El Caracazo. Un ¡Ya basta! Contra el neoliberalismo

Indio contestón

Esa la noche del miércoles 1 de marzo no supo de suspensión de garantía ni del establecimiento del estado de sitio. Sólo disfrutaba del sabor a vida, denegada tantos años, con un fino escocés entre sus manos.

Tuntuneco avanzaba con rolitranco de pea.

Soldado:

-Suidadano, ¿qué hace ebrio en pleno toque de queda? Causa, motivo o circunstancia.

Respuesta:

-Taré bebiendo con plata tuya.

¡BLUM!

Pegó unaComo a mí me lo contaron de muy buena fuente, se los repito al oído:

-Se dice que los primeros policías que cayeron fue por un buen negocio de Blanca Ibáñez: chalecos antibalas

¡De cartón!

Un Warao contra CaribesEl soldadito preguntó al transeúnte:

-Señor, ¿onde toy?

-En Caracas, -contestó.

-Si yo se… ¿pero dónde?

-Bueno, esto lo llaman Los Caobos. Contestó con miedo pensando que le tomaba el pelo.

-Y allá?

-Ah, eso es el Teatro Teresa Carreño

-¿Quién es esa?

-Bueno, es en honor a una artista, allí se hacen actividades culturales.

-¡Ah!... ¿Y eso qué es?

El Ateneo contestó con temor a represalias

-¿Y de dónde es eso?

-De aquí mismo… pero ¿de dónde es usted?

-Del Delta. Anoche me trajeron con apuro en un avión. Primera vez que salgo de mi tierra, no tengo ni un mes de servicio.

-¿Y tienes hambre? ¿Has comido?

-Bueno, a mí me trajeron estos granos de granola, me tiene que durar varios días, me la debo comer por cucharaditas… y yo que estoy acostumbrado a la cacería.

Ya confiado. -¿quieres un café?

-¿Usté me lo va a brindá?

-Claro.

(Entre sorbos) -¿Y ese edificiote qué es?

-El Hotel Caracas Hilton.

-Ah… yo pensé que era Miraflores.

No todo lo que sube, baja.

Sargento:

-Bájese inmediatamente esa nevera.

Saqueador:

-Mire, mi señor agente, la verdad es que no se cómo me la subí porque desde ahora quiero bajármela.

RevanchaEn residencias de clase media empobrecida, afirman que el próximo saqueo será más arrecho porque se va hacer con la rabia revanchista de “los no saqueadores del 27”

Piropo 1:-“Catira, como la vida está tan cara, ¿Por qué no te economizas la cama y te vienes a dormir conmigo?”

Piropo 2:-”Adiós morena, estás de saqueo”

Letreros.Dos carteles a puerta de rancho:

“Se benden computadoras a precios de máquinas de escrivi”

“Vendo en apuro, televisores con teclas”

Filas

Cansado:

-¿Y en esa fila qué venden?

También cansado:

-Tres coñazos por un bolívar.

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Jodedor:

En la fila nerviosa-carencial pasa un abastecido jodedor y les grita:

-¡Compren hielo, que va a subir!

Yo tenía una luz…

En el barrio El Carpintero, el albañil y su hijo cargaron sansónicamente con una gran nevera cuatro puertas.

Al llegar, no había espacio. Sacaron la vieja nevera para quien tuviera gusto.

Pero que mala suerte por sobre carga tienen los pobres

Al enchufar la nueva, se fue la luz en todo el barrio.

Camastrote LibertadorEn El Cementerio, zona industrial, Fabian y otros destrozaron vidrieras de una mueblería lujosísima, con precios que pasaban de cien mil. El oriental, como pudo, cargó con el techo esfaralado del camastrote Libertador y sus cuatro pilares del techo.

Llegando a casa, la mamá, vieja oriental, lo increpó con grito y arrechera:

-¡Fabian, pa’ qué traes esa vaina que no sirve pa’ mi catre!

¡Traé comía!

Otro que caeEl artista abraza a su amigo y le dice:

-¿Cómo andas de sentimiento?

-Bien, le contesta el otro, pensando en su amor.

-Para que me regales 50 bolos

No me vayas a dejar morir.

Fue lo que siguió.

Bochinche, puro bochinche, sentenció Miranda.

Al belicoso el barrio San Andrés, en El Valle, le lanzaron hasta tanquetas que abrían boquetes en ranchos enteros. Altaneros, metrallaron multitudes, que se burlaban de la vida y de la muerte.

Para cubrir la masacre, más con circo que con pan, al año les hicieron una fiesta con los clásicos merengues Billofrometistas de la cultura adeca.

Desclasados, todos bailaron como si nada.

Sólo un perro sin sus patas traseras, perdidas por la metralla indolente, se arrastraba con rabia, recordando, quizás, lo sucedido.

La otra guardiaEn una zapatería del centro, las cámaras de TV enfocaban la algarabía.

Las mujeres saludaban con sus manos a la cámara mientras, apuradas, seleccionaban el color y el número.

A una que miraba impávida, se le acercó un policía, y el tono autoritario le dijo: - Y Ud., por qué no entra?

Pase, que la otra guardia no se sabe cómo viene.

Buena voluntad

La estructura de la economía informal suministró coordinación y comunicación En taxis piratas y motocicletas, iban y venían por la ciudad.

Convirtieron la rebelión espontánea en algo coordinado, lo más parecido a una situación pre- revolucionaria.

Cuando todavía no estallaba el saqueo en forma, un motorizado hacía piruetas en el centro con un enorme saco de harina, quizás del primer saqueo.

Pasó confiado por el cordón policial.

Extrañado alguien le preguntó:

-Epa, chamo, ¿a dónde llevas eso?

Y la respuesta fue:

A denunciarlo a YVKE Mundial.

Pero luego les dio como penaHay historias que se pretenden sepultar. Las derrotas son huérfanas, reza otro dicho, recordando tantos muertos. Así es, dice JJ. “El país luce entristecido. La salsa suena con culillo en las esquinas del barrio. El vallenato teme orientar nacionalidades señaladas como causales. La misma enfermedad silencia el merengue y otros ritmos Caribes. Casi que hacen que perdamos el humor que nos caracteriza como pueblo alegre y jodedor”. Se hacía un silencio con cierto bochorno cuando se recordaba el asunto.

¿Será que para rehacerse del agravio, nuestra gente hace que se olvida?

No hay pueblo vencido, también dicen.

Pollera El Caviar (El Valle)

Al grito:

Señores, cómanse bien los pollos

pa’ que cojan fuerza

que ahorita vamos pa’l Supermercado Los Criollitos.

A volar pollos

La muchedumbre se agolpaba en pleno saqueo en el Centro Comercial Anauco, con los brazos repletos de pollos.

De repente estalló un grito:

-¡ABRIERON SUPER VOLUMEN!

-Eeeeeh!!!!

Y los pollos volaron por los aires.