Bienaventurados Junio 2013

Año 9 | 91Junio 2013. Distribución gratuita

¿Que sifnifica ser Papá?

Catedral San Isidro - Sta. María de la Cabeza - Ntra. Sra. de la Ribera - Stella Mariswww.catedraldesanisidro.org

Encuentro diocesal de Jóvenes con el obispo.

En el nombredel Padre

Especial Año de la Fe Miguel Angel D'Annibale

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¡Gracias al Padre Pedro por liderar este equi-

po! ¡Gracias a todos los que fueron parte y a

todos los que, mes a mes, donan su tiempo

y aportan ganas para contar a la comunidad

y a los vecinos lo que hace el amor de Dios!

Correo de lectores y anunciantes: [email protected]

CoordinadoraFlor Tapia Gómez

Diseñadora GráficaAnita Bartolini

CorrectoraSofi Costa

ColaboradoresJocha Castro VidelaNichi Gorchs

STAFF

Distribución: gratuitaTirada: 5.000 revistasOrigen: año 2002

ÍNDICE

En el nombre del Padre Encuentro diocesal de Jóvenes con el obispo.

Pastoral de la Escucha II

San Isidro Labrador

10 • Pastoral de jóvenes

04 • Padre Mariano

05 • Comunidad

06 • Jóvenes

08 • En acciónUn espacio comun de bienes

14 • EspiritualidadOlor a periferia

Confirmaciones 201315 • Avisos

¿Que significa ser papás?

Guiados por el Espíritu12 • Especial año de la fe

03 • Carta del Párroco

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3Bienaventurados 2013 •

Queridos amigos,Ya que este mes celebramos el Día del Padre, los invito a

reflexionar sobre nuestra relación con Dios Padre.

1. La BibliaYa en el Antiguo Testamento, por su

amor y autoridad, Dios se revela esen-cialmente como Padre (leamos con atención Génesis 2,4 hasta 3,21). Por medio de hermosas imágenes se nos enseña que:

• Inicialmente “creó” al hombre y a la mujer, es decir les dio la vida como los padres se la dan a sus hijos.

• Luego, en el relato del pecado ori-ginal, se nos dice que los “educó”, en-señándoles qué cosas eran buenas y cuáles eran malas.

• Pero, respetando la libertad de ellos, permitió que transgredieran sus enseñanzas. A consecuencia de esto, les aplicó un correctivo pero les prome-tió que no los abandonaría, sino que serían salvados.

Del mismo modo, en muchas pági-nas de la Biblia podemos encontrar este esquema “paterno” en la relación de Dios con los hombres. De un modo especial se muestra Padre del pueblo elegido, creándolo, guiándolo, corri-giéndolo y rescatándolo por medio de jefes y profetas.

Incluso en numerosas ocasiones se lo llama Padre y en salmos u oraciones se lo invoca explícitamente como tal.

Pero es en el Nuevo Testamento donde la paternidad de Dios se mani-fiesta de un modo pleno. Jesús tiene

una relación única y especial con su Padre, pues es Hijo de Dios, igual a Él y unido indisolublemente con Él.

Sin embargo, nos enseña que Él es también nuestro Padre, a quien pode-mos invocar por medio de la oración, que nos ama, escucha, guía y perdo-na. La magnífica parábola del padre misericordioso (también llamada del hijo pródigo, Lc. 15,11-32) sintetiza esta imagen de la paternidad de Dios hacia nosotros.

2. Nuestra relación con el padreUno de los tres objetivos proclama-

dos por la Revolución Francesa era la “Fraternidad”. Fue un rotundo fracaso, pues terminaron matando a miles de personas a los que no consideraban sus “hermanos”. Era una fraternidad para algunos, no para los otros.

Lo que no tuvieron en cuenta es que sólo son hermanos los que nacieron de los mismos padres. Al pretender quitar toda referencia a Dios, se que-daron sin Padre y por lo tanto no pu-dieron ver que los demás eran sus her-manos. Volvieron atrás en la historia y

terminaron haciendo realidad la frase latina: “Homo hominis lupus” (El hom-bre es un lobo para el hombre).

Creer en un Dios Padre, amarlo, in-vocarlo, poner en sus manos nuestras necesidades, nos obliga a “hacer su vo-luntad”, es decir a construir un mundo de hermanos. Por eso, Jesús enseña que los dos mandamientos más impor-tantes son amar a Dios y al prójimo.

Que Él nos conceda lograrlo en nuestras familias, en nuestra comuni-dad, en nuestro país.

Los invito a que nos preguntemos:» ¿Creo y siento que Dios es mi Padre, que me ama, escucha y perdona?¿Por qué?

» ¿Cómo me relaciono con Él?

» ¿Procuro hacer su voluntad? ¿Cómo?

» ¿Construyo un mundo de herma-

nos? ¿Qué hago para conseguirlo?

Hasta pronto,

CARTA DEL PÁRROCO

En el nombre del Padre

Pedro Oeyen

"La magnífica parábola del padre misericordioso, sintetiza la imagen de la paternidad de Dios hacia nosotros."

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4 • Bienaventurados 2013

Padre Cholo padrecholo.blogspot.com | [email protected]

PADRE MARIANO

Como recordarán, el mes pasado les conté acerca de la primera experiencia de Pastoral de la Escucha que hicimos este año en Pascua Joven. Involucró a 45 personas adultas que estuvieron a disposición de los 2.850 chicos que hi-cieron el retiro, para escucharlos.

Después de contarles acerca de esta nueva experiencia, hoy quiero dejarles algunas reflexiones que esto suscitó en mí:

• Primero y fundamental, me hizo pensar en cómo, cuando uno pone el co-razón en Jesús, todo se vive de otra ma-nera. Nos animamos a abrirnos, a mirar y a bucear en qué es lo que queremos, qué es lo que estamos viviendo. Al en-contrarnos con Él, dejamos de lado las cosas triviales y pasamos a descubrir aquellas palabras que verdaderamente dan vida y, por consiguiente, aquello que a mí me da vida.

• Segundo, la necesidad de ser es-cuchados. A pesar de que vivimos en la época de la globalización y de las comu-nicaciones, cada vez pareciera que hay menos espacios para abrir verdadera-mente el corazón, para poder decirle al otro lo que estoy viviendo, mis sen-timientos, mis sensaciones, lo que hoy me pasa. En un retiro, y por gracia de Jesús, esto se da casi naturalmente. Y por eso me abro y encuentro también a alguien que quiere escucharme, que me escucha verdaderamente.

• Tercero, el crecimiento del lugar de los laicos en la Iglesia. Durante mucho tiempo se tendió a separar: esto hacen los laicos, esto los curas, etc. Hoy creo que hemos empezado a mirarnos como uno solo, es decir como Pueblo de Dios. Y todos somos importantes, con dis-tintos talentos y carismas. Cuando les contaba a mis amigos la experiencia acerca de que íbamos a hacer en Pascua

Joven me decían: “¿estás seguro de que los chicos se van a prender?”. Hoy la respuesta fue más que clara, era un miedo nuestro y no de los jóvenes. Ellos ya viven en una Iglesia distinta, en don-de todos pueden ejercer este ministerio de la escucha, en donde todos podemos hacer muchas cosas, en donde todos caminamos juntos como comunidad si-guiendo a Jesús.

• Cuarto, pensaba en cómo todos sa-limos enriquecidos. Durante estos días, me he juntado con las personas adultas que participaron de esta experiencia y el primer sentimiento que tenían era el de agradecimiento por la confianza de-positada en ellos, por haberles permiti-do ser mediadores de Jesús. Para ellos, Pascua Joven también fue una experien-cia muy profunda.

•Quinto, nos invita a animarnos a ir por más. Si bien todo momento es im-portante, creo que estamos en un mo-mento especial, de gracia, para buscar nuevos caminos, nuevas propuestas. Muchas veces tenemos miedo a los cambios, a vivir nuevas experiencias eclesiales pero, como sabemos, el mie-do no es buen consejero y, como nos dice el apóstol San Juan, “en el amor no hay lugar para el temor” (1 Jn. 4,18).

Esta experiencia fue fruto de un ca-mino de discernimiento entre curas, lai-cos y nuestro obispo. Hoy todos noso-tros, como Iglesia diocesana, estamos invitados a vivir de esta manera, escu-chándonos, no sólo en la Pascua sino siendo en todo momento comunidades acogedoras y abiertas hacia los demás. Pidámosle a Jesús, que con amor y aten-ción escuchaba a cada una de las perso-nas que se le acercaban, que también nosotros podamos hacer lo mismo.

Pastoral de la Escucha

SEGUNDA PARTE

Cuando uno pone el corazón en Jesús, todo se vive de otra manera.

La necesidad de ser escuchados.

El crecimiento del lugar de los laicos en la Iglesia.

Todos salimos enriquecidos.

Animarnos a ir por más.

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Escucha

COMUNIDAD

FIESTA DESAN ISIDROLABRADOR

Al mediodía, el sol brillaba en todo su esplendor. San Isidro nuevamente nos regalaba un día soleado, aunque algo fresco. Las campanas y bombas de estruendo despertaron la tranquilidad de la tarde, anunciando la salida de las imágenes del Santo y su esposa Santa María de la Cabeza mientras el guión nos introducía en la vida de nuestro pa-trono laico, de familia pobre y trabaja-dor de la tierra.

San Isidro iba al encuentro con la gen-te. En el caminar por la ciudad, nos fui-mos deteniendo en las distintas realida-des: lo público, lo cultural, la patria, la educación, la salud, las vocaciones.

Realizamos gestos por las calles (por ejemplo, repartimos espigas y estam-pas, signos del fruto del trabajo diario de nuestro Santo Patrono). Al pie del mástil, rezamos la oración por la patria pidiéndole a Jesús que nos ayude a ser sembradores de paz en nuestras fami-lias, en la sociedad, en el país, en noso-tros mismos… asumiendo el compromi-so con gestos de paz.

Se nos invitó a reflexionar sobre las palabras del Papa Francisco: “Dios vive en nuestra ciudad y nos urge salir a su encuentro, para descubrirlo, (…) para construir relaciones de cercanía, (…) para acompañarlo en su crecimiento y encarnar el fermento de su Palabra en

obras concretas. Actuar como buenos ciudadanos, en cualquier ciudad, mejora la fe. Pablo recomendaba desde el co-mienzo “ser buenos ciudadanos”.

Se puede decir que la mirada de fe nos lleva a salir, cada día y siempre más, al encuentro del prójimo que habita en la ciudad (…) porque esta mirada se ali-menta de la cercanía. No tolera la dis-tancia, pues siente que esta desdibuja lo que desea ver; y la fe quiere ver para ser-vir y amar, no para constatar o dominar. Quien dice que cree en Dios y “no ve” a su hermano, se engaña”.

Regresando a la Catedral, al pasar por la imagen del Sagrado Corazón, le pedimos que nos bendiga, cuide, acom-pañe y ayude, porque no queremos ser esa Iglesia temerosa encerrada en el cenáculo; queremos ser la Iglesia soli-daria que se anima a bajar de Jerusalén a Jericó, sin dar rodeos; la Iglesia que se anima a acercarse a los más pobres, a curarlos y recibirlos. No queremos ser esa Iglesia desilusionada, que abandona la unidad de los apóstoles y vuelve a su Emaús; queremos ser la Iglesia conver-tida que, después de recibir y reconocer a Jesús como compañero de camino, emprende el retorno al cenáculo, vuelve llena de alegría a la cercanía con Pedro, acepta integrar la propia experiencia de prójimo y persevera en la comunión.

Luego de la procesión, durante la misa nuestro obispo nos decía: “(…) “Señor que en la humildad y en la sen-cillez de San Isidro nos dejaste un ejemplo de vida escondida en Cristo…” (…) Estamos saturados de soberbia, el mundo está saturado de soberbia. La llegada de los gestos del Papa Francisco no se puede entender de otra manera. Gestos de cercanía, sencillez, tan com-prensibles. El mundo está azorado por esta revelación de sencillez, casi diría de naturalidad. Porque estamos hartos de búsqueda de protagonismos, de bús-queda de poder, sin ningún tipo de prin-cipios; de decir la parte de verdad que me conviene, de no aceptar con nobleza la verdad del otro, de nuestra falta de capacidad para escuchar, para dialogar. El mundo está cansado de soberbia, de vanidad, de búsqueda de uno mismo”.

Ya entrada la noche, cuando el frío hacía rato que había gritado presente, nos juntamos como comunidad de la Catedral en torno a la mesa para com-partir algo y conocernos más como

familia.

POR: Andrés Galíndez, Grupo de Laicos FOTOS: Alejandro Begral

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¿Qué significa ser

Papá?Para celebrar el Día del Padre, invitamos a 3 jóvenes de la comuni-dad (que están en distintas etapas de sus vidas respecto a este desa-fío que regala la vida) a que nos compartan su visión sobre el tema.

JÓVENES

LUISMA CASERES (37)Veterinario | Casado con Mer Ambrosini, ingeniera agrónoma | Papá de Rufino y Emilia.

Mer y Luisma fueron coordinadores del Grupo de Con-firmación de Jóvenes-Adultos durante el ciclo 2009-2010, y entre los años 2009 y 2011 fueron miembros del Grupo Misionero Jeremías.

Antes de ser papá, es imposible imaginarse lo que real-mente significa serlo. Más allá de todo, el sentimiento que se me viene a la mente antes que ninguno es el AMOR. Cada día que pasa, vuelvo con más ganas a mi casa para ver a mis hijos. Luego, y a medida que van creciendo, aparece la RESPONSABILIDAD de criarlos de la mejor manera posible; y, finalmente, llega el MIEDO a que les pase algo. Son muchos sentimientos juntos que hay que aprender a equilibrar todos los días para no pifiarla como papá.

Mi corta experiencia como padre me enseñó que, en los pri-meros años de vida, la demanda que nuestros hijos tienen ha-cia nosotros es enorme. Ellos simplemente quieren estar con sus papás. Eso hace que el matrimonio tenga poco tiempo para sí, es decir, cuando llegan los hijos queda poco tiempo para la

pareja. Entonces, una de las cosas que más rescato del noviaz-go es el crecimiento y desarrollo de la pareja: conocerse a fon-do, entender cómo piensa el otro, qué cosas le gustan y cuáles no. Porque luego, cuando los hijos llegan, mucho tiempo no hay para charlar. Es el 100% del tiempo dedicado a tus hijos.

Luisma, Mer, Rufino (3) y Emilia (1)

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JÓVENES

MANU DEL PINO (29)Licenciado en Administración de Empresas | Casado con Vicky Zavalía, trabaja en equinoterapia | Papá de Ceferino (va a nacer en julio)

Vicky y Manu fueron coordinadores del Grupo de Confirmación de Jóvenes-Adultos durante los ciclos 2010-2011 y 2011-2012, y entre los años 2011 y 2012 fueron miem-bros del Grupo Misionero Jeremías.

Hace tres años que estamos casados con Vicky y los últimos siete meses fueron los mejores de nuestras vidas. Cuando la revista me pidió que escriba sobre el ser papá, me sentí un esta-fador. “Llevo sólo siete meses de padre”, pensaba, “¿qué puedo aportar?”.

Definitivamente, hay padres con más experiencia. Lo que sí puedo decir es que empezar a ser una familia es lo más lindo que me pasó en la vida. Nuestro tiempo de pareja fue exce-lente, rico en experiencias y aprendizaje; pero ser una familia es impresionante. Junto con Vicky dimos vida a la persona más importante del planeta y esta personita nos está llenando de vida a nosotros.

Así como aprendí mucho de mi mujer, nuestro hijo nos está haciendo aprender todavía más de nosotros, del amor de fa-milia, del servicio, de la alegría, de la paciencia infinita y de la increíble sensación de querer a alguien de una forma que no se puede explicar. Este tiempo de familia me está enseñando de a poco; creo que es un aprendizaje que va a ser constante

y, seguramente, en el futuro me equivoque y no tenga todas las respuestas para nuestro hijo. Por eso, sólo le quiero pedir a Dios que me enseñe a siempre tener paciencia, dedicación y mucho amor para volcar en mi familia. Lo que parece todavía más increíble es que en dos meses Ceferino va a estar durmien-do en casa.

Por otro lado, creo que es importante destacar que, cuando uno ya tiene hijos, también es sano encontrar los momentos para crecer como pareja; es una actividad proactiva, uno debe buscar esos momentos, crearlos, porque ahora esos momentos no vienen solos como en el noviazgo.

Manu, Vicky y Ceferino (en la panza)

JUAMPI CASARETTO(24)Estudia Administración de Empresas | De novio con Clari Mentruyt, que estudia Recursos Humanos |

Los dos fueron miembros de los Grupos Misioneros Santa Clara (2007-2008) y Jeremías (2008-2013) y fueron Coordinadores de Confirmación y Caminar.

Estoy dentro del grupo de gente que lo primero que pien-sa cuando le preguntan cómo quiere ser cuando sea padre es: “quiero ser como mi papá”. Y lo voy a resumir en una pequeña anécdota.

Él es un amante del río y, como único hijo varón, heredé los mismos hábitos. De chico, fuimos (como tantas otras veces más) a pescar pejerreyes al Río de la Plata. La técnica era la pesca “al garete”, es decir pescar a la deriva, dejando que el bote se mueva por la corriente o el viento acompa-ñando el movimiento de las boyas. El tema era que era tal la corriente que las boyas se alejaban muy rápido. Y ahí esta-ba mi papá: remando, privándose de pescar, él remaba para que mi pesca fuera más efectiva.

Esa experiencia me permite entender lo que es ser padre. Es dejar todo por tus hijos. Ser padre te hace dejar de pensar

en vos, para pensar en él/ella/ellos las 24hs del día. Espero llegar a ser así: un padre amigo, que genere en la familia un lugar de confianza, de valores y, por sobre todas las cosas, un hogar de Amor.

Juampi y Clari

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COMUNIDAD

UN

PARA LAPUESTA EN COMÚNDE BIENES

ESPACIO

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Mario Franzini es Ingeniero y tiene 65 años. Vive en San Isidro y desde muy joven forma parte de la comunidad de la Catedral y de la Diócesis de San Isidro. Casado hace muchos años, Mario tiene 7 hijos y 13 nietos.

En 1979, junto con un grupo de amigos y de la mano de las hermanas misioneras diocesa-nas, crearon la Fundación Sagrada Familia con el objetivo de contribuir a la promoción de las personas y consolidación de las familias a tra-vés de programas que facilitaran el acceso a una vivienda digna.Sagrada Familia nació hace más de 34 años de la mano de un grupo de jóvenes llenos de ideales. Queríamos un mundo más justo y más libre. Teníamos grandes objetivos para la Argentina y para el mundo. Queríamos hacer casas para las familias que no tenían los ingresos necesarios para acce-der a una vivienda propia; pero queríamos hacerlas de forma que la gente participa-ra activamente. Queríamos trabajar con la gente, y tuvimos la suerte de encontrarnos. El proyecto nos entusiasmó, nos pareció que tenía sentido y, a medida que avanzamos, nos empezamos a divertir y a emocionar. Nos en-cantaba trabajar juntos. Nunca pensamos en la vivienda como el obje-tivo de la fundación; para nosotros la vivienda fue siempre el medio por el cual las familias encuentran una oportunidad de mejorar sus vidas. El deseo y las ganas de tener una casa propia tienen una fuerza motivacional muy grande, que lleva a las personas a compro-meterse y hacer los esfuerzos necesarios para cambiar su vida. En un principio, la misma gente construía las casas, guiados siempre por profesionales

voluntarios. Pero enseguida nos dimos cuen-ta de que era necesario tener un coordinador estable de obra que pudiese guiar y organizar el trabajo cotidiano. Con el tiempo, incor-poramos también el trabajo de personal es-pecializado con el objetivo de avanzar más ordenadamente en las obras y que éstas no superasen el año y medio de duración (un tiempo que, para el grupo de familias que participa de cada proyecto, conlleva mucho sacrificio, esfuerzo y compromiso). De a poco, también todo el equipo de trabajo se fue pro-fesionalizando en la dirección de las obras, el acompañamiento social y la administración general de los proyectos. Hoy, Sagrada Familia cuenta con un equipo de 100 personas entre rentados y voluntarios, que llevan adelante la misión original a través de proyectos de vivienda e infraestructura, microcréditos para el mejoramiento habi-tacional y el programa Sume Materiales. La fundación guía y acompaña cada uno de estos proyectos, en los cuales las familias son las verdaderas protagonistas. Ellas trabajan en cada etapa y se comprometen con la mejora o construcción de sus viviendas. En todos estos años de trabajo, la Fundación Sagrada Familia acompañó a más de 7.500 familias.La fundación nació para ser un espacio de puesta en común de bienes, un espacio en el cual cada uno aporta y comparte lo que pue-de desde el lugar en el que se encuentra. Esto vale tanto para los donantes como para las fa-milias, el equipo de la fundación y para todos los voluntarios que se acercan a ella.

Mario Franzini Fundador de Sagrada Familia

15 El domingo 28 de abril nos reunimos

a festejar un sueño hecho realidad. El proyecto “15 Esperanzas” en Benavídez abrió las puertas de sus casas tras los festejos que se hicieron en la Capilla San Antonio de esa misma localidad. Fue un evento en donde reinó el sentimiento de orgullo y la felicidad de todos lo que participaron.

15 Esperanzas está conformado por un grupo de 15 familias que en 2011 comen-zaron a reunirse junto a Sagrada Familia con el sueño de acceder a su casa propia. Todas las familias seleccionadas conta-ban con un terreno dentro del barrio y compartían la necesidad y las ganas de empezar el camino hacia su propia casa.

Este es el tercer proyecto que Sagrada Familia realiza junto al programa de Viviendas de Caritas Argentina, y que cuenta a su vez con el financiamiento de la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Nación, que confía a Caritas la ejecución de las obras a tra-vés de las Caritas diocesanas y, en este caso, a través de la Fundación Sagrada Familia. Caritas evalúa y aprueba los proyectos presentados, y luego de que la Subsecretaría los haya aprobado, acom-paña y monitorea el desarrollo de las obras hasta su finalización.

15El domingo 28 de abril nos reunimos

a festejar un sueño hecho realidad. El proyecto “15 Esperanzas” en Benavídez abrió las puertas de sus casas tras los festejos que se hicieron en la Capilla San Antonio de esa misma localidad. Fue un evento en donde reinó el sentimiento de orgullo y la felicidad de todos lo que participaron.

15 Esperanzas está conformado por un grupo de 15 familias que en 2011 comen-zaron a reunirse junto a Sagrada Familia con el sueño de acceder a su casa propia. Todas las familias seleccionadas conta-ban con un terreno dentro del barrio y compartían la necesidad y las ganas de empezar el camino hacia su propia casa.

Este es el tercer proyecto que Sagrada Familia realiza junto al programa de Viviendas de Caritas Argentina, y que cuenta a su vez con el financiamiento de la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Nación, que confía a Caritas la ejecución de las obras a tra-vés de las Caritas diocesanas y, en este caso, a través de la Fundación Sagrada Familia. Caritas evalúa y aprueba los proyectos presentados, y luego de que la Subsecretaría los haya aprobado, acom-paña y monitorea el desarrollo de las obras hasta su finalización.

Esperanzas benavidez

- Asesoramiento de arquitectos o ingenie-ros para construcción y remodelaciones. - Voluntarios para las áreas de desarrollo institucional, administración, capacita-ción, recursos humanos, legales, etc. - Voluntarios para jornadas de construcción. Si querés donar tu tiempo, escribinos a

[email protected]

INFORMACIÓN INSTITUCIONAL

TDONÁ TIEMPO!

La Fundación Sagrada Familia cuenta con un esquema flexible para recibir las donaciones de la manera más eficiente. Colaborá con nosotros. Ingresá a www.sagradafamilia.org.ar o escribinos a

[email protected]

$DONÁ DINERO!

Desde cal o cemento, hasta grifería, abertu-ras o muebles, Sume Materiales (el corralón social de Sagrada Familia) retira a domicilio donaciones de materiales que ya no se usan y los pone a la venta a precios sociales, fa-voreciendo a las familias de menores ingre-sos que están mejorando su casa. Si tenés materiales para donar, ingresá a www.sagradafamilia.org.ar o escribinos a [email protected]

HDONÁ MATERIALES!

COMUNIDAD

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¿Qué quiero o espero de mi comunidad y de la Iglesia?

PASTORAL DE JÓVENES DIOCESANA

Hace mucho que la idea de un evento así revoloteaba en el Equipo de la Pastoral de Jóvenes de San Isidro y, finalmente, el 1° de mayo tuvo lugar el primer encuentro diocesano de jóve-nes con el obispo.

Fue una tarde de actividades que apuntaban a encontrar-nos, conocernos, escucharnos y descubrirnos acompañados en este camino de ser discípulos de Jesús. Los objetivos princi-pales eran generar el encuentro entre los jóvenes y el encuen-tro de los jóvenes con el obispo; lo central era vincularse. En esta línea, desde el bailar al ritmo de una murga (que contagió incluso a Mons. Ojea), escuchar al obispo y hacerle preguntas, y luego terminar con un rato de oración, todos los momentos ayudaron a crear comunidad. “La fe crece cuando se compar-te. Es importantísimo que, en encuentros como el de hoy, se den cuenta de que no están solos” .

Fue muy lindo ver a tantos chicos y chicas, de realidades tan diversas, reunidos con un objetivo en común. Dedicaron su tarde libre para participar de un evento diocesano que nunca

antes se había hecho y, como si esto fuera poco, muchos se trasladaron desde muy lejos (hasta en colectivo por Panameri-cana y luego caminaron varias cuadras).

Gracias a Dios, se logró lo que buscábamos y todos nos fuimos muy contentos. Ahora deseamos poder repetir esta actividad año a año, y ojalá reunamos cada vez a más jóvenes que quieran encontrarse. Como dijo uno de los miembros del equipo: “¡Me parece algo para seguir empujando, porque tiene potencial para crecer de lo lindo!”.

i Para saber un poco más acerca del encuentro, pueden leer el siguiente artículo de AICA : http://www.aica.org/6332-como-ser-jovenes-de-fe-una-reflexion-mons-ojea.html

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Creo que este encuentro planteaba un gran desafío para los organizadores: ¿cómo lograr una charla con el obis-po en un grupo tan grande y diverso?, ¿cómo lograr que los jóvenes pudieran transmitir sus inquietudes?Monseñor Ojea arrancó con una charla sobre la juventud y la fe, orientando hacia la dinámica grupal posterior la cual, para mi asombro, se llevó a cabo en un clima intenso de oración. Luego nuestro obispo fue respondiendo una a una las preguntas que cada grupo le hacía. Las preguntas fueron sinceras, las respuestas también; de hermano a hermano, de padre a hijo… rodaron consejos y experiencias, y todos nos vi-mos alimentados.

Tomi Ballvé (26) seminarista

Monseñor Oscar Ojea obispo de san isidro

Belu Arnaudo (19) estudia biología

Fui al encuentro con muchas expectati-vas. Para el obispo, hablarles a los jóve-nes siempre es algo importante y com-prometido. Y me encontré con una gran receptividad desde el primer momen-to. Con el tiempo, uno se va dando cuen-ta del valor de los silencios, de cómo responden las miradas. […] Estuve en un grupo. Poco a poco, fueron diciendo co-sas cada vez más comprometidas; cosas que tenían que ver con sus lugares en las parroquias, en sus comunidades […] me hace comprender que muchos de nues-tros jóvenes están viviendo la fe de un modo heroico, en medios en donde no es tan fácil decir “tengo fe”, “voy a la pa-rroquia o a la iglesia” […][…] En medio de un grupo que se des-tacaba, para mí, por la diversidad, me gustó el respeto con el que se escucha-ban, qué deseo importante tenían de escuchar la posición del otro, la reali-dad del otro. Sus preguntas eran muy profundas; tenían que ver con el futuro de la Iglesia, con la evangelización, con los pecados de la Iglesia, con aquellas cosas que tenemos que corregir… Me parecieron preguntas muy inteligentes, muy comprometidas con la realidad, y nada fáciles de responder. […] El saldo del encuentro fue hermo-sísimo; me quedé muy contento. […] estoy orgulloso de haber compartido esto con ustedes. Respecto de la organización, creo que hubo un esfuerzo destacable […] Me gustó mucho esto de “armar la cosa, pero no avasallar”. En el clima se vio algo tipo “no vamos a poner demasiadas pautas” como para ahogarlos, sino ge-nerar un clima de recepción, de libertad, de respeto. Es una onda buenísima para seguir trabajando en esta misma línea con los jóvenes.

La jornada fue una experiencia muy lin-da para todos, una oportunidad genial para conocer un poco más a nuestro obispo, aprender de él y escuchar qué es lo que espera de nosotros. Fue un lindo espacio para reflexionar sobre inquie-tudes que tenemos hoy en día, no sólo hablándolo con Monseñor Ojea sino también charlándolo con otros jóvenes que comparten el mismo camino. A la vez, fue muy motivante el vernos a to-dos juntos, de distintas parroquias de la diócesis, con ganas de crecer a la par en el descubrimiento de Jesús. Fue un día muy enriquecedor.

PASTORAL DE JÓVENES DIOCESANA”

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"Ya no somos espectadores,somospartícipes

ESPECIAL AÑO DE LA FE

+ ¿Cuál es el objetivo principal de la constitución Sacro-sanctum Concilium?

MD| El objetivo principal es la reforma y el fomento de la liturgia. Así lo dice el número 1 del texto de la Constitución. Tengamos en cuenta que es el primer texto escrito del Concilio Vaticano II, el cual marca los objetivos de dicho Concilio: "acre-centar de día en día entre los fieles la vida cristiana, adaptar mejor a las necesidades de nuestro tiempo las instituciones que están sujetas a cambio, promover todo aquello que pueda contribuir a la unión de cuantos creen en Jesucristo y fortalecer lo que sirve para invitar a todos los hombres al seno de la Iglesia". A fin de poder alcanzar estos objetivos, los Padres Conciliares consideraron que era necesario proveer a la reforma de la liturgia.

+ ¿Cómo era la liturgia pre-conciliar y por qué necesitaba reformarse?

MD| Durante muchos siglos, la liturgia se fue "encerrando" en un ámbito más clerical. En todas partes del mundo, las ceremo-nias se realizaban en latín, lengua que sólo entendían quienes habían cursado los estudios eclesiásticos. El pueblo de Dios asistía a las ceremonias sin comprender muy bien qué se hacía en ellas, aunque siempre con un sentido de elevación y espiritualidad por el misterio que allí se realizaba. Dado que la gente quería participar, nacieron así otras devociones que acompañaban la ceremonia. El rezo del rosario, la lectura del "devocionario" (libro que contenía devociones para leer durante las ceremonias) y el Vía Crucis eran algunas de las expresiones religiosas de la gente sencilla que, en el medio de las ceremo-nias, buscaba mantenerse unida a Dios. Podríamos decir que es durante este tiempo cuando nace la así llamada “Piedad Popu-lar”, ya que la liturgia y las ceremonias no eran muy captadas ni comprendidas.

Se esperaban entonces reformas profundas y algunos, mu-cho antes del Concilio, comenzaron a concretarlas. El monje

benedictino Odo Casel (1886-1948) de la abadía de María La-ach (Alemania), el sacerdote teólogo Romano Guardini (1885-1968) en Alemania y el párroco Pío Parsch (1884-1954) en Aus-tria, por ejemplo, buscaron acercar la liturgia a la comprensión de la gente. Sus obras de reflexión teológica y pastoral permi-tieron que el llamado "Movimiento Litúrgico" desembocara en la Constitución Conciliar sobre la liturgia y que, con su publica-ción, se pudiera avanzar en las reformas necesarias.

+ ¿Qué reformas se introdujeron? ¿Qué beneficios aca-rrearon?

MD| La primera reforma que se percibe en la Constitución Conciliar es comprender a la liturgia no sólo como una mera cremonia, sino como una verdadera celebración (que inclu-ye, sin duda, el aspecto ceremonial). Definir a la liturgia como la actualización del Misterio Pascual de la Muerte y Resu-rrección del Señor es dotar a la fe de un contenido esencial. Cuando celebramos la liturgia en la iglesia ingresamos en el Misterio de nuestra salvación. Ya no hablamos sólo de cere-monias, sino de verdaderas celebraciones de la fe, en las que la Pascua del Señor se hace presente aquí y ahora en la realidad que estamos viviendo. Gracias a esta manera de comprender la liturgia, el Misterio Pascual de Cristo no queda allá en el tiempo sino que se hace presente en nuestra realidad.

De allí surge la segunda reforma, que es la de la participa-ción. Hasta el Concilio se utilizaban conceptos como "asistir" a misa, "escuchar" misa, "decir" misa, "rezar" misa, "oficiar" misa (todavía existen hoy). Estos conceptos pueden traer aparejada la idea de presenciar algo que hace otro y de lo cual yo soy un mero espectador. De algún modo, por lo explicado más arriba, así sucedía en la liturgia pre-conciliar. La Constitución Conci-liar nos habla de la necesidad de participar consciente, activa y fructuosamente del misterio que se celebra. Ya no somos espectadores, somos partícipes. De allí que el sujeto de la liturgia, "quien celebra", es la Iglesia, todos los bautizados, no

"SACROSANCTUM CONCILIUM | PRIMERA PARTE

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"Ya no somos espectadores,somospartícipes

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ESPECIAL AÑO DE LA FE

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sólo el sacerdote.La actualización del Misterio Pascual y la participación en ese

Misterio que se celebra son las dos grandes reformas concilia-res, que hacen al "qué" de la liturgia, a su sentido más profundo, diríamos, a su esencia.

Luego siguen reformas que hacen al "cómo" de la liturgia, a sus formas, que varían de acuerdo con los tiempos y las realidades. Entre las más importantes citamos el idioma, ya no se celebra en latín sino en la lengua de cada lugar; la dispo-sición de las iglesias, el altar ya no está "pegado al fondo del templo" sino en el centro de la visual, lo que le permite al sacer-dote presidir la Eucaristía de frente al pueblo y no de espaldas; la diversidad de ministerios y servicios, ya no lo hace todo el

sacerdote, sino que se distribuyen las tareas en la misma ce-lebración dando así una imagen real de una Iglesia-Comunión; el enriquecimiento de las lecturas bíblicas para la misa, con li-bros nuevos y lecturas más accesibles a la gente; la organización más clara del Año Litúrgico, con el centro puesto en la Navidad y la Pascua y los tiempos que las preparan y las prolongan en sentido festivo, además del Tiempo Durante el Año, verdadera escuela de discipulado.

Entrevista a Miguel Angel D'Annibale

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OloraPeriferia

ESPIRITUALIDADJocha Castro Videla [email protected]

“–esto les pido: sean pastores con

«olor a oveja», que eso se note”Un pedido tan simple como profundo. ¿Quién le creería a un pastor que no tie-ne olor a oveja?, ¿a un pescador que no tiene olor a pescado? Probablemente nadie, nos parecería raro. Porque, ¿qué implica impregnarse con el olor de lo que uno hace? Significa cercanía. Si uno es pastor, debe estar cerca de las ovejas; si uno es pescador, debe estar cerca de los pescados; si uno es padre/madre, debe estar cerca de sus hijos… estar cer-ca, impregnarse con su olor, su esencia. Este fue el pedido del Papa Francisco a sus sacerdotes en la Misa Crismal del Jueves Santo. Y me llamó gratamente la atención la cantidad de veces que el Papa en esa homilía pronunció la pala-bra “periferia”: cinco veces. Realmente es esperanzador. Y pensaba en nosotros los católicos, principalmente en los lai-cos: ¿qué olor deberíamos tener? Olor a periferia, clarísimo.El 29 de junio como Iglesia recordamos a San Pedro y San Pablo, dos santos fun-damentales. Pedro, el pescador, de clase baja, quien negó tres veces a Jesús, la piedra de la Iglesia y mártir. Pablo, per-seguidor de cristianos, judío ortodoxo, converso al cristianismo, gran misione-ro y también mártir. Es mucho lo que se puede decir, reflexionar y rezar sobre la vida de estos dos santos, pero quiero de-tenerme en dos lecturas.La primera, un fragmento del capítulo 12 de los Hechos de los Apóstoles: “Después de arrestarlo, lo hizo encarcelar, ponién-dolo bajo la custodia de cuatro relevos de guardia, de cuatro soldados cada uno. Su intención era hacerlo comparecer ante el

pueblo después de la Pascua”. Herodes arresta a Pedro. El segundo, el capí-tulo 2 de la segunda Carta a Timoteo: “Acuérdate de Jesucristo, que resucitó de entre los muertos y es descendiente de David. Esta es la Buena Noticia que yo predico, por la cual sufro y estoy en-cadenado como un malhechor”. Las lecturas nos relatan dos situaciones de persecución y de cárcel, lo habitual para los primeros cristianos. Es que su vida era así, vida de periferia. El poder político y religioso de la época no quería saber nada con Pedro y Pablo, los que-rían muertos. ¿Por qué? Por predicar a un Dios que se hizo hombre para alcan-zar la periferia, y predicarlo tanto con palabras como con obras. Pedro y Pablo, y los primeros cristia-nos, estaban impregnados con olor a periferia. Ese mismo olor que el Papa Francisco, sucesor de Pedro y de Pablo, nos invita a tener. La periferia de ese momento estaba constituida por los gentiles, las mujeres, los leprosos, los discapacitados. Y los primeros cristianos vivieron con ellos, entre ellos, y les pre-dicaron la Buena Noticia, y fueron asesi-nados por esa misma razón.Ser el sucesor de Pedro y de Pablo impli-ca en primer lugar eso, ser hombres de periferia, impregnarnos de olor a perife-ria. Esa es la tarea de nuestros pastores, empezando por Francisco: el olor a oveja. Y es por este camino que debemos bus-car transitar los cristianos, el camino del Nazareno, a la periferia de nuestra pro-pia vida y de nuestra sociedad. Y nos dice Francisco que la periferia son los lugares

“donde hay sufrimiento, hay sangre derra-mada, ceguera que desea ver, donde hay cautivos de tantos malos patrones”. Es la periferia la que espera ansiosa la Buena Nueva de Dios. Aquello de nues-tra vida que está ‘encarcelado’, oprimi-do, silenciado, oscuro; aquello que nos avergüenza, nos hace sentir indignos. Es esa periferia la que desea inquieta el paso liberador del Nazareno. Y, por su-puesto, también debemos pensar en la periferia de nuestra sociedad, en los que viven y sobreviven en los márgenes, ol-vidados, excluidos, explotados, usados. Dios se hizo hombre para impregnarse de olor a humanidad; Jesús fue pobre para impregnarse de olor a pobreza. ¿Quién les hubiera creído sino? “Habla como quien tiene autoridad…” dijeron del Nazareno. Y quizá fue su cercanía, su olor, lo que le confería autoridad para hablar de un banquete al cual todos es-taban invitados, donde los últimos iban a ser los primeros. La fiesta de San Pedro y San Pablo, y el mismo Papa Francisco, nos invitan a mi-rar nuestra vida, nuestra tarea pastoral, nuestro ser Iglesia, y reflexionar: ¿Qué olor tiene nuestra vida, nuestro cami-no? ¿Qué olor tienen las tareas pasto-rales que realizo? ¿Qué olor tiene mi Iglesia? El olor a periferia puede ser muy variado, hay muchas periferias en nues-tra comunidad que no necesariamente tienen olor a pobreza. Animémonos a descubrirlos y acercarnos, con los pies descalzos como Moisés, sabiendo que cuando entramos en la periferia esta-mos pisando suelo sagrado.

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AVISOS

CAPILLAS

Párroco: Pedro Oeyen

Vicarios Parroquiales:P. Francisco GamboaP. Mariano CaraccioloP. Hugo Álvarez

Diáconos Permanentes:Wenceslao Gómez CarideJosé Hamed

Secretaría Parroquial:

8:30 a 12hs y de 16 a 20hsAdrián Beccar Varela 530Tel. 4743 0291/ 4990

Caritas:

Atiende en Anchorena 469

Confesiones:

Diarias: media hora antes de misa de 19hs

Dominicales: media hora antes de misa

Horarios de misa:Lunes a viernes: 8, 10 y 19hsSábados y Feriados: 10 y 19hsDom.: 10, 12:30, 19 y 20:30hs

Ntra. Señora de la Ribera

Santa María de la Cabeza

Stella Maris

El Cano 172, AcassusoTel. 4742 7198

33 Orientales 1301, Beccar

España 1016, Beccar

Horarios de Misa:Sábado 19hsDomingo 19:30hsHorarios de Secretaría:Jueves 15 a17hsSábados 17 a 19hs

Horario de Misa:Domingo 11hs

Horarios de Misa:Sábado 19:00hs de niñosDomingo 11:30hs

Contacto:[email protected] 155-6451482

ABZAmbientacionesEventos Sociales

San Isidro – Recoleta

CONFIRMACIOES 2013 Como todos los años para esta época, alrededor de 300 jóvenes de la parroquia recibirán el sacramento de la confirmación.

* El viernes 28 de junio a las 20.30hs. lo hará el primer grupo.

* Los otros dos grupos lo harán los viernes 5 y 12 de julio, a la misma hora.

¡Invitamos a la comunidad a rezar por todos ellos!

CATEDRAL

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Bienaventurados Junio 2013

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