IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista...

55
IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL Y EVOLUCIÓN DEL MOVIMIENTO CAMPESINO Carlos Monge Centro Peruano de Estudios Sociales

Transcript of IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista...

Page 1: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

IX

PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA,DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL

Y EVOLUCIÓN DELMOVIMIENTO CAMPESINO

Carlos MongeCentro Peruano de Estudios Sociales

Page 2: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización
Page 3: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

PRESENTACIÓN

Entre 1950 y 1990 el agro peruano ha sufrido una transforma-ción sustantiva en sus estructuras económicas y sociales. Los movi-mientos campesinos son causa y consecuencia de estos cambios: laacción de los campesinos ha contribuido grandemente a los cam-bios ocumdos en la sociedad rural y el país; pero en cada períodoel accionar de los campesinos ha estado fuertemente determinadopor las características de la sociedad global de la que forman parte.

Esta reflexión en torno a la articulación dinámica entre movi-mientos campesinos y estnzcturas agrarias se ordena en dos seccio-nes. En la primera, se hace una presentación de las dos tendenciasfundamentales que constituyen el marco general en el que se handesan-ollado los movimientos campesinos en el período 1950-1990 ycuya consideración es necesaria para entender su dinámica históricay actual. Estas son la transición capitalista de la economía agraria y ladesestructuración de la organización social y politica de la sociedadn.iral. En la segunda se propone una periodización del movimientocampesino (1956-1964, 1969-1980, y 1982-1990) que toma en cuen-ta cambios habidos en las características sociales y productivas de loscampesinos y sus movimientos así como aquellos que se han dado ensu entorno económico, social y politico mas amplio.

PRIMERA PARTETRANSICIÓN CAPITALISTA Y DESESTRUCTURACIÓNSOCIAL EN EL AGRO PERUANO

I. La transición capitalista

El Perú tiene una limitada base productiva agropecuaria.Las áreas de cultivo se incrementaron en aproximadamente un

323

Page 4: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

35% entre los años 30 y 70, siendo el crecimiento mas impor-tante el ocurrido en la selva'. De los años 70 al presente, el cre-cimiento ha sido escaso, a lo más de un 9% z. En la actualidad,de las 128.251.000 has. que constituyen el total del territorionacional, el 5,8% son de uso agrícola y el 13,8% son tierras depastos para la actividad ganadera. El 37,8% son bosques y sel-vas de aptitud forestal y e142,3% son terrenos de protección nohábiles para usos productivos. Ni siquiera la quinta parte delterritorio nacional es apta para la actividad agropecuaria.

CUADRO 1PERÚ, 1990

TIPOS DE TIERRA (EN MILES DE HAS)

Total Costa Sierra Selva* % * % * % * %

Total 128.251 100,00 100,00 10,63 100,00 30,56 100,00 59,01Cult.limpo 4.902 3,82 8,36 23,26 3,42 27,36 3,20 49,37Cult. perman. 2.707 2,11 3,64 18,32 0,05 0,74 2,89 80,94Pastos 17.916 13,97 11,89 9,05 26,98 59,04 7,55 31,91Prod. forest. 48.696 37,97 1,27 0,36 5,34 4,30 61,35 95,35Proteccion. 54.300 42,34 74,84 18,80 64,21 46,35 25,01 34,85

* Tipos de tierra al interior de cada región% Peso de la región en cada tipo de tierraFuente: Richard Webb y Graciela Fernandez Baca, Perú en números, 1990,Lima: Cuanto SA, 1990.

En el contexto latinoamericano, el Perú presenta la relaciónmás pobre tierra de cultivo/superf'icie territorial total, y la terce-ra peor si se incorporan al análisis las praderas y los pastos per-manentes, que en el Perú tienen peso significativo.

' Fernando Eguren, Orlando Plaza, Flavio Figallo y Carola Amézaga,Evolución de la estructura productiva agraria en el Perú, Lima: DESCO,1985.

Z Por ejemplo, de acuerdo al Censo Agropecuario de 1972, 23.545.147has. eran para fines agropecuarios (cultivos en limpio, cultivos permanentes,pastos). De acuerdo a la información consignada en el Cuadro 1, para 1990ese hectareaje creció a 25.525.000, dos millones mas de hectáreas.

324

Page 5: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

CUADRO 2TIERRAS DE USO AGROPECUARIO EN PAÍSES DE AMÉRICA

LATINA EN 1974(% respecto de la superticie territorial total)

País Tierras de Cultivo T.C.+praderas y pastos perm.

Argentina ^ 12,57 65,12Bolivia 2,97 28,05Brasil 6,84 24,81Chile 6,92 22,41Colombia 5,05 33,93Ecuador 9,42 18,67Paraguay 2,77 40,52Perú 2,49 23,68Uruguay 10,72 89,06Venezuela 4,04 32,02

Fuente: Eguren, Plaza, Figallo, Amézaga, op.cit

Por lo demás, la mayor parte de la tierra de cultivo del Perú(65.5%) es de secano, siendo dependiente del comportamientonatural de las lluvias. Y la tierra de riego está desigualmenteconcentrada en la costa (casi un 60%) habiendo una predomi-nancia de tietras de secano en la sierra y la selva.

CUADRO 3PERÚ 1972

TIERRAS DE RIEGO Y DE SECANO POR REGIONES NATURALES

Total Costa Sierra Selva* * % * % * %

RiegoSecano

1.273.5132.417.904

34,565,5

92,37,7

58,42,6

21,678,4

38,674,0

6,293,8

3,023,4

Total 3.691.417 100 100 100 100

* Tipo de tierra en cada región% Peso de cada región en el tipo de tierraFuente: Eguren, Plaza, Figallo, Amézaga, op. cit.

Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización de la pobla-

325

Page 6: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

ción, invirtiéndose la relación entre lo urbano y lo rural. Lapoblación urbana crece más que la rural, la de costa y selva lohace más que la de sierra. El país es cada vez menos rural-cam-pesino-serrano, y cada vez mas urbano y costeño o selvático.

En términos de la población económicamente activa, el sectoragropecuario decrece en su participación relativa en la PEA nacio-nal (pasa de ser e152,24% de la PEA nacional total en 1940 a 39,78en 1980 y 34,78% en 1989) frente al crecimiento de la PEA ubicadaen las actividades "terciarias" y una PEA industrial que permaneceestanca. Sin embargo, su participación sigue siendo significativa ysigue siendo el sector que individualmente más PEA alberga.

CUADRO 4URBANIZACIÓN DE LA POBLACIÓN

Distribución de la Población Tasa de Crecimiento1940 1989

Total 6.207.000 100,0 21.792.000 ^ 100,0 2,5Urbana. 219.700 35,4 15.108.000 69,3 3,3Rural 4.011.000 64,6 6.684.000 30,7 0,8

Costa 2.132.000 34,5 11.431.000 52,5 3,1Sierra 3.741.000 60,3 7.900.000 36,2 1,5Selva 334.000 5,2 2.461.000 11,3 3,4

Fuente: Webb y Fernandez Baca, Op. Cit.

CUADRO 5

PEA 1961 1980 1980

Total 3.124.579 (100,00) 5.587.000 7.425.000 (100,00)Agricultura 1.555.560 (49,78) 2.223.000 2.583.000 (34,79)Minería 66.413 (2,13) 117.000 178.000 (2,40)Indust. Manufac. 470.980 (15,07) 648.000 765.000 (10,30)Elect, gas, agua 8.548 (0,27) 17.000 22.000 (0,30)Construcción 104.696 (3,35) 218.000 267.000 (3,60)Comercio 281.847 (9,02) 732.000 1.114.000 (15,01)Transportes 93.971 (3,0) 246.000 327.000 (4,40)Finanzas - - 140.000 186.000 (2,51)Servicios 476.714 (15,26) 1.246.000 1.983.000 (26,71)

Fuente: Webb y Femandez Baca, Op. Cit.

326

Page 7: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Más significativo que la caida en su capacidad de absorciónde PEA es el descenso del aporte del sector agropecuario al PBInacional. El PBI agropecuario apenas se ha cuadruplicado en 50años, mientras que el de otros sectores ha crecido de manerasignificativa. La contribución del.sector decrece de manera sus-tancial, de alrededor del 20% en 1950 a poco más del 10% en1989, con altibajos en el camino.

CUADRO 6PBI POR SECTORES

PRECIOS 1986

millones intis 1950 % 1960 1970 1980 1989 %

Total 83.121 100 143.017 243.684 348.088 315.403 100Agricultura 18.421 22 23.084 32.093 32.499 41.783 13Pesca 174 0 1.186 3.918 1.566 3.854 1

, Minería 1.810 2 4.290 6.346 12.941 9.759 3Manufactura 16.801 20 36.286 63.921 88.400 71.877 23Construcción 7.226 9 11.610 18.879 28.706 26.046 8Servicios 38.689 47 66.597 118.527 183.976 162.084 51

Fuente: Instituto Nacional de Estadísticas, Perú. Compendio Estadístico,Lima: INE, 1990.

Ahora bién, el agro no evoluciona como un bloque sino que asu interior se han producido modificaciones tanto en la tenencia dela tierra como en la importancia relativa de productos y regiones.

Como era común a muchos paises de América Latina, aúnhasta los años 60 el agro peruano presentaba una alta polarizaciónlatifundio/minifundio en lo que se refiere al tamaño de las explo-taciones agropecuarias y a las tierras bajo su control. De acuerdoa los datos del CIDA, en 1960 el 0,1% de las explotaciones (conmás de 2.500 has. c/u) controlaban el 60,9% de la superf'icieagropecuaria. Las empresas de 0 a 20 has. (más de190% del total)controlaban alrededor de un 10% de la superficie 3.

' Comité Interamericano de Desarrollo Agrícola, Tenencia de !a tierra ydesarrollo socioeconómico del sector agrícola. Perú, Washington: UniónPanamericanalOEA, 1966.

327

Page 8: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

La comparación realizada por Fernando Eguren en base alos datos del Censo Nacional Agropecuario de 1972 y laEncuesta Nacional de Hogares Rurales de 1984 habla de la pro-funda transformación que a este respecto se ha producido en losúltimos 40 años:

CUADRO 7PERÚ 1972 Y 1984

EXPLOTACIONES AGROPECUARIAS

% del Total Nacional 1972 1984

eas eas has tierras cult

menos de 1 ha 34.822,5 1,1 3,9

01-01,99 has 18.723,1 3,1 10,202-04,99 has 24.425,6 7,7 21,8OS-09,99 has 11.013,5 9,1 20,410-19,99 has 5,7 6,8 16,220-49,99 has 3,4 • 5,6 17,150 has y mas 2,0 2,9 10,3

Fuente: Fernando Eguren, "La tenencia de la tierra", en Los hogares ruralesen el Perú, Lima: GAPA/PADI-Fundación Ehbert, 1987.

Como puede observarse, en la actualidad la llamada propie-dad familiar no empresarial (de entre 1 y 10 has) da cuenta del62% del total de todas las explotaciones del país y aunque con-trola sólo el 21% de la superf'icie, este porcentaje crece cuandose habla de las tierras de cultivo (52.40%).

De los Cuadros 9 y 10 se desprende que la pequeña pro-piedad familiar no empresarial se ha afirmado también en sucontribución al PBI del sector. Ciertamente, la importancia delPBI sectorial al interior del nacional ha decrecido, pero a suinterior han cobrado importancia los pequeños productores.Las mismas propiedades de entre 1 y 10 has que conforman lapropiedad familiar no empresarial aportan el 33% del VBPagrícola. Y que una proporĉión significativa de la poblaciónpecuaria total se encuentra en explotaciones agropecuarias demenos de 10 has.

328

Page 9: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

CUADRO 8REGIONES 1984

EXPLOTACIONES AGROPECUARIAS

% del Total Costa Sierra Selva

eas has eas has eas has

menos de 1 ha 33,3 4,0 26,8 1,5 2,4 0,101-01.99 has 17,0 6,3 27,4 3,8 12,1 1,102-04.99 has 27,6 25,6 25,2 7,9 25,7 5,0OS-09.99 has • 15,4 28>1 10,9 7,9 21,1 9,410-19.99 has 5,3 19,6 4,2 6,1 16,5 15,020-49.99 has 1,3 13,4 2,9 8,3 16,8 31,650 has y mas 0,1 3,0 2,6 64,4 5,4 37,8

Fuente: Eguren, Op. Cit.

CUADRO 9

Explotaciones Agropecuarias % del VBP

menos de 1 ha 51-4,99 has 115-9,99 has 2210-19,99 has 2020-99,99 has 16100 y mas 22

Fuente: Raul Hopkins, "La producción agrícola", en Los hogares rurales enel Perú, Lima: GAPA/PADI-Fundación Ehbert, 1987.

CUADRO 10% DE LA POBLACIÓN PECUARiA POR TAMAÑO DE LA EXPLOTACIÓN

vacunos ovinos caprinos porcinos

Sin tierras 1,6 6,0 5,5 0,5menos de 1 ha 12,5 7,2 10,1 17,81 a 1.99 has 19,4 12,9 18,7 25,12 a 4.99 has 23,7 17,3 15,9 19,95 a 9.99 has 15,6 12,4 9,5 13,210 a 19.99 has 9,8 7,8 5,5 7,320 a 49.99 has 9,2 4,8 6,2 7,2mas de 50 has 8,1 11,2 1,3 3,1

Fuente: Benjamín Quijandria, "Las explotaciones pecuarias", en Los hogaresrura[es en el Perú, Lima: GAPA/PADI-Fundación Ehbert, 1987.

329

Page 10: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Es necesario precisaz que la importancia relativa de la peque-ña propiedad debe ser mayor de lo que las cifras empleadas indi-can. Por dos razones. Primero, porque la ENAHR no incluyó alas empresas asociativas, cooperativas, comunidades campesi-nas, etc., que -en la medida que agrupan a familias campesinasque se comportan como pequeños propietarios- debieran serincluidas en las categorías que hacen parte de la pequeña propie-dad no empresarial. Segundo, porque de 1984 a la fecha lamayor parte de las empresas asociativas se han fragmentadoincrementando la importancia relativa de la pequeña propiedad.

En efecto, por acción de la reforma agraria entre 1967 y1990 se habían expropiado y adjudicado casi 9.000.000 has. detierras que pasaron de ser de haciendas a conformaz diversasformas de propiedad campesina °. Pero, de 1980 a la fecha, lamayor parte de las formas asociativas surgidas de la reforma sehan reestructurado o parcelado, afirmándose la predominanciade la pequeña propiedad parcelaria, individual o comunera-cam-pesina. A Enero de 1990, de un total de 609 cooperativas exis-tentes a nivel nacional, se habían parcelado 430. En la costa, de363 cooperativas, las parceladas (sujetas a cambio de modeloempresarial) eran 299 5.

Esta información permite sustentar algo que es de primeraimportancia no solo para entender la estructura productiva delagro peruano contemporáneo, sino también para la discusiónsobre el movimiento campesino, su base social, sus demandas,etc. En resumen, a diferencia de lo que ha ocurrido en buenaparte de la América Latina, en el Pení la transición capitalistano se ha dado desde adentro de la gran y mediana propiedadcon exclusión del campesinado, sino más bien sobre la base desu afirmación como propietario y como productor. A la luz dela reestructuración de las empresas asociativas de la sierra y laparcelación de las de la costa, ésta parece ser una tendenciaaún vigente.

' Ministerio de Agricultura, Dirección General de Reforma Agraria yAsentamiento Rural, Oficina de Programación y Presupuesto, "Reforma Agra-ria en cifras", Lima: Enero de 1990.

5 Ibid.

330

Page 11: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Ahora bién, los cambios habidos en la tenencia de la tierra y laafirmación de la importancia relativa de la pequeña propiedad encuanto a número de explotaciones agropecuarias, hectareaje con-trolado, aporte al producto agrícola y control de cabezas de gana-do, se ha acompañado también de redefiniciones de importanciaen cuanto a la importancia relativa de productos y regiones.

Como puede observarse en el Cuadro 11, se produce unestancamieñto e incluso una caida de la importancia relativa(hectareaje y volumen de producción) de los productos andinoscomo la papa, la cañihua, la quinua, el maíz amiláceo y el trigo)así como de los tradicionales productos de exportación y consu-mo industrial (azúcar y algodón). En cambio, han crecido enhectareaje y producción el arroz, el maíz amarillo duro, y elcafé -sobre'todo en la selva-, y también productos de nuevaimportancia como soya, sorgo, espárragos y_mangos, asociadosa la agroindustria y la exportación. Esta información confirmala hipótesis sustentada desde inicios de los 80 por Hopkins 6 enel sentido de que la tendencia global del agro es a la pérdida depeso relativo de los productos tradicionales de exportación(algodón y azúcar) y el de los productos de mercados restringi-dos (productos campesinos para consumo local) frente a pro-ductos asociados a los mercados urbanos, las agroindustrias onuevos mercados externos.

La información en torno al cambio en la importancia relati-va de diversos productos alimenta dos reflexiones que son tam-bién importantes para el debate sobre el movimiento campesino.La primera se refiere a la incorporación de la selva como áreaproductiva y socialmente importante. Como se ha señaladoantes, en mucho la expansión de la frontera agrícola se debe a lamigración campesina serrana hacia el oriente. Pues bien, el cre-cimiento relativo de la importancia del arroz, el^ café y el maízestá directamente relacionado con este proceso. A lo que hayque añadir el crecimiento de la siembra de hoja de coca asocia-da al narcotráfico. Este mismo fenómeno ha significado, desdeel punto de vista de las dinámicas sociales, el ingreso de la selva

6 Raul Hopkins, Desarrollo desigual y crisis de [a agricultura peruana1944-1969, Lima: IEP, 1981

331

Page 12: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

al movimiento nacional y, desde ahí, aportes significativos a larenovación de sus demandas, sus formas de organización ylucha, etc.

CUADRO 11IMPORTANCIA RELATIVA DE PRODUCTOS AGROPECUARIOS

Productos 1965 1984

has tm has tm

Arroz 74.920 290.520 236.178 1.127.154Maíz Amar Duro 137.550 339.126 200.255 556.984Maíz Amiláceo 204.800 218.045 202.057 216.050Trigo 153.150 146.720 95.117 97.349Sorgo 2.170 4.016 13.779 43.783Soya 395 575 1.106 1.829Papa 251.120 1.568.240 187.375 1.559.794Cañihua 6.550 5.877 4.733 1.959Quinua 19.485 17.635 18.370 12.153Café 92.670 48.264 163.903 83.906Algodón 238.135 357.351 95.352 201.859Caña Azúcar 46.520 7.498.940 53.265 7.156.779Espárragos * 955 4.084 2.497 11.392Mango 2.620 40.336 7.657 93.293Naranja ** 11.551 172.674 15.296 144.117

unidades tm unidades tm

Vacunos Carne 3.644.000 74.000 4.051.000 780.000Ovinos 15.218.000 21.500 12.701.000 18.900Porcinos 1.843.000 1.036.000 2.214.000 1.204.000Vacunos Leche 590.000 714.000 600.000 780.000

* datos a 1969** datos a 1966

Fuente: Para los productos agrícolas, Ministerio de Agricultura GAPA/PADI,

Perú: estadística de superfiĉie, producción y precio de 175 cultivos segúnregiones naturales, Lima, 1988. Para los pecuarios, Webb y Fernandez Baca,Op. Cit.

En segundo lugar, puede parecer redundante insistir en quelos productos qué han ganado importancia son aquellos que^omo se ha señalado- suponen la articulación a mercadosurbanos o a procesos agroindustriales. A ello habría que añadir

332

Page 13: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

que muchos productos tradicionalmente de mercados restringi-dos, como la papa, se destinan ahora en buena medida a losgrandes mercados urbanos. Si combinamos esta informacióncon aquella de los cambios en la tenencia de la tierra, resulta laimagen de una transición capitalista que tiene como un rasgocentral una masiva incorporación de campesinos y pequeñospropietarios al mercado. Desde el punto de vista del movimien-to campesino nacional esto ha significado cambios sustancialesen las demandas, propuestas programáticas y formas de organi-zación y movilización en relación al período anterior dominadopor la lucha por la tierra.

Sin embargo, es necesario precisar el grado de esta inser-ción al mercado que, con ser masiva, no es absoluta. Por ejem-plo, en base a la información de la ENAHR (Cuadros 12 y 13)se ha señalado que -especialmente en la Sierra sur- existeun fuerte contingente de explotaciones agropecuarias quededican buena parte de su producción al autoconsumo. Obvia-mente, es entre los productos andinos tradicionales donde estasituación se presenta con más fuerza. Es importante precisar,sin embargo, que esta información se recogió durante unacampaña duramente afectada por la sequía de 1982/83, lo quecon seguridad lleva a una sobreestimación del autoconsumo.Aún así, las cifras indican una considerable presencia de estefenómeno.

CUADRO 12% DE EAS CON VENTA DE PRODUCTOS AGRÍCOLAS

Costa 86Sierra 34Selva 89Total 51

Fuente: Armando Tealdo, "La comercialización", en Los hogares rurales en elPerú, Lima: GAPA/PADI - Fundación Ehbert, 1987.

En segundo lugar, si la inserción al mercado significa quebuena parte de lo que se consume viene de afuera y buena partede lo que se produce se coloca afuera (en la linea de lo señaladopor Figueroa en su trabajo a partir de comunidades del sur andi-

333

Page 14: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

no'), ello no implica que los campesinos accedan a todos losbeneficios económico/productivos y políticos que el mercadodebería suponer.

CUADRO 13DESTINO DE LA PRODUCCIÓN DE ALGUNOS PRODUCTOS

autoconsumo venta

semilla cons. hum.cons. anim. otros

arroz 0,9 4,7 0,3 2,8 91,3cebada grano 13,4 53,5 6,4 5,8 20,7maíz amarillo 1,2 10,1 14,3 1,6 72,8maíz amiláceo 6,2 60,2 6,1 5,8 21,9trigo 11,0 58,2 2,1 5,4 23,4papa 15,8 34,6 0,7 9,1 39,9yuca - 60,0 10,5 3,5 25,9

Fuente: Tealdo, Op. Cit.

Por ejemplo, sólo una parte mínima de los productores agro-pecuarios se ha beneficiado del acceso a créditos promocionalesotorgados por el Banco Agrario (además de que buena parte deese crédito fue a los productos más modernos y más ligados almercado (arroz y papa) y a los medianos propietarios. En térmi-nos generales, los indicadores de maquinización, tecnología,productividad, etc. de estos pequeños productores insertos en elmercado son bastante pobres.

CUADRO 14ACCESO AL CRÉDITO

1984 % eas dcrédlto % eas c/crédito BAP credito BAP/regiones

Nacional 7,5 6,5Costa 31,5 30,5 48,9Sierra 3,5 2,5 28,5Selva 8,5 ^ 7,5 23,3

Fuente: Faustino Ccama, "El crédito", en Los hogares rurales en el Perú,Lima: GAPA/PADI - Fundación Ehbert, 1987.

' Adolfo Figueroa, La economía campesina de la sierra del Perú, Lima:PUC, 1981.

334

Page 15: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

El resultado es mas bien una suerte de "inserción desventajo-sa" al mercado con un alto costo de pobreza campesina. Politica-mente, la inserción plantea una suerte de paradoja: es cierto que lainserción campesina al mercado a presupuesto la ruptura de hege-monías y monopolios de los hacendados y poderes locales tradi-cionales en el acceso a recursos productivos y a la acción politicay ha sido -por tanto- un factor de democratización 8. Pero no esmenos cierto que es imposible hablaz en el campo de una vigenciareal e institucionalizada, no cuestionada, de los derechos producti-vos y ciudadanos de los campesinos. Por el contrario, como seplantea en la siguiente sección, en paralelo con la inserción al mer-cado se ha producido una desestructuración de la sociedad rural yuna violentización de las relaciones sociales.

En el Cuadro 15 se puede observar como el "ingreso indepen-diente agrícola" (la mayor parte de los campesinos y pequeños pro-ductores) cae en ténninos relativos (°Io del total) y casi no crece entérminos absolutos. Esto sucede en un contexto en que también seven perjudicados los ingresos de los trabajadores (remuneraciones) ,_;mientras que crecen de manera importante los ingresos de los inde-pendientes no agrícolas y, sobre todo, las utilidades de las empresas.

CUADRO 15INGRESO NACIONAL POR SECTORES

PRECIOS 1986

millones de intis

1950 1960 1970 1980 1988

Total 66.172 100 106.291 199.483 283.037 317.320 100Remuneraciones 25.855 39 49.144 84.850 106.582 91.351 29Ing Ind Agric 13.457 20 14.516 21.552 18.875 17.708 5Ing Ind No Agr 10.628 16 20.210 33.479 49.879 75.436 24Renta Predial 5.427 8 8.490 8.995 6.511 566 0Utilidades Emp 10.357 16 13.962 51.441 101.739 131.852 42intereses 430 1 -32 -834 -549 " 2.407 1

Fuente: Webb y Fernandez Baca, Op. Cit.

8 Fernando Eguren, "Democracia y sociedad rural", en Democracia,sociedad y gobierno en el Perú, •Lima: CEDYS, 1988.

335

Page 16: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

CUADRO 16POBREZA CRÍTICA EN EL PERÚ.

LAS 10 PROVINCIAS MÁS POBRES

Provincia Departamento % PEA Agrop

1. CotabambasApurimac 86,412. ParuroCusco 88,103. ChumbivilcasCusco 83,474. PaucartamboCusco 86,265. AĉomayoCusco 88,156. AcobambaHuancavelica 85,497. Mariscal LuzuriagaAncash 83,898. QuispicanchisCusco 69,469. La MazAyacucho 78,59

10. CanasCusco 79,64

Fuente: PNUD-INP, "Distribución territorial de la pobreza en el Perú", Lima,Julio de 1989.

En la evolución global del ingreso nacional cae el peso rela-tivo del ingreso agrícola independiente (que puede equipararsegruesamente al ingreso campesino y pequeño productor). Entérminos absolutos, este ingreso es en 1988 sólo un poco mayorque en 1950, y está en tendencia a la baja en los últimos añosluego de un pico en los años 70 y otro en la mitad de los 80. Suexpresión más cruda y dramática es la pobreza que asola a lasprovincias de más alta población ruraUcampesina.

La redistribución poblacional acompañada de cambios en latenencia de la tierra y en la importancia relativa de áreas y pro-ductos agropecuarios, con un correlato global de pobreza campe-sina, tienen como contrapazte el desarrollo de una agroindustriano afincada directamente en la propiedad tierra sino en activida-des de transformación y comercialización. Ciertamente, comoresultado de las movilizaciones campesinas y las reformas agra-rias de los años 6o y 70, desapazeció la oligarquía terrateniente,

. principal fracción de la clase dominante que se asentaba en lapropiedad de la tierra. Pero, 20 años después, en el agro emergeuna nueva clase dominante cuya base principal no es el controlde la tierra sino el de los capitales, los mercados y la tecnología9.

9 Aunque en algunos casos sí le intereses entrar a controlar la producciónen función de sus actividades agroindustriales'y de exportación. Ver "Agri-buisseness in Perú" ... Fernando Eguren ha explorado el tema de la agroindus-tria en "Los nuevos grupos dominantes en la agricultura", Debate

336

Page 17: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Lo primero a resaltar es que la actividad del gran capitalligada al agro es de importancia nacional. En 1987, 35 de las 100empresas con más ingresos estaban relacionadas el sector agra-rio. Las tres primeras eran empresas estatales (ENCI, ECASA yParamonga), pero las demás eran todas empresas privadas:

CUADRO 17EMPRESAS AGROPECUARIAS ENTRE LAS 100 PRIMERAS

POR INGRESOS

Estatales ................................................ 3Nicolini ................................................. 2Backus Bentin .......... :........................... 1Brescia .................................................. 2Rodríguez Banda .................................. 2Lanatta Piaggio ..................................... 1Montero Pacocha .................................. 1Romero ................................................. 2Ikeda ..................................................... 2La Fabril ............................................... 3Fierro .................................................... 2Benavides de la Quintana, etc ............... 2

Para 1989, por el lado de las utilidades, 27 empresas delsector se ubicaban entre las primeras 100:

CUADRO 18EMPRESAS AGROPECUARIAS ENTRE LAS 100 PRIMERAS

POR UTILIDADES

Estatales ................................................ 1Fierro .................................................... 3La Fabril ............................................... 3Backus Bentin ...................................... 2Nicolini ................................................. 2Romero . ................................................ 1Ikeda ..................................................... 3Cogorno .. .............................................. 1Ponce Riofrio ... .................................... 1Rodríguez Banda .................................. 1Montero Pacocha etc ............................. 1

Fuente: Materiales trabajados por Fernando Eguren a partir de la informaciónde The Peru Report's, "Peru. The Top 1500", Lima 1989 y The Perú Report's,"Pení. The Top 2000", Lima: 1990

agrario 7, 1989. Una fuente de consulta indispensable sobre las agroindustriasy en general los grupos de poder es el trabajo de Carlos Maplica S.S., El podereconómico en el Perú, Lima: Mosca Azul Ed., 1989.

337

Page 18: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

En ambos casos, por ingresos o por utilidades, queda claroque actividades ligadas al agro (aunque no directamente de pro-ducción agrícola ni pecuaria, excepto aves), se ubican junto conotras actividades (especialmente mineras) entre las más impor-tantes y rentables de la ecoñomía nacional.

La mayor parte de estos oligopolios pertenécen a"grupos"con una presencia diversificada al interior de uno o más activi-dades vinculadas al agro'°.

Algunos de estos grupos con intereses en la agroindustria(p.e. Nicolini, Romero, .La Fabril, Lanatta Piaggio, etc.,) tienenademás presencia importante ^en el sistema bancario y en otrasactividades económica vinculadas o no al^agro ".

10 Haciendo referencia sólo a algunos de los grupos que controlan interesesagroindustriales ubicados entre las cien empresas con más ingresos o más utili-dades en los últimos años, encontramos lo siguiente. El Grupo Backus Bentinposee la Cervecería Backus y Johnston, la Cervecería del Norte, la CerveceríaSan Juan, la Maltería Lima, los Jugos del Norte, y la Distribuidora La Florida.Y, con el grupo Lana[ta Piaggio (dueño de la Cia Nacional de Cerveza, laSociedad Cervecera de Trujillo, la Distribuidora La Victoria, y la Distribuidorade Cerveza Jesús María) controlan casi todo el negocio de la cerveza del país.Los Lanatta Piaggio también tienen, mediante Molitalia, intereses en el negociodel trigo y las harinas de trigo y derivados (pan y fideos).

El Grupo Benavides de la Quin[ana posee la Industrial Peru Pacífico yServicios Comerciales y Mercadeo. El Grupo Field-Arteaga es dueño deArturo Field y La Estrella Ltda y la Molinera del Sur. El Grupo Fierro esdueño de la Distribuidora Dinámica (la más importante comercializadora dealimentos del país) y controla el negocio del tabaco y los cigarrillos mediante ^Tabacalera Nacional, Tabacos del Pení y Tabacalera del Sur.

El Grupo Ikeda es dominante en la preparación de alimentos balanceadospara aves y el negocio de los pollos y los huevos. Tiene Molinos Mayo, Gran-ja Los Huertos, Agropecuaria Andina, Granja Don Julio, Granja Los Ponchos,Granja Amanda, y Granja Avícola Doña Juanita. • La Fabril es dueña deCOPSA, de la Cia Molinera Santa Rosa y de la Sociedad Industrial del Sur; esdecir, está en harinas, oleaginosas y actividades de comercialización. LosNicolini poseen Nicolini Hermanos, la Cia Molinera del Perú, la MolineraInca, la Cia Fundo Flores y Anexos, la Lavaggi Hermanos, y la Agropecuaria ,Santa Angela, de nuevo, harinas, alimentos para aves, pollos y huevos.

El Grupo Romero tiene el Consorcio Distribuidor, Ganadera Shilcayo,Calixto Romero SA, Oleaginosas Pisco, Selva Industrias, Consorcio Distribui-dor Iquitos, Frigorífico San Martin de Porres, Palma del Espino, es decir, estáen la transformación, y la exportación e importación de ganados, oleaginosas,algodón, y también en maderas, jugos, café, etc.

" Por ejemplo, antes de la "nacionalización" de la banca, los Romero con-trolaban el 14,4% del Banco de Crédito del Perú y desde ahí tenían -aparte

338

Page 19: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Resulta pues que los oligopolios agroindustriales están enmanos de grupos de poder que invierten en una variedad de acti-vidades económicas. Por lo general, están asociados a algunaentidad bancaria desde la cual canalizan recursos crediticioshacia las actividades más rentables en cada coyuntura, sacándo-los de aquellas que ofrecen menores tasas de ganancia. A losgrupos de poder que desarrollan actividades financieras, decomercio internacional de importación y exportación, aduanas,servicios de almacenamiento y transporte, de transformación enlas ramas textil, molinera y aceitera, etc., difícilmente les va mal.

Otra característica no menos importante de los oligopoliosagroindustriales es que unas pocas empresas controlan gruesossegmentos del mercado de consumo, lo que les da capacidaddeterminante en la fijación de precios y tasas de ganancia enproductos directamente vinculados a la alimentación popular12.

de los intereses agropecuarios arriba anotados- intereses en empresas denavegación y aduanas, empresas de comercialización, sis[emas de almacena-miento, y empresas de transporte interno. Tienen, además, intereses en empre-sas conswctoras, de grupos electrógenos, de computación, y empreĉas de ser-vicios (contabilidad, planillas, etc.) que atienden al grupo en su conjunto. Enasociación con el grupo Raffo --también del Banco de Crédito-- tienen intere-ses en empresas de seguros y reaseguros, inmobiliarias, mineras, transporteaéreo, centros comerciales, etc.

Por su parte, los Nicolini -también asociados al Banco de Crédito- tie-nen, como se ha mencionado antes, empresas de molinería de trigo, de hari-nas, de fideos, de alimentos para animales, de crianza y comercialización depollos y huevos, de fabricación y distribución general de productos alimenti-cios, de comercialización, empaque y tejidos de algodón, de harinas y aceitesde pescado. Y, como los Romero, articulan estos intereses con el control deempresas de aduanas y almacenamiento, de transporte general, de construc-ción, de seguros y reaseguros, aparte de intereses no relacionados ni siquieraindirectamente al agro como en la industria de las máquinas de escribir, activi-dades inmobiliarias, motores, reencauchadoras, turismo, etc.

." El caso más extremo es el de los productos lácteos, en donde Gloria SA,de los Rodriguez Banda, controla 48,08% del mercado, seguido de PERU-LAC, que controla 15,81%. Entre ambos tienen 63,89% y, por tanto, controlabsoluto de1 mismo. Otro caso es el de la fabricación de aceites y grasas vege-tales y animales, donde las 5 compañías mas importantes controlan el 65% delmercado, y son propiedad de La Fabril (COPSA), Montero-Pacocha (Ind.Pacocha), los Romero (Calixto Romero y Oleaginosas Pisco), etc. Por el ladode la molinería, actividad relacionada al procesamiento del trigo para panes,galletas y fideos, tenemos que 8 empresas controlan el 51% del mercado, sien-do algunas de ellas propiedad de los grupos Nicolini (Nicolini Hermanos y

339

Page 20: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Esto explica el porqué de la tercera característica de los oli-gopolios agroindustriales: siendo parte de grandes grupos depoder y controlando porcentajes determinantes de los principa-les rubros ligados a la alimentación, siempre han logrado hacerprimar sus intereses en las definiciones de política agraria a lolargo de los últimos años. Un ejemplo reciente es el de la políti-ca importadora implementada por el gobierno de Alan García(1985-1990), que benefició directamente con insumos muy sub-sidiados a estos oligopolios. También, la reciente fijación de lapolítica de aranceles que debía acabar con la política importado-ra pero que termina fijando los aranceles más bajos a aquellosconsumidos por los oligopolios.

II. La desestructuración social

Los movimientoĉ campesinos, reformas agrarias, desarro-llos económicoĉ y de mercado; etc., no sólo han dado curso a latransición •apitalista dé la agricultura peruana como fenómenoeconómico sino que contribuyeron también al colapso final deuna sociedad rural y un sistema de poder en el campo que seordenaba en torno a la hacienda y el ejercicio oligárquico ygamonal del poder. Pero ni la organización campesina ni elEstado reformista que desde los años 60 cuestionaban a lahacienda, ni los ex-hacendados y gamonales que sobrevivierona la reforma y persisten en el campo amparados en otras activi-dades, ni los nuevos grupos de poder surgidos al amparo de la

Molinera Inca), de La Fabril (Molinera Santa Rosa y SIDSUR), de los LanattaPiaggio (Molitalia), Cogomo (Molino Exelsior), etc. Los mismos grupos con-trolan la fabricación de productos de panaderia.

Otra actividad directamente vinculada a la alimentación popular es aquellade los alimentos balanceados paza aves y las granjas avícolas y de huevos. Enla elaboración de alimentos prepazados paza animales, 5 empresas controlan el55,66% del mercado estando entre éllas Nicolini Hermanos del Grupo Nicoli-ni, Molinos Mayo de los Ikeda, Purina Peru de la transnacional Ralston, yMolinos Takagaki de la familia Komatsudani; varios de los mismos gruposapazecen en control de las granjas avícolas y el negocio de los pollos y loshuevos. Finalmen[e, dos grupos (Lanatta Piaggio y Backus Bentin) controlancasi el 70% del mercado de la cerveza y afines.

340

Page 21: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

agroindustria, el transporte, el comercio o el aparato local delEstado lograzon reemplazar de manera estable y permanente elordenamiento social y el sistema de poder destruido entre losaños 50 y 70.

Desde mediados de los 70 --cuando en la práctica terminóla iniciativa estatal hacia el campo- hasta el presente, lo que seha creado en el medio rural es una suerte de reestructuración amedias -un vacío de poder- que ha venido tratando de serllenado por un plural conjunto de actores sociales y políticos13.En amplios sectores del campo, ésta ha sido la dinámica central-aunque quizás no muy evidente- de la vida rural. Los cam-pesinos, por un lado, el Estado (maestros, jueces, policías, fun-cionarios) y los nuevos grupos de poder (agroindustriales,comerciantes, transportistas), por otro, han venido pugnandopor definir "quien manda". La ausencia de canales instituciona-les legitimados para la resolución de los conflictos y el merohecho de que esté en disputa incluso quien define y quien cons-truye esa institucionalidad, han hecho de la violencia factorcotidiano en la resolución de dichos conflictos. En la variantemás extrema y desde un accionar militaz, las FFAA y los alza-dos en armas también pugnan por llenaz dichos vacíos.

La reforma agrazia creó el contexto propicio paza un augede la organización campesina, proceso que no se ha detenidodespués de paralizada la reforma como acción estatal, sino quese ha extendido y profundizado a casi todo el medio rural. Esteproceso intenso de organización se asienta en la no solución deuna serie de problemas económico-productivos mencionadosantes. Pero es también cierto que el sólo hecho que haya proble-mas -por lo demás, los campesinos siempre han tenido proble-mas- no explica la vastedad del proceso organizativo ni su altaconflictividad. La vastedad del actual proceso organizativo

° La idea de un "vacío" en el medio rural ha sido esgrimida por CarlosIván Degregori para el Ayacucho de los años 50 y 60 pars entender la impor-tancia desmesurada de la Universidad San Cristóbal de Huamanga en Ayacu-cho (ver "Los hondos y mortales desencuentros", Lima: IEP 1985). Mas en lalínea de lo que acá se sostiene, Henri Favre la propone paza explicar de mane-ra mas amplia el surgimiento de Sendero Luminoso (ver "Sendero Luminosoy horizontes oscuros", Quehacer, 31, Octubre de 1984).

341

Page 22: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

parecen explicarse más bien por la existencia de un terreno fér-til, un vasto espacio abierto, producto del derrumbe del ordenhacendario y gamonal.

Su alta conflictividad se explicaría porque los campesinoscompiten con otros actores sociales (estado, podéres locales pri-vados, grupos insurgentes, fuerzas armadas) en la búsqueda deocuparlo y definir a su favor una nueva institucionalidad.En estabúsqueda de llenar el espacio vacío, los campesinos enfrentan lapersistencia y potencialidad de prácticas gamonales ya no enbase a la tierra y la hacienda ni ejercida siempre por los viejosgamonales, sino ahora en base al comercio y el transporte y elcontrol de las instituciones estatales en manos de nuevos gruposde poder. Democratizada la tenencia de la tierra, se mantiene yreproduce el ejercicio gamonal del poder ahora asociado a dosfactores claves: la etnicidad y la cultura y el control de la inter-mediación política y económica con la sociedad nacional (elEstado, el transporte y el comercio) ". Enfrentan también estra-tegias militares que buscan llenar ese mismo espacio a costa dela propia organización campesina.

En el campo costeño, es importante señalar que la impor-tancia de la agroindustria y la mediana propiedad no radicasólo en su capacidad de producir más y mejor para una diversi-dad mayor de mercados, sinó -y principalmente- en su capa-cidad de hegemonizar la dinámica social y la vida ideológicaen los valles. Esto, junto con la mayor proximidad física ysocial al Estado central y sus instituciones, hace que no se déahí de manera tan abierta el vacío de poder (fuertemente anota-do para la sierra y selva) y que no existan condiciones aparen-tes para la reproducción de prácticas propiamente gamonalesdesde el Estado y viejos y nuevos grupos de poder. Pero el pro-

'" En un esfuerzo por entender la violencia política en el agro contemporá-neo, Nelson Manrique ha hecho hincapié en la naturaleza esencialmente vio-lenta de la articulación entre el capital mercantil y la producción campesina enel campo contemporáneo. Ver "La década de la violencia", Márgenes, 1990.Desde otro punto de vista, la discusión sobre el ejercicio gamonal del poderdesde el Estado, el transporte y el comercio contribuye, desde el estudio actualde los movimientos campesinos, a la revisión his[oriográfica que se viene pro-duciendo en torno a la importancia explicativa de la hacienda para el entendi-miento de los fenómenos sociales y político de la sociedad rural.

342

Page 23: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

blema existe, en la actualidad está planteado el reto de cons-truir un liderazgo alternativo y una contrahegemonía desde losactores populares rurales (pequeños productores, trabajadoreseventuales) en los valles de la costa, y la creciente presencia deSendero Luminoso (y en menor medida del mrta) en los vallesal norte y sur de Lima es un indicador de la fragilidad de esasoĉiedad civil y de sus posibles similaridades con la experien-cia social de la sierra.

En la sierra sí sólo la constación de la no reestructuraciónsocial y de la existencia de ese vacío permite entender demanera analítica el fenómeno de la violencia subversiva y de laorganización campesina. El fenómeno ha sido evidente inclusopara los propios grupos alzados en armas, en particular paraSendero Luminoso, quien reclama el haber tenido que resolverde manera original y no prevista el problema de organizar lavida cotidiana de los pueblos en las zonas en las que su acciónprecipitó el colapso total del Estado y la institucionalidad ofi-cial bastante antes de haberse resuelto el "problema del poder"a nivel nacional15. Por lo demás, en esta situación radica laexplicación de porqué en el desarrollo de las luchas campesi-nas de los últimos tiempos, importancia central han tenidodemandas más bien "democráticas" (revocación y nombra-miento de autoridades, control territorial, administración dejusticia y orden interno, etc.), y no sólo demandas económicoproductivas1ó.

A1 igual que la organización campesina, la acción de losgrupos alzados en armas y de las Fuerzas Armadas en el campoandino a lo largo de la última década expresa y se explica por ladescomposición del orden social hacendado y su no reemplazodesde ninguno de los actores de la sociedad civil y el Estado. Almismo tiempo, expresa la existencia de estrategias que preten-den llenarlo por fuera de todo marco institucional y prescindien-do incluso de la voluntad y participación democrática de los

's Ver "La entrevis[a del siglo". Entrevista a Abimael Guzmán publicadaen El Diario> Año IX, No.496, Julio de 1988.

16 Ver Movilización campesina, respuesta democrática, Lima: CCP, 1989.Publicación que resume la experiencia de las huelgas campesinas de 1998-1989 en el Perú.

343

Page 24: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

actores sociales locales. Si la vastedad de la organización autó-noma del campesinado reclama tomar en cuenta el vacío depoder anotado, resulta imposible entender la profundidad delfenómeno subversivo sin apelar a lo mismo.

Finalmente, y en respuesta al vacío mismo y a las estrate-gias de diversos actores sociales por llenarlo, encontramosque el Estado central -vía la regionalización- se convierteen otro actor de este proceso. Desde la perspectiva del reorde-namiento nacional de las estructuras de poder en el agro, laregionalización dispuesta por la carta constitucional de 1979e implementada a través del Plan Nacional de Regionaliza-ción (1984), Ley de Bases de Regionalización (1988), LeyesOrgánicas de Creación de las Regiones ( 1989), etc., es unaconsecuencia lógica de la reforma agraria. Un segundo pasoindispensable en respuesta al vacío de poder que la propiareforma contribuyó a crear; una búsqueda de reordenamientode la institucionalidad y de creación de instancias descentrali-zadas para la canalización y solución de conflictos en losmedios rurales.

En suma, los cambios experimentados por el campesinadocomo productor como consecuencia de su inserción en el mer-cado en el contexto de la transición capitalista se han dado demanera paralela a su actuación en un escenario más amplio decolapso de estructuras sociales tradicionales y de disputa por sureemplazo a partir de nuevos actores en la escena rural.

Estas dos dinámicas conforman el contexto global al interiordel cual es necesario ubicar y discutir la experiencia del movi-miento y la organización campesina en las últimas cuatro 0cinco décadas. Este contexto global explica cuales han sido lascaracterísticas del movimiento campesino y su impacto en elproceso histórico y al mismo tiempo dan sentido y urgencia a ladiscusión sobre su situación actual y sus perspectivas.

SEGUNDA PARTELA EVOLUCIÓN DEL MOVIMIENTO CAMPESINO

Esta segunda parte trata de la evolución del movimientocampesino en el contexto de la transición capitalista y el vacío

344

Page 25: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

de poder anotados en la primera parte del trabajo ". Se presentanlos antecedentes y se propone una periodización de tres momen-tos en la movilización campesina para el período en estudio.

Antecedentes

La agremiación campesina independiente en el Perú con-temporáneo se remonta a la década de 1920, en que se fundó laFederación General de Yanaconas y Campesinos del Perú,impulsada por Juan Hipólito Pevez Oliveros18. Pero la crisis de1930-31 y los gobiernos autoritarios y represivos que la siguie-ron frustraron esta experiencia.

En 1947 hubo un nuevo esfuerco en este sentido. En Abril sefundó la Confederación Campesina del Perú (CCP), la que enDiciembre realizó su I Congreso y eligió a Pevez su Secretario Gene-ral. La fundación de la CCP fue un intento de centralizar el movi-miento campesino que se dió durante la apertura democrática de1945^8, en el que ya adquiría importancia la demanda campesina porla tietr`a, mejores condiciones de trabajo, contra los abusos de autori-dades, y por el derecho a la sindicalización19. El golpe militaz del

" Se toma como eje la experiencia de la Confederación Campesina delPení. La CCP no es el único gremio campesino peruano, pero sí el más repre-sentativo y que expresa mejor el surgimiento de un sujeto social populaz agra-rio. Existen también la Confederación Nacional Agraria (CNA), la AsociaciónNacional de Parceleros Agrarios (ANAPA), la Confederación General de Cam-pesinos del Perú (CGCP), además de organizaciones como la Asociación Inte-rétnica de la Selva Peruana (AIDESEP) y la Confederación de NacionalidadesAmazónicas (CONAP), que agrupan a las nacionalidades amazónicas del país.

18 Sobre la fundación de la Federación de Yanaconas y Campesinos delPení y una reflexión mas general en torno a la agremiación campesina de eseentonces, ver en Juan H. Pevez, Memorias, Illa: Lima, 1984.

19 Alberto Flores Galindo ha anotado que una de las caracteristicas de lamovilización campesina iniciada a fines de los 50 sería la de ser "campesina" ymodema, no "indígena". Ver Alberto Flores Galindo, "Los movimientos campe-sinos en el Pení. Balance y esquema", en Allpanchis, XI-XII, 1978. Pero quedaaún por documentar cómo y cuándo se da este tránsito. Por ejemplo, hacia 1945-48, el movimiento es modemo pues sus demandas ya no contienen aspectos mile-naristas o utópicos, pero la percepción del movimiento por la propia vanguardiapolitica involucrada --en este caso el PCP y el APRA--mantiene el enfoque indí-gena antes que campesino. A1 respecto resulta ilustrativo revisaz los números de"La Tribuna (órgano del APRA) y"Labor" (ó rgano del PC) de esos años.

345

Page 26: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

General Manuel A. Odría (1948-1956) terminó con dicha "apertura"y reprimió duramente a la organización popular. La movilizacióncampesina entró en un reflujo y la CCP prácticamente desapareció.

Primer períodoEl movimiento campesino entre 1956 y 1964

En 1956, a la caida de Odríá, se inició un período de movili-zaciones campesinas que duró hasta 1964 cuando el primergobierno de Belaunde Terry inició la represión a las guerrillas.A la dinamización del movimiento contribuyeron el retorno deregímenes representativos y más democráticos, las contradiccio-nes entre los hacendados tradicionales y fracciones burguesas ymedias con afanes de cambio y modernización, así como laexpansión de las economías campesinas y su inserción al mer-cado 20. Las luchas más importantes fueron contra los hacenda-dos en La Convención y Lares (Cusco) y contra la Cerro dePasco Corporation y otras haciendas en Pasco y Juñín, así comolas de los trabajadores de las haciendas costeñas por sti derechoa la sindicalización y a mejores condiciones de vida y trabajo21.

En esos años, las demandas campesinas más frecuentes fueronpor la tierra (38,3%) y por mejores relaciones de trabajo (17,8%).Casi el 80% de las demandas o acciones por tierras fueron contrahaciendas de propiedad privada. Sólo un 8% fueron contra el Esta-do o contra la Iglesia, y otro 8% se refiere a problemas de linderosque enfrentan a comunidades o grupos campesinos entre sí. Tam-bién tuvieron peso los conflictos con el Estado (29,7%) que surgí-an a propósito de su intervención represiva en los conflictos entrecampesinos y trabajadores rurales con lás haĉiendas.

30 Una breve pero sustantiva discusión y una muy completa bibliografía alrespecto puede verse en Pedro Gibaja, Movimiento campesino peruano (1945-1964). Algunos elementos de análisis y una aproximación bibliográfica,Lima: CEPES, 1983.

21 Una exhaustiva recopilación de información periodística en torno a lasluchas de este período puede verse en Virginia Guzmán y Virginia Vazgas, Elcampesinado en la historia. Cronología de los movimientos campesinos,1956-1964., Lima: IDEAS, 1981. El análisis cuantitativo en torno a lasdemandas campesinas en ese período se basa en la iriformación presentada porGuzmán y Vazgas.

346

Page 27: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Estas demandas permiten ubicaz al movimiento campesinocomo actor del momento inicial de la transición capitalista. Vis-tas a la distancia, las demandas centrales por recuperaz tierrasde haciendas y modernizaz las relaciones de trabajo (suman masdel 50% del total) apuntazon a romper la intermediación de lahacienda entre el campesino y el mercado. Así, el movimientocampesino contribuyó de manera exitosa a la transición capita-

. lista de la agricultura impulsando el acceso de miles y miles depequeños propietarios a la economía de mercado en base al con-trol autónomo de sus recursos productivos y la libre disponibili-dad de sus ingresos. Más tarde, las reformas agrarias apuntaríanen el mismo sentido.

Sin embargo, este empuje campesino por insertarse en elmercado ^mpuje que iba de la mano con las tendencias globa-les de la economía y de la producción en el agro y el país-enfrentó obstáculos de índole más bien político: la permanentede la hacienda y los hacendados como componentes centralesdel poder, y del Estado como instrumento a su servicio.

Se explica así el peso de las demandas frente al Estado y elque su componente dominante sea la protesta frente a la represióny el reclamo por el reconocimiento legal de los sindicatos. El Esta-do es aún el gazante de los hacendados, pero también potencialproveedor de legitimidad para la organización de los campesinos.

CUADRO 1DEMANDAS CAMPESINAS

PERÍODO 1956-64

Demanda1956 1957 1958 1959 1960 1961 1962 1963 1964 Total Porc

Tierra 23 27 26 22 34 30 54 58 56 330 38,3Econ-Prod 0 0 3 2 0 4 2 1 0 12 1,6Agua 2 1 2 0 1 6^ 5 3 1 21 2,4Relac Trab 5 32 20 14 14 10 27 20 9 151 17,8Servicios 0 0 1 0 0 0 1 1 1 4. 0,4Estado 9 24 38 23 • 32 18 55 15 40 254 29,7Desastres 0 0 3 0 0 1 0 0 0 4 0,4Recursos 0 0 0 0 0 1 0 0 0 1 0,2Poder Local 2 11 8 4 17 4 6 6 10 68 7,9Vida Gremial0 0 0 0 1 0 1 1 8 11 1,3

Total 41 95 101 65 99 74 151 105 125 856 100

Fuente: Guzmán y Vargas. Elaboración propia

347

Page 28: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

En cuanto a la distribución de los conflictos rurales, Limaocupa el primer lugar con el 15,7%: en esos años el departa-mento era aún fundamentalmente agrícola y su agro era segura-mente el más integrado al mercado por lo que las presiones eco-nómicas y sociales para acceder a la tierra y modernizarrelaciones laborales podrían ser mayores.

CUADRO 2DEMANDAS POR TIERRA

PERÍODO 1956-64

Demanda1956 1957 1958 1959 1960 1961 1962 1963 1964 Total Porc

vs hacienda 10 16 23 14 31 27 44 50 47 262 79,3vs Estado 3 1 1 3 0 1 4 3 3 19 5,7vs Iglesia 1 0 0 1 1 0 5 0 2 10 3,1linderos 3 7 2 4 2 1 1 3 4 27 8,2nativos 3 2 0 0 0 0 0 1 0 6 1,9titulación 1 1 0 0 0 0 0 1 0 3 0,9vs urbaniz 2 0 0 0 0 1 0 0 0 3 0,9

Total 23 27 26 22 34 30 54 58 56 330 100

Fuente: Guzmán y Vargas. Elaboración propia.

Le sigue en importancia el Cusco (13,4%). El epicentro dela lucha fue La Convención y Lares, un polo de migración y dedesarrollo agropecuario altamente integrado al mercado (café,té, cacao, etc) ZZ. Luego vienen Pasco y Junín (con un agregadode 14,3%), donde la formación de las haciendas había sido brus-ca y reciente en un contexto de economía campesina altamentemercantil y muy integrada al mercado desde tiempos coloniales 23.

22 Existen numerosos estudios sobre la experiencia de La Convención yLares. Ver la bibliografía en Gibaja, Op. Cit.

29 La importancia de la "memoria reciente" de la propiedad de la tierrasurge de la propia experiencia peruana (la "gran rebelión campesina" del surdel Perú en los años 10 y 20 responde a un proceso masivo y rápido de apro-piación de tierras por las haciendas iniciado sólo en las últimas dos décadasdel siglo XIX). Paza México, Womack anotó la tremenda importancia de esamemoria reciente para explicar la rebelión campesina en Morelos: Zapatajoven recordaba haber jugado cuando niño en los árboles y jardines ahora pro-piedad de los hacendados; y había una generación entera de adultos y viejospaza recordárselo. Ver John Womack, Zapata y la revolución mexicana.

348

Page 29: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Están también las zonas azucareras de Ancash, La Libertad yLambayeque (agregado de 21,2%), departamentos donde seconcentró el movimiento de los trabajadores por la sindicaliza-ción. Piura figura a cotinuación con conflictos en zonas de costaaunque sus actores principales son, como en la sierra, la comu-nidad y la hacienda. La selva está prácticamente ausente.

No resulta casual que el movimiento campesino se hayaconcentrado en la costa y zonas específicas de la sierra conmayor integración relativa al mercado o una experiencia muyreciente de afirmación de la hacienda a costa de los campesinos.En realidad se dio ahí donde había asentada una población cam-pesina que veía en la hacienda el obstáculo palpable para afir-mar o recuperar su integración al mercado, o donde los sindica-tos en mayor contacto con fenómenos o influencias externasejercían más presión por modernizar las relaciones laborales.

CUADRO 3DEMANDAS EN LOS DEPARTAMENTOS

PERÍODO 1956-64

Depart. 1956 1957 1958 1959 1960 1961 1962 1963 1964 Total Porc

Amazonas 1 2 0 0 0 1 3 0 2 9 1Ancash 2 10 12 4 7 6 3 6 11 61 7,1Apurimac 2 1 2 4 2 3 5 7 13 39 4,6Arequipa 3 6 5 2 7 3 0 1 0 27 3,1Ayacucho 1 7 3 1 12 0 9 7 4 44 5,1Cusco 0 8 10 12 9 8 26 10 31 114 13,4Cajamarca 1 8 10 2 1 3 6 2 6 39 4,3Huancav 0 1 0 4 3 3 6 1 9 27 3,3Huanuco 1 0 2 0 5 0 8 1 1 18 2,2Ica 3 2 2 1 0 2 2 6 3 21 2,5Junin 6 0 1 3 10 9 17 21 7 74 8,4La Libert 5 10 12 14 3 6 3 5 7 65 7,6Lambayeque 2 5 2 4 4 4

^25 4 6 56 6,5

Lima 6 23 21 8 20 9 27 7 13 134 15,7Mad. Dios 0 3 1 0 0 0 0 0 0 4 0,4Pasco 0 4 9 3 7 9 6 8 4 50 5,9Piura 6 1 5 2 7 1 3 15 6 46 5,4Puno 2 2 4 1 2' 7 1 4 2 25 2,9San Martin 0 1 0 0 0 0 0 0 0 1 0,2Tumbes 0 0 0 0 0 0 1 0 0 1 0,2Ucayali 0 1 0 0 0 0 0 0 0 1 0,2

Total 41 95 101 65 99 74 151 105 125 856 100

Fuente: Guzmán y Vargas. Elaboración propia.

349

Page 30: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

La movilización campesina se acompañó de un intenso pro-ceso de organización, formándose numerosos gremios campesi-nos de nivel local, provincial y departamental. A fines de 1950e inicios de los 60 surgieron las federaciones campesinas de LaConvención y Lares y la Departamental del Cusco, con lideraz-go izquierdista; la federación de Puno, con liderazgo social-cris-tiano; sindicatos cañeros y federaciones de braceros desde Limahasta Lambayeque, y organizaciones de comunidades y federa-ciones campesinas en la sierra central, donde el APRA y laizquierda se disputaban la conducción; y federaciones en Piuray Cajamarca, con liderazgo populista y aprista, respectivamente:

El sentido inmediato de esta organización fue alcanzar losobjetivos específicos y puntuales que los propios campesinos seplanteaban, y no otros de mayor permanencia y proyección. Sibién el solo hecho de la organización campesina y sus luchasexpresaron la debilidad de los hacendados y contribuyeron alderrumbe del orden político tradicional, ni la movilización ni laorganización campesina apuntaron a llenar el vacío que contri-buían a generar. El campesinado fue un actor central de ladesestructuración de la sociedad rural tradicional, pero su inca-pacidad de liderar una reestructuración alternativa de acuerdo auna propuesta propia contribuyó a instalar el vacío de poder alque hemos hecho referencia en la primera parte de este trabajo.

Hubo también intentos por centralizar nacionalmente almovimiento campesino. En 1962 tanto la Confederación Cam-pesina del Perú (CCP, ya con un definido liderazgo izquierdista)como la Federación Nacional de Campesinos del Perú (FEN-CAP, de liderazgo aprista) hicieron congresos nacionales y pro-curaron erigirse coma la dirección centralizada de esas luchas.Pero estos intentos enfrentaron grandes obstáculos. Desde losaños de post-guerra los terratenientes tradicionales estaban per-diendo el control del Estado que antes tuvieron, pero su capaci-dad de respuesta a la movilización campesina era aún grande. Aella se añadió después la represión generalizada que se imple-mentó en 1964-1965 como respuesta gubernamental al accionarde diversos grupos guerrilleros.

Otra dificultad se derivó de las características mismas de lasdemandas y lógicas de movilización de los campesinos. Pese aque de 1930 en adelante hubo uná creciente integración econó-

350

Page 31: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

mica, social y política del país y un cierto desarrollo del merca-do interno, la lucha campesina por la tierra y la de los sindicatospor mejores condiciones de trabajo seguía respondiendo a diná-micas y conflictos fundamentalmente locales. La lucha campe-sina era por integrarse al mercado, pero aún el mercado nolograba integrazla nacionalmente.

Los años 60 estuvieron también marcados por la dispersión yfragmentación de las izquierdas, que no tuvieron la capacidad deconformar una vanguazdia política unificada que le disputara alAPRA la influencia que aún mantenía en las organizaciones cam-pesinas y que dieran. orientación programática nacional al conjun-to del movimiento. En casos extremos, como los de La Conven-ción y Lares y Pasco-Junín, este vacío de liderazgo gremial ypolítico nacional llevó a la formación de vanguazdias ad hoc acada experiencia: el Frente de Izquierda Revolucionario (FIR) enel Cusco, el Movimiento Comunal del Centro en la Sierra central.

En suma, el movimiento campesino de los años 50 y 60 fueexitoso en tanto logró sus reivindicaciones puntuales y contribuyóal curso general de inserción campesina al mercado y de democra-tización de la sociedad nacional, no pudo constituirse en actorsocial permanente con capacidad de definir el curso de los proce-sos que contribuía a desatar. Sin organización nacional, sin unavisión clara de su propio proceso y de los nuevos retos que se leplanteaban desde adentro del mercado, sin opciones de reordena-miento de las relaciones de poder en la sociedad rural, el campesi-nado no sólo fue derrotado coyunturalmente durante la represiónde 1964-65 sino que perdió la iniciativa y pernĉtió al Estado y lossectores medios liderar los grandes procesos de cambio de los 70.

Segundo períodoLa reforma agraria y el movimiento campesino ^°

La reforma agraria iniciada en Junio de 1969 dio el golpe degracia a un sistema de hacienda ya debilitado y, al legitimar el

Z' El título y mucho del contenido de esta sección del trabajo correspon-den a mi artículo "La reforma agraria y el movimiento campesino", Debateagrario, 7, 1989.

351

Page 32: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

reclamo campesino por la tierra y mejores condiciones de traba-jo y vida, estimuló un nuevo ciclo de movilización y agremia-ción autónoma de los campesinos Z5.

La movilización campesina de los 70 fue similar a la de los50 y 60 en tanto su objetivo central (tierra y relaciones de traba-jo) y sus formas organizativas eran básicamente las mismas.Pero fue diferente en tanto era distinto el contexto social y políti-co en que la lucha se daba, eran distintas las bases que se movili-zaban, y era distinta la capacidad de organizazse nacionalmentepara incidir sobre el curso global de los acontecimientos.

En sus momentos iniciales, el movimiento campesino de los70 tuvó al Estado de su lado. A diferencia del período anterior enque la iniciativa correspondió al campesinado en contra de loshacendados y el Estado, en los 701os arrestos contra la haciendapartieron básicamente "desde arriba" y fueron ellos los que die-ron legitimidad y crearon un contexto globalmente favorable a lamovilización campesina por la tierra y relaciones modernas detrabajo. Sólo en un segundo momento, desde mediados de los70, cuando en algunas zonas se experimentan las limitacionesdel modelo CAP y SAIS y el gobierno redefinió radicalmente suactitud política frente al agro, se produce una contradicción glo-bal entre el movimiento campesino y el Estado 26.

Como se ha señalado, las demandas en torno a las que searticuló la movilización campesina de los 70 fueron en sus ras-gos generales iguales a las del período anterior: la tierra, lasrelaciones de trabajo y el derecho a la organización. Pero, elcambio de contexto -reforma agraria en plena implementa-ción- determinó diferencias. En primer lugar, la demandageneral por tierra se acompañó de precisiones respecto de canti-dades, modalidades de adjudicación, alternativas frente a los

z5 Fernando Eguren, "Democracia y sociedad rural", en Luis Pásara yJorge Parodi, Democracia, sociedad y gobierno en el Perú, Lima: CEDYS,1987.

Z6 Aunque no es posible extenderse en este trabajo al respecto, es impor-tante anotar que dentro de este marco general, las dinámicas concretas delmovimiento y los ritmos de sus relaciones de alianza y conflicto con el Estadovariazon de lugar en lugar. Ver al respecto Monge, "Reforma agraria y movi-mien[o campesino"

352

Page 33: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

mecanismo de evasión, etc. La otra demanda general, aquella^por redefinir las relaciones de trabajo y negociarlas organizada-mente mediante la organización gremial, se hizo más complejaaún en la medida en que los trabajadores estables de las hacien-das, especialmente los de la costa, pasaron a adquirir -en sunueva condición de cooperativistas- el doble status de trabaja-dores y dueños.

En términos generales se puede plantear la siguiente parado-ja: la reforma dio aliento a un nuevo ciclo de movilizacionescampesinas en torno a demandas tradicionales pero, al mismotiempo, agotó dichas demandas obligando a que en plena diná-mica de movilización campesina surgiera la necesidad de unreplanteamiento sustancial de su naturaleza misma. A fines delos 70 ^uando recién estaba cuajando en el terreno organizati-vo una intensa movilización centrada en el reclamo por tierra yderechos laborales- la inserción campesina al mercado y lacrisis de las empresas asociativas plantearon una situación ente-ramente nueva. La búsqueda de respuestas a los nuevos retossurgidos de la integración al mercado ocupa buena parte del ter-cer período del movimiento campesino, de 1980 en adelante.

De la misma manera que en el caso de las demandas, laexperiencia organizativa de los 70 fue de reafirmación de lo tra-dicional (se mantuvieron los esquemas organizativos de los años60 con la organización sindical y territorial) seguida por la nece-sidad de dar respuesta a nuevos retos, especialmente en cuanto ala organización en el terreno de la producción. En el terreno másespecíficamente gremial, y a diferencia del período anterior, lacreación de la CNA y la acción del SINAMOS en el campoplanteó con mucha fuerza el debate en torno a la autonomía^organizativa de los gremios y el corporativismo gubernamental.

En la sierra la comunidad campesina se mantuvo como elreferente organizativo básico, al igual que la organización terri-torial. Pero ya desde los momentos mismos de adjudicación orecuperación de tierras de haciendas y, más tarde, a partir de ^arecuperación de tierras de las propias empresas asociativas crea-das por la reforma, comenzó a plantearse el problema de cómoorganizarse también como productores insertos en el mercado.Desde esos años la respuesta comenzó a ser -aunque de mane-ra muy incipiente- el impulso a experiencias de gestión pro-

353

Page 34: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

ductiva al interior y entre las comunidades y, en el terreno gre-mial, la combinación de la organización territorial con una porramas de producción.

En la selva esta solución ^xpresada en comités de produc-tores y organizaciones por caserío, localidad, valle y provincia-surgió desde el inicio mismo de una experiencia organizativaque no tenía base comunal ni tradición de lucha por la tierra. Aello hay que añadir la organización gremial autónoma de lasnacionalidades amazónicas que toma fuerza también en esteperíodo. En la costa, como hemos mencionado antes, la creaciónde las cooperativas y la doble condición de socios y trabajadoresde sus integrantes llevó a la experiencia sindical a un callejón sinsalida. Sólo con la parcelacióri de las cooperativas en los 80 sereplantearía ahí en términos distintos el problema.

Es sobre la base de este nuevo movimiento campesino quese produce una radical reorientación de la CCP en el IV Con-greso de Huaral en 1974 27 y tienen lugar los intentos corporati-vistas que desde el SINAMOS y la formación de la Confedera-ción Nacional Agraria (CNA) 28 desplegó el gobierno militar. LaCCP en los años 60 había tenido su asentamiento en sectoresdel campesinado de Ancash y Ayacucho así como entre trabaja-dores sindicalizados del norte chico. Estas bases habían realiza-do sus experiencias de lucha desde fines de los 50 y durante los60, antes de la reforma agraria. En cambio, la reorientación dela CCP y la formación de la CNA tuvieron como base social los

Z' La contradicción que se generó en la CCP desde inicios de los 70 entreuna dirección gremial y política aferrada al pasado y nuevos desarrollos desdelas bases hizo finalmente crisis en 1973 cuando se frustra el IV Congreso CCPen Eccash, Ancash, se forma una Comisión Organizadora y ĉoordinadora y selleva a cabo (Mayo de 1974) un nuevo IV Congreso CCP en Huazal, Lima.Ahí se hizo un balance crítico de las luchas del movimiento campesino y delos problemas de la CCP en el período anterior y se acordó un eje de moviliza-ción de lucha por la tierra, por los derechos sindicales del proletariado agríco-la y por preservaz la autonomía de los gremios campesinos frente al corporati-vismo del gobierno.

^ En un inicio, el gobierno militar había respetado la e^tistencia de la Socie-dad Nacional Agraria (SNA), el gremio histórico de los grandes tecratenientes.El DL 19400 disolvió a la SNA y creó las condiciones para la formación de laCNA, transfiriendo a esta última los bienes y recursos de la SNA. Ver MarianoValderrama, 7 años de reforma agraria en el Pení, Lima: PUC, 1977.

354

Page 35: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

movimientos campesinos de Cajamarca, Piura, Andahuaylas yCusco y sindicatos costeños que estaban en plena lucha contrala partición de haciendas para evasión de reforma agraria, a losque hemos hecho mención antes z9.

La nueva experiencia gremial no solo significó dar respues-ta y orientación -desde una u otra perspectiva gremial- a lareforma, sino que además creó condiciones para la centraliza-ción nacional del movimiento campesino. A ello contribuyeronvarios factores externos al campesinado mismo. En primerlugar, la sola reforma agraria precipitó un debate nacional sobregrandes opciones frente a los problemas sectoriales y naciona-les. El problema de la tierra siempre fue nacional, pero losmovimientos campesinos e incluso las reformas agrarias previasfueron de dimensión local. En cambio, la reforma de los 70 fueun hecho nacional que uniformizó esas dinámicas locales y creóla necesidad de respuestas igualmente nacionales.

En segundo lugar, con la reforma se impuso como actor unEstado altamente centralizado, con una importante participacióneñ la vida económica del sector, y con escaza capacidad yvoluntad de canalización y solución de conflictos a nivel local.Ello planteó a los campesinos la necesidad de contar con intér-locutores propios igualmente nacionales. Desde esa fecha hastael presente la intensa centralización del Estado peruano, suingerencia en la economía nacional y agraria, y la ausencia deuna institucionalidad local para prestar servicios y canalizarconflictos, son elementos explicativos de la naturaleza "nacio-nal" del movimiento y la organización campesina. Por la mismarazón, como se verá después, la regionalización en curso puedealterar de manera sustancial las condiciones y posibilidadesmismas del movimiento nacional campesino.

En tercer lugar, la centralización nacional de la organizacióncampesina y su permanencia está muy ligada al desarrollo denuevas vertientes políticas de la izquierda peruana que lograrondesplazar al APRA de la organización campesina en los años

^ EI trabajo de Diego Gazcía Sayán, Tomas de tierras en el Perú ", Lima:DESCO, 1982, es una referencia obligada paza entender estas luchas campesi-nas de los años 70.

355

Page 36: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

70. El desanollo de estas nuevas vanguardias políticas respon-dió también al nuevo contexto político nacional que estimulabala búsqueda de nuevas respuestas a los grandes problemasestructurales del país. Y, aunque en su momento su tamaño y suimpacto fuesen más bien reducidos, estas nuevas vanguardiascontribuyeron decisivamente a la existencia de los cuadros diri-genciales, experiencias colectivas de organización y lucha, yorientaciones programáticas que son indispensables para laexistencia del movimiento nacional campesino.

Tercer períodoEI movimiento campesino en los 80

En los 70, la reforma agraria modificó el contexto global dela agremiación campesina. Los debates que en torno a élla sedieron y las alternativas que se implementaron se centraron enla tenencia de la tiena, su modificación y el rol del Estado y losmovimientos campesinos organizados. Pero al mismo tiempo, ysin que esto fuera materia de mayor debate, el movimiento cam-pesino y la reforma agraria aceleraron la participación de loscampesinos en la transición capitalista y llevaron al extremo ladesestructuración de la sociedad rural y la existencia ahí de unvacío de poder. Ambos, refonnas y movimientos, sentaron lasbases de desanollos económicos globales así como de condicio-nes sociales y políticas que configuraron un contexto sustancial-mente diferente para el accionar del movimiento campesino.

Como consecuencia, en los años 80 -en la medida de lainserción de sus bases al mercado- los gremios campesinoshan prestado creciente atención a las políticas económicas y suimpacto en la producción, comercialización y consumo de pro-ductos e insumos en el agro, al rol del campo en el abasteci-miento urbano, así como a los problemas referidos al Estado, lademocracia y el poder en el campo, y todo esto en el contextode una pluralidad de actores sociales y gremiales agrarios30

30 A1 respecto puede verse mi trabajo "Las demandas de los gremios cam-pesinos en los 80", Debate agrario, 4, 1988.

356

Page 37: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

La historia reciente de la CCP ejemplifica bien estatransición. En el V Congreso Nacional (Cusco, 1978) sedio una reafirmación de la lucha por la tierra, pero se ins-taló una sub-comisión de "Problemas del campesinado" enla que las bases tuvieron oportunidad de plantear -porprimera vez- una serie de problemas y reivindicacioneseconómico- productivas 31. E1 VI• Congreso Nacional de1982 se abocó ya plenamente a dar respuesta a los "nue-vos" problemas enfrentados por el campesinado en la déca-da de los 80. Un análisis de las demandas y planteamientospresentados por las bases campesinas asistentes a dichocongreso ilustra acerca de los cambios operados en rela-ción a los años 50 y 60'Z. .

Como puede observarse, para esta fecha ya se ha produ-cido una redefinición sustantiva de las demandas campesi-nas. El peso de las demandas por tierra es de menos del 25%del total, (incluso menos del 20% si se exceptúa la informa-ción correspondiente a Puno, donde la demanda por la rees-tructuración de las empresas asociativas sigue siendo la mássentida). En cambio, más de una cuarta parte de las deman-.das presentadas al evento se referían a problemas económi-co-productivos, demandas que casi no aparecen en los movi-mientos campesinos previos a la reforma agraria. El Cuadro5 ilustra acerca de la variedad de estas demandas y llama laatención sobre la importancia dominante que para los campe-sinos adquieren los problemas de precios de venta de susproductos y compra de aquellos que adquieren para su repro-ducción.

" Ver Sur,.'z En la preparación de esta sección del trabajo he revisado 190 informes

de bases, excluyendo de la revisión a los informes de federaciones departa-mentales y provinciales que más que demandas puntuales de bases postulabaninterpretaciones y caracterizaciones del momento político nacional y alternati-vas globales de carácter estratégico y programático. En estos 190 informes seencuentran 653 demandas concretas. En la preparación de lá información seha visto por conveniente realizar también cálculos sobre la base de la exclu-sión del departamento de Puno, en la medida en que su presencia fue abruma-doramente mayoritaria: dio cuenta de 88 de los 190 informes y 263 de las 653demandas.

357

Page 38: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

CUADRO 4DEMANDAS CAMPESINASVI CONGRESO CCP 1982

Demandas . Total Porc. s/Puno Porc.

Tierra 158 24,2 77 19,7

Agua 25 3,8 21 5,4

Poderes Locales 10 1,5 5 1,3

Desastres 7 1,1 4 1,1

Económico-productivo 174 26,6 110 28,2

Recursos 10 1,5 4 1,0

Servicios 131 20 82 21,0Sendero Luminoso 2 0,3 2 0,5

Estado 109 16,7 69 17,7VidaGremial ' 27 4,1 16 4,1

Valores Culturales 1 0,2 0 0

Total Demandas 653 100 390 100

Total Informes de Bases 190 102

Fuente: Informes de bases al VI Congreso Nacional CCP. Elaboración propia.

CUADRO 5VI CONGRESO CCP 1982

DEMANDAS ECONÓMICO PRODUCTNAS

Demandas Tot Porc.

Términos de intercambio 29 45,3

Condiciones de trabajo 2 3,9

Salarios 1 1,5

Crédito monto 0 0,0

Crédito destino 2 3,9

Crédito intereses 7 10,9Condonación deudas 0 0,0

Especulación, Acapazamiento 2 3,9Tiendas Tambos Comunales 5 7,8

Diversificación productiva 6 9,1

Fuentes de trabajo 2 3,9Maquinaria 3 2,2

Asistencia técnica • 2 3,9

Pasajes 3 2>2

Total 64 100

Fuente: Informes de bases al VI Congreso Nacional CCP. Elaboración propia.

358

Page 39: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

El tránsito hacia una más plena conciencia de la importanciade los problemas relativos a la producción llevó no solo a unareformulación de las demandas puntuales sino. también de lasformulaciones programáticas. Ya a propósito del debate entorno al DL 02 de Desarrollo y Promoción Agraria (1980) losgremios campesinos entraron de lleno en la discusión sobrepolíticas agrarias y. programas de desarrollo del sector ". Mástarde, se han desarrollado alternativas más concretas de reorde-namiento y desarrollo agrario en torno a la "defensa del agro yla alimentación popular" o la búsqueda de la seguridad alimen-taria, que incluían toma de posición y alternativas frente a losoligopolios de la agroindustria, el comercio internacional deproductos e insumos agropecuarios, el rol del Estado y el capitalen la fijación de los precios y la comercialización interna deproductos e insumos, entre otros temas antes no tocados 34

Esta evolución en cuanto a demandas puntuales y propues-tas programáticas ha llevado a formular, desde la práctica gre-mial, alternativas de programas de emergencia y de políticaagraria. El empobrecimiento de las poblaciones rurales y condi-ciones coyunturales particularmente difíciles como las de lassequías e inundaciones en 1983-84, y la de sequías, plagas,heladas y paquetazos de estabilización de 1989-90 están llevan-do a los gremios a asumir como suyos los problemas de loscampesinos en tanto consumidores en situaciones límite desobrevivencia y a entrar de lleno en el debate en torno a progra-mas de emergencia y compensación social y su relación conopciones de reactivamiento productivo.

Otro aspecto significativo de la movilización campesina delos 80 es la ampliación nacional de su base social y su experien-cia organizativa. El dato mas significativo es el de la ampliación

33 En su III Co^sejo Nacional en Colcabamba, Huancavelica (1981), laCCP discutió y aprobó propuestas en torno a programas de desarrollo agrarioalternativos a la LPDA. A1 respecto pueden verse los documeñtos "El proble-ma agrario y los objetivos de un programa altemativo" y"Proyecto alternativode Ley de Promoción y Desarrollo Agropecuario" discutidos por el III Conse-jo Nacional GCP en Colcabamba, Huancavelica. Ver el informe de Sur, AñoN, N.° 44, (Noviembre de 1981).

^ Ver Monge, "Las demandas".

359

Page 40: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

del movimiento hacia la selva, por la vía de la organización gre-mial de los colonos llegados entre los 50 y los 70 y de los gru-pos nativos amenazados por eĉta colonización y también en ace-lerado proceso de integración al mercado y la sociedadnacional. Además, nueva la experiencia de la selva importa nosólo porque el movimiento se extiende geográficamente, sinoporque de esa experiencia surgen nuevas opciones en cuanto ademandas, formas de organización, y formas de lucha.

Como se ha visto en la primera parte de este trabajo, laexpansión agrícola de la selva es en base a cultivos comerciales,y su dinámica social no arrastra tradiciones de lucha por la tie-rra:resultó ahí más fácil que en la sierra (tradiciones del períodoanterior) y en la costa (confusión generalizada en torno a lasparcelaciones) definir una nueva lógica de vida gremial en tornoa problemas de inserción al mercado. Lo mismo se puede decirde las formas de lucha (son los maiceros de San Martín los quellevan adelante, por primera vez, los paros y huelgas como for-mas dominantes de lucha) y de organización (también ahí, enUcayali y Loreto) se dan las primeras combinaciones eficientesde organización territorial y por ramas de producción al interiorde un solo gremio).

En la costa, la parcelación de las cooperativas agrarias deproducción ha llevado a la desaparición de la organizaciónsindical y cooperativa tradicional y está abriendo el curso deuna profunda redefinición de las formas organizativas en elsentido de la experiencia del oriente: organización territorial(por valle o cuenca) combinada con organización funcional(manejo de agua, por producto, por servicios comunes, etc.)sobre una base. social de pequeños propietarios plenamentearticulados al mercado, a lo que hay que añadir -aún comointerrogante- el asunto de los trabajadores eventuales o cam-pesinos sin tierra, sus problemas, demandas, organización,dinámica social, etc.

En la sierra la inserción en el mercado y la especializaciónde la producción están impulsando, ya desde fines de los 70, laorganización por ramas de la producción, aunque no con laintensidad de otras zonas. Ello porque el campesinado comune-ro es aún, en mucho, un policultivador con estrategias diversi-ficadas ^de sobrevivencia, y porque entre los cuadros dirigen-

360

Page 41: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

ciales se mantiene con una mucha fuerza la experiencia de laorganización tradicional territorial. Sin embargo, en muchaszonas ya hay experiencias de organización de acuerdo a laespecialización productiva (paperos, criadores de camélidos,tomateros, etc.).

Es importante anotaz que esta ampliación de la coberturageográfica de la movilización campesina sobre la base de laincorporación de miles de pequeños productores al mercado esparalela a un perf'ilamiento del movimiento como uno de "pro-pietarios". En otras palabras, el movimiento campesino y losgremios se han ido convirtiendo en expresión gremial de aque-llos campesinos que a lo largo de las tres décadas anterioreslograzon, por uno u otro camino, acceder a la propiedad de latierra. Fuera del movimiento y sin real espacio en los gremioshan quedado los sectores más pobres del campesinado, aquellosque generan el grueso o el total de sus ingresos en base a laventa de su fuerza de trabajo.

Finalmente, a diferencia del tránsito del primer al segundoperíodo, en la transición entre los 70 y los 80 ha habido unacontinuidad y una afirmación de la centralización nacional cam-pesina al mismo tiempo que se reformulaban las demandas, lasformas de organización y lucha y las propuestas programáticas.Desde este punto de vista, uno de los aspectos fundamentales dela experiencia del movimiento campesino es que ha tenido lacapacidad de perdurar e ingresaz a un nuevo período -el de los80- con la pretensión de incidir con orientaciones y propuestasen los procesos de cambio que ha contribuido a generar.

Es conveniente anotar, sin embargo, que la reforma agrariacreó un contexto paza la agremiación no sólo de los campesinos,sino también de otros sectores de la sociedad rural. Después dela ilegalización de la CNA en 1978 el gobierno, en busca denuevos interlocutores oficiales, impulsó a los Comités de Pro-ductores, los que en los meses iniciales de 1980 y bajo la con-ducción de medianos propietarios se agrapazon en la Organiza-ción Nacional Agraria (ONA). A la. ONA más tazde se sumazonotras organizaciones empresariales en la formación de una cen-tral gremial de la burguesía agraria. A todo esto hay que añadirla existencia de centrales de empresas asociativas surgidas de lareforma (CAPs y SAIS), de organizaciones por sectores econó-

361

Page 42: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

micos específicos (trabajadores y cooperativas del azúcar), porramas de producción (productores cafetaleros, fondos ganade-ros), etc.35.

Hacia finales de los años 70 e inicios de los 80 el agroperuano presentaba pues un panorama organizativo bastantemás complejo que el de los años 50 y 60. Eliminado el monopo-lio organizativo de los hacendados tradicionales -y pese a losintentos corporativistas del gobierno- se había abierto un pro-ceso masivo de organización de todos los sectores y grupos deinterés del campo peruano. En muchos casos, sectores impor-tantes de los campesinos y pequeños productores individuales yasociativos optazon por participar más en una instancia organi-zativa, integrándose de manera simultánea, por ejemplo, a basesde la ONA y la CCP o la CNA.

Los gremios campesinos, además de afirmaz su propio perf'ilcomo tales, han venido respondiendo a estos retos de dos mane-ras. La primera, ir copando espacios al interior de organizacio-nes originalmente lideradas por los medianos propietarios. Uncaso ilustrativo es el de la Federación Provincial de Campesinosde Andahuaylas, que nació en los años 70 en las luchas por latierra que acabazon con el sistema de hacienda en Andahuaylasen 1974-75; que como todos los gremios campesinos de laépoca asumió una estructura organizativa territorial que le per-mitía responder a las dinámicas de movilización contra lashaciendas y los poderes locales; y que más tazde, producto delagotamiento de esta lucha, difiĉultades para dar continuidad a lavida gremial en torno a otras dinámicas, y de la represión, prác-ticamente desapareció. Sin embargo, la FEPCA renació a ini-cios de los 80, teniendo esta vez como su base más dinámica alComité Provincial de Prod•ctores de Papa, impulsando la for-mación de Comités de Producción en las comunidades, revir-

35 A1 respecto, ver Héctor Bejar y Cazlos Franco, Organización campesinay reestructuración del Estado, Lima: CEDEP, 1985; y Cazlos Monge, "Gre-mios empresariales agrarios: representatividad y concertación", en DebateAgrario, N.° 2, (1988). La cantidad y heterogeneidad de las organizacionesasistentes al I Congreso Unitario Nacional Agrario (I CiJNA) ilustra acerca delo complejo de este proceso organiza[ivo. Ver I Congreso Unitario NacionalAgrario, Lima: 1983.

362

Page 43: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

tiendo el liderazgo que medianos propietarios de la zona habíanlogrado construir en este terreno y recuperando una hegemoníalocal que en la década pasada se había construido en la luchapor la tiena3ó. En la actualidad, dirigentes de base o intermediosde las organizaciones campesinas y de pequeños productoresafiliados a la CCP o la CNA han llegado a ocupar cargos deimportancia en los Comités de Productores afiliados a la ONA,como es el caso de los de maíz y algodón, entre otros.

Una segunda respuesta gremial campesina frente a la plura-lidad organizativa en el agro ha sido la conformación de frentesagrarios de distinta amplitud y contenido. En 1980, en respuestaa los ataques gubernamentales a la empresas asociativas surĉi-das de la reforma y, en general, percibiéndose un clima deabierta "contrareforma", los gremios campesinos formaronjunto con centrales de cooperativas y de empresas asociativas yalgunos medianos propietarios el Frente Único de Defensa delAgro Nacional (FUDAN). Dos años más tarde, en respuesta apolíticas liberales percibidas como perjudiciales para todo elagro, se formó el Consejo Unitario Nacional Agrario (CUNA)interesante experiencia que aglutinó a todos los sectores gremia-les y políticos del campo en torno a una plataforma de puntosmínimos y el reclamo global de priorizar al agro en las estrate-gias de desarrollo. En la a•tualidad se ha conformado la Coordi-nadora Nacional de Organizaciones Campesinas y Nativas, queagrupa más bien a organizaciones de los sectores popularesagrarios, pero no sería extraño que el impacto de las políticas deestabilización lleve nuevamente a coordinaciones más amplias.

En la década de los 80, habiendo el Estado perdido ya todainiciativa reformista frente al campo y habiendo los campesinosconsolidado sus organizaciones, comienza a enfrentarse también-y en todas sus dimensiones- el vacío de poder generado porla desestructuración de la sociedad rural desde los años 50.Como se ha señalado antes, en el campo se vive un proceso en elque una pluralidad de actores sociales vienen tratando de impo-ner su hegemonía en la definición de un orden alternativo al de

" Entrevista a José Pérez, asesor de la FEPCA. Andahuaylas y Lima,Agosto de 1988.

363

Page 44: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

la hacienda. Desde el punto de vista de la organización campesi-na, ello se traduce en términos inmediatos en una constante con-flictividad con el Estado (con sus agentes locales) y los podereslocales (tierra, comercio, transporte), que se percibe claramenteen las demandas de las bases asistentes a eventos gremiales.Recurriendo de nuevo a los informes de bases al VI CongresoNacional CCP, en el Cuadro 6 encontramos que más de190% delas demandas y planteamientos directamente referidos al Estadotienen que ver con casos de corrupción y represión.

CUADRO 6DEMANDAS ESTADO

VI CONGRESO NACIONAL CCP

Demandas

Corrupción y abuso 6 37,5Reconocimiento legal 3 18,5Represión 4 25,0Conversión en comunidad 1 6,3Delincuencia. Abigeato 1 6,3Distritalización 1 6,3

Total 16 100

Fuente: Informes de Bases al VI Congreso Nacional CCP. Elaboración pro-pia.

El ejemplo más conocido de organización campesina quesurge y se desarrolla fundamentalmente como respuesta al vacíode poder, es el de las rondas campesinas de Cajamarca, Existeuna abundante bibliografía sobre el tema que no es posible rese-ñar en estas líneas, pero lo principal a ser anotado es que estasorganizaciones surgen principalmente para actuar en el terrenode la seguridad ciudadana y la administración de la justicia dis-putando objetivamente funciones tradicionalmente privativasdel Estado y los poderes locales. Incluso, en la mayor parte delos casos, estas organizaciones no se han dedicado o lo hanhecho de manera subordinada a construir un liderazgo en el

, terreno de las reivindicaciones económicas y productivas. Esdecir, no se trata de que ^omo en las huelgas campesinas en

364

Page 45: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

el oriente y la Sierra sur- la lucha económica cree un contextofavorable a reclamaciones "democráticas" relativas a autorida-des, orden interno, justicia, etc., sino de organizaciones que sur-gen fundamentalmente para eso.

Huelga insistir en que experiencias como éstas sólo puedenentenderse en el período post-reforma agraria, en el contexto deuna estructura social colapsada y de una pugna entre diversossectores por afirmar a su favor una nueva institucionalidad.

Finalmente, hay que tomar en cuenta que estos procesos-que ya de por sí son de alta conflictividad- tienen lugarahora en un escenario más complejo en el contexto de la violen-cia política y la regionálización, fenómenos que no se dabanantes y que redefinen totalmente el contexto, los retos y lasposibilidades mismas del movimiento campesino.

La violencia política es la expresión última del vacío depoder a que hemos venido haciendo referencia. Como ha seña-lado Favre ", la irrupción de Sendero Luminoso sólo es entendi-ble en el marco del colapso general de las estructuras de lasociedad rural y de la incapacidad colectiva para reemplazarlas.Este espacio en el que se desarrolla la violencia es el mismo queexplica el desarrollo generalizado de la organización campesina,pero en la medida en que la lucha por llenarlo está ahora milita-rizada (SL, MRTA, FFAA, Rondas de Defensa Civil, etc) puedeser también el espacio de su disolución.

La generalización de la violencia política (casi 20.000muertos en 10 años, la mayor parte campesinos; casi el 100% delas áreas rurales en Estado de Emergencia y sin autoridadesciviles ni derechos humanos vigentes; el primer lugar en elmundo en cuanto a detenidos/desaparecidos; etc.) enfrenta almovimiento campesino con un problema de sobrevivencia: enmuchas zonas del país se ha hecho casi imposible la continuidadde la organización y la movilización campesina en sus términostradicionales. En otras, la voluntad y la necesidad de persistĉ enla organización comienza a plantear interrogantes de difícil res-puesta asociadas a la posibilidad de formas de autodefensa mili-tarizada desde los gremios.

" Henri Favre, Op. Cit.

365

Page 46: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

Paralelamente, en respuesta al vacío de poder, a la conflicti-vidad local al que éste contribuye, y al fenómeno global de vio-lencia política, desde el Estado central se viene impulsando laregionalización, proceso que -como se ha señalado antes-puede también alterar de manera sustancial el desenvolvimientodel movimiento campesino. Pese a todas sus deficiencias, alcrear espacios para la participación de la representación campe-sina en ámbitos de poder regionales y locales la regionalizaciónenfrenta al movimiento campesino con dos retos centrales.

El primero, desarrollar propuestas programáticas que vayanmás allá de las sólamente reivindicativas e ingresar al terreno dela fomulación de alternativas de desarrollo menos económicas ymenos sectoriales, más integrales y más regionales, abarcandotambién los terrenos de la política, la cultura, la sociedad, lasinstituciones, la agroindustria, el comercio, la ciudad, etc. Elsegundo, definir una práctica de participación en el procesoregional, incluida la participación en el gobierno regional, quecontribuya a que la regionalización en marcha construya espa-cios para un ejercicio diametralmente distinto del poder basadoen el protagonismo, no sólo programático sino fáctico, de hechode los cotidianamente marginados. Esta tendencia podría poten-ciar la construcción del movimiento nacional campesino, dán-dole soportes regionale ĉ efectivos a lo que siempre corre el ries-go de devenir en discursos nacionales vacíos de especificidadlocal.

Inversamente, en la medida en que la regionalización efecti-vamente transfiera a las regiones y sus nuevas institucionesrecursos y funciones efectivas, puede impulsar una fragmenta-ción de la movilización y la organización campesina cuestio-nando (o replanteando radicalmente) las bases de la construc=ción de sujetos sociales populares "nacionales".

Conclusión

El movimiento campesino peruano, con una identidad histó-rica construida a lo largo de décadas de lucha por la tierra y por

.los derechos sindicales de los trabajadores agrícolas, ha redefi-nido en los últimos años mucho de su discurso y su práctica, ha

366

Page 47: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

logrado cierta capacidad de continuidad y adaptación a coyuntu-ras cambiantes y puede, quizás, convertirse en interlocutor delos grandes debates y las grandes decisiones sobre el desarrolloagrario y nacional.

Los cambios que a lo largo de los 60 y los 70 se operaron enel Estado, en la relación entre el Estado y la sociedad, y al inte-rior de la propia sociedad agraria, han creado en los 80 condi-ciones y contextos para la agremiación campesina distintos deaquellos vigentes en su experiencia anterior.

Si la eliminación de la hacienda por acción de las luchascampesinas y las reformas agrarias tuvo como consecuencia lamayor incorporación del campesinado al mercado y, en conse-cuencia, una redefinición sustancial de sus demandas y propues-tas programáticas, también tuvo como consecuencia la creaciónde un vacío de poder que nadie (incluida la organización cam-pesina) ha podido llenar, y que ahora pretenden también llenaractores militarizados como Sendero Luminoso, el MRTA y lasFFAA, o-desde una reforma y extensión de su institucionali-dad- el Estado central.

En estas circunstancias, si el movimiento campesino perua-no tiene la posibilidad de convertirse, por primera vez, en inter-locutor en los grandes debates sobre las opciones de desarrolloagrario y nacional y un actor con capacidad de incidir en losprocesos que contribuye a generaz, se encuentra al mismo tiem-po enfrentado a una situación límite de violencia política y reor-denamiento estatal que cuestiona las premisas mismas de su for-mación en las últimas décadas.

En esta encrucijada, ningún desenlace es predeterminado 0inevitable. El destino del movimiento campesino, que es enmucho el destino de la sociedad rural peruana, finalmentedepende de las opciones que frente a los retos planteados tomenlos campesinos de base, sus dirigentes intermedios y nacionales,los cuadros partidarios que influyen en los gremios y los aseso-res e intelectuales con opinión sobre el agro.

367

Page 48: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización
Page 49: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

PUBLICACIONES DEL^MINISTERIO DEAGRICULTURA, PESCA Y ALIMENTACION

SERIE ESTUDIOS

1. García Ferrando, Manuel. La innovación tecnológica y su difusiónen la agricultura. 1976. 300 p. (agotado).

2. Situación y perspectivas de la agricultura familiar en España. ArturoCamilleri Lapeyre et al. 1977. 219 p. (agotado).

3. Propiedad, herencia y división de la explotación agraria. La suce-sión en el Derecho Agrario. Director: José Luis de los IVÍózos. 1977.293 p. (agotado).

4. Artola, Miguel, Contreras, Jaime y Bernal, Antonio Miguel. El lati-fundio. Propiedad y explotación, siglos XVIII-XX. 1978. 197 p.(agotado).

5. Juan i Fenollar, Rafael. La formación de la agroindustria enEspaña (1960-1970). 1978. 283 p.

6. López Linage, Javier. Antropología de [a ferocidad cotidiana:supervivencia y trabajo en una comunidad cántabra. 1978. 283 p.

7. Pérez Yruela, Manuel. La conflictividad campesina en la provinciade Córdoba (1931-1936). 1978. 437 p.

8. López Ontiveros, Agustín. El sector oleícola y el olivar: oligopolio ycoste de recolección. 1978. 218 p.

9. Castillo, Juan José. Propietarios muy pobres. Sobre la subordina-ción política de[ pegueño campesino en España (la ConfederaciónNacional Católica Agraria, 1917-1924). 1979. 552 p.

10. La evolución del campesinado: la agricultura en el desarrollo capita-lista. Selección de Miren Etxezarreta Zubizarreta. 1979. 363 p.

11. Moral Ruiz, Joaquín del. La agricultura española a mediados delsigló XIX (1850-I870). Resultados de una encuesta agraria de laépoca. 1979. 228 p.

12. Titos Moreno, Antonio y Rodríguez Alcaide, José Javier. Crisiseconómica y empleo en Andalucía. 1979. 198 p.

13. Cuadrado Iglesias, Manuel. Aprovechamiento en común de pastos yleñas. 1980. 539 p.

14. Díez Rodríguez, Fernando. Prensa agraria en la España de la Ilus-tración. El semanario de Agricultura y Artes dirigido a los párrocos(1797-1808). 1980. 215 p.

15. Arnalte Alegre, Eladio. Agricultura a tiempo parcial en el PaísValenciano. Nah^raleza y efectos del fenómeno en el regadío litoral.1980. 378 p.

16. Grupo ERA (Estudios Rurales Andaluces). Las agriculturas anda-luzas. 1980. 505 p.

369

Page 50: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

17. Balcells, Albert. El problema agrario en Cataluña. La cuestiónRabassaire (1890-1936). 1980. 438 p.

18. Carnero i Arbat, Teresa. Expansión vinícola y atraso agrario (1870-

1900). 1980. 289 p.

19. Cruz Villalón, Josefina. Propiedad y uso de la tierra en la BajaAndalucía. Carmona, siglos XVIII-XX. 1980. 360 p.

20. Héran Haen, François. Tierra y parentesco en el campo sevillano: larevolución agrícola del siglo XIX. 1980. 268 p.

21. García Ferrando, Manuel y González Blasco, Pedro. Investigación

agraria y organización social. 1981. 226 p.

22. Leach, Gerald. Energía y producción de alimentos. 1981. 210 p.

23. Mangas Navas, José Manuel. EI régimen comunal agrario de losConcejos de Casti[la. 1981. 316 p.

24. Tió, Carlos. La política de aceites comestibles en la España del sigloXX. 1982. 532 p.

25. Mignon, Christian. Campos y campesinos de la Andalucía medite-

rránea. 1982. 606 p.

26. Pérez Touriño, Emilio. Agricultura y capitalismo. Análisis de lapequeña producción campesina. 1983. 332 p.

27. Vassberg, David E. La venta de tierras baldías. El comunitarismoagrario y la Corona de Castilla durante el siglo XVL 1983. 265 p.

28. Romero González, Juan. Propiedad agraria y sociedad rural en laEspaña mediterránea. Los casos valenciano y castellano en los siglosXIX y XX. 1983. 465 p.

29. Gros Imbiola, Javier. Estructura de la producción porcina en Ara-

gón. 1984. 235 p.

30. López López, Alejandro. El boicot de la derecha y las reformas dela Segunda República. La minoría agraria, el rechazo constitucionaly la cuestión de la tierra. 1984. 452 p.

31. Moyano Estrada, Eduardo. Corporatismo y agricultura. Asociacio-nes profesionales y articulación de intereses en la agricultura espa-

ñola. 1984. 357 p.

32. Donézar Díez de Ulzurrun, Javier María. Riqueza y propiedad en

la Castilla del Antiguo Régimen. La provincia de Toledo en e[ sigloXVIIL 1984. 558 p. (agotado).

33. Mangas Navas, José Manuel. La propiedad de la tierra en España.Los patrimonios púb[icos. Herencia contemporánea de un refor-mismo inconcluso. 1984. 350 p. (agotado).

34. Sobre agricultores y campesinos. Estudios de Sociología Rural deEspaña. Compilador: Eduardo Sevilla-Guzmán. 1984. 425 p.

35. Colino Sueiras, José. La integración de la agricultura gal[ega en e[capitalismo. El horizonte de la CEE. 1984. 438 p.

36. Campos Palacín, Pablo. Economía y energía en la dehesa extre-

meña. 1984. 336 p. (agotado).

370

Page 51: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

37. Piqueras Haba, Juan. La agricultura valenciana de exportación y suformación histórica. 1985. 249 p.

38. Viladomiu Canela, Lourdes. La inserción de España en el complejosoja-mundial. 1985. 448 p. '

39. Peinado Gracia, María Luisa. El consumo y la industria alimentariaen España. Evolución, problemática y penetración del capitalextranjero a partir de 1960. 1985. 453 p.

40. Lecturas sobre agricultura familiar. Compiladores: Manuel Rodrí-guez Zú^iga y Rosa Soria Gutiérrez. 1985. 401 p.

41. La agricultura insuficiente. La agricultura a tiempo parcial. Direc-tora: Miren Etxezarreta Zubizarreta. 1983. 442 p.

42. Ortega López, Margarita. La lucha por la tierra en la Corona de Castillaal final del Antiguo Régimen. El expediente de Ley Agraria. 1986..330 p.

43. Palazuelos Manso, Enrique y Granda Alva, Germán. El mercadodel café. Situación mundial e importancia en el comercio con Amé-rica Latina. 1986. 336 p.

44. Contribución a[a historia de la trashumancia en España. Compilado-res: Pedro García Martín y José María Sánchez Benito. 1986. 486 p.

45. Zambrana Pineda, Juañ Francisco. Crisis y modernización del oli-var español, 1870-1930. 1987. 472 p.

46. Mata Olmo, Rafael. Pequeña y gran propiedad agraria en la depre-sión del Guadalquivir. 1987. 2 tomos. (agotado).

47. Estructuras y regúnenes de tenencia de la tierra en España: Ponenciasy comunicaciones del II Coloquio de Geografía Agraria. 1987. 514 p.

48. San Juan Mesonada, Carlos. Eficacia y rentabilidad de la agricul-tura española. 1987. 469 p.

49. Martínez Sánchez, José María. Desarrollo agrícola y teoría de siste-mas. 1987. 375 p. (agotado).

50. Desarrollo rural integrado. Compiladora: Miren Etxezarreta Zubi-zarreta. 1988. 436 p. (agotado).

51. García Martín, Pedro. La ganadería mesteña en la España borbó-nica (1700-1836). 1988. 483 p.

52. Moyano Estrada, Eduardo. Sindicalismo y política agraria enEuropa. Las organizaciones profesionales agrarias en Francia, Italiay Portugal. 1988. 648 p.

53. Servolin, Claude. Las políticas agrarias. 1988. 230 p. (agotado).54. La modernización de la agricultura española, 1956-1986. Compila-

dor: Carlos San Juan Mesonada. 1989. 559 p.55. Pérez Picazo, María Teresa. El Mayorazgo en la historia económica

de [a región murciana, expansión, crisis y abolición (Ss. XVII-XIX).1990. 256 p.

56. Cambio rural en Europa. Programa de investigación sobre lasestructuras agrarias y la pluriactividad. Montpellier, 1987. Funda-ĉión Arkelton. 1990. 381 p.

371

Page 52: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

57. La agrociudad mediterránea. Estructuras sociales y procesos dedesarrollo. Compilador: Francisco López-Casero Olmedo. 1990.420 p.

58. E[ mercado y los precios de la tierra: funcionamiento y mecanismosde intervención. Compiladora: Consuelo Varela Ortega. 1988.434 p.

59. García Alvarez-Coque, José María. Análisis instituciona[ de laspolíticas agrarias. Conflictos de intereses y política agraria. 1991.

387 p.

60. Alario Trigueros, Milagros. Significado espacial y socioeconómicode la concentración parcelaria en Castil[a y León. 1991. 457 p.

61. Giménez Romero, Carlos. Valdelaguna y Coatepec. Permanencin yfuncionalidad del régimen comunal agrario en España y México.1991. 547 p.

62. Menegus Bornemann, Margarita. Del Señorío a la República deindios. El caso de Toluca, 1500-1600. 1991. 260 p.

63. Dávila Zurita, Manuel María y Buendía Moya, José. El mercado de

productos fitosanitarios. 1991. 190 p.

64. Torre, Joseba de la. Los campesinos navarros ante la guerra napo=leónica. Financiación bélica y desamortización civil. 1991.

289 p.

65. Barceló Vila, Luis Vicente. Liberación, ajuste y reestructuración de

la agricultura española. 1991. 561 p.

66. Majuelo Gil, Emilio y Pascual Bonis, Angel. Del catolicismo agra-rio al cooperativismo empresarial. Setenta y cinco años de la Federa-ción de Cooperativas navarras, 19I0-1985. 1991. 532 p.

67. Castillo Quero, Manuela. Las políticas limitantes de la ofertalechera. Implicaciones para el sector lechero español. 1992. 406 p.

68. Hitos históricos de los regadíos españoles. Compiladores: AntonioGil Olcina y Alfredo Morales Gil. 1992. 404 p.

69. Economía del agua. Compilador. Federico Aguilera Klink. 1992.425 p.

70. Propiedad y explotación campesina en la España contemporánea.Compilador: Ramón Garrabou. 1992. 379 p.

71. Cardesín, José María. Tierra, trabajo y reproducción social en unaaldea gallega (Ss. XVIII-XX). Muerte de unos, vida de otros. 1992.

374 p.

72. Aldanondo Ochoa, Ana María. Capacidad tecnológica y divisióninternacional de[ trabajo en la agricultura. (Una aplicación alcomercio internacional hortofrutícola y a la introducción de innova-ciones post-cosecha en la horticultura canaria.) 1992. 473 p.

73. Paniagua Mazorra, Angel. Repercusiones sociodemográficas de [apolítica de colonización durante el siglo XIX y primer tercio del XX.

1992. 413 p.

372

Page 53: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

74. Marrón Gaite, María Jesús. La adopción y expansión de la remolachaazucarera en España (de los orígenes al momento actual). 1992. 175 p.

75. Las organizaciones profesionales agrarias en la Comunidad Euro-pea. Compilador: Eduardo Moyano Estrada. 1993. 428 p.

76. Cambio tecnológico y medio ambiente rural. (Procesos y reestructu-raciones rurales.) Compiladores: Philip Lowe, Terry Marsden ySarah Whatmore. 1993. 339 p.

77. Gavira Alvarez, Lina. Segmentación del mercado de trabajo rural ydesarrol[o: el caso de Andalucía. 1993. 580 p.

78. Sanz Cañada, Javier. Industria agroalimentaria y desarrollo regio-nal. Análisis y toma de decisiones locacionales. 1993. 405 p.

79. Gómez López, José Daniel. Cultivos de invernadero en la fachadaSureste Peninsular ante el ingreso en la C.E. 1993. 378 p.

80. Moyano Estrada, Eduardo. Acción colectiva y cooperativismo en laagricultura europea (Federaciones de cooperativas y representaciónde intereses en la Unión Europea). 1993. 496 p.

81. Camarero Rioja, Luis Alfonso. Del é,rodo rural y del éxodo urbano.Ocaso y renacimiento de los asentamientos rurales en España. 1993.501 p.

82. Baraja Rodríguez, Eugenio. La ezpansión de la industria azucarera yel cultivo remolachero del Duero en el contexto nacional. 1994. 681 p.

83. Robledo Hernández, Ricardo. Economistas y reformadores españo-les: La cuestión agraria (1760-1935). 1994. 135 p.

84. Bonete Perales, Rafael. Condicionamientos internos y externos dela PAC. 1994. 470 p.

85. Ramón Morte, Alfredo. Tecnificación del regadío valenciano. 1994.642 p.

86. Pérez Rubio, José Antonio. Yunteros, braceros y colonos. La polí-tica agraria en Extremadura, 1940-1975. 1994. 612 p.

87. La globalización del sector agroalimentario. Director: AlessandroBonnano.1994. 310 p.

88. Modernización y cambio estructural en la agricultura española.Coordinador: José María Sumpsi Viñas. 1994. 366 p.

89. Mulero Mendigorri, A. Espácios rurales de ocio. Significado generaly análisis en la Sierra Morena cordobesa. 1994. 572 p.

90. Langreo Navarro, Alicia y García Azcárate, Teresa. Las interprofe-sionales agroalimentarias en Europa. 1994. 670 p.

91. Montiel Molina, Cristina. Los montes de utilidad pública en laComunidad Valenciana. 1994. 372 p.

92. La agricultura familiar ante las nuevas políticas agrarias comunita-rias. Miren Etxezarreta Zubizarreta et al. 1994. 660 p.

93. Estimación y análisis de la balanza comercial de productos agrariosy agroindustriales de Navarra. Director: Manuel Rapún Gárate.1995. 438 p.

373

Page 54: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

94. Billón Currás, Margarita. La exportación hortofrutícola. El caso delalbaricoque en fresco y la lechuga iceberg. 1995. 650 p.

95. California y el Mediterráneo. Historia de dos agriculturas competi-doras. Coordinador: José Morilla Critz. 1995. 499 p.

96. Pinilla Navarro, Vicente. Entre la inercia y el cambio: el sector agra-rio aragonés, 1850-1935. 1995. 500 p.

97. Agricultura y desarrollo sostenible. Coordinador: Alfredo CadenasMarín. 1994. 468 p.

98. Oliva Serrano, Jesús. Mercados de trabajo y reestructuración rural:una aproximación al caso castellano-manchego. 1995. 300 p.

99. Hacia un nuevo sistema rural. Coordinadores: Eduardo RamosReal y Josefina Cruz Villalón. 1995. 792 p.

100. Con el número 100 se ha editado un Catálogo monográfico de los 99libros correspondientes a esta Serie, que se remitirá a las personasque lo soliciten.

101. López Martínez, María. Análisis de la industria agroalimentariaespañola (1978-1989). 1995. 594 p.

102. Carmona Ruiz, María Antonia. Usurpaciones de tierras y derechoscomunales en Sevilla y su "Tierra" durante el siglo XV. 1995. 254 p.

103. Muñoz Torres, María Jesús. Las importaciones de cítricos en la Re-pública Federal de Alemania. Un enfoque cuantitativo. 1995. 174 p.

104. García Muñoz, Adelina. Los que no pueden vivir de lo suyo: trabajoy cultura en el campo de Calatrava. 1995. 332 p.

105. Martínez López, Alberte. Cooperativismo y transformaciones agra-rias en Galicia, 1886-1943. 1995. 286 p.

106. Cavas Martínez, Faustino. Las relaciones laborales en el sectoragrario. 1995. 651 p.

107. El cámpo y la ciudad (Sociedad rural y cambio social). Edición acargo de M a Antonia García León. 1996. 282 p.

108. EI sistema agroalimentario español. Tabla input-output y análisis delas relaciones intersectoria[es. Director: Antonio Titos Moreno.1995. 431 p.

109. Langreo Navarro, Alicia. Historia de la industria láctea española:una aplicación a Asturias. 1995. 551 p.

110. Martín Gil, Fernando. Mercado de trabajo en áreas rurales. Unenfoque integrador aplicado a la comarca de Sepúlveda. 1995. 619 p.

111. Sumpsi Viñas, José María y Barceló Vila, Luis V. La Ronda Uru-guay y el sector ^agroalimentario español (Estudio del impacto en elsector agroalimentario español de los resultados de [a Ronda Uru-guay). 1996. 816 p.

112. Forgas i Berdet, Esther. Los ciclos del pan y dél vino en las pare-mias hispanas. 1996. 562 p.

113. Reformas y políticas agrarias en la historia de España (De la Ilustra-ción al primer franquismo). Coordinadores: Angel García Sanz yJesús Sanz Fernández. 1996. 406 p.

374

Page 55: IX PERÚ: TRANSICIÓN AGRARIA, DESESTRUCTURACIÓN SOCIAL …€¦ · Desde el punto de vista poblacional, en las últimas 5 déca-das el Perú ha vivido una sustancial urbanización

114. Mili, Samir. Organización de mercados y estrategias empresarialesen el subsector del aceite de oliva. 1996. 383 p.

115. Burgaz Moreno, Fernando J. y Pérez-Morales Albarrán, M a delMar. 1902-1992. 90 años de seguros agrarios en España. 1996. 548 p.

116. Rodríguez Ocaña, Antonio y Ruiz Avilés, Pedro. El sistema agroin-dustrial del algodón en España. 1996.

117. Manuel Valdés, Carlos M. Tierras y montes públicos en la Sierra deMadrid (sectores central y meridional). 1996. 551 p.

118. Hervieu, Bertrand. Los campos del futuro. 1996. 186 p.

119. Parras Rosa, Manuel. La demanda de aceite de oliva virgen en elmercado españoL 1996. 369 p.

120. López Iglesias, Edelmiro. Movilidad de la tierra y dinámica de lasestructuras agrarias en Galicia. Análisis de los obstáculos que hanfrenado durante las últimas décadas las transformaciones en laestructura dimensional de las explotaciones. 1996. 525 p.

121. Baz Vicente, M.e Jesús. Señorío y propiedad foral de la alta noblezaen Galicia, siglos XVI-XX.• la Casa de Alba. 1996. 454 p.

122. Giráldez Rivero, Jesús. Crecimiento y transformación del sectorpesquero gallego (1880-1936). 1996. 423 p.

123. Sánchez de Puerta T, Fernando. Eztensión agraria y desarrolloruraL Sobre la evolución de las teorías y praxis extensionistas. 1996.512 p.

124. Calatrava Andrés, Ascensión y Melero Guilló, Ana M e. España,Marruecos y los productos agroalimentarios. Dificultades y poten-cialidades para las exportaciones de frutas y horta[izas. 1996. 286 p.

125. García Sanz, Benjamín.La sociedad rural ante el siglo XXI. 1996.678 p.

126. Román Cervantes, Cándido. Propiedad, uso y explotación de la tie-rra en la comarca del campo de Cartagena (siglos XIX y XX). 1996.579 p.

375