Qué son las dinámicas de grupo
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¿QUÉ SON LAS DINÁMICAS DE GRUPO?
Las dinámicas de grupo son herramientas empleadas en estos para tratar
determinados temas, de forma que los miembros puedan trabajar y sacar
conclusiones de forma práctica y amena, en la mayor arte de los casos. Se
emplean para aspectos muy diversos, pero son de gran utilidad en temas
que sean engorrosos de tratar. Por tanto, son medios, pero no fines en sí
mismos.
Su empleo es más sencillo en ambientes cordiales, en los que predomine
las ganas de aprender del compañero. Las dinámicas se basan en el trabajo
voluntario (nunca forzar la participación) y la conciencia de GRUPO.
Con las dinámicas de grupo de busca simplicidad y entretenimiento a la
hora de trabajar un tema. Esta claridad ha de mantenerse durante toda la
actividad para evitar que el tema principal se desvíe, perdiendo el sentido
la dinámica empleada. Para ello, el coordinador, o en otro caso quien
conduzca la dinámica, ha de conocerla muy bien (así como posibles
variantes, a emplear según se desarrollo), así como saberla utilizar y
desarrollar oportunamente. Siempre deben dirigirse al logro de un objetivo
concreto.
Se pueden definir las Dinámicas para Grupos como el intento de lograr una
experiencia de aprendizaje total en el que el saber y la teoría están
conjuntados con la experiencia y la práctica.
No solo influye el logro de un objetivo concreto y el momento en que
desarrollar una determinada dinámica, sino que hay que tener muy claro
que no todas las técnicas son válidas para todos los grupos. Podríamos
establecer una clasificación de las dinámicas de grupo en función de los
siguientes condicionantes:
los objetivos perseguidos.- gran variedad de dinámicas, como veremos
en este curso y los siguientes.
la madurez del grupo.- para los grupos de reciente constitución hay que
emplear dinámicas sencillas, mientras que en grupos más entrenados
(acostumbrados al uso de dinámicas) se pueden emplear técnicas más
complejas.
el tamaño del grupo.- muy importante considerar esto, ya que será más
fácil encontrar el consenso en las conclusiones de un grupo pequeño.
También es importante que el conductor sepa mantener la intensidad de la
dinámica en todo momento, algo especialmente difícil en grupos grandes,
que tienden a la distracción.
el entorno.- como en todo en la vida, el entorno condiciona la realización
de una dinámica. Espacio interno o externo, materiales necesarios,
meteorología (en su caso), tiempo necesario (evitar recortes o alargues de
tiempo que no aporten nada),... son aspectos a considerar por el conductor
de la dinámica durante la preparación de la misma.
las características de los miembros del grupo.- edades, intereses,
experiencias, capacidades, posibilidades, atención, madurez,...
la capacidad del conductor de la dinámica.
EL USO DEL JUEGO EN LAS ACTIVIDADES DE GRUPO
En el funcionamiento diario de un grupo es muy importante la realización
de juegos. Estos pueden tener o no fines concretos, pero nos centramos en
este momento en el juego como herramienta para el grupo, como antes
hemos hablado de las dinámicas.
Un buen momento para realizar un juego es al iniciar la actividad del día
(por ejemplo, una dinámica de grupo) ya que sirve para concentrar al
grupo e ir entrando en situación. De esta manera ya se está realizando una
labor en común, que facilitará la motivación de todos para continuar la
actividad. Además de para divertirse y relajarse entre actividades, el juego
tiene la función de reflejo de situaciones reales, que bien podríamos
emplear durante la actividad.
Pero el encargado de realizar el juego debe tener en cuenta una serie de
factores que lo condicionan, como el número de participantes, sus
respectivas edades y capacidad de entendimiento, su seguridad, las
condiciones climáticas, el lugar y materiales disponibles así como los
juegos anteriores que haya realizado el grupo, lo que le permitirá un nivel
más alto o más bajo.
También debe ser creativo (lo que desarrollarán también los miembros del
grupo) para no repetir los juegos a lo largo de varias sesiones, para, de esta
forma, mantener la atención e intensidad de todos los miembros. Dos
últimas consideraciones: 1) adecuado uso de juegos cooperativos, para que
los que pierdan no se sientan desplazados, y 2) atención a la finalización
del juego para no extenderlo en demasía para así mantener el interés para
la próxima ocasión.
Clasificación de las dinámicas de grupos
- DINÁMICAS Y JUEGOS DE PRESENTACIÓN. Esta serie de actividades es
tremendamente útil cuando se está formando un nuevo grupo o bien
cuando un nuevo miembro da los primeros pasos para incorporarse al
mismo. Estas actividades pueden desarrollarse tanto en un espacio interno
(salón, habitación,...) como externo (campo, patio, playa,...) en función de
los objetivos del grupo y de los condicionantes de la propia actividad.
En primer lugar, el NOMBRE del juego o dinámica que corresponda,
seguido de los OBJETIVOS que se persigan con su realización. Junto a esto
haremos mención a la EDAD (si es necesario) así como a los MATERIALES
necesarios para su desarrollo. El DESARROLLO del juego o técnica y sus
VARIANTES (si las hay) serán los últimos aspectos a considerar, si bien la
propia actividad podría motivar la incorporación de nuevos
condicionantes. Los materiales tendrán su propia descripción si es
necesario. Además se incorporarán fotografías que faciliten la comprensión
de los materiales a emplear así como el desarrollo de la propia actividad.
Por ejemplo: Dinámica LA AUTOPRESENTACIÓN
Es una dinámica sencilla con la que los miembros del grupo conocerán los
nombres de sus compañeros. Puede realizarse en un espacio cerrado o
abierto, y ayudará a que el grupo pueda superar los primeros momentos de
inquietud por no conocer al resto de compañeros. Es muy importante el
papel del coordinador para dar dinamismo a la actividad, fomentando la
participación de los miembros. Aplicable a grupos que tienen su primer
contacto.
OBJETIVOS.- Que los miembros del grupo conozcan los nombres de sus
compañeros.
MATERIALES NECESARIOS.- Pizarra o panel sobre el que escribir, tizas o
rotuladores (en función de la pizarra o panel) y sillas, tantas como
miembros del grupo.
EDAD.- Cualquiera.
DESARROLLO.- Los miembros del grupo, sentados en semicírculo, se
levantarán hasta la pizarra o panel, donde escribirán su nombre. Tras esto,
comentarán aspectos varios de su vida, como la edad, lugar de nacimiento,
hobbies,... Aunque ya se haya presentado con anterioridad, el coordinador
será el primero en realizar la actividad, marcando la pauta de lo que irá
diciendo cada miembro del grupo. Sería conveniente seguir el orden en el
que los miembros estén sentados, ya que la timidez podría eternizar la
actividad si el orden de salida es voluntario.
VARIANTES.- No necesariamente hace falta la pizarra o el panel y
levantarse, sino que se puede realizar una rueda estando el grupo sentado
en círculo. También puede hacerse de pie, lo que da intensidad al ejercicio.
OTRAS CONSIDERACIONES.- Es una actividad recomendada para grupos
no excesivamente grandes (no más de 15 personas), ya que en grupos
grandes puede resultar muy pesada.
Otro ejemplo: ¿CONOCES A TUS VECINOS?
Es un juego clásico y muy conocido entre los animadores de grupos de
pequeña edad. Es muy útil para niños que tienen su primer contacto, y es
que pese a ser muy sencillo les resulta muy divertido. No necesita mucho
tiempo.
OBJETIVOS.- Que los miembros del grupo conozcan los nombres de sus
compañeros.
MATERIALES NECESARIOS.- Sillas. El número necesario es el de los
componentes del grupo menos una.
EDAD.- hasta 10 años.
DESARROLLO.- Los componentes del grupo se sientan en círculo en las
sillas dispuestas; todos, a excepción de uno, que queda de pie en el centro.
El que está en el centro, que en un primer momento sería conveniente que
fuera el coordinador para explicar la dinámica del juego, se dirigirá a uno
de los miembros preguntándole: “¿Cómo se llaman tus vecinos? ¿Te gustan
tus vecinos?” El preguntado tendrá que responder el nombre de los que
están sentados a su lado, de forma que si no responde correctamente
pasará a ocupar el lugar del centro. En caso de responder correctamente
(“mis vecinos se llaman Isaac y Noelia”, por ejemplo) seguirá diciendo: “sí,
CONOZCO mis vecinos, pero también me gustaría CONOCER A Daniel y
María José” (haciendo referencia a otros dos miembros del grupo). En este
momento, Daniel y María José tienen que ocupar los lugares de Isaac y
Noelia, y también el que está en el centro tratará de situarse como vecino
del que ha preguntado, por lo que Daniel o María José quedarán sin sitio y
ocuparán el lugar del centro.
El que queda en centro, bien porque no haya acertado con el nombre de
sus vecinos o porque se ha quedado sin sitio se dirigirá a otro miembro del
grupo haciéndole las mismas preguntas (“¿Cómo se llaman tus vecinos?
¿Te gustan tus vecinos?”) continuando así la dinámica del juego
VARIANTES.- Una vez que el niño responde y acierta con sus vecinos, en
lugar de decir “sí, me gustan mis vecinos, pero también me gustaría que
fueran Daniel y María José” podría decir “sí, me gustan mis vecinos, pero
quiero conocer a más vecinos”, momento en el que todos los miembros del
grupo tendrían que cambiar de sitio, quedando en el centro el que no haya
encontrado una silla libre.
DINÁMICAS DE INTEGRACIÓN
Son la herramienta a emplear por todo coordinador de grupo cuando
persigue el objetivo de la unión del mismo. Igualmente se emplean en caso
de conflictos, para que los miembros superen el problema y vuelvan a
trabajar juntos.
Pero principalmente deben emplearse en las fases de nacimiento-
crecimiento del grupo. Sirven para coger confianza, para relajar tensiones
propias de miembros que apenas se conocen, para integrar a nuevos
compañeros, o simplemente, para crear el ambiente adecuado de trabajo.
Persigue el objetivo principal de la cohesión del grupo, pero sin dejar de
lado otros, como podrían ser:
- Fomentar relaciones de amistad entre los miembros del grupo en sus
primeros momentos.
- Sacar a relucir los intereses del grupo y de cada uno de sus miembros en
particular, información con la que el animador guiará al grupo en su
quehacer diario.
- Crear buen ambiente en el grupo, en base a valores como la cooperación,
confianza y participación de sus miembros.
- Generar auto confianza (tanto individual como de grupo) en todos los
componentes del grupo.
Trabajo en equipo. POR EJEMPLO:
TERMINAR LA HISTORIA
OBJETIVOS.- Fomentar trabajo en equipo, la creatividad y la participación.
MATERIALES NECESARIOS.- Sillas.
EDAD.- Cualquiera.
DESARROLLO.- El animador divide el grupo en equipos con el mismo
número de personas, que habrán de reunirse en lugares distintos dentro
del espacio (interior o exterior) en el que se desarrolla la dinámica. Luego
empezará a contar una historia a los equipos, que tienen la misión de
terminarla, en función del sentido final que quiera otorgarle el animador a
la historia. El equipo que antes lo haga tendrá que exponerlo en común al
resto del grupo.
La historia podría empezar: “Una tarde unos amigos se reunieron para
merendar, y uno de ellos propuso que se fueran juntos a disfrutar de unas
vacaciones. Comenzaron a discutir sobre el destino y el precio del viaje.
Entonces...” En este momento el animador informa a los equipos que la
historia debe tener un final feliz. Los equipos se reúnen y el que primero
termine, expone. Finalmente, el animador irá preguntando a los
componentes de los equipos que tal se han sentido con sus compañeros, si
lo han conocido más, si coinciden en sus pensamientos, si podría
extrapolarse el comportamiento del equipo al grupo,...
VARIANTES.- La historia puede ser cualquiera que se invente el animador,
así como los finales que proponga: feliz, triste, sorprendente, sin sentido,...
CONSIDERACIONES.- La dinámica puede repetirse en varias ocasiones, y el
monitor debe hacer que expongan todos los equipos formados ante sus
compañeros.
AMIGO SECRETO
OBJETIVOS.- Establecer relaciones entre los miembros del grupo.
MATERIALES NECESARIOS.- Una cesta y tarjetas con los nombres de los
participantes.
EDAD.- Cualquiera.
DESARROLLO.- Los miembros vivirán una experiencia de integración. De la
canasta sacarán la tarjeta que tendrá el nombre de su “amigo secreto”. En
caso de sacar la tarjeta con su mismo nombre volverá a meterla en el cesto
y sacar otra. Por supuesto, es fundamental que durante el tiempo que dura
la dinámica los participantes no digan a nadie quien es su amigo secreto.
Durante el tiempo de duración de la dinámica, que el animador debe dejar
muy claro a los participantes, cada uno de ellos tendrá que relacionarse
especialmente con su amigo secreto, sin decirle que es él, y así se
comprobará la actitud de ambos, su forma de ser,... Una vez que se da por
concluida la dinámica, los miembros se sientan en círculo, y uno de ellos
acude voluntariamente al centro del mismo. Se le tapan los ojos, y debe
acertar con su amigo secreto (que se pondrá detrás de él), para lo que tiene
dos oportunidades. Ambos comentarán su experiencia ante los
compañeros. A continuación, la persona identificada se tapa los ojos y debe
reconocer a su amigo secreto. Y así sucesivamente.
CONSIDERACIONES.- Su duración depende del contexto en el que se mueva
el grupo. Así podría ir desde un día (en convivencias de día o aperturas del
curso) hasta un mes (en grupos de reuniones constantes, o mismamente
clases).
DINÁMICAS DE COMUNICACIÓN: Permiten fomentar y facilitar la
comunicación y el entendimiento entre los miembros del grupo.
VEO POR TUS OJOS, DIBUJO POR TUS PALABRAS
OBJETIVOS.- Facilitar la comunicación y el entendimiento entre los
miembros del grupo.
MATERIALES NECESARIOS.- Papel, y lápiz, tantos como participantes. Es
conveniente contar con soportes en los que puedan apoyarse los miembros
que dibujan.
EDAD.- Cualquiera
DESARROLLO.- El animador seleccionará a uno de los miembros del grupo,
al que entregará una plantilla como las que se muestran en los siguientes
gráficos. Este se pondrá de cara a sus compañeros, a los que explicará la
composición de las figuras geométricas tal como aparecen en la plantilla.
Tendrá que explicarse muy bien para ser entendido por sus compañeros.
Una vez que todos los miembros completen el dibujo correctamente, otro
miembro ocupará su lugar y recibirá una nueva plantilla del animador.
VARIANTES.- El animador puede preparar tantas plantillas como se le
ocurra. Otra variante está en que los miembros compongan el dibujo con
formas de cartón, papel o cartulina, que les permita probar más fácilmente
la situación de las figuras.
CONSIDERACIONES.- La opción de las formas de las figuras en algún
soporte es interesante para grupos de edades pequeñas, a los que no deben
complicarse las figuras ni la relación de estas. En este caso serían
necesarios los materiales con los que se hagan las figuras, como podrían
ser cartón, cartulina, papel de colores y tijeras. No alargar el juego.
Introducción
La teoría de campo o de la dinámica de grupos tienen su origen en los
trabajos del psicólogo prusiano Kurt Lewin (1890-1947), que se ocupó del
estudio de los pequeños grupos humanos y de la dinámica que se
desarrolla en ellos.
Aun cuando el término "Dinámica de Grupos" se ha empleado para hacer
referencia a un conjunto de técnicas y métodos aplicables a los individuos y
a los grupos sociales, la acepción que asumimos en este trabajo, mucho
más amplia que esta, comprende los fenómenos de naturaleza psicosocial
que se producen en los grupos humanos y las leyes que rigen dichos
fenómenos.
Así la dinámica de grupos, tiene como objeto de estudio los grupos
humanos, para lo que utiliza instrumentos diversos propios de disciplinas
tales como la Psicología Social, la Sociología, la Antropología, la Pedagogía,
etc. Como disciplina científica se fundamenta en la formulación de
hipótesis y en la construcción de teorías y principios generales que
permiten la observación, análisis, contraste y universalización de los
fenómenos que se desarrollan en los grupos humanos. Esta ciencia se
ocupa de manifestaciones tales como el liderazgo y sus distintos estilos, el
clima y cohesión de los grupos, su dinámica y evolución, y tiene aplicación
en campos tan variados como la la salud, la económica, la política, la
promoción social, etc., entre los que ocupa un lugar destacado la educación.
En el seno de esta ciencia han surgido distintas perspectivas de estudio que
han estudiado los fenómenos psicosociales que tienen lugar en los grupos
desde ángulos diversos:
Perspectiva interaccional.- Centra su interés en las fuerzas que se
manifiestan entre los integrantes del grupo, en un contexto y lugar
determinados, con el objetivo de mejorar las interacciones que tienen
lugar. Para ello se aprovechan los mecanismos de feed-back. Sus
principales representantes son el propi Kurt Lewin y sus discípulos de
Bethel.
Perspectiva psicoanalítica.- Su principal interés se encuentra en las
fuerzas psicológicas que aporta cada integrante del grupo, las cuales sufren
modificaciones como consecuencia de la interacción grupal. Se concibe al
grupo y a sus miembros como representaciones mentales que existen en la
mente de los sujetos, de modo qaue su finalidad es la de poner de
manifiesto y hacer conscientes a los sujetos de dichas representaciones.
Los autores más representativos de esta corriente se integran en la escuela
de Tavistock.
Perspectiva humanista.- Atiende a las oportunidades de crecimiento
personal que la interacción grupal aporta a los miembros del grupo, de
modo que su interés estará en potenciar cualquier tipo de interacción que
pueda surgir en el seno del grupo. Su máximo represenante es Carl Rogers.
Importancia de la dinámica de grupos para la educación.
La importancia de la dinámica de grupos en cualquier nivel educativo viene
dada por constituir una herramienta que permite al docente, a través de las
técnicas grupales, canalizar y orientar los fenómenos que tienen lugar en la
clase en favor de un resultado educativo óptimo. No obstante, es necesario
señalar que se trata de un método más al servicio del docente, de manera
que su uso ha de adaptarse a cada circunstancia, a cada gupo de estudio, a
cada nivel, etc. A este respecto hay que tener presente que las técnicas
grupales:
1.- Son medios útiles para el proceso de comunicación que ha de tener
lugar en el aula. Nunca son un fin en sí mismas.
2.- No todas las técnicas son útiles para todos los objetivos educativos.
3.- Son instrumentos que hay que saber utilizar y como tales, no operan
por sí mismos, viniendo dado su valor y su eficacia por la creatividad del
docente que las utilice.
4.- Estas técnicas no son un juego, aun cuando deban realizarse bajo ciertas
condiciones que las hacen parecer como tal.
Las técnicas de grupos son útiles para:
1.- Dar profundidad y seriedad a la actividad docente, por cuanto que
facilitan la reflexión sistemática del grupo.
2.- Constituyen un medio para fomenter unas relaciones más estrechas ,
desarrollando actitudes de cooperación y estableciendo lazos emocionales
entre los miembros del grupo.
3.- Ayudan a superar el estacamiento de la dinámica interna de un grupo.
4.- Facilitan la búsqueda de soluciones a los problemas, la resolución de
conflictos internos del grupo, la integración y comunicación intragupal, el
desarrollo del sentido crítico y hacen más efectivo el trabajo en grupo.
Tipologías de la interacción grupal
Lewin y su discípulo Deutsch describen tres modelos de interacción grupal
de los estudiantes:
1.- La de aquellos que plantean el curso de acción como una competición en
la que se dilucida quien es el mejor.
2.- La de quienes trabajan individualmente sin prestar atención ni mostrar
interés por el trabajo de los demás.
3.- La de los estudiantes que ensayan fórmulas de interacción cooperativas
mediante las que muestran tanto interés en el trabajo propio como en el de
los demás.
Los tres estilos de interacción que acabamos de describir se van a ver
potenciados o limitados en función de la naturaleza del grupo en que los
sujetos se integran, y del escenario social que en ellos se propicia.
Grupos competitivos.- Los grupos competitivos producen un escenario
social en el que se fomentan los comportamientos propios del primero de
los estilos de interacción que hemos descrito. El éxito de un miembro del
grupo vendrá dado por el fracaso del resto de sus integrantes.
Grupos individualistas.- En estos grupos se propician interacciones como la
antes descrita en segundo lugar. En los escenarios individualistas las
posibilidades de éxito de un determinado individuo no entran en colisión
con las expectativas de logro del resto de los integrantes del grupo, ni se
ven incrementadas por éstas. Cada individuo recibirá unos resultados que
dependen en exclusiva de la calidad de su acción, de su trabajo. Esta
situación es la que se propicia la enseñanza universitaria que se
fundamenta en la lección magistral como única estrategia metodológica y
que utiliza como instrumento único de evaluación el trabajo personal del
alumno.
Grupos cooperativos.- Cuando el escenario social en que se desenvuelve el
grupo determina que las consecuciones alcanzadas por un determinado
miembro estén en función de que los demás también alcancen sus
objetivos, estamos ante un grupo de tipo cooperativo, en el que se
fomentan las interacciones descritas con anterioridad en tercer lugar.
Las técnicas grupales tienen la finalidad de fomentar las interacciones
cooperativas entre los miembros del grupo, las cuales, desde el punto de
vista educativo, tienen evidentes ventajas sobre las otras dos formas de
interacción: Permite la confrontación de diferentes puntos de vista,
generando un clima de aceptación y respeto mútuo.
Estilos de liderazgo
Una cuestión de importancia capital en las teorías de la dinámica de
grupos, es el análisis de los distintos estilos de liderazgo que pueden
ejercerse en los grupos y los efectos que sobre la dinámica interna de estos
tiene cada uno de ellos.
Al respecto es necesario indicar en primer lugar, que en la mayoría de los
grupos sociales existe un líder formal, que generalmente es investido como
tal por un agente externo al grupo. Así, por ejemplo, en la industria, son los
jefes de equipo, designados por la dirección, quienes desempeñan este
papel; en educación, es el profesor, quien ha sido nombrado para tal fin por
la dirección de la institución educativa.
En los grupos también están presentes líderes informales, que por sus
conocimientos o caracteríticas personales, son miembros del grupo que
ejercen una notable influencia sobre los demás. El liderazgo informal surge
a partir de las caracteríticas personales de los miembros del grupo y de los
modos de interacción que ponen en práctica. Este tipo de liderazgo
constituye una propiedad que se distribuye entre los miembros del grupo
de una forma variable, en función de las variables que determinan la
actividad del grupo: naturaleza de las tareas a desempeñar, estados de
ánimo de cada cual, influencia del líder informal, etc.
Conviene aquí detenernos a analizar en mayor profundidad la situación de
la díada liderazgo formal/liderazgo informal, que se da en los grupos de
enseñanza universitaria. Como acabamos de indicar, el profesor es, a
proiri, un lider formal, por cuanto que su posición de líder viene dada
desde fuera del grupo. Es más, la organización de la enseñanza
universitaria impone a cada grupo de clase un abanico de líderes formales
tan amplio como el de asignaturas que componen el currículum académico.
En esta situación, el papel de liderazgo que ha de representar cada
profesor ha de tener en cuenta necesariamente las relaciones de poder que
se dan en el seno del grupo, tratando de aprovechar a fondo las cualidades
de los líderes informales que pudieran existir. Pretender usurpar a estos
líderes, es, en la mayoría de casos, una empresa imposible debido a una
serie de factores que se resumen en la posición de elemento externo al
grupo con que es generalmente percibido el profesor desde el grupo.
Esta tarea de facilitación de los aprendizajes y de los logros del grupo con
la mediación y la colaboración de sus líderes naturales, requiere que el
profesorado asuma la función de coordinar y estructurar la actividad del
grupo con relación a la consecución de los objetivos formativos definidos
para su disciplina. Para ello ha de ejercer las siguientes funciones
(Beauchamp, Graveline y Quiviger, 1985):
Ayudar al grupo a realizar lo decidido y a evaluar lo realizado.
Procurar que el grupo mantenga la fidelidad a los objetivos que han sido
propuestos y a la organización que para ello se ha establecido.
Garantizar la cohesión entre los miembros del grupo.
Animar al gupo durante el desarrollo de las diferentes tareas.
Motivar a los miembros del grupo para que progresen.
Pasando ya al análisis de los distintos tipos de liderazgo que pueden ser
ejercicios por el profesorado desde su posición de guía informal, hemos de
expresar que las teorías de la dinámica de grupos identifican tres estilos de
liderazgo, los cuales generan otras tantas estructuras grupales:
Estilo autoritario o autocrático.- La estructura de funcionamiento de los
grupos sometidos a este tipo de liderazgo suele estar controlada por un
individuo o por un reducido grupo de sujetos que adoptan las decisiones
relativas al grupo sin contar con los demás. Existe poca comunicación entre
los miembros del grupo y se genera un clima de excesiva irritabilidad,
hostilidad y agresividad, que en muchas ocasiones deriva hacia
determinados miembros del grupo sobre los que se descargan las
tensiones. Son grupos que pueden parecer eficaces, pero que en realidad
abocan a la mayoría de sus miembros a mantener una actitud pasiva y poco
o nada crítica .
Estilo permisivo o liberal.- Se situa en el polo opuesto al que acabamos de
describir. El líder no ejerce prácticamente ningún control sobre el grupo,
de modo que se generan en su seno una dinámica de funcionamiento
fraccionada en función de las distintas tendencias, opiniones y pareceres
que existan en el grupo. Adquieren especial protagonismo los líderes
naturales,corriéndose el riesgo de que éstos impongan los objetivos al
grupo y los procedimientos y actividades para conseguirlos. Se genera un
clima de ineficacia, en el que predomina la impresión de frustración y
pérdida de tiempo y en el que salvo los líderes naturales, los miembros del
grupo mantienen una actitud pasiva tendente al mínimo esfuerzo.
Estilo participativo o democrático.- El líder participativo o democrático
propicia una estructura de funcionamiento en la que facilita al grupo la
definición de sus objetivos y la elección de las estrategias y medios para
conseguirlos, manteniéndolo enérgicamene fiel a dichas decisiones. El
trabajo se produce en equipo y se genera un clima de gran cohesión y
participación en la actividad del grupo, en el que abundan las
comunicaciones en todos los sentidos. El grupo es realmente eficaz,
proporcionando a sus miembros un verdadero enriquecimiento personal.
El estilo de liderazgo a utilizar con un determinado grupo está
condicionado por el contexto externo e interno del grupo en cuestión. En
situaciones en las que prima la eficacia y el rendimiento a corto plazo,
como es por ejemplo el caso de la industria, quizás sea el estilo autoritario
el más adecuado, lo que va en un detrimento evidente de las posibilidades
de desarrollo de los integrantes del grupo. En situaciones en las que, como
la educación, se persigue el crecimiento y el desarrollo del grupo y sus
miembros, es más adecuado el estilo participativo o democrático, aún
cuando su puesta en práctica pueda parecer inicialmente ineficaz; su
verdadero valor se aprecia a largo plazo.
Técnicas grupales
De la investigación realizada en el ámbito científico de la dinámica de
grupos se deduce un un cuerpo de técnicas útiles para perfeccionar la
acción de los grupos y para facilitar la consecución de sus objetivos. Estas
técnicas constituyen procedimientos contrastados científicamente y
suficientemente probados en la práctica. En nuestro trabajo vamos a
ofrecer una representación reducida de las distintas categorías de técnicas
grupales, de entre las que prestaremos atención a las que consideramos
que tienen una aplicación más efectiva en el ámbito de la enseñanza
universitaria en general. En la bibliografía al final de este texto se ofrecen
varias obras que proporcionan un amplísimo catálogo de técnicas.
La elección de la técnica más adecuada a cada elección ha de venir dada
bajo la consideración de un conjunto de criterios:
En primer lugar, la aplicación de una determinada técnica grupal ha de
estar en función de los objetivos perseguidos. Se hace necesario por tanto
delimitar y definir los objetivos instructivos y, en función de éstos,
seleccionar la/a técnica/s más adecuada/s.
Un segundo elemento a tener en cuenta es las características (edad,
composición, , intereses, etc.) del grupo al que irá dirigida la técnica,
especialmente la experiencia del grupo en el uso de técnicas grupales.
Obviamente, en el caso de grupos con poca práctica habrá que introducir
inicialmente técnicas que no encierren gran complejidad, aumentando el
grado de ésta conforme el grupo gana experiencia.
Otro factor lo constituye el tamaño del grupo, ya que los comportamientos
son muy distintos en el caso de grupos grandes y pequeños. Como
veremos, existen técnicas que son bastante adecuadas para su aplicación a
los grandes grupos; no obstante, es preferible, en la medida de lo posible, la
aplicación de técnicas que fragmenten el grupo en subgrupos de trabajo.
Ahora bien, hay que tener presente que la fragmentación de un grupo
grande no nos va a permitir aplicar cualquier técnica.
El cuarto elemento a considerar es el ambiente físico en que se
desenvolverá el grupo durante la aplicación de la técnica. A este respecto
hemos de indicar que en la mayoría de los casos las aulas universitarias
cuentan con un diseño realizado bajo los presupuestos organizativos que
se derivan de la lección magistral. Ello dificulta en gran medida la
aplicación de determinadas técnicas y dinámicas grupales, especialmente
aquellas en que los miembros del grupo han de interactuar cara a cara.
El último elemento a considerar es la experiencia y la capacidad de quien
ha de aplicar la técnica.
Son diversas las clasificaciones que se han realizado de las técnicas
grupales, atendiendo a diversos criterios. En nuestro caso vamos a
proponer una clasificación que se establece atendiendo a la finalidad que
tiene cada técnica. Así, distinguiremos entre técnicas de presentación,
mantenimiento, producción y evaluación.
Técnicas de presentación.- Estas técnicas tienen la finalidad, de una parte,
de implicar al grupo en la tarea a la que se enfrenta y, de otra, de facilitar el
conocimiento de los miembros del grupo, el establecimiento de lazos
afectivos y la cohesión grupal.
El paseo
Presentación por parejas
¿Quién es quién? La telaraña
Técnicas de mantenimiento.- Las curvas de motivación y atención típicas
de un grupo definen momentos en los que los niveles de atención y
motivación son mayores. Las técnicas de mantenimiento tienen un doble
objetivo: alcanzar el grado máximo de atención y motivación, y mantenerlo
durante el máximo de tiempo.
La noticia
Frases desordenadas
Técnicas de producción.- El fin de estas técnicas es aprovechar al máximo
la capacidad de trabajo que todo grupo encierra, mediate una adecuada
organización de las tareas en función de los objetivos propuestos.
El foro
Mesa redonda
El panel Debate
Phillips 66 Cuchicheo
Simposio Torbellino de ideas
Estudio de casos Paull
Técnicas de evaluación.- En determinados momentos conviene que los
grupos se detengan con el objetivo de analizar su funcionamiento y evaluar
si es necesario realizar algún cambio. A ello contribuyen este tipo de
técnicas, que permiten enfocar la atención del grupo a dos aspectos
esenciales: el proceso grupal, es decir, sus modos de funcionamiento y las
relaciones que se establecen entre los miembros del grupo, y el nivel de
logro, o grado en que han sido alcanzados los objetivos marcados.
Referencias bibliográficas
ANDREOLA, B. (1984): Dinámica de grupo. Bilbao: Sal Terrae.
ANTONS, Klaus (1990): Práctica de la dinámica de grupos. Ejercicios y
técnicas. Barcelona: Herder.
BEAUCHAMP, A.; GRAVALINE, R. y QUIVIGER, C. (1977): Cómo animar un
grupo. Bilbao: Sal Terrae.
CANTO ORTIZ, J.M. (2000): Dinámica de grupos: Aspectos técnicos,
ámbitos de intervención y fundamentos teóricos. Málaga: Aljibe.
DAVIDOFF, L. (1994): Introducción a la psicología. Madrid: McGraw-Hill.
FRANCIA, A. y MATA, J. (1996): Dinámica y técnicas de grupo. Madrid: CCS.