PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio...

89
PABLO HOY El anuncio apasionado del encuentro con Cristo Juan Esquerda Bifet Presentación En toda época histórica, la comunidad de los creyentes en Cristo experiementan las propias limitaciones. Frecuentemente la barca de la Iglesia parece zozobrar. Entonces es la hora de Dios, un momento de gracia, para redescubrir y experimentar de modo nuevo la presencia de Cristo resucitado. “En esperanza fuimos salvados (Rom 8,24), dice san Pablo a los romanos y a nosotros” (Benedicto XVI, enc. Spe salvi 1). Cuando Pablo se encontraba en Corinto, tal vez con cierta tendencia al desánimo, después de constatar que en Atenas no habían aceptado el misterio de Cristo resucitado, el Señor se le hizo presente de nuevo para decirle: “No tengas miedo, sigue hablando y no calles; porque yo estoy contigo y nadie te pondrá la mano encima para hacerte mal, pues tengo yo un pueblo numeroso en esta ciudad” (Hech 18,9-10). Recordar a San Pablo, en un año jubilar o en el decurso del año litúrgico, forma parte de la “memoria” de la Iglesia. Es siempre un acontecimiento de gracia y de renovación, en el camino de la santidad y de la misión. El Corazón de Cristo se refleja en el corazón y en la vida de Pablo así como en el corazón y en la vida de todo apóstol que quiera vivir en coherencia con el evangelio. Pablo cuenta repetidamente su “conversión”, en el sentido de un encuentro vivencial con Cristo que le confía la misión de evangelizar sin fronteras (cfr. Hech 9,1-19; 22,3-21; 26,9-20). En él, la misión tiene como fuente el amor: "Me amó" (Gal 2,20); "la caridad de Cristo me urge" (2Cor 5,14); "urge que él reine" (1Cor 1

Transcript of PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio...

Page 1: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

PABLO HOY

El anuncio apasionado del encuentro con Cristo

Juan Esquerda Bifet

Presentación

En toda época histórica, la comunidad de los creyentes en Cristo experiementan las propias limitaciones. Frecuentemente la barca de la Iglesia parece zozobrar. Entonces es la hora de Dios, un momento de gracia, para redescubrir y experimentar de modo nuevo la presencia de Cristo resucitado. “En esperanza fuimos salvados (Rom 8,24), dice san Pablo a los romanos y a nosotros” (Benedicto XVI, enc. Spe salvi 1).

Cuando Pablo se encontraba en Corinto, tal vez con cierta tendencia al desánimo, después de constatar que en Atenas no habían aceptado el misterio de Cristo resucitado, el Señor se le hizo presente de nuevo para decirle: “No tengas miedo, sigue hablando y no calles; porque yo estoy contigo y nadie te pondrá la mano encima para hacerte mal, pues tengo yo un pueblo numeroso en esta ciudad” (Hech 18,9-10).

Recordar a San Pablo, en un año jubilar o en el decurso del año litúrgico, forma parte de la “memoria” de la Iglesia. Es siempre un acontecimiento de gracia y de renovación, en el camino de la santidad y de la misión. El Corazón de Cristo se refleja en el corazón y en la vida de Pablo así como en el corazón y en la vida de todo apóstol que quiera vivir en coherencia con el evangelio.

Pablo cuenta repetidamente su “conversión”, en el sentido de un encuentro vivencial con Cristo que le confía la misión de evangelizar sin fronteras (cfr. Hech 9,1-19; 22,3-21; 26,9-20). En él, la misión tiene como fuente el amor: "Me amó" (Gal 2,20); "la caridad de Cristo me urge" (2Cor 5,14); "urge que él reine" (1Cor 15,25). La misión es un itinerario de conversión permanente, como apertura a la sorpresa de Dios.

Su vida es una continua apertura a la gran novedad del misterio de Cristo (cfr. Gal 1,11-17; 1Cor 15,8-10). A la luz de Cristo, cambió radicalmente su actitud personal y su cosmovisión, y así pudo contagiar a otros de su experiencia de encuentro con el Señor resucitado.

Tenía conciencia de ser "instrumento escogido" (Hech 9,15), “segregado para el evangelio de Dios” (Rom 1,1), dentro de un proyecto misionero; por esto se sentía como "encadenado por el Espíritu" (Hech 20,22). Esta elección era un don recibido o "gracia otorgada por Dios", que le destinaba a "ser para los gentiles ministro de Cristo Jesús" (Rom 15,15-16). Por esto se presenta como "deudor de todos" (Rom 1,14), sin otra razón de ser que la de anunciar el evangelio (cfr. 1Cor 9,16).

La misión se concretaba en el mismo Cristo que le había enviado, le acompañaba y le esperaba en todos los hermanos. La comunidad eclesial de los creyentes, la “ecclesia” convocada y amada por el Señor, era como "cuerpo" o expresión de Cristo (cfr. 1Cor 12,26-27), su "esposa" o consorte (cfr. Ef

1

Page 2: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

5,25-27; 2Cor 11,2) y "madre" fecunda para hacer nacer a Cristo en los demás (cfr. Gal 4,19.26). Su entrega apostólica, llena de dificultades, tiene esta característica de "completar" a Cristo por amor a su Iglesia (cfr. Col 1,24), y de preocuparse "por todas las Iglesias" (2Cor 11,28). Así vivía en sintonía con el amor de Cristo a su Iglesia hasta “dar la vida por ella” (Ef 5,25).

La atención respetuosa y crítica respecto a los criterios del momento y a las preferencias ideológicas o prácticas de la sociedad, no le podían separar del amor a Cristo y de la misión confiada (cfr. Rom 8,35). Por esto, no se avergonzaba de anunciar el evangelio en su totalidad (cfr. Rom 1,16) ni buscaba su propio interés (cfr. Hech 20,23). “Predicar el Evangelio no es para mí ningún motivo de gloria; es más bien un deber que me incumbe. Y ¡ay de mí si no predicara el Evangelio!" (1Cor 15,16).

Este estilo misionero paulino es el que quería contagiar a los demás "pastores", a quienes se había confiado cuidar de la "Iglesia" que el mismo Cristo "adquirió con su sangre" (Hech 20,28). Lo más importante de la vida apostólica consistía en ser "fragancia" de Cristo y de su caridad pastoral: "Por nuestro medio difunde en todas partes el olor de su conocimiento. Pues nosotros somos para Dios el buen olor de Cristo" (2Cor 2,14-15). "Por mi parte, muy gustosamente gastaré y me desgastaré totalmente por vuestras almas" (2Cor 12,15).

La misión consistía en anunciar a Cristo, haciéndole presente bajo signos eucarísticos y comunicándolo a los demás como participación en su vida. A Pablo le había tocada en suerte anunciar este misterio a todos los pueblos (cfr. Ef 3,8) proclamando "la verdad en el amor" (Ef 4,15). Cristo anunciado y vivido es el centro de la misión, porque "todo ha sido creado por él y en él", y "todo se apoya en él" (Col 1,12-17; cfr. Ef 1,3-23). El apóstol es sólo servidor del "misterio" de Cristo manifestado por medio de su Iglesia (cfr. Col 1,24-27; cfr. Ef 3,1-11). Por esto, el anuncio debe ser hecho a todos "los pueblos, como coherederos y copartícipes de las promesas en Cristo Jesús, por medio del evangelio" (Ef 3,6).

El “gozo de la esperanza” (Rom 12,12) se fundamenta en el mismo Cristo resucitado, “nuestra esperanza” (1Tim 1,1). Se anuncia a Cristo, el Hijo de Dios hecho hombre, el Salvador y Redentor (cfr. Rom 1,2-7). Es el misterio de la “cruz” salvadora de “Cristo crucificado”, aunque parezca un “escándalo” y una ”necedad” (1Cor 1,23)

La ilusión del Apóstol estriba en "presentar a todos los hombres perfectos en Cristo" (Col 1,28). La llamada al bautismo es para configurarse con Cristo (cfr. Rom 6,1-5), para vivir en sintonía los criterios, la escala de valores y las actitudes de Cristo (cfr. Gal 2,20; cfr. Fil 1,21).

Sin retrasos, hay que tender a "recapitular todas las cosas en Cristo" (Ef 1,10), porque ha llegado "la plenitud de los tiempos" (Gal 4,4), en la que Dios ha enviado a su Hijo, "nacido de "la mujer", para salvar a todos. La historia humana ya ha recuperado su sentido, porque Cristo la vive con nosotros. "Ahora es el día de la salvación" (2Cor 6,2). La historia camina hacia Cristo hasta que Dios sea "todo en todos" (1Cor 15,28).

Cristo es "el Hijo de Dios" (Hech 9,20), "el Salvador" (Tit 1,3), que "fue entregado por nuestros pecados y resucitó para nuestra justificación" (Rom 4,25). Se trata de un cristocentrismo abierto a toda la humanidad, que no destruye lo que Dios ya ha sembrado en otras culturas y religiones (cfr. Hech 17,22-34). Sólo con la presencia de Cristo resucitado, la historia humana y la misión eclesial recobran su sentido.

Pablo era sólo "olor" de Cristo y signo personal suyo. De los demás apóstoles sabemos poco, pero sí sabemos que amaron y evangelizaron como Pablo. Todos dieron la vida como el Buen Pastor, dejando, casi siempre en el anonimato, la huella y la fragancia de Dios Amor. Así fueron Pedro, Juan, Santiago, Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago de Alfeo, Tadeo, Simón el Zelotes... Era la "vida apostólica" que fueron imitando los apóstoles de todos los tiempos: Agustín, Benito, Patricio, Bonifacio,

2

Page 3: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Columbano, Francisco, Domingo, Catalina, Juan de Ávila, Teresa de Jesús, Ignacio, Javier, Alfonso de Ligorio, Pablo de la Cruz, Juan María Vianney, Daniel Comboni, Teresa de Lisieux, Carlos de Foucauld, Teresa de Calcuta, María Inés Teresa Arias...

La lista no ha terminado. Sus carismas son distintos, aunque es uno el Espíritu de quien derivan. No todos han formado parte del colegio de los Doce y de sus sucesores o inmediatos colaboradores. Cuando hablamos de Pablo hoy hay que pensar también en laicos, personas consagradas, sacerdotes. En el arco de veinte siglos de cristianismo habría que colocar muchos nombres; pero, en realidad, han sido, son y serán muchos más los desconocidos de ayer, de hoy y de mañana. Son los misioneros y misioneras de todas las épocas y también los apóstoles que trabajan en sus propios ambientes y en los centros neu-rálgicos de nuestra sociedad...

Después de muchos años de convivencia en todos los continentes con estos "Pablos" de hoy, y mirán-dolos con el prisma de la vida y de la doctrina de Pablo de Tarso, me decidí a escribir estas modestas reflexiones, a modo de glosa, sobre lo que he sentido al meditar los textos paulinos en los diferentes ambientes misioneros.

Lo importante es descubrir que Cristo resucitado sigue viviendo en el corazón y en los gestos de sus apóstoles. Con los textos paulinos podríamos hacer una biografía de muchos apóstoles de hoy que son, a pesar de sus limitaciones, un signo personal de Cristo.

El celo del Buen Pastor, vivido como Pablo, será siempre una pauta posible y actual, especialmente en un período nuevo de evangelización, en el que se nos pide cuál es nuestra experiencia de encuentro con Cristo resucitado. Hoy se abren campos inéditos e inesperados a la evangelización.

La mayoría de los apóstoles o de los "Pablos" de hoy seguirán en el anonimato. Quien ciertamente no los olvida es el Señor, que les sigue trazando un programa de vida: "Venid"... "Id"... "Estaré con vos-otros". Un día los encontraremos y conoceremos a todos en el corazón de Dios. Mientras tanto habrán sido ellos los verdaderos protagonistas de la historia humana y eclesial, y descubriremos que, gracias a ellos, nuestras facciones se parecen más a las de Cristo. Dedicando su vida al anuncio del mensaje evangélico, se han convertido en los "sembradores de la paz"; es el mismo Cristo, príncipe de la paz, quien reina en nuestros corazones.

Los textos de Pablo hablan por sí mismos. En realidad, es el mismo Cristo quien habla en ellos, como habla a través de cualquier texto inspirado de la Sagrada Escritura. Pero en los textos paulinos es como si Jesús, que vive en el corazón de cada apóstol, suscitara unas resonancias indecibles, que las capta principalmente quien sintió la llamada apostólica como declaración de amor. Y entonces el cora-zón de todo apóstol revive, reestrena su "sí", profundiza en su "experiencia existencial" del amor de Cristo (Juan Pablo II, Bula Abrid las puertas al Redentor 3). La vida del apóstol tiene sentido porque se orienta solamente a amar a Cristo y hacerle amar. En su donación a los hermanos deja transparentar que "Jesús vive" (He 25,19). Esa transparencia es posible cuando intenta seriamente hacer realidad todos los días la divisa paulina: "Mi vida es Cristo" (Flp 1,21).

3

Page 4: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

INTRODUCCIÓN A LA LECTURA DE PABLO

La mejor lectura de Pablo sería la de adivinarle en los gestos y en el corazón de muchos apóstoles de ayer y de hoy. Esto sólo es posible si aprendemos a pasar ratos, sin prisas psicológicas, junto a Cristo eucaristía, quien deja oír su voz a través de los textos inspirados por el Espíritu Santo hace casi dos mil años. Con esta luz tal vez descubriríamos la vida de Pablo en nuestra propia vida y en nuestro derredor. ¿Por qué no? Somos del mismo barro y tenemos el mismo Señor...

Esta lectura contemplativa y amistosa nos hace entrar en el Misterio de Cristo, que se prolonga en sus apóstoles y en nuestras propias vidas. A Cristo sólo se le entiende cuando se le ama (Jn 14,21).

Pero esta lectura vivencial no nos ahorra nuestro esfuerzo de reflexión y aun de estudio teológico sobre san Pablo y sobre los demás textos del Nuevo Testamento.

Muchos apóstoles de hoy ya no disponen de aque-llas largas horas de estudio que tenían en el seminario o. en la escuela y grupo de formación. Es verdad que hay momentos fuertes de formación permanente y que todo apóstol debe y puede encontrar algún tiempo para orar, descansar y estudiar. Precisamente por esto voy a resumir en unas pocas pinceladas algunos datos sobre la vida y la doctrina de Pablo.

Es una síntesis que he ido elaborando durante lar-gos años de lectura y meditación, que ya he aprovechado en mis propias tareas apostólicas y que ahora la brindo a todos cuantos gastan su vida para anunciar el evangelio. Sigo creyendo que he aprendido más en contacto con ellos que en los libros técnicos; pero tal vez sin estos escritos no hubiera valorado tanto la vida de Pablo hoy, hecho realidad en apóstoles de carne y hueso.

Los comentarios sobre san Pablo y las vidas reales de los apóstoles de hoy contagian de evangelio e invitan al encuentro vivencial con Cristo para compartir su misión. Pero la vida de Pablo y de cualquier apóstol de Cristo será siempre fuente de controversia. Es la lógica del evangelio. Y es señal evidente de que el apóstol se ha hecho signo de Cristo, es decir, un interrogante para los hombres de todas las épocas.

Retazos de una vida

Pablo deja entrever, con cierta frecuencia, algunos detalles de su vida pasada. No son muchos, es verdad. Y son difíciles de cronometrar con precisión. Eso sí, todos los ve como momentos de gracia, puesto que el Señor le guió cariñosamente hasta el encuentro definitivo con él. A la luz de

4

Page 5: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

este encuentro posterior descubre que toda su vida (como la de todo apóstol) comienza con una declaración de amor, que tiene su iniciativa en Dios: "Cuando plugo al que me segregó desde el seno de mi madre y me llamó por su gracia para revelar en mí a su Hijo, anunciándole a los gentiles, al instante, sin pedir consejo ni a la carne ni a la sangre..., partí para la Arabia y de nuevo volví a Damasco" (Gál 1,15-17).

De su infancia y juventud sabemos poco. Su nombre era Saulo (en su expresión griega) o Pablo (en su expresión latina). Había nacido en Tarso (Asia Menor), mientras Jesús de Nazareth tendría de seir a diez años. Nacido de padres hebreos, fariseos, de la tribu de Benjamín, era ciudadano romano (Flp 3,5). Su formación escriturística fue esmerad, “a los pies de Gamaliel” (He 22,3).

Dotado de tres culturas (hebrea, griega y latina), Pablo se describe a sí mismo con tres pinceladas: “Fariseo” (Flp 3,5; He 23,6-11), “celoso de las tradiciones” (Gál 1,14), “perseguidor” (1 Cor 15,9). En Tarso pudo conocer bien las escuelas filosóficas y las leyes del comercio. Pero su oficio propio era el de rabino, que conjugaba la enseñanza con el trabajo manual de guarnicionero o curtidor de pieles.

La conversión de Saulo fue un don de Dios en el momento en que humanamente menos se podía esperar (He 9,1ss). Dios había preparado este momento por vías inimaginables. No se puede infravalorar el impacto producido al ver a un cristiano (Esteban) morir perdonando (He 7,54-60). La actitud externa e interna de sintonía con los otros verdugos (He 7,54ss) y de agente principal e intransigente en la persecución (He 8,3) pueden ser un síntoma de una resistencia explícita a la gracia, que no dejaba dormir tranquilo a aquel joven precoz.

La vocación apostólica de Pablo comenzó en el mismo momento de la conversión. ¿Sería el mismo año 33, año de la redención? La entrega generosa a la misión era la señal de autenticidad de la conversión; pero, sobre todo, era la prueba del amor del mismo Jesús, que restaurara sin herir la dignidad personal. En el camino de Damasco, Pablo aprendió que Cristo, viviente en cada hermano y en cada acontecimiento, nunca había dejado de amar ni al mismo perseguidor. Ahí está el meollo de la doctrina que Pablo predicaría: Cristo, presente y protagonista de la vida de los suyos, es el Salvador universal que hay que anunciar a todas las gentes; el mismo Señor que le recibe en la comunidad ya creyente, le envía a crear nuevas comunidades de creyentes.

La conversión inicial necesitaba un proceso lento de maduración. Era conversión auténtica y definitiva, pero que necesitaba calar hondamente en los criterios, motivaciones o escala de valores y actitudes. Entre el camino de Damasco y el primer viaje misionero pasaron tal vez doce años. Es verdad que Pablo no dejó de anunciar a Cristo desde el primer momento; pero se necesitaban también largos años de desierto y una vida ordinaria y oculta de “Nazareth” en Tarso, ciudad natal. No obstante, este tiempo largo, de relativa inactividad, será siempre un enigma de la providencia.

A Tarso le fue a buscar Bernabé para llevárselo a Antioquia (año 43-44). Y en el calor hogareño de una comunidad de “cristianos” que vivían bajo la acción del Espíritu Santo enviado por Jesús, comenzaron los viajes misioneros de grandes distancias, a modo de ensayos sucesivos para un apostolado siempre sin fronteras en la geografía y en la historia.

Los viajes misioneros de Pablo quedan narrados, con ciertos detalles, en los “Hechos”, escritos por san Lucas. Ocupan un arco de diez a doce años hasta el martirio. Pero no se puede precisar mucho la cronología ni aun ciertos detalles geográficos. Durante el primer viaje, parece ser Bernabé quien dirigía la acción misionera. Los tres grandes viajes que nos describen los Hechos comienzan y terminan en Antioquia (como comunidad local que arropa y sostiene a los misioneros), pero pasan siempre por Jerusalén para poner en práctica la comunión apostólica con Pedro y los demás apóstoles.

Las dificultades de la misión fueron en aumento. Son las reglas de juego de la caridad pastoral. Las persecuciones provenientes del mundo gentil y de algunos círculos hebraicos eran poca cosa, a pesar de las lapidaciones, azotes y cárceles, sin contar las inclemencias de los viajes.

5

Page 6: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

La verdadera oblación o victimación del apóstol se fraguó donde menos se podía esperar: en la comunidad cristiana, compuesta de miembros santos y, a la vez, limitados. Por esto se necesitó un concilio (año 49). El conflicto con Pedro acerca de la práctica de vida cristiana pudo ser superado gracias a la sinceridad, caridad y humildad de ambos (Gál 2,11-21; cf 2 Pe 3,15).

La separación de Bernabé, que discrepaba de Pablo en la apreciación sobre el actuar de Marcos, debió ser más dolorosa (He 15,35-39). Era el "precio" que Cristo exigía a los suyos para conseguir una evangelización más eficaz, a modo de fecundidad eclesial (Gál 4,19; cf Jn 16,20-22). Estos avatares del primer viaje (años 45-49), a través del Asia Menor y de Chipre, dieron lugar a mayor colaboración por parte de otros "apóstoles" (Silvano, Timoteo, etc.), mientras Pablo y Bernabé se orientaban, cada uno por separado, a abrir nuevas puertas al evangelio.

Las dificultades y frutos del segundo viaje (años 50-53) no fueron menores. Era la primera vez que el evangelio pasaba de Asia a Europa. Pablo se sintió interpelado por la fuerza del Espíritu, que le empujaba a una misión sin fronteras, sin esperar a que las comunidades fueran perfectas. El objetivo principal fue Atenas, el centro motor de la cultura de aquellos tiempos, con un influjo decisivo en todo el Imperio Romano.El sermón de Pablo en el Areópago de Atenas fue un modelo de inculturación (He 17,19-34). No falta un detalle. Era necesario hacerlo así, como en cada época, cultura y situación social. Pero las cosas de Dios siguen otras reglas de eficacia. A Pablo no es que le rechazaran, sino que, cosa peor, se le rieron y le caricaturizaron su mensaje sobre Jesús resucitado. Una experiencia y un fracaso tan doloroso no lo había experimentado nunca. Los atenienses estaban dispuestos a aceptar cualquier "Dios" que les dejara en paz; pero no podían aceptar, de ninguna de las maneras, a un Dios personal, Amor, "alguien", cuyo Hijo se había hecho verdadero hombre y había sido crucificado y resucitado. Eso iba más allá de sus sistemas e ideologías. A ellos les bastaba un "Dios" que era una primera idea y un primer motor, y que no se entrometía en los procesos de su cultura... Hasta ahora, todos los dioses se habían conformado con esos privilegios... No acababan de comprender que el cristianismo, que respeta y valora todas las culturas, va más allá de cualquier cultura, ideología y grupo sociológico.

Pablo sentiría la sensación de fracaso. También para él era una prueba, sobre todo en esas circunstancias, el hecho de tener que predicar un mensaje cristiano "molesto", que es siempre "misterio" de Dios. Se refugió en Corinto, donde estuvo año y medio (He 18,11). El Señor le dejó experimentar el fondo de su propia nada. Algún tiempo después (ciertamente demasiado largo para el corazón de Pablo), el Señor se hizo nuevamente encontradizo para reafirmarle en la fe y en la misión: "No temas, habla; estoy contigo" (He 18,9-10). Años más tarde, en una carta a los cristianos de Corinto, Pablo reflejaba sus sentimientos íntimos durante su estancia entre ellos, a continuación de la penosa experiencia de Atenas (1 Cor 2,2-5; cf Rom 1,16).

El tercer viaje misionero (años 54-58) sirvió para reconfirmar en la fe a las comunidades de Asia y de Grecia. No faltaron los conflictos, los malentendidos y las insidias de todo tipo. Tampoco faltaron los éxitos apostólicos. De camino hacia Jerusalén se detiene en Mileto, donde expone largamente a los responsables de la Iglesia de Éfeso cuáles han sido siempre las líneas de su actuar apostólico y cuáles deben ser, por tanto, las líneas de sus colaboradores y sucesores. Es su testamento pastoral (He 20,27-38).

Al llegar a Jerusalén, Pablo cumplió con sus deberes de comunión eclesial con los apóstoles. Pero fue un error práctico el aconsejarle cumplir con el rito judío en el templo. Los malentendidos y el furor popular consiguieron la detención y la cárcel. Dos años aparentemente perdidos (58-60). Luego, el viaje a Roma, el naufragio en la pequeña isla de Malta y también el consuelo de ver, finalmente, a los hermanos de Roma (He 28,14-15). Tal vez era el año 61, cuando Pablo tenía cincuenta y cinco años.

Pablo escribió cartas a las principales Iglesias fundadas o visitadas por él. A los cristianos de Roma les había prometido visitarlos, de paso, en su viaje programado para España (Rom 15,19-24). Pero a Roma llegó cargado de cadenas. La prisión de Roma pudo durar dos años (He 28,30; años 61-

6

Page 7: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

63?). Es casi segura una liberación y un viaje a España (el cuarto viaje misionero); así lo aseguran el Papa san Clemente Romano, el canon Muratori y algunos Santos Padres como san Atanasio. En su último viaje a Oriente fue nuevamente arrestado y llevado a Roma, donde fue decapitado en la laguna Salvia ("tre fontane") hacia el año 67. Pedro y Pablo fueron, ese mismo año, los "dos testigos", cuyos cuerpos destrozados quedaron expuestos "en la plaza de la gran ciudad" (Roma; cf Ap 11,3-8).

Pablo había hablado de su vida y de su muerte como de libación o sacrificio (2 Tim 4,6-8). En sus últimos momentos sintió de nuevo el misterio de una soledad (abandono por parte de la comunidad), pero, al mismo tiempo, la cercanía inconfundible de Cristo amigo, que no abandona a los suyos (2 Tim 4,16-17). Hasta el último momento se sintió misionero de Cristo para "todas las gentes" (ib). Su encuentro con Cristo se hizo contemplación, anuncio y donación a los hermanos.

El apostolado de Pablo fue siempre "sin fronteras", tanto durante los años de desierto y de cárcel como en los interminables viajes. Su capacidad de "encarnación" era la misma que la de su trascendencia. Evangelizó en las grandes ciudades (Damasco, Antioquía, Efeso, Tesalónica, Atenas, Corinto, Roma) y, al mismo tiempo, se adaptaba a las pequeñas comunidades, haciéndose "todo para todos" (1 Cor 9,22). Siempre supo encontrar y abrir nuevas puertas al evangelio, sobre todo después de grandes tribulaciones (I Cor 16,9; 2 Cor 2,12; Col 4,3).

Pablo era muy consciente de que no todo lo podía hacer 61. Había que respetar el carisma y el campo de otros; por esto no fue a Alejandría y a Cartago. Por donde pasaba, sabía reconocer lo que otros habían sembrado. Se rodeó de colaboradores que fueron, al mismo tiempo, su cruz y su consolación. No todos fueron fieles al evangelio. Algunos amigos, tan santos y fieles como él (Pedro, Bernabé, Marcos, etcétera), tenían otros métodos de actuación que originaron tensiones dolorosas. Entre el centenar de colaboradores de Pablo hay gentes de toda raza, cultura y posición social; no faltaron mujeres y matrimonios, que demostraron ser capaces de colaborar en el difícil apostolado del evangelizador itinerante hasta los últimos confines de la tierra (Hispania).

Pablo abrió nuevos cauces al evangelio. A su muerte, el cristianismo seguía siendo una minoría al margen de la vida cultural y social del Imperio Romano. No obstante, la semilla quedaba echada en el surco, para ir muriendo y resucitando a través de cada apóstol en cualquier época y circunstancia histórica. Es la semilla de algo (o, mejor, de "alguien") que ya constituye la entraña de la existencia y del quehacer del hombre de todos los tiempos, de todas las culturas y de todas las razas: "Jesús vive" (He 25,19). Es la eterna cuestión que los "Pablos" de todos los tiempos plantean a la sociedad humana y a cada hombre en particular. Si no fuera así, no valdría la pena ser apóstol; mejor dicho, Pablo no hubiera sido apóstol.

El evangelio según san Pablo

El evangelio que Pablo predicaba era el mismo de los demás apóstoles y evangelistas; no podía ser otro (1 Cor 15,3ss). Claro que Pablo no se dedicó a escribir sistemáticamente, sino que sus escritos más bien fueron cartas circunstanciales, a modo de retazos de vida, suya y de los demás. No obstante, en varios fragmentos aparece la misma síntesis del "kerigma" o primer anuncio de los demás apóstoles (Rom 1,17; Gál 4,4-7; 1 Cor 15,3ss; Ef 1,3-14). Pedro y Pablo predican el mismo evangelio (He 2,32ss; 13,26ss).

Los matices y el tono del evangelio según san Pablo son diversos. Porque el apóstol vivía como "segregado" (Rom 1,1) para predicar este mismo evangelio a todos los pueblos (Ef 3,8ss). El era sólo "olor" de Cristo (2 Cor 2,15), urgido por el amor (2 Cor 5,14), puesto que Cristo se enamoró de él hasta dar la vida (Gál 2,19-20). No dejó de sentir la tentación del "escándalo" que suponía predicar a Cristo crucificado (Rom 1,16; 1 Cor 2,2-5), pero esta tensión interior le ayudaba a reestrenar todos los días una decisión inicial clara y total: "Sé de quién me he fiado" (2 Tim 1,12).

Del encuentro con Cristo en el camino de Damasco y de la consiguiente acogida familiar en las

7

Page 8: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

comunidades eclesiales, Pablo fue desgranando los datos fundamentales del mensaje cristiano, que es común a todos los apóstoles y evangelistas.

Cristo resucitado, presente en los que creen en él, llama a cada uno a vivir esta realidad y a transmitirla a todos los hombres. Pablo se sintió llamado de modo especial a despertar esta vocación cristiana en cada ser humano redimido por Cristo. La conversión, como retorno progresivo y como encuentro continuo con Cristo, se hace misión. Pablo estrenó el encuentro con Cristo de esta forma existencial, que compromete en el campo de la perfección y de la evangelización, sin fronteras en el corazón y en la acción. Su vida es Cristo (Flp 1,21) y su única razón de ser es anunciarle a todas las gentes. Esa es su identidad, de la que no se avergüenza y de la que hace gala en el comienzo de todos sus escritos.

Cristo es el hijo de Dios hecho hombre por nosotros, que ha muerto y resucitado, que vive en nos-otros y entre nosotros (bajo signos eucarísticos y eclesiales) y que camina con nosotros, comunicán-donos su Espíritu en una marcha escatológica hacia el Padre. Esta es toda la fe cristiana: Trinidad, revelación, encarnación, gracia o vida nueva, redención, Iglesia y sacramentos, resurrección final (Ef 1-3).

La vida nueva (Rom 7,6) o el hombre nuevo en Cristo consiste en la fe, esperanza y caridad, como inicio de una vida eterna, que sólo será plenitud en el más allá. Es un revestirse de Cristo (Rom 13,14) para pensar como él, valorar las cosas como él y amar como él. Con la acción del Espíritu Santo es posible ir transformándose en Cristo para llegar al Padre (Ef 2,18). Es este mismo Espíritu, recibido en el bautismo, quien transforma nuestro ser, toda la humanidad y toda la creación, hasta llegar a ser la gran familia restaurada de los hijos de Dios (Rom 6-8). Esa es toda la moral cristiana o vida en Cristo; es "la caridad, que es vínculo de perfección" (Col 3,14).

El evangelio que Pablo predica presenta unas coordenadas que, en el fondo, son comunes a los demás evangelistas, pero que en él tiene unos matices peculiares: Jesús es verdadero hijo de Dios (manifestado por la fuerza del Espíritu y por su resurrección) y verdadero hombre (descendiente de David y nacido de "la mujer"); por esto nos puede salvar con su muerte sacrificial y con su resurrección. Es, pues, el Salvador universal, el único Mediador, Cabeza de su Iglesia como cuerpo (místico), el Señor. En él encontramos nuestra salvación definitiva; por él, Dios se revela y comunica a todos los hombres. A la luz de Cristo muerto y resucitado se desvela definitivamente el misterio de Dios del hombre y del mundo (cf Rom 1, lss; Gál 4,4ss). Dios quiere que todos se salven (1 Tim 2,4), y llama a todos para un encuentro y configuración con Cristo Redentor.

En Cristo, Pablo descubre el misterio de su Iglesia, que es la comunidad concreta de los creyentes, como signo pobre de la presencia activa de Cristo, su complemento o "pleroma" (Ef 1,23), su "cuerpo" o visibilidad (Ef 4,12ss), su esposa (Ef 5,22), su sacramento o misterio (signo portador: 1 Tim 3,16), su templo (2 Cor 6,16), su pueblo (2 Cor 6,16). Esta Iglesia, que es el nuevo pueblo o Israel de Dios (Gál 6,16), la nueva Jerusalén (Gál 4,26), debe llegar a ser toda la humanidad, como "implantación" de los signos de la presencia activa de Cristo resucitado en el corazón de toda comunidad, pueblo, cultura y situación histórico-social.

Pablo no se dejó llevar nunca de los complejos, a pesar de su flaqueza y de los fracasos, al tener que hablar de "implantar" la Iglesia por medio de una conversión o reorientación radical de los hombres y de la comunidad hacia Cristo resucitado (1 Cor 3,9-17; 14,2-26; Ef 2,19-22; 4,12). No existe misión apostólica sin la comunión de Iglesia (Ef 2,20).

El amor de Pablo a la Iglesia se basa en esa realidad de ser "pleroma" (complemento) de Cristo. Y de este amor no le separó ni la decepción ni la misma infidelidad de algunas comunidades y de algunos colaboradores íntimos. Se sintió identificado con la Iglesia madre, portadora de Cristo, precisamente por medio de un sufrimiento hecho fecundo por la caridad (Gál 4,19-26). Así podría participar en la fe o fidelidad generosa de "la mujer" (María) que es figura y personificación de la Iglesia (Gál 4,4). La actuación del Espíritu Santo a través del apóstol reclamaba esta actitud materna, para hacer a todo hombre hijo de Dios (Gál 4,4-26; cf Jn 16,13-14.20-22). Pablo sufrió por la Iglesia y de la Iglesia; de

8

Page 9: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

este modo pudo asociarse "esponsalmente" (como Iglesia esposa o madre fecunda) para completar o suplir lo que "falta" a los sufrimientos redentores de Cristo (Col 1,24).

Pablo quiere convertir a cada comunidad eclesial en misionera y madre (Rom 1,8; cf Gál 4,26). Cada cristiano tiene un carisma o gracia especial para cumplir esta misión de Iglesia (Ef 4,1-16). Condición para este objetivo es la unidad en la caridad (1 Cor- 12-13; Rom 12). Para conseguir este objetivo impone las manos (signo sacramental), comunicando la misma consagración y misión del Espíritu a quienes serán sus inmediatos colaboradores y sucesores en la presidencia de la comunidad (2 Tim 1,6; 1 Tim 4,14).

La salvación en Cristo ya ha comenzado a ser realidad en los que creen en él. Toda la historia hu-mana anterior fue una preparación. Ahora es ya urgencia de aplicación a todos y de participación por parte de todos. La historia de la salvación ya sólo tiene un nombre: Jesucristo. Ha comenzado la "plenitud de los tiempos" (Gál 4,4), pero hay que llegar a la "restauración de todas las cosas en Cristo" (Ef 1,10), cuando Jesús entregue al Padre toda la creación y la historia renovada (1 Cor 15,28). Este es el evangelio de la paz, del amor, de la gracia o vida divina, del gozo pascual, de la unidad y de la vida, de la justificación y reconciliación, de la liberación que hay que anunciar a todas las gentes. De este evangelio Pablo es embajador o legado, aunque muchas veces entre cadenas (Ef 6,20).

Pablo es el apóstol de la libertad en el Espíritu, es decir, de la verdadera y única libertad: la del amor (2 Cor 3,17; Gál 5,13). Predica el evangelio no con sentido de superioridad, sino como "servidor" humilde, que ha experimentado la misericordia y fidelidad de Cristo en su conversión y en medio de toda clase de tentaciones y pruebas (He 20,19). A su título de "apóstol" por vocación (de cuya identidad no dudó nunca) añade el título de "siervo de Jesucristo" (Rom 1,1), "siervo vuestro", "siervo de todos" (1 Cor 9,19). Por este Pablo predica con audacia y firmeza los planes salvíficos de Dios para todos los hombres. Para él y para todo cristiano, esos planes de salvación son "un tesoro en vasos de barro"(2 Cor 4,7).

Para Pablo, evangelizar es anunciar el gozo pascual de la salvación en Cristo muerto y resucitado. Es la alegría de la paz mesiánica o de la buena nueva. En Cristo encontramos el "sí" o el "amén" de las promesas mesiánicas y planes de Dios sobre el hombre; en él y con la fuerza del Espíritu, ya podernos decir .nuestro "sí" a Dios (2 Cor 1,19-22).

Mientras Pablo predica este evangelio de Cristo, queda él mismo evangelizado. Es consciente de ello. Y esta humildad y autenticidad es garantía de perseverancia en la fidelidad generosa a la llamada apostólica. "Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero" (1 Tim 1,15). Por esto, el verdadero apóstol no produce miedo ni presenta algo extraño, sino que atrae hacia Cristo, como haciendo descubrir que ya el Señor había sembrado anteriormente su semilla evangélica en el corazón de cada hombre, pueblo y cultura.

El misterio del hombre y del mundo sólo se desvela en Cristo. La contingencia y limitación humana, amalgamada con frecuencia con el pecado, ha sido liberada por la sangre o la muerte redentora de Cristo. El humanismo cristiano que Pablo predica es un humanismo integral. La salvación en Cristo abarca todo el ser del hombre: su cuerpo (como expresión sensible de su ser), su alma y espíritu (capaz de recibir el Espíritu de Dios), su corazón y su mente. Este hombre, con todas sus facetas, forma una unidad maravillosa redimida por Cristo. Es verdad que ha de pasar por una lucha entre el espíritu y la "carne" (o egoísmo) y que el cuerpo será momentáneamente disuelto por la muerte; pero, al fin, todo el hombre, cuerpo y alma, será perfectamente configurado con Cristo resucitado, vencedor del pecado y de la muerte (Flp 3,21; 1,23).

El encuentro con Cristo por la fe se transforma en configuración e incorporación a él por el bautismo (y confirmación). En Cristo, presente en medio de la comunidad eclesial, encontramos la reconciliación y el perdón. La celebración de la eucaristía, como presencia, sacrificio y comunión (banquete, sacramento), será la prenda de la perseverancia y del proceso continuo de transformación en su cuerpo o Iglesia, que debe llegar a ser toda la comunidad humana. Así se espera activamente,

9

Page 10: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

por el compromiso de la santificación y del apostolado, la última venida del Señor (1 Cor 11,23-25). En esta historia de la Iglesia, peregrina y misionera, Pablo, como los innumerables apóstoles de todos los tiempos, ha dejado una huella imborrable: la de vivir enamorado de Cristo resucitado presente, o la de gastar la vida entera para amarle y hacerle amar. El sacramento del' matrimonio (Ef 5,32) y consagración sacerdotal (1 Tim 4,15) son un signo especial de este amor de Cristo a la Iglesia. A Pablo le había tocado en suerte una consagración virginal, de desposorio con Cristo en un campo de caridad sin fronteras (1 Cor 7,25ss). Sólo un enamorado de Cristo podrá entender la vida y los escritos de quien ha precedido a todos los apóstoles en este amor sin fronteras para predicar el evangelio a todas las gentes.

Los trabajos apostólicos de Pablo eran fecundos porque los asumía con amor y tenían como objetivo “formar a Cristo” (Gal 4,19) en los redimidos. María, “la mujer”, la madre de Jesús, era para él la figura (el icono) de la misión materna de la Iglesia (cfr. Gal 4,4-7.19.26). Pablo hoy se realiza en el gozo de anunciar con amor apasionado el encuentro con Cristo resucitado. “Nada hay más hermoso que haber sido alcanzados, sorprendidos, por el Evangelio, por Cristo. Nada más bello que conocerle y comunicar a los otros la amistad con él... Verdaderamente, nada hay más hermoso que encontrar a Cristo y comunicarlo a los demás” (Benedicto XVI, exhortación Sacramentum caritatis 84).

10

Page 11: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Orientación bibliográfica

AA.VV., Paul du Tarse, apôtre du notre temps, Ab. S. Paul, Rome 1979.AA.VV., Pablo, vida, apostolado, escritos, Studium, Madrid 1972.AMIOT. F., Ideas maestras de san Pablo. Sígueme, Salamanca 1966.BARBAGLIO G., Pablo de Tarso y los orígenes cristianos, Salamanca, Sígueme, 1989.BARRIOLA, M. A., El Espíritu Santo y la praxis cristiana, Inst. Teológica, Montevideo 1977. BEAUPERE, N., San Pablo y la alegría, Atenas, Madrid 1975.BENETTI, S., Pablo y su mensaje, Paulinas, Madrid 1982.BONSIRVEN, J., L'évangile de Paul, Paris 1948.BOVER J.M., Teología de san Pablo, Madrid, BAC, 1967.F. BROVELLI, En el corazón del apóstol. A la escucha de san Pablo, Madrid, San Pablo, 2004.BRUNOT, A., Los escritos de san Pablo, Verbo Divino, Estella 1982.CERFAUX, L., Itinerario espiritual de san Pablo, Herder, Barcelona 1968.ID., Jesucristo en san Pablo, Desclée, Bilbao 1967.ID., El cristiano en san Pablo, Desclée, Bilbao 1965.ID., La Iglesia en san Pablo, Desclée, Bilbao 1964. COLSON, J., Pablo, apóstol mártir, Palabra, Madrid 1973.DANIEL-ROPS, H., San Pablo, conquistado por Cristo, Aymà, Barcelona 1966.ESQUERDA BIFET J., Pablo hoy, Madrid, Paulinas, 1984.FERNÁNDEZ RAMOS F. (dir.), Diccionario de San Pablo, Burgos, Monte Carmelo, 1999.FITZMYER, J. A., Teología de san Pablo, Cristiandad, Madrid 1975.GARCÍA PABLOS L., San Pablo, combatiente de Cristo, Madrid 1975.GARDINI, W., Pablo, un cristiano sin fronteras, Paulinas, Buenos Aires 1979.GONZÁLEZ RUÍZ, J. M., El evangelio de san Pablo, Atenas, Madrid 1963.HERRANZ M., San Pablo en sus cartas (Madrid, Edic. Encuentro, 2008).HOLZNER, J., San Pablo, heraldo de Cristo, Herder, Barcelona 1971.ID., El mundo de san Pablo, Rialp, Madrid 1965. KUSS, O., San Pablo, la aportación del apóstol a la teología de la Iglesia primitiva, Herder, Barcelona 1975. LORENZI L., Paolo e i suoi tempi, Paoline, Roma 1960.LYONNET, St., Apóstol de Jesucristo, Sígueme, Salamanca 1966.ID., San Pablo, libertad y ley nueva, Sígueme, Salamanca 1964.MUÑOZ IGLESIAS S., Por las rutas de San Pablo. Ciudadano romano, apóstol y mártir, Madrid, Palabra, 1981.MURPHY-O’CONNOR J., Pablo, su historia, Madrid, San Pablo, 2008.PASTOR RAMOS F., Pablo, un seducido por Cristo, Estella, Verbo Divino, 1993.PRAT, F., Lâ teología de san Pablo, México 1947. REY, B., Creados en Cristo Jesús. La nueva creación según san Pablo, Fax, Madrid 1972.RICCIOTI, G., Pablo apóstol, Conmar, Madrid 1950. RIGAUX, B., Saint Paul et ses lettres, Paris-Bruges 1962.

RUBINO, A., Leyendo a san Pablo, Eler, Madrid 1955.SABUGAL, S., Conversión de san Pablo, Herder, Barcelona 1976.J. SÁNCHEZ BOSCH, Nacido a tiempo, Barcelona, Claret, 1994.ID., Maestro de los Pueblos. Una teología de Pablo, el Apóstol (Estella, Verbo Divino, 2007).VIDAL, A., Tras las huellas de san Pablo, Vilama, Barcelona 1963.ZEDDA, S., Para leer a san Pablo, Sígueme, Sala-manca 1965.

11

Page 12: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

PRIMERA PARTE

OPCION Y DECISION FUNDAMENTAL

Pablo estrenó su encuentro con Cristo por medio de un "sí" que quiso ser definitivo ya desde el principio: "Señor, ¿qué quieres que haga?" (He 22,10). Es la respuesta decidida a la llamada para la misión. La conversión o retorno a Cristo se hace disponibilidad plena para amarle y hacerle amar.

Podrán surgir dificultades y tribulaciones, pero la convicción de ser amado por Cristo y la decisión de anunciarle a todas las gentes no disminuirán su tono inicial de totalidad y de universalidad. El amor, cuando es verdadero, se estrena y se mantiene así. Es la identidad apostólica que no se amilana ante la duda, precisamente por nacer de una declaración de amor y por ponerse en práctica por medio de una amistad honda a modo de desposorio. Es este enamoramiento de Cristo, y no a la inversa, el que fraguará las reflexiones y la metodología sobre la misión. Quien se ha decidido a amar a Cristo ha hipotecado la propia existencia para pensar, valorar las cosas y obrar como él.

La propia debilidad y limitaciones no son obstáculo mayor. En la vida de Pablo hubo momentos de miedo, de debilidad, de sufrimiento, de tentación, de Getsemaní. Pero nunca dejó entrar la duda sobre su identidad apostólica. El era "enviado por Cristo", conquistado por su amor misericordioso. Podrían zozobrar todos los planes y previsiones apostólicas, como podrían oscurecerse, por un momento, todas las ideas y la lógica humana; pero ya no cabía dudar sobre la caridad de Cristo (Rom 8,35).

La respuesta a la vocación se renueva todos los días a la luz y al calor de una presencia amorosa de Cristo, que sigue hablando y acompañando al apóstol. Sin esta renovación y reestreno diario, el apóstol quedaría reducido a pavesas o a espantapájaros. Se siente la necesidad absoluta de una relación amistosa con Cristo, practicada por medio de momentos de estar con él sin prisas psicológicas. Las cartas que Pablo escribe a las comunidades o a los colaboradores parecen un diálogo con partida doble: hablar de Cristo y a Cristo. Y en él ve siempre al Padre y la fuerza del Espíritu.

Cada palabra y cada gesto de Pablo reflejan a Cristo resucitado. Verdaderamente, el corazón de Pablo era un trasunto del corazón del Señor. Todo respira a Cristo (2 Cor 2,15). Es un cristocentrismo que descorre el velo de los planes salvíficos de Dios sobre toda la humanidad y toda la creación. La opción y decisión fundamental, que es el punto de partida de toda vocación apostólica, se mantienen con esta perspectiva universalista, sin fronteras en el corazón y en la acción.

Este amor, que condiciona toda la vida del apóstol, confiere novedad perenne a todos sus gestos y trabajos. Ya no hay monotonía ni anquilosamiento, profesionalismo, instalación y rutina, ni días grises y monótonos. Todo se convierte en una ocasión nueva para amar y anunciar a Cristo. En la vida de Pablo no tendría sentido reducir el apostolado a un paréntesis o a una ocasión de medrar egoísticamente. Por esto no se sintió nunca frustrado. Su hablar sobre Cristo y sobre su evangelio es siempre nuevo, porque nace de un amor reestrenado todos los días y practicado en el quehacer apostólico de las circunstancias ordinarias.

Todo apóstol es capaz de decir, como Pablo, "mi vida es Cristo" (Flp 1,21). El secreto de esta capacidad no es la propia "virtud" o las propias cualidades, sino la fe y la confianza apoyadas en la realidad de que es Cristo quien ha tenido la iniciativa de asumir nuestra vida como suya. El apóstol no vive nunca solo: "Ya no soy yo el que vive, sino que es Cristo quien vive en mí" (Gál 2,20), "ya sea que vivamos, ya sea que muramos, somos del Señor" (Rom 14,8).

Es verdad que las palabras y la vida de Pablo son un desafío para cada apóstol. ¿Quién no se siente ruborizado o avergonzado al querer pronunciarlas y hacerlas suyas? En realidad, es el desafío de los

12

Page 13: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

enamorados. Porque el mismo Cristo, que nos examina e interpela sobre este amor, hace posible nuestro "sí": "Todo lo puedo en aquel que me conforta" (Flp 4,13).

1. Elección inesperadaAl caer a tierra, oyó una voz que decía:Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? El contestó: ¿Quién eres, Señor?...Yo soy Jesús, a quien tú persigues.Levántate y entra en la ciudad,y se te dirá lo que has de hacer.

(He 9,4-6).

Pablo no se había imaginado nunca este modo original de encontrar a Cristo. Jesús no era una idea ni un mero personaje del pasado, fundador de un grupo religioso de adeptos. Verdaderamente había resucitado y vivía en el corazón de los creyentes, protagonizando su existencia. El mismo Saulo, perseguidor, no era ajeno a esta presencia y a este amor.

Jesús llama a quien quiere, cuando quiere y como quiere. Se hace encontradizo con todos. Toda la vida es un conjunto de detalles de su presencia amorosa. Pero es él quien tiene la iniciativa de escoger el momento y el cómo por el que declara más fuertemente su amor. La vocación o llamada se recibe como es: un don inmerecido e inesperado, pero comunicado en la propia circunstancia en la que uno vive. Allí estaba esperando Cristo desde siempre.

El dolor y sufrimiento de una Iglesia peregrina no podía quedar estéril. Una vocación apostólica es fruto de una comunidad que ora con María (He 1,14) y que sabe sufrir amando y perdonando. El martirio de Esteban no es ajeno a la conversión y a la vocación misionera de Pablo. Todo ello era necesario, como el dolor de una madre, para que a Pablo se le desmantelasen todas sus seguridades ficticias.

La mirada de Cristo, que llama por el nombre y que penetra el corazón, no humilla, sino que sana, libera, restaura y envía. Es la "venganza" del amor. Es como si Pablo hubiera descubierto que Cristo resucitado era el único amigo de toda su vida y que ahora le invitara a correr esponsalmente su misma suerte y a hacer que todos le encuentren como Salvador y Redentor. Esa mirada de Cristo presente será el sostén de toda la vida del apóstol.

Esta elección inesperada reclama un "sí" de todo corazón, que orienta definitivamente toda la vida para amar a Cristo y hacerle amar (He 22,10). Es un "sí" que quiere ser total y para siempre, que se mantiene y se estrena continuamente en el diálogo de la oración íntima con Cristo.

2. Respuesta inmediata y definitiva

Cuando plugo al que me segregó desde el senode mi madre y me llamó por su graciapara revelar en mí a su Hijo,anunciándole a los gentiles, al instante...partí para Arabia y de nuevo volví a Damasco.

(Gál 1,15-17; cf He 22,10).

Pablo no olvidó ni ocultó nunca su condición de convertido (He 22,3ss; 26,9ss; I Cor 15,9). ¿Cómo podría olvidar aquella experiencia profunda del amor misericordioso de Dios en Cristo Jesús? Su única gloria era el haber sido salvado por Cristo crucificado y resucitado.

El recuerdo constante de esta experiencia le llevó a descubrir que toda su vida, desde el seno de su

13

Page 14: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

madre, había sido un retablo de las misericordias de Dios. De ahí su profunda generosidad, gratitud, comprensión, confianza, audacia y celo universalista. Son las notas de la verdadera humildad.

A todo apóstol se le han perdonado "muchos" pecados; por esto quiere amar de todo corazón. Teresa de Lisieux decía que a ella le habían perdonado más que a Magdalena; por esto quería ser el amor en el corazón de la Iglesia. Pablo va todavía más lejos: a él, como a todos, Dios le amó desde la eternidad, eligiéndole en Cristo (Ef 1,4); por esto su respuesta al amor se traducirá en "solicitud por todas las Iglesias" (2 Cor 11,28) y hacer de su vida una oblación para anunciar a Cristo a todas las gentes.

La misión es una experiencia peculiar de conversión, como retorno continuo a Cristo, que vive en uno mismo y en cada hermano. Es un "sí" que se hace anuncio y donación. La vocación apostólica es un don que se recibe, agradece y vive tal como es: sin rebajas en el corazón y sin fronteras en la acción. Si se perdiera el sentido de gratitud, traducida en celo apostólico, se correría el riesgo de no ser fiel a la vocación.

La respuesta de Pablo fue inmediata y definitiva. No es como un puñetazo encima de la mesa, sino una actitud humilde de confiar en el mismo que le llamó y amó. Es un "sí" que inicia un desposorio o una amistad íntima con Cristo, que necesita restaurarse todos los días y que se puede poner en práctica en los detalles o circunstancias del propio existir.

Precisamente por esta respuesta misionera Pablo sintió la necesidad de "desierto" o de momentos de contemplación, y descubrió el misterio amoroso de la "comunión" de la Iglesia como conjunto de signos pobres y fraternos de la presencia de Cristo resucitado. Sólo así es posible mantener la respuesta generosa y gozosa a una misión sin fronteras. Una vocación que se agradece continuamente no se pierde ni se mustia.

3. Segregado por Dios Amor

Dijo el Espíritu Santo: segregadme a Bernabéy a Saulo para la obra a que los llamo.Entonces, después de orar y ayunar,

les impusieron las manos y los despidieron. (He 13,2-3).

Para Pablo fue una nueva gracia, extraordinaria. Era otra sorpresa preparada por el Señor. Habían pasado ya unos doce años de la conversión; fueron años de vida escondida relativamente, casi un "misterio" para nosotros. Ahora Bernabé le fue a buscar a Tarso, ciudad natal de Pablo, para trasladarle a Antioquía. Un detalle entusiasmante para el apóstol de las gentes: en Antioquía los discípulos del Señor comenzaron a llamarse "cristianos". La Providencia se sirve de estos pequeños detalles para estimular a sus apóstoles. En aquella comunidad ferviente, el Espíritu Santo inspira la misión concreta de Pablo. Su vida apostólica quedará definitivamente orientada a la misión sin fronteras.

La misión es una segregación para Dios Amor. El apóstol ya no se pertenece. Sus intereses personales quedan en un segundo nivel. Hay que aventurarlo todo para anunciar el evangelio. La misión será una aventura siempre nueva, que se estrena todos los días. Los viajes apostólicos de Pablo durarían unos once años. Valía la pena sentirse desde el primer momento hipotecado para una misión totalizante. El amor sólo tiene una regla: querer darlo todo. La comunidad arropará esta entrega con oraciones permanentes.

Un carisma como el de la vocación apostólica no es para hacer piezas de museo ni privilegiados de pedestal y de placas conmemorativas, sino apóstoles incondicionales del amor. En aras de ese amor del Espíritu Santo, hay que usar todos los medios posibles, pero sin apegarse a ellos.

El apóstol sólo tiene una especialidad: Jesucristo. Todo se orienta hacia él y todo en él recobra su

14

Page 15: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

verdadero valor. Pero a Jesucristo no se le puede separar de la comunidad eclesial; tal separación equivaldría a quedarse sin Jesús y sin Iglesia. El apóstol ha aprendido a necesitar de los hermanos y de la comunidad. Entonces se descubre la soledad como llena de Dios. Porque el apóstol nunca está solo: le acompaña la oración y el afecto de toda la Iglesia y, sobre todo, le acompaña Jesús resucitado. Cada paso apostólico es un gesto o evento eclesial.4. Urge evangelizar

¡Ay de mí si no evangelizare!...Me hago siervo de todos para ganarlos a todos...;me hago débil con los débiles para ganar a los débiles;me hago todo para todos para salvarlos a todos.Todo lo hago por el evangelio,Para participar en él.

(1 Cor 9,16-23)

Con el correr del tiempo y con el roce cotidiano de las experiencias apostólicas se pierden muchas seguridades humanas. Algunos puntos de vista y aun planes entusiastas se quedaron atrás. Pero el amor con que se estrenó la vocación apostólica es cada vez más auténtico, como la respuesta de Pedro al examen de caridad que Cristo le hizo después de la resurrección. A Pablo lo único que le quedaba era la convicción de ser amado por Cristo y la decisión de amarle y hacerle amar. Ya no se pertenece. No sirve para nada más que para anunciar a Cristo. Sin esta misión, su vida no tendría sentido.

Para este amor apostólico no hay fronteras. La experiencia de las propias limitaciones y aun de los propios defectos hace descubrir la ternura del amor de Cristo y el gran regalo de la vocación. La vida ya sólo sirve para transparentar el evangelio. Reestrenando todos los días el amor de Cristo y a Cristo, no queda lugar para la frustración y para el desánimo.

Y no se pueden poner condicionamientos a este amor. No se buscan los propios intereses y gustos. Esta realidad interna libera también de la esclavitud respecto a modas, eslóganes masificadores y teorías achatadas sobre la misión. Es un amor que se acerca a todos y se hace pan partido para todos. No interesa ya el aprecio y la aceptación por parte de los hombres. No se desea más premio que el de poder seguir evangelizando, con la sencillez de una vida que transparenta el evangelio del perdón y de la misericordia.

Los preferidos del apóstol serán siempre los más pobres. La caridad con que Pablo imita al Buen Pastor es amor de padre y madre, que es capaz de amar a cada hijo con un amor particular e irrepetible y, al mismo tiempo, con un amor preferencial al más débil y marginado. La experiencia de las propias debilidades, en las que también espera Cristo como en un nuevo camino de Damasco, ha comunicado ternura y firmeza al corazón del apóstol.

5. Apóstol s in merecerlo

Por la gracia de Dios soy lo que soy,y la gracia que me confirió no resultó vana,antes me he afanado más que todos ellos;pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.

(I Cor 15,10).

No es posible olvidar el momento gozoso de unas bodas, de una imposición del crucifijo

15

Page 16: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

misionero o de una ordenación sacerdotal. El apóstol cristiano vive de este recuerdo como de un punto de referencia o de "primer amor" (Ap 2,4). Es verdad que se marchitan muchas cosas secundarias y que la propia debilidad ha dejado también huellas imborrables. Pero aquella gracia de Cristo, como declaración de amor, ha superado las embestidas de todo tipo de tormentas.

Todo ha sido gracia, especialmente los momentos de perdón y los momentos de emprender nuevas aventuras por el evangelio. Se ha mantenido la decisión de querer amar del todo y para siempre. Y ese amor, renovado todos los días, chamusca y repara todas las deficiencias. El apóstol se ha moldeado por la gracia y la colaboración personal a la misma. Ya no se tiene otra seguridad que la de sentir necesidad absoluta (afectiva y práctica) de la palabra y de la presencia de Cristo.

La envidia ya tiene sentido. El lugar que cada apóstol ocupa en el corazón de Cristo está reservado para siempre. Y la misión o función que cada uno ha de ejercer, tiene también la nota de exclusividad. Pero no conviene confundir los cargos y las ventajas temporales con la verdadera misión recibida del Señor. En el fondo del corazón queda el gozo de la gratitud a Cristo, que no abandona jamás a los suyos. No se necesitan otros privilegios y ventajas.

6. Condicionado sólo por el amor

La caridad de Cristo nos impulsa...,murió por todos para que los que vivenno vivan ya para sí, sino para aquel quepor ellos murió y resucitó.

(2 Cor 5,14-15).

¿Quién nos separará del amor de Cristo? (Rom 8,35).

La misión nace de un enamoramiento que tuvo su iniciativa en Dios Amor y en Jesucristo su Hijo. Es una misión que comenzó en el apóstol por la comunicación ("unción") del Espíritu Santo, como caridad de Dios derramada en nuestros corazones (Rom 5,5). Es el amor a Cristo el que orienta toda la vida de Pablo y de cualquier apóstol; no es una teoría sobre la misión, sino una donación esponsal a la misma misión.

La vida del apóstol vale según el peso de su amor. Es libertad que libera de otras preocupaciones y prisas que no sean las de hacer amar a Cristo, que murió por todos para que todos vivan para él. Sería un contrasentido que el apóstol, que predica este amor, se buscara a sí mismo o a sus propios intereses. No es fácil acertar. Sólo se acierta cuando se encuentra tiempo para estar con Cristo sin prisas en el corazón.

Vale la pena gastar la vida para hacer descubrir a todos que cada uno es amado irrepetiblemente por Cristo redentor. Este gastarse por el Señor comporta inconvenientes respecto a ventajas y seguridades materiales. El desgaste físico, como las arrugas en la frente y los callos en las manos, o los achaques de la salud y de los años que pasan, se aceptan como consecuencia de haberse realizado amando y dándose. El amor a Cristo chamusca las propias imperfecciones y defectos. Lo único importante para el apóstol es haber sido expresión de Cristo para todos y en todo momento.

7. A modo de desposorio

Dentro de nuestro corazón estáispara vida y para muerte...

16

Page 17: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Estoy celoso de vosotros con celos de Dios,pues os he desposado a un solo marido, Cristo,para presentaros a él como casta virgen.

(2 Cor 11,2).

La llamada para la misión nace de un encuentro personal con Cristo, a modo de declaración de amor. El apostolado de Pablo consistía en hacer que otros se encontraran con Cristo amigo, mediador, esposo o consorte, es decir, que comparte, como protagonista, nuestro existir.

A Pablo lo único que le interesaba era que Cristo fuera conocido y amado. De ahí se seguía la salvación de cada ser humano. Su tarea apostólica consistía en desposar a los hombres con Cristo, es decir, ayudarles a descubrir que la vida no tendría sentido sin el Señor. Fuera de este campo de acción, Pablo no tenía nada que ambicionar.

La comunidad eclesial, amada esponsalmente por Cristo (Ef 5,25ss), debe responder fielmente a este amor, haciéndose transparencia del amor de Cristo para todos los hombres. Cada creyente entra en un proceso de configuración con el Señor para pensar, sentir y amar como él.

Esta caridad apostólica de desposorio o amistad apostolado. Es un amor que no se arredra ni aun cuando falta el reconocimiento por parte de los demás. El apóstol lleva a todos en el corazón; pero sin condicionar su libertad y su relación personal con Cristo.

La vida del apóstol, por esta dedicación desinteresada, es la prenda permanente del amor esponsal de Cristo a cada persona y a cada comunidad. La identidad apostólica se vive gozosamente, sin caer en dudas enfermizas, cuando se la redescubre como transparencia, signo y estímulo del amor de Dios a todos los hombres.

8. Amar sin esperar

No busco vuestros bienes, sino a vosotros...Yo de muy buena gana me gastaré y me desgastaré por vuestras almas, aunque, amándoos conmayor amor, sea menos amado de vosotros.

(2 Cor 12,14-15).

La única recompensa del apóstol es el mismo Jesucristo. Se busca sólo amarle y hacerle amar. El apóstol no se queda con la "esposa" de Cristo; le basta con ser "el amigo del esposo" (Jn 3,29). El amor de Cristo y el ejercicio de su propia misión no se lo puede quitar nadie.

El apostolado, en sus múltiples facetas, es el mejor ejercicio para realizar el don de sí. Ni la alabanza, ni la eficacia inmediata, ni el reconocimiento o el premio son valor definitivo. El mismo fracaso y "abandono" son una simple etapa para madurar la caridad pastoral. El Señor basta. Y, como buen amigo, él se deja sentir disimuladamente por medio de algún buen "samaritano" o "cireneo". Si se hace esperar, es para hacernos partícipes esponsalmente de su Getsemaní y de su cruz y poder así compartir con nosotros su resurrección.

El apóstol da sus cosas y, sobre todo, se da a sí mismo. Si no encuentra eco o fruto inmediato, cier -tamente descubre una nueva presencia y amor de Cristo. Es la única recompensa que vale la pena. Quien ama así hace el ridículo humanamente, pero contagia de evangelio a los hombres de buena voluntad. El enamoramiento de Cristo y el anunciarle a todas las gentes siguen una lógica distinta de los cálculos y esperanzas humanas. "Me sedujiste, Señor" (Jer 20,7). ¡Gracias! Es la libertad de quien no tiene nada que perder porque ya lo ha aventurado todo por el amor. Así ya puede amar "a todos en las entrañas (o con el amor) de Cristo Jesús" (Flp 1,8).

17

Page 18: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

9. Sin componendas

¿Busco yo ahora el favor de los hombreso el de Dios?¿Acaso busco agradar a los hombres?Si aún buscase agradar a los hombres,no sería siervo de Cristo.

(Gál 1,10).

Hay que renovarse en la metodología pastoral y hay que presentar un estilo apostólico que transparente mejor la figura del Buen Pastor. Lo que no se puede hacer es aguar el evangelio, jugando a componendas con los criterios y gustos de la moda. La vocación y la misión deben ser tal como se han recibido de Cristo. Y no se puede traicionar a este primer amor. La identidad apostólica no se puede vender por baratijas ni se puede dejar a merced de veleidades.

Al apóstol lo zarandean desde todas partes, desde dentro y desde fuera de la comunidad eclesial. No es posible agradar a todos. Todo se juzga y critica según el interés personal o de grupo. El apóstol no puede "jugar" a conejitos de Indias. Lo que importa es agradar a Cristo. Es el mejor modo de servir a la Iglesia sin servirse a sí mismo. La mejor autocrítica se hace con el evangelio en las manos, con la ayuda de los hermanos y especialmente en el diálogo personal con el Señor.

Ejercer el ministerio con actitud de servicio incondicional es exponerse al ridículo; pero es el único modo de servir al hombre salvado por Cristo. Hay que estar dispuesto a aceptar el reto de la marginación y de la intimidación, sobre todo cuando este reto proviene de hermanos bienintencionados. El verdadero apóstol y profeta no es siempre aceptado en sus circunstancias, pero no puede huir de estas circunstancias, sino que debe amarlas y debe aceptar morir en ellas para transformarlas. Así amó Cristo a su Iglesia, a la que redimió con su propia sangre (He 20,28).

10 . De pecador a após to l

Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores,de los cuales yo soy el primero.

(1 Tim 1,15).No soy digno de ser llamado apóstol,puesto que perseguí a la Iglesia de Dios.

(1 Cor 15,9).

Pablo, como todo auténtico apóstol, no tenía aires de superioridad. Mientras evangelizaba a los demás, vivía intensamente su propio proceso de conversión. El apóstol descubre, cada vez con más profundidad y amor, que su vida es la de un redimido por Cristo. Por esto en la acción apostólica no humilla a los demás, sino que es portador de un mensaje de misericordia, que todos pueden examinar tanto o más que él (2 Cor 4,1; 1 Tim 1,16).

El apóstol más ferviente e incansable es el que no olvida nunca su primer encuentro con Cristo, cuando le esperaba amorosamente en su situación de pecador o en su camino de Damasco. Descubrir

18

Page 19: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

a Dios Amor y misericordioso, escondido o esperando en la propia miseria y pobreza, equivale a descubrir la dignidad del hombre redimido por Cristo.

La sencillez del apóstol, como Pablo, consiste en su transparencia. El es un museo de las misericordias de Dios. Esta humildad y verdad es el sostén de una actitud de comprensión, de generosidad y de disponibilidad sin fronteras. El Señor le ha salvado y le ha hecho instrumento vivo de esta misma salvación para todos los hermanos.

Con esta actitud de autenticidad es posible dar testimonio del evangelio y poder así comunicar la propia experiencia de encuentro con Jesús resucitado. Al hijo pródigo le bastaría con contar a todos el amor tierno con que le ha recibido el padre. Por esto el apóstol se siente siempre en casa, con naturalidad, sin complejos de superioridad ni de inferioridad. En sí mismo ha descubierto que cada uno es amado y llamado con amor y vocación irrepetible. Ese es el secreto de la perseverancia en la propia vocación de convertido, salvado y enviado.

11. Encarcelado por CristoPablo, anciano y ahora prisionero de Cristo Jesús,te suplico por mi hijo Onésimo,a quien engendré entre cadenas.

(Filem 1,9-10; cf Ef 3,1; 6,20).

"Anciano" y en la cárcel... Es una etapa apostólica no menos fecunda que las anteriores. Jesús no nos ama por nuestras cualidades y por nuestra capacidad de sentirnos realizados, sino por nosotros mismos, especialmente cuando la salud, los años y las circunstancias nos han desmantelado de todo. Parece imposible imaginarse a Pablo achacoso y encerrado entre cuatro paredes. Cualquier circunstancia adversa ayuda a madurar el amor. Cristo no deja solos a los suyos, especialmente en estos momentos privilegiados de tribulación.

Cuando parece que todo son trabas para el apostolado, en realidad son momentos privilegiados para romper las barreras del tiempo y del espacio. Esta actitud de libertad en el amor no se improvisa, sino que es fruto de un ejercicio continuo de ir rompiendo toda atadura ya durante los tiempos que parecen más fecundos. La desesperación, el desánimo y la frustración se incuban en los momentos en que uno se busca a sí mismo.

La libertad que Pablo propugna es una revolución audaz: cada hombre, sin excepción, tiene la misma dignidad que los demás, puesto que ha sido liberado por Cristo para adquirir la filiación divina. Es la libertad que Pablo aprendió a defender desde la cárcel y concretamente en favor de un esclavo llamado Onésimo, que se había fugado y que ahora, ya libre en Cristo, tenía que volver a su casa con la frente levantada.

Pablo se sentía feliz, fecundo, realizado, porque, en realidad, era prisionero de Cristo, es decir, liberado por él de las ataduras de una vida equivocada. Por esto se sentía más joven, con una juventud permanente sostenida por la esperanza y alimentada por los pequeños detalles del servicio a los demás. Una carta breve sobre un esclavo fugitivo (a quien Pablo consideraba como pedazo de sus entrañas) se convirtió así en la carta magna de la libertad cristiana y apostólica de todos los tiempos.

12. Comunicar los planes salvíficos de DiosEs preciso que los hombres vean en vosotrosa ministros de Cristo y dispensadoresde los misterios de Dios. Por lo demás,

19

Page 20: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

lo que se espera de los dispensadoreses que sean fieles.

(1 Cor 4,1-2).

Pablo no se dejaba llevar por ningún complejo de inferioridad al presentarse como ministro o servidor de Cristo. Era su identidad, estrenada como declaración de amor total y para siempre. Un amor así no entra en las marañas de la duda. Experimentó la intimidad y ternura del amor de Dios manifestado en Cristo. De este "misterio" o intimidad de Dios se sentía portador y vocero para todas las gentes.

El apóstol es sólo instrumento vivo y administrador fiel; no es el patrono. Por esto no tergiversa ni amaña a su aire el servicio de anunciar, hacer presente y comunicar a Cristo. La misión arranca de una consagración. Las palabras cristianas, como la de "ministro", "misterio", "fidelidad", "consagración", "culto", "sacerdocio", "misión", etc., suenan a amor. Y el que ama a Cristo y se cree amado por él no siente necesidad de usar otra terminología.

El ministro o servidor de Cristo gasta su propia vida en prolongar los signos de la presencia activa de Cristo resucitado: su palabra, su eucaristía, sus sacramentos, su actuar de Buen Pastor. Cada vocación cristiana o estado de vida (laical, consagrada, sacerdotal) es un camino de enamoramiento: ser santo y apóstol en las propias circunstancias. Es siempre vocación sin fronteras en el corazón y en la acción.

13. Cristo, nuestro todo

El que no perdonó a su propio Hijo,sino que le entregó por todos nosotros,¿cómo no nos ha de dar con él todas las cosas?

(Rom 8,32; cf Rom 8,29; Ef 1,4).

¿Para qué desear otras cosas y prodigar la vida en otras empresas? Sólo Jesucristo puede llenar el corazón. Hay que orientarlo todo hacia él y trabajar con todo empeño para "restaurar todas las cosas en él" (Ef 1,10). Las cosas valen en tanto en cuanto reflejan o deben reflejar el amor que Dios nos tiene en Cristo (2 Cor 10,5).

El mundo ya ha sido redimido. El hombre ya ha sido liberado por Cristo. La historia del mundo y del hombre es una historia de amor. Cristo ha asumido como propia la aventura histórica de una restauración integral del hombre y del mundo. Sólo falta, en cada época, la cooperación de "los suyos", de su esposa la Iglesia y, concretamente, del apóstol. La tarea merece una dedicación plena. ¿Para qué buscar sucedáneos estériles en seguridades humanas, en intereses personalistas y en éxitos aparentes? Nuestra verdadera riqueza proviene de la "pobreza" de Cristo (2 Cor 8,9).

Todo es gracia. Todo es don. Todo suena a mundo nuevo, que avanza hacia su restauración definitiva. Lo que no sea restaurado en Cristo se desmoronará como corteza carcomida. El sufrimiento y la tribulación, transformados en amor, son la mejor colaboración a la redención.

Cristo es el centro de la vida del apóstol. No es centro de nuestras teorías, caprichos, ocurrencias y demás tonterías, sino centro de gravedad de sólo y todo lo que queremos construir según el amor. Flaquezas las hay; pero se chamuscan fácilmente en la intimidad con Cristo amigo. Hemos sido "elegidos en él" desde la eternidad (Ef 1,4). El Padre nos ha predestinado a ser "conformes con la imagen de su Hijo" (Rom 8,29). Este amor eterno fundamenta la esperanza, puesto que todo hombre es llamado por Dios a pasar al "reino del Hijo de su amor" (Col 1,13).

49

20

Page 21: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

14. Una v ida para el evangelioNo te avergüences jamás del testimoniode nuestro Señor y de mí, su prisionero;antes conlleva con fortaleza los trabajospor la causa del evangelio con la ayudadel poder de Dios, que nos salvóy nos llamó con vocación santa.

(2 Tim 1,8-9).

Una vocación apostólica vivida sin componendas contagia y suscita nuevos amigos del Buen Pastor. Para poder contagiar a otros de este seguimiento apostólico no se pueden hacer rebajas de entrega en la oferta. Cuando se estrena una vocación, se quiere dar todo y para siempre. Pablo preparaba así a sus sucesores y colaboradores, a quienes contagiaba con sus actitudes interiores de convicción y decisión.

Ni la cruz del Señor ni las cadenas de Pablo deben amedrentar al apóstol. Quien comienza a ceder ante las intimidaciones, se pierde en una madeja de miedos tontos. El que ama a todos sin complejo de superioridad, como amó Cristo en la cruz, no se deja llevar por el miedo. ¿Avergonzarse de seguir a Cristo Buen Pastor, que da la vida por todos? Caricaturas sobre el evangelio las habrá siempre. Al enamorado no le hacen mella los espantapájaros.

El que sabe morir como Cristo, amando y perdonando, no teme los desprecios y humillaciones. Estos fantasmas asustan solamente cuando uno se busca a sí mismo. La madurez de la paternidad o maternidad apostólica la constituye el amor que Cristo ha sembrado en nuestros corazones débiles. Somos un amasijo de grandeza (la fuerza del resucitado) y de debilidades (nuestra realidad deleznable y quebradiza).

Si no nos apoyamos en seguridades humanas, podremos perseverar airosamente en la vivencia y en el anuncio del evangelio. Hemos sido amados y llamas por Dios en Cristo desde la eternidad. Esta vocación o elección, como declaración de amor, es nuestra fuerza. Si no se pierde el sentido de gratitud respecto a esta vocación, nada ni nadie nos podrá separar de Cristo. El amor eterno de quien nos llamó convierte toda nuestra existencia en transparencia a de este mismo amor y nos ayuda a descubrir que ida hombre es amado por Dios en Cristo de modo repetible. Ese es el evangelio que predicamos.

15. Reestrenar el "sí”

Te amonesto que hagas revivir la gracia de Diosque hay en ti por la imposición de mis manos.

(2 Tim 1,6). No descuides la gracia que posees,que te fue conferida por una intervención proféticacon la imposición de manos de los presbíteros. (1 Tim 4,14).

Siempre es posible reestrenar el "sí" a la llamada de Cristo. El mismo Señor, que tuvo la iniciativa de llamarnos, hace posible todos los días este reestreno. Hay un "sello" impreso en lo más hondo de nuestro ser; es el sello o "carácter" del Espíritu Santo, como caridad de Dios derramada en nuestros corazones. Es una prenda imborrable, que nos recuerda que el Señor nos ama y llama definitivamente. Es una declaración de amor que resuena como un "sí" de amistad para ,siempre.

Hay momentos especiales de gracia en los que se puede reestrenar de modo especial esta gracia del bautismo, de la consagración sacerdotal y de la vocación. Son los tiempos personales o

21

Page 22: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

comunitarios reservados para Dios: oración, retiros, cursos de renovación, fiestas del año litúrgico, sacramentos...

En todo momento disponemos de signos de Iglesia portadores de la presencia, de la palabra y de la acción salvífica del Señor.

El Espíritu Santo, recibido principalmente en el bautismo, confirmación y orden sagrado, según el propio estado de vida o vocación, llama continuamente a la Iglesia para que despierte al primer amor (Ap 2,7; 3,6). Cristo se hace encontradizo, llamando a la puerta del corazón e invitando a un proceso ininterrumpido de configuración con él (santidad, perfección) y de anuncio del evangelio (misión). Es siempre posible reestrenar la vocación, a modo de retorno al "primer amor" (Ap 2,4). El Señor hace posible la perseverancia en esta opción y decisión fundamental, que es a modo de desposorio o amistad íntima, del todo y para siempre.

22

Page 23: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

SEGUNDA PARTE

EVANGELIZAR SIN FRONTERAS

El amor a Cristo se traduce en deseos ardientes de darle a conocer y de hacerle amar. Cuando no se tienen fronteras en el corazón, tampoco existen en la acción. La misión que Cristo comunica al apóstol es totalizante, sin fronteras. Es la misma misión que el Señor recibió del Padre. Pablo no se cansaba de repetir: evangelizar a todos, preocupación por todas las Iglesias, anunciar el misterio de Cristo a todas las gentes...

Evangelizar es prolongar a Cristo: su palabra, su sacrificio, su acción salvífica y pastoral. Se le anuncia para llamar a un encuentro vital con él, que transforma toda la existencia personal y social. Pablo deseaba ardientemente agradecer la fe, haciendo que todos creyeran en Cristo. Toda su ilusión era "implantar" la Iglesia, es decir, hacer que en cada comunidad humana haya los signos de presencia y del actuar de Cristo resucitado. Por esto instaba a todas las comunidades cristianas a sentirse responsables de la evangelización "ad gentes", es decir, a todos los pueblos.

El mandato de Cristo es siempre el mismo: "Id y enseñad a todas las gentes" (Mt 28,19). Al apóstol enamorado de Cristo, estas palabras o mandato del Señor le atraen mucho más que las teorías de moda sobre la misión. Por esto no se arredra ante las difi-cultades. La misión comienza y continúa como enamoramiento.

Pablo deseaba anunciar el evangelio especialmente allí donde todavía no había sido anunciado. No se trataba sólo de sectores geográficos, sino también de los puntos neurálgicos de la sociedad. Para el que ama hondamente a Cristo, siempre es posible abrir nuevas puertas al evangelio.

La condición indispensable para ser apóstol sin fronteras es la de una vida centrada en Cristo y, por tanto, que ha dejado atrás todo el lastre que le pudiera impedir darse totalmente a la evangelización. Se quiere predicar el evangelio tal como es, todo el evangelio, en toda circunstancia y situación humana y a todos los hombres.

Cuando se quiere evangelizar sin fronteras se descubre que el único título, ventaja y premio del apóstol es precisamente el de anunciar a Cristo. ¿Qué mejor título que el de "apóstol", "servidor" de Jesucristo? Así se presentaba Pablo en todas sus cartas. Otros títulos, precedencias y privilegios valen poco, si es que valen algo. ¡Cuánto tiempo y cuántas energías gastadas inútilmente para alcanzar un barniz superficial y estéril, que desaparecerá con el correr de la historia!

Se sirve a Cristo y a su Iglesia, es decir, a Cristo presente bajo signos eclesiales. El amor a Cristo se traduce necesariamente en el amor a la Iglesia. El apóstol ha aprendido este amor en la intimidad con el mismo Cristo, que "amó a su Iglesia y se entregó en sacrificio por ella" (Ef 5,25). Por esto el apostolado verdadero no consiste en hacer la propia obra, sino en construir la Iglesia como "pleroma", complemento o signo transparente y portador de Cristo. El Señor llama y espera, escondido en cada persona y en cada comunidad, especialmente en los más pobres y marginados, que todavía no han encontrado a Cristo o que todavía no viven de él.

16. Segregado para el evangelio

Pablo, siervo de Cristo Jesús,

F

23

Page 24: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

llamado al apostolado,elegido para predicar el evangelio de Dios...acerca de su Hijo, nacido de la descendenciade David según la carne...

(Rom 1,1-3)

"Apóstol", "servidor" de Jesucristo. Es el único título que vale la pena. A Pablo no le interesaba ningún otro. Para él ese título sonaba a declaración de amor: enviado y signo personal de Cristo amigo. Servir a Cristo significa reinar y ser libre, porque equivale a darse sin esperar otra recompensa que continuar anunciando el evangelio del resucitado.

Pablo traducía su amor incondicional a Cristo en dedicación total para hacerle conocer y amar. Esa era su vocación, como respuesta a una misión totalizante. En Cristo se desvela el sentido de toda la historia y se descifra el sentido de la existencia de cada hombre. La creación y la historia son sólo huellas de los planes salvíficos de Dios Amor. Desde la encarnación, todo y todos encuentran su razón de ser en Jesucristo.

Vale la pena gastar la propia existencia para anunciar el evangelio de Jesús. Ya no hay paréntesis ni compases de espera. Los días se estrenan con esta ilusión evangelizadora. Cada momento se hace acción apostólica. El trabajo, el descanso y la convivencia humana ya son sólo para Cristo y para su cuerpo místico que es la Iglesia. Lo importante es servir, día a día, según las propias posibilidades desplegadas hacia el don de sí. Se sirve a los hermanos, convertidos en Iglesia o comunidad y familia de Cristo, pero sin servirse de ellos para los propios intereses. El amor del apóstol es como el del Señor: servir ("diaconía"), dando la vida ("kénosis") para crear la comunión o familia de hijos de Dios (“koinonía”, “ecclesía”).

17 . Disponib le para todosMe debo tanto a los griegos como a los bárbaros,tanto a los sabios como a los ignorantes.Así que, en cuanto depende de mí, pronto estoya evangelizaros también a vosotros,los de Roma".

(Rom 1,14-15).

El carisma de la vocación apostólica es para anunciar a Cristo sin fronteras. En el corazón del apóstol caben todos, porque es un corazón que vive en sintonía con el corazón de Jesucristo: "Tengo otras ovejas..., es preciso que yo las traiga" (Jn 10,16). Las gracias o carismas son para servir, y solamente se conservan y desarrollan cuando con ellas se sirve a los hermanos. El apóstol pertenece a todos, sin exclusivismos ni privilegios.

Cada persona es amada irrepetiblemente por Dios. El apóstol es un creyente que ha comenzado su retorno a Dios, como encuentro permanente y progresivo con Cristo. Este encuentro íntimo sólo se perfecciona cuando se convierte en misión, a fin de que otros retornen a los planes salvíficos de Dios. No se hace ninguna ofensa ni se humilla a nadie por el hecho de llamarlo a conversión; simplemente se anuncia que la vida sólo tiene sentido si se transforma en un "sí" a Dios Amor, que nos ha dado a su Hijo Jesucristo.

El evangelio es de todos y para todos. La comunidad cristiana en la que vive el apóstol respira en esos aires y horizontes del Buen Pastor. En cada comunidad

(Ro

24

Page 25: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

cristiana, si es auténtica, se respira Iglesia universal y humanidad entera redimida por Cristo. por esto, el apóstol, que ha contagiado a la comunidad con su celo misionero, está siempre dispuesto a abrir nuevas puertas al evangelio dentro y fuera de la comunidad. La sangre redentora de Cristo se ha derramado para todos.

18. Sin complejos

Pues no me avergüenzo del evangelio, que es poder de Dios para la salvación de todo el que cree...porque en él se revela La justicia de Dios.

(Rom. 1,16-17)

El evangelio respeta, ama y salva todos los valores que hay en cada cultura, religión, pueblo e ideología. En todo hay semillas del evangelio o preparación evangélica. Pero el apóstol llama e invita a un salto hacia el infinito: Dios Amor, que nos envía a su Hijo como Redentor y nos comunica su Espíritu Santo santificador. Por esto Jesús, el Salvador y Redentor, que ha muerto y resucitado, vive entre nosotros y en nosotros para hacernos llegar a una plenitud de vida divina. Pablo predicaba este evangelio, y por esto no pocas veces fue rechazado, como Jesús en Nazaret y en Cafarnaúm. En realidad, el evangelio viene a llamar a todos (hebreos, griegos, latinos, gentiles...), porque es de todos y para todos. El apóstol no puede quedárselo para sí ni para su pequeño círculo de adeptos.

Pablo sintió muchas veces el dolor de ver rechazado el evangelio en nombre de la cultura y de la religión. Se sentiría tentado, como todo apóstol, a ofrecer rebajas en las exigencias evangélicas. Pero supo reaccionar movido por la fe, la esperanza y el verdadero amor. No caben las componendas ni las medias tintas. Con esta actitud de convicción profunda y de decisión firme se esfuman los complejos y las frustraciones. No caben los miedos ni los fanatismos. Los entusiasmos pasajeros y los triunfos fáciles tienen poco valor. Comprensión, sí; componendas, no.

El evangelio quiere seguidores libres y convencidos. No quiere gente acomodaticia, sino enamorados de Cristo. Evangelizar no es forzar, sino respetar y preparar la hora de Dios: el don de la fe. El fruto parece escaso cuando se trabaja así. El apóstol ha de aprender a trabajar sin desmayo, sobre todo en los momentos en que sus manos parecen vacías. Cristo está presente, siempre y en cualquier circunstancia y lugar. No hay que avergonzarse ni huir. Siempre se puede dar la vida como el Buen Pastor. Cuando se tiene el deseo de anunciarle a todas las gentes y hasta los últimos confines de la tierra, se descubre y vive mejor el trabajo de la propia circunstancia o del propio Nazaret. Ahí está la fuente del gozo apostólico.

19. Otras reglas de eficacia

Yo planté, Apolo regó; pero

25

Page 26: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

quien dio el crecimiento fue Dios...Nosotros sólo somos cooperadores de Dios y vosotros sois arada de Dios,

edificación de Dios.(1 Cor 3,6-9; cf Flp 2,3-4).

Pablo deseaba ardientemente llegar a todos los hombres y a todas partes. Su solicitud apostólica abarcaba todas las comunidades eclesiales. Quería convertirse en mordiente de cada Iglesia particular y de la Iglesia entera. Su ansia era que todos amaran a Cristo sin reservas. Pero precisamente por este universalismo y totalidad tenía muy clara la conciencia e su propia limitación. El no podía hacerlo todo. El amor sí que puede llegar a todo. El carisma aposólico se desarrolla en la medida en que respeta el ;arisma de los demás apóstoles y de las otras instituciones apostólicas. Se siente entonces la necesidad de los otros y, al mismo tiempo, se vive la disponibilidad para colaborar con todos.

El apóstol es sólo instrumento vivo, siempre débil y quebradizo, aunque fiel y dócil al Espíritu. Es el Señor resucitado quien da la fuerza y el agua viva. ¿Para qué serviría la envidia y el exclusivismo? Al apóstol le basta su propia misión, que será siempre de respeto y admiración por la misión de los demás. Sintonizar con Cristo significa considerar a los demás apóstoles como superiores (es decir, irrepetibles) y servirles sin buscarse a sí mismo (Flp 2,3-4; 2,21).

Lo importante es hacer Iglesia, y no precisamente hacer la propia obra. La Iglesia, en cada comunidad cristiana, debe aparecer como el complemento o prolongación de Cristo, su signo o sacramento, su pueblo, su viña o propiedad esponsal, su cuerpo o expresión sensible... La Iglesia es el mismo Jesús prolongado en la historia y en el espacio por medio de signos visibles. El apóstol no construye una Iglesia prefabricada en su cabeza, sino la Iglesia que fundó el Señor y tal como él la quiso. El apóstol, con sus propios planes apostólicos, es un simple andamio para hacer que Cristo viva en cada comunidad humana; los andamios son sólo provisionales. Se borrará tal vez la memoria de aquel apóstol y de aquella institución apostólica, pero nadie podrá borrar jamás la huella del amor que el apóstol haya dejado en la humanidad. Lo que no se resuelva en amor no sirve para nada, sino para estorbar la obra redentora.

20. Dimensión universalistaMis cuidados de cada día,la preocupación por todas las Iglesias.

¿Quién desfallece que no desfallezca yo? ¿Quién seescandaliza que yo no me abrase? (2 Cor 11,28-29).

En el corazón del apóstol caben todos sin excepción ni acepción de personas. La dimensión universalista se demuestra en la atención cariñosa y responsable hacia los que viven cerca. Se sintoniza con Cristo, que vive en cada hermano y en cada co-munidad humana. Nada ni nadie es extraño a quien vive en sintonía con el Señor. "Todo fue creado por él y para él... y todo subsiste en él", que es "la imagen de Dios invisible" (Col 1,15-17).

Este aire puro de universalismo sanea todos los problemas caseros. En las cosas más pequeñas y en los acontecimientos más insignificantes se ve siempre un "más allá" y una

26

Page 27: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

repercusión en toda la humanidad y en todo el cosmos. Cada persona y cada cosa ocupan un lugar peculiar en el corazón de Dios. Hay que aprender a escuchar, respetar, admirar, amar. Entonces no hay personas extrañas ni lejanas; todos son hermanos que dicen o pueden llegar a decir: "Padre nuestro".

El apóstol vive en el corazón de Cristo y, por tanto, en el corazón de su Iglesia. El Señor espera al apóstol en el corazón de cada comunidad, pueblo, cultura y situación humana concreta. En todas partes, y especialmente en el corazón de cada persona, ya existen semillas de evangelio. Por esto el apóstol vive pendiente del gemido del Buen Pastor: "tengo sed", "tengo otras ovejas", "tengo compasión de la muchedumbre"... No hay tiempo que perder. No cabe entretenerse en tonterías o niñerías. Si una comunidad acaparara unilateralmente el corazón del apóstol, destruiría la vocación del mismo apóstol y convertiría en una secta. El apóstol auténtico contagia de universalismo a una comunidad, haciéndola Iglesia de Cristo. Urge hacer o "presentar a todos perfectos en Cristo" (Col 1,28).

21. Amor de madre¡Hijos míos, por quienes sufrode nuevo dolores de partohasta ver a Cristo formado en vosotros!

(Gál 4,19).

En cada nueva dificultad, el apóstol descubre un nuevo aspecto del misterio de Cristo. Los obstáculos que Pablo encontraba no provenían principalmente de los paganos, sino de la misma comunidad eclesial. Valía la pena cualquier sacrificio, en vistas a hacer nacer a Cristo en cada fiel y en medio de la comunidad., Configurar con Cristo a los que ya creen en él comporta "dolores de parto". Son tribulaciones que el amor apostólico transforma en gozo de fecundidad (Jn 16,20ss).

La terminología que Pablo emplea no es nueva. El trasfondo de esas afirmaciones apostólicas es un amor de madre. Otras veces se comparará a un padre (1 Cor 4,15). El celo apostólico es así (EN 79). "La, mujer", de la que nace Jesús, es María (Gál 4,4); ella es la figura de la Iglesia como asociada a Cristo (Jn 2,4ss; 19,25ss). La maternidad de María (Gál 4,4) y la de la Iglesia (Gál 4,26) encuentran en el apostolado su aplicación concreta y permanente. El apóstol es invitado a transformar las tribulaciones en amor; entonces tiene lugar la fecundidad eclesial de la que María es figura excelente, es decir, Tipo y Madre.

Las "noches" del apóstol, bajo esta perspectiva de caridad pastoral, se hacen luminosas y tienen perfecto sentido. Pero hay que perseverar en la fe y en la esperanza, "iluminándolas" con la palabra de Dios meditada en el corazón (Lc 2,19.51). Sin esta actitud contemplativa de todos los días, especialmente a la luz de las lecturas bíblicas de la celebración eucarística, no sería posible transformar las dificultades en una nueva posibilidad de amar. Sin la intimidad con Cristo resucitado presente, las tribulaciones se convierten en obstáculos insuperables, atrofiantes y estériles.

22. La suerte de evangelizar

Recapitular todas las cosas en Cristo.(Ef 1,10).

27

Page 28: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

A mí, que soy el menor de todos los santos,me fue otorgada esta gracia de anunciar a las gentesla insondable riqueza de Cristo e iluminar a todosacerca de la dispensación del misterio ocultodesde los siglos en Dios.

(Ef 3,8-9).

Cada uno piensa, vive y habla según el peso de su amor. Pablo sólo pensaba en dar a conocer a Cristo. Le había tocado en suerte la vocación de evangelizador. Su único título académico era "apóstol" o enviado de Cristo. La tarea de evangelizar es inmensa. Es un ministerio o servicio totalizante que atrapa toda la existencia. Porque hay que reorientar toda la creación y toda la humanidad hacia Cristo. La tarea más difícil y más arrebatadora es la de reorientar todo corazón humano hacia el amor. Pero es tarea que la hace posible solamente Cristo viviente en el apóstolel mejor servicio prestado a los hermanos.

La tarea de evangelizar es inmensa. Es un ministerio o servicio totalizante que atrapa toda la existencia. Porque hay que reorientar toda la creación y toda la humanidad hacia Cristo. La tarea más difícil y más arrebatadora es la de reorientar todo corazón humano hacia el amor. Pero es tarea que la hace posible solamente Cristo viviente en el apóstol.

Se trata de anunciar y comunicar a todos los planes salvíficos de Dios. Decir a cada ser humano que es amado irrepetiblemente por Dios y que tiene que realizar una misión trascendental en la historia. Porque cada persona humana ha sido pensada y amada por Dios desde la eternidad. Ese es el "misterio" o intimidad de Dios Amor. La vida del apóstol es un destello de este misterio, a modo de museo de las misericordias de Dios. Es la aventura infinita y continua de "amar y de hacer amar al Amor" (santa Teresa de Lisieux).

23. Caridad, don de síHablamos no como quien busca agradara los hombres, sino a sólo Dios...,nos hicimos como pequeñuelos ycomo nodriza que cría a sus niños; así,llevados de nuestro amor por vosotros,queremos no sólo daros el evangelio de Dios,sino aun nuestras propias vidas.

(1 Tes 2,4-8).

La caridad del apóstol es como la del Buen Pastor: no busca sus propios intereses, sino los de los demás (Flp 2,4ss; Mc 10,45). Es un amor paterno y materno que se traduce en un continuo don de sí. Entonces no hay ataduras que arruinan y hacen es-tériles muchas actividades apostólicas. No se busca agradar, sino servir.

Los evangelizados necesitan ver al Buen Pastor. Muchos ya han escuchado y leído el evangelio, pero no lo han visto; falta la transparencia personal del apóstol. No obstante, el evangelio encontrará siempre cierta resistencia por parte del corazón humano, zarandeado por su propio egoísmo. El apóstol no vive pendiente de si su persona es o no aceptada; le basta con intuir que todos tienen necesidad de Cristo, de su mensaje y de su acción salvífica.

28

Page 29: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Hay que estar pendiente de las nuevas gracias de Dios en cada época y momento histórico. Los acontecimientos humanos son portadores de una voluntad de Dios, que lleva al Buen Pastor hasta "la hora" de dar la vida en la cruz para resucitar. Los verdaderos "signos de los tiempos" llevan a construir la propia existencia según el amor. Por esto el apóstol no cede a las modas ni a las apariencias ni a los gustos. La madurez de la caridad pastoral no se aprende en el ruido de las propagandas y de las teorías de moda, sino en la lectura de la palabra del Señor y en el diálogo íntimo con Cristo Buen Pastor.

24. El evangelio según san Pablo

Al llegar la plenitud de los tiempos,envió Dios a su Hijo, nacido de la mujer,nacido bajo la ley, para redimira los que estaban bajo la ley,para que recibiésemos la adopción de hijos.

(Gál 4,4).Todo es vuestro, vosotros de Cristo y Cristo de Dios.

(1 Cor 3,22-23).

El evangelio se anuncia y comunica más con gestos de vida que con palabras; pero éstas son también necesarias. El apóstol que vive del evangelio no necesita mucha retórica para anunciarlo. A Pablo le bastaban unas pocas palabras para decirlo todo: Cristo es el hijo de Dios, hecho hombre por obra del Espíritu Santo en el seno de María, "la mujer"; gracias a esta redención hemos sido hechos hijos de Dios. Este mensaje es para todos los hombres y debe ocupar el centro de cada corazón y de cada grupo humano. Cristo llena con creces.

La vida de Pablo, como la de todo verdadero apóstol, estaba dedicada a evangelizar. Esa es su identidad, su razón de ser, su vivencia más honda y su gozo. No valdría la pena vivir el apostolado sólo con intermitencias y paréntesis. Urge invitar a todos a encontrar a Cristo y a configurarse con él. En él y con él, todos pueden decir "Padre" a Dios. Mientras el Señor no sea una realidad vivida en cada corazón humano, el apóstol no puede permitirse el lujo de evangelizar a tiempo parcial y a ratos perdidos.

La acción evangelizadora del apóstol va acompañada de la fuerza del Espíritu Santo. Se trata de comunicar la vida divina, que es vida trinitaria, vida "espiritual" o vida en el Espíritu, y que hace participar en la filiación divina de Jesús. El apostolado es el ejercicio de la maternidad de la Iglesia. Su fecundidad depende de la fidelidad a la palabra de Dios y a la acción del Espíritu Santo. Por esto el apóstol coloca espontáneamente a María en el centro de su vivencia y actuación; ella es su modelo y Madre, que le ayuda a vivir el apostolado como asociación esponsal a Cristo Redentor.

25. El servicio de la palabra

Si confesares con tu boca al Señor Jesúsy creyeres en tu corazón que Dios le resucitó

29

Page 30: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

de entre los muertos, serás salvo.(Rom 10,9).

Este es el mensaje o "la palabra de la fe" (Rom 10,8). El apóstol no predica un mensaje teórico, sino una realidad viviente: Cristo resucitado, que murió para redimir y salvar a todos. Así como la vocación nació de un encuentro (y no de una idea), del mismo modo la misión es la comunicación de una “experiencia existencial” que pertenece a todos: Cristo presente y cercano a cada persona y en toda circunstancia, como protagonista y consorte.

El anuncio del evangelio equivale a anunciar a Cristo, papalbra de Dios o Verbo hecho hombre. Este mensaje no es cómodo, puesto que llama y urge a un retorno o “conversión”; volver a los planes salvíficos de Dios Amor sobre el hombre y sobre el mundo. todo retorno supone cambio de orientación y de ruta, cambio de mente y corazón. Es un volver al corazón de Dios, de donde hemos salido. Es una tarea que no termina nunca. Por esto el apóstol tiene siempre algo que hacer; piensa continuamente que todavía no ha hecho lo mejor de su vida, pero que es posible hacerlo y que se puede ayudar a otros a realizarlo: en encuentro total y definitivo con Cristo.

La palabra predicada o el anuncio evangélico libera al hombre de toda atadura, propia y ajena. Nos liberamos a nosotros mismos y liberamos a otros en la medida en que la luz de Cristo penetra en nuestra oscuridad y en el grado en que su “agua viva” riega nuestra tierra reseca. El tiempo y la existencia sólo tienen sentido cuando quedan iluminados por la palabra y la presencia de Cristo resucitado. Al Señor se le descubre cada vez más cercano e íntimo, sobre todo después de las borrascas y de los momentos de desierto o de sepulcro vacío. De todo nuevo encuentro brota una nueva misión: “Ve a mis hermanos” (Jn 20,17). Entonces no existen obstáculos insuperables para anunciar a Cristo y hacerle amar.

26. Siempre es posible evangelizar

Sufro hasta ser encadenado corno malhechor;pero la palabra de Dios no está encadenada.

(2 Tim 2,9; cf He 18,10).

Gran parte del mensaje evangélico de Pablo fue escri en la cárcel o en situaciones difíciles. Ahora trasciende el espacio y el tiempo. El Cántico espiritual de san Juan de la Cruz fue elaborado durante ocho meses de calabozo. Santa Teresa de Lisieux se hizo misionera encerrada entre cuatro paredes. El dogma de la “comunión de los santos” guarda en secreto, hasta el día del juicio, los nombres de innumerables mártires, santos y apóstoles. El evangelio de Cristo tiene una fuerza irresistible que se basa en la sangre de Cristo Redentor y de amigos suyos que gastaron la vida por él. La fuerza de Cristo resucitado rompe toda clase de cadenas.La palabra evangélica tiene la fuerza irresistible del Espíritu. Basta sembrarla auténticamente, con sudores de sembrador, en el corazón de los niños, jóvenes, enfermos, ancianos, pobres y hombres de buena voluntad. Del crecimiento se encarga el Señor. El apóstol enamorado de Cristo encuentra siempre nuevas ocasiones para sembrar; no le interesa sembrar en los "espejismos" de los campos honoríficos.

30

Page 31: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Hay todavía muchos campos en el mundo que esperan ansiosamente la semilla del sembrador; hay sembradores que, preocupados por su obra persona- lista y por sus propios prosélitos, olvidan esos in- mensos campos misioneros y se empeñan en sem- brar donde ya otros misioneros están sembrando. La falta de vocaciones y la esterilidad apostólica nacen de esas visiones achatadas, que engendran tensiones, roces y problemas artificiales de identidad y de falta de fraternidad y de "comunión". Las tribulaciones que permite el Señor son siempre providenciales, aunque a veces cuesten lágrimas y persecución. ¿Por qué empeñarse en ir a "misionar" allí donde "ahora" hay muchas vocaciones, y no más bien en evangeli zar allí donde se necesita el carisma de la propia institución apostólica?Hay que aprender a sufrir amando. Entonces los mayores obstáculos se convierten en los mejores medios apostólicos. El Señor, después de habernos hecho experimentar la tempestad, la soledad o la cárcel, se hace encontradizo cuando menos lo esperábamos: "Estoy contigo" (He 18,10). Es un buen amigo, que no falta nunca a la cita (2 Tim 4,17). Su silencio es sonoro, corno de corazón enamorado que se da más allá de lo que podíamos imaginar; por esto espera la actitud de silencio contemplativo del apóstol, que nace de un amor profundo que escucha para darse totalmente. De estos momentos de silencio, de donación, nacen los grandes momentos de evangelización.

27. Una vida para predicar

Atiende a la enseñanza, insiste en ella.Obrando así, te salvarás a t i mismoY a los que te escuchan.

(1 Tim 4,16).

¿Gastar la vida en otra cosa que no sea evangelizar? Eso sería impensable para Pablo. A sus colaboradores les contagiaba de su celo misionero sin fronteras. La vocación apostólica es dedicación esponsal al anuncio del evangelio por medio de todos los modos posibles. El apostolado como simple profesión o como "hobby" sería un absurdo.

El anuncio del evangelio ocupa toda la vida del apóstol. Es una scética permanente de escucha de la palabra, de contemplación, de reflexión, vivencia y comunicación. Todas las cosas sirven de leña para alimentar ese fuego y para contagiarlo a todos. Es una preparación permanente y una actitud de enamoramiento. Todo hace referencia a Cristo, porque él es el centro de la vida y de la historia.

Al amor no le detiene nada ni nadie. Cuando no se desea otro porvenir que el de evangelizar, no se encuentran obstáculos insuperables. Si se buscaran los propios intereses, más o menos solapados, entonces todo se convertiría en fantasmas y problemas insolubles. El secreto del éxito, para el enamorado de Cristo, es el de no buscarse ni predicarse a sí mismo. Es una ascesis que reclama un retorno constante o una "conversión" continua a la persona y al mensaje de Jesús resucitado presente.

31

Page 32: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

28. Sólo, ¡siempre y en todo

Guarda el buen depósito por la virtud del Espíritu Santo que mora en nosotros.(2 Tim 1,14; cf 1 Tim 6,20).

Predica la palabra, insiste a tiempo y a destiempo..., haz obra de evangelista, cumple tu ministerio.

(2 Tim 4,2-5).

Para el apóstol, la vida sólo tiene sentido si se gasta por Cristo. Evangelizar es una urgencia que nace de haberse enamorado del Señor. Ha sido un don inmerecido y una iniciativa de Cristo. No se vive de una teoría sobre la misión, sino de un encuentro permanente y renovado con el Señor resucitado, presente bajo signos de Iglesia y bajo signos del hermano. La pobreza de estos signos y la oscuridad de la fe son un estímulo para la caridad. Es una búsqueda dolorosa y gozosa a la vez que se va haciendo nuevo encuentro compartido con los hermanos. Es dinámica de esperanza: confianza y tensión.

Urge comunicar el evangelio a todos y en toda circunstancia. Otra clase de prisa no tendría sentido. No es prisa nerviosa y alienante, sino dedicación esponsal. Se vive para predicar a Cristo. El apóstol no se pertenece; todo lo orienta hacia la evangelización. Su vida está hipotecada para la libertad evangélica. Es Cristo, con su presencia y con su palabra siempre viva y actual, quien sostiene las ansias evangelizadoras del apóstol. Por esto encuentra también tiempo para descansar y para convivir con los hermanos.

Predicar a Cristo es de enamorados. Se predica lo que se ha vivido en intimidad con él. La experiencia existencial del encuentro contemplativo o de amistad se convierte en predicación, que contagia de evangelio y llama a un encuentro con Cristo. El mensaje evangélico es para todos, porque es el mensaje de Dios Amor, Padre de todos. Es "palabra de Dios, que obra eficazmente" en los que creen (1 Tes 2,13).

29. Amor de padre

Aunque tengáis diez mil pedagogos en Cristo,pero no muchos padres, puesto que quienos engendró en Cristo por el evangelio fui yo.Os exhorto, pues, a ser imitadores míos.

(1 Cor 4,15-16).

Pablo llama a sus evangelizandos: "hijos míos carísimos". El apostolado auténtico es un acto de madurez, sin paternalismos ni complejos. Es el don total de sí para hacer nacer a Cristo en cada corazón y en cada comunidad. Se transmite la vida nueva recibida de Cristo como vida divina o vida en el Espíritu. Todo sacrificio es poco cuando hay amor de padre.

El apóstol con amor de padre no humilla. Todo su ideal es que los demás lleguen a participar más que él de la vida en Cristo. Presentarse como modelo que imitar no es

32

Page 33: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

orgullo; es manifestar sencillamente la alegría del encuentro con Cristo. Tal vez no será la presentación de grandes virtudes; pero sí todos pueden vernos enamorados de Cristo y felices por nuestra vocación. El hijo pródigo, como Saulo, no tiene reparo en contar gozosamente cómo le ha tratado el Padre.

Testimoniar a Cristo es transparentar la experiencia de un encuentro y presentar la vida de un enamorado. El amor de padre exige olvidarse de sí mismo. Es un compromiso responsable de no poner límites ni fronteras a la acción de la gracia. Es una paternidad sin cálculos matemáticos en el número de hijos por evangelizar: "Ay de mí si no evangelizare" (1 Cor 9,16). Se educa a los demás para que ellos, a su vez, se hagan Iglesia misionera y madre.

30. Reconciliarse y reconciliarAhora os ha reconciliado en el cuerpo de su carnepor su muerte, para presentaros santos,inmaculados e irreprensibles delante de él. (Col 1,22).Por Cristo nos ha reconciliado consigoy nos ha confiado el ministerio de la reconciliación... Por Cristo os rogamos: reconciliaos con Dios. (2 Cor 5,18-20).

La propia experiencia de reconciliación con Dios por medio de Cristo crucificado urge a anunciar la reconciliación a los hermanos. El servicio apostólico es siempre para construir o reconstruir la unión con Dios y entre los hermanos. El precio de esta reconciliación es la muerte de Cristo Redentor, que ha asumido como propia nuestra historia de pecados y rupturas. Por esto el Señor es nuestra reconciliación y nuestra paz (Ef 2,14).

El servicio apostólico es siempre de anuncio y de comunicación de la misericordia y del perdón. El apóstol prolonga a Cristo Buen Pastor, que da la vida en la cruz para rescate de todos. En la propia experiencia de perdón, el apóstol encuentra el aliciente para hacer partícipes a todos de la misericordia de Dios. Predicar el retorno al corazón de Dios, es decir, la "conversión", no es una injuria a nadie, sino una realidad liberadora, que recupera y restaura a todo hombre en cualquier situación histórica, cultural y social.

Se anuncia, se hace presente y se comunica a Cristo Redentor, que sale al encuentro de todo hombre por medio del apóstol. Es una llamada a la santidad, como encuentro generoso e incondicional con Cristo. El apóstol guía y ayuda en el proceso de sintonía vivencial con Cristo y con los hermanos. Así construye la. comunidad eclesial, que es "comunión" de hermanos reconciliados y reconciliadores.

31. Animadores del caminar comunitario

Mirad por vosotros y por todo el rebaño,sobre el cual el Espíritu Santo os ha constituidoobispos para apacentar la Iglesia de Dios,que él adquirió con su sangre.

(He 20,28).

El precio de la salvación de cada persona y de cada comunidad es la sangre del Señor. El apóstol no puede

33

Page 34: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

permitirse el lujo de dormir sobre los laureles ni de hacer de la comunidad una experiencia de conejitos de indias. Hay que llegar a cada persona, en su problema y situación concreta, para ayudarle a abrirse al infinito del amor. El evangelizador no se inventa los medios salvíficos, sino que usa los medios ya instituidos por el Señor.No bastan los andamios y planificaciones perfectas. Todo es bueno, conveniente y, a veces, necesario; pero cada persona en particular ha sido amada, creada y redimida por artesanía. Sobre cada persona concreta resuena la voz del Buen Pastor: "Tengo sed", "tengo compasión", "venid a mí todos", "tengo otras ovejas", "sígueme"... Cada una vale tanto como la sangre del Señor. Por esto cada cristiano está llamado a ser santo y apóstol, viviendo y anunciando "la palabra de Dios" (Col 3,16).El apóstol es servidor, instrumento vivo; no es el patrono. El trabajo de animar la comunidad polariza toda la existencia del apóstol. La vida cristiana es vida según el Espíritu Santo, que nos introduce en el corazón de Dios y nos compromete a edificar la comunidad humana en el amor. La vocación apostólica, especialmente la de los "Doce" y de sus inmediatos colaboradores, es carisma del mismo Espiritu Santo que ya vive, de algún modo, en el corazón de los evangelizandos. Es el Espíritu o la vida según el Espíritu, el "agua viva", que Cristo crucificado y resucitado comunica a su Iglesia y, por medio de ella, a toda la humanidad. La Iglesia es el "sacramento" o signo transparente y portador de Cristo (Ef 5,32); para hacer a su Iglesia "santa", Cristo se entregó en sacrificio (Ef 5,25-27).

32. Transparentar a Dios Amor

Cuando apareció la bondad y el amor de Dios,nuestro Salvador, hacia los hombres...por su misericordia nos salvó medianteel lavado de la regeneracióny renovación del Espíritu Santo.

(Tit 3,4-5).

Toda acción apostólica es epifanía y cercanía de Dios Amor. Se predica a Cristo, que es la Palabra del Padre pronunciada eternamente en el silencio del Espíritu de amor. Se hace presente, bajo signos sacramentales, toda la obra redentora del Buen Pastor. Se comunica la vida nueva o nuevo nacimiento en Cristo bajo la acción del Espíritu Santo. Por esto toda la vida del apóstol es "ascesis del pastor de almas" (PO 13) o donación de caridad pastoral.

El apóstol es el signo personal del Buen Pastor, participando de algún modo en la realidad de Cristo que es signo y epifanía personal del Padre. En Cristo aparece la

n,p

34

Page 35: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

máxima epifanía y cercanía de Dios Amor, puesto que es el Verbo y Emmanuel (Dios con nosotros). El apóstol ayuda a nacer y a crecer en esta nueva vida del Espíritu, que es un proceso de adquirir los rasgos de la fisonomía de Cristo. La acción apostólica tiende a edificar, en cada persona y en cada comunidad, el templo vivo del Espíritu.

El apóstol es testigo y custodio de una historia de Dios amor en cada ser humano y en cada pueblo. Cada persona existe por amor; pero, precisamente por ello, está llamada a poner en práctica los planes o designios que Dios pensó y quiso desde toda la eternidad. Cada persona es amada de modo irrepetible, ocupa en el corazón de Dios un lugar de privilegio y debe dejar en el mundo una huella imborrable del amor. La misión del apóstol consiste en el servicio humilde y desinteresado de hacer que todos se sientan realizados en la propia misión. Al apóstol no le interesa aparentar ni dejarse sentir demasiado; le basta con hacer posible "la obra" del Padre (Jn 17,4). "Dios ha hecho brillar la luz en nuestros corazones para hacer resplandecer la ciencia de la gloria de Dios en el rostro de Cristo" (2 Cor-4,6).

33. Oración universalista

Ante todo te ruego que se hagan peticiones, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todoslos hombres... Esto es bueno y grato a Dios,nuestro Salvador, el cual quiere que todosse salven y lleguen al conocimiento de la verdad.

(1 Tim 2,1-4).

Orar es el compromiso más profundo, duradero y eficaz, porque es entrar en el corazón de Dios, donde se encuentran todos los hermanos. La oración del apóstol no tiene fronteras; por esto dinamiza y sostiene toda su acción apostólica. Cuando existe esta actitud de caridad pastoral, se encuentra tiempo, sin dicotomías, para estar con Cristo. Los momentos de oración ayudan a descubrir que la acción apostólica no es dejar al Señor, sino seguirle donde quiera que él esté esperando: en su palabra, en su eucaristía y sacramentos, en su acción pastoral.

La oración ensancha el corazón del apóstol. Ya no hay fronteras ni puertas cerradas, sino sólo nuevas posibilidades para amarle y hacerle amar. Esas posibilidades van envueltas frecuentemente en la niebla dolorosa de la fe. Reaccionando con amor, la perspectiva misionera se ensancha para llegar, afectiva y efectivamente, a toda la geografía, toda la historia, todos los sectores sociales, todos los hermanos. Toda persona y todo problema tiene cabida en el corazón del apóstol. Con este espíritu de oración contemplativa, el apóstol se hace "el amor en el corazón de la Iglesia" (santa Teresa de Lisieux).

Se ora por la paz, la justicia, la verdad y el amor entre los hermanos. Y esta oración se transforma en compromiso concreto; a veces son sólo pequeños detalles y gestos de vida, que son más elocuentes que las grandes pantallas y monumentos. La oración se

35

Page 36: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

demuestra especialmente en la comunidad en la que vive el apóstol; su pequeño servicio, callado y olvidado, es necesario para que la comunidad ore, ame y se sienta realizada. Entonces se disciernen y siguen fielmente los "signos de los tiempos", a través de las pequeñas circunstancias de todos los días, como signos indicadores del Espíritu Santo para dar la vida como el Buen Pastor. "La hora" del Padre es la hora del don de sí, que pasa por Nazaret, por los caminos de Palestina, y que culmina en la cruz y en la resu-rrección. Sin oración no se sabrían discernir los "signos de los tiempos" ni la hora del Padre.

36

Page 37: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

TERCERA PARTE

ESTILO DE VIDA

APOSTOLICA

El estilo de vida del apóstol de todas las épocas, como el estilo de vida de Pablo, sólo tiene un calificativo: es la caridad del Buen Pastor, que da la vida en sacrificio por todos. Y quien da la vida está dispuesto a dar todo lo demás, sin excusas, sin trampas, sin subterfugios. Es la "ascética propia del pastor de almas" (PO 13).

Este estilo no se devalúa, precisamente porque no nace de ninguna idea de moda. Es fidelidad al Espíritu Santo, que invita a configurarse con Cristo Buen Pastor en todas las circunstancias de la vida. Este estilo no tiene rebajas ni admite complejos.

Pablo se sintió siempre servidor e instrumento. Era consciente de que lo importante es no poner estorbos a la gracia, es decir, a los planes salvíficos de Dios Amor, a la acción de Cristo resucitado, a la nueva vida según el Espíritu Santo. Es el seguimiento radical de Cristo, a modo de desposorio, de amistad íntima y de enamoramiento definitivo. Es Cristo quien ha cautivado la voluntad, la intimidad más honda y el deseo de seguridades. Es la obediencia (Flp 2,5ss), la virginidad (1 Cor 7,7ss) y la pobreza de Pablo (He 20,33ss), que se calificaba a sí mismo como "prisionero" de Cristo y de su Espíritu.

Esta generosidad evangélica, sin fronteras en el corazón, lleva consigo una disponibilidad sin fronteras en la acción. Es la actitud de éxodo o de dejarlo todo para predicar el evangelio con libertad, a todos y en toda circunstancia. Entonces se descubren nuevas puertas y nuevos caminos para la evangelización. Si hubiera alguna polilla en el corazón, toda la acción "apostólica" se convertiría en una computadora de cálculos matemáticos e interesados que sonarían a hueco.

El estilo apostólico de cada época se construye a lo Pablo. No hay que esperar a que nos regalen un estilo prefabricado. Las gracias de Dios, que son siempre nuevas, instan a imitar a Cristo Buen Pastor, sin paliativos, en cada época histórica. No fal tan nunca las directrices de la Iglesia, expresadas en documentos que deben redescubrirse y que, a veces, quedan sin estrenar. El error del apóstol sería pensar que su estilo apostólico se lo van a regalar gratis. La santidad y la espiritualidad son un don de Dios que reclama colaboración responsable.

¡Ser signo personal de Cristo! Eso es todo. Es el único título que le interesa al apóstol; en él descubre que es amado y enviado simultáneamente. Quien prolonga la palabra de Cristo, su sacrificio, su acción salvífica y pastoral, no puede menos de engolfarse en sus amores y sentimientos. Sólo entonces se transparenta al Señor resucitado. Este estilo apostólico es posible porque es cuestión de enamoramiento. Sin amor de intimidad y de relación personal no solamente sería difícil, sino, por añadidura, imposible. Pablo no era más fuerte que los apóstoles de hoy; apoyado en Cristo, logró ser fiel y nos legó ese estilo de "vida apostólica", que será siempre la pauta de todo apóstol.

37

Page 38: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

34. El modelo y fundamento apostól icoYa no sois extranjeros y huéspedes,sino conciudadanos de los santos y familiaresde Dios, edificados sobre el fundamentode los apóstoles y profetas,siendo piedra angular el mismo Cristo Jesús.

(Ef 2,19-20; cf 1 Cor 11,1).

El estilo de vida del apóstol no puede cambiar como cambia la posición de una veleta. Hay siempre gracias nuevas, que son del mismo Espíritu Santo, que ha suscitado el estilo apostólico de cada época. Y hay adaptaciones a circunstancias y culturas diferentes. Pero siempre es para transparentar mejor a Cristo.

El punto obligado de referencia del estilo apostólico es siempre el mismo Cristo Buen Pastor. Los apóstoles nos han legado un arsenal de doctrina y de gestos de vida, para decirnos: "Sed .mis imitadores, como yo lo soy de Cristo" (1 Cor 11,1). Es la llamada "vida apostólica", que la Iglesia hace suya y la concreta en los documentos magisteriales de cada época. Para un seguimiento fiel de esta vida evangélica, el apóstol mira a Pedro y Pablo como expresión de Cristo, que es la piedra angular y que vive en "la Iglesia, columna y fundamento de la verdad" (1 Tim 3,15).

La verdadera renovación se realiza profundizando en la fidelidad generosa a las gracias o carismas ya recibidos. Entonces se disciernen mejor las gracias nuevas, que señalan nuevos derroteros para transparentar el evangelio. Esta renovación es la mejor fidelidad histórica, que sabe legar al futuro nuevos gestos de vida apostólica, que nada ni nadie podrá borrar. Ser "olor" de Cristo para el hombre de hoy sólo es posible con esta fidelidad generosa y renovadora.

35. Sembrar con lágrimasVosotros sabéis bien cómo me condujecon vosotros..., sirviendo al Señor con toda humildad,con lágrimas y con tentaciones...;cómo no omití nada de cuanto fuerade provecho, predicándoos y enseñándoosen público y en las casas, dando testimonio sobrela conversión a Dios y la fe en nuestro Señor Jesús.

(He 20,18-20).

Ser apóstol nunca ha sido ni será cosa fácil. A nadie le gusta que se le llame a conversión o a retorno sincero a Dios. Y entonces se origina una serie interminable de tribulaciones y contradicciones de parte de todos. Si se predica el mensaje de "conversión", que es el mensaje de Jesús (Mc 1,15), muchos se sienten ofendidos; no entienden el amor exigente de Dios, que quiere lo más profundo de nuestro ser, y no sólo nuestras cosas. Por esto las siembras son siempre así, con sudor y lágrimas.

r

38

Page 39: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Evangelizar vale la pena, al menos para poder correr la misma suerte de Jesús crucificado.

Cristo es el punto de referencia del apóstol. Sería más cómodo y menos cuestionado hacerse esclavo de una teoría o de una moda. Pero el apóstol no puede traicionar a Cristo y a su evangelio. Lo importante es garantizar que se anuncia el evangelio, aunque sea a "destiempo". El fruto está asegurado, sobre todo cuando se ha sembrado la buena semilla con abundantes lágrimas e incomprensiones.

El apóstol lo orienta todo, hasta sus ventajas personales y sus amistades, para dar a conocer el evangelio. Ya no se preocupa de sus propios intereses, sino de los de Jesucristo. Por esto no busca lugares ni puestos privilegiados, sino la cercanía a los más pobres, especialmente a los que todavía no han recibido el evangelio. Cada hombre ha sido amado y redimido por Cristo, y necesita ser guiado a una plenitud de vida en Cristo. El apóstol está plenamente ocupado en su propio "retorno" a Dios Amor; por esto siente la necesidad imperiosa, que es también encargo o misión, de ayudar a otros a realizar este mismo retorno o conversión a los planes de salvación en Cristo.

36. A todo r iesgoYo no hago ninguna estima de mi vida,con tal de acabar mi carrera y el ministerioque recibí del Señor Jesúsde anunciar el evangelio de la gracia de Dios.

(He 20,24).

No hay sorpresas para el apóstol que medita continuamente en la vida del Buen Pastor. Las dificultades son "gajes" normales del oficio pastoral. Siempre es posible conseguir el objetivo del Señor: la gloria del Padre en la salvación de los hombres. Por esto las dificultades no se convierten en tragedia, sino más bien en nuevas posibilidades de anunciar el Reino. Los callejones sin salida comienzan a encontrarse cuando uno se busca a sí mismo. El corazón del apóstol vive la libertad del Espíritu por-que no tiene nada que perder.

Se ha arriesgado todo por Cristo. Hay que afrontar la realidad con una actitud de decir "sí, Padre". Entonces los acontecimientos se convierten en una nueva posibilidad de dar a conocer a Cristo. No se buscan otras seguridades que las de amarle y hacerle amar. Lo único que cuenta es evangelizar, y esto es siempre posible. En todas partes y en cualquier circunstancia se pueden dejar impresas para siempre las huellas de Cristo resucitado.

Los complejos y las alergias no sirven para nada. El complejo de víctima y el de superhombre nacen de la misma aberración: predicarse o buscarse a sí mismo. Para darse no se necesitan tantas complicaciones y cálculos; pero es indispensable vivir en intimidad personal con Cristo. La fortaleza del apóstol consiste en afrontar la realidad, compartiéndola esponsalmente con Cristo.

37 . Disponible para darse

No he codiciado plata, oro o vestidos de nadie.Vosotros sabéis que a mis necesidades

39

Page 40: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

y a las de los que me acompañan han suministradoestas manos. En todo os he dado ejemplo...,recordando las palabras del Señor Jesús:hay más dicha en dar que en recibir.

(He 20,34-35).

La donación del apóstol no sigue cálculos personalistas. Es un darse totalmente como signo de la caridad del Buen Pastor. No se actúa con miras egocéntricas, sino con el desinterés de quien ya "no tiene donde reclinar su cabeza". Ya no se necesita más tesoro que el de la convicción de ser amado de Cristo.

El evangelizador sirve a la Iglesia sin querer servirse de ella. Cada tarea nueva y cada cargo apostólico es una escuela para prepararse a dejar huellas del amor allí donde uno trabaja, mientras se tiene todo a punto para marchar a abrir nuevas puertas al evangelio. Por esto no se exigen privilegios y comodidades. La mochila está siempre preparada para partir y anunciar el evangelio sin fronteras. Es la misma disponibilidad que la de enterrarse como el grano de trigo en el surco del propio Nazaret.

Quien está dispuesto a dejarlo todo no valora los cargos y lugares por las ventajas personalistas ni por el mero realizarse psicológicamente. Todas las ocasiones son buenas para darse y para realizarse según el propio carisma. Quien sabe dar todo a los demás, tiene siempre algo que compartir. Es la regla evangélica de saber vaciar las manos para tenerlas siempre llenas de donación. El apóstol no da sólo sus cosas, sino que principalmente se da a sí mismo, como el Señor.

38 . Hue l las de após to l

Hermanos, sed imitadores míos y atended a losque andan según el modelo que en nosotros tenéis,porque son muchos los que andan, de quienesfrecuentemente os dije, y ahora os lo digo conlágrimas, que son enemigos de la cruz de Cristo.

(Flp 3,17-18).

La tarjeta de identidad del apóstol tiene siempre estas dos características: cruz y esperanza. Es el seguimiento de Cristo, iniciado en la fe, sostenido por la esperanza y expresado en caridad o unión con Cristo crucificado y resucitado. El punto de referencia del estilo apostólico de todas las épocas es la vida del Buen Pastor, tal como la imitaron los doce apóstoles.

El evangelizador, urgido por la caridad, sabe mantener un equilibrio entre la cercanía a los hombres y la trascendencia o el "más allá". Esta actitud es señal de garantía para no caer ni en el inmanentismo oportunista ni en las fantasías ilusorias. Es el misterio de la "encarnación" vivido en la realidad cotidiana, en una tensión vital y generosa entre el "ya" y el "todavía no".

Hay que adaptarse y acercarse a todos y en todo, sin traicionar el misterio de Cristo, que es el Verbo del Padre hecho nuestro hermano. La vida del apóstol es un trasunto del misterio pascual: el "paso" cotidiano por la cruz hacia la luz. Se vive en Cristo crucificado, que ha dado la vida para restaurarlo todo según los planes del Padre. El ministro de Cri-to es apóstol de la esperanza, traducida en confianza, cercanía y tensión hacia el "más allá".

40

Page 41: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

39. Pobreza y profetismo

Teniendo con qué alimentarnos y con qué cubrirnos,estemos con eso contentos. Los que quieren enriquecerse caen en tentaciones,en lazos y en muchas codicias locas...Pero tú, hombre de Dios, huye de estas cosasy sigue la justicia, la piedad, la fe, la caridad,la paciencia, la mansedumbre...,que conserves sin tacha ni culpael mandato hasta la manifestaciónde nuestro Señor Jesucristo.

(1 Tim 6,8-14)

Con el corazón libre para amar, el apóstol no encuentra obstáculos insuperables en la predicación del evangelio. Se anuncia la Verdad, que es el mismo Cristo, sin medios ni ambiciones. El corazón vive pendiente de la venida cotidiana y de la venida definitiva del Señor. Entonces se vive en el gozo confiado de la espera. Con esta serenidad y equilibrio afectivo no se encuentran enemigos, sino sólo hermanos redimidos por Cristo. Es el servicio de la verdad en la caridad universal.En una sociedad materialista y de consumo, el apóstol se presenta con la verdad en la mano y, sobre todo, en el corazón. No se siente santo ni superior, sino más bien liberado continuamente, por Cristo, de ambiciones y deseos desordenados. Esta misma liberación se le ha convertido en el don de vocación y misión sin fronteras. Se vive sólo de la presencia y de la palabra de Cristo. Es vivencia y anuncio al mismo tiempo. Y es también comprensión y cariño para ayudar a otros a liberarse del mismo pecado y egoísmo.La pobreza apostólica no es puritana y negativa, sino la libertad de seguir a Cristo, sin tener otra seguridad que la amistad con él. Es pobreza que va acompañada siempre de humildad, sacrificio, gozo, intercambio, comprensión, obediencia, caridad... El apóstol es sólo aprendiz de la pobreza del Buen Pastor; por esto no posee ni aun la "riqueza" de pensar que es pobre.

40. Soldado de Cristo

Comparte las fatigas, como buen soldadode Cristo Jesús. El que milita, para complaceral que le alistó como soldado,no se embaraza con los negocios de la vida.

(2 Tim 2,3-4).

El apóstol vive "a sueldo" del único Señor. Por esto no busca más premio que al mismo Cristo: ser amado por él, amarle, darle a conocer y hacerle amar. Es una ocupación que le llena con creces.

41

Page 42: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Otro premio sería una alienación y un error que se pagaría muy caro. No vale la pena arriesgar este tesoro por unos harapos, aunque estén de moda.La decisión está tomada, pero no como quien pega un puñetazo encima de la mesa, sino como una declaración de amor que se renueva todos los días. El apóstol no tiene "cuerda" para más tiempo que el que corre entre los momentos frecuentes de encuentro personal con Cristo. La esperanza, más allá de toda humana esperanza, se basa en confiar en Cristo y no sentir necesidad absoluta de él. Hay que vestirse la "armadura de Dios" (Ef 6,11-17).La decisión de amistad con Cristo se ha tomado para siempre y se quiere mantener a toda costa. La perseverancia se apoya en el hecho de no' buscar nada más que al Señor. Cristo es el más interesado en esta donación total y continua. Hay muchos apóstoles olvidados, como los ha habido y los habrá siempre; el único que no les olvida es el Señor. No conviene, pues, buscar sucedáneos y paños calientes; nada ni nadie puede suplir a Jesucristo.

41. Perseverar en la tribulaciónTodos los que aspiran a vivir piadosamente en Cristo Jesús sufrirán persecución...Tú permanece en lo que has aprendido y te ha sidoconfiado, considerando de quiénes lo aprendiste.

(2 Tim 3,12-14).

Las dificultades son regla normal de la vida espiritual y apostólica. A veces proceden de malentendidos, aunque no faltan las persecuciones. Pero no hay que hacer tragedias ni adoptar un complejo de persecución. En realidad son medios privilegiados para darse totalmente y para manifestar la caridad de Buen Pastor.

El compromiso más profundo es el de la caridad pastoral. Se ama a todos, se sirve a todos y se llama a todos a la conversión. Decir la verdad con amor suscita malentendidos y resistencia, e incluso la persecución de los buenos, como diría santa Teresa. Se denuncia el error y el pecado, amando profundamente a las personas. Por esto el apóstol puede llegar a ser crucificado por todos, como lo fue Jesús. Y, por añadidura, todavía le dedicarán el título sarcástico de "no comprometido". Morir amando y perdonando, como Cristo, es siempre el escándalo de la cruz.

La fecundidad apostólica sigue esta regla: sufrir amando o transformar toda circunstancia en una nueva posibilidad de amar y de darse plenamente. Es la maternidad misionera de María y de la Iglesia, que se realiza en el "fiat" y en el "estar de pie" junto a la cruz. Las dificultades ayudan a profundizar la unión con Cristo y la "comunión" con la Iglesia.

42. Prisionero del Espíritu

Encadenado por el Espíritu, voy hacia Jerusalén,sin saben lo que me sucederá, sino que en todas

42

Page 43: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

partes el Espíritu Santo me advierte,diciendo que me esperan cadenas y tribulaciones.

(He 20,22-23).

No se necesitan otras "cadenas" que la libertad del Espíritu para predicar el evangelio sin fronteras. De esa actitud libre, de verdad y de caridad surgirán muchas dificultades, a modo de cadenas que quieren acallar la voz del apóstol. Cadenas estériles serían el miedo, el desánimo, el culto de la propia personalidad y de la eficacia inmediata. La libertad del amor ata al apóstol para dar la vida y le desata de las cadenas de su propio egoísmo; haciéndose prisionero de Cristo y de su Espíritu (Ef 3,1), alcanza la libertad del amor. .

Seguir la acción del Espíritu es la actitud más auténtica del apóstol. Por esto intenta vivir en esa paz serena que brota de la amistad con Cristo y que hace caso omiso de las opiniones de la moda. La eficacia del apostolado está condicionada solamente a seguir la hora del Padre, es decir, la hora de ser crucificado con Cristo. Las dificultades son la piedra de toque de la caridad pastoral; se convierten en cruz salvífica cuando el apóstol las afronta con serenidad, dispuesto a desprenderse más de sus propios planes, sus puntos de vista y sus intereses personales.

Se discierne de verdad la acción del Espíritu cuando se está habituado a seguir esta misma acción. La generosidad sin cálculos aprioristas es la mejor regla del discernimiento. Sin esta generosidad se atribuiría al Espíritu lo que uno ya ha decidido apriorísticamente. El apóstol no hace depender su vida de nuevas teorías sobre la misión; no valdría la pena aventurar tantas cosas por opiniones fabricadas en el laboratorio. Siguiendo, como Cristo, la hora del Padre y la acción del Espíritu, es siempre posible hacer lo mejor de la propia existencia: darse como el Buen Pastor.

43. Un riesgo permanente

Os aseguro, hermanos, por la gloriaque en vosotros tengo en Cristo Jesús,

nuestro Señor, que cada díaestoy en trance de muerte.

(1 Cor 15,31).

La vida sólo merece vivirse cuando se transforma en el gozo de darse. Basta con el quehacer y los detalles de cada día vividos en el espíritu de Nazaret. Entonces se afrontan con normalidad también las circunstancias extraordinarias. Lo que importa es realizarse amando. Es la actitud "pascual" de "pasar" por la muerte a la resurrección. Este "paso" ya se está dando con el correr del tiempo y en el transcurrir de las ocasiones, a condición de que todo se transforme en servir amando.

La actitud gozosa de dar la vida gota a gota no puede existir sin la decisión de querer arriesgarlo todo por Cristo. Cuando hay otras añoranzas y telarañas, difícilmente se acepta el paso de los días, de los años, de los cargos y de la salud. ¿Por qué empeñarse en ser o parecer imprescindible? Basta con serlo en el amor que hay que dejar en cada cargo, en cada comunidad y en cada lugar. Cuando no se tiene nada que perder, todo se

43

Page 44: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

convierte en la mejor ocasión de darse sin reservas. La muerte física se prepara así como un momento privilegiado de asociarse al misterio pascual del Buen Pastor.

No hay que pedir ni esperar tantas garantías y cálculos humanos para darse. Hay. que aprender a arriesgar el tiempo para saber escuchar la voz del Señor, que a veces pide un salto en el vacío. Siempre es un ponerse en sus manos paternas. La piedra de toque es el saber encontrar tiempo para orar, como relación personal con Cristo y como meditación sapiencial de su palabra. Entonces se encuentra tiempo para escuchar y servir a todos. Otras personas arriesgan mucho más que nosotros para sus negocios y planes a ras del suelo. Vale la pena arriesgarlo todo para presentarse a esas "oposiciones" de los cargos humildes y de la misión sin fronteras; ahí no hay envidias ni zancadillas.

44 . Olor de Cris to

Doy gracias a Dios, que nos hace triunfar en Cristoy por nosotros manifiesta en todo lugar el aromade su conocimiento; porque somos para Diossuave olor de Cristo.

(2 Cor 2,14-15).

Vale la pena gastar la propia existencia para hacer conocer y amar a Cristo. Es verdad que, para conseguir este objetivo, hay que pasar por el molino y por el lagar, si no ya por los molares de las fieras, como san Ignacio de Antioquía. El amor a Cristo no se detiene ante ninguna dificultad. No es vocación de héroe, puesto que la debilidad de la naturaleza humana sigue siendo la misma; pero se tiene confianza plena en la presencia y compañía del Señor resucitado, que es el mejor amigo.

El perfume es poco consistente; por esto no se cierra en sí mismo, sino que se comunica a todos por igual. La humildad o autenticidad del apóstol se transforman en evangelización sin fronteras. La vanidad y el personalismo arruinan todos los ideales y deshacen los mejores planes de evangelización trazados por nosotros o por los demás. Pablo dejaba en todas partes las huellas de Cristo. Su vida apostólica se reducía a ser transparencia del evangelio o epifanía de los planes de Dios en Cristo. Por esto se ale-graba de los planes apostólicos de los demás.

El apóstol habla con gestos y retazos de vida; no es un teórico. La eficacia es segura, aunque no inmediata. Los signos pobres de una vida de Nazaret o de un servicio oculto y perseverante son garantía de la acción del Espíritu Santo. Este perfume de Cristo se adquiere en el diálogo personal con él y se contagia a los hermanos cuando nos ven enamorados del Señor.

45 Fuerte en la f laqueza

44

Page 45: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

El me dijo: Te basta mi gracia, que en la flaqueza llega al colmo el poder. Muy gustosamente, pues,continuaré gloriándome en mis debilidadespara que habite en mí la fuerza de Cristo...;pues cuando parezco débil, entonceses cuando soy fuerte.

(2 Cor 12,9-10).

La fuerza del apóstol emana de Cristo amigo, resucitado, presente. La condición para gozar de esta fuerza es el reconocimiento de las propias flaquezas y limitaciones. ¿Para qué apoyarse en arenas movedizas? Todo es gracia y manifestación de Dios Amor, a condición de que se reconozca este "más allá" de las apariencias o de la superficie.

Esta "pobreza" bíblica es el secreto de la santidad y del apostolado. El hombre sólo puede realizarse amando, pero por sí mismo es incapaz de amar perfectamente. El egoísmo acecha en cualquier situación humana personal y social. El apóstol siente cercano a Cristo y siente necesidad absoluta de él; por esto encuentra alivio en recitar las oraciones evangélicas: "¿A quién iremos?", "el que amas está enfermo", "en tu nombre echaré las redes"... Pablo diría: "Todo lo puedo en aquel que me conforta" (Fip 4,13).

La seguridad del apóstol radica, pues, en la fe y convicción honda de ser amado, tal como es, por Cristo. Descubre más hondamente al Buen Pastor cuando se reconoce oveja perdida. Por esto experimenta la misericordia de Dios y la fuerza de Cristo resucitado en medio de la tempestad de las propias limitaciones y de los avatares históricos. Dios ha puesto en nuestras débiles manos su programa para extender su Reino. No hay que tener miedo ni desconfianza; basta con reconocer que nuestras manos son débiles y que están vacías y sucias; entonces es él quien pone sus manos en las nuestras para hacerlas limpias, fuertes y transparentes. Nos basta la convicción de ser amados por él y la decisión de amarle y de hacerle amar. "Tal es la confianza que por Cristo tenemos en Dios..., nuestra suficiencia viene de Dios" (2 Cor 3,4-5).

46. Vivir de Cristo

Estoy crucificado con Cristo,y ya no vivo yo, sino quees Cristo quien vive en mí...;vivo en la fe del hijo de Dios,que me amó y se entregó por mí.

(Gál 2,19-20; cf Rom 14,8).

La vocación apostólica comienza siempre por un encuentro vivencial con Cristo crucificado y resucitado. Es una declaración de amor por parte del Señor. Y es una entrega de amor de retorno por parte del apóstol. La vida ya no tendría sentido al margen de Cristo: "Si vivimos, vivimos para él" (Rom 14,8).

Al Señor se le ha encontrado como Redentor, en la propia circunstancia. Ha sido una experiencia de su misericordia. De este encuentro nace, como exigencia de amor, una actitud permanente de confianza, generosidad, audacia, gratitud, celo apostólico... Cristo se hace protagonista de la propia vida. Nuestra vida y muerte le pertenecen esponsalmente. La soledad real no existe para el apóstol.

Si se vive la vocación como enamoramiento, ya no se necesita huir de la propia circunstancia ni descender de la cruz. Cristo nos amó y se entregó por nosotros así, y

45

Page 46: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

ahora reclama nuestra convicción de que nos sigue amando y nuestra decisión de amarle del todo y hacerle amar de todos. ¿Para qué empeñarse en vivir solo o al margen de Cristo?

47. Testigo desconcertante

Orando por mí, para que, al hablar,se me conceda la palabra para dar a conocercon franqueza el misterio del evangelio,del que soy embajador, encadenado, para anunciarlocon toda libertad y hablar de él Como conviene. (Ef 6,19-20).

Ante los poderes del mundo, el modo de actuar del apóstol parece ridículo. La tentación más frecuente y sutil del apóstol es la de apoyarse en esos poderes. Pablo prefirió quedarse con la fuerza de la cruz y presentarse como "embajador encadenado". Lo importante es anunciar el evangelio con autenticidad y sin componendas.

Quien corre la suerte de Cristo se hace partícipe de su fuerza y de su "flaqueza". La fuerza del Señor consistía en seguir la voluntad del Padre, aunque se manifestara por medio de signos pobres. Su "flaqueza" consistía en la humillación, la pobreza, la in-comprensión y el sufrimiento. No hay que dejarse llevar del temor de ser humillado y marginado ni aun dentro de la comunidad eclesial. La flaqueza se transforma en la fuerza de la cruz por medio del amor y de la comunión eclesial.

No hay que avergonzarse de sufrir por Cristo. El Señor nos hace gustar la impotencia de nuestras fuerzas para que descubramos el poder de su resurrección. No hay fracasos cuando se sigue a Cristo. Sí hay Getsemaní y cruz. Las cruces más dolorosas del apóstol son las que provienen de amigos de Cristo que, a veces, parecen querer hacer del evangelio una amalgama de componendas. Entonces se comparte el sufrimiento actual de Cristo en su Cuerpo Místico.

48. Escala de valoresLo que tenía como ganancia lo considero ahora por Cristo como pérdida, a causa del sublime conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por cuyo amortodo lo sacrifiqué y lo tengo por basura, con tal de ganar a Cristo.

(Flp 3,7-8).

La escala de valores del apóstol es desconcertante. Sabe apreciar todas las cosas como dones de Dios: patria, familia, cultura, trabajo, bienes, seguridades... Pero considera todo valor a la luz de Cristo resucitado y de la restauración de todas las cosas en él. Entonces todos los valores recuperan su puesto adecuado, siempre bajo el primer valor que es Dios Amor. Al margen de esta verdadera escala de valores no habría más que exageraciones y material de desecho.Los "negocios" del apóstol son así. El Señor es el primer valor, y todo lo demás tiene un valor relativo. A este primer valor se somete todo, incluso la propia realización personal.

46

Page 47: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

¿Qué importa perder la hojarasca? En realidad, centrando la vida en Cristo no se pierde ningún valor, sino que se recuperan todos en su autenticidad más honda. Pablo puso al servicio de Cristo resucitado todos sus títulos y cualidades, que, al margen del Señor, se reducirían a sólo paja.

Cada uno tiene su propia escala de valores, más o menos consciente. La distribución que uno hace del tiempo es un índice para saber dónde tiene el corazón. Cristo no admite sucedáneos, aunque le digamos que lo hacemos todo por él. Hay que buscar primero la extensión del Reino, y hacerle conocer y amar tal como él quiere ser conocido y amado. Con esta orientación de la vida desaparecen fácilmente los parásitos mentales y los problemas artificiales.

49 . Como Cr is to Buen Pas tor

Muéstrate en todo ejemplo de buenas obras... Porque se ha manifestado la gracia salvífica de Dios para todos los hombres... para que vivamos...con la bienaventurada esperanzaen la manifestación gloriosadel gran Dios y Salvador nuestro, Cristo Jesús,que se entregó por nosotros para rescatamosde toda iniquidad y purificar para sí un pueblopropio, celador de buenas obras: (Tit 2,7-14)

Jesús es la epifanía personal de Dios Amor. El apóstol es un signo personal de Cristo Buen Pastor, que dio la vida en sacrificio. La acción apostólica, reforzada por el testimonio del apóstol, es la prolongación de la acción evangelizadora de Cristo. El apóstol ha sido llamado a anunciar a todas las gentes los planes salvíficos de Dios Amor.Hoy se necesitan signos y gestos evangélicos. Muchos ya han leído el evangelio o ya han oído algo sobre él, pero no han visto el signo claro del Buen Pastor. La vida del apóstol es un "gesto" de caridad en medio del desierto del egoísmo y de la división. Se necesita su autenticidad, sus gestos y su experiencia de encuentro con Cristo; no se le pide nada más que transparentar el evangelio. No tiene otra especialización que la de anunciar el evangelio sin rebajas ni arreglos. No se trata de agradar, sino de salvar (1 Tes 2,4).El ministerio apostólico es el de imitar a Cristo, que se hizo el servidor de todos. Al apóstol le basta el seguimiento de Cristo para sentirse amado por él y para darse como él; el cómo y el dónde lo escoge también el Señor. Este servicio desinteresado es "el máximo testimonio del amor" (PO 11).

50. La ascesis del apóstol

Ejercítate en la piedad...

47

Page 48: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Por esto penamos y combatimos, porqueesperamos en Dios vivo, que es el Salvadorde todos los hombres, sobre todo de los fieles.

(1 Tim 4,7-10).

El apóstol se modela a cincel, meditando la palabra de Dios y entregándose a la caridad pastoral. Es una ascética de confianza gozosa, que se apoya en Cristo resucitado, presente en todo ser humano y en toda situación histórica.

La palabra y la presencia de Dios por medio de Cristo, que es el Verbo hecho hombre y Emmanuel, son fuente de espiritualidad o de vida según el Espíritu. A veces se suceden "silencios" y "ausencias", que luego se transforman en palabra y presencia más profundamente sentidas. Es una ascesis que no se estila ni se comprende en una sociedad materialista y de consumo; es la ascética que puede conducir al encuentro definitivo de toda la humanidad con Dios. Sin esta "ascética" contemplativa, otras "gim-nasias" musculares y psicológicas (1 Tim 4,8) no serían más que acción o interiorización alienante.

El apóstol está siempre disponible para servir como Cristo y para ser su transparencia y su instrumento. Vive pendiente de los intereses dt Dios y de los problemas de los hombres, para dar h vida gota a gota en el quehacer cotidiano. En esta ascética y tensión de caridad no se encuentra nunca salo, sino que vive inmerso en la gran presencia dt Cristo resucitado y de todo su Cuerpo Místico que es la Iglesia.51. La oración permanente del apóstol

Yo os encomiendo al SeñorY a la palabra de su gracia.

(He. 20,32).

Rogamos a Dios que no hagáis ningún mal…Lo que pedimos es vuestra perfección.

(2 Cor 13,7-9).

La oración del apóstol no es un cumplimiento ni una fórmula rutinaria. Es la preocupación constante de encomendar todo el corazón de Cristo, amigo y mediador. La oración verdadera es el compromiso más radical y permanente, porque hace entrar en el corazón de Dios, donde cada ser humane es amado de modo irrepetible. Es la verdadera sintonía con toda persona redimida por Cristo.

Todo acontecimiento humano, a la luz de Cristo resucitado se convierte en diálogo con Dilos y en donación a los hermanos. Es la oración en el Espíritu Santo, que nos ayuda a decir "Padre" a Dios con la voz y con el cariño de Cristo Buen Pastor.

Quien ora de verdad, ama a los hombres por sí mismos, sin querer hacer de ellos un instrumento de la propia gloria y de los propios intereses o medros personales. Al hermano se le ama por lo que es, no por las cualidades que tiene, ni por sus simpatías, ni por su utilidad. Esta actitud de caridad fraterna es actitud de escucha, respeto y donación. Esta oración no necesita ni busca dispensas ni excusas; se encuentra siempre tiempo para ella. Y es ella la que hace posible y la que da sentido a los momentos fuertes de oración.

48

Page 49: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

49

Page 50: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

CUARTA PARTE

CRUCIFICADOCON CRISTO

La palabra "cruz" no le espantaba a Pablo. Sentía, es verdad, la debilidad de la naturaleza, como todos y como el mismo Jesús quiso experimentar en Getsemaní y en el Calvario. Para el apóstol, la palabra "cruz" suena a enamoramiento: "Estoy crucificado con Cristo..., que me amó y se entregó por mí" (Gál 2,19-20). Lo principal, es decir, la persona amada, resta importancia al espanto que produce el sufrimiento. Es la persona del crucificado quien ha conquistado el corazón y la existencia del apóstol.

Se quiere correr la suerte de Cristo, convivir con él en sus mismas circunstancias, aunque sea llevando la corona de espinas (como pedía santa Rosa de Lima). Lo que Cristo pasó por nosotros es lenguaje de amor e invitación a beber su misma copa de bodas (Mc 10,38). "Cruz" significa ahora sufrir amando y perdonando como Cristo y con él. Es la caridad pastoral de dar la vida, es decir, de darlo y arriesgarlo todo. Así se colabora a que la vida de configuración con Cristo sea una realidad en todo ser humano.

La vida se ha hipotecado por Cristo. Se acepta, ya desde ahora, cualquier modo de amarle y de hacerle amar, aunque fuera un camino doloroso ("via crucis"). La vida se vive como un todo, que incluye la misma muerte como donación esponsal. "Si vivi-mos, vivimos para él; si morimos, morimos para él...; somos del Señor" (Rom 14,8).

Así se participa en el misterio de la Pascua, como "paso" de toda la humanidad y de toda la creación hacia Dios, por Cristo y en el Espíritu. El modo de este "paso" puede ser doloroso, pero lo que se busca directamente es el amor y la unión final con Cristo. Es el "sí" o "amén" de Cristo al Padre, que es nuestro "sí": "Por él, ya podemos decir amén a Dios" (2 Cor 1,20).

Cristo hace posible y llevadera nuestra crucifixión con él. No se trata de fantasmas, sino de una vida de donación que incluye principalmente los momentos de Nazaret (o vida oculta) y los momentos del Calvario, para llegar al gozo de la resurrección. Este gozo pascual ya se anticipa, en cuanto que, en medio de penumbras, se intuye la fecundidad materna de la Iglesia, que encuentra en María su Tipo y su Madre.

52. Compañero del crucificado

Para mí es vaso de elección,para que lleve mi nombre ante las naciones... Yo le mostraré cuánto habrá de padecerpor mi nombre.(He 9,15-16).Estoy crucificado con Cristo.

(Gál 2,19).

La iniciativa de la vocación la tuvo el Señor. Y sigue siendo él quien traza los planes del

50

Page 51: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

encuentro personal y del apostolado: correr su suerte de cruz y de resurrección. Naturalmente que esta vocación no es para quedarse en la cruz, sino para dar la vida por el evangelio y de este modo colaborar a la redención de toda la humanidad. La restauración y redención es siempre a precio de sangre, es decir, de donación.

La vocación es un don que se recibe tal como es. Es llamada a un encuentro, a una entrega y a una misión sin fronteras. El apóstol, mientras mantenga el sentido de gratitud, será fiel a este universalismo y totalidad. Hemos sido elegidos y amados para contagiar a todos de esta misma elección y amor.

Se comparte la vida y la muerte de Cristo para compartir su triunfo y glorificación. El Señor murió y resucitó para la redención de todos. Hay que aprender a sufrir amando, en silencio, sin propagandas ni exigencias de reconocimiento. Al amor le basta con darse; si buscara directamente recibir el premio, ya no sería amor. El recuerdo de la elección, que fue siempre inesperada e inmerecida, será el sostén de nuestro "sí" cotidiano, en un silencio tan elocuente como fecundo.

53. Preparado para dar la vida

En todas las ciudades el Espíritu Santo me advierte,diciendo que me esperan cadenas y tribulaciones.Pero yo no hago ninguna estima de mi vida...

(He 20,23-24).Si morimos, morimos para él.

(Rom 14,8).

La vida apostólica es la mejor escuela para aprender a darse como Cristo Buen Pastor. Es el holocausto de todos los días y de todos los intereses más o menos bastardos. Así sè prepara el gran holocausto de la muerte, como "hora" de entregar la vida en manos del Padre. Se siente, como es lógico, la debilidad y el miedo; pero al mismo tiempo la decisión de correr la suerte de Cristo Redentor se hace irrevocable.

El holocausto de cada día y el del momento final lo prepara el Señor como a él le gusta más. Para nosotros, el "cómo" o las circunstancias importan poco; lo importante es beber la misma "copa de bodas" de Cristo esposo y amigo. Sin la meditación de la palabra de Dios y sin intimidad y relación personal con Cristo, esta actitud de desposorio sería imposible.

La vida se ha hipotecado por Cristo. A algunos, incluso a amigos cercanos y bien intencionados, nuestra vida les parecerá un fracaso o una exageración. Para Pablo, el único premio deseable no era el aprecio de los amigos, sino el mismo hecho de participar en la donación sacrificial de Cristo Redentor.

54. Inmolarse por los demás

Siento una gran tristeza y un dolorcontinuo en mi corazón, porquedesearía ser yo mismo anatema de Cristopor mis hermanos, mis deudos según la carne...cuya es la adopción.

51

Page 52: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

(Rom 9,2-4).

Cualquier precio resulta barato con tal de ayudar a los demás a descubrir y vivir su realidad de redimidos y de hijos de Dios por adopción. La caridad pastoral, como trasunto del amor de Cristo, no tiene lógica ni balanza humana. Simplemente ama sin medida. Es la participación en la realidad de Cristo Buen Pastor, responsable y protagonista de la existencia de todos y de cada uno.

Se ama a los hermanos con profundidad, en su ser más íntimo, sin querer utilizarlos; no se les aprecia por lo que tienen, sino por lo que son. Se les ama tal como son, para ayudarlos a transformarse en

Cristo. Se vive al servicio de todos, sin esperar más recompensa que . la de que conozcan y amen a Cristo.

Los números cuentan poco en la escala de valores del evangelio. Bastaria una oveja perdida o alejada para suscitar el celo del Buen Pastor. Se vive a pre sión la caridad de Cristo, que se desvela por los marginados, los más pequeños, los enfermos, los más indefensos y los más pobres. No se trata de propagandas ni de charlatanerías. Y tampoco se busca un número de votos para unas elecciones interesadas. Se trata propiamente de la entrega cotidiana, que no hace ruido ni atrae la atención, porque ya no se estila. Este amor es sólo noticia en el corazón de Dios. La "canonización" de muchos gestos heroicos de caridad pastoral y de martirio sólo tendrá lugar después del juicio universal.

55. No desvir tuar la cruz de Cris to

No me envió Cristo a bautizar, sino a evangelizar,y no con sabia dialéctica,para que no se desvirtúe la cruz de Cristo.

(1 Cor 1,17).

El apóstol no se deja llevar por las alergias ni por los malentendidos sobre la cruz. Muchos se espantan ante la cruz o les da miedo hablar de ella. En realidad, es la copa de bodas y la máxima epifanía de Dios Amor. Predicar la cruz es predicar al crucifica-do, Jesucristo, que ha dado su vida por la redención de todos (Mc 10,45). Las circunstancias humanas de dificultad se pueden convertir en cruz redentora; basta con amar como Cristo y vivir en unión con él. Este es el mensaje evangélico que el apóstol no puede callar, aunque no guste o no esté de moda.

En el apostolado, la fuerza y la eficacia no provienen de las grandes cualidades ni de las seguridades humanas, sino de la cruz como expresión de caridad pastoral. Hay que poner al servicio del Redentor todos los carismas y dones recibidos de él; pero no se puede poner el corazón en ellos. Cada apóstol tiene su propia misión y su modo propio de misionar; el común denominador de todos es el de dar la vida como el Buen Pastor. Con esta actitud fundamental, todos los carismas y vocaciones se complementan. Sin la disponibilidad de donación sacrificial, los mejores dones y cualidades se convierten en inicio de gangrena personal y comunitaria.

Lo importante es convertirse en transparencia del crucificado, o en crucifijo viviente, que transparente, en la esperanza, el gozo anticipado de la resurrección. La vida de todo

52

Page 53: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

apóstol y de toda institución eclesial debe ser un "interrogante" que a veces produce escándalo y frecuentemente es molesto. La cruz es un cauterio que chamusca todo tipo de egoísmo personal y colectivo. El mismo apóstol siente la tentación del escándalo y de la fuga; pero persevera gracias a la meditación del mensaje evangélico que predica a los demás: "Jesucristo, siendo rico, se hizo pobre por amor nuestro, para que vosotros fueseis ricos por su pobreza" (2 Cor 8,10).

56 . Predicar a l cruc i f i cadoLos judíos piden señales, los griegosbuscan sabiduría, mientras que nosotrospredicamos a Cristo crucificado,escándalo para los judíos, locura para los gentiles;mas poder y sabiduría de Dios para los llamados,ya judíos, ya griegos.

(1 Cor 1,22-24; cf Ef 2,4-5).

¿Para qué serviría predicar otro mensaje que no fuera el de Cristo crucificado? No valdría la pena.

La vida se arriesga sólo por el evangelio, que se concreta en las bienaventuranzas y en el mandamiento del amor. Se predica el amor de un Dios que nos da todo lo que tiene e incluso a sí mismo, y que precisamente por ello nos quiere hacer imagen viviente de su amor. No se predica, pues, una teoría de moda ni la propia opinión; hacerlo así sería predicar un mesianismo ilusorio, porque sería predicarse a sí mismo.

Pablo predicaba la "locura" de la cruz. Es la misma experiencia de Dios Amor en Cristo: "Por el gran amor con que nos amó... nos dio vida por Cristo" (Ef 2,4-5). Un cristianismo sin cruz sería un absurdo, una cisterna vacía. Es Cristo crucificado, y no otro, quien ha conquistado el corazón del apóstol. Aquella mirada de enamorado ("redendor"), que muere dando la vida, ya no se podrá olvidar jamás. Sus últimas palabras y su corazón abierto para comunicar el Espíritu Santo son su testamento, deja-do ahora bajo signos eclesiales. El apóstol es ministro o servidor de estos signos "pobres" portadores de verdadera liberación. Hemos sido liberados por la sangre del Redentor (1 Cor 6,20; 7,23).

Aunque, en un primer momento, el mundo rechace la cruz, en realidad no puede prescindir del crucificado, puesto que no puede prescindir del amor de donación total. La cruz es la luz verde que abre el camino y el significado del sacrificio: sufrir aman-do, darse a Dios y a los hermanos. Es el camino para transformar toda dificultad y toda tribulación en una nueva posibilidad de servir y de amar. La esperanza de una plena restauración de todas las cosas en Cristo pasa por la cruz.

5 7 . L a s a b i d u r í a d e l a p ó s t o l

Nunca entre vosotros me precié de saber cosaalguna, sino a Jesucristo, y éste crucificado...Mi palabra y mi predicación no fueen persuasivos discursos de sabiduría,sino en la manifestación del Espíritu...,para que vuestra fe no se apoye

53

Page 54: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

en la sabiduría de los hombres,sino en el poder de Dios.

(1 Cor 2,2-5; cf Ef 5,25).

La ciencia y la sabiduría del apóstol se basan en Cristo crucificado y resucitado, centro de la creación y de la historia. Es la sabiduría de la cruz. El cristianismo respeta todas las culturas, pero presenta una sabiduría infinitamente superior a toda ciencia: Dios Amor, que nos ha amado hasta darnos a su Hijo y hacernos participar en su filiación divina por una vida nueva en el Espíritu.

Cristo crucificado es, para el apóstol, sabiduría, luz, fuerza y razón de ser. Es la máxima expresión del amor: "me amó y se entregó por mí" (Gál 2,20); "amó a la Iglesia y se entregó por ella" (Ef 5,25). En Cristo crucificado, amigo íntimo, el apóstol encuentra siempre el modo de rehacerse y comenzar de nuevo: ¿Qué ha hecho Cristo por mí? ¿Qué he hecho yo por él? ¿Qué debo hacer por él? (Ejercicios de san Ignacio).

En Cristo crucificado, la vida se hace coherente, porque se aprende a amar a todos. Es la libertad de amar como Cristo y de vivir crucificado con él. Esa es la identidad del apóstol, que no admite dudas estériles y enfermizas.

Es la ciencia del corazón, que se aprende en la intimidad con Cristo. La propia debilidad no es un estorbo cuando se deja que Cristo sea el protagonista y consorte de nuestra vida. De esta debilidad se aprende humildad, comprensión, confianza, generosidad, celo apostólico. Es decir, el Buen Pastor, que muere en la cruz, contagia a su apóstol de la actitud de misericordia y de amor de totalidad.

5 8 . E s c á n d a l o y r e c h a z o

Dios a nosotros, los apóstoles, nos ha asignadoel último lugar..., pues hemos venido a serespectáculo para el mundo, para los ángelesy para los hombres . . . Hemos venido a serhasta ahora como desecho del mundo,como estropajo de todos.

(1 Cor 4,9-13).

La peor desgracia del apóstol sería la de ser aceptado fácilmente como algo "inofensivo" y amorfo. Si encuentra dificultad, es que los otros se han dado cuenta de las exigencias evangélicas. El rechazo acostumbra a ser una señal de que el evangelio llega a las llagas más profundas del corazón del hombre.

A veces es también el rechazo y el ridículo de parte de los que se llaman seguidores de Cristo. ¿Quién va a hacer caso de una persona que no ofrece ventajas temporales y que no se apoya en sus cualidades y títulos humanos? El apóstol no se busca a sí mismo ni espera más recompensa que la de hacer conocer y amar a Cristo. Esta actitud comporta, muchas veces, el convertirse en el "hazmerreír" o en el "burro de carga". Con tal que "Cristo sea anunciado, yo me alegro" (Flp 1,18).

Lo que importa es ser un interrogante que cuestiona las situaciones personales y sociales para iluminarlas y sanarlas con la fuerza de la verdad evangélica. No es un puritanismo ni una actitud heroica buscada por sí misma. Es simplemente la consecuencia de una amistad honda con Cristo, porque él basta y llena con creces. Se

54

Page 55: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

insta a todos a acelerar el paso hacia la plenitud en Cristo. Algunos se molestan porque esta llamada a la "conversión" les parece una humillación o un desprecio de los verda-deros valores personales y sociales. En realidad, se trata de la "conversión" o retorno sincero y cordial a los planes salvíficos de Dios. Así seremos totalmente de Cristo, y Cristo de Dios (1 Cor 3,22-23).

59 . En la penumbra

No nos predicamos a nosotros mismos,sino a Cristo Jesús, el Señor;y en cuanto a nosotros, nos predicamossiervos vuestros por amor de Jesús.

(2 Cor 4,5).

Se predica a Cristo crucificado y resucitado sirviendo humildemente a los demás. Los cargos y los "primeros" puestos son secundarios. La naturaleza se resiente y protesta. Pero lo que importa es amar. Cristo da valor eterno a esta actitud de darse. Para realizarse, uno no necesita más que sentirse amado y poder amar. Es el amor el que trasciende el espacio y el tiempo. La penumbra es aparente mientras dura esta peregrinación, en la que nos dejamos llevar de tantos espejismos. Los grandes monumentos desaparecerán; sólo quedará lo que haya nacido del amor.

¿Para qué predicarse a sí mismo y hacer prevalecer las propias opiniones? No vale la pena perder tanto tiempo por algo tan pasajero. Es mejor servir a todos y en todo, sin hacer ruido. Para darse de verdad hay que aprender a olvidarse sin reclamar propinas. Al apóstol sólo le interesa que sobresalga la presencia, la palabra, el amor y la acción salvífica de Cristo resucitado y de su Espíritu. Hay que chamuscar mucho egoísmo para hacer sentir la voz del Espíritu enviado por Jesús.

Se busca solamente el desposorio de toda la humanidad y de cada persona con Cristo. El apóstol no se queda con la esposa del Señor. Para llegar a construir la comunidad o vida fraterna basada en el mandamiento del amor ("koinonía") es necesario que el apóstol pase por la humillación ("kénosis") de un servicio humilde y sacrificado ("diaconía"). El apóstol es sólo "servidor" o "ministro" del evangelio (Col 1,23).

60. Las señales del crucificadoCuanto a mí, jamás me gloriaré sino en la cruzde nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundoestá crucificado para mí y yo para el mundo...Llevo en mi cuerpo las señales del Señor Jesús.

(Gál 6,14-17).

Cada uno expresa en su vida las huellas de la persona amada. El apóstol deja entrever la figura del crucificado. Hasta en su mismo cuerpo se notan los surcos de una vida gastada por la evangelización. Pablo había decidido vivir crucificado con Cristo (Gál 2,19). Los enamorados viven el uno para el otro, sin importarles demasiado las opiniones "ajenas". Hasta en el cuerpo de Pablo'se dejaba entrever la vida de Jesús (2 Cor 4,10).

55

Page 56: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

Crucificarse con Cristo equivale a liberarse de todo valor que no suene a evangelio. Es un proceso doloroso, porque supone mucha renuncia; es una ascética de toda la vida, porque el Señor pide siempre algún pequeño tesoro en el que teníamos puesto nuestro corazón. Pero este proceso produce, al mismo tiempo, el gozo de vivir para Cristo y para sus intereses. Se ha optado por un primer valor de la escala de valores y se quiere ser coherente.

Se camina hacia la hora del Padre, es decir, hacia los momentos en que la vida se ofrece totalmente y se gasta por el evangelio. La vida queda marcada, cicatrizada por esas cruces de todos los días, que llevan al gozo de una fecundidad presentida y vivida en la esperanza. El apóstol ya no sirve para otra cosa que no sea transparentar a Cristo. Si buscara otra cosa, ya haría el ridículo de verdad. Precisamente su identidad y su gozo es saber que ya no sirve para nada más que para amar y hacer amar al Señor.

61. Vivir y morir por CristoPara mí la vida es Cristo, y la muerte, ganancia...Por un lado, deseo morir para estar con Cristo;por otro, quisiera permanecer en la carne,que es más necesario para vosotros.

(Flp 1,21-24; cf Rom 14,8).

La vida y la muerte del apóstol, como la de todo cristiano, pertenecen a Cristo (Rom 14,8). Sería un contrasentido empeñarse en vivir solo y afrontar los problemas como francotirador. Es Cristo quien nos ha llamado y enviado, comunicándonos la misma misión recibida del Padre. Y es él quien nos acompaña a scll y a sombra. Sentir fervor o no sentirlo ante esta realidad es secundario; lo importante es la convicción y la decisión cristianas, que llamamos fe, esperanza y caridad.

El apóstol se alegra por el apostolado y por el éxito de otros hermanos. Hay que dejar hacer a los demás su propio cometido y saber encontrar el propio campo de misión; así desaparecerán las envidias y las competencias inútiles. El campo de apostolado es inmenso y no se puede permitir el lujo de perder tiempo en niñerías.

Para el cristiano, y especialmente para el apóstol, morir tiene sentido positivo: darse totalmente. Por esto la vida es una escuela en la que se aprende a realizarse amando. Es el "paso" a la verdadera vida, que es la vida de Dios Amor, participada de Cristo por medio de su Espíritu. Es la "pascua" o paso a las manos creadoras y redentoras de Dios en el modo, lugar y tiempo que él quiera. Es la ganancia de dar la vida para recuperarla definitivamente (Jn 10,17).

62. Sufrimiento como asociación esponsalAhora me alegro en mis padecimientos por vosotrosy suplo en mi carne lo que falta a las tribulacionesde Cristo por su Cuerpo, que es la Iglesia.

(Col 1,24).

Ser redimido por Cristo comporta ser asociado, como instrumento vivo, a su redención. Es correr la suerte del Señor, participando en sus sufrimientos, por el bien de toda la humanidad redimida, para que se vaya convirtiendo en Iglesia Cuerpo de Cristo. No se trata principalmente de explicaciones técnicas sobre el modo de como se puede

56

Page 57: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

"completar" la pasión de Cristo. Basta con aceptar la invitación del Señor: "¿Podéis beber el cáliz (o la copa de bodas) que yo be de beber?" (Mc 10,38). Es el "despo-sorio" con Cristo crucificado (Flp 3,10).

El sufrimiento del apóstol es siempre fecundo cuando se transforma en humildad, servicio y caridad. Sólo con una visión de fe se vislumbra la fecun-

didad sobrenatural del sacrificio, que casi siempre aparece como un fracaso inmediato. Así se llega al gozo pascual de la maternidad de la Iglesia (Jn 16,21-22; Gál 4,19). Todo ministerio y vocación, si se viven auténticamente, tienen esta característica de "via crucis". Así se acompaña a Cristo, que va a bodas o a realizar la alianza esponsal por medio de su muerte redentora.

Si la Iglesia es el "pleroma" o complemento de Cristo (Ef 1,23), el apóstol completa o prolonga la misión del Señor. Todo gesto cristiano, y especialmente todo gesto apostólico, es un acontecimiento eclesial, que recibe y comunica toda la dinámica de la "comunión de los santos". Es una corresponsabilidad con Cristo Redentor: "¡Oh cruz, hazme lugar, y recibe mi cuerpo, y deja el de mi Señor! ¡Ensánchate, corona, para que pueda yo ahí poner mi cabeza!" (san Juan de Avila). El Señor nos tiene cariñosamente de la mano en estos momentos difíciles, que a nosotros nos parecen golpes despiadados de un herrero. Ser Iglesia "cuerpo" de Cristo comporta una sintonía de desposorio con él, que es su cabeza, su esposo, su rey (Ef 1,22-23; 5,23; Col 1,18).

63 . Debi l i dad y fuerza de la c ruz

La doctrina de la cruz de Cristoes necedad para los que se pierden,pero es poder de Dios para los que se salvan. (1 Cor 1,18).

El evangelio sigue otra lógica que la de la eficacia y de las seguridades humanas. Una de las cruces más difíciles del apóstol es precisamente el seguimiento de esa lógica, que parece ridícula y que no se puede reducir a cálculos de computadora. Cuesta mucho ver una voluntad salvífica de Dios a través de personas, de actuaciones y de acontecimientos limitados y defectuosos. Así se va aprendiendo que la fuerza viene del Señor resucitado, que murió en cruz. Y con ello se aprende especialmente a depender esencial y amorosamente del Señor.

No sería bueno poner obstáculos a la cruz en el sentido de escapar o desanimarse. A veces nos encerramos en nuestros sentimientos de euforia o de desaliento. Los problemas deben afrontarse tal como son, y se les debe buscar una solución que no impida la donación de sí por el amor y el servicio. Al fin y al cabo, es siempre posible conseguir los intereses de Cristo, que son la gloria del Padre y la salvación de los hermanos. Entonces no necesitamos nada más. Sería una gran tentación, que se pagaría muy cara, la de empeñarse, por encima de todo, en la eficacia y en el fruto inmediato.

No se puede desvirtuar la cruz de Cristo, sobre todo en el momento de predicar el evangelio en una cultura y en una situación histórica concreta. La cruz debe aparecer con toda su trascendencia, como máxima manifestación de Dios Amor en Cristo. Es copa de bodas que produce la verdadera liberación. En la pobreza y debilidad de la cruz

57

Page 58: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

aparece la trascendencia de Dios Amor, que nos comunica su Espíritu para hacernos partícipes de la filiación divina de Jesús. No hay cruz verdadera sin Jesús, ni Jesús sin cruz.

64 . Proc lamar la muer te de Cr i s toYo he recibido del Señor lo que os he transmitido:que el Señor Jesús, en la noche en que fue entregado, tomó el pan y, después de dar gracias,lo partió y dijo:Esto es mi cuerpo, que se da por vosotros;haced esto en memoria mía.Y asimismo, despuésde cenar, tomó el cáliz, diciendo:Este es el cálizde la Nueva Alianza en mi sangre...Pues cuantas veces comáis este pan y bebáis este cálizanunciáis la muerte del Señor hasta que vuelva.

(1 Cor 11,23-26).

Toda la vida del apóstol, por ser vida de caridad pastoral, es una proclamación de la muerte del Señor, en una espera activa y responsable de la restauración de todas las cosas en él. Esta proclamación tiene lugar principalmente en la celebración eucarística. Después de haber anunciado el mensaje de Jesus, se hace presente el misterio y sacrificio de su muerte y resurrección para transformarlo en comunión y compromiso de vida.

Los signos de la muerte del Señor se hacen realidad en la vida del apóstol, especialmente por el hecho de sufrir amando y de servir dando la vida a "fondo perdido". Así se respeta y restaura el misterio. del hombre o de todo hermano por quien Cristo ha muerto.

Pablo, como todo apóstol que vive con autenticidad, no inventa el evangelio, sino que lo transmite con objetividad: todo el mensaje de Jesús, tal como es y para todos los hombres (1 Cor 15,3-5). El evangelio y la comunidad que es evangelizada no son un producto de laboratorio donde se pueda realizar todo tipo de experimento. Si los signos eclesiales de la comunidad no nacieran de la revelación, de la eucaristía y de la comunión universal, serían signos estériles. La comunidad nace de la palabra de Dios, predicada con integridad y objetividad, y de la eucaristía como fuente y cumbre de todos los trabajos apostólicos y de toda la vida de la Iglesia.

65. Víctima con Cristo

Os ruego, hermanos, por la misericordia de Dios,que ofrezcáis vuestros cuerposcomo hostia viva,

58

Page 59: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

santa, grata a Dios; éste es vuestro culto racional.Que no os conforméis a este mundo,sino que os transforméis por la renovaciónde la mente, para que sepáis discernir

cuál es la voluntad de Dios(Rom 12,1-2)

A veces nos perdemos en problemas de competencias y privilegios. El apóstol debe hacerse un eterno aprendiz de la inmolación pastoral por Cristo. La vida merece vivirse cuando se gasta sirviendo y amando según los planes de Dios Amor. Este es el único privilegio que vale la pena y que no suscita envidias ni ansias de dominio. Y de este privilegio hay que hacer partícipe a toda la comunidad.

El culto cristiano se basa en la inmolación de Cristo al Padre, movido por el Espíritu Santo. Participa más en el culto cristiano quien vive más esta realidad victimal de Cristo. Poder realizar este o aquel ministerio, de suyo no indica mayor partici-pación en la inmolación de Cristo. Lo importante es amar a Cristo devolviendo amor por amor. Y el ejercicio de este amor no reclama privilegios sobre los hermanos. Servir, sí; aprovecharse de las gracias y carismas para medrar, no.

Hay que hacerse "hostia viva" también en un ambiente secularizante. Quien quiere transformar su vida según el mandamiento del amor se convierte en luz y sal, que transforma la sociedad en oblación agradable a Dios. El altar es la voluntad del Padre. A cada hombre le llega la redención a precio de sangre (1 Cor 6,20). Es la sangre que derrama Cristo y, con él, su apóstol.

66 . Por Cri s to , hacia e l Padre

Cuantas promesas hay en Dios son en él "sí";y por él decimos amén para gloria de Dios.

(2 Cor 1,20).

Nuestra vida se hace sacrificio agradable al Padre cuando vivimos en unión con Cristo: "Por él ofrecemos continuamente a Dios sacrificio de alabanza" (Heb 13,15). El valor de nuestro quehacer cotidiano consiste en el don de sí a Dios y a los hermanos. El apóstol valora la eficacia de su apostolado con los mismos módulos del Buen Pastor. La tarea apostólica consiste en hacer posible que la comunidad cristiana sea un pueblo sacerdotal, como oblación agradable a Dios Amor (Ap 1,5-6).

La historia humana se construye y se transforma amando. Es un camino responsable para hacer que toda la creación y toda la comunidad humana diga "amén" ("sí") a los planes de Dios. Entonces la vida tiene sentido. El "sí" de Cristo Redentor al Padre se hace nuestro "sí". En él somos ya una misma oblación que queda impregnada del olor del Espíritu Santo o Espíritu de amor.

Nuestro "sí" sacrificial unido al de Cristo se dirige al Padre y abarca a todos los hermanos. Es un "sí" que enraíza en las circunstancias concretas y que continúa la creación y la obra redentora. No es un “si” superficial o de formulismos, ni menos un “si” de pasividad, sino un “si” de contemplación y de caridad, “en espíritu y en verdad” (Jn 4,23), que sale de lo más hondo del corazón. Es un “si” posible por parte de todo

59

Page 60: PABLO HOY - compartirencristo.files.wordpress.com€¦  · Web viewPABLO HOY. El anuncio apasionado del encuentro con Cristo. Juan Esquerda Bifet. Presentación. En toda época histórica,

apóstol, porque es Cristo quien lo pronuncia con nosotros. Es el “si” que agrada a Dios, como respuesta al “si” de su creación y de su obra salvífica.

67. Sintonizar con Cris to muerto y resucitado

Tened los mismos sentimientosque tuvo Cristo Jesús,quien, existiendo en forma de Dios...,se anonadó, tomando la forma de siervo,y... en la condición de hombre, se humilló,hecho obediente hasta la cruz,por lo cual Dios le exaltóy le otorgó un nombre sobre todo nombre.

(Fip 2,5-9).

Amor equivale a sintonía de criterios, sentimientos y quereres. La personalidad no se anula, sino que se realiza y enriquece cuando el apóstol se da a sí mismo. Todo lo que tiene y es se pone al servicio de Cristo. Ya no se buscan los propios intereses, sino los del Señor. Se busca servirle en cualquier hermano y en cualquier signo de Iglesia.

La "kénosis" o humillación de Cristo no es un adorno, sino un servicio ("diaconía") de todo su ser para hacer de toda la humanidad una comunión ("koinonía") o familia de hijos de Dios. Jesús vivió y sigue viviendo como propia la vida de cada persona humana. Sus "sentimientos" equivalen a un compromiso esponsal y a un amor de totalidad.

El apóstol ha empeñado toda su existencia en correr la suerte de Cristo o en beber su misma copa de bodas. Así participa en el diálogo de Cristo al Padre y en su donación total por la redención de todos. Con Cristo resucitado construye la nueva humanidad, basada en la lógica del amor. Así se realiza la gran "pascua" o paso de toda la humanidad hacia la restauración final en Cristo.

60