Ecumenismo (1)

5
Panel 1er. día: ECUMENISMO: REALIDAD INSOSLAYABLE E INCIPIENTE La invitación para participar en este Panel me gratifica profundamente por dos razones. Primera, porque es una expresión de actitud ecuménica, que pone de relieve que no es solo un tema que tratamos sino una realidad que vivimos. También me hace sentir feliz porque mi presencia en esta SEMANA DE FORMACIÓN PARA CATEQUISTAS es el resultado de un proceso espiritual, amical y laboral que se inició el año 2002, mientras un grupo de “amigos de la Biblia” nos uníamos para elaborar como discípulos de Cristo –católicos y protestantes evangélicos- Estudios Bíblicos, representando a la Comisión de Catequesis, Pastoral Bíblica y Pastoral Indígena, y a la Sociedad Bíblica Peruana A.C. Proceso único en las Américas y que alcanza un punto culminante con la llegada del Papa Francisco, por su visión de futuro, en una indeclinable y sostenida promoción de La Nueva Evangelización. Considero muy importante que notemos, que esta incipiente relación ecuménica en nuestro país, se da y se desarrolla con nuestra convergencia en el lugar que tiene la Biblia y la centralidad del Kerigma bíblico, en la misión de la Iglesia, en un ambiente de relación de amistad. Privilegio que disfruté el año pasado al compartir con Sor Eleana Salas y los participantes, en el taller sobre la proclamación del Evangelio. Pienso que el tema lo debemos desarrollar dentro del contexto de la realidad peruana tanto secular como religiosa, aunque por el tiempo que disponemos, sea en forma somera y esquemática, que sin embargo nos permita tener un marco correcto para nuestra reflexión.

description

tema

Transcript of Ecumenismo (1)

Page 1: Ecumenismo (1)

Panel 1er. día:  ECUMENISMO:

REALIDAD INSOSLAYABLE E INCIPIENTE

 

La invitación para participar en este Panel me gratifica profundamente por dos razones. Primera, porque es una expresión de actitud ecuménica, que pone de relieve que no es solo un tema que tratamos sino una realidad que vivimos.

También me hace sentir feliz porque mi presencia en esta SEMANA DE FORMACIÓN PARA CATEQUISTAS es el resultado de un proceso espiritual, amical y laboral que se inició el año 2002, mientras un grupo de “amigos de la Biblia” nos uníamos para elaborar como discípulos de Cristo –católicos y protestantes evangélicos- Estudios Bíblicos, representando a la Comisión de Catequesis, Pastoral Bíblica y Pastoral Indígena, y a la Sociedad Bíblica Peruana A.C. Proceso único en las Américas y que alcanza un punto culminante con la llegada del Papa Francisco, por su visión de futuro, en una indeclinable y sostenida promoción de La Nueva Evangelización.

Considero muy importante que notemos, que esta incipiente relación ecuménica en nuestro país, se da y se desarrolla con nuestra convergencia en el lugar que tiene la Biblia y la centralidad del Kerigma bíblico, en la misión de la Iglesia, en un ambiente de relación de amistad. Privilegio que disfruté el año pasado al compartir con Sor Eleana Salas y los participantes, en el taller sobre la proclamación del Evangelio.

 Pienso que el tema lo debemos desarrollar dentro del contexto de la realidad peruana tanto secular como religiosa, aunque por el tiempo que disponemos, sea en forma somera y esquemática,  que sin embargo nos permita tener  un marco correcto para nuestra reflexión.

La presencia Protestante en el Perú

La herencia protestante es legado que los evangélicos peruanos hemos recibido a través de Lutero, Calvino, Zwinglio, Pedro de Osma, Francisco Ximénes de Cisneros, Juan de Valdés, y los anabaptistas entre otros reformadores europeos; por ser herencia

Page 2: Ecumenismo (1)

anclada en el evangelio de Cristo, del cual la Biblia da testimonio, tiene un alcance mundial, un sentido ecuménico y una vigencia actual.

La Biblia llega al Perú en sermones y enseñanzas en el siglo XVI a través del sacerdote José de Acosta. Pero como libro, con el pastor y maestro bautista, Diego Thomson, quien fue invitado por el General San Martín para dar inicio a las Escuelas Lacansterianas, en las cuales la Biblia era el principal medio de enseñanza. La versión que se usó fue Torres Amata, católica; y los principales colaboradores de Thomson fueron sacerdotes católicos, entre los que destacaba el Padre Navarrete. La cooperación ecuménica se inició con la distribución y enseñanza de las Escrituras, en los días tempranos de nuestra independencia política.

Las afirmaciones centrales de la Reforma del siglo XVI constituyen parte permanente del cristianismo histórico y vivo. Y el Concilio Vaticano nos ha acercado en una forma insospechada y que demanda de ambas partes encuentros y diálogos, que nos permitan aquilatar nuestras coincidencias y destilar el mensaje evangélico. Estamos seguros que una toma de conciencia del mismo, en forma personal y social, de parte de nuestros compatriotas; así como su aplicación en todas las esferas de relaciones humanas, han de ser la base de una verdadera transformación moral, espiritual  y comunitaria, que nuestro pueblo anhela y dará estabilidad a nuestra democracia, “rostro humano” a nuestro desarrollo económico, y esperanza no fallida en la búsqueda la paz que debe estar fundada en la justicia.

La consideración de la religión en el Censo del 2007, evidencia que el protestantismo evangélico en el Perú ha echado raíces profundas y asume con creciente fuerza un carácter definido, propio y autóctono. Porque los protestantes peruanos lo hemos hecho nuestro, y en cuyo reconocimiento, la Constitución de 1979 afirma: “El Estado…podrá establecer su colaboración con otras confesiones religiosas”; en adición se entiende, a la Iglesia Católica. Esta constatación no debe llevarnos a los protestantes evangélicos, al triunfalismo ni al narcisismo ni a  la arrogancia, tentaciones que algunas de nuestras comunidades no han podido evitar. Comprobación estadística que para un sector evangélico importante tiene un llamado a la humildad, el arrepentimiento y la responsabilidad.

La presencia del protestantismo evangélico en el Perú, constituido por las Iglesia Evangélicas, su arraigo y desarrollo futuro, su confirmación como la minoría religiosa más importante del país son asunto de la gracia de Dios. Estas comunidades de fe presentes a lo largo y ancho del territorio patrio, son parte del panorama religioso y espiritual  de nuestro pueblo, e ingrediente de beneficios incalculables, en la formación de la peruanidad, si es que permanecen fieles al Evangelio de Cristo, y tienen la capacidad de desarrollar una actitud ecuménica entre sus denominaciones y hacia otras confesiones.

 

Page 3: Ecumenismo (1)

Esta última afirmación es una arista muy importante en la búsqueda de un diálogo ecuménico significativo y saludable para la nación. Es o debe ser un diálogo de amigos, que nos estimule al amor y a las buenas obras. Una pregunta que nos viene de la sociedad secular y que ninguna confesión cristiana sola, y menos, solitaria, podrá responder en forma adecuada es esta: “¿Qué acción cristiana debiera desarrollarse a la luz del despertamiento de la conciencia social en nuestro país y del crecimiento económico que todavía no toca la vida real de los ciudadanos marginales en costa, sierra y selva? ¿Cuál debe ser nuestra contribución espiritual y moral para que no se desboque con el crecimiento económico en “una economía salvaje”, cuyo peligro late peligrosamente y puede tornarse avasallador por el poder de los medios de comunicación, desquiciando la vida nacional?

Tenemos una segunda pregunta, que ha surgido tanto de los predios católico romano, como de los protestantes evangélicos: ¿Cómo pueden el catolicismo y el protestantismo peruanos convertirse en una realidad encarnacional en el país? De otra forma dicho: ¿Cómo estas confesiones pueden relacionarse con la vida en forma tal que las transforme haciéndola más humana? Lo pondré así: ¿Cómo pueden estas comunidades de fe en el Perú ser verdaderamente pertinentes a la situación humana y constituir una fuerza espiritual redentora?

Escuché, hace ya buen tiempo, al Dr. José Pérez Guadalupe señalar que los católicos practicantes en el Perú serían cuatro millones, y presumía él, que la población evangélica era similar, y proponía en forma audaz, que católicos y evangélicos uniéramos esfuerzos para evangelizar al restante veinte millones de peruanos. Como dije al comienzo, en este momento histórico tenemos dos puntos de confluencia: La Biblia y la Evangelización. Y, pienso, que debemos proseguir en los esfuerzos conjuntos de distribuir, conocer, comprender, obedecer y compartir la Biblia. Pero con la finalidad de que la palabra de Dios, nos conduzca a conocer e intimar con Jesucristo, el Señor y Salvador, Palabra de Dios encarnada.

Finalmente, pienso, que el futuro de la Iglesia de Cristo en el Perú está en una Iglesia Católica Romana reformada por la Palabra de Dios; una Iglesia Evangélica que devuelva a su púlpito la Palabra de verdad y sea renovada por ella; una Iglesia Pentecostal profundizada en la Palabra y ardorosa por ella; e iglesias independientes que se sometan a la autoridad de la Palabra Santa. Y todas dispuestas y obedientes a la conducción del Espíritu, buscando la gloria de Dios, que es el camino de bendición del pueblo peruano

Pastor Pedro Arana Quiroz

Iglesia Presbiteriana “Pueblo Libre”