R E C U E R D O S Era un atardecer caluroso de verano, víspera de nuestras fiestas de la Cinta. Estábamos varios amigos en la terraza de un café, disfrutando de la poca brisa que corría y comentando los temas políticos, sociales, culturales y deportivos de nuestra Ciudad como es normal y corriente en cada tertulia de amigos, donde tampoco faltaban las clásicas “chafarderias” propias de un colectivo, en el que, como es sabido, la mitad se burla de la otra mitad. De repente, entre la gente que transitaba por allí, observé el paso de un señor, en solitario, que me dejó perplejo al recordar su fisonomía pero sin encajar a quien pertenecía ese rostro. Nunca he sido un gran fisonomista. Más bien al contrario, pero aquella cara me recordaba algo en la lejanía del tiempo. No me cuadraba bien. Cuando, al cabo de un rato, volvió a pasar, lo comente´con mis compañeros y ninguno supo darme razón del personaje en cuestión. Más bien al contrario. Me indicaron que no le habían visto nunca. Como sea que no volvió a pasar, la cuestión quedó en el olvido y no se comentó más. . Por la noche, al acostarme, siguiendo una tradicional costumbre de recordar los sucesos del día y las previsiones del día siguiente, en plan agenda, volvió a la memoria la visión del personaje y con más calma, fui recordando su fisonomía hasta dar con su identidad, con absoluta certeza. Se llamaba, se llama, Ricardo L.C. y faltaba de Tortosa hacia aproximadamente unos 50 años. Había marchado al extranjero y yo personalmente no lo había visto más. Después de su marcha nos carteamos con mucha insistencia al principio, como siempre sucede y más pausadamente después hasta llegar al olvido total, como también sucede casi siempre. Creo que nuestras últimas misivas coincidieron con el anuncio de nuestros respectivos casamientos, allá por la década de los 50. A partir de allí, el silencio. Al día siguiente, llamé a su casa y efectivamente se confirmó mi intuición. Concertamos una primera entrevista y él también me reconoció enseguida pese a que nuestras figuras habían dejado de ser lo estilizadas que eran en la época que él se marchó. Un abrazo intenso, natural, después de tantos años y a continuación un alud de preguntas por ambas partes salidas de nuestras gargantas y de nuestros corazones. ¿Cuantos hijos y nietos tienes? ¿Qué ha sido de fulano o de mengano? ¿Piensas quedarte aquí? ¿Te has traído la familia?. etc. etc. .... Todo fue apaciguándose y con la calma precisa, fuimos informándonos mutuamente de nuestras vidas, en lo más fundamental, durante todo este período de tiempo, que por otro lado, es casi una vida. Resultó que venia sólo por una temporada para ver lo que le quedaba de familia; amistades y hacer un pequeño recorrido por los lugares que le habian visto nacer y crecer. Como teníamos tiempo, quedamos citados por las tardes para ir viendo cosas en común, charlar sobre personajes, situaciones y sobre todo, de nuestra Tortosa a la que él había encontrado tan distinta. Así lo hicimos y a partir de ese momento cada encuentro , era una nube de RECUERDOS..... más RECUERDOS...... más RECUERDOS Empezamos nuestros paseos por el Parque de Teodoro González, al que no encontraba cambios sensibles en su conjunto. El lago con los peces, la Lonja, el paseo central, los cambios en el paseo llamado entonces de las bicicletas, etc. Tuve que explicarle el empleo de la Nau al tiempo que me enorgullecía dándole los datos de las últimas Ferias de Muestras y deI esplendor y categoría que tiene en estos momentos. De repente. ¡ Enrique! Ya no debe estar de Alcalde el Sr. Albacar verdad?. Ricardo, por favor. Sitúate en la realidad del tiempo. Don Esteban Albacar Ferrando, un gran Alcalde, murió hace muchos años. Igual que D. Andrés Celma, Secretario del Ayuntamiento; D.

Agustín Barlett, Arquitecto Municipal , D. Mariano Lleixá Asensio, Aparejador .y un sinfín de concejales y funcionarios, cosa muy natural teniendo en cuenta los años transcurridos. Para mi, Ricardo, el Sr. Albacar fue un gran Alcalde. Le correspondió sanear y reconstruir la Ciudad, arrasada por los bombardeos de nuestra guerra civil Tuvieron que reconstruirse casi todos los servicios públicos como alcantarillado, redes de agua potables, redes eléctricas, pavimentos, aceras.etc. etc. Fue el impulsor del Estadio Municipal, que por cierto y según mi modesta opinión, debería llevar su nombre. Posteriormente urbanizó Ferrerías, comprando previamente el Ayuntamiento 5,50 Has. de terreno a la Baronesa de Baronceli . Por Regiones Devastadas se construyeron las famosas casas baratas; el nuevo Ayuntamiento y un sinfín de cosas más durante los muchos años que se mantuvo en la Alcaldía. Por cierto, si la memoria no me falla, le sucedió en el Ayuntamiento, el Dr. Barlett, quien a su vez fue reemplazado por el gran industrial D. Joaquin Fabra Grifoll. Después, el ilustre Abogado D. Felipe Tallada Cachot que fue el que dio paso al primer Alcalde de la democracia D. Vicente Beguer Oliveras. En la actualidad, sustituyendo al Sr. Beguer, después de 12 años, tenemos de Alcalde a D. Mariano Curto Fores. ¿Quien te ha parecido el mejor, Enrique? La pregunta me dejó perplejo. Para él cualquier respuesta era buena pero para mi, era muy difícil ser Juez de esta cuestión, por lo que me decido por la solución más fácil. Mira Ricardo. Todos han hecho según sus medios o posibilidades, lo mejor que han podido o sabido para nuestra Ciudad. De eso estoy absolutamente convencido, Los resultados puede que sean diferentes pero jamás su voluntad de que hayan sido perfectos para los intereses de los tortosinos. Tu mismo iras juzgando a lo largo de estos días que visitaremos la Ciudad, con detenimiento, si los resultados te satisfacen o por el contrario, los criticas. Por ejemplo. Hoy empezaremos por los barrios de Ferrerías y la Casota San Vicente, .tal y como nosotros lo conocimos en aquella época. Antes fué el arrabal de la Cruz y más antiguamente, Isla de los Genoveses ó de Génova. Hablando de esto, fíjate en el ofrecimiento que en el programa de fiesta del Barrio, correspondiente al año 1.944, hacia D. Enrique Bayerri, de la Real Academia de la Historia y Cronista Oficial de Tortosa, en la que destaca el párrafo de “aquella famosa Génova Tortosina, que fué Patria y cuna del inmortal descubridor de América” Ya recordarás, Ricardo la fuerte tesis del Sr. Bayerri con respecto al origen de Colón. Ignoro lo que habria pasado de poder seguir trabajando sobre esta materia. Lo extraño es que nadie haya continuado con esta labor, aunque nada más fuese por patriotismo. Recuerda que él mismo nos enseñó en una ocasión, la cantidad de documentos que tenia al respecto. Vamos a intentar hacer un buen esfuerzo de memoria y recordar que la arteria principal de Ferrerías, la Rambla de Cataluña, a nivel de edificación, notarás que ha ganado en el final, a la izquierda, dirección Roquetas. Se ha completado toda la calle hasta llegar a la actual Plaza de la Corona de Aragón. Por el lado derecho, prácticamente está igual. Lo que si está es muy cambiada en cuanto a los establecimientos y negocios que había cuando tu te fuiste. Recordemos que empezando en el río, parte derecha, dirección Roquetas, estaba Talleres Escudé, regido por el Sr. Escudé y posteriormente por el Sr. Mola, una industria de fabricación de bombas de riego de grandes capacidades que instaló muchisimas en nuestra provincia y también en la Mancha y Andalucía, donde constantemente tenia montadores. Hoy está cerrado el negocio. Después venia el taller de reparación y afilado de sierras de Tomás Favá;: somiers Riallo y la primitiva ferretería Garcia. A continuación, Casa Tupinamba, torrefactos de café, del caspolino Mariano Montserrat. Al cerrar el establecimiento por defunción, ha estado muchos años la Cooperativa de Transportes. Al trasladarse estos, en la actualidad, hay un establecimiento de pollos y conejos al ast. Luego venia casa Baró y a continuación la Farmacia Gamundi, donde el Sr. Gamundi tenia su tertulia literaria, futbolista y ciclista. Luego la botería Castells, casa Gasco y encima las habitaciones del bar La Rambla. A continuación y donde actualmente está el cine y local del Montepío de choferes, estaba la Posada del Sol, de Antonio Domingo, que también era bar. Y seguido el famoso Parador Cardona, de mucho esplendor en

nuestra época. A continuación , bar Lapeira; Cereales Vicente Miralles que antes estuvo en la calle Castellón, esparteria de Manuel Alberich; la actual posada Aragonesa; una carreteria y a continuación un gran establecimiento de comestibles como era Casa Peralta. Después el pintor Monclus; guarnicioneria José Caballé López, y la primera posada Aragonesa. A partir de aquí, todo huertos hasta llegar a la gasolinera de Chavarria. Como verás, aquí se ha construido poco a poco pero aún, como ves, no llegan las edificaciones hasta la plaza de la Corona de Aragón. Me preguntas por qué. Pues no lo se. Pueden ser los solares caros, puede ser algún problema de urbanización de la zona, no lo se pero como ahora verás, todo el barrio de Ferrerías se ha extendido por todos los lados menos por aquí. Siguiendo nuestro recorrido por la misma Rambla, paseando, pasamos a la orilla izquierda y empezando por el río, estaba en los bajos de la casa del Dr. Llorca, el taller de bobinaje de los hermanos Provinciale, también conocido por Boby Motor; luego la bodega de vinos al por mayor de Rafael Lluis, sucesor de Alvarez, abuelo del empresario actual de Congelados Lluis; a continuación la ferretería Celma. Después el almacén de Coloniales Gracia y Caminals que tenian su casa central en Alcañiz; guarnicionero Galiana y el estanco de la Sra. María Contel y su hija Paquita que, posteriormente fue de Pau Torres. Luego la cuchillería de Martí, “ el esmolet” y a continuación bar y fonda de La Rambla del Sr. Ramón Mora, más conocido por casa Pola. ¿Recuerdas, Ricardo, las veces que veníamos para ver a los jugadores del Tortosa que se hospedaban aquí o cuando llegaban las vueltas ciclistas a Cataluña y a España cuya mayoría de corredores se hospedaban entre este establecimiento y el Parador Cardona. O también los componentes de las veladas de lucha libre a los que veíamos comer o cenar juntos y luego se “destrozaban” en el ring. Nuestra inocencia de la época, la ausencia de televisión y casi de radio, y la limitadisima información escrita y gráfica a la que podíamos tener acceso, nos forjaba la ilusión de poder ver y casi tocar a todos aquellos atletas que nos parecían superhombres. Debía ser cuestión de la época pero hoy, de alguna otra forma, esa ilusión que antes comentábam os, se transforma en muchas ocasiones en auténticos delirios, sobre todo en la juventud a la que se le ve llorar al escuchar en directo a algún cantante que es su ídolo. Enrique, sigamos nuestro recorrido y no pensemos más en esta clase de fenómenos. Dejémoslo pensando simplemente que son otros tiempos. Siguiendo con nuestros RECUERDOS y recorrido, después del citado Bar La Rambla, venia la farmacia de Salvia, taller de motos de Maximiliano Plá, hierros Bonet y a continuación casa Camós, emblemático almacén de salazones de gran importancia comarcal; después guarnicionero Folqué con su poste de gasolina; barbería del Sr. Juan; horno de la Sra. Mercedes; carnicería Julve; comestibles “casa Nostre Señor” , de Carmen Dalmau Llobera; tienda de loza de José Puntes; trapería Llorca, que posteriormente se trasladó a la calle del Comercio; carreteria de Marcelino; hojalatería de Mundo y seguidamente, casa Nicolau otro gran almacén de salazones al por mayor; ferreteria Adell, Jabones López, donde se fabricaba también un famoso ungüento para curar heridas y granos; Armería Descarrega; esparteria “la santa”; jabones Rovira, eI grupc esccIar, deI que Iuegc habIaremcs, una casa de cañizos; dos tiendas de rateras y jaulas, la botería de Cervera , Bicicletas Fábregues y al final, pasados los 4 caminos, Traperia Ismael Forés. Después, todo huertos. Y luego aislada, en la carretera de Roquetas, la fábrica de generos de punto de Hijos de J. Sanz Martorell, dirigida por D. Francisco Sanz Domingo, co-fundador de nuestro C.D.Tortosa y Presidente en una de sus épocas mas gloriosas en otras no tan gloriosas y varias veces en la junta directiva pero siempre con una gran dedicación y entrega. Fué un gran Presidente y su imagen siempre servirá como modelo. Frente a la fábrica estaba el veterinario Sr. Cólera. Esta zona de la izquierda de la Rambla, ha quedado totalmente cerrada hasta el ferrocarril quedando un barrio con buenas avenidas que lo hacen cómodo a sus habitantes y en el que también queda incluido el Estadio Municipal y el pabellón cubierto.Referente aI CcIegic de Ferrerias, estcs dias se ha ceIebradc eI 50 aniversaric de su fundacicn y se ha recrdadc a numercscs prcfescres deI mismc ccmc pcr ejempIc a

Entre los dos, hemos “reconstruido” la Rambla de Cataluña de antaño. Seguramente nos habremos olvidado de algún nombre o establecimiento, pero ha sido involuntariamente. Lo que si tienes que observar, amigo Ricardo, es que la mayoría de los establecimientos recordados, han cerrado sus puertas. Algunos se han reciclado, otros han dejado de funcionar por desaparición de los dueños y otros por quedar en desuso en su mayor parte. Esto también forma parte de la modernización de la vida y que los usos y costumbres son muy otros. En las pocas travesías que por entonces tenia el barrio, recordemos que en la calle Comercio había dos tratantes de ganado, el Zagal y Martí; herreria de Juan Curto Estrada; aceites Cugat; jabones Besora y de Francisco Cid Benet; Hierros Domingo y por fin Aceites Bau, auténtico buque insignia de la época por su importancia internacional y por la cantidad de empleados. También estaba las Destilerias del Ebro de Miguel Campi Nicolau. En la calle Batea, una carbonería y Talleres de Juan Gas Martorell, industria de la misma importancia que la de talleres Escudé.y sucesores también del mismo Juan Escudé. En la calle Horta, sin salida como en la actualidad, solamente estaban jabones Besora. Calle Castellón, Talleres Mayo; Harinas “el curret” de Martín Albé; Botería Julian; Talleres y Carrocerías J. Homedes; Fruteria de la Sra. Teresa, la Valenciana; Aceites Alifonso; tratante Sr. Piqué y Neumáticos Feliciano Domingo. Al otro lado de la Rambla, el estanco de la Sra. María; Verduras de la Sra. Angelita “la Chertolina”; una herrería; Horno de la Sra. Regina y de Pau Torres; Licores Leheman; verdulería Alberich y casa Baró; Cuchillería de Martí; Carnicería del Sr. Máxim.; taller de confección Minguell; trapería de Manuel Escobedo; Fonda Guerrero y Abonos Viriato Murall. Después, todo huertos En la calle Valencia, solo el Gato Negro y habitaciones del bar La Rambla, después, también, todo huertos. Y en la calle larga San Vicente, en este lado de Ferrerías, si recordamos bien estaban helados Papaseit; Muebles La Valenciana; Casa Baró, buen complejo industrial de fundición y maquinaria para los molinos de aceite; Serrería Bertomeu; Piensos Juan Valldeperez; carpintería “los franceses”; de Doroteo Ferrandiz, que, por cierto, se fueron a Méjico allá por el año 1.951 y fueron asesinados en el año 1.956 por un robo en su domicilio; Horno de la Sra. Pepeta la de Vallés; Harinas Jaime Nomen Aragonés, Herreria Emilio Mayo, Harinas Fatsini (con posterioridad fué descascarador de almendras de Ramón Alcón Arnal ) Metalúrgica Catalana , Hierros Mestres , muebles José Segarra .Trapos Ramón Domingo Carbó y Pastas alimenticias La Fama, de Juan Mestre. Después, por ambos lados de la Rambla, recuerdas, eran todo huertos. Entre la Rambla y el río, donde estaba el huerto y vaquería de Llevat, date cuenta las calles que han surgido nuevas y las edificaciones construidas. Y entre la Rambla y hacia la Casota, fíjate lo que se ha construido. El Ambulatorio de la Seguridad Social; plaza de D. Joaquín Bau, Clínica La Alianza; S.A. Panificadora Industrial, la SAPI, que elabora pan en plan completamente industrial y que fué inaugurada en diciembre de 1.955; Las famosas casas baratas,x construidas por Regiones Devastadas; Estadio Municipal, muy distinto a como estaba cuando marchaste. Se cambió la fachada; se han construido dos piscinas, una de ellas cubierta y climatizada; se ha prolongado el velódromo; construido el pabellón cubierto; tribuna cubierta en el campo de fútbol y un campo de tierra posterior con pistas de atletismo. También se ha construido un nuevo Instituto de Enseñanza Media, junto al Estadio, en sustitución del antiguo de la calle de Moncada. También se ha construido un nuevo Instituto de Formación Profesional, en la Avenida de Colón, junto al también nuevo Cuartel de la Guardia Civil que sustituyó al de la calle de Cervantes. Ese edificio que me preguntas, próximo al Cuartel, es el Mercado del Barrio, que no tuvo excesivo éxito entonces y ahora parece que está pendiente de destino. No debia demorarse para que no llegue a su total degradación. En la carretera de Valencia, teniamos Harinas La Providencia; Aceites de orujo de

Homedes S.L. Aceites de Josefa Espuny Aixendri; Harinas de Fermín Alegret ; Harinas Ramón Roselló Bayerri y Flores Tost. Esto es a grandes rasgos, si no recordamos mal, lo que “fisicamente” era el barrio de Ferrerías que tu conocías. En el sentido llamémosle espiritual, era un barrio industrial, junto con la Casota, que luego visitaremos, y netamente comercial. Prácticamente las pocas o muchas industrias que había en la época, en Tortosa, estaban aquí entre la Casota y Ferrerias y no digamos el comercio al por mayor. Además era un barrio con mucho empuje y con gente muy emprendedora. ¿No recuerdas las famosas fiestas para la Virgen del Carmen, que duraban una semana entera?. En todos los huertos que había donde ahora esta el Ambulatorio, se montaba una autentica plaza de toros, con un sinfín de festejos con intervención de auténticos “maestros” del barrio. Yo recuerdo una gran corrida de toros en la que el matador era Enrique Llorca y una charlotada con intervención de músicos del barrio y un Don Tancredo, aquél personaje todo de blanco que esperaba estoicamente al toro completamente inmóvil y que éste casi siempre respetaba, que si no recuerdo mal fue “interpretado” por el Sr. Ricardo Puigdefábregues, cobrador de la Hife. En cuanto al resto de actos, las verbenas, que se celebraban en la Rambla, con la orquesta donde esta actualmente el Montepio de Choferes, actuaban los mejores conjunto de la época. ¿Recuerdas?. Batavia, Satélites, José Guardiola; Bonet de San Pedro, Jorge Sepúlveda; Antonio Machin y un largo etc. Eran unas fiestas a lo grande, como correspondía a la época y sucedía igual en los otros barrios de Remolinos y el Rastre, debido a que entonces, solamente teníamos justificación para bailar y divertirnos, en las fiestas de la Cinta y las de los barrios. No había discotecas pero en cambio había mucha ilusión, ¡RECUERDAS? Y con la camaradería y amistad que nos unía entonces a todos, esperábamos las fiestas y las disfrutábamos de lleno con la satisfacción de ver nuestra ILUSIÓN realizada. Cualquier cosa se hacia con toda la ilusión del mundo. No veíamos a la novia hasta el sábado por la tarde y luego el domingo la misa del mediodía y nuestro paseo por el parque después. Por la tarde, al fútbol si lo había y después al cine Coliseum o Fémina, que era otro acontecimiento y al salir del mismo, el clásico paseo por la calle Cervantes, “ a chafar raya”, como decíamos y que seguramente sorprendería a la juventud actual ver aquella calle, sin ningún coche, por supuesto, llena de gente, que la mitad iba hacia la estación y la otra mitad en dirección contraria. Mucho paseo, mucha conversación y lógicamente pocos cubatas, pues la cuestión no estaba para dispendios. Pero esto, amigo Ricardo, que tan pronto se explica, era nuestra esperanza é ilusión durante toda la semana. Y aún que nos tachen de antiguos o carrozas, como ahora dicen, esto era muy bonito. La ilusión se mantenía en cualquier acto de nuestras vidas. El estreno de cualquier prenda de ropa, zapatos, un mechero, la petaca, etc. etc. Teníamos tan poco, que todo nos hacia ilusión. Y el resto de la semana, de lunes por la mañana a sábado por la noche, a estudiar o trabajar con el mayor ímpetu posible pues al propio tiempo que ilusión, teníamos mucho respeto a nuestros mayores, sabíamos el esfuerzo é ilusión que tenían con nosotros y nuestro mayor deseo era complacerlos. Como muestra de esta ilusión y constancia, vale la pena recordar que todos los domingos del año, a partir de la finalización de las fiestas del Carmen, las sacristanas y sacristanes, salian por todo el barrio a recoger los donativos que cada vecino tenia la voluntad de entregarles para el montaje de las fiestas del año siguiente. Eso se hacia durante la mañana de cada domingo. Después de este breve paréntesis, que seguramente iremos repitiendo a lo largo de nuestros paseos y RECUERDOS, seguiremos paseando hacia el barrio de la Casota, netamente industrial. Allí estaban las industrias, sobre todo mecánicas, que había en Tortosa. Talleres Vilas, antiguos Sales, que se desmontaron cuando la guerra y se trasladaron a Vich, dando origen a una colonia Tortosina, que aún persiste y que el ayuntamiento de aquella Ciudad, agradeció con un parque que se llama así : Parc dels Tortosins. En estos talleres Sales, fué donde se construyó el famoso vapor Anita. Talleres de calderería Baulenas; Talleres Prieto, de Francisco Prieto Hernandez, nuestro gran Juan de Cadup, que con sus satíricos versos, nos contaba su visión de la vida local, escribiendo sus comentarios deportivos desde lo alto de su “noria” a la que le sacó

mucho partido. Un gran personaje. Luego estaba La Metalúrgica del Ebro; fábrica de hielo; astilleros en la orilla del Ebro, donde se fabricaban los llauds, entre otros por Isaias Vilas en la calle San Vicente 12, que navegaban por el río y que cuando iban aguas arriba, los remolcaban caballerías desde las orillas; Chocolates CREO, Maderas Audí; Hierros Bonet; Serreria Nicolau; de gran importancia en su época;la legendaria imprenta Blanch y maderas Tomás. También estaban las fábricas de mosáicos de Constantino Cases y J. Ferrando, construcción de carros José Rius Plá; panaderia de Luis del Aguila Plá; los aceites de José Alifonso y de José Gilabert Aspa. Por la calle Amposta, Refineria de aceites Ballester, donde, por cierto, estaba antiguamente el campo de fútbol del Dertusa y Piensos Piasa. En la Plaza del Pozo, (actual de Pio XII) , estaba la fábrica de hielo de Campos (posteriormente, de Pilar Chavarria) y una fachada de la Iglesia del Rosér. Posteriormente se instaló también Hierros Bonet, procedente de la Rambla de Cataluña. Antes de la guerra, estaba en esta zona el Royal Cocert, más conocido por El Flamenco, una especie de sala de fiestas con restaurante y juegos y que era propiedad del Sr. Pentinat, vecino de la misma plaza. Cabe recordar también la buena convivencia que existia entonces entre los gitanos que residian en el barrio y el resto de vecinos. Estaban totalmente integrados y desarrollaban todo tipo de trabajos, más bien liberales, como limpiabotas, paragüeros, chatarreros, etc. A lo largo de todo este barrio, incluso el de Ferrerías, habrás observado el encauzamiento del río mediante los muros de piedra. Junto con los de la margen izquierda forman un conjunto muy armonioso en el cruce del rio Ebro por toda la Ciudad. Observarás también, el monumento erigido sobre la pilastra del antiguo puente de pago. Se dedicó a todos los combatientes de la famosisima batalla del Ebro de nuestra desgraciada guerra civil. A mi entender, embellece el entorno pero siempre encuentro a faltar la iluminación nocturna que le da una elegancia al monumento pero que nunca funciona. Lo vino a inaugurar el Generalísimo Franco, siendo Alcalde D. Joaquin Fabra y Obispo el Dr. Moll. Como podrás observar, todo el paseo del Ebro está en obras. Creo que cuando esté finalizado quedará muy bonito y será otra zona que dará prestancia a nuestra Ciudad. Por cierto, no hemos comentado la iglesia del Roser. Recuerda que cuando la guerra, quedó destruida la torre, alguna bóveda y mucho deterioro en el resto. Regiones Devastadas la reconstruyó. Tu y yo recordamos con mucho agrado a Mosen Vicente Fábregat, Párroco durante más de 24 años y aunque nacido en Villafeanca de Cid (Castellón) fué un tortosino de Ferrerias donde era querido y apreciado por todas las clases sociales del barrio por su sencillez y dedicación a la ayuda al prójimo. . En cuanto a edificaciones, destacan el grupo de viviendas de la Caixa y el edificio llamado la Torre, de bastante mal gusto. Ambos el el paseo del Ebro y luego hay otros grupos que junto con la urbanización del barrio, lo han dejado, como ves, un conjunto agradable en el qué, por cierto, destacan los talleres del ramo del automóvil, aparte de los ya mencionadosd, de Vilás y Talleres Prieto;. Han cerrado sus puertas los talleres de Baulenas, los de la Metalúrgica del Ebro, Serreria Nicolau, Hierros Bonet, Chocolates CREO, Maderas Audí, Maderas Tomás, las fábricas de mosáicos de Constantino Cases y J. Ferrando y la famosa imprenta Blanch, entre otros. En conjunto, es uno de los barrios que más se ha desarrollado de nuestra Ciudad. Se ha completado recientemente con la construcción de la Plaza de la Corona de Aragón, cerrada por los cuatro lados con el nuevo Hotel que lleva el mismo nombre de la plaza. Luego está la urbanización construida por la empresa Subirats Berenguer, que permite pensar en la futura unión con el barrio de Jesús por la arteria de la carretera, con cuatro circulaciones, y que con la construcción del Parque de Bomberos y el centro Comercial Sabeco, confirman esta supuesta unión. Una vez repasado este barrio, podemos o mejor dicho, puedes empezar a darte cuenta del desarrollo de nuestra Ciudad en estos años. En conjunto ha sido un desarrollo normal, propio de los avances y adelantoa de nuestra civilizació, pero muy lento en comparación con otras ciudades que han tenido un avance muchos más espectacular, rápido y con sus propios medios. Aquí seguimos siempre esperando que nos lo hagan y a quejarnos si no lo hacen. Es nuestro caracter y así

parece que seguira siendo. No somos luchadores y siempre esperamos a perder algo para protestar despues, cuando no tiene remedio. Regresaremos a Tortosa, en cuya casco antiguo es donde menos verás modificaciones importantes salvo la mejora de algunas calles y la adecuación a la vida actual en materia de vehículos rodados. Empezaremos por la calle Obispo Aznar y plaza del Pont de la Pedra a través de cuyo subsuelo discurre la gran alcantarilla, que desemboca en el Ebro y que corresponde principalmente al barranco del Rastre. Pocas modificaciones verás en la zona, salvo el cambio ó cierre de casi todos los establecimientos de la época. Estaban los chocolates Grego: bicicletas Serra; Ferretería Nivera; Cereales Morales; Gestoria José Calvet; La Radio Moderna; Comestibles Forcadell, que posteriormente fueron zapateria; Armería La Primitiva; horno y panadería de José Mª Vallés, el de “charrades sense malitzia” ; Manufacturas Alimenticias S.L. MAE, Carpintería Peransi; Verdulería Sr. Ramón Calatrava; Boteria Vda. de Ricardo Boix; Fontanería y electricidad Meneses y en la esquina, Carpintería de Enrique Alado. En la parte de la plaza, Tintorería Besalduch; antigua Clínica Lluch; Librería y estanco Viladrich; Chucherías, cohetes y petardos de Serra (que luego se quemó); Peluquería Pérez; Fotografía Daufí; Panadería Rafael Espuny; Tejidos López y Vergés; Contratista Jaime Princep Gendre, Farmacia Sanmartín y Bar y restaurante Pepe que luego se transformó en comestibles Bel y Subirats; Piensos y alfalfas de Emilio Segarra Roca; Tejidos Tomás Sánchez: Cesteria de Cinta Jardí y Procurador de los Tribunales, Ramón Nivera. .En el callejón Botigues de la Sal, Lejias Faiges.y en la plaza Nueva del Vall, el practicante Carmelo Loren. Adentrándonos por la calle de la Rosa, en dirección a la plaza de la Catedral y calle de la Merced, nos encontrábamos con la farmacia Vergés, en el edificio del Palacio de Campmany, con su vistoso patio interior y su fachada modernista; los laboratorios farmacéuticos Vergés&Oliveres; objetos religiosos y merceria Estorach; alpargateria de Hijas de P. Subirats; Encuadernaciones Beltrán; fotógrafo Alfonso Salvador, Imprenta Monllau, Curtidos Paré Colominas; Hojalatería é instalaciones Canalda; Zapateria Ramón Garcia; máquinas de escribir de Francisco Colomé; Colchoneria la Rosa; Colegio de la Consolación, sombrerería hermanas Delsors; Pastelería La Sarah de J. Aymerich; La Catedral y enfrente las oficinas comerciales de FECSA. En el piso de arriba, el contratista Jaime Carme Monreal y la Comadrona Josefa Clua. En la esquina con el Arco del Romeu, está el edificio modernista Casa Grego, obra del arquitecto Pau Monguió, donde estaba el Abogado Manuel Benseny. En el Arco del Romeu, la taberna de Adela Bonfill y el Perito Electricista José Mª Mallafré . Hemos dejado para el final los dos palacios que existen en dicha calle. El de los Oriol, donde, restaurado, está la Escuela de Músicca y el de Despuig, extraordinariamente restaurado por la Diputación y donde se halla la biblioteca de la propia Diputación, muy disminuida en la actualidad al traspasar la mayor parte de sus existencias a la biblioteca de la Generalidad sita en el Palacio de Oliver de Boteller, entre las calles Ciudad, Cambios y Cárcel. Luego hablaremos de ella.En la calle Oliver estaba el abogado D. Ramón Martí Zaragoza. Ricardo. No debemos pasar por aquí sin guardar un grato recuerdo a nuestra época y a los rectores de la Catedral. Empezaremos con el Obispo D. Felix Bilbao, del que aún recordamos su entierro por el impresionante gentío congregado en el mismo. Después nombraron a D. Manuel Moll Salord que estuvo muchos años, hasta su fallecimiento. Le sustituyó D.Ricardo .Mª Carles, que ha permanecido en el cargo hasta hace unos siete años en que fue nombrado Arzobispo de Barcelona. En la actualidad, además de seguir en Barcelona, ha sido nombrado Cardenal, situación que nos llena de satisfacción a todos los tortosinos y que creo que ha sido la culminación de sus muchos méritos. Le sustituyó D. Luis Martinez Sistach que fué nombrado Arzobispo de Tarragona y en la actualidad tenemos a D.Javier Salinas. Pero también hemos de recordar a los sacerdotes de nuestra juventud entre los que citaremos a D. Felipe Pitarque; Mosen Jovaní, con su gran vozarrón, a los dos Mosen Arasa (el joven y el viejo, como les decíamos nosotros) y los Forés, Cabús, Capsir, etc. etc. Sin olvidar a D.

Claudio Perez.de Heredia, que posteriormente fue trasladado a Madrid y nombrado Fiscal del Tribunal de la Rota. Recordarás que era una época de mucho esplendor católico y se construyó el actual Seminario, una obra gigantesca para entonces y que estaba llenos de seminaristas. ¿Te acuerdas en las procesiones las hileras interminables de futuros sacerdotes?. Pues en la actualidad, no lo se a ciencia cierta, pero es posible que no haya más de la docena. Son otros tiempos si bien tengo que decirte qué, en mi opinión, el católico actual es más profundo, sano y sincero pues no está sujeto a ningún tipo de obligación social como sucedia en nuestra época. Ahora todo lo que se hace es devoción y catolicismo sincero. Repito, es una opinión.. Continuando nuestro recorrido de hoy, nos adentramos por la calle de la Merced, donde nos encontramos con la iglesia de la Reparación; colegio de la Merced que después fue cuartel del la Policía Nacional; Carpintería de Otero, cuyos hijos José y Paco fueron grandes jugadores de nuestro C.D. Tortosa. José, Pepe para todos, ha sido de todo en el Club. Jugador, entrenador, Delegado, directivo, cuidador del fútbol base, etc., etc. Toda una institución.A continuación, Pompas Fúnebres Fernando Sánchez. Al finalizar la calle, llegábamos a la pequeña plaza, que entonces se llamaba de O´Callaghan donde estaba perfumes Jamsol; Comestibles Primitiva Margalef; CYME, material eléctrico; taberna de Francisco Audí y el antiguo Ayuntamiento, donde en la actualidad están situados los Juzgados. También fué sede del Instituto de Enseñanza Media al trasladarse el Ayuntamiento a su actual emplazamiento y mientras duraron las obras de restauración del edificio de la calle Moncada, antiguo Seminario. Haciendo un inciso, desde la Catedral, en dirección al barrio de Remolinos, estaba y está la calle Taules Velles donde recuerdo la tienda de instalaciones eléctricas de Torrejón; Comestibles de Joaquina Esteller, Academia Bel-Gonzalez, Comestibles de Agustin Ferrando y se desembocaba en la calle Ciudad donde estaba la hojalatería de Marro; botería Pastafio; barbería Roselló; carbonería de Pepe y el famoso Bar la Cinta de la familia Más. En la calle de Cambios, Vidrios Virgili; Y hasta el Palacio del Sr. Obispo, estaba la librería López ; la panadería de la Canonja de Jacinto Estrada y Gestoria Barreno. En el solar formado por las calles de Ciudad, Cambios y Cárcel, donde antiguamente estaba el Palacio Municipal o Casa de la Ciudad, se ha construido este edificio destinado a los Servicios de Cultura de la Generalidad; biblioteca; sala de exposiciones, etc. En su construcción se trasladó, piedra a piedra, la fachada del antiguo Palacio Oliver de Boteller que estaba en la orilla del rio, muy cerca de su emplazamiento actual, consiguiendo este armonioso edificio, centro cultural de estas comarcas. Nosotros, en su anterior emplazamiento de la orilla del rio le llamábamos el Ateneo, por ser el último ocupante antes de su demolición.. Seguiremos desde la plaza O´Callaghan, hacia la calle Moncada, donde aparte de algún pequeño establecimiento, encontramos al abogado José Faura Elias; el convento é iglesia de la Purísima; las antiguas oficinas de la Real Compañía del Canal; enfrente, las oficinas y almacenes de venta a plazos de El Ocaso, regido entonces por los Srs. Muiño y Vidal; los restos de la Iglesia de San Antonio donde entre sus ruinas aún se conservan algunos frescos en buen estado. En la actualidad es el depósito de todos los “pasos” de las procesiones de Semana Santa; Hagamos un inciso para decir que en la calle Tras Purisima, estaba la imprenta Peri.y en la calle de San Antonio, panaderia de las Hermanas Mulet y carboneria de Manuel Chavarria. Siguiendo por Moncada, venian chocolates Francisco Geballí; Panaderia Domenech; encuadernador Fontanet; Electricista Ginovart; Taberna de Blanch; Comestibles de Antonia Cots y Felipe Gisbert; Cámaras frigoríficas Grifoll; Transportes Ebro; Tejidos Pilar Budria; drogueria Blanch Sanmartin; Construcciones Borrás; Procurador Gisbert; Practicante Jacinto Sabaté; Peluqueria de Sras, Jaime Farnos; Comestibles Manuela Escobedo; Instalaciones eléctricas Salvador Monllaó; Transportes Ramón Pons; Carpinteria Aurelio Climent; Hojalateria de Jaime Besalduch; Abogado Miguel Llopis; el antiguo edificio del Instituto de Enseñanza Media, desembocando en la plaza de la Virgen de Montserrat, también llamada de los faroles. Vuelvo atrás, hasta el Instituto. Tu ibas a los Hermanos pero yo estuve en el Instituto durante tres años. Recuerdo con mucho agrado al bedel Sr.

Ferré, con sus enormes mostachos ¡Cuantas felonías no le haríamos a aquél buen hombre!. Recuerdo al administrativo Sr. Caudal y al prmer Director, el Dr. Montserrat, al que sucedió por breve tiempo, el Padre Manyá y finalmente D. Mariano Hernandez. Si la memoria no me falla, recuerdo como profesores al propio Dr. Montserrat; Teresa Roé; Mosen Arasa: D. Ricardo Cerveto, que creo hacia también de Secretario; Mosen Manya; D.Enrique Bayerri ; un catedrático de latín, Sr. Morán, que estuvo unos años destinado en Tortosa, creo que por algún tipo de destierro político, al que recuerdo que en su despedida, por su regreso a Madrid, se le hizo un homenaje y nuestro curso le obsequiamos con una pluma estilográfica que le entregamos en la misma estación del ferrocarril cuando fuimos a despedirle. Tambien estaban, como profesores Felicia Delsors: V. Cascante: F. Ubach; L. Castaño; F. Queralt; R. Cucó A. Mascareñas; J. Alsina; Emilio Sanz; F. Gonzalez, Abella, J. Bel, ´Maria Gimeno, José Pena, etc. etc. y posiblemente alguno más que olvido. Recuerdo también un hecho luctuoso que sacudió a Tortosa por sus dimensiones, tan poco frecuentes por aquellas fechas. Fue un lunes de Pascua, cuando se ahogaron en el río nuestra compañera Montserrat Curto, su hermana, el dentista Dr. Mestre, el barquero Sr. Roig y Salomé, la esposa del veterinario Sr. Cólera. Otro detalle a recordar del citado Instituto, era que en las clases y cursos, no pasaríamos de 20 personas y en algunos cursos, bastantes menos. La dichosa guerra tenia la culpa. Durante la misma, no hubo clases y al finalizar, unos empezábamos ya mayores y alguno de los mayores ya no estaba entre nosotros. Cambiando de tema, verás que el edificio está cerrado. Después del Instituto, aún fue Colegio de la Merced durante unos años y en la actualidad, se ve que está muy deteriorado y para su consolidación hace falta mucho dinero y en estos momentos no hay. Es mi opinión, no contrastada con nadie, pero si puedo decirte que seria una pena que se perdiera un edificio de su importancia. Recordarás que anteriormente, este edificio fué la sede del Seminario.En el mismo edificio y en la vivienda del Sr. Caudal, tenia su consultorio su hija, la comasdrona Mª Cinta. Justamente al lado del Instituto, estaba el Colegio del Mestre Llanes, muy concurrido entonces sobre todo en lo que ahora se llama enseñanza primaria. Por cierto, en la calle que va desde la plaza, hacia Mercaderes, había una especie de colegio, predecesor de los actuales parvularios, al que llamábamos casa dels bassinets, debido a que cada crío tenia el suyo para evitar males mayores y en ausencia de los W.C. actuales. Al llegar a la plaza de Montserrat, estaba materiales y decoración Coyde; la Sociedad farmacéutica Aragonesa; barbería Valldeperez; clínica del Dr. Fornós; Básculas Casadó; taller de bicicletas del corredor Ferrando. En la calle Gil de Federich, lo que más recuerdo son las oficinas de las aguas de la Caramella con el Sr. Vaqué a la cabeza.; fotógrafo José Ramos.; cerrajeria Ramón Estrada; carboneria Miguel Alqueza; taberna de Asunción Latorre y Dr. Luis Soler Moltó. En las calles Mercaderes, Bonaire y Carmen, Muebles Villé; Bazar sanitario de Jaime Carme; Sastre Arturo Gaya; la imprenta Querol; el sastre Ramón Plá Curto; la antigua escuela del Trabajo, vivero de grandes profesionales de la época actual en materia del albañilería, ebanistería, electricidad, fontanería, etc. Tejidos Felipe Moré; Mármoles Llatje; tabernas de Teresa Riba y de Juan Subirats; panaderia Vda.de Forcadell; Café Bar Tortosino y ya, desembocando en la plaza del Ángel, la funeraria de Rollán y Domingo, en la que este último, como buen aficionado al fútbol y co-fundador de nuestro C.D.Tortosa, tenia más carteles de fútbol en sus naves, que ataúdes. Siguiendo por la calle Moncada, hasta la Plaza del Angel, Chocolates Tallada; Muebles Panisello; Sastreria Juan Forés Mauri; Tintorería de Juan Besalduch; corseteria Hermanas Roca; muebles Llorens de la Vda. de Sanz; Ultramarinos Regina Fabregat y optica Romagosa. En toda esta zona que hemos recorrido hoy, observarás qué, como zona y casco antiguo, hay pocas novedades. Si acaso, las que ya hemos referido anteriormente con respecto a Ferrerías. El cierre de un 80% de lo que hemos recordado y algún cambio de negocio, más acorde con la realidad actual. En lo que a edificios se refiere, prácticamente todo igual o más bien peor, pues todos los edificio tienen casi 50 años más encima. Se va reformando alguna cosa, pero nada. Más bien hay edificios cerrados totalmente por amenaza de ruina. La verdad es que haría falta

dinero pero habría que despejar algunos edificios y ampliar las calles para que estén más acordes con la vida actual pero como eso, Ricardo, es una utopía, más vale no meneallo, como dicen los gallegos Mañana haremos un recorrido por la parte llamada del Centro, empezando por la plaza del Ángel, calle San Blas, Cervantes y calles adyacentes. Aquí ya veras más modificaciones, algunas de ellas muy sentimentales como es el caso del Colegio de los Hermanos y actualmente la propia estación del ferrocarril o mejor dicho, sus servicios. También el cambio de costumbres de la juventud que ha dejado vacío nuestros paseos por la calle Cervantes y así sucesivamente. Tal como quedamos ayer, empezaremos por la calle de San Blas, en el Pont de la Pedra y por el lado derecho , recuerda que había un pequeño edificio haciendo chaflán, que ya está derruido, donde estaban casa Guitart y Tejidos Lapeira. Después casa Canivell, que aún subsiste, Novedades Marisa y a continuación el café y el hotel Siboni, de gran raigambre tortosina. Tenia una gran cocina y eran famosos sus banquetes por la superabundancia de comida y su correspondiente calidad. Tenia también su mozo de maletas en la estación del ferrocarril, a la llegada de todos los trenes y recuerda sus voces de ¡Hotel Siboni! ¡Hotel Siboni! En franca competencia con su homónimo del hotel Victoria que daba también sus gritos de ¡Hotel Victoria! ¡Hotel Victoria!, estableciendo una rivalidad para conseguir clientes que en más de una ocasión acababa en algo más que palabras. Después del hotel, venia Casa Barrobés; Perfumeria Guerola; Almacenes Cabanes: Tejidos Agustín Curto; Confiteria Agustín Blasco; merceria Benaiges; Almacenes Ebano; Optica Forteza; Confecciones la Fábrica; Peluqueria de Sras. José Palau;. Casa Mora y enfrente, Tejidos Martí Lapiedra, la célebre relojería Merlin, cuyo emblemático reloj, con muy buen acierto, aún se conserva. Después Librería Matheu y camiseria Vallespí. Volviendo atrás, empezando otra vez desde el Pont de la Pedra y por la margen izquierda, Tejidos Segura; calzados el Recadero; La Favorita Casa Bel; Abogado Felipe Tallada Cachot; Estanco de Martí; Ferreteria Gas; Libreria Voltes; Gestoria Gomin; Registro de la Propiedad; Alpargateria Miguel Vergés; máquinas de coser Hipólito Zorrilla; Merceria Benaiges; Calzados La Villa de Sitges y en los porches, Radio Mayor y Librería Saporta, finalizando en la esquina de Mercaderes, estaban calzados Ramón Sabaté y Calzados Homedes. De todo este recorrido hasta aquí, veras Ricardo, que ha desaparecido el Hotel Siboni, relojería Merlyn, máquinas de escribir Mayor, Librería Sapeira, que por cierto tenia una sucursal en la calle Cervantes, en el patio del entonces Cuartel de la Guardia Civil, Zapatería Homedes, y bastantes más pero en cambio, han surgido otros, más acordes con el tiempo actual y algunos se han transformado, como la antigua librería Matheu que actualmente es un despacho de quinielas. Pero otro negocio que también, ha desaparecido en la Plaza del Ángel, es el de los limpiabotas. ¿ RECUERDAS, sobre todo los domingos por la mañana, las colas que había en cada limpia ? Era toda una ceremonia. Antes de ir a misa de 12, había que limpiarse los zapatos y las colas que se montaban eran fenomenales. Tengo que aclararte que ha desaparecido también, el oficio de limpiabotas. Salvo en alguna capital, no encuentras ni uno. Los elementos caseros de venta en el mercado ha hecho desaparecer este oficio, entre otras cosas.. En conjunto, toda esta zona de la Plaza del Ángel, San Blas, D’en Carbó era antiguamente y casi sigue siéndolo, la parte más comercial de Tortosa. Ahora, como iras viendo, se ha ido ampliando por la actual Avda. de la Generalidad y algún sitio más pero en concreto, sigue ceñida a esta zona Centro. Nos queda, por esta zona, las calles D’en Carbó y Sangre, que comentaremos con la antigua calle de la Lonja, después Avda. Generalisimo y después y actualmente, Avda. de la Generalitat. Empezaremos la calle San Blás, subiendo hacia la calle de Cervantes. En parte izquierda, se empezaba la calle con el edificio del Patronato de la Sagrada Familia, con el acceso por esta calle con un fenomenal vestíbulo y escaleras. Ya se disponia de una sala, que daba a la calle

Mercaderes, llamada “de juegos”, junto a la cocina del conserje de donde salian las “enormes” consumiciones que debian de hacerse en la época y que servia en sus horas libres, el citado conserje Sr. Bruno , tambien guardia urbano y abuelo materno de los actuales hermanos Llangostera. Después dos grandes salas donde estaban las mesas de ping-pong, que se retiraban los dias que habia teatro por aprovecharse como zona de acceso y descanso. De esta zona se encargaba mosen Arasa, que al ser trasladado a Barcelona, fué sustituido por mosen Pardo. A partir de aquí, otras dos salas más pequeñas y el patio a cielo abierto que lindaba con la iglesia de San Blás y con la subida al Garrofé, donde habia una pequeña puerta de acceso. Esta zona, RECUERDAS, era de los dominios del Doctor D. Emilio Sanz. ¡Qué gran pedagogo! ¡Que persona más amante de los niños! Además de facilitarles material para los juegos, balones, pelotas ping-pong, parchis, cuentos, etc. siempre tenia charlas con todos ellos a nivel individual y en corros donde aconsejaba y orientaba con gran paciencia y por puro amor al prójimo. Despues de terminar su jornada como médico, se presentaba en el Patronato y allí pasaba las horas con sus muchachos hasta que cerraban. Un sencillo y gran hombre. Siguendo la ruta hacia arriba, venia la confiteria de Victor Prat:el sastre Colomé, Electricista Albiol; fotografia Andreu, Bicicletas Cantó de los hermanos Luis y Roberto; Iglesia de San Blas, bastantes años derruida despues de la guerra; Administración de loterias de la Vda. De Mur; Calzados Salamó; Espumosos y fábrica de hielo de Bertomeu; Tejidos Manuel Martín López; Pasteleria La Tortosina de José Ramón Escurriola; Muebles Catalán; Fotografia Gijonz; Zapatos La Coronela, del Sr. Angelats, padre de Jordi, Presidente que fué del C.D. Tortosa y actualmente y desde hace muchos años, de Cantaires Ebre-Delta. Maestro de sardanistas, de dulzaineros, etc. etc. Bajo su mandato, llevó muy alto el pabellón de Tortosa con el baloncesto femenino. Varias veces Campeones de España de liga y Copa de la Reina. Después teniamos hojalateria Gasulla, Barberia Ferrás; panaderia Manuel Vilanova; Procurador Juan Jardí; comestibles Guillamet; sastreria Monclús; Géneros de punto Concepción Sanz; Fotógrafo Ramos; Joyeria Ferré y helados Planelles. Por aquí se llegaba a la calle Cervantes, justo por la esquina donde estaban las escaleras que subian a los cuarteles, donde estaba, hasta el año 1.942, el único campo de fútbol que habia en Tortosa desde el final de la guerra. Allí jugaba el Remolinos y todos los que teníamos ganas de jugar y disponíamos de un balón, que tampoco era nada fácil. Si podíamos conseguir alguno de 2ª ó 3ª mano, éramos felices. Y eso que no eran como los de ahora. Eran como las ruedas de bicicleta. El forro de piel y llevaban cámara que se pinchaba o reventaba muchas veces y las que nosotros podíamos usar, llevaban más parches que pelos teníamos en la cabeza. Luego, el cuero tenia una abertura de unos 6 o 7 centímetros que una vez introducida la cámara, é hinchada con una bomba de bicicleta, se ataba con una especie de cordón de la misma piel y se ataba, escondiendo el nudo entre la piel y la cámara. ¡ Vamos, que si le dabas un cabezazo al balón y dabas en la correa, quedabas arreglado!. Y no digamos del calzado. Con alpargatas y gracias por que el que tenia borceguies, era medio Rey. Eran unas alpargatas iguales que una bota, pero también de suela de cáñamo y el resto, lona. Eran otros tiempos Ricardo pero también te diré que es muy cierto que la necesidad, agudiza el ingenio y al no tener medios, buscábamos sustitutos para todo con mucha modestia y ayudándonos mutuamente en todo. No era dificil ver que dos amigos habian decidido jugar medio partido cada uno y el que habia dejado de jugar, le dejaba al otro los borceguies o los pantalones o lo que fuese. Y aviso a la juventud actual. Como no teniamos coches ni tampoco nuestros padres, para ir a jugar a Campredó, Amposta, Cherta y hasta la Ampolla, íbamos en bicicleta y en algún caso, uno sentado en el cuadro y el otro pedaleando. Con esto quiero decirte también, amigo Ricardo, que en mi opinión, la comodidad tampoco es muy amiga del sacrificio que hay que hacer para conseguir muchas cosas. Y esto te lo digo igual para el deporte que para los estudios, para el trabajo y para el desarrollo de todas las actividades. Una vez desarrollado este inciso, pasamos a la parte de la derecha de la calle San Blás, empezando en el Ángel.

Camiseria Vallespí; Sastreria Ibañez; Pintor Emilio Fumadó; Optica Segura; Merceria Guerola; Pasteleria La Inglesa;Comercial de Crédito R.C bicicletas y recambios; Corseteria Cinta Solé; Merceria José Maciá; Zapateria Crisanto Notario; Electrodomesticos Clari; Orobitg, relojero; Carniceria especializada en carne de caballo; Máquinas Colomé; Pasteleria Hermanas Ciurana; Taberna La Gandesana; Ferreteria Duart; Pinturas Canivell: Carniceria Navarro; Alpargateria Manolita Ferré; Barberia Francisco Escoda; Tejidos Fabregat; Tocineria MªCinta Royo; Calzados Garcia; Comestibles Ernesto Montagut y Alpargateria Calvet; Comestibles Josefa Pallarés y ya desembocábamos en la calle Cervantes, el Ensanche para nosotros. ¡Cuantos recuerdos nos trae esta calle! Era nuestro punto de unión, sobre todo los domingos, cuando a la salida de misa, dábamos nuestro clásico paseo hasta chafar raya, que era ir ininterrumpidamente desde una punta de calle hasta la otra en grupos de amigos y conversando sin parar entre todos.Luego nos íbamos al Parque. Por la noche a la salida de la 2ª sesión de los cines, la concurrencia era todavia mayor y su animación aumentaba con la música que emitian los altavoces de Falange, situados al principio de la calle. ¿ RECUERDAS nuestras primeras sonrisas a las mozas? Aquella creo que me ha mirado, no estoy seguro. Veremos a la vuelta. Y a la vuelta, nada. Y a la otro, tampoco, pero teniamos la ilusión de que alguna vez seria la primera y en cuanto esto se daba, ya tenias que las siguientes vueltas, nos uniamos todos y a charlar. ¡Cuantos noviazgos no habrán surgido de estos paseos de la calle Cervantes. Pero aparte de esto, se conversaba con todo el mundo, se desarrollaban amistades, que aún perduran, y nos conociamos todos un poco mejor. ¡Qué tiempos!. No seré yo quien diga si mejores o peores que los actuales. Cada uno que saque su propia conclusión pero lo que tu y yo estamos de acuerdo, es que eran tiempos muy, muy, muy diferentes Empezando la calle Cervantes, parte izquierda, dirección Estación. Teniamos primero el estanco de Escudé. En la esquina siguiente,el edificio conocido por casa Brunet, sede de la emblemática Academia Cots, un gran Centro educativo sobre todo a nivel comercial y en cuyos bajos estaba instalado el bar de la Sociedad de Cazadores de Pilar Homedes que más tarde se transformó en el bar Negresco. de mucha categoria y que estuvo montado y regido por aquel buen barman, aragonés, de Zaragoza. que se llamaba Enrique Gil Quiñones. El vino a Tortosa, a descansar, procedente de Madrid, donde habia regido una cerveceria en la calle de la Cruz, junto a la puerta del Sol. Allí tenian su parada los taxistas Manuel Curto, Juan Chavarria y Hermanos Homedes. Siguiendo la ruta, Ricardo, recordaras que a continuación estaba el abogado Enrique Pedret y gestoria Joaquín Plá; Correos, donde ahora está la licoreria Fernando; Igualatorio Médico-Quirúrgico del Colegio Oficial de Médicos de la Provincia del que estaba como representante, José Mª Martorell; Fotógrafo Vallés; Joyeria Amor; Banco de España donde como ves hay mucho más movimiento que antes. Haremos otro inciso para hablar un poco del mismo. Por una disposición del Gobierno, se suprimieron todos los servicios del Banco de España en todas las ciudades que no fueran capitales de provincia. Por tanto, se cerró el edificio. Con posterioridad, y después de gestiones de numerosas personas y autoridades y sobre todo gracias al gran mecenas tortosino D. José Celma Prieto, se instaló allí la Universidad a Distancia (UNED), donde en la actualidad ya han surgido los primeros titulados de grado superior con la totalidad de la carrera cursada en el Centro. Ha sido un gran acierto. Siguiendo la acera izquierda, a continuación del Banco de España se encontraba y aun se encuentra, el convento é iglesia de las Siervas de Jesús. Luego Radio Electrón; Doctor José Rosell Delsors y Dr. Luis Vallés Roselló; la imprenta de Algueró y Baiges, que tambien era libreria. Tintas de Isabel Vilá de Salvadó; Cartonajes Dertos y a continuación venia el cine Goya del Sr. Pentinat que tambien era teatro y donde se celebraban también muchos espectáculos de revista de la época. Posteriormente se transformó en frontón de frontonistas profesionales que tuvo mucho auge en la época hasta que cerró, creo que bajo bastantes presiones. También había baile de orquesta todos los domingos. Como otra variante, se transformó en bolera con escaso éxito. Finalmente se derribó y se construyó el actual Hotel Berenguer. Después venia el garaje Cervera, con su poste de gasolina, servicio de taxis, taller mecánico y garaje. En la acera derecha, empezando por la calle San Blas, estaba una sucursal de DYPA; Dr. José Matheu Climent; Gestoria Boix; las oficinas de Falange donde estaba

instalado el altavoz que transmitia música durante nuestros paseos de los domingos por la tarde-noche; Café Versalles, por cierto, primer local social de nuestro Club Deportivo Tortosa, donde se instaló posteriormente el Banco de Aragón hasta que este fue absorbido por el Banco Central. Después se transformó en la actual gestoria Janini y un banco que quiero recordar ha cambiado un par de veces de nombre. En la esquina siguiente, el Banco Hispano Colonial;, Bar y Pensión Colón y el cuartel de la Guardia Civil en el edificio esquina a la calle Berenguer. En la esquina siguiente el famoso Bar Chicote,de Andrés Miralles, célebre por sus aperitivos y a continuación el Banco Español de Crédito. En la esquina siguiente de la calle Genoveses estaba el famoso café Español, regido por el Sr. Emilio, abuelo de nuestro buen amigo “Miliet”, portero que fué del C.D. Tortosa. Era un café muy grande, con billares, partidas de cartas, negocios de la época etc. Etc. Cuando cerró, se instalo allí las oficinas centrales de Arrocerias Reunidas del Ebro (ARDE) de mucha importancia en la época. En la actualidad estan las oficinas de la Caja Postal y Querol, Club de la Oficina. Despues se encontraba el Club de Tenis, con su famosa pérgola cubierta que ocupaba toda la acera. También fué y es una Entidad de solera en nuestra Ciudad. A continuación estaban los almacenes de ropa y confección de Mortimer. RECUERDAS la frase del anuncio ¿Quien te viste ? Mortimer en sus almacenes Remitrom, que es fácil ver que era su propio nombre escrito al revés; El propietario se llamaba Mortimer Bellaubí Canalda. En los pisos sobre estas tiendas y locales, estaban el Dr. David Maqueda Muñóz; Dr. Estanislao Pujol Menescal; Procurador Julio Mora Pascual y Corredor de Comercio Ignacio de Ramón y de Abaria. Aqui finalizaba nuestra famosa calle Cervantes. Pasaremos ahora a la calle posterior y paralela a la calle Cervantes. Nos referimos a la calle Historiador Despuig. Recordarás que era una calle sin mayor relevancia comercial pero que albergaba a 4 entidades de mucha transcendencia. Nos referimos al nuevo Colegio de la Consolación; el colegio de los Hermanos de La Salle ; la estación de autobuses de a Hife y la nueva Clínica Lluch, si bien esta última parece una paradoja decir nueva cuando estos dias ha cerrado sus puertas por jubilación. El 1º, el Colegio de la Consolación, viene de su emplazamiento anterior de la calle de la Rosa y que representaba el afianzamiento de dicho Colegio dentro de la Sociedad tortosina y de su comarca. La gran cantidad de alumnas obligó a la construcción de este nuevo edificio que en su momento, fué un pionero en cuanto a sus adelantos y comodidades. El mismo caso es el de la Clinica Lluch. Su emplazamiento anterior en el nº 1 de la calle de la Rosa, se hizo insuficiente para albergar la cantidad de clientes locales y comarcales que su prestigio había conseguido y se construyó este nuevo edificio que, como decimos anteriormente, ha cerrado estos dias por la jubilación de su Director Propietario Dr. Lluch. Casi puede decirse lo mismo de la estación de autobuses de la Hife. De su prmer emplazamiento, cuando llegaron desde Benasal la Compañia y sus primeros empleados, en la por entonces calle de la Sangre, concretamente donde estuvo tantos años los almacenes Pedrola, pasaron a la plaza de Alfonso XII, donde actualmente está´el Banco Central Hispano, que antes fue cine Niza y más anteriormente almacenes de aceites Bonet que fué el sucesor directo de la Hispano Fuente en Segures, que por cierto y como curiosidad para el que no lo sepa, lleva este nombre en honor a las aguas medicinales de su balneario de Benasal (Castellón). Al aumentar sus líneas y sus autobuses, decidieron construir el actual garaje qué, por cierto, en la actualidad, solamente queda como taller y oficinas pues la estación de autobuses esta instalada en el edificio que construyó el Ayuntamiento y que explota la mencionada Compañia. Ultimamente se nota un aumento y mejoria de sus servicios despues de una temporada en baja como consecuencia del cambio de propietarios. Hemos dejado para el final el colegio de los Hermanos. Yo diria y no fuí alúmno suyo, que ha sido el Colegio más emblemático, privado, que ha existido en Tortosa. Por mayor cantidad de alumnos, sobre todo teniendo en cuenta las limitaciones de la época, por una muy buena calidad de la enseñanza y por la educación social y moral que se les inculcaba a los alumnos. Era una enseñanza que ahora llamariamos primaria pero con cierta especialización contable. De sus filas salieron el 95 % de empleados de banca que posteriormente llegaron en buen número a Directores; empleados contables de la mayoria de Empresas tortosinas y de la comarca y algún otro etc. La

costumbre de la época era que cuando un banco, una empresa, una tienda o algún taller necesitaba un empleado administrativo, acudia al colegio y le recomendaban a un alumno, que siempre hacia quedar bien al colegio por su laboriosidad, honradez y preparación. Pero este tipo de enseñanza iba cambiando y el colegio aspiraba a más y pretendió ampliar la primaria con una continuación a traves del bachillerato. Parece que hubo muchisimos problemas y al final optaron por marcharse. Fué un triste final para un colegio que llevaba tantos años y que aún hoy, hay muchos ex-alumnos que lo recuerdan con mucho afecto. En esta calle, tambien estaba la carpinteria de Montagut. Descendiendo hacia el río, recorreremos en primer lugar la calle Teodoro Gonzalez que empezaba con el cine Fémina que quiero que recuerdes que se estrenó con una gala y con la pelicula El Escándalo protagonizada por Armando Calvo, Mercedes Vecino, etc. Fue todo un acontecimiento. Lecheria Natividad Domingo; .; tintoreria Ibérica de Casimiro Font y la galeria y estanco de Escudé, ya esquina a la calle Cervantes, Por el otro lado, la carpinteria de Franquet; Lechera Tortosina y la Academia Cots. Al otro lado de la calle Cervantes, en la parte izquierda, la gestoria Boix y en la siguiente esquina, la central de teléfonos de tan “ grato “ recuerdo. Si te parece, Ricardo, le dedicaremos un pequeño párrafo dedicado a las generaciones posteriores a la nuestra, para que sepan cómo nos movíamos y el ritmo de vida más tranquilo que llevábamos. Y pese a esto, todo seguia su curso y habia mucho menos stress que ahora. Que quede claro que no voy en contra de los adelantos modernos en todos los órdenes, al contrario, los uso y disfruto como los demás y asombrado en muchos casos por dichos adelantos. Queda dicho antes que es una explicación de la central telefónica, como botón de muestra de lo anteriormente comentado. Empezaremos por decir que en aquella época todos los teléfonos eran manuales. Quiero decir que no había números para llamadas automáticas. Aún quedaban algunos que llevaban una manivela adjunta al aparato y al descolgar, le dabas dos o tres vueltas y eso era la llamada a la central. Los aparatos más modernos, solamente al descolgar, ya sonaba el aviso en la Central. Al contestar la telefonista de la Central, solicitabas el número local o la conferencia. Pero cuidado, esto ya era más complicado. Para las llamadas a la comarca, léase Amposta, San Carlos, Ulldecona, etc. Generalmente te anunciaban que la demora estaba entre la media hora y las dos horas, pero para los grandes centros como Barcelona, Madrid, Zaragoza etc. como mínimo, un dia por otro, era de tres a cuatro horas. Sucedia lo mismo a la inversa o sea llamar desde estas ciudades a Tortosa. Pero en aquella época no todo el mundo tenia teléfono por lo que para hablar con cualquier persona que no tuviese teléfono en otra Ciudad, habia que poner lo que se llamaba un aviso de conferencia. Dabas el nombre y la dirección de la persona que querias hablar y a través de unos empleados que habia en todas las centrales, repartian el aviso para una hora determinada y las dos partes interesadas se personaban en su respectiva Central y podían hablar, pero nunca a la hora anunciada pues siempre se añadía el correspondiente retraso y así estaban siempre llenas las Centrales, aumentados por los viajantes y forasteros que tenían precisión de efectuar alguna llamada. Parece que las conferencias internacionales gozaban de cierto privilegio y no era raro que en menos de 10 minutos estaban en comunicación. Así contaban los vieneses en su espectáculo, que un Sr. en el consultorio de Barcelona quería hablar con Badalona y no había manera. Al darse cuenta del privilegio citado de las llamadas internacionales, pidió una conferencia con Paris que le tramitaron en el acto, habló con su pariente y le pidió por favor que llamara a Badalona a su casa y le dijera a su esposa que no la esperase a comer. Por cierto, a medida que habian más teléfonos en Tortosa, se iba quedando colapsada la central y hubo que instalar otra en la calle de la Rosa que cubrió muchas solicitudes pero aumentó los problemas. Frente a la Central, estaba el bar Mondor, actualmente Mundial. Después las oficinas del C.D. Tortosa; sacos José Montañés Adell, Almacén de materiales de construcción de Joaquin Sales; Comercial Radio; Imprenta Monllaó y enfrente, en todos los bajos del Centro del Comercio estaban los almacenes de aceites Ballester; más abajo la fonda de Josefa Carles Vda. de Gas, que posteriormente se dividió en dos, al separarse los dos hermanos, uno de ellos, Pepin, fue un gran boxeador. Luego los nuevos almacenes se la S.A. Farmacéutica Aragonesa; Taller eléctrico de J. Torres; Bar Sport de gran raigambre entonces y ahora, regido por la familia Colomé. En el piso

de arriba, el dentista Agustín Audí; Ferreteria Margalef y al llegar a Felipe Pedrell, Cementos Borrás y Mesón Parador del Ebro. Calle Campomanes, empezando por la parte del rio, teníamos al abogado David Subirats Carsi y al Veterinario Joaquin Montserrat Vericat; el odontólogo Dr. R. Mestre Riba; Licores Pedro Lapeira Forés; Géneros de punto y reparación de medias de Narciso Tena; Dr. Joaquin Soler Prades; Contratista Julian Fernandez; Procurador Francisco Tallada Cachot; Pastas de sopa de José Fabregat Segarra; dentista Evaristo Martí Fabregat; corredor de fincas José Calbet Ventura; licores Juan Favá Arasa; Camiseria Tena; Maquinaria Industrial I.C.A. del Sr. Herraiz, junto al veterano Cine Coliseum en el que tanto nos costaba adquirir las entradas para los domingos y donde acudimos casi a escondidas a ver la tan “vituperada” pelicula de Gilda. En la esquina estaba el bar del Coliseum, regido por Secundino Andreu. Antes de llegar a la plaza de Alfonso XII, teníamos Almacenes Jordá; y yá en la Plaza, Aceites Ballester;, debajo del Centro del Comercio; Construcciones S,A. Crédito y Obras; Corredor de Comercio Rafael Zaragoza Santiago;El Rápido de Tortosa, recadero diario con Barcelona, de Mario Balagué; Aceites Francisco Alifonso Gas; Mutua General de Seguros con su director Sr. Escriche, gran españolista/ periquito y también su agente Sr. Mañé. Dando la vuelta estaba la pasteleria de Gozalbo, Clinica Sabaté de largo historial comarcal, dirigida por el Dr Secundino Sabaté, con el que colaboraban sus hijos Drs. Tomás y José Sabaté Roselló y las monjas de la Consolación; Panaderia Juan Salvat Barberá y almacen de aceites Bonet, después que se marchó la Hife. Corredor de Comercio Joaquin Bau Nolla; Dr. José Delsors Pujol. Continuando hacia arriba, por Campomanes, estaba y está la farmacia Salvia; el Dr. Federico Llorca; las oficinas de la 2ª Jefatura de Estudios y construcción de Ferrocarriles, del Ministerio de Obras Públicas y que llevaba todo lo relacionado con el Ferrocarril de Val de Zafán, de triste memoria, pues alegando, fundamentalmente que no era rentable, se cerró practicamente a los cinco meses de morir D. Joaquin Bau, que por lo visto, debido su cargo, era el que aguantaba é impedia el cierre. Pero los intereses y el peligro que el buen funcionamiento de esta línea representaba para otros, pudo más que nadie y se cerró. Pero amigo Ricardo, desde su apertura, del tramo Bot-Tortosa el 10 de Septiembre de 1.941 hasta su cierre el 14 de Septiembre de 1.975, no se gastó ni una peseta en el acondicionamiento y mejora del trazado, que se había terminado con fines militares, trabajando incluso con un batallón de prisioneros, que residian en Cherta en una fábrica, creo que de harinas que había a la salida de la población, a mano izquierda dirección Alcañiz. Pues bien, Ricardo, en el momento de cierre, funcionaba el servicio entre Tortosa, Alcañiz, Puebla de Hijar y Zaragoza. Todo completo, estaciones, casillas, telégrafo, etc. Estaba y aún esta, finalizada la Estación monumental de Tortosa, en Ferrerias, prevista para 24 vias y donde iba también la actual estación de Tortosa. Estaba hecha toda la explanación hasta San Carlos de la Rápita incluso las explanadas de las estaciones de Amposta y San Carlos, y un ramal, que a través de un túnel, llegaba al puerto y corria paralelo al muro hasta llegar al final del espigón. También quedó preparada la explanación para continuar hasta Alcanar y enlazar con el ferrocarril de Barcelona a Valencia. Date buena cuenta que esta línea con las modificaciones necesarias en su trazado y altimetria y aunque solo hubiese sido una curva reparada por año, representaba todo el desahogo del Pais Vasco, Navarra y Aragón hacia el Mediterráneo por ser su línea más recta. Imaginate el porvenir del puerto de San Carlos; la salida de productos de la Cámara de Amposta; la puesta en servicio del ferrocarril de dos ciudades con mucho porvenir como son Amposta y San Carlos, etc. Etc. Pues bien, no dudando que la línea no era rentable debido al mal servicio que habia, hay que decir muy fuerte que en España, entonces y creo que ahora, no hay ninguna línea que sea rentable. Lo que sucede es que entonces, como ahora, todas estas tierras de la Terra Alta, Baix Ebre y Montsiá seguimos siendo ciudadanos de 4ª categoria. Pero lo peor es que creo que nos lo merecemos pues refiriéndome a este ferrocarril, los ayuntamientos se dieron mucha prisa para empezar a tapar zanjas, demoler puentes, etc. sin tener paciencia y unir fuerzas para defender sus intereses hasta el límite. En fin, Ricardo, es otra de las cosas que irás observando a lo largo de estos dias. Sigamos con esta calle Campomanes hacia arriba. En las 4 esquinas de esta calle en su cruce

con la calle Cervantes, estaban el Banco Hispano Colonial, el café Versalles, la casa que estaba la gestoria Plá y Correos. Siguiendo hacia arriba, estaba el contratista de obras Agustin Pedrol Griñó; muebles La Industrial; fábrica de gaseosas de Francisco Curto Gas; Seguros Juan Bta. Celma Comas; nuestra muy recordada Radio Tortosa, donde a través del gran aficionado Sr. Mestre, se fueron forjando y poco a poco cumpliendo su misión Paco Guimerá, Luz Acero, José Mª Vallés y Rodolfo Lamote la clásica pareja de “charrades sense malitzia” con su clásica despedida, despues de dar palos hacia todos los lados: “Andosien y a esforsarse”. Posteriormente fueron incorporándose J.A.. Odena y Joaquin Rambla. Una pena que después de pasar a Radio Nacional de España, también desapareció. Otra cosa más. Y la misma Emisora de R.N.E. en Ulldecona, aún sigue funcionando. Luego seguia un lateral del colegio de la Consolación y enfrente, el despacho del Aparejador y Perito Agrícola Sr. Gaya Gilabert, padre del actual Arquitecto Sr, Gaya Jardí. También el abogado Luis Jardí Ferré. Pasamos a la calle Berenguer IV. Empezaremos por el rio. En la parte izquierda, Aceites S.A.T.A. y restaurante Tortosa de Julia Prado. Después del acceso a las Galerias Franquet, la plaza de Alfonso y después Gestoria Tator de Serafin Sánchez; abogado Manuel Prada Catalá, primer Presidente del C.D.Tortosa y luego el constructor José Herrera; Colegio de la Consolación ; Generos de punto Barrobés y Cerrajeria de Daniel Ramirez Otero. Volviendo a la parte del rio, por la parte derecha empezabamos con materiales de la construcción Julian Mayor; Corredor de Comercio Andrés López Muñóz; la plaza de Alfonso, ya reseñada anteriormente y luego el Dr. Emilio Llorca Piñol y el dentista Julio Morá Abad; Bar Chicote; Banco de España; Cruz Roja; peluqueria de señoras de Ramón Montserrat; Herreria de Conrado Barberá y yesero Francisco Gómez Gómez. En la calle Genoveses, no muy comercial, estaban los aceites de Mª Teresa Gaya Gilabert; Constructor José Obalat Calvo. Aceites Juan Panisello Valldeperez; Perito Industrial José Bernis de Jorge; Embutidos Francisco Espelta Salvadó; Dr. Juan Andreu Fábregues; Dr. Francisco Renau Martí; Banco España y Convento de las Siervas de Jesús; Recaudación de Contribuciones; Colegio de los Hermanos, almacenes de Bau y aceites Lubrificantes de Ramón Alentorn Ricós En la calle del Padre Cirera estaba y está la Caixa de Pensiones y nuestro emblemático y por aquel entonces muy brillante Centro del Comercio. ¿ RECUERDAS sus famosos bailes de fiestas Mayores y sobre todo para Navidad, Nochevieja y Reyes? . Daremos un salto y nos pasaremos al barrio de Remolinos. Luego regresaremos a la zona del Ensanche y recorreremos la actual avenida de la Generalidad, orilla del rio y el barrio del Rastre. Recordarás que el barrio de Remolinos era un barrio netamente agrícola en la mayor parte de sus vecinos. Pues bien, en la actualidad sigue siéndolo con mayor motivo pues se han trasladado de barrio alguna pequeñas industrias que allí había como eran y son, Cristales Guardiola que se ha trasladado al Polígono Industrial Baix Ebre, junto a Campredó. Lo mismo ha sucedido con el Matadero Municipal una obra modernista proyectada por el Arquitecto Pau Monguió, padre del tambien arquitecto y tambien Pau Monguió, que muchos años más tarde proyectó el actual Colegio de la Merced, situado en el barrio del Rastre. sobre la antigua fábrica del Gas. De Remolinos también se ha trasladado la Cooperativa Agrícola de Santiago, al principio de la carretera del Arrabal de Cristo desde la carretera de Valencia y se ha fusionado con las cooperativas de Roquetas y Jesús, formando una sola con la denominación de Soldebre. Empezaremos el recorrido por la Calle Ciudad donde nos encontrábamos la boteria de Pastafio; piensos y alfalfa Remigio Folch, bicicletas Ricardo Ferrando, un gran corredor de bicicletas, sobre todo en pista donde generalmente formaba pareja con Fombellida y que se quedó en Tortosa al retirarse formando sociedad con José, el Llampo. Hojalateria de Marro; barberia

Roselló, pasaje de Franquet; y a continuación, una pequeña plaza formada por varios edificios destruidos y donde estaba la carboneria de Pepe y el bar La Cinta, muy acreditado en la época por sus extraordinarias meriendas y recenas. Lo regentaba la familia Más, que posteriormente se trasladó a Vich, donde regentaban dos establecimientos similares. También estaba en esa placeta, casa Virgili. En la actualidad, se ha construido en ella, el edificio que alberga los servicios de Cultura de la Generalidad y la Biblioteca Pública. Es el Palacio Oliver de Boteller y hay que resaltar qué.el edificio en cuestión, estaba situado en la orilla del Ebro y fue trasladado piedra a piedra, en cuanto a fachadas, a su actual emplazamiento. También se trasladó el frontal de la fuente gótica que había estado en la plaza de Agustín Querol, Era de planta octogonal y construida a finales del siglo XIV. El palacio Oliver de Boteller era del siglo XV y allí existió una institución bancaria denominada “Casa dels Canvis e dels Comuns Dipósits de la Ciutat de Tortosa” .Después perteneció a los Jordá y finalmente a los Guzmám de Villoria. Fue sede del Banco de Tortosa en el año 1.881 y en 1.895 el Club Recreativo y finalmente al Ateneu. Habia sido hospedaje de Felipe II y fue destruido en la guerra civil de 1.936/39. En su emplazamiento actual, se hallaba situado el Palacio Municipal, Casa de la Ciudad, Ayuntamiento de la época. Seguian por la calle Ciudad, la librería López, horno d la Canonja, Aridos y transportes con caballerias de Juanito Cadenes, una herreria, el Palacio del Obispado, sede de todos los Obispos tortosinos y de los que ya hemos hablado anteriormente; Afilador de sierras Ricart; carpinteria Panisello, Comestibles Mascarell, tintoreria de Juan Besalduch, Farmacia, pirotecnia de Juan Besalduch y antes de pasar a la calle Cruera, no seria justo olvidar a nuestro barrio chino particular, más conocido como “la Costa”. Merece la pena recordarlo, guste o no guste, pues era un autentico desfiladero de hombres de toda la comarca y de casa. Lo componian, con variantes posteriores, las casas de “Los Pajaritos”, “La Mayals”, “La Chiquina”, “La Irene”, “La sucursal” y alguna más que no son al caso. Eran casas autorizadas y controladas, lo que representasba cierta garantia. Podriamos decir que vivian al amparo de la represión sexual de la época pero algo falla cuando pensamos que en la actualidad, sin esta represión, con las variantes de la época, este tipo de casas han proliferado enormemente hasta el extremo de anunciarse en la prensa, pero ¿el control médico obligado anteriormente. existe actualmente en todos los establecimientos? Sigamos con lo nuestro, Ricardo y continuábamos por las calles Cruera y Sta. Ana, donde estaban ciclos Plá; Comestibles “Los Cachorros”, Oficinas del Canal, Colegio de Remolinos, edificado sobre la antigua cárcel, estanco y comestibles de José Mauri y barberia de Rufin. Al llegar a la plaza de San Jaime nos enconrábamos con la Cansaladeria de Tomás, Bar Manolo Carniceria “La Tacos”, comestibles de Carmen Ferraté Domenech, madre de Ramoncita y Angeles Rosello. La primera es la actual joyera y objetos de regalo y la segunda es la esposa del popular José Otero. A continuación el horno de Manolo Sanz Cid y los molinos de aceite de Calafat y el Aldoverenq Al adentrarnos en Mayor de San Jaime, nos encontramos con Cristales Guardiola con el bueno del Sr.Jaime al frente y sus hijos Rodolfo y Miguel, hoy separados comercialmente pues uno se encuentra en la calle Barcelona y el otro en el polígono de Campredó. Tenian una buena y abundante plantilla dedicada, mayormente. al montaje de vidrio en obras. Era y continuan los hijos siéndolo, una buena Empresa. A continuación nos encontrábamos con la “Jarra· y sus famosos y acreditados pastisets, conocidisimos en toda Cataluña y alrededores. Era un producto manual, elaborado con algún aditivo natural, que los hacia diferenciar de otros por su mayor gusto y sabor. Después venia la vaqueria de Vicent, Comestibles “La Barraquera· y el bar de Piqué, posteriormente de Paco Balagué donde Juanito Vidal buen futbolista, Presidente del C.D.Tortosa, dio sus primeros pasos en el negocio a la sombra de su madre y padastro. Actualmente es propietario del bar Estudiantil en la plaza Joaquin Bau.. A continuación, en la calle Pintor

Casanovas, nos encontrábamos con el café de Manel, la Cooperativa de Santiago y otra acreditada casa de pastisets como era la de “Tereseta la Calses”. En la Plaza de la Inmaculada, encontramos la licoreria de Fernando, comestibles Cinta, Café de Enrique, Barberia de Ramón, Café Morena, contratista de obras José Beltrán Rodriguez, los restos de la antigua plaza de toros, de la que hablaremos más adelante, la Iglesia de San Jaime, las carpinteria de Baubi y Pepe Chavarria y el Balneario de Porcar, al que también queremos dedicar unas líneas. Si te parece bien, Ricardo, comentaremos al final de la visita al barrio de Remolinos, estas dos obras emblemáticas como son la Plaza de Toros y el Balneario de Porcar a los que añadiremos el Matadero Municipal, en la Avda. Felipe Pedrell y el barrio judio.. Al salir de la plaza de la Inmaculada, nos adentramos por la calle Mayor de Remolinos, donde nos encontramos al contratista Juan J. Baubí Baiges, con el representante, poeta y gran dibujante José Rollán. con el guarnicionero Batina, el horno de Paca, Comestibles Aguiló, taberna de Peu, barberia de Alberto Mañé, molino de aceite de Antó, Comestibles de Julio Mauri Sabaté, sucesor de su madre, Pilar Sabaté Fornós, “la Botons”, la pequeña Ermita de Santa Rosa, Patrona del Barrio y en cuyo honor se celebraban unas mágnificas fiestas de Barrio, que nada tenian que envidiar a las de Ferrerias, el otro gran barrio de Tortosa. Se celebraban bailes, toros, carreras, pasacalles, rondallas, etc. etc. siendo el principal centro de las fiestas la siempre denominada “explanada de Remolins”. Despues de la Ermita, estaba la alfareria de Arturo Noé, Vinos Chavarria, Horno de José Royo, molino de aceite de Salvadó “de la Mora”, taberna de Fosch, “Musola”, que hacia de recadero, en carro, al Puerto de Caro. En la Travesia del Muro, estaba el carretero Muixeli y en la travesia de Jerusalem, estaba la fábrica de mosáicos de Joaquín Vilarroya Masip.. Con posterioridad y paulatinamente se fueron construyendo los grupos de casas baratas de Mariano Tornadijo y Casanova; la urbanización de la Plaza; acceso al Parador; pista polideportiva, dispensario, la urbanización llamada Feria y el famoso, merecidamente, Parque del Príncipe con sus numerosas y extraordinarias escultura del desarrollo de la vida, obra del escultor De Santiago y todo ejecutado y desarrollado gracias al mecenazgo del ilustre tortosino D.José Celma Prieto. Si te acuerdas, Ricardo, todo está asentado en los terrenos del antiguo balneario de Porcar y su importancia y categoria, creo que no está explotado como merece. Este Parque, junto con otros extraordinarios monumentos como pueden ser las murallas, catedral, barrio judio, castillos de la Zuda, Tenalles, Orleans, Bonete, palacios de Boteller, Oriol, Despuig y Capmany, que pese a ser privado, no creo que hubiese ningún problema para la visita a su famoso patio. Creo, Ricardo, que hay muchas cosas más para visitar, colegio San Luis, Sto. Domingo, tesoros y códices de la Catedral, por ejemplo, y a ti y a mi y a muchos otros tortosinos, nos duele no se organice esta cuestión para poder conseguir un turismo que buena falta nos haria. . En el barrio judio, .formado por pocos y estrechos callejones, destaca la Plaça del Platge y las calles de Vilanova, Gentildones, Jerusalem, etc y su conjunto conserva todo su ambiente medieval, mereciendo una visita detallada de toda la zona. Otro lugar a comentar es el antiguo Matadero Municipal. Es un edificio modernista y fue obra del Arquitecto Pau Monguió Segura. Se inauguró en 1.908 y ha estado funcionando hasta hace unos tres años, que se ha trasladado al polígono de Campredó. Actualmente se están ejecutando obras de restauración y consolidación que permitirán adaptar el edificio para una Facultad de También es un edificio a visitar. El Balneario de Porcar se construyó en 1.9 y su destino fue como lugar de reposo y aprovechar las aguas del manantial que allí existe. Se construyó el hotel, un teatro, pistas para baile y una zona de jardines con una vegetación frondosa que permitia el disfrute del verano con una temperaturas muy agradables. Despues de la guerra, en fiestas señaladas, aún se hicieron bailes en su terraza, amenizados por las extraordinaria orquestas locales Batavia y Satélites.

Y finalmente la plaza de toros. Fue una pena su demolición, pues actualmente su utilidad seria muy amplia para otro tipo de espectáculos. Allí se celebraron mítines politicos con asistencias masivas y en cuanto a su utilidad taurina, habria que recordar las actuaciones de Por aquí finalizamos nueastros RECUERDOS del barrio de Remolinos. Como podrás observar, Ricardo, por la parte del rio hay mucha variación desde que te fuiste. La más importante fue la construcción del muro que ganó una calle y separó toda la alineación de casas correspondientes con el Palacio del Obispo. Fue una gran mejora. La expansión del barrio, poca, se está desarrollando precisamente entre la parte antigua y el rio. Es una buena zona y si el emplazamiento del futuro parque ferial se decide por allí, la zona puede ser objeto de una buena ampliación. Ahora, Ricardo, pasaremos a visitar la actual Avenida de la Generalitat y la paralela al rio qué, como verás, es una de las zonas por donde más se ha ampliado la Ciudad. Empezaremos desde la rampa del puente, en dirección al Parque. El primer tramo de la calle, se llamaba entonces de la Sangre. Por su parte derecha, encontrabamos a los Pienso de José A.Montañés Segarra, Merceria de Mercedes Villagrasa Gorini, Hierros de Manuel Virgili Aixalá, Tejidos de Cristobal Minguell Fabregatm cuyo negocio han continuado sus hijos José Mª, Paco (e.p.d.) y Jaime, Tintoreria de Juan Murall Escudero, Tejidos Joaquin Calafell Andreu, Doctor Calafell y Curtidos Colomines, cuando vino trasladado de la calle de la Rosa. Hacia esquina con la calle Lonja. Por la parte izquierda, incluyendo un trozo de la travesia del Angel, también conocida como callejón del Siboni. Allí habia una barberia, que regentaba Juanito Albiol, hijo de Rufin, el peluquero de Remolinos, Almacenes y sastreria el Siglo de Honesto Torrens Parreu, , Merceria Tudó, Merceria Miravalls, Ferreteria Federico Caudet, Tejidos Manuel Ruperez, antiguos Benet Piñana, Coloniales Joaquín Prades Segura, En el piso 1º, la comisaria de Policia, donde se despacharon el primer Documento Nacional de Identidad, Merceria Segarra Boix y Farmacia José Mª Renau Martí en la esquina con el callejón de la Sangre A partir de aquí, hasta la plaza de la Paz, por la derecha teniamos en la calle de la Lonja, hasta el rio, el almacén de frutas de Turón y Urgell, El restaurante La Tasca de Santiago Fabra y la Clinica La Alianza en su primer emplazamiento. Fue y es, una gran institución, pero en aquella época, con la seguridad en embrión, tuvo una importancia extraordinaria, junto con las clínicas de Sabaté, Lluch, Abades, posteriormente Monegal y el hospital de Jesús. Hoy todo ha cambiado pero justo es dedicarles este modesto recuerdo. A continuación y por la parte derecha, estaba la alpargateria de José Adam Tena, camiseria de Manuel Miravalls Riba, Ferreteria Plá, Alpargateria Francisco Gallart, Alpargateria Tafalla y Cia. S.L. Teidos José Pedrola Millán y frutas Eduardo Espuny Sebastiá. Por la parte izquierda, Estanco de Carmen Caballé Bel, Tejidos Pilar Vaquer, Vda. de Cavé, esparteria de José Nocolau Varés, central de D. Y P. A., drogueria y productos alimenticios. Loza de José Mauri Estupiñá, merceria Salvador Mascarell Ferré, Merceria de Juan Gas Bel, muebles Edualdo Pedrola, Frutas Francisco Barberá Espuny, Joyeria José Homedes Ramirez, Cereales Pilar Jardí. Vda. de Dalmau y tejidos Francisco Curto. En la Plaza de la Paz, en la derecha estaba el establecimiento de drogas y coloniales Luis Vericat Delsor y en la parte izquierda, Zapatillas, cordeles y albarcas de Tafalla, Alpargateria de Pilar Cladelles Baiges, electricista Juan Beltrán Zaragoza y comestibles José Baulenas Domingo. Aquí empezaba la calle de Reus.

Hoy empezaremos con el Barrio del Rastre. Es un barrio relativamente nuevo, pues en Abril mde este año, ha cumplido 139 años, según concesión del Ayuntamiento de entonces a D. Manuel de Córdoba y Miguel para construir un barrio, en terreno de su propiedad, y según los planos presentados al efecto. Ocupaba un espacio encajonado entre el castillo de San Juan y La Zuda, al norte y el fuerte del Bonete, al sur y limitado por la muralla principal del siglo XIII y una contra-muralla exterior del siglo XV. Por nuestra época, Ricardo, habia cuatro cosas que recordamos por encima de todo. La plaza, el colegio de San José, la fábrica del gas y el barranco qué estaba descubierto hasta la plaza aproximadamente. Hubo una barrancada en el año 1.944, que debió ser determinante para su cubrición hasta dejarlo como ahora lo ves. Antes, recuerda, era un cauce del barranco, que dejaba solo una pequeña circulación lateral y con sus correspondientes peligros. El Colegio de San José y su fundador Mosen Manuel Domingo y Sol, ha representado mucho para el Rastro. Seminaristas y escolares, lo han poblado a lo largo de los años y ha sido una buena base para el nivel cultural de muchos jóvenes, hombres ya, que recuerdan constantemente sus años escolares en los Josepets. Tiene actualidad este comentario, pues el finalizado curso 1.999/2.000, ha sido el último que sus alumnos han tenido en sus aulas. A partir del 2.000, el colegio pasa a integrarse en el antiguo seminario, donde le deseamos toda clase de éxitos. La fábrica del Gas, situada sobre la antigua Necrópolis, fue una de las primeras instaladas en España Se puso en marcha el año 1.877 y su primer Director y propietario fue el Sr. Barnils hasta 1.885 que traspasó su negocio al Sr. Masana Tarrés. Modernizó la fábrica y llegó a producir 5.000.- m3. diarios de gas, empleándolo, al principio, sus 1.500 abonados para usos domésticos y para el alumbrado. Con la modernización de los productos energéticos, la fábrica entro en

desuso hasta llegar a su cierre. Con posterioridad, se ha construido un grupo escolar que lleva el nombre de La Merced, con mucha capacidad de alumnos y que está diseñado por el Arquitecto Pau Monguió, hijo del autor del proyecto del matadero y de otros edificios más en Tortosa. Y finalmente la plaza. Al principio se llamó de Tetuan y luego de Mosen Sol, que aún mantiene actualmente. Antes de la guerra estuvo allí instalada una estatua de Mosen Sol que duró hasta la revolución de 1.932. Para evitar males mayores, el Alcalde Sr. Benet, ordenó su traslado al claustro de la Catedral donde permaneció hasta la guerra de 1.936. El pedestal se conserva en el recinto del Colegio de San José. La plaza, al cubrirse el barranco, observarás, Ricardo, que ha ganado en amplitud y prestancia, pero creo que aún se le puede sacar mucho más partido. Volviendo a nuestro tema del paseo, ya hemos nombrado la fábrica del Gas y el colegio de San José, dos centros, en su época, muy importantes en la vida del barrio, pero había más cosas. Estaba la fábrica de piedra artificial de Siso Cano, de gran importancia en el gremio de la construcción de Tortosa y Comarca; fábrica de velas de la familia Espinach; la venta de agua de la Caramella por Joaquina “la Neira”; Taberna del Ros; constructor de obras Ramón Grifoll “Lluquets”; Carpinteria de Felipe Benet; pintor Pascual Blanch; fundición de cobre de Marqués; blanqueadores Amaré; vestidoras de difuntos Nieves Sesé y Paca; electricista Ricardo Princep; taberna de Andreu “lo Luixan”; contratista de obras José Bellobí Royo; Juanita la planchadora, todo una institución en su época; hornos de cal de Musol; los lavaderos públicos en el barranco; barberia de Tomás Andreu; sastre Garrigosa, muy importante y con mucha clientela; alpargateria y comestibles de la Sra. Maria en Ros de Medrano; también la alpargateria de las hermanas Adam, en la calle del Medio; la señora Encarna pitonisa muy conocida; encurtidos de aceituna de Ferré “Tosa”; reparación de sacos Montañés; molinos de aceite de Cavet, de “Ullots” y del Dragó; caballos de la remunta en la plaza; escuela de música y el tratante Juan Ramón, hombre de mucho prestigio entre todos los suyos y entre los que no lo eran. Tenia su punto de contacto y reunión, en el bar Mundial, en la actual Avda. Generalitat. Las fiestas del barrio, en honor de la Virgen de la Providencia, se celebran el 15 de Agosto y en su tiempo, fueron de mucho explendor, compitiendo con Remolinos y Ferrerias. Los actos festivos, bailes, etc.y la romeria a la Ermita de la Providencia en Mitg-Camí. están devolviendo explendor actualmente a las fiestas del Rastro. Creo, Ricardo, que ya hemos recorrido el barrio. Posiblemente nos hemos dejado algún establecimiento, como en todos los recorridos efectuados, pero siempre son ajenos a nuestra buena voluntad. Ha sido un barrio pujante, con una época de paralización y decaimiento que parece está superando con la ayuda de sus vecinos, a través de su Asociación y la colaboración municipal. Y ahora, Ricardo, andaremos un poco más y nos trasladaremos al barrio de la Leche, donde veremos lo poco que habia en nuestra época.