DISTINGUIENDO LOS PACTOS BÍBLICOS, � Primera Parte �

Preparación del maestro

Esta sección está dedicada a la preparación del maestro. Es muy importante que durante toda la lección se mantenga en mente el propósito, los objetivos, y resultados de la lección. Esto le ayudará a estar enfocado en la lección y el tema principal.

Ore para que Dios use Su Palabra en su corazón primeramente y luego en los corazones de aquellos que recibirán la enseñanza. La Palabra de Dios llevará fruto y Cristo será glorificado y esto solamente será posible en la medida en que el Espíritu del Señor trabaje por medio de un maestro que está rendido a él, y que haya oyentes receptivos.

Visión General de la Lección:En esta lección, el maestro enseñará la doctrina de los pactos bíblicos. Los pactos que son declarados claramente en la Palabra de Dios estarán definidos y descritos. En esta lección, vamos a presentar los tres pactos generales con toda la humanidad, y el pacto condicional con Israel.

Las Escrituras: Génesis 2:15,16; 3:14-19; 9:1-17; Éxodo 19:1-8; Gálatas 3:16, 19-24; Romanos 3:19-20; 6:14-15; 7:1-4; 8:2-4; 10:4

Declaración de propósito: Enseñar cuatro de los ocho pactos Bíblicos que Dios ha hecho con el hombre.

Objetivos:

Entender el pacto Edénico. Entender el pacto Adámico Entender el pacto Noaico Entender el pacto Mosaico

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Resultados esperados de los estudiantes: Después de esta lección los estudiantes podrán:

Definir bíblicamente y describir el pacto Edénico Definir bíblicamente y describir el pacto Adámico Definir bíblicamente y describir el pacto con Mosaico

Ayudas Visuales:

Respuestas de la lección

Las Escrituras (versículos en acetatos)

# 1 – Tópicos en Distinciones Bíblicas # 2 – Adán y Eva – La Caída # 3 – El Diluvio # 4 – El Arco Iris # 5 – Monte Sinaí # 6 – La Ley Mosaica # 7 – El Tabernáculo

Para enseñar a los estudiantes

DISTINGUIENDO LOS PACTOS BÍBLICOS̶� Primera Parte �

En esta serie de estudios bíblicos, estamos observando importantes Distinciones Bíblicas que necesitamos examinar para usar bien y entender la Palabra de Dios. Repasemos brevemente los temas que hemos estudiado hasta ahora.

Tópicos en Distinciones Bíblicas

Para empezar nuestro estudio, hagamos algunas observaciones acerca de la naturaleza de un pacto y repasemos algunos principios importantes acerca del estudio de la Biblia que aprendimos en nuestra primera lección.

I. INTRODUCCIÓN A LOS PACTOS

A. EN CUANTO A LOS PACTOS

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1. Un PACTO es un CONTRATO o ACUERDO obligatorio entre dos partes.

Firmamos convenios (acuerdos legales que debemos cumplir) cuando compramos un vehículo o una casa o cuando alquilamos un apartamento. Estos son contratos legales.

2. Un PACTO puede ser INCONDICIONAL (unilateral) o CONDICIONAL (bilateral) por naturaleza.

Los Pactos Condicionales usualmente vendrán asociados con un “si”. Los Pactos Incondicionales contienen una sencilla declaración de Dios - “Yo haré.” Dios hace ambas clases de pactos con los hombres.

Necesitamos ser cuidadosos cuando vamos a distinguir entre pactos condicionales e incondicionales y serán obvios para nosotros si prestamos atención a la manera en que Dios presenta el pacto.

B. EN CUANTO A LA BIBLIA

1. Un pacto en la Biblia tiene que interpretarse de una manera NORMAL, LITERAL, HISTÓRICA, GRAMATICAL, y CONTEXTUAL, como todo el resto de las Escrituras.

Interpretamos los convenios en una manera normal, gramatical y contextual en nuestras vidas cotidianas. Nunca alegorizaríamos un pacto cuando pagamos una hipoteca o un contrato de arrendamiento. Nunca interpretaríamos $1000 mensuales en una manera alegórica. Lo interpretamos en una manera normal. Si dice que necesitamos pagar en el primer día del mes, significa lo que dice.

* ¿Por qué es importante esto?

Toda la Palabra de Dios, inclusive los pactos, deben ser entendidos en esta manera –normal, literal, histórica, gramatical y contextual. La Biblia es parte de la literatura y debe ser entendida en una manera normal. Se pueden encontrar figuras retóricas en la Biblia, pero son metáforas obvias y también los símiles son claros cuando son usados y tienen un significado específico. Cuando el sentido llano de las Escritura tiene sentido común, no busque otro sentido. Si no, esto sería solamente decir cosas que no tienen sentido. Cuando algo es absurdo al sentido común, es posible que sea lenguaje figurado. Ejemplo: En Juan 15:1 cuando Jesús dijo “Yo soy la Vid…..”

Entonces, entendemos los pactos en una manera normal, literal, histórica, gramatical y contextual.

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2. Creer en los pactos BÍBLICOS NO es lo mismo que la TEOLOGÍA DEL PACTO.

En la Teología del Pacto, los pactos son hechos por hombres, como parte de un sistema teológico. Los pactos de la Teología del Pacto nunca son declarados como pactos.

La Teología del Pacto entiende la profecía usando un “hermenéutica doble.” Eso significa que algunas profecías, como aquellas que hablan acerca de la primera venida de Cristo son entendidas literalmente. Pero las profecías de Su Segunda Venida y su Reino son entendidas figurativamente. Ellos espiritualizan estas profecías y las aplican a la iglesia. ¿Cómo decidimos si debemos interpretar una profecía espiritualmente o literalmente? ¡Uno hace lo que encaja mejor en su sistema de teología!

* ¿Cuál es la diferencia entre la Teología del Pacto y la Teología Dispensacional?

La diferencia no es acerca de si creemos los pactos o no. La Teología Dispensacional reconoce MÁS pactos bíblicos que la Teología del Pacto.

La teología del pacto reconoce dos pactos: El Pacto de Obras y el Pacto de Gracia. Se cree que el Pacto de Obras, que nunca se nombra en la Biblia, fue el pacto entre Adán y Eva con Dios, antes del pecado en el Huerto. El Pacto de Gracia, el cual ellos creen que se extiende desde la caída del hombre en pecado hasta el día de hoy, incluye el plan de redención de Dios. Puesto que la Teología del Pacto ve toda la historia humana desde la caída como un solo pacto, el resultado es una teología que no hace claras diferencias entre la ley y la gracia o entre Israel y la Iglesia.

La Teología Dispensacional reconoce los pactos bíblicos, pero también reconoce que Dios ha tratado con la humanidad de diferentes maneras bajo varias administraciones o dispensaciones. Un Dispensacionalista distinguirá entre la ley y la gracia o entre Israel y la Iglesia porque hay diferentes economías, administraciones o dispensaciones en el gobierno soberano de Dios.

Otra importante diferencia entre la Teología del Pacto y la Dispensacional es su visión de Israel en el Nuevo Testamento. La Teología del Pacto ve a la iglesia como el ‘Israel espiritual’ que ha reemplazado a la nación de Israel de modo que todas las promesas a Israel en el Antiguo Testamento se cumplen espiritualmente en la iglesia. Esto se llama a menudo ‘Teología del Reemplazo’.

La Teología Dispensacional aún tiene un lugar para Israel en el plan de Dios y entiende que las promesas de Dios a la nación de Israel se cumplirán literalmente en el futuro.

Con este comentario como introducción, consideremos ahora los pactos bíblicos uno a la vez. Empezaremos examinando cuatro pactos y terminaremos con los últimos cuatros en el próximo estudio.

II. LOS PACTOS BÍBLICOS

A. HAY TRES PACTOS BÍBLICOS PRINCIPALES ENTRE DIOS Y EL HOMBRE

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1. El Pacto EDÉNICO involucraba una promesa de MUERTE por comer del árbol de la ciencia del bien y del mal. (Génesis 2:16-17)

El contexto aquí es el Huerto de Edén y la primera prohibición dada al hombre. Dios dio a Adán la oportunidad de decidir obedecer o desobedecer con una restricción sencilla.

Génesis 2:16,17 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; 17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.

* ¿Cuál fue la promesa de este pacto?

Este es el primer pacto, promesa o garantía entre el hombre y Dios que vemos en la Biblia. Dios dio una sencilla promesa con el Pacto Edénico: obedece y tendrás vida, desobedece y tendrás muerte. Sabemos que Adán y Eva desobedecieron y murieron espiritualmente ese mismo día y esto dio comienzo al proceso de muerte física e introdujo el pecado y la muerte en el mundo.

* ¿Cuál fue el resultado?

Adán y Eva – La Caída

Génesis 3 registra cómo Adán y Eva desobedecieron, comieron el fruto, y trajeron una maldición sobre la humanidad. Los resultados fueron desastrosos y la muerte entró en la raza humana; y encontramos por primera vez pecado, discordia, enfermedad, sufrimiento y muerte. (Génesis 6:5) No podemos ni imaginar cómo sería la condición del mundo si Adán y Eva nunca hubieran pecado.

Para vislumbrar las consecuencias desastrosas del pecado, comparemos las primeras palabras en Génesis – en el principio, creó Dios –– con las últimas palabras en Génesis – Y murió José a la edad de ciento diez años; y lo embalsamaron, y fue puesto en un ataúd en Egipto. Cuando Dios creó el mundo, Él dijo repetidas veces que su creación era buena. No mucho tiempo después de la caída del hombre en pecado, el comentario de Dios acerca de la tierra fue esto:

Génesis 6:5 Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.

¿De dónde vino pecado, la maldad, y la muerte para la raza humana? ¡Vino del huerto de Edén! Vino como resultado de las decisiones que ellos tomaron.

Ahora comparemos las primeras palabras de Génesis con las últimas palabras del Antiguo Testamento – “no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición.” ¿Por qué hubo una maldición? ¿Qué paso con la

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creación perfecta de Dios? Fue arruinada por el pecado, el cual fue traído primero al universo por Lucifer y luego traído a la tierra por Adán y Eva.

Se pueden observar algunos de los resultados de la decisión desastrosa de Adán y Eva en el próximo pacto:

2. El Pacto ADÁMICO involucra la maldición sobre Satanás, la mujer, el hombre y la naturaleza, junto con la promesa de un futuro Redentor (Génesis 3:15-19)

El contexto aquí es el Huerto de Edén y las consecuencias del pecado de Adán y Eva. Aquí el Señor pronunció una maldición sobre la serpiente. También vemos en el versículo 15 lo que es llamado en griego: “el proto evangelio” o “las primeras buenas noticias”. Es la primera mención en la Escritura después de la caída, de que Dios proveerá una manera de salvación.

Génesis 3:14,15 Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. 15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.

La herida en la cabeza es un golpe mortal; en cambio, la herida en el calcañar es dolorosa, pero no es mortal. Esta promesa fue cumplida en última instancia por Jesucristo, quien hirió la cabeza de Satanás cuando él murió en la cruz, tratando con el pecado completamente. Un día, Satanás será juzgado al final y arrojado en el Lago de Fuego.

Dios continuó en el versículo 16 con la maldición sobre Eva y después, Adán.

Génesis 3:16-19 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti [o, tu voluntad será sujeta a tu marido]. 17 Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida. 18 Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo. 19 Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

* ¿Cómo se sienten hoy los efectos de ese pacto?

Lo que Dios dijo en los versículos 16-19 pudiera haber sido escrito ayer, describe tan bien la condición humana. Los dolores de parto, la tendencia de las mujeres a querer dominar a los hombres, el duro trabajo de ganarse la vida, y la muerte física – todas son realidades hoy en día. Esta maldición todavía se aplica hoy, afectando no solamente a Adán y Eva, sino que a todos sus descendientes.

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El Diluvio

En Génesis 6, las Escrituras declaran que Dios destruyó la tierra con un diluvio. Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová y Noé y su familia fueron salvos en el Arca. Después Dios hizo un pacto con Noé.

3. El Pacto NOAICO involucra la promesa de Dios de nunca volver a destruir la tierra por un diluvio universal. (Génesis 9:1-17)

Génesis 9:1-6 Bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad y multiplicaos, y llenad la tierra. 2 El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos, en todo lo que se mueva sobre la tierra, y en todos los peces del mar; en vuestra mano son entregados. 3 Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he dado todo. 4 Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis. 5 Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre. 6 El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada; porque a imagen de Dios es hecho el hombre.

* ¿Cuál nueva revelación fue parte de este pacto?

Con el Pacto Noaico se dio una nueva revelación en cuanto a comer carne (vers. 3). Por este motivo, muchos maestros de la Biblia creen que antes del Pacto Noaico, que permitió comer carne de animales, la gente era vegetariana.

También, por primera vez se implementó la pena capital (vers. 6). Dios ha dado a los hombres autoridad para tomar la vida de otro hombre en caso de un crimen capital.

* ¿Cuál es la señal de este pacto?

Génesis 9:7-17 Mas vosotros fructificad y multiplicaos; procread abundantemente en la tierra, y multiplicaos en ella. 8 Y habló Dios a Noé y a sus hijos con él, diciendo: 9 He aquí que yo establezco mi pacto con vosotros, y con vuestros descendientes después de vosotros; 10 y con todo ser viviente que está con vosotros; aves, animales y toda bestia de la tierra que está con vosotros, desde todos los que salieron del arca hasta todo animal de la tierra. 11 Estableceré mi pacto con vosotros, y no exterminaré ya más toda carne con aguas de diluvio, ni habrá más diluvio para destruir la tierra. 12

Y dijo Dios: Esta es la señal del pacto que yo establezco entre mí y vosotros y todo ser viviente que está con vosotros, por siglos perpetuos: 13 Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por señal del pacto entre mí y la tierra. 14 Y sucederá que cuando haga venir nubes sobre la tierra, se dejará ver entonces mi arco en las nubes. 15 Y me acordaré del pacto mío, que hay entre mí y vosotros y todo ser viviente de toda carne; y no habrá más diluvio de aguas para destruir toda carne. 16 Estará el arco en las nubes, y lo veré, y me acordaré del pacto perpetuo entre Dios y todo ser viviente, con toda carne que hay sobre la tierra. 17 Dijo, pues, Dios a Noé: Esta es la señal del pacto que he establecido entre mí y toda carne que está sobre la tierra.

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El Arco Iris

El pacto Noaico involucra la promesa de Dios que Él nunca volvería a destruir la tierra por un diluvio universal. El arco iris fue dado como señal del pacto (versículos 12, 13). Cuando Dios destruya nuevamente la tierra, será por fuego, no por agua. El arco iris es una señal colocada en los cielos por Dios para que la humanidad recuerde este pacto. Esto no significa que no habrá desastres naturales, sino que no va a haber otro diluvio universal.

Estos son los tres pactos principales dados de manera general entre Dios y el hombre. Fueron dados a toda la humanidad, no solamente a un grupo de gente específica. Empezando con Abram en Génesis 11, Dios ahora trabaja con Su pueblo escogido, los descendientes de Abraham – Israel.

B. LOS CINCO PACTOS BÍBLICOS PRINCIPALES ENTRE DIOS Y LAS ISRAELITAS

Hay un pacto condicional, y cuatro pactos incondicionales. Consideraremos los cuatro pactos incondicionales la próxima vez.

1. El Pacto MOSAICO es el pacto CONDICIONAL hecho en el Monte Sinaí con la nación de Israel. (Éxodo 19:1-8)

Monte Sinaí

En este pasaje en Éxodo, los hijos de Israel acaban de salir de Egipto por medio del Mar Rojo, y llegaron a Monte Sinaí.

* ¿A quién fue dado este pacto?

Éxodo 19:1-5 En el mes tercero de la salida de los hijos de Israel de la tierra de Egipto, en el mismo día llegaron al desierto de Sinaí. 2 Habían salido de Refidim, y llegaron al desierto de Sinaí, y acamparon en el desierto; y acampó allí Israel delante del monte. 3 Y Moisés subió a Dios; y Jehová lo llamó desde el monte, diciendo: Así dirás a la casa de Jacob, y anunciarás a los hijos de Israel: 4 Vosotros visteis lo que hice a los egipcios, y cómo os tomé sobre alas de águilas, y os he traído a mí. 5

Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra.

Noten que este pasaje trata con los hijos de Israel (versículo 1) y que Dios está hablando a través de Moisés a la casa de Jacob, y… los hijos de Israel (versículo 3). No es bíblico aplicar este pasaje a la iglesia del Nuevo Testamento a menos que la Palabra de Dios nos diga que debemos hacerlo en algún lugar. La Ley fue dada a los judíos, no a los gentiles.

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*¿Por cuánto tiempo estuvo vigente este pacto?

La Ley no era un pacto perpetuo. Tenía una duración limitada. Miremos lo que Pablo dice en Gálatas:

Gálatas 3:19 Entonces, ¿para qué sirve la ley? Fue añadida a causa de las transgresiones, hasta que viniese la simiente a quien fue hecha la promesa; y fue ordenada por medio de ángeles en mano de un mediador.

Nótese que la Ley fue añadida…hasta que viniese la simiente. ¿Qué o quién es esta simiente en este pasaje?

Gálatas 3:16 Ahora bien, a Abraham fueron hechas las promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como si hablase de muchos, sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo.

Entonces, es claro que la simiente es Jesucristo, y la Ley estaba en efecto hasta que Cristo viniese. De hecho, Cristo fue el ‘fin’ o “la meta’ de la Ley:

Romanos 10:4 porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree.

Esto significa que el propósito de la ley era retratar, prefigurar y anunciar a Jesucristo al pueblo. Una vez que Cristo vino, el pacto de la ley ya no está vigente. (Gálatas 3:10-13, 16, 19; Romanos 10:4; Santiago 2:10)

Entonces, si la Ley fue dada al pueblo de Israel, y solamente era temporal, entonces ¿por qué es que Dios dio la Ley?

* ¿Cuáles elementos estaban involucrados en la Ley Mosaica?

La Ley Mosaica

Mucha gente piensa en la Ley Moral, o los Diez Mandamientos, cuando piensan en la ley de Moisés. Sin duda, estos eran una parte importante de la Ley. Sin embargo, esta solamente era la Ley Moral. Había otros dos aspectos importantes de la Ley.

La Ley Social consistía en leyes que estaban designadas para permitir que los israelitas funcionaran como una unidad social. Estas serían llamadas hoy leyes civiles. ¿Qué haríamos si nuestro buey pisoteaba los jardines de nuestro vecino? ¿Cómo debemos tratar los esclavos? ¿Cómo deben manejar las israelitas los casos del homicidio? Aquí hay un caso interesante:

Éxodo 21:27 Y si hiciere saltar un diente de su siervo, o un diente de su sierva, por su diente le dejará ir libre.

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Hay muchos tipos de leyes que Dios dio a los Israelitas para ayudarse a gobernarse. ¿Se acuerdan de que la nación de Israel era una teocracia, no una democracia? Dios reinaba directamente sobre el pueblo. ¡No había una separación entre la iglesia y el estado!

El Tabernáculo

El tercer aspecto principal de la Ley era la Ley Ceremonial. Esta incluía el diseño del tabernáculo y la tarea de los sacerdotes. Incluía también los días festivos que debían observar los israelitas. Hay más capítulos dedicados a este aspecto de la Ley en Éxodo que a los otros dos aspectos juntos.

Los judíos contaban todas las facetas de los mandamientos en la Ley y ¡determinaron que hay 613! Por alguna razón, mucha gente hoy quiere ponerse bajo la Ley, pero ¡no saben lo que están diciendo! Ellos piensan que la Ley es como una comida buffet (que pueden decidir comer solo lo que ellos quieren) Sin embargo, no es así como Dios lo ve.

Santiago 2:10 Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos.

No pueden ser exigentes sobre algunas partes de la Ley. ¡Es una unidad indivisible!

Gálatas 3:10-13 Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas. 11 Y que por la ley ninguno se justifica para con Dios, es evidente, porque: El justo por la fe vivirá; 12 y la ley no es de fe, sino que dice: El que hiciere estas cosas vivirá por ellas. 13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero),

Noten que la Ley requiere obediencia a todas las partes de la Ley (versículo 10). La conclusión en el versículo 11 es que nadie puede ser justificado ante Dios por la Ley. Las buenas nuevas son que Cristo pagó nuestra pena por el pecado y Él alcanzó todas las demandas de la Ley cuando Él murió en la cruz por nuestros pecados. ¡Él se hizo una maldición para nosotros! ¡Esta es las buenas nuevas!

Y ¿qué de la Ley? Para Israel la Ley era temporal y multifacético.

* ¿Cuál es el propósito de la Ley? (Romanos 3:19-20; Gálatas 3:20-25)

Al continuar en Gálatas, vemos uno de los propósitos de la Ley:

Gálatas 3:20-25 Y el mediador no lo es de uno solo; pero Dios es uno. 21 ¿Luego la ley es contraria a las promesas de Dios? En ninguna manera; porque si la ley dada pudiera vivificar, la justicia fuera verdaderamente por la ley. 22 Mas la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuese dada a los creyentes. 23 Pero antes que viniese la fe, estábamos confinados bajo la ley, encerrados para aquella fe que iba a ser revelada. 24 De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe. 25 Pero

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venida la fe, ya no estamos bajo ayo,

Fijémonos que este 24 dice que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo. Un propósito de la ley es para mostrar a la gente que necesitan un Salvador. Cualquiera persona que entienda la Ley se dará cuenta de que ninguno de nosotros puede guardarla. Solamente somos malditos y condenados por la Ley y nunca nos puede justificar. Esto debe dirigirnos a Jesucristo, porque solamente Él cumplió las demandas justas de la Ley con Su vida perfecta y su muerte como el sustituto por nuestros pecados en la cruz.

Ahora veamos otro propósito de la Ley:

Romanos 3:19-20 Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que están bajo la ley, para que toda boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de Dios; 20 ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado.

La Ley demuestra que todo el mundo es culpable ante Dios. ¿Cómo es que lo demuestra? Mostrando que aún bajo condiciones ideales, inclusive como el pueblo de Dios que era especial, único, y escogido – ellos no podían guardar la Ley. Si ellos fallaron, es cierto que nadie tendría éxito guardando la Ley. Todo el mundo es culpable ante Dios y es incapaz de ser justificados ante Dios por sus obras. La Ley demuestra este hecho y también define el pecado porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado.

* ¿Cómo se relaciona la Ley con el creyente bajo la gracia? (Romanos 6:14-15, 7:1-4, 8:2-4)

La Ley no tiene parte en la vida del creyente. Muchas personas inclusive los creyentes, se muestran sorprendidos al oír este hecho. Nada puede ser más claro en la Palabra de Dios:

Romanos 6:14-15 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. 14 ¿Qué, pues? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera.

El contexto de este pasaje es el caminar del creyente, no la justificación. Nos explica que no estamos bajo la ley en nuestro caminar cristiano. ¿Es un motivo o una excusa para pecar? ¡En ninguna manera! La gracia, entendida y aplicada correctamente nos conduce a una vida piadosa, no una vida de rebelión. Sin embargo, el medio de tener una vida piadosa no es guardar la ley.

Romanos 7:1-4 ¿Acaso ignoráis, hermanos (pues hablo con los que conocen la ley), que la ley se enseñorea del hombre entre tanto que éste vive? 2 Porque la mujer casada está sujeta por la ley al marido mientras éste vive; pero si el marido muere, ella queda libre de la ley del marido. 3 Así que, si en vida del marido se uniere a otro varón, será llamada adúltera; pero si su marido muriere, es libre de esa ley, de tal manera que si se uniere a otro marido, no será adúltera. 4 Así también vosotros,

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hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.

Este es otro pasaje claro que enseña que el creyente no está bajo la Ley en el caminar cristiano. Debido de que la Ley solamente aplica a gente viva, y nosotros hemos muerto con Cristo, la Ley ya no tiene autoridad sobre nosotros como creyentes. Hemos muerto a la ley (versículo 4). Somos libres de esa ley (versículos 3). Quedamos libres de la ley (versículo 2).

Imagínense un hombre que rompió la ley por un exceso de velocidad. Antes de tener una oportunidad de pagar su multa o comparecer ante la corte, este hombre murió de un infarto. La ley ya no tiene dominio sobre este hombre. No tendrá su día en corte. No necesita pagar su multa. Ya no está bajo la jurisdicción de la ley porque la ley solamente se aplica a gente viva.

Debido de que cada creyente en Cristo está muerto con Él (Gálatas 2:20), somos muertos a la Ley y no estamos bajo su jurisdicción. ¿Esto significa que el creyente no tiene una regla de vida? Debido de que no somos bajo la ley, ¿debemos vivir como criminales? No, hay un principio más alto por la cual debemos de vivir. Se llama la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús.

Romanos 8:2-4 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. 3 Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne; 4 para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

El creyente camina en el Espíritu y vive bajo el control de Dios el Espíritu Santo. El requisito de la justicia de la ley (versículo 4) está cumplido en el creyente que camina bajo el control del Espíritu Santo. Esto no es guardar la Ley. Este no es el legalismo. Este es el Espíritu de Dios produciendo una justicia dentro del creyente que resulta en los absolutos morales de la ley que son cumplidos en el creyente automáticamente. Entonces, un creyente caminando en el Espíritu no matará, mentirá, o cometerá adulterio porque el Espíritu de Dios no haría tales cosas.

De los Diez Mandamientos que son parte de la ley moral, nueve de ellos son repetidos bajo la gracia, para ser cumplidos en la vida del creyente – no por mantener la ley, pero como resultado directo de caminar en el Espíritu. El único mandamiento que no está repetido bajo la gracia es Acuérdate del día de reposo para santificarlo. No hay un ‘Día de Reposo’ cristiano. Dios no nos dio días específicos especiales como Él hizo con Israel bajo la ley. El Domingo no es el “Sábado” o “Día de Reposo,” solamente por casualidad. Es el día cuando los cristianos tradicionalmente tienen sus cultos de adoración.

Ahora regresemos a los israelitas en el libro de Éxodo. Se acuerdan en Éxodo 19:5 la palabra “si” cuando Dios dijo, ‘Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, (entonces)…. Esto indica un pacto condicional. Israel tenía que cumplir su parte del acuerdo. Las bendiciones de la Ley fueron congruentes en su obediencia. Esta es la razón por que la Biblia se refiere a la Ley como una ‘maldición.’ Fallar de obedecer la Ley resultara en maldición y condenación.

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Éxodo 19:6-8 Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel. 7 Entonces vino Moisés, y llamó a los ancianos del pueblo, y expuso en presencia de ellos todas estas palabras que Jehová le había mandado. 8 Y todo el pueblo respondió a una, y dijeron: Todo lo que Jehová ha dicho, haremos. Y Moisés refirió a Jehová las palabras del pueblo.

Noten que Dios hizo una oferta a los israelitas, y ellos estuvieron de acuerdo con los términos. Los israelitas habían fracasado completamente hasta este punto. Ellos se quejaban por el agua y la comida en su salida de Egipto. Deberían de haber visto lo desesperado de tratar de obedecer en la manera que Dios exigía.

Los israelitas llegaron a estar obligados a un pacto condicional y bilateral. No modificaba el pacto Abrahámico. La Ley no fue un camino HACÍA la vida, pero un medio DE vivir. Ninguna de nosotros podemos obedecer la Ley completamente o satisfactoriamente. La Ley nos muestra nuestro pecado y nuestra gran necesidad, y nos conduce a Calvario.

Comparemos la Ley y la gracia. Cuando la Ley fue dada, 3000 murieron al pie de Monte Sinaí. Cuando la gracia vino, 3000 fueron salvos en el día de Pentecostés. ¿Bajo cuál preferiría usted estar?

Nadie puede ser justificado ante Dios por la Ley. De la misma manera, nadie puede ser santificado por la Ley. La Ley cumple su propósito cuando conduce a una persona a Jesucristo. La Ley define el pecado y nos muestra a cada uno de nosotros que somos pecadores culpables ante Dios. Ahora, no debemos someternos bajo esclavitud, ni tratar de salvarnos, ni santificarnos por mantener la Ley. Dios ha provisto un nueva manera viva, ¡la ley del Espíritu de Vida en Cristo Jesús!

En nuestro próximo estudio, veremos que Dios ha hecho cuatro promesas incondicionales a Israel. Estas promesas todavía no han sido cumplidas, pero podemos ver aspectos de ellas que ya han sido cumplidos por la misericordia y fidelidad de Dios. Podemos regocijarnos de que Dios es un Dios que cumple sus promesas. Cuando Él nos hace una promesa, Él va a cumplirla. Ser fiel es su naturaleza, porque Dios nunca miente y Él es inmutable – nunca cambia.

En la misma manera que Israel puede confiar en que Dios va cumplir Sus promesas, nosotros podemos depender en él también. Tenemos muchas promesas de Dios y ¡podemos confiar totalmente en ellas! Él es un Dios que hace pactos y que cumple sus promesas.

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Lección 20 Preguntas para los estudiantes:

1. Usando referencias bíblicas, defina y describa el pacto Edénico.

2. Usando referencias bíblicas, defina y describa el pacto Adámico.

3. Usando referencias bíblicas, defina y describa el pacto Noaico

4. Usando referencias bíblicas, defina y describa el pacto Mosaico.

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EVALUACIÓN DEL MAESTRO:

¿De qué maneras puedo mejorar la enseñanza de este mensaje?

¿Los alumnos tenían algunas preguntas que indican una necesidad a cambiar o desarrollar más en alguna área?

¿Entendieron los alumnos las verdades y los principios del tema presentado?

¿Estoy aplicando las verdades de esta lección en mi vida personal por la gracia de Dios?

¿He orado para que Dios use su palabra en mi vida y después en las vidas de las personas a las que estoy enseñando? (1 Timoteo 4.16)

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