prctica de conservacin de Canad

La ponencia a continuacin es una perspectiva compuesta sobre el tema de la

autenticidad en la conservacin en el Canad. Consta de contribuciones de muchos

miembros del ICOMOS Canada, algunas presentadas por invitacion, otras

simplemente las hemos "tomado prestadas." Entre los contribuyentes se hayan

Wayne Zelmer, Frank Korvemaker (elevadores de grano en Saskatchewan), Susan

Myer (la reconstruccin de Louisburg), Walter Jamieson, Fergus Maclaren (turismo),

Alain Lafrenire (arquitectura verncula y ciudad de Hull), Susan Bogey (paisajes

culturales), Christina Cameron (corredores de transporte), Gordon Bennett

(integridad conmemorativa), Michel Bonnette (Ciudad de Qubec y retauracion de la

Place Royale), Pierre la Rochelle ((Ile d'Orleans), Andrew Powter ( Iglesia de St

George en Halifax y la Biblioteca Parlamentaria), Dinu Bumbaru (Montral), Les Hurt

y Jack Brink (Head-Smashed-In-Buffalo Jump). Agradezco la contribucion sustancial

que cada uno ha hecho para esta ponencia, y lamento no haber podido usar todo el

material enviado. Anoto tambien que soy responsable de todas la interpretaciones,

uso y organizacion del material.

He citado al autor y la obra en todos los casos en que se us material publicado o

notas completas. Cuando solo me proporcionaron apuntes informales, lo he

expresado con mis propias palabras, dndole crdito al autor.

Herb Stovel

Presidente

ICOMOS Canada

Diciembre, 1995

UNITED STATES NATIONAL COMMITTEEOFTHE INTERNATIONAL COUNCILON MONUMENTSAND SITES

COMIT NATIONALDES ETATS UNISDU CONSEIL INTERNATIONALDES MONUMENTSETDES SITES


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Introduccion

Este ensayo explora como ha cambiado la percepcion de la

autenticidad (y por lo tanto, su aplicacion a la prctica de la

conservacion) en Canad durante las tres ltimas dcadas. El tema

se desarrolla sobre como se ha cuestionado el tema del tratamiento

de la autenticidad en diversos sitios de importancia patrimonial. El

enfoque sobre el tema tiene que limitarse a causa del nmero de

sitios que examinamos y la propia subjectividad y experiencia del

autor.

La autenticidad es la medida de la verdad esencial de los valores o

mensajes que comunica el patrimonio cultural segun lo perciben

aquellos que entran en contacto con el sitio. Como tal, los cambios

en la percepcion de la autenticidad reflejan los diversos enfoquesentre los profesionales y el pblico que define el mensaje y su valor

patrimonial relativo.

Si seguimos la lnea del debate establecido en Bergen y Nara, la

autenticidad puede tambin ser entendida a travs de los atributos

del patrimonio cultural, ya que los mensajes o valores como tales,

no son palpables: no se pueden tocar ni ver ni sentir. El anlisis de

la autenticidad para cualquier sitio exige primeramente la

identificacin de los atributos que mantinenen a esos valores, y por

segundo, un estimado del grado de veracidad o genuinidad que se

les atribuye a ellos.




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La autenticidad ha sido una meta constante a travs de todo el

desarrollo de la prctica de la conservacion en Canad durante los

ltimos 25 aos. Sin embargo, los objetivos que se refugian detras

de esa palabra son tan variados como los valores que se ha buscado

proteger y preservar a traves de la conservacin.

Canada, como todo estado en el Nuevo Mundo, ilustra el esfuerzo de

grupos culturales trasplantados, principalemente de Europa, por

subyugar las tierras, en su mayora salvages, y los pueblos nativos

que encontraron a su paso por varios siglos. Tambien, como en

todos nuestros paises, podemos trazar la labor de conservar el

patrimonio cultural por mas de un siglo, pero la mayor parte del

desarrolllo terico, la prctica y la capacidad de la conservacin ha

tenido lugar en los ltimos treinta aos -- la edad misma del

ICOMOS. Una investigacin sobre los cambios en la percepcin de

los valores patrimoniales en Canad y los cambios pertinentes encuanto a la autenticidad nos muestra, por una parte, las importantes

corrientes evolutivas que se comparten en las Amricas y, por otra,

las caractersitcas especficas que marcan el enfoque canadiense

hacia la conservacion.

La autenticidad y la precision: las reconstrucciones y restauraciones

tempranas

La "autenticidad fue definitivamente una piedra clave en mis

primeros encuentros en los aos 70 con actividades serias de la

conservacion. Habiendo pasado dos aos estudiando conservacion

en Edinboro (bajo Colin McWilliam de la Universidad Heriot-Watt,

1976-77), me habia imbuido de lo que Michael Petzet de ICOMOS




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Alemania llama "fetichismo material" -- una reverencia ante el

objeto como el nico transmisor legtimo del valor patrimonial.

Pronto descubr entre mis colegas canadienses un enfoque

diferente. Cuando decian "autntico, queran decir "preciso." Su

mundo era uno de reconstrucciones pedantes, de restauraciones

agudamente correctas en su re-creacion de otra poca. Ponan sus

abilidades de investigacion super-desarrolladas y solidamente

fundamentadas al servicio de la historia, la arqueologia y la

arqutectura para las formas perdidas que consideraban ser de valor

para los canadienses. Pero cules eran esos valores?

En 1967, Canad celebr su centenario, y muchas de las

celebraciones concentraron parte considerable de su atencin en la

naturaleza de la identidad del canadiense. A diferencia de hoy, en

que la identidad nos parece demasiado compleja para tratar de

darle una definicion abarcante para el beneficio de todos, elgobierno de entonces desarroll un sentido de identidad nacional

mediante la afirmacin de ciertos temas dominntes, tanto histricos

como naturales, con los que todos estaban de acuerdo en que

demostraban la naturaleza esencial del pais: La "Trilogia Ferroviaria

Canadiense" de Gordon Lightfoot fue el resonante himno en honor a

uno de los actos que de mayor manera definieron las historia del

Canada: la construccion del tren transcontinental. "Mon pays - c'est

l'hiver" de Gilles Vigneault apunt mas directamente hacia las

condiciones de la naturaleza que fomentaron las ataduras de los

quebecois hacia el norte.




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En aquella poca, Parks Canada, actuando a nombre del gobierno

de Canad y continuando una tradicion de ver la historia canadiense

a travs de los anales militares, se enfoc sobre un hecho clave de

las guerras Francobritnicas: la destruccion por los ingleses de un

puerto francs del siglo XVIII en Nova Escocia, la Fortaleza de

Louisburg. A principio de los 60, Parks Canada lanz el mas

extenso programa de reconstrucin en la historia del pais con el

objetivo de recapturar ese temprano captulo de la historia francesa.

Aunque la motivacion principal fue de fortalecer la dbil economa

del lugar, Susann Myers apunta que la intencin detras de la

reconstruccin fue de conmemorar un sitio con un profundo

significado en la epopeya hacia un imperio en Norteamrica y

tambien uno de los principales centros pesqueros y comerciales de

su poca en este continente.

La reconstruccion del 25 % del poblado original y la mitad de susfortificaciones afinaron las tcnicas de la primera generacion de

profesionales de la conservacion del Canad (la Division de Servicios

de Conservacion de Parks Canada), que se creo durante el boom

economico que ocurri despues del Centenario.

Pero la reconstruccin de Louisburg foment algo mas que

abilidades tcnicas; foment una nueva actitud que sugera que la

bsqueda diligente de la verdad en los documentos de archivos y a

traves de la arqueologia haran posible la reconstruccion de esa

verdad que se ha perdido. A la autentitcidad se le entenda como la

medida de la verdad en la reconstruccion y se viritieron esfuerzos

sin precentes para obtener esa meta. Y sin embargo, durante la




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reconstruccion de Louisburg, la autenticidad no fue un tema critico,

ya que la reconstruccion no ofreca muchas opciones en cuanto a los

valores patrimoniales que competan:

A pesar de ubicarse en su sitio original. la reconstruccion no

destruy mas que el 5% de los restos arqueolgicos. Todo el

material original de importancia (los muros, pavimentos, y las

defensas en tierra) se mantuvieron en su sitio siempre que fuera

posible; los yaciminetos sin excavar que aun permanencen son un

recurso arqueolgico incalculable.

El carcter esencial del sitio (descrito por Susann Myers como "un

lugar cenagoso envuelto en neblinas, apresado por el hielo al borde

mismo del Nuevo Mundo) permanece relativamente intacto, como lo

puede atestiguar cualquiera que lo haya caminado en una maana

de niebla.

A su vez, en los aos siguientes, surgieron una serie de preguntas

ligadas a la autenticidad:

por el lado positivo, la rica documentacion archivstica y

arqueologica son hoy reconocidas como un hecho significativo que

contribuye a la autenticidad del sitio

algo mas problematico es el grado al cual las limitaciones prcticas

durante la reconstruccion diluyeron la precision que hubiera sido

posible en base a las investigaciones previas a la reconstruccion.

Hoy que la valorizacion de Louisburg como patrimonio canadiense

se basa en parte en como refleja las practicas de la conservacion en

los 60 y 70, el deseo de corregir los "errores" de esa epoca crean un




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dilema mayor en cuanto a la autenticidad. yace la autenticidad, en

mejorar la fidelidad en cuanto al original o en la conservacion de los

errores caracteristicos de uno reconstruccion que ya de por si ha

adquirido valor?

Igualmente, dado el objetico museologico de presentar la vida del

Siglo XVIII dentro del marco de la reconstruccion, las tempranas

decisiones de "limpiar" la historia (por ejemplo, evitando referencias

a la explotacion de la poblacion nativa) le han creado dilemas a los

museologos (interpretes) contemporaneos: se admiten los prejuicios

del pasado o se mantiene continuidad con las versiones de la

historia que se presentaron en eun pasado.

La preferencia de los que trabajan sobre el sitio hoy en dia es de

resolver esos dilemas enfocando el espiritu de la reconstruccion de

los 60 y 70, sugiriendo que la autenticidad aqui yace en la labor de

reflejar de manera honesta y verdadera la evolucion de losconocimientos sobre el sitio.

Un proyectos de mayor visibilidad y consecuencia y tambien mayor

controversia el la aun inconclusa restauracion de la Place Royale en

el Barrio Bajo de Qubec. El proyecto nacio en la estela de la

"Revolucion Tranquila" de Quebec a final de los 60, cuando la

poblacin quebecois quiso convertirse en "maitre chez-nous' dentro

de Canada. Se asoci a la provincia de Quebec con la ciudad de

Quebec con el fin de emprender una restauracin historica (period

restoration) que le mostrase a residentes y visitantes la manera en

que existi el dia antes de la batalla de los Llanos de Abraham en

1759, en que los invasores ingleses le arrebataron Quebec a los




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franceses. Aunque el concepto original no era tan ambicioso como

se ha convertido, era sin embargo un esfuerzo por articular una

identidad distintiva para los quebecois. El proyecto incluy el

devolver volumetras y fachadas al siglo XVIII, retirando los aadidos

en ladrillo encima de los frontones en piedra, y la demolicion de

fachadas "modernas." En algunos casos ello signific la

reconstruccin completa de estructuras en hormign armado que se

revistieron con materiales tradicionales. Aunque tanto los

anglocanadienses como los quebecois cuestionaron la sabiduria de

retirar toda evidencia posterior en un sector entero de la ciudad,

Michel Bonnette apunta que la preocupacion principal en cuanto a la

autenticidad ha sido quizas la atencion exclusiva hacia la

reintegracion de formas anteriores y no de las funciones y usos en

una ciudad historica viva.

En un coloquio celebrado en 1978, muchas de las decisionestomadas se pusieron en duda. Alentados por sus sueos de crear un

telon autenticamente historico como trasfondo para sus

aspiraciones polticas, los restauradores fueron criticados por

muchos ya que al borrar la historia del Post-Conflicto de la

dominacion inglesa, se borraba a la vez parte de la historia de sus

propios antepasados. Como resultado, se limito el alcance del

proyecto, inicindose una conservacion mas respetuosa de la

evolucion posterior. A la vez, surgio una consciencia en cuanto a la

importancia de los valores integrales de toda la ciudad historica y

una preocupacion por aunar al a conservacion al desarrollo urbano.

Se creo la Divison du Vieux Qubec para gestionar este enfoque




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integral hacia el desarrollo del centro historico. Sus 15 aos de labor

han reforzado la base economica de la ciudad, las condiciones de

habitabilidad y la calidad de la experiencia de los visitantes.

Ahora, el debate de la autenticidad converge sobre como terminar

el proyecto de la Place Royale. Dado el mal estado de las

construcciones candidatas, no es factible detener la obra para

"atestiguar" las condiciones "pre-proyecto." Entonces, debe la

estauracion dirigirse a lograr una harmonia interna en el sector? o

deberan los diseadores guiarse por el respeto hacia la totalidad de

la evolucin de cada edificio? Sea cual fuere la respuesta, y apesar

de los enfoques ya obsoletos en cuanto a investigacion, concepto y

ejecucion que tan criticados han sido, es importante reconocer que

la restauracion de la Place Royale es autntica - un documento

autntico de la voluntad de un pueblo de reclamar y manifestar su

propia identidad.La autenticidad en la prctica contempornea

Los dos ejemplos anteriormente citados fueron concebidos como

"sitios historicos" - lugares con un significado tan especial que

meritaron que se les abstrayese del desarrollo presente para que

sus mensajes pudieren ser claramente presentados al visitante. La

Fortaleza de Louisburg funciona oficialmente como un sitio historico

de Park Canada, mientras que la Place Royale, a pesar de formar

parte de una ciudad viva, tiene el caracter de estar congelada en el

tiempo tipico de los sitios historicos.




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Ambos sitios meritan atencion en cualquier estudio sobre la

autenticidad en el Canad (dado su papel de liderazgo como

modelos de conservacin y su enorme influencia didctica sobre dos

generaciones de profesionales). En los 25 aos transcurridos desde

su inicio, la conservacin ha llegado a ocupar un sitio prominente en

el campo de la planificacin general. Nuestra definicion de

patrimonio abarca amplios campos de expresiones tangibles e

intangibles de nuestro pasado. Ya no nos concentramos en los

monumentos aislados o en los sitios de excepcional valor, sino en

conjuntos integrales con los rasgos y patrones que aparecen en los

paisajes urbanos y rurales, mas el gran grupo de valores sociales y

econmicos que dichos paisajes representan. Nuestra labor de

conservacin ya rara vez se contrapone al desarrollo, si no que mas

bien se integra a el. El respeto hacia el patrimonio es un factor

dominante en la toma de decisiones a todo nivel: federal, provincial,

regional y municipal. Como consecuencia, el enfoque

contemporneo de la autenticidad requiere un anlisis mucho mas

complejo que el que domin en Louisburg o en la Place Royale o en

el sistema de sitios histricos en que floreci y que a su vez inspir.

La conservacin en el Canad de 1995-- excluyendo la de los sitios

histricos--trae a colacion un nmero de temas importantes en

tormo a la autenticidad. Qu papel juega la autenticidad en un

edificio histrico de gran significado que continua en uso? Como se

aplica el concepto de autenticidad a las estructuras daadas por

catstrofes naturales o humanas? Y qu pasa con la autenticidad

en asentamientos humanos historicos?




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Comencemos por estudiar a las edificaciones importantes aun con

uso activo.

El caso de la Biblioteca Parlamentaria del Canad es interesante.

Dada su ubicacin y su arquitectura neo-gtica victoriana, la

Biblioteca establece el caracter del Cerro del Parlamento en Ottawa

y es uno de los edificios mas importantes del Canada. A traves del

tiempo, han habido muchos cambios en sus necesidades

funcionales, producindose as ciclos de alteraciones sobre el tejido

historico, algunos mas respetuosos que otros. En la actualidad, las

necesidades funcionales reclaman cambios una vez mas, y algunos

plantean que esta sera una oportunidad ideal para deveolverle al

edificio su apariencia del 1876. Andrew Powter indica que el respeto

por la autenticidad en este caso ha guiado al grupo de diseo y

conservacin hacia una metodologa en la que se pesa cada

decisin en relacin a su impacto sobre los valores identificados encada area, determinando si el valor patrimonial se acenta, se

reduce or si el impacto es nulo. Este enfoque asegura que cada

intervencin ha de responder a las cualidades particulares de los

elementos por ser intervenidos, y no responde a preceptos

generalizados. De este modo, Powter apunta, "la Biblioteca se

conservar en su forma actual. Despus de un cuidadoso

asesoramiento, las intervenciones negativas del pasado se

retirarn." Tambin, en un futuro, toda alteracion ser concebida en

un contexto de respeto hacia los valores patrimoniales existentes y

por lo tanto, se plaenearn conscienzudamente para enfatizar esos

valores.




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Y qu hacer con estructuras patrimoniales que han sufrido prdidas

catastrficas? Un buen ejemplo es la iglesia de St George en Halifax,

muy daada durante un fuego en junio de 1994. Construida en

1800, la iglesia es uno de las mejores muestras de arquitectura

paladiana en el pais.

El debate despues del fuego dio pie a un nmero de temas

relacionados a la autenticidad. Primero se pregunt si haban

sobrevivido suficientes materiales como para comunicar los valores

significativos de la iglesia. Y si la iglesia se mantuviese como ruina

Sera necesaria una restauracin para mantener esos valores? Una

vez que se decidi emprender una restauracin de $6 millones,

surgieron otras dudas: donde ciertas zonas de importancia no se

pudieren salvar podrian implementarse los cambios funcionales

deseados por mucho tiempo en vez de simplemente re-integrar el

material perdido? Aqui de nuevo, mediante una evaluacin de loque pesa cada atributo del valor patrimonial del sitio, se pudo

desarrollar una estrategia de restauro en funcion de una mxima

retencin de la autenticidad.

El problema de definir la autenticidad en una sola estructura se

mutiplica exponencialmente al aplicrsele a un asentamiento o

ciudad historica. Est claro, por ejemplo, que en Montreal la

autenticidad no se puede interpretar como la suma de

autenticidades en sus edificios individuales, si no mas bien, com nos

dice Dinu Bumbaru, mediante la bsqueda de una manera para

medir el "sabor" o personalidad de un lugar. Hay que tomar en

cuenta tambien otros factores como el uso de la tierra, la vida en los




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espacios pblicos, la mezcla demogrfica, etc. Ni tampoco es

suficiente al considerar la totalidad edilicia identificar solamente las

contribuciones monumentales o vernculas al tejido urbano.

Montral es nica entre las ciudades de Norteamrica en haber

mantenido sustancialmente su continuidad, densidad y la

organizacion espacial y material de su tejido urbano a traves de

toda su historia, cosa que podemos contrastar con el desarrollo del

centro de Hull a mediados de los 70 para permitir la expansion de la

capital nacional cruzando el rio Ottawa hacia la provincia de

Quebec. Las expropiaciones, las demoliciones masivas y la

construccion de grandes bloques de oficinas destruyenron el trazado

urbano del centro y el tejido social que lo mantenia. Despues, han

habido olas sucesivas de demoliciones que han debilitado mas aun

al frgil tejido urbano de Hull.

El reto actual de mantener la autenticidad en Montral, Hull y otrasciudades canadienses es complicado. Hablando de Hull, Alain

Lafrenire seala la vulnerabilidad de la arquitectura verncula:(que

consitutye el 90% del tejido tradicional urbano): lo difcil que es para

un politico defender lo"normal y comun," el costo del terreno atrae

la especulacion, y la dificultad de llegar a un acuerdo entre

profesionales en lo que se refiere al valor de lo vernculo. Dinu

Bumbaru nos indica que en Montreal las caracteristicas de la

arquitectura residencial verncula (estructuras de madera

revestidas en su exterior con piedra) hace de estos edificios fciles

presas del fachadismo, un virus que amenaza de manera particular

a la autenticidad. A su vez los propietarios son muy susceptibles




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ante las campaas comerciales que promueven materiales de

recubrimiento exterior (vinlico, aluminio) que dan un aura de

modernismo y progreso.

Otros puntos sobresalientes al tratar el problema de la autenticidad

urbana en el Canad: primero, estbien claro que en este medio, la

autenticidad no solo les preocupa a los especialistas, si no que

tambin al ciudadano comun que quiere mantener las cualidades

esenciales de su barrio. Segundo, para responder a esta inquietud,

hay que establecer un proceso de administacin urbana que cuente

con el ciudadano al definir cuales son los valores patrimoniales por

conservar y que a su vez aliente el desarrollo de procesos que sean

sensitivos a los elementos ordinarios y los patrones de vida

importantes para la ciudadana.

La autenticidad y los paisajes culturales

El auge actual de los "paisajes culturales" como marco para definir y

manejar el patrimonio ilustra como los valores de complejos

territorios se pueden manejar y expresar con utilidad. Concebidos

por el Comit de Patrimonio Mundial como "ilustradores de la

evolucin de la sociedad y asentamiento humano a traves del

tiempo," Susan Buggey explica que los paisajes culturales se

pueden interpretar como poseedores de

valores intrnsicos (expresados en la continuidad del uso de la tierra,

la tradicin en su manejo segun se manifiesta en patrones de

organizacin espacial, redes de circulacion, preferencia por ciertos

materiales, formas y tecnologas) y valores asociativos (como

testimonios de creencias espirituales y/o tradicionales) Aqui el




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anlisis de la autenticidad necesariamente se concentra en el

entendimiento de los elementos principales de ciertos procesos

dinmicos, y no en los atributos estticos de la forma y los

materiales. Dentro de un contexto donde el cambio diario es la

norma, un anlisis sobre la autenticidad rpidamente lleva a

cualquier conservacionista a identificar los valores importantes

dentro del continuum de tiempo, tanto hacia delante como hacia

atrs, reconociendo que las mejores soluciones no son las que

protegen, si no las que renuevan.

Existen muchos ejemplos de como el enfoque sobre las cualidades

dinmicas en el proceso de evaluacin inicial de un paisaje cultural

puede aclarar las verdaderas fuentes de autenticidad y guiar el

proceso de tomas de decisiones sobre la conservacion. Los estudios

recientes en la Ile d'Orleans (Pierre La Rochelle, "Le Projet du

Paysage au Qubec," Trames, Univ de Montreal) en el Rio SanLorenzo, cerca de Quebec, uno de los paisajes agrcolas mas

clebres del Canad y muy vinculado en la mitologa popular con los

origenes de la Nueva Francia de los siglos XVII y XVIII, han

demostrado el valor del anlisis tipo-morfolgico enfocado sobre lo

ordinario, y no en lo distintivo y lo poco comun, como se haca

tradicionalemente en el analisis convencional de la conservacion. El

enfoque de La Rochelle sobre las caractersticas morfogenticas

permiten identificar "permanencias estructurales," es decir, formas

que mantienen una continuidad reconocible a pesar de la

renovacion de sus partes, y que permite para identificar tambien

una guia de como proteger las vistas importantes, determinar la




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forma apropiada para las nuevas construcciones y esbozar el marco

de accion para los proyectos de desarrollo de manera que enfaticen

el uso existente de la tierra y los patrones de circulacion o

movimiento.

Hay otros paisajes tpicos candienses que necesitan un anlisis

similar para reducir los peligros que amenazan su existencia. El

paisaje tan familiar de la praderas con sus ascensores para grano

modulando el horizonte cada 8 10 millas a lo largo de las ferrovas

hoy est amenazado por los cambios en la tecnologa de la

produccin agrcola y su distribucin. Desde 1950, mas de 2/3

partes de los ascensores se han perdido, y el carcter que le

impartieron a las praderas se ha disminuido. Los ascensores de

grano conllevan muchos mensajes: orientaban a los viajeros a

donde ir, y cuando llegaban, les anunciaban el nombre de la

comunidad y los comercios locales; cuando se agrupaban,significaban una comunidad prspera; sus frontones, cpulas,

ventanas y su madera de revestimiento anunciaban el caracter del

poblado donde se ubicaban. Hoy, la avanzada tecnologa de

ascensores remplaza las estructuras tradicionales con estrucutras

prefabricadas de mayor capacidad, eficiencia y seguridad, y se

construyen en las afueras de los poblados, alejados del centro de

comercio. Las compaas de ascensores se niegan a mantener los

viejos ascensores en desuso, alegando su potencial peligro de

fuego. Sin embargo, los ascensores exigen un alto mantenimineto y

pagan altas tasas de impuestos. Las mejorias en la red de carreteras




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han eliminado el atractivo de aunar la produccion de granos en las

postas tradicionales de ascensores.

Los anlises que permiten identificar los patrones y atributos

significativos de los paisajes de la pradera dentro del proceso

dinmico de identificar las caractersticas bsicas se concentran en

los indicadores de la autenticidad, y nos brindan un marco de

referencia para guiar los cambios que podran mantener los valores

paisajsticos. Si no creamos una mayor consciencia sobre estas

metodologas, la prdida de los elementos principales que definen el

carcter de las praderas seguir en aumento.

El mismo anlisis es til al estudiar otras caractersticas del paisaje

canadiense - los corredores de transporte que unen al pais: los

sistemans fluviales como el de San Lorenzo y el de Mackenzie en el

noroeste, que abrieron nuestro territorio al comercio de pieles y a la

exploracin; el Canal de Rideau construido a principios del XIX entreKingston y Ottawa con fines defensivos; las dos ferrovas

transcontinentales de fines del XIX, y la Carretera Trans-Canad, la

mas larga carretera pavimentada en el mundo, que recorre sus

7,821 kms desde St John en Terranova hasta Vicotria, en la

Columbia Britnica.

Como lo ha comentado Christina Cameron en "Los Retos de los

Corredores Histricos" (CRM Bulletin Vol 16, No. 1. 1993), el reto a la

autenticidad es de poder guiar las modifcaciones necesarias en el

tejido del corredor manteniendo a la vez su funcion esencial de

transportar gentes y productos a lo largo de la ruta..




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La Autenticidad y el Patrimonio de los Pueblos Indigenas del Canada

En el passado reciente, las autoridades de la consevacin hancomenzado a buscar maneras de reconocer y aumentar la

apreciacin hacia el patrimonio de nuestros pueblos nativos. Este

compromiso nos ha traido nuevos desafos en cuanto a la

autenticidad, dada la vinculacin con lo intagible y lo asociativo que

los indigenas le achacan a ese patrimonio. Estas dificultades quedan

bien ilustradas en la labor por establecer un programa

museolgico (interpretation) para uno de los primeros sitios

culturales canadienses inscritos en la Lista de Patrimonio

Mundial, Head-Smashed-In Buffalo Jump ( el Salto de Bfalos con

Cabeza Escachada), cerca de Fort McLeod en Alberta. La intencin

del programa museolgico era revelar y apoyar la tesis histrica

central que haba sido mantenida por el Servicio de Sitios Historicos

de Alberta:Por 2,000 aos, hasta la era del contacto, los Indios de los llanos del

noroeste desarrollaron un sistema cultural basado en la

expolotacin de grandes manadas de bfalos. La importancia

suprema de este animal se demuestra en los incontables usos de su

carne, pieles, cuernos, huesos, cascos y ligamentos; la naturaleza

de sus rituales y mitologas; y todo su modo de vida adaptado a las

migraciones de las manadas. Durante ese perodo se desarrollaron

variadas tcnicas refinadas y complejas para facilitar la matanza de

grandes nmeros de animales. Head-Smashed-In es sin duda el sitio

mejor conservado que muestra una de las tcnicas mas efectivas y

duraderas para matar: el salto del bfalo. Los restos arqueolgicos




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en el sitio reflejan un minimo de 6,000 os de adaptacion cultural

en los llanos del noroeste.

Les Hurt del Servicio de Sitios Historicos de Alberta nos dice lo

siguiente:

Todas las actividades para desarrollar el sitio estaban y estn aun

dirigidads por la creencia que el carcter actual del paisaje local -

formas naturales cubiertas de vegetacion y alteradas por el hombre

exclusivamente en cuanto a las exigencias de la gandera - ha de

ser conservado, y que cualquier construccion que se haga necesaria

ser lo mas invisible que permita la tecnologa; evitando o

disminuyendo su impacto sobre los recursos arqueolgicos.

Aqui esta claro que un aspecto de manetener la autenticidad ha

exigido una concentracion sobre lo fsico, tratando de eliminar la

intrusion de los elementos museologicos, incluso del edificio en si.

Pero aun mas importante, en este sitio la autenticidad podria ser

entendida como un reflejo de la naturaleza de la experiencia cultural

que se ofrece, ya que el sitio tiene gran impacto sobre los visitantes.

Solo guas e intrpretes indgenas le presentan el sitio al visitante, y

ellos son los reponsables de comunicarles el espritu del sitio. La

autenticidad de los mensajes nativos se asegura mediante consultas

con una Junta de Nativos y los Ancianos. Cuando lasinetrpretaciones Nativas difieren de las cientficas, ambas se

presentan como diferentes, y no como conflictivas.

Jack Brink, el arquelogo del sitio, dice que la meta de la

interpretacin es aumentar el conocimiento sobre la complejidad y




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refinamiento de la cultura aborigen en cuanto a sus caceras

comunales en particular, y su adaptacion cultural en general. Brink

apunta tambien que el sitio:

promueve la comprensin entre miembros de culturas diferentes. El

foco del mensaje es que el temor ante otras culturas y la falta de

aprecio por la diversidad cultural surge de la ignorancia de como

viven otros pueblos. Al exigirle al visitante un reconocimiento de la

elaborada naturaleza de las expresiones culturales indgenas, la

experiencia de Head-Smashed-In aspira fomentar una comprension

por la diversidad cultural. El hecho de que el visitante est sujeto a

guas indigenas es importante para lograr ese objetivo. La

autenticidad de la interpretacion sin duda se intensifica mediante

este tal vez primer encuentro entre el visitante y un aborigen al oir

el mensaje de los labios de los descendientes de aquellos

habitantes que construyeron y utilizaron el sitio.Todo visitante queda consciente que el sitio es reverenciado y

respetado por los aborigenes de hoy, y que los atributos espirituales

contribuyen en gran parte a su autenticidad.

La Autenticidad y el Turismo

En el clima econmico actual en que la conservacion del patrimonio

tiene que ser auto suficiente, quizs el reto mayor es de mantenerla autenticidad dentro del sistema de mercados y esa indiferencia

por gran parte de la industria turstica hacia las verdaderas

cualidades de la atracciones patrimoniales que se fomentan y se

venden.




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Para los que toman decisiones que afectan los sitios patrimoniales

en la industria turstica es importante que se libren de las etrategias

de mercadeo convencionales, y que se dediquen en vez a crear un

nuevo mercado al estimular una demanda [diferente]. Tienen que

darse cuenta que el pblico quiere autenticidad; quiere creer en lo

genuino, en lo completo y en la verdad del mensaje que se llevan

cuando visita un sitio patrimonial. Tambien debemos recordar que

aun cuando exista un compromiso por mantener la autenticidad, las

pequeas decisiones se pueden ir acumulando rpidamente hasta

reducir la calidad de lo autntico en la experiencia. Fergus Maclaren

nos dice:

inevitablemente, los diseos y el uso de un sitio se adaptan a lo que

atraiga turistas. En los sitios industriales, los nuevos usos, como

cafetines, restaurants, libreras, boutiques y viviendas tipo loft, se

superimponen sobre los viejos patrones de actividades tpicas en laszonas industriales tradicionales. La necesidad de mantener una

imagen atractiva al visitante a menudo lleva a re-definir la historia.

El miedo es que los recursos patrimoniales de un sitio se conviertan

en fachadas que escondan actividades comerciales y residenciales y

que los habitantes de la zona se conviertan en los actores de un

drama diario que se le ofrece a los turistas para que lo fotografen y

se maravillen. La irona es que aunque tal vez la embadurnada

realidad de un distrito puede ser demasiado ruda para atraer

turistas, el proceso de gentrification [remplazo de los habitantes y

comercios tradicionales con unos mas afluentes y modernos] de por

en si nos brinda la verdadera historia de cambio y desarrollo.




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Muy a menudo, la planificacin turstica en el Canad ha

dismuinuido en vez de enriquecido la autenticidad de los sitios

especiales. En verano, en Quebec o en Saint-Andrews-by-the-Sea en

New Bruswick, la imagen de los edificios se transforma con los

vitrales de la tiendas mostrando la moda, lo ltimo y hasta lo

escandaloso, lo que atraiga al trurismo aunque la calidad ambiental

se diluya. Sin embargo, por cada uno de esos desastres, hay un

xito, como el de la Isla de Granville en Vancouver, donde un sitio

costero de industria ligera y almacenes fue reciclado en los 70 para

convertirlo en centro de recreo, marina y mercado popular. Muchas

de las estructuras originales se han reciclado para tiendas,

restaurants, teatros, un hotel y una academia de arte. Aunque la

autenticidad de uso no se mantuvo (excepto en una planta de

cemento y una cervecera) los fragmentos que sobreviven de

aquello que se haba convertido en un sitio casi abandonado, hoy

superimpuesto con los avisos y los colores modernos, si recuerdan

una poca anterior y transmiten mensajes histricos importantes.

Como en otros sistemas dinmicos, el desarrollo turstico se puede

manejar en beneficio de los recursos en que se basa. Ello es posible

si se usa un entendimiento de la autenticidad de los recursos para

identificar los procesos y atributos caractersticos que son

esenciales para mantener el contexto y propsito de los sitios

patrimoniales.

La Autenticidad, los sitios historicos y la integridad conmemorativa.

Uno de los enfoques mas intrigantes de la autenticidad en el Canad

ha surgido del sistema actual de sitios historicos y de la creciente




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necesidad de Parks Canada por aclarar su metodologa al establecer

y proteger los valores historicos en un sitio dado. La poltica de

manejo de recursos histricos adoptada por Parks Canada en 1993

se basa en cinco principios claves que se usan para determinar las

intervenciones apropiadas: (valor, entendimiento, integridad,

respeto y beneficio pblico) y ha tenido un gran efecto en

democratizar la toma de decisiones mediante nuevos mecanismos

para hacerlo. Esta metodologa est acompaada de la introduccin

de un concepto que incorpora una manera para definir y manejar la

autenticidad: "la Integridad Conmemorativa."

La integridad conmemorativa describe la salud o entereza de un

sitio historico nacional. Tal sitio posee integridad conmemorativa

cuando el recurso que simboliza o representa su importancia no se

encuentra reducido o en peligro, cuando las razones por las cuales

el sitio tiene importancia se les comunican eficazmente al pblico ycuando los valores patrimoniales son respetados por todos cuyas

decisiones afectan el sitio.

Grodon Bennettt tiene lo siguiente quie decir en cuanto al desarrollo

de la integridad conmemorativa en el sistema de Parks Canada:

El concepto de integridad conmemorativa se desarroll para el

Informe sobre la Condicin de los Parques en los 1990s, cundo

surgi una consciencia (algo incredula) que no existia un marco

conceptual dentro del cual evaluar el estado global de un sitio

histrico. Exista informacin considerable sobre algunos de sus

aspectos (condicin del recurso, estado de la exhibicin, etc) asi

como mucahs ideas sobre el estado idneo de un sitio histrico,




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pero no haba ninguna manera efectiva de integrar todos esos datos

de una manera coherente para un sitio especfico. Es mas, casi

todos los instrumentos a la mano se basaban en su capacidad de

asesorar la condicin de actividades en particular o de las grandes

categorias delos recursos. En otras palabras, no habia un parmetro

para desarrollar nuestra misin fundamental - el sitio historico. En

cierto modo, los medios se habian convertido en la meta final

El hecho que nuestros colegas en los parques nacionales estaban

usando la "integridad ecolgica" con buenos resultados nos llev a

buscar un concepto anlogo que nos ayudase a describir la

condicion de nuestros parques. Por una serie de razones, el

concepto de "integridad historica" fue rechazado como anlogo y se

adopt en vez la "integridad conmemorativa.". Pero debemos notar

que la integridad ecologica posee un componenente significativo de

presentacin que no esta presente en la integridadecolgica [Sic]. La integridad ecolgica se concentra en lo pristino y

en la restauracin de esa condicin pristina en cuanto sea posible y

cuando haya sido afectada por un impacto humano. La integridad

conmemorativa, por otra parte, no se puede ver afectada por el

hecho que el sitio no es ya el mismo que fue hace 50, 100 o 10,000

aos. Si el pasado ha de formar parte del presente, la nocin de

aislarlo de un presente hostil no resulta apropiada.

El valor de esta metodologa yace en su capacidad de darnos un

marco de referencia explcitamente claro para el proceso de toma

de decisiones. Todos aquellos que formen parte del proceso pueden




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trabajar en conjunto al poder enfocar varios temas compartiendo los

mismos criterios.

Conclusin:

En el debate de Nara y el de Bergen que precedi, se trataron de

aclarar esos varios atributos del patrimonio cultural a travs de los

cuales se expresan sus valores. el "diseo, los materiales, la

manufactura y la ubicacion." Estos atributos para la "prueba de

autenticidad" establecidos por el Comit de Patrimonio Mundial

fueron extendidos en la discusin de Bergen para incluir

"diseo/forma; materiales/substancia; tradiciones/tcnicas;

ubicacin/contexto. El documento de Nara se refiere a estos como

:fuentes de informacin" y describe:

aquellos internos al monumento o sitio, incluyendo la forma y el

diseo, los materiales y la substancia, la funcion y el uso, las

tradiciones y las tcnicas, la ubicacin y el entorno, el espritu y el

ambiente y otras fuentes de informacin externas. El uso de estas

fuentes permite la elaboracion de las dimensiones artsticas,

historicas, sociales y cientficas especificas al bien cultural bajo

estudio.

El anlisis sobre la autenticidad y la problemtica de los sitios

estudiados en este ensayo apuntan hacia ciertas conclusiones delDocumento de Nara que meritan examinarse:

1. Los ejemplos candienses confirman la importancia de la

autenticidad en el proceso de toma de decisiones en la conservacin

canadiense. Dado que la autenticidad es una medida de la verdad




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esencial que porta nuestro patrimonio, es igualmente importante

que los profesionales y los ciudadanos participen en el proceso.

2. Los ejemplos estudiados confirman la utilidad de un marco de

referencia sistemtico para analizar la autenticidad del patrimonio -

marco de referencia que asegura que el anlisis sea elaborado en

relacin a los valores patrimoniales estrictamente definidos y sus

atributos accidentales. (La metodologa de la "integridad

conmemorativa" de Parks Canada es un ejemplo de un marco de

referencia tal)

3. La gama de ejemplos presentados tambien confirma el valor de

un nmero mas amplio de atribtuos de la autenticidad, en particular

al tratar con la funcin y las tradiciones aun vivas (en sitios como los

paisajes culturales y vernaculos), cuyo valor yace en procesos

dinmicos.

4. Los ejemplos tambin apuntan hacia la necesidad de asegurar

una participacin adecuada de la poblacion local al definir los

valores patrimoniales, sus atributos relativos y su autenticidad.

5. Aunque la consideracin de las muestras canadienses aqui

presentadas demuestran el valor de afinar el analisis de la

autenticidad mediante la identificacin de los atributos que con

mayor importancia definen los valores del sitio, se ha sugeridotambien el valor de un estudio paralelo y mas integral de la

autenticidad. Mas importante que la opcin entre forma y materiales

o forma y funcin, en particular dentro de la perspectiva

contemporanea del patrimonio, est la necesidad de enfocarse




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sobre el espritu total de un sitio, de estar consciente de la

capacidad de un sitio (a travs del impacto acumulado de todos sus

atributos) de transmitir mensajes de importancia.

Si el anlisis de la autenticidad solo observa la naturaleza

importante de un solo atributo caracterstico, se convierte en un

ejercicio mecnico que ignora la esencia mayor del sitio. Por

ejemplo, aunque la restauracion de la Place Royale no resulte muy

autntica dentro del marco convencional de forma y materiales, si

es un testimonio autntico de una aspiracin legtima compartida

que puede pesar mas que las preocupaciones convencionales que

se han anotado. Igualmente, al estudiar las zonas urbanas o los

paisajes culturales, la autenticidad es a menudo mucho mas que la

suma de sus partes: ese sentido de su caracter o personalidad o

identidad que sus atributos solos no pueden explicar. Por eso, una

determinacin de la autenticidad debe anticipar e integrar laarticulacin de los atributos a traves de la identificacin del espritu

esencial de un lugar y el grado hasta que las intervenciones pueden

apoyar, continuar, acentuar o disminuir ese espritu.

END ICOMOS CANADA POSITION PAPER ON AUTHENTICITY

Spanish Version

Translation by Gustavo Araoz, US/ICOMOS

Autenticidad en la práctica de conservación de Canadá

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