Revista Yaguarzongo N° 46

46
1

description

Órgano de difusión de la Casa de la Cultura Ecuatoriana Núcleo de Zamora Chinchipe

Transcript of Revista Yaguarzongo N° 46

Page 1: Revista Yaguarzongo N° 46

1

Page 2: Revista Yaguarzongo N° 46

2

DIRECTORIO2011-2015

PRESIDENTELic. Claudio Torres Torres

VOCALES PRINCIPALESLic. Alejandro JumboLic. Armando RomeroIng. Miguel Samaniego

Dr. Miguel Parra

VOCALES SUPLENTESLic. Leonardo Quiñónes

Dr. Ramón Calderón Lic. Hectór Peña

YAGUARZONGOEs una publicación de la Casa de la Cultura

Ecuatoriana “Benjamín Carrión”, Núcleo de Zamora Chinchipe

DIRECCIÓNHernando de Benavente y Pedro de Barahona

Telf: [email protected]

Zamora-Ecuador

Los artículos, colaboraciones o temas diferentes, son responsabilidad de sus autores y no comprometen a la

Institución.

Reproducción autorizada citando la fuente.

DISEÑO, DIAGRAMACIÓN E IMPRESIÓNEDITORIAL “LEONEL FEIJÓO”

CCE NÚCLEO Zamora ChinchipeRevista Número 46 - Marzo 2014

ÍNDICE

Editorial.................................................................2Zamora de Ayer...................................................3Nueva Obra..........................................................4Galería..................................................................5Conversando con.............. ....................................8Pintura Submarina...........................................................10La pasta piedra..................................................12La Cordillera del Cóndor.................................14El fruto de lo imaginario...................................16Día Internacional del Hombre..........................18El sustento del texto........................................................20Kingman............................................................25Mi cuarto y los cuentos de Pablo...............................27El diablo descubierto............................................................29La misteriosa mujer de blanco........................30Hugo Guaman....................................................31Himno a la Amazonía.......................................34Filatelia es cultura.............................................35Biografía.............................................................37La Posada del Cuento.......................................38Poesía..................................................................40

Comentarios, sugerencias a: [email protected]

buscanos en facebook

Page 3: Revista Yaguarzongo N° 46

3

EDITORIAL...

Claudio Torres T.,

Presidente CCE Núcleo Zamora Chinchipe

Hemos arribado al año número 70 de presencia de la Casa de la Cultura “Ben-jamín Carrión” en el Ecuador. Este acontecimiento no solo es propicio para vi-vificarnos con el brillante ideario de Carrión, ese rotundo aporte que mucho ha servido para fortalecer nuestra Patria y la patria grande que es Latinoamérica; también es propicio para dar muestras del cambio, de la renovación en la gestión institucional, y en este caso de la que desde el sur del Ecuador estamos empren-diendo. Y es que el vivir en esta gran aldea global, como en su momento la llamó McLuhan, por otro lado nos ha impuesto nuevos retos que hay que asumirlos con entereza y eficiencia.

Nuestra revista “Yaguarzongo” en su número 46, por primera vez ha querido nu-trirse del pensamiento no solo de autores del sur del Ecuador, como: Juan Carlos Izquierdo, Paúl Palacios, Joffre Villalba, José Carlos Arias, Patricio Guzmán, Hugo Arias, Hilario Zhinín, Umar Klerth; sino también del aporte de autores de gran talla del vecino país del Perú como: Percy Valladares, Julio Solórzano, Raúl Gálvez Cuellar, Paúl Ramírez y Carlos Llanos. Un amasijo de cultura ecuatoriano–perua-no; un transvase de historia y de riqueza que no es nuevo, sino que viene desde tiempos pre incásicos donde “en este espacio, se relacionaron diversas sociedades a lo largo de las diferentes épocas: prehispánica, colonial, y republicana; caracte-rizándose como un territorio de una gran riqueza de recursos culturales especí-ficos, y diferentes de aquellos de los territorios que lo rodean”. Hocquenghem y Durt (2002). Ecuatorianos de las provincias de Loja, Zamora Chinchipe y El Oro y peruanos hermanados por la cultura.

Hemos asumido este gran reto de una revista binacional, en la cual ponemos a consideración de vosotros temas de: historia, de biodiversidad, de artesanías, de fotografía, de arte plástico, narrativa, filatelia, poesía, entre otros. Remarcamos entonces la necesidad de fortalecer esos nexos de cooperación, y que la cultura sea la antítesis de lo que representan los límites y la política, en lo que a unir nuestros pueblos y comunidades se refiere.

“Yaguarzongo”, estimo que es el nombre que mejor nos une a ecuatorianos y pe-ruanos, por ello les agradecemos a todas y todos por hacer de este número, el mejor homenaje con el que este año, iniciamos la celebración a esta Casa ideada por Benjamín Carrión.

Page 4: Revista Yaguarzongo N° 46

4

EL ALUVIÓN DEL 63Foto: Minga para la limpieza de la vía en el sector El RetornoFuente: Prof. Hilda Gavilánez de Izquierdo

La madrugada del 24 de junio de 1963 se rompió una represa natural que se había formado en una que-brada del sector de El Retorno, cerca de la carretera a Loja, misma que con gran fuerza se sumó a las caudalosas aguas del río Zamora y aunado a la fuerte estación invernal que también incrementó el caudal del río Bombuscaro, ocasionó el aluvión más grande que se ha dado en la historia de la ciudad. Desde su inicio cerca de Sabanilla arrasó con el campamento del MOP y la vida de 35 trabajadores. A su paso dejó desolación y muerte pues una gran cantidad de animales de las fincas fueron llevados en el gran cauce que se formó. Su paso por Zamora se sintió con mayor fuerza alrededor de las cinco de la mañana en que disparos de fusil realizados por el Sr. Eduardo Soto desde el sector de La Península llamaron la atención de la población. Una especie de gran laguna se había formado sobrepasando el nivel normal del río y llegando a cubrir todo el estadio antiguo y el sector de la unión con el río Bombuscaro. En una canoa manejada por Julio Torres y César Izquierdo se logró salvar al recordado Alonso Soto y su esposa que habían quedado varados en medio de la inundación. Solo al llegar la mañana se pudo apreciar la grave desolación que se había causado, los peces muertos por miles eran recogidos por los zamoranos que en pequeñas canoas navegaban por la gran laguna. Días después se organizaron grandes mingas para la limpieza y arreglo de los destrozos causados por el aluvión. En la fotografía se aprecia a los maestros y padres de familia de la escuela Eloy Alfaro de Zamora que organizados por el Director de Educación Sr. Vicente Rivera realizaron una gran minga para el mantenimiento de la carretera a Loja precisamente en el sector de El Retorno donde se inició el aluvión. Pero el aluvión no solo causo desgracias en Zamora, pues su recorrido a lo largo de todo el curso del río llegó con su ola de destrucción hasta más allá de los límites de la provincia. .

JUAN CARLOS IZQUIERDO

© 2013 Juan Carlos Izquierdo – Derechos Reservados.

Zamora, 1963

4

Page 5: Revista Yaguarzongo N° 46

5

NUEVAS OBRAS

Título:

Un Drama en el Corazón

Autor:

Galo Guaicha Guaicha

Edición:PrimeraPáginas:

94Editorial:

“Leonel Feijóo”

Título:Mariposa

Autor:

Joffre Juan Villalva Casanello

Edición:PrimeraPáginas:

148Editorial:

“Leonel Feijóo”

Título:Laguna de Papel

Autor:Manuel Ortiz

Edición:PrimeraPáginas:

94Editorial:

“Leonel Feijóo”

Hago gustosa esta presentación no solo por la

amistad el respeto y el aprecio que le tengo sino

por conocer de su entrega al quehacer literario,

después de leer este libro espero que mi lectura

haya sido capaz de percibir todos los aciertos de

su poesía, que mi análisis esté a la altura de su

trabajo y de su dedicación, sé del valor que tie-

ne un libro para el autor y sé del esfuerzo que

representa.

Confiada me acerco, sumerjo mis pies, mis manos,

mis sentidos a sus cristalinas y remansadas aguas,

percibo la ternura, la soledad la nostalgia, el amor

que encierra Laguna de Papel y me apropio de su

fragancia de la frescura de sus aguas por las que

corren hondas y profundas emociones, saboreo la

riqueza de sus versos escritos con sabiduría y con

la soltura de quien domina el oficio de este libro.

Poesía que se nutre de las experiencias de la vida

de las batallas del amor de sus triunfos y derrotas,

así es la poesía de Manuel Ortiz a veces tenue, a

veces festiva, profunda y silenciosa, remanso, ola

y marejada, cristal y espejo, una remuneración de

la nostalgia que siempre está a su acecho, como

una herida intermitente, poesía que apuesta innu-

merables veces al amor a las trampas que son el

corazón conoce, y que solo el corazón entiende,

describe poéticamente la experiencia de un amor

intenso, se abandona …………..poesía que se

nutre de emociones, porque eso es la poesía, el

lenguaje de la emociones. Escribir poesía es ver la

vida, el mundo, el amor de una manera personal y

única, es hacer de la soledad una celebración her-

mosa, encontrar la belleza en la parte más oscura

del corazón, es la fiesta de las palabras, un despo-

jarnos de las máscaras y mostrarnos cómo somos

con el barro que estamos hechos, un poema será

algunas veces la sombra de nosotros, un espejo o

un testimonio del instante en que vivimos y que

lo perpetuamos y finalmente un pájaro volando

hacia todas partes.

Manuel Ortiz, conjuga los elementos de la nueva

poesía las imágenes y adjetivaciones reciben nue-

vos significados. Sin lugar a dudas la nostalgia es

una de las emociones más recurridas en la poesía

de Manuel, y es natural que así sea porque escri-

bimos sobre las cosas que más nos duele que más

nos conmueven.

Experimenta con reiteraciones aparentemente in-

usuales eso solo lo hace quien entiende a la poe-

sía como el espacio para crear, para explayarse y

logran figuras literarias que van más allá del juego

vacío de palabras.

Un lenguaje bien trabajado con sensibilidad y be-

lleza.

Presentación “Laguna de Papel”Dra. Mónica Cuenca

Page 6: Revista Yaguarzongo N° 46

6

GALERÍA

“La música está en todo” nos dice Luis Ayala, porque influye en todas las expresiones artís-ticas como la danza, el canto, la pintura y la literatura, por eso quizá desde muy pequeño le gustó involucrase en la mú-sica.

Radicado en Yantzaza, el maestro Luis Ayala nació en la capital del Ecuador el 15 de junio de 1948. A la edad de 16 años ingresó en la orden de San Agustín de Quito con la idea de algún día llegar a ser sacerdote, es así que continúa sus estudios superiores y religiosos bajo la tutela de los padres Agustinos en la Universidad Católica de Quito. Al parecer el camino ha-cia el sacerdocio era inminen-te; pero su gusto por las bellas artes lo aparto de este objetivo cuando paralelamente a sus es-tudios de teología se apuntó en el Conservatorio de Música.

Una vez dentro del conserva-

ORQUESTAS SINFÒNICAS JUVENILES…

EN BUSCA DEL SUEÑO

6

Page 7: Revista Yaguarzongo N° 46

7

torio por intermedio del Instituto Ecuatoriano de Crédito y Becas –IECE- el gobierno sovié-tico le otorgó una beca para estudiar música en Moscú, en San Petersburgo por alrededor de 10 años donde tuvo la suerte de conocer a famosos como; Ilya Musin y Mariss Jansons destacados Directores de Orquesta a nivel mundial.

Con los años consiguió la seguridad que bus-caba como músico por lo que sin pensarlo dos veces acepto muchos retos, mientras duró su estancia en uno de los países más grandes del mundo como lo es Rusia, aunque también lo hizo en Finlandia, Suecia y España.

Los retos fueron aceptar ser Director de im-portantes Coros, lo que le permitió abrirse paso como un verdadero profeta en tierra aje-na. Inició siendo Director de Coros de Helsin-ki- Finlandia(1990), Director del Coro “Esbo” Finlandia (2001), Director invitado de la Or-questa Sinfónica de Rusia-Moscú, Director de la Orquesta de Cámara Mozarteum y de la Universidad de San Peterburgo, en Rusia en el periodo (2000-2001). Y antes de volver al Ecuador finaliza como Director de la Orques-ta Internacional “Ilya Musin” Madrid-España en el año 2009.

Cabe decirlo, que durante su estancia en Rusia la fuerte atracción por las artes le hace tam-bién descubrir la literatura y la pintura obte-niendo también gratos reconocimientos. De la literatura podemos hablar de poemarios como “Tunas de Amor” y entre “Flautas Prohibi-das” y algunos otros que fueron publicados en idioma sueco, ruso, húngaro y finlandés. En cuanto a la pintura se pudo visibilizar ante los ojos de la crítica europea que lo catalogó así: “Luis Ayala Hermosa ha creado su pro-pio idioma de imágenes, en las líneas de sus pinturas hay música y poesía, es un pintor del instante”.

Pero el destino estaba marcado para nuestro multifacético amigo, y luego de 36 años fuera de su país regresa y se radica de forma per-manente en el cantón Yantzaza, lo bueno es que no llega con las manos vacías, sino con un portafolio de ilusiones y propuestas. El reto era grande, pero él tenía a sus espaldas años de experiencia y sabía por dónde empezar; y no descansaria hasta lograr conformar (pro-yecto) la Orquesta Sinfónica Musical Juvenil de Yantzaza, compuesta por niños de 6 a 13 años.

Convencido, que los talleres de música de cortos períodos no solucionan la necesidad de aprender en los niños y jóvenes, ya que mu-chos se quedan abandonados y desorientados; ha podido socializar con autoridades locales este gran problema, con el anhelo de reforzar las asignaturas de cultura estética y de edu-cación musical de las Escuelas y Colegios de nuestra Región. Esta labor ha sido bien vista por la sociedad Yantzacence.

Pero según Ayala aún queda muchos pasos para dar; como el que dio hace pocos días, cuando entregó en las manos de Claudio To-rres, Presidente de la Casa de la Cultura Nú-cleo Provincial, un proyecto denominado “ORQUESTA SINFÓNICA INFANTIL Y JUVENIL ZAMORA CHINCHIPE, con mi-ras a que se desarrolle en toda la provincia y

El gobierno soviético le otorgó una beca para estudiar música en Moscú, en San Petersburgo por alrededor de 10 años donde tuvo la suerte de conocer a fa-mosos como; Ilya Musin y Ma-riss Jansons.

El Maestro Ilya Musin, fotografiado por el maestro Luis Ayala en una de sus clases.

Page 8: Revista Yaguarzongo N° 46

8

el oriente ecuatoriano.

Sin duda este es el gran sueño de Luis Ayala que los niños, niñas, jóvenes y adolescentes puedan tener una capacitación sustentada en la continuidad; tanto de aprendices como de educandos en materia musical. Que no solo los niñ@s de la capital provincial tengan el privilegio de aprender a tocar al algún instru-mento musical, que los infantes de los barrios y comunidades alejadas también tengan esa suerte.

Otro paso significativo ha sido poder sociali-zar con las escuelas bilingües la posibilidad de capacitar a los niños y niñas de la etnia shuar; como la de “Yamant Sawant” del barrio Gran Colombia donde ya dicta las primeras clases de música a 24 niñ@s que estudian en este establecimiento, no sin antes gestionar ante el Consejo Cantonal de la Niñez y Adolescencia del Municipio de Yantzaza, la compra de 24 flautas dulce para sus alumnos (as).

“Se sabe que muchos niños y adolescentes luego de la jornada escolar se dedican a la te-levisión, a las máquinas de juegos, al internet y otros a pasar el tiempo vagando por las ca-lles; esta sería una forma de solucionar este gran mal que aqueja a nuestros muchachos”, afirma el artista.

Con esta entrevista Ayala, aparte de dejar constancia de la labor desempeñada en pro de la Música, nos deja el mensaje de luchar por lo que queremos, de emprender proyectos productivos en favor de las nuevas generacio-nes; con el propósito de seguir activándolos en las actividades musicales.

Le deseamos éxitos en su camino a seguir y desde esta redacción apoyamos su gran traba-jo como activista cultural.

Luis Alberto Ayala Hermosa, cursó estudios de post grado de dirección coral y orques-tal, obtuvo el título de Máster Internacional de Dirección de Orquesta Sinfónica y Máster en Artes Pedagógicas-Musicales, pintor, músico, director de Ópera y Orquesta Sinfónica. En Europa realizó diferentes exposiciones de pintura: colectivas e individuales. Además es coautor del filme documental sobre el Prof. Ilia Musin y sus teorías de dirección de

orquesta, con la TV Filandesa.

Obra de Luis Ayala Hermosa que se encuentra en la portada de su libro, publicado en la CCE Zamora Chinchipe.

Page 9: Revista Yaguarzongo N° 46

9

Me encuentro en Lima, capital del Perú y como siempre luce majestuo-sa con su catedral y casas señoria-les de otras épocas, el bullicio nos indica que está despertando en otro amanecer de su historia, no sé si por coincidencia, estoy alojado en la Po-sada de Atahualpa que queda en Ni-colás Pierola 1176 – me he grabado tan bien la dirección por ese temor que tenemos las personas de extra-viarnos- El reloj me indica que son

(PATRICIO GUZMÁN CÁRDENAS)Loja - Ecuador

Conversando con:

las 14 horas 30 minutos, me queda 30 minutos para llegar a tiempo a la Entrevista en el Club “La Unión” con Carlos Arturo Llanos Solis, Pre-sidente del XXXIV Congreso Mun-dial de Poetas WAAC 2014 – Perú. Salgo a la calle, y vaya… atravieso avenidas y parques que desearía describirlos en su contextura, sin embargo pienso que eso sería ma-teria de otro escrito, ¡hay tanto que decir! Pero también me voy cruzan-

do con personajes singulares como el de un Papa Noel en silla de ruedas que en la Avenida Cuzco expende caramelos a diez céntimos de sol, siempre he tenido la idea de Papas Noeles de gran estatura con carca-jadas estruendosas que regalan ju-guetes y que presurosos se meten por las chimeneas de las casas, pero este es diferente, rebosa en alegría roja igual que su vestimenta, pero es flaco y posee una carcajada ausen-te, y por curiosidad le compro unos cinco caramelos, esperando que sean mágicos. Caramba se me está haciendo tarde digo, al ver que mi reloj me da un tiempo de cinco mi-nutos para llegar a la cita, apresuro el paso. Ya en el Club La Unión me hago anunciar con un señor de cierta edad (me reservo el cálculo) vestido impecablemente y con algo de cal-vicie no sé si de las preocupaciones que debe tener –tome asiento, espere un momento- me dice en tono grave. Transcurren los minutos, posible-mente… no sabría decirlo, hasta que al fin por las escaleras del Club con un traje de revista, veo descender a mi entrevistado, su sonrisa me lo dice todo, es de los típicos peruanos cordiales, estrechamos nuestras ma-nos en un signo de hermandad bina-cional, e inmediatamente me invita a pasar al Salón, donde se desarrolla la presente entrevista.

Estamos con el Magíster Carlos Ar-turo Llanos Solis Presidente del Co-mité Ejecutivo del XXXIV Congre-so Mundial de Poetas WACC 2014 - Perú a desarrollarse entre el 15 al 22 de Septiembre 2014.

9

Page 10: Revista Yaguarzongo N° 46

10

1- En ocasiones los Latinoameri-canos somos pesimistas y no con-fiamos de nuestras posibilidades. Hágame un recuento de como el Perú consiguió esta honrosa de-signación que por supuesto lo ca-tapulta como un ejemplo a seguir, y lo pone en la mira mundial como una potencia cultural, artística y poética.

R.- Bien lo dice, sufrimos de ese pesimismo, pero gracias a ello lu-chamos y pudimos vencer ese ne-gativismo, concursamos con cuatro países pero con persistencia y tra-bajo alcanzamos la nominación de la SEDE para el XXXIV Congreso Mundial de Poetas de la Academia.

2- ¿Qué significa para Usted haber sido designado Presidente de este Congreso Mundial de Poetas?

R.- Para mí es un gran honor haber sido designado Presidente del Co-mité Ejecutivo, y a la vez es la cul-minación de 50 años en el mundo de la literatura, lo cual me permite reunir a poetas de múltiples partes del mundo en el Perú y así poder-les brindar el cariño y el calor que los peruanos sabemos dar a nuestros hermanos del mundo.

3- Hasta ahora qué acciones han sido ejecutadas por Usted y el Co-mité para llevar a efecto este mag-no evento.

R.- Primero fue reunir a los diferen-tes escritores de las distintas orga-nizaciones y gremios e informarles acerca de la oportunidad de traer al Perú el Congreso Mundial de Poe-tas, además en dicha Asamblea se eligió al Comité Ejecutivo, el cual ha estado trabajando para satisfacer los requerimientos de la Academia, y así conseguir la nominación. A la fecha contamos con la carta oficial de la Academia en la cual se designa al Perú como Sede del XXXIV Con-greso Mundial de Poetas.

4- Y por supuesto, para informa-ción del lector deseamos conocer su semblanza biográfica.

R.- Desde niño la poesía estuvo arraigada en mí, y fue en el primer grado de la primaria que pedí recitar, y el Director accedió, me pararon en una silla y declamé Angelito de la Guarda, desde ahí todos los años en los actos literarios las madres reque-rían que recitara el mismo Angelito de la Guarda hasta que complete la primaria. Luego cuando entré a la Escuela Secundaria ya tomé con más seriedad la poesía y concursé en los juegos florales del Colegio, y así fui desarrollando las técnicas de la de-clamación, ya para los últimos años de mi instrucción secundaria hice mis primeros intentos de escribir poesía, y en el primer año universi-tario pude realizar mi primer poema titulado María, dedicado a una com-pañera de estudios que hasta la fecha ha sido un amor platónico, aquí hubo bastante amor y sentimiento. Para el año de 1994 en Australia auspicia-do por el Consulado General del Perú y la comunidad peruana, publi-qué bajo el título de “Un Poema de Amor” mis dos primeros libros que comprende el primero: Un Poema de Amor y el segundo: “Nostalgia”, cada uno de los cuales consta de cuarenta poemas. Luego para 1998 di a conocer mi segunda creación poética bajo el título de “Un Poema, Tres Historias y Una Verdad” que comprende los dos primeros libros anteriores más un tercer nuevo libro titulado “Amor, Anhelo y Pasión”, y luego para el 2011 publiqué mi ter-cera creación titulada: “Un Poema para el Mundo” en la cual incluyo mis tres libros anteriores más dos li-bros nuevos “Canto a la Madre Tie-rra” – “Remembranzas”, que dan un total de 200 poemas.

5- Qué papel cree que los Poetas y artistas de los países hermanos y vecinos al Perú, podemos desem-peñar en esta fiesta de hermandad y verso, pues lo vemos ya como

una cuestión de la América Lati-na, porque si triunfa el Perú, es-tamos convencidos de que después de algunos años, los otros países, caso Ecuador, podemos ser toma-dos en cuenta para organizar esta clase de eventos.

R.- En realidad tener el Congreso Mundial de Poetas en el Perú sig-nifica abrir las puertas para que la América Latina sea tomada en cuen-ta y así esta fiesta literaria en el Perú por los poetas del mundo mañana sea compartida con otra hermana República de América Latina.

6- En estos momentos va a existir un acto en la Casa de la Literatu-ra Peruana al cual Usted ha sido invitado, específicamente en ho-menaje a César Vallejo, defínalo a este Poeta Universal.

R.- Referirse a César Vallejo es refe-rirse al Maestro de la Poesía, es decir César Vallejo no solo le pertenece al Perú sino a todos como Poeta del Mundo que él fue. Por tanto es un honor ser participé de un homenaje que se le rinde al Gran Maestro.

7- Para terminar esta entrevista, y deseándole éxitos en estas altas funciones. Desearíamos un men-saje de Usted a los Poetas y tam-bién al Ecuador.

R.- A mis hermanos poetas del Ecua-dor, les digo que las puertas del Perú están abiertas y me gustaría compar-tir una tertulia poética con ustedes.

Y a los poetas de la América Latina decirles que mi corazón y mi poesía siempre estará con ellos, y quisiera hacer un hincapié y decirles a los hermanos del Ecuador, Venezuela, Colombia, Surinam y las Guayanas que muy pronto he de visitarlos y así realizar una pequeña travesía por la América del Sur, para luego com-partir y visitar con mis hermanos de Centroamérica y Norteamérica mi poesía en este Continente.

10

Page 11: Revista Yaguarzongo N° 46

11

En una visita que realizá-bamos al vecino país del sur Perú, tuvimos la oportunidad de conocer a un personaje muy particular por la actividad que realiza, él es Pascual Mimbela Chero, nacido en Los Órganos; un centro pesquero en un dis-trito al norte del Perú, siempre quiso fusionar sus dos activi-dades favoritas la pintura y el mar, así fue que nació el sueño de pintar bajo el mar.

Gracias a su talento innato ganó una beca para estudiar artes plásticas en Piura, la cual decidió no aceptar y eligió es-tudiar la carrera de diseño grá-fico en Lima. Aunque se alejó de su tierra se llevó consigo su sueño de niño.

Tiempo después, conoció a Denisse Sotomayor, Giuliana Dávila y Jeannette Dávila a quienes les contó de este sue-ño de pintar bajo el mar, ellas lo adoptaron como suyo al ins-tante y así surgió el proyecto cultural Pintura Submarina, con el cual a más de evidenciar el talento de Pascual, también intentan sensibilizar a la po-blación sobre la diversidad de especies y arrecifes que existen en el mar tropical peruano y así procurar su conservación.

Para Pascual, pintar estas obras no fue fácil, tuvo que tomar clases de buceo, lo que le tomo cierto tiempo, después

el sumergirse con un tanque de aire comprimido que dura 45 minutos y en ese lapso con-cluir cada obra le significaba

arriba: Pascual mostrando dos de sus obrasabajo: Pascual, pintando bajo el mar

Llevando el arte al fondo de lo imaginable

CCE ZAMORA CHINCHIPE

Page 12: Revista Yaguarzongo N° 46

12

que hacían detener el trabajo por temporadas, el movimien-to constante de las corrientes del mar que desorganizaban el material y no permiten delinear perfectamente los trazos, fue-ron la tónica de este proyecto que ya lleva algunos meses y ha logrado la realización de 16 cuadros pintados bajo el mar.

Los cuadros están realizados en óleo sobre lienzo, los pinta utilizando pinceles y espátu-las, la impermeabilización del lienzo es el secreto nos dice Pascual motivo por el cual hay que darle un tratamiento espe-cial.

Para cada inmersión Mimbe-la está rodeado de 2 equipos uno que documenta en fotos y video todo el trabajo con la finalidad de poderlo compartir en charlas con niños y jóvenes sobre la importancia de este hábitat marino y su trabajo; y otro equipo que colabora con lo que respecta a la elabora-ción de las obras.

Por el momento lo que está en mente de Pascual es concluir las 14 obras más con las que tendría un total de 30 comple-tando la muestra y continuar llegando con su mensaje de conservación por medio del arte de estos hábitats poco ex-plorados por el hombre.

El cumplir su sueño ha sido prueba de su infatigable es-fuerzo y su lucha constante por cumplir con lo que se ha-bía propuesto desde niño, hoy es el primer peruano en hacer pintura submarina dejando ya la huella de sus pinceles llenos de sal en un sitio importante del arte.

Fotos: Giuliana DavilaTexto: Fernando Ortega A.

otro reto, esto sin considerar el escenario marítimo en el que trabaja y donde la variación de colores producida por la pro-

fundidad en la que pinta hace confundir constantemente, la escasa visibilidad, depender de las condiciones climáticas

Fotos: Pascual en diferentes etapas de creación de sus obras

Page 13: Revista Yaguarzongo N° 46

13

LA PASTA PIEDRA EN MANOS DE UN ZAMORANO

trónico, ella me enviaba los datos y las fotos de cómo se preparaba las mezclas, me costó mu-cho trabajo conseguir todos los materiales para hacer la masa, pero preguntando por aquí y por allá pude encontrar los ingredientes y ponerme manos a la obra. El resultado fue fantástico y desde allí estoy con este nuevo proyecto.

En que consiste la pasta piedra?La pasta piedra se caracteriza por su gran resis-tencia y por no necesitar horno para fraguar, los objetos fabricados son más bien sumergidos en agua por algunos días y luego de eso se empieza a realizar los acabados.

Qué objetos se puede hacer con pasta pie-dra?Muchas cosas, es muy versátil. En principio, es muy usada para hacer fuentes de agua y tam-bién macetas para plantas. Pero en mi caso yo la utilizo para pequeños objetos decorativos, como por ejemplo: relojes, bandejas, fruteros, posavasos, portarretratos y candelabros, etc.

Cómo te iniciaste en la artesanía?A la edad de 9 años, cuando en la escuela me mandaron a crear un objeto en madera, “arran-que un tronco de la tierra y me puse a trabajar, allí descubrí el camino que quería seguir.”

En qué consisten tus trabajos actualmen-te?Trabajo en la confección de objetos en guadua y muchos de mis trabajos también tienen que ver con la restauración de antigüedades preferente-mente de madera: talla, lacado y acabados.

Trabajas en una nueva técnica para dise-ñar objetos, cuál es?Es verdad, gracias a una amiga argentina que conocí en un viaje que hice a Holanda pude co-nocer la técnica de trabajar en pasta-piedra, me quedé asombrado de los resultados que tenía la técnica en otros países y le pedí que me ense-ñará.

Cómo recibiste esta capacitación?Lo hice a través del internet y por el correo elec-

(JULIA MORALES TELLO)Relaciones Públicas CCE Zamora Chinhipe

Un artista de vocación es sin duda Héctor Vinicio Livizaca, oriundo de Cumbaratza que a sus 42 años de vida ha logrado plasmar con sus manos una gran diversidad de ideas a través de la madera, guadúa y actualmente de la pasta-piedra. Considera la artesanía como su vida, ya que gran parte de su tiempo lo dedica a crear objetos de gran valor inspirados en el paisaje intercultural de nuestra tierra.

13

Page 14: Revista Yaguarzongo N° 46

14

Como artesano zamorano, te sientes valo-rado y reconocido?La verdad no, nuestra profesión lamentablemen-te no tiene el reconocimiento social que debería tener, el artesano está muy desvalorado por las autoridades locales, en mi caso no pertenezco a ninguna asociación ni gremio por lo que me es muy difícil a veces participar en eventos provin-ciales o nacionales.

Qué quisieras que se cambie o se haga?Que den espacios a los artesanos de la provin-cia, que se hagan intercambios de exposiciones y talleres, que se tome en cuenta lo artesanal frente al interés que tienen quienes nos visitan, es una pena que Zamora no tenga, un museo, o una recopilación del pasado, porque eso atrae mucho al turismo.

Sobre tu trabajo actualmente qué nos puedes contar?Recientemente trabajé alrededor de 60 piezas realizadas en madera y pasta piedra, que fueron expuestas en las fiestas de provincialización en la última “Feria Gastronómica Zamora Chin-chipe 2013”; todo esto gracias al auspicio y al apadrinamiento de la Casa de la Cultura Núcleo de Zamora Chinchipe. Aprovecho la oportuni-dad para agradecer al Núcleo Provincial por el espacio y apoyo brindado, y en especial al Lic. Claudio Torres Presidente de esta Institución.

Quiénes visitaron tu última exposición, y que resultado obtuviste?La verdad creo que a propios y extraños, a todos llamo mucho la atención esta nueva técnica en pasta-piedra. Para ser la primera vez que expuse aquí en Zamora, creo que me fue exitosamente.

14

Page 15: Revista Yaguarzongo N° 46

15

La primera vez que en el barrio escuchamos nombrar a la Cordillera del Cóndor fue duran-te uno de los varios conflictos armados entre Ecuador y Perú: la Guerra del Cenepa.

Si bien la ciudad de Zamora está relativamente alejada de la cordillera, los zamoranos no fui-mos ajenos a la realidad de la guerra. La úni-ca vez que he visto volar un avión de guerra fue cuando tenía 13 años. Volvía a casa de la escuela y vi sobrevolar uno a gran velocidad y bastante cerca de la ciudad. Como no sabía distinguir entre un avión ecuatoriano o peruano, pensé que se trataba de uno peruano y lo único que avancé a hacer es agacharme como tratando de protegerme en caso de que fuera a disparar, lanzar una bomba, o algo parecido.

Recuerdo también que en las noches, las calles de la ciudad se quedaban sin iluminación y los vecinos nos juntábamos a escuchar una radio que funcionaba a pilas, tratando de conocer los detalles de la guerra y de saber cuán cerca se llevaba a cabo la batalla, con el miedo intrín-seco de que a lo mejor fuera a acercarse a la ciudad.

Un día mientras trabajaba en una carpintería, llegó la noticia de que el papá de un amigo y compañero del fútbol de los domingos había muerto en combate. Se trataba del Sgto. Ava-nanchi, y una de las primeras cosas que pensé era que ahora mi compañero del fútbol, por ser el hijo mayor, iba a tener que asumir la respon-sabilidad de su padre. Por un momento sentí miedo, ya que mi papá también estaba en una

zona cercana al conflicto. Luego, cuando el cuerpo del Sgto. Avananchi llegó a Zamora, se lo nombró Héroe de Guerra y fue enterrado con ceremonias y honores. Yo sólo pensé: ¿De qué te sirve todo eso, si ya estás muerto?

No fueron esas entonces, las condiciones idea-les para enterarnos de la existencia de la Cor-dillera del Cóndor; pero a mí al menos, se me quedó grabado en la mente que había tal, y que esta nos separaba a los ecuatorianos de los pe-ruanos. Entonces la Cordillera del Cóndor, fue por mucho tiempo, no sólo para mí, sino tam-bién para muchos, campo de batalla y sinónimo de guerra, de disputa, de enemistad entre dos naciones, en fin... sinónimo de MUERTE.

Ese concepto, que no era de unos pocos, sino de muchos, habría de cambiar con el tiempo. Luego de firmado el Tratado de Paz en 1998, la Cordillera del Cóndor pasó a ser conocida –más que por la misma guerra– por la gran riqueza natural que existe en ella; investigaciones cien-tíficas empezaron a revelar la altísima biodiver-sidad de la zona y, pasó entonces a ser sinónimo de VIDA.

Riqueza Natural

Siendo sincero, muchas veces mientras viajaba

“Camino por donde haya una gran cascada, que nazca donde las montañas se vuelven pie-dra. Esta cascada me dará fuerza...”

(Canto Shuar)

La Cordillera del Cóndor: más que un límite fronterizo

(PAÚL PALACIOS)

15

“Una de las primeras cosas que aprendí de la cordillera es que en ella no existen cóndores.”

Page 16: Revista Yaguarzongo N° 46

16

desde Zamora a El Pangui o a Gualaquiza, ha-bré pasado como si nada frente a la cordillera. No sabía exactamente su ubicación y tampoco había estado interesado en conocerla. Para mí, como quizás para la mayoría de zamoranos, aún en estos tiempos, no eran más que simples y comunes montañas, no era más que un límite fronterizo.

Personalmente, no fue sino hasta 2001 cuan-do ingresé a la Universidad a estudiar Ciencias Ambientales que me enteré de su riqueza natu-ral. Ya para entonces, científicos de la talla de David Neill (1990), Alwyn Gentry (1993), Ro-bin Foster y Hamilton Beltrán (1995) y, Alexan-der Hirtz y Carlyle Luer (1995) habían realizado varias expediciones a la Cordillera del Cóndor, encontrando en sus adentros especies que hasta entonces eran totalmente desconocidas para la ciencia.

Una de las primeras cosas que aprendí de la cordillera es que en ella no existen cóndores (Vultur gryphus), así que no le debe su nom-bre a la existencia de estas aves; quienes la han sobrevolado dicen que las diferentes montañas que la constituyen le dan la forma de un cóndor con las alas extendidas, supuestamente de ahí su nombre. Una segunda teoría es que los prime-ros visitantes foráneos confundieron a unas aves nocturnas llamadas Tayos (Steatornis caripen-sis) con Cóndores. A raíz de ello, para referirse a dicha cordillera, se hizo costumbre entre los visitantes llamarla Cordillera del Cóndor, aún sin saber a ciencia cierta que se trataba de una especie distinta.

Me enteré también, que se trata de una cadena montañosa que tiene alrededor de 150 Km de longitud de norte a sur, ubicándose en el Ecua-

16

dor en las provincias de Morona Santiago y Za-mora Chinchipe; que tiene una altitud máxima de cerca de 2900 m. snm.; que de acuerdo con algunos estudios tiene una conexión biogeográ-fica con el Escudo Guyanés –por eso sus mon-tañas planas (tepuyes) en el Alto Nangaritza– y que algunos expertos han afirmado que puede tener la “flora más rica de cualquier área de ta-maño similar en el Neotrópico” (Schulenberg y Awbrey, 1997; Neill, 2005), y que además “tie-ne casi con certeza una de las concentraciones más altas de especies de plantas vasculares aún desconocidas científicamente que cualquier lu-gar en la Tierra”1.

Esa fue una de las razones para interesarme más aún por ella, pues entre 2000–2001 la Cordillera del Cóndor todavía conservaba el 91% de su co-bertura vegetal natural, lo cual significaba que aún había mucho por descubrir en ella.

El profesor David Neill, a quien recientemente, ya en mi vida profesional tuve el honor de cono-cer, habla en sus publicaciones de varios géne-ros descubiertos recientemente en la Cordillera del Cóndor y que son nuevos registros para el Ecuador. Inclusive habla del registro de varias especies nuevas para la ciencia; éstos incluyen árboles localmente endémicos que son restrin-gidos a los bosques de arenisca de la cordillera, es decir, que no se pueden hallar en ningún otra parte del planeta, si desaparecen estos ecosiste-mas las habremos perdido para siempre.

En enero de 1997, Conservación Internacional realizó una expedición científica; los resultados expusieron un gran valor biológico, concluyen-do que la Cordillera del Cóndor “constituye una de las regiones biológicamente más ricas de toda Sudamérica” (Conservación Internacional, 1997).

Doce años después, se volvió a desarrollar un estudio rápido de la Cordillera del Cóndor en-contrando para el Ecuador, entre otras cosas: 2 nuevos registros de insectos hoja, 1 nuevo regis-tro de anfibio, 2 nuevos registros de mamíferos y para la ciencia 3 nuevas especies de plantas, 13 nuevas especies de insectos hoja, 10 nuevas especies de insectos palo, 4 nuevas especies de anfibios y 1 nueva especie de reptil.

1 Inventario Botánico de la Región de la Cordillera del Cóndor, Ecua-dor y Perú: Actividades y Resultados Científicos del Proyecto, 2004-2007

Page 17: Revista Yaguarzongo N° 46

1717

Riqueza Cultural

Pero la riqueza de la cordillera no se limita úni-camente a la flora y fauna. En ella hay una gran riqueza cultural. El principal grupo humano que habita en este territorio es la nacionalidad Shuar, de espíritu guerrero y milenario, y que depende en gran medida de los recursos de sus bosques.A los Shuar, más por desconocimiento que por otra cosa, se les ha catalogado de poco trabaja-dores (“vagos”), quizás porque a diferencia de los demás pueblos que habitan esta provincia, estos no talan el bosque para establecer grandes potreros. Un criterio bastante general en la pro-vincia es que mientras más cantidad de potre-ros haya en una propiedad, más trabajadora es una persona. Lo que ignoran quienes tienen ese criterio es que, por tradición, los Shuar no des-truyen el bosque porque dependen de él para la caza, la pesca y la recolección de frutos, que son y han sido milenariamente su forma de vida, lo que les ha permitido su independencia del mer-cado.

Los Shuar son los únicos que conocen a certitud los cientos de senderos que se pierden y reapa-recen en el medio del bosque, además de poseer una sabiduría que es el resultado de su milenaria convivencia armónica con el entorno. En el bos-que han aprendido a encontrar la cura para las enfermedades, sus alimentos y hasta venenos que son utilizados para la caza y la pesca.

A propósito de esto último, siempre tengo la duda respecto de si allá en la cordillera pudiera estar la cura para enfermedades tan nefastas como el cáncer, la diabetes, el sida y otras. Recordemos lo que pasó con la cascarilla (Cinchona offici-nalis) encontrada en nuestro Parque Nacional Podocarpus que salvó al mundo entero del pa-ludismo. Probablemente ahora mismo no lo se-pamos, pero considero que es un potencial que está ahí, y estará, como una verdadera riqueza, mientras las y los zamoranos chinchipenses op-temos por seguir conservando nuestra cordille-ra. Es ahí, donde nuestra cordillera se convierte también en sinónimo de ESPERANZA.

En conclusión:

La Cordillera del Cóndor es el límite natural entre Ecuador y Perú, zona de un conflicto sin sentido que duró años y en el que murió mucha gente, pero con un atributo excepcional que la ha hecho merecedora de un reconocimiento y de

un status a nivel mundial debido a su singular flora, fauna y cultura.

Aunque en la actualidad esta región se encuen-tra aún en un estado de relativa conservación, está claramente amenazada por proyectos de “desarrollo” en diferentes estados de planifi-cación e implementación, a ambos lados de la Cordillera.

Por otra parte, aunque no lo he mencionado a detalle en este artículo, las aguas que fluyen de la Cordillera del Cóndor riegan extensas áreas habitadas por comunidades indígenas y colonas (ecuatorianas y peruanas) que dependen de este recurso y de los productos del bosque sustenta-do por las mismas.

Sin lugar a dudas, el manejo apropiado de los recursos de la región, para beneficio de las ac-tuales y futuras generaciones, dependerá de las decisiones que tomen las autoridades que estén al frente de la provincia y el país ahora.

Ojalá que la conservación de la biodiversidad y la cultura de la Cordillera del Cóndor se con-virtiese en una prioridad a nivel provincial, na-cional y mundial; que ese proceso sea con la participación de todos los habitantes del área, incluyendo a los grupos indígenas; y que la ca-pacitación local en el manejo apropiado de los recursos sea considerada prioritaria en las polí-ticas de conservación y desarrollo.

Sólo así, nuestra Cordillera del Cóndor seguirá siendo sinónimo de VIDA y de ESPERANZA..

Los Shuar son los únicos que conocen a certitud los cientos de senderos que se pierden y reaparecen en el

medio del bosque, además de poseer una sabiduría que es el resultado de su milenaria convivencia armónica con el

entorno.

Page 18: Revista Yaguarzongo N° 46

18

El objetivo de este escrito es demos-trar la falencia del argumento polí-tico que se maneja en la región, no con el ánimo de ofender sino con el firme propósito de mejorar en algo la capacidad de criterio que tienen sus habitantes, ya el tiempo dirá luego de todo lo obrado, si hubo justicia y razón.

En la realidad fronteriza de Ecuador y Perú se vislumbra la negociación simultánea con el gigante asiático, tal como se pretendiera luego de la Gran Colombia; fortalecer los lazos de amistad con el enemigo por con-siderarlo el más fuerte. Aunque se debe reconocer que las técnicas son diferentes; unas en bicicletas otras a pie, contribuyen a la ignominio-sa tarea de reescribir el pasado con los mismos argumentos; buscar el bienestar para el pueblo a través del bien común, cuando a breves rasgos podemos darnos cuenta de que la primera alianza con el capitalismo no funcionó; sin ser pesimistas de-beríamos considerar que el socialis-mo democrático (nueva versión del pensamiento socialista de Lao Tse) tenderá a los mismos resultados. Y es que no existe ninguna otra para-doja que; cuando nos damos cuenta de algo: hacemos como que no nos importa y volteamos la página de la experiencia. Este esfuerzo por negar la realidad es fruto de vivir anhelan-do lo imaginario, lo que es peor es

EL FRUTO DE LO IMAGINARIO sobre la vida de los pueblos

( JOFFRE JUAN VILLALVA CASSANELLO )Zamora - Ecuador

tratar de que pueblos enteros cami-nen con la misma visión; aletargan-do sus vidas y ofrendándola a ideales tan perversos.

Miremos y recordemos el conflicto limítrofe que existía entre Ecuador y Perú; no por generar nuevos en-frentamientos sino para aprender de nuestro pasado; y es que el fruto de lo imaginario está presente inclusi-ve en la firma de acuerdos y trata-dos. Como recordarán el puesto de observación fronteriza de Ecuador frente a Perú se encontraba a pocos pasos sobre una falla de delimitación aparente: invocando a mi pobre ex-periencia en mediciones geodésicas cartográficas y de manejo de GPS u otros artefactos para los mismos fines, me atrevo a decir que la base para el conflicto limítrofe entre am-bas naciones radicaba en la sutil pero necesaria LINEA IMAGINARIA FRONTERIZA que para acabar de aterrizar, no brindaba facilidades para emplazar los hitos (postes de piedra u otra señal que se clavaba en el sue-lo y señalaba el límite de un terreno o indicaba la dirección o distancias de una vía o un camino). Más aún si consideramos que se incluía en aquel debate la propiedad del espacio aé-reo y por tanto el derecho a la sobe-ranía aérea (de cajón). Bajo la supo-sición de que el diferendo limítrofe era percibido como una cuestión ma-temática; cabe decir que lo más di-

fícil era tomar la decisión de sumar y restar; sumemos inexperiencia de los pueblos y restemos credibilidad al manejo político. Yo diría que de ambas partes mediaba el desconoci-miento de las medidas exactas, tanto del terreno en cuestión como de su espacio aéreo; para el cálculo mate-mático; si consideramos que el espa-cio aéreo a delimitarse consta de 100 km y que los puntos de observación en la frontera entre ambos países era de 4km; se entiende que el radio de observación aérea desde el puesto de observación ecuatoriana era de 8 km; restándole 6 km de espacio aé-reo en el cual las operaciones milita-res eran simplemente inobservables a simple vista; si ocurría lo mismo en el lado peruano, era de entender-se que ambos puntos de observación estarían a la misma altura sobre el nivel del mar; lo cual no ocurrió; esta comprensión de la capacidad de observación tanto del espacio aéreo cuanto de las posiciones de observa-ción de ambos países, nos permite comprender por qué era tan difícil encontrar la LÍNEA IMAGINA-RIA FRONTERIZA y demarcarla correctamente. Si buscamos eviden-cias sobre las diferencias en la forma de vida de ambos pueblos como para establecer de mejor manera las refe-rencias limítrofes culturales; enten-demos que en dicho ejercicio se pre-tenda desarrollar un registro cultural conductual de los pueblos asentados

Page 19: Revista Yaguarzongo N° 46

19

en ambos lados fronterizos, aleján-donos un poco de la capacidad de gobernabilidad que ambos pueblos hayan ejercido entre sus pobladores, debemos concluir que ambos países tenían expectativas saludables en re-lación al desarrollo económico y so-cial de esa población en particular; sin embargo los esfuerzos tardaban años en concretarse y los pobladores decidieron sumarse al gobierno que más atención les hubiere brindado; sin faltar a la verdad de que el do-minio de un territorio se expresa en el deseo de su gente de pertenecer a tal o cual país, en general; la suma de dichas voluntades degeneraría en una desmembración más para cual-quiera de las partes, sin que en ello se respetara la voluntad o el acuerdo del total de la población de ambos países. Buscando estas evidencias, he podido concretar una más de las interpretaciones culturales que un gobierno puede dar o no a los des-cubrimientos arqueológicos; en este caso sucedió en el lado de la fronte-ra ecuatoriana; en donde se registra como “nueva cultura ancestral” ; a una expresión costumbrista funera-ria de pueblos vecinos; me refiero a la cultura Mayo Chinchipe; que es considerada una cultura nueva; pero que su verdadero fin y propósito era el de llevar adelante una actividad más (como la minera y de extrac-ción) como es la funeraria, dicho servicio fúnebre se ofrecía en un si-tio exclusivo de la selva amazónica accesible para pocos adinerados de la época; elegido tal punto por su paraje y belleza tanto como por sus poderes curativos chamanísticos; todo lo cual de seguro atrajo a “tu-ristas y conocedores de su época”; el proyecto en mención fue en su mo-mento de gran importancia; pero su-friría el embate del expansionismo

colonialista de España y la presen-cia de los conquistadores españoles en la región determinó que los pro-pietarios; chamanes del imperio in-caico; desearan la muerte antes que entregar sus conocimientos y sus frutos; por lo cual en el ideario de la conquista española no se incluiría proyectos funerarios de chamanes desconocidos ni nada parecido. El futuro era incierto para la preserva-ción del lugar; si en esta zona limí-trofe se hubiera dado un conflicto armado entre ambos países, más sin embargo pienso que el sacrificio de ambos chamanes sigue desconocido aún después de descubierto el sitio; ya que ninguno de los dos países en cuestión se ha pronunciado sobre ello; el sacrificio llevado a cabo por estos chamanes incluye la promesa de ser los guardianes eternos de la unión de ambas naciones y derrama-rían su sangre para que ni siquiera las huestes invasoras impidieran que se cumpla con esta solemnidad; el sitio en sí mismo lleva adelante la cultura guerrera de ambos pueblos; uno de los esqueletos descubiertos coincide con la descripción del chamán des-aparecido en la localidad vecina de

lo que hoy es Perú; el otro chamán nos hace falta en el lado ecuatoria-no en lo que hoy se conoce como Zamora Chinchipe; este ejemplo como el de la LINEA IMAGINA-RIA FRONTERIZA; me recuer-da la capacidad del ser humano de creerse sus fantasías e involucrar su deseo de vivir en ellas, sin embargo pienso en que la libertad de culto, de creencia, de vida; también debe extenderse a la propiedad del espa-cio aéreo y territorial; es decir que quien quiera vivir en un territorio o nación pueda hacerlo sin que por ello esté delimitando su vida a dicho suelo y espacio. Dado que si solo de-fendemos la propiedad sobre los re-cursos, olvidamos de entrada lo más importante; el cuidado de la vida de las personas que pueden optar o no por esos recursos, si estos recursos son limitados en el tiempo, debemos incentivar a todos los habitantes que deseen estos recursos al cuidado de los mismos otorgándoles una pro-piedad extensiva de sus derechos so-bre los mismos; no por banderas ni nombres de países inventados; sino porque consideramos al ser humano una sola raza, una sola nación.

Mi mensaje final como fruto de lo imaginario para este tiempo es que; los gobiernos deben no solo re-conocer la libre determinación de sus pueblos sino ayudarles a construir la franja de territorialidad en la que los pueblos puedan hermanarse, mezclarse, auto-delimitarse y reconstruirse para beneficio de ambos países; dado que las líneas imaginarias no existen sino en el cerebro del que piensa linealmen-te, optemos por la libertad del ser humano en cual-quier país que se halle o en cualquier frontera que desee cruzar.

Page 20: Revista Yaguarzongo N° 46

20

Al leer algo de Gabriel García Márquez, me puse a pensar que yo, desde mi posición soy el menos indicado para exaltar la figura del hom-bre, porque aunque soy uno de ellos, sé que en-tre vosotros existen muchos de gran talle que merecen hacer esta apología, este homenaje al hombre, presente desde los inicios de la huma-nidad, esto que para muchos puede ser motivo de un chascarrillo de quienes hemos planificado este homenaje. O también, algún amigo o amiga enjugada de sudor por su arduo trabajo y desde su sufrimiento diario, dirá, que es una ocurren-cia de quienes tienen pocas ocupaciones. Por momentos, puede resultar pueril, son posibili-dades todas ellas que las asumimos, porque es-tamos conscientes que somos pioneros en esta celebración y caminamos en la construcción de una sociedad con equidad.

Con entereza debo decir que esta iniciativa, la de celebrar por primera vez en Zamora el Día Internacional del Hombre dista mucho de ello, y más aún, dista del deseo de contraponer o ha-cer oposición a las organizaciones femeninas que con justicia trabajan para hacer respetar sus derechos, alcanzados con esfuerzo.

Hacer eco del Día Internacional del Hombre cuya celebración ya empezó hace más de 12 años a nivel mundial, creemos que implica un pensar diferente, una muestra de liberación de estigmas, de ataduras y una muestra de vivir una sociedad con mayores posibilidades.

Desde 1960, grupos de hombres de diferentes partes del mundo empezaron movilizaciones con la finalidad de que se reconozca un día de-dicado al hombre, pero es desde el año 1999, en que varios países del hemisferio en línea, co-menzaron a celebrar el 19 de noviembre, con el reconocimiento de la UNESCO, como el día internacional del hombre iniciado en Trinidad y Tobago por el Dr. Jerome Teelucksingh. Aun-que con traspiés en los años posteriores, desde ahí, el Día Internacional del Hombre ha echado raíces en la escena internacional, siendo esta iniciativa independiente a nivel mundial en lo que respecta a las agendas a tratar en cada con-memoración, que dicho sea de paso está aumen-tado cada año más.

Diferentes países, en este día han tendido so-bre el tapete temáticas de interés con enfoque en los hombres y la salud del niño, la mejora de las relaciones de género, la promoción de la igualdad de género, la propuesta de modelos masculinos positivos, que por cierto (en nuestra ciudad los tenemos muchos), una ocasión para que los hombres podamos poner de manifiesto la discriminación que aunque pareciera mentira existe y celebrar los logros y contribuciones a las comunidades, lugares de trabajo, amistades, familias, matrimonios y cuidado de niños.

Resaltar la figura del hombre, sin duda impli-ca, un avance en la concepción de la vida y las formas de convivencia que tenemos las genera-ciones presentes y al promover modelos mas-

DÍA INTERNACIONAL DEL HOMBRE

(CLAUDIO TORRES TORRES)Presidente del Núcleo de Zamora Chinchipe

Conferencia ofrecida el 18 de Nov/2014

Es este el motivo de esta celebración, esa necesidad de reconocer un hombre que también exige ciertos derechos que la

educación a la usanza tradicional le ha privado. Como el derecho a la ternura

tradicionalmente dado a la mujer.

20

celebración en Zamora por primera vez

Page 21: Revista Yaguarzongo N° 46

21

culinos no nos referimos a estrellas de cine o del deporte, sino y sobremanera nos queremos referir a los hombres comunes de la patria y de nuestra provincia, a los hombres que realizan su trabajo desde el sitial en que la vida nos ha asignado y desde donde promueven una vida decente y honesta. Al obrero, por siempre cons-tructor de sociedades, al médico, al chef, al sas-tre, al panadero, al conductor, a quienes diaria-mente arriesgan su vida en trabajos destinados

Es este el motivo de esta celebración, esa nece-sidad de reconocer un hombre que también exi-ge ciertos derechos que la educación a la usanza tradicional le ha privado. Como el derecho a la ternura tradicionalmente dado a la mujer. Sin embargo hoy vemos hombres que pueden ser y son mucho más tiernos con sus hijos o con su esposa de lo que se piensa, donde el hom-bre ha abandonado ese rol tradicional impuesto por la educación tradicional de ser únicamente

solo para hombres, no porque las mujeres no puedan hacerlo, sino porque se requieren mayores posibilida-des de fuerza, a quie-nes han enviudado o a aquellos que han te-nido el infortunio de vivir una separación de su matrimonio y han tenido que cui-dar, criar y educar a sus hijos e hijas sien-do padre y madre a la vez, es para ellos este homenaje.

Hace 50 años la ima-gen colectiva de los hombres era bastante clara: hombre traba-jador, padre fuerte,

protector, proveedor y poco involucrado en la familia. Pero la igualdad de géneros, por su-puesto que no solo ha afectado a las mujeres, los hombres también nos hemos visto involu-crados en estos cambios, por lo cual ha sido imperante adaptarse a estos cambios sociales y de los cuales somos testigos cada día y en cada ciudad. Hoy podemos hablar de hombres modernos con roles diferentes e impensados en siglos pasados, podemos decir que el hombre moderno se ha liberado del yugo del aparentar ser valientes, duros e insensibles. Cada día más los hombre modernos sienten que pueden ser de carne y hueso. Cierto es que entre nuestros mayores que nos acompañan existe un clima de alarma, hombres que se sienten atacados y descolocados, ya que todo para lo que fueron educados está cambiando, incluido la manera de relacionarse con la mitad de la población que representan las mujeres.

el proveedor de la casa, privándole (en la edu-cación equivocada) de pasar más tiempo con sus hijos, ocuparse de tareas de la casa, lo cual y de paso (dicho por los profesionales con-sejeros matrimoniales) ha permitido mejorar las relaciones de pare-ja, en suma ese derecho de modificar roles de la pareja.

Reiteramos que para nada este día está desti-nado a competir con el Día Internacional de la Mujer. El motivo más bien es exaltar la figu-

ra del hombre, resaltamos esos nuevos roles asumidos por el hombre moderno, evoluciona-do y que quizá no han tenido reconocimiento por parte de nuestra sociedad. Aquí en nuestra ciudad vemos en cada día de esos modelos de hombres de los que brevemente he conversado, actitudes, dignas de alabanza, pero a la postre y reiterando el motivo de esta celebración es el contribuir a mejorar las relaciones de género y promover su igualdad, todo para crear una me-jor sociedad, una sociedad que mire hacia ade-lante, para crear un mundo más seguro, libre de violencia de ningún tipo y donde todos y todas contribuyamos a que cada persona alcance lo mejor de sí.

“Un hombre con una idea nueva es un loco, hasta que la idea triunfa”

Mark Twain.

Claudio Torres T. presidente de la CCE Zamora Chinchipe

21

Page 22: Revista Yaguarzongo N° 46

22

ACTIVIDADES DEL NÚCLEO

Asamblea de Miembros Numerarios 2013 e informe de rendición de cuentas, realizada en el auditórium “Eugenio Espejo” del CCE-ZCH, el 13 de septiembre del 2013.

Presentación del Ballet Nacional del Ecuador, con la obra Ángeles, el 4 de octubre por las Fiestas de Fundación de Zamora.

Como preámbulo de esta actuación se presentó el artista Marco Sarango.

En el mes de Octubres se dio inicio a los cursos permanentes en la CCE-ZCH de ballet, modelaje y danza.

21

ACTIVIDADES DEL NÚCLEO

Page 23: Revista Yaguarzongo N° 46

23

Representando a Zamora, Vidalino Martínez ganador de la Guayusa de Oro en el Festival Nacional de Tríos realizado en Macas.

Presentación del disco “Niños Cantores de Zamora” realizado el 3 de octubre en el teatro del Sindicato de Choferes de Zamora, hizo la presentación Armando Romero

quien además fue el instructor de canto, en este proyecto.

Homenaje al día del Pasillo Ecuatoriano con la presentación destacada de Crhistián Julio Jaramillo, nieto del “Ruiseñor de América” y la Rondalla Municipal de Loja.

22

Page 24: Revista Yaguarzongo N° 46

24

Concurso Provincial Juvenil de Oratoria por las Fiestas de Provincialización de Zamora Chinchipe, organizado por la CCE-ZCH en conjunto con el Gobierno Provincial.

Participación de dos jóvenes artistas zamoranos en la VII Exposición Regional de Artistas Plásticos y Visuales “Visual Sur, Carlota Zamora Barrezueta”, que se realizó en la ciudad de Machala,

Provincia de El Oro el pasado 12 de septiembre.

Hora Cívica en Homenaje al Día Internacional de Hombre, evento realizado por primera vez en Zamora por la Casa de la Cultura Núcleo de Zamora Chinchipe.

23

Page 25: Revista Yaguarzongo N° 46

25

Presentación de la Obra literaria "Bella y yo" de la autora Yuri Quezada. evento realizado en el Gad Municipal de Yantzaza.

Festival Nacional "Hecho en Casa" realizado por el Núcleo de Zamora Chinchipe, con la participación de artistas de la localidad, artesanos, asociaciones y varios grupos colaboradores.

Presentación de los poemarios "Laguna de Papel" de Manuel Ortiz y "Mariposa" de Joffre Villalva. Con este evento la CCE-ZCH, dio inicio a las ediciones literarias del 2014.

24

Page 26: Revista Yaguarzongo N° 46

26

UN PENSAMIENTO A TRAVÉS DE FRASES TRUNCADAS Y LÍNEAS INACABADAS

Nunca hubiera expuesto el Maes-tro lo que exponemos hoy en Loja, Zamora, Machala y otras ciudades ya que estos dibujos correspon-den al campo de la preparación artística, como un fragmento pre-liminar de la sucesión artística en la ejecución de una obra de arte, porque Eduardo Kingman los uti-lizaba habitualmente como “me-dios” para que “vivan” en otro lenguaje acabado.

De hecho hace numerosos boce-tos hasta conformarse, con otro tamaño, los pule, los va pensan-do poco a poco. No obstante, nos

asaltan dos preguntas: ¿Pueden y deben ser una obra de arte aca-bada? ¿Merecen la pena ser ex-puestos como patrimonio de su dignidad artística? Por supuesto que sí, además nos ofrecen unos valores añadidos en relación a su forma de mirar y sentír la crea-ción. No fueron concebidos para un peregrinaje museal y esto les convierte precisamente en desa-fíos plásticos para interpretarlos, museografiarlos y divulgarlos.

Estudió por tres años en la Es-cuela de Bellas Artes de Quito, luego abandonó la escuela y con-

tinuó como autodidacta. Su gene-ración es la misma de Guayasamín (1919 –1999), Diógenes Paredes (1910–1968), César Andrade Faí-ni (1913–1995), Alfredo Palacio (1912–1998) y Bolívar Mena Fran-co (1913–1994).

Todos ellos fueron parte de este gran movimiento que aconteció en al arte y literatura ecuatoriana de-nominado como Realismo Social. En estos artistas fueron de gran inspiración los muralistas mexica-nos. Los temas que representaban estaban cargados de un espíritu na-cionalista que reflejaba

Dr. José Carlos Arias ÁlvarezHISTORIADOR DE ARTE

Page 27: Revista Yaguarzongo N° 46

27

la situación injusta de obreros y campesinos.

En sus dibujos se descubre la no-bleza del indio, la devoción reli-giosa de la beata, el sentido de la fiesta, los arcos de las arquitectu-ras coloniales, etc,..

Los dibujos de Eduardo Kingman nos acercan a su pensamiento, son un escaparate social. Es conocido como el pintor de las manos, por la fuerza expresiva que carga en ellas, la habilidad de interpretar temas como la ternura, el cansan-cio, la esperanza, el dolor, etc,….

A nuestro parecer, centra todo su interés en tres cuestiones artísti-cas principales:

a) El dibujo como sujeto de unas proporciones, la elaboración de

una cuidada composición, las le-yes artísticas, etc,..

b) La forma de objetivar las ideas a través de las líneas, su desafío era constante, un buscador nato al tratar de materializar el pensa-miento.

c) No le interesaba lo anecdótico, lo especulativo, su vida artística y su arte son una continua síntesis, buscando el sustrato elemental de las cosas, hablaba con el dibujo de forma sencilla y concreta. Su discurso a través de las líneas, los puntos, los planos, las explo-raciones compositivas, la repro-ducción del espacio tridimensio-nal, la fuerza expresiva de los recursos formales y la creencia de que el dibujo es interacción física entre el ojo y la mano, nos llevan

a concluir que fue un excepcional Maestro de la mirada, mucho más que un Maestro de las manos.

Es su realismo escueto y duro el de los dibujos, pinta lo que siente, un principio moral y estético a la vez. Esto no significa que los di-bujos no tengan una composición cuidada, complicada o el filtro de la sensibilidad: ojos-cavernas rasgados, tez quemada por el aire, cabelleras negras, el abrigo del azul, la nariz carnosa y triangu-lar, la mano izquierda o la dere-cha como en esta fotografía de su propia mano, etc,.. todo se englo-ba en la forma sencilla, decidida y apasionada de dibujar. Sus di-bujos tienen carácter simbólico y marcan el carácter originario telú-rico de una raza que busca los es-pacios de su propia construcción social.

Son los dibujos del Maestro Eduardo King-man Riofrío que forman parte de un microcosmos que se ha ido configurando con la aportación de la familia de este Maestro lojano y vivirán sus

significados en la estrategia de cada observador que con humildad desee cuestionarse sobre el

dibujo como forma de pensamiento y de arte. Así, cada uno de estos dibujos es un sistema de infini-tas posibilidades al tornarse inocentes y frescos, con el objeto de establecer un sistema de rela-ciones formales para producir un pensamiento,

mediante su presencia.Exhiben mundos propios a los que siempre de-bemos entrar cuidadosamente, respetando la

memoria del artista que siempre sigue vivo, pero puestas las expectativas en lo que el dibujo dice de sí mismo y no en lo que puede o quiere decir “gracias” a nosotros, humildes intérpretes, con

argumentos que pasan de ser todo a nada, cuando el dibujo decide hablar.

Page 28: Revista Yaguarzongo N° 46

28

¡No lo comprendo…! ¡No me lo explico…! ¿Por qué escogí la profesión de médico? Impregna-da con esa maldad de Mr. Hyde, me tiene prisionero entre sus paredes, algunas grises y otras blancas, escondiéndome del arte pleno y puro, dejándome por acompañante solitario de mis arrebatos de libertad a ese lobo estepario de Herman Hesse.

Realmente, no lo sé. Sin em-bargo, no me arrepiento. Una porción de mi subconsciente, me dice que está bien, impolu-tamente bien, como lo que hago posterior a mi jornada de trabajo, cuando entre horas de descanso me deslizo por mi cuarto buscan-do mi tiempo extraviado en esas fantasías y obsesiones no escri-tas. Por eso, a lo mejor, ésta se convierta en mi razón (especial razón) para, además de poseer en mi escritorio Tiopental, Dormi-cum, Ditopax, los apuntes acerca del dolor neuropático, la estatui-lla de la Virgen del Cisne, tenga también las Obras Completas de Pablo Palacio.

Páginas y más páginas que, irre-verentemente hojeadas por el cansancio que me muerde todas las noches posibles, hago míos al Huerfanito, al Hombre Muerto

a Puntapiés, a la Doble y Única Mujer, a la Vida del Ahorcado, al Frío, a Los Aldeanos, a Débora, y a tantos otros relatos y cuentos que, en ocasiones, lo confieso, me invade la certeza (franca cer-teza), de que sus personajes em-piezan a carcomer intransigente-mente el libro cobrando vida y presentándose de cuerpo entero, así como son, hermosamente im-pasibles, comenzando la orgía por los sueños invencibles y ter-minando en la inmortalidad.

A no dudarlo, obras maestras a través de las cuales resucita Pa-blo Palacio escarbando una Rea-lidad Nacional y, a quién, con mi cuento lánguido e inexperto, tra-taré de rendir homenaje.

MI CUENTO

Son las tres de la mañana. ¡Vayan a saberlo! Supongo que lo son. Siempre a esa hora en que los cristales hacen chick, chick, en respuesta al viento, comienzo a despertarme sofocado entre sue-ños no recordados. Pero en esta ocasión, mientras así lo hago, es-cucho golpes en la puerta de mi cuarto de hospital, invitándome a dejar mi reposo, tibio reposo.

—Pronto, pronto… doctor…

uf… Han dejado en emergencia a una persona inconsciente que parece que está muerta —me se-ñala la voz sin aliento del otro lado de la puerta.

—¿Uno que parece muerto? —interrogo con incredulidad, anhe-lando que se trate de una broma, de esas que se realizan de vez en cuando.

—Sí, doctor… Y lo dejaron unos que decían ser sus familiares —la confirmación desvanece la presunta broma.

—Bueno, sí así se presentan las cosas, espéreme don Pepito —había reconocido la voz del auxi-liar del turno de la noche—. Dos minutitos, me enjuago la cara.

Acto seguido, empezamos a mor-der con nuestros zapatos aquel pasillo solitario de luz tenue, que se nos presentaba deliciosamente frío con un áspero descuido, co-mido por el polvo de los meses sin barrer. Recorrimos la distan-cia del pasillo y al final ingresa-mos a Emergencia. ¡Qué decir! ¡La sorpresa! Todo el ambiente se encuentra impregnado con un hondo bullicio carnavalesco. Las conjeturas van y vienen, sa-turándose de misterios impene-

(PATRICIO DOMINGO GUZMAN CÁRDENAS)Loja - Ecuador

Mi Cuarto, los cuento de Pablo Palacio y mi cuento...

28

Page 29: Revista Yaguarzongo N° 46

29

trables. Unos desean identificar al posible muerto con rostros de conocidos, otros discuten la posi-bilidad de que el muerto no esté muerto y con una reanimación se lo devuelva a la vida.

Ajetreo y más ajetreo, paralizán-dose por un momento, cuando el reloj de la pared se bifurca por el ambiente en cuatro campana-das con olor a fresco cementerio. Toda voz se esfuma. Transcurre el tiempo silencioso en una espe-cie de palmada, y mientras así lo hace, con algo de risilla nerviosa, nos vamos recuperando; en una palabra, vamos perdiendo la pa-lidez de nuestra piel, volvemos a nuestra condición de humanos.

Personalmente confieso que, mientras me estoy recuperando, ¡no lo sé! Al detener mi vista so-bre el posible muerto me parece regresar en el tiempo, encon-trándome con el Hombre Muer-to a Puntapiés. ¡Sí! El mismo de 1927. ¿Es qué la cordura se me está extinguiendo como el fue-go de Prometeo?, me interrogo, cuando un estudiante de medi-cina, con su dedo tembloroso vuelve neciamente a señalarme a aquel paciente inconsciente: ¡Ahí! ¡Ahí! Su voz jadea en for-ma por demás graciosa, lo cual a pesar de cargar mi dureza de aquellos momentos me permite esbozar una sonrisa, impercepti-ble quizás.

—Bienvenido a la profesión, es-pero que te vayas a comprar un Diazepam, tus nervios necesitan calmarse.

—¡Pero doctor, haga algo! ¡Por Dios recupere al paciente! —me señalan varias voces con sus mi-radas excitadas, nerviosamente excitadas, extraviadas, mal dor-midas, enrojecidas por la madru-gada y una taza de café. No me queda más. Procedo a arrodillar-

me, mis ojos se encuentran con una cabeza inmóvil en una espe-cie de oración al cielo, espero un milagro, el milagro de Lázaro.

Acerco mi mano, palpo la yugu-lar, siento que la misma extravió sus latidos. Posteriormente colo-co mi otra mano sobre la piel cia-nóticamente azulada, sintiéndola fría, sudorosa, descompasada con la vida, una equivocación de partitura. Con la luz de la linter-na examino sus ojos. ¡A la ver-dad, no presentan reflejos! Éstos se han extraviado por el laberinto indescifrable de una eternidad le-jana, su pupila me lo confirma, es un punto negro, grande, inmóvil, perdido, estático. Un comedido que no identifico, me pasan un estetoscopio, lo acomodo sobre el pecho raquítico y lampiño, de-seo cerciorarme de si su corazón late y grita. ¡Pero no!, no escu-cho, no... absolutamente nada, a no ser el frío que se retuerce en la madrugada.

En un acto desesperado lastimo su dedo pulgar con una aguja de jeringuilla, y él no se mueve. Dios, ni un leve indicio. Apenas brotan de su parte ofendida gotas de una sangre negruzca y coagu-lada.

Como último intento, pongo mi oído próximo a su boca, deseo percibir el aliento que tenemos los mortales. Sin embargo, per-cibo la quietud de un sueño sin regreso.

Inmóvil, frío, pálido, me levanto señalando que es caso perdido, que se encuentra muerto, real-mente muerto.

Transcurren los minutos, es di-fícil señalar cuantos minutos navegan por este ambiente de frustración. El dolor es una fiera que carcome nuestros sentimien-tos, y de pronto, no sé de dónde

sale el movimiento de mis manos que tratan de hurgar su identidad, arrancando de sus bolsillos pape-les inexistentes, vacíos y decep-ciones, y en este juego abobado de manos, mi vista repara en dos cosas: sus ropas (algo anticuadas) se encuentran en perfecto estado, como si ese día precisamente las hubiera estrenado, esperan-do la muerte, coqueteándola con su traje. Y en segundo lugar, su cuerpo no presenta ni el más leve vestigio de violencia, a no ser por una gota de sangre, que pe-gajosa y tímida, asoma a través de su fosa nasal derecha.

—¿De qué moriría, doctor?—No sabría decirlo. Parece en-contrarse todo en orden, dema-siado en orden. Habrá que rea-lizarle una autopsia. Pasen al Sr. Ramírez (la pronunciación de este apellido apareció espontá-neamente en mis labios) al anfi-teatro.

Ahora me desquito de mi duda: iba a saber con certeza la causa de la defunción de un Hombre Muerto a Puntapiés, y mientras lo sigo en una especie de proce-sión detrás de los auxiliares de enfermería que lo cargan, obser-vo que una mueca cómplice pa-rece deslizarse sobre su comisu-ra labial. Es, lo sé, su aceptación: tengo la confirmación de que él también desea conocer la causa de su muerte.

Nota: Este cuento fue Finalista en la VI Bienal del Cuento Ecuatoriano organiza-do por el CEDIC. Quito. 18 de Noviem-bre del 2001. El autor de esta manera rinde homenaje a un Grande de las letras lojanas, ecuatorianas y latinoamerica-nas.

29

Page 30: Revista Yaguarzongo N° 46

30

Corría el tiempo de la Colonia, y por Huanchaco pasaban muchos comerciantes en dirección a los poblados vecinos.

Una noche, se celebraba una fies-ta familiar en una casa en donde abundaba el licor y la comida.

Los pobladores de esta Caleta siempre se han caracterizado por ser amigables y bondadosos. La fiesta se encontraba en su apo-geo, cuando vieron acercarse por la calle a un personaje descono-cido.

-”Un caminante quizás...”- pen-saron. Y sin temor a que pudie-ra ser un asaltante de caminos ó algo por el estilo, sin más ni más lo invitaron a la fiesta.-” Pase señor, tome asiento..”- le dijo una de las muchachas y le sirvieron comida y trago a rauda-les.

Pero el desconocido se negaba a bailar. Se encontraba sentado al lado de una mesa y no se movía de allí para nada.Un crío, que se encontraba jugan-do con unas canicas, por recupe-rar una de ellas, se metió bajo la mesa y sorprendido observó como por un lado del pantalón sobresalía y se movía un rabo.Un poco desconcertado salió y se dirigió a la cocina a buscar a su madre y le dice:

-”Mamá, ese señor tiene rabo...”--”¿Qué señor?”- replicó la ma-dre.-”Ese, el que recién ha llegado y que está en la mesa...”- confirmó el chiquillo.

Acostumbradas a oír y ver cosas extrañas, las mujeres se imagina-ban ya de quién se trataba.

Idearon un plan para desenmasca-rar al Maligno. El plan consistía en obligar a bailar al desconocido con el fin de que bailando dejara entrever su rabo.

Para ello, buscaron a la mucha-cha más decidida de la fiesta, pues al enterarse de lo sucedido, nadie quería sacar a bailar al des-conocido.

Una de ellas, muy resuelta se acercó al desconocido personaje:

-”¡Señor, vamos a bailar...!”--”Discúlpeme pero no puedo se-ñorita..., es que no sé bailar...”- contestole el supuesto caballero.-” Eso no es problema, aquí se aprende. No se preocupe, nadie va a burlarse...”- replicó la chica.

Pero el extraño caballero seguía negándose. Tanto insistió la mu-

EL DIABLO DESCUBIERTO

(Cuento)

chacha que al fin, a regañadien-tes, el aceptó salir a bailar.

Estando en pleno baile, por una de las perneras del pantalón aso-mó un rabo...Una de las señoras no pudiendo soportar su sorpresa y su temor, exclamó:

-”¡JESÚS, MARÍA Y JOSÉ...!”

Al sentirse descubierto y al es-cuchar estos sagrados nombres, cuentan que el visitante, explotó dejando impregnada toda la vi-vienda con un insoportable olor a azufre, el cual tardó mucho tiem-po en desaparecer.

Desde entonces, se dice, que el Diablo no entra a lugares donde haya niños, en recuerdo de aquél que lo descubrió en aquella fies-ta...”

Versión de Don Manuel Huamanchumo Cumpa, año 1968.

Acuarela del pintor José Paúl Pérez

(Percy Valladares)Perú

Page 31: Revista Yaguarzongo N° 46

31

En el barrio Cinco Esquinas allá por los años de mil no-vecientos veinte, existió una ranchería al mismo estilo tejano, estaba cercado por árboles coposos de gran ta-maño, la casa era de adobe con techo y piso de madera, dicen que cuando llegaba las doce de la noche clarito se sentía el paso de una persona por el lado que salia al rancho, se escuchaba también el trote de un caballo que lentamente se perdía en la oscuridad. Los lugareños comenzaron a tener miedo a pasar por el rancho aquel, pues el solo escuchar el ulular del viento se les estre-mecía el cuerpo. Muy cerca del rancho había una casa que en su frontera tenia plantaciones de higos, ciruelos y un viejo sauce que estaba al lado de la acequia, suce-dió que un día un grupo de amigos venían desde Huaura por todo el camino de la vía del tren, cuando de repente pasando por el rancho misterioso vieron cabalgar a una mujer completamente desnuda, en un hermosísimo po-tro negro, quisieron seguirla pero algo inusual sucedió, todos se quedaron mudos, no podían hablar, sus pies les temblaban y solo cuando el caballo se perdió en la os-cura noche con la dama desnuda, recién articularon vo-ces alguna y despavoridos huyeron a sus casas, contaron lo sucedido a sus familiares, uno de ellos decide hacer guardia esa noche para verificar los hechos, así fue que “Cachucho” Pérez acompañado de Filomeno un viejo amigo de farra, después de libar varios pomos de ron se fueron al lugar de los acontecimientos, cuando en eso sienten el trotar del caballo se esconden detrás del viejo sauce y comienzan a espiar para saber de quien se tra-taba, efectivamente era una bella mujer completamente desnuda, la siguieron por todo el largo de la acequia y vieron que la dichosa mujer no era ninguna fantasma, pues se trataba nada menos que la esposa del hacendado, que salia desnuda para asustar a los curioso, toda vez que ella tenia un romance con Toribio, uno de los traba-jadores del rancho.

Ella al verse descubierta suplica a los curiosos no decir nada a su esposo ofreciéndoles a cada uno una buena recompensa en dinero.

Pasado los meses cae enferma la mencionada mujer de un mal bronquial, en eso que el marido estaba en busca de un buen doctor, uno de los que había visto a la mujer

le dijo: Para qué busca usted un médico, yo le aseguro que en un santiamén le sano a su esposa, yo le puedo garantizar mi trabajo, tengo estudios de curanderismo y espiritismo en el norte yo soy el chaman Cahucho Pérez, si no le sano a su mujer mándeme preso si quiere.

El tipo este llego hasta el lecho de la paciente, pidió que lo dejen solos y acercándose a su oído le dijo ¡No! Tema usted señora solo quiero ayudarla. De tanto estar salien-do calata por las noches ha cogido una fuerte pulmonía, hay que frotar con infundía de gallina su pecho, cierre bien las ventanas que están en el techo, y no salga por una semana.

Pasaron los días y a la semana la mujer ya se sentía me-jorada, el hacendado muy feliz le dijo al dichoso curan-dero, pídeme lo que quieras yo estoy en deuda contigo, cosa que Cachucho no demoro en pedir que le regalen el hermoso caballo negro con el que salía a cabalgar la bella dama de noche. este al estar solo con la señora le dijo; Yo solo cuido de su vida, si dejo el caballo puede tener una recaída, más vale que le sea fiel a su marido, a que sacrifique su vida por ese mantenido. Cosa que el esposo no entendía nada y pregunto: ¿Qué tiene que ver el caballo con la salud de mi esposa? ¿Acaso sucede algo que yo ignoro?

No mi señor no pasa nada, Así como usted sale con la yegua muy de madrugada, su esposa puede salir en su busca montando el dócil caballo negro, y si usted no me regala el potro nacarado, de seguro que pierde a su es-posa.

Cosa que accedió de inmediato el hacendado, su esposa vivió junto a él hasta que éste falleció y el rancho aquel fue completamente remodelado, dando la apariencia que allí vivió la pareja más feliz de la tierra.

Del mozo o sea Toribio el amante no se supo nunca más nada de el, partió a rumbo desconocido, la mujer sin su caballo nunca mas volvió a cabalgar desnuda y en todo el barrio Cinco Esquinas la gente frecuentaba por cual-quier dolencia al famoso curandero “Cachucho” Pérez, especializándose en males de amor y mañas.

La isteriosa Mujer de Blanco

(JULIO SOLORZANO)Perú

Page 32: Revista Yaguarzongo N° 46

32

Hablar de Hugo Guamán, sin duda es hablar de fotografía. Quienes hemos vivido en Za-mora entre mediados de los setenta hasta finales de los noventa, recordamos su ca-racterístico caminar acompa-ñado siempre de una cámara. Muy jovial, alegre y siempre dispuesto a atender los reque-rimientos de sus clientes, son las características que me-jor lo describen. No había un cumpleaños, una fiesta, en la que el licenciado Hugo como siempre le hemos conocido no estuviese para perennizar en el papel fotográfico aquellos mo-mentos de recuerdo.

Hugo Neptalí Guamán Queza-da, nació en Loja, estudiando en la escuela de los Hermanos Cristianos desde donde nació su inclinación a la fotografía, ya que al finalizar su último año escolar conoció de cer-ca de través de un compañero de aula, Vicente Chauvín, los primeros secretos de la foto-grafía. Resulta que este último era hijo de un reconocido fotó-grafo de gabinete, es decir fo-tografías de retratos que luego las iluminaba, retocaba y hacía ampliaciones según el deseo del cliente. Un inocente acto de “magia” de su compañero que hacía aparecer y desaparecer una imagen utilizando un ne-gativo y papel fotográfico hizo que Hugo insistiera en conocer más allá de aquello.

Y así desde muy jovencito em-

pezó a aprender el arte de la fotografía, empezando a hur-tadillas con algunos compañe-ros a aprender, con su amigo el “curo” Hidalgo construye-ron su propio cuarto oscuro en donde empezaron a practicar sobre todo el proceso de re-velado. Luz blanca, luz roja, cajón para revelar negativos, copiadora, ampliadora, pre-paración de revelador, fijador, neutral, papel fotográfico, etc., se empezaron a convertir en palabras fluidas y de cotidiano uso que demostraban su per-manente aprendizaje y gusto por el mundo de la fotografía.

Su primera cámara la adquirió ya de estudiante en el colegio Bernardo Valdivieso, era una pequeña de doce cuadros, ta-maño cuatro por cuatro, con la cual solamente sacaba copias al tamaño del negativo, siendo el máximo de 6cm x 9cm. Su carrera como fotógrafo prácti-camente arranca en sus últimos años de colegio con pequeños trabajos, pero al finalizar esta etapa estudiantil recibió la vi-sita de otro ilustre fotógrafo de Zamora, don Alonso Soto, quien con el tiempo se conver-tiría en su gran amigo y cole-ga.

Este le ofrecía en venta una ampliadora de 35mm y una cámara de las mismas carac-terísticas, se hizo el negocio gracias al apoyo de su padre y prácticamente allí arranco su negocio en mayor escala.

Sus primeros trabajos los em-pezó a realizar desde su casa, ya que entregaba todo a do-micilio, pero un buen día se presentó la oportunidad de ins-talar su propio local. Con su padre había aprendido desde niño el negocio de la tipogra-fía y la encuadernación, pues éste tenía una de las prime-ras imprentas de la ciudad de Loja, el local se ubicada en la calle Rocafuerte, entre Bolívar y Sucre, propiedad del Colegio La Inmaculada. Justo frente al local de su padre un cierto día se desocupó un local siendo arrendado de inmediato para instalar su primer local.

Como impulso final a su ca-rrera como fotógrafo y a pesar que su aprendizaje autodidacta y su experiencia avalaban su

(JUAN CARLOS IZQUIERDO)Zamora - Ecuador

Trabajando acompañado por sus hijos.

HUGO GUAMÁN

32

Page 33: Revista Yaguarzongo N° 46

33

trabajo, era necesario realizar el curso como fotógrafo para obtener su título de maestro artesanal en fotografía, así lo mandaban las normas en aquel entonces, esto le valió compar-tir con varios compañeros de rama, asociándose al Sindicato de Fotógrafos, participando in-cluso en algunas ocasiones en su directiva.

Ya con el título bajo el brazo y el taller instalado, nació Arte Unión, un nombre que abar-caba sus actividades de foto-grafía, pero también sus otros conocimientos en encuaderna-ción e imprenta.

Así empezó desde muy joven, con el mínimo de equipos y con el deseo de superación su actividad como fotógrafo.

Los primeros años los dedicó a toda clase de eventos sociales, deportivos, etc., en los cuales se requerían sus servicios, pero también su gusto por el arte se vio plasmado en varias expo-siciones realizadas, llegando incluso a obtener premios por

sus trabajos.

Es recordada la fotografía del puente sobre el río Zamora con los sauces llegando al río, foto premiada con una poesía del Dr. Rubén Ortega impresa sobre ella y publicada en “La Opinión del Sur”.Su estudio fotográfico se com-pletó gracias a la ayuda de su padre que a través de préstamo en La Previsora permitió com-pletar lo necesario llegando in-cluso a mantener una secretaria y ayudante para la cantidad de trabajo que se llegó a obtener.

Pero Hugo Guamán, no solo es fotografía, ya que a la par, empezó a estudiar en la Uni-versidad Nacional de Loja, la carrera como maestro en cien-cias físico matemáticas, que la culminó con éxito. Estando en la universidad precisamente conoció a quien sería su espo-sa, doña Luz María del Carmen Vivanco Vásquez, formando su joven hogar con el naci-miento de su primer hijo Stalin Fabricio. En estas circunstan-cias en que el negocio crecía

constantemente, un aluvión de grandes proporciones generó destrucción de tal magnitud que la ciudad de Loja se quedó sin luz durante algunos meses. Los fotógrafos más antiguos y con recursos adquirieron motores de luz que les permi-tió seguir con su trabajo, pero para los que recién estaban ini-ciándose y justo en temporada de matrículas escolares, esto prácticamente era una quiebra, de modo que Hugo empezó a optar su segunda carrera, la de maestro, así terminó de sacar su título y casi de inmediato al saber de una vacante en el co-legio 12 de Febrero en Zamo-ra, noticia comentada por su amigo Flavio Carrillo que ya era profesor en el mismo esta-blecimiento, hizo que se tras-ladase hasta esta ciudad para probar suerte.

Un lunes 8 de octubre de 1974, acercándose a conversar con el rector del colegio tuvo la sorpresa de encontrar en estas funciones a su ex compañero de banca en la Universidad, el Dr. Juan Aguilar, quien lo

En Sexto Curso en el Bernardo Valdivieso, portando su primera cámara con la cual inició su carrera.

33

Page 34: Revista Yaguarzongo N° 46

34

recibió con cariño enviándo-lo a coordinar su contratación con el colector del colegio en aquel entonces, don Diómenes Rodas, quien por circunstan-cias de trabajos de impresión de documentos para el colegio también lo conocía. Terminado su período de prueba a los cua-tro meses y al no haber posibi-lidades de renovar su contrato él y otros maestros estuvieron a punto de salir, pero la gestión de los padres de familia ayudó a que permanecieran, llegando su nombramiento. Así empe-zó su vida como docente en el prestigioso establecimiento estando ya para los cuarenta años de servicio.

Su nombramiento definiti-vo como maestro otorgado el 1 de abril de 1975 hizo que trasladase definitivamente su estudio fotográfico a Zamora, instalándose de inmediato en la casa de la señora Leovina Iñiguez de Cabrera, frente al actual coliseo de deportes. El trabajo fotográfico era intenso, especialmente en temporadas

de carnet, en fiestas de la pro-vincias, eventos deportivos, entre otros.

Con el avance de su negocio cambió su local hasta la casa del señor Carlos Calderón la calle Diego de Vaca en donde a más del estudio fotográfico instaló un bazar con el cual se mantuvo durante muchos años hasta que tuvo que abandonar el local que iba a ser remodela-do por el propietario. De allí se trasladó hasta su vivienda ubi-cada en la ciudadela del Banco de la Vivienda, en la cual tuvo el privilegio de ser uno de los primeros seis propietarios de las villas que esa entidad cons-truyó en ese entonces despo-blado y lejano lugar. Mantuvo su estudio hasta inicios del nuevo siglo aproximadamente, tiempo desde el cual ha conti-nuado su actividad en el arte fotográfico pero en menor es-cala, pues la pasión por la foto-grafía nunca se termina.

Estando en Zamora también realizó exposiciones en algu-

nas ocasiones, pues su incan-sable andar con su infaltable cámara le llevó a retratar a múltiples personas, eventos y sucesos de la historia de la ciu-dad y provincia.

Así ha transcurrido la carrera de Hugo Guamán, inmerso en la fotografía, en la cual tam-bién estuvo su padre, y lo han estado sus hijos, manteniéndo-se una tradición. Su mensaje final se enfoca despersonaliza-ción de la fotografía que con la adaptación a los cambios en los procesos tecnológicos han transformado la fotografía y todo su quehacer, pasándo-la de un verdadero arte a un proceso mecánico que con los actuales instrumentos digita-les y automatizados permiten a cualquier persona hacer algo que hasta hace unos pocos años requería de la sapiencia y creatividad de quienes verda-deramente llegaron a amar la creación de la imagen a través de la fotografía.

Hugo Guamán y el cantante argentino El Greco, en su presentación en Loja

34

Page 35: Revista Yaguarzongo N° 46

35

IV

Dignidad a proteger y cuidar

Gran historia en las edades.

Loor Pueblos y Nacionalidades

El Oriente siempre su hogar.

En pos del equilibrio terrenal.

Augusta maravilla imponente.

No a la zaga nuestro Oriente.

Presente en esta Aldea Global:

V

Es el Oriente del Ecuador:

Naturaleza en perfecta armonía.

El País te aclama con fervor.

Es el doce de febrero tu día.

Esta Región de mi patria,

Sobre la Línea Equinoccial

Se levanta, este vergel señorial.

De tamaña expresión singular

VI

Admirable nuestra savia vegetal.

Amazonía magna exuberante:

Copiosa riquezas natural.

En la patria el tesoro es oriental.

Van y vienen por tus Ríos

Causes de agua a raudal

Que nunca cesen su caudal:

Que renueven las aguas del mar.

CORO

Imponente Oriente Ecuatoriano.

En un solo puño las manos,

¡Salve! Tierra de esta Amazonía.

Agua, aíre y la ecología.

Tutelando nuestra heredad

En defensa de la biodiversidad.

ESTROFAS

I

Parque Nacional Yasuní,

Vocablo de esta lengua ancestral,

Tierra Sagrada Universal,

Prodigio natural del Planeta.

Ambiente sin contaminación

El sustento del ecosistema,

Larga vida es nuestro lema.

Con los bosques la purificación.

II

Recia esta fuerza laboral

Pasos firmes al desarrollo

Superando barreras y escollos,

que crezca la nación en poder.

Celosos de este territorio

Y de esta verde economía.

Juro que el corazón yo daría.

Un espacio perder nunca más

III

Paraíso que nos dio el Creador,

Estepas de increíble realidad,

Muestra de su amor y bondad.

De fauna y flora sin igual.

Tan profusa y limpia ecología,

De este suelo grande y fecundo

De su vientre surge para el mundo:

El Oriente y nuestra Amazonía

HIMNO A LA AMAZONIA ECUATORIANA

Propuesta de Nuevo Himno a la Amazonía Ecuatoriana, escrito por Umart Kler Ghov y entregado al G. Provincial de Zamora Chin-

chipe, para que sea socializado e implementa-do por las 6 provincias de la Amazonía Ecua-

toriana.24/08/2013

Page 36: Revista Yaguarzongo N° 46

36

El río Amazonas sin lugar a dudas es uno de los símbolos más fuertes de ecuatorianidad, sin bien es cierto luego de la firma del Trata-do de Paz con el Perú en 1998 se perdió toda posibilidad de un acceso soberano al gran río, la historia escrita con la sangre y el esfuerzo de miles de ecuatorianos no puede ser desco-nocida, por ello y a pesar de cualquier cosa los ecuatorianos siempre consideraremos a nues-tro país como amazónico.

Previo al descubrimiento del río mar, el Te-niente Gobernador de Quito Gonzalo Díaz de Pineda realizó varias expediciones entre los años 1538 y 1539 para explorar la región amazónica aportando los primeros datos y relaciones geográficas que sirvieron de base para la posterior conquista de la región y el descubrimiento del río Amazonas. Los libros de historia nos recuerdan que Gon-zalo Pizarro acatando las órdenes de su her-mano el conquistador del Perú Francisco Pi-zarro avanzó hasta Quito el año 1540, en la cual empezó los preparativos para la expedi-ción en búsqueda de El Dorado, aquel mítico lugar en donde todo era de oro. Dicha aventu-ra inició en Quito el 25 de febrero de 1541 con 220 españoles y 4000 nativos. Complementa-ba esta expedición el tuerto Francisco de Ore-llana quien saliendo de Guayaquil llegó hasta

La filatelia como arte investigadora rescata estos hechos históricos a través de múltiples en varios países del mundo que destacan so-bre todo el valor natural de la inmensa región amazónica, patrimonio mundial natural y una de las nuevas siete maravillas naturales de la humanidad otorgándole la condición de países amazónicos a Guyana, Surinam, Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil.

El gobierno ecuatoriano a través de su empre-sa nacional de correos ha realizado la emisión de algunos sellos postales alusivos a esta im-portante temática. Así en 1942 con motivo de los 400 años del descubrimiento del río Ama-zonas, se emitió una gran serie compuesta de 8 sellos con valores de 10 y 40 centavos, 1 y 2 sucres para el correo ordinario; y, de 40 y 70 centavos y 2 y 5 sucres para el correo aéreo. Las ilustraciones o viñetas contenían las representaciones de los conquistadores españoles Francisco de Orellana, Gonzalo Pi-zarro, Francisco Pizarro, los mapas antiguos de Sudamérica con la información sobre el nuevo descubrimiento, el centro de Guayaquil y la catedral de Quito, lugares desde donde partieron los conquistadores para atravesando los andes ecuatorianos llegar a descubrir el río más caudaloso del mundo como lo es el Ama-zonas.

(Juan Carlos Izquierdo Carrión)Zamora - Ecuador

FILATELIA ES CULTURA:

EL RÍO AMAZONAS

la actual provincia que lleva su nombre con 64 compañeros iniciando luego de un penosísimo an-dar desde la costa ecuatoriana, un viaje sin retorno por el río Coca, el Curaray y finalmente el Mara-ñón el día 12 de fe-brero de 1542.

Años después median-te Decreto Ejecutivo 266 publicado en el Registro Oficial No. 1072 el 18 de marzo de 1961 se emitió tres sellos componentes de la serie dedicada a la “Semana Amazó-nica” que el gobierno nacional lanzó como símbolo de reivin-dicación de los de-

Page 37: Revista Yaguarzongo N° 46

37

rechos del Ecuador en la Amazonía. Se trata de tres sellos postales para correo aéreo de 80 centavos, 1,30 y 2 sucres en policromía. Una característica especial de la ilustración que es la misma para los tres sellos es el mapa del Ecuador que incluye los territorios hasta más allá del Marañón; y, sobre todo aquella leyenda generada con vehemencia en la Ad-ministración del Presidente José María Velas-co Ibarra, “El Ecuador ha sido, es y será País Amazónico”. En el mismo año y como parte integrante de la serie postal dedicada a la III Exposición Fila-télica Nacional realizada en Quito en el mis-mo año, se emite un sello postal para correo aéreo de,30 sucres multicolor impreso en Edi-torial Colón de la misma ciudad con el mapa de Sudamérica en el cual se destaca por pri-mera vez la línea interoceánica que partiendo de San Lorenzo en la provincia de Esmeral-das, y siguiendo por el Amazonas termina en el Atlántico brasileño.

En el año 1969 se autorizó la utilización del timbre orientalista de 30 centavos que había dejado de utilizarse por la derogatoria de la Ley Especial de Oriente y del cual habían que-dado algunos miles de ejemplares. Este timbre había sido impreso en la casa Heraclio Four-nier, pero para las impresiones de sobrecargos y sobrellos que le darían su uso postal se con-trató al Instituto Geográfico Militar que había pasado a ser desde 1967 el impresor oficial de las especies postales nacionales. Se realizaron dos emisiones, el 7 de abril y el 2 de mayo de 1969. Se aplicaron 15 sobrecargos con valores

diferentes desde los 20 centavos hasta los 5 sucres; y la frase “POSTAL” sobresellada en tinta de color azul, rojo, negro y lila. Este tim-bre orientalista llevaba la imagen del mapa del Ecuador con su extensión original antes de la firma del Tratado Salomón Lozano, firmado secretamente entre el Perú y Colombia para repartirse el territorio ecuatoriano, se puede apreciar a simple vista la extensa magnitud de suelo nacional cercenado al área original de la Real Audiencia de Quito conforme se adoptó como territorio en la primera constitución del 13 de mayo de 1830.Más tarde en 1984 se emite una serie comple-ta de seis sellos postales denominada “Políti-ca Internacional del Presidente Osvaldo Hur-tado”, el primero de los sellos con un valor postal de 8 sucres impreso en policromía de colores recordatorio de la visita del primer Presidente ecuatoriano en recorrer el río Ama-zonas durante su visita oficial a Brasil.

Finalmente dos años después en 1986 y con motivo del V Censo de Población y IV de Vi-vienda se emite una hoja recuerdo perforada en cuatro partes, las dos superiores correspon-dían al Mapa del curso del Amazonas diseña-do por el padre jesuita Samuel Fritz en el año 1744. Por su vistosidad y carácter histórico estos dos sellos deben ser muy apreciados en el inventario filatélico nacional.

Es así como la filatelia nacional rinde home-naje al padre de todos los ríos, el gran Amazo-nas, cuyo descubrimiento y conquista cubrió de gloria a todos los ecuatorianos.

Page 38: Revista Yaguarzongo N° 46

38

Matilde Hidalgo Navarro

Matilde Hidalgo Navarro

Museo Matilde Hidalgo de Procél

Matilde nació en Loja y fue la menor de los seis hijos del comerciante zarumeno Juan Manuel Hidalgo y la vene-zolana Carmen Navarro. Después de que su padre murió, su madre tuvo que trabajar como costurera para mante-nerlos. Matilde estudió en la escuela de la Inmaculada Concepción de las Hermanas de la Caridad.

Al graduarse de sexto grado, Matilde le dijo a su hermano mayor Antonio de su deseo de seguir estudiando. Anto-nio hizo la solicitud a la secular de la escuela secundaria Colegio Bernardo Valdivieso. El director de la escuela, el Dr. Ángel Rubén Ojeda, estuvo de acuerdo después de pensarlo durante un mes. La reacción en la comunidad no fue muy buena: las madres prohibieron a sus hijas su amistad con ella y el sacerdote local la obligó a escu-char misa dos pasos fuera de la entrada de la iglesia. No obstante, su madre la defendió firmemente. Finalmente Matilde se graduó con honores el 8 de octubre de 1913 y continuó sus estudios en la Universidad de Cuenca, obteniendo el doctorado en Medicina el 21 de noviembre de 1921, convirtiéndose en la primera mujer ecuatoriana de recibir tal título. Dos años más tarde, Matilde se casó con el abogado Fernando Procel, y tuvo dos hijos.

Durante la presidencia de Jose Luis Tamayo, Matil-de anunció que iba a votar en las siguientes elecciones presidenciales. La solicitud fue sometida a consulta mi-nisterial, decidiéndose a su favor, y el 10 de mayo de 1924, Matilde Hidalgo se convirtió en la primera mujer en América Latina en ejercer el derecho constitucional a votar en una elección.

En 1941 se convirtió en la primera mujer candidata y la primera mujer elegida administradora pública en Loja con el cargo de Diputada Suplente. Ejerció la medici-na en Guayaquil hasta 1949, cuando obtuvo una beca para realizar una especialización en Pediatría, Neurolo-gía y Dietética en Argentina. A su regreso al Ecuador, se dedicó a desarrollar obras sociales, fue nombrada Vicepresidenta de la Casa de la Cultura Ecuatoriana y fue presidenta de honor y vitalicia de la Cruz Roja en El Oro. También recibió múltiples reconocimientos como la condecoración con el Mérito de Salud Pública.

Falleció en 1971 por un ataque de apoplejia y su vela-ción se realizó en la Facultad de Medicina de la Uni-versidad Catolica de Guayaquil, en donde era decano su hijo Fernando.

Page 39: Revista Yaguarzongo N° 46

39

La Posada...del Cuento

Fue el mismo día en que llegué a Cajamarca, lugar donde Francisco Pizarro ordenó ejecutar al último Monarca del Imperio de los Incas.

Fui destacado a trabajar como te-legrafista del Estado, a esa ciudad de añejas y amplias casonas, donde flota el misterio de tantos episodios entre los incas y la aventura de los españoles.

Mucho había oído hablar de los muertos que resucitaban, y que en la soledad de las noches, acosaban a los campesinos. Había escuchado relatos sobre cadáveres salidos de sus tumbas; y que del subsuelo su-bían ruídos de cadenas hasta que la gente enloquecía de terror.

Incrédulas sonrisas ensayaban mis labios cuando me contaban esas his-torias, que yo atribuía a la ignoran-cia y estupidez. En vano mis colegas se afanaban en narrarme, justo el día de mi llegada, tan insólitas experien-cias y combates singulares entre se-res de este mundo y del otro, puesto que nada me haría pensar que sería protagonista de tan extraños suce-sos.

Era de noche y me encontraba solo en una inmensa casa, de la cual me tocaba ocupar un cuarto con puerta a la calle. Remplazaba al telegrafista Ricardo Bado, a quien trasladaron a Trujillo, y tuvo la cortesía de trasla-

darme el alquiler. Como el servicio de agua estaba muy distante, había cual centilena en la cabecera de mi cama, un rústico palanganero de ho-telucho, que sostenía una desporti-llada cofaina, con su jabonera y su toalla colgante, mientras una jarra con agua descansaba en su parte in-ferior. Antes de acostarme tranqué la puerta con un tronco de eucalipto que ahí mismo encontré, porque esa sería su función.

Cansado por los ajetreos del viaje y por esas cosas que nos distraen siempre que llegamos a sitios desco-nocidos, me desplomé en el catre de fierro, cuyas patas se hundían en el piso de tierra. Ingresé a las profun-didades del sueño fisiológico, que

nadie sabe por qué designios existe.

Habrían pasado dos o tres horas, o sería media noche, cuando de súbito desperté, sobresaltado por extraños sonidos. A medida que tomaba con-ciencia, recordaba que ese día había viajado largo; y que tramontando “El Gavilán”, ya estaba en Cajamar-ca: ¡Oh Cajamarca, ciudad de las leyendas!.

Pero he aquí … ¿y estos ruídos?... Se oía, en el hondo silencio de la noche, el claro e inconfundible cha-potear del agua, ¡¡en mi cabecera!!, ¡¡en el lavatorio situado a centíme-tros de mi cama!! …¿Qué?...

¿Quién se está lavando aquí a estas horas, a oscuras? No hay duda. No puede haberla: alguien se lava en la cofaina, ¿pero quién?... Ah, será un sueño de esos que parecen reales y que me transportaban a otras reali-dades… pero no, no puede ser eso porque ahora siento un miedo hu-mano. Lo que pasa es que me han contado tantas rarezas, que estoy su-gestionado. ¿Fantasmas? ¡jamás creí en eso! ...Pero entonces…

Paralelamente a mis razonamientos afiebrados, continuaba el nítido cha-paleo, como para dar fe a la tétrica realidad. Me pellizqué hasta san-grar.

Temblada desde la punta de los pies

(Raúl Galvez Cuellar)Perú

Page 40: Revista Yaguarzongo N° 46

40

hasta el último pelo de mi cabeza. Finalmente y ante la evidencia de los hechos, descarté definitivamente la hipótesis del sueño, y decidí enfren-tarme a la estremecedora verdad.

Hasta ese momento había permane-cido totalmente cubierto con las fra-zadas, debido al intenso frío. Más ar-mándome de valor, y ya fuese quien fuese, -me dije-, trataré de verlo... Y apartaba de mis ojos la ropa de cama, muy lentamente, a la veloci-dad de las sombras solares… Mi cu-riosidad desembocó en un horrible salto: mi cara recibió un chorro de agua helada… Como si me dijeran: -¿qué miras, desgraciado ser de los vivos?.

Para qué decirles que a partir de entonces tuve el pánico más horri-pilante que se pueda imaginar: mi temblor se hizo convulsión epilépti-ca e impía. Me era imposible dudar porque el líquido helado me dejaba absolutamente despierto. Instintiva-mente volví a cubrir mi rostro, mien-tras escuchaba, con horror creciente, que el “muerto” seguía lavándose las manos, la cara, sus brazos tal vez.

Cada segundo era una eternidad, y mi visitante no terminaba de lavar-se; continuaba el lacerante chacolo-teo. Pero ¡qué manera de asearse! ¡y a estas horas! El ruido inmisericorde y desarticulado taladraba mi cerebro esa noche espantosa.

¿Por qué no cesaba tan torturante circunstancia?, sea quien fuera, ¿por qué no acababa de una vez?... Pero acabar ¡¿qué?!... Esto es absurdo: absurdo y cierto. Estoy ante un fe-nómeno sobrenatural. ¿Será el Inca Atahualpa?...

Tras enfermizas reflexiones llegué a la conclusión de considerar verí-dicas las historias de resucitados, y nada era más cuerdo, si aquí mismo se refrescaba el espectro de un indio o de un soldado español.

Asperjado todavía, me sentía humi-llado por la insolencia del espantajo; cuando de pronto me acordé que en Cajamarca era la temporada de car-navales en que predomina el juego con agua. Entonces creí que lo más atinado era, como una cortesía de mi parte, levantarme, coger la jarra con agua, y ¡zas!... bañar al fantasma, correspondiendo así su invitación a los festejos carnavalescos.

Y calculando la distancia hacia la jarra, extendí mi brazo en la oscuri-dad, pero fui sujetado a la altura de la muñeca, por una mano que parecía de fierro (y helada), al mismo tiempo que recibía en mi nuca un leve rocío. Logré zafar, y enterado de la puntería de mi compañero de juego, atrapé la jarra cuando otra suave lluvia chico-teaba mi cuello. Fácil era presumir que mi “contrincante o amigo” tenía el lavatorio, puesto que yo tenía la jarra. Y también que no era su inten-ción empaparme, sino entretenerme, lanzándome certeras gotas. Seguí su ritmo, salpicándolo con mi derecha, y sosteniendo la jarra con la izquier-da. Simultáneamente debía evitar ser alcanzado; y entonces iniciamos una danza macabra en el oscuro, a los acordes de débiles chirridos que articulaba el fantasmagórico. El so-nido era tan extraño que no puedo describir, pero si afirmar que no eran de este mundo.

Queridos lectores, ustedes al leer estas líneas, posiblemente están cómodamente instalados; pero otra cosa es haber estado en el mismo escenario de los hechos. Yo tenía que correr para no ser rociado con la precisión de un ser invisible, y que tenía la ventaja de ver en la noche; y no tenía otra alternativa que saltar como un arlequín desaforado, trope-zando con lo que había, resbalando una y otra vez en el charco tenebro-so, enredándome con mi propia ropa que caía de los clavazos afianzados en viejos troncones.

Desde la más ridícula posición (y

orientado siempre por la rara sin-fonía), lancé resueltamente el agua que me restaba. Y entre colérico, asustado y satisfecho de tanto dispa-rate, volví a mi cama.

Ya no se oía el ruído de ultratumba, pero cuántas cosas imaginé esa no-che!: ah, cuando amanezca, empeza-ré la tarea de desenterrar el Tesoro del Inca, ¿Cuántos días emplearé?, ¿semanas?, ¿meses? ¿Avisaré a mis colegadas del Telégrafo? ¿Lo hago en secreto?.... Y si no hay nada, me tildarán de ambicioso, iluso, y men-tiroso. Sería la vergüenza y el haz-merreír… Creyéndome loco, me re-gresarían a Lima para internarme en el Larco Herrera.

Y perdido en turbulentes proyectos, retomé el sueño.

Con los primeros rayos del sol ca-jamarquino desperté en la mañana. A las ocho horas empezaba mi turno en el circuito con Lima, y el Correo estaba a la vuelta de la esquina. Lo primero que recordé fue la noche de horror. Tenía tiempo para pensar, durante del desayuno, lo que haría respecto del tesoro. El terreno no parecía duro, y vi mentalmente a un grupo de lugareños, bajo anchos sombreros de paja, cavando pico en mano… Innumerables piezas de oro puro, de incalculable valor, másca-ras, brazaletes, pendientes, variedad de joyas preciosas que darían envi-dia al hombre más rico del mundo… Yo, naturalmente, dirigía las ope-raciones y ordenaba el tesoro. Mi dinero en los bancos de Suiza me permitiría viajar por la más bellas y exóticas ciudades.

Pero de mi pensamiento a la realidad no había ni un paso: en el lavatorio vi … un pericote ahogado.

«Escrito en Cajamarca, en 1954, antes de cumplir mis 20 años, y que originó mi frase “Un pericote me hizo escritor”».

Page 41: Revista Yaguarzongo N° 46

41

1¿Recuerdas..? solos tú y yo;

toda la familia afuera;tus viejos en la frontera,

de Thailandia,o Yhamquempó.La cosa,amor,empezó,

como empiezan estas cosas;promesitas primorosas;tomaste la iniciativa;

no lo he olvidar mientras viva..:¡que avispas para espantosas..!

2

Él solito se ha ganadoesa opinión tan precisa;demoledora,y consisa,

que medio mundo ha escuchado.El que la dijo,acertado;

más elocuencia,no pudo;mi amigo,yo no lo dudo,porque,como así lo ven,le, pueden decir,también:

¡qué pobre y triste “quejudo”..! 3

Cuado me dicen “doctor”,que no soy,aunque parezco,reclamo,porque merezco,que me traten de... señor.Lo reclamno, por favor,

porque siempre me he esmeradoen lucir inmaculado

mi prestrigio,y mi buen nombre,que nadie,de ello,se asombre

porque es mío,y lo he cuidado... 4

Si me vas aser infiel,dímelo ahora,negrita;

porque después me lo grita,este barrio,que es tan cruel.Que conste,lo hago por él,

del que siempre me he cuidado;la más chismosa,de al lado,,

con vulgar vocabulario,..tiene al día al vecindario,

y bien feo me ha gritado..,.

(Paúl Ramírez Soto)Perú

DÉCIMAS “LIBRES”,DESDE CHICLAYO,PERÚ...

41

Page 42: Revista Yaguarzongo N° 46

42

Cuando muere un poeta,calla la vida,

se entristece el alma,el mundo suspira…

Cuando muere un poeta,se quiebran las voces

del ritmo versado,del alma herida.

Cuando muere un poeta,la tinta se esparce

sobre la pálida hojabuscando la plumaque débil reposajunto al tintero,

soñando escribir,quizás, su última prosa.

Cuando muere un poeta,hay un silencio profundo,

no hay cruz, ni corona,ni un llanto, ni un gemido,

sólo queda cual nidoun libro encendido,con letras ardientes

que graban los versos,del poeta querido.

Cuando muere un poeta,hay calma en el cielo,

las huestes celestesirradian sus luces

al rítmico pasode un verbo valiente,que queda en la tierra,Cual valioso presente.

Cuando muere un poeta,no hay un adiós

ni un hasta luego,sólo hay un presente

que queda en la mente,cual recuerdo urgentedel poema que un día,escribió para siempre.

Cuando muere un poeta,hay paz en el alma,profunda la calma,divino es el don,

que se esparce cual vientoesperando el momento,

de su encuentro con Dios.

CUANDO MUERE UN POETA (Julio Teófilo Solorzano Murga)

Perú

42

Page 43: Revista Yaguarzongo N° 46

43

TARDESHay tardes simples,

sin motivos, sin razones.Tardes de fiebre en el pecho,

Tardes en las que:Me pesa el aire que respiro,

me pesa tu mirada en mis pupilas,me pesa el tiempo en los párpados,

y fastidia el peso del alma.

SUEÑOMe aferro al sol de tu mirada,

se anima el bosque de mi pecho.Tu sonrisa de blancas estrellas,

corre en tropel, descalza, por las venas.Te atrapo en delirios, respiros agitados.Explotas indolente, en pájaros infinitos.

Otra vez la luna pálida en la ventana.

Estanislao.Guayzimi - Ecuador

43

Page 44: Revista Yaguarzongo N° 46

44

ZAMORA DE MIS SUEÑOS

Hugo Arias Benavides.Zamora - Ecuador

Zamora desde que te conocíDe pronto ya me enamoré de tiPor tu sol radiante al amanecer

De románticas tardes al anochecer.

Tus montañas son perlas del orienteDe ensueños y alegres despertaresQue gorjean tus cantarinas avesCompartes un paraíso sin igual.

Tu cielo azul que brilla en el espacioBajo el manto verde viven culturas milenarias

En medio del bosque eterno e infinitoCon juguetones ríos te acompañan.

Aquí llegaron los intrépidos ibéricosTras el oro que ocultaban tus montañas

Que les dio riqueza y fama vanidosaSolo quedaron huellas como herencia.

Tras leyendas y fábulas contadasLlegaron los valientes colonizadoresPara reeditar la historia ya perdida

Ahora somos ejemplo de nuestro Ecuador.

44

Page 45: Revista Yaguarzongo N° 46

45

ACRÓSTICO A ZAMORA CHINCHIPE

Delicia Villalta OrtegaZamora - Ecuador

Al recordar con júbilo, 60 años de provincialización,

Te rendimos homenaje todas las nacionalidades,Irradiados de alegría y acicalados de conmoción.

Zamora Chinchipe, eres provincia oriental,A ti te exalto, por ser mi terruño natal,Monumentos se exhiben demostrando tu potestad,Oh prodigio de cascadas, flora y fauna sinigual.Recibe el saludo y reverencia de colonos, shuar,Afroecuatorianos, saraguros y puruháez.

Con júbilo, vitoreamos los 60 años de emancipación,Hombres y mujeres te agasajan con emoción,Inclinando la frente por tu soberanía y libertad.Naciste un 10 de noviembre, colosal de potestad,Codiciada de propios y extraños, por el amarillo metal.Hacer, quisieran de tus maravillas, su madrigal,Ilusiones y ambiciones se conjugan por igual.Porque eres la provincia anhelada por el precioso metal.Engalanada de paisajes y tranquilidad celestial.

¡Loor a mi Zamora Chinchipe!

45

Page 46: Revista Yaguarzongo N° 46

46