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E N V I A D O SE L L I B R O D E L O S H E C H O S

SUMMIT EN ESPANOL˜

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Í N D I C E

Introducción ............................................................................................................ 7

SEMANA 1Hechos 1:1-26: Los Testigos ..............................................................................11

SEMANA 2Hechos 2:1-13: El Espíritu ................................................................................15

SEMANA 3Hechos 2:14-41: El Mensaje ............................................................................19

SEMANA 4Hechos 2:42-47 y 4:32-37: La Comunidad ................................................ 23

SEMANA 5Hechos 3:1-26: La Fe ..................................................................................... 27

SEMANA 6Hechos 4:1-31: La Osadía .............................................................................. 32 SEMANA 7Hechos 5:1-42: Un Temor Mayor .................................................................... 36

SEMANA 8Hechos 6:8-7:60: El Discurso de un Mártir ................................................... 41

SEMANA 9Hechos 8:1-40: El Ministerio de un Diácono ................................................. 46

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I N T RO D U C C I Ó N

El lIbRO DE lOs Hechos es como un álbum de recortes que recuenta los comienzos de la Iglesia. Es la historia del pueblo de Dios fortalecido por el Espíritu de Dios para llevar a cabo la misión de Dios en el lugar donde vive y trabaja. El libro de los Hechos termina en una forma que comunica que el relato sigue hoy en día. Nosotros ahora somos el pueblo de Dios, llevando a cabo la misma misión, y eso explica por qué este libro tiene tanta importancia para nosotros. En el libro de los Hechos descubrimos nuestro propósito como el pueblo de Dios, y cómo proceder para alcanzar ese propósito. Para decirlo de una forma sencilla, esta historia es nuestro patrimonio espiritual. Esperamos que crezcas en tu percepción del Espíritu de Dios y tu confianza en Él . . . y esperamos que empieces a ver y a vivir la misión a la cual Él te ha llamado.

CÓMO UsAR EsTA GUÍAEsta guía tiene el propósito de ayudarte a aprender y a aplicar las ver-dades de las Escrituras que vas a encontrar en tu estudio personal, en tu Grupo de Estudio Bíblico, y con toda la familia de Summit en Español du-rante los servicios dominicales. Esta guía cubre nueve semanas, y contiene dos secciones de material para cada semana. Puedes acceder una tercera sección, “Devocionales Personales,” en línea cada semana en http://sum-mitesp.info/los-hechos/ Hay cuatro devocionales para cada semana, y puedes usar el quinto día para hacer tu estudio personal de la Guía. Las secciones en esta Guía son:

1. Tareas. Si perteneces a un Grupo de Estudio Bíblico, tu provecho de este material será mayor si usas esta Guía como tarea semanal antes de asistir a la reunión del Grupo de Estudio Bíblico. Hacerlo así ayudará que el tiempo de discusión de grupo sea mucho más rico y productivo para todos los participantes. Así que, asegúrate de leer la sección de COMENTARIO y contestar la sección de PRE-GUNTAS PARA REFLEXIÓN Y DISCUSIÓN antes de reunirte con tu Grupo de Estudio Bíblico cada semana.2. Tiempo de Grupo. Cada reunión del grupo incluirá: a. un repaso del material de la semana pasada

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b. una discusión a base de las PREGUNTAS c. sugerencias para el tiempo de oración, y un desafío para la semana

lOs DEVOCIONAlEs en línea (4 por semana) te ofrecerán la oportunidad de escarbar más hondo en las Escrituras. Te ayudarán especialmente si actualmente no estás siguiendo un plan de lectura bíblica. También, los devocionales te ayudarán a ser un mejor lector del libro de Los Hechos: primero por mostrarte los vínculos a otras partes de la Biblia que tuvieron mucha importancia en el pensamiento de la iglesia del primer siglo, y se-gundo, por explicar unos principios de interpretación que te ayudarán a clarificar tu lectura, y tercero, por mostrarte lo que otros lectores de Hechos captaron al leer este libro.

UNA INTRODUCCIÓN BREVE AL LIBRO:

El lIbRO DE lOs HECHOsFíjate rápido en Lucas 1:1-4 y Hechos 1:1-5. Estos primeros versículos te dirán mucho acerca de Hechos. Primero, Hechos es la segunda parte de una historia. Hechos retoma el relato donde los Evangelios (especialmente el de Lucas) terminan. Lucas y Hechos juntos, contienen más del 40% de las palabras en todo el Nuevo Testamento. Es imposible comprender el mensaje del Nuevo Testamento si no conoces el libro de los Hechos. Segundo, nos da una “lista” de los personajes. Un nombre común para Hechos es “Los Hechos de los Apóstoles”. Se les dio una misión en el capítulo 1 y el resto de la historia se trata de cómo los Apóstoles llevaron a cabo esa misión. El trabajo de dos de los Apóstoles en particular es el enfoque de la mayoría del libro. En Hechos 1-8, que vamos a estudiar por medio de esta Guía, Pedro es el actor principal, con su ministerio centrado en Jerusalén y sus alrededores. En Hechos 9-28, se narra el ministerio de Pablo. Se entrega a Cristo, Dios lo envía a los gentiles (los no judíos) y hace sus viajes misioneros. Estudiaremos Hechos 9-28 en la próxima guía, que vendrá más adelante. Pero no te dejes confundir: los Apóstoles son personajes princi-pales en esta historia, pero no son EL PERSONAJE PRINCIPAL. El Evangelio de Lucas relata la vida de Jesús, y Hechos relata el trabajo del Espíritu Santo. A cada vuelta, los Apóstoles y otros discípulos logran llevar a cabo su misión porque el Espíritu les da el poder para hacerlo y los guía en el proceso. De ninguno de los Apóstoles se da su información biográfica personal porque el relato no se trata principalmente de ellos. Ellos van y

Enviados: El Libro de los Hechos

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vienen en el relato a medida que el Espíritu los guía en la misión. Tercero, aprendemos de la introducción al Evangelio de Lucas y Hechos que éste es un libro de historia. Es la única historia de la iglesia “primitiva” (del primer siglo) que tenemos, así que tiene mucho valor para nosotros. Afortunadamente, Lucas tuvo mucho cuidado al compilar el re-lato de su historia “ordenadamente”. Una Precaución: interpretar un libro de historia requiere un dife-rente tipo de trabajo que interpretar las cartas del Nuevo Testamento u otro tipo de literatura bíblica. En un libro de historia, todo es descriptivo, pero no todo es prescriptivo (la forma en que hay que hacerlo). El mero hecho de que la iglesia del primer siglo hiciera algo, no significa que nosotros tenemos que hacerlo. Pero Lucas incluyó estos relatos específicos por una razón. Muchas veces la razón es para que nosotros copiemos a esa iglesia. Estaremos examinando este principio a medida que estudi-emos el libro de los Hechos. La estructura y dirección de Hechos se encuentran al puro principio del libro en Hechos 1:8. Allí, Jesús predice y manda lo que sucederá du-rante todo el libro. Los Apóstoles serán Sus testigos hasta los fines de la tierra. De camino, Hechos hará mención de los cambios en geografía con frases como “la palabra de Dios continuó aumentando” o “la iglesia . . . se multiplicaba.” Una frase como ésta se encontrará en el último versículo de cada uno de la secciones que vienen a continuación:

1:1-6:7 El evangelio en Jerusalén6:8-9:31 El evangelio se extiende a Judea y Samaria9:32-12:24 El evangelio llega a los gentiles (no judíos)12:25-16:5 El evangelio se extiende a Asia16:6-19:20 El evangelio se extiende a Europa19:21-28:30 El evangelio llega a Roma

De Roma, el evangelio podía (¡y de hecho lo hizo!) extenderse hasta el fin de la tierra. Todos los caminos iban de Roma al mundo cono-cido de ese día, así que no habría nada que detuviera el evangelio una vez que llegara a Roma. Dos mil años más tarde, nos encontramos al fin de la tierra, habiendo escuchado nosotros el evangelio, junto con miles de millones de otras personas. La Iglesia Summit en Español tiene una pasión por continuar esta historia, asegurándonos que gente de cada nación tiene acceso al evangelio. Summit en Español, ésta es tu historia . . . Así que ¡métete y empieza a disfrutar el viaje!

Introducción

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ORIGEN DEl CONTENIDOTodo el material de esta Guía y los devocionales para esta serie fueron escritos por miembros de Summit en Español. Es la primera vez que hemos producido nuestro propio material. Les agradecemos a los que con mucho amor se gastaron para que pudiéramos tener un material propio de nues-tra congregación.


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1L O S T E S T I G O S

H e c h o s 1 : 1 - 2 6

Lee el comentario y contesta las preguntas en esta Guía ANTES de llegar a tu Grupo de Estudio Bíblico semanal. Tu preparación de antemano hará que el tiempo de grupo sea mucho más productivo.

COMENTARIOEl libro de Hechos comienza con una breve sinopsis de los 40 días que Jesus pasó con sus discípulos después de la resurrección. El autor muy es-pecíficamente menciona que Jesús les dio “muchas pruebas convincentes de que estaba vivo.” Este punto es muy importante, pues la autoridad de los apóstoles está basada en la verdad de la muerte y resurrección de Jesu-cristo. El hecho de que los apóstoles creyeron en esta verdad es lo que los motiva a ser testigos ante el resto del mundo. Veremos que los apóstoles, y eventualmente sus hijos espirituales estaban dispuestos a sufrir persecución y hasta la muerte por su fe. Los apóstoles tuvieron una capacidad única en este papel. No era cualquiera que podía ser un apóstol, sino única-mente los que habían presenciado la vida, muerte, y resurrección de Cristo. Aunque muchos de los apóstoles eran discípulos, vemos que el cambio a la palabra apóstol los denota como aquellos que han sido testigos, y que tienen el trabajo específico de revelarle a la iglesia las verdades claves y formativas para la vida cristiana. Uno podría decir que aun hoy en día hay muchos discípulos de Cristo, pero ya no hay apóstoles, pues el trabajo del apóstol terminó con la documentación y enseñanzas que constituyen nuestro Nuevo Testamento. Adicionalmente vemos que Jesús les da instrucciones a los apósto-les sobre sus acciones inmediatas y futuras. Primero, les dice que esperen la llegada del Espíritu Santo. Podemos observar que aun en ese momento, los apóstoles no entendían claramente la misión de Cristo. ¡Aún esperaban una revolución política! Pero Cristo les aclaró que su misión no era rees-tablecer el Reino de Israel, sino ser testigos de El Cristo (o dicho de otra forma) de su evangelio hasta los fines de la tierra. Hechos 1:8-9 se usa muy frecuentemente para indicar el deseo de Dios que su evangelio sea llevado hasta los fines de la tierra. Es importante sin embargo saber que aunque Jesús usa un esquema geográfico que comienza con su área local

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y termina con el fin del mundo, su intención no es que el evangelio sea limitado a esa secuencia. Incluso, vamos a leer en otros capítulos de este estudio cómo Dios no sólo manda a su iglesia a alcanzar al mundo, sino que también trae a la gente de los fines del mundo a encuentros con individuos de la iglesia para llevar a cabo su estrategia global a la vez.

¿Cómo respondieron los apóstoles? Bueno, en realidad su inicio no fue tan impresionante. Se quedaron tan asombrados por la ascensión de Cristo, que un par de ángeles les tuvo que recordar que Cristo regresará (¿será que con ese recuerdo se dieron cuenta que Cristo les había dicho que otras cosas tenían que pasar antes de Su regreso? En otras palabras, ¡deja de desperdiciar el tiempo, y haz lo que te ha dicho Cristo!). Lo que siguió es un ejemplo de cómo el cuerpo de Cristo anticipa la acción de Dios. En vez de más preparación personal, se dedicaron a orar juntos. Demostraron una unidad no solamente entre los apóstoles, sino también con la iglesia. Durante estos 10 días de oración, bajo el liderazgo de Pedro, completaron una vez más el número de apóstoles. Aun este proceso fue una confir-mación de que Cristo es el Mesías, pues Pedro cita un salmo que indica que uno de los seguidores originales será traidor y será reemplazado por otro. Aunque la manera en que el nuevo apóstol fue escogido puede parecer al azar, vemos que ellos no estuvieron dependiendo de la suerte para indicar cuál debería ser el último apóstol, sino, en oración, le pidieron al Señor que simplemente indicara Su voluntad al escoger a la persona apropiada. Si uno fuera a tomar esto como un ejemplo de cómo tomar decisiones, el enfoque no es en echar suertes, sino más bien en el tiempo de oración, la unidad del cuerpo, y la entrega a la voluntad de Dios que demostraron los apóstoles y la iglesia.

AUTO REFlEXIÓNResponde las preguntas a continuación con toda honestidad. La escala para las respuestas son: Muy en Desacuerdo (1), Desacuerdo (2), Neutral (3), De Acuerdo (4) Muy de Acuerdo (5).

a. Creo que Cristo murió, resucito, y ascendió al cielo. 1 2 3 4 5

b. Me siento confiado y seguro en la salvación que he recibido de Jesu-cristo.

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c. Me considero un participante activo en la misión de Dios. 1 2 3 4 5

Responde las siguientes preguntas escribiendo notas sobre tus pensamientos. Considera compartirlos con tu grupo de estudio bíblico esta semana.

d. ¿Quiénes han sido los “testigos” que más han influido en tu vida espiritual hasta este punto?

e. ¿Hay algo en tu tiempo devocional que ha tenido un gran impacto en tu vida esta semana? ¿Por qué?

PREGUNTAs DE EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. ¿Por qué fue tan importante que Jesús les diera a los apóstoles pruebas convincentes de que estaba vivo?

2. Hay tradiciones religiosas, aunque se consideran cristianas, que siguen a un “apóstol.” ¿Cuál es la diferencia entre esos apóstoles y los apóstoles bíblicos?

3. ¿Has considerado cómo Hechos 1:8 se puede desarrollar en tu vida? ¿Cuáles son los desafíos que te han detenido de obedecer este manda-miento anteriormente?

Semana Uno: Los Testigos

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4. ¿Cómo traducirías “Jerusalén, Judea, Samaria y fin del mundo” en el lenguaje de hoy? ¿A cuál de ellos eres “llamado?”

5. Es fácil leer el libro de los Hechos y entender por qué ese tiempo fue tan emocionante para la iglesia. Pero en realidad, nosotros también vivimos en un tiempo que tiene gran potencial para el Reino de Dios. ¿Cuáles son los acontecimientos que podemos soñar para el Reino de Dios a nuestro derrededor? ¿Cómo debemos prepararnos?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos ó tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Comienza con un tiempo de alabanza y agradecimiento. Escribe los nombres de aquellos que compartieron el evangelio contigo o que fuer-on clave para a traerte a la fe. Toma tiempo dándole gracias a Dios por ellos y la manera en que fueron usados por el en tu vida. Lee 2 Tesalonicenses 3:1-3 y Hebreos 13:18. Usa estos pasajes para orar por tus líderes, aquellos que han influenciado tu desarrollo es-piritual y en el desarrollo de la iglesia. Finalmente, usa Colosenses 4:2-4 para orar por ti mismo(a). Usa tus propias palabras y pídele a Dios que te enseñe cómo puedes ser Su instrumento para que el evangelio avance.


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2E L E S P Í R I T U

H e c h o s 2 : 1 - 1 3


COMENTARIOEl segundo capítulo de Hechos es el cumplimiento de la promesa que Cristo les dio a sus seguidores no solamente en el primer capítulo, pero también en Juan 14. Es más, el texto en Juan 14:15-17 nos ayuda a entender uno de los distintivos de la vida cristiana. Cristo no solamente les prometió la presencia permanente del Espíritu Santo en sus vidas, sino que les dijo muy claramente que ese es un privilegio que solo reciben los que lo siguen. Este regalo es tan exclusivo que aquellos que no siguen a Cristo no lo en-tenderán. Veremos al seguir leyendo en el segundo capítulo de Hechos que efectivamente eso fue lo que ocurrió cuando el Espíritu se manifestó entre la iglesia frente a una multitud. No entendían lo que estaban viendo al punto de acusar a la iglesia de estar borracha. Pero aún más impor-tante que esto es la llegada del protagonista principal a la escena. El ultimo mandamiento de Jesus fue “Id y hacer discípulos”, y también les dio una condición muy importante: esperen al Espíritu Santo (Lucas 24:49). Así que este es el comienzo de algo muy importante, algo que debe provocar mucha anticipación-el trabajo del Espíritu de Dios en su pueblo para al-canzar a las naciones! Este capítulo no es una prescripción de cómo actúa el Espíritu de Dios en su iglesia, simplemente es una descripción de como aconteció en esta situación específica. Vemos que los apóstoles y los 120 que formaron la primera iglesia seguían reunidos, podemos asumir que su actividad en oración aún continúa. Mientras están juntos viene una “violenta ráfaga de viento.” La presencia del viento es una manera que Dios se manifi-esta frecuentemente en la Biblia. A veces, como en esta situación es un viento violento, otras veces como en 1 Reyes 19:11-13 viene en un suave murmullo. Igualmente, la presencia del fuego es muy representativa del Espíritu a través de las Escrituras. Específicamente, como es demostrado en Mateo 3:11-12, el fuego representa la separación entre aquellos que

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seguían a Cristo y la multitud que aún no lo hacía. Aunque fue un momento increíble en la vida de la iglesia, vemos que este evento no es normativo en su descripción para la futura iglesia, pues vemos relatos de gente que conoce al Señor y escuchamos sobre el crecimiento de la iglesia sin una vez más ver la repetición de estos detalles. Lo que si vemos es que el Espíritu continúa moviéndose y dándole crecimiento a su reino en nuestra tierra. El punto de esta historia no es el evento milagroso en sí, el punto es la misión de Dios y el poder ilimitable que Dios derrama en su iglesia para darle ese crecimiento. La misión de Dios es salvar a la gente, no solo al pueblo judío, pero hasta el fin del mundo. Algo muy importante está ocurriendo en este pasaje. Génesis 11 nos cuenta la historia del origen de las lenguas. El hombre, para traerle fama a su nombre, construye una torre que alcanza hasta los cielos. Dios los castiga creando muchas lenguas, creando con-fusión y división, y evitando que ellos declaren su propia gloria ante Dios. Ahora en Hechos 2, Dios les da a unos pocos hombres muchas lenguas para que ellos puedan proclamarle la gloria de Dios a todo hombre. Esto no se debe confundir con el don de lenguas que es mencionado entre los dones espirituales en otros pasajes Bíblicos. Más bien es una situación donde de una manera milagrosa el Espíritu de Dios demostró su poder y su propósito al permitir que gente que antes no se entendía entre sí, de repente entend-iera cada palabra que decían y que esas palabras relataran las obras del Señor. Aquí está la clave normativa para este pasaje. El Espíritu Santo vino a remover confusión y obscuridad, y más bien ofrecer entendimiento y esperanza. Esta acción estratégica utiliza un evento como el día de Pente-costés, un día que atraía a judíos de todas partes del mundo a Jerusalén para empezar a cumplir Hechos 1:8. Y lo hizo en una manera que removió divisiones básicas y permitió un entendimiento mayor de las maravillas de Dios.


a. Entiendo quién es el Espíritu Santo. 1 2 3 4 5


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b. Mi vida es caracterizada por una dependencia en el Espíritu Santo. 1 2 3 4 5

c. Creo que Dios aun demuestra su poder a través de Su Espíritu hoy. 1 2 3 4 5

d. ¿Puedes pensar en alguna vez que Dios te llamó a hacer algo? ¿Cómo respondiste? ¿Cómo acabó la situación?

PREGUNTAs DE EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. Después del día de Pentecostés, los cristianos no seguían sus vidas con una llama sobre sus cabezas. En vez, fueron reconocidos por otras ra-zones. Cuáles eran? Como conocemos a otros creyentes hoy en día?

2. Vemos que el día de Pentecostés fue estratégico para traer a gente que podía ayudar a cumplir Hechos 1:8. ¿Cuáles situaciones, eventos, circunstancias en tu vida podrían ser parte de un plan estratégico para hacer lo mismo?

3. En el versículo 11 vemos que la multitud “oía proclamada en su pro-pia lengua las maravillas de Dios.” ¿Cuáles eran esas maravillas? ¿Estás listo(a) a proclamarlas tú? ¿Cómo lo harías?

Semana Dos: El Espíritu

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4. Podemos ver que al mismo tiempo que algunos se asombraban ante este milagro, otros se burlaban, y acusaban a la iglesia de estar borrachos. ¿Alguna vez has experimentado tal reacción de otros ante tu fe? ¿Cómo debemos responder a esa situación?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide al grupo en grupos de dos ó tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Comienza alabando a Dios, pensando en sus hechos maravillosos por el hombre. Anota cualquier Escritura que te venga a la mente, celeb-rando sus hechos maravillosos. Úsalos para alabar a Dios. Ora por individuos que conozcas que están rechazando al evan-gelio. Ora que Dios te utilice para remover cualquier barrera al evange-lio. Lee Mateo 6:9-10. Ora que Dios obre en tu vida de una manera que exalte a Cristo y avance el evangelio. Ora que lo mismo sea ver-dadero en tu familia y en la iglesia.


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3E L M E N S A J E

H e c h o s 2 : 1 4 - 4 1


COMENTARIOLos eventos del Día de Pentecostés demandaban una explicación. Las ex-plicaciones que daban las personas que los presenciaron variaban mucho. De todos los espectadores, nadie había atinado con la explicación cor-recta. Pedro se dio cuenta de lo que pasaba, y como líder natural, se levantó para dar la explicación bíblica y teológica de ese evento que estremeció tanto a los que lo vivieron. Aunque no tenemos en el Nuevo Tes-tamento las enseñanzas directas de Jesús sobre el tema, es evidente que Él les había hablado extensamente a los apóstoles sobre el Espíritu Santo y sobre cómo Él cumplía las profecías en el Antiguo Testamento en cuanto al Mesías. Para entender realmente la importancia de lo que acababa de ocurrir (y lo que eso significa para nosotros) hay que entender que bajo el Antiguo Pacto (Antiguo Testamento) muy pocas personas habían tenido la experiencia de tener al Espíritu de Dios obrando en sus vidas (mucho menos morando constantemente en ellos). Algunos líderes (no todos), los profetas, y una que otra persona conocieron lo que significaba tener al Espíritu de Dios posando temporalmente sobre ellos. El “creyente” (israelita) común y corriente no tenía esa presencia de Dios. Dios residía en el tabernáculo y luego en el templo, pero no en ellos. Como resultado, su experiencia religiosa siempre fue algo externo, no algo interno, y tenían que vivir como pueblo de Dios sin los enormes recursos que el Espíritu de Dios nos da a nosotros, los del Nuevo Pacto en Cristo. Dios, por medio de algunos de los profetas del Antiguo Testamen-to, había prometido que vendría el día (con la llegada del Mesías) en que todo eso cambiaría y el creyente común y corriente tendría a Dios mismo residiendo en él o ella. El israelita común tampoco podía tener mucho de lo que llamaríamos un ministerio espiritual en la vida de otras personas. El

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ministerio se limitaba casi exclusivamente a un grupo selecto de personas: a los sacerdotes. Pablo aquí citó una profecía de Joel (2:28-32)1. Moisés, en Números 11:24-30, también anheló el día en que el Espíritu de Dios estu-viera sobre todo creyente y que todo creyente profetizara. La forma en que Pedro usó las profecías del Antiguo Testamento en este sermón, y las aplicaciones que hizo de ellas nos indican que Pedro tenía por lo menos cuatro ideas principales que quería comunicarles a los oyentes. No sólo estaba explicando el gran estruendo que ocurrió ese día sino que estaba comunicando el mensaje del evangelio que la gente pre-sente necesitaba escuchar. Por decirlo así, el primer punto de su sermón fue: Jesús es el Mesías porque cumplió las profecías del Antiguo Testamento. No te voy a dar los demás puntos, sino que al ir haciendo tu estudio personal (a continuación), irás sacando los otros tres puntos de su sermón.

AUTO REFlEXIÓNResponde las preguntas a continuación con toda honestidad. La escala para las respuestas son: Muy en Desacuerdo (1), En Desacuerdo (2), Neutral (3), De Acuerdo (4) Muy de Acuerdo (5).

a. Entiendo el mensaje del evangelio 1 2 3 4 5

b. Estoy convencido de que Jesús es el Mesías, el Salvador 1 2 3 4 5

c. Estoy consciente de la presencia y el trabajo del Espíritu Santo en mi vida.

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1. Al leer la profecía de Joel, te será útil entender algo sobre cómo los profetas del Antiguo Testamento veían (a lo lejos) o concebían la venida del Mesías (el Cristo). Nosotros (después del hecho de la llegada del Mesías) ahora podemos distinguir que hubo un primer adven-imiento . . . y que habrá una segunda venida (al final de los tiempos). Pero los profetas antiguos, no lograban distinguir esos dos eventos. Ellos describían la venida del Mesías como si fuera un solo evento. Ahora sabemos que algunas de las cosas que describió Joel formarán parte de la “Segunda Venida” de Cristo (“19 Arriba en el cielo y abajo en la tierra mostraré prodigios: sangre, fuego y nubes de humo. 20 El sol se convertirá en tinie-blas y la luna en sangre antes que llegue el día del Señor, día grande y esplendoroso.”), pero Joel las veía como parte de un solo evento.


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d. Me siento cómodo(a) hablando de Cristo con mis amigos 1 2 3 4 5

PREGUNTAs DE EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. En los versículos 17-18 Pedro (y Joel) dijo que cuando venga el Me-sías, Dios derramará Su Espíritu sobre todo creyente, y que esos creyentes comunes y corrientes “profetizarán”. ¿Cuál es el papel principal de un profeta? ¿En qué sentido puedes verte cumpliendo el papel de profeta o profetiza?

2. El segundo punto del sermón de Pedro se encuentra en los vv. 22 al 33. ¿Cuál es la segunda razón que Pedro dio como prueba de que Jesús era el Mesías prometido? ¿Por qué esta verdad es tan importante para nosotros?

3. Según los vv. 34-36, ¿cuál fue el tercer punto del sermón de Pedro? Ese punto tiene claras implicaciones para los no creyentes, pero ¿en qué sen-tido es importante también para el creyente?

4. Según los vv. 37-40, ¿Cuál fue la cuarta verdad que Pedro quiso co-municarles a las personas que presenciaron la venida del Espíritu de Dios sobre los discípulos?

Semana Tres: El Mensaje

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5. Ya que Pedro (y Joel) indicaron que una diferencia muy básica entre el Antiguo Pacto y el Nuevo Pacto es que en el Nuevo Pacto el Espíritu de Dios viene a morar permanentemente en el creyente, y que eso implica que cada creyente esté declarándoles a otros la Palabra de Dios (profetizan-do) (vv. 17-18) ¿hasta qué punto estás tú, y hasta qué punto está tu Grupo de Estudio Bíblico llevando a la práctica esta función de un hijo renacido de Dios? ¿Qué necesitan para poder cumplir su función como “profetas” a los que los rodean?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos o tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. En Summit en Español una forma en que a veces expresamos el evangelio (diferente a la forma en que lo expresó Pedro) es “La Oración del Evangelio” que salió de la serie de estudios sobre el evangelio. Use “La Oración del Evangelio” para guiar su tiempo de oración. Pasen tiempo orando sobre cada punto. Usen sus propias palabras para afirmar su con-fianza en el evangelio.

1) En Cristo, no hay nada que yo pueda hacer para que Él me ame más; y no hay nada que yo haya hecho que cause que Él me ame menos.2) Tú eres todo lo que necesito hoy para tener gozo eterno.3) Como Tú has sido para mí, yo seré para otros.4) Al orar, mediré Tu compasión por la cruz y Tu poder por la resurrección.

Oren que Dios les ayude a prepararse para compartir el evangelio clara-mente y con valor.

PREPARACIÓN ADICIONAlVean el video “Entrenamiento en el Evangelismo: El Puente” bajo Videos en www.summitesp.info/evangelismo.


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4L A C O M U N I D A DH e c h o s 2 : 4 2 - 4 7 , 4 : 3 2 - 3 7


COMENTARIOLa Fiesta de Pentecostés en Jerusalén se celebraba cinco semanas después de la Pascua judía. De ahí la raíz penta quiere decir cinco. Este era un tiempo en que la gente traía sus cosechas, por eso también se conoce como la Fiesta de las Cosechas. Muchos judíos y prosélitos (gentiles convertidos al judaísmo) procedentes de pueblos y lugares fuera de Jerusalén habían llegado para celebrar la fiesta. Fue en esos días que los apóstoles y los seguidores de Jesús estaban reunidos y siguiendo la instrucción dada por el Señor Jesucristo, esperaban la llegada del Espíritu Santo. Estando ellos reunidos vino el Espíritu Santo y la iglesia comenzó a funcionar como el cuerpo de Cristo. Los apóstoles predicaban el evangelio con gran poder y muchos entendían la muerte y la resurrección de Jesucristo y lo aceptaron como el Mesías prometido, el Salvador de sus vidas. Cuando los que estaban en la ciudad oyeron el evangelio, es-cucharon a los apóstoles y vieron los milagros que en el nombre de Jesús hacían, creyeron y fueron bautizados. El amor de la iglesia el uno por el otro y por Cristo culmina en Hechos 2:47 cuando el Señor “añadía al grupo los que iban siendo salvos.” Francis Schaeffer, el gran teólogo, ofrece la opinión que “la iglesia es la apologética final. Al fin del día es el amor entre cristianos y por Cristo que mejor defiende el evangelio en el cual creemos. Esto fue verdadero en Hechos, imagínense la alegría que se ex-perimentaba entre ellos y juntos adoraban a Dios por Jesucristo. Muchos decidieron quedarse en la ciudad por más tiempo para aprender más de los apóstoles, ya que todo era nuevo para ellos. ¡Qué gran oportunidad de discipulado sucedió en esos días!, pues perseveraban en la Palabra. Se vio la necesidad de proveerles hospitalidad y alimentos. Imagínense tener que preparar alimentos para muchísima gente. Ellos comían en las casas donde se hospedaban y hacían oraciones juntos. La

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iglesia del primer siglo entendía que ser parte de una comunidad no era simplemente un club al cual uno pertenece, sino un compromiso vivo y ac-tivo que demandaba participación y sacrificio. ¡Qué hermoso hubiera sido haber estado presente allí! ¡Que emoción fue poder hablar con Dios per-sonalmente en el nombre de Jesucristo! Estas personas regresarían a sus tierras y ellos serían los primeros cristianos en esos lugares. Vemos cómo la Gran Comisión de llevar el evangelio a otras tierras ya comienza. Es hermoso presenciar la bondad y la generosidad de los herma-nos cuando hubo necesidad. Como la comida y el dinero escaseaban, los hermanos empezaron a compartir lo que tenían y con mucho gozo, per-sonas que tenían bienes los vendían y les traían el dinero a los apóstoles para ser repartido entre todos según su necesidad. También el pueblo los apoyaba. Vemos en la iglesia de Jerusalén varias funciones estratégicas para la iglesia cristiana:

• La Adoración es lo primero: la gente alababa a Dios.• El Evangelismo: es muy posible que mientras comían, hablaban de Cristo y muchos entendían el evangelio.• El Discipulado: se congregaban en el templo y en las casas. Perseveraban en la Palabra. Es decir: obedecían lo que escuchaban de los apóstoles. • La Oración juntos: oraban en las casas.• El Compañerismo: en las casas también comían. Esa parece ser una igle-sia muy alegre. • Ministerios. En todo el pasaje se notan los ministerios de predicación, de servicio, de enseñanza, de hospitalidad, de generosidad.

Qué hermoso sería tener una iglesia así!


a. Tengo una amistad profunda y honesta por lo menos con un amigo crey-ente.

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b. Me gusta la manera en que mi grupo de estudio bíblico funciona como una comunidad de amor.

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c. Busco maneras de servirles a otros creyentes. 1 2 3 4 5

d. Uso las Escrituras para apoyar y darle ánimo a mis amistades. 1 2 3 4 5

e. Mezclo mis amistades creyentes y no creyentes. 1 2 3 4 5

PREGUNTAs DE EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. ¿Cómo podrías tú contribuir para tener una iglesia como la que se mues-tra en Hechos 2:42-47 y 4: 32-37?

2. ¿Qué papel juega la oración en la vida de la iglesia Summit en Español? Describe tu vida de oración.

3. En el relato de Hechos 2 y 4 se observan claramente el evangelismo y el discipulado que los primeros cristianos recibieron. ¿Cómo podría tu grupo de estudio bíblico cumplir con esos ministerios?

Semana Cuatro: La Comunidad

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4. Cuáles casos de generosidad has logrado presenciar en SEE cuando ha habido necesidades específicas de algún miembro? ¿Cuál ha sido tu respuesta?

5. Parte de nuestra generosidad debe ser nuestro apoyo para personas que Summit en Español ha comisionado para llevar el evangelio a otros países. Otra faceta de la generosidad sería ayudar a personas que no tienen trabajo o a personas que están enfermas. ¿Cuál será tu aportación a cubrir alguna de estas necesidades?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos o tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Comienza dándole gracias a Dios por tu comunidad y orando por sus necesidades. Haz una lista de la gente con quien más compartes ese sentir de ser comunidad. Dale gracias a Dios por su gracia demostrada en esas amistades. Toma unos minutos para orar específicamente por ellos y sus necesidades. Lee Efesios 4:29 y Filipenses 2:1-4. Ora que tus interacciones con otros sean caracterizadas por este tipo de humildad y devoción. Lee el Salmo 133. Ora que nuestra iglesia sea caracterizada por un amor genuino el uno con el otro y una unidad centrada en la misión que Dios nos ha dado.


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5L A F E

H e c h o s 3 : 1 - 2 6


COMENTARIOEn el principio de cualquier movimiento (en este caso, el principio de la iglesia cristiana), es importante estar seguro de que todo el mundo sepa lo que está pasando y por qué está pasando. Eso fue el caso con la venida del Espíritu Santo en el Día de Pentecostés, y lo vemos aquí otra vez en el capítulo 3 de Hechos cuando ocurre un milagro muy notorio. La curación del hombre cojo desde su nacimiento no fue el primer milagro en la vida de la iglesia naciente. Toda la vida de la iglesia en esos días estaba llena de milagros. Por ejemplo: el cambio asombroso que la resurrección de Jesús produjo en los discípulos (los cambió de hombres derrotados a hombres de mucha fe y valor), el hecho de que gente de muchas naciones oyeron a un grupo de galileos hablar cada quien en su lengua materna, la unidad que se produjo en gente de tantas diferentes culturas al concluir ellos que Jesús era el Mesías, la extraordinaria genero-sidad que surgió en la comunidad cristiana frente a las necesidades de más de 8,000 nuevos creyentes (muchos de los cuales habían venido de otras ciudades y países). Todos estos fueron milagros asombrosos. Pero el milagro del capítulo 3 fue de alguna forma más física, más espectacular, más personal . . . y más abierto a una mala interpre-tación. El capítulo 3 de Hechos trata el tema del origen de los milagros y de cómo surgen los milagros. Esos fueron temas muy importantes durante el principio de la iglesia cristiana en Jerusalén, y siguen siendo de mucha importancia hoy en día por el contexto en que vivimos. La experiencia de encontrar a personas pidiendo limosnas en un lugar público fue cosa de todos los días en esos tiempos. Es una expe-riencia muy común también en América Latina. Pero la compasión que los discípulos aprendieron con Jesús hizo que ellos vieran más allá de la necesidad económica de ese hombre. Sabían que Dios podría resolver su

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necesidad más básica: sanidad espiritual y a la vez física. Por esto, el enfoque de este capítulo no está en el mendigo y sus necesidades, sino que está en Jesús, el Mesías, quien puede transfor-mar al mendigo mucho más allá que simplemente resolver una necesidad económica. Hechos 3 nos enseña que la fe es una confianza en Cristo que afecta TODA la vida. Nuestras habilidades no son eficaces. Pedro mismo le explicó a la multitud que la restauración de la salud del mendigo, un evento lleno de fe, no tuvo nada que ver con piedad personal o poder humano (v. 3:12). El poder para sanar es externo, no interno. Por lo tanto, el objeto correcto de nuestra fe es de suma importancia. Jesús es el único con las cualidades, habilidades, y poder para redimir y salvar. Por eso, el sermón que predicó Pedro, fue una expresión de la grandeza de Dios y de la preeminencia de Jesús – el Cristo; Él es el objeto de nuestra fe, en un sentido global, el remedio para toda enfermedad. Un corazón enfocado en la grandeza de Jesús se desborda en una gran fe. Es esencial que veamos Hechos 3 como nuestra historia. Nosotros somos el mendigo anónimo. Los impedimentos físicos de ese hombre son sinónimos con nuestra propia condición espiritual delante de Dios. Igual que a él, nuestras vidas han sido dañadas por el pecado desde que naci-mos. La deficiencia del mendigo lo llevó a una dependencia en las limos-nas, lo que implicaba que necesitaba de la misericordia, la compasión, la gentilidad y la bendición de otros. Nuestra condición humana nos convierte en discapacitados espirituales, personas que necesitan las bendiciones y misericordia de Dios. Hoy en día, como en el primer siglo, no es que la iglesia no se preocupe por las necesidades económicas o físicas de las personas, sino que sabe que la forma más completa y duradera de encarar esas nece-sidades es lograr que estas personas conozcan al Autor de los milagros y que se integren en una comunidad de fe (la iglesia). Jesús les puede trans-formar la vida, cambiar sus valores y ayudarlos a vivir como Dios quiere que vivan. A tales personas, la comunidad de fe les puede ayudar a suplir sus necesidades físicas, a la vez que las ayuda a empezar una relación personal con Cristo y las apoya en su crecimiento espiritual. Otra cosa que vemos en este capítulo es la habilidad que tenían los cristianos de aprovechar cualquier situación inesperada para dirigir la conversación hacia la fe en Jesucristo y cómo Él transforma la vida. El propósito de Pedro y Juan (al sanar al cojo) no fue crear una oportunidad para testificar. Ellos respondieron a la necesidad del mendigo por un interés genuino en su bienestar total. Pero ya que esa ayuda causó que


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mucha gente viniera corriendo a ver esa cosa increíble, Pedro aprovechó la oportunidad para explicar lo que pasó y para llamar a la gente al ar-repentimiento y fe en Jesús. Esta es una lección que nosotros debemos aprender. Debemos mejorar nuestra habilidad de encaminar conversaciones cotidianas . . . o eventos inesperados . . . hacia una oportunidad de compartir nuestra fe y la necesidad de tener una relación personal con Jesucristo.


a. Yo acepto que soy un discapacitado(a) espiritual. 1 2 3 4 5

b. Yo no podría afirmar que Jesucristo ha hecho grandes cosas en mi vida que les son evidentes a otros.

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c. A mí, sí es importante que yo reciba crédito por cosas que hago bien. 1 2 3 4 5

d. Estoy consciente de la presencia y el trabajo del Espíritu Santo en mi vida.

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PREGUNTAs DE REFlEXIÓN Y DIsCUsIÓN1. De lo que sabes de la religión de los judíos en el tiempo de Jesús y el co-mienzo de la iglesia, ¿Cómo piensas que ellos contestarían esta pregunta: “¿Qué hay que hacer para estar bien con Dios?”?

Semana Cinco: La Fe

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2. ¿Cuál fue la diferencia entre cómo ellos creían y el evangelio que Jesús predicó?

3. En el relato en Hechos 3, ¿quién tuvo fe en Jesús?

4. ¿Qué es lo que hace que la fe sea “fe salvadora”? ¿Qué es lo que hace válida la fe de uno? ¿Qué papel juega la “cantidad” de fe que uno tenga?

5. En la introducción a este estudio dice, “es importante estar seguro de que todo el mundo sepa lo que está pasando y por qué está pasando.” En el relato en Hechos 3, ¿qué está tratando de aclarar Pedro con su sermón improvisado?

6. Pedro continúa su práctica de citar versículos del Antiguo Testamento para apoyar sus declaraciones de que Jesucristo es el Mesías prometido en el Antiguo Testamento. En este sermón hace mención del “Santo y Justo” (citando el Salmo 16 que también citó en el capítulo 2) y cita Deuteronomio 18:15, 18-19. ¿Por qué piensas que Pedro cita tanto al Antiguo Testa-mento y especialmente a Moisés?


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7. ¿Habrá alguien a quien los miembros de tu Grupo de Estudio Bíblico, o dos o tres de ellos, podrían servirle de catalizador de fe para que él o ella llegue a tener una relación personal con Jesucristo por medio de recibir un acto de amor y fe de parte de ustedes?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos o tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Empieza el tiempo de oración con un tiempo de adoración. Cu-ando piensan de la grandeza de Dios, Su fidelidad, la suficiencia de Cristo, ¿cuáles son los pasajes bíblicos que vienen a la mente? Apunten esos pas-ajes. Usen estos y sus propias experiencias para regocijarse en la bondad de Dios. Clamen a Dios por Su ayuda en sus vidas. ¿Cuáles necesidades personales o quebrantamiento quisieran traer a Dios? Lean Salmo 50:15. Pidan que Dios les ayuden en sus necesidades. Pasen tiempo orando por los que les rodean que son quebrantados y necesitados. Pidan que Dios los use para suplir sus necesidades.

Semana Cinco: La Fe

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6L A O S A D Í A

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COMENTARIOTiene un significado profundo el hecho de que las primeras palabras regis-tradas en la biblia, dichas por Jesús, después de haber resucitado, fueron: “ —No tengan miedo” (Mateo 28:10 NVI). El pasaje del libro de Hechos que estudiamos hoy está profunda e íntimamente relacionado con uno de los mandamientos más importante que Jesucristo nos dejó. “Por tanto, vay-an y hagan discípulos de todas las naciones”. (Mateo 28:19-20 NVI) Dios en su inmensa perfección, reservó lo mejor para el final, justo cuando los seguidores y perseguidores de Cristo creían que todo había acabado, que Jesús había quedado en la cruz. Dios Todopoderoso no solamente los sorprendió a ellos resucitándolo, sino que incluso hoy nos deja maravillados al revelarnos la perfección de Su plan. Antes de envi-arnos a trabajar, nos alertó: “no tengan miedo”. Luego nos ordenó “vayan y hagan discípulos”, y acto seguido, nos dijo por que no deberíamos temer: “les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.” En otras palabras, es como si nos hubiera dicho: “Sé que no es fácil, pero no temas, ve, haz discípulos, que yo estaré contigo en cada una de las dificul-tades que sobrevengan; ellas pueden sorprenderte a ti, pero no a Mí.” Aun sabiendo que Dios está a nuestro lado, no podemos olvidar que si “Los reyes de la tierra se rebelan y los gobernantes se confabulan contra el Señor y contra su Ungido”, (Hechos 4:26) más rápido y con mayor facilidad lo harán en contra de ti al estar cumpliendo con el man-damiento dado por Jesucristo. Predicar la palabra de Dios conlleva riesgos que, en conse-cuencia, nos generan miedo, algunos irracionales, otros muy reales. Las dificultades, los obstáculos, problemas y pruebas siempre estarán pre-sentes. Seremos objeto de burla, discriminación, injusticias, e incluso enfrentaremos situaciones difíciles, permitidas en nuestro camino por Él, quien nos ha enviado a trabajar.

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Seguramente ya has experimentado, o acabas de pensar lo difícil que es cumplir esta misión y es cierto, es difícil, pero recuerda: Jesús cum-pliendo su misión, al igual que tú, también sintió miedo y angustia: «Es tal la angustia que me invade, que me siento morir (Mateo 26:38 NVI) ¿ Que vas a hacer? ¿Escogerás muerte o escogerás vida? ¿Huirás o harás como Cristo, quien oró y le pidió valor al Padre para poder con-tinuar con Su misión? Este pasaje nos llama a actuar como Pedro y Juan. Las autori-dades, temerosas de perder poder, pero reconociendo el bien que han hecho Pedro y Juan simplemente les dicen que paren de hablar. Su re-spuesta? “Nosotros no podemos dejar de hablar de lo que hemos visto y oído” (v.20). Ante las amenazas de las autoridades, uno entendería si los creyentes estuvieran orando por un rescate de la persecución. En vez, vemos que oran por la valentía de declarar su palabra (v. 29-30). Es más, vemos que al citar el Salmo 2, declaran que Dios es soberano sobre reyes y gobernantes. En vano estos se oponen a Dios, no simplemente porque Él es Todopoderoso y los puede destruir, pero porque Él puede usar hasta sus planes malos para cumplir Su voluntad. Los discípulos oran con osadía porque están basando sus oraciones en la Palabra de Dios. Recordando las palabras de Dios en el pasado, claman las promesas de Dios para el presente. Si no sabes qué hacer, relee el pasaje de hoy y actúa como Pe-dro y Juan, ora y pídele a Dios que a través del Espíritu Santo te dé valor para cumplir, sin temor, tu misión. Luego sal confiado, con aptitud de osadía, ante las dificultades, los obstáculos, problemas y pruebas y haz nuevos discípulos. ¿A qué le temeremos, si el Creador de todo cuanto existe está de nuestro lado?


a. Mi tiempo de oración se caracteriza por orar con atrevimiento. 1 2 3 4 5

b. Estaría dispuesto a compartir mi fe en Cristo a una audiencia hostil. 1 2 3 4 5

Semana Seis: La Osadía

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c. Confío en Dios completamente con mi vida. 1 2 3 4 5

d. ¿Qué nos detiene de tener osadía por Cristo en la manera que la tenía Pedro y Juan?

e. ¿Cuál de tus tiempos devocionales tuvo el máximo impacto personal esta semana? ¿Por que?

PREGUNTAs PARA EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. El miedo o temor es una emoción caracterizada por un intenso sen-timiento, habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado. Es una emoción primaria que se manifiesta en todos los animales, incluyendo al ser humano. ¿Cuáles son tus miedos a predicar el evangelio de Jesús? Compartalos con el grupo.

2. Una vez identificados tus miedos a “ir a hacer discípulos” ¿Cómo piensas que puedes superarlos?

3. Si la oración debe ser nuestra primera defensa ante el temor de ir a hacer nuevos discípulos, ¿Qué debemos pedirle a Dios en oración?


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4. ¿Por qué crees que es tan importante que el primer mandamiento que nos dio Jesús después de resucitar fue ir a hacer discípulos?

5. ¿Cómo puedes adaptar la respuesta que Pedro y Juan le dieron a la jerarquía religiosa a tu vida diaria?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos o tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Toma unos momentos para pensar en oposición o resistencia que has enfrentado en tu vida. Piensa en la grandeza de Dios. ¿Cuáles pas-ajes bíblicos vienen a tu mente? Usa Su palabra para adorar a Dios. Pídele a Dios que te enseñe dónde y con quién debes ser intencio-nal y tener osadía presentando el evangelio. Lee los siguiente pasajes y ora que Dios haga todo lo que ha pro-metido hacer: Filipenses 1:6, Romanos 8:28-29, y Salmos 138:7-8.

Semana Seis: La Osadía

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7U N T E M O R M AYO R

H e c h o s 5 : 1 - 4 2


COMENTARIOEl tema de la semana pasada continúa en esta semana. ¿Por qué los discípulos en el capítulo 4 no les temían a los líderes religiosos? Porque temían a Dios, y tener un respeto y honra hacia Dios significa que uno no tiene que temerle a ningún hombre. El capítulo cinco inicia con el pecado de Ananías y Safira. ¿Por qué esta pareja cayó en el pecado? Porque no temían a Dios. Este relato enseña que debemos tener un temor santo hacia el Espíritu de Dios. Él camina a nuestro lado en todo momento, pero no debemos pensar en Él como “mi cuate” o “mi amigacho”. El pecado de Ananías y Safira no fue que retuvieran parte del precio del terreno; su delito fue tratar de engañar a los apóstoles y la iglesia con una mentira. Su error fue pensar que a Dios no hay que temerle, que Él no lo sabe todo, o que mentirle no tendrá consecuencias drásticas. Podrían haberse quedado con todo el precio de la venta, si así gustaban (v. 4). Su delito fue que querían el reconocimiento y el “estatus” que creían que las personas que vendieron y ofrendaron el precio total de sus propiedades estaban recibiendo. Su pecado fue orgullo, un deseo de recibir honra, de compararse con otros . . . y de mentir para tratar de conseguirlo. Su problema fue que no les temieron a los hombres porque sabían que a ellos los podrían engañar, pero se les olvidó que a Dios nadie lo engaña. La muerte de Ananías y Safira fue, en realidad, una misericordia para muchísimas personas, pues haría que se examinaran estrictamente a sí mismas, con oración y terror de la hipocresía, codicia y vanagloria. Sa-ber de su castigo la haría pensar dos veces a toda persona que pensara que no era necesario temerle a Dios. Uno sabe que tiene un temor salu-dable hacia Dios cuando ese temor lo(a) lleva a actuar con valor y vivir en una forma radical.

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Luego, en los versículo 14-15, Lucas relata el crecimiento numérico vertiginoso de la iglesia. El crecimiento total de creyentes fue tan rápido que Lucas ya no da el número de ellos. Los líderes religiosos estaban celo-sos, pues Pedro y los demás creyentes tenían más respeto entre el pueblo que el que los líderes religiosos recibían. La diferencia radicaba en que los líderes religiosos demandaban respeto y reverencia para ellos mismos, mientras que la meta de los apóstoles era lograr respeto y reverencia ha-cia Dios. A los apóstoles no se les daba respeto porque ellos lo merecían, sino porque sus vidas reflejaban el impacto de Jesús en ellas. Sin embar-go, eso no implicaba que estaban libres de azotes y persecución. Esto nos enseña que la fe en Dios no elimina los problemas, sino que nos capacita para enfrentarlos sin temor, porque los pone en la debida perspectiva. Tú no puedes esperar que todos reaccionen favorablemente cuando anuncies algo tan dinámico como tu fe en Cristo. Por el contrario, espera algunas reacciones negativas; pero recuerda que debe interesarte más servir a Dios que recibir la aprobación de los hombres. Los apóstoles volvieron a predicar después de las persecuciones y maltratos que sufrieron, y esto era por nada menos que por el poder del Espíritu de Dios obrando en el-los. Pero sucedió algo sorpresivo durante esas persecuciones: aparece Ga-maliel, integrante del Sanedrín y un aliado inesperado de los apóstoles, aunque quizá no apoyó sus enseñanzas. Su verdadera intención fue evitar que el concilio tomara acciones agresivas contra los seguidores de Jesús, y que los romanos decidieran tomar cartas en el asunto. Gamaliel presentó algunos consejos sabios sobre cómo reaccionar ante algunos movimientos religiosos: “Si lo que se proponen y hacen es de origen humano, fracasará; pero si es de Dios, no podrán destruirlos, y ustedes se encontrarán luchan-do contra Dios.” (NVI) ¿Alguna vez has pensado que la persecución es una bendición, algo digno de nuestro regocijo? Los apóstoles sufrieron por su fe y ala-baron a Dios porque les permitió sufrir persecución como su Señor.


a. Regularmente miento, sin sentir remordimientos: 1 2 3 4 5

Semana Siete: Un Temor Mayor

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b. Regularmente tomo en cuenta antes de actuar, el hecho de que Dios ve lo que hago o pienso hacer.

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c. Lucho con mantener un balance entre Dios como “ogro” y “mi amiga-cho”.

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d. Padecer por predicar el evangelio me parece exagerado. 1 2 3 4 5

En tiempos anteriores, el templo había sido el lugar donde moraba el Espíritu de Dios. Después del día de Pentecostés y por la salvación que recibimos en Cristo, el Espíritu Santo ahora mora en cada creyente. La iglesia en Hechos tuvo que aprender, como vemos en la historia de Anan-ías y Safira, que este nuevo templo (creyentes!) era igual de santo que el templo del Antiguo Testamento. Con una reflexión sobria de su presencia santa dentro de ti si eres un creyente, y con la esperanza dada por ver-sículos como 1 Juan 1:9 y Santiago 5:16 considera las siguientes preguntas: e. Cuáles son mis motivos cuando tomo decisiones? Le estoy dando más im-portancia (gloria) a mi percepción de seguridad, mis posesiones, alegría, honor de otros hombres, etc…o le estoy dando más importancia a Dios?

f. Como le he mentido al Espíritu Santo al pretender ser alguien que no soy, efectivamente descreditando su poder y presencia en mi vida? Dios nos ofrece gracia y misericordia en esta vida, acude a él y recuerda su fidelidad, justicia, y perdón.

PREGUNTAs PARA EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. ¿Por qué fue el castigo de Ananías y Safira tan severo?


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2. ¿Por qué piensas que a nosotros nos daría miedo que nuestros padres, o nuestro cónyuge o nuestro jefe se diera cuenta de algo que estamos ha-ciendo, pero no nos preocupa del hecho de que Dios se dé cuenta de todo lo que hagamos? ¿Por qué nos preocupa más que los hombres sepan algo, pero no tememos el hecho de que Dios lo sepa?

3. Para muchos de nosotros, el llegar a conocer el evangelio nos quita de encima un temor de un Dios que vemos como un “ogro”, un ser negativo, vengativo. El amor de Dios, Su aceptación incondicional, Su paciencia con nosotros nos liberta, nos da nueva vida. ¿Cómo compaginamos estas ver-dades con lo que estamos viendo en Hechos 5: que debemos temer a Dios?

4. ¿Hay campos que en forma general como cristianos hoy en día en que no vivimos con un “temor santo” hacia Dios?

5. Pedro y Juan continuaron predicando a pesar de las amenazas. A lo mejor a nosotros no nos azotan ni encarcelan, pero nos podrían ridiculizar o calumniar. ¿Sabe lo que significa sufrir por el privilegio de anunciarles el evangelio a otros?

Semana Siete: Un Temor Mayor

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6. Lee los versículos 34 al 39. ¿Qué piensas de la sorprendente observa-ción que hizo Gamaliel?

7. Es fácil sentirse atraído a una iglesia por sus programas, buenos predica-dores, tamaño, comodidades o compañerismo. ¿Cómo atraía la iglesia primitiva a los creyentes? ¿Qué hace al cristianismo atractivo?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos o tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Empieza adorando al Señor. Piensa en cómo ves su santidad (juicio del pecado) y misericordia (perdón y restauración) demostrado en la cruz. Dale gracias a Dios y adóralo. Toma tiempo confesando tu idolatría, los lugares donde no le has dado la importancia a Dios. Confiesa y arrepiéntete de cualquier área en la cual pretendes ser alguien que no eres. Recibe y regocíjate en el perdón de Dios (1 Juan 1:9). Ora que Dios te enseñe un temor santo y que te dé confianza en Él, que produce valor.


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COMENTARIOEn el primer estudio vimos que los Apóstoles llevaron a cabo su función de testigos (daban testimonio de la vida y enseñanzas de Jesús, que el-los habían presenciado). Los creyentes “se mantenían firmes en la ense-ñanza de los apóstoles” (2:42). Pero también es evidente que con sólo 12 apóstoles y más de 8,000 nuevos creyentes, los que no eran apóstoles hicieron mucho del trabajo de ministerio en la iglesia. Se encargaban de las reuniones de día en día en las casas. “De casa en casa partían el pan y compartían la comida con alegría y generosidad, alabando a Dios” (2:46-47) En poco tiempo fue necesario ampliar el liderazgo de la iglesia un poco: los siete diáconos se encargaban de un ministerio administrativo y de servicio. Pero con el pasaje que estudiamos esta semana, el Espíritu Santo empezó a romper aun esa esquema de unos que hacían el trabajo es-piritual y otros que hacían el trabajo administrativo. El Espíritu empezó a usar a uno de los diáconos (que ayudaba en la distribución de la ayuda alimenticia y financiera) como canal para obrar milagros. De esta forma, al igual que Pedro y Juan, se encontró un día explicando y defendiendo la fe en Jesús el Mesías. El Espíritu, actuando en la vida de Esteban, estuvo ilustrando las implicaciones de la profecía de Joel que Pedro citó en Hechos 2:16-21. Al derramar Su Espíritu sobre “los hijos y las hijas”, y sobre “mis siervos y mis siervas”, Dios estaba extendiendo al creyente común el derecho y el privilegio de ministrar la palabra de Dios a los que los rodeaban. Ya no sería necesario tener una clase especial de personas (sacerdotes o Após-toles) para llevar a cabo la obra espiritual dentro del pueblo de Dios. Efectivamente, en los años que siguieron, aunque los Apóstoles jugaron un papel muy importante en esparcir el evangelio por el mundo conocido, la mayor parte de la extensión del evangelio se hizo por cristianos comunes,

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hombres de negocios, esclavos, comerciantes, soldados, amas de casa y mujeres de fe que evangelizaban a sus vecinos y familiares. El gran Após-tol Pablo vivía soñando llevar el evangelio a Roma . . . pero cuando por fin llegó a Roma, encontró una iglesia cristiana ya establecida allí. ¿Quién la planto? No sabemos pero posiblemente esclavos del mismo César, o soldados o comerciantes. No la plantó ningún Apóstol. Algunos líderes religiosos lo acusaron de herejía y lo llevaron ante el Concilio, el Sanedrín. Esteban, sin pelos en la lengua, empezó a recor-darles la larga historia de desobediencia y rebeldía de Israel que vez tras vez rechazaba al Espíritu de Dios y se iba tras ídolos. Aunque supuesta-mente pertenecían al “pueblo de Dios”, para ellos era más importante su aprecio por un profeta de Dios (Moisés) que escuchar la palabra de Dios por medio de Su Mesías. Su interpretación de la Ley fue más importante que escuchar al Mesías enviado por Dios. Su comprensión del papel que jugaba el “sábado” y el templo era más importante que lograr una com-prensión verdadera de las buenas noticas sobre cómo tener una relación correcta con Dios. El enfoque del sermón de Esteban fue la rebeldía del “pueblo de Dios” que lo llevaba a adorar ídolos y darles más importancia a cosas secundarias en vez de realmente escuchar a Dios y reconocer a Jesús como el Cristo (Mesías) y prestarle atención al Espíritu de Dios. A veces el pueblo de Dios trata de limitar a Dios a lo que ellos esperan de Él o piensa que Él debe hacer. Tratamos de meterlo en una caja. Como una ilustración de la rebeldía de Israel, Esteban hace ref-erencia a un relato muy interesante: el intento de Moisés a los 40 años de edad de liberar por sus propios esfuerzos al pueblo de Israel de la esclavi-tud, intento que terminó en el asesinato del capataz en Egipto. A pesar de que el método que escogió Moisés no fue correcto, Esteban dice que ese evento fue una ilustración de su rebeldía hacia Él y Sus planes. También menciona al deseo del pueblo de regresar al estilo de vida que tenía en Egipto, deseo que los hizo rebelarse contra el Espíritu de Dios y pedir un ídolo.


a. Yo sí sé cómo Dios quiere usarme para ministrar en la iglesia. 1 2 3 4 5


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b. A mí no me gusta tanto énfasis sobre los “ídolos” que tenemos en nuestras vidas.

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c. Yo sí me puedo ver llevándoles el evangelio a personas de otras cul-turas.

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d. Estoy consciente de los campos en mi vida en que me rebelo contra el trabajo de Dios en mi vida.

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PREGUNTAs PARA EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. ¿Dios (quizá por medio de alguien) te ha estado señalando “ídolos” que tienes en tu vida? ¿Cuáles pueden ser algunos de nuestros ídolos que nos llevan a hacer caso omiso a lo que Dios quiere decirnos?

2. Esteban pasó tiempo en su sermón mostrándoles que el enfoque de Moi-sés no fue en el tabernáculo sino en el profeta (semejante a Moisés) que Dios en el futuro levantaría: el Mesías (v. 37). También dijo que la Ley que Dios le dio tenía como propósito darles vida (“Fue también él quien recibió palabras de vida para comunicárnoslas a nosotros.” v. 38) Sin embargo, la fe de los israelitas se había reducido a legalismos que mataban la vida espiritual. ¿Puedes identificar en la vida religiosa actual elementos de le-galismo que no contribuyen a una relación viva con Dios? ¿Qué diferencias ves en lo que se predica aquí en Summit en Español?

Semana Ocho: El Discurso de un Mártir

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3. Esteban menciona el deseo de los israelitas de tener un dios más tan-gible (un becerro de oro) en vez de “el Dios de ese Moisés que hace 40 días desapareció”. (vv. 39-40) ¿Cuáles semejanzas ves con la religión tradicional de América Latina?

4. Esteban parece indicar en los vv. 42-50 que aun el tabernáculo, y después el templo, se convirtieron en piedra de tropiezo para Israel. De hecho, uno de los cargos contra Esteban fue que enseñaba que Jesús iba a destruir el templo. El templo había llegado a ser más importante que el Mesías prometido que estaba en medio de ellos. Les estaba diciendo que Dios trabaja fuera de edificios y en maneras no esperadas. Para nosotros en Summit en Español nuestro edificio no tiene mucha importancia. Pero ¿has tenido alguna experiencia de Dios que no cuadraba con tu idea de cómo Dios debe actuar?

5. Esteban les dijo, “ustedes, que recibieron la ley promulgada por medio de ángeles y no la han obedecido.” (v. 53) ¿Hay cosas que decimos que hemos recibido de Dios (que supuestamente creemos), pero en realidad no estamos obedeciendo?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos o tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Oren para que el Espíritu de Dios le dé a cada persona en Summit en Español la convicción de que, puesto que tiene el Espíritu, debe estar proclamándoles la Palabra de Dios a otros, o debe estar aprendiendo de


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otro, es decir que debe estar discipulando a otros o pedirle a otro que lo(a) discipule. Pidan que Dios los use a ustedes, a su Grupo de Estudio Bíblico y a Summit en Español para llevarles el evangelio a las naciones. Pidan que Dios les revele a ustedes cuál debe ser su parte en esa misión. Lean 1 Corintios 6:19-20. Pidan que Dios les muestre lo que sig-nifica que sus cuerpos son templo del Espíritu Santo y cómo pueden honrar a Dios con sus cuerpos.

Semana Ocho: El Discurso de un Mártir

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COMENTARIOAl inicio del Cristianismo, los Apóstoles eran los que tenían la responsabi-lidad de dar a conocer la vida y las enseñanzas de Jesús porque ellos habían sido testigos oculares directos de las obras y enseñanzas de Jesús. La importancia de la responsabilidad de los Apóstoles como los que expresaban fielmente los hechos y enseñanzas de Jesús naturalmente les daba una posición única en la iglesia. Esa exclusividad de respon-sabilidad quizá tendía a hacer que el creyente común pensara que no cualquiera podía ser usado por Dios para extender la fe cristiana. Entre los cristianos en Jerusalén pronto era evidente que se esperaba ciertos ritos y formas de vida de los que querían seguir a Jesús. Este capítulo de Hechos nos muestra cómo, por la acción del Es-píritu Santo, esas jerarquías y procedimientos son dejados de un lado. Fe-lipe y Esteban no fueron testigos oculares de todas las obras de Jesús, en consecuencia, según la costumbre no podían ser considerados Apóstoles. Ellos fueron eligidos “diáconos”, personas que se ocupaban en asuntos ad-ministrativos y logísticos. Tenían responsabilidades importantes dentro de la incipiente estructura de la iglesia cristiana porque se encargaban de repartir los alimentos, hecho que liberaba a los Apóstoles para dedicarse a la oración y a la proclamación de la revelación de Dios. Si trasladamos sus funciones a nuestros días, sin temor a duda podemos aseverar que Fe-lipe y Esteban eran los mesoneros de la congregación. No habían estado con Jesús desde el principio; no fueron discipu-lados directamente por el Maestro, así que no calificaban para la posición de Apóstoles. Pero la acción del Espíritu Santo, narrada en Hechos, clara-mente muestra que el Espíritu de Dios rompe el paradigma de quién puede ser Su mensajero, quien puede propagar Su amor y obras entre su entorno o a cualquier persona que sea puesta en su camino.

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Nuestro Padre celestial, llama a cada hijo Suyo a que participe en Su misión, sin importar cuánto sepa acerca de las Escrituras o con cuánta in-tensidad busca servirle. Así como Dios instruyó a Felipe y Esteban a través del Espíritu Santo, también instruye a cada creyente a ser un mensajero efectivo en la propagación la palabra. Dios, por medio del Espíritu Santo quiere ministrar a tu entorno, quiere usarte para que seas quien lleve Su mensaje en tu grupo laboral, familiar, entre tus amistades o conocidos, a la cajera del mercado en donde compras tus alimentos. Cuando aceptes el llamado a hacer discípulos en todas las naciones, el Espíritu de Dios que está en ti te guiará y protegerá, y en el camino tendrás la ayuda de Sus demás enviados para apoyarte. No es necesario mucha preparación en teología, o una vida libre de manchas, o un caminar perfecto con Cristo para realizar el trabajo que Él nos ha encomendado. No, nuestro Dios nos llamó a nosotros, personas sencillas, sin ninguna capacidad extrasensorial especial, sin doctorado en teología, hacedores constante de errores, pecadores, para ser Su voz. Si piensas que no tienes ningún talento para esto, recuerda, Dios escogió a un hombre con impedimentos lingüísticos, a un gago, para que fuera Su voz en la liberación de Israel. Tú puedes ser el mensajero de Dios.

A QUIEN lE DEbEMOs PREDICARLa iglesia naturalmente pensaba que quienes aceptaban a Jesús tenían, que convertirse al judaísmo. Al principio no le predicaban de Jesús a gente no judía, y si algún no judío se convirtía, consideraban que tenía que hacerse judío antes de seguir a Jesús. Pero el capítulo 8 nos muestra que el mensaje ha de ser llevado a todos; no hay distinción. Esta escena entre Felipe y el eunuco demuestra cómo el evangelio destruye divisiones étnicas y crea un hogar para aquellos sin identidad o familia (el eunuco en esa cultura usualmente era menospreciado y tratado como alguien aparte y aislado). El evangelio permite que todo el mundo tenga un futuro en la familia de Dios, ¡cosa que ciertamente es un mensaje de buenas nuevas! Felipe fue enviado a evangelizar al eunuco no judío. Y ese eunuco fue quien llevó el evangelio por primera vez a África. Nosotros no conocemos el plan de Dios, ¡no sabemos qué tiene Él preparado para la persona que ha cruzado nuestro camino! Hay cientos de millones de personas alrededor del mudo, espe-rando que alguien les explique las Escrituras. Pero no necesitas preparar una campaña para evangelizarlos, comience por mirar a tu entorno, segu-ramente habrá unas cuantas docenas de personas esperándote a ti.

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a. Le pongo más valor al propósito de Dios en mi vida que a mi carrera o status social.

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b. Me considero un misionero en mis esferas de influencia. 1 2 3 4 5

c. Estoy comprometido(a) a llevarles el evangelio a los pueblos no alcanza-dos.

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d. Me mudaría a otra ciudad si Dios me llamara a ser parte de su mission allá.

1 2 3 4 5 e. Vamos a hablar hipotéticamente: Si surgiera una oportunidad para mudarte a otro país y llevarle el evangelio a un pueblo no alcanzado, ¿cuáles serían las barreras que me detendrían de decirle “sí”?

f. Si surgiera la oportunidad de ir por dos semanas a ministrar en un pueb-lo no alcanzado, que te detendría de hacerlo?

PREGUNTAs PARA EsTUDIO Y DIsCUsIÓN1. ¿Qué calificaciones profesionales, espirituales o teológicas necesitas tener antes de aceptar el llamado de Dios? Explíquelas.


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2. ¿Qué obstáculos reales ves que te dificulten aceptar el llamado a evan-gelizar? Enumérelas y explíquelas.

3. Muchos de nosotros, quizá inconcientemente, descalificamos a ciertas personas de recibir de nosotros un testimonio acerca de Jesús. ¿A cuáles clases de personas tendemos a pensar que no debemos compartir el evan-gelio? ¿Por que no debes seleccionar a quien le compartirás la palabra?

4. ¿Viene a tu menta alguna persona con quien en esta semana debes tratar de compartir el evangelio, y que quizá sin que ella o él lo sepa, está esperando para que le expliques las Escrituras?

5. ¿Apoya tu grupo apoya a algún misionero? Si no, ¿cuáles pasos pueden tomar para hacerlo? Si sí, ¿qué pueden hacer esta semana para apoyarlos y darles ánimo?

GUÍA PARA ORACIÓN EN GRUPODivide el grupo en grupos de dos o tres personas. Así se aprovechará al máximo el tiempo de oración. Haz una lista de gente que conoces en el campo misionero. Toma unos minutos para orar por ellos.

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Ora que Dios te muestre oportunidades para ir a un viaje de corto plazo entre los pueblos no alcanzados. Ora que remueve todas las bar-reras, reales o percibidas! Ora que Dios te muestre a la gente aislada y menospreciada a tu alrededor y que te utilice para mostrarles el evangelio de una manera viva y real. Ora que el poder del amor de Dios transforme la identidad de los menospreciados, que encuentren esperanza, libertad, y gozo en El.


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