lunes 25 de junio del 2012a26. el comercio

“Desde el Paleolítico Superior hasta la fecha, el ser humano no ha aprendido

a conocerse debidamente.”

Tengo 53 años. Estudié en el colegio Roque Sáenz Peña de San Miguel. Mi mayor virtud es la sinceridad. Mi mayor defecto es que soy cachivachero. Guardo demasiados papeles, libros y discos compactos. Soy hincha del Alianza Lima. Que me disculpe mi hermano, pero no concibo a alguien salsero de Universitario. La persona viva que más admiro es el compositor criollo Manuel Acosta Ojeda, siempre ha sido fiel a sus principios. Mi personaje de ficción favorito es el justiciero Sandokán, de las novelas de Emilio Salgari.

posdata

S e hizo aficionado a este género musical cuando descubrió a Benny Mo-ré, Arsenio Rodríguez y la explosión salsera en

Nueva York de los años setenta. —¿Cómo fue ese inicio?En casa escuchaban la Sonora Ma-tancera, algo de la Fania en los años setenta. He vivido en San Miguel los primeros 30 años de mi vida. No quiero hacer una comparación con el Callao o La Victoria, pero ahí se escucha buena salsa.—¿Quiénes son sus referentes?Yo consideraría a Arsenio Rodrí-guez, Benny Moré y Celia Cruz. Creo que soy salsero por ellos y la

explosión ocurrida durante los años setenta en Nueva York. —¿Cuando ingresó a la universidad siguió con su pasión musical?Cuando ingresé a San Marcos se es-cuchaba la Nueva Trova. Yo prefiero a Benny Moré cien veces más que a Silvio Rodríguez. —¿Qué sentido le da a la salsa en su vida?Para mí la salsa es música, es vida, ese es mi acercamiento. La música en verdad me ha acompañado en los momentos más difíciles, personales y profesionales.—¿Cómo cuáles?Cuando recuerdo mucho a gente que no está conmigo. Mi padre, por ejemplo. Prefiero recordarlo con música. Y cuestiones profesionales, el juicio a Fujimori. Era de absoluta tensión. Puedo decir que la salsa me ayudó a enfrentarlo con alegría, con optimismo, con vida.—¿A qué canción volvía durante el período del juicio?Volví mucho a Benny Moré, la can-ción “Repica bongó”, por la fuerza, la interpretación. Me hacía sentir

marco aureliodenegri

IVáN GoNzALES GELdRES

EspErado rEcital

El regreso de Valentina— la talentosa pianista Valentina lisitsa se pre-sentará el lunes 2 de julio en el teatro Municipal. tiene el 15% de descuento en tu Entrada. participe en clubsuscriptores.pe por cinco entradas dobles .

cElEbra 25 años dE trayEctoria

Julio Sabala— El 28 y 29 de junio en el teatro del pentagonito, sabala presenta-rá a su nuevo show “risoterapia”. tienen el 20% de descuento en las entradas. ingrese a nuestra página web y participe en una promoción para conocer al artista y tomarse una fotografía con él.

Lo más característico de la elec-ción de pareja es la equivocación. Pero uno se equivoca, no porque no haya advertido en la perso-na elegida defectos que luego

se manifestaron; no; uno se equivoca por-que desde el Paleolítico Superior hasta la fe-cha, el ser humano no ha aprendido a cono-cerse debidamente y por supuesto tampoco ha aprendido a conocer bien a los demás.

Ha tenido cuarenta y cinco mil años para aprender, pero hasta ahora no ha apren-dido. Esta sorprendente incapacidad es estructural, built-in, y por consiguiente no tiene remedio. Sin embargo, el ser humano, en relación con lo impersonal, ha aprendido muchísimo, y sigue aprendiendo; pero en relación con lo personal es prácticamente una nulidad.

En resumen, no es que nos equivo-quemos por tales o cuales razones. No. La cuestión es que no podemos acertar porque somos naturalmente incapaces del acierto. Ésta es la nuda realidad, sin afeites.

Para las más de las personas, la acep-tación de lo antedicho es imposible y en consecuencia prefieren seguir equivocán-dose, inconscientes de que lo terrible no es el error, sino la perseverancia en el error. Y aunque errar, como dijo Séneca, es humano, perseverar en el error, según los escolásticos, es diabólico.

Mando y sumisiónLa Escuela Etológica Contemporánea nos dice que el mando o jefatura nos es con-natural, pero también la obediencia y la sumisión. Lo que no nos es connatural es sentirnos iguales a los demás. Por eso la democracia nunca ha logrado prevale-cer, porque la democracia es igualitaria, pero el ser humano no es igualitario, sino jerárquico.

Imaginarse una relación de pareja igua-litaria, equivale a imaginarse una pareja que por decirlo así le ha enmendado la plana al orden natural. En la especie humana, las relaciones igualitarias, cuando las hay, no son producto de la Naturaleza, sino de la Artificialeza o Cultura.

La vida es quehacerLa ocupación, el negocio o la tarea que ha de hacerse se llama quehacer. La vida es quehacer, decía ortega y Gasset, y quien trate de sustraerse a ello, quien resuelva no hacer nada, no solamente habrá de aburrirse, sino que será condenado al peor de los trabajos forzados: a hacer tiempo, o a matar el tiempo.

En el aburrimiento, el tiempo se alarga; en la diversión, contrariamente, se acorta. En alemán, el aburrimiento se designa con el término Langeweile, que literalmente sig-nifica «tiempo largo», al paso que Kurzweile (diversión) quiere decir «tiempo corto».

Tarde o temprano, la inactividad, o como diría Gregorio Marañón, el sinquehacer, resulta insoportable.

ElEcción dE parEja

“a los abogados les falta más chispa, a los políticos...

¡que les pongan salsa!”

Ronald GamarraAbogado defensor de los derechos

humanos. Ex fiscal adjunto en el Caso Fujimori

JUaN poNcE

“ El juicio a Fujimori era de absoluta tensión. Puedo decir que la salsa me ayudó a enfrentarlo con alegría, con optimismo, con vida. Volví mucho a Benny Moré, la canción ‘Repica bongó’”.

“ Los fines de semana pongo música en Twitter. La gente va conociendo que esos días “el loco de Gamarra” no va a hablar de política”.

capaz de enfrentar situaciones pro-fesionalmente complicadas. —¿Conoce a algún político salsero?Bueno, el doctor delgado Aparicio. Yo no lo conocía hasta el juicio con Fujimori.—Es algo curioso, ¿no? Porque él es fujimorista y usted fue procurador en el juicio.Mira, nunca hemos hablado de po-lítica. En las sesiones del juicio a Fu-jimori empezamos a hablar solo de música. Él es un erudito en el tema y yo me defiendo algo. Coincidíamos en algunos gustos musicales.—¿Con quiénes comparte su afi-ción salsera?Con omar Córdova, de descarga en el Barrio; Eloy Jáuregui; Eduardo Vega de la defensoría y Enrique Pie-dra. Con ellos nos reunimos.—¿Cómo son las reuniones?Conversamos, escuchamos música, cada quien va presentando lo que ha descubierto, lo que más le gusta. Yo aprovecho para ponerles algo con mensaje, siempre lo trato de hacer. —¿Cuál diría que es el salsero con el mejor mensaje? El que transmite paz, justicia y libertad en sus letras.Si vamos a hablar de música con mensaje, Henry Fiol. En todas sus canciones transmite ese deseo de superación, de enfrentar el mal mo-mento y asentarse en sus principios. —Me comentaron que ha ido a los eventos de Descarga en el Barrio.Para mí, la descarga en el Barrio fue todo un descubrimiento. En los años ochenta buscaba música que no era muy comercial. Alguien me dijo que en el Jr. Quilca había vinilos y caset. Ahí conocí a omar Córdova, quien organiza la descarga en el Barrio. Nos hicimos amigos. Fui al evento cuando cumplió 10 años. —¿Qué tal la experiencia?Resulta que estaban las cámaras de “Cuarto poder” y sacaron “procura-dor salsero”. Es curioso porque hay una entrevista que me hace en el 2003 o 2004 Mariella Balbi para El Comercio. Es una página completa con una foto mía y ahí se ve el cua-dro de la Fania All Stars completa.—¿Escucha salsa para relajarse lue-go del trabajo?de verdad valoro los pocos momen-tos de tranquilidad que tengo. Yo solo pongo mi música y la escucho horas de horas. —Entonces, es su terapia.Ahora que uso redes sociales, Twit-ter sobre todo, los fines de semana voy poniendo música. Ya la gente va conociendo que en esos días “el loco de Gamarra” no va a hablar tanto de política, sino va a poner salsa.—Si tuviera un programa de músi-ca, ¿cómo se llamaría?Probablemente no sea nada nuevo, pero le pondría “Pa’ bravo yo”.—¿Desde qué medio le gustaría di-fundirlo?En la radio y redes sociales. En la te-levisión se pierde un poco el contac-to con la gente. Prefiero ir poniendo música, que la gente me vaya pidien-do temas.—¿Les falta sabor a los políticos?Los abogados y los políticos son de-masiados serios para la salsa. Creo que les falta más alegría, más chis-pa. A los políticos... ¡que les pongan salsa! [risas]

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Conocido por su firmeza a la hora de defender los derechos huma-nos, el abogado Ronald Gamarra nos ofrece una faceta descono-cida por muchos: la de salsero. Incluso confiesa que la música lo ayudó a enfrentar el juicio contra Alberto Fujimori.