Ocho x Ocho Especial 40

Andr Chron Le Temps, 1930

Mate en 3

Problemas a 5 niveles

l:d 'JIJ ejor J~ tJD"'flr'Jrl ..; o-- .... - -JY1JJJJaturaJ d 2

~l y 2 r y d 2 } J o y Mates y remates Finales prcticos

SUPLEMENTO o h AL N1 186 DE LA REVISTA C

8 414090 5 00715

l "LLAl _L l L.

L\_\_tll ~LL IJ /- ~ -, L_ liiJifl,. o

-~

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Toda la Magia de los Juegos en una Caja llena de Sorpresas

YA ESTAN A LA VENTA

MENSUAL AO IV

NMER040

DIRECTOR Ramn Torn . Maestro Internacional.

COLABORADORES Julin Alonso Martn. J. P. de Arriaga. M.l. Alberto Barreras Gorda.

_ G.M. Juan Manu el Belln. M.l. Alexander Bihovsky. G.M. Jaan Ehlvest. G.M. Epishin. El Federal G.M. Svetozar Gligoric. G.M. Flix lzeta G.M. Nikolai Krogius. G. M. Bogdan Lalic. M.l. Juan Reyes. G.M. Oleg Romanishin. A. l. Antonio Romero. Isidoro Snchez de la Nava. G.M. Vesselin Topalov. M.F. Fernando Visier. y la colaboracin exclusiva de: Anatoli Karpov, Campen Mundial.

EDITA ZUGARTO EDICIONES, S. A (Z. U.E.S.A.) Editor: Rafael Taul er Fesser. Publicidad general: ZUGARTO EDICIONES, S. A Redaccin y Administracin: Pablo Aranda, 3 - Tfno: *41 1 42 64 Fax: 562 26 77 28006 MADRID. Impresin: UNJGRAF, S.A. Artes Grficas. Avda. Cmara de la Indus-tria, 38 Polgono In d. Arroyomolinos, 1 - 28938 Mstoles (Madrid) Distribucin: COEDIS, S.A. Tel-fono: 93 - 680 03 60 Molins de Rei (Barcelona) . Impo rtado r exclusivo en la Repbli-ca Argentina: JUEGOS & Co., S.R.L.-Corrientes 1312, ( 1 043) Buenos Ai-res. Distr ibucin en Capital Fede ral, D JSTRIMACH J S.A. , Carlos Calvo 2426 , Bue nos Aires; en Inte rior, D.G .P.S.A., Alvarado 21 18, Buenos Aires. De psito legal: M.22475-1994. OchoXOcho, 1981 . Pro hibida la repro duccin de textos, fotografas o juegos. ni aun citando su procedencia. Precio de este ejemplar para Canarias. Ceuta y Melil la incluido tasas: 200 pesetas. E-mail: [email protected]

Printed in Spain

EL PROBLEMA DE PORTADA Por J. P. de Arriaga

El tema Indio y el Cheney-Loyd

En este problema, Chron supo reunir dos famosos temas que se desarrollan en las dos variantes correspondientes. En ambos temas una pieza se desplaza por la lnea temtica atravesando la casilla crtica, pero en el tema Indio participa en el mate y sin embargo en el tema Cheney-Loyd permanece enmascarada.

&JWDilrtD IR Mates y_ remates 4 Test ~osicional 10 Tctica y_ estrategia 1 1 La mejor jugada 19 Finales ~rcticos 20 Problemas 25 Soluciones 31

JoseGregoCuadro de textohttp://matika-chessismylife.blogspot.com.es/

~M~~~~=Q~~l~~ff~=Q~==~=a~=~----------------~111 "D EJAQ~~~:on~MSnDAMA

Durante un partido de tenis, se producen a veces un tipo de jugadas de bien definidas caractersticas, con las que se pretende desequilibrar el ritmo de juego provocando una crisis en l. Los jugadores estn pasando bolas, ms o menos duras, desde el fondo de la pista; y

de pronto, uno de los jugadores reduce la potencia de su pegada para dejar la pelota muy cerca de la red y lejos, por tanto, de la situacin que ocupa su rival. Estas "dejadas" conllevan

un riesgo y casi siempre conducen a una definicin rpida del juego.

C reo que, en la partida de ajedrez, existe un cierto paralelismo cuando realizamos un t ipo de sacrificio de Dama en el que dejamos "abando-nada" (?)tan valiosa pieza ante la amenaza directa de algn elemento enemigo que podra, sencilla-mente, capturarla . Ya se comprende que, sa lvo que sea un error, ta l "dejada" lleva el veneno incorporado ... (Lo que llamamos sacrificios en ajedrez, tienen siempre ese aadido). Y como, al sacrificar la Dama de esta manera, la "pod erosa seora" no se lleva nada por delante, no resulta difcil deducir que el veneno, en este caso, condu-ce al mate .. . si el contrario tiene la osada de aceptar el regalo envenenado.

Pues bien. Alrededor de este asunto se desarro-lla el juego en las posiciones y partidas que vamos a ofrecer en esta ocasin: uno de los jugadores coloca su Dama en una casilla, anteriormente vaca, donde puede ser capturada por el ejrcito enemigo, gratuitamente -entindase, sin com-pensacin material alguna-. El segundo jugador, que desconfa de los presentes de esta naturaleza, rechaza el ofrecimiento en cuanto comprueba las desagradables consecuencias que se derivaran .. . pero la sacrificada Dama, "rabiosa" por el desdn, volver a ofrecerse de nuevo ... Y, -en nuestros ejemplos resulta as-, al final no hay forma de resistir ante Dama tan insidiosa ...

CANTOS DE SIRENA

En definitiva, estamos hablando de una m anio-bra en que la Dama se ofrece para traer a la casilla que ocupa a una pieza enemiga, desvindola de la funcin que desempeaba, fundamental para la seguridad de su propio monarca .

(ver diagrama) La debilidad de la ltima fila, permiti al primer jugador "olvidarse" de su Dama

1. l;H4! ftl e 7

pues resulta evidente que si 1 .. . t!\i' xd4 sigue 2. z:l, f8 mate.

2 . 'l d7!! rinden

Con esta segunda entrega de la Dama blanca, las negras no pueden vigilar todas las casi llas 4

Duras-Wolf Viena, 1907

de su primera fila que permitiran, al prim er jugador,.darmate(c8, d8, e8 y f8). Muy espectacular resulta la solucin dada por el conductor de las blancas a la situacin de partida que se muestra en el siguiente diagra-ma:

J. .l

Bochoff-Hirz Aachen, 1936

El salto de Caballo a f6, producira el inmediato abandono del segundo jugador que tiene a su Dama impidiendo, desde e 7, la agresin enemi-ga. El Blanco decide "desviar" de su trabajo a

la Seora rival. .. para lo cual, nada mejor que ofrecer gratuitamente(?) la propia:

1. ~a3!

No hubiera sido lo mismo 1. bl. xd7, que habra resultado un error, despus de 1 ... .Q6 x d7 2. bl. xd7 ,!;t 8!, dando la "vuelta ala tortilla" .

1. . .. ~d8

La verdad es que no hay otra respuesta,.pues 1 ... d6; se contesta simplemente con 2. bl. xd6 y el Negro est en situacin perdida.

2. ~f8+!! ~xf8 3. 0> f6 mate

PELIGRO EN LA OCTAVA Conocimos personalmente al GM Suetin (n. 1926) cuando acompa como "segundo" a Petrosian en el match que ste sostuvo con el alemn Hbner, en Sevilla, mayo de 1971.

En la siguiente posicin da buena cuenta de un desconocido oponente ...

9 J. J.

Suetin-N.N. URSS, 1965

A l. ;.

Juegan las blancas que ejercen una considera-ble presin sobre las horizontales del campo enemigo quien, sin embargo, parece haberla contrarresta do, por el momento. 1. lf g4 ... Amenaza mate y el Negro slo tiene una for-ma de impedirlo .

1 ... g6 2. tfl e6+! ...

Un ofrecimiento que no se puede aceptar, porque sus consecuencias seran mortales. 2... h8 3. ~f6+! ...

La Dama blanca insiste y esta vez no hay forma de oponerse a sus malvolas intencio-nes; por eso, las negras abandonaron. (Tam-bin hubiera servido 3. 1ill'e8+ que conduce igualmente al mate en la jugada siguiente) . Resulta muy grato traer a estas pginas la siguiente partida que bien merece el honor de una publicidad ms amplia de la que ha tenido hasta ahora.

Ponce Sala-Parpal Barcelona, 1950

1. e4 c5 2. 0> f3 d6 3. d4 cxd4 4. 0J xd4 0> f6 5. 0J c3 g6 6 . .Q6e2 0> c6 7 . .Q6 e3 .Q6 g7 8. f4

~b6?!

Una imprudente jugada de Dama. A partir de aqu la partida adquiere un carcter muy movi-do.

9. 0> f5! ~xb2 1 O. :'>xg7+ ~f8 11. ~d2 ~xg7 12. bl.b 1 ~a3 13. 0-0 0>d4 ?!

El Blanco tiene un pen menos, pero con to-das sus piezas desarrolladas, y conserva el Alfil que corre por casillas negras. El segundo jugador, por otra parte, sigue haciendo movi-mientos poco consecuentes.

14. e5! 0> xe2+ 15. ~xe2 dxe5 16. fxe5 ~c5+? 17 . .Q6 e3! ~xc3

Evidentemente, 17 .. . ~xe5?? perdera la Dama.

18. exf6+ exf6 19. bl. b3 ~e5 20. ~d2

Poniendo de manifiesto su superioridad sobre las diagonales negras: se apunta a h6 y se amenaza 21 . .Q6 d4 con entrada, lu'ego, en f6. 20 ... .Q6 f5 21 . .Q6h6+ 111l? g8 22. bl. e1 ~c5+ 23. ~h1 ~xc2

5

24. blbe3!! 27. ble6!!

La Dama se deja abandonada porque 25. ble8+ Bello remate de una hermosa combinacin! conducira almate.

24 . ... ~c6

25. ~d5!!

De nuevo se ofrece la Dama, con una conti-nuacin semejante en caso de ser aceptada. Pero es que adems, en esta ocasin, se amenaza:

a) 26. ~xc6 seguida de 27. ble8+ b) 26. ~xf5! gxf5 27. b\g3mate e) 26. ~xf7+ ! ~xf7 27. ble7+ ~g8 28. blg7+

~f8 29. blxb7+, etc., ganando, como de-muestra el conductor de las blancas en sus anlisis.

25. ~e6! 26. ~d4!

Ahora la amenaza es 27 . 'i!xf6, despus de lo cual el mate en g7 no se podra evitar.

26. ... ~d7

6

27. fxe6 28. ~xf6 se rinden

Esta partida se disput en el Torneo Social del Club Barcelona, en 3 categora! Su gana-dor la recoge en un libro del que es autor: Estrategia y Tctica en Ajedrez (Ediciones Zeus, Barcelona 1975).

NO SE FE DE LA DAMA ABANDONADA Ofrecemos ahora dos formidables confronta-ciones que resu ltan paradigmticas en el mbi-to de lo que estamos tratando.

De "Rochade"

Empezamos con una partida que es una verda-dera joya. Aunque haya sido reproducida en innumerables ocasiones, siempre vuelve a verse con la emocin que producen las autn-ticas obras de arte .

E. Z. Adams-C. Torre Nueva Orleans, 1920 (Ahorraremos la transcripcin de las primeras

jugadas que se encuentran en multitud de publicaciones, para enfrentar, cuanto antes,

el siguiente diagrama)

El turno de juego corresponde a las blancas ... Un ligero anlisis de la posicin pone de mani-fiesto la tensin que recorre la columna e, tensin que el primer jugador va a explotar de manera magistral.

17. ~xf6! ~xf6

Ahora se comprueba, adems, que la Dama negra no puede abandonar la vigilancia dee8 .. .

18. ~g4!!

Formidable! Las negras no pueden tomar la Dama ( 18 ... 'li\l' xg4) porque recibiran mate. Tampoco sirve 18 ... Z"l, xe2 ; pues las blancas tomaran la Dama y su Caballo defendera e 1. Ni esposible defender la Dama atacada con 18 .. . Z"l, ed8 ; por 19. 'li\l' xd7 Z"l, xd7 20. &S e8+ y mate.

18 . ...

J.

19. ~c4!!

~b5

.1 w .l.lJ. .i.

La Dama blanca se ofrece ahora para ser tomad a por dos piezas rivales ... pero ninguna de ellas se atrever!

Por otro lado no debemos ignorar que 19. a4, (movida que pareca desviar definitivamente a la Dama negra de la defensa de eS) sera un t r emendo error, debido a 19... 'li\l' xe2! 20 . bl. xe2 .!d c1+ 21 . {Je1 bl. x e1 seguido de mate. La jugada del texto impide esta continuacin de las negras .

19 . .. . ~d7

(ver diagrama)

20. ~c7!!

1 -

.1 w J. J. J. .i.

La Dama blanca, "rabiosa", persigue a su rival. 20. ... ~b5

Si la Dama negra se hubiera retirado a a4 , 21 . l:ie4! decidira pues las piezas del segundo jugador no pueden tomar lo que se le ofrece y no hay defensa contra 22 . ~xc8, l:i x c8 y 23 . l:ix a4.

21. a4! ~xa4

No hay otra opcin, pues, en otro caso, la amenaza Y!\l' x c8 seguido de axb5 sera impara-ble .

22. l:ie4! 23. xb7!

Y!\l'b5 abandonan

.1. '} ~ J. J. J. :.a

Carlos Torre t ena, cuando se disput esta partida, 15 aos. Nacido en Mrida (Mjico) se desplaz con su familia a Nueva Orleans en 1915. Alcanz gran notoriedad cuando derro-

7

t en forma convincente a Em. Lasker, en el torneo de Mosc, 1925.

Este mismo ao, apareca publicada en el American Chess Bulletinla partida que aca-bamos de reproducir. El ganador, Edwin Zie-gler Adams ( 1855-1944), fue su maestro y amigo en la ciudad del Mississippi ... y esto ha producido suspicaces comentarios respecto a la realidad de la partida sugirindose, inc luso , que fuera una invencin del jugador mejicano como homenaje a su amigo. (La siguiente situacin ...

Rovner-Kamishov URSS, 1972

se re suelve de manera bien parecida, aunque menos brillante, de lo que acabamos de ver :

1. ~a7! ~a5 2. ~xa6! ~ c7 3. ~a7! y las negras desistieron de continuar) Para terminar, otra partida poco conocida o, al menos, en un nivel de difusin muy inferior a sus mritos, que pone de manifiesto cuan bella puede ser una realizacin sobre el table-ro si el soplo de la inspiracin ilumina a los oponentes, cualquiera que sea el nombre que estos tengan.

1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9.

10.

;'l) f3 g3 c4 b3 Ql.b2 Ql.g2 0-0 bxc4

~c2 13g5

Heberger-Kunert Weilheim, 1949

13f6 d5 c6

~~7 0-0 dxc4 Ql.e6

~eS

El primer jugador quiere evitar el cambio de 8

los alf il es que corren por las casillas blancas para lo cual esta jugada parece efectiva; pero ms acorde con la situacin hubiera sido 1 O. d4 para continuar el desarrollo con

22. d4 J. 1..1 w .l.l .!

.l.! .lJ. .! .! '.l .! .!.l ... .l 1t ji J. ji .. jijiji .. ~ ji .i, ~- ji .i, ji ji

ji Ji 114) .Ji ' '~~

,i4) Ji 22 . ... e5 !!

Wl~ Una vez ms - y van tres!- la Dama negra "se deja" tomar porque si 24 . ~xc5 b!. x d1 es mate (advirtamos tambin que 24. b!. d3 b!. x d3+ dese.! , conduce al mismo resultado).

24. rinden Otra jugada sorprendente que deja a la Dama, por segunda vez, "abandonada" ... Aunque muy pronto se cae en la cuenta de que 22 ... dxc5 23. B xd1+ lleva al mate a la siguiente.

23. S'a3 b!. xd4! !

Las blancas han sucumbido al "cinturn negro" que rodea su fortaleza real y a la potencia generada, con su dejada, por la Dama rival.

CATLOGO DE LIBROS COLECCIN DE AJEDREZ DE ZUGARTO EDICIONES S.A.*

1 -El ajedrez paso a paso, N. V. Krogius .................. ........ .... ..... .. .. ....... ...... ...... .. ........ ... ...... 1 . 7 O Optas. c. IVA 2 -Mis f inales favoritos, A. Karpov y Evgen i Gik ... ...... ............... .......................... ..... .... .. ... 1. 2 O O " 3 -Cmo ganar contra la defensa Grnfeld, A. Karpov .... ..... .... ......... ... ..... .............. .... ...... 1. 3 O O 4 -Cmo jugar las aperturas abie rtas, A. Karpov ............ .............. .. .......................... ......... 1.3 00 5 -Bobby Fischer (1 de la se rie "Reyes de l ajedrez"). D. Bjeli ca .... .... ........................ .... 2. 500 6 - M ihail Tah l (2 de la serie "Reyes del ajedrez" ), D. Bjel ica ..................... ... .... .... ...... .. . 1 .500 7 - Cmo jugar las aperturas sem i abiertas, A. Karpov ........................................... ............ 1. 5O O 8 - Aiexa nder Alekhine (3 de la se ri e "Reyes del ajedrez"). D. Bjelica .... ......... .............. 1. 5 00 9 -Cmo jugar las aperturas cerradas, A. Karpov .............................................................. 1. 5O O

1 O - Ti gran Petrosian (4 de la serie "Reyes del ajed rez"). D. Bjelica ..... ... .... .... .. .. ....... ..... 1. 5O O 1 1 -Cmo jugar las aperturas semicerradas, A. Karpov ....................... ......................... ...... 1. 5O O 12 -Jos Ral Capab lanca (5 de la serie "Reyes del ajedrez"), D. Bjelica ....... ........ ....... 1.300 1 3 -Miha il Botvinnik (6 de la serie "Reyes del ajedrez"). D. Bje lica ..... .. ... .' ........ .. ... ........ 1 . 3 O O 1 4 - La defensa Caro-Kann con blancas y neg ras, A. Beljavsky y A. Karpov ... ..... ........ .... 1 . 8 O O EDICIN ESPECIAL GRANDES TORNEOS* -"Los Grandes Torneos- Linares 1991", A. Karpov y D. Bjelica ............ ... _ ............. ... ..... .. 1.500ptas. c. !VA -"Los Grandes Torneos- Linares 93", A. Karpov y D. Bje lica ...... .. .............................. ..... 1.500 " -"Los Gra ndes Torneos - Regg io Emilia", A. Karpov y D. Bjelica .... ...... .. .... ... ................... 1.5 00 PRODUCTOS INFORMATOR -Informador ajed recstico (de l 53 al 68) .. ................... .. ................ .......... .. .............. ... .... ..... .... 4 . 500ptas. c. !VA -Encic lopedia aperturas A (Inglesa, Reti, Benoni) Actua lizada .. ..... ..... ...... ...... .. ........ ........... 6 . 50 Optas. c. !VA -E nciclopedia aperturas 8 (Semiabiertas ) 3~ edicin ........ .... ...................................... ... ........ 6.500 " -Enciclopedia aperturas C (Abiertas, Francesa) .......... ........... ..... ... ..... ........ ... ...... ................ .. 6. 500 -Enc iclopedia aperturas D (Pen dama, Grunfeld) .......... .. ... ......... .. ........... ... .... ..... ....... ......... 6.500 -Enciclopedia aperturas E (India de rey, Catalana) ........... .......... ................... ... .. ................... 6.500 -Anto loga de Combinaciones de Ajedrez .... .. ............ .. ................ .. ...... ...... .... .......................... 6. 500 *NOTA: En los libros de "Coleccin de Ajedrez" y "Edicin Especial Grandes Torneos" los suscriptores de la revista OCHOXOCHO tienen el 20% de descuento.

(sigue en pgina 18) 9

10

ID Por Juan Reyes. Maestro Internacional

Le invitamos a reflexionar sobre los siguientes diagramas. En cada uno de ellos habr de encon trar una maniobra de tipo posicional,

que supone la mejor opcin para el bando que la ejecuta Nuestro objetivo es ayudarle a perfeccionar su juego dndole a Ud. algunos puntos de apoyo

.1

.l 1

que le permitan tomar decisiones responsables en el futuro.

A Anderssen-Paulsen

Vienna, 1873

Juegan blancas

e Karpov-Hort

Mosc, 1971

::'it * .l .!

.l ii .i.

Juegan blancas

.1

~

B Botvinnik-Keres Mosc, 1952

Juegan blancas

D Stein-Keres

Mosc, 1967

J. ; .IW . ,.,.,_. u

.l.l .l.i. ii'

-

.l .l.l ii .l

Juegan blancas

LA .MEJOR DEFENSA Por Alberto Barreras Garca. Maestro Internacional.

Cuando escuchamos el viejo consejo de que la mejor defensa es un buen ataque nos asalta una duda : Cmo puedo atacar si debo defenderme? Steinitz,

cuyas teoras pasaron las pruebas del tiempo, aconsejaba en el manejo de las posiciones que, cuando se tena ventaja (lase mejor desarrollo, mayor espacio, etc.) era necesario pasar al ataque .

o de lo contrario se poda perder esa ventaja transitoria. Quizs otras teoras no hayan resistido la constante reevaluacin que nutre el ajedrez actual,

pero sta sin duda siempre ser vigente.

Podemos pasar al ataque en cua lquier circuns-tancia? De ser posible sto, el legendario juego sera patrimonio slo de los agresivos, as que deben existir leyes estratgicas que establez-can diferentes pautas de cmo comportarse de la mejor manera en cada situacin ... y de hecho existen; as como existen leyes y "leyes" para controlar o sugerir el comportamiento de los hombres cas i en todos los rdenes de la vida. El Ajedrez, como filosofa con lenguaje propio, tiene sus leyes, cuyo conocimiento nos puede ahorrar muchos "descubrimientos" que traduci-dos en tiempo equiva len a ms de un sig lo de cultura especfica.

He pensado trasladar a nuestros lectores algu-nas definiciones con re lacin al mejor mtodo de defensa, conocido como CONTRAATAQUE.

Existen varios tipos de defensa: a) La defensa pasiva . b) La defensa en posiciones restringidas. e) La defensa activa. Dentro de estos tipos de defensa existen dife-

rentes mtodos, como pueden ser los cambios de piezas, la economa, y el que se va a convertir en objeto de nuestro trabajo hoy: el contraataque.

Vamos a analizar los diferentes tipos de contra -ataque y mostraremos ejemplos prcticos para hacer ms comprensible el tema al lector:

1. Contraataque en el centro. El bando que ataca en el flanco lo hace sin la garant a del dominio del centro o su bloqueo.

Situemos la siguiente hipottica posicin: (ver diagrama) El ataque de las blancas parece muy fuerte, y esa v ent aja que poseen en el flanco rey parece estar a punto de dar sus frutos, pero e ll as han descuidado un principio fundamen-tal, que es el control del centro y realmente no puede progresar ningn ataque si primero no se tiene dominio central. Cmo puede reaccionar el negro? Veamos cmo las ne-gras dan a sus piezas el mximo de energa.

Tngase en cuenta que este artculo est escrito con la anotacin algebraica abrevia-da: no se indica el jaque ni el signo de captura.

.l

1 ... d5! (El momento ideal para liberar el juego y abrir la diagonal que dispara hacia el Rey blanco, a la vez gana un tiem o atacando en pen de f4) 2 . e5 c5! 3. cd d5 (la amenaza del alfil en b7 es formidable. No es posible 4. ~e4 f?Or 4 ... f5!) 4. !J!!Ig1 d2! 5. '~fe3 (si 5. f2 /'J, ed8 sera definitiva tambin) 5 ... '@' c6! y las blancas abandonaron.

A pesar de ser un ejemplo algo primitivo., no deja de ser impresionante cmo las negras logran liberar su juego y ganar en pocas jugadas una posicin tan amenazada.

~

El estudio de partidas del sigo pasado, pre-vias a la poca de Steinitz, nos muestran tambin magnficos ejemplos de esta estra-tegia:

4' Match, 1858 Blancas:Anderssen Negras:Morphy (ver diagrama)

11

Las blancas estn amenazando ~h6, y este tipo de amenaza en manos de Anderssen es doblemente peligrosa. Las negras podran defenderse mediante 0Je 7, pero Morphy, con ese sentido de la actividad que le caracteriz encontr una mejor respuesta:

J. tll. w .l J. J. .~. .... .i. 4f .!

.!

1 ... ~d5! (Contraatacando en el centro. Mu-chos aos despus, Nimzowitch estableci los principios de la centralizacin como un mtodo efectivo para contrarrestrar una ac-cin contra un flanco. Si ahora 2. ~h6? ~f3 3. gf ~d4 con gran ventaja . 2. 0Jd5 1!1fd5 3. ~h6 gh 4. 1!1fh6 ~e4 con el mismo efecto. Note el tremendo poder de las piezas centralizadas y compare con el pseudo-ataque en el flanco) 2. ~e5 ~d6! (las negras podan ganar un pen: 2 ... ~e5 3. de bl.e5, pero luego de 4. ~b6 cb las blancas no tienen nada que temer) 3. ~c2

~d4! 4. ~d4 ~d4 5. ~d5 1!1f e5 6. ~ f6 ~f6 7. ~h7 ~f8(tambin Morphy tuvo el criterio del ataque en posiciones con alfiles de dife-rente color, pero esto sera tema de otro estudio, por ahora slo nos dedicaremos al anlisis de la fuerza de las piezas en el centro como contragolpe a un ataque de flanco. El Rey negro no corre ningn peligro y toda la posicin blanca carece de coordinacin) 8. ~e4 bl. ad8 9. ~h1 ~b2 1 O. bl.ab1 bl. d1 11. bl.d1 -e t2 12. f!? h8 . . e7y las negras ganaron jugadas ms tarde . Ante la iniciativa en la Apertura, tambin se han desarrollado algunas ideas encaminadas a realizar un rpido contraataque, como es el caso de la partida que a continuacin someto a su criterio:

URSS, 1982 Blancas:Kupreichik Negras:Kasparov

1. e4 c5 2. ~f3 e6 3. d4 cd 4. 0ld4

demostr estar bien preparado para esta contingencia.

1 ... d5! (como en la partida anterior, esta jugada permite a las negras tomar la ini ciati-va) 2. ed ~d5 3. 0ld5 l'Jd5 4. ~e7 ... (el intento de retener la pareja de alfiles falla por la debilidad de c2: 4. ~f2 0ib4 5. ~e4 0if6)4 ... l'Je7 5. ~f3 ... (a nada conduce 5. f6 ~f6 6. ~f6 gf 7. ~g4 ~h8 8. ~h4 'g8 9. ~e4 ~g7. Los chances ahora son e uivalentes) 5 ... ) f6 6. ~ d2 0J ed5 7. o e4 e8 8. ~ae1 ~ae8 (ambos bandos han desarrollado sus efecti-vos a las mejores casillas y la posicin no presenta ventaja para nadie. Con un juego correcto, el empate pudo haber sido un resul-tado normal, pero Ljubojevic no se resigna a que el negro haya salido tan cmodo de la Apertura. Con 9. c3 pudo haber mantenido la igualdad. Con la jugada realizada, crea debili-dades en el flanco dama) 9. c4? l'Je4 1 O. ~e4 ~f6 11. ~b7? e4! 12. ~e4 ~c4?(con 12 ... ~e5! las negras ganaban una pieza como acot Gufeld en el boletn del Torneo. Luego de 13. ~e2 'e4 14. ~fe 1 ~d4 15. b3 ~d6! 16. g3 ~c6! 17. I!Wg2 f6 seguido de ~e5 liberando su pieza) 13. b3? (parodiando a Tartakower, podemos decir que Ljubojevic pierde porque comete el ltimo error. En sus lecciones, el ex-campen mundiall?etrosian, dice que si un jugador extra-clase no pued~ ver una amena-za muy simple de inmediato, entonces, por ms que busque, no la encontrar ... en cua l-quier caso , Ljubojevic confirm esta senten-cia. Casi que cualquier otra jugada mantena los chances parejos) 13 ... tvb4! y las blancas abandonaron.

No siempre estos golpes centrales son efec-tivos, el clculo es fundamental en la deci-sin. En la siguiente partida, las negras juga-ron de manera rutinaria :

URSS, 1978 Blancas:Vilner Negras:Kochiev

l. .l!

. J. -

1 ... d5? 2. ed ~d5 3. ~d5 ~d5 4. f6! gf (si 4 ... ~f6 5. b4!; 4 ... ~f8 5. 0ld5 ~d5 6. fg ~g7 7. ~f3; 4 ... ~c5 5. b4! ~b4 6. '!1l!' 4 ~f8 7. fg ~c5 8. ~d5 ~d5 9. "ef3 ~e3 1 O. h 1! ganando en todas las variantes) 5. b4 ~b4 6. 0id5 ~d5 7. ~d5 ~d5 8. "e g4 ~h8 9. ~b4 y algunas jugadas despus, las negras abandonaron. No slo mediante ataques a la estructura de peones o rupturas se consigue el contraata-que, sino mediante el clculo concreto y el valor de la actividad y la coordinacin de las piezas, como podemos apreciar en el siguien-te ejemplo. Mosc, 1961 Blancas:Smyslov Neg ras:Polugaievsky

J. .i.l

ji ji l ~'

A ;h . .~ A .A.. ~ ~ . ~ ~ :~-' ~

i, i,~ Polugaievsky haba jugado la Apertura de manera algo indiferente y la posicin que nos presenta el diagrama realmente no tiene nada de envidiable para el negro. Qu puede hacerse en situaciones como sta? Despus de larga meditacin Polugaievsky encontr el mejor mtodo de defensa cuando calcul con mucha exactitud que su nico chance consist a en aceptar el pen ofrecido por Smyslov .

1 ... l'J e5! 2. fe 0>c4 3. 0le4 ~d8 (al mismo tiempo que defiende casillas vitales como f6 y g5, la dama acta sobre el centro blanco) 4 . ) f6! ~f6 (naturalmente, si 4 ... gf 5. "eg4 ~h8 6. ef ~f6 7. ~e4 dara la victoria al blanco)5. ef ~ b2 6. ~h7! ... (ahora no es posible 6. ~a6 "ed4 7. ~f2 0id3!) 6 ... ~h8 (pero no 6. ~h7 7. 1\\th5 Wg8 8. ~g5 ganando) 7. ~g4?! ... (la defensa negra se vera muy comprometida con 7. 'il1lh5 ~d4 8. Wrh1! m e3 9. ~d3 m h6 10. fg ~g7 11. ~h6 ~h6 12. ~a6 seguido de 13. a4 y el final es muy delicado por el caballo ne ro irradiado en b2)7 ... gf 8. bl. f4 ... (contra 8. f3, las negras disponan de 8 ... ~c4!) 8 ... f5! 9. ~ f5 ef 1 o. m 5 ~d3! (una jugada de

13

problema) Esta es la clave de la defensa, que tuvo que ser calculada por el negro desde la aceptacin del pende c4) 11. f!iirh5 y la parti -da fue declarada tablas por jaque perpetuo.

2. Contraataque en el flanco opuesto:

No siempre es preciso el contraataque cen-tral y es preciso actuar en el flanco opuesto, podemos comenzar ejemplificando con una posicin hipottica, como en el inciso ante-rior:

La amenaza blanca no ::uede ser ms fuerte : 1 ... ~e4! 2. ~e4 e2 3. &,\ e1 &,\ fd8! 4. h3 f5 5. 0l g5 ~g5! y el resto es fcil y luego de 6. '@' g5 ll, d1 7. ~h2 ll, e11as blancas se rinden.

Es de todos conocida la Variante Karlsbad en el Gambito de la Dama; en ella las blancas plantean un ataque minoritario en el flanco dama y las negras tienen como nica res-puesta efectiva, hacer todos sus esfuerzos en el flanco rey. Hace varias dcadas Tar -takower analiz la posicin, y con aquel, su sin igual estilo, puso los puntos sobre las es para cada bando. A continuacin reproduci-mos algo de aquel artculo: (ver diagrama) Hoy se conoce que la pos1c1on de la torre blanca en e 1 es errada, las blancas han perdi-do algn tiempo en su plan de ataque en el flanco dama, pero lo que realmente nos inte-resa de la posicin es la ingeniosa ofensiva negra en el flanco opuesto.

1. a3 ~h5! (para evitar la simplificacin que se produce tras 1 ... ~e4)2. ~e7 'I!!J e7 3. b4 g5! 4. ~f5! g4 5. ~e5 ~g5 6. ~es ll, ae8 7. ~a4 ... (7. 0>e2 era mejor , aunque renunciaba 14

definitivamente a la iniciativa) 7 ... f6 8. :J d3 ~g6 9. jb6 ll, e7 1 O. a4 0>h4 11. b5 h8! 12. be be 13. :Jb4 ll,g8 14. ~ h1 ll,eg7 15. '1il!' e2 g3!! 16. f4 ... (si 16. fg ~g3!!) 16 ... '1il!' f5 17. h3 ~ h3!! 18. gh g2 19. h2 gf=~ 20. ll, t1 ll, g2 21. e 9 2 &,~ g2 22. ~h1 ":'> g3 MATE.

El plan de Tartakower de g7-g5-g4 es muy interesante, as como su idea de -f:Jh5 y de-ms. Hoy todo ha cambiado, pero los precep-tos de la estrategia se mantienen: las negras necesitan jugar con todas las piezas posibles en el FR.

Hastings, 1895 Blancas:Pillsbury Negras:Tarraseh

.1

.l .l

Esta posicin se produjo luego de la jugada 16. -f':>e2. La estrategia est planteada, lucha en flancos opuestos. La posicin blanca pare-ce muy amenazadora, pero el negro no tiene debilidades.

16 ... "::> e4! (un mtodo de defensa que hemos

mencionado, consistente en la simplificacin) 17. !4e7 lJ. e7 18. !4e4 ... (con buen criterio, Pillsbury cambia su alfil, que de poco podra servirle en una diagonal obstruida) 18 ... ef 19. ~g3 f6 20. ~ g4 ll!l?h8 21. f5 'll'd d7 22. lJ. f1 lJ. d8 23. lJ. f4 f!i' d6 24. ~h4 lJ. de8 25.

~ e3 !4d5 26. M 2 ~e6

Todos los esfuerzos de ambos contendien-tes se han centrado en el punto e4. La estra-tegia de Pillsbury es tener a las piezas negras sujetas a la defensa de ese punto para inten-tar el asalto final al FR .

27 . .lJ. f1 b4 28. ~e2 ~a4 29. ~ g4 o) d7 30. lJ.4f2 ~gS!

La amenaza es ms fuerte que la ejecucin, dira Nimzowitch 30 aos despus ... 31. "~ e 1 .. . El contraataque negro en el FD ha privado a las blancas de la concentracin de piezas que planeaban. Observe otro mtodo de defen-sa : la economa. 31... e3 32. b3 f!}' e6 33. h3 ... (para atacar ahora, las blancas necesitan desencadenar una tormenta de peones) 33 ... a5 34. z:Jh2 a4 35 . g4 ab 36. ab lJ. aS! (si las negras P.ueden capturar el pen de b3, sus peones ligados y pasados en el FD . deben garantizarle la victoria) 37. g5 .lJ.a3 38. j g4 -' g3? (luego de una brillante defensa, las ne-gras capturan en b3 con la pieza equivocada. El Alfil era necesario para la defensa, pOr lo que luego de 38 ... .lJ.b3! 39 . ')b3 !4b3 el ataque blanco no puede distraer el avance de los peones pasados en el FD) 39. lJ. g2 ~h8 40. fg fg 41. 2i b3 lJ.b3 42. Z)h6 lJ.g7 43 . .l'J, g7 Wg7 44. ~g3! ~h6 45. \!i\?h1!! .. . (esta es la jugada que debi escapar al anlisis del Dr . Tarrasch, otra joya combinatoria de Pills -bury)45 ... ~d5 46. lJ.g1 f!}' f5 47. ~h4 ~h5 48. ~f4 ~g5 49 . .lJ.g5 fg 50. ~d6 \!i\?h5 51. ~d7 e27? (los errores nunca viajan solos. Este crue l error debe haber sido producido por la fatiga de tan tensa partida . Con 51 ... .lJ. b 1 52. ~g2 'h6, la tarea de las blancas para ganar, an es ardua) 52. ~h7 MATE!! Niksic, 1983 Blancas:Tahl Negras:Portiseh (ver diagrama)

T ena que estar Portisch muy seguro de su clculo cuando jug: 15 ... j f4 16. ~f4 e5 17. 'l!!il h4 ed 18. jd5 ~dS 19. je7 ~hS 20. ' f 1 ~ g4! (la defensa de Portisch se basa precisamente en el caballo blanco de e7 . Sin esa pieza, el ataqiJe blanco es muy lento) 21. ' f6! ~h7! 22. bl. df1 ... (en caso de 22. e5 z)d3 23. lJ.d3 de 24. lJ.g3 g6!)22 ... ~ d3 23. ed B eS! (al t1emp~ que elude uno de los tpicos traps del Gen1o de Riga, Portisch elimina el desagradable caballo. Si 23 ... .?l,e2 24. B h6! gh

.1

25. lJ. f6 f!}'c7 26. o)c6!! desviando la dama de las casillas negras) 24. 'i)e8 ~e7! (la dama debe permanecer en casil las negras, y al mismo tiempo conecta la torre de f8 al con-traataque) 25. ~b1 B eS 26. B 6f2 .?l,e6 27.

~h5 b5 2S. ~d1 ~a5 (las blancas han tenido que replegarse a la defensa, esa no es tarea para T ahl, quien decide devolver la calidad y por tanto convertir la com ensacin ne,gra en igualdad)29. b3 B e3 30. f7 Qi, f7 31 . bl. f7

~a3 32. ~f1 B e5 33. lJ. f5 .lJ. e7 34. ~e1 .lJ.e3 35. ~f1 ' e7 36. e5 ~e5 37. ed y se acordaron las tablas.

3. El sacrificio como recurso para el contraataque.

En una situlcin ~e defensa, el contraataque puede surg 1r med1ante un oportuno sacrificio de material. En caso de estar dirigido contra el Rey, ser ms eficaz, aunque bien pudiera estar basado simplemente en el aumento de la actividad y la cooperacin de las propias

pieza~ o en el bloqueo de lneas de ataque del enem1go. Generalmente estos sacrificios crean fortalezas que conducen a la igualdad de posibilidades . .

El olfato para el peligro que tena Petrosian, era como un sexto sentido en l, por eso no puedo vencer la tentacin de ofrecer com-pleta esta partida .

Mosc, 1971 Blancas:Parma Negras:Petrosian

1. e4 e5 2. c:~ f3 ~e6 3. d4 ed 4. z)d4 f!}' e7 5 . Z) e3 e6 6 . .?l, e3 a6 7. f4 b5 S. ')b3 d6 9. .?l, d3 0l f6 1 O. 0 -0 .?l, e7 11. ~f3 .?l, b7 12. a4 b4 13. i'lb1 a5 14. o) 1d2 0-0! 15. \!i\? h1! (Parma tambin tiene un fino olfato para la tctica. En caso de 15. i'lc4 d5 16. ed ed 17.

15

~b6 ~b8! 18. 0 ca5 0J a5 19. '0Ja5 bl,a5! 20 . ~a5 ~a7 ganando. Ahora parece que el pen est condenado .. . } 15 ... 0Jb8! 16. 0J d4 (si 16. ~c4 d5!}16 ... 0Jbd7 17. 0Jb5?(era mejor ugar previamente 17. ~h3} 17 ... ~b8 18. a e 1 'e8! (el signo no es por ocupar la columna abierta, algo al alcance de cualquier mortal, sino por la fuerza que desarrollar esa pieza como centro del contraataque ne ro} 19.

~h3 )e5 20. ~e5 bl,e5 21. 0lb3 h5 22. ~f3 e5 23. f5 (da la impresin que la torre ser cazada por los peones blancos, cuyo avance es parte de la estrategia blanca) 23 .. . d5! 24. 0J d2 bl, h4 25. g3 de 26. ) e4 bl, e4! (despus de este hermoso viaje de la torre para ser sacrificada en e4, se justifica incluso un segundo si no a la jugada 18 ... bl, c8) 27. bl,e4 ~d8 28. fe 1 bl, e8 29. bl, 1 e2 (en caso de 29. ~e2 bl. c4!! 30. ~f3-30. ~c4 ~e4 31 . ~g 1 ~c5 32. ~f 1 '0Jd2- 30 ... bl,e4 31. bl,e4

~d5, etc.) 29 ... 'l!!l d5 30. b3 h6 (la profilaxis no puede faltar en el juego profundo de Petrosian}31. ~g2 'l!!l d7 32. h3 ~e5! 33. h4 h5! 34. ~h3 ~b6 35. ~h2 g6! (el asalto final) 36. fg f:J g4 37. ~g2 f5! y Parma aban-don.

Match, 1966 (10-) Blancas:Petrosian Negras:Spassky

.l

Spassky buscaba en este match pescar en aguas turbias y no dejaba pasar ningn chan-ce de complicar las partidas. Su ataque en el flanco rey parece peligroso, pero enfrente tiene un artista de la defensa ...

1. ~ e3!! ~ f1 (si 1... bl, f4 2. bl, f4 ~g5 3. bl,g4!! ~g4 4. 0lg4 )g4 5. ~g4 ~g4 6. ~h1 y las negras estn en aprietos) 2. bl, f 1 ) g6 3. ~g4! Df4 4. bl, t4!! ... (termin el ataque del negro, ahora comienza el blanco, y por cier -to, termina rpido} 4 ... bl, t4 5 . ~e6 bl, f7 6. 'De4! ~h4 7. Dd6! 'l!!l g5 8. ~h1 bl, a7 9. ~f7 bl, f7 1 O. ~h8! y Spassk y abandon. 16

Considero que sta es una de las mejores partidas de contraataque de todos los tiem-pos. No quise hacerle comentarios a las juga-das finales , para no privar a nuestros lecto-res del placer de analizar los mltiples deta-lles del juego tctico de Petrosian. La defensa siciliana, por ser precisamente un contraataque desde la primera jugada, tiene innumerables ejemplos que nutriran nuestro estud io, sobre todo en la Variante Dragn, donde son muy conocidos los sacrificios del negro en c3 y los del blanco en h5. No pode-mos obviar uno de ellos hoy.

Mosc, 1954 Blancas:Bibikov Neg ras :Valshin

1 ... bl, e3! 2. 'e3 'a2 3. ~e 1 bl, e8 4. 'e3 ~b3 5. ~d3 ~a4 (amenazando 6 .. . ~c2 y 6 .. . i:'

desde b6 ser el ncleo del contrajuego ne-gro.

1. g4 g6 2. ~h6 ~g7 .3. g5 ~d8 4. ~g3 f6 (al tiempo que se def1ende, el Dr. Tarrasch prepara sus contragolpes por la columna f . Si las blancas se defienden mediante 5. h4 fg 6. hg I;'H4! 7. '@if f4 ~g5 y las negras ganan) 5. 'J f5 IJ1llh8 6. 'J h4 fg 7. ~g5 ~g5 8. ~g5 d3 (con la apertura de la diagonal 1-a7 comien-za el contraataque negro) 9. h 1 .!':!.e2 1 O. bte3 .!':!. ff2 11. 'J g2 d2 12 . .!':!. g1 .!':!. e1 13. "lff e7 .!':l. g1 14. 1Jli!l g1 d1=~ Y las blancas reci-bieron mate en pocas jugadas. El siguiente ejemplo siempre se ha presenta-do como contraataque obligado, y se ha hecho nfasis en la poca suerte del Maestro Janovsk i, sin embargo, las cons i~ erac.iones psicolgicas y el clculo a que se ~'

Posiblemente el ataque b lanco sea ganador, pero siempre tienen que participar en el mi s-mo la mayor cantidad de piezas posible, de esta manera no ser a difcil entender que 1. .0d6 es una jugada tentadora (candidata, al decir de NimzovitchL y no puede t ampoco subestimarse la fuer za de los alfi les negros amenazadores hacia el FR.

1. ;0g5?! f6! (Reshevsky ha sido obligado a jugar bien! Con esta jugada, nica adems, se aduea de la importante co lumna f.) 2. ef ~ f2 (quizs Landau pas por alto esta juga-da.) 3 . ~f2 ~ f6 4. ;0 f3 ~f3 5. gf fil' f3 6. ~g1 ~H 4 7. ~f4 ... (equivalente al abandono) 7 ... {J f4 8. ~f1 bl. c5 y poco despus las blancas abandonaron.

Finalmente podemos sealar que par a eva-luar posicionalmente los temas de un contra-ataque , podemos clas ificar los objetivos que persigue de la siguiente manera:

A) Dirigido a un objetivo de mayor va lor que el que est siendo o ser ob jeto del ataque del contrario. Por ejemplo, contraataque con-

,

tra el Rey cuando el f lanco dama est siendo atacado.

8) Cuando los objet ivos son de igual valor , por e jemplo, ataques al rey en flancos dife-rent es, el t iempo es lo ms importante. La lucha se estab lece por llegar pr imero.

C) Cuando los objetivos son de m enor valor , es importante garantizar pr imero una defen-sa econmica y desviar las fuerzas enemigas de su ofensiva , por ejemplo, una demostra -cin en el flanco dama o el centro cuando el contrar io amenaza atacar el flanco rey.

El estudio de las posiciones es uno de los secreto s de la maestra en el Ajedrez, y de la misma manera que pueden estudiarse esque-mas de pen ais lado , de centro fijo, o los distintos temas tct icos y de ataque, co nsi-deramos que los temas de contraataque de -ben ser va lorados en su verdadera importan -cia y podemos definir lo como la tctica de la defensa, donde la profundidad y agudeza de clcu lo es lo nico que puede garantizar el x ito de los contragolpes .

CATALOGO DE LIBROS (viene de pgina 9)

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Por Juan Reyes. Maestro Internacional

Nuestra intencin con estos tests es brindarle un punto de apoyo para perfeccionar su juego. Y le in vitamos a reflexionar sobre los siguientes diagramas. En cada uno de ellos tenemos una posicin crtica, siempre nos preguntamos cmo est mi posicin?, lo cual nos obliga

a una severa evaluacin. Por supuesto, no es siempre fcil evaluar correctamente, pero el objetivo es entrenarnos para ello. Nos guiaremos por una escala de puntos

de 1 a 6 que nos dir la dificultad de cada posicin Espero que el trabajo les resulte gratificante.

.l ii

.1

JUEGAN NEGRAS 1.-Las negras estn: a) Igual

'b) Perdidas 2.-Cu l es la mejor jugada de las negras?

IL Puntos posib les: 4

-;(~( ti

.1 J.

.l J.

JUEGAN NEGRAS

JUEGAN BLANCAS 1.-Las blancas estn: a) Igual

b) Mejor e) Ganando

2.-Cul es la mejor jugada de las b lancas?

ii

Puntos posibles: 3 -e( -e:( -e(

; , ..

.i.

9 .1. rrt!l

..

i

w

JUEGAN BLANCAS 1.-Cul es la mejor jugada blanca?

Puntos posibles: 3

.

1.-Cul es la mejor jugada? a) 1 ... lf1/ f5 b) 1 ... e2

.l Puntos posibles: 3

_liJ

19

fFD[fD@l0e& fPJrrilccailcc ID ALFIL Y PEN DETORRE (MARIDAJE Y DIVORCIO)

Por Fernando Visier. Ex campen de Espaa.

Ser porque como es ms fuerte se le exige mayor responsabilidad. El caso es que sin tener en cuenta sus mritos anteriores, el trabajo

que haya podido realizar durante la partida, si el alfil queda como nica pieza superviviente y se le asigna la tarea de colaborar en la coronacin del pen/compaero

que avanza por la columna de torre, sabe que le pueden vestir con el sambenito de "malo " si coincide que la casilla de llegada no es de su mismo color.

A unque de todos son conocidas una serie de posiciones donde alfil-malo y pen de torre logran la victoria, merced a que consiguen contro-lar los cuadros que necesita el rey enemigo para llegar al rincn, dichas posiciones se refieren al final genuino, o sea, a los casos en que la defensa no cuenta ms que con su propio rey.

Por una de esas aparentes paradojas que tan a menudo ofrece el ajedrez, el hecho de que el bando dbil disponga de algn pen, si bien es cierto que incrementa su potencial en trminos absolutos, muchas veces constituye un serio inconveniente. Y quiz sea el ms grave, en la prctica, el plus de confianza que adquiere la defensa al suponer, errneamente, que as es ms sencillo.

En la Olimpiada de Erevan, 1996 ocurri algo sorprendente:

KOBESE (Sudfrica)-TU (Vietnam)

1 .... ~h477

Se equivoca Tu, pero igual nos poda haber pasado a ti, a usted y a m. Seducido por la idea de eliminar cuanto antes el ltimo pen blanco, juega con el plan h5 y g4, que asegura-ra el empate(?). 20

2. -g4

Obligada y ganadora!

2 .... h5

Si 2 ... ~g3 3. ~f5 h5 4. ~xg5, etc. 3. ~f5! abandonan

Mu juicioso. Si 3 ... hxg4 4. hxg4 y si 3 ... ~g3 4. xg5 h4 5. -d7 W/ f3 6. ~xh4 ~f4 7. h5

e5 8. g6, etc.

En lugar de buscar el cambio del pen, que tan graves consecuencias trajo, las negras debieron aprovechar la circunstancia de que el pen contrario (pen de torre) corona en casi-lla de distinto color del alfil.

Con la simple retirada 1 ... ~g6, el final es tablas.

V. Averbach, 1954

Tablas. Juegue quien juegue Siendo mano las negras, pueden optar por la espera, sin salir del rincn, y avanzar a5 y b4!,

si se ven obligadas, o bien forzar los aconteci-mientos con 1 ... a5, ya que 2. ~xa5+ b7, da como resu ltado una posicin de tablas ter i-cas tan elemental que no merece ms exp lica-ciones.

Juegan las blancas :

1. ~a5+ 2. ~d6

~b7 ~c8

A verbach da esta continuacin con el fin de explorar todas las posibi lidades defensivas, aunque lo ms lgico es mantenerse dentro de las cuatro casi llas del rincn.

3. ~c6 4. ~b6

l@llb8 ~a8!

Se pierde con 4 ... l@llc8? 5. ~a7! ~d7 6. ~xa6 ~c6 7. ~b6 ~d7 8. ~b7 ! ~d6 9. ~a5 ~d7 1 O. ~c7 ~e6 11. c6 lf9e7 12. ~xb5 ~d7 13. ~b6 IJ!t!l c8 14. a4, etc.

5. ~c7 'l!i a7 6. IJ!t!l c8 ~a8 7. ~b6 a5 8. ~c5 b4! 9. ~xb4

Es un "farol".

9 . ... a4! Tablas

Advierto a quienes no estn muy fami liariza-dos con la teora de este tipo de finales que no pasen la pgina.

El tema encierra ms dificultades de las que aparenta.

Kling y Horwitz, 1851 (Corregido por Averbach)

' '

Juegan blancas y ganan

ID V. Rauzer, 1928

Juegan b lancas: tab las

Si comparamos ambos diagramas y sus enun-ciados, es inevitable pregunt arse por qu es tablas en un caso y en el otro no. La geome-tra plana, en su aspecto ms elemental, viene a echarnos una mano.

V. Rauzer determin la llamada "zona de empa-te ", refirindose al caso en que los peones ocupen la posicin que presentan en el si-guiente diagrama.

El Dr. Rey Ardid concreta an ms la cuestin:

"Es de sentido comn pensar que siempre ser necesario que el rey del bando dbil, aunque est dentro de la "zona de empate", se encuentre en condiciones de alcanzar el rincn salvador a cuando el rey del bando f uerte capture el pen".

Veamos las soluciones de los dos ltimos problemas.

21

KLING Y HORWITZ, 1851

La primera jugada de las blancas es obli gada. 1. ~c5

De otro modo, el rey negro ira a a7, entrando en la "zona de empate" en ptimas condicio-nes.

1. 2. b7 3 . .\?l,b6 4. ll!i1c6

\1!11 a5 'b5 'c4

~b3

Si 4 ... ~d3 5. ~b5 ~e4 6. ' xa4 ~d5 7. ~b5 ~d6 8. ~a6 ~c6 9. a4 . ~ d7 1 O. ~b 7, etc.

5. ~c5 ~c4 6. ~d6

Tambin se gana con 6. ~e3 ~b3 7. ~e 1, continuacin sugerida por A verbach.

6. 7. ~b5 8. ~h2 9. ~xa4

10. ~b5 11. llill'b6

Y las blancas ganan.

V.RAUZER

~d4 ~d5 \?il'e6 ~d7 ~es

Tambin en este caso se impide desde el primer momento que el negro ocupe las casi-llas del rincn. No obstante, el plan no cu lmina con xito, debido a que el rey de la defensa se encuentra dentro de la "zona de empate".

1. ~d6 2. b7 3. ~c7 4. ~c6 5. ~b6 6. ~c5

~d8 ~d7 ~e6 f@Jl e 7 f@Jle6

Las blancas maniobran para alejar todo lo posi-ble al rey negro, pero la operacin obliga a su vez al desplazamiento de su propio rey, lo que implica dejar en suspenso la necesaria captura del pen.

6. 7. ~f8 8. ~g7+

(Ver diagrama)

~e5 f@Ji d4

En lugar de 7 ... ~d4 , las negras se podan defender con 7 ... ~e6. 22

ID El estudio pretende poner de manifiesto cmo es la defensa en situaciones lmite.

8 .... ~e4!

Ser desalojado de la zona de salvacin no significa que la defensa quede sin recursos. Lo que realmente importa es acceder de nuevo al pol gano en condiciones de poder llegar al rincn.

Si en lugar de 8 ... ~e4!, juegan 8 ... ~c4?, se produciran posiciones semejantes a las del estudio de Kling y Horwitz. Por ejemplo: 8 ...

~c4? 9. ~e5 ~d3 (si 9 ... 111/b3 1 O. ~d6 ~c4 11. ~c5, etc.) 1 O. ~d5 ~e3 11. ~h2 ~d3 12. ~c5 ~e4 13. ~b5 ~d5 14. ~g3!, y ganan.

9. \1!11d6 ~f5 10. ~e5 \1!11 g6!

No 10 ... 111/e4? 11. ~e6! 11. ~e6 12 . .\?l,d6 13. ~e7 14. ~b4 15. ~c3 16 . .\?l,e5

~g5 ~g6 ~g7 ~g6 111/g5

~g6

Se pierde con 16 ... ~g4 17. ~f6 ~f3 18. ~e3 19. ~b2, etc.

17. ~f6 Wlh6

f&

Hasta aqu llega todo lo que pueden hacer las blancas en su inters por alejar al rey enemi-go. El problema es que tambi n el suyo se encuentra apartado del objetivo principal, ll-mese capturar el pen de a4.

18. 19. 20. 21.

~h7 ~h6

~h7 \1!11g6

22. ~g8 23. '~ f7 24. ~f8 25. ~e7 26. ~e8 27. ~f8

Si 27. ~d8 ~f7 . 27. 28. ~b4 29. ~C3+ 30. ~e7 31. ~d6 32. ~e5

'@lf f5 ~g5

~f5 ~e5 ~e6

f6 g7 ~g6 W/f5 96

Si 32. ~c6 ~f7 33. ~b5 l!ii?e8 34. ~ xa4 ~d7 35. b5 ~e 7, y el rey llega al rincn.

32 .... f7

El juego es tablas . Las blancas no pueden prosperar.

EL RINCN PUEDE SER UNA TRAMPA La recomendacin defensiva tan til en los ejemp los anteriores (llevar el rey del bando dbil al rincn} resulta nefasta en el caso si-guiente:

Y. Averbach

Juegan blancas y ganan Juegan negras: tablas

Aparece en liza un nuevo elemento, que es el pen negro de b5 .

Este detalle hace que toda la teora relaciona-da con el polgono o "zona de empate" quede fuera de servic io.

" ... el rey negro para hacer tablas puede ocu-par cualquier regin del tablero (estando prximo a l el rey blanco, naturalmente} si

ID exceptuamos el rea comprendida por las SEIS CASILLAS a8, a7, a6, b8, b7 y c8, que le resultan fatales. Si las blancas logran tener confinado al rey negro en dicha zona, ganarn el juego, pero si dicho rey consigue huir de estas seis casillas, encontrar siempre el me-dio de hacer tablas" (Dr. Rey Ardid "Finales de piezas menores"}.

JUEGAN LAS BLANCAS

Como de lo que se trata es de recluir al rey negro en el rincn, la primera jugada cierra el posible escape va d8.

1. - f6! 2. ~d8 3. ~b6 4. c5

l!ii?b7 l!ii?c8

~b7 ~c8

Si 4 ... b4 5. axb4 a3 6. ~b5 a2 7. ~d4, etc. 5. c6 ~b8 6. -d8 a8

Si 6 ... ~c8 7. ~c7 y si 6 ... \li!? a7 7. t4 c7 ~a8 8. ~b6 y ganan.

7. ~b6 ~b8 8. - c7+

Y las negras se vern forzadas a avanzar su pen, ya que si 8 .. . ~a8 9 . ~e5, y si 8 ... ~c8 9. ~c6, ganando en los dos casos.

JUEGAN LAS NEGRAS 1. . .. ~d8!

Huyendo de la quema. Si las blancas toman el pen de b5, nos encontraramos en uno de los ejemplos de tablas que ya conocemos .

2. - f6+ 11ll?e8! 3. -e7

Si 3. ~c7 ~f7 4. -e5 ~e6 5. ~h2 'if!Je7 6. ~xb5 ~d7, y tablas.

3. .. f7 4. ~d7 g6 5. ~e6 \li!?g7 6. -h4 ~g8 7. e7 ~g7 8. ~f6+ ~g6 9. @e6 'il!!lh6

10. 'il!!ff5 (ver diagrama}

10 .... l!ii?h7!

El mayor peligro para las negras es caer in-23

conscientemente en una posicin de ahogado,

como sucedera despus de 1 0 ... ~h5? 11 . ~g5!, y las blancas ganan.

11 . ~c3 ~g8 12. V11? e6

"Con 12. ~f6 se consigue, a lo sumo, arrastrar al rey negro hacia a8, pero esto resultara tambin inoperante: 12 ... ~f8! 13. ~b4+ V11? e8! 14. ~e6 ~d8 15. ~d6 V11? c8 16. ~e7 (ahora quien est lejos de la zona neurlgica es el rey blanco, lo que ermite ... ) 16 ... b4! 17. axb4

~b7 18. ~e6 c6! 19. ~e5 ~b5, y tablas. Algunas subvariantes de inters: 12 .. . ~h7? 13. ~d2 ~g8 14. ~h6 ~h7 15. ~g7, y gana. 18 ... ~b6? 19. ~d5! ~b5 20. ~d4 a3 21 . ~c3 y gana". (Anlisis presentados por el Dr. Rey Ardid)

12. ~f8 13. ~f6 'fl\\l'g8 14. "f!Je7 ~h7 15. ~f7 l'!!ih6 16. ~e7

24

IR 16 . ... ~h5!

Para no caer en la trampa del rey ahogado. Si 16 ... IJ!li'h7? 17. ~f8 ~h8 18. ~h6! y ganan.

17. ~f6 ~g4 18. ~d6 ~f3 19. ~f5 ~e3 20. ~C5+ ~f3!

En cambio pierde 20 .. . ~d3? 21. \l!ile5 "f!Jc4 22. ~d6 ~b3 (si 22 ... b4 23. ~xb4 ~b5 24. ~c5, y ganan) 23. l'!!ic6 lmc4 24. ~d6 ~d4 25. ~xb5 ~d5 26. ~h2 ~e6 27. lmxa4 y ganan.

21. ~d4 ~g3 22. ~e3 ~f3 23. ~f4

Esta posicin, si se prescinde del pen negro situado en b5, fue analizada por Kling y Horwitz, en 1851, con resultado victorioso para las blancas. Sin embargo, en este caso no se puede ganar debido a que dicho pen acaba desempeando un papel activo.

23. ... ~g2 24. lmg4

Si 24 . ~e4 ~h3! 25. ~d4 ~g4 26. ~h2 'l f5 27. 1!!!1'c5 1!!!1'e6 28. xb5 ~ d7, tablas.

24. ' f2 25. ~c1 ill:'e2 26. f4 . d3 27 . ~e5

Si 27 . ~e3 b4! y tablas. 27. c4 28. ~d2 b4! 29. ~xb4 ~b5

Y el rey negro llega al ansiado rincn y se asegura el empate. 41

Nivel 1 No debe ofrecer excesiva dificultad la resolucin de los problemas de este grupo

a los jugadores de primera categora, pero s ser interesante para stos tratar de resolverlos a "golpe de vista", en dos o tres minutos a lo sumo.

Para los de segunda categora, calculamos como tiempo bueno para hallar la lnea ganadora de cuatro a seis minutos; unos nueve o diez, para los jugadores de tercera categora,

5.986

Blancas juegan y ganan

y un mximo de doce minutos, para el aficionado. En todo caso, un buen aperitivo para afrontar los siguientes niveles.

J. .14. J.

1t.l .l.

~ .l iiii9 Ji

Ji ~ Ji '

w .l

~ 1' 'WJ

5.988


w .l i;

.l ~~ ~ .l

1! Jii ... , ,,

Ji f

Partida : Hoi-Gulko (Olimpiada de Sa lnica, 1988). Partida : Karak laj ic-Ni ko lic (Yugos lavia, 1973). Tema: Obstruccin. Tema: Desviacin.

5.987


.i.

.l J.

Ji ji

.ti. w .l.l

' J. i, ~ ~ .9iiiiii

Yf).

5.989


ffl) . '

Part ida : Serper-Shirov (Mosc, 1991 ). Tema: Des- Partida: Niko lic-Hbner (Olimpiada de Saln ica, viacin . 1988). Tema: Ataque sobre columnas y d iagona-

les.

25

~~~ffw~ow~a~~~~~@=~~--------------------~111 5.990

Negras juegan y ganan

5.993


9 .l

.l

.l .l . 'ir ji ji

iif~ ~ '

Partida : Druon-Roethel (Alemania, 1963). Tema : Partida: Filguth-Chandler(Dubai,Oiimpiada 1986). Demolicin. Ataque sobre columnas. Tema: Clavada y desviacin.

5.991

Negras juegan y ganan ,~,

ji sR'

5.994


.i. J. .l

~ ,~

Partida: Juferov-Gusev (URSS, 1973) . Tema: Partida : Malich-Kort(R.D.Aiemana, 1971).Tema: Desviacinyencaminamiento. Desviacin .

5.992


5.995


.l

9 .l .. ,._, J. J. .l

B,~

Partida: Budrich-Gumpich (Alemania, 1989). Tema: Partida: M adsen-Napolitano (correspondencia, Ataque sobre columnas y diagonales. Desviacin . 1953). Tema: Desviacin .

26

Nivel 2 l Imperceptiblemente, se eleva el nivel

de dificultad, aunque es probable que alguno de los problemas de este nivel /e resulte ms

fcil que otros del nivel 1.

5.998


J.

Se trata de que los temas combinativos se van conociendo y nuestras ideas

son ms claras. Cuatro minutos deben bastar, en cada problema,

para el jugador de primera categora; nueve, para el de segunda; Partida:Taimanov-Kusminich (URSS, 1950). Tema:

trece, para el de tercera, y quince, para el aficionado.

5.996


.l J.W

'ii'.lJ. .l .l. .a~

.l !Y J..l . ...

.a B, ,. A

Desviacin y doble amenaza.

5.999


Partida : Platonov-Korchnoi (URSS, 1970). Tema: Partida: Molnar-Scherbakoff (Pars, 1962). Tema: Demolicin de la defensa. Tpico mate.

5.997 J. .lit w 6.000 Negras .l .l Negras ~ ll .l ii juegan

.l Ji . .l juegan y .a y ganan

.a ganan Ji .l ~ ~ ji'

'WJ ,, ,~, ~ ,i~ Partida: V. Georgiev-Nataf (beda, 1997). Tema : Partida: Dut rejev-Malanjuk(Mosc, 1991). Tema: Doble amenaza. Ataque sobre co lumnas. Clavada .

27

6.003

~---~--iv_e __ l_3 ____ ~l ~:;;~s w .l.!.l . ii J. l. J.

Un nuevo paso, quiz menos perceptible que el anterior, en cuanto a dificultad

se refiere. Para resolver los problemas de este nivel, un jugador

de primera categora no deber emplear ms de cinco o seis minutos,

y ser un buen tiempo el de doce minutos para el de segunda;

dieciocho, para el de tercera, y veinte, para el aficionado.

6.001 .IW

Negras .l 1 .l .l .~. I juegan

y .~Ji 1ft' Ji ganan Ji ~. cz) Aii ~

li

y ganan

Partida: Korchnoi-Veinger (Suiza, 1978). Tema: Ataque sobre columnas y diagonales.

6.004 ' 9

Negras :i.J.J. .l J. ,.-. J. juegan ~ ii .l y Ji ganan f Ji ~ J.1i' iiii :

.l it VfJ Partida: Miles-Korchnoi (1978) . Tema: Demolicin Partida: Miller-OmboltJensen (correspondencia, de la defensa. 1983). Tema: Clavada y coronacin pen .

6.002 J. 1i' w 6.005 . 9 J. w

Blancas .l.i. Blancas .1 J. .i.J. J. .l J..l .i. .l juegan .l .l'cz) t juegan .l cz) J.

...

-y ii J. ii y .J. ii ,,.,. ganan ii li ganan A ii ii~ ~ ii~ ~iiii ~ ii

.~ .. jt A~ W1 Partida: Conquest-Bobzin (Berna, 1993). Tema: Partida: Wirthensohn-Linta (Novi Sad, 1990). Tema: Ataque sobre col u m nas. Ataques sobre col u m nas y diagonales.

28

Nivel 4 l La dificultad, tericamente, es mavor en e/ lote de problemas de este grupo.

Pero va algunos de los temas nos sern familiares. Las soluciones,

por otro lado, nos avudarn a comprender las combinaciones. Siete u ocho minutos han de

ser suficientes para la resolucin de cada problema

al jugador de primera categora; quince, para el de segunda; vein tids, para el de tercera,

v veintisis, para el aficionado.

6.006


6.008


Partida: Fery-Maurice (Francia, 1988). Tema: De-molicin. Ataque sobre diagonales.

6.009


Partida: Apergaard-Anka (Noruega, 1992). Tema: Partida: Korchnoi-Polugaievsky (Buenos Aires, Ataquecombinativo.Obstruccin . 1977). Tema: Clavada.

6.007


6.010


:::l.i. ~"::t:'

""iil Ji' ;;j~f . f{f}

Partida: Korchnoi-Karpov (match final de Candida- Partida: Timoshenko-Gutop (URSS, 1984). Tema: tos, 1974). Tema : Enroque debilitado y clavada. Desviacin y doble amenaza.

29

Nive/5 Si ha resuelto los niveles anteriores,

podr afrontar los de ste con buenas posibilidades de xito.

Encare el estudio con espritu de competicin y, al final, viendo en las soluciones

cmo se resolvieron las partidas, obtendr una valiosa experiencia.

Tiempos: diez a doce minutos, el jugador de primera categora; diecinueve,

el de segunda; veintisis, el de tercera, y treinta, el aficionado.

6.011


J. .i.J. w J..l 1i'J..l.l

J. Jiil

JiJi ~ 1

PORTADA 1. ~a 1! c5 2. g b2! ~d4 3. g b4 mate, tema Indio. Si las negras eligen 2 ... ll!lc3 3.

~e6 18. ~f5 ~x f5 19. ~xf5 '1!!1 b6 20. e4 dx e4 21 . fxe4 'd8 22. e5 ~d5 23. -De4 ~f8 24. 0>d6 ~c7 25. ~e4 0>e6 26 . ~h4 g6 27 . ~xd5 cx d5 28. 'c1 ~d7 29. 'c3 ' f8 30. ~f5 ~fe8 31 . {.)h6+ ~f8 32. ~f6 -Dg7 33. 'cf3 bJ, c8 34. 0>xf7 bJ, e6 35. ~g5 0f5 36. h6 ~b5 37. g4 1-0

e 1. 'g4! Fuerte jugada profilctica que hara las delicias de Nimzovitch. Lo importante es ev itar que la dama negra se situ en forma activa en el flanco de rey , donde las piezas negras estn un poco "en el aire" . Adems la torre blanca actuar de forma activa por la cuarta lnea

Posicin tomada de la partida Karpov - Hort, Mosc, 1971 : 1. e4 c5 2. -0> f3 d6 3. d4 cxd4 4. 0xd4 0 f6 5. 0Jc3 e6 6. g4 0c6 7. g5 0Jd7 8. f4 a6 9. ~e3

~e7 1 O. bJ, g 1 0J xd4 11 . ~xd4 e5 12. ~d2 exf4 13. ~xf4

PROBLEMAS Nivel 1

Nm.5.986 1. 1!\lh7+!! y las negras abandonaron, ante 1 ... {:) x h7 2. ~g6 mate.

Nm.5.987 1. ~xe6+! las negras abandonaron, ante 1 .. . ~xe6 2. f8 mate.

Nm.5.988 1. 1!\'l' a5! y las negras abandonaron, ante 1 ... {:) x a5 2. 0Ja7 mate, o 1 ... {:)eS 2. ~d8+! {:) xd8 3. ~a7 mate y, an, 1 ... 1!\'l'd7 2. {:)a7 +! ~ xa7 3. ~xd7.

Nm.5.989 1. ~xg6+! xg6 2. ~d3+ y las negras abandonaron , ante 2 ... ~ xg5 3. ~g3+ 11ll/h6 4. h8 mate.

Nm.5.990 1 ... '' g 1 +! (hay otros caminos, pero es fe es el ms elegante) 2. ~xg1 ~xg1+ 3. lll!? h2

~e5+ 4. f4 ~xf4+ 5. h3 ~h1 mate.

Nm.5.991 1 ... A f1! y las blancas abandonaron, ya que no hay defensa eficaz contra 2 ... ~ 2+, mien-tras que, si 2. ~xf1 ~xh2+ 3. 1l!lle1 c1 mate.

Nm.5.992 1. ~xd5+! cxd5 2. ~xf8+!! y las negras abandonaron, ante 2 ... ~xf8 3. ~c8+ que lleva al mate.

Nm.5.993 1 ... g3! y las blancas abandonaron, ya que, si 2. ,l x g3 ~e1+ 3. ~g1 1!ll'g2 mate y, si 2. fxg3 f2, decide.

Nm.5.994 1. ~b2! f!J e7 2. 1!\'l' xb7!! y las negras abando-

naron, ya que, si 2 ... 1!ll' f8 3. ' xf7+! 1!\'l' xf7 4. bi xe8 mate y, si 2 ... ' xd8 3. bid7 ganara fcilmente .

Nm.5.995 1 ... ~ e1+! 2. ~xe1 ~d4+!!y las blancas abandonaron, ante 3. ~xd4 dxe1=~+.

Nivel2 Nm.5.996 1 ... b xf3 2. gxf3 1!\'l' h3 y las blancas abando-naron, indefensas contra la amenaza 3 ... ~xf3.

Nm.5.997 1... ;.}b5! 2. ~xb5 ... (si 2. QJ. xd8 c)a3 mate y, si 2. ~xf7

Nm.6.002 1. ~h8+! ~xh8 2. ~xg5+ ~g7 3. M 6+ ~f8 4. ~h8+! (ms fuerte que la ganancia de la dama} y las negras abandonaron, ante 4 ...

~xh8 5. )h7 mate.

Nm.6.003 1. ~xb7+! ~xb7 2. fj> b5+ 11Jl?c8 3. ~h3+y las negras abandonaron, ante 3 ... ~d8 4. ~xc6 ante la mortal amenaza ~d7.

Nm.6.004 1... i!l' xf1+! 2. ~ xf1 ~f2!y las b lancas aban-donaron, ante la amenaza 3 ... ~xf1+ 4. xf1

~e 1 y el pen corona.

Nm.6.005 1. d5! cxd5(si 1 ... ~f7 2. 'h6 ~g8 -si 2 ... ~xh6 3. z:J xf7+ ~ 8 4. ~x h6 mate 2 ... ~f6 3. ~xc4 cxd5 4. h4- 3. f1J xg 7+ ~xg7 4.

~g4+ gana} 2. ) xg6+ y las negras abandona-ron, ante 2 ... hxg6 3. ~h6+ y 4. 'li!!' xg7 mate.

Nivel4 Nm.6.006 1. g8+! ~xg8 3. ti f7+ 11Jl'h7 4. )g5+ ~h8 5. ~h6+! ~xh6 6. ~h7 mate. Tambin ganaba bri llante-mente: 1. ~h6! para seguir con 2. 1J.h8+

~xh8 3.

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Ocho x Ocho Especial 40

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