Ruben Dri Reflexiones Sobre El Sujeto, El Poder y La Ética

10
199 Las reflexiones que avanza Miguel Mazzeo sobre la construc- ción del poder popular, tanto en su obra anterior ¿Qué (no) hacer? Apuntes para una crítica de los regímenes emancipatorios como en ésta, El sueño de una cosa. Introducción al poder popu- lar, son contribuciones fundamentales para las tareas políticas pendientes del movimiento popular. Logra el autor exponer una visión crítica de los movimientos revolucionarios y elaborar con- ceptos que abren fecundas perspectivas para el trabajo político de liberación. En este epilogo sumamos algunas reflexiones que se encuentran en la misma línea general. Lo que ha venido sucediendo en nuestra sociedad, sobre todo a partir de la década del 90, es la destrucción de la ética o del Epílogo Reflexiones sobre el sujeto, el poder y la ética Por: Ruben Dri

description

dfg

Transcript of Ruben Dri Reflexiones Sobre El Sujeto, El Poder y La Ética

  • 199

    Las reflexiones que avanza Miguel Mazzeo sobre la construc-cin del poder popular, tanto en su obra anterior Qu (no)hacer? Apuntes para una crtica de los regmenes emancipatorioscomo en sta, El sueo de una cosa. Introduccin al poder popu-lar, son contribuciones fundamentales para las tareas polticaspendientes del movimiento popular. Logra el autor exponer unavisin crtica de los movimientos revolucionarios y elaborar con-ceptos que abren fecundas perspectivas para el trabajo poltico deliberacin.

    En este epilogo sumamos algunas reflexiones que se encuentranen la misma lnea general.

    Lo que ha venido sucediendo en nuestra sociedad, sobre todoa partir de la dcada del 90, es la destruccin de la tica o del

    Eplogo

    Reflexiones sobre el sujeto,el poder y la tica

    Por: Ruben Dri

  • 200

    EL SUEO DE UNA COSA

    ethos, que, en un sentido etimolgico, significa el refugio, el hbi-tat, la guarida, la naturaleza en la que vive el animal. Comonosotros, seres humanos racionales, hemos roto con la natura-leza, aunque sigamos siendo seres naturales, no podemos vivir enesa naturaleza y por eso tenemos la necesidad de crear lo que nosdicen los filsofos, desde Aristteles en adelante, una segundanaturaleza.

    Esta segunda naturaleza es nuestra casa espiritual, es la tica, esnuestro ethos. Cuando se destruye esa casa nos destruimosnosotros. Porque la construccin de esa casa significa valores com-partidos, claves mediante las cuales nos entendemos, leyes quehacemos nosotros, estructuras y obligaciones que tenemos encomn. Esto es, toda nuestra cultura, nuestro arte, nuestro pensa-miento. Cuando eso se viene abajo, nosotros nos venimos abajo.Pero no pasamos a la primera naturaleza. Por eso cuando se diceque esto es la ley de la selva se le hace un insulto a los animales,porque ellos tienen sus leyes, no estn en lucha todos contra todos.Tienen sus amores, sus odios, sus claves, saben entenderse,pueden vivir en esa naturaleza, pero como nosotros ya no somosms seres puramente naturales, no podemos hacer lo mismo.

    Cuando destruimos nuestra casa somos peores que ellos.Ah ses ya la lucha de todos contra todos, porque ah ya no hay claves,ya no hay valores, todo vale, cualquier medio es lcito, la destruc-cin, el sadismo, la desaparicin... El animal no hace desaparecer,no hace un plan de desapariciones. Eso lo hacemos nosotroscuando destruimos nuestra casa. Por lo tanto ac hay una tareafundamental que es, precisamente, reconstruir la tica. La tica noes la moralina, no es un sermn de somos buenos o somosmalos, sino que la tica son los valores que nos permiten a nos-otros ser personas, ser sujetos, convivir, realizarnos como sujetos.

    Si nosotros destruimos esto nos destruimos absolutamentecomo sujetos y rompemos la nica posibilidad que tenemos desuperar la objetualidad. El sujeto no se puede ver o palpar, porqueno es mi cuerpo, mi cara, mis ojos, mis manos.Yo no veo sujetos.En todo caso veo cuerpos.

  • 201

    REFLEXIONES SOBRE EL SUJETO, EL PODER Y LA TICA

    Para percibir al sujeto se tiene que producir una transforma-cin. Esa transformacin tiene, por lo menos, dos niveles: el actode la creacin y el del reconocimiento. El beb comienza a lucharpor su reconocimiento desde que sale del vientre materno y nosvuelve locos a todos porque quiere ser reconocido.Todos quere-mos ser reconocidos.Yo quiero ser reconocido por mis interlocu-tores, pero no como profesor sino como sujeto, como quin soyyo. Quiero una relacin de sujeto a sujeto, una relacin personal.Esa nica relacin personal es la que me constituye como sujeto.

    De manera que para que tenga lugar esa relacin personal senecesita que yo rompa mi propia objetualidad y rompa la objetua-lidad del otro, que yo perfore la objetualidad, o sea, lo objetivo queveo en l, para que aparezca el sujeto. Ese mutuo reconocimiento,precisamente, tiene consecuencias profundsimas en todos losniveles: en el mbito de la pareja, en el de la amistad, en el nivelfamiliar, en el pedaggico, en el social, en el poltico, en el econ-mico. Ser reconocido como sujeto por otro sujeto no es un actointelectual, sino integral.Ahora, esa integridad est centrada plena-mente en la prctica.

    Ah donde hay desocupacin hay objetualizacin del sujeto, y ennuestra sociedad somos tratados como objetos, no como sujetos.Pero somos nosotros mismos quienes muchas veces nos dejamostratar como objetos. Subjetualizarse es exponerse ante el otro,porque ser sujeto, adems de reconocerse, reconocer y ser reco-nocido, es ponerse, y es exponerse. El que no se pone, no escompletamente sujeto. El que deja que lo pongan, es objeto.Ponerse, a su vez, es crearse, es hacerse. En otras palabras, no haysujeto sino un hacerse sujeto, sin un sujetualizarse. Porque elsujeto no es algo esttico como el objeto, sino que el sujeto esdinmico, es dialctico, porque es lo que no es y no es lo que es.

    Continuamente yo no soy lo que soy, porque si en algnmomento fuese simplemente yo nunca ms dejara de ser eso quesoy en ese momento, es decir, sera un objeto.Yo continuamentedejo de ser lo que soy para ser otro o, en otras palabras, soy cier-tamente yo en mi ser-otro. Pero continuamente soy yo en mi ser-

  • 202

    EL SUEO DE UNA COSA

    otro, porque yo me hago yo en ese ser otro; pero para que estosea as, yo tengo que ser realmente mi historia.

    En otras palabras, soy mi historizarme, y esto significa ser mimemoria. No hay sujeto sin memoria porque nosotros somosnuestra historia. Si yo no me recuerdo, si yo me pierdo, me pier-do como sujeto, desaparezco como sujeto. Los psicoanalistascuando tratan a alguien que anda medio desquiciado, le empiezana preguntar qu le pas en la infancia. Porque un desquiciado sien-te que su historia est truncada y como est truncada su historiaes el sujeto el que est truncado.

    Pero esto no lo descubri Sigmund Freud, esto ya lo sabanlos brujos, los saban los chamanes. Como ellos eran muy cos-molgicos no partan de la historia individual sino de la historiacsmica. Cuando se presentaba uno de estos enfermos -que sepensaba que eran endemoniados o algo parecido- lo que hacanera recitarle los mitos cosmognicos, los mitos del principio delmundo. Por qu? Porque ellos intuan que haba una fractura enl, en esa historia, por lo cual el sujeto se haba fracturado y, porlo tanto, estaba enfermo. Para curarse deba recordar. Pero norecordar como quien recuerda cosas que pasaron, sino recor-dar una interiorizacin, eso que pas soy yo, porque yo soy seque fui.

    Pero en el sujeto colectivo se que yo fui, fue precisamenteeste pueblo o estos sectores sociales. Si yo no recuerdo precisa-mente esa historia, no puedo colaborar para reconstruir el sujetosocial, el sujeto poltico que quiero.

    Para que nos entendamos: cuando se construye la NacinArgentina se escribe una historia, la escribe Bartolom Mitre, laescribe Domingo Faustino Sarmiento. En esa historia se recuerdaprecisamente al sujeto que corresponde a esta Nacin -o sea, losque estuvieron en contra no pueden recordar su historia, nodeben recordarla, no tienen historia-, por eso es que los vencidosno tienen historia, porque al no tener historia no son sujetos, alno ser sujetos son objetos y por lo tanto, totalmente manipula-bles.Y fijmonos sobre lo que nos pasa en nuestra historia.Todos

  • 203

    REFLEXIONES SOBRE EL SUJETO, EL PODER Y LA TICA

    hemos estudiado historia y, qu hemos estudiado de Artigas?Sabemos acaso que es el primero que plantea lo de la reformaagraria, el que tiene realmente el sentido propio del pueblo, de latierra? Qu pensamos de Felipe Varela? Incluso en la zamba es elbandido, cuando en realidad su lucha consisti en oponerse a laguerra del Paraguay y luchar por la unidad americana.

    O sea, o no se recuerda o, si se lo hace, hay que reprimirlo, hayque denostarlo, porque son actos de bandidaje. Y por eso los30.000 desaparecidos, pues son grmenes malignos, aptridas,delincuentes subversivos. Son aquellos que ni siquiera existie-ron. Por eso la desaparicin de las personas hay que verla comoun proyecto explcito de absoluto borrn de la memoria, es decir,como sostena el dictador Jorge Rafael Videla no estn, no tienenidentidad, desaparecieron. Entonces a sos no hay que recordar-los. El acto de recordarlos es un acto de reconstruccin de unsujeto. Precisamente de este sujeto que nosotros queremosreconstruir en este proyecto de una sociedad nueva, de una socie-dad liberada.

    Adems, en el recuerdo siempre es importante el smbolo deese recuerdo. Los 30.000 son 30.000.A m no me importan lasmatemticas porque yo no s realmente si son ms o menos,podran ser muchos ms. Pero los 30.000 ya son el smbolo de unproyecto de sociedad, de pueblo, de pas, como los 12 son el sm-bolo de un determinado proyecto.

    Por qu los revolucionarios que desembarcaron en elGramma, que se juntaron despus que Fulgencio Batista los barre,son 12? Se puede creer que realmente fueron 12 los guerrillerosque se re-encontraron? No, esos 12 tienen que ver con los 12apstoles, tienen que ver con las 12 tribus. Pero ni las 12 tribus nilos 12 apstoles fueron 12, porque basta con leer los textos y unose da cuenta de que los nmeros no dan, porque sas no sonmatemticas cuantitativas sino cualitativas, simblicas.Ah los 12representaban siempre un proyecto trascendente y eso es lo quehan pasado a significar en nuestra cultura. Por eso Jess cuandoinstituye nuevamente su proyecto, que es el proyecto del Reino de

  • 204

    EL SUEO DE UNA COSA

    Dios, que es el proyecto comunista, que se haba instaurado enIsrael en el 1200 a. C., el proyecto de la confederacin, se sube aun cerro, para reproducir nuevamente el Sina y ah elige a los 12que no son los 12 apstoles sino que son los 12. Esos 12 signi-fican el proyecto.

    Para nosotros los 30.000 significan el proyecto. Como paralos mapuches los 400.000, que tampoco ellos saben si realmenteson 400.000, tal vez sean muchos ms, no importa.Ya los 400.000,pasan a tener una significacin. Ellos reconstruyen su sujeto comopueblo recordando los 400.000 y cuando hablan de los 400.000no estn hablando solamente de ellos sino que estn hablando delproyecto del pueblo Mapuche. Esto es fundamental para nosotros:el reconstruir y re-escribir nuestra historia; re-escribirla desde losvencidos, re-escribirla desde los luchadores.

    Como deca tambin Antonio Gramsci: hay que partir del buensentido que anida en el sentido comn de la gente. Por eso el lla-mado es a hacer juntos, a ir con ellos aprendiendo de ellos yensendoles. Es decir, esto es dialctico, nadie es solamente pro-fesor ni solamente alumno, nunca nadie puede ser solamentepadre o solamente madre, o solamente hijo/hija. Hay que poten-ciar que se realice la relacin de sujeto a sujeto.

    se debe ser el ideal: reconstruir las relaciones. Porque las otrasrelaciones, las jerrquicas, las relaciones entre dominador y domi-nado, el amo y el esclavo, no son categoras para designar relacio-nes intersubjetivas sino objetuales. La relacin por el mutuo reco-nocimiento siempre es una lucha por ser reconocido.Yo quieroser reconocido y el otro tambin quiere serlo. Es la lucha por elreconocimiento. Parece que el que triunfa es el seor y el quepierde, el que se objetualiza, es el esclavo, es el siervo y terminadefinitivamente derrotado.Y, sin embargo, no es as.

    Por qu? Porque la relacin seor-siervo,dominador-dominado,es una relacin inhumana. Porque la lucha es por el mutuo reco-nocimiento, pero en la relacin seor-siervo no puede habermutuo reconocimiento, por lo cual el seor nunca puede serreconocido como sujeto sino slo como seor y, por quin?, por

  • 205

    REFLEXIONES SOBRE EL SUJETO, EL PODER Y LA TICA

    el que se ha objetualizado, es decir, por el sbdito y no por el otrosujeto. Adems, el seor no supera el deseo animal. Por qu?Porque no transforma la realidad con la que se alimenta, sino queesto lo hace el siervo. Entonces, el seor se queda en una etapaanimal, mientras que el siervo es el que (mediante el trabajo)transforma, crea y se crea. Porque cuando hablo de trabajo noestoy hablando del trabajo en la fbrica simplemente, estoyhablando de la creatividad, y el ser humano no puede ser sujetosin crear, sin crearse.

    Ser sujeto es sujetualizarse permanentemente y esto es crear,que es al mismo tiempo crearse. Crear es crearse y crearse escrear. Entonces, la salida est por el lado del siervo, precisamenteporque solamente lo popular creando, transformando y recono-cindose como sujeto, puede superar la relacin seor-siervo.Y esesto, este tipo de relacin histrica, lo hay que superar.

    Nadie puede tener la verdad. No hay iluminados. Debemosescuchar a todos los que nos puedan decir algo. Estamos apren-diendo a escucharnos y esto es fundamental, porque aprender aescucharse es aprender a tener nuevas relaciones intersubjetivasque nos van transformando en nuevos sujetos y en una nuevasociedad.

    El capitalismo es perverso de toda perversin en su mismaestructura esencial porque pervierte el acto de la creacin delsujeto. O sea, el sujeto se crea, se hace sujeto creando, y lo quecrea el sujeto, precisamente, el capitalismo lo vuelve contra elsujeto que lo ha creado, lo transforma en capital.

    El capital es el sujeto que se va desprendiendo cada vez ms delacto de la creacin y se transforma primero en capital financiero,capital especulativo y finalmente en capital virtual.Aqu ya estamosen presencia de un capital que salta de Honk Kong a Nueva Yorkapretando simplemente unos botones. Aqu nos ponemos todosa temblar porque con esto ya no somos ms sujetos, ya somosobjetos, sometidos por este gran sujeto que hemos creadonosotros mismos. O sea, todos nuestros pueblos han alimentadoa esta estructura del capitalismo por siglos.

  • 206

    EL SUEO DE UNA COSA

    Por eso hablar de la humanizacin del capital es como hablardel "hierro de madera", es decir, el capital no se puede humanizarporque es inhumano por nacimiento, por esencia. Es cierto quepuede ser ms atroz o menos atroz. Se puede torturar las 24horas o solamente 3 horas, pero lo que no se puede hacer eshumanizar la tortura. Es lo mismo que humanizar el capital: no sepuede. El capitalismo puede ser ms salvaje o un poco menos sal-vaje, pero siempre es inhumano. Lo que pasa es que hoy se estllegando a situaciones extremas en las que los nicos paliativos selos est encontrando en los comedores comunitarios, la madreTeresa, la atencin a los nios de la calle...

    Todo esto es perverso porque es humillante. Lamentablementehay que hacerlo porque es necesario, el nio abandonado a susfuerzas hoy tiene que vivir y si no podemos darle hoy ese chicono puede vivir. Pero esto es profundamente humillante.Lamentablemente, a pesar de lo que uno pueda admirar en lagenerosidad y la entrega de una madre Teresa de Calcuta uno nopuede menos que desconfiar automticamente cuando ve que lalogia (G-7) la pone como ejemplo. Claro, necesitaran ms, nece-sitaran 100, 200, 500 mil madres Teresa para que vayan arreglan-do los tremendos desastres humanos que ellos mismos provocancon la promocin del capitalismo, para que les vayan curando losenfermos.

    Hegel deca que solucionar el problema de la pobreza conlimosna es humillante porque no se respeta al sujeto que se sien-te completamente humillado, y no se puede construir una socie-dad sobre esos sentimientos. Qu pasa con la desocupacin? Eldesocupado es un ser al que han humillado completamente.Necesariamente tiene que ponerse de pie, como lo estn hacien-do, porque tiene que reivindicarse como sujeto!

    No es simplemente comer, aunque sea fundamental hacerlo,porque si uno no come se muere. Se trata tambin de que unosea capaz de crear sus propios medios de vida y as poder crear-se a s mismo. Esta posibilidad tiene que darla la sociedad. Un sis-tema que no la da es un sistema totalmente perverso. Eso es este

  • 207

    REFLEXIONES SOBRE EL SUJETO, EL PODER Y LA TICA

    sistema perverso y sin salida humana. Pero aun en este sistemanosotros hacemos espacios de creacin. Cmo? Tenemos queinventar. Yo, siempre que puedo, les agradezco pblicamente aHIJOS porque nos dieron ese excelente medio que es el escrache.sa es una invencin, es descubrir algo nuevo. No exista y ellos loinventaron, hoy lo podemos aprovechar entre todos. Es un verda-dero ejemplo de lo que hay que hacer: hay que inventar.

    Pero para eso hay que conocer bien la realidad, debe estarsiempre presente esta relacin entre prctica y conciencia, entreprctica y teora. No tenemos que tener miedo de pensar quetodo esto es poltica. La poltica es la accin ms noble del serhumano. Porque poltica es el acto de la creacin, de la intersub-jetividad, de la creacin de los sujetos. Nosotros nos creamospolticamente.Ahora, tanto se ha destruido esto que hoy hablar depoltica es como hablar de lo peor, es hablar de corrupcin.Tenemos que recuperar la poltica, pero no solamente con discur-sos, sino fundamentalmente con la prctica y con la reflexinsobre la prctica.

    No hay un solo proyecto, no hay un solo pensamiento. La glo-balizacin no es ms que la universalizacin que han hecho lasgrandes corporaciones en este momento. Nosotros podemoshacer otra universalizacin. La historia nunca termina, precisamen-te porque es dialctica. Siempre hay posibilidades, nosotros pode-mos cambiar esto y lo vamos a cambiar. Por eso hay que ver qutenemos que hacer en este momento para reflexionar bien sobreesto. No es que hay condiciones objetivas por un lado y condicio-nes subjetivas por el otro. Esto siempre fue, es y ser dialctico.No hay objeto sin sujeto ni sujeto sin objeto. Las condiciones sub-jetivo-objetivas siempre estn presentes. Por lo tanto siempre selas puede cambiar.

    El problema es ver bien en qu momento estamos y qu esmejor empezar a cambiar en este momento.As podemos plante-arnos actos, acciones que podemos hacer y as ir creando poten-cia en el sujeto. Se va creando la propia estima del sujeto y el suje-to va viendo que se puede. Claro que se puede: podemos! Pero

  • 208

    EL SUEO DE UNA COSA

    eso tenemos que hacerlo ver, para nosotros mismos y para losdems, con acciones concretas. Ir avanzando en estas accionesconcretas hasta poder conformar sujetos fuertes, poderosos, concapacidad de dialogar entre nosotros, e ir creando redes fuertes,cada vez ms amplias, de manera de ir recomponiendo el granmovimiento popular-nacional.

    Buenos Aires,4 de marzo de 2007