La Hermana de La Bella Durmiente

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  • 7/25/2019 La Hermana de La Bella Durmiente

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    La hermana de la Bella Durmiente

    I

    Los padres de la Bella Durmiente celebraban el cumpleaos nmero quince de su segunda

    hija.

    Veinte aos atrs, su primognita, los mismos rees toda la poblaci!n de "alacio se hab#an

    sal$ado, gracias al beso del pr#ncipe, del sueo eterno en el que los hab#a sumido la maldici!n

    de la bruja %gatha &tambin conocida como el 'ada (ala&. (aldijo a Bella, la primognita,

    en su cumpleaos nmero quince, precisamente por no haber sido in$itada a la )iesta. La

    conden! a dormir por siempre en cuanto se pinchara con una aguja. De no ser por el beso en

    los labios del pr#ncipe *omo, an estar#an durmiendo.

    Los rees hab#an recibido el nacimiento de Bella como un milagro, puesto que por entonces

    lle$aban muchos aos de casados sin que la "ro$idencia los hubiese bendecido con la

    llegada de un hijo. + luego de que el pr#ncipe anulara el hechio, al poco tiempo dieron al reino

    la buena nue$a de que un hijo ms $en#a en camino. -ue una hermosa princesita a la que

    llamaron o)#a. %hora cumpl#a quince aos.

    Las horribles circunstancias del cumpleaos nmero quince de Bella hab#an escarmentado a

    los rees, -la$io %driana. +a sab#an que no bastaba con todo el poder ni el dinero ni los

    guardias del mundo para garantiar la seguridad de sus hijas. "ero, aunque nada )uera

    su)iciente, deb#an preca$erse con inteligencia astucia para que el destino de las j!$enes

    )uera lo ms seguro posible.

    "or ello, para el cumpleaos nmero quince de o)#a con$ocaron al reino al pro)esor

    trogono)), quien estaba reputado en toda /uropa como sabio prominente, e0perto en

    estrategia, seguridad trato con los poderes e0traterrenales.

    /l pro)esor /mil trogono)) era un hombre de cincuenta aos, de mu buen $er, con una

    tupida barba blanca, una mirada intensa brillante. Lleg! a "alacio en un carro tirado por

    dos caballos, acompaado por cuatro guardias del reino de Basilea, de donde pro$en#a, a

    llegar al sendero real se le sumaron cuatro guardias montados ms, en$iados por -la$io

    %driana.

    Luego de una op#para merienda, el sabio durmi! una necesaria siesta, por la noche, luego

    de la cena &porque mientras se come no se trabaja&, -la$io, %driana /mil trogono)) se

    reunieron en la ala de 1on)erencias real para debatir el tema2 c!mo asegurar el buen

    transcurrir de la )iesta de quince aos de o)#a.

    trogono)) pidi! todos los documentos re)eridos al cumpleaos nmero quince de Bella, a

    %gatha a las 'adas Buenas.

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    &/s e$idente &les dijo el sabio a los rees& que $uestra preocupaci!n de$iene del mal

    trance $i$ido hace $einte aos, cuando el cumpleaos nmero quince de $uestra primognita.

    Lo primero que debemos e$itar es que se repitan semejantes sucesos.

    -la$io %driana asintieron.

    Los tres con$ersaron horas sobre cada uno de los detalles que hab#an precedido a laceremonia, a la aparici!n intempesti$a de %gatha a la maldici!n. /l pro)esor trogono)) le!

    una $e ms los documentos delante de los rees , no contento con ello, se lle$! los papeles

    a la cama.

    &(aana por la maana &dijo el pro)esor&, luego del desauno, les recomendar un plan

    de acci!n.

    Los rees pasaron una mala noche, aguardando con ansiedad la sugerencia del sabio.

    %l d#a siguiente, como hab#a prometido, luego de los canaps de lengua de ruiseor la leche

    con licor que los rees acostumbraban desaunar, trogono)) present! su plan de seguridad.

    II

    &3ui mi idea les resulte pueril o in)antil &dijo el pro)esor&. "ero a menudo los peligros

    ms di)#ciles se alejan con las respuestas ms simples. Lo s por mi ser$icio a las !rdenes de

    buena parte de los poderosos de la 4ierra2 rees, emperadores hombres ricos o ilustres. "or

    todo lo le#do con$ersado, tengo para m# que el nico peligro real cercano que ho

    a)rontamos es la misma %gatha. %n $i$e ans#a $engana. /s cierto que a lo largo de su

    $ida la princesa o)#a en)rentar muchos otros peligros &no podemos pre$er la maor#a de

    ellos&, para entonces, si la buena )ortuna lo quiere, ella a estar casada, protegida por un

    gran seoir, ser lo su)icientemente grande como para saber preca$erse o bien recurrir a m#

    de nue$o, que estar siempre a $uestras !rdenes. "ero el desa)#o de la presente hora es

    impedir que en la pr!0ima )iesta, en la )lor de su edad, la princesa o)#a su)ra un destino

    semejante al de $uestra primera hija. "or lo tanto, mi consejo es in$itar a la bruja %gatha a la

    )iesta.

    III

    /l re la reina casi se caen para atrs en sus con)ortables sillones.

    ab#an que la bruja $i$#a, pero ten#an la esperana de no $ol$er a $erla por el resto de su $ida.

    5In$itarla a la )iesta, nada menos... 6a la responsable de la peor tragedia que hab#an $i$ido78

    &"ero... pero... &tartamude! el re -la$io, que nunca tartamudeaba&. 51ul es el sentido

    de in$itar a nuestra peor enemiga a la ms importante de nuestras )iestas8

    &(is queridos rees &respondi! trogono)) con la calma que lo hab#a hecho clebre.

    9stedes saben tan bien como o que la bruja %gatha lan! su maldici!n sobre Bella con

    moti$o de no haber sido in$itada a la )iesta. "ues... 6pre$engmonos7 In$itmosla a la )iesta de

    o)#a quitmosle todo moti$o para atentar contra la )amilia real. Deben saber, $uestras

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    majestades, que la pa se hace con los enemigos. :o hace )alta hacerla con los amigos, pues

    con ellos a e0iste una relaci!n pac#)ica. Les recomiendo in$itar a %gatha, como si )uera otra

    de las brujas buenas. (s $ale tenerla de in$itada que de enemiga.

    Los rees pidieron al pro)esor tiempo para meditar su consejo.

    e retiraron a la alcoba real regresaron cuando trogono)) termin! su almuero. /l pro)esorles pidi! permiso para retirarse a su siesta diaria antes de recibir la respuesta real, sus

    an)itriones se lo concedieron. "or la tarde, -la$io %driana respondieron que aceptaban el

    consejo2 in$itar#an a %gatha a la )iesta.

    IV

    :o se recordaba en el reino una )iesta tan )astuosa, elegante clida desde la boda de Bella.

    De todos los reinos, de todos los imperios, e incluso de aquellos pa#ses donde a no hab#a

    rees ni emperadores concurrieron in$itados2 gentes de la corte, grandes dignatarios,

    cient#)icos e historiadores de escasos recursos econ!micos. 4ambin, por supuesto, las tres

    hadas buenas2 (arcia, -lora %ulina.

    1omo a todos los in$itados, los rees hicieron llegar a %gatha una tarjeta enmarcada

    bordada en oro, con$ocndola al cumpleaos de quince de o)#a. "ero cuando a el banquete

    promediaba, la bruja no se hab#a hecho presente.

    -la$io la aguadaba con en)ermia ansiedad, pero %driana comenaba a concebir la esperana

    de que no concurriera. /mil trogono)) manten#a su impasible calma.

    "ara los postres, poco antes de que %driana se dispusiera a decir unas bre$es palabras

    regalara a su hija una corona de oro perlas, una pro$incia oriental; poco antes de que las

    tres hadas buenas bendijeran a la quinceaera con dones sobrenaturales, un rao siniestro

    atra$es! el gigantesco sal!n apareci! %gatha )lotando justo en el medio entre el piso de

    plata el techo de mrmol.

    &(alditos &grit!&. (alditos los rees, malditos los in$itados maldita la homenajeada.

    -la$io trag! sin masticar el troo de pastel que ten#a en la boca2 5acaso no le hab#a llegado la

    in$itaci!n8 64res pajes dos guardias le aseguraron que la hab#a recibido la bruja en persona7

    trogono)) mir! con se$eridad a la reina %driana2 5acaso no hab#an seguido su consejo, no la

    hab#an in$itado8

    -ue %driana, demostrando la pro)undidad de la oculta $alent#a de las mujeres, la que se

    atre$i! a responderle con un grito de madre injuriada2

    &4e hemos in$itado a nuestra )iesta, %gatha. 1omo a todos, te en$iamos una tarjeta

    enmarcada bordada en oro. 5"or qu no ocupas tu lugar en la silla, lo que te ha sido

    o)recido en buena le, en lugar de amenaarnos sin sentido8

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    &1laro que me habis in$itado, desdichados. 'e llegado un poco tarde, pero de todos modos

    antes de que termine la )iesta. % tiempo para condenar a tu hija a que duerma eternamente no

    bien se pinche con una aguja.

    "ro)erida la maldici!n, lan! un nue$o rao, s!lo sobre o)#a, que la hio brillar malsanamente

    durante un segundo. Las hadas, una $e ms, nada pod#an hacer para romper ese hechio.-la$io, alentado por la $alent#a de su esposa, grit! a la bruja2

    &61!mo te atre$es, ingrata7 /n la )iesta anterior nos dijiste que tu )uria se deb#a a que no te

    hab#amos in$itado... 5"or qu nos atacas ahora8

    %gatha se tom! un instante para responder, como si lo pensara, habl! con indolencia2

    &'e descubierto algo sobre m# misma creo que tal $e ustedes debieron haberlo sabido

    antes que o2 so mala porque s#. :o me importa si me in$itan o no a sus )iestas; maldecir a

    cada una de sus hijas.

    &4iene toda la ra!n, (ajestad &dijo trogono)) sin perder la calma&. *eintegrar $uestros

    honorarios abandonar mi pro)esi!n. De)initi$amente, hace )alta ms que un estratega para

    $encer el enigma del (al.

    Marcelo Birmajer